NUEVO TESTAMENTO
Traduccién directa det
ORIGINAL GRIEGO
por Monsefior Doctor
JUAN STRAUBINGER
CON TODAS SUS NOTAS COMPLETAS
SEGUN LA FIEL VERSION ORIGINAL
SANTOS EVANGELIOS
HECHOS DE LOS APOSTOLES
CARTAS DE SAN PABLO,
DEL APOSTOL SANTIAGO, DE SAN PEDRO,
DE SAN JUAN Y DE SAN JUDAS
EL APOCALIPSISADVERTENCIAS:
Entre las numerosas referencias a otros libres
de Ja Sagrada Escritura, v. g. los Salmos, etc.,
el lector hallard citas ‘de ciertos pasajes "y.
nota”, Estas notas,son las que el autor ha
pure en su edicién completa de la Sagrada
iblia.
Los versiculos y niameros puestos entre cor-
chetes [] se refieren a textos que no se en-
cuentran en los mejores manuscritos griegos.
La rigurosa fidelidad al original griego obli-
fi, Donen. en contadas ocasiones, alguna pa-
labra entre paréntesis y cn bastardilla, para
adaptar la versién a 1a sintaxis castellana,
Estd de mas decir que los titulos y epigrafes
no forman, Pe, ‘del texto sagrado, sino que
sélo han sido puestos para marcar la division
logica y facilitar la lectura.INTRODUCCIG
1
La munificencia del Padre celestial que, 2 no dudarlo, bendice muy particularmente la
difusiin de su Palabra, que es el objeto del apostolado biblico, incrementa, en forma sor-
prendente, el, deseo que le expresamos de servir ese divino propésito de que Ja Escritura
revelada sea “el libro por excelencia de la espiriualidad cristiana’,
‘Fetminada con el tomo 5? nuestra edicién completa de la Biblia Vulgata, “explicada para
Ja vida", seguin la feliz. expresin de la Editorial Guadalupe, presenta hoy Desclée, de Brou-
wer, en la forma cuidadosa que todos conocemos, esta primera edicién del Nuevo Tpstamento,
au hemos traducido del origina! griego.con Ja mayor fidelidad posible y, que, anticipada en
parte con ediciones del Evangelio (Pia Sociedad de San Pablo, Peuser), de los Hechos y de
Jas Epistolas paulinas (Apostolado Livirgico del Uruguay, Barreiro y Ramos), aparece ahora
con notas y comentarios mds extensos, merced a la amplitud mayor de su formato. Ellos
contienen, como acertadamente acaba’ de, expresarlo un ilustrado profesor en la “Revista
Eclesidstica del Arzobispado de La Plata”, por una parte ‘las explicaciones de los Santos
Padres y comentarios de los diversos lugares, atendiendo més al adelantamiento espiritual
de los lectores que a las discusiones cientificas, sin que por ello st dejen de anotar, cuando
se presenta la ocasion, las divergencias de los autores", y por otra parte “gran numero de
referencias a otros lugares de las Escritaras, segin la sabia_y harto, olvidada regla exegética
de comentar fa Sagrada Fscritura a la luz ‘de 1a Sagrada Escritura”
La Iglesia Catélica reconoce dos fuentes de doctrina revelada: la Biblia y la Tradicién.
All presentar aqui en parte una de esas fuentes, hemos procurado, en efecto, que el comen-
tario no sélo ponga cada pasaje en relacién con la Biblia misma —mostrando que ella cs un
mundo de armonia sobrenatural entre sus més diversas partes—, sino también brinde al Jector,
junto a la cosecha de autorizados estudiosos modernos, el contenido de esa tradicién en
entos pontificios, sentencias y opiniones tomadas de Ja Patristica e ilustraciones de la
Liturgia, que muestran la aplicacién y trascendencia que en ella han tenido y tienen muchos
textos de Ja Revelacién.
EI grande y casi diria insospechado interés que esto despierta en las almas, esté explicado
en las palabras con que el Cardenal Arzobispo de Viena prologa una edicién de los Salmos
semejante a ésta en sus propésitos, sefialando “en los circulos del laicado, y aun entre los
jévenes, un deseo de conocer Ja fe'en su fuente y de vivir de la fuerza de esta fuente por el
contacto directo con ella”, Por eso, afade, "se ha creado un interés vital por la Sagrada
Escritura, ante todo por el Nuevo Testamento, pero también por el Antiguo, y el movi-
miento biblico catdlico se ha hecho como un rio incontenible”.
Es que, como ha dicho Pio XII, Dios no es una verdad que haya de encerrarse en el
templo, sino la verdad que debe iluminaros y servirnos de guia en todas las circunstancias
de la vide, No, ciertamente para ponerio al servicio de lo material y terreno, come si Cristo
fuese un pensador a la manera de los otros, venido para ocuparse de cosas temporales © dar
normas de prosperidad mundana, sino, precisamente al revés, para no perder de vista lo
sobrenatura} en medio de “este siglo malo” (Gél., 1, 4); lo cual no le impide por cierto al
Padre dat por afladidura cuantas prosperidades nos’ convengan, sea en el orden. individual
© en el colectivo, a los que antes cue eso busquen vida eterna.
0
‘Un escritor francés refiere en forma impresionante la lucha que en su infancia conmovia
su espiritu cada vez que veia el libro titulado Santa Biblia y recordaba las prevenciones que
se le habjan hecho acerca de Ia lectura de ese libro, ora por dificil e impenetrable, ora por
peligroso 0 heterodoxo. "Yo recuerdo, dice, ese drama espiritual contradictorio de quien,
al ver una cosa santa, siente que debe buscaria, y por otra parte abriga un temor indefinido
y, misterioso de alg espirita escondido alli... Era para mi como si,ese libro hubiera
sido escrito a un tiempo por el diablo y por Dios. Y aunque esa impresion. infantil —que
¥eo es general en casos como el mio— se producia en Ja subconciencia, ha sido tan intensa
mi desolante duda, que sélo en la madurez de mi vida un largo contacto con la Palabra
de Dios ha podido destruir este monstruoso escdndalo que produce el sembrat en la nifez
el miedo de nuestro Padre celestial y de su Palabra vivificante.’
La meditacién, sin palabras de Dids que le den sustancia sobrenatural, se convierte en
simple reflexin —autocritica en que el juez es tan falible como el reo— cuando no termina
u2 2, NUEVO THSTAMENTO
por derivarse al terreno de Ja imaginacién, cayendo en pura cavilacién o devaneo. Maria
guar das Palabras repaséndolas en su corazin (Luc., 2, 19 y 51): he aqui la mejor
definicién de lo que es meditar. Y entonces, lejos de ser una divagacién propia, es un
estudio, una hocién, una contemplacién que nos une a Dios por su Palabra, que es el Vetbo,
que es Jess mismo, la Sabiduria_con la cual nos vienen ‘todos los bienes (Sab. 7, 11).
Quien esto hace, ‘pasa con la Biblia las horas inas felices © intensas de,su vida. Entonces
entiende cio puede hablarse de meditar dia y noche (Salmo, 1, 2) y de orar siempre
(Luc. 18, 1), sim cesar (I Tes, 5, 17); porque en cuanto él permanece en Ia Palabra, las
palabras de Dioy comienzan a permanecer en él —que es lo que Jesés quiere para damos
Guanto le pidamos (Juan, 15,7) y para que conquistemos la libertad del espiritu (Juan, 8, 31)—
y no permanecer de cualquier modo, sino com opulencia, segin la bella exptesién de San
Pablo (Col., 3, 16). Ast van esas palabras vivientes (I Pedro, 1, 23, texto griego) formando
el substrato, de nuestra personalidad, de modo tal que, a fuerza’ de admirarlas cada dia
més, concluimos por no saber pensar sin elas y encontramos harto pobres las verdades rela-
tivas —si es que no son mentiras humanas que se disfrazan de verdad y virtud, como los
sepulcros blanqueados (Mat, 23, 27)—. Entonces, asi como hay una aristocracia del pensa-
mitento y del arte en el hombre de formacién clésica, habituado a lo, superior en lo inte~
lectual © estético, asf también en lo espiritual se forma el gusto de lo duténticamente sobi
natural y divino, ‘comp lo muestra Santa Teresa de Lisieux al confesar que cuando descubrid
el Evangelio, los’ demis libros ya no le decian nada. {No es éste, acaso, uno de los privilegios
que promete Jestis en ef texto antes citado, dicienddque la verdad nos shari libres? Se ha
recordado recientemente la frase del Cardenal Mercier, antes lector insaciable: "No soporto
otra lectura que los Evangelios y las Epistolas.”
m™
¥ aqui, para entrar de leno 4 comprender la importancia de conocer ¢l Nuevo Test
mento, tenemos que empezar por hacernos a nosotros mismos una confesidn muy {atin
a todos nos parece raro Jess. Nunca hemos legado a confesarios esto, porque, por un
cierto temor instintivo, no nos hemos atrevido siquiera a plantearnos semejance ‘cuestién.
Pero £1 mismo nos anima a hacerlo cuando dice: "Dichoso el que no se escandalizare de
Mi” (Mat, 11, 6; Luc, 7, 23), con lo cual se anticipa a declarar que, habiendo sido #1
anunciado como piedra de escindalo (/s, 8, 14 y 28, 16; Rom. 9, 33; Mat. 21, 42-44),
Jo natural en nosotros, hombres caidos, es escandalizarnos de £1 como lo hicieron sus dis-
cipulos todos, segin EI lo habia anunciado (Mat, 26, 31 y $6). Entrados, pues, en este
cémodo terreno de intima desnudez —podriamos decir de psicoanilisis sobrenarural— en la
presencia “del Padre que ve en lo secreto” (Mat. 6, 6), podemos aclararnos a nosotros
mismos ese punto tan importante para nuestro interés, con I alegria nueva de saber que
Jess no se sorprende ni se incomoda de que lo encontremos raro, pues £1 sabe bien lo
que hay dentro de cada hombre (Juan, 2, 24-25). Lo sorprendente seria que no lo hallé-
semes Taro, y podems afirmar que nadie se libra de comenzat por esa Impresién, pues,
Como antes deciamos, San Pablo tos revela que vingin hombre simplemente natural’ ("pst
tquico”, dice él) percibe lag cosas que son del Fspititu de Dios (I Cor, 2, 14). Bara esto es
necesatio “nacer de nuevo”, €s decir, “renacer de lo alto", y tal es la obra que hace en
nosotros —no en los mis sabios sino al'contrario en los mas pequefios (Luc., 10, 21)— el Espi-
ritu, mediante el cual podemos “escrutar hasta las profundidades de Dios” (/ Cor., 2, 10).
Jesis nos parece raro y parodéjico en muchisimos pasajes del Evangelio, empezando por
el'que acabamos de citar sobre la comprensién que tienen los pequefios mas que los sabios.
El dice también que la parte de Marta, que se movia mucho, vale menos que la de Maria
gue estaba sentada escuchindolo; que, ama menos aquel a quien menos hay que perdonarle
Luc. 7, 47); que (quiza por esto) al obrero de la Gitima hora se Je pagé antes que al de
la primera (Mar, 20, 8); y, en fin, para no. ser prolijo, recordemos que El proclama de
un modo general que lo que es altamente estimado cntre los hombres es despreciable a los
ojos de Dios (Luc, 16, 15).
Esta impresin nuestra sobre Jesis es harto explicable. No porque £1 sea raro cn sf, sino
porque lo somos nosotros a causa de nuestra naturaleza degenerada por la caida original.
Bl pertenece a una normalidad, a una realidad absoluta, que es la nica normal, pero que a
nosotros nos parece todo lo contrario porque, como vimos en el recordado texto de San
Pablo, no podemos comprenderlo naturalmente.. “Yo soy de aftiba y vosotros sois de abajo”,
dice el mismo Jesis (Juan, 8, 23), y nos pasa lo que a los nictélopes que, como el murcié-
Tago, ven en la oscuridad y se ciegan en la luz.
fecha asi. esta palmaria confesion, todo se aclara y facilita. Porque entonces recono-
cemos sin esfuerzo que el conocimiento que teniamos de Jesis no era vivido, propio, intimo,
sino de oidas y a través de libros o definiciones mds o menos generales y sintéticas, mas
© menos ersatz; no era ese conocimiento personal que sdlo resulta de una relacién directa.
