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Análisis Archer Reseña Critica Del AT

Este documento presenta un resumen de tres capítulos de la obra "Introducción al Antiguo Testamento" de Gleason Archer. En el capítulo 1, Archer define la introducción al AT y explica la relación entre el AT y el NT. En el capítulo 2, discute la inspiración del AT y presenta evidencias de su carácter inspirado. En el capítulo 3, analiza los manuscritos hebreos más antiguos y las primeras versiones del AT.

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Análisis Archer Reseña Critica Del AT

Este documento presenta un resumen de tres capítulos de la obra "Introducción al Antiguo Testamento" de Gleason Archer. En el capítulo 1, Archer define la introducción al AT y explica la relación entre el AT y el NT. En el capítulo 2, discute la inspiración del AT y presenta evidencias de su carácter inspirado. En el capítulo 3, analiza los manuscritos hebreos más antiguos y las primeras versiones del AT.

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Seminario Teolgico Presbiteriano

Rev. Jos Manuel Ibaez Guzmn

Informe de lectura:
Resea Crtica de una Introduccin al Antiguo
Testamento - Gleason L. Archer

David Vsquez Guerra


Valparaso, 16 agosto 2017
Metodologa Exegtica
Profesor: Rev. Ams Cavalcanti
Anlisis: Captulo 1 - Introduccin

Al iniciar su exposicin, el autor explica los objetivos de su libro y los elementos esenciales
para comprensin de lo que es la Introduccin al Antiguo Testamento. Su objetivo es proveer
un texto sencillo y til para estudiantes y seminaristas no iniciados en la crtica al Antiguo
Testamento, y brindar un panorama general del tema para pastores y estudiosos de la Biblia. El
autor explicita que ha hecho una seleccin, para revelar slo los puntos de vista ms
representativos he influyentes de las autoridades indiscutibles en el estudio de la introduccin al
AT y tratando solo los puntos principales de manera clara y sencilla. Aclara tambin sus
preconceptos al enfrentar la lectura de la Biblia, reconociendo que el libro se adhiere a una
postura netamente conservadora y evanglica. El autor expresa su conviccin personal de que
solamente esta postura sobre el contenido de la Biblia le hace verdadera justicia al texto bblico y
a la evidencia. En consideracin del autor, es de mxima importancia entender correctamente el
verdadero significado de la revelacin de las Escrituras.

El autor define claramente la introduccin al AT como el estudio sistemtico del antiguo


trasfondo en el cual deben ser entendidos los primeros 39 libros de la Biblia, que abarca el
lenguaje, las costumbres, las situaciones histricas, las personas, los lugares y los
acontecimientos. Incluye las siguientes disciplinas de estudio: (1) los idiomas empleados para la
escritura del AT, (2) la historia del pueblo hebreo y sus pases vecinos, (3) la religin y la cultura
de estas naciones no hebreas, (4) la paternidad literaria de los libros de la Biblia, (5) la fecha en
que se compuso cada libro, (6) la situacin histrica y los problemas contemporneos a los que se
refirieron los autores inspirados, (7) el texto original de cada libro o crtica textual, (8) la integridad
del texto, (9) la historia de la transmisin del texto. Adems dentro de la introduccin caben dos
subdivisiones principales: introduccin general (que se ocupa de lo relativo al texto y al canon) e
introduccin especial (que se ocupa aisladamente de cada uno de los libros del AT).

El autor comenta luego en este captulo sobre la relacin entre el Antiguo y el Nuevo
Testamento. Establece que los escritores del NT consideraron los libros del AT (la ley y los
profetas) como un solo cuerpo literario (las Escrituras), cuya paternidad literaria lo corresponde en
ltima instancia a Dios mismo, que utiliz autores humanos que escribieron su verdad bajo su
direccin infalible. Considera que los escritores del NT vieron en la totalidad de las Escrituras
Hebreas un testimonio de Jesucristo. El AT expuso los preparativos de los cuales el NT sera el
cumplimiento: Jess de Nazaret cumpli lo que predijo el AT. En suma, el AT demuestra que
Jess y su iglesia fueron hechos providenciales, la personificacin de los propsitos de Dios; y el
NT prueba que las Escrituras hebreas constituyeron un organismo coherente e integrado,
enfocado sobre un nico y gran tema, y que constituyeron un solo programa de redencin.

