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Beato de Liebana y Los Beatos PDF

El documento describe la exposición sobre Beato de Liébana y los Beatos que se llevará a cabo del 9 de marzo al 29 de abril. Explica que Beato de Liébana fue un monje del siglo VIII que tuvo un papel importante en la defensa de la ortodoxia católica y en el fomento del culto a Santiago. Su obra más famosa fue su libro "Comentarios al Apocalipsis" que incluía ilustraciones que influyeron en el desarrollo del arte occidental. La exposición mostrará códices de este

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El documento describe la exposición sobre Beato de Liébana y los Beatos que se llevará a cabo del 9 de marzo al 29 de abril. Explica que Beato de Liébana fue un monje del siglo VIII que tuvo un papel importante en la defensa de la ortodoxia católica y en el fomento del culto a Santiago. Su obra más famosa fue su libro "Comentarios al Apocalipsis" que incluía ilustraciones que influyeron en el desarrollo del arte occidental. La exposición mostrará códices de este

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Beato de liébana y los beatos

EXPOSICIÓN
del 9 de marzo al 29 de abril
Lunes a Viernes de 16:00 a 20:00 h
Domingos de 10:00 a 14:00 h
Presentación.
Hace unos 1200 años nuestra región había alcanzado un especial protagonismo dentro del ámbito
nacional, e incluso europeo, gracias entre otros aspectos a la figura de Beato de Liébana.

El siglo VIII constituye una etapa crucial para Cantabria, en cuanto a factores históricos y culturales,
al adquirir un papel preponderante en los inicios de la Reconquista frente a los musulmanes y los
consiguientes inicios de la repoblación y constitución del reino asturiano, en cuya dimensión políti-
ca y religiosa va a colaborar nuestro monje lebaniego.

Además de ser el primer escritor cántabro conocido, aunque en latín, a través de sus obras descu-
brimos su singular relevancia en cuestiones religiosas, como su defensa de la ortodoxia católica
frente a la herejía adopcionista propalada por el primado de Toledo, Elipando, o el obispo de Ur-
gel, Félix, que tras la intervención del propio emperador Carlomagno se resolvió a favor de nuestro
monje. En dicha controversia se dilucidaba no sólo el dogma sino también la actitud tolerante de la
iglesia oficial toledana frente a los musulmanes y al mismo tiempo la independencia de la iglesia y
el estado asturiano frente a las jerarquías religiosas cristianas que convivían en territorio musulmán.
Esas relaciones culturales se traslucen en el arte prerrománico de los siglos IX y X, - capiteles,
modillones y celosías- presente en esta muestra.

Otro aspecto relevante desde el punto de vista religioso es también el papel de Beato en el fo-
mento del culto a Santiago y su propuesta como patrón de España, a través de su “Himno para el
día de Santiago Apóstol”, lo que quizás supuso un impulso para la búsqueda y descubrimiento del
sepulcro del apóstol en Iria Flavia, hace ahora 1200 años.

Pero sin duda la mayor aportación de Beato de Liébana al arte universal sería su libro “Comen-
tarios al Apocalipsis”, en donde, insertados entre los textos, aparecen ya ilustraciones preciosas
que influirán en el desarrollo del arte occidental y en particular en la iconografía del arte románico.
Los códices -como los que presentamos en esta exposición- realizados la mayoría de ellos en
monasterios castellanos a lo largo de cinco siglos, son un prodigio de elaboración y muestran la
evolución estética del arte occidental , anticipando conceptos -cubismo, expresionismo, surrealis-
mo, “comic”- fundamentales del arte moderno.

Ignacio Gavira
Fragmento del Mapa Mundi del beato de Saint Sever, Director General
primero en el que aparece el topónimo “Cantabria” Fundación Comillas
LIÉBANA EVANGELIZADA.

La tradición considera que fue el monje palentino Toribio, que vivió en el siglo
VI, el primer evangelizador de esta comarca, quien con otros compañeros
fundó este monasterio. Algunos creen que fue él quien depositó los restos de
Santo Toribio, obispo de Astorga y las reliquias del Lignum Crucis que éste
había traído de Jerusalén.
En el inicio de la Reconquista dirigida por los reyes asturianos, una de las pri-
meras decisiones estratégicas fue la despoblación de la vertiente meridional
de la cordillera y la repoblación con esa gente de las comarcas septentrionales.
Alfonso I, rey de origen cántabro, repobló Liébana y a continuación las demás
comarcas situadas hacia el este: Trasmiera, Sopuerta, Carranza, Vardulia... Es
muy probable que sea en este momento cuando llegan a Liébana las reliquias
procedentes de Astorga.

