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Informe Final Arqueología Santa Bárbara. Mompox. Oct. 2014 PDF

Este informe presenta los resultados de un programa de arqueología preventiva realizado en la plaza Santa Bárbara y la Carrera 1a Sector Albarrada Sur en Mompox, Colombia. El trabajo incluyó la prospección, salvamento y monitoreo arqueológico de las áreas afectadas por obras. Se encontraron vestigios prehispánicos, coloniales y republicanos que aportan nueva información sobre los patrones de asentamiento en esta región durante diferentes periodos. El informe también incluye un plan de manejo de los hallazgos y actividades

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Este informe presenta los resultados de un programa de arqueología preventiva realizado en la plaza Santa Bárbara y la Carrera 1a Sector Albarrada Sur en Mompox, Colombia. El trabajo incluyó la prospección, salvamento y monitoreo arqueológico de las áreas afectadas por obras. Se encontraron vestigios prehispánicos, coloniales y republicanos que aportan nueva información sobre los patrones de asentamiento en esta región durante diferentes periodos. El informe también incluye un plan de manejo de los hallazgos y actividades

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INFORME FINAL

MONITOREO Y ACTIVIDADES DE SALVAMENTO ARQUEOLÓGICO


EN LAS OBRAS DE RECUPERACIÓN DEL ESPACIO PÚBLICO PLAZA
SANTA BÁRBARA Y CARRERA PRIMERA SECTOR ALBARRADA SUR.
MOMPOX (BOLIVAR). PROGRAMA DE ARQUEOLOGÍA PREVENTIVA

AUTORIZACIÓN ICANH Nº 3742

YURI ROMERO PICÓN


ARQUEÓLOGO DIRECTOR

ANGELICA VIVAS
ARQUEÓLOGA COINVESTIGADORA

MOMPOX, OCTUBRE 2014

0
1
2
3
4
CONTENIDO

Pág.

INTRODUCCIÓN 8

CAPÍTULO I / METODOLOGÍA 11

1.1. Trabajo Pre-campo 11

1.2. Trabajo de campo 11

1.3. Trabajo de laboratorio 17

CAPÍTULO II / REVISIÓN CRÍTICA DEL CONTEXTO REGIONAL


ARQUEOLÓGICO 20

2.1. Periodo prehispánico, cuenca baja del río Magdalena 20

2.2. Periodo colonial, Santa Cruz de Mompox 25

CAPÍTULO III / TRABAJO DE CAMPO 32

3.1. Prospección arqueológica 32

3.1.1. Registro prospección parque 33

3.1.2. Registro prospección portales 35

3.1.3. Prospección Albarrada Sur 36

3.1.3.1. Registro sector Albarrada de San Rafael y Portales de La Marquesa 37

3.1.3.2. Registro sectores Albarradas del Alba, Campillo y Los Ángeles 38

3.1.4. Prospección trazado líneas eléctricas 40

3.2. Salvamento 42

3.2.1. Contexto arqueológico sector atrio de la capilla 42

3.2.2. Contexto arqueológico sector del manjol 45

3.3. Monitoreo 57

5
Pág.

CAPITULO IV / TRABAJO DE LABORATORIO 61

4.1. Cerámica prehispánica, colonial y republicana 61

4.2. Vidrio 77

4.3. Líticos 81

4.4. Metal 82

4.5. Cuentas de collares y huesos labrados 85

4.6. Ladrillos y tejas 86

4.7. Macrorrestos de animales 88

4.8. Evidencias óseas humanas 93

4.8.1. Ficha 10 análisis de restos óseos humanos individuo 01 94

4.8.2. Ficha 11 análisis de restos óseos humanos individuo 02 96

4.8.3. Ficha 12 análisis de restos óseos humanos individuo 03 98

4.8.4. Ficha 13 análisis de restos óseos humanos individuo 04 100

4.8.5. Ficha 14 análisis de restos óseos humanos individuo 05 102

4.8.6. Ficha 15 análisis de restos óseos humanos individuo 06 104

4.8.7. Ficha 16 análisis de restos óseos humanos individuo 07 106

4.8.8. Ficha 17 análisis de restos óseos humanos individuo 08 108

4.8.9. Ficha 18 análisis de restos óseos humanos individuo 09 110

4.8.10. Ficha 19 análisis de restos óseos humanos individuo 10 112

4.8.11. Ficha 20 análisis de restos óseos humanos individuo 11 114

6
Pág.

4.8.12. Ficha 21 análisis de restos óseos humanos individuo 12 116

4.8.13. Ficha 22 análisis de restos óseos humanos individuo 13 118

4.8.14. Ficha 23 análisis de restos óseos humanos individuo 14 120

4.8.15. Ficha 24 análisis de restos óseos humanos individuo 15 122

4.8.16. Ficha 25 análisis de restos óseos humanos individuo 16 124

CAPÍTULO V / PLAN DE MANEJO Y PROTOCOLOS 126

CAPÍTULO VI / ARQUEOLOGÍA PÚBLICA Y DIVULGACIÓN 134

CAPITULO VII / CONCLUSIONES 141

BIBLIOGRAFÍA 143

ANEXO 1. Tablas de registros prospección, salvamentos y monitoreo 152

ANEXO 2. Fechas carbono 14 Beta Analytic 182

ANEXO 3. Listas asistencia charlas y conferencias 187

ANEXO 4. Documentos disposición final objetos arqueológicos 203

ANEXO 5. Denuncia extravío objeto exposición Academia de Historia 212

ANEXO 6. Cartografía 216

- Prospección plaza Santa Bárbara

- Prospección la Albarrada Sur

- Salvamentos arqueológicos

- Salvamento Manjol (cementerio)

- Apiques post salvamentos

- Prospección líneas eléctricas

7
INTRODUCCIÓN

La investigación se inscribe en el marco de la arqueología preventiva. El propósito


académico ha sido el de contribuir a la identificación y análisis de vestigios
arqueológicos prehispánicos, coloniales y republicanos en el área objeto de estudio
para ampliar el conocimiento de base sobre Mompox; indagando con particular
interés las dinámicas sociales que habrían tenido lugar en el sector histórico de esta
ciudad, particularmente, la plaza Santa Bárbara y la Carrera 1ª (Albarrada Sur).

En la investigación también se acogió la noción de patrones de asentamiento, con


referencia a la manera como las sociedades humanas se han distribuido en el
espacio y en el tiempo y a cómo se relacionan económica y socialmente entre sí.
En consecuencia, toda modificación de un territorio para ocuparlo como sitio de
residencia, campo hortícola, vía de tránsito, espacio ritual o cualquier otra actividad
humana aprehensible y mensurable mediante el registro arqueológico permite
orientar el estudio de los patrones de asentamiento (Romero 2009). De este modo,
se contribuye a explorar preguntas como ¿Dónde vivía la gente? ¿Por qué vivía
ahí?

El área de monitoreo y, por lo tanto, de investigación es la plaza Santa Bárbara; que


incluye el parque, los portales y el callejón de Santa Bárbara o calle 14, es más o
menos de 4,8 hectáreas; y la Carrera Primera sector La Albarrada Sur, a lo largo de
560 metros.

Las coordenadas de referencia Magna Origen Bogotá son:

Plaza Santa Bárbara: 962338 Este – 1513217 Norte.


Albarrada Sur inicio: 962333 Este – 1513288 Norte.
Albarrada Norte final: 962012 Este – 1513746 Norte.

Físicamente, los suelos del área objeto de interés se caracterizan por contener
depósitos inconsolidados cuya edad varía del Pleistoceno al Holoceno. De acuerdo
con el análisis edafológico previo al inicio de la obra (Mincultura 2012), en los sitios
despejados que no se hallaban cubiertos por adoquines se observaban los
siguientes tipos de materiales:

➢ Superficialmente se encuentra una capa de pasto con limo variable entre 5 y


20 cm.
➢ A continuación se halla una capa de limo areno-arcilloso hasta una
profundidad variable entre 0,50 y 1,50 metros.
➢ Más abajo se encuentran arenas finas limosas hasta una profundidad
variable de 2,50 metros.
8
➢ A partir de este último material se hallan arcillas limosas ó arcillas limo-
arenosas, con algunas intercalaciones de arena fina ó limo en profundidad
(Ibíd.).

En los espacios adoquinados, que corresponden al 99% de la superficie de


intervención, el estudio previo muestra la siguiente configuración estratigráfica:

➢ Superficialmente aparece la estructura de concreto rígido (material de


rodadura para el tránsito), cuyo espesor promedio es de 10 cm.
➢ A continuación se halla un relleno compuesto por escombros de
construcción en matriz areno-limosa. El espesor promedio es de 0,50
metros.
➢ Más abajo aparece una capa compuesta por una arena fina limo-arcillosa
gris altamente oxidada de compacidad baja. Alcanza profundidades hasta
de 4 metros y tiene un espesor promedio de 1,50 m, con algunas
intercalaciones.
➢ A partir de profundidades promedios de 2 m aparece una arcilla limosa ó
limo- arcillosa con arena fina de humedad media y consistencia media a alta
(Ibíd.).

De acuerdo con el análisis citado (Ibíd.), los materiales tipo arenas finas y/o arcillo
limosas se encuentran en estado suelto y blando respectivamente, la compacidad
es baja y la capacidad de soporte igualmente baja. Las arenas limosas
corresponden a suelos producto de la depositación del río. En épocas recientes, su
grado de compresibilidad es alto, asociado a su estado suelto. La presencia de
flujos de agua por ascenso y descenso del nivel freático aumenta la posibilidad de
cambios volumétricos que se manifiesta en deformaciones del terreno.

En los mapas temáticos 1 a 6 se muestra la localización general del proyecto y los


resultados de la investigación.

El informe está organizado en siete (7) capítulos. El primero corresponde a la


metodología implementada en el programa de arqueología preventiva.

En el segundo se expone una revisión crítica del contexto regional y antecedentes


de investigación.

El tercer capítulo da cuenta de los resultados del trabajo de campo.

En el cuarto capítulo se expone el análisis de las evidencias y los datos en la


etapa de laboratorio.

9
El quinto capítulo corresponde al plan de manejo arqueológico y los protocolos
para hallazgos fortuitos, exposiciones a manera de museos y colección de
referencia.

En el sexto capítulo se presentan las actividades de arqueología pública.

En el séptimo capítulo se exponen las conclusiones del estudio.

Al final de documento también se incluyen cinco anexos. El primero contiene las


tablas de registro cuantitativo de las evidencias arqueológicas obtenidas en las
actividades de prospección, salvamento y monitoreo.

En el segundo anexo se presenta el informe del laboratorio Bata Analytic a las dos
muestras enviadas para fechamiento de restos óseos humanos por carbono 14. La
interpretación del resultado se incluye en el capítulo III.

El tercero contiene copia de las listas de asistencia a la mayoría de las actividades


de arqueología pública.

En el cuarto anexo se presentan los documentos relacionados con la disposición


final de los objetos y la tenencia por parte de la Alcaldía Municipal.

El quinto anexo corresponde a la denuncia policiva de extravío de una moneda de


finales del siglo XIX, el día de la inauguración de la exposición “Los secretos bajo
las plazas de Mompox” en la correspondiente sala de la Academia de Historia.

El sexto anexo corresponde a la cartografía

10
CAPÍTULO I

METODOLOGÍA

1.1. Trabajo Pre-campo

La fase de pre-campo se centró en el análisis bibliográfico para la caracterización


arqueológica del área objeto de estudio y el análisis espacial de información
secundaria de tipo ambiental, arqueológica e histórica para definir áreas con mayor
o menor posibilidad de albergar evidencias arqueológicas. El resultado de esta
labor se incluye en la sección titulada revisión crítica del contexto regional
arqueológico.

