Clase 4 GRACIA LIBRE Juan Wesley
Clase 4 GRACIA LIBRE Juan Wesley
"El que no perdonó a su hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no no con él
también nos dará libremente todas las cosas" Rom. 8:32
AL LECTOR Nada más que la convicción más fuerte, no sólo que lo que está aquí avanzado
es "la verdad como lo es en Jesús", sino también que estoy indispensamente obligado a
declarar esta verdad a todo el mundo , podría haberme inducido abiertamente a
oponerme a los sentimientos de aquellos a quienes valoro por su obra: ¡A cuyos pies
puedo encontrarme en el día del Señor Jesús! En caso de que alguno crea que es su deber
responder a este respecto, sólo tengo una petición que hacer, -- Que todo lo que hagan,
se haga intrínsecamente, en el amor y en el espíritu de mansedumbre. Dejen que sus muy
disputados demuestren que han "puesto, como elegidos de Dios, entraña de
misericordias, dulzura, longanimidad; " que incluso de acuerdo con este tiempo se puede
decir: "¡Mira cómo estos cristianos se aman unos a otros!"
1. ¡Cuán libremente Dios ama al mundo! Mientras aún éramos pecadores, "Cristo murió
por los impíos." Mientras estábamos "muertos en nuestro pecado", Dios "no le escatimó a
su propio Hijo, sino que lo liberó por todos nosotros". Y con qué libertad con él "nos da
todas las cosas!" ¡Sin cierto, GRACE GRATUITA es todo en todo!
2. La gracia o el amor de Dios, de donde viene nuestra salvación, es GRATIS EN TODO, y
GRATIS PARA TODOS.
3. Primero. Es gratis en todos los que se les da. No depende de ningún poder o mérito en
el hombre; no, ni en ningún grado, ni en su totalidad, ni en parte. No depende en modo
alguno ni de las buenas obras ni de la rectitud del receptor; no en nada de lo que ha
hecho, ni nada de lo que es. No depende de sus esfuerzos. No depende de sus buenos
temperamentos, ni de sus buenos deseos, ni de buenos propósitos e intenciones; porque
todos estos fluyen de la gracia libre de Dios; son sólo los arroyos, no la fuente. Son los
frutos de la gracia libre, y no la raíz. No son la causa, sino los efectos de la misma. Todo lo
bueno es en el hombre, o es hecho por el hombre, Dios es el autor y hacedor de él. Así es
su gracia libre en todos; es decir, de ninguna manera dependiendo de ningún poder o
mérito en el hombre, sino solo de Dios, que libremente nos dio su propio Hijo, y "con él
nos da libremente todas las cosas.
4. Pero es gratis para TODOS, así como EN TODO. A esto algunos han respondido: "No: Es
gratis sólo para aquellos a quienes Dios ha ordenado a la vida; y no son más que un
pequeño rebaño. La mayor parte de Dios ha ordenado a la muerte; y no es gratis para
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ellos. Los que Dios odia; y, por lo tanto, antes de que nacieran, decretaron que debían
morir eternamente. Y esto lo decretó absolutamente; porque también lo fue su buen
placer; porque era su voluntad soberana. En consecuencia, nacen para esto, - para ser
destruidos cuerpo y alma en el infierno. Y crecen bajo la maldición irrevocable de Dios, sin
ninguna posibilidad de redención; por la gracia que Dios da. él da sólo para esto, para
aumentar, no prevenir, su condenación.
5. Este decreto de predestinación. Pero creo que escucho decir una: "Esta no es la
predestinación que sostengo: sólo sostendré la elección de la gracia. Lo que creo no es
más que esto, - que Dios, antes de la fundación del mundo, hizo elección de un cierto
número de hombres para ser justificados, santificados y glorificados. Ahora, todo esto será
salvado, y ninguno más; porque el resto de la humanidad Dios se va a sí mismo: Así siguen
la imaginación de sus propios corazones, que sólo son malvados continuamente, y,
encerándose cada vez peor, son por fin justamente castigados con la destrucción eterna."
6. ¿Es esto toda la predestinación que usted tiene en cuenta; tal vez esto no es todo. No
creas que Dios los ordenó a esto mismo" Si es así, crees todo el grado; usted tiene la
predestinación en el sentido completo que se ha descrito anteriormente. Pero puede ser
que creas que no. Entonces no creas, Dios endurece el corazón de los que perecen: No
creas, él (literalmente) endurecido el corazón de Faraón; y que para este fin lo levantó, o
lo creó Por qué, esto equivale a la misma cosa. Si usted cree Faraón, o cualquier hombre
en la tierra, fue creado para este fin, - para ser condenado, - usted sostiene todo lo que se
ha dicho de la predestinación. Y no hay necesidad de añadir, que Dios segundo su grado,
que se supone inmutable e irresistible, al endurecer los corazones de esos vasos de ira que
ese decreto había apto antes para la destrucción.