Y es evidente que nadie se enamara ni cobra amistad 0 afecto a otro por lo que le digan de él.INTRODUCCION 2B
sino cuando Jo ha tratado personalmente, es decir, cuando lo ha ofdo hablar. FI mismo Evan-
fo se encarga de hacernos notar esto’ *n forma llamativa en el episodio de la Samaritans.
ando la mujer, iluminada tg Jests, fué a contar que habia hallado aun hombre extra-
ordinario los de’ aquel pueblo acudieign a escuchar 2 Jesis y le rogaron,que_ se quedate
con ellos. Y una vez que hubieron oie sus palabras durante dos dias, ellos dijeron a la
mujer: “Ya no creemos a causa de ‘us palabras: nosotros mismos lo hemos oido y sabemos
que El es verdaderamente el Salvador del mundo” (Juan, 4, 42).
¢Podria expresarse con mayor elocuencia que lo hace aqui el mismo Libro divino, lo que
significa escuchar tas Palabras de Jesus para darnos el conocimiento directo de su adorable
Persona y descubrirnos ese sello de verdad inconfundible (Juan, 3, 19; 17, 17) que arrebata
a todo el que lo escucha sin hipocresia, como Fl mismo lo dice en Juan, 7, 7?
E] que asi empiece a estudiar a Jesis en el Evangelio, dejar ca fa vez mds de encontrarlo
raro, Entonces experimentari, no sin sorpresa grande y ‘reciente. lo que e3.creer en Fl con
fe viva, como aquellos samaritanos. Entonces querra conocerlo mas y mejor y buscara los
demas Libros del Nuevo’ Testamento y los Salmos y los Prof.tas y la Biblia entera, para
ver cémo en toda ella el Espiritu Santo nos lleva y nos hace adinirar a Jesucristo como
Maestro y Salvador, enviado del Padre y Centro de las divinas Fcrituras, en Quien. habrin
de unirse todos los misterios revelados (Juan, 12, 32) y todo Jo creado en el cielo y en Ia
tierra (Ef., 1, 10). Es, como vemos, cuestién de hacer un descubrimiento propio. Un fend-
meno de experiencia y de admiracién, Todos cuantos han hecho ese descubrimiento, como
dice Dom Galliard, declaran que tal fué el mas dichoso y grande de sus pasos en 1a vida
Dichosos también los que 10s, como la Samaritana, contribuir por el favor de Dios
@ que nuestros hermanos reciban tan incomparable bien.
IV
E] amor lee entre lineas. Imaginemos que un extrafio vid en una carta ajena este parrafo:
“Cuida tu salud, poe si no, voy a castigarte.” E) extrafio puso los ojos en la idea de este
castigo y hallé dura la carta. Mas vino luego el destinatario de ella, que era el hijo a quien
a pairs le eseribia, y al leer esa amenaza de castigarle si 0 ‘se culabe, se pusw a lorar. de
ternura viendo que el alma de aquella carta no era la amenaza sino el amor siempre des-
pierto que le tenia su padre, pues si le hubiera sido indiferente no tetulria ese deseo apa-
Sionado de que estuviera bien’ de salud :
Nuestras rtotas y comentarios, después de dar la exégesis necesaria para la «neligencia
de los pasajes en el cuadro genefal de la Escritura —como hizo Belipe con el ministro de la
feina_pagana (Hech., 8, 30 s. y nota)— se proponen ayudar a gue descubramos (usando
Ja vision de aquel hijo que se sabe amado y no la desconfianza del extrafo) los esplendores
del espiritu que a veces estan como tesoros escondidos en la letra. San Pablo, el mds com-
plewo ‘siemplar en st area apowtlics, decia,confiande en el fruto, estas palais que todo
apéstol ha ‘de hacer suyas: “Tal confianza para con Dios la tenemos en Cristo; no porque
seamos Capaces por nosotros mismos... sino que nuestra capacidad viene d+ [)ios..., pues
Ja letra mata, mas el espiritu da vida” (II Cor., 3, 4-6).
La bondad del divino Padre nos ha mostrado por experiencia a muchas almas que asi se
han acercado a FE] mediante la mie] escondida en su Palabra y que, adquiriendo la inteli-
gencia de la Biblia, han do el sabor de la Sabiduria que es Jesis (Sab., 7, 26, Prov., 8, 22;
Ech, 1, 1), y hallan cada dia tesoros de paz, de felicidad y de consuelo en este monumento
el unico eterno (Salmo 118, 89)— de un amor compasivo e infinito (ef. Salmo 102, 13;
Ef. 2, 4 y notas).
Para ello sdlo se pide atencién, pues claro esté que el que no lee no puede saber. Como
cebo para esta curiosidad perseverante, se nos brindan aqui todos los misterios del tiempo
¥ de a eremidad. @Hlay algin libro magico que pretenda lo mismo?
Sélo quedarin excluidos de este banquete los que fuesen tan sabios que no necesitasen
aprender; tan buenos, que no necesitasen mejorarse; tan fuertes, que no necesitasen protec-
cidn. Por eso los fariseos se apartaron de Cristo, que buscaba 2 los pecadores. ¢Cémo iban
ellos a contarse entre las “ovejas perdidas"? Por eso el Padre resolvio descubrir a los insigni-
ficantes esos misterios que los importantes —asi se creian ellos— no quisieron aprender
(Mat., 11, 25). ¥ asi leno de dienes a los hambrientos de luz y dejé vacios a aquellos
“ticos” (Luc., 1, 53). Por eso se llamo a los lisiados al banquete que los normales habian des:
rado (Lue. i4,'15-24). ¥ la Sabidaria, desde lo alto de su torre, mandd su pregon diciendo:
“Bl que sca pequefio que venga a Mi” Ya los que no tienen juicio les dijo: “Venid a
comer de mi pan y a beber el vino que os tengo preparado” (Prov., 9, 3-5).
Dios es asi, ama con predileccién fortisima a los que son pequefios, humildes, victimes
de Ia injustieia, como fué'Tesis: y entonces se explica que a éstos, que perdonan sin vengarse
y aman a los enemigos, 1 les perdone todo y los haga privilegiados, Dios es asi; indtil
tratar de que El se ajuste a los conceptos y normas que fos hemos formado, aunque nos
parezean lgicos, porque en el orden sobrenatural El no admite que nadie sepa ada si no14 ‘EL NUEVO TESTAMENTO
lo ha ensefiado £1 (Juan, 6, 45; Hebr., 1, 1 s.). Dios es asi; y por eso el mensaje que £1
nos manda por su Hijo Jesucrito en el Evangelio nos parece paradéjicg. Pero El, ex asi
y hay que tomarlo come es, 0 buscarse otro Dios, pero no creer que Fl va a modificarse
segiin nuestro modo de juzgar. De ahi que, como le decia San Agustin a San Jeronimo, la
actitud de un hombre recto esta en creerle a Dios por su sola Palabra, y no creer a hombre
alguno sin averiguarlo. Porque los hombres, como dice Hello, hablan. siempre por interés
© teniendo presente alguna conveniencia o prudencia humana que los hace medir el efecto
‘que sus palabras han de producin, en tanto que Divs, habla para ensefar la verdad desnuda,
narjsima, santa, sin desviarse un pice por consideracién alguna, Recuérdese que asi hablaba
Jess, y por eso lo condenaron, seguin lo dijo £1 mismo. (Véase Juan, 8, 37, 38, 40, 43, 45,
46 y 47; Mat., 7, 29, etc.) "Me atreveria a apostar —dice un mistico— que cuando Dios
‘nos mutstre sin Velo todos las misterios de las divinas Eserivuras, descubriremos que si habia
palabras que no habiamos entendido era simplemente porque no fuiinos capates de creer
sin dudar en el amor sin limites que Dios nos tiene y de sacar Jas consecuencias que de
ello se deducfan, como lo habria hecho un nifio.” :
Vengamos, pues, a buscarlo en este magico “receptor” divino donde, para escuchar su
voz, no tenemos mis que abrir como lave del dial a tapa del Libro eterno. Y digimosle
luego, como le decia un alma creyente: ";Maravilloso campeén de los pobres afligidos y
mis maravilloso campedn de los pobres en el espiritu, de los que no tenemos virtudes, de los
que, sabemos Ja corrupcién de nuestra naturaleza y’ vivimos sintiendo nuestra incapacidad,
temblando ante la idea de tener que entrar, como agrada a los fariseos que Ta nos denun-
ciaste, en el eviscoso terreno de los méritos propioss! Tu, que viniste para pecadores y no
Para justos, para enfermos y no para sanos, no tienes asco de mi debilidad, de mi impotencia,
de mi incapacidad para hacerte promesas que luego no sabria cumplit, y te contentas con
que yo te dé en esa forma el corazén, reconociendo que soy la nada y Tui eres el todo.
creyendo y confiando en tu amor y en tu bondad hacia mi, y entregandome a escucharte
¥ a seguirte en el camino de las alabanzas al Padre y del sincero amor a mis hermanos,
perdonindolos y sirviendolos como Tu me perdonas y me sirves a mi, joh, Amor santisimo!”
Vv
Ora de Jas cosas que Haman la atencién al que no esti familiarizado con el Nuevo Testa-
mento es ta notable frecuencia con que, tanto fos Evangelios como las Epistolas y el Apoca-
lipsis, hablan de la Parusia o segunda venida del Sefior, ese acontecimiento final y defintivo,
ue puede llegar en cualquier momento, y. que “vendri como un ladrén”, mis de improviso
que la propia muerte (1 Tes., 5), presentindolo como una fuerza extracrdinaria para man-
tenernos con la mirada vuelta hacta lo sobrenatural, tanto por e} saludable temor con que
hemos de vigilar nuestra conducta en todo instante, ante la eventual sorpresa de ver llegar al
supremo Juez (Marc,, 13, 33 38 Luc., 12, 35 ss.). cuanto por la amorosa esperanza de ver
a Aquel que nos amé'y se entregd por nosotros (Gal, 2, 20); que traera con El su galardon
(Apoc,, 22, 12); que nos transformaré a semejanza “de £1 mismo (Filip, 3, 20 s.) y nos
Mamara a'su encuentro en los aires (I Tes., 4, 16 s.) y_cuya glorificacion quedard consu-
mada a la vista de todos los hombres (Mat., 26, 64; Apoc., 1, 7), junto con la nuestra
(Col, 3, 4). Por qué tanta insistencia en ese tema que hoy’ casi hemos olvidado? Es que
San juan nos‘dice que el que vive en esa esperanza se santifica como El (1 Juan, 3, 3),
Y Ms ensefia que Ja plenitud del amor consiste en la confianza con que esperamos ese dia
{ Juan, 4,17). De ahi que los comentadores atribuyan especialmente la santidad de la
primitiva Iglesia a esa presentacidn del futuro que “mantenia la cristiandad anhelante, y lo
maravilloso es que muchas generaciones cristianas después de la del 95 (la del Apocalipsis)
han vivido, merced a la vieja profecia, las mismas esperanza y 1a misma seguridad: el reino
esta siempre en el horizonte” (Pirot).
No queremos terminar sin dejar aqui un requgrdo agradecida al que fué nuestro primero
Y.quetido mentor, instrumento de los favores del divino Padre: Monsenor doctor Paul W. von
eppler, Obispo de Rotenburgo, pio exegeta y sabio profesor de Tubinga y Friburgo, que
nos guid en el estudio de las Sagradas Escrituras. De él recibimos, durante muchos ‘afios,
el sstimulo de nuestra temprane, vocaciGn bibles con el ereciente anor a la givina Palabra
¥ la orientacidn a buscar en ella, por encima de todo, el tesoro escondido de ke sabiduria
sobrenatural. A él pertenecen estas palabras, ya célebres, que hacemos nuestras de todo
corazon y que caben aqui, mas que_en ninguna otra parte, como la mejor introduccidn 0
“aperitivo” a Ia lecrura del Nuevo Testamento que él ensefié fervorosamente, tanta en la
catedra, desde la edad de 31 afios, como en toda su vida, en la predicacion, en la conver-
sacién intima, en los libros, en Ja literatura, y en las artes, entre las cuales él ponia una
como previa ‘a todas: “el arte de la alegria™. "Podria escribirse, dice, una teologia de la
alegria. No faltaria ciertamente material, pero el capitulo més fundamental y mas interesante
seria el biblico, Basta tomar un libro ‘de concordancia o indice de la Biblia para ver laINTRODUCCION: 15
importancia que en ella eng la alegria: Jos nombres bitlicos que sigaifican alegria se sepiten
miles y miles de veces. Y ello cs muy de considerar en un Lbro que nunca emplea palabras
vanas © innecesatias. Y asi la Sagrada Escritura se nos convierte en un paraiso de delicia
«paradisus voluptatiss (Gen, 3, 23) en el que podremos encontrar 1a alegria cuando la
hayamos buscado indtilmente en’ el mundo o cuando la hayamos perdido.”
