El pensamiento
salvaje
por
CLAUDE Lévi-Strauss
. ~
Fonbo DE Cuttura EcostMica
MEXICO-ARGENTINA-BRASIL-COLOMBIA-CHILEESPANA
ESTADOS UNIDOS DE AMERICA-GUATEMALA -PERU-VENEZUELA,
Primera edicin en francés, 1962
Primera ediién enespafol (ECE, México), 1964
Primera reimpresiin(FCE,Colombia), 1997
Titulo orginal:
La pensée sauvage
(© 1962, Librairie Plon, Paris
D.R.© 1964,Foxpo pe Cuctura Bconcnaca
DIR © 1988, Foxpo pe Curmura Ecovowica S.A. De CY.
(Carretera Pieacho-Ajusc0 227; 14200 México, D.F.
DIR. © 1997, Foxoo px Cuunuma Econsnaca 1D
(Carrera 16 No, 80-18, antaféde Bogots, D.C, Colombia
ISBN 958-38-0054-6
Impreso en ColombiaNo hay nada como lo salvaje, los campos
sony la gente de" provincia para cali +
fone stn autos en todo los sentido: tabi.
‘anno Hegam del Pensamieno a! Teche, nt
‘enti las come comple
H, de Balzac, Le Cabinet des antiques
PRELOGO
sre lio forma vn tod, pero lx phobledias que eh
ee diacyten guardan una etrecha relalgp, <0 lop
‘que cxaminamos tds répidamente en una abt deen
temente tiulads Le tolémime avjoudind (POE.
Pari 1962). Sin pretender exigtle al lector-
qae' aa
pers cece lew hace to,
Uicwaccilodyamacetea cate se
corte, el olor, Tn darera y otron exaceres. de
ia'mima clase” Docenar'y doceras de peces Y
te conthat poe nombres dstntvon, y se 1
conoce tambien. por sus caracteritics Props
Sus costimbres ls diferenclas.sexuales eh el
feno de cada date... (mith, p.180)
Habitantes de una regién desértica de la California
del Sur, en la que hoy logran subsistir solamente unas
ccuantas familias de blancos, varios miles de indios cox
1 También, 4g clases de hongos comestibles (oe. ety
ast) y em plano teenoldgico, go tipor de flechas dif
ences (Ud PP 265-268).
8 LA GIENGIA DE LO CONGRETO
hhuilla no Hegaban a agotar los recursos naturales; vivian
fen Ia abundancia. Pues, en este tervtorio aparente
mente dejado de la’ mano de Dios, conoctan no menos
de 6) plantas alimenticiss y otras 28, de propiedades
narcétieas, etimulantes 0 medicinales. (Barrows). Un
Solo informante seminola identifica 250 especies y vax
Fiedades vegetales (Sturtevant). Se han contado 350
plantas conocidas por los indios hopi, y mas de 500
Por los navajos. El léxico botinico de tos. subanu
ue viven en cl sur de las Filipinas, sobrepasa de
til terminos. (Frake) el de los hanunéo se acerca a
Jos 20002 ‘Trabajando con un solo informante det
Gabén, Sillans ha publicado recientemente un reper-
torio etno-botinico de cerca de 8 000 términos, repar
tidos entre las lenguas o dlalectos de 12 0 15 tibus
adyacentes. (Walker y Sillans) Los resultados, inéditos
fen su mayor parte, que han objenido Marcel Griawle
J sus colaboradores en el Sudin, prometen ser igual
ate impresionant
‘extremada familiarizacién con el medio biolég
‘o, la apasionada atencién que le prestan, los conoci:
Imientos exactos a 4 vinculados, a menudo han im.
preionado 4 on inveigadres, por cuanto denotan
Zetitudes y preocupaciones que distinguen a los indige:
hhas de sus visitantes Blancos) Entre los indios tewa de
Nuevo México:
Se observan las diffenciss menvdas.. venen
nombres para Gesignaf>a. todas las especies de
tonne a en aha bin ee
If dierend vb y, entre
fos im individu que no hublee reeibido en-
frenamiento seria incapar de. diunguilas. En
Serdad, no babria ninguna dificultad en traduelr
tr tratado. Ge bordnica a la Tengua ceva. (Rob
bins, Harrington y Free Marvecd, pp. 9, 12)
2 Vea, infra, pps a8, #8LA GIENCIA DE LO CONCRETO 9
En un relato apenas novelado, E. Smith Bowen ha
narrado amenamente su confusién cuando, desde su
Tegeda a una tribu africana, quiso comenzar por apren-
der la lengua: a sus informantes les parecié lo mis
natural del mundo, en la etapa elemental de su enseBan-
‘m reunit un gran nimero de expecimencs botinieos
que iban nombrando a medida que se los presen
aban, pero que Ja investigadora era incapaz de iden-
tifiear, no tanto por raz6n de su naturalera exéticn,
como porque ella. jams se habia interesado en las
Fiquezas y Ia diversidad de) mundo vegetal, en tanto
aque Tor indigenas daban por supuesta tal curiosidad.
Serene nen eS
Serta genie
pea ere ees ra
See
Pelee
ir | gems ace,
eee
fugar en el que cals planta, siveste ©
So ge eeneyeat cheesy en tao en dee
Sido, ene que cas hombre, mujer 7 nie
Tonvee centensves de especex, Winguno de ellos
Geert jamie que soy incspar, aunque quewé-
Gale, ee aber tanto’ como on. (mith Bowen,
p22)
Totsmente dierent ct rien den sec
lisa, autor de wna monografiaen Ia que des
de 300 expeccs 0 varedads de. planias medicinal ©
tixieas, utliadas por algunas poblaciones de la Ro
desia del Norte:
» LA CIENCIA DE LO CONGRETO
Me ba sorprendido siempre la diligencia con
que lor habitentes de Bslovale y de la regione
Necnas acepaban, hablar de su remedion y de
ts venenor Les balagaba el interés de que daba
fucstras yo. por sat’ mésodos’ Conslderaban
Suesras convetsaciones como un iitereambio de
informaciones ence colegat 0 querian acer
galt desu suber? Coalquiera que bays podido
Serle rani de su acti, mune. se haclan de
togar. Me acuerdo de um condenado viejo lucha
sigue me tala bratadas de hojor seas, Ge rales
3, an par are to pion
2Qué era, Herbolario 0. brojo? ‘Nomea_pude pe
fear" en ste” mistrio, pero compruo” on
pesar que no poseeré munch su clench de Ia el
fologia atvicansy su habilided para cuidar a sos
Seals eee a ceretinioee ion
ys talentor habrin formedo. una” willsiana
Zombinaciim. (Gilges,p. 20)
Al citar un extracto de sus cuademas de viaje,
Conklin ha tratado de ilostrar este contacto {ntimo
‘entré el hombre y el medio, que el indigena impone
perpetusmente al eindlogo:
‘A, 0600 yijo una Havin tiger, Langha.
partinos de Parina en diveain de Biull.” En
‘rasa, Langa me pid. que cotara varias ban
dla de corcenas, de 10 por 80 cnt, del drbol anzpla
hii (Abii roe (Rob) Be pa
preenatnon de “ie ‘sangjucs. Frotande on
rs ner del cone smn oo 9
Ello ae. produds una ‘apace dents de
twlor tora que era un magnifico. repelente. En
camino, cerea de Aypud Langta te detuvo de
om, Randa btn bere
pe carrigo una pequesa
tawog hugan bulabaled WBuehner™ Uricfole R.IA CIENCIA DE 10 CONCRETO. wt
ey gue, sein ne ip, I sii de ceo.
Siapar’s un jabell’ Algunon intantes mis
Erde, y eaminabamos ripidamente, se detuvo de
peal since ara rane epee rae
terrese (fil de Gecuber ajo In vette
in que I cobra) amada djemiiyam (Epibo-
fun rome (@ Dan) an) lant empleds
fom combodir migiarence a tor inecro. para
{or de lot culivos En Binli, Langba se tomd el
tidedo. de no echar a perder lo que habla re
‘opido,urgando en su moral de pslma rena
ora sacar pu, eal apagada y tabehu (Nicotine
baci 1), que queria ofecer-a. la gente. de
Binli a cambio de otros ingredientes para mas-
far. Despues dena dizeuion acerca. de" 1os
‘meron respeciven de las varedades locales de
Betekpimienta(eiper belle L), Langba obtuvo
Berm par ctr cxtacan de Daa. Upomocs
ator {L) Poin) que pertenecian a dot format
sepettias diferent y tings con Tes nom.
Tres de hamutt tnaseang y Ramu fupaw.«- Yen
nado de cme, rare 29 ican
ferea de 75 cre. de largo, de cada vatiedad, que
‘Similan. on el exter del allo, yas env:
‘ino cadence ly grandes bo ra
aging wba caltvado (Misa sepientum com:
rea’ (Bio) ‘Teodro) pars que comervaen
fi fated hasta meta gaa a LanghaEn
amino, mattiamos tllos de tabu inane, ex
ice de cata de audit (Secharum fiinareon
Th) nor detuvimor uma ver para recoger algunas
bate meee de arene (ec ec 1),
otra ve, pata tecoger y comer los frutos, ie:
Tojntel rea veces, de algunos maton
Ge ucnay.(Antidensa brani (L) Spreng). Lie
fgamal'a Muri a medindon 41a tarde. lo
fitge de necro camine la mayor parte del
tiempo la hablamos pasado. dicutiendo acer
de tor cambioe en Ia Yegetacinoeutidos en le
Atma decenae anos (Conklin, 1, pp. 1317),ee
4y—_1AGHENGIA DE Lo concnsTo
Te saber, y lon medion Hingdisicos de que dispone,
sblexiende tambien a In morfologt La lengua tora
lien trminon dsintan para cada Pare, © ca, del
Serpo de lt aves ) de fox manifros (Henderson y
Hortigton, p 8). La deseipcion morfoligiea de lt
hoje de Ales ode plane, cuenta con coarenta
termine, y bay quince términcs disinon que comer
ponden a ba diferentes pares de una plate de tai
ara desir lan arta corstiutias y la prope
andes de ln vegetal los hanundo denen ms de 180
‘Ginnos, que convotan las categoria en foncén de
Jet cole enue ls plants *ydiseuten entre ellos
Ste de centre de arco gue ey dings
menudo coresponden « propcaadessignficativay,
thao medicine cote alimentcae™ (Conklin, Zp. 9.
To pioatibo, entre Ios tals @ han eontado iis de
(0 plantas can sombre, "no tenen solamente un o>
Dociniento fabuloo de sis plantas y de sus modos
de ulimcién; emplean mee 100 trminos para de
Sibir soe pares aspetos caracersican”” (R. B.
Fox pa)
Ts claro que wn saber desallado tan sistemética-
ment porte ter Tenn an lo ela
Prdctia.) Despues de haber su bs viquera y
Faecsién de lon conocimsenton eaolgins ybocnicos
‘Be los Indios del norete de los Estados Unidos y del
Canadé:" montagnais, naskapi, micmac, malecite, pe
robacot, el etndlogo que los ha estudiado mejor not
dice
ra de exper, por Jo que repecta a ls
contumbres de la cam mayer, de la ue provie
fen e alimento y las matsries primar dela in
Ginn lndigens.” No- oy sorprendente..- gue el
Caandor pondbico de Maine’ porn un mejor co
Socio pracico de lt costumbre y el rae
ter dal alee que el soblogo mis expeto. Pero
undo aprecimos en so justo valor el culdado
LA GIENCIA DE LO CONCRETO s
que_han puesto los indios ent observar y siste-
fatlzar lot hechos clentificos que hacen xeladiéa
on las formas inferiores de 1x vida animal, ha
Ge permitirsenos mostrar alguna sorpresa.
Toda a clase, de reptiles... no. ofrece nin-
agin interés econémleo para estos indios; no con-
mene cane de fat srpiente, nt de fos bata.
os, y no utilizan ninguna parte de sus, restos
salvo en casos muy raros, para Ja confeccién de
amuletos ‘contra Ta enfermedad ola brujerla.
(Speck, 1, p. 273)
¥ sin embargo, como lo ha mostrado Speck, los in-
ios del noreste han forjado una verdadera herpetolo-
‘32, con términos distintos para cada género de repeiles
'¥ otros mis reservados para las especies © las varie-
Gades.
‘Los productos naturales utilizades por lot pueblos
siberianos con fines medicinales ilustran, por su defi
sein precisa y el valor espectico que se les presta, el
cexidado, el ingenio, la atencién al detalle, 1a preocu-
paciin por las distinciones que han debide poner en
ica los olservadores y los teéricos en lat tocieda-
\des de esta clase: arafias y gusonos blancos que se
twagan itelmene y yakutos, para la esterilidad) : grasa
de escarabajo negro. (osetos, contra hidrofobia); cucara-
ha aplasiada, hiel de gallina (rusos de Surgut, contra
abcesos y hernias); gusanos rojos macerados.(yakutos,
contra el reumatismo); hiel de lucio (buriatos, enfer.
‘medades de los ojos); locha, cangrejo de rio, que se
teagan vivos (rusos. de Siberia, contra la epilepsia y
‘todas las enfermedades): toque con un pico de pljaro
‘arpintero, sangre de pijaro carpincero, insufladon na-
sal de polvo de pijaro earpintero momificado, huevo
fiagsdo del pijaro Aukcha (yakutos, contra el dolor
de dientes, contra las exeréfulss, las enfermedades de
Jos caballos y la tuberculosis, respectivamente) ; sangre44 LA GHENCIA DE. 10 CONCRETO
de perdi, suri de caballo (oirote, contra ls hernias
Y tts verugas); caldo de plehin (buratos, contra Ia
Xo); polte de pans trturadas del pljaro leg 0
ie es eer pers So)
inge dvecado colgado al culo” (ror del Alt, cor
tre a febne); intlacin de age. procedente de un
artimbano colgado del nido del pljaro remiz (iets,
fenfermedades de lot oft). Para’ mencionar solzmente
Slo buriston y limitandonos ak ow, Ia carne de te
pose see varleadesterapeories ditntan, ta sangre 5.
[Pram 8, ef cerebro 12, la bil 17, el pelo 2. Tam.
Wit del ox, los Kalar recogen los exerémentos dros
como pledra, ab finaliar la hibernaci, para cara el
tsteimiento. (Zeleni, pp. 470) En un estudio de
Tob se encontrark tn Fepetori.igualmente ¥ico eo:
THespondiente 2 una tibia africana.
\/ De tales ejemplos, que podriamos encontrar en todss
las regiones del mundo se podria infers de buen grado
due bas eopecies aimaes y segetalcs no s0n conocidas
is que porque son ‘utiles, sino que se las dedara
‘tiles 9 ineresantes porque primero se la conoce.
Be objetaré que tal clencia no puede ser eficar ms
‘que en el plano de lo prictico. Pero, da In casual
a de que su objetivo primero no es de orden préc
tico. Corresponde' a exigencias intelectuales ances, ©
fener, de satfncer necesidade
HI verdadero problema no estriba en saber si el con
taco de un pico de péjsro cixpintero cura las enfer
medades de los dienter, sino Ia de si es posible que
dade un cierto punto de vista el pico del. pajaro
caupintero ¥ el diemte del hombre *vayan juntos” (on
frutncia cuya {rmla terapeutica no constitaye mis
{que tna aplicaciim hipotética, entee otras) Y. por im
termedio de estor agrupamientos de cosis y de sexes,
Jntoducie un comienzo de orden en el universo; pu
TA CIENCIA DE LO CONCRETO 5
Ja dlasificacién, cualquiera que sea, posee una virtwd
propia por relacién a la inexistencia de Ia clasificacion.
Como ba escrito un tesrico modemo de la taxonomia:
{Los subiossoportan Ia duda y el fracaso porque
no ex queda mis remedio que hacerlo. Pero. el
‘desorden es lo nico que no_puieden ni deben to
icra. Todo el objeto de In clencia pura es evar
4's punto mis alto, mis conscient, la rede
Gibn. He exe’ modo tabticn de perebit, que ha
‘ometirado en un plano inferior jy verosiniimente
inconacient, con lox orfgenes manos le Ta vida.
En algunos’ casos, podremos preguntarnos sia
‘ise de orden que fr sido forjacls ex un cardter
‘objetivo de Tos fenémenos oun artifcio creado
por el sabio. ‘Este problema se_plantes sin ce
SS, on mri de conomia nial Sn
bargo, el postulado fundamental de la eiencia es
(ue ls natoralers misma esd ovdenads... Ea 30
puree tcénla, la cenca se reduce a un’ poner en
Srden,y..~ ai & Verdad que la sistemvia consiste
fen tal poner en orden, os teminos de sistem
ticay de iencia tedrca podin ser consderades
Snénimos. (Simpson, p. 8)
‘Ahora bien, esta exigencia de orden se encuentra en
Ja base del pensamiento que Mamamos primitive, pero
sélo por cuanto se encuentra en Ia base de todo pen-
‘samicnto: pues enfocindolas desde tas propiedatles co-
‘mimes ¢s Como encontramos acceso mAs ficilmente a
las formas de pensamiento que nos parecen muy ex:
trafas
sada cosa sagrada debe estar en su lugar", obser=
‘vaba con profundided un pensador indigena (Fletcher 2,
p. 84). Inclusive, podriamos decir que es esto lo que
Ia hace sagrada, puesto que al suprimirla, sunque sea
en al pensamiento, el orden entero del universo queda-
ia destruido; asi pues, contribuye a mantenerlo all6 LA GIENCIA DE LO CONGRETO
focupar el lugar que Te corresponde. Lor refinamientos
Gel ritual, que pueden parecer ociosos cuando se les
examina superficialmente, 0 desde fuera, 1 explican
por Ia preocupacién de lo que podriames lamar una
"mlero-perecuacién": no dejar escapar 2. ningin ser,
objeto 0 aspecto, a fin de asignarle un lugar en el seno
e-una dase. A este respecto, la ceremonia del hako, de
los indios pawnee, es particularmente reveladora ‘an
‘lo porque ha sido bien analizado. La invocacién que
acompafa al cruce de una corriente de agua se divide
fn varias pares, que corvesponden respectivamente al
‘momento en que los viajeros meten Jos ples en el agua,
fen que los desplazan, en que el agua recubre completa:
mente sus pies) Ia invocacién al viento separa los
‘momentos en que el frescor es percibido solamente so-
bre las partes mojadas del cuerpo, luego aqui, despues
alls, y por ultimo sobre toda Ia epidermis: “solamente
fentonces podemos avanzar con seguridad” (id., pp. 77-
78). Como lo expliea exactamente el informador, “de-
hemor dirigir wna ‘incantacién' expecial a cada coma
que encontramos, pues Tirawa, el espirita supremo, re-
fide en todas Ist cass, y todo, lo que encontrames.
mientras vames de camino, puede socorrernos... Se nos
ba ensefado a prestar atencién a todo lo que vemos”
(id, pp. 7881).