7. bueno, pero puede ser que no creas ni siquiera esto; usted no tiene ningún decreto de
reprobación; no crees que Dios decrete que ningún hombre sea condenado, no se
endurece, se ajusta irresistiblemente a él, para la condenación; sólo dices: "Dios decretó
eternamente que todos estaban muertos en pecado, él diría a algunos de los huesos
secos, Vivir, y a otros que no lo haría; que, en consecuencia, estos deben ser hechos vivos,
y los permanecen en la muerte, - estos deben glorificar a Dios por su salvación, y aquellos
por su destrucción."
8. ¿No es esto lo que quieres decir con la elección de la gracia Si lo sea, yo haría una o dos
preguntas: ¿Son todos los que no son así elegidos salvados o fueron cualquiera, desde la
fundación del mundo es posible que cualquier hombre sea salvo que sea así elegido si
usted dice: "No", usted está sino donde estuvo; usted no tiene un pelo más lejos; todavía
creéis, que, como consecuencia de un decreto inmutable e irresistible de Dios, la mayor
parte de la humanidad permanece en la muerte, sin ninguna posibilidad de redención; en
la medida en que nadie puede salvarlos, sino Dios, y no los salvará. Usted cree que ha
decretado absolutamente no salvarlos; y lo que es esto, pero decretando condenarlos Es,
en efecto, ni más ni menos; se trata de la misma cosa; porque si estás muerto, y
completamente incapaz de hacerte vivir, entonces, si Dios ha decretado absolutamente,
sólo hará vivos a los demás, y no a ti, ha decretado absolutamente tu muerte eterna; estás
absolutamente condenado a la condenación. Entonces, aunque usas palabras más suaves
que algunas, te refieres a la misma cosa; y el decreto de Dios sobre la elección de la gracia,
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según su relato de ella, no equivale ni más ni menos que lo que otros llaman el decreto de
reprobación de Dios.
9. Llámalo por lo tanto por cualquier nombre que quieras, elección, preterición,
predestinación o reprobación, llega al final a la misma cosa. El sentido de todo es
claramente esto, -- en virtud de un decreto eterno, inmutable e irresistible de Dios, por
parte de la humanidad son salvados infaliblemente, y el resto infaliblemente condenado;
siendo imposible que cualquiera de los primeros debe ser condenado. o que cualquiera de
estos últimos debe ser guardado.
10. Pero si esto es así, entonces todo predica vano. No les hace falta que sean elegidos;
porque ellos, ya sea con predicación o sin ella, se salvarán infaliblemente. Por lo tanto, el
fin de la predicación - para salvar debe - es nulo con respecto a ellos; y es inútil para ellos
que no son elegidos, porque no pueden ser salvos: Ellos, ya sea con predicación o sin ellos,
serán condenados infaliblemente. Por lo tanto, el fin de la predicación es nulo con
respecto a ellos de la misma manera; por lo que en cualquier caso nuestra predicación es
vano, como usted escucha también es vano.
11. Esto entonces, es una prueba clara de que la doctrina de la predestinación no es una
doctrina de Dios, porque hace nula la ordenanza de Dios; y Dios no está dividido contra sí
mismo. Un segundo es, que tiende directamente a destruir esa santidad que es el fin de
todas las ordenanzas de Dios. No digo, ninguno de los que lo sostienen son santos;
(porque Dios es de tierna misericordia para aquellos que están inevitablemente
enredados en errores de cualquier tipo;) pero que la doctrina misma, - que todo hombre
es elegido o no elegido de la eternidad, y que el uno debe ser inevitablemente salvo, y el
otro inevitablemente condenado, - tiene una tendencia manifiesta a destruir la santidad
en general; porque quita por completo esos primeros motivos a seguir después de ella,
tan frecuentemente propuesta en las Escrituras, la esperanza de la recompensa futura y el
miedo al castigo, la esperanza del cielo y el miedo al infierno. Que éstos se vayan al
castigo eterno, y a los que se tome la vida eterna, no es motivo para que luche por la vida
que cree que su suerte ya está echada; no es razonable que lo haga, si cree que es
inalterablemente juzgado ya sea a la vida o a la muerte. Dirás, "Pero él no sabe si es vida o
muerte." Lo que entonces - esto no ayuda a la cuestión; porque si un hombre enfermo
sabe que debe morir inevitablemente, o inevitablemente recuperarse, aunque él no sabe
cuál, es irrazonable para él tomar cualquier físico en absoluto. Podría decir justamente, (y
así he oído hablar a algunos, tanto en la enfermedad corporal como en espiritual,) "Si soy
ordenado a la vida, viviré; si a la muerte, moriré; por lo que no es necesario preocuparse
por ello. Así que esta doctrina tiende a cerrar la misma puerta de la santidad en general, --
a impedir que los hombres profanos se acerquen a ella, o se esforzen por entrar en ella.
