ERRORES MÁS FRECUENTES EN LOS
INFORMES PERICIALES PSICOLÓGICOS
El Informe Pericial
Psicológico constituye actualmente una de las pruebas de mayor relevancia en muchos
procedimientos judiciales en los que se trata de dilucidar el ajuste psicológico y/o
lacompetencia parental de las personas en litigio, laadaptación psicosocial de los
menores o lacredibilidad de un testimonio, especialmente en procedimientos de
guarda y custodia de los hijos.
Fiabilidad y Validez del Informe Pericial
El informe pericial psicológico debe garantizar que el auxilio que ofrece al Tribunal
judicial responde al proceder más ajustado a los conocimientos científicos actuales,
ofreciendo las menores dudas posibles acerca de sus conclusiones. Sin embargo, no
existen protocolos establecidos con un suficiente grado de consenso entre la
comunidad científica para garantizar la máxima Validez de este tipo de evaluaciones
(entendida por Validez que tanto los instrumentos psicológicos como la metodología
utilizados sirvan realmente al objeto de la evaluación solicitada), ni una
suficiente objetivación en la toma de decisionesque garantice la máxima Fiabilidad de
las conclusiones alcanzadas (es decir que impida que en otras circunstancias similares
puedan alcanzarse conclusiones totalmente contradictorias). Quizás por ello
encontramos con mayor frecuencia de la deseable, errores de tal envergadura que
deberían conllevar necesariamente la nula consideración de las conclusiones que de
ellos se deriven, si bien no siempre puede dilucidarse la relevancia de dichos sesgos
por parte de Jueces y Fiscales, dado que no son expertos en Psicología Forense.
Por ello, la persona perjudicada por dichos errores periciales cada vez es más habitual
que promueva un Dictamen o Contrainforme pericial que evalúe el informe pericial
por el que se siente perjudicada, y aprecie si existe una suficiente fundamentación
científica en sus conclusiones.
Errores más frecuentes en los Informes Periciales
Psicológicos
A continuación, se ofrece a modo de autocrítica un listado de los sesgos más
habitualmente encontrados en los informes periciales psicológicos, que todos los
Peritos Forenses deberíamos evitar, y que también pueden orientar a Jueces y Fiscales
en su práctica judicial:
Obviar evaluar a todos los miembros de la familia: por ejemplo, prescindir de evaluar a
los menores a pesar de tener edad suficiente para completar un test psicológico o ser
entrevistados.
Valorar la competencia parental o los estilos de crianza de los progenitores sin utilizar
prueba psicológica alguna, a partir de la información ofrecida por cada uno de ellos en
la entrevista, o en base a juicios de valor acerca de lo convincente que resultan sus
propuestas.
Obviar ofrecer la descripción de los resultados obtenidos en las pruebas psicológicas, o
la reflexiónen torno a ellos, u obviar ofrecer una integración de todos los resultados.
De tal manera que las conclusiones parecen más basadas en impresiones o en unos
pocos datos, que en el proceso completo de evaluación seguido.
Falta de transparencia: al no aportar todos los resultados obtenidos en las pruebas de
evaluación, ni siquiera los significativos, se dificulta su
necesaria contrastación científica y obliga a un innecesario ejercicio de confianza ciega
en la labor del Perito.
Obviar la toma en consideración necesaria de todos los documentos y datos obrantes
en Autos, o los aportados al proceso pericial por uno u otro progenitor.
Ofrecer sólo los datos que muestran congruencia con las conclusiones alcanzadas, de
entre todos los obtenidos en la evaluación pericial, y obviar los incongruentes.
Aunque pueda resultar inverosímil, uno de los errores más frecuentes consiste en
la falta de fundamentación científica de las conclusiones ofrecidas en el informe
pericial.
Errores en la utilización de las pruebas psicológicas (tests, sesiones de observación).
Los más habituales, son:
Pruebas desfasadas: Utilización de pruebas demasiado antiguas, y cuyos baremos
están tan obsoletos que no permiten extraer resultados aplicables al contexto
sociocultural actual. Es decir, al cambiar la sociedad cambian los valores, creencias y
costumbres, y se requiere adaptar los tests para contemporizarlos, adaptando la
redacción de sus preguntas o ítems, y obteniendo nuevos baremos de referencia
adaptados al momento presente.