Hemos preferido en cuanto al texto la edicién critica de Merk, que consideramos supe-
rior por muchos conceptos, sin perjuicio de seftalar en su caso las’ variantes de alguna con-
sideracién, como también las diferencias de la Vulgata.
J. Srravaincen,EVANGELIO DE N. S. JESUCRISTO SEGUN SAN MATEO
Nora inTRODUCTORIA
De Ia vida de San Mateo, que antes se Ila-
maba Levi, sabemos muy poco. Era publicano,
¢ decir, recaudador de tributos, en Cafarnaim,
shasta que un dia Jestis lo amé al apostolado
diciéndole simplemente: *Sigueme”; y
"levantandose le siguis” (Mat. 9, 9).
‘Su vida apostélica se desarvollé primero en
Palestina, al Jado de los otros Apostoles; mas
tarde predicé probablemente en Etiopia (Afri-
ca), donde a lo que parece también padecid el
martirio. Su cuerpo se venera en la Catedral
de Salerno (Italia); su fiesta se celebra el 21
de setiembre.
‘San Mateo fué el primero en escribir a Bue~
na Nueva en forma de libro, entre los afios 40-
50 de Ia era cristina. Lo compuso en lengua
aramea o siriaca, para los judios de Palestina
que usaban aquel idioma. Més tarde este Evan-
gelio, cuyo texto aramco se ba perdido, fud
traducido al griego
FI fin que San Mateo se propuso fué demos.
trar awe Joris es el Mesias prometido, porque
en P! 4. ban cumplido los vaticinios ‘de los
Profetas. Para sus lectores inmediatos no ba-
bia mejor prueba que ésta, y también nos-
otros experimentamos, al leer su Evangelio, la
fuerza avasalladora de esa comprobacion.
I. INFANCIA DE JESUCRISTO
(11 =2,23)
CAPITULO 1
Genrarocla tecat ve Jésts, 1Genealogia de
Jesueristo, io de David, hijo de Abrahin:
"Abrahin’ engendré a Isaac; Isaac engendré a
1s, 8. Mateo da comienzo a su Evangelio egn
oi cbolengo de Jesis, comprobendo ‘con esto. que Bl,
por, su padre adoptive, San José, desciende legal-
mente en'linea recta de David “y Abrahin, y queen
Hise han cumplide los vaticinios del Anti
tamento, los cuales dicen que el Mest
ha'de ser de Ja raza hebrea de Abrabin y de la
familia eal de David. La genealogia no es completa.
Sav cardeter compendioso se" explica, segin, S. Jers:
fimo, por el deseo de hacer “tres grupes de eatorce
personajes cada uno (ef. v.17). Esta gevealogia es
fade San José, y no la de la. Santisima Virgen, para
mostrar que, stgin la Ley, José era padre legal de
Fess, y “Este, heredero legal dei trono de. David y
de Jes” promeiag meginices, Por lp “dems, “Marfa
@ igualmente descendiente de Davids ‘porgie_ seq
Son ‘Laces, 1, 52, 61 bile de ia Viewen ‘ork heredero
del trono “de su’ padre David”. Sobre la genealogis
ges, ae S: Lacan) y que ex ta de le Virnen, vetve
ate. 3,23 y nota. Seguin los resultados de las, inves:
anes modernas hay. que colocar el nacimiento
de Jesis algunos afion antes de la era cristiana de.
terminada (por el, calendario. gregoriano, o sea en el
tio 747 de Ia fundacién de Roma, mds 0 menos.
Lev! |
Jacob; Jacob engendré a Judi y a sus herma-
nos; “Juda engendré a Farés y 2 Zara, de T2-
mar; Farés engendré a Esrom; Esrom engen-
dré'a Aram; Aram engendré a Aminadabs
Aminadab engendré a, Naasn; Naasoa engen-
Gré a Salmén; Salmén engendrd a Booz, de
Racab; Booz engendro a Obed, de Rut; Obed
engendré a Jesé; *Jesé engengré al rey David;
David engendré a Salomén,’ de aquella (que
habia sido nnger) de Uxias; “Salomon engendro
a Roboam; Roboam engendré a Abia; Abia
engendré a Asaf; %Asaf engendré a Josafat;
Josafat engendré ‘a Joram; Joram engéndré a
s; *Ozias engendré a Joatam; Joatam en-
gendré a Acaz; Acaz engendré' a Ezequias;,
WEzequfas engendré a, Manasés,; Manasés en-
gendré a Amén; Amén_engendré a Josias;
HJosias engendré a Jeconias y a sus hermanos,
PoE el tiempo de la deportacién, a Babilonia.
2Después de la deportacién a Babilonia, Je~
conias engendré a Salatiel; Salatiel engendrd a
Zorobabel; 1Zorobabel engendré 2 Abiud;
‘Abiud engendré a Eliaquim; Eliaquim engen-
‘dr6 a Azor; 4Azor engendré a Sadoc; Sadoc
engendrd a Aquim; Aquim engendrd a Eliud;
1Eliud engendré a Eleazar; Eleazar engendrd
a Matan; Matin engendré a Jacob; Jacob
engendré a José, el esposo de Marfa, de la cual
nacié Jesiis, el llamado Cristo. 17Asi que todas
las generaciones son: desde Abrahén hasta Da-
vid, catorce, generaciones; desde David hasta
la deportacién a Babilonia, catorce generacio-
nes; desde la deportacién a Babilonia hasta
Cristo, catorce generaciones.
Nacimtento pe Jests. ¥La generacién de
Jesucristo fué como sigue: Desposada su madre
‘AI no hacerlo asi, resultaria que Herodes babria ya
imuerto a la. fecha de ia natividad del Sefor, To
cual contradice las Sagradas Escrituras. Ese hombre
Hnpo fauna gp og primeron see oth 750,
ee esta genealogia \e
ests, ‘euatro mujeres: Tamar, Racab, Betsabee
ut, trea de lan evaies foeron’ pecadoras (Gan, 38,
183 Jog. & Lage; Rey. 11, 185) y 1 cuagta ‘mow
3: Feronino dice al respecio gue el Sefor Io
dispuso. sei “siya ‘que venis. para salvar, a
ios” pecadores,degcendiendo ‘de. pecadores borrara Tow
pecadon de todon" : :
7 EBsposo ay Maria: §. Ignacio y S. eee
explican que fue de suma importancia que Jesta_ na.
Glera de ‘Una mujer que contervando $a. virginidad,
Face ala, ver casaday pues. ast quedaria’ vel
los ojos de ‘Satands el misterio. de ia Enea
Jesis (hebreo Yeschua) signi ie 8
We 21). Cristo es nombre ari
hebreo Mesias, cuyo signific En
Teruel se. consaetaban cou. leo fos Reyes 'y os Sax
oe Seen Jeunes Upon ace
neia, por 4er el “Rey. de los Reyes" (Apoe, 19, 1
ya Sumo Saccrdote de Ia Nueva Alianza (Ct. Hebe,
Caps. 5-10; S. 109, 4 y nota).
1S. atre iow fudion lor. despesorios 9 noviasgo
cquivalian al matrimonio y'ya loa prometidos ae lise
eee 7 enpoee.
"718
Maria con José, se hallé antes de vivir juntos
ellos, que Habja’ concebido del Espiritu Santo.
José, ‘su esposo, como era justo y no queria
delatarla, se proponia despedirla en secreto.
20Mas mientras andaba con este pensamiento,
he aqui que un dngel_ del Sef i
en suefios y le dijo: “José, hijo de David, no
temas recibir a Marfa tu esposa, porque su con-
cepcién es del Espirit Santo. 21Dard a luz
un hijo,y le pondrés por nombre Jesis (Sal-
vador),"porque El salvaré a su pueblo de sus
pecados”. : |
Todo esto, sucedid para que se cumpliese
la palabra que habja dicho el Sefior por el pro-
fea: 23Ved ahi que la virgen, concebird y" da-
Hi luz un hijo, y le pondrén el nombre de
Emmanuel, que ‘se traduce: “Dios con nos-
otros”. *4Cuando desperté del suefio, hizo José
como el Angel del Sefior le habia mandado, y
recibié 2 su esposa, Y sin que Ia conociera,
did ella 2 luz un hijo y le puso por nombre
Jests.
CAPITULO I
AporaciON pe Los MAGos. 1Cuando hubo na-
cido Jesés en Betlehem de Judea, en tiemy
del rey Herodes, unos magos del ‘Oriente, lle-
garon a Jerusalén, 2y preguntaron: ":Dénde
19, No babiendo manifestado Maria a su eqporo la
aparicign Gel Ange! ni la’ maraviliosa_comepetbn.por
bra ‘det spirits. Santo, San Jose se vio en. da
Situacion sin) salidas teemenda “prueba, para ‘eu fe.
Juridicamente José habrin tenido dos -selucione
Wiiacugar a Mara ante igs ‘thanale, for ial
seuin ies ley de Moisct, (a ‘babrian condenado
muerte (Lev. 20, 10; Deut. 22, 22-24; Juan 8, 2 56.)3
Br Gane le ae reaadi eden eevee
Gio, permitido por Ia Ley para tal caso, Pero, po du-
Gonad'at Por um instante "de" Ia suntiiad de_ Marin,
aP"fant guaran ae decid § dejar pcretamecné
ano infamasla, hasta. que intervino el cielo acla-
Fandole el misteri. “| “qué. admirable silencio. el
de Maria! Bretiere sutr
Sites que. descubris. lm
emelia, Yn el cielo art prob6 a. doe corazones ino.
Senter 'y santos come el de Joxe y- Maria, ¢por_ ave
foe quefamos de. las pruebas que’ nos envia ia. Pro-
videncia? (Mons. Ballester). "Ea ta sinceridad de
Mesirg fe Jo, gue Dias pone a, prudhe,“egun Wen
sein Gan Pedro (I. Pedr. 1, 7). Vease S16, 3
Sota
73. Es una cita del_profeta Tesias (7, 14). Con
ocho sigios de anticipaciOn Dios amincia,” asmave en
forma’ veladay cssombroso musterio de’ amor ce a
Bacarnacign ‘redentora de. su" Verbo, que entara con
Agptos fon Tog ue bats in Gonrimacién dl sa
Gilat 29," 20). "Sera ‘para las alas eqy particular’ ¥
oP ginmanudl’: “Dios eon os:
‘stig, au Evangelioy por la vor
ferio infatible instituldo por £1 mismo.
‘ue la conociera, ce. Bate es el sentido
we dice, ema oF ‘no ia ‘conoel® bas.
ina". 'flasta®slanificaha” entre tos “be:
como “mientras” y_ express, como, dice
feamente 10 que aconteesg,o no, haves
jeito momento, mar mo Io que suced’s despues. Ve
Ser como elemplo, Lue, 237 y lp mismo ft Rey. 6,
25; “Mileof no avo hijos hasta ef dia de su muerte”
Mago\ex el tombre_ que. entre toa persasy cal.
se dabs. a tos hombres doctos. que cultivaban las
ciencia, especisimente iz aatronomian
WH fey rectin nacido es alos ojo8 de los magos
un rey universal, tel como. Jo. daban a “conocer los
divinos oriesios “de Ta
a infam
‘Jeronimo,
23,
5'ss.; 33, 15; Is. caps. 11, 32, 60; Bz. 37, 238.)