Sobre la Familia Semtica de Lenguas, el autor considera que el genio del idioma hebreo fue
un factor determinante en la expresin del mensaje del AT. El hebreo puso su hincapi sobre el
modo de accin y no sobre los tiempos verbales (a diferencia del griego). Archer establece que
una adecuada interpretacin de la revelacin del AT exige dominio de estos rasgos peculiares del
verbo hebreo y de la sintaxis hebreo en general, de lo contrario la Escritura resultar
incomprensible y desvirtuada. Existen otros idiomas que contribuyeron en mayor porcentaje al
vocabulario del hebreo bblico, por ello es importante analizar estos idiomas afines y obtener de
ellos la luz que puedan arrojar sobre el uso del hebreo.
Anlisis: Captulo 2 - La inspiracin del Antiguo Testamento

En este captulo, el autor pretende discutir sobre el planteamiento bsico de qu clase de libro
es el AT. Todo el proceso de investigacin est profundamente influido por la premisa con la cual
se inicia. Si se trata de un producto del genio humano, debe ser evaluado en trminos puramente
literarios. Si fueron inspirados por Dios, al emplear instrumentos humanos para registrar la verdad
que revel a los hombres, los datos deben ser manejados procurando una reconciliacin
satisfactoria de las aparentes discrepancias.

Parte al discutir evidencias en favor de la inspiracin global de la Biblia. Presenta las


causas por las cuales es razonable y correcta la premisa de que el AT es una coleccin de libros
inspirados por Dios. En primer lugar, hay una significativa unidad que subyace en toda la coleccin
de libros del AT, lo que revela una interconexin orgnica. En segundo lugar, en consideracin del
autor solamente la religin hebreo-cristiana ofrece una epistemologa lgicamente defendible.

Contina explayando sobre la infalibilidad de los autgrafos originales. La infalibilidad es


necesaria, porque si la Biblia es una mezcla de verdades y errores, es un libro como cualquier
otro, sin autoridad, sujeta al juicio del hombre en vez de juzgar ella al hombre. Si la revelacin nos
ha de ser entregada de forma til y confiable, que no dependa del juicio falible del hombre, debe
serlo de forma infalible.

Luego se refiere brevemente a que la transmisin textual no es necesariamente infalible. La


infalibilidad o libertad de todo error es necesaria solamente para los manuscritos originales o
autgrafos de los libros bblicos. El texto bblico tal cual lo tenemos ahora no est libre de todo
error cuando se trata de errores atribuibles a los copistas, puesto que hayamos algunas
discrepancias en las copias manuscritas que tenemos a nuestra disposicin. Estas discrepancias
no son de magnitudes que pervierten el mensaje o imposibilitan traducir su verdadero significado.
Dios no permiti que los errores de transmisin corrompieran o pervirtieran su revelacin, por su
intervencin y direccin confiamos en la fidelidad de la transmisin.

Presenta argumentos para concluir que la doctrina de la inspiracin es sostenida por la


propia Escritura. Luego de una cuidadosa investigacin, podemos decir que la Biblia afirma su
absoluta autoridad como la infalible Palabra de Dios. El autor presenta argumentos desde textos
bblicos del NT, para afirmar que la misma Biblia plantea que en su totalidad y en todas sus partes
es infalible en cuanto a la verdad y terminante en cuanto a su autoridad. El argumento bsico para
la total confiabilidad de las Escrituras es la confiabilidad del propio Dios. Cuando habla la Escritura
es Dios quien habla, por lo que la Palabra de Dios tiene autoridad para juzgar todas las dems
filosofas y razonamientos humanos con absoluta y soberana autoridad. Concluye el autor que
todo hombre debe escoger entre dos alternativas: la infalibilidad de las Sagradas Escrituras, o la
infalibilidad de su criterio personal.