12. Al igual que directamente esta doctrina tiende a destruir varias ramas particulares de
santidad. Tales son la mansedumbre y el amor, - el amor, quiero decir, de nuestros
enemigos, - de los malvados y no gracias. Yo digo que no, que nadie que lo sostiene tienen
mansedumbre y amor; (porque así como el poder de Dios, así es su misericordia;) pero
que naturalmente tiende a inspirar, o aumentar, una nitidez o afán de temperamento, que
es bastante contrario a la mansedumbre de Cristo; como entonces aparece
especialmente, cuando se oponen en esta cabeza. Y como naturalmente inspira desprecio
o frialdad hacia aquellos a quienes suponemos que los marginados forman Dios. 0 pero,"
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dices. "Supongo que ningún hombre en particular un reprobado." Quieres decir que no lo
harías si pudieras evitarlo: Pero no puedes dejar de aplicar a veces tu doctrina general a
personas particulares: El enemigo de las almas la aplicará por ti. Sabes con qué frecuencia
lo ha hecho. Pero rechazaste el pensamiento con aborrecimiento. Verdadero; tan pronto
como puedas; pero ¿cómo agrió y agudizar su espíritu en el tiempo medio! bien sabes que
no era el espíritu de amor que entonces sentías hacia ese pobre pecador, a quien suponías
o sospechabas, si lo harías o no, haber sido odiado por Dios desde la eternidad.
13. En tercer lugar. Esta doctrina tiende a destruir el consuelo de la religión, la felicidad
del cristianismo. Esto es evidente en cuanto a todos aquellos que se creen reprobados, o
que sólo lo sospechan o temen. Todas las grandes y preciosas promesas se pierden para
ellos; no les dan ningún rayo de consuelo: Porque no son los elegidos de Dios; por lo
tanto, no tienen ni lote ni porción en ellos. Este es un bar eficaz para encontrar cualquier
consuelo o felicidad, incluso en esa religión cuyos caminos están diseñados para ser
"caminos de amabilidad, y todos sus caminos de paz".
14. Y en cuanto a vosotros que os creéis elegidos por Dios, qué es vuestra felicidad espero,
no una noción, una creencia especulativa, una opinión desnuda de cualquier tipo; pero un
sentimiento de posesión de Dios en tu corazón, hecho en ti por el Espíritu Santo, o, el
testimonio del Espíritu de Dios con tu espíritu de que eres un hijo de Dios. Esto, de lo
contrario llamado "la plena seguridad de la fe,: es el verdadero terreno de la felicidad de
un cristiano. Y ciertamente implica una plena seguridad de que todos tus pecados pasados
son perdonados, y que ahora eres un hijo de Dios. Pero no implica necesariamente una
plena seguridad de nuestra perseverancia futura. No digo que esto nunca se una a ella,
sino que no está necesariamente implícito en él; para muchos tienen el que no tiene el
otro.
15. Ahora bien, este testimonio de la experiencia del Espíritu muestra ser muy obstruido
por esta doctrina; y no sólo en aquellos que, creyéndose reprobados, por esta creencia lo
empujaron lejos de ellos, sino incluso en los que han probado ese buen don, que aún lo
han perdido de nuevo, y volvieron a caer en dudas, y temores, y la oscuridad, - oscuridad
horrible, que podría sentirse! Y apelo a cualquiera de ustedes que sostienen esta doctrina,
para decir, entre Dios y sus propios corazones, si no tienen a menudo un retorno de dudas
y temores concernientes a su elección o perseverancia! Si preguntan: "Quién no lo ha
hecho" respondo, muy pocos de los que sostienen esta doctrina; pero muchos, muchos,
de los que no lo sostienen, en todas las partes de la tierra; -- muchos de ellos han
disfrutado del testimonio ininterrumpido de su Espíritu, la luz continua de su rostro, desde
el momento en que creyeron por primera vez, durante muchos meses o años, hasta el día
de hoy.