EVANGELIO SEGUN SAN MATEO 1, 18-25; 2, 1-14
estd el rey de los judios que ha nacido? Por-
que hemos visto su estrella en e] Oriente y ve-
nimos a adorarlo.” 8Oyendo esto, el rey Hero-
des se turbé y con éi toda Jerusalén. 4¥ con-
vocando a todos los principales sacerdotes y
a los escribas del pueblo, se informé de ellos
dénde debia nacer el Cristo, Ellos le dijeron:
"En Betlehem de Judea, porque asi esté es-
crito por el profeia: 8*Y't Betlehem (del)
pais de Judd, no eres de ninguna manera la
menor entre las principales (ciudades) de Juda,
Porque de ti saldrd el caudillo que apacentard
Israel mi pueblo”, *Entonces, Herodes amo
en secreto a los magos v se informé exacta-
| mente de ellos acerca del tiempo en que Ia
estrella habia aparecido, *Después los envié
a Betlehem diciéndoles: “Id y buscad cuidado-
samente al_nifio; y cuando lo hay4is encon-
trado, hacédmelo saber, para que vaya yo
| también a adorarlo”. Con estas palabras del
Tey, se pusieron en marcha, v he aqui que la
estrella, que habian visto en el Oriente, iba
delante de ellos, hasta que Hlegando se detuvo
encima del lugar donde estaba el nifio. 1A] ver
de nuevo Ja estrella experimentaron un goz0
muy grande. 12Entraron en la casa v vieron al
nifio con Maria su madre. Entonces, proster-
nindose lo adoraron; luego abrieron’ sus teso-
ros y le ofrecieron sus dones: oro, incienso y
mirra, 1Y, avisados en suefios que no volvie~
ran a Herddes, regresaron a su pais por otro
camino.
Hyioa a Eero, 1Luego que partieron, un
Angel del efor se aparecié en suefcs 2. jose
y le dijo: “Levantate, toma contigo al nifio y
a su madre y huye a Egipto, donde permanece-
ris, hasta que yo te avise. Porque Herodes va
a buscar al nifio para matarlo.” 14Y él se le-
Pero no se trata para ellos de un rey como los de-
: tiga "las act vey Tal desde tier
fo stsae anunciado "y prometide por Dios, que habia
BE Safest su pueblo 2 toda Is humenidad, Vest
fe in pyatecia del ingel en ut, ty 32h ia aclamacion
det puchlo en Mace"11, 20; la conten “de Pista
a Juan 19,39) a
et Vlase’ sig, $25 Juan 7, 42. Betlem 0 Be.
ten chadad ‘stiads «) Qiems, ‘al sur de Jerusalem
ita “ntesiren ‘Basten sesuerda 9)" nacinnto. del
Salvador Es ta grutas aGinjor arden constantemente
52 Ainnarass y tna Estella sefsla” ef lugar donde
Racio yuestrs Redentors Spree simtolo de la es
Tea vanes Ie potecis de Balaam en Nam. 24,517"
Apoe. 22, 16, donde Jestis mismo se da ese nombre
(ees. to," ota)
11. Como’ hijos de los gentile
loy ager adotadorgs ine Primieias de mucstea ross
ins “Ge nuestta fe, yeelebremoe con corazoney. di
fSttuds porta’ slepria Tor cometsos de ‘era dichoes
pues! Sends ette’ momento se iniia ace
aca la celeafialbevensia de. los‘bjos de
Bios" reba alagio).. Los. dones de lot mages
Se waoy ips "3 Goo. simsian a reat
SMioteto iy ivindad, i iray is hom
flats put, de una ‘publica conteida: de
da info det hombre"y' dela realesa que baba. sido
ioe
fanuneiada por el angel (Lue. 1 325
notas).
14. Unas ocho 0
profe.
Fir ‘exousas, tan obyias en tal trance, ahandona. al
instante el pais natal y acata en todo la santa volun-EVANGELIO SEGUN SAN MATEO 2, 1.23; 3, 1-16
vanté, tomé al nifio y a su madre, de noche,
salié para Egipto, My se quedé’ alli hasta
muerte de
a rrrC~—~—S—~=——S—isiCSSS
lerodes; para que se cumpliera lo te cs de quien hablé el profeta Isaias cuando
o 19
el desierto de Judea, 2y decia: “Arrepentios,
jue habia dicho el 'Sehor por el profeta: “De dijo: “Voz, de uno que clama en el desierto:
| Preparad el camino del Seftor, enderezad sus
Egipto llamé 2 mi hijo.
Deconiaci6n pe Los wwoceNtrs. 1°Entonces
Herodes, viendo que los mages lo habian bur-
lado, se enfurecié sobremanera, y mandé ma-
tar a todos los niiios de Betlehem y de toda su
comarca, de la edad de dos afios para abajo,
segin el ciempo que habfaaveriguado de los
magos, 17Entonees se cumplié la palabra dicha
por el profeta Jeremias: 1®"Un clamor se hizo
oir en
Hora a sus hijos y rehusa todo constelo, porque
elles no estan mis.
Reoneso pr La Sagrapa Fannua. Muerto
Herodes, un angel del Sefor se aparecié en
suefios a’ José en Egipto y le dijo: "Levdntate,
toma contigo al nifio y a su madre y vuelve
ala tierra de Isracl, porque han muerto los
que buscaban Ja vida del_nifio”. 2E1 se le-
vant6, tomé consigo al nifio y a su madre y
entré'en tierra de Israel. 2°Pero oyendo que
Arquelao reinaba en Judea en el lugar de su
padre Herodes, temié ir alli; y, advertido en
suchios, fuése a’ la regién de Galilea, 28Y Ie-
ado alli se establecié en una ciudad llamada
Nazaret, para que se cumplicse la palabra de
Jos profetas: “E] sera llamado Nazareno.”
Il. PREPARACION PARA LA VIDA
PUBLICA
Ga-4u)
CAPITULO IIT
Previcacton pe Juan et, Bautista, 2En aquel
tiempo aparecié Juan el Bautista, predicando en
tad de Dios, que para dl habia reservado las tarcas
mas enosas. A st obediencia y humildad correspon
fle st gloria y poder en el cielo,
15. Vease Oseas 13, 1. y nota explicativa,
: Con. el versicula citado, San Mateo quiere ex:
nectar Na jnmenndad el dolor aludiendo a toma
tle Raquel, esposa de Jacob, ‘sepultada en’ el. camino
de Terusalén a Belén (Gen. 38, 19: Jer. 31.18).
Roma: localidad sitvada al Norte de” Jerusslén y
eampo de concentracion de los judios que por Nabi
cglenosor, fuczon levados al eautiverio de’ Habilonsa
87a. C.), “Raquel se alza de su sepulero para Ilo-
tar la partida de sus hijos a Babilonia y pera mez.
lar sys lementos con los de las madres de los Tno-
centes.” La Iglesia celebra el 28 de diciembre la
memoria de éstos como flores del martirig. por Cristo.
‘22. EB} Patriarea José es un envidiable prototipo
de las almas interiores, habiéndose iormado' él ms.
mo en ja escuela de Jesis y de Maria. Su vida fue
una vida de silencio y trabajo manual, En el taller
de Nuzaret, este varéa juste, come lg ama et Esp
ity Santo (1, 19), nos'da, ejemplo de ana santa la-
boriosidad, en” unién ‘cond diving Modelo, en cuyo
nadie buseaba al Mesias, Véase v. 15; Lue.’ 1,26:
2, 395 Juan 3, 46; 8 52; Nazareno, esto es, Naza-
reo 9, éousagrado a Dios (Deut. 23, 16 y nota) ¥
Pimpollo (Is. 11, 1; 53, 2).
ama, Hanto y alarido grande: Raquel |
sendas.” 4Juan tenia un vestido de pelos de
camello, y un cinto de piel alrededor de su
cintura; su comida eran Jangostas y mic! sil-
vestre. Entonces salia hacia él Jerusalén y
toda la Judea y toda la regién def Jordin, ¢y
se hacian bautizar por él en el rio Jordin,
confesando sus pecados. ‘
TMas viendo a muchos fariseos y saduceos
venir a su bautismo, les dijo: “Raza de viboras,
squién os ha ensefiado a huir de la célera
que viene? 8Producid, pues, fratos propios del
arrepentimiento, ®Y no creais que podéis decir
dentro, de vosotros: “Tenemos por padre a
Abrahin": poraue yo os digo: "Puede Dios
de estas piedras hacer que nazcan hijos a Abra-
hin”, Ya el hacha esti puesta a la raiz de
los Arboles; y todo arbol que no produce
buen fruto seré cortado y arrojado al fuego.
Yo, por mi parte, os bautizo con agua para
al arrepentimiento;’ mas Aquel que viene des-
pués de mi es mis poderoso que yo, y yo no
soy digno de llevar sus sandalias. £1 os bauti-
zar4 con Fspiritu Santo y fuego. 12La pala de
aventar esti en su mano y va a limpiar su, era:
reuniré el trigo en el granero, y la paia la
quemaré en fuego que no se apaga.”
Baunismo pe Jess. 1Entonces Jess fué de
Galilea al Jordin a Juan para ser bautizado
por él. 14Péro Juan querfa impedirselo y le de-
cla: “Yo tengo necesidad de ser bautizade por
Ti y £14 vienes a mi?” "Jesis le respondié y
dijo: “Deja ahora; porgue asi conviene que
nosotros cumplamos toda justicia.” | Entonces
(Juan) le dei, WBantizado Jestis, salié al pun-
2. BI reino de los cielos, 0 sea, el reino de Dios
La. condition necesaria para. entrar en ese reino es
afrepentirse de los pecedos y creer all Evangelio. (4,
17} Mare. 1, 15), cosas ambes que Jesds resume en
ta’ pequefez, es decir, en 1a. infancia espiritual o la
pobreza en espiritu (5, 3; 18, 14). Vease v. 10 ¥
Rota.
3. Véese Ts, 40, 3
6. Este bautiomo ‘to erasing una preparacién de
Iscael para recibir al Mesias (Hech, 19,4 9 nota).
Tampoco. era un sacramento la confesién que los pe-
gadores “hacian, pero si una manifestacion’ del dolor
interior, un medio cficaz, para conseguir In gracia
de arrepentimiento, condicién del. perdén.
Oss. Aqui y en el v. 12 ef Dautista sefiala 2 Je
sis dispuesto a comenzar su reinado de iusticis. Eo
11, 12 55,, el mismo Jents nos muestra cémo ese reino
sefa’en ce entonces impedico por la violencia y como,
aungue el Bautista vino con la misiéa de Elias (Mal.
4, 8-7 13), este habra de volver un dia (7, 115),
2’ restauraslo tode, “Fillion hace notar la similitud de
‘ste pasaje con Mal, 3, 25. (véase alli la nota), dom
dena ae trata. adel jut, sobre, [ag nacioneseomo
en 25, 32, (ef, Joel 3) sino de un juicio sobre su pile-
blo. Ci. 'S. 49, 4 58, y notas,
14. jestis “wo necesitaba del bautismo, pero gue.
riendo cumplir toda justicia (v. 15), e8 decir, guarder
puntualmente todas las leyesy" costumbres “de st
pucblo, se sometié. al bautismy coma se habia 50°
Mretido’ a la ‘citcuncisién y demas rites judios,
16. Bn “el battismo. de Jess. se manitiesta le
Sema. Trinidod: el Padre que habla del cielo, al
Hijo que esta en forma de hombre arrodillado a la20
to del agua, y he aqui que se le abrieron los
cielos y vid al Espiritu de Dios, en figura de
paloma, que descendia y venia sobre El, 17¥
una voz del cielo decia: “Este es mi Hijo, el
Amado, en quien me complazco.”
CAPITULO IV
Jests Fs TENTAO0 PoR EL DIABLO. 1Por aquel
tiempo Jesis fué conducido al desierto por el
Espiritu, para que fuese tentado por el diablo.
Zayuné cuarenta dias y cuarenta noches, des-
pués de lo cual tuyo hambre. ®Entonces el ten-
talor se aptoximé y le dijo: “Si TW eres el
Hijo de Dios, manda que estas piedras. se
vuelvan panes,” ‘Mas El replicé y dijo: "Esta
gserita: “No ‘de pan sélo viviek el’ hombre
sino de toda palabra que sale de la boca de
Dios.” 5Entonces lo Hevd el diablo a la Cindad
Santa y Jo puso sobre el pindculo del Templo;
fy le dijo: "Si Ta eres el Hijo de Digs, échate
abajo, porque esta escrito: “El dard ordenes 2
sus Angeles acerca de Ti, y te llevardn en pal-
mas, para que no lastimes tu pie contra alguna
piedra.” "Respondidle Jesiis: “También esta es-
ctito: “No tentaris
nuevo Ie Ilevé el diablo a una montafia muy
alta, y_ mostrindole todos los reinos del mundo
y su gloria, le dijo: "Yo te daré todo esto si
postrindote me adoras.” 1Entonces Jestis le
dijo: “"Vete, Satands, porque estd escrito: “Ado-
raris al Seior tu Dios, y a El sdlo serviris.”
orilla del Jordan, y el Espiritu Santo que se hace
visible en forma de paloma, Cf. Lue. 3, 22; Juan 1,
32s. y-nota. :
17, He aqui la primera revclacién del mis grande
de los misterios: ef anfinito amor. del Padre al Uni.
aénito, en el eval reside toda su felicidad sin mites
ef eval, con ef cual y en el cttal recibe eterna.