Esta preocupacién por Ja observacin total y de ine
ventario sittematico de las relaciones y de los vineulos
puede culminar, a veces, en resultados de buen aspecto
entfico: tal es el caso de los indios blackfoor, que
Giagnosticaban Ia proximidad de la primavera segin el
estado de desarrollo del feto de bisonte extraldo del
vientre de Ia hembra muerta en la eam. Sin embargo, no
podemos aislar estos aciertos de tantos otros. parallos
Ge Ia misma dlase que la. ciencia decara_ilusorios.
Pero ¢no seri que el pensamiento migico, esa “gigan-
tesca variacién sobre el tema del principio de causalie
LA CIENCIA DE LO CONCRETO
dad", declan Hubert y, Mauss (2, p. 61), se distingue
‘menos de Ia ciencia por Ia ignorancia 0 el desdén del
determinismo, que por una exigencia de determinismo
‘més imperiosa y mds intransigemte, y que la ciencia
puede, a todo lo mis, considerar irrazonable y preci
pltada?
Considerasa como stema de flotti:naturl
Ss Go ral een mp ental
fa degree cs rsltade dela beajei: qe opera
ee or a ero ae
Sone tome tm ull 6 fc ing
pa to cee
iasitermites 0 6 contrac uti meningitis cerebro:
sapien’ anda arsurttque eed
Sin os efemetnd mv augue cone
Uaiesirareeerserrat shearer
Bia del granero, dela enfermedad I brojeria
ee ee ee
ee
See ea
eae rc ae
poe eee
Seemte pe a gee Gerace at
nis cuaegeces etait cutrenuseces
spain Soweto ors
ies eeinie tax dare eet ase
Peete eee Taeecicr ae:
Ce ee eee
(OES wee eg
ny ser croaiied ca pinay ay coe
Sones wocelee (Ee Petcark Ts pp. 4189)
Por tanto, entre magia y cfencia Ia primera diferen-
cia serfs, desde este punto de vista, que wna postula un
determinismo global e integral, en tanto que Ia otra
‘opera distinguiendo niveles, algunos de los cuales, s0-
Tamente, admiten formas de determinismo que se con-
sideran inaplicables a otros niveles. Pero, 2no podrlamos8 LA GIENGIA DE Lo CONCRETO.
ir un poco més lejos y considerar al rigor y a la pre
sién de que dan testimonio el pensamiento magico y
las précticas rituales, como si tradujeran una aprehensién
inconsciente de la verdad del determinismo, en cuanto
‘modo de existencia de los fenémenos cientificos, de ma
neta que el determinismo seria globalmente sospechado
Yy pueito en juego antes de ser conceido y respetado? Los
Titos y las creenciss migicar se nos manifestarian en:
tonces como otras tantas expresiones de un acto de fe
fen una ciencia que estaba todavia por nacer.
Y lo que « mis: no solamente, por su naturaleza,
‘estas anticipaciones pueden 4 veces verse coronadas pot
cl éxito, sino que también pueden anticipar doblemen-
te; anticiparse ala ciencia misma, y a métodos o resulta
dos que Ia ciencia no asimilard’ sino en una etapa
avanada de'sa desarrollo, sie verdad que el hombre
se enfrent6 primero a lo mds dificil: In sstematizacion,
al nivel de lor datos sensibles, a los que la ciencia du
ante largo tiempo volvié la espalda y a los que co-
amienza ahora, solamente, a reintegrar en su perspectiva.
En Ia historia del pensamiento cientific, este efecto
de anticipacién #e produjo por Jo demés en varias oca-
siones: como lo ha mostrado Simpson (pp. 8489), con
ayula de un ejemplo tomado de la biologia del. si-
‘glo xix, resulta que —como Ia explicacién clentifi
Corresponde siempre al descubrimiento de un “ordena-
miento"— todo intento de este tipo, aun cuando csté
inspirado por principios que no sean ciemtitice, puede
encontrar verdaderos ordens
previsible sf se admite que, por definicién, el nimero
elas estructuras es finito: 1a “puesta. en estructura’
poveeria entonces una eficacia inerinseca, cualesquiera
{que sean los principios y los métodos en que se inspira,
La quimiea moderna reduce Ia variedad de los sabo-
ret y de lot perfumes a cinco elementos diversamemte
‘combinados: carbono, hidrégeno, oxigeno, szufre y ni:
LA GIENGIA DE LO CONCRETO »
tuégena Trarando cuadros de presencia y de ausencia,
‘stimando dosificaciones y umbrales,lega a darnes cuen-
ta y raén de diferencias y desemejanzas entre cualida-
des que antaio habria expulsado fuera de su dominio
por considerarlas “secundarias". Pero estos paralelos y
‘Stas distinciones no sorprenden al sentimiento esttico:
‘mis bien, 1o enriquecen y lo aclaran, fundando asocia-
cones que ya se sospechan, y de las cuales se comprende
Inejor por qué, ya en qué condiciones, un ejercicio asiduo
e Ia sola intuicién habria permitide descubritlas ya;
i, que el humo del tabaco pueda ser, para una Jégica
de Ia sensacién, Ia interseccién de dos grupos: uno de
Tos cuales comprenderia uambién la carne a la parrilla
y In tostada cortera del pan (que estin, como 4, com-
uestos de nitréyeno; y el otro, del que forman. parte
€1 queso, Ja cervern ¥ a hiel en raain de la presencia
del diacetilo). La ccrera silvestre, Ia canela, a yainilla
¥ 1 vino de jerez forman un grupo, no sélo sensible,
‘ino inteligible, porque todos contienen aldehidos, en
tanto que los olores semejantes del t€ del Canada
(wintergreen) de la lavanda y del plitano se expli-
can por la presencia de csteres. La intuicion por af
fola incitard a agrupar a la cebolla, el ajo, la col, el
nnabo, el rabano y 1a mostaza, aunque la botnica sepa-
re a las lilidceas de las cruciferas, Comprobando el
testimonio de Ia sensibilidad, la quimica demuestra que
cextas familias, extrafias entre si, se emparientan en otro
plano: todas oculian amfre (K., W). Un filésofo pri
mitivo o un poeta habria podido realizar estos reagru-
ppamientos intpirindase en consideraciones ajenas a la
quimica, 0 a cualquier otra forma de ciencia: la litera:
tra etnogrifica nos revela un cierto niimero de los
‘mismos, euyo valor empirico y estético no e menor.
Ahora bien, «50 no es, solamente, el efecto de un fre-
resi atociativo, que a veces habré de tener éxito por
‘un puro azar. Mejor inspirado que en el pasaje ante:se LA GIENCIA DE 10 concrEro
Giada en el qe nos oece eta interpretcsn,Simpion
pare ee tern ete pntcer
necead comin al ane a a cence y que, por con
a exoromi, gue eel poner em orden por
Troce um iinente alr eatin (oe
P-). Eotonce se vrprende uno menos de que el en-
Sao esto, abandonado.a sus solos fuerms, pueda
Seine ef corint' txtonocia"y-au sapee-a
Slgunos de sus resueado.
Sin ebago, no retortamoe 11s tes wlga (pot fo de
is uaailtte en a penpects ated enh Gos
Coloe), seg Ia coal a agin sera una fora tna y
fates de b Gene porque noe petted 8 ts
tedio de comprender el pensamento mdgic, spre
{enitsmos redusila 4 un'momento, o& 0ba capa de
In eyolucin tdenicn elena. Sombra que mt en
Engst cies, Ta mogla ey en on ido, com
‘ono 4, tan aabada y coherente, en 1s inmate
lida, como els aSlido 2 que solamente ha prece
fide Fi penramieno magico o em comien, un
‘stor, una inicio, Ia parte de un todo que todavia
fo ac ha realizado; forma un stema bien acaado
Intependeme, en relacion con et, de ee oto stems
aque convituird Ie Geni, avo la analogs formal gue
Ei cinprientay'qoe hace del primero tna waete de
fxpreson merits dea segunda Por ant, em et
de eponer magia y len, tela mejor ealocalt par
ISancne, com doe modes de fonociniento. desis
fn cuanto 2 los resladon tdricor y pric (puen,
desde ete punto de vita, cs verdad que a lencia lene
this éxito gue a magn, sungoe a maga prefigure ¢
TE lencla eh el sentido de que tambien sia acetal
fun secs), pete no por la cle de operiioner mex:
Els que anda soponen, y que diflren menor eo
vont a ln nares que ch funciona clase Se
fenomenos eles que espn.
LA GIENGIA DE LO CONCRETO 2
Estas relaciones se derivan, en efecto, de las condi
clones objetivas en que aparecieron el conocimiento
rmigico y el conocimiento clentifico. La historia de este
Ultimo ex demasiado breve como para que estemos bien
informados a su respecto; pero el que el origen de la
iencia moderna se remonte solamente a algunos siglo,
plantea un problema sobre el cual los etnSlogos no
han reflexionado suficientemente; el nombre de pare-
doja neolitica le convendria perfectamente.
Es en el neolitico cvando se confirma el dominio,
por parte del hombre, de las grandes artes de Ia civil
Zacién: cerdmica, tejido, agricultura y domesticacion de
animales, Nadie, hoy en diz, se atreveria a explicar es
tas inmensas conguistas mediante 1a acumulacién for
tite de una serie de hallargos realizados al azar, 0
revelados por el especeiculo pasivamente regisrado de
algunos fenémenos naturales
Cada una de estas ténicas supone siglos de ob-
servacién activa y metédiea, de hipévesis atrevidas y
ontroladas, para rechararlas 0 para comprobarlas por
fntermedio de experiencias incansablemente repetidas.
‘Observando la rapider con la que plantas originarias
dal Nuevo Murdo se aclimataron en las Filipinas, y
fueron adoptadas y nombradas por Jos indigenas que,
fen muchos casos, parecen haber redescubierto inclusive
‘sus usos medicinales,rigurosamente paralelos a los que
eran tradicionales en México, un bidlogo interpreta el
fendmevo de la manera siguiente:
‘2 Se ha tratado de saber Jo que passia’sl el mineral de
cobre se hublese mercado accidentalmente a. un fog6n:
fexperiencias maliples y variadas han establcido que no
pasaria nada. El procedimlento mds simple al que se haya
Tiegado ‘para obtener metal fundido cansice en calentar
intenetmente mmalaquita finamente pulverimda on una copa
de arella cubierta con una vaija Invertida. Este solo
resultado aprisiona ya al azar en el recinto del fogin de
‘igtn allarero eepecnlta em cerdmica vidriada (Coghlan)
Miia ni_-LAGIENGIA DE LO CONcRETO
Las plantas cuyas bojat 0 tallor tienen uns
borage cen comdnane os be Fit
nas conta lon paecimiento el emago. Toda
planta Imvoic ie gies amo. ark
fen cd rpidamente probada Porque la ma
Fla de ls poblacones de les Filipinas hacen cope
{anemente experiencia com lat plantas, aprenden
Hpitamente conocer en funetin de at
Fite de 0 propia calla, los empleos’ponbls
fe Tas plants Importadan’ (Rs Fox: pps 22
tis)
Para tranformar a yea silvestre en planta culiva
4a, una bos salvaje en animal domestica, hacer apa
reter en la na o en la ot propiedades alimenticas
© tecolégist que, ciginamente,staban_ por com
pleto auientes 0 apenas sie. podian scypechar pera
hacer de ura srclls inewable, de fal desmoronantien-
to, expusta a pulveriane o 2 raja, una vanja de
bro Slide y que no dejeccapar el agua (pero. alo a
‘ondicién de haber determinado, ence una multitud de
Imnteriasorginics © inogdnieas In que mejor se prev
tara a servir de depraante, ssf como <1 combustible
convenient, la temperatura y el tempo de coccén, el
srado de oxidacion fica); para elaborar as tecnias,
3 menudo prolongadss y complejs, que permiten cal
tivar sin tera, o bien in agua cmbinegrenos 0 races
‘Gries en alimenton 0 todavia mi, ution eta tox
dad para ta cay, la guerra, al ital, no. nor quepa la
‘menor duds de que se requriS una acttud mental ver
diaderamente cites, uta cutioddad aidua Y perpe
tuamente depiena, in gusto del conocimiento por el
placer de conocer, pues sma peje fscién tolamen-
te de las obseracionesy de es experiendis (de las que
65 neceario suponer que estnieroninmprads, primer
Y sobre todo, por Ia afin al saber) podian dar revul
{ads pricticos ¢ inmeditamente wimablen Y haga
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LA GIENCIA DELO CONCRETO 5
mos a.un lado a Ia metalurgia del bronce y cel hice,
Bde los meales preciows, y aun cl simple trabajo dl
cobre naiivo por el simple procedimiento del marl
‘que precedicron a Ia metalurgis en varios milenion y
todos los cuales exigen ya una competencia técnica muy
considerable. EI hombre del nealitco ode la proto.
Istria ex, pues el beredero de una larga taticiéa
dentiica: sin embargo, si el epirta que To inspird 2
ilo mismo que a todos sus antepassdos, hubiete sido
fexactamente el mismo que el-de los mpdernos, zcémo
ppodriamos comprender que se haya detemido, y que va-
ios milenioy de extancamiento se intecslen, como un
Gescarsilo, entre 12 revolucidn neolien y Ta dene
Contemporinca? La paradoja no admite més que una
folocon: la de que’ exten dow mod ditintn de
Pensamiento cientfce, que tanto el uno como el ou8
son funcién, no de etapas desiguales de desarrollo del
Sspiriat humano, sino de los dos nivelesextrtégion en
ue Ia naturalesa se deja atacar por el conocimiento
entific: uno de ellos aproximatvamence ajustado al
Ge Ta pereepcién y Ja imaginacion y el oto. despls
ado; como si las telacones necesriss, que constituyen
fl abjcto de toda ciencia —sea neoilica 0 moderns,
pudiesen alcanzarse por dos vias diferentes una de
fellas muy cercana a Ia intuicién sensible y Tn otra mis
alejada.
Toda casfcaciin es superior al caox, y aun_una
lasifcacin al nivel de lis propiedades senaibles c
tuna etapa hacia un orden racional. Si-se pide csitt
Grr una coleccidn de frutos varias en cuerpos relat
vamente mis pesados y relativamente mis lvians, serd
Jegitimo comenzar por separar las peas de las mai*
zanas, aunque Ta forma, el color y el ssbor earezcan a
‘elacion con el peso y el volumen: pero porque las mis
aguas, de entre las marzanas, son mis ticles de di
finguir de las menos gruesas, que cuando las manzanasSLA GENCIA DE Lo coNcRETO
Fermanecon mexeladas com fran de aepect dierent
Fite ejemplo non permite ver yu ques man al nivel Se
1a pevepeion ete, ts Gulla tee 80 veto.
For ovr pare, y aunque no haya conexin necenla
entee tas cuadades senile y In propiedaden existe
por lo menos una reacon de hecho eh gran ndmero
Ercan y ln genealiacon de eta rac, aunque
to ent fundads tu In tat, pode ser dora fro
‘expo una opercion fractaoes, tei y prictcamene
ter Tocas os juges ties no an andiente 9 amargox
7 ts vetproce eo ext cevdacers aim embargo Te
aturaton ead heeha de tal manera que es mis hur
tho, pa el pennento para la accion proceder
tomo st na equivalence que ste a sentiieo
sco coresponde ‘ambien a ura realidad objedre
Sin que nos correspond aqut el sverigiat por qué &
Probuble que pets datas de algin erdter note
bie forma, color olor, sbran al ebsereador To que
Perramos lamar un "derecho de prospu' el de
Plea cage abla sn cae ee
Piedad: igusimenee singeare, pero ocutas Admir
fc Ie rcacom etre os dor ten lin rion sen
Ir que un grano en forma de diente preserve contra
Tar mordedarar de serpent, que tm jogo amar tex
tin ‘spaiico pare lo tratornot ile, ec) lene
Inls valor prolonsiment, que Ia inifrencia'a toda
Coneién: puesta dsiicaion, aunque sea heteréita
Paver savapuanda Ta equem yle iversidad del
Tovenaroy al dendr qve"hay. que tener en cwenia
toto, facta la consid ona "meworls”
‘Ators bin es um hecho qoe mets de et fdole
potian conduct a deenninador rexltados que eran
Inapensbles para que cl hombre pudioe aiaar 8 Ia
Tule deide ot fiance, Lejs be ae como 4.6
tuo se pretend, la ora de una “ioncion bu
Bort que le vache In eps la rid, tn mos
LA CIENCIA DE LO CONGRETO s
4 los ritos ofrecen como su valor principal el preservar
fasta nuestra época, en forma residual, modos de ob-
servacién y de reflexién que estuvieron (j siguen estan
ddolo sin duda) exactamente adaptadot a descubrimien-
425 de un cierto tipo: los que autorizaba la naturaleza, 2
‘pantie de la organiza y de la explotacion reflexiva
dei mundo sensible en cuanto sensible. Esta ciencia de
Jo concrcto tenia que estar, por esencia, limitada a
‘ouos resultados que los prometidos a las ciencias exnc-
fas naturales, pero no fue menos cientifica, y sus resul-
fados no fueron menos realex. Obtenidor diez mil afios
antes que los otros, siguen siendo el sustrato de nuestra
civilizacion.
For lo demds, mfsine ene nosotros umd fafa de ae
fivided que, en el plan téenico, nor permite muy bien
fenctbir lo que pudo sr, en ci plano de la specs:
iin, na cienla'a Ia que prefers lamat “primera”
fit que primiva: & la que cominmente se dei
Gon el vriing de Bicolage™ En wu serido aniguny et
eb Briley we aplca af jgo de plot y de bila,
Bla cama ya be equiacén, pro siempre part coca on
ueiento ncideme: el de la pelo que rebels e
at perro que dvegn, el del caballo que apart’ de
In inea recta pata vitr un obseeilo. Y, en nuentton
Shs cotter = ol que wabsja con, dnow, ut
Tiraido medios denindor por compsricion con oi del
Iombre de are. Ahora bin, lo propio dl pentmlento
aio es expreirse con syila dem repertoro capa
* os ttre Pricer brielageybrclear en a ace
ii que les dal sor, bo tenes ain esc
EL bvtolar cs que srs sin plan prey con ned y
Pscrimicnssspatadx dt uncles ome
oe opera com Slee frm ano yo dss con
tragnencs de obraxcon roe ms come Ul te ee
fe La letra del eto aeliradsuicnemetee seee
see einen)yo TAGIENCIN DE 10 CoNcRETO
tompsiin es hetereiay que) aunque ampli-no
Stone estimates un tbingo, recs que ae
sti, enlqaea que se a tarea gue se asgne
no iene rintaoo del que ec manox De
ERs se motte como unt sere de briolage
inten lo que expla fat rlaconer que se otervan
entre lo doe.