16. Esa garantía de fe de la que disfrutan excluye toda duda y temor, excluye todo tipo de
dudas y temores sobre su perseverancia futura; aunque no es apropiadamente, como se
dijo antes, una garantía de lo que es futuro, sino sólo de lo que es ahora. Y esto no
necesita para su apoyo una creencia especulativa, que quien alguna vez es ordenado a la
vida debe vivir; porque se forja a partir de hora a hora, por el poderoso poder de Dios,
"por el Espíritu Santo que se les da." Y por lo tanto esa doctrina no es de Dios, porque
tiende a obstruir, si no destruir, esta gran obra del Espíritu Santo, de donde fluye el
principal consuelo de la religión, la felicidad del cristianismo.
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17. Una vez más: ¡Qué incómodo es este pensamiento, que miles y millones de hombres,
sin ninguna ofensa previa o culpa suya, estaban inmutablemente condenados a
quemaduras eternas! ¡Cuán peculiarmente incómodo debe ser para los que se han puesto
a Cristo! a aquellos que, llenos de entrañas de misericordia, ternura y compasión, incluso
podrían "deseándose mal por el bien de sus hermanos!"
18. En cuarto lugar. Esta doctrina incómoda tiende directamente a destruir nuestro celo
por las buenas obras. Y esto lo hace, En primer lugar, como naturalmente tiende (según lo
observado antes) a destruir nuestro amor a la mayor parte de la humanidad, a saber, el
mal y no gracias. Porque cualquier cosa que disminuya nuestro amor, debe ir mucho
menoscaba nuestro deseo de hacerles el bien. Esto lo hace, en segundo lugar, ya que
corta uno de los motivos más fuertes a todos los actos de misericordia corporal, como
alimentar a los hambrientos, vestir a los desnudos y a similares, - viz., la esperanza de
salvar sus almas de la muerte. Por lo que sirve para aliviar sus deseos temporales, que
simplemente están cayendo en el fuego eterno "Bueno; pero correr y arrebatarlos como
marcas fuera del fuego.: No, esto se supone imposible. Fueron nombrados allí, dices,
desde la eternidad, antes de que hubieran hecho el bien o el mal. crees que es la voluntad
de Dios que deben morir. Y "quien se ha resistido a su voluntad" Pero usted dice que no
sabe si estos son elegidos o no. ¿Qué es entonces si usted sabe que son uno u otro, - que
son elegidos o no elegidos, - todo su trabajo es nulo y vano. En cualquier caso, su consejo,
reprobación o exhortación es tan innecesaria e inútil como nuestra predicación. No les
hace falta que sean elegidos; porque infaliblemente serán salvos sin él. Es inútil para ellos
que no son elegidos; porque con o sin él serán condenados infaliblemente; por lo tanto,
no puedes soportar consistentemente con tus principios ningún dolor por su salvación. En
consecuencia, esos principios tienden directamente a destruirte celo por las buenas obras;
para todas las buenas obras; pero particularmente para el más grande de todos, la
salvación de las almas de la muerte.
19. Pero, en quinto lugar, esta doctrina no sólo tiende a destruir la santidad cristiana, la
felicidad y las buenas obras, sino que también tiene una tendencia directa y manifiesta a
derrocar toda la Revelación cristiana. El punto que el más sabio de los incrédulos
modernos más industriosamente laborios para probar, es que la Revelación Cristiana no es
necesaria. Ellos bien saben, ¿podrían mostrar esto una vez, la conclusión sería demasiado
clara para ser negada: "Si no es necesario, no es cierto", Ahora, este punto fundamental
que renuncia. Porque supongamos que ese decreto eterno e inmutable, una parte de la
humanidad debe ser salvada, aunque la Revelación Cristiana no estuviera en ser, y la otra
parte de la humanidad debe ser condenada, a pesar de esa Revelación. Y qué desearía un
infiel más Que le permitas todo lo que pide. Al hacer el Evangelio así innecesario para todo
tipo de hombres, renuncias a toda la causa cristiana. "0 lo digo no en Gath! para que las
hijas de los incricocunidos se regocijan; "para que los hijos de la incredulidad triunfen!