1.2. Trabajo de campo

Se entiende por arqueología preventiva al conjunto de actividades orientadas a la


preservación del patrimonio arqueológico de la nación. En este caso, el programa
de arqueología preventiva estuvo centrado en la actividad de monitoreo a las obras
civiles con el objeto de identificar la presencia o ausencia de vestigios
arqueológicos enterrados y de los que no se tenía conocimiento.

De acuerdo con los lineamientos técnicos del ICANH (2010), para las obras de
infraestructura en contextos urbanos se tuvo en cuenta que:

En el desarrollo de este tipo de proyectos, las medidas de manejo


tendrán aplicación durante la fase de obras, en la medida en que las
intervenciones arqueológicas tendrán necesariamente que contar
con el concurso de aquellas actividades inherentes al desarrollo de
la obra, que implican remoción de los elementos sólidos que cubren
el suelo. Se trata de la aplicación de medidas de prevención y
mitigación de impactos diseñadas de tal forma que ante el hallazgo
de un contexto arqueológico deberá garantizarse la suspensión de
las obras en ese punto, proceder a una evaluación rápida de las
características científicas y culturales del contexto, su estado de
conservación y la implementación de acciones consecuentes, que
pueden llevar al salvamento de las evidencias para mitigar el
impacto de la obra, o a la modificación de la misma para evitarlo
cuando esto sea indispensable dadas las características de dichas
evidencias (Ibíd.: 12).

11
Con base en la experiencia obtenida por Romero (2013) y Romero (2012) en
espacios urbanos, la técnica de campo implementada se basó en la excavación de
apiques a intervalos regulares, inspecciones visuales y actividades de salvamento
en el caso de hallazgos.

La prospección arqueológica empezó en la primera semana de enero de 2014. Esta


se basó en la excavación de apiques de 50 x 50 cm, separados entre sí cada tres
metros, a lo largo y ancho de la plaza y a lo largo de La Albarrada. La profundidad
varió entre 70 y 90 cm. La excavación se realizó por sectores conforme se
avanzaba en la demolición de la estructura de concreto que las cubría (acabado
final de la plaza y Carrera 1ª).

En los mapas 1 y 2 se indica la dispersión del muestreo y sus coordenadas. En las


fotografías 1 y 2 se muestra la actividad de prospección.

Fotografía 1: Prospección plaza Santa Bárbara.

12
Fotografía 2: Prospección en la Albarrada Sur.

En el atrio de la capilla de la iglesia de Santa Bárbara, en un área de más o menos


de 84 m², se encontró un apisonado de arena, concreciones de argamasa y
separaciones de este mismo material. Además, fragmentos aislados de teja, ladrillo
y cerámica colonial (fotografía 3). Ver mapa 3 para la localización del sitio.

Fotografía 3: Salvamento sector capilla.

13
Cerca al apisonado, en el sector del callejón de Santa Bárbara (calle 14), entre el
parque y los portales de Santa Bárbara; junto al Manjol 08 (entrada al sistema de
alcantarillado); se encontraron fragmentos de restos óseos humanos. En
consecuencia, se solicitó al ICANH aprobación para implementar en una estrategia
de salvamento que permitiera precisar la extensión de los sitios y recuperar
adecuadamente los vestigios (fotografía 4).

Fotografía 4: Salvamento sector manjol (profundidad de la


excavación 160 cm)

El procedimiento a seguir incluyó los siguientes pasos:

I- Detención temporal de las obras en el sitio del hallazgo para


dimensionarlo.

II- Encerramiento de protección. El encerramiento consiste en cercar el


lugar para evitar intervenciones no autorizadas sobre el hallazgo.

III- Salvamento de las evidencias. Esto consiste en la recuperación de los


vestigios arqueológicos tal como se infiere de los lineamientos técnicos del
ICANH en el párrafo antes citado (ICANH 2010: 12). De acuerdo con las
indicaciones del ICANH para esta clase de proyectos, se solicitó y obtuvo
de esta entidad el adendo 01 a la autorización nº 3742 para proceder con
esta actividad. Antes de la expedición del adendo, la prospección
continuó en otros sectores de la plaza y en la Albarrada Sur.

IV- El salvamento en el sector del atrio comprende las actividades que


permitieran identificar la función del apisonado, registrarlo topográfica y
fotográficamente y recuperar los vestigios arqueológicos asociados.

14
V- El salvamento de los restos óseos humanos se concibe como un
conjunto de actividades que permiten, primero, visibilizar los vestigios
arqueológicos de manera individual y en conjunto dejándolos
temporalmente in situ (fotografía 6). Segundo, llevar a cabo los registros
fotográficos, topográficos y escritos necesarios para la contextualización del
sitio arqueológico. Tercero, levantar las evidencias, guardarlas en bolsas y
cajas debidamente rotuladas para cada unidad de análisis y trasladarlas a
sitio seguro.

VI- Excavación de nuevos apiques y continuación de obras. Una vez


llevada a cabo la actividad de salvamento se excavó otro grupo de apiques
para verificar la ausencia de vestigios a mayor profundidad. Dicho de otro
modo, después del nivel más profundo donde se encontraron las
evidencias en el salvamento, se excavaron nuevos apiques de 50 x 50 x
100 cm a intervalos regulares, permitiendo verificar la no afectación de
posibles evidencias. Luego se dio paso a la obra civil.

El punto de referencia topográfico (BM 0,00), para medir la diferencia de nivel


vertical, estuvo ubicado en el margen oriental de la plaza (ver mapa 3), al nivel de
la superficie del adoquinado. A partir de este punto se tomaron todas las medias de
la obra civil y de arqueología.

Acorde con lo expuesto, en la primera semana de febrero de 2014 se despejó el


área del apisonado para visibilizarlo y se excavaron por niveles las cuadrículas
donde éste tenía baja compacidad. Esto permitió recuperar los vestigios (v. gr.
fragmentos de cerámica, macrorrestos animales) que allí se encontraban. Luego se
amplió el área de excavación. Al finalizar la etapa de salvamento, se demolió el
apisonado y se excavó un nuevo grupo de apiques para verificar la presencia o
ausencia de evidencias a mayor profundidad. No hubo más hallazgos (Fotografía
5).

Fotografía 5: Grupo de apiques post-


salvamento sector atrio capilla.

15
En la cuarta semana de enero y las dos primeras de febrero, se excavó en el sector
del manjol un cementerio prehispánico del siglo XV d.C., organizado del modo
como se muestra en el mapa 4.

La excavación se realizó descendiendo por niveles de 10 cm en el estrato superior


de arena de relleno que se hallaba debajo de la estructura de concreto de 10 cm,
correspondiente al acabado final del callejón de Santa Bárbara (calle 14); cuya
superficie estaba a nivel del punto topográfico BM (ver mapa 3). A partir de los 60
cm, la estratigrafía del suelo mostró otra capa de 100 cm de arena fina limo-
arcillosa de humedad y consistencia media, donde se encontraron las evidencias
arqueológicas. En ésta última se excavó por niveles de 5 cm al visualizar los
vestigios, los cuales se registraron mediante topografía (estación total), fotografías y
diario de campo. Además, se diligenciaron fichas de antropología forense (v. gr.
estatura in situ de los esqueletos completos, sexo de los individuos y tendencia del
patrón racial) previendo que por la fragilidad de los huesos cierta información no se
pudiera precisar en la fase de análisis de vestigios o laboratorio (ver capítulo IV).
Posteriormente, se trasladaron todas las evidencias a sitio seguro en la casa oficina
del consorcio contratista.

La excavación evidenció que las obras urbanas de construcción del manjol hace
dos décadas, destruyeron parcialmente el área del cementerio. Por esta razón se
encontraron en la prospección fragmentos de restos óseos humanos y de vasijas.
Al finalizar el salvamento también se excavaron nuevos apiques a mayor
profundidad. No hubo más hallazgos (fotografía 6).

Fotografía 6: Grupo de apiques post-salvamento sector del manjol.


La flecha señala el manjol (MH) de concreto.
16
Respecto a la actividad de monitoreo, ésta corresponde al seguimiento hecho al
movimiento de arena por la maquinaria y obreros de la obra. Se revisaron las
zanjas (fotografía 7) para recuperar evidencias aisladas diferentes a las obtenidas
en la prospección y el salvamento. Dicha actividad se realizó entre febrero y junio,
en la plaza y La Albarrada Sur, y en agosto de 2014 en el trazado de las líneas
eléctricas para la iluminación de la obra.

1.3. Trabajo de laboratorio

La fase de laboratorio incluye el lavado y marcado (fotografías 7 y 8), la


organización de todos los vestigios, la clasificación (análisis), los registros
específicos, la diagramación, cartografía, entre otras actividades. Esta fase se llevó
a cabo desde mediados de marzo hasta agosto de 2014.

El análisis de la cerámica se fundamentó en la observación de las formas, los


decorados y el tratamiento de la pasta. En general, la decoración incluye la técnica
utilizada en la realización de los motivos (v. gr. incisiones, aplicaciones, pintura,
etc.); el diseño se considera expresión gráfica de las ideas de quien lo plasma en la
cerámica; la asociación forma-decorado se asume como un elemento de identidad
de los artesanos de una u otra cultura; el manejo de los estilos cerámicos sugiere
un medio activo de comunicación social y la relación textura, composición de la
pasta y tratamiento de la superficie aportan elementos de interés en el análisis de
los fragmentos. Para la documentación cerámica se tuvo en cuenta el glosario del
Fondo de Promoción de la Cultura (FPC 1993).

Fotografía 7: Fragmentos de cerámica Fotografía 8: Labor de marcar la cerámica


lavados en la casa laboratorio en Mompox. con el lugar de procedencia y nivel.

17
Para la clasificación de la cerámica se tomaron como referencia dos documentos de
amplia divulgación en el medio arqueológico. De un lado, el artículo de Reichel –
Dolmatoff y Dussán (1953) que ofrece las bases para la clasificación de la cerámica
indígena del Bajo Río Magdalena. Este artículo ha servido de punto de partida a
otros investigadores como Correal (1975), Reines (1979), Plazas y Falchetti (1981)
y de los programas de arqueología preventiva. De otro lado, el libro publicado por
Therrien et al (2002) que ofrece una guía no sólo para el análisis de la cerámica
colonial / republicana sino también para comprender la tipología previa al contacto
hispano.

Respecto al análisis de los restos óseos humanos, los primeros datos se tomaron in
situ en fichas y diario de campo. En el laboratorio se organizó la información en
fichas digitales y se llevó a cabo el análisis (fotografías 9 a 11) de patrón racial,
sexo, edad en el momento del fallecimiento, estatura inferida por las medidas de
huesos largos y posibles patologías óseas a partir de los criterios expuestos en
Rodríguez (1994 y 2006), Campo (2003) y Krenzer (2006).

Fotografía 9: Análisis de restos óseos Fotografía 10: Análisis de restos óseos


humanos, casa laboratorio en Mompox. humanos, casa laboratorio en Mompox.

18
Fotografía 11: Análisis de restos óseos
humanos, casa laboratorio en Mompox.

Otro tipo de evidencias corresponde a macrorrestos de animales. Como este no es


un campo de especialidad de los arqueólogos del proyecto, se contrató la
consultoría del zooarqueólogo Germán Peña León, profesor en la Universidad
Nacional de Colombia, sede Bogotá, para el análisis de peces, aves y mamíferos; y
se contó con la colaboración del Dr. Antonio Elizalde Hevia, chileno, coleccionista y
autoridad en la identificación de gasterópodos (univalvos) y bivalvos. El resultado
del análisis se presenta en el respectivo capítulo de este informe.