Ziomo Al ricolage en el plano tec, 1 retlexém
snes puede alcear en of plano ttletal rel
dor branes e imprevisos, Reciprocament, « menudo
wyaaterendo el cricter mitopoto el brio
Secs en el plano del are, Hamada “bru” 0 “Inge
Boor cx ta-brgubecure famiia Ta gone de
Tarcto‘Cheral en las decracione de Georges Melis
ran eh fs innortalinds por Is Grandes husones de
‘ickens pero nmplridas sn dada peimero. por Ia ob
Actin det “caso” cabsrbane de wor Wenimick,
on su puene Tevaoo en misistra, scan qUe
Sckbe? a ar mueve, y so hvercclo de serduras y
feplnon grec a coal fv ocupantes podrian sostener
Tito, ee ter necro.
"ele Te pena shondat en Is compari, porque not
permite netec mejor a ly rencone rele ene Tos
por de conodmicno cnt soe mon in
“dat Tl bnicolowr reaps de jeatr on gran nizer9
4 trees divesicaig, pero, «diferencia del ingen
fo. ao aubordina ninguna Ge lia sa obtenion de
Ducts prims y de insrumentr coectido 7 bie
Sides 2 imide desu poyeco: univeno iste
ena esd cerrado la foyin de juego es empre
Inde aeglily con “lo que no tenga’, dace
Gn conjurto, cada instante fn, de tsrumentos
7 de mmriae, betcrélte adem, porque la compo
Taba dal conjino no eth en elacign eon el proyeso
del momestay i, pot Jo. Gems, con ang oye
to puncte, sno ue es of reledo contingent de
TACCIENGIA DE 10 CONCRETO 7
Tas ecasiones que se le hun ofrecdo de renovar
‘eniguecer sur exntencias, 0 de conservarlas con
esd de consrucciones y de destrueiones ante
El conjunto de lov medion del bricoleur v0 30
fponie defini, por lo tanto, por un proyecto o que
ix, por lo dems, como en el exo del ingeniero,
fexistencia de cantor conjuntor mtrumentales como
fgncon de proyectos, por lo menos en tora); +e deft
Se solamente por st insumentalidad, 0 dicho de otra
manera y pars ecplear el Lenguaje del Dricoew, por
ue lm clementos se recogen 0 conseran en razdn de
Principio de que “de ako habrin de servir’ Tales
Erementon por tant, estin pariculatizados ames:
forsufcience como para que ol bricoleur no tenga nec
tidad del equipo del saber de todo fs cuerpos admi-
iuratnos; pero no tanto como para que cada elemento
fea comirefido. aun empleo precio y detrminado.
{Gads clemento representa un conjunto de elacioney, +
Tn vez concrets y virtuales20n operadors, pero wilt
tables con vst 4 operaciones cislexuiera en el sen0
eum Spo,
‘Be ta misma-maners, lor clementor de la reflexion
imiien se situa siempre a mitad de camino entre pro
Yeoncepton Seria imposble extract los prime
for de Ia situaciin concrets en que aparecieron, en
Tanto que el rear a ls segundos engiia que el pen-
Sainiento pues, provisionsimentc, poncr sus proyee
fos entre perémesis. Ahora bien, existe un intermediario
fntte la tnagen yl concepio: ese sgoo, puesto que
Siempre tele puede definix, de la manera iniiada por
Saunurea propésito de esa categoria pertcular que for
tan los signos linge, como un lao entre una
imagen yun concepto, que, en ia unign ast reliada,
dlempeta ropectivamente ior papeles de signiticante y
a
ae ‘el signo es un ser concreto, pero———
* LA CIENCIA DE £0 CONCRETO
{Fie parece al concepto por su poder referencil: el tno
Yel otto no se relacionan exclusivamente a ellos mis-
moe, sino que pueden sustitir s algo que no son
clos. Sin embargo, el concepto posee a exe respecto
tuna capacidad iimitada, en tanto que la del signo es
limitada. La diferencia y 1a semejanra se pueden obser-
vvar bien en el ejemplo del bricolewr. Contemplémoslo
tn aceidn: exctado por aw proyecto, «primers ac
tddn prictica es sin embargo, retrospectiva: debe vol-
verse hacia un conjunto ye constituido, compuesto de
hherramientas y de materiales: acer, 0 rehacer, el ine
ventario; por kino y sobre todo, establecer con
tune suerte de didlogo, para Iiacer un repertorio, antes
de elegir entre ells de las respuestas posibles que el
fonjunto puede ofrecer al problema que él le plantes,
Todos estos objetos heterélitos que constituyen su te-
Soro! son intcrrogados por él para comprender To que
Gada uno de ellos. podria contribuyendo
de tal manera a definir un eonjunto por realizar, pero
Gue, Finalmente, no diferird del conjunto instrumental
iis que por la disposiciin interna de las partes) Este
‘euko de encino puede ser cufia para remediar In insu
ficiencia de un tablén de abeto o bien pedestal, 1o que
permitiria sacar a relucir el grano y el pulimento de la
Vieja madera, En un caso serd extensidn, en cl otro ma-
terla, Pero estas posibilidades estin siempre limitadas
por Ia historia particular de cada pieza, 0 por lo qui
Subsiste en ella de predeverminado, debido al uso or
ginal para el que fue concebida o por Ins adapraciones
Que bz sufrilo con vistas a otros empleos. Como las
tinidades constitutivas del mito,, cuyascombinaciones
posibles son limitadas por el hecho de que s¢ han t-
Iado en prétamo al lenguaje, en el que poseen ya un
entido que restringe la libertad de maniobra, los cle
“Tesoro de idest”, dicen admltablemente dé 1a ma:
sia Hubert y Mauss (2, p. 136)
LA CIENCIA DE LO CONCRETO 2
smentos que colecciona y utiliza el bricoleur estén “pre:
Constrchndoe” (LéviStrauss, 5, p. 85). Por otra parte,
Ja decision depende de la posibilidad de permutar otro
clemenco err Ja funcién vacante, hasta tal punto que
ada cleccién acarreard una teorganizacién completa de
Ta estructura, que nunca seré aquella que {ue vagumente
sonads, ni aquella otra que se pudiera haber preferida
con ver de ella.
‘Sin duds, el ingeniero interroga también, puesto que
4a existencia de un “interlocutor” es resultado, para él
de que sus mecios, su poder ¥ sus conocimientos, jams
Son ilimitados, y porque, en esta forma negativa, tro
pies con una resistencia con la que tiene, indispenss-
blemente, que sransigir. Se sentiria uno tentado a decir
‘que interroga al universo, en canto que el bricoleur se
Girige a una coleccién de residuos de obras humanas,
f decir, a un subconjunto de la cultura. Por fo de
fis, la toria de Ia informacién nos muestra cbmno es
posible, ya menudo stil, reducir as acciones del fsico
una suerte de diilogo con la naturalera, lo cual ate
fpuarla Ia distincién que tratamos de trazar. Sin em-
argo, subsistrd siempre una diferencia, aun si se tiene.
fen cuenta el hecho de que el sabio nunca disloga con
Ta naturaleza pura, sino con un determinado estado,
de la relacin entre 12 naturalem y Ia cultura, detini
ble por el periodo de la historia en el que vive, la
Givillzacién que ex la suya y los medios materiales de
‘que dispone, Al igual que et bricoleur, en presencia
de una tarea dada, no puede hacer lo que Je dé la
gana; también Gl tendr4 que comenzar por inventaiar
fun conjunto presecerminado de conocimientos teéri
€0s y pricticos, de medios téenieos, que restringen las
solucioncs posibles.
“Ask pus, la diferencia no e tan sbsoluta como nos
veriamos tentados a imaginirnosla; no obstante sigue
siendo real, en 1a medida en que, por relacién a esasLA CIENCIA DE LO CONCRETO:
onstriciones que resumen un estado de civilizcién, el
ingenicro trata siempre de abrirse un pataje y de si
tare més alié, en tanto que el bricoleur, de grado 0
por fuerr, permanece més acd, lo que es otra manera
de decir que el primero opera por medio de conceptos
y dl segundo por medio de signos. Sobre el eje de la
posicion entre naturaleza y cultura, los conjuntos de
{que se valen estin perceptiblemente dislocadas. En efec-
0, por lo menos una de las maneras en que el signo
© opone al concepto consiste en que el segundo quie-
re ser integralmente transparente a la realidad, en tanto
ue el primero acepia, y aun exige, que un determinade
fasgo de humanidad esté incorporado a esta realidad.
Segin la expresién vigorost y dificilmente tcaducble
de Peince: It addresses somebody.
‘Asi pues, podria decirse que tanto el sabio como el
bricolewr estan al acecho de mensajam pero, para ol bri-
olewr, se trata de mensajes en cierta manera pretras-
Imitides y a los cuales colecciona: como esos ebdigos
comerciales que, condensando como condensan Ta expe-
riencia pasada de la profesién permiten acer frente,
econémicamente, a todas las situaciones nuevas (a con
dicién, sin embargo, de que pertenercan ala misma
clase que las antiguas); mientras que el hombre de
‘iencia, y2 sea ingeniero, ya sea fsico, cuenta siempre
el olro mensaje, que podria serle arrancada un
interlocutor, a pesar de su resistencia a declarar acerca
de cuetiones cuyas respuestas no han sido repetidas de
lantemano, De tal manera, el toncepto se nos manifiesta
‘como el que realex In apertura del conjunto con el que
se trabaja, y la significacién como Ta que realiza su te-
forganizacién: no la extiende nila renueva, y se limita
a obtener el grupo de sus transformaciones
‘La imagen no puode ser idea, pero puede desempe
far el papel de signo, 0, mis exactamente, cohabitar
on a idea en un signo; si la idea no se encuentra
IA CIENCIA DELO CONCRETO 4
todavia alli, reapetar su lugar futuro y hacer aparceer,
eatvamente, tus contornos. Ta imagen exh tijd,
figeda de manera unwoea al acto de concienda que Ia
feompafn, pero el sign In imagen que se ha tornado
Significame! si carecen todavia de comprehersdn, cs
‘ein de relaconessimulténest y tebieamenteiimita
as con ottor sees del mismo tipo lo que cx el priv
legio det concepto~ son ya permttabie, es decir, pueden
“mantener relsiones sicedvas con otvoe sees, sunque
fn mimero Finitalo,y, como se ha visto, @ condicén
4 formar siempre un sbtema en el que Ura modifi
‘eid que afecte 2 un elemento intrearé antomiticn
‘mente todor los dems: en ete plan, ia extersin y
Tn comprehensin de los Wgicor no existen. como. dot
Seeecter duties Y. chaplenettatioy tino crn Gra
eslidad soldara. De tal manera, se comprende que el
Densamiento mitico, aunque ese envicado em lt ii
ene, pueda ser geteraliador, y por tant. cenifico:
fambien-et opera a foerm de anslogin y de paralelos,
sun si como en cl caso del bricologr, sim ceaciones se
redveen siempre a un ordenamiento. nuevo de clemen-
fos coya natursera no se. ve maifieads segin que
figuren en ef conjumo instrumental en Ts dixporcin
final (que, slvo por lo que toea a la disposicign in:
terna,forman siempre el mismo objeto): we dita que
fos universes mitolovias tin detinadon a ser desman
felados apenin formed, para qe micron univeros
razcan de sus fragmentos". (Boas 1, p. 18). Esta pro
fonda observaciin se olvida de tener’ en cuenta, sin
embargo, que, en esta inetsante reconstruccién con ayu
Gls Us nia sterile, ton leaps fine antigen
Jos que habrin de devempetar el pepel de medio le
gnfiados se tcean en sgnificanes, a la inven
Tata (Grmbla, que podria servir de definiciin para
Ghbricolege ros cxplict que, para Ia relletin mite, In
toralidad elon medion disponibles debe ser ambien4: LAGIENGIA DE 10 CONCRETO
implictamenteinventatinda © concebids,pare'que pac
atdefinine un reultado que ser sempre una compo-
nena enwe la stractor del conjunto instrumental.
In uel proyecto Una ver realeadoy exe sltimo estas
por tame, inevablemente @ilocado por rlaion a ln
[Rend incl (por lo demi, simple eaquema), eee
to que los errata han nombrado felmente “szat
cbjstvo". Bevo hay mas: la poesia del briclage le
iene ambi, y some todo, devqve no s Kimita a rex
Tro ejseuer
tom to hemes mostedo Ya, sino también por medio
de tas es” contando, por intermetio de Te eleccién
fe efectia entre. ponbes limiadon,elcardeter ta
ia desu ator. Sir lograr totalmente su proyecto,
ULbricolew pone siempre algo de él mimo,
Dest ete punuo de vista también, la teesin mi
tice se non maniietn coma una forma intelectual. del
Brizolage, La cencin, pr enero, ha consruido 3po-
Sendore en is distingon de lo contingente y elo
Tettorion que. tambien Is del acnterimiento y de
In eqwuctors, Las cusidades que, nel momento de a
cimnt, hal suas evn preiumente aul us
Tomo no formarom parte en manera sigura te la expe
ffencla vida, eran exteriors 3, por as deco, exe
fara fos acontecimientow exe cy el sentido de la noc
Te Guaidades primeras. Ahora bien Io propio del. pen-
aoe een dat bcos 4 plano pe
comic en caborar conjuntos eauctrados, 10
Sectamente con otros confunton esructurados® sino
lindo resduoy restos de xcontecnienton ode
nd andy dria wn Ingles 0, en putol sobre y
£1 pentamento mftico esific conjuntot estructurados
por medio de un conjunto eatructurade, que et el lene
fusjer pero no se apadera al nivel de la estructura: con
Gruye sor palacor eoldgicos con los cicombros de un
ntiguo deere social
TA GIENGIA DE LO CONGRETO s
| gronos,testimonios {sles de la historia de tin individvo
de una sociedad. En un sentido, por lo tanto, la re
Jasin entre la dincronia y la sincronia ha sido inverti-
| da: el persamiento mitico, ese bricoleur, elabora es
‘eracturas disponiendo acontecimientos, 0 mis bien
‘Fesiduos de acontecimicntos* en tanto que la ciencia,
en morcha” por el simple hecho de que sc instaura,
‘ema, en forma de acontecimientos, sus medios. y sus
(Fetuliados, gracias a las extructuras que fabrica sin tre-
ua y que son sus hipétesis y sus ceoris. Pero no nos
1 novae trata de dos etapas, 0 de do fases, de
He evolucidn del saber, pues las dos acciones son: igual»
‘mente vélidas. La fica y 1a quimica aspiran ya a tor-
cnarse de mucvo cualitativas,¢s decir, a explicar también
fas cualidades sagundas que, una ver que sean explica-
das, volyerdn a convertine en medios de explicaciéns y
uizls la biologin marca el paso mientras espera que 52
ealice esto, pata poder, 2 su vez, explicar Ia vida. Por
Su parte, el pensamiento mitico no es solamente prisio-
fnero de acomtecimientos y de experiencias que dispone
J redispone incansablemente para descubrirles un sen-
do: es tambien liberador, por la. protesta que eleva
ceontra el nosentide, con el eval la'ciencia se habia
esignado, al principio, a wransigit.
erie aie
‘Las consideraciones anteriores, en varias ocasiones, han
rondo el problema del arte, y quizis podriamos indi-
‘ear brevemente cémo, en esta perspectiva, el arte se
fnserta, a mitad de camino, entre-el_conocimiento
Gentifico y el pensimicnto mitico 0 migico; pues todo
€l mundo sabe que el artista, a la ver, tiene algo det
Sabio y del bricolewr: con medios artesanales, confee~
‘ion Um objeto material que es al mismo tiempo ob-
jeto de conocimiento, Hemos distinguido al sabio del
© Pricalage opera también con cualidades "segunda":
vlase el término expafol “de segunda mano”, de ocasin,46 TAGIENGIA DE Lo CONCRETO
Iricoleur por as funciones inverts que, en ct orden
Invtramental y fina, asgnan al scontecimiento 7-2 la
tstructara, tno de eli haciendo scontecimientos (are
iar el mundo) por medio de oxructaras'y el otro
fsuructurs. por medio. de acontecimientos (6rmug
{erecta en esta form jane, pero que nuciro and
Tir debe permite matin). Contemplemor ahora ite
retro de mujer pinto por Close, preganttmonas
por las razon ce In profendsima enociin etéien
he enscta inexplcablemente, al parce, Hd reprodve
ga ilo por bilo y en un cxcrupslos trompetoe!
de una gorguera de’ encaje (Cin)
TH ejemplo de Clovet no ct escgido al ar: puss
es abidg que le gumtaba.pintar 3 tamafo menor que
1 patorly sus cadror eon, pr, como tos jrdines
faponese, lor auton em minintra.y los barcor en as
Berlin, lo que en lengunje de bricoteur se lama “m0-
elo veducido". Abora bien, se planes Ia cosiém de
Shersi el modelo reducdo, que et tambien Ia "obra
Inert” del compar, no ofece siempre y por do-
{Ger el tipo mimo de Ta obra de arte” Pues parece
Seitjue todo modelo reduido tiene una vocaién ete
fica hide dénde saan eta virtud comtamte, #1 n0
fu dimensiones pins 0. la invers, que Ta ine
tensa tayoria de la obras de arte son también mo-
{clos redudon. Podria-ceense que este carder obe-
dece, en primer lugar, 2 uns preocupaciim por econo-
Inver. materiaks y medion, ¢ ivocsr en apoyo de oa
Interpretacén obris iniscustemente sti, aunque
tmonumentales Es precvo entenderse acerca de las de
finitones ls pinturas dela Capilla Sista sun
Imodelo reduido, 2 despecho desis dimensiones ime
ponents puesto que el tema que iustran es el del
Fade los Gempos! Lo mismo ocurce con el xinboi
tno camico de los monuments religiont. Por otra
ane, pooriamos preguntarnon 3 <1 ceca extéien di
LA CIENCIA DE LO CONGRETO s
5, de una extatua ecuestre de tamatio mis grande
Gue el natural, proviene de que agranda aun hombre
basta sleansar lis dimensiones de un pefion, y no de
gue reduce lo que e primero, de lejos, percibido come
fun pefién, a las proporciones de un hombre. Por ul
timo, aun el “tamafio natural” supone al modelo re-
cide, puesto que Ia transposicion grifica 0. plistica
spore siempre la renuncia a determinadas dimensio-
hes del objeto; en pinturs, el volumen; los colores, los
lores, Ins impresiones tictles hasta en la escultura:
4, en los dos casos, In dimensién temporal, puesto que
Gi todo de la obra figurada es aprehendido en el ins
Entonces, zqué virtud acompaia. a la reduecién, ya
sea de excala 0 yx sex que afecte a las propiedades? AL
parecer, es resultado de una suerte de inversién del
del conocimiento: para conocer al objeto real
1 su totalidad, propendemos siempre @ obrar a partir
de sus partes, La resistencia que nos opone se supera
ividiéndola. La reduecién de escala invierte sta. si
fmuacidn: siendo més pequefia, Ia totalidad det objeto
hhos parece menes formidable: por el hecho de haber
sido cuantitaivamente disminuida, nos parece que se
hha simplificado cualitativamente. para decirlo con
mds exactitud, esta transposicién cuantitativa acrecienta
¥ diversifica nuestro potier sobre un homélogo de la
com; a través de @, esta tltima puede ser agarrads,
sopesada en Ia mano, aprehendida de una sola mirada,
La mufieca de Ia nifia no 6 un adversario, un rival
(6 siquiera un interlocutor: en ella y por ella, Ia perso-
nna se trueca en sujeto. A la inversa de Io que ocurre
‘iando tratamos de conocer a una cosa o a un'ser-de
talla real, en el modelo reducido el conocimiento det
todo precede al de Tas partes. Y aun si esto es una
ilusién, Ia raz6n del procedimiento es la de crear o la
de mantener esta ilvsién, que satisface a la inteligen-® LA CIENCIA DE 10 CONCRFTO
cia y-a Is eensibilidad com um placer que, fandindonos
solamente en esto, puede Mamarse ya. estético.