El autor critica algunos criterios sub-bblicos de la inspiracin, de la posicin neo-ortodoxa.


Responde a lo que se le llama mentalidad de Cristo para juzgar entre la verdad doctrinaria y error
en la Biblia. Tambin al punto de vista que considera la Biblia como algo menos que la escrita
Palabra de Dios sino que meramente un testimonio de la Palabra de Dios, que entra en accin
cuando se produce un encuentro viviente o existencial entre el creyente y Dios. Concluye que el
punto de vista neo-ortodoxo sobre las Escrituras plantea dificultades mucho ms serias que las
que pretende resolver, y que resulta que toda afirmacin de los adherentes de esta escuela
depende en ltima instancia de la veracidad escrita en las Escrituras hebreo-cristianas.

Finalmente el autor discute cmo encarar ciertas dificultades que hay en la Biblia. Hay dos
mtodos posibles para encarar las dificultades bblicas: (1) mantener en suspenso la pretensin de
la infalibilidad bblica en tanto no quede aclarada toda dificultad individual, (2) Retener la fe en la
infalibilidad del registro bblico, a pesar de las aparentes discrepancias, y esperar con paciencias
la reivindicacin que posteriores investigaciones seguramente garantizarn, en base a la
conviccin de que solo el origen divino explica el fenmeno de las Escrituras. Recomienda el autor
al creyente que no debe sentirse embarazado por aferrarse a la presuncin de que la Biblia es la
infalible Palabra de Dios
Anlisis: Captulo 3 - Los manuscrito hebreos y las primeras versiones

Al iniciar este captulo, el autor reconoce que no tenemos acceso a los originales infalibles de
los diversos libros que componen las Escrituras Hebreas, las ms antiguas copias de las que
disponemos estn distanciadas no menos de mil aos de la poca de su composicin original. No
obstante, el autor plantea que constituyen hoy en da nuestra principal autoridad en cuanto a la
inspirada Palabra de Dios. Archer pretende entonces resear las evidencias escritas sobre las
cuales se basan nuestras modernas ediciones impresas de la Biblia hebrea, y tomar conocimiento
del enorme y variado cuerpo de evidencias con las cuales trata la crtica textual del AT. Los
manuscritos hebreos tiene valor prioritario, pero las primeras traducciones al griego, al arameo o al
latn no pueden dar claves a palabras o frases del original hebreo donde los manuscritos hebreos
fueron pervertidos o mutilados.

Expone primero los ms antiguos MANUSCRITOS HEBREOS. Inicia describiendo los


manuscritos precristianos, que consisten principalmente en los que se hallaron en los notables
descubrimientos de las cuevas del mar Muerto y se designan tcnicamente como materiales de
Qumram. El autor considera manifiesto que los materiales del Qumram apuntan a tres o cuatro
principales familias de manuscritos: (1) proto-masortica, (2) proto-septuaginta, (3) proto-
samaritana, (4) una familia neutral. Recalca que nada en los nuevos descubrimientos de las
cuevas de Qumram pone en peligro la confiabilidad y autoridad esencial del texto de nuestra Biblia
hebrea. Posteriormente enumera los manuscritos de la era cristiana: el cdice oriental, cdice
cairensis, manuscrito Leningrado, cdice Leningrado, y el Pentateuco Samaritano.