517, 83 Ts. 42, 15
Misa, Cf, sobre este amor 12,
Juan 3, 38; 12, 28; IL Pedro" 1, 17.
1, Véase Mare. 1, 2883 Luc. 4, 155
3'ss. Esta tentacidn se comprende, s6lo como humi-
Macién del Sefior, quien, siendo el segundo Adan,
i jar ast ‘cl pecado de los primeros padres.
po caper ane pends ef pimu a
EPs doe Seas Eo coon as
comer, Ia soberbia por medio del orgullo presuntuoso,
J, [2 goscupiscencia de Tos ojos por medio’ de los ape-
itos de riqueza, poder y goce, Preparése Jestis para
Ja tentacién orando y_ ayunando, aut las armas
mag eficaces pata sesistir 2 las tentaciones, Las citas
de la Sagrada Escritura corresponden a. os signien-
tes pasaies: v. 4 a Deut 8, 3. Sab. 16, 26; v. 6,
al Salmo 90, 1165 ve 7, @ Deut 6, 16; v.10, a
Dest. 6, 13
“7. wGuardese el lector de entender que Cristo de-
clara_agui su divinidad, diciendo a Satands que no
fo tiente a #l, Esto habria sido revelar su condicién
de Hijo de Dios, que el diablo descaba vanamente
averiguar. Veneié Jestis. a} tentador con esta res:
Pcstn, ‘enteRndonot que poner a Dios en al caso de
fener que hacer un milagro para librarnos de un pe:
Tigra en que nos hemos, colocado temerariamente
motivo alguno, es pecado de presuncién, o sea tent
2 Dios”
10, Por tercera vez es vencido Satanas por el po-
der de la Breritura, San Pedro nos reitera’ esta doc-
trina de que, para vencer al diablo, hemos de ser
fuertes en'la’ fe (I Pedro 5, 8) y San Juan nos da
igual receta para vencer al mundo, cuyo principe es
el mismo Satanas (Tuan 14, 30). Sobre d poder de
fa Palabra divina, véase Luc, 22, 36 y nota; S. 118,
Ys; Apoc. 12, 11
al Sefior tu Dios.” 8De!
EVANGELIO SEGUN SAN MATEO 3, 16-11; 6, 1-25; 5, 1-3
2Déjole entonces el diablo,
x a
Angeles se acercaron para servirle.
Ill. MINISTERIO DE JESUS
EN GALILEA
(4,12 - 18,35)
Comrenzo pe La vipa pUBLICA. 2A oir (Jestis)
jue Juan habia sido encarcelado, se retiré a
alilea, 18y dejando Navarct, fue y habité en
Cafaraim junto al mar. en el territorio de
Zabulén y de Neftali, “para que se cumpliera
lo que habia dicho el profeta Istas: 1°" Tierza
de Zabulén y tierra de Neftali, camino del
mar, més allé del Jordan, Galilea de los gen
tiles; 1el pueblo “asentado en tinieblas, luz
grande vid; y a los asentados en la region y
sombra de la muerte, luz les albore6.”
Los primezos visciputos. Desde, entonces
Jesis comenzé a predicar y a decir: “Arrepen-
Hos porque e] reino de los ciclos esta cerca.”
18Caminando junto al mar de Galilea vid a dos
hermanos, Simén el llamado Pedro y Andrés
su hermano, que echaban la red en el mar,
pues eran pescadores, y dijoles: “Venid en pos
de Mi y os haré peseadores de hombres.” 20Al
instante, dejando las redes, le siguieron. *Pa-
sando adelante, vid a otros dos hermanos, San-
tiago hijo de Zebedeo y Juan su hermano, en
su batca con Zebedeo su padre, que estaban
arreglando sus redes. y los Hamé. 2Ellos al
punto, abandonando Ja barca y a su padre, le
siguieron,
EvaNcenizacion pe Gauitea. 2Y recorria to-
da Ia Galilea, enseftando en las sinagogas de
ellos, y proclamando la Buena Nueva del reino
y samando toda enfermedad y toda dolencia
en el pueblo, 24Su fama se extendid por toda
la Siria, y le traian todos los pacientes afligidos
de toda ‘cise de dolencias y sufrimientos, en-
demoniados, lundticos, parsliticos, y los sané.
S5Y “Te siguieron grandes muchedumbres de
Galilea, Decapolis, Jerusalén y Judea, y del
otro lado del Jordan,
CAPITULO V
Ex SerMén pe La MontaSta. Las ocho Biex-
AVENTURANZaS. 1A ver estas multitudes, subid
a la montafia, y habiéndose sentado, se le acer-
caron sus disefpulos. #Entonces, abrié su boca,
Yy se puso a ensefiarles asi: 3"Bienaventurados los
13. Cafernaim, hoy ‘Tel Hum, sitvada en la ribe-
ra norte del Lago de Genesaret.
185, Véase Tg. 9, 15, y nota,
25. En las sinagogas dello
nota.
‘26, Lundticos se llamaban los epilépticas y enfer-
mos de similar categoria, porque su enfermedad se
atribuia a la influencia de ia luna,
3. Pobres en el espiritu son, como observa Sto. To
ma, citando @ San Agustin, to solamente los que 0
se apegan a las riquezas (aunque sean materialmente
| Ficos), sino principalmente los humildes y pequefios
cf. Hebe. 8 4 yEVANGELIO SEGUN SAN MATEO 5, 3-29
pobres en el espiritu, porque a ellos pertenece
el reino de los cielos. #Bienaventurados los
afligides, porque serin consolados. Bienaven-
turados los mansos, porque heredarén la tierra.
SBienaventurados los que tienen hambre y sed
de la justicia, porque serin hartados. “Bien
aventurados los que tienen misericordia, porque
para ellos habré misericordia. SBienaventura-
dos los de corazén puro, porque verin a Dios.
"Bienaventurados los pacificadores, porque se-
rin lamados hijos de Dios. 20Bienaventurados
Jos perseguidos por causa de la justicia, porque
a ellos pertenece el reino de los cielos. 1Di-
chosos seréis cuando os insultaren, cuando os
petsiguieren, cuando dijeren mintiendo todo}
mal contra Yosotros, por causa mia. 1Gozaos
y alegraos, porque vuestra recompensa es gran-
de en los cielos, pues asi persiguieron a los
profetas que fueron antes de vosotros.”
Vosorros sois 1A SAL DE LA TERRA. 13"°Vos-
otros sois la sal de Ja tierra, Mas si la sal pier-
de su sabor, :con qué serd salada? Para nada
vale ya, sino para que, tirada fuera, la pisen
Jos hombres. 14Vosotros sois la luz del mundo.
No puede esconderse una ciudad situada sobre
una montafia, IY no se enciende una candela
para ponerla debajo del celemin, sino sobre el |
candelero, y (asi) alumbra -a todos los que
estin en ia casa. 2As{ brill vuestra luz. ante
Jos hombres, de modo tal que, viendo vuestras
obras, buenas, glorifiquen a vuestro Padre del
cielo.
Jests perrecciona 1a Ley axmicua. 17*No
vayais @ pensar que he venido a abolit la Ley
¥ los Profetas. Yo no he:venide para abolir|
sino para dar cumplimiento verdad os
‘que no, confian, em sus propias fuerza y que cstin,
Eine’ dice 'S. Criséstomo, en actited de un mendige
ae constantemente implora. de’ Digs la fimosna. de Ja
facia, Ea este sentido. dice el, Magnificat “A. log
Hambrientos Tend ‘de Bienes y a los ricos dejo vactos™
Cine 1 38).
4. Los mansos tendrin por herencia el reigo de Jos
cicios, cuya figura era Ia Herra. prometida. Ch. 8. 36,
3; 33,19 y nota,
& Verh @ Dios: “Los limpios de corazén son los
auc vena Dios, conocen tu valuntad, yen su or, in
ferpretan su palabra. Tengamos pof cletto que para
ies Santa Bia, sande mis Rhinos y lara Ie
cscuridad de sus misters poco valen fas letras yc
Sing. profanas, y mucha la caridad y el amor de Digs
yidel projimo” (S. Agustin).
10. C5.°S. 16 y sis. notas.
13'ss. Hn las dos figuras de la sat y de Ia ine, nos
inculeg el Sehr el deher de preservarnes ‘de’ Ta ‘cor
rrupeién y dar” buen ejemplo,
‘Asi Brille” siguien seHalaba 1a dulzura que es-
onde estas “palabras las ‘miramos\ como wh voto
amistoso para ‘que nuestro ‘apostolade dé fruto slum.
nando a todos (cf. Juan 15, 16),para gloria del Padre
Guan 15, 8), ¥si es un voto' de Jesus ya podemos
darlo’ por’ realizado’ con s6lo adherirnos a €), deseando
fue toda la gloria sca para el Padre y nada pata, nos.
‘kro nk pars hombre alguno.
17. San Pablo enseha expresamente que Jesis ac
6 J’ cireuncisign para mostrar fa veracidad de ‘Dios
confirmando las promesas que £ habia hecho a tos
pelgarcas (Rom. 15,8). Belo que dice Maria en Luc.
TR. La jota (yod) es en ol alefato, hebreo ta letra
ris pesca; Este anuacio Jo habia hecho ya: Moisés
a'Tsrael, diciéadole que tun dia ‘habla de cummplit “to.
21
digo, hasta que pasen el cielo y la tierra, ni
una jota, ni un dpice de la Ley pasard, sin que
todo se haya cumplido. 2°Por lo tanto, quien
violare uno de estos mandamientos, (avin) los
minimos, y ensefiare asia los hombres, sera
Mamado ‘el minimo en el reino de los ¢ielos;
mas quien los observare y los ensefiare, éste
sert llamado. grande en ef reino ‘de los cielos.
Os digo, pues, que si vuestra justicia no
fuere mayor qué la de los escribas y_fatiseos,
no entraréis en el reino de los cielos.
21"Ojsteis que fué dicho a los antepasados
No matardsa; el-que matare serd reo de con-
denacién.” 22Mas Yo os digo: “Todo aquel
ue se encoleriza contra su hermano, merece
la condenacién; quien dice a su hermano
merece el sanhedrin; quien le dice enccio» me-
rece la gehenna del fuego. 28Si, pues, estis
presentando tu ofrenda sobre el’ altar, y alli
te acuerdas de que tu hermano tiene algo que
reprocharte, *4deja alli tu ofrenda delante del
altar y ve primero a reconciliarte con tu her-
mano, y entonees ven y presenta tu ofrenda.
25Ponte en paz, sin tardar, con tu adversario
mientras vas con é1 por el ‘camino, no sea que
él te entregue al juez y el jucz’al alguacil;
y te pongan en la carcel. En verdad te digo,
gue no saldris de alli sin que hayas pagado
hasta el iltimo centavo.”
2Oisteis que fué dicho: «No cometeris
adulterio» Mas Yo os digo: “Quienquiera
mire a una mujer codiciéndola, ya cometié
con ella adulterio en su corazén. %Si, pues,
tu ojo derecho te hace tropezar, arrincatelo
arrojalo lejos de ti; mis te vale que se pierda
uno de tus miembros y no que sea echado todo
Ges Jos mandamientos que boy te intima” (Dent. 30,
8). Lo mismo. se babla‘prometido en Jer. 31. 335 Be"
36, 27, “ete y sin embargo Jesus habia, dicho a los
Judion ‘que ninguno de ellos cumplia ia Ley Cuan 7,
15). Sel Htedentor quiere asl ensefarles que tsles pro
speiag/ aslo Hegsrin a comple con #1 Cf. Hs. 4h
F nota
‘ygr'Se trata aqui de férmulas abreviades de mal-
dicién. Se promuneiaha una sola palabra, mas el oyente
bien sabia "Io que era de. completar. ‘Tomado por st
Solo, racd significa estipido y necio en las costs, que
fe tefieren a la religidn yal culto de Dios, (Necio'es
mis injurioso que “raed”, “porgue ‘cquivale 4. implo,
Fnmoraly ateo, en extremo perverse. “Ei eonclloy este
ce, eh Sanhedrin ovsupremo telosnal del pueblo. Si
dio, conataba de 71 jusces y era presididy. or ef Sune
Sacerdote, Representaba Ia. suprema autoridad. doctel:
aly judicial» administrativas Gehenna es nombre: del
intierna, ‘Trae su origen del valle Ge Hinnom, al sur
de Jerusalém, donde ‘estaba. Ie estatua de Moloe, Tue
Garde fdolatviay. sbominacioan IV. Keys 23, 109.