asia ahora no hemos considerado mis que In escar
Inj In cual, como seabames de ver, supone una relscién
dlaléctica entre magnitud —es decir, cantidad— y.cua-
lidad. Pero el modelo reducido posee un atributo sr
plementario: es algo construido, man mede , lo que
Smt echo mun Porno 20 ena ane
proyeccidn, un homélogo pasivo del objeto. Conscituye
tuna verdadera experiencia sobre el objeto. Ahora bien,
fen Ia medida en que el modelo es artificial, se torna
posible comprender imo esti hecho, y esta aprehen
sién del medo de fabricseién aporta una dimensién
suplementaria a su ser; ademis ~lo hemos visto @ pro-
pita del Bricolage, pero el ejemplo de las “maneras”
‘de los pintores, nos muestra que esto es verdad tam
bbign del arte— el problema lleva consigo siempre varias
soluciones. Como la eleccién de una solucién,acarrea
‘una modificacion del resultado a que nos babria com- +
ucido otra solucién es, por lo tanto, el cuatro general
dde estas permutaciones cl que se encuentra virtalmen-
te dado, al mismo tiempo que la solucién particular
ofrecida a Ja. mirada del espectador, transformado por
esto —aun sin que 4 se dé cuenta en agente, En
vireud de Ja sola contemplacién, el espectador, si nos
std permitido decirlo, entra en posesién de otras mo:
dalidades posibles de la misma obra, y de las cuales se
siente confusamente el creador con mayor raz6n que
‘el propio creador, que las ha abandonado al exeluiras
ide 44 creacién; y estar modalidades forman otras tantas
erspectivas suplementarias, abiertss sobre Ia obra ac
tualizada, es deci, realizada. O dicho de otra manera,
Ja virtud inurinseea del modelo reducido es 1a de que
‘compensa la renuncia a Jas dimensiones sensibles con
Ia adquisicién de dimensiones inteligibles,
‘Retornemos ahora a la gorguera de encaje, en el cus
LA GIENGIA DE LO CONCRETO ®
ro de Clouct. Todo lo que acabamos de decir se le
splic, pats, para representala en forma de proveceién
fm tm expacio de propiedades en el que las dimensio-
Set semables son ‘nds pequetay, 7. meen’ mumeroeas
gue las del objeto, ha sido necesario obrar de mancra
fiméirica ¢ inverse a como lo hubiere hecho Is. cien
bse hubiese propucsto, pucr tal ex su funcién, pro.
ucir ~en ver de reproducir— no slo un nuevo. punto
ge eneaje en Ingar de um punto ya eonocida, sino tam
bien un verdadero encaje en vex de un encaje figurado,
En efecto, In ciencia fhubisse trabajado en cicala real,
‘pero por intermedio de Ia invencién de un oficio, en
fnto que el arte wabaja 2 escala reducide, teniendo
‘como fin una imagen homéloga del objet. La. primera
“Scividad pervenece lorem de 14 metonimia, susti-
faye 2 un ser por otro ser, @ un efecto por au causa,
fn taito que la segunda pertenece al orden de Ia me:
‘ors.
YY to no cs todo, Pues, si es verdad que la relaciin
des priocidad entre extractura y acontecimiento se amr
tifiena de manera simetrica e inversa en la ciencia
fn €l bricolagenes havo que, desde este punto de vit
fembién, clare ocupa’ una posicién intermediaria.
‘Aun si lo figuracién de una gorguera de encnje en
‘modelo reducido supone, como lo hemos mostrado, wn
conodimiento interno de su morfologia y de su téenica
e fabricscién (y. si se hubiese tratado de uma repre-
fentacién homana © aniwal, habriames dichor de la
fnatomia y de las posturss), no ae reduce a un dia-
Pam os una limina de tecnologia: realiza la sintess
de citar propicdades intrinsecas y de las que provic:
fren de un contexto espacial y temporal. #1 resultado
final ex Ia. gorgucra de encaje, tal cual os absolute.
mente, pero también tal como, en el mismo insane
te, su apariencia se ve afectada por la perspectiva
fen que se presents, que pone en evidencia algunasa |LA CIENCIA DE LO CONCRETO.
partes y oculta otras, cuya existencia continia, por
Tanto, influyendo en el resto: por el contraste entre
su blancura y los colores de las otras piezas del vestido,
Gl rellejo del cuello nacarado que rodea y el del cielo
@e un diay de un momento; tl, también, porque
significa como adorno banal o de aparato, llevado, nue
vo 0 usado, recientemente planchado 0 arrugato, por
tuna ‘mujer del pueblo © por una reina, de la que Ia
fisonomia confirma, invalida o califica su condicion, en
tun ‘medio, una sociedad, una regién del mundo, un
periodo de Ia historia... A mitad de camino siempre
entre el esquema y la anécdota, el genio del pintor
omiste en unir un conocimienio interno y extern,
tun ser yun devenir; en producir, con su pincel, un
‘objeto que no existe, como objeto y que, sin embargo,
Sabe crearlo sobre #0 tela: sinters exactamente equil-
brada de una o de varias estructuras artificiales y max
turales y de sino o de varios acontecimientos, naws
tales y sociales, La emocién estéica proviene de esta
unig’ instituida en el. seno de una cosa creat por
fl hombre, y por tanta, también, virtualmente por el
fspectador, que descubre su posibilidad a través de Ia
fobra de arte, entre el orden de la estructura y el orden
‘del aconteciniento,
Ente andliss incita a hacer varias observaciones. En
primer lugar, permite comprender mejor por qué los
faitos se nos pretentan simultineamente, como sistemas
Ge relaciones sbstractas y como objetor de contemplar
tin extéica: en efecto, el acto creador que engendra
fal mito es simétrico e inverso a aquel que encontramos
en el origen de la obra de arte, En cste-tiltimo-
mento de Ja estructura en los dos casos. Sin embargo,
ninguna forma dle arte mercceria este nombre si
ddejine captar en sv totalidad por las contingencias ex:
twinsecas, ya sean la de la oeasién o la de Ia destina-
cin; pues la obra deacenderia.entoneces al rango dé
icono."(euplementario del modelo) 0 de instrumento
(omplementario de la'materia trabajada). Aun el arte
‘mas sabio, si not conmueve, no sleanza este resulta-
ido mis que a condiciin de detener a tiempo esta disipa-
‘ign de la contingencia en provecho del pretexto, y de
incorporatla a In bra, confiriéndole a esta tltima la
lignidad de un objeto absoluto. Silos artes arcaicos,
log artes primitivos, y los periodes “primitives” de Tos
artes sabios, son los tinicos que no envejecen, lo deben,
2 esta consigracin del accidemte al servicio de la eje-
‘cucién, por tanto al empleo, que tran de hacer inte-
fal, del dato bruto como materia empiriea de una sig:
acto?
1 Prosiguicndo este anlisis, podriamos defini la pinnura
tno figurativa por dos earacteres. Uno, que tiene en comin
fen In pintura. de caballete, consiste en un rechazo
Ge la centingencia de destinadn: el coadro no esta
pra un empleo particular, EL oto caracter, propio de
pintura no figurativa, consist en una explotacon me’
ica de ls contingencis “de ejecueion, que se. pretend
fonvertir em el pretexto o en la gcason externa del cuatro
1 pinara no figurative opta “manera” 2 guia de“
pretende dar una represntacién conereta de as
Condiciones formales de toda pintura. De esto resulta, px
radojcaments, que Ia pintura no figurativa no crea, como
To cree, obray tan reales —si no mds come los objetor
et" mundo fisico, sno imitaciones reallstas de modelos
Inerintenter. Ex na creel de pintura académica, en 12
(que cada anita te afana en representar ls manera como,
fjecutara ous euadros si, por casalidad, lor pintae.
LA GIENGIA DE LO CONCRETO Pa
“Por iilkimo, hay qye afiadir que el equilibrio entre
“eezuctura y acomtedimiento, necesidad y contingencia,
Geerioridad y exterioridad, es un equilibrio. precario,
Genstantemente amenazado por las tracciones que ©
fen un gentida o en el otto, segim las fluctua:
“Gones de la moda, del estilo y de las condiciones socia-
a generales, Desde este punto de vista, el impresior
‘pismo y el cubismo se nos aparecem menos como dos
‘Gzapas sucerivas del desarvollo de Ia pintura que como
Gos empresas cémplices, aunque no hayan nacido. en
tn unt, chron conven prt Pos
Jongar, mediante deformaciones complementarias, un
‘gordo de expresién cuya existencia misma (hoy nos dar
‘os cuenta de ¢sto mejor) estaba gravemente amena-
Gada. La boga intermitence de los “collages”, macida
Gn el momento en que el artesanado expiraba, podria
po ser, por su parte, mis que una transposicion det
Bricolage al terseno de los fines contemplativos. Por
Gltimo, el hincapié- hecho en_el aspecto acontecimental
puede también disociane segiin los momentos, subrax
Fondo més, a expensas de la estructura (entiéndase: la
Enructura de igual nivel, pues no esté excluido que
el aspecto estructural se restablezca en otra parte y en
fun nuevo plano), unas veces, [a temporalidad social
feomo a fines del siglo xv con Greuze, 0 con el rex
Jismo socialista), y otras veces la temporslidad natu.
‘al, y aun mettoroldgica (en el impresionismo) -
Si, en el plano expeculativo, el pensamiento mitico no
‘earece de analogia con el bricolage en el plano. précti+
fo, y si la creacién artistica se coloca a igual distancia
Entre estas dos formas de actividad y Ia cencta, el juego
¥ el tito oftecen entre si relaciones del mismo tipo.
Todo juego se detine por el conjunto de sus reglas,
que Tiacen posible wn nimero pricticemente ilimitado
ide partidos; pero el rito, que también se “juega”, ses6 LA GIENGIA DE LO CONCRETO
emeja més bien’ a una partida privilegiads, excopida
YJ consereads de entre tolas las posibles porque s6lo
Ena se obtiene,en ‘um determinado tipo de equilibrio
fentre los dos campos La transposicgn es féemente
Yerficble en el cao de los gabukwgama de Noeva
Guinea, que han aprendido a jugar furbol, pero que
joenan, varios die seguidos,eantos partidos como sean
Iecesrios para que se equilbren exactamente los par
tides perdidos 7 ganador por cada bando (Read,
P- 429}, lo cual ex tater a/un juego como un rito.
Se puede decir otro tanto de lov juegos = que se
entregaban los indiot fox, en ocasién de las cetemonias
de ndopciio cay fin era sustituir un pariente muerto
por otto vivo, y de permitir, ai, Ia partida definitive
Eel alma del difunto® Lot rtos funerarios de lox fox,
fn clecto, parecen estar inpirados por la gran preocw-
pecién de Geshacere de lon muertos, y de impedir que
Bios no se venguen en lor vivos de la amargura y de
lon pesnes que sienten por no encontrare ya entre
lon La filsotiaindigens toma, pues, dedididamente,
fl partido de los vivos! “la muere es dura; més duro
todaviaves pes”.
EI origen de Ia muerte se remonta a Ia destruccn,
por las potencae sobrenaturales, del mis joven de dot
Frermanos miticos que detempenan el papel de heroes
faulturales entre todas las trbus algonguinas, Pero ne
fra todavia delinitiva: fue el mayor el que la convirtid
fn definitiva al recbazsr,.no obstante su pesar, Ia pe
tien del fantaama, que queria volver & ocupar su
Tgar entre los vivos. Segin este ejemplo, los hombres
eben tare mes até Jos muss oe voy
rin comprender a &tos que no han perdido nada
Thode, pues retbirin regularmente offendas de tabaco
J de alimentos, en cambio, 4 cspera de ellos que, 2
eulo de compensacién de exta muerte, cuya realidad
8 Vease, infra, ps 286
LA CIENCIA DE LO CONCRETO 7
a los vivos, y del pesar que les causan_por
-deceso,¢llos les garanticen una larga existencia, ves
'y algo que comer: “fen lo sucesivo, son los muer-
Jos que traen Ja abundancia, comenta el informador
na, “ellos {los indios) deben engatusarlos (coax
3) com este fin". (Michelson, 1, pp. 359407).
“Ahorn bien, los ritos de adopeion, que son indis-
‘pensables para decidir al alma del muerto a que se
‘Saya definitivamente al més alla, donde habra de des:
‘exxpefiar su papel de espiritw protector, van acompa:
Gados normalmente de competencias deportivas, de jue-
‘ger de destrera ode azar, entre bandos constituidos
‘fonforme a una division ad hoc en dos mitades: Tokan,
“Ge um lado y Kicko, del otro; y se dice expresamente,
‘en varias ocasiones, que cl jueze opone a los vivos y
‘$ los muertos, como si, antes dle desembarazarse deti-
“nitivamente de él, los vives ofreciesen al difunto el
‘eensvelo de un iiltimo partido. Pero, de esta asimetsia
de principio entre los dos campos, se desprende auto-
‘iiticamente que el desenlace esta determinado de an-
He aqut toque psaba cuando jugaban a la
2. Bel hombre’ (el difuno) por quien se
tokanagi ganabar rida. Los Kickoagi no.
dian ginar. Fiesta tenfs lugar por una
mje kieko, Tos Kickesgi ganaban, y eran los
{oranagi ler’ que no’ pout ganar’ Mtichelson,
as)
¥en efecto, geudl es In realidad? Fn el gran juego
Dioldgico y social que se desarrolla perpetuamente en-
‘te los vives 7 los muertos, et claro que los tinicos que
‘ganan son los primeros. Pero —y toda ki mitologta
‘norteamericana lo confirma de una manera simbsliea
(que innumerables mitos pintan como real), ganar ena LA CIENCIA DE LO CONGRETO
el juego es “matar” al adversario. AL preserbir sem
pre el triunfo del bando de Jos muertos, se les daa
%tos, por tanto, Ia ilusién de que son los verdaderos
ivientes, y que sus adversarios estin muertos puesto
‘que ls han “matado". So capa de jugar con los mucr-
fo, se lor engaia y se los ata. La estructura formal
de lo que, a primera vista, podrfa parecer que era una
‘competencia deportiva, es en todos sus detalles seme
jane a la de un puro rival, tal como. el mitawit-o
1 midewiwim de las mismas poblaciones algonquinas,
fen el que los nebfitos se hacen matar simbélicamente
por lor muertos cuyo papel desemperiun los iniciados
E fin de obtener wn suplemento de vida veal a costs
de una muerte simulada. En los dos casos, la muerte
‘es wsurpada, pero sélo para ser engaiiada.
Entonces, el juego se nos. manifiesta. como. disytne
tivo: culmina en In ereacion de una. separaci6n, dife-
rencial entre jugadores individuales o entre bandos,
{que al principio nada designaba como desiguales: Sin
‘embargo, al fin de Ta partida, se distinguiran en gana-
ores y perdedores. De manera siméarica inversa,
ritual es conjuntivo, pes instituye una unién (podria:
fos decir aqui que wna comunién) ©, en todo" caso
tuna relacién organica, entre dos grupos (que xe com
Tunden, en el limite, no con el personaje del oficiam
te, y el otro con In colectividad de los fiele), y que
fstaban disociados al comienzo. En el ciso de} juego
Ta simetsinesté, por Jo tanto, preordenada; y es este
tural, puesto que se deriva del principio de que las
reglas son las mitmas para los dos campos. La aslme-
tia, es engendrads; se deriva inevitablemente de ta
ontingencia de los acontecimientos, depensian.éstos de
a intencidn, del azar, 0 del talento, En el caso. det
lanl 6 1o/conuarl: se eabece ns viet pe
concebida y postilada entre profano y sagrado, fieles
Y oficiante, mucrior y_vivos, sniciados to iniciados,
LA GIENCIA DE LO CONCRETO »
'y el “juego! consiste en hacer pasar @ todos los
pantes al lado del bando ganador, por medio
fscontecimientos cuya naturaleza y ordenamiento tie
fun cardeter verdaderamente estructural. Como la
ca aunque aqui, todavia, ya sea en el plano re.
_ Ja sea en el plano prictco), el juego produce
jentos a partir de una estructura: se com-
fentonces, que Ios juezos de competencia prov
‘nuestras sociedades industriales; en tanto que
ritos y los mitos, a la manora del bricolage (que ev
tmismas rociedacies industiales. ya no toleran, sino
hobby 0 pasitiempo), deseomponen y recom:
‘anjuntos acontecimentales (en el plane pst
‘guico, socioshiswérico © técnica) y se valen como de
tantas.piezas indestructibles, con vistas a ordena-
extructurales que habrin de hacer Ins veces,
“gkternadamente, de fines y de medios.Il, LA LOGICA DE:LAS GLASIFICACIONES
TOTEMICAS
Sin BUDA, hay algo paradbjico et 12 idea de una Iogich
‘enyos términos consisten en sobras y pedazos, vestigios
de proceios psicoldgicos o hiswricos y, en cuanto tales,
desprovistos de mecesidad. Quien dice Logica, dice ins-
tauracidn de reliciones mecesarias; pero ecdmo se ex
tablecerian tales relaciones entre términos que nada ha
destinado a que cumplan esta funcién? Las propos
cones no pueden encadenarse de manera rigurosa més
‘que si sus términos han sido previamente definidos sin
‘equivoco. gEn las piginas anteriores, no. nos hemos
asignado la imposible tarea de descubrir las condicior
nies de una necesidad a posterior? Pero, en. primer
lugar, esas cobras y esos pedazos no se muestran como
tales mis que ante los ojos de Ia historia que Jos ha
producido, y no desde el punto de vista de la logica
4 Ia que sirven, Solamente por relaciéa al contenido
podemtos proclamarlos heterdditos, pues, por Jo que
toca a la forma, existe entre ellos una analogia, que et
ejemplo del bricolage ha permitido defini: esta analo-
fia consisce en Ia incorporaciSh, a su forma misma, de
lana determinada dosis de contenido, que e aproxima-
tivamente igual para todos, Las imagenes significantes
‘del mito, los materiales del bricoleur, son clementos de>
finibles mediante un doble “aiterio: har servido, como
palabras de un discurso que la reflexién mitica “des
‘monta” a Ja manera del Bricoleur que arregla tos en
{granes de un viejo despertador desmontado; y pueden
Yodavia servir para el mismo vs, 0 para un wo dife-
rrente, por poco que los desvie uno de su funcién
primera.
fo
TAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 61
segundo lugar, ni tas imigenes del mito, ni los
el bricoteur provienen del devenir puro.