Pruebas que no cumplen los requisitos metodológicos mínimos: Utilizar pruebas que
han sido baremadas con un escaso número de sujetos, o cuyos grupos de baremación
son escasamente representativos de la población, por ejemplo en cuanto a su escasa
variabilidad clínica, a pesar que la prueba pretende ofrecer una adecuada
discriminación entre un sujeto y otro en cuanto a la clínica que padecen.
Utilizar una gran cantidad de pruebas, como si con ello aumentara la calidad del
informe pericial, cuyos resultados luego no se tienen en cuenta, para finalmente basar
sus conclusiones en impresiones obtenidas en las entrevistas periciales, o en posibles
prejuicios a favor o en contra de un tipo de custodia, como la compartida.
Discriminación entre uno y otro progenitor en la utilización de las pruebas: Utilizar
pruebas diferentes con uno u otro progenitor, lo que impide una mínima comparación
estandarizada entre ellos.
Errores en la temporalidad de los síntomas evaluados: Utilizar sesgadamente pruebas
psicológicas diseñadas para evaluar los síntomas sufridos en las últimas semanas, para
intentar apreciar rasgos de personalidad que son características estables e inflexibles
del comportamiento que suelen iniciarse en la adolescencia o el principio de la edad
adulta.
Errores en el rango de edad: Utilizar pruebas indicadas para un rango de
edad concreto con personas que no tienen esa edad, como la utilización con
adultos del Test del Dibujo de la Familia, cuando dicha prueba está indicada
exclusivamente para niños y adolescentes.
Errores en la finalidad de la prueba: Utilizar sesgadamente pruebas cuya finalidad es
laselección de personal, el desarrollo personal, la orientación al proceso de
tratamiento, o la mera evaluación del nivel de estrés para apreciar una posible
incapacidad o invalidez psíquica,para evaluar posible desajuste psicológico (rasgos
desadaptativos de personalidad y trastornos mentales).
Errores con respecto a la utilización de las entrevistas periciales: En muchos informes
periciales los resultados de las entrevistas aportan una información relevante en sus
conclusiones, por lo que estas deberían realizarse con el máximo rigor científico, sin
embargo suelen cometerse errores tales como:
Obviar ofrecer la información relevante obtenida de las entrevistas, o no ofrecerla
textualmente. Ello dificulta gravemente una mínima contrastación externa, por
ejemplo para conocer si se ha interpretado de forma objetiva los datos aportados por
las entrevistas.
Realizar una única entrevista a cada miembro del núcleo familiar, sin posibilidad de
someter la información obtenida a una necesaria contrastación inter-progenitores,
como si los peritados no pudieran ofrecernos la información de forma sesgada, o en
ocasiones incluso intencionadamente.
Utilización diferente de las entrevistas con uno y otro progenitor, en cuanto a
su duración, o sunúmero. En ocasiones encontramos que a un progenitor se le ha
realizado una única entrevista, mientras que al otro se le han realizado dos o más, lo
que puede ser indicativo de la existencia de posibles prejuicios hacia uno de ellos, o
hacia sus propuestas.
Sesgo en realizar intentos de diagnóstico clínico durante la entrevista pericial sin
contar con la necesaria especialización en Psicología Clínica.
Obviar la evaluación en profundidad de posibles procesos de Interferencia Parental o
deAlienaciónParental entre los progenitores, de un posible Maltrato o Abuso Sexual o
de un posibleAbuso de sustancias adictivas por parte de alguno de ellos, o
las denuncias existentes entre ellos, y todo ello a pesar de la existencia de indicadores
al respecto. U obviar valorar la existencia de comportamientos relevantes de
una escasa sensibilidad hacia las necesidades de los menores, tales como la renuncia
voluntaria a su sostenimiento económico, o la renuncia a mantener una mínima
comunicación con el otro progenitor con el objeto interesado de aparentar la
existencia de un mayor conflicto entre ellos del realmente existente.
Publicado por PABLO TORRES SALVADOR en 21:58