Los primeros monasterios

En este proceso tienen gran protagonismo los monasterios, constituidos bajo


diversas formas y reglas. Las gentes que llegan son hispanovisigodos, más
romanizados y cristianizados que los habitantes indígenas y así se inicia una
organización del territorio, civil y religiosa, de raíz jurídica visigoda, con conda-
dos, cotos señoriales y obispados, con una fragmentación territorial que inicia
la implantación del sistema feudal. Liébana va a ser la comarca privilegiada
por su situación y orografía, para acoger a estos monjes que fundarán nume-
rosos monasterios.

Iglesia del antiguo monasterio de Santo Toribio de Liébana


SANTO TORIBIO DE LIEBANA LOS MONASTERIOS DE SAN MARTÍN Y SAN-
. TO TORIBIO
Fue obispo de Astorga hacia el año 450, don-
de se distinguió por su lucha contra la herejía El monasterio de San Martín de Turieno es uno
de los Priscilianistas. Antes de recibir la orde- de los primeros monasterios de Cantabria de
nación episcopal, siendo aún presbítero, fue los que existe constancia documental, ya en el
a Jerusalén, donde permaneció unos años al siglo VIII. En su origen su escasa importancia
frente de la sacristía del Santo Sepulcro. A su sería similar a la de otros pequeños monaste-
vuelta a España se le permitió traer algunas rios pero enseguida se produce su expansión
reliquias, entre ellas un trozo grande de la cruz por la comarca, basada sin duda en la pose-
del Señor. Dichas reliquias fueron probable- sión de las reliquias del Lignum Crucis y en los
mente depositadas en la catedral de Astorga. restos de Santo Toribio. La primera referencia
al monasterio de San Martin de Turieno con la
Tras la invasión musulmana las reliquias se nueva advocación de Santo Toribio es en 1125
trasladaron, junto con los restos del obispo, al y ya pertenecía al patrimonio real.
monasterio de San Martín, que había fundado
en Liébana el monje Toribio.Según los Santo- En el año 1256 se construye la actual iglesia,
rales murió el 16 de abril del año 460. De ahí con el apoyo económico de los fieles, por me-
que se celebre el Jubileo los años en que di- dio de indulgencias concedidas para tal fin
cho día cae en domingo. por el obispo palentino Fernando.

EL ENTORNO DEL MONASTERIO:


TORIBIO DE PALENCIA.
Las ermitas.
Fue un monje natural de la Tierra de Campos Alrededor del monasterio, en un radio de unos
que vivió en el siglo VI. Según la tradición se 500 m. se encuentra un conjunto de ermitas y
retiró con cinco compañeros a las montañas lugares de retiro y oración de los monjes. En-
de Liébana, en donde fundaron el monasterio tre ellas destaca Cueva Santa, construcción
de San Martín de Turieno. A él se refieren las prerrománica, en la ladera norte del monte de
crónicas benedictinas así como las leyendas la Viorna, en parte excavada en la roca y en
acerca de la construcción del monasterio y su parte fabricada en sillería y sillarejo. Dispone
retiro en la Cueva Santa. de dos exiguas plantas, con acceso a través
de una puerta en arco de medio punto y cu-
bierta de lajas de piedra.
Cueva Santa
CANTABRIA EN EL SIGLO VIII: LA MONARQUÍA ASTURIANA Y EL IMPERIO CAROLINGIO.

Al producirse la invasión musulmana (711) muchos nobles hispanovisigodos se refugian en las


montañas cantabroastures e inician la Reconquista tras la batalla de Covadonga y otras esca-
ramuzas, como la acaecida en el cercano lugar de Cosgaya.
Se funda el reino asturiano, cuyos monarcas se consideran continuadores de los reyes visigo-
dos.

Desde mediados del siglo VIII, la monarquía asturiana trata de buscar alianza con los reyes
francos merovingios en su lucha contra los musulmanes. Esta relación se incrementa a finales
del siglo con Alfonso II el Casto, cuando la expansión de este rey se ve seriamente respondida
por nuevas incursiones moras en territorios cristianos, llegando a conquistar Astorga e incluso
Celosía prerrománica. Perrozo. s. IX asediar Oviedo.

Esta colaboración entre la monarquía carolingia y la asturiana dará sus frutos, tanto en el campo
militar, en donde se logra mantener estables las fronteras cristianas en el tercio norte peninsular,
como en el aspecto cultural, en el que las relaciones fueron muy fluidas, como lo demuestra la
introducción en Asturias de la moneda carolingia, la influencia de su sistema constructivo, que
observamos en el prerrománico.

En el ámbito religioso es donde destaca la figura de Beato, que mantiene relación epistolar con
el sabio Alcuino, de la corte del emperador Carlomagno.