“tion, que piece breerles fle. cuando Tos ob-
Crecente de si wits erp To pea
‘nat, ciando formaban parte de ots conjun-
faietetes, 9 To que es mas lo poscen todavia, en
‘medida que no ton materiales brates, sino productos
Tabajados:terminos del lengusje o, en el caso del
jg términos de un sistema tccnolégico, expre-
Condensadas, por tanto, de relaciones necesaias
tas que, de maneras divers, las consriceioncs har
tir el eco sobre cada uno de sus niveles de uti
‘Su necesidad fo @ simple y univoca: existe,
To tanto, como la invariancis, de orden seméntico
vette, que caractriza al grupo de tat transforms.
‘Gones 2 las que se presan, y de las que hemos visto
“gue no eran imide.
Mpsta Valea opera, un poco,» la manera del caleidos
‘copio instramento que contiene también sobras y tro
foe por medio de Ios cuss se realizan ordenamientos
‘qulturales. Los fragmentos provienen de un proceso de
ompimiento y de destruccon, en s{rusmo concingen-
Je pero a reserva de que sus productos ofteean entre
algunas homologs: deal, "de. vivacldad’ de
‘color, de transparencia, No tienen ser propio, por re
Tecibn lor objetor manfacturados que pronueiaban
fon "discurio” del que han pusedo a ser los excombros
indefinibles, pero, en otra telacibn, eben poseerlo en
‘eantided soficiente para participar Wtilinente en la for-
“ucidn de un ser'de una nueva clase: cate ser conse
‘en ordenamiemtos en los que, en virwd del juego de
Ibs cspejon los reflejr cquivalen a objeton, decir
‘en los que los signos aleinzan el rango de cous sig
pifcada estos ovdenomientos realizan posibles, cuyo
tnimero, aunque sea muy elevado, de tolos modos no
G ilimitado, puesto que es fancién de las dsposiciones(TAS GLASIFICAGIONES ToTEMICAS
de Jos equilibrios realizables entre cuerpos cuyo mil
nero mismo €s finito: por ultimo y sobre todo, estos
ndenamientos, engendrados por el enewentro de. acon:
tecimicntos contingentes (el giro que del instrumento
hhace el observador) y de una ley (la que preside a ts
construction del caleidoscopio, que comesponde al ele-
mento invariance de los coustrefimientos de que ha
blibemos hace un momento), proyecta modelos de ine
teligibilitad de alguna manera provisionales, puesto que
‘ada ordenamiento se puede expresar en forma de re-
liciones rigurosas entre sus partes, y-que estas relacio-
nies no tienen mis contenido que el ordenamiento
‘mismo, al cual, en la experiencia del observador, no)
onesponde ningin objeto (aunque pueda ser que, por
‘ste incermedio, algunas estructuras objetivas se revelen,
fantes de su soporte emplrico, domo, por ejemplo, las
e los cxisteles de nieve o de algunos tipos de radiow
Tarios y de diatomaceas, al observador que no las bays
visto nunca todavia.
Concebisnos, pues, que tal Jogica concreta sea posible.
Resta, ahora, definir sus caracteres y la manera en que
se manifiestan en ol transcurso de la observacién etno-
‘geifica, Esta tims los capta en un doble aspecto, afec-
tivo € intelectual.
“Los seres que el pensamiento indigena carga de
nificaciin se_perciben como si ofrecieran com el hom
be tun determinado parentesco. Los ojibnea creen en,
tun niverso de seres sobrensturales:
Pero, a llamar sobrenaturales a estos seres,
se"filuex un. poco LAS GLASIFIGACIONES TOTEMICAS
re, 2 Solldege Vinge aurea (Segin Bull. Torrey Botanical
‘clut)
de todo, se trata de animales miticos, caya. identifi
cacién podsfa parecer indul, © inclusive imposible.
Y, sin embargo, de sta identificacisn depende toda
Ja interpretacion del ritual. Por relacién a la cara
de Aguilas, no se puede sacar nada de los osos; pero
en Jo tocante Jos glotoncs —que los canadienses Uls-
man carcajous, adaptacién de una palabra india que
significa “mal caréeier"— ya no ocurte lo mismo, puee
‘ocupan en cl folklore un lugar muy particular; animal
engufiador en la mitologia de los algonquinos del
noreste, el glotén es un arimal odiado y temido, tanto
por los esquimales de la bahia de Hudson como por
fos athapaskan occidensales y por las tibus conteras deLAS CLASIFIGACIONES TOYEMICAS 8
Alaska y de a Columbia Britinica. Reuniendo las in-
formaciones relativas a todas estas poblacioncs, se ob}
tiene la, misma, explicacin que: In recogida indepen
ientemente por un gedgrato contemporineo de boes
{e los tramperos: “el glotdn es casi el tinica miembro de
la familia de tos mustelinos que no puede ser cogido
en una tramps, Se divierte en robar, no solamente las
eapturas, sino también Jas trampas del cazador. Este
Lslimo no se deshace de él més que con el fel". (Brow
illetie: p. 155.) Ahora bien, los hidawsa cazan las agui.
las ocultindose en. fosas; el dguila es atraida por wi
‘echo colocado encima, y cuando el ave se posa. para
agarrarlo, el cazador la atrapa con sos manos desnuda’,
Ext téenica ofrece, pues, un caricter paraddjico: el
hhombre et Ia trampa, pero para desempefar este papel,
tiene que descender a una fora, e decir, asumir In po.
sicidn del. animal cogido en una trampa, ex ala yer,
cazador y pieza de caza. De todos los animales, el glotén
© €l tinico que sabe superar esta situacién ‘contradic:
foria: no sélo wo teme nada a las trampas que le pre:
paran, sino que rivaliza con el trampero al robarle sus
esas, y a veces también sus trampas.
Si este comienzo de interpretacién es enacto, se dex
prende de 4 que ta importancia ritual de la cara de
Aguilas que practican los hidatsa obedeee, por lo menos
en parte, al empleo de fosas, es decir, a'la adopein,
por el cazador, de una posicén singularmente baja (en
tide propio, y, como acabamos de ver, también en el
figurado), para capturar una piesa euya posicion es
1a més celta, objetivamente hablando (el dguila vuela
alto). y también, desde cl punto de vista mitico (en
el que el aguila ocupa el punto ms alto en Ia jerarquia
de las aves).
EL andlisis del ritual veriica, en vodos sus detalles,
sta ipétesis de_un dualismo entre una presa celeste
yum cazador eténico, que evoca tambien 1a més vigo-
te LAS CLASIMIcACIONES ToTEMICAS
rosa opotcii concebibe, en el: domino de Ia cazay en
Torma de la raion entre lo alto y lo bajo. La ext
crdinaria complicaciin de lov tos que preceden, scone
altar) concliyed by cars de dmullat x pes ta contre:
parte de la posicin excepeionsl ocipada por eta en
Eseno cle tna tipolagia lien, que hace doella la
‘opeedéucconeetard Une speracife maxima: ente cl
exrador ¥ su pica
’AT sto less alaran lgunoe puster'cxcuros
4c ritual sobre todo el aleance y Ie sgnilicacion de
fo mltos'eantidon saranie:laerpedicpnes deca
«que se refleren a heroes culuursles capacer de watnfor
Iharee en flecas, y macitron de Ia cara con arco: doble
imente inadecuadox, por ta ras6n, para desempeia el
papel, de. cebo. para la caza_de gulls, bajo su apa:
Fiendla animal d& gato salvaje y de mapche, En efecto,
ta cara con arco, lectn ala regidn del espacio sitiada
inmediatamente por encima del suelo, es dec, el cielo
tment trio o- medio: cl caador y In pieva se juntan
nel espacio: invermediaro, en tanto que la cata de
‘guilas lor desune al asignares eplocaciones opuestis:
el cara en Uerrajlaiearaleetasaal erptten
Otro aepecto singular de Ia casa de Aguilas es que
ts mje rent inten, ene dee
sy cintiaiamsente alas ercencias.rdctcamense tak
Wal cect ia pusbbe caniorey Unecepetea ia
hidaisamismos por lo que se refiere a cualquers otra
amacque no sex la de las dguilan Exe detalle 4 ade
fy tambida, 2 a loa de lo que acabamos de decir,
2 tiene en” cuenta. que.cn Ia caza de. aguilss conce
Dida como a reduccion de una separaci6n maxima ety
tte earadory pice, Ia mediacon’ se cfecula, en el plano
tdenteo, por el intermedio del cebo, pedazo de carne ©
Poqueto. animal caado, por tanto, cuerpo sangulno-
Tento que babri de sufrs una répida putrefaccon. Una
az primaria, “da que obtiene cl eebo). eondilonaLAS GLASIFIGAGIONES TOTEMICAS
una caza secundaria: una es sangrienta (por medio del
arco y las flechas), y Ia otra no. (las dguilae se estran:
gularin sin efusién de sangre); una de ellas, que con-
siste en la conjuncién cercana del carador y de la pieza,
proporciona el término mediador de una conjuncion tan
Femota que se presenta, primero, como una disyuncién
insuperable, salvo, precisamente, por medio de la san-
se. En tal sistema, as reglas femeninas adquieren una
triple determinaci6n positiva: desde un punto de vita
iricamente formal, siendo una caza lo contrario de
Ja otra, el papel que se atribuye a las reglas se invierte
e igual manera: maleficas en un caso. (por exceso de
similicud), se tornan benéfieas en el otro caso (en el
‘que su sentido metalérico se duplica con un sentido
metonimico, pesto que evocan al cebo como sangre
‘orrupcion orginica, y puesto que el cebo es una pat
te del sistema). Desde el panto de vista téenico, el
‘cuerpo sangriento, que-no tarda en convertirse en cae
rrofia, contiguo durante horse o aun dias al cazador
viviente, es el medio de la presa, y es significative que
‘el-mismo término indigena designe el abrazo amoroxo
yy el cebo para él ave. Por iktimo, en el plano serine
fico, Ia manchz, por o menos en el pensamiento de
Jos indios de In Amériea del Norte, consiste en una
conjuncién demasiado estrecha de dos términos que es:
aban destinados a permanecer, cada uno de ellos, en
‘estado “puro”. Si, en In caza cercana, las reglas feme-
ninas corren siempre el riesgo de introducir tun exceso
de conjuncién, acarreando, por redundancia, 1s satura-
cién de Ta relacién primitiva y newnalizando su virtwd
dindmica, en Ta caza Tejana ocurre Jo contrario: la con
juneidn 5 deficiente y el tinico medio de poner reme-
dio a su debilidad consiste en admitir 1a maneha, que
aparcceré como feriodicidad sobre el eje de las suce:
Hones, © como eorrupeién sobre al ej¢ dela simulta
8) LAS CLASIFICGACIONES ToTeMICAS
Come estos dos ejes corresponcen, uno a la mitolo-
‘lt de Ia agriculeura, y otro, a la mitologia de In eaza,
por medio de esta interpretacién se Mega a un sistenna
de referencia global, que permite percibir homologias
entre temis cuyos desarrollos no oftecen, 2 primera vis-
ta, relacién alguna. Ahora bien, en el caso de la caza
de dguilas, este resultado ¢s muy importante, porque
‘existe, con formas divers (pero siempre. fuertemente
impregnadas de ritual), sobre casi toda Ia extensién
del continente amerieano y en pueblos de culvuras di
ferentes, cazadores los unos, agticultores los otros. La
funcién, modesta, pero positiva, atribuida a 1a mancha
centre los hidatsa, os mandan 'y los pawnee (con vax
rlantes interpretables, por lo demis, en funcidm de la
‘organitacién social de cada tribu), puede entonces tra-
fare como un ciso particular den conjunto mds
vasto, del que otro caso particular est ilustrado por el
‘mito de los indiot pucblo, del hombre comprometide
‘e0 matrimonio con una muchaeha-éguila, mito que
tte lor indioe pueblo est4vinculado 2 oo: el de Ia
noviaantasma (‘eorpse girl’, “ghost-wife”) en el que
Ia mancha potee una funeidn fuerte (novia-caddver, en
‘vez de mujer indispuesta), pero negativa (pues acarrea
Ja muerte del cazador, en vex de su éxito), porque, se
‘in las indios pueblo (y como Io explican los mitos).
‘mo hay que hacer sangrar a os conejos que constivuyen
cl objeto por excelencia de la cara ritual, en tanto que,
pata los hidatsa, hay que hocerlor sangvar para que pue-
ddan servir de medio a la caza ritual por excelencia: 1a
‘ear de dguilas, Las cuales bo deben sangrar. En efecto,
Jos indios pueblo capeuran. a las siguiles, las rian, pero.
no las matan, y algunos grupos se abstienen inclusive
‘completamente, por medio de olvidarse de alimentar
alas aves, y dejarlas morir de hambre.
Para volver brevemente a los hidasso, se plantean
‘otros. problemas, que tienen que ver con el papel mirLAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 85
tieo que se hace desemipefiar al glotén, en una reyidn
(que est4 en Jos limites del area mayor de difusién, mis
septentrional, de esta especie animal! Mencionamos
fxte punto para subrayar que problemas de orden his-
tbrico y geogritico, Jo mismo que semintica y estructu-
ral, estén ligados 2 la identifieacién exacta de un
animal que cumple una funcién mitica: Gulo tuseus,
Esta identificacion repereute profundamente sobre Ia
interpretacidn de mitos procedentes de poblaciones tan
alejadas del habitat del giotén como’ los indios pueblo,
© aun, en el corazén de Ia América tropical, los.sherente
del Brasil central, que poseen igualmente el mito de la
viafantasma. Pero no insinuamos que todos eston
smitos hayan sido tomados, 4 pes de distancia consi
erables, a una cultura septentrional: el problema po-
dela plantearse solamente en lo tocante 3 lor hidatsa,
puesto que el glotén figura explicitamente en sus mi
fox. En los otros casos, nos Timitaremor a comprobar
‘que estructuras légicas anfloges pueden construire por
4 Masta donde se remontan sus tradiclones, lor hidasa
patecen haber vivid en diversor punter del ertado de
Dakota det Norte
En cuanto al glosda “et una eepecie crcumpolar de oe
Dosjues septentsionales de Jos dos continentes Ep la Ame
Hea del Norte, 56 Je encontraba antano desde el limite del
Domgue, a1 norte, hasta Ia Nucea Inglatera, y el Estado de
‘Nueva York, al ur, y en las Montafas Rocrat hasta el
tado de Colorado. Por ultimo, en la Sica Nevada, hasta
monte Whitney en California". (Nebon. p. x8) El glotn
comin se encontraba “desde el Ocfano Arteo, y ta bahia
te Baffin, en el norte, y desde el Pacfian basa et
ties basta Ia zona fronteriza del norese de. lot Ex
Unidos: Wisconsin, Michigan, Minnesota, Dakota del Nor
te: y, em las Montaftas Rocoas hasta ler estador de Utah
¥ 4© Colorado”. (Anthony, pp. 111 #8) Espectesverosimil
‘nente sinénimas se han senalado en las montafiat de Call
fomia yen Fort Union, Dakota éel Norte (id).
85 LAS CLASIFIGAGIONES ToTEMICAS
medio de recurios de léxico diferentes. Los elementos
no son constantes, slo lo son tas relaciones.
Exe hima’ observcién conduce al examen. de ota
difeahad. No basa con identifier, com preci, cada
Shimal, cada planta, pdr, cuerpo cst © fendmeno
Sata) evocadon en Ton mites 7 e ritual —tareas mle
piss pars las que sama ver cath prepara el etndgrafo=
Sino que hay que saber también qué papel les atbuye
da ‘olsrs cel eno de an seria de sigan.
fre Cero cela dilator Ix squess la nara
ei traci edge y dee me
ttencién prolongada y Yepetda, cjrcico siduo de (o-
owsheloraido loge cgpcioeishaecreels
tmctdico de las deyeriones de los animales pata cono-
rats hibioralinenticon ce. De todos exon detales
fmenudos, pacentemente acumuladot en el ranean
de siglot yfielmente tasiidos e-una generacion
1s ott solamente algunos ee conserva para atgoae al
drimal o a ln planta une fancién sigaficante enw
Sima: Ahora Ein, ex preci aber cul, pes, de una
Sociedad a la otra y por lo que toa 3 la'misma expe:
Sie estas relacones no ton constants
Len Than » Woo dayak del mar Od sr de"Borneo,
scan promgles interpreando el canio'y el vuelo de
hin Espoces deer El canto preipitado del aren:
Aaj creado (led lps galerictlrus Cursier), evo,
dicen, cl ehiaporoteo de Is rans sugua pcs. v0.
fablemente ef exto de la tora el geo de alarm de
th togén (Ulorpactes didi “Temminck), comparad
fos estetrer de umn anil doglldo, presala una
tnona cua en tanto que el gta de alors de Sea
ainormis Teaminck w dice que dsprende, como
fon rapara los mals epiriis quo aceban a los cu
tives porgue se pares al mt que hace el raspado de
ttn cothilo, Ouro togén (arpctes devnucelt TenLAS eLASINIGACIONES ToTEMICAS
sinc) presgh por su “ris” el dito de las expedcio
ter comerciales y por a copecic de cilavina de color
‘ojp brillant, evora el prewigio pineal 2 3s gue
fru viceroy aoe viajes lejoes
Hs caro que lr mismos detalles podsfan ‘aber re
ibid sigilealnes diterenes,y que otf rages
ticioea dss misma’ ayes” pitan haber eo
prefeidos en vstcde eon, Hl estes adiinaoro clige
folamentesigunos range dative, le prt una
silken atBerasny ye Umitrn siete-ave:cuyaloe
Gn not sorprende en razén de ws inigificania, Peo,
srbitcrio al mipelGeslontémianns el aatems sc tran
eta dd tected peas carne
tere solamente aes cer contumbres se pram flr
mente aun simbolime snopomérficn,¥ son, tices
de difreniar las sina de Tat otras por medio. de re
{os combinables entre a para fojar mensajes mis cone
Flier (Freema).Sncetsbarge, abla cucnta-de Ia
Fiqueray de la divereidad del material en brat del qe
26lo alguns elements, de entre tanios.pesbley on
liza por el stema, nose puede dda de que un
Bumero considerable de siemos de fx mim else hae
Item otvectl ua coherecia tal, y que nioguno ea
redetinado. ser elegido por todas Ins soca
Pain as tice ncn ae poem
bifccin inne: su stnicacion co" postin,
farina heetasyachcoteto cata por
parte, por otra party de la etractura del sistema en
Ehgue babe de igure
Esa acta select. s-maniiea ya’ alive ded
Sesaad Ea igang rchipneasiniebs et
ie que “pica con el pico's yl pijao carpmtero
Eee teeariics pumtineanctiercone wr
pat bajo un temmina genic que expr el bul
bh vexipiiar is enlbctinnla/clrvecocia Por tnt
+= pln en Jos ecto en] etd lana, mle
8 LAS GLASIFICACIONES ToTexteAs
en su forma de erislida o de adulto. El nombre de ta
alondra hace elacién a su expol6n alagado, en tanto
‘que el inglés prefiere fijare en las plumss protebe:
antes eu cabera. ("Hornedlark’). (Relehar, f, ple
‘nas 1011)
Cuando emprendié el exudio de ts manera en que
Jos hanundo ile las ile Filipinas clasifian ls. clo.