"2h" misericordia. del Padre et Tal, que. atiens
de més g. nuestro. proveeho que al honor del culte”
(SCriadivomo):
‘27. Vease Ex. 20, 14; Deut. 5, 10,
2g, Ws" muy importante distinguir entre la incli-
aacign y Ja volumtad, ‘No hemos de. sorprendernos de
Hentir el mal deseo ai tener’ eserdpulo de. ely poraue
sto es lo"normaly pecado seria consentiy’ en fo que
Sentimos, ‘Dion saca’de 1 geastén de mérite, grandic
Simo "cuando Jo confersmos con plena desconfianea de
frosoteos mibmgs, y entonces nos da la fuerza
despreciarlo. Por "eso. Santiago. (ir 12) ltma. blew:
aventuranzs la tentaci6a en el hombre recto,
We, Vease Lev. 24, 193. Por ojo, derecho y por
mano “deveche entiende Jestcristo. cualqeicr coe gue
os sea tan preciosa como los miembros mis mecetae
Toe de nuestro cuerpo.2
tu cuerpo en Ja gehenna. 20¥ si tu mano dere-
cha te es ocasién de tropiezo, cértala y, arré-
jala lejos de ti; més te vale que se pierda
no
uno
de tus miembros gue sea echado todo
32Mas Yo os digo: “Quienquiera repudie a su
mujer, si mo es por causa de forntcacién, se
hhace causa de que se cometa adulterio con ella;
y_el que toma a una mujer repudiada comete
adulterio.”
23" Ofsteis también que fué dicho a los ante-
pasados:
tas).
‘43. Odiarés @ ft, enemigo: Tmporta mucho zclarar
‘que esto Jamis. fue precepto de Moisés, sino dedue-
cide, teolégica ‘de los" ralihos “que
tradisones habian quebrantado los mandamiento
Bios” (5, 93s Mare 7, 736.) y a.
recuerda Ig misericordia con palabras del AT. (9, 3;
12, 7),,E1 misqpo Jests nos ensefia que ahve —d
grin "Yo soy" “cuya ‘voluntad te expresa en el
Antiguo Testamento, co su Padre Juan 8, $4) "y 00
Giertamente menos ianto que El, puesto ge todo lo
aie £i tiene Jo reccbe del Padre (11, 27), at cual
os da precisamente por Modelo de Ia’ caridad evan-
silica, revelandonos que emia misericordia esta Ia
Suma perfeccion del Padre (5, 48 7 Hive. 6,35). Esta
misericordia abunda en. cada, ‘pagiaa del ArT. 5 se
fe prescribe a Terael, no s6lo para con a préjimo
ex 20, 16; 22, 267 Lev. 19, 18; Det, 15, 125.27,
17)" Prov. 3, 28, et), sino’ tambidn con ol extra
EVANGELIO SEGUN SAN MATEO 5, 29-48; 6, 1-2
jimo, y odiarés a tm enemigo.» 44Mas Yo os
digo: “Amad a vuestros enemigos, y rogad por
fos que os persiguen, a fin de que sesis hijos
de vuestro Padre celestial, que hace levantar
su sol sobre malos -y buenos, y descender su
luvia sobre justos e injustos. “Porque si amis
a los que os aman, zqué recompensa tendréis?
gh98 mismos publicanos no hacen otzo tanto?
TY si no saludais més que a vuestros herma-
nos, zqué hactis vosotros de particular? No
hacen otro tanto los gentiles? 48Sed, pues, vi
‘otros perfectos como vuestro Padre celestial
es perfecto.”
CAPITULO VI
De ta recta mvTENcION, 1Cuidad de no prac-
ticar vuestra justicia a Id vista de los hombres
con el objeto de ser mirados por ellos; de otra
manera no tendréis recompensa de vuestro Pa-
dre celestial. Cuando, pues, haces limosna, no
toques la bocina delante de ti, como hacen’ los
Jere (Bx, 22, 21; 23, 9; Lev. 19, 33; Deut,
10, 18; 23. 7; 24, 14; Mal. 3, 5, ete), Véase Ia doc
trina de David en 8. 57, 5 y note, Lo que hay es
que Tsrael era un pueblo privilegiado, cosa que hoy
fos cuesta imaginar, y lor extranjeros estaban nav
furalmente excluidos de su comunidad mientras no
fe citeuncdaban (ix. 32, 43) Lev. "22,10; "Nim.
1, $1; Ez. 449), y_ mo podian Ilegar a ser sacer,
dote, ni rey (Nim. 18, 7; Deut. 17, 15), ni casarse
con los hijos de Israel (Ex. 34, 16;'Deul. 7, 3; 25,
Sp Eedr. 10, 2; Neb. 13, 27).' Todo esto era orde-
nado por ef mismo Dios’ para preservar, de Ia. ido-
atria ¥ "mantener os privilegios, del pueblo escozido
¥ teveritiea (cf. Deut, 23, 1 s.), lo cual desapare
feria desde que Jesiis aboliese a’ teocracia, separan-
Go lo det César ¥ lo de Dios. Los extranjeros resi-
dentes eran asimilados a los israelitas en cuanto a
su sujecion a as leves (Lev, 17. 10; 24 16; Nem.
19, "10; 35, 15; Deut, 31, 12; Jos. ‘8, 33); pero. a
os pueblos’ perversos ‘como los ‘amalecitas (Ex. 17,
Thy ‘Deut, 35,19), Dios mandaba destruirlos por
sef enemigos del puchlo Suya (ef. S. 104, 145s. y
hota). TAY. de nosotros si pensamos. mal’ de Dios
(Sab 1,1). y nos atrevemos ‘2 juzgarlo en su liber:
tad soberana!’ (cf. 8, 147, 9 'y nota). Aspiremos a
Ia bienaventaranza de no escandalisarnos del Hijo
(iay'G y. nota) ni, del Padre (Juec. 1, 28; 3, 225
I Rey, 15, 288), “Cuidado con querer ‘ser inds bue-
ho gue Dios y tener tanta caridad con los hombres,
Ge eondenemos a Aguel “que enter®. ou Tio pot
Mads, Como se ve, el perdém y el amor a los ene-
‘igor’ es Ia nota caracteristicn, del cristianismo. “Da
Tia’ caridad "fraterna su. verdadera fisonomia,, que
ts a ‘pisericordia, Ta. cuat, “como fo confirme. Jesus
en su Mandamiento ‘Nuevo’ (juan °3, 34. 715,92),
Einsiste en la. imitacién de su amor misericordioso,
El eristiano, nacido de Dios por la fe, se hace co-
heredero. de #Cristo por la caridad (Lev. 19, 18; Lae.
6, 275.23, 34; Hech, 7, 597 Rom. 12, 20)
48. Debe notarse “gue vexte pasaje ‘se complementa
con'el de Lue. 6, 36. Agut Jesus nos ofrece como
modelo de perfeccién al Padre Celestial, que es bue-
Ro tambien "con los “Que, obran como enemigos suyos,
alif'se aclata y_ confirma que, en el conceto de
Fests, esa “perfeceién que hemos ‘de imitar en a die
vi "Padey cosise on La muericorda (EE 2, 43
W525 "Cal! S13). ¥ por que no dice aqui imitar
ai Hijo? Borque d Hijo como hombre es constante
imitador del Padre, como nos repite tantas veces
Jest Juan, §, 198. y 30) 12, 448, 492 ctedy
yx adora al’ Padre, a quien’ todo lo debe, Sélo ‘el
Padre ino dene a ‘nadies poraie todo y todos proce-
den de"E1" Guan 4, 28°y nota).
‘Non toques Ja Bocine? Comtraste con Nim. 10,
10. El Padve Celestial mo necesita ya de cota adver.
fencia, segin vemos en'et We 4EVANGELIO SEGUN SAN MATEO 6, 2.20
hipécritas en las sinagogas y en las para
Sef glotificados por los hombres; en verdad os
digo, ya tienen su paga. #T%, al contrario,
cuando haces limosna, que tu mano izquierda
no sepa lo que hace tu mano derecha, para
que tu limosna quede oculta, y tu Padre, que
ve en lo secreto, te lo pagari.’
La oraciéy pommvicat. 5“Cuando oréis, no
sedis como los hipécritas, que gustan orar de
pie en las sinagogas y en las esquinas de las
calles, para ser vistos de los hombres; en ver-
dad os digo, ya tienen su paga. ®Td, al con
tario, cuando quieras orar entra en’ tu apo-
sento, corre el cerrojo de la puerta, y ora a
tu Padre que esta en lo secreto, y_ tu Padre,
que ve en lo secreto, te lo pagaré. TY cuando
ordis, no abundéis en palabras, como, los paga-
nos, que se figuran que por mucho, habl
serdn ofdos. §Por Jo tanto, no los imitéis, por-
que vuestro Padre sabe qué cosas necesitais,
antes de que vosotros le piddis. Asi, pues,
oraréis vosotros: "Padre nuestro que estis en
los cietos, santificado sea ta nombre; ?0venga
‘tu reino; hagase tu voluntad en la tierra como
en el cielo. 1Danos hoy nuestro pan super-
23
substancial; 12y perdénanos nuestras deudas,
como también ‘nosotros perdonamos a nuestros
deudores, !y no nos introduzcas en tentacién,
antes bien libranos del Maligno. ‘Si, pues,
vosotros perdondis a los hombres sus ofensas,
vaestro Padre celestial os perdonaré tambi
pero si vosotros no perdondis a los hombres,
tampgco vuestro Padre perdonard vuestros pe-
cados”.
Et avvno. 1“Cuando ayuntis, no pongéis
cara triste, como los hipéeritas, que fingen un
ostro escudlido para que las gentes noten que
ellos ayunan; en verdad, os digo, ya tienen su
aga. 17Mas ti, cuando, ayunes, perfuma tu
cabeza y lava tu rostro, 2a fin de que tu ayu-
no sea visto, no de las gentes, sino de tu Padre,
jue esté en’ lo secreto; y tu Padre, que ve en
lo secreto, te lo pagari”.
Las VeRDADERAS RIQUEZAS. 1°"No os amonto-
néis tesoros en la tierra, donde polilla y
herrumbre (Ios) destruyen, y donde, los Iadro-
nes horadan los muros y Toban. 20Amonto-
naos tesoros en el cielo, donde ni polilla ni
herrumbre destruyen, y donde ladrones no ho-
3 fw eneda, ca dese qos vo, bowen de ba
sasha detirdteas dere, avoe, cent hae
210 ee oman sate Joe dete og
seo. del templo (Lue. 18, 11 8,
ee tige ae ‘lode ca eta 7
ee eee ere a eae cee ey
Sees a. ae cue age oe es
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Hine gteraed oe reeeam, ie, o Fours a fe
gloria como verdaderos hijo:
oi Bepngrentee Me cacisa modo por
we Bs ee rea ee Gee BE
Se ee erm a eee te
Seer anaes Caner eee es el Sie entre
ge iat gue Sewage Dye mee,
BOG WE RS A Sat aoa
bg a ie, sited oa, oma, Ze
Se, rua, Bo otrmon pent ai der at gid
mae ert a Oe atts
souls tala ide intact’ del covarén
inane VE, hated ane ae
i abe Vas St Sauilcode a ca de
See rae ae at Fa ee ade
Jer err ree, Mgnolo ol Silo donde
See See oe ae I eee
spin emg anid cue toa, erased
sehen ge gure ce uae, Pade ous ome 8
vé; ‘en el Nuevo Testamento: Padre. Véase Juan
sate Picts MaEMe EB ciclo adonde ire
mos, sino del Reino de Dios sobre Ja tierra, de modo
ma ng el eee Digester,
SPSL Bae Seecee Benes ls sree ay
eee ee ee Gee aloes
Be secammtel tn kez eal! desea nee see
eae ars Easels de Jp Coats 8: 2407
1) Mean 2h Sat dee 28 Be EE hae
and; Seteenitinl vie, fobigavar Mal
ese See Cio Stn Jecinine, Sia embareo, bay
ee ee ee eae
Que auestro parecer no se compagina bien com el
{enor dela Oraciin dominicai, que es todo sobre.
natural, Este modo de peair lo espiritual antes de
qo temporal coincide com Ja ensefianza final del Sermén
Gr 33), sega fa cual ‘heigos de buscar ante todo
arcing de’ Digs, porque todo fo demas se aos da
Spor afadidura™,' eb decir, sia necesicad de pedirlo.