Respecto a los objetos de metal, éstos se analizaron a partir de la relación forma –


uso, consultando el posible uso a personas que trabajan metales en la comunidad
momposina.

Finalmente, para el análisis de los fragmentos de vidrio tomamos como referencia el


trabajo de Ortiz (2007), enfocado a las botellas de este material como marcadores
sociales y cronológicos en los siglos XVII – XX d.C.

19
CAPÍTULO II

REVISIÓN CRÍTICA DEL CONTEXTO REGIONAL ARQUEOLÓGICO

2.1. Periodo prehispánico, cuenca baja del río Magdalena

En términos generales, la Costa Caribe colombiana ha jugado un papel importante


en lo que se refiere a los inicios de la vida sedentaria, la alfarería, la agricultura y la
adopción del cultivo intensivo del maíz (Reichel Dolmatoff 1986; Langebaek y Dever
2000). De ahí que uno de los intereses predominantes ha sido el estudio de los
orígenes de las prácticas agrícolas, asociados a la sedentarización y al desarrollo
de jerarquías sociales (cfr. Plazas y Falchetti 1981; Langebaek y Dever 2000). Esta
problemática se ha asociado a un período Formativo, definido como la época en la
cual los grupos humanos pasaron de un tipo de vida nómada o semi-sedentario a
uno sedentario, organizándose en casas dispersas y posteriormente aldeas, y
pasando del cultivo de la yuca al del maíz (Reichel-Dolmatoff 1986). El cambio de la
vegecultura a la semicultura se vio acompañado de la consolidación de un nuevo
patrón de asentamiento - la aldea – vinculado con el aumento de la densidad
poblacional a nivel regional.

Siguiendo lo expuesto por Angulo (1981), se ha considerado que en el primer


milenio antes de la era cristiana se presentó un cambio en las estrategias de
adaptación de los grupos humanos establecidos en esta zona del país: ellos se
alejaron del litoral y los esteros y se asentaron a lo largo de los ríos y en las orillas
de las grandes lagunas y ciénagas formadas por diferentes ríos. Ejemplo de esta
nueva forma de adaptación es Malambo, ubicado junto a una laguna al sur de
Barranquilla, cerca de la orilla occidental del río Magdalena. Este sitio muestra
vestigios de una población ribereña y sedentaria, que allí se estableció por el año
1.120 a.C. El estudio muestra una cerámica más rica en formas que la de los
períodos anteriores, caracterizada por elementos modelados con anchas incisiones.
Parte de su riqueza se basa en el hallazgo de fragmentos de grandes platos planos,
conocidos como budares, que se asocian con la preparación del cazabe, o pan de
harina de yuca (Reichel-Dolmatoff 1986). Este sitio se ha interpretado como uno de
los primeros ensayos de vegecultura, con testimonios de la presencia de yuca
(Manihot esculenta) (Angulo 1981).

En siglos posteriores, en la Costa Caribe se presentó una nueva adaptación a


ambientes específicos que trajo como consecuencia la diversificación, el aumento
de la población, la generalización del cultivo del maíz y la aparición de culturas
locales, las cuales se manifiestan a través de una serie de complejos cerámicos
diversos en esta vasta región (Groot 1989).

20
En el Bajo Río Magdalena, entre Tamalameque y Zambrano la amplia secuencia
cultural se extiende hasta la conquista española. Los vestigios estratificados en los
niveles superiores y las recolecciones en superficie sugieren la existencia de
pequeñas aldeas a lo largo de éste río. Los indígenas combinaban la agricultura
con la pesca. Además, mantenían cierta movilidad según el aumento del nivel de
agua del río en épocas de creciente, sin controlar las inundaciones, aunque éstas
influyeron en los patrones de asentamiento; haciendo referencia a la manera como
las sociedades humanas se han distribuido en el espacio y en el tiempo y al modo
como se relacionan económica y socialmente entre sí.

En esos sitios, el material predominante se caracteriza por un buen pulimento de la


superficie y por la decoración incisa fina. Reichel-Dolmatoff (1986) sugiere que
dichas manifestaciones arqueológicas pertenecieron a una cultura de los malibú. Si
bien la información etnohistórica da cuenta de ellos y en el registro arqueológico
hay indicios de su presencia en diferentes sitios del bajo río Magdalena, al menos
desde el siglo XV d.C. en adelante; sigue siendo de interés académico verificar o
refutar sus manifestaciones culturales en relación con los registros arqueológicos y
las diferencia que puede haber entre unos y otros sitios.

Los malibú, mencionados en los recuentos españoles, se asentaban en caseríos


sobre las terrazas no inundables de los brazos del río Magdalena, aprovechando
los recursos fluviales y utilizando las áreas boscosas interfluviales como cotos de
caza. Esta gente construyó poblaciones de alguna importancia como Mompox,
Tamalameque y Zambrano (Reichel y Dussán 1954). En el área de Zambrano había
plataformas para viviendas hasta de seis metros de espesor, elaboradas de una
mezcla de tierra y basura doméstica. Posteriormente se conformaron aldeas
mayores. En sus cementerios se destacan enterramientos con urnas funerarias
(Ibíd.). En la investigación de Reichel-Dolmatoff y Dussán (1953), se ha establecido
que el poblado de Zambrano era un centro de comercio o mercado y que en los
poblados de Mompox y Tamalameque habitaban trabajadores orfebres; lo mismo
que en Saloa, donde se han encontrado desechos metalúrgicos y martillos de
orfebres (Ibíd.).

De acuerdo con Rivet (1947), los malibú estaban se distinguían entre los de río y
los de las ciénagas o pocabuyes, que sin tener la misma lengua, hablaban idiomas
afines, claramente diferenciados de la lengua de los indios cordilleranos. Los de río,
que abarcaban hasta las orillas de del mar, al oriente de Cartagena, eran llamados
mocanás. Fride (1968) señala que los malibú estaban organizados en cacicazgos
hereditarios de filiación masculina. Sus principales poblaciones eran Mompox,
Tamalameque, Sompallón, Tenerife, Semphegua, Panchique, Sopatí, Sapatosa,
Simichagua, Soloba y Nicao.

21
Datos etnohistóricos sugieren que los malibú estuvieron estrechamente integrados
dentro de una red comercial, donde también participaron los grupos zenúes que
conocieron los españoles (ODC 1994: 229). Juan López de Velasco, geógrafo
español del siglo XVI, se refiere así a los malibú que habitaban Mompox.

(…) de buena estatura, antes grandes que pequeños, de buenas


fuerzas y de buena razón, y las mujeres de buenas facciones:
andaban todos desnudos antiguamente, y ahora se visten; eran todos
idólatras, convirtiéndose fácilmente; su mantenimiento ordinario es
maíz, pescados, y frutos de la tierra, las ocupaciones, sementera,
caza y pesca y alguna contratación y mercadería de mantas y
algodón. (López de Velasco 1574).

De acuerdo con la antropóloga Patricia Vargas (ODC 1994), no se conoce a ciencia


cierta hasta dónde llegaba el territorio de los malibú por el occidente y el oriente.
Las crónicas del siglo XVI d.C., sólo precisan que este grupo habitó de sur a norte
la ribera del bajo río Magdalena (Tovar 1993). Por lo tanto, le corresponde a la
arqueología contribuir a definir el área de dispersión de los malibú.

Desde el punto de vista arqueológico, su alfarería se halla en la tradición Incisa -


Alisada. Esta tradición ha sido descrita por Reichel-Dolmatoff (1954) con el nombre
de tradición Plato – Zambrano, equivalente al término tradición Incisa – Alisada de
Plazas y Falchetti (1981: 110). Es claro que, si bien en el medio de los
investigadores se ha generalizado en décadas posteriores la asociación entre los
malibú y esta tradición, no quiere decir haya sido exclusiva de ellos. De ahí la
importancia de buscar y relacionar datos inéditos de etnohistoria con la arqueología.

Asociados a los malibú, hubo centros poblados o aldeas que después de la


conquista continuaron como poblaciones hispanas, entre ellos Mompox. También
asentamientos de menor tamaño en terrazas ribereñas no inundables de la cuenca
del río Magdalena en los departamentos de Bolívar, Córdoba, Magdalena y Sucre.

Si bien el conjunto de las investigaciones en la región ha sido amplio, sobre todo


por el aporte de los programas de arqueología preventiva, también se puede afirmar
que aún hay bastante camino por recorrer en la reconstrucción de la historia de los
antiguos pobladores indígenas, desde el punto de vista arqueológico.

En el departamento del Magdalena, Rodríguez (2006) prospectó un sitio de vivienda


en jurisdicción del municipio de Guamal. Allí obtuvo una muestra significativa de
cerámica de la tradición Incisa - Alisada. En el mismo sitio, denominado Las Brisas,
el autor describe la presencia de macrorrestos de peces de río, identificados por el

22
arqueólogo Germán Peña del Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad
Nacional de Colombia. Entre las especies identificadas se encontró bocachico,
doncella, mojarra y blanquillo.

En otra investigación llevada a cabo en el municipio de Guamal, Londoño et al


(2011) excavaron un complejo arqueológico cuyas manifestaciones abarcan desde
finales del siglo XVI d.C., hasta el periodo republicano, según el análisis de las
evidencias y dos fechas de carbono 14. El análisis de cerámica permitió identificar
material similar al excavado por Reichel – Dolmatoff en el corregimiento de Saloa
(Chimichagua), de la tradición Plato – Zambrano, también denominada Incisa –
Alisada. La relación de los datos sugiere que esta tradición comprende un periodo
amplio desde antes de la conquista hispana hasta el siglo XIX d.C. Igualmente, los
autores llaman la atención de que algunos fragmentos podrían evidenciar variantes
locales en la producción de cerámica.

En el departamento de Sucre, particularmente en San Pedro y municipios vecinos,


diferentes proyectos de arqueología preventiva como los de Chacín (1999 y 2005);
Poveda y Ramón (2000); Romero (2006); Romero y Vivas (2007); Romero, Vivas y
Peña (2007); Rueda, Vivas y Bautista (1995), han permitido identificar la presencia
de cerámica no sólo de la cuenca baja del río Magdalena (tradición Incisa – Alisada)
sino también de la cuenca media de río San Jorge, territorio de la antigua cultura
Zenú. Este territorio abarca una extensa área que ha tenido como centro de
investigación los cursos bajos de los ríos San Jorge y Sinú (Plazas y Falchetti 1990)
en el departamento de Córdoba.

Durante más de dos mil años, el hombre manejó las tierras bajas
cenagosas, aprovechando la riqueza de la fauna acuática y
controlando las aguas de inundación con el fin de proteger las
viviendas y enriquecer con sus sedimentos las zonas de cultivo. Este
fue un proceso lento iniciado en el segundo milenio antes de Cristo,
que alcanzó su mayor auge cuando densas poblaciones zenúes
ocupaban, hacia los siglos V – X de nuestra era, la región del bajo
San Jorge. Después de esta época, estas poblaciones zenúes
sobrevivieron en las Sabanas del Sinú y San Jorge, regiones donde
los hallaron los conquistadores españoles.
El manejo hidráulico de mayor magnitud, tuvo lugar en la Depresión
Momposina, delta inferior con 6.000 kmts² de extensión, formado por
la unión de los ríos Magdalena, Cauca y San Jorge. (Ibíd.: 152).