res, Conklin se vio al prinipio dexonccrado por con-
fusiones y contradiccones sparen‘, sin embargo, Ga
dsaparectan en cuanto te fe pedia al tnformador que
Aetinera, no miesirae aadst, sino oposiciones, inter
nas entre parejas contrastads. Habis pos, un stem
Coherent, pero exteltiea no pola resaltar en los ter
‘inos de nueso propio stems, que utiliza dow ees
del valor y ef del cromatismo. Todos low equivecos
se desvanedeton cuando te comprendié que el stem
hamundo tiene iguslmente dow ties pero definidos de
otra manera: lating los colores, por una. part, eh
Felitvamente clos yrelatvamente oicuros,y por otra
parte, segin que sean tabicwles en ly plants freseat
oven las plantas secaas Ton indigenas, de tal modo,
wen como’ verde cl color tmrron reludente dem
trozo de bambi que acaba de ser Crtado,siendo que
nosotros Io veriamor como rojo si twvitsemon que dae
fiir en os térnos de Ia onic ene lo colores
Tojo y verde que se encuentra enue Is hanuage. (Com
iin, 2)
De igual manera, animales muy emparentados pus
den aparecerfrecuentemente enc felkire. aunque Con
Signlicaciones diferentes El pjaro carpinero.y sus
Congéners se allan en exe caso, Si el pero epa
twoncos despert el interés de lov austeaizbos es como
Jo ha mosiralo RadelifeBrown (2), porque frcwents
Jos huceor de lot drbotes; pero los fds de las prade
vas de ta América del Norte prestan.atencon “a un
Aetalle por completo diferente: el pajso carpinero deLAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 8
‘cabeza roja se cree que esté protegido de las aves de pre-
s@ porque nuncs se encuentran sus vestigios. (School.
raft) Un poco mas al sur, los pawnee del alto Missouri
establecen una relacién (como Jos antiguas ‘romanos,
al parecer) entre el pijaro carpintero, y la tempestad
y Ja tormenta. (Flewcher, 2), eh tanto que los osagos
asocian este pijaro con €l sol y las estrellas. (La Flex
che). Pero, para los iban de Borneo, que mencionamos
hace un momento, una variedad de pijaro carpintero
(Bbuhipicus rubiginosus Swainson) reeibe un papel srw
bilico en razén de su canto “tiunfal” y del carde-
ter de advertencia solemne atribuido a su grito. Sin
duda, no se trata exactamente de las mismas aves, pero
1 cjemplo permice comprender mejor cémo poblacio-
nes diferentes podtrian utiliar.en su simbolismo al mise
mo animal, [undindose en earacteres carentes de rela-
cid entre si: habitat, asociacién meteorotdgica, grito,
ftc.; el animal vivo @ el animal muerto. Aun, cad
etalle seria imerpretable de diferentes manerat, Los
indios del sudoeste de los Estados Unidos, que viven
de Ia agricultura, consideran al cuervo, sobre todo,
‘como un saqueador de los huertos: en tanto que los
ios de Ia costa noroeste del Pacifico, que son exclu
ivamente pescadores y cazadores, ven en. el mismo pi
jaro a un comedor de carrofia y, por tanto, de excte-
mento. La carga semintica de Corvus es diferente en
Tos dos casos: sea vegetal, sea animal: y de tivalidad
com el hombre en a similitud, 0 de antagonismo en
‘una conducta inversa.
‘La abeja es un animal rotémico, Jo mismo en Africa
(que en Australia, Pero, entre los nuer, se trata de un
totem secundario asociado a Ia serpiente pitén, porque
las dos especies tienen el cuerpo marcado de manera
semejante, E] que tiene a la serpiente pitén por totem
se abstiene pucs, de matar a las abejas y de comer su.
miel. Una asocacién de la misma clase existe entre
@ _ascxasmcscioxts Tor#ess
Te Bormign role ya cobs, pagel nombre de el
tines space: eopimente "a pods” rane
Sank 2p.
Tiffen mde compleje ol pson sero
ace topene i nunaln e Kbeey
See arare ar nel nae
fie eeanicor ey ona rar ene
ieelrichceary larva nana atl
alana ocak cress
STpar tio, ee re recone machen y Dea
eating chi iy de rome
ies joes Santa compte anes
sone pregmrrans queer atresia
SSitean Ercan at pa ee
eee ipa esta epee
Sins cgropes jut lv antzaeey ho ceo
Stewie earl)
ee nt dee rs,
Scare Ware enemy ne
Tota dengue be quar coapricba
Inespectacovts(nigena Lat neces, Moquen
cet pind tds icrys ees acohaal
oe ase clan eee coe eae
Serge dese one ait dennado otto” “la
Sebi goa dasha una etre roahatedl
ercenwll ager (aie conerrangale, ac
fese rai), dine te ln ter (obs. dere ey
Se eieecigraia ia room
Sovcnteicied andere sical
sucunmrerapeiarpencieceay a as geal
ee eee
‘Sir a ign conto, a an lr top
Sonltok piste starsicseserrart ail
tm conto enopiicesuetemene rie pata
ae
Tenor dee algongsinos eae, ya desLAS CLASIFIGACIONES TOTEMICAS gt
vecinos winnebago, sugicre una clasifiacién en cinco
categorias que corresponden respectivamente @ la tierra,
al agua, al mundo subacutico, al cielo. atmosférica
al cielo empireo. Las diffcultades comienzan cuando
se quiere asignar un lugar a cada clan, Los menomini
contaban unos 50, las cusles se siente uno tentado a
‘repartir en euadrdpedos de la tiera firme (lobo, perro,
iervo), cuadripedos de los lugares hiimedos (alce,
2, marta, castor, pecan) aves “terrestres” (Aguilas,
‘gavilanes, cuervos, corneja), aves acusticas (grulla, garza
real, pato, gallineta), por diltimo los animales ctduicon-
Pero esta categoria es especialmente rebelde, puesto
‘que muchos de los animales por clssficar (ovo, tortugs,
Puerco espin) podrian también colocarse en otra parte,
Las diffcultades serian mas grandes todavia por lo que
respecta a todas los términos restantes.
Australia ofrece problemas del mismo tipo. Después
de Frazer; Durkheim y Mauss han meditado sobre las
lasficaciones totales de algunas tribus como los worjo-
baluk, que inhuman 2 sus muertos orientdndolos en
tuna direccién particular a cada clan (véase la figura de
Ja pagina siguiente).
‘Ademés de que las informaciones son, sin duda, frag-
mentarias, no se pueden observar més que esbozos de
‘organizacion, que, por Jo demas, no oirecen este ex
ricer més que para el observador, puesto que el con-
texto etnogrifico —que seria el tinico que permitiria
interpretarlos~ fala casi por completo: la cacitta blan-
S Entre los winnebago y otras tibus sioux. come lot
algonquines cenrales, se enctentta una clasificcion em cin.
(©. grupos: animales tervestres, animales celestes, animales
et cielo empireo, animales acuiticos y animales sub-
aculticos, Entre. los winncbago, el avetrueno. pertenece
al cielo emplreo: el agulla, el gavilin, In paloma, al celo
Atmonfércy el oso y el Yobo aU tierra: ox peces aga,
fl geno de lat aguas 31 mundo sulacusticn”” (Radin, 2, 186)
ge _ LAS CLASIFICACIONES ToTEMICAS
ca, “diurna’ es vecina del sol, y 1a cxeatia negra, que
fe le opone casi diametralmente, es vecina de los tu-
Derculog, vegetles “ctGnicos", aun cuando se hallan sobre
el mismo eje que a gruta que también es "exdnica’
Las serpientes estén sobre un eje, los seres “marinas
pelicano, mar, viento cilido, parecen estar también
agrupades siguiendo un eje. Pero, zeste viento cilide
ede tierra 0 de msr? Lo ignoramos, y come ocurre
tan a menudo, la respuesta 2 un programa etnogréfico
se encuentra e1y manos del gedgrafo y del meteor6logo,
cexando no en las del botinico, el roilogo 0 el geo
logo...
La verdad es que el principio de una clasficacion no
4e postula jamdr slo 1a indagacién, emnogrifica, es
decir, In experiencia, puede descubritlo a posteriori
El ejemplo de Tos owigos. que son sioux meridionales, es
revelador porque ss clailicaciones ofsecen um earicter
fistemdtico, por lo menos en apariencia, Lox osagos re
© Tomamos agai, de nuevo, algunas piginas de un texto
estinado 3 as Melenges Alexandre Koyre.LAS CLASIFIGAGIONES TOTEMICAS gg
Parten a los seres ya las cosas en tres categorias, respec:
tivamente asocindas al cielo (sl, estrella, grulla, cucrpos
celestes, noche, constelacion de las Pléyades, etc), al
agua, (mejillon, tortuga, Typha latifolia (an junco),
niebla, peces, etc), y ala tierra firme (090, negro y
Blanco; puma, puereo espin, ciervo, Aguila, etc). LA
Posicién del dguila seria incomprensible, si no cono-
idsemes Ia marcha del pensamiento de los osagon que
asocia al dguila con el xeldmpago, al relimpigo con el
fucgo, al fuego con el carbs y al carb con la tierra:
asi pues, como uno de los “amos del corbin el iguila
es un animal “de tierra”. De igual manera, y sin que
nada pueda indicarlo de antemano, et pelicano des:
cmpetia un. papel simboico en razén de la edad avanzada
a a que llega, y el metal a causa de su durem. Un
animal desprovisto de utilidad prictica se inyoca a me.
‘nudo en los rts: Ia tortuga que tiene la cola en forma
de dientes de sierra. Su importancia seria inimeligible
para siempre, sino supiésemes, por otra parte, que él
‘imero 15 posee para los osagos tin valor mitica. Fl sol
que se levanta tiende 18 rayos, que se reparten en un
grupo de 6 y um-grupo de 7, que corresponden respec:
fivamente al. lado iquierdo y al lado derecho, 4 Ia
lierra y al cielo, al verano y al invierno. Ahora bien,
Jas incentaciones de 1a cola de esta especie de tortuga
s¢ dice que son en mimero de 6 0 de 7 segiin los caso,
1 pecho del animal representa, pues, Ia béveda celeste,
y la linea gris que lo atraviess Ta via dete. No seria
menos dificil predecir Ia funcién pansimbélica ai
Duida al alee, cuyo cuerpo es una verdadera imago
mundi: sus pelos representan la hierba, sus perniles las
colinas, sus flancos tas Vanuras, sa espina dorsal el re-
lieve, sw cuello los valles, sus cuernos la red hidrogr
fica por entero... (La Flesche, passim).
Por Jo tanto, algimas interpretaciones de los osagos
son restituibles; la rain de esto es Ia de que se di
ot LAS CLASIMEACioNsS “roreMIcAs
nea’ propésito de ello de na enorme’ documen-
bn reanida por La Flesch, que ert hijo de un jee
maha, parcalarmente resptuino de woo Toe cle
feos recomdos pore penamlen Indigens. Pero Ls
Alidcatades son insuperster én el exo de wha tba
taal extingulda, como los creek, antafo diididon en
fmis de 50 clanestomios y matrlineses, nombrados
tobre too con nombres de animales, pero también con
fos de algunas plantas, fendmenot meteorolgicos (0
lo, vients), gelogcon (al) © anattmico (pelos del
pub). cor dance exaban sprupats en fats,
Is ales cen tnien dda en do ropes co
rrespondiener quick a lo animales texreres'y 2 los
Bnimalesacreos,sungue eto no se desprenda’ de st
dksignacon como "gentes de’ otra lengua y "Blancs",
@ coma "rol" “buincor Pero, por gue kn totems
Se'dgtinguen en "tice" y en “iobrinot” (al com los
Hop dtinguen tow totem en “hermanos de madre” por
tine parte, “padre, “madre” o-ssbuela” por ot par
te):? por que, bie todo habids eoene de ta aE
1, Nc ama ems nora ge
tecape la_poscién principal, siendo el labo. por elem
pio! el "Wo" del tuo, ye gato ava, el del gran
feng Narada “pantera” en el sur de los Estados Uni
Gos? Por que ef clan del caiman etd asocado al del
pave (ino tomo podria ser, en su caldad de pone
Ente de hueson)y cl del mapsehe al dan de Ia papa?
4 Se ha sugerido una interpretacion de una diac
anilogs "eo na (riba attcants "Dior el pate Je os
Spins del ate més importantes, y 2s eepFtos menores
Serdice-que_ son Jo hijor de sis hijos y por tanto de so
Tinaje, Be os expitus ttémicon, se ice a menido. que
ton fe hijo de ts hijo) pot tanto exrafon su naj
To gue, pert los puch es” una_svanera_ de oleae mas
hao tolvia en la jeramula elas fart copies
(Gemma Pricad, 2p 9)LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 95,
En el pensamiento de los creck el lado de los “blancos”™
es el de Ia par, pero el investigador obtiene explicacio-
nies de una desesperante variedad: el viento (nombre
de un clan "blanco" tae el buen tempo, ex decir, el
tiempo “apacible"; el oso y el lobo son animales que
siempre estan atentos y por Io tanto se entregan a las
obras pacificas, etc. (Swanton, 1.)
Las dificultades ilustradas por estos ejemplos son de
dos tipos, extrinsecas o intrinsecas. Las primeras son
fl resultado de la ignorancia en que not encontrames
a propésito de las observaciones ~reales 0 imaginarias—
de ios hechos, © de los principios, que inspiran las
clasificaciones. Los indios tlingit dicen que el gusano
de la madera es “limpio y astuto" y que la nutria terres:
tre “tiene horror al olor de Ins deyecciones humana”,
(Laguna, pp: 177, 188) Los hpi erefan que los buhos
ejercen una influencia favorable sobre los melocotone:
ros (Stephen, pp. 78, 91, 109; Voth. 1 p. $7). Si
0s atributos hubiesen de comarse en cuenta para asig:
nnar a és0s animales un lugar en la clasifieacion de los,
seres y de las cosas, podrlames buscar indefinidamente
Ih dave, a no ser que el azar not proporcionase sus
‘menudas pero valiossimas indicaciones. Los indics ojie
bbwa de 12 isla Parry poseen, entre otros “totems”, el
guila y la ardilla. Felizmente, una glosa indigena ex-
plica que estos animales intervienen como simbolo de
los arboles que frecuentan respectivamente: el abeto-
iewta (Tiuge canadensis) y el cedro (Thuja occiden-
talis). (Jenness, 2). Por tanto, el interés de los ojibwa
por Ja ardilla es de hecho un interés dirigide a un
abol; y carece de relacién con el que los asmat de la
Nava Guinea prodigan, tambien a ard, pero por
Los lores y las ardillas son grandes comedores
de frutos... los hombres que salen a cazar cabe-
as se slenten préximes a elles y los Maman sus
98 LAS CLASIFICACIONES "ToT #ENNICAS
hhermanos.... (en: rax6n del). paralelismo entre el
cuerpo buitano y un érbol, entre Ia eabera hu:
mana y su fruto.'(Zegwaard, p. 1034.)
La misma ardilla eat probibida a las mujeres embs
randat por los fang del Gabln, en virtud de conside:
raciones de otro orden: este animal se relugia cm las
cavidades de los troncos de rbol y Ta foura madre,
que consumiera su carne, comteria al riesgo de que el
{eto imitase al animal ye rehusase a evacuar el hex
EL mismo raronamienco se aplicaria bastante bien a las
comadiejes y a los tejones que viven en madrigueras;
Sin embargo, los indion hopi siguen una lines de rele:
xion invert consideran ue Ia carne de estos animales
favorable al pari por razin de su capacidad de
fexeavar en el suelo un camino para escapar cuando son
perseguidos por el cuador: ayudan pues, a que el nifo
ecscienda ripidamente": yen cohseevenesa. tambien
se les puede inwocar para que csiga la Ihwia. (Voth, 1,
psn)
Una incantencién ritual de los onagos socia de mae
nera enigmitica una flor (Lacineria pycnostachya) Ils
mada en inglés “blazing star’, una planta alimenti
5-¥ no solamente Ia ardila: “el peligro mis temible que
‘amenaza a lar mujeres embarazadae proviene de los anita.
Jer que viven © que se capturan en lor agujeroe —ya tea
e Ios daboles 0 de ia tierra. Se puede hablar, a ete
fespecto, de un verdadero horror vetul. Si la mijer co-
‘miese un animal de este tipo, el nifo podria quédarse tam.
bign en ew azujeo, “em el vientre, y entonces habria que
ciperar Un parto dificil. De igual manera, durante exe
Periedo, os padres no deben tratar de reirar nidos de
Datos de lor huccot de lee Arboles y ino’ de mis cmplea-
fos, que habla dejado embarazida a una. mujer, se neq®
‘eategericamente a confecionarme un modelo de hoyera de
mandiocs, <0 pretevto de que era una cosa ahecada”,
(esmann. p30)LAS GLASIFICACIONES TOTEMICAS gg
el maiz, y un mamifero: 1 bisonte, (La Fleche, 2,
- 279) Las razones de esta asociacién serian incom
prensibies, si otra fuente no revelase. independiente:
‘mente que los omaha, parientes préximos de los ost
gos, cazaban el bisonte durante el verano, hasta que
Ih “blazing star" florecia en las Uanuras; sablan enton:
‘ces que el maiz estaba maduro y regresaban a la aldea
ara Ia cosccha. (Fortune, 2, pp. 1819)
Las dificultades intrinsecas son de otra naturalens
No provienen de nuestra ignorancia de lor caracteres
objetivamente retenides por el pensamiento indigena,
para establecer una conexién entre dos o mis términat,
sino de la naturaleza polivalente de légieas que apelin
simultineamente a varios tipos formales de vinculacio:
nies. Los luapula de la, Rodesia septentrional ejempli+
fican bien este aspecto. Sus canes, que Hevan nombres
animales, vegetales o de objeios manufacturados, no
son “totémicos" en el sentido que habitualmente se
da a este término: pero, como entre los bemba y los
ambo, razones de burla los unen de dos en dos en far
ign de una logica que, desde el punto de vista en que
nos colocamos, presenta el mismo interés. En efecto,
hemos mostrado en un trabajo precedente, y continua:
‘mos estableciendo aqui, que el. pretendido totemisme
no €s sino un caso particular del problema general de
lag clasficaciones, y un ejemplo entre otros del papel
frecuentemente atribuido a. términos expecifico, para
elaborar una dlsificacién social.