20. Y como esta doctrina tiende manifiesta y directamente a derrocar toda la Revelación
cristiana, hace lo mismo, por clara consecuencia, al hacer que esa Revelación se
contradiga a sí misma. Porque se basa en tal interpretación de algunos textos (más o
menos no importa) como contradice rotundamente todos los demás textos, y de hecho
todo el alcance y el tenor de la Escritura. Por ejemplo: Los hacedores de esta doctrina
interpretan ese texto de la Escritura: "Jacob he amado, pero Esaú he odiado", como lo que
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implica que Dios en un sentido literal odiaba a Esaú, y a todos los reprobados, desde la
eternidad. Ahora bien, lo que posiblemente puede ser una contradicción más plana que
ésta, no sólo para todo el alcance y tenor de la Escritura, sino también para todos esos
textos particulares que declaran expresamente: "Dios es amor" Una vez más: Deducen de
ese texto: "Tendré misericordia de quien tendré misericordia" (Romanos 4:15) que Dios es
amor sólo es amor a algunos hombres, viz., los elegidos, y que tiene misericordia para los
sólo; totalmente contrario a lo cual es todo el tenor de la Escritura, como es esa
declaración expresa en particular, "El Señor está amando a todo hombre; y su misericordia
está por todas sus obras." (Salmos 114:9.) Una vez más: Deducen de eso y de los textos
similares: "No es de aquel a quien quiere, ni de aquel que corre, sino de Dios que muestra
misericordia, que sólo muestra misericordia a aquellos a quienes tenía respeto desde toda
la eternidad. No, pero quien responde contra Dios ahora Tú contradicen a todos los
oráculos de Dios, que declaran en todo: "Dios no respeta a las personas:' (Hechos 10:34)
"No hay respeto de las personas con él." (Rom. 2:11.) Una vez más: de ese texto, "Los
niños que aún no han nacido, ni habiendo hecho ningún bien o mal, para que el propósito
de Dios según las elecciones se presente, no de las obras, sino de él que llama; se le dijo",
a Rebecca, "El anciano servirá a los más jóvenes;" usted inferir, que nuestro ser
predestinado, o elegir, de ninguna manera depende del conocimiento previo de Dios.
Contrariamente a esto son todas las Escrituras; y los en particular, "Elegid según el
conocimiento previo de Dios"; (1 Pedro 1:2;) "A quien hizo por su conocimiento, también
predestinó." (Rom. 8:29.)
21. Y "el mismo Señor sobre todo es rico" en misericordia "a todos los que lo invocan:"
(Romanos 10:12:) Pero tú dices, "No; él es tal sólo para aquellos por quienes Cristo murió.
Y esos no son todos, sino sólo unos pocos, a quienes Dios ha elegido del mundo; porque
murió no para todos, sino sólo para aquellos que fueron elegido en él antes de la
fundación del mundo. (Ef. 1:4.) Totalmente contrario a su interpretación de estas
Escrituras, también es todo el tenor del Nuevo Testamento; como son en particular esos
textos: -- "No lo destruyas con tu carne, por quien Cristo murió" (Rom. 14:15, ) -- una
prueba clara de que Cristo murió, no sólo por los que son salvos, sino también para los
que perecen: Es "el Salvador del mundo;" (Juan 4:42;) Es "el Cordero de Dios que quita los
pecados del mundo;" (Juan 1:29;) "El es la propiciación, no sólo por nuestros pecados, sino
también por los pecados de todo el mundo;" (1 Juan 2:2;) "El", el Dios viviente, "es el
Salvador de todos los hombres;" (1 Timoteo 4:10;) "Se dio un rescate por todos;" (1
Timoteo 2:6;) "Probó la muerte por cada hombre." (Heb. 2:9.)
22. Si usted pregunta: "¿Por qué entonces no todos los hombres no son salvos" toda la ley
y la respuesta del testimonio, Primero, No por ningún decreto de Dios; no porque sea su
placer que deben morir; porque, mientras vivo, dice el Señor Dios," No tengo placer en la
muerte de aquel que muere." (Ezequiel 18:3, 32.) Cualquiera que sea la causa de su
perecer, no puede ser su voluntad, si los oráculos de Dios son verdaderos; porque
declaran: "No está dispuesto a que nadie perezca, sino que todos vengan al
arrepentimiento;" (2 Pet. 3:9;) "Quiere que todos los hombres sean salvos." Y ellos, en
segundo lugar, declaran cuál es la causa por la que no se salvan a todos los hombres, a
saber, que no serán salvos: Así nuestro Señor expresamente, "No vendrás a mí para que
podáis tener vida." (Juan 5:40.) "El poder del Señor está presente para sanarlos", pero no
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serán sanados. "Rechazan el consejo", el consejo misericordioso, "de Dios contra sí
mismos", al igual que sus antepasados de cuello rígido. Y por lo tanto son sin excusa;
porque Dios los salvaría, pero no se salvarán: Esta es la condenación: "¡Cuántas veces os
habría reunido, y no lo haríais!" (Mateo 23:37.)