12, Perdonamot: esto. eb, declaramos estar perdo-
nando desde cate momento. No quiere decir que Dios
fon. perdone “segdn nosotros solemos perdonar_ordi-
‘ariamente, pues eutonces -poro. podrlamos esperar
er uesra ‘pare. EL sentido es," pues perddnanoe
Eome "perdanemos, seziin se ve en dv. 14
13, ‘Aqui como en-5, 37, In expregiOn griega “Apé
tu, ponert™, ‘semejante a fa Tatina “a malo” y. a, Is
hebrea “min ‘bara, parece referirse, como lo indica
Jotion, antes, que, al mal en general al Maligno, 0
sea a’ Satandsy de quien vient. In. tentacién mencio-
Bada en el mismo yersiculo. La peor tentacion se
fis precisamente Ta de no, perdonar, que S.. Agustin
lisa horrends, porgue ella nos. itpediria ser pet-
donades, sega’ vimos en el v.12 y qa eonfirman ol
ianyuel 15, Véase 18, 35; Mare, 11, 25; Juan 17,
1S, Temtaciin (60 evga) peiraamts, ‘de, peice, prac.
experiencia) " puede” traducirse tambien” por
prucbo, “Gon: lo. caal queda claro el sentido: 0 bos
pongas’ a prueba, porque desconfiames. de nosotros
fistos ly omes’ muy (capaces de ralconarte: “ate
cael leaguaje de Tn verdadera humildad, lo opuesto
la. presuneién ‘de Pedro. Véase Luc. 22, 33. (ef.
Martin). Esto no quita que #1 prucbe. nuestra fe
(1 Pedr. 1, 7) cuando asi nos convenga (Sant. 1,
“ jermitirg
!2) yen tal caso “fiel es Dios que 00 p
que seis tentados alld de vuestras “fuerzas”
"Cor. 10, 13).
14, 1s, ‘pues, enorme 1a promesa que Jesis pone
aqui ‘en nuestras manos! [Imaginemos a in. juer de
fa tierra’ que dijese otro tamtol Pero jay!’ si n0
perdonamos, porque entonces nosotros mismos nos
Condenamos’ en esta oracion (ef. 5, 43-48). Es decir,
que si rezaran Bien un solo Padreauestro ios que ba:
imposibles. |Y aun se
‘g."Bi aywno no era, como boy, parcial, sino
comigia la abstinent que odes ae co 3
¥ bebidas durante cl dia. Bre, ues, wna verdader
Brivacién, ‘una -auténticn sehai "de" penitencay que
Dracticabsn, ‘también Jos primeros eristianos, prinei-
Balmente.el viernes. de cada semana, por ser adie
en que “el Esposo nos fue quitado” "(, 13).
se24
radan ni roban, 24Porque alli donde, esté tu
tesoro, alli también estafé ta corazén”.
22"La limpara del cuerpo es el ojo: Si tu
ojo esté sencillo, todo tu cuerpo gozart de la
faz; Spero si tt ojo estéinservible, todo. a
cuerpo estard en tinicblas, Luego, si la luz que
hay en ties tiniebla, las tnieblas mists,
cuan indés seran?”.
24°Nadie puede servir a dos sefiores; porque
odiari‘al uno y amaré al otro; o se adherna al
uno y despreciars al otto, Vosotros no podéis
servir a Dios y a Mammén”.
ConrtanzA EN LA PROvIDENCIA HC o1vINO.
Panne. 25"Por esto os digo: no os preocupéis
por vuestra vida: qué comeréis o qué beberéis;
ni_por vuestro cuerpo, con qué to vestiréis,
2No vale més la vida que el alimento? zy el
éuerpo més que el vestido? 2°Micad las aves
del cielo, que no siembran ni siegan, ni juntan
en graneros; y vuestro Padre celestial las ali-
21, Jess nos da aqui una pietra de toque para
discernir en ‘materia “de esplritualidad propia y aje-
a. Bl que estima algo coma un tes0ro, no necesita
Que 10 fuercen a buscarlo, Por eso. San Pablo nos
Guiere llevar por sobre todo al ‘conocimiento de Cris-
fo Gig, [4a Una vee puesto “el corazén ‘en #h
es seguro’ que’ el mundo ya no podri. seducirnos.
Véase 13, 44. ss
2% Hestas palabras se refieren ala recta intencién
o simplicitad del scorszén, tan, fundamental segin
foda Ia Escritura, “Dios, dice 8. Bernardo, no mita
Ig “que haccis, sino con qué ,voluntad lo haceis”.
Véase Sab. 1, 138, y nota. Cf Lac, 1, 34 y nota,
24, Para_poder entender. €l seatido literal, en ei
cwal se encirra 1a. profunda qnscfanza espiritual de
ste texto, nevesitamos ver detenidamente que en-
fiende Jesis "por el uno y, él otro. El primero. es
Dios, ye otro es, Mammén, nombre que. significa
te Upionificacién de Ian riguesas, ‘De ‘esto. fetlia
que el que ama. lor riguezas, pontendo en ellae so
forazén, ‘llega "sencillamente 2 odiar a. Dios. Terti-
ble verdad, que no seré menos real por el hecho de
que "no tengames conciensia de ese odio. Yann.
Foe gatee, ot, ago. fan monstruote, es bien Hci
fe comprender si pensamos que cn tal caso la ima
gen de Dios se_nos representara dia. tras. dja como
Ta del. peor enemigo “de esa presunta felicidad en
que tenemos puesto el corazén; por lo cual no es
Rada sorprendente que Jleguemos 4 odiarlo en. dl fon:
do del corazdn, aunque por fuera tratemos de cum
ir algunas obras, vacias de amor, por. miedo de
Incurrir en el castigo del Omnipotente. En cambio,
‘al segundo caso nos muestra que si nos adherimes, 2
Dios, esto es, si ponemos nuestro corazén en fl,
mirandolo como un bien deseable y" no como. une
pesada obligacion, entonces sentiremos hacia el mus
oy" sus riquezas, no Ya ‘odio, pero. si desprecio,
como quien posee oro y desdefia ef cobre que se. le
offece “en cambio. Santo TTomés sintetiza sia "doc:
{rina diciendo que el primer fruto del Evangelio es
el crecimiento en Ife, 0 sea ene conocimiento. d
os atractives de Dios; y el segundo, consecuenc
del_anterior, serd el desprecio del mundo, tal como
We promis Jess oh exe vesicle fey
5. Quiere decir: si lo que vale més (Ia vida y
el cuerpo) me ha sido dade gratis y sin gue yo 10
pidiese, icOmo, no, ha de darseme Jo “que vale me
fos, esto’ es. cl limento para esa vida y. el vestido
BETS josG,cuernof Ts el 'miamo Vargumenio’ que use
San, Pablo en ol. orden eapiritual: Dies que no. per.
a su propio Hijo y lo entrex6 por nosotros
jebmo no habria de darnos con #1 todos los bienes?
Rom. 3 32).
26, Vesse, tn argumento andlogo, en Is. 40, 25-
31, donde ei divine, Padre se queja de que se Ie
imite’ como ‘malo’ e indiferente ante mucstras. neces
dades,
EVANGELIO SEGUN SAN MATEO 6, 20-26
menta. , o debemos esperar a otro?”
‘Jesis les respondié y dijo: “Id y anunciad a
fuan lo que ois y ‘veis: $Ciegos ven, cojos
andan, leprosos son curados, sordos oyen, muer-
tos resucitan, y pobres son evangelizados; iy
‘gst oe bienes” Gono dp Iota al Kpulin (Lue
a" gjemplo de los Recabitas en Jer 35. Otros tra
ducen: “quien ‘conserva salma, esto es, quien
retende salvarse por au, propio eafuerzo, sin securrit
aI Gnico “Salvator, Jests, Ve
nota,
AH me _recibe: Jests mismo vive en sus
scién “a este com:
de
fase Lue. 14, 26 a3
17,33
diacilon; ew 1a" ghe de a8 signi
jacipulos; ex fo que ds. sit signi
ortarmiento. cuando. Jess habla. del “ethos”
elacion filial" con Dios, de la actitud a
tin eservas frente al Pacey “del amor “fraterng
reciproco que ha ge unit a los “bijos de Dios, el
Sentido de ‘esta actitud se fandamentaasimiame par
fiendo de la persona de Jesus. “El que por Mi reci.
tere aun mifio como date, a Mi me eeibe; y el
due eseandalizate 4 uno de’ estos pequetios que crcen
ea Mi, més fe valiera que Je colgasen al ctelo. una
edra’ de molino. de asno le arrojarsn al fondo
ja mar” (Mat. 18, 5-6) (Guardiai).
428i los que sélo apagan la sed fisica de un dis.
cipale “de Cristo, oblendcan au, Teeampensajeunto
tule iy ‘ecibirdn Jos ministros de Cristo que apaguen
en Jas gimas Ia sed de verdad?
3. EI que viene, eato es, el Mesias, rey de Israel,
anunciado "por los’ profetas, ‘Véase Juan 6, 14) 11,
27-y nota. En el v. § Jestis se pretenta con las pa.
jabras con que lo anuaciara Tsalas (Is, 38, $; 61,
Ty notas). “¥ como bien sabia #1 que habia de se?
Fechazado, ‘expres en dv. 6 lo. henaventuranza de
aquellos que excepcionaimente no ballaren en an
tropiezo.
‘5. Ba ver de larga respuesta, Jestis muestra a los
eaviados los prodigios que estaba obrando cuando
ellog Megaron, 'y les prueba de este modo que #l es
el Mesias, en ‘quien se han complido las. profectas
Us, 35, 8 33 61, 1).
6. Dichoso ‘el que no se escandalizare de Mi: Es
devs dichoso “el fais "sabe Feconocer ue las, prene.
dentes ‘palabras de. Isaias sobre el Mesias Rey s¢
cumplen realmente en Mi (cf, Luc. 4, 21 nota), y
no tropieza y cae en la duda como los demas, ‘es.
candalizadg por las apariencias de que soy un cat.
Pintero (Mat 13, "55; Marc. 6, 3), ¥ porque apa.
Belén (Mat. 21,
es con.
Pesar ‘de esas apariencias, porque ve esas obras que
Yo hago (Juan 10, 33; 14, 12) y esas palabras que
ningin otro hombre ‘dijo (Juan 7, 46),.¥ juza con
un juicio recto y no por las aparientias Guan 7,30
dichoso el que no se escandalizare de Mi!”
TY cuando ellos se retiraron, Jesis se puso
a decir a las multitudes a propésito de Juan:
* Qué salisteis a ver al desierto? Acaso una
cafla sacudida por el viento? *Y si no, zqué
fuisteis a ver? Un hombre ataviado con ‘ves-
tidos lujosos? Pero los que evan vestidos lu-
josos estan en las casas de los reyes. *Entonces
equé salisteis a ver? (Un profera? Si, os digo,
y mis que profeta. Wfste es de quien esté
escrito: "He ahi que Yo envio a mi mensajero
que te preceda,el coal, preparara mm camino
jelante de ti.” En verdad, os digo, no se ha
levantado entre los hijos de mujer, uno mayor
que Juan el Bautista; pero el mis’ pequefio en
el réino de los cielos es més grande que él.
Desde los dias de Juan el Bautista hasta
ahora, el reino de Jos cielos padece fuerza, ¥
los que usan la fuerza se apoderan de ’él.
18Todos los profetas, lo mismo que la Ley, han
profetizado hasta Juen, MY, si queréis creetlo,
& mismo es Elias, cl que debia venir. ;Quién
tiene ofdos oiga!®
‘Tenquenan pet Purnio. 16" Pero, con quien
comparar la raza esta? Es semejante a mucha-
chos que, sentados en las plazas, gritan a sus
camaradas: 170s tocamos Ja, flauta y no dan-
zasteis, entonamos cantos fiinebres y no pla-
24), Porque los que dudan de los escritos, de Moisés
y de tos Profetas (Juan 5, 46) "n0 creerian aunque
un mucrto. resucilara y- les bablase, (auc, 16, 31).