Estén en relacion de burla o broma, entre Ios uae
pula, Jos clanes siguientes: leopardo y cabra, porque él
tuno se come al otro; hongo y cermitera, porque el uno
rece sobre la otra: papilla y cabra, porque e pref
‘ble tomar la papilla acompafiada con carne; elefante y
arcilly, porque en otro tiempo las mujeres, en vex de
hhacer las vasijas, arrancaban del suelo las huellas de Jas
patas de clefante, y utiliaban estas formas animales a
8 —_LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS
tmanera de recipientes a ermitera,y In serpiente 0 la
Fiesta, porque la hierba erece bien ally pergue laser
pene ae oculta en ell; el hero. y todos 1s lanes
Efnimales" porque los mata. Razonamientos del mismo
tipo permiten definir una jerarguia de lov clanes: el
Iippando es superior a ln cobra, el hiero a Js anima-
Tey Tn luvin a herr, porgve lo herrumbra; adem,
A'dan deta Thuvia cs superior 2 todor los dems
Porque, sin Huis, lor snimales moriian’ de hambre
J de sed, seria del todo imposible preparar 1a papilla
Teombre' de clas), vain” (nombres declan), etcéera
ei 1 gram mimeo de con
sideraciones diferente el valor y las modalidades de
tmplco de sus plantas mediinales: la planta cece al
Tado de una planta medicinal més importante: una de
fn partes se parcee a una parte del cuerpo human
olor de ta planta es "como eh debido™ (0 el taco,
8 el sabor); ln planta colorea el agua "como es de
flows a planta ets stociada 2 tn animal, (como su
iment, © por contacto, © por comunidad de abl
tat)! be sido tevelada, por Tor dies, alguien ha en-
tthdo el uso. 0 la bm recopido cerca de un dchol
fendido. por un rayo; cor una determinada enferme
dad, por tanto et buena tambien pare una enfermedad
Andioga o que afecte al mismo érgano. (Leighton p. 58)
En lor nomres de plantas de lo hanundo, los terminot
dllerenciaes 4 refieren a lot dominios siguientes: for
tm dela hoja, color habitat, alla, dimension, sexo, tipo
fe crecimiento, hutsped Babitul, epoca de crecimiento,
sor olen. Conk, 2. 181)
Tato ejemplos complcian lor que preceden mostran-
do que tales gies trabajan_smtdneamente sobre
varios eje, Lat relacones que establecen entre los ter
Ininen, ls mis de Is veces estén fndadas en a cons
auided (erplente y temiters, entre tos Tuapula, loLAS CLASIFIGAGIONES TOTEMICAS gp
‘mismo que entre los toreya de la India del Sur? o sobre
Ja semejanra (bormiga roja y. cobra, semejantes por el
“color” segin los nuer). Desde este punto de vista, no
se distinguen formalmente de otra taxonomias, ain
moderns, en los que contiguidad y semejanza. desem
pefian siempre un papel fundamental: 1a contigiidad,
ara descubrir cosas que, “desde un punto de vista
structural, lo mismo que funcional, pertenecen... all
‘mismo sistema”; y Ia semejanza, que nd exige la parti
cipacién en un sistema y se funda solamente en la
posesién comiin de uno 0 de varios caracteres, por
Cosas que todas ellas, son “o amarillas, 0 lisas, 0 tla:
das, o inclusive de dier pies de alto". (Simpson, pp. $4.)
Pero, en los ejemplos que hemos examinado, inter
fenen otros tipos de relaciones. Las relaciones pueden
ser, en efecto, sensibles, (marcas corporales de la abeja
y de la serpiente pitén); 0 inteligibles (funci6n fabri
‘adora como rasgo comin a la abeja y al earpintero)
1 mismo animal, la abeja, funciona, valga la expresion,
en dos cultures a niveles de abstraccién diferentes. La
relaci6n puede ser iqualmente cercana o lejana, sinerd:
nica o diacrénica.(relacién entre ardilla y cedro. por
tuna parte, . por otra parte, entre alfarero y huella|
del elefante), estética (papilla y eabra) 0 dindmica
(el hierro mata a los animales, 1a Huvia “mata” al hie
ro; la floracién de una planta significa que es tiempo
de regresar a la aldea), ete.
Es probable que el niimero, Ia naturalera y la “calc
dad” de estos hechos I6gicos no sean los mismos sega
9 “Los miembros det clan de Ia serpleme sinden eulto
42 los hormigueros. porque sirven dev morada alas ter.
pieniex" (Turion, vol VI, p. 176) De igual manera, en
Nueva Guinea: “algunos tpot‘de plantas a como sur pa:
risltos animales y vegetales, se considera que pertenesen|
Sen ke nun matic y tte”, Wie el.
pm)
100 _LAS CLASIFIGACIONES TOTEMICAS
Is culturas, y que’se podria clasficar a éstas en mis
ricas yen ies pobres, segim las propiedades. formales,
de los si
cdificar sus estructuras de dlasificacin.
menos dotados, en relacién con
cas de varias dimensiones, cuyo inventario, anilisis €
interpretaciém exigirian una tiqueza de informaciones
feunogrificas y generales que 2 menudo no se poseen.
Hasta ahora, hemos evoeado dos tipos de dificultades
propias de las Iogieas “totémicas”. En primer lugar,
‘gnoramos, las mis de las veces, de qué plantas 0 de
qué animales se trata exactamente: hemos visto, en efee-
to, que una identifieacién vaga no basta, pues las ob
servaciones indigenas son tan precios y tan matizadas
aque el lugar atribuido 2 cada término en el sistema
‘orresponde a menudo 2-un detalle morfoldgico 0 aun
comportamiento, definible solamente al nivel de la vx
riedad o de la Subvariedad. Los esquimales de Dorset
exculplan efigies de animales en trozos de marfil det
igrueio de wna eabera de cerilla, con tal exactitud que,
4l examinarlas al microscopio, lor aodlogor distinguen
Jas variedades de una misma especie: por ejemplo, et
somormujo comin y el somormujo de cuello rojo. (Car
enter)
En segundo lugar; cada’ especie, variedad 9. sub-
variedsd, puede cumplir un niimero considerable de
funciones diferentes cn sistemas simbdlicos, en los que
alguna funciones solamente les son efectivamente aig.
radas. No conocemos la gema de estas posibilidades,
y, para determinar Tas selecciones, Kay que referirse no
S610 al conjunto de datos etnogréficos, sino también
2 Infortaciones procedentes de otras fuentes: 200163
‘, otinica, geogrifica, cte. Cuando las informaciones
suficientes —lo que rara ver ocurre— se compra
ba que awn culturas vecinas construyen sistemas totalLAS CLASIFICACIONES TOTENICAS 104
mente diferentes con elementos que, superficialmente,
pparecen ser idénticos o muy semejantes. Si las pobla-
iones de la América del Norte pueden considerar al
401, segin los casos, como un “padre” y un bienhechor,
‘0 como un monstrvo cantbal avido de carne y de sane
gre humanas, equ diversidad de interpretaciones no
hhabremos de esperar, cuando se trata de seres tan. par
tculares como son los de una subvariedad de planta
0 de aver
Como ejemplo de recurrencia de una estructura de
opesicién muy sencilla, pero con inversidm de las cargas
seminticas, compararemos el simbolismo de los colores
entre os Iuvale de Kodesia, y en algunas tribus aus
tralianas del noreste de Ia provincia meridional, en
que los miembros de la mitad matrilineal del difunte
se peinan con ocre rojo y se acercan al cadaver, en tan-
to que los de la otra mitad se peinan con arcilla blanca
yy se mantienen alejados. Los tuvale utiliza también
ticrras roja y blanca, pero, entre cllox la arcilla.y la
Iharina blancas sirven para las oftendas destinadas a los
espiritus ancestrales; sc las sustituye por la arcilla roja
fen ocasién de los ritos de pubertad, porque es et color
de la vida y de la procreacién. (C. M. N. White, 4,
pp. 4647).2° Por tanto, si en os dos casos el Ylanco
corresponde a la situacién “nosmarcada", el rojo&-por
Jo cromético de la oposicién— estd asociado ya sea a Ia
muerte, ya sea ala Vida. Tgualm
el distito. de Forrest River, los miembros de la gene
racién del difunto se peinan con blanco y negro y se
mantienen alejados del cadiver, en tanto que los de
las otras generaciones no se peinany se acercan al
cadiver, A carga semintica igual, por consiguiente,
1a oposicién: blanco /rojo estin sustitwidas por una opo-
sicida: blanco + negro/®. En ver de que, como en €l
39 Como en China, donde el blanco ex el color del duelo,
y el rojo el del matrimonio,
ton LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS
‘aso precedente, los valores del blanco y del rojo estén
invertidos, el valor del blanco (aqui asociado al negro,
olor no Gromitien) permanece constante, y es el con:
tenido del polo opuesto el que se invierte, pasando del
rojo, “supersojo", a la ausencia total de color. Por
‘timo, otra, tribu, australiana,-lon bard, constrayen au
simbolismo por medio de Ia oposicién: ‘negro/roje. El
negro. es el color de duclo para Ins generaciones de
ango par (abuelo, Ego, nieto), el blanco, para las
generaciones de rango impar (padre, hijo) (Elkin, 2,
PP. 298299), es decir aquellas a las cuales no esté as:
mmilada Ja generacién del sujevo. Una oposicin entre
dos términcs desigualmente marcados: muerte y vida
entre Jos luvale, “su” muerte y "mi" mucrte en Aux
tralia, se expresi, entonges, mediante pares de elemen:
tos extraides de una misma cadena simbélica: ausencia
Ge color, negro, blanco, negro + blanco, rojo (como pre:
sencia suprema de-color), etc
‘Ahora bien, se. yuelve.a encontrar entre los indios
fox Ja misma opesicién fundamental, pero transpucsta
del orden de los colores al de las sonoridades: mien-
tras se desarvolla Ia ceremonia de inhumacién, lor que
entierran al muetto hablan entre si, pero. los dems
no dicen palabra. (Michelson, J, p. 411}. La oposicién
‘entre palabra y muder, ruido y silencio, corresponde,
por tanto, 2 Ja existente entre color y ausencia de co-
Jor, 0 entre dos cromatismos de grado desigual.. Estas
dobservaciones mos parecen hacer justia a todas las
teorias que invocan a “arquetipos” o a un “inconsciente
colectivo", Sélo las formes pueden ser comunes, pera,
no los contenidos. Si existen contenidos comunes, 1a
arin debe busearse, ya sca del lado de las propiedades
‘objecivas de algunos seres naturales o artificiales, ya sea
del lado de la difusion y de la recepcidn, es decir, en
Jos dos casos, fuera del espiritu.
‘Oura dificultad tiene que ver con Ia complicaciénLAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 10
natural de las Iégicas concreias, para Tas cuales el he-
cho de Ia vineulzcién es mis ceencial que Ja natura-
Teza de: las vinculaciones; en el plano formal, valga la
expresion, echan mano de todo. De esto se sigue que,
ante dos términos dades en conexién, nunea podemos
postular 1a naturaleza formal de ésta. Como los térmi+
os, Jas relaciones entre los términos deben abordare
indireetamente y, en cierta forma, por la banda. La
linglistia estructural tropieza hoy en dia con esta dif
cultad, aunque en un campo diferente, porque tambien
ella se funda en una Iogica coalitativa: coge pares
‘de oposiciones formadas de fonemas, pero el espiritu de
‘etda oposicidn cs en gran medida. hipotética: en la
e1apa preliminar, e¢ dificil, para defininlo, evitar un
determinado impresionismo, y varias soluciones del mis:
mo problema son posibles durante largo tiempo. Una
de las mas. grandes dificultades de 1 Linguistica es
tauctural, que s6lo ha superado imperfeccamente, obede-
‘cea que a reduccidn que realiza gracias 2 la nocién de
‘opasicion.binaria, debe_pagarse al precio de una ci
versidad de naturaleza, insidiosamente reconstivuida en
provecho de cada oposicién: disminuida en un plano,
el mimera de las dimensiones se restablece en otro.
Sin embergo, podria ser que en lugar de una dificultad
de método, troperdramos con un limite inherente a la
naturale de algunas operaciones intelectuales, cuya
debilidad, al mismo tiempo que su fuer, consistria
fen poder ser Iogicas permaneciendo, al mismo tiempo,
arraigadas en 1a cualidad.
Hay que considerar por separade un iilime tipo de
difieultad que concierne mie particularmente las cae
sificaciones Hamadas “totémicas” en sentido amplio.
decir, aquellas que son, no's6lo concebidas, sino vividas.
Cada’ ver que son denominados algunos grupos socia
Tes, el sistema concepwwal formado por estas denomina-
ve LAS GLASIFICAGIONES ToTeMICAS
Giones se halla, por asl deco, entregado a lox capri
thor de wna evolucién demogeien que posce ss lees
propas, pero que es contingente por retacon a el En
ecto, el sitet cs dno en Ia seroni em tani que
Ia evolucém demogrdtca se deenvuelve en la dco
las 0 sex, dos determin, cada uno de los cuales
opera por'mtcoenta y sn preocopare por el tf
ste confit entre sneroniay diacronia existe tam
bien en ef plano lingusica. "Es probable que ln
caraceres etructrals de una lengua cambien a Ia
Poblacion que la tim, antto muy vasa, se torna
Progrsvamente mis pequcia: yer claro que tna lene
fun desparae con fr hombrts que la hablan, No
fbsante, el lzo entre sincroniay iaconia no et tk
flo, em primer Tage, porque todo ly ejetor pata
terse valen (ormala que ripidamente se tomar fl
ssc tomara uno elcotlado de Indicar caso conceto)-
Y desputs y sobre todo, porque In eaructura de Ta
Jengua etd Teluivamente proterida por a uncibn pb
tha, que es Ia de auegurar ba comunicalon: a lengua
no ty pus, sensible la infiuenca de los cambloe de
Mogridcor més que dentro de algunos Minis, en
Invmedida cn que tu funcéa no se ve compromedda:
Paro ot shtemas conceptoale que extdiames qu no
son (0 n0 son mia que mibsdiriemente) ‘hedion
4 comunicar: som roclion de pemar, aaividad copes
Condiciones ton macho menos etritas Uno se hace
fomprender o nos pero uno Pensa mis © meney Bien.
El orden del ponstmiento comporta grados. y un me:
dio de pensar puede degentrar nem en mation
ae recordar. Esto explica que lr etrucurs snerént
tas de los sinemae lsnadontotGnico sean en exrem0
Salnerabler a lor efector de 1a diacronia: un medio
Hemoléenico opera con menoresgaston que un medio de
reflexion insect, el al, a su ve, ch menos ex
fente que'un medio de comunicacin,LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 105
Hstremos este punto con un ejemplo apenas ima-
ginario, Trétese de una cribu antafo dividida en 3
lanes, cada uno de los cuales Tevaba el nombre de un
animal, simbélico de un elemento natural:
- ea ome
com sin) oa
y Supongames que In evolucién demogrifica ha prove:
cado Ia extincion del clan del oso y Ia proliteracién
del de Ta tortuga, el cual estd, por consiguiente, esein-
‘ido en dos subclanes que, ulteriormente, han legado
al status de clan, La estructura antigua’ desaparecerd
‘completamente y coderd su lugar 2 wna estructura del
tipo:
est, —
forage tile roe wie
No existiendo étra informacion, seré vano buscar el
plan inicial detrds de esta nueva estructura; inclusive
6 posible que todo plan, consciente o inconsciente-
mente percibido, haya desaparecico completamente det
pensamiento indigena, y que después de este trastorno,
log tres nombres del clan no sobrevivan més que como,
etiquetas tradicionalmente aceptadas, desprovistas de
significacién en el plano cosmolégien. Este resultado
ce probablemente muy frecuente, y explica que un sie
tema subyacente pueda ser, a veces, postulado de dere-
cho, aunque sea imposibleyrestituirlo de hecho. Pero
menudo, también, las cosas ocurrirén de otra manera
En una primera hipdtesisyel sistema inicial podré so:
brevivir, en Ia forma mutilada de una oposicidn binaria
106 _LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS
centre el ciclo y el agua. Otra solucién seria resultado.
del hecho de que habia tres términes al comien20, y de
(que tres términos subsisten al final; sin embargo, Jos
trea primetos terminos expresaban ‘una triparticign ire
ictible, en tanto gue los otros tres son resultado de
dos dicotomias sucesivas, primero entre el cielo y el agua,
Yy despuds encre amarillo y gris. Que esta oposicién de
colores reciba un sentido simbéliéa por ejemplo bajo
Ja relacién del dia y de la noche y tendremos, ya. no
tuna, sino dos oposiciones binarias: cielo[agua, y dla]
noche, es decir, un sistema de cuatro cérminos.
‘Veroos, pues, que la evolucién demogréfica puede
hacer exallar a la estructura, pero que, si Ta orientacién
‘estructural resiste al choque; dispone, a cada trastorno,
dle varios medios para restableeer un sistema, si no idén-
tico al sistema anterior, por lo menos formalmence del
rismo tipo. Ahora bien, esto no es todo: pues no be-
‘mos corsiderado hasta ahora mis que una dimension
del sistema, y éste tiene siempre varias, que no son
igualmente vulnerables a 10s cambios demogriticos. To-
memos de nuevo el ejemplo dexde el comienzo. Cuando
inuestra sociedad teérica se hallaba en la etapa de los
tres clementos, esta triparticién. no. funcionaba sola
mente en el plano de los nombres de canes: el sis.
tema descansaba sobre mitot de creacion y de origen, €
impregnaba todo el ritual. Aun si la base demografica
te viene abajo, este tastorno no repercute instancinea
mente sobre todos los planos. Los mites y los rites
cambiarin, pero con un cierto retardo, y como si estu
viesen dotados de un remanente que preservard en ellos,
durante un tiempo, toda o parte de Ia orientacién pei-
mitiva. Por tanto, a través de ellos, éta permanecerd
loperante indirectamente para mantener Las nuevas solu
‘Gones estructurales en Ia linea aproximativa de la es
fructura anterior. Si suponemos un momento inicial
(cuya nocién 5 totalmente teérica) en el que el con:LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS oy
junto de to siemas haya extado exactamente ajustad,
tate conjunto reaccionard a todo cambio. que afecte
Primero, a tna de sut_porey como una miquinn de
Fred:backs aujeada (en lat dos acepciones del ter
mino) por su ammonia anterior, orientard al Srgano
escompucno en el and de un equa que sera
por lo menos, una componenda entre cl etado antigua
Fel deorden intrelacdo. dede fuera
‘Tanto a conesponden como no, ale realidad hist
fica nv tradihonesIegendnias de Jon gos mesa
ave el pemamieneo indigena ha podido consider in
tcrpetaciones de ete tio, fundada en Ia hes te
tim sepulcion‘erceual del deven hiadego, Chan:
olor ancottos emergicron de las profundidades de
Invite les estaba didn en don groper, uno
paclico) vegetariano, y asociado al lado teqacrda, a
‘10 elicon, carnivoro, stoi al Ido detecho Lon
desi grupes rnoldcon lane y cambiar. eure 00
respectivon alimentos En el coro de sis migraconcy,
{sos grupos encontraron a otro, Seon, que te Auta
fxcusivamente de caro, con el el legaron a unine
{Gada uno de Tos tes grupos comprendia priniivamen:
te dane, lo que suata un toul de 21. A pesar de
fea simetria tiparta, el stems extabn descqulibado,
Pcs. que lor recién igs pevenecian tambien. al
fado dela guerra, y babia 14 danes de umn lado y 7
cae eee
€l equllrio entre el Jado de Ia guera y el lado Ge la
parse redjo el némero de fo canes de uno de lee
rupos guerreros a5, y el del otro a 2 Desde entone
fx lo camparientos de low cogs deforma. relat
4 cuya entrada te abre al ete, comprenden canes
de Ts par que ocopan la mitad norte, 4H iejuerda de
is entrada, 77 anes de Ia guerra que ocupan Ia itd
sur, 4 ln derecha de la entrada. (J. 0. Doney, 1, 2)
Ta leyenda invoca ast un doble venir; uno, pur:
408 LAS CLASIFICAGIONES ToTEMICAS
‘mente structural, que pas de un sistema dualista a
un sistema tripartita, con retorno al dualismo anterior;
fl otro, a Ia ver estructural e histérico, que consiste
fen la anulacién de un trastorno de Ja estructura primi-
iva, Fesultance de acontecimientes histéricas 0 conce-
ides como si Io fueran: migraciones, guerra, alianza.