En segundo lugar hace referencia a las PRIMERAS VERSIONES DEL ANTIGUO


TESTAMENTO. Enumera las versiones griegas: (1) La Septuaginta (LXX), donde la Torah fue
vertida al griego para la conveniencia de los judos de habla griega que desconocan el hebreo,
con diversos manuscritos o fragmentos importantes (Cdice Vaticano, Sinatico, Alejandrino); (2)
versiones griegas posteriores como la de Aquila, de Simaco, y de Teodocin. Luego se refiere a
los targumes arameos, parfrasis arameas del texto hebreo asentadas como interpretacin.
Sobre las versiones latinas, presenta la (1) Versin Latina Antigua o versin Itala (traduccin
latina de la LXX), y la (2) Vulgata de Jernimo, que fue primero una ligera revisin de la Itala
aproximndola ms a la LXX, para posteriormente ser perfeccionada por el mismo Jernimo
desde el texto hebreo generando la aceptacin ms o menos oficial como la nueva y autorizada
Biblia Latina. Finaliza con una breve referencia a las versiones siracas y los poliglotas.
Anlisis: Captulo 4 - Baja crtica del Antiguo Testamento

La baja crtica o crtica textual gira alrededor de la tarea de restaurar el texto original sobre la
base de las copias imperfectas que han llegado a nuestras manos.

El autor inicia el captulo exponiendo los tipos de errores de los manuscritos. Analiza los
diversos tipos de errores que podan cometer los copistas, y observa los contextos en los cuales
estos ocurran con mayor frecuencia. Enumera algunos de los errores ms frecuentes: (1)
Haplografa, la escritura de una letra, slaba o palabra una sola vez, cuando debe escribirse ms
de una vez; (2) Ditografa, escribir dos veces lo que solo debe escribirse una vez; (3) Mattesis,
alterar el orden de las letras de un vocablo o el orden de las palabras; (4) Fusin, combinar dos
palabras separadas para formar una; (5) Fisin, dividir una palabra en dos; (6) Homofona,
sustitucin de un homnimo por otro; (7) Incorrecta interpretacin de letras similares; (8)
Homoeoteleuton, omisin de un pasaje interpuesto, porque el copista pas directamente de un
final a otro final semejante; (9) Omisin accidental de palabras en situaciones donde no est
involucrada ninguna repeticin; (10) Incorrecta interpretacin de vocales como consonantes.

Archer plantea que los crticos han establecido ciertos criterios standard para ayudar a una bien
fundada eleccin entre dos o ms variantes competitivas, lo que denomina Canon de la Crtica
Textual. Propone seis cnones que servirn como una gua confiable a la crtica textual: (1) Dar
preferencia a la variante ms antigua; (2) Dar preferencia a la variante ms difcil; (3) Dar
preferencia a la variante ms corta; (4) Dar preferencia la variante que mejor explica todas las
variantes; (5) Dar preferencia a la variante que cuente con ms amplio geogrfico; (6) Dar
preferencia la variante que ms se ajusta al estilo y a la diccin del autor; (7) Dar preferencia al
texto que no refleja ninguna parcialidad doctrinaria.

Posteriormente nos entrega un resumen de los mtodos textuales, donde seala una
metodologa propuesta por Wurthwein. l intent establecer un mtodo de objetividad y de
procedimiento cientfico que eliminara gran parte de las enmiendas temerarias e inconsideradas
que con frecuencia has sido tomadas como crticas textuales de buena fe.

El autor luego recapitula la obra de los Soferim y los Masoretas. Los soferim eran la orden de
escribas que iniciaron su actividad bajo la direccin de Esdras. Formaban un gremio reconocido
de custodios del texto bblico, en tiempos de Jess. Su trabajo ms meritorio fue el de normalizar y
uniformar un texto puro de las Sagradas Escrituras. Los Masoretas dieron los ltimos toques y
fijaron la forma definitiva del texto del AT, preservaron por escrito la tradicin oral (masora)
respecto del correcto uso de las vocales y los acentos, y de las veces que figuraban palabras
raras de ortografa poco comn. Recibieron de los soferim el texto con consonantes, sin
puntuacin y le insertaron los puntos vocales que le dieron a cada palabra su exacta
pronunciacin y su forma gramatical. Indicaron las variantes con el explicativo qer (que significa
lase! en arameo). Los masoretas tambin se ocuparon del os signos de acentuacin.
Anlisis: Captulo 5 - El canon del Antiguo Testamento

En este captulo el autor estudia lo relacionado con el canon del AT, estableciendo qu es lo
que le da canonicidad a un libro de la Escritura, y en qu momento el pueblo hebreo acept como
cannicos estos diversos libros. La palabra canon se refiere a los escritos que se ajustan a una
regla o standard de divina inspiracin y autoridad..