Modillón de lóbulos. Santa María de Lebeña, s. X


BEATO DE LIÉBANA

Abad del monasterio de San Martín de Turieno (hoy Santo Toribio), que vivió en la segunda mitad
del siglo VIII. En el año 776, (segunda versión en el 784) escribió el libro “In Apocalypsin Com-
mentaria” , para explicar el hermético texto de San Juan. Para su redacción nuestro monje se
basó en otros libros de Santos Padres orientales y romanos, lo que nos indica la gran biblioteca
que debía poseer el cenobio lebaniego.

En su tiempo Beato alcanzó gran fama por su intervención, -junto con su compañero Eterio- en
la controversia suscitada por la herejía “adopcionista”, frente al Elipando de Toledo, arzobispo
primado y Felix de Urgel, defendiendo la ortodoxia católica frente a la herejía que afirmaba que
Cristo era solamente hijo “adoptivo” de Dios (“Apologeticum”) . En el proceso se vio impli-
cado el propio emperador Carlomagno, que convocó un Concilio en Ratisbona, en el cual se
ratificaron las posturas de nuestro monje frente a los herejes. Se puede decir que a partir de este
momento Cantabria comienza a ser conocida en el ámbito internacional.

Su relación con el culto a Santiago deriva de la composición del himno “O Dei Verbum”, para la
festividad de Santiago en la liturgia mozárabe, cuya alabanza del apóstol como “cabeza reful-
gente y dorada de España, defensor poderoso y patrono especialísimo”, supuso el inicio de su
culto como patrón de España y propició el descubrimiento del sepulcro de Santiago.

Pero Beato, además de su proyección histórica, ha pasado a la Historia del Arte porque en su
libro, junto a sus textos, comenzaron a incluirse ilustraciones o miniaturas, cuya temática y técni-
ca fueron fundamentales para la evolución técnica y estética de la pintura y escultura mozárabe
y románica. Perdida la obra original, apenas se han conservado 25 códices ilustrados de los
siglos IX al XIII, que han tomado el nombre del autor de los “Comentarios”.