Ahora bien, Ja organizacién social de los osagos, tal
‘como puclo ser observada en el siglo xr, integraba de
hecho los dos aspectos: aunque comportaban el mismo
riimero de elanes, el Iado de la paz y el de In guerra
‘estaban en desequilibria, puesto que uno era puramente’
"cielo", en tanto que el otro lamado también de “la
tierra", comprendia dos grupos de clanes respectivamen-
te stockidor a la tierra firme y al agua. El sistema era,
‘pues, simultineamente histérieo y estructural; binario
Y ternario; simétrico y asimétrico: estable y sin conse-
fuir su propésivo de serio.
‘Ante una dificultad del mismo tipo, nuestros contem-
porineos reaccionan de otra manera. Prucha de ello,
‘eta comprobacién de desacuerdo que pone fina un
reciente coloquio:
Rertrand de Jowvene!: —Sefor Priowret, squ-
slera uated terininar didéndolo. en unas” pocas
Para at :
Roger Priouret! —Me parece que nos hemos er-
oncrado, de hecho, aie dos tele por completo
puesta
Raymond Aron yuelve a considerar Ja tesis de
‘andre: Siegfried. Para André Sietried. hay en
Francia ‘or scttuder_ potas fondamentales,
Nuestro pais unas vece! «s orleaists, y otra 8
onapardta, Orleanista ‘cuando deja en manos
de for dipuiados el cuidado. de los asunton pit
tices ‘Bomepartista cuando. acepta’ el poder
oa, yan 1p dean ec a
farota como la e871 ona guerra. que st
prolongs como Inde Argel, Frenca cabin de1LAS GLASIFIGACIONDS TOTEMICAS 10
sesitd, 8 dece, pat’ del bomsparismo al orea
‘amo, como en fai, 0 del eckanismo al bons.
Partai, como el 18 de mayo de 1088,
Personalente, por lp contaroy yo ere que el
cami scan, i que sea caalaene Tndepen
dene del wemperaninto polltco trancls est
fdo sos travtornor que oindatralisng seanea
Ele wocledad. Bro pataelo hits cl que
te me viene 4 las mente A Ta primera Yevluc
Sion industrial corresponde ct golf de ttado del
Eide didembre. de IBbl, a le segunds, el golpe
undo del 18 de mayo de 100 To ou pe
Inbras tn trator de las condiciones de I ho.
ducdn y del consimo parece inconciliable® en
isn. Sl epineh prtament 9a
= reso pfs aca Ya forma del poder attri
fio que cofreyonde a'mt temperament, es dear
aT poder personal. (Sedeis p20),
Es probable que a los osagos, estos Ulos tipos de opo-
sicidn (uno sinerénico, otro dizerénico) hubieven ser-
‘vido de punto de partida; en ver de pretender elegir
centre ellos, los habrfan admitido en pie de igualdad,
‘buscando a la vez elaborar un esquema tnica que le
permitiera integear el punto de vista de la estructura
y el del acontecimiento.
Gonsideraciones del mismo orden podrlan explicar-
nnos, sin duda, de manera harto satisfactoria para la
inteligencia, Ia curiosa dosificacién de divergencia y
hhomologtas que caracteriza a la estructura social de las
cinco naciones iroquesas y, en wna escala histrica y
eogréfica mis vasia, Las semejanras y las diferencias
de que dan testimonio los algonquinos del este de los
Extados Unidos. En las sociedades de clanes unilineales
¥ exogtimicos, el sistema de los nombres de Jos clanes se
halla casi siempre a mitad del camino encre el orden
y el desorden; lo que, al parecer, sélo podria explicar
la accién conjugada de dos tendencias: una de origen
sno TAS GLASIFICACIONES TOTHMICAS
demogrtic, que: Neva a la desoganiac, ots: de
ingpiracién tellexiva, que eva la Teorganizacion con
forme a una norma To mls semejante posible a estado
ejemplo de Tos indica pucblo, cuyas aldeas one
iy iene el epee ts mes
del qe © sospecha que podria ser el mismo para todox,
pon de rete el fendmeno. Al compl las flor
FBaciones lavas bop, nuh eres y anoan, Rrocber
Greys antato que podia demottar “que un’ eauema
ley pectic! Ur rpunanin int ara bt
indioe pieblo”, aunque cada aldea mo ofrexca ms que
tina htrscion prea y deforma. ste cindro (pH)
Cofnke en unit curoctors de 12 pares de cane: sr
lene de caxabel pantera; cersoanilop: clabam gr
Tig nubematr; lagartotierras conejotabaco; "mostra
talaje™ (Stonia)gillo svete; kacehing_ (curve
Jove: pinodlama): ledncoyote: un grupo de 4 clans
(Cechnan, dguilepae) ; ejincans ‘unjueseconcha ©
coral. (Kroeber, 1, pp. 187140)
Bia Ingenio tentaiva de rewltair un '“plén. mae
tro” a sido eritcada por Egan con fundamento. en
formacones mis mumcrossy menos. amabigust que
aquelas de Int que podla diponer Krosber en 1915:
1616, fecha a ta que ee remoncam sus observaciones
Pero se le podiia opones a Kracbr ote argumento de
orden pejudiil: ycdmo podria haber sobrevivida an
plan mnestro a las evolucones demograic diverge
tes de cada ales? Ateniéndoncr as tnormariones
publicadas por el propio Xrocber, comparemos la dir
{eibucidn de Los clanen de Zu (1650 babitanies em
1018) y eu don aldeas hopi de Ia primera mes, cxyo
2utor ha mulipliado la cla de poblacin por cinco
Gresutado: 1610) 4 fin de hacer as lb confrom-
facta:LAS CLASIFICAGIONES TOTEMICAS 114
Rt (watpiyschureuty
Sol, iguila, pavo a0 -
Comin 490 ts
Mate, rama 195 25
Comadzeja, oF0 195 160
Gralla 100 mada
Coyote B &
Mostaza, gallo silvestre 69 235
‘Tabaco 45 185
Gervo, antilope 20 5
Serpiente de caxcabel nada 0
Lagatto, tierra mda M5
(Glan desconocido) 10 ada
Tora. io iio.
Si se traza la cura de distribucidn de los clanes zu
colocindolos en orden demogrifico decreciente, y si
sobreponemos la curva de los clanes hopi de la primera
‘mesa, se comprueba que las evoluciones. demogréficas
son divergentes'y que la comparacién no deberia per-
‘mitir,tebricamente, reconstruir un plan comin (Fig. 3).
En estas condiciones, y aun admitiendo que Ta re.
construccién de Kroeber violenta In experiencia on
algunos puntos, no ¢s menos notable que tantos ele
‘mentos comunes y de vinculaciones sistemicicas subsis-
ten en las diferentes organizaciones locales, Jo que
supone, en el plano de la reflexién intelectual, un i=
{gor, una tenacidad, una fidelidad a tas distinciones y a
las opesiciones, de los que en el plano prictico, wn
botdnieo ha recogido pruebas igualmente convincentes:
En México, he trabajado sobre todo con cam
pesinos de extraecidn completa o parcialmente et
Fopea. Aun lor que tenlan aspecto de indigenar
preferiam hablar espafiol y no se consideraban in-
12 LAS CLASIFICACIONES TOTENICAS
ey
pevionos por clon
Tass se7 eo NR
Fic. : Distribucidn de la pobleciin por clanes en Zu entre
Tos hopi de le primera mesa.
dim, He encontrado dense 1 mina cane de
acion en Guatemala, pero all he al
Efmbien con Indios que habian conserado su a
tf Kenge 9 a tara ona par
Meat exaban, en cuanto a por eecciona:
fiis"de_manera mucho. mar erica que en el
{Guo de sus vecinos de lengua espaila. Sus plan-
tacioncs hublan permanecido tan autentieas como
to furron, en los Estados Unidos, las plantaco.
mia le mar en la gran epoca de los concursos
Sgricola, cuando lor aguicaltores 86 entregaban,
nos nds suites refinam lento, a mantener una
tiiformiid que tenis mucha amportames en ia
ompetcncia. El hecho era notable, en raedm deLAS CLASIFICAGIONES TOTEMIGAS 11g
4a extrema yarnblidad del_mair guatemalteo
ce seer» em a om al eal
bibrida: basta com que un nse trae
pe pa inet ieee cae
Para que toda I conecha remit mera. Silo na
elecciin meticuloss de las mazoreas de simiente
Yel demrraigo de ta plantas que se dervian del
lipo pueden permite conser una varedad pura
1 les condiciones Y sin embargo, en Mex
fo, en Guatemala y en nuestro. propio sidoeste
Ie'scwacin es lar silt donde Ian vies calturas
indigenss ban testido mejor el mair ha conser:
rade major homogeneidad dentro’ de lov Vanites
de la varedad,
Milo at ade, cid ma colciin
fe granos de imal, recogidos en un pusblo toda.
‘a's primivos los mags de Asam a toe que
Zigunos findlogos desciben diciendo que ve tn:
aentran todavis en la edad de pltirs’ por todo
fo que respects a ln vida cotidians. Cat tbe
cuts very vriedades de mn que deren
unas de otras de'manera tajente y, sn embargo,
fn eno de adn varicdd cau oy ree
iss de-una planta 2 otra. ¥ lo que’s mis,
mas anedades ae ete Tas orgies, en
talivadas, no’ s6lo por familias diferentes, sino
or tbs dilerentes,y en reglones,igualmente
Aiferemes. Era neessrto un apego fandtico aun
{ipo ideal para comervar ton poray stay varie.
ladey,siendo que se tramitian 0. adquirian. de
familia'a familia, de tribu a tsibu. Por tanto,
parece ser inexacto afirmar, como se hace tan'@
eh es
Guendran entre los pueblos més primitives. Exae
famenie, ocurre lo Gontrario. Phet son sobre todo
Jon indigenss ‘recuentemente vision Tos ‘que
viven cefea de las grandes vias de comunicacon
Ye fas ciadades y cuya-culeora tradicional se
hh deterorado mis gravement, Tot que han dado
arigen a ia ereencia de que los pcos primiivs
14 _LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS
son horticultores descuidados. (Anderson, pp. 218-
219)
Andon Hs ag de anes nprsnants a
preocupacon por lat separaconesdiferenciales, que ine
wae atcivded copiien y « Ie reflexia imtelec
Reade Yor que lamiamor primitives. Por su caricter
formal por la “press” que hace sobre toda sbere de
feomtenidon, ext preocupacion explica que as instia-
‘once indigenas pueda, sumqoe también ells se vean
Srresradas en un flnjo de temporalidad, mantenerse
Aisancia coostante de la contngendia historia y de 1a
Snmutsbilidad de un dan, y nsvegar, valga Ia cxpre=
fon, en a coriente de intligibilidad. Siempre 2
‘ditanca aroma de Carbs y de Sala diacronia
finaonia, acontecimiento y estructura, etétics gr
ta, naturnlesa 90 ha podido oculereles mis que a
‘Queues pretendla delinicla solamente por un aspect.
Bue ef sbourdo. profundo de la pricicas y de las
Gqeencias primitivs, procamado por Frazer su val
diciin tspeiom por’ evidencas de un pretendide
fentido comin, invocadp por Malinowski, hay lugar
pura toda una cee y para toda une flsotia,IIL. LOS SISTEMAS DE TRANSFORMACIONES
Como acabamos de ver, las Idgicas practicoteéricas que
rigen la vida y cl pensimiento de las sociedades Hama
ddas primitivas estin movidas por Ia exigencia de lat
separaciones diferenciales, Esta exigencia, manificsta ya
fen Tos mitos fundadores de las instituciones totémicas
(LéviStrauss, 6, pp. 2728 y 3087), aparece también
en el plano de Ia actividad técnica, dvida de resulta:
dos marcados por el sello de la permanencia y de Ia
discontinuidad. Ahora bien, lo que importa tanto en
1 plano de la seflexién intelectwal como en el plano
prictico, es la evidencia de las separaciones, mucho més
que su contenido; forman, una vex que existen, un sit.
(ema utlizable a la manera de un enrejillado que se
aplica, para descifrarlo, sobre un texto al que su in
tcligibilidad primera de Ia apariencia de un flujo indie.
‘into, y en el cual el enrejillado permite introducir cor-
tes y contrastes, es decir, las condiciones formales de un
mensaje significante. E1 ejemplo teérico que. hemot
discutido en el capitulo precedente muestra eémo un
sistema cualquiera de separaciones diferenciales —en
cuanto ofrece el cardcter de sistema permite organi
tar una materia sociolégica “trabajada” por la evolu
ibn histérica y demogratica, y que consiste, pues, en
luna serie teéricamente ilimitada de contenidos dife-
EL principio Idgioo es el de poder oponer siempre
‘términos, que un empobrecimiento previo de la total
dad empirica permite concebir como si fueran distintos.
Cémo oponer es, por relacién a esta exigencia primera,
‘una cuestién importante, pero cuya consideracién viene
después. Dicho de otra manera, lot sistemas de deno-
‘minacién y de clasificaci6n, coménmente Hamados wocé
‘micos, sacan su valor operatorio de st cardcter formal:
15
LOS SISTEMAS DE ‘TRANSFORMACIONES
ton cédigos, capaces de transmitir mensajes traducibles
en Jos términos de otros cédigos y de expresar en st
propio sistema los mensajes recibidos por el canal de
ofdigos diferentes. El error de los etndlogos clasicos
ha consistido en querer reificar eta forma, ligarla a un
contenido determinado, siendo que se presenta al obscr-
yador como un método para asimilar toda suerte de
contenidos. Lejos de ser una institucidn auténoma, det
nible por caracteres intrinsecos, el totemiamo o lo que
pretence ser totemismo, corresponde algunas modali-
dades arbitrariamente aisladat de un sistema formal
‘uya funcién es la de garantizar la convertitilidad ideal
de los diferentes niveles de Ia realidad social. Como
Durkheim parece haberlo entrevisto a veces, et en una
“rocio-égica” donde reside el fundamento de Ix socio:
logis. (LéviStrauss, 4, p. 86; 6, p. 187)
En el segundo volumen de Totemism and Exogemy,
Frazer se interesé.particularmente en formas simples
de las creencias totémicas, observadas en 1a Melanesia
por Codrington y por Rivers. Greyé reconocer en elas
formas primitivas, que serian el origen del totemismo
‘concepcional australiano del que, segun él, se derivarian
todos los demés tipos.,En Tas Nuevas-Fidbridas (Auro-
ra). y en las islas Banks (Mota), algunos individuos
creen que su existencia extd ligada a Ia de una plant
de un animal, 0 de un objeto, Iamados atei 0 temaniss
cn las islas Banks, y munu en Aurora; el sentido de
rmumu, ¥ quizis también el de atai, 8 aproximadamente
el de'un alma (Fig. 4).
Segiin Codrington, un indigena de Mota, descubre
tu femaniu por una visién, 0 eon Ja ayuda de técnica
ivinatorias. Pero, en Aurora es Ja futura madre la
que se imagina que un coco, un fruto del drbol del
an, o cualquier otro objeto, esté ligado misteriosamen:
{eal nifo, que seria una suerte de eco ce dicho objeto.
Rivers ha encontrado las mismas creencias en Mote,1LOS SISTEMAS DE TRANSFORMACIONES 147
donde muchas personas observan prohibiciones alimen-
ticias porque cida una cree ser un animal o un fruto,
‘encontrado u observado por su madre mientras estaba
‘embarazada, En tal easo, Ia mujer lleva In planta, el
fruto o el animal a la aldea, en donde se inforzna del
sentido del incidente. Se le explica que dara nacimiento
un niflo que se pareceré a la cosa, o que sera es
cosa misma. Entonees ella vuelve a colocar esa com
en el lugar en que la enconted, y, sf se trata de un
animal, le construye un refugio con piedras: lo visita
cada dia y lo alimenta. Cuando el animal desaparece,
porque ha penetrado en el cuerpo de la mujer, de
donde volvers a salir en forma de nif.
So pena de enfermedad 0 de muerte, ¢l nifio no po
dra consumir Ia planta 0 el animal con el que se le ha
identificado. Si se trata de un fruto no comestible, el
Arbol que 1o produce ni siquiera podra ser tocado, Se
asemeja la ingestign o el contacto & una suerte de auto-
anibalismo; la relacién entre el hombre y cl objeto
3 tan intima que el primero pose Tas caractersticas
del segundo: segiin los casos, el nifto serd débil ¢ indo-
Jente como 1a anguila y la serpiente de agua, colé-
rico como el cangrejo ermitafio, suave y amable como
1a lagartija, aturdido, preeipitado ¢ irrazonable como la
rata, o bien tendré un vientre gordo que recuerde Ia for-
ama de una manzana silvestre, etcétera. Estas equivalen-
cias se encuentran también en Motlav (nombre de una
parte de la isla Saddle;
entre un individuo por una parte, y, por la otra, una
planta, un animal o un objeto, no es general: afecta
solamente a algunas personas, Tampoco es hereditaria
y no lleva consigo prohibiciones exogimicas entre hom:
bores y mujeres que el azar habria asociado a seres de Ta
misma especie. (Frazer, vol. 11, pp. 8183, pp. 8991
[citando a Rivers), y vol. IV, pp. 28687.)
Fraser ve, en estas creenciss, el origen y la explica
i$ LOS SISTEMAS DE TRANSFORNACIONES
NUEVA GUINEA
Fic, 4. Mapa parcial de la Melonesia centro de documentacién acerca de. Oceania
de fa Exuela Practica de_Altos Estudios,