23. Así, esta doctrina tiende manifiestamente a derrocar toda la Revelación cristiana,
haciéndola contradecir; al dar tal interpretación de algunos textos, como contradice
rotundamente todos los demás textos, y de hecho todo el alcance y el tenor de la
Escritura; - una prueba abundante de que no es de Dios. Pero tampoco todo esto: Porque,
por séptima parte, es una doctrina llena de blasfemia; de la blasfemia que debo temer
mencionar, pero que el honor de nuestro Dios bondadoso, y la causa de su verdad, no me
sufrirá para guardar silencio. En la causa de Dios, entonces, y de una sincera preocupación
por la gloria de su gran nombre, mencionaré algunas de las horribles blasfemias
contenidas en esta horrible doctrina. Pero primero, debo advertir a cada uno de ustedes
que oye, como ustedes responderán a la gran día, no para acusarme (como algunos han
hecho) de blasfemias, porque menciono la blasfemia de otros. Y cuanto más estáis
afligidos con los que profetizan, veis que "confirmad vuestro amor hacia ellos: cuanto
más, y que el deseo de vuestro corazón, y la oración continua a Dios, sean: "Padre,
perdónalos; porque no saben lo que hacen!
24. Esta premisa, que se observe, que esta doctrina representa a nuestro bendito Señor,
"Jesucristo el justo", "el Hijo unigénito del Padre, lleno de gracia y verdad", como un
hipócrita, un engañador del pueblo, un hombre vacío de sinceridad común. Porque no se
puede negar, que él en todas partes habla como si estuviera dispuesto a que todos los
hombres fueran salvos. Por lo tanto, decir que no estaba dispuesto a que todos los
hombres fueran salvos, es representarlo como un mero hipócrita y dessembleador. No se
puede negar que las amables palabras que salieron de su boca están llenas de invitaciones
a todos los pecadores. Decir, entonces, que no tenía la intención de salvar a todos los
pecadores, es representarlo como un grosero engañador del pueblo. No puedes negar que
dice: "Venid a mí todos los que estáis cansados y cargados." Si, entonces, usted dice que
llama a los que no pueden venir; aquellos que él sabe que no pueden venir; aquellos a
quienes puede hacer capaces de venir, pero no lo hará; ¿cómo es posible describir una
mayor insinceridad Que lo representes como burlarse de sus criaturas indefensas,
ofreciendo lo que nunca pretende dar. Usted lo describe como diciendo en la cosa, y lo
que significa otro; como fingir el amor que no había hecho. El, en "cuya boca no era
engaño", te llenas de engaño, vacío de sinceridad común; - entonces especialmente,
cuando, acercando la ciudad, lloró sobre ella, y dijo, '0 Jerusalén, Jerusalén, matas a los
profetas y los apedreas que te son enviados; cuántas veces habría reunido a sus hijos, - y
no lo harían, "hqelhsa - kai ouk hqelhsate. Ahora, si usted dice, lo harían, pero él no lo
haría, usted lo representa (que podía oír) como cocodrilos llorando lágrimas; llorando por
la presa que él mismo había condenado a la destrucción!
25. Tal blasfemia esto, como uno pensaría que podría hacer que los oídos de un cristiano
cosiera! Pero aún hay más detrás; porque así como honra al Hijo, también esta doctrina
honra al Padre. Destruye todos sus atributos a la vez: Anula tanto su justicia, misericordia
y verdad; Sí, representa al Dios más santo como peor que el diablo, como más falso, más
cruel y más injusto. Más falso; porque el diablo, mentiroso como él, nunca ha dicho: "Hará
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que todos los hombres sean salvos:" Más injusto; porque el diablo no puede, si lo desea,
ser culpable de tal injusticia como usted atribuye a Dios, cuando usted dice que Dios
condenó a millones de almas al fuego eterno, preparado para el diablo y sus ángeles, por
continuar en el pecado, que, por falta de esa gracia no las dará, no pueden evitar: Y más
cruel; porque ese espíritu infeliz "busca descanso y no encuentra ninguno," para que su
propia miseria inquieta sea una especie de tentación para él de tentar a los demás. Pero
Dios descansa en su lugar alto y santo; para suponer que él, por su propio mero
movimiento, de su voluntad pura y placer, tan feliz como es, de condenar a sus criaturas,
lo hagan o no, a la miseria sin fin, es imputarlo tal crueldad, ya que no podemos imputar ni
siquiera al gran enemigo de Dios y del hombre. ¡Es representar al Alto Dios (¡el que tiene
oídos para oír, déjalo oír!) como más cruel, falso e injusto que el diablo!