FY sto tes 'pasé aun a Tos apéstoles con’ el mismo
Jesés resucitado! (Iuuc, 24, 11). Dichoso el que sabe
Teconocer, en esa felicidad’ hoy’ anunciada alos pox
bres y cumplida, en estos milagros, las profecias
Hloriosas Sobre el Mesias Rey que, justo con ‘dominar
toda Ja tierra (S. 71, 8), tiene esa predileccign
gue Yo demuestro por’ los "pobres (S. 71,1238;
Yue. 4, 18). Dichoso, en fit el que, al pie de in
Graz, ‘Sia creyendo todavia, camo Abrabdn, contra
‘esperanza Rom, 4, 18), como ereyé mi Madre
Ghue, f, 43; Joan 19, 25 y" nota) y comprenda las
Eserituras, segtin las’ cuales "era necesarco que el
Mesias padeciese mucho, muriese y resucitase (Lae.
24 262 y 480; Juan 21, $a; Heck. 3; 22
Jokes Bon "evo atic queda ie 4 Jesse al no fe strat
especialmente el diving Padre Tuan 6, 44), porque
fs demasiado escandaloso el misterio "de un Dios
victima de amor Cor. ‘1, 23). Bor eso. muchas
Yeees, aunque nos decimos 'ereyentes, no. creemos,
porque somes como el pedregal (Mat. 13, 21). Véase
Tuc. 7,25 y nota,
fi. Re décirr Juan es et mayor de los, profetas
del antiguo ‘Testamento, pero ia nueva alianza, ol
Reing de Jesucristo, sera tan superior que cualquiera
en Gl seré mayor que Juan porque #1 lo constituirs
Sobre todos sus bienes (24, 40s: Hebr, 8 8 3.), En
cuanto a la Iglesia, fundada cuando Israel rechazé
1 ecno te Meta (ot 16, Hes Rome Hh 12 9°15
¥ hotas),, vemos ‘coan_privilegiada es, deide ahora
Huestra, situaclon, de verdaderos hijos de ‘Dios y her.
manos de Jesis, Véase Juan 1, 11-12; 11, $2; Bf. 1,
Shy nots, ete,
{2 Segtin algunos, los que no hacen violencia a
Dios, con su, confimnsaingucbrantable, mo entrarsn
en'al Feino ‘de Ins cielos, Otros exegetas toman estas
Dalabras en sentido. profatico, reficiendolas a las per-
Secuciones que el Reino de Dios ha de sufrir en Ja
tierra, Véase Tuc. 16, 16 y nota, Se apoderan de él:
tai también “Busy la Biblia Pisot, Cf, 23, 13.
4 Muchos consideraban al Bautista coms el pro
feta ‘Bligs, el cual, conforme. ala. profecia de. Ma.
teawins Gy §), ‘ha ‘de volver at mundo. Vésse 17, 1h
EVANGELIO SEGUN SAN MATEO 11, 6-30
Aisteis. "Porque; vino Juan, que ni comia ni
bebia, y dicen: “Estd endemoniado.” 18Vino el
Hijo ‘del Hombre, que come y bebe, y dicen:
“Es un glotén y' borracho, amigo ‘de publi-
jge,pecadores.” Mas la Sabiduria he
ja por sus obras.”
VAY pe LAs crupapes ipeNrreNtes! 20Enton-
ces se puso a maldecir a las ciudades donde
habia hecho el mayor nimero de sus milagr
porque no se habjan arrepentido: 2"";Ay de ti
Corazin! ;Ay de ti Betsaida! porque si en Tiro
y en Sidon se hubiesen hecho los prodigios
ue han sido hechos en vosotras, desde hace
mucho tiempo se habrian arrepentido en saco
y en ceniza, Por eso os digo, que_el dia
del juicio seré més soportable para Tito y
Sidén que para vosotras, 5Y ti, Cafarnaim,
zacaso habris de ser exaltada hasta el cielo?
Hasta el abismo serés abatida. Porque si en
Sodoma hubiesen sucedido las maravillas que
han sido hechas en ti, atin estaria ella en pie
el dia de hoy. *Por'eso te digo que el dia
del juicio serd mis soportable para la tierra
de Sodoma que para ti.”
Inrancia esprmitvat. 2Por aquel tiempo Je-
sés dié una respuesta, diciendo: “Yo te alabo,
oh Padre, Sefior del cielo y de la tierra, por-
que encubres estas cosas a los sabios ya los
prudentes, y las revelas a los pequefios. ?Asf
¢s, oh Padre, porque esto es Jo que te agrada
2'Ti, 7A Mi me ha sido transmitido todo por
mi Padre, y nadie conoce bien al Hijo sino
el Padre,’ni al Padre conoce bien nadie sino
el Hijo y aquel a quien el Hijo quisiere reve-
lar (Io). 28Venid a Mi todos los agobiados y
los cargados, y Yo os haré descansar. "Tomad
sobre vosotros el yugo mio, y dejaos instruir
por Mi, porque manso soy’ y humilde en el
corazén; y encontraréis réposo para vuestras
vidas. *Porque mi yugo es excelente; y mi
carga es liviana,”
19, Véase Lue. 7, 35 y,
ereada es el mismo Verbo dh
Sus obras le dan testimonto, como
#1 mismo lo. dijo
muchas veces Juan 10, 37 4.3 12, 37-403 15, 22-25).
21s, Corasin y Betsaida eran ciudades vecinas
Gafarnadm, Las “tres son” aqui maldecidas por su
ineredulidad ¢. infidelidad a los privilegios de que
se gloriaban (ef. 7, 23; Twuc. 13, 27)
dos ciudades paganas ‘de’ Fenicia.
28. El Evangelio. no es privilegio de los que se
creen’ sabios y prudentes, sino que abre sus, paginas
2 todos los hombres de’ buena ‘voluniad, sobre. tod
a Jos pequeituelos, esto es, a los pobres’ en el espi
Fity y humildes de corazén, porque “aqui. tienen
todos a, Cristo, sumo y perfecto cjemplar de just
cla, caridad y “misericordia, y estén ablertas para el
géiero bumano, herido y tembloroso, las fuentes de
aguella divina gracia, postergada Ia cual y dejada
aun lado, ni los pueblos mi sus gobernantes pueden
Iniciar, ni conselidar la tranquilidad social y [a con-
(Pio XII en la Enciclica “Divino Affiante
Spiritu”),
28. No s6lo los muy agobiados; también todos los
cargados,, para que la vida les sea lievadera,
29. Nétese que no dice gue soy manso, sino por-
que soy manso. No se pone aqui como modelo, sito
comp Maestro al cual debemos ir sin timidez, puesto
que es mano ¥ no se irrita al vernos tan torpes.
‘30. HI adjetivo eriego ““jrestds” que Jesus aplica
Troy Sidon:“VANGELIO SPGUN SAN MATEO 12, 1-34
CAPITULO XI
Conaovensias sopre EL shsapo. *Por aquel
tiempo, Jestis iba pasando un dia de sébado,
a través de los sembrados, y sus discipulos,
tentiendo hambre, se pusieron a arrancar algu-
nas espigas y a comerlas. *Viendo esto, 10s
fariscos fe dijeron "Tus discipulos hacen fo
que no es licito-hacer en sibado.” SJests les
dijo: “No habéis leido, pues, lo que hizo
David cuando tuvo hambre él y los que esta-
ban con él, fedmo entré en la casa de Dios y
comié los’ panes de la proposicién, que no
era licito comer nj a él, ni a sus compafieros,
sino solamente a los sacerdotes? 5:No habéis
asimismo leido en la Ley, que el dia de sibado,
fog sacerdotes, en el cemplo, violan el reposc
sabético y lo hacen sin culpa? ®Ahora bien, os
digo, hay aqui (alguien) mayor que cl Tem-
lo." SP hubieseis comprendide lo que. signi-
fica: “Misericordia quiero, yo. sacrificio”,
no condenariais a unos inocentes. *Porque Se”
fior del sébado es el Hijo del hombre.”
De alli se fué a la sinagoga de ellos; y he
aqui un hombre que tenia una mano seca. 1Y
opusieron esta cuestién: “Es licito curar
el dia de sibado?” —a fin de poder acusarlo—.
UE! les "Cuil serd de entre vosotros el
jue teniendo una sola oveja, si ésta cae en un
foso, el dia de sébado, no ird a tomarla y le
vantarla? Ahora bien, jcudnto mis, vale el
hombre que una ovejal Por consiguiente, es
Kcito hacer bien el dia de sébado.” Enton-
ces dijo al hombre: “Extiende tu mano.” El
la extendid, y le fug restituida como la otra.
¥Pero los fariseos salieron y deliberaron contra
£1 sobre el modo de hacerlo perecer. ®Jesis,
2 sa yugo, es ol mismo que se usa en Luc, 5, 39
para. calificar el vino -afiejo, De abi que es més
Exacto. traducirlo por “excelente”, ‘pues. “llevadera””
S6lo da la idea de ua mal menor, 'en tanto que Jestis
nos ofrece un bien positive, el bien mas grande’ para
nuestra febeidad un temporal, siempre que le crea
mos. El yugo es para la carne mala, mas mo para
al espirita, al cual, por el contrario, EI le conguista
la Wbertad Quan 8,31 ‘s.; 11 Cor. 3, 177 Gal. 2,
4; Sant. 2, 12). Recordemos siempre esta divina f6r!
‘Some una gran luz para nuestra vida espi-
|. ET Evangelio. donde el Hijo nos da conocer
Ins maravillas del Eterno Padre, eg un mensaje de
amor, y no un simple cédigo penal. El que lo co-
ozea fo amaré, es decir, nolo mirard ya como una
obligacién sino "como un 'tesoro, y entonces, si que le
era suave el yugo de Cristo,” asi como el avaro se
Weustosamente por sa oro, 0 como la esposa
lo deja todo por seguir a aquel que ama. Jesus
acentia esta revelacion en Juan 14, 25 s., al decir
a. San Judas ‘Tadeo que quien lo ama observard su
Goctring y el que no lo ama no guardard sus pala-
bras, Tai es el. sentido espiritual de las parsbolas
del tesoro escondido y de la perla preciosa’ (13, 44
's5.). Del conocimiento viene el amor, esto es, la fe
obra por la carded (Gal, 5, 6), Y si no hay amor,
sunaue fhubiera ‘obras, ‘no, valdrian nada (Gor. 15,
1.85). Todo precepto es ligero para el que, ama, dice
‘Agustin; amando, nada euesta el trabajo: Ubi
amatur, non_laboratur,
= tude Jesiis a Ia historia que se refiere en el
primer, libro’ de los Reyes 21, 16. Los panes de la
Proposicién, son los doce panes que cada semana se
eolocaban "como. sacri ja ‘mesa de oro en el
Santo del ‘Templo, Véase Lev. 24, 5 ss.
7, Vease 9, 13; Os. 6, 6 Kali. 38, 4.
31
al saberlo, se alejé de alli. Y muchos lo siguie-
ron, y los sané a todos. #8Y les mand6 rigu-
rosaniente que no lo diesen a conocer; “para
que se cumpliese la palabra del profera Isaias
que dijo: "He aqui a mi siervo, a quien elegi,
el Amado, en quien mi alma se complace. Pon-
dré mi Espirit sobre El, y anunciaté el juicio
a las naciones. No disputard, ni gritard, y
nadie oird su voz en las plazas. No quebrard
la caiia cascada, ni extinguird la mecha que
aun humea, hasta que lieve el juicio a la vic-
toria; #y en su nombre pondedn las naciones
su esperanza.”
Et pecano contra pi. Espinrre. 2#Entonces
le trajeron un endemoniado ciego y mudo, y
lo sand, de modo que hablaba y vela. 2Y to-
das las inultitudes quedaron estupefactas y dije-
ron: “Sera éste el Hijo de David?” *Mfas los
fariseos, oyendo esto, dijeron: “El no echa los
demonios sino por Beelzebul, el principe de
Jos demonios.” #Conociendo sus pensamientos,
les dijo entonces; “Todo reino dividido con
tra sf mismo, esti arruinado, y toda ciudad 0
casa dividida’ contra si misma, no, puede sub-
sistir. 28Si Satands arroja a Satands, contra si
mismo esti dividido: entonces, zcémo podra
subsistir su reino? 27Y si Yo, por mi parte,
echo los demonios por Beelzebul, También podría gustarte
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