Sobre la Muerte y los Moribundos.
Como el título de este libro lo dice, nos habla acerca de la muerte y lo que sienten o
piensan las personas que aparentemente están más próximas a ella. Para muchas
personas, como nos podemos dar cuenta a través de la lectura le temen a la muerte,
algunas por no querer dejar solos a sus seres queridos, otras porque no quieren ser
devorados por los gusanos, otros porque sus familiares no aceptan que “ha llegado su
hora de morir”. Al igual que estas personas hay muchas que no le temen en lo absoluto,
piensan que la muerte es un “paraíso”, en donde Dios los estará esperando y sentirán una
inmensa paz sin necesidad de nada.
A través de las entrevistas realizadas tanto a los familiares como a los pacientes,
me di cuenta que todos aquellos que aceptan su muerte se debe en cierta forma porque
tienen mucha fe en un Señor o un Dios supremo, es lo que les ayuda a llegar a la etapa de
aceptación, como se menciona, dicen “Dios así lo quiso” o “Dios sabe lo que hace”.
Para llegar a la etapa de aceptación antes mencionada, se tiene que pasar por
diversas etapas tales como, la negación y el aislamiento, la ira, el pacto, la depresión y
finalmente la aceptación. Es muy difícil para la mayoría de las personas saber que te
queda poco tiempo de vida, realmente no sabes cuánto, pero sabes que lo que habías
planeado para un futuro ya no podrá ser posible, entrando en la negación, pensando que
tú no tienes nada y que se trata de un error, como se menciona, tu inconsciente no puede
aceptar que morirás, en el eres inmortal se podría decir que eres “Superman”. Después te
enojas con todo el mundo y piensas ¡¿Por qué yo?! ¡¿Por qué a mí?! Te puedes dar o no
cuenta de que en algún momento todos moriremos, no sabemos la fecha indicada pero
cada una de las personas pasará por una situación parecida. Es cuando llega el momento
de pedírselo amablemente a Dios, tal vez así conceda que aún no muramos. En el caso de
los moribundos que se encuentran en los hospitales generalmente, se dan cuenta de que
no mejoran y que no ha servido de nada las peticiones que han hecho, cuando se presenta
la depresión. Finalmente gracias a las personas que se encuentran a su alrededor, tienen
un papel fundamental, ayudándolos a aceptar, haciéndolos sentirse que nunca estarán
solos.
Como ya lo había mencionado, algunas veces los pacientes son los que no temen
por morir, lo aceptan, pero los familiares no lo conciben, y por esa razón ellos no pueden
morir, siente que no los pueden dejar así. La muerte es algo natural, pero que no lo vemos
como tal, la mayoría de las personas quisiéramos ser inmortales o al menos decidir
cuándo y cómo queremos morir. Sin embargo eso es imposible para la mayoría de
nosotros.
Es un libro demasiado interesante que realmente nos acerca a los moribundos,
sabiendo que es lo que sienten y piensan en momentos tan difíciles como es la muerte ya
que dejaras de tener todo contacto terrenal. Gracias a las entrevistas realizadas es posible
ayudar a que otros pacientes como los entrevistados no se sientan de la misma manera,
tratando de que su muerte sea menos dolorosa, pero sobre todo con menos tristeza y
mayor alegría de los últimos momentos en la Tierra. Como muchos dicen quieren seguir
siendo personas no quieren convertirse en objetos, como algunas veces se sienten en los
hospitales. A algunos les gustaría saber la verdad, sería mejor que no se los ocultaran al
igual que los tomarán en cuenta para la decisión de su vida, no les gusta que decidan por
ellos cuando aún están conscientes y lo pueden hacer. A la mayoría de las personas les
gusta que platiquen con ellas, no les gusta sentirse abandonados, quieren sentirse vivos
pero, sobre todo quieren morir teniendo dignidad.
Vanezhva Camacho Ordóñez.