26. ¡Esta es la blasfemia claramente contenida en el horrible decreto+ de la
predestinación! Y aquí me arreglo el pie. En este me uno a un problema con cada aserdor
de la misma. Representas a Dios como peor que el diablo; más falso, más cruel, más
injusto. Pero dices que lo probarás por las Escrituras. ¡Mantener! ¿Qué probarás por la
Escritura que Dios es peor que el diablo que no puedo ser. Cualquiera que sea la prueba
de la Escritura, nunca lo demuestra; cualquiera que sea su verdadero significado. Este no
puede ser su verdadero significado. ¿Preguntas, "Cuál es su verdadero significado
entonces" Si digo, "No sé", no has ganado nada; porque hay muchas Escrituras el
verdadero sentido del cual ni tú ni yo sabremos hasta que la muerte sea tragada en
victoria. Pero esto lo sé, mejor que decir que no tenía sentido, que decir que tenía un
sentido como esto. No puede significar, sea lo que sea que signifique, que el Dios de la
verdad es un mentiroso. Que signifique lo que quiere decir que el Juez de todo el mundo
sea injusto. Ninguna Escritura puede significar que Dios no es amor, o que su misericordia
no está sobre todas sus obras; es decir, sea lo que sea que demuestre que no hay escritura
puede probar la predestinación.
27. Esta es la blasfemia por la cual (sin embargo amo a las personas que la afirman)
aborrezco la doctrina de la predestinación, una doctrina, sobre la suposición de la cual, si
uno pudiera suponerlo por un momento, (llámalo elección, reprobación, o lo que te
plazca, porque todos vienen a lo mismo,) uno podría decir a nuestro adversario, el diablo,
"Tú tonto , por qué ruges por más tiempo Tu mentira a la espera de las almas es tan
innecesaria e inútil como nuestra predicación. No oigas que Dios te ha quitado la obra de
tus manos; y que lo hace mucho más efectivamente Tú, con todos tus principados y
poderes, sólo puede asaltarnos para que podamos resistirte; pero puede destruir
irresistiblemente el cuerpo y el alma en el infierno! Tú sólo puedes seducir; pero sus
decretos inmutables, para dejar miles de almas en la muerte, los obliga a continuar en el
pecado, hasta que caigan en quemas eternas. Tú temptest; Nos obliga a ser condenados;
porque no podemos resistirnos a su voluntad. Tonto, ¿por qué vas por más tiempo,
buscando a quien devoras No oyes que Dios es el león devorador, el destructor de las
almas, el asesino de los hombres" Moloch hizo que sólo los niños pasaran a través del
fuego, y ese fuego pronto fue sofocado; o, el cuerpo corruptible que se consume, su
tormento estaba en su fin; pero a Dios, se le dice, por su decreto eterno, fijado antes de
que hubieran hecho el bien o el mal, causas, no sólo los hijos de un lapso de largo, sino
también los padres, para pasar a través del fuego del infierno, el fuego que nunca será
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sofocado; y el cuerpo que se lanza allí en, siendo ahora incorruptible e inmortal, será
siempre consumido y nunca consumido, pero el humo de su tormento, porque es el buen
placer de Dios, 'asciende para siempre y para siempre'.
28. 0 ¡Cómo se regocijaría el enemigo de Dios y del hombre al oír estas cosas! ¡Cómo
lloraría en voz alta y no escatimaría! ¿Cómo levantaría la voz y dijo: "A vuestras tiendas,
oh Israel! ¡Huyan del rostro de este Dios, o perecerán por completo! Pero adónde huiréis
al cielo Está allí, hasta el infierno también está allí. No puedes huir de un tirano
omnipresente y todopoderoso. Y si huid o perdéis, llamo al cielo, a su trono, y a la tierra, a
su taburete, a testimoniar contra vosotros, pereceréis, moriréis eternamente. ¡Cantad, 0
infiernos, y regocijaos, vosotros que estáis bajo la tierra! Porque Dios, incluso el Dios
poderoso, ha hablado, y dedicado a la muerte miles de almas, forman la salida del sol a la
caída de ella! Aquí, 0 muerte, es que pican! No podrán escapar; porque la boca del Señor
lo ha dicho. Aquí, 0 tumba es tu victoria Naciones aún no nacidas, o siempre que han
hecho el bien o el mal están condenados a nunca ver la luz de la vida, ¡pero les roerás para
siempre y para siempre! ¡Que todas esas estrellas de la mañana cantaran juntas, que
cayeron con Lucifer, hijo de la mañana! ¡Que todos los hijos del infierno griten de alegría!