El primer aspecto comentado es la divisin tripartita del canon hebreo. La edicin masortica
del AT difiere de orden de los libros seguido por la Septuaginta, que es de las iglesias
protestantes. En cuanto al orden, la Biblia protestante sigue a la Vulgata, pero en cuanto al
contenido sigue al Texto Masortico (TM). El orden de los libros en TM es: Tor, el Pentateuco;
Nebim, los profetas (los profetas anteriores y los profetas posteriores); Ketubim, los escritos
(poesa y sabidura, los Rollos o Megilloth, e histricos).

El autor comenta brevemente sobre la denominada Antilegomena, o libros contra los cuales se
habla. Trata y responde brevemente a los cargos formulados contra libros de canon masortico,
uno por uno: Eclesiasts, Cantar de los Cantares, Ester, y Proverbios.

Luego, recopila antiguos testimonios sobre el Canon Masortico. La ms antigua referencia


a las tres principales divisiones de la Escritura Hebrea figura en el prlogo de Eclesistico, libro
apcrifo compuesto por Jess Ben Sirac alrededor del 190 aC. El mismo NT en Lucas se refiere al
AT hablando de lo que est escrito en la ley de Moiss, en los profetas y en los salmos. Recalca
ac que no hay dudas de que la tercera divisin del canon hebreo (Ketubim) fue colocada por los
escritores del NT como al mismo nivel que las dos anteriores, como divinamente inspirada. Josefo
de Jerusaln (37-95 dC) enumera en 22 los libros del AT y los divide en libros de Moiss, profetas
y los restantes libros que abarcan himnos a Dios y consejos a los hombres para la conducta de la
vida. Archer posteriormente enumera an ms referencias al catlogo de libros del AT, como la
lista del Obispo Melitn de Sardis (170 dC), Orgenes (s. III), Tertuliano (160-250 dC), Hilario de
Poitiers (305-366), y Jernimo (340-420). Posteriormente, trata sobre la canonicidad de los
apcrifos, mostrando evidencia que indica que no son cannicos.

Concluye el autor, luego de considerar algunas pruebas de la canonicidad, que la nica


prueba verdadera de la canonicidad es el terminonio de Dios el Espritu Santo sobre la autoridad
de su propia Palabra. Este testimonio hall una respuesta de reconocimiento, fe y sumisin en los
corazones del pueblo de Dios que camin con l en una comunin de pacto. En su soberana,
Dios dispuso las cosas de tal manera que su pueblo reconociera y recibiera su Palabra. El autor
reconoce que a duras penas podramos esperar otro criterio vlido aparte del indicado. El Dios
Soberano tom la iniciativa en la revelacin y en la produccin de un registro inspirado de tal
revelacin a travs de agentes humanos. El autor plantea que la canonicidad se trat de un
problema de reconocimiento de la cualidad ya inherente por acto divino en los libros as
inspirados. El reconocimiento por parte de la iglesia no imparte ninguna nueva cualidad a los
escritos sagrados, simplemente reconoce su condicin ya existente. Los Snodos y Concilios
Eclesisticos no le impartieron canonicidad a una sola pgina de la Escritura, simplemente
reconocieron la divina inspiracin de documentos religiosos que fueron inherentemente cannicos
desde el momento en que fueron compuestos y rechazaron formalmente otros libros a los que se
le haba atribuido una falsa canonicidad. Finalmente el autor responde a teoras liberales sobre
el origen del canon, descartando lgicamente sus planteamientos y argumentando en pro de una
postura ortodoxa.

Bibliografa

Archer, Gleason L., Resea Crtica de una Introduccin al Antiguo Testamento, Editorial
Portavoz, 1981

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