Visión del Cordero. Beato de San Isidoro de León


EL APOCALIPSIS. vamente tolerante según Beato. Por otra parte, nas, carolingias y sobre todo norteafricanas, se
se acerca el año 800, que según algunos coloca a la cabeza de la Europa cristiana en
Es el último libro de los que componen la iba a suponer el fin del mundo, en que volvería cuanto a cantidad (cada Beato suele tener al-
Biblia y se atribuye al evangelista San Juan, a reinar Satanás, el Anticristo, antes del triunfo rededor de 97 miniaturas) y calidad de las ilus-
durante su destierro en el isla griega de Pat- definitivo de Cristo y de su Iglesia. traciones, que se difundirán ampliamente, por
mos, a finales del siglo I. Apocalipsis signi- la gran aceptación que tuvo este libro de Beato
fica “revelación” y hace referencia a la lucha durante más de 500 años.
de los enemigos contra la Iglesia, represen- En el año 776 Beato escribe su “Comentarios
tada en una visión alegórica de lo que suce- al Apocalipsis” y en el 784 redactará una nue- El primer códice ya tenía ilustraciones: en va-
derá al Final de los Tiempos. va versión, cuya finalidad es el adoctrinamien- rios lugares aparece la expresión ‘storia sub-
to de los monjes, con un lenguaje claro y llano sequente picturae’. Su estilo se correspondería
Se compone de un prólogo -en el que Je- ante el convencimiento del fin del mundo. Junto con el arte asturiano, que procedía de la tradi-
sucristo se aparece a San Juan y le enco- al texto de San Juan aparecen las “explicacio- ción artística hispano-visigoda.
mienda la misión de enviar su mensaje a las nes” de Beato, basadas en la Biblia, los Santos
siete Iglesias de Asia Menor- y doce capí- Padres (San Agustín, San Gregorio Magno, San La existencia del códice más antiguo, del siglo
tulos, en los que se aparecen cinco series Isidoro) y otros escritores, como el norteafrica- IX procedente de Silos, ha movido a algunos a
de visiones: la de los siete sellos, la de las no Ticonio y el hispano Apringio de Beja. Ade- pensar en un “primer estilo”, arcaico, derivado
siete trompetas, la de las siete señales, la de más del propio texto del Apocalipsis se suelen quizás de la versión original. Las ilustraciones
las siete copas y la lucha de Cristo y el de- incluir otros pasajes bíblicos, que dan ocasión se encuentran intercaladas en los textos.
monio. Se cierra la obra con un epílogo, en a otras ilustraciones como el Arca de Noé, Da-
el que se narra la visión del Juicio Final, la niel en el foso de los leones o el Mapa Mundi, A partir del siglo X ocupan página entera o do-
Jerusalén celestial y la Gloria de los Santos para situar la predicación de los apóstoles . ble página y textos. Sería el “segundo estilo”,
en el cielo. denominado leonés o mozárabe, con una de-
ILUSTRACIONES DE LOS BEATOS. rivación hacia Zamora. En él aparecen las típi-
Desde los primeros siglos del cristianismo cas bandas coloradas para crear espacios y
se convirtió en uno de los libros más impor- La decoración de manuscritos hispanos de perspectiva.
tantes de la Biblia, especialmente para la letra visigoda era muy sencilla. Apenas tenía
Iglesia de Occidente. La regla de San Isido- cambios de color en la tinta o ligeros motivos El “tercer estilo” sería ya románico, siglos XI y
ro imponía a los monjes la obligación de leer ornamentales. A partir del siglo VIII, por influen- XII, con fuerte influencia internacional, produ-
fragmentos en Pascua y Pentecostés, por lo cia carolingia comienza a aparecer la deco- ciendo obras de extraordinaria calidad y belle-
que este libro debía existir en los monaste- ración de lacería en las letras capitales y algo za, como el Beato de Fernando I, el del Bur-
rios. más tarde aves y peces por influencia musul- go de Osma o el más tardío de San Andrés de
mana. Arroyo.
La época en la que vive Beato es convul-
sa por las relaciones con los musulmanes Por tanto, la decoración de los Beatos inicia
y con la propia jerarquía toledana, excesi- un nuevo ciclo que tomando influencias italia-
LOS BEATOS Y EL ARTE ROMÁNICO.
humedad de los edificios. Algunos autores nos
El estilo románico supone para Europa occidental han dejado sus impresiones, como Emeterio,
la recuperación de una técnica, perdida con la inva- que se autorretrató en la torre de Tábara, junto
sión de los pueblos germánicos y de una iconogra- con su compañero, el copista Señor y un auxiliar
fía para su escultura y pintura, superando la contro- pergaminero. Los ilustradores que aparecen ci-
versia iconoclasta. tados en los beatos conservados son los siguien-
tes: Magius, Oveco, Ementerio, Ende, Estéfanus
Los Beatos van a servir de modelos para los artis- Garsia, Dominicus y Munnio, Egeas o Facundus.
tas que habrán de esculpir los capiteles y pintar los
murales de las iglesias. Tanto el contenido simbóli- EL SCRIPTORIUM
co-doctrinal como su plasmación estética eran muy Cada beato contiene alrededor de noventa ilus-
adecuados para la mentalidad medieval, ávida de traciones, relacionadas con el texto apocalíptico
signos transcendentes en su necesidad de evadir- y con otros pasajes bíblicos y de algunos San-
se de las tentaciones terrenales. La temática de las tos Padres, que paulatinamente fueron aña-
ilustraciones del Apocalipsis va a constituir el so- diéndose, así como cuadros de genealogías y
porte argumental de la religiosidad del periodo ro- el Mapamundi.
mánico (siglo XI y XII) e incluso algunos temas per-
durarán con la llegada del gótico. La Lucha entre el Destacan por su belleza de dibujo y colorido, así
Bien y el Mal, la idea de Cristo Juez, el premio, la como por la fuerza expresiva de las imágenes,
tentación y el castigo, son la base de toda la teolo- cuya iconografía deriva de modelos norte-afri-
gía medieval. canos y carolingios y evoluciona dentro de la
escuela prerrománica y románica castellana y
LOS CODICES francesa.

Todos los monasterios disponían de un cierto núme- Merece singular atención la simbología vegetal y
ro de libros, tanto para el culto como para el estudio numérica, así como la animalística de carácter
y meditación. Los libros litúrgicos solían guardarse fantástico, que será fundamental en la evolución
en el “armariolum”, especie de armario de madera de la iconografía románica.
empotrado, situado en el vestíbulo o en algún pasi- Mujer vestida de sol y batalla contra el dragón. Beato de San Isidoro de Leo

llo entre el claustro y la iglesia. El trabajo en el scriptorium consistía de repro-


Los libros de estudio tenían su propio ám- ducir libros –única manera de conseguirlos
bito en la biblioteca, colocados en armarios para su monasterio, junto con el intercambio- o
o baldas (tecas). Esta estancia se ubicaba realizar encargos para otros. Era a su vez un
en la segunda planta, orientada hacia el sur buen método para allegar recursos económi-
para recibir la luz natural. En lo grandes mo- cos para el cenobio.
nasterios, una parte de la biblioteca estaba
destinada al “scriptorium”, lugar en el que se La labor de trascripción y decoración era ardua
disponían los correspondientes escritorios y y exigía una gran paciencia y concentración.
atriles para facilitar el trabajo de los copistas Se solía trabajar alrededor de seis horas dia-
e ilustradores. rias, durante alrededor de un año y a veces en
precarias condiciones , por la falta de luz y la
Metopa de los cuatro vientos. Piasca, s.XII Adoración del Cordero. Beato de Valcavado

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