Porque el decreto es pasado, y quién lo desautorizará"
29. Sí, el decreto es pasado; y así fue antes de la fundación del mundo. Pero lo que el
decreto Incluso esto: "Voy a poner delante de los hijos de los hombres vida y muerte,
maldición de bendición. Y el alma que elige la vida vivirá, como el alma que elige la muerte
morirá." Este decreto por el cual "a quien Dios conocía, predestinó", fue en efecto de la
eternidad; esto, por el cual todos los que sufren a Cristo para hacerlos vivir son "elegidos
según el conocimiento previo de Dios", ahora se mantenemos firmes, así como la luna, y
como testigos fieles en los cielos; y cuando el cielo y la tierra desaparezcan, sin embargo,
esto no pasará; porque es tan inmutable y eterno como lo es el ser de Dios que lo dio. Este
decreto produce el mayor estímulo para abundar en todas las buenas obras y en toda
santidad; y es un manantial de alegría, de felicidad también, de nuestro gran e
interminable consuelo. Esto es digno de Dios; es todo lo que es consistente con todas las
perfecciones de su naturaleza. Nos da la visión más noble tanto de su justicia, misericordia
y verdad. A esto está de acuerdo con todo el alcance de la Revelación Cristiana, así como
todas sus partes. A esto Moisés y todos los Profetas dan testimonio, y nuestro bendito
Señor y todos sus apóstoles Así Moisés, en el nombre de su Señor: "Llamo al cielo y a la
tierra a registrar contra ustedes este día, que he puesto delante de ustedes la vida y la
muerte, la bendición y la maldición; por lo tanto, elige la vida, para que tú y tu semilla
vivan." Así Ezequiel: elige la vida, para que tú y tu descende viva;" Así Ezequiel: (Para citar
a un Profeta para todos:) "El alma que peca, morirá: El hijo no soportará" eternamente, "la
iniquidad del padre. La justicia de los justos estará sobre él, y la iniquidad de los inicuos
estará sobre él." (18:20.) Así nuestro bendito Señor: "Si alguno tiene sed, venga a mí y
beba." (Juan 7:37.) Así, su gran apóstol, San Pablo: (Hechos 17:30:) "Dios manda a todos
los hombres de todas partes que se arrepientan; - "todos los hombres en todas partes,"
cada hombre en cada lugar, sin ninguna excepción de lugar o persona. Así Santiago: "Si
alguno de vosotros carece de sabiduría, pida a Dios, que da a todos los hombres
liberalmente, y no se levanta, y se le dará." (Santiago 1:5.) Así San Pedro: (2 P. 3:9:) "El
Señor no está dispuesto a que nadie perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento."
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Y así San Juan: "Si alguno peca, tenemos un Abogado con el Padre; y él es la propiciación
de nuestros pecados; y no sólo para los nuestros, sino para los pecados de todo el
mundo." (1 Juan 2:1, 2.)
30. ¡Oh, os oyeis esto, vosotros que os olvidéis de Dios! ¡No puedes cargar tu muerte
sobre él! "¿Tengo algún placer en absoluto que los malvados deben morir dice el Señor
Dios." (Ezequiel 18:23 ss.) "Arrepentíos, y apartaos de todas tus transgresiones; por lo que
la iniquidad no será su ruina. Apartaos de vosotros todas vuestras transgresiones en las
que por vosotros habéis transgredido, -- por qué moriréis, 0 casa de Israel porque no
tengo placer en la muerte de aquel que muere, dice el Señor Dios. Por tanto, volváos y
vived." "Al vivir, dice el Señor Dios, no tengo placer en la muerte de los inicuos. - Volvdos,
apartaos de vuestros malos caminos; por qué moriréis, 0 casa de Israel" (Ezequiel 33:11.)
Editado por Ken Harris con correcciones por Ryan Danker y George Lyons de Northwest
Nazarene University (Nampa, Idaho) para el Wesley Center for Applied Theology.
Copyright 1999 por el Wesley Center for Applied Theology. El texto puede ser libremente
utilizado para fines personales o académicos.
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