Dicho manejo hidráulico estaba formado por una compleja red de canales
artificiales de diversas dimensiones y configuraciones a manera de sistemas de
drenaje. Además, en los amplios basines que se extienden entre los caños

23
mayores, hay un sinnúmero de cursos menores de agua, en cuyas márgenes se
asentó una numerosa población sobre plataformas de vivienda (Plazas, Falchetti,
van der Hammen y Botero 1988; Rojas y Montejo 2002)

En el departamento de Bolívar, otra referencia interesante, en el marco de la


arqueología preventiva, es el salvamento de vestigios arqueológicos en el municipio
de Cicuco, vecino de Mompox. En los cortes arqueológicos Sánchez y Quevedo
(2011) exhumaron un individuo adulto en posición de cubito lateral izquierdo con los
miembros inferiores elongados y una una copa de cerámica. En otro corte de
excavación exhumaron el cuerpo de un infante con cuatro ollas a manera de ajuar
funerario. Los fragmentos de cerámica, clasificados en la tradición Incisa – Alisada,
sugieren que se trató de un sitio malibú.

Por otra parte, en jurisdicción del municipio de Córdoba, departamento de Bolívar,


en las excavaciones de Gutiérrez et al (2012) se exhumaron los restos óseos de
diez individuos, algunos en entierros primarios en posición decúbito dorsal
extendida y otros a manera de entierros secundarios en urnas funerarias. La
cerámica asociada a los entierros humanos y la obtenida en recolecciones en
superficie se halla en la tradición Incisa – Alisada. Dos fechas obtenidas por
Carbono 14 ubican los contextos arqueológicos, considerados malibú, en los rangos
de 1430 – 1450 d.C. y 1440 – 1480 d.C. (siglo XV d.C.).

Con variaciones en los nombres a medida que los arqueólogos clasificaron la


cerámica desde el trabajo pionero de Reichel – Dolmatoff (1954) y la investigación
de Plazas y Falchetti (1981) en el sitio Las Palmas, fechado entre los siglos XIV y
XVII d.C.; hasta los programas de arqueología preventiva; la tradición Incisa –
Alisada comprende diferentes tipos a saber: particularmente el “Rojo Bañado”, el
“Habano Inciso Fino”, el “Habano Alisado Sencillo”, el “Tosco Granuloso”, el “Tosco
Achurado”, el “Negro a Café Bruñido” y el “Rojo con Engobe Crema”.

En la plaza de San Francisco de Santa Cruz de Mompox, Romero y Zarama (2014)


llevaron a cabo la actividad de salvamento arqueológico de dos contextos
funerarios: uno más antiguo, ubicado en el periodo prehispánico, siglo XV d.C; el
otro, superpuesto, se asocia al periodo colonial, siglos XVI y XVII d.C. Esta
inferencia se obtiene, tanto por el análisis de los vestigios (cerámica, antropología
forense) y los datos asociados (estratigrafía, interfaces de destrucción); como por
las seis fechas obtenidas mediante datación por radiocarbono (método acelerador
de espectrometría de masa – AMS –). El contexto prehispánico está conformado
por cinco vasijas globulares de tamaño mediano, de las cuales tres contenían
restos óseos humanos de niños muy pequeños, quizás neonatos. Además, tres
concentraciones de fragmentos de cerámica de la tradición Incisa – Alisada;
esqueletos más o menos completos de tres individuos adultos, restos óseos

24
incompletos de un cuarto individuo y tres conjuntos por separado de algunos
huesos correspondientes a tres personas. También se halló un fragmento de
metate o artefacto para la molienda y un hacha de piedra pulida. El contexto
colonial es sui géneris, pues se desarrolló en el mismo sitio donde estaba el
contexto funerario prehispánico; los momposinos de los siglos XVI y XVII d.C.
enterraron algunos de los difuntos cerca del templo de San Francisco, construido en
1580. Desde la fundación de la Villa de Santa Cruz de Mompox hasta la
construcción del templo y en los años siguientes, el área de la plaza tuvo también
un área de cementerio. Las evidencias de restos óseos humanos del periodo
colonial no son precisas. Si bien se identificaron otros 81 individuos frente al templo
de San Francisco, casi todos estaban muy deteriorados, sus esqueletos
incompletos y el contexto funerario bastante intervenido tanto por el uso del lugar
como sitio de enterramientos durante dos siglos como por intervenciones
posteriores en la plaza vinculadas a renovaciones del espacio público. Además de
lo expuesto, en otros sectores del parque y en la carrera primera (sector Albarrada
Norte) se encontraron fragmentos de cerámica indígena (tradición Incisa – Alisada),
cerámica colonial y republicana y macrorrestos de animales: bovinos, tortugas, ave
de corral, manatí, babilla y peces (Ibíd.).

2.2. Periodo colonial, Santa Cruz de Mompox

Algunos historiadores como Salzedo del Villar (1938) señalan que Mompox fue
fundado por don Alonso de Heredia en 1537. Otros como Jaramillo (1991: 43-57)
afirman que fue fundada por Juan de Santa Cruz, bajo la orden de don Alonso de
Heredia, en 1540. Historiadores coinciden en que el pueblo se fundó donde
quedaba una aldea indígena, que para la época pudo haber sido una parcialidad de
los malibú.

De acuerdo con Salcedo del Villar (1938: 24), el nombre de la tribu denominada
Kimbay, como dice la tradición, pudo haber sido tomado de algún antiguo cacique,
pues: “Pocos lustros después de la fundación de la Villa existía en ella un indio
principal de pura sangre, que se llamaba Kimbay, quien hecho cristiano tomó el
nombre de Juan Rodríguez Kimbay, y se casó con Cristina de La Cruz nombre que
se conserva aún en el de la isla frontera a la ciudad”.

Respecto al contacto hispano con los indígenas, Di Filipo (2010) destaca que:

Es posible que en el caso de Mompox y de la región, también se haya


aplicado a los indígenas le figura jurídica del “requerimiento”, acto por
medio del cual los españoles “aclaraban las bases de su derecho a
llegar a estas nuevas tierras, apoderarse de ellas y quitar su autoridad
a los caciques indígenas”. (Ibíd.: 36)

25
En el caso de Mompox, la población adquiere una forma y distribución
particular, ya que existían unas limitaciones geográficas y
topográficas, derivadas del hecho de que debía ser puerto sobre el
río, donde las orillas cíclicamente sufrían cambios por las crecientes y
también por tener a sus espaladas unas zonas cenagosas, que
constreñían su ampliación a no más de tres manzanas, situación que
dio para determinar unas construcciones asentadas en el camellón
alto que se dan coincidiendo longitudinalmente con el río. (Ibíd.: 39).
Los territorios de la margen izquierda del río, donde está asentado
Mompox, corresponden a un ecosistema y origen geológico diferente
a los de la otra orilla. Las crecientes cíclicas del río, que afectan sobre
todo esta región momposina, fertilizan los suelos, permitiendo que en
la mayoría del territorio se den extensos pastizales de especies
nativas, que permitieron desde un principio la cría de vacunos sin
mayor trabajo de sostenimiento de potreros. (Ibíd.: 49).

Las primeras construcciones de Mompox fueron casas de barro y bahareque,


dispuestas en calles al estilo hispano y tres barrios. En el barrio central se
encontraba el cacique Mompoj y en los barrios extremos los caciques Zuzua y
Mahamón, súbditos del primero (Salzedo del Villar 1938). La ubicación y dominios
de estos caciques fueron relevantes para el desarrollo urbano de Mompox, pues se
considera que dieron lugar a las tres plazas ribereñas que caracterizan el pueblo, a
diferencia de una plaza mayor que era la usanza española.

Las tres plazas en referencia son: San Francisco en el norte, La Concepción en el


centro y Santa Bárbara en el sur (figuras 1 y 2) y en cada una se halla un templo
tan importante como los otros en el sentir actual de la comunidad momposina.

Figura 1. De izquierda (sur) a derecha (norte) se señalan las tres plazas ribereñas: Santa Bárbara, La
Concepción y San Francisco (Imagen tomada de Aprile-Gniset 1991: 201).

26
Figura 2. Las flechas indican las plazas de San Francisco (arriba – norte), La
Concepción (centro) y Santa Bárbara (abajo – sur)

Los materiales de construcción usados para las edificaciones, fueron


en su mayoría abundantes en la región, sobre todo lo referente a
maderas, arena, arcilla y otros. No lo fueron, la piedra calcárea
necesaria para la fabricación de la cal y los cantos rodados para los
cimientos, materiales que había que traer desde una distancia de
cincuenta kilómetros aguas arriba, creándose en uno de estos sitios
un asentamiento humano que aún existe y lleva el nombre de
“Cantera”. El hierro había que traerlo de España a un costo elevado y
los ladrillos, tejas y cal, generaron el establecimiento de una de las
primeras industrias en estos territorios americanos, empleando hornos
que con leña quemaban arcilla y piedra, produciendo ladrillo, teja y
cal, de una calidad que nos permite ver hoy, lo que se produjo desde
hace unos 400 años. (Di Filipo 2010: 39).

En Mompox, la vía de la Albarrada ha sido desde la época colonial el conector entre


las tres plazas y un eje importante para la consolidación urbana. Albarrada quiere
decir muro de protección contra las aguas. En este caso, las del río Magdalena
(figura 3). Esta ubicación determinó que el crecimiento de la Villa fuera orientado
por el río, en cuya ribera se construyeron barreras de piedra para contener las
crecientes, y el espacio que las bordeaba pasó a llamarse calle de la Albarrada
(OPUS 2006: 6); actualmente carrera 1ª.

27
Figura 3. Localización de la plaza de Santa Bárbara y la Carrera 1ª en el sector la Albarrada Sur.

Desde su fundación, Mompox fue concebido como villa, que en la política


fundacional significaba un lugar para que se estableciera la población española.
Administrativamente contaba con un cabildo y aunque formaba parte de la Provincia
de Cartagena, sus élites mantenían cierta rivalidad con las de la ciudad de
Cartagena.

Se puede decir, que en las épocas coloniales Mompox fue el principal


productor de ganado vacuno y caballar de la región Caribe, que servía
para abastecerse, para abastecer a Cartagena, principal centro
poblado de la región, a otras poblaciones, a algunas zonas mineras, lo
mismo que a las embarcaciones legales e ilegales que llegaban a
nuestras costas (carne, tasajo, cueros y cebo). La región y en general
“la tierra firme” española, casi nunca fue utilizada para cultivos
extensivos, a diferencia de las islas del Caribe. Se exceptúa algo de
caña para las mieles, sobre todo destinadas al aguardiente, cacao
promovido por los jesuitas y algodón al final de la Colonia. Los
momposinos no tuvieron necesidad de correr riesgos económicos con
cultivos, pues realmente el comercio, legal e ilegal, la minería, la
burocracia; les brindaba lo pretendido: poder y riqueza. (Di Filipo
2010: 57).

28
En el interés de los académicos, unos de los temas más investigados sobre
Mompox ha sido el del desarrollo comercial del puerto durante la época colonial y
sus implicaciones económica, urbanística, arquitectónica, social y cultural; la
importancia político administrativa que alcanzó y el posterior declive en el periodo
republicano (cfr. Corradine 1969, Daza 2009, Del Castillo 1986, Fals Borda 1979,
Herrera 2002, Múnera 1994, Salzedo del Villar 1938, entre otros). En general, las
actividades comerciales de la villa de Santa Cruz de Mompox se han analizado a
partir de los estudios sobre la navegación por el río Magdalena. Incluso, referencia
de ello se hallan en Simón (1628) y Santa Gertrudis (1775).

