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ENSAYO

Este documento discute la importancia de implementar la perspectiva de género en la educación para lograr la igualdad de oportunidades y el desarrollo pleno de las capacidades de niñas y niños. Propone que se capacite a docentes en esta perspectiva y se establezcan canales de participación entre el gobierno y la sociedad civil para garantizar la igualdad.
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ENSAYO

Este documento discute la importancia de implementar la perspectiva de género en la educación para lograr la igualdad de oportunidades y el desarrollo pleno de las capacidades de niñas y niños. Propone que se capacite a docentes en esta perspectiva y se establezcan canales de participación entre el gobierno y la sociedad civil para garantizar la igualdad.
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INTRODUCCION

Se ha señalado en el discurso que el futuro del país depende de las nuevas ge-

neraciones; sin embargo, estas crecen y el anhelo permanece. Por consiguiente

debemos preguntarnos: ¿qué educación necesitan las niñas y los niños para

cumplir o lograr dicho anhelo considerando sus diferencias, los contextos en

los que viven y crecen, así como los grandes retos que enfrentarán en el futuro?

Ante las nuevas realidades y desafíos que viven los actores de la educación,

requieren nuevas respuestas y propuestas que observen como prioridad el

desarrollo equitativo de todas sus capacidades, una mejora continua para un

presente digno, con sentido de justicia social.

Se abren nuevos horizontes para la educación debido a los compromisos

asumidos por la Reforma Educativa y el marco legal, considerando las ense-

ñanzas y los aprendizajes que dejaron miles de educadoras y educadores para

construir una base sólida con nuevos programas que, con equidad e igualdad de oportunidades,
brinden a las niñas y los niños la capacidad y autonomía

para crecer, desarrollarse y pensar en mundos posibles, libres de estereotipos

y esquemas obsoletos, que respondan a sus necesidades y los que requiere la

sociedad actual.ldad

EN LA EDUCACION ES UN espacio privilegiado en donde se transmiten y reproducen valores,


actitudes
y comportamientos hacia el género femenino, naturalizados en nuestra socie-

dad; pero al mismo tiempo constituye un factor de cambio para transformar

realidades y fomentar la aplicación de derechos y libertades.

igualdad. Por ello

considero que la incorporación de la perspectiva de género en la formación

inicial y continúa se convierte en un imperativo de justicia social en tanto

que ayudará a las niñas, niños y adolescentes apreciar la diversidad como

un elemento de enriquecimiento personal y humano, por consiguiente en el

desarrollo de competencias de vida.

La escuela es el agente más importante en la formación integral de la perso-

nalidad del individuo; debe ser el espacio fundamental para la educación en

igualdad de género y de esa manera corregir cualquier tipo de inequidad social.

Garantizar la equidad y eliminar las desigualdades educativas no implica

simplemente un crecimiento exponencial del Sistema Educativo Nacional.

En otras palabras, “lograr la equidad de género no sólo significa incorporar a

más niñas, adolescentes y mujeres adultas en los distintos niveles educativos,

sino erradicar todas las formas de manifestación del sexismo en los procesos

educativos” (Marina Subirats y Cristina Brullet, 1992).

Es importante señalar que introducir la dimensión de género como un

imperativo de justicia social y el desarrollo con igualdad en todo el Sistema

Educativo Nacional no implica tan solo modificar el lenguaje al nombrar a las


niñas y los niños como un mero cambio retórico. El Instituto Nacional de la

Mujeres en el 2004 menciona la necesidad de adjuntar “el proceso de resigni-

ficación simbólica que incorpore la diversidad como un principio pedagógico

que enriquezca a las personas; esto representa un reto educativo, pues significa

desarrollar, promover y construir alternativas creativas y estratégicas incorpore

la perspectiva de género en las diversas realidades y contextos que conforman

nuestra sociedad mexicana”.

La educación con perspectiva de género implica la formación de la nueva per-

sonalidad del individuo sobre la base de la equidad entre los sexos, buscando

alternativas que le permitan acceder de manera igualitaria a los servicios que

brinda el sistema educativo que gradualmente se transforma y sin discrimina-

ción. En México, la aspiración de la igualdad entre ambos sexos se encuentra

reflejada en la legislación vigente.

es necesaria una reforma de la educación que

considere la implementación de un programa sustentado en una concepción

Jesús Adolfo Trujillo Holguín y José Luis García Leos (coords.)

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moderna, eficiente, diversificada, de calidad y adecuada a las necesidades y

prioridades de las niñas y los niños que permita combatir rezagos, desigual-

dades y desarrollar las competencias de vida que requieren en la actualidad

los educandos, con la finalidad de crear y fomentar verdaderas ciudadanas

y ciudadanos altamente capacitados y autónomos, con la conciencia de sus

responsabilidades sociales, comprometidos con su sociedad, país y el mundo,

respetuosos de los derechos humanos, partícipes de una cultura de paz y de

la preservación de los medios, entornos y contextos donde se desenvuelven.

En el mismo sentido, es importante la constitución de identidades sexuales

y de género de los educandos, así como el establecimiento de bases sólidas

de una convivencia armónica, de respeto y tolerancia a la diversidad; implica

el diseño de estrategias y programas que atiendan cada etapa de su desarrollo

y que considere prioridad la incorporación de la perspectiva de género con el

propósito de brindar, particularmente, igualdad de trato y de oportunidades

como un imperativo de equidad y justicia social. Es una exigencia que empieza

a tomar fuerza en las legislaciones locales, nacionales e internacionales en

esta materia y que en la actualidad forma parte de las prioridades elementales

educativas en muchos países.

En este supuesto, María Bertely (2003) dice:

para el desarrollo de competencias en los educandos mediante

estrategias con perspectiva de género en los diversos ambientes educativos

y en los procesos de aprendizaje a fin de cumplir con el compromiso social,


político, cultural y educativo para lograr los propósitos de la Reforma Edu-

cativa en México.

ORIGEN

CAUSA

REALIDAD

CONCLUISIONES

Refiere

que mujeres y hombres sean capaces de comenzar a transformar patrones

valorativos y de conducta que les permita efectivamente adquirir diferentes

destrezas y habilidades desde el respeto a sus diferencias sexuales y de gé-


nero como un principio pedagógico que enriquezca a las personas. Este es el

propósito de transversalizar la perspectiva de género como política pública en

nuestra sociedad y en la educación en México.

Es necesario proporcionar a los docentes las herramientas conceptuales,

didácticas y metodologías que les permitan la revisión de su actuar y práctica

reflexiva en el aula, así como buscar el trato equitativo e igualitario de su re-

lación con sus educandos y de ellos entre sí; y de la relación con sus iguales,

el uso de un lenguaje incluyente hacia su alumnado, todo ello mediante la

sensibilización, capacitación y formación en perspectiva de género que esté

disponible en las instancias de formación, profesionalización y actualización

de los docentes.

Para avanzar en la política pública de género y educación se requiere

de la vinculación entre los diferentes ámbitos de gobierno: federal, estatal y

municipal, y de la sociedad civil organizada. Esto implica generar canales per-

manentes de consulta, participación y seguimiento que garanticen la igualdad

de oportunidades entre mujeres y hombres, su pleno desarrollo de competencias

de vida y el ejercicio de sus derechos.

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