Peñas y Arquez (1994: 65-66), contribuyen en su obra a precisar, entre otros temas,
la importancia del contrabando como motor económico de Mompox. De acuerdo
con los autores, al asumir el poder la dinastía borbónica en España, a partir de
1700, y con el estímulo a los diversos monopolios del Estado, se intensificó el
contrabando de manera desmedida. Por esta vía entraban inmensas cantidades de
mercancías a Mompox, que por su situación estratégica, se le ha considerado, para
la época, como la capital del comercio ilícito en el país: para la exportación, cacao,
velas de sebo, madera para la construcción de bajeles (barcos) para su majestad,
maíz, manteca, carne, algodón sin pepita, doblones de oro y plata, astas de buey,
esteras de Mompox – de uso en todas las habitaciones y templos – harinas del
reino, sombreros de paja, bálsamo de tolú, cueros al pelo, etc. De Europa llegaba
vino, vinagre, aceite, manteca, licores, galletas, aceitunas, ciruelas pasas, uvas,
almendras, higos de Cádiz, piezas de coleta de Castilla, sombreros, zapatos, papel
blanco y pintado de Málaga, diferentes clases de fierro, cerraduras, locería,
pomadas, cristales, fideos, etc. Los autores afirman que en la villa de Mompox, la
relación entre hacienda (tributación) y comercio, se establece en principio una
simbiosis que desembocará luego en el predominio desde mediados del siglo XVIII
en el predominio del comercio.

Fals-Borda (1979) indica que hacia 1720 se estableció una aduana en Santa Cruz
de Mompox con el propósito de controlar el contrabando, sin embargo, ésta no
surtió efecto debido a que hubo complicidad de los oficiales reales con esta
actividad al margen de la ley.

Respecto a las expresiones urbanísticas que dan cuenta del comercio activo en la
villa, sobre todo en el siglo XVIII, que podría considerarse como el de esplendor
comercial, en una revisión documental y de reconocimiento arqueológico, Pérez
(2010) encuentra que las manzanas cercanas a las plazas de San Francisco y La
Concepción y la plazuela del Moral, ofrecen la mayor capacidad de almacenamiento
de productos; y que las fachadas que dan hacia el río Magdalena en la Albarrada,
fueron casi en su totalidad dedicadas al comercio.

29
La plaza de La Concepción habría sido la de mayor jerarquía en términos
comerciales. Incluso, hoy día aún se conserva y está en proceso de restauración el
edificio del antiguo mercado, construido en la primera mitad del siglo XX. Esta plaza
también contaba con un importante acceso al río por medio de escalinatas. En el
lado sur de la plaza, en el sector de la Albarrada Los Ángeles, donde hoy día
funcionan locales comerciales restaurados, posiblemente funcionó uno de los
primeros centros de comercio en épocas coloniales. Estos locales tienen la
particularidad de comunicarse tanto con la Albarrada por el oriente como con la
calle de San Juan por el occidente. En la plazuela del Moral, por su parte, funcionó
la Casa de la Aduana.

En cuanto a los aportes de la arqueología para profundizar en el análisis del ámbito


comercial durante los periodos colonial y republicano, las evidencias obtenidas se
basan fundamentalmente en alfarería, vidrio y metales, mientras que otros objetos,
que podrían dar cuenta de lo descrito por diferentes autores a partir de fuentes
documentales, no se han conservado por su carácter perecedero. Los trabajos de
Uprimy (1996), Benavides (1997), Pérez (2010) y Cifuentes (2012) han contribuido
a diferenciar elementos de la cultura material durante estos periodos.

Pérez (2010: 13) llevó a cabo una prospección arqueológica en el sector antiguo de
la ciudad de Mompox orientada a obtener evidencias materiales sobre los bienes
comerciales que circulaban durante el periodo colonial para intentar reconstruir la
capacidad comercial del puerto y conocer el rol de la villa en las redes transatlántica
e interna del Nuevo Reino de Granada. De acuerdo con el autor, al empezar la
investigación esperaba encontrar un gran número de datos sobre productos en las
fuentes documentales, pero también preveía que buena parte de éstos bienes
podían no estar presentes en el registro arqueológico estratificado (elementos
perecederos de naturaleza orgánica) y que era factible encontrar evidencia
arqueológica que no estuviera en el registro escrito (Ibíd.: 120). También
consideraba que los lugares con mayor probabilidad de hallar cultura material
relacionada con el comercio podían ser las zonas ribereñas del poblado, como las
plazas con acceso al río donde se efectuaban las labores de carga y descarga
(Ibíd.: 121). Sin embargo, los muestreos efectuados en esos lugares no brindaron
los datos esperados en cuanto a la cultura material estratificada relacionada con la
actividad comercial colonial del puerto. En términos generales, las evidencias
arqueológicas obtenidas fueron: fragmentos de cerámica, loza, restos óseos de
animales (res, tortuga, pollo), vidrio, objetos de hierro, monedas, herramientas
líticas y madera (Ibíd.: 121). El autor concluye que el hecho de que en las zonas
ribereñas no se hayan recuperado elementos deseados para el análisis del
comercio colonial del puerto, no implica que en otros lugares del poblado,
específicamente en zonas más alejadas de la ribera, se puedan encontrar sitios
arqueológicos con mejores atributos para este tipo de investigaciones (Ibíd.: 122).

30
Cifuentes (2012: 6), por su parte, afirma que los estudios de los espacios públicos,
como parte del proceso arqueológico e histórico, se han efectuado en alguna
medida en las antiguas plazas de mercado y calles coloniales. Esto ha permitido
obtener materiales relacionados con las actividades comerciales y cotidianas que
en esos espacios se efectuaban (cfr. Correal 2006; Cifuentes y Salas 2010). El
autor, desarrolló un proyecto de arqueología preventiva en la plaza de La
Concepción y la Calle de San Juan, en Mompox, donde obtuvo cerámica indígena y
colonial; loza industrial; artefactos líticos; macrorrestos animales destacando los de
manatí y caimán; restos óseos humanos; puntillones de hierro; fragmentos de
ladrillos y tejas.

En nuestra opinión, la mayor contribución de este trabajo es la evidencia de la plaza


como sitio de enterramiento frente a la iglesia. Aunque en el 2011 sólo se
rescataron esqueletos de seis individuos, información de algunos momposinos
indica que en intervenciones anteriores de remodelación se hallaron evidencias de
más enterramientos, incluso cremados, posiblemente asociados a la epidemia del
cólera el siglo XIX (Jaime de León, comunicación personal 2014).

En este sentido, la arqueología da cuenta de aspectos de la reconstrucción histórica


que no se han tocado o se han generalizado en las fuentes documentales
históricas, pero, también tiene la limitante de la conservación en el registro
arqueológico de productos elaborados con materiales perecederos que podrían
ofrecer evidencias de los intercambios comerciales, de sus rutas y, por supuesto,
de los productos citados en los documentos de archivo.

31
CAPÍTULO III

TRABAJO DE CAMPO

3.1. Prospección arqueológica

De acuerdo con el planteamiento metodológico presentado en el capítulo I, la


prospección se inició en la segunda semana de noviembre de 2013 con la
excavación de apiques a intervalos regulares de tres metros en los sectores del
atrio, el parque, los portales y el callejón de Santa Bárbara, que comprenden toda la
plaza. Esto se realizó coordinado con la obra civil, a medida que se retiraba la
estructura de concreto que cubría la mayor parte de la plaza con la excepción de
los lugares donde están sembrados los árboles y la jardinera a desnivel (ver mapa
1). El equipo de arqueólogos estuvo conformado por Yuri Romero, Germán Vega y
Angélica Vivas.

En la prospección se encontraron evidencias de un apisonado de arena con


concreciones de argamasa y separaciones de este mismo material en un área de
84 m² en el sector del atrio de la capilla, junto a la iglesia de Santa Bárbara. Por otro
lado, al lado del Manjol 08 (sistema de alcantarillado) en el callejón de Santa
Bárbara (calle 14), entre el parque y los portales, se encontraron fragmentos de
restos óseos humanos. Por lo tanto, se presentó al ICANH un plan de manejo
específico para intervenir el área con la actividad de salvamento. Esta área se
encerró con cinta de seguridad y se informó al contratista y a la interventoría técnica
de la obra el procedimiento a seguir para el salvamento. La prospección continuó
en otras zonas de la plaza.

Salvo el sector de los portales de Santa Bárbara, donde se encontraron dos


concentraciones de fragmentos de cerámica colonial con macrorrestos de animales,
las evidencias en el resto de la plaza fueron mínimas y aisladas. Esto se debió a
que hace cuatro décadas, en un proceso de mejoramiento del espacio público, se
reemplazó la capa de tierra que cubría la base del adoquinado de más o menos el
60% de la plaza con arena del río Magdalena (dragado en ese entonces para
facilitar la navegación frente a la Albarrada). De acuerdo con la información recibida
de algunos habitantes momposinos, entre el río y el muro de la Albarrada que se
halla en el lado oriental de la plaza, era común encontrar fragmentos de cerámica,
monedas y otros objetos considerados antigüedades.

32
Todos los apiques se ubicaron cartográficamente con estación total de topografía.
Igualmente se hizo el registro fotográfico y las descripciones de estratigrafía para
comparar con los datos del estudio previo de geotecnia (Mincultura 2012).

En el caso de la Albarrada Sur (Carrera 1ª), la prospección se llevó a cabo entre los
meses de noviembre de 2013 a marzo de 2014. La razón obedece a que la obra
civil intervino por sectores la zona. La Albarrada Sur está dividida en Albarrada de
San Rafael, Albarrada Portales de La Marquesa, Albarrada del Alba, Albarrada del
Campillo y Albarrada Los Ángeles. Estos nombres corresponden a la nomenclatura
usada por la comunidad momposina. En la cartografía anexa, los mapas 1 y 2
detallan la dispersión del muestreo y las coordenadas de los apiques.

Estratigráficamente, se observó un relleno de 15 a 20 cm que servían de base al


adoquinado del parque; debajo una capa uniforme de arena fina limo-arcillosa
parda de compacidad baja (la compacidad es medida con la densidad relativa). En
el lado norte del atrio de la iglesia, las evidencias arqueológicas se encontraron
dispersas entre 20 y 40 cm de profundidad. En el sector de salvamento (lado sur del
atrio), se encontró el apisonado entre 10 y 70 cm. Topográficamente, la plaza tenía
un desnivel de 1,5% que permitía que el agua lluvia corriera hacia la Albarrada y
hacia el manjol. Este desnivel se mantuvo en las obras de renovación del espacio
público del 2014.

3.1.1. Registro prospección parque

En las fotografías 12 y 13 se muestran detalles de la labor de prospección. En el


apique de la fotografía 14 se indica una sección de tubería y parte de una hilera de
ladrillos dispuestos entre el apisonado de la capilla y la entrada a la capilla. En las
fotografía 15 y 16 se observa la base de relleno del adoquinado en los primeros 20
cm del apique, seguida de una capa parda de arena fina limo arcillosa. En la
fotografía 17, el apique se excavó en una de las áreas verdes del parque, aquí se
aprecia un estrato de suelo arenoso pardo oscuro (Horizonte A) de 30 cm, seguido
de un estrato de suelo arenoso pardo claro (Horizonte B).

La plaza de Santa Bárbara tiene la particularidad de que a comienzos de siglo XX y


en la década de 1940, se utilizó arena de río de dragado para reconformar la base
del acabado final, por lo tanto, tal como se muestra en el mapa 1, la dispersión de
evidencias arqueológicas no es uniforme.

33
Fotografía 13: Panorámica de la distribución
Fotografía 12: Cuadrilla de prospección
de apiques en la plaza

Fotografía 14: Detalle apique 84. Fotografía 15: Detalle apique 92.
Coordenada: 962339 E – 1513188 N Coordenada: 962361 E – 1513205 N

Fotografía 16: Detalle apique 175. Fotografía 17: Detalle apique nº 211.
Coordenada: 962352 E – 1513221 N Coordenada: 962348 E – 1513230 N

34
3.1.2. Registro prospección portales

En el sector de portales de Santa Bárbara, la prospección mostró dos


concentraciones de fragmentos de cerámica y macrorrestos de animales. Para
recuperar estas evidencias se realizaron dos cortes contiguos de 3 x 3 m cada uno,
en las áreas intermedias entre apiques. Esto permitió recuperar entre 30 y 80 cm
una muestra interesante de fragmentos revueltos de cerámica indígena, colonial y
loza industrial. Además de otras evidencias arqueológicas que se detallan más
adelante en el capítulo IV. Estratigráficamente, se aprecia una capa gris de
aproximadamente 50 cm de suelo arenoso grueso. Debajo, una capa de arena fina
limo-arcillosa de humedad y consistencia media. Las fotografías 18 a 25 muestran
detalles de esta actividad.

Fotografía 18: Ampliación de la


Fotografía 19: Panorámica corte 1
prospección, corte 1

Fotografía 20: Fragmento de plato colonial Fotografía 21: Fragmentos de cerámica


hallado en el corte 1 hallados en el corte 1

35
Fotografía 22: Ampliación de la Fotografía 23: Concentración de fragmentos
prospección, corte 2 de cerámica en el corte 2

Fotografía 24: Concentración de fragmentos de


cerámica, corte 2. Al fondo fragmento de Fotografía 25: Panorámica corte 2
botija

3.1.3. Prospección Albarrada Norte

Debajo de la estructura de concreto (material de rodadura para el tránsito) se


hallaba una capa de 10 cm de relleno para la base de la vía. Este material se retiró
durante el levantamiento del concreto. A partir de este relleno se observó una capa
uniforme de arena fina limo-arcillosa gris intervenida años atrás por las obras de
dotación de servicios públicos domiciliarios. A los largo de la Albarrada Sur, las
evidencias arqueológicas se encontraron aisladas entre 20 y 45 cm de profundidad.
Principalmente se hallaron fragmentos de cerámica.

36
3.1.3.1. Registro sector Albarrada de San Rafael y Portales de La Marquesa

Partiendo de la plaza de Santa Bárbara hacia el norte por la carrera 1ª, denominada
en el proyecto la Albarrada Sur, se divide en sectores que son reconocidos por los
momposinos con los nombres tradicionales. El primero es el de la Albarrada de
San Rafael, seguido por la Albarrada de La Marquesa, donde queda la casa en
otrora fuera de los marqueses de Santa Coa (Daza 2009).

En las fotografías 26 a 29 se muestran detalles de la prospección.


Estratigráficamente, debajo del adoquín se aprecia la capa de relleno de 20 cm que
le servía de base. A este relleno le sigue una capa de arena fina limo-arcillosa,
intervenida por las obras de instalación de redes de servicios públicos domiciliarios.
Al respecto, en las fotografías 27 y 29 se indican secciones de tuberías en uso.

En este sector, las evidencias arqueológicas (sobre todo macrorrestos de animales)


se encontraron dispersas entre 20 y 40 cm de profundidad.

Fotografía 26: Prospección sector Albarrada Fotografía 27: Detalle apique 360.
de San Rafael Coordenadas: 962322 E – 1513304 N

37
Fotografía 28: Prospección sector Albarrada Fotografía 29: Detalle apique nº 415.
Portales de la Marquesa Coordenada: 962246 E – 1513419 N

3.1.3.2. Registro sectores Albarradas del Alba, Campillo y Los Ángeles

Las fotografías 33 y 31 corresponden a la Albarrada del Alba; las 32 y 33 a la


Albarrada del Campillo y la 34 a la Albarrada Los Ángeles.

Estratigráficamente, en la fotografía 31, se aprecia la capa de relleno de 20 cm que


servía de base al adoquín. A este relleno le sigue una capa de arena fina limo-
arcillosa. En el límite de las dos capas se halla una sección de tubería en uso de
servicio público domiciliario.

Mientras que en la fotografía 33 se observa la capa de relleno debajo del adoquín


de aproximadamente 40 cm. Más abajo se halla una capa de arena fina limo-
arcillosa donde una sección de tubería en uso de la red de servicios públicos
domiciliarios.

En este sector, las evidencias arqueológicas (sobre todo macrorrestos de animales


y algunos fragmentos de cerámica) se encontraron dispersas entre el material de
relleno y entre 20 y 40 cm de profundidad.

38
Fotografía 31: Detalle apique nº 545.
Fotografía 30: Prospección Albarrada del Alba
Coordenada: 962144 E – 1513553 N

Fotografía 32: Prospección Albarrada del Fotografía 33: Detalle apique nº 570.
Campillo Coordenada: 962121 E – 1513591 N

39
Fotografía 34: Panorámica apiques de
prospección en la Albarrada Los Ángeles

3.1.4. Prospección trazado líneas eléctricas

En agosto de 2014 se prospectó el trazado; en las calles 14, 16, 17 A y 17; de las
excavaciones para las líneas de conexión eléctrica del acabado de la plaza Santa
Bárbara y la Albarrada Sur. En la cartografía, el mapa 6 muestra la localización de
los apiques y sus coordenadas. Las fotografías 35 a 37 corresponden a esta
actividad.

Debajo del concreto de rodadura, la estratigrafía de las cuatro calles muestra una
capa de arena limo-arcillosa. La mayoría de los apiques se excavaron hasta los 85
cm. Las excepciones fueron los apiques donde se hallaron tuberías en uso de
servicios públicos.

En los trazados no se encontraron vestigios arqueológicos de ningún tipo. En


contraste, bajo la edificación conocida como el antiguo mercado de La Concepción,
frente a la plaza del mismo nombre, en la excavación para la caja del alumbrado
eléctrico y punto de inicio del trazado que va por la Albarrada Los Ángeles para
tomar la calle 17 A; se hallaron fragmentos de restos óseos humanos asociados a
cuentas de collar (fotografía 37) y huesos de manatí, en un contexto arqueológico
alterado por la edificación del mercado.
40
Fotografía 35: Calle 16. Detalle apique 715. Fotografía 36: Calle 17 A. Detalle apique 740.
Coordenadas: 961986 E – 1513582 N Coordenadas: 961958 E – 1513488 N

Fotografía 37: Fragmentos de cráneo asociados a


cuentas de collar en concha.

En la tabla 1, incluida en el anexo 1 al final de este documento, se presenta la


relación de todos los apiques, su ubicación dentro del proyecto, las coordenadas y
el tipo de evidencia encontrada si la hubo. Igualmente, los mapa 1 y 2 de la
cartografía anexa ilustran la dispersión del muestreo en la prospección.

La tabla 2, también del anexo 1, alude a la relación de evidencias obtenidas en la


prospección (mediante apiques) según su procedencia y clase. No se incluyen los
restos óseos humanos, pues éstos corresponden a fragmentos hallados en tres
apiques en el sitio donde posteriormente se llevó a cabo el salvamento. En la tabla
3 del mismo anexo se presentan los tipos cerámicos obtenidos en la prospección de
acuerdo con el análisis realizado en el capítulo IV.

41
En la tabla 4 del anexo 1 se relacionan las evidencias obtenidas en la ampliación
de la prospección alrededor del apique 306 (ver mapas 1 y 3). La tabla 5 detalla los
tipos cerámicos hallados en este sitio, según el análisis efectuado (capítulo IV).

La tabla 6, por su parte, indica las evidencias obtenidas en la ampliación de la


prospección alrededor del apique 286 (mapas 1 y 3). Asimismo, la tabla 7 da
cuenta de los tipos cerámicos del material recuperado.

3.2. Salvamento

Esta actividad se inició el 2 de enero con la expedición del adendo 001 a la


autorización ICANH nº 3742 y corresponde a dos sectores de salvamentos: el atrio
de la capilla y el manjol, ubicado entre el parque y los portales de la plaza de Santa
Bárbara.

3.2.1. Contexto arqueológico sector atrio de la capilla

La primera área de salvamento corresponde al atrio de la capilla de la Santa


Caridad del Ecce Homo junto a la iglesia. Este se construyó a manera de un
apisonado con concreciones de argamasa y separaciones de este mismo material.
Para darle mayor consistencia de éstas últimas, se utilizaron fragmentos de teja y
ladrillo. En las zonas intermedias, donde el apisonado estaba más suelto, se
encontraron en el relleno: concreciones de argamasa, fragmentos de cerámica
colonial e indígena y macrorrestos de animales, entre ellos el caparazón articulado
de una tortuga de río. Las fotografías 38 a 48 muestran detalles del apisonado y
de las otras evidencias arqueológicas asociadas.

Fotografía 38: Estructura apisonado primera Fotografía 39: Panorámica apisonado segunda
semana de enero semana de enero

42
Fotografía 40: Dispersión de fragmentos de
Fotografía 41: Excavación arqueológica
cerámica indígena y colonial

Fotografía 42: Detalle perfil separaciones


Fotografía 43: Detalle concreción de argamasa
apisonado. Fragmentos de ladrillo y teja

Fotografía 44: Detalle del apisonado lado sur y


ampliación de verificación al oriente
43
Fotografía 45: Detalle del apisonado lado norte y
ampliación de verificación al oriente

Fotografía 46: Perfil de los cimientos de la capilla.

44
Fotografía 47: Caparazón de tortuga y
Fotografía 48: Boca de vasija colonial (botija)
fragmentos de cerámica

La observación casual del modo como se construye la estructura de rodamiento de


algunos caminos veredales, permite inferir cómo se construyó el apisonado frente a
la capilla. En el caso de los caminos, no se funden placas de concreto sino un
enrejado o grilla de este material y en las zonas intermedias se vacía y compacta
un relleno de arena y recebo. La adecuación frente a la capilla pudo haber sido
similar con materiales diferentes y con un diseño asimétrico. Las referencias de
habitantes momposinos indican que en época de creciente del río, este se
desbordaba y alcanzaba a cubrir sectores de la plaza; frente a esta situación, es
razonable que se haya adecuado el frente de la capilla con una elevación un poco
mayor que el resto de la plaza para preservar el recinto de las inundaciones.

Estratigráficamente, en el sector del atrio, el apisonado se hallaba debajo de los


adoquines de la plaza (5 cm) y de una capa de arena (5 cm) que le servía de base
a este último. El grosor del apisonado variaba entre 30 y 40 cm. Debajo se hallaba
el estrato de arena fina limo-arcillosa común en toda la plaza, incluso, debajo de los
cimiento de la capilla (fotografía 58).

3.2.2. Contexto arqueológico sector del manjol

La palabra manjol es la castellanización del vocablo ingles Manhole (MH). Se


refiere a una entrada en forma cilíndrica que forma parte del sistema de
alcantarillado. En Mompox, el MH 08 tiene aproximadamente 80 cm de diámetro en
la entrada y 2 m de profundidad. La base irregular abarca un área de 9 m². Junto a
esta estructura (fotografías 49 y 67), se llevó a cabo el salvamento de un contexto
funerario del siglo XV d.C., asociado a cerámica de la tradición Incisa – Alisada,
común a los grupos indígenas malibú. En las fotografías 49 a 69 se muestran
detalles de la actividad.

45
Fotografía 49: Fase de visibilización de los restos óseos humanos y otras
evidencias en la actividad de salvamento alrededor del manjol

Fotografía 50: Fase de visibilización de los restos óseos humanos y otras


evidencias en la actividad de salvamento. Primer plano individuo 01

46
Fotografía 51: Actividad de visibilización del Fotografía 52: Detalle plato a manera de
individuo 01 máscara funeraria individuo 01

Fotografía 53: Actividad de visibilización de los Fotografía 54: Detalle individuos 05 primer plano
individuos 05 (der.) y 06 (izq.) y 06 (plato a manera de máscara) al fondo

Fotografía 55: Actividad de visibilización de Fotografía 56: Actividad de visibilización del


los restos óseos humanos y la cerámica individuo 04 (primer plano)

47
Fotografía 58: Panorámica individuos 02, 03
Fotografía 57: Actividad de visibilización de los
(debajo del anterior), 04 (extendido), 05 y 06
restos óseos humanos durante el salvamento
(junto al manjol)

Fotografía 59: Detalle individuos 02 (primer plano Fotografía 60: Detalle individuo 03 (boca abajo
sin cabeza) y 03 (debajo) con piernas flexionadas)

Fotografía 61: Detalle individuo 10 (niño) Fotografía 62: Detalle individuo 07

48
Fotografía 63: Individuo 11. Posición decúbito Fotografía 64: Detalle fémur derecho. El hueso
lateral. Detalle fémur derecho soldó en vida del individuo

Fotografía 65: Restos del Individuo 08, destruido


Fotografía 66: Vasija 10, destruida parcialmente
por la construcción del manjol y fragmentos de
por la construcción del manjol
cerámica

Fotografía 67: Estructura visible del manjol 160 cm,


parte superior al nivel de la plaza y calle 14

49
Fotografía 69: Protección in situ de las vasijas
Fotografía 68: Vasijas 4, 5, 6 y 7
antes de retirarlas

El salvamento se realizó en un área de 45 m². No obstante, el área de indagación


fue de 70 m² menos los 9 m² de cobertura del manjol. Para el registro de las
evidencias, la disposición espacial de las cuadrículas se hizo cada metro (mapa 3).

La actividad de salvamento se dividió en tres fases: La primera corresponde a la


visibilización de los vestigios arqueológicos de manera individual y en conjunto.
Esto se llevó a cabo en un periodo de 20 días. Finalizando este periodo, se realizó
la segunda fase del salvamento, que es la de toma de datos in situ y los registros
topográficos con estación total, fotográficos y escritos necesarios para la
contextualización del sitio arqueológico. En el apartado de la metodología se explica
que buena parte de los datos para el análisis de antropología forense se tomaron
en esta fase mediante fichas (fotografía 70), previendo que la fragilidad y el
deterioro de los esqueletos dificultarían su análisis en el laboratorio.

Fotografía 70: Diligenciamiento de ficha Fotografía 71: Limpieza de vestigios para


preliminar de antropología forense traslado a sitio seguro

50
La tercera etapa corresponde al levantamiento de las evidencias para trasladarlas a
sitio seguro (fotografía 71). En este caso, a la casa oficina del consorcio constructor
(donde posteriormente se realizaría la etapa de laboratorio en los meses de abril a
agosto de 2014). Después de que se completaron los registros, todo el material se
guardó en bolsas plásticas y cajas de cartón, debidamente marcadas.

Para verificar que debajo de las evidencias visibilizadas, registradas y levantadas


no había más vestigios, se revisó con cuidado cada base de arena sobre la que
reposaban los esqueletos, se cernió y retiró del sitio esta arena y se excavó un
nuevo grupo de apiques a intervalos regulares bajando hasta un metro de
profundidad. La distribución de estos apiques se muestra en el mapa 5 de la
cartografía anexa. No se encontraron más vestigios arqueológicos (fotografía 6,
capítulo I).

Este sector comprende un cementerio del periodo prehispánico, siglo XV d.C. Esta
inferencia se obtiene, tanto por el análisis de los vestigios (v. gr. cerámica,
antropología forense) y los datos los asociados (v. gr. estratigrafía); como por las
dos fechas obtenidas mediante datación por radiocarbono (método acelerador de
espectrometría de masa – AMS –), en el laboratorio Beta Analytic de Estados
Unidos.

El contexto prehispánico está conformado por diez vasijas globulares de tamaño


mediano, de las cuales cuatro contenían restos óseos humanos de niños muy
pequeños, quizás neonatos (vasijas 2, 3, 4 y 7). Infortunadamente, los huesitos no
se preservaron; pudiéndose solo identificar fragmentos durante la actividad de
laboratorio (ver capítulo IV).

El esqueletico de la vasija 7 (ver mapa 4) se ubica cronológicamente en el rango de


1430 a 1485 d.C., con un 95% de probabilidad, o 1440 a 1455 d.C. con un 68% de
probabilidad.

Otro grupo de evidencias de este contexto corresponde a los enterramientos de por


lo menos trece individuos.

En el orden de la numeración dada en campo, el primero, masculino, enterrado en


posición decúbito dorsal con la cabeza hacia el norte, se caracteriza por la
particularidad de tener un plato a manera de máscara en el rostro (fotografías 50 a
52). Antropológicamente:

El simbolismo de la máscara es uno de los más complejos y


escurridizos. Ambigua por definición, a un tiempo esconde y revela
algo de quien la lleva (Grossato 2000:30).

51
(…) las investigaciones efectuadas con máscaras procedentes de
diferentes culturas apoyan la conclusión de que las máscaras, de la
misma forma que las caras, tienden a representar ciertas emociones.
Las máscaras faciales se utilizan sobre todo en los ritos y
representaciones (…) (Ember et al 2008: 558)

(…) la máscara tiene inicialmente el sentido de supresión temporal del


“yo” habitual, para reemplazarlo por “otro”, dotado de atributos
superiores o deseables en algún sentido. La ocultación tras la
máscara tiende a la trasfiguración, facilita el traspaso de lo que se es
a lo que se quiere ser (Folch 2000: 95)

En la muerte, a diferencia de la máscara con representación antropomorfa, donde el


individuo fija y transmite una emoción o busca la preservación de su rostro en el
tránsito hacia otra vida o en el encuentro con sus antepasados y los dioses de sus
creencias; y a diferencia de la máscara zoomorfa, que representa los atributos del
animal escogido; la máscara sin rostro, oculta no solo la identidad sino todo tipo de
emoción y atributo. En el caso del individuo 01, el plato, dispuesto como una
máscara, pudo haber sido, en la cosmovisión de los malibú de la época, un objeto
ritual de protección.

El individuo 02, por su parte, se encontró sin cráneo (fotografía 59). Estaba
orientado con las piernas hacia el suroriente. No se observaron indicios de que el
cráneo hubiese sido destruido durante la construcción del manjol u otra obra. Si
bien el paso del tiempo deshizo la mayoría de los huesos, no se encontraron los
dientes que por lo general se preservan mejor. Tres cuentas de collar en conchas
de caracol se encontraron asociadas al esqueleto. Cerca de sus pies se hallaron
fragmentos de cerámica.

Debajo de este individuo, se halló el individuo 03, femenino, con la cabeza hacia el
oriente, bocabajo y las piernas flexionadas (decúbito ventral flexionado) (fotografías
59 y 60). En 1991, durante una práctica de antropología forense en la hacienda
Vistahermosa (municipio de Mosquera, Cundinamarca) y bajo la dirección del
arqueólogo Gonzalo Correal y el antropólogo físico José Vicente Rodríguez,
excavamos un esqueleto del periodo herrera de la Sabana de Bogotá, enterrado
bocabajo (fotografía 72). La interpretación dada por el Dr. Correal es que
posiblemente se trataba de alguien con atributos especiales, quizás un chamán.
Con la posición bocabajo se habría buscado que la energía de ese individuo se
retuviera en la tierra.

52
Fotografía 72: Esqueleto de individuo enterrado
bocabajo, posible periodo Herrera, Sabana de
Bogotá. Foto Yuri Romero P.

Si bien la palabra chamán tiene origen en Asia Oriental, en la etnia


Tungú, el concepto evoca individuos de muchas culturas antiguas y
actuales que tienen la capacidad de trascender y manejar escalas de
conciencia en comparación con el resto de sus comunidades.
(Páramo 2004).
La capacidad del chamán de comunicarse con los espíritus de los
muertos era representada en la ofrenda con huesos de ancestros; si
infundía temor se enterraba desmembrado y bocabajo, para que no
saliera a perturbar el mundo de los vivos. (Rodríguez 2011: 165)

Cuando el chamán es temido, los ritos funerarios pueden reflejar ese


miedo y el emplazamiento del espíritu se convierte en un lugar
inseguro. (Vitebsky 2006: 96)

En una investigación arqueológica en el estadio del Deportivo Cali en Palmira, Valle


del Cauca, se excavó un complejo ritual de la cultura Malagana, en el que se
destaca el enterramiento de una mujer joven cuyo cuerpo yacía en posición
decúbito ventral flexionado, con nueve punzones de hueso humano, flauta en hueso
de animal, un collar con caracoles marinos y la piedra de amolar de los utensilios de
hueso (Blanco et al 2007). Para los investigadores, esta mujer debió poseer
notables dotes de curación, pero al mismo tiempo habría infundido temor, por lo que
fue enterrada bocabajo (Ibíd.).

53
El individuo 04, masculino, fue enterrado en posición decúbito dorsal, con la cabeza
orientada hacia el noroccidente y los pies al sureste, contiguos a las clavículas del
individuo 02, como si fuera la continuación de éste último.

Los pies del individuo 05, femenino, se hallaban cerca de la cabeza del individuo
04. La cabeza estaba orientada hacia el oriente (fotografías 53 y 54). La disposición
geométrica de los tres esqueletos: 05, 04 y 03, se asemeja a una parábola
(fotografías 57 y 58; mapa 4). Una muestra del esqueleto 05 se envió a fechar a
Beta Analytic, ubicándolo en el rango de 1435 d.C. a 1490 d.C., con una
probabilidad del 95% o 1440 d.C. a 1465 d.C., con una probabilidad del 68%. Como
ajuar funerario se encontraron cuentas de concha y dijes de piedra de color rojo
sobre la ingle izquierda. Además, una nariguera en forma de candonga de tumbaga
(aleación de cobre y oro) y una nariguera de oro (fotografía 73).

Fotografía 73: Nariguera en oro


asociada al esqueleto 05

Al lado derecho del esqueleto 05 se hallaba el esqueleto del individuo 06 (fotografía


54), masculino, en posición decúbito dorsal. Este último, al igual que el individuo 01,
fue enterrado con un plato que le cubría el rostro a manera de máscara o como
objeto de protección chamánica.

Resulta paradójico que se hubiera conservado durante la construcción del manjol,


pues la base de esta estructura quedó junto al cráneo del individuo 06,
rompiéndolo, al igual que el plato, pero quedando ambos en el sitio donde fueron
inhumados (fotografía 54).

Debajo de los individuos 05 y 06, se halló el esqueleto de un niño (individuo 10,


fotografía 61), inhumando con la cabeza hacia el noroccidente y fragmentos de
vasijas sobre y debajo del torso.

54
Cuatro metros al occidente de estos esqueletos se halló el esqueleto del individuo
07 (fotografía 62), posiblemente masculino, inhumado en posición decúbito dorsal,
orientado con la cabeza al suroccidente y los pies al nororiente. La orientación del
cuerpo de este esqueleto, la disposición de las vasijas v7, v3 y v2 y los esqueletos
04 y 02, también forman una parábola (ver mapa 4). Notoria en este esqueleto
(fotografía 74), es la reducción de la cabeza del fémur derecho, quizás por una
necrosis avascular o isquémica debido a la pérdida del flujo de sangre que irrigaba
la cabeza del fémur, como resultado de un trauma en la cadera (contusión). Esto
habría tenido repercusiones importantes en las actividades cotidianas como
caminar y correr.

Fotografía 74: Individuo 07. Detalle patología


Fotografía 75: Individuo 11. Detalle fémur
cabeza del fémur derecho en comparación con el
derecho. El hueso soldó en vida del individuo
izquierdo

Cerca al individuo 01, pero orientado en sentido contrario, con los pies hacia el
norte, se halló el individuo 11, posiblemente masculino, inhumado en posición
decúbito dorsal izquierdo. El detalle más significativo es la fractura completa que en
vida sufrió esta persona y que no fue reducida (procedimiento para colocar los
fragmentos de hueso en su alineación correcta), fusionándose de manera natural
las dos partes del fémur (fotografías 63, 64 y 75). Sin duda, esto le ocasionó mucho
dolor al caminar, limitándolo en sus actividades. Pero el hecho de que la fractura
haya sanado (aunque de manera incorrecta) sugiere que recibió los cuidados
necesarios para sobrevivir.

Cerca del individuo 11 se hallaron los cráneos de dos pequeños niños (individuos
12 y 13), quizás enterrados en posición fetal. No se conservaron los huesos de los
cuerpos, salvo algunas vértebras cervicales. Los huesos de los cráneos también
estaban muy frágiles y deteriorados.

55
En el contexto arqueológico del sector del manjol, al menos dos individuos fueron
destruidos en su totalidad hace dos décadas por las obras de construcción del
manjol. Esta inferencia la hacemos por los hallazgos de unos pocos huesos en dos
lugares diferentes: los restos del individuo 08 que se encontraron revueltos con
fragmentos de cerámica cerca a la también destruida vasija 10 (fotografías 65 y 66)
y, en otro lado, los restos del individuo 09, correspondientes a fragmentos de
huesos largo, encontrados cerca de las vasijas 5 y 6, junto a una tubería conectada
al manjol (fotografía 76).

Fotografía 76: Fragmentos de huesos, individuo 09. Panorámica del


manjol y de las vasijas 1, 4, 5, 6 y 7. Al fondo, vasija 9

En el anexo 1, la tabla 8 muestra la relación de evidencias en el salvamento del


sector atrio de la capilla. Esta incluye los vestigios recuperados en el área de
ampliación (ver mapa 3 y fotografías 44 y 45). En esta última, el conjunto de
evidencias corresponde a menos del 25% del total de lo obtenido; y se hallaron en
las cuadrículas aledañas al apisonado. En la tabla 9 se detallan los tipos cerámicos
diferenciables en la muestra. Se destaca un mayor número de evidencias del
periodo colonial, de acuerdo con la clasificación expuesta en el capítulo IV,

En el mismo anexo, en la tabla 10 se relacionan las evidencias del salvamento


alrededor del manjol. En este caso, prácticamente debajo de la estructura de
concreto de rodamiento (calle 14) se hallaron los pocos fragmentos del periodo
colonial que había en el sitio. Mientras que la concentración mayor de vestigios
corresponde al contexto funerario prehispánico, a partir de 120 cm de profundidad.
Los fragmentos hallados en el nivel intermedio guardan relación con la destrucción
parcial del sitio cuando se construyó el manjol. En la tabla 11 se indican los tipos
cerámicos de la muestra obtenida y analizada (capítulo IV).
56
3.3. Monitoreo

La actividad de monitoreo alude principalmente al acompañamiento preventivo a las


obras civiles, particularmente en la fase de zanjado, para verificar la presencia o
ausencia de evidencias arqueológicas que no se hubiesen detectado durante la
prospección y en los sectores de salvamentos. Esta actividad se realizó desde
noviembre 2013 hasta agosto de 2014. Empezó en el sector de la Albarrada de Los
Ángeles inmediatamente después de la prospección arqueológica y terminó con el
trazado a las líneas de interconexión eléctrica para la iluminación del parque y de
todos los sectores de la Albarrada Sur.

En la Albarrada sur, primero se llevaron a cabo los zanjados de hasta 70 cm para la


renovación de la red de tubería de servicios públicos (fotografía 77).
Posteriormente, con semanas de diferencia, se excavó la superficie para la
conformación de la sub-base y la base de los adoquines del acabado final de la vía.
En la plaza de Santa Bárbara, la excavación general profundizó hasta 70 cm para
conformar la sub-base y la base granular del acabado final (adoquines). La
fotografía 78 muestra el área de encerramiento del salvamento arqueológico en el
atrio de la capilla, la excavación de 70 cm para toda el área de la plaza según el
diseño de la obra y la conformación por capas de la base granular hasta alcanzar el
nivel del contrato.

Fotografía 77: Zanjado renovación tubería Fotografía 78: Configuración de la base granular
servicios públicos Albarrada del Campillo antes del adoquinado sector del parque

Arqueológicamente, a lo largo de la Albarrada Sur se hallaron macrorrestos de


animales (v. gr. huesos de bovinos y tortugas), fragmentos de cerámica en menor
proporción, algunos instrumentos de hierro del siglo XX. El análisis de estas
evidencias se presenta en el capítulo IV. En tres sitios se encontraron restos óseo
humanos.

57
En la Albarrada de San Rafael cerca a los portales de Santa Bárbara, se
encontraron, junto a una tubería, huesos del cráneo y del brazo izquierdo de un
esqueleto (individuo 14 en la numeración general; fotografía 79). Aunque no se
pudo determinar si era del periodo prehispánico o posterior a éste, se obtuvo
información interesante de algunas personas de familias momposinas desde hace
varias generaciones. Según ellas, antiguamente, cuando el río llevaba algún
ahogado y quedaba trancado al lado de la Albarrada, se le enterraba próximo a ese
sitio, porque la gente creía que era presagio de algo malo. En el transcurso de las
décadas, el río ha cambiado su curso, acercándose desde el periodo colonial a la
villa de Mompox. Cimientos del muro de la antigua Albarrada se ha observado en el
lecho del río, cuando el nivel del agua ha bajado en periodos de sequía. La ribera
de la margen occidental (donde queda la ciudad) era más amplia de lo que se
aprecia hoy día.

Fotografía 79: Zanjado renovación tubería servicios


públicos Albarrada del Campillo

Otro comentario relacionado con este esqueleto, alude a que antiguamente, por
temor a la brujería, a las personas sospechosas de esta práctica no las enterraban
en los cementerios sino que los botaban al río o los enterraban cerca para que el
agua se los llevara. La duda sobre la identidad del maltrecho cadáver del ahogado y
el temor a la brujería hacía que le enterrara en sitio diferente al campo santo
(cementerio).

En la Albarrada del Alba, se encontró un esqueleto más completo aunque los


huesos estaban muy deteriorados y frágiles (individuo 15). Los incisivos en forma
de pala (rasgo de antropología forense) y algunos fragmentos de cerámica sugieren
que era indígena. La excavación se realizó de manera controlada (fotografías 80 y
81)

58
Fotografía 80: Albarrada del Alba , Individuo 15

Fotografía 81: Albarrada del Alba , Individuo 15

Acorde con lo expuesto, tanto en este capítulo como en el capítulo II de este


informe; y los hallazgos del periodo prehispánico en la plaza San Francisco y
Albarrada Norte, investigación llevada a cabo por Romero y Zarama (2014); Santa
Cruz de Mompox se fundó y expandió en una zona habitada por los indígenas
malibú, por lo menos desde las primeras décadas del siglo XV d.C hasta el contacto
59
hispano. Esto sugiere que además de las tres plazas: Santa Bárbara, La
Concepción y San Francisco, hubo otros sitios funerarios entre éstas. Con el
desarrollo urbano de la ciudad, varios contextos funerarios se habrían perdido o aún
permanecen bajo los cimientos de las casonas y edificaciones antiguas, las calles y
los otros parques.

En la tabla 12 del anexo 1, se indica el número de fragmentos de evidencias


obtenidas durante el monitoreo y su procedencia en el área del proyecto. La
distribución tipológica de la cerámica se muestra en la tabla 13, siguiendo los
criterios que se exponen en el capítulo IV.

Respecto a las tablas 14 a 17 del mismo anexo, éstas dan cuenta de las evidencias
halladas en los cortes 3 y 4 realizados para recuperar los vestigios asociados a los
dos esqueletos encontrados durante el monitoreo en la Albarrada de San Rafael y
la Albarrada del Alba (ver mapa 5).

60
CAPITULO IV

TRABAJO DE LABORATORIO

En este capítulo se expone el resultado de los análisis llevados a cabo, por el grupo
de profesionales de arqueología y especialistas, a los diferentes tipos de evidencias
encontradas en la investigación: cerámica, vidrio, artefactos líticos, instrumentos de
metal, restos óseos humanos (antropología forense) y macrorrestos de animales.

4.1. Cerámica prehispánica, colonial y republicana

El análisis de la cerámica prehispánica se fundamentó principalmente en las


clasificaciones hechas por Reichel – Dolmatoff (1991) y por Plazas y Falchetti
(1981) y en las contribuciones de los programas de arqueología preventiva.

Tomando como referencia el trabajo pionero de Gerardo Reichel-Dolmatoff y Alicia


Dussán en los años cincuenta en el bajo río Magdalena, Plazas y Falchetti
encuentran similitudes entre la cerámica del sitio Las Palmas, del bajo río San
Jorge, y la cerámica excavada por Reichel y Dussan en los municipios de Plato,
Zambrano, Chimichagua, entre otros. Según las autoras (Ibíd.: 116)

El complejo Cerámico de Las Palmas es una manifestación local de la


Tradición Incisa – Alisada que tiene una amplia distribución en el norte
de Colombia, concentrándose especialmente en el bajo río
Magdalena. Tres tipos de este complejo tienen su equivalente en el
bajo Magdalena.

Bajo San Jorge Bajo Magdalena


(Complejo Las Palmas) (Complejo Plato – Zambrano)
Las Palmas Incisa Fina corresponde a Saloa Gris Modificada
Las Palmas Hachurada corresponde a Magdalena Hachurada
Las Palmas Roja Bañada corresponde a Plato Roja Bañada

A partir de esta asociación y teniendo en cuenta las contribuciones de los


programas de arqueología preventiva en la región (ver capítulo I), en el análisis del
material cerámico prehispánico acogemos la denominación Tradición Incisa –
Alisada que comprende diferentes tipos a saber: particularmente el “Rojo Bañado”,
el “Habano Inciso Fino”, el “Habano Alisado Sencillo”, el “Tosco Granuloso”, el
“Tosco Achurado”, el “Negro a Café Bruñido” y el “Rojo con Engobe Crema”, según
las evidencias halladas en la plaza Santa Bárbara y la Albarrada Sur.

61
Intencionalmente no le anteponemos el nombre del sitio (v. gr. Las Palmas, Saloa,
Magdalena, Plato) a cada tipo pues consideramos que al ser una tradición
extendida por toda la región, no se necesita dicha identificación. Ocasionalmente,
en una presentación en Santa Cruz de Mompós nos preguntaban por qué no
identificar cada tipo con la palabra Mompox. La explicación que dimos es que en los
trabajos pioneros de arqueología era importante dicha identificación para precisar
de dónde procedía el material, sobre todo en una época en la que los diferentes
investigadores no contaban con una colección de referencia tan amplia como la que
hay hoy día descrita en un sinnúmero de informes inéditos y publicaciones.
Valoramos los esfuerzos comparativos de colegas y nos interesa que el lenguaje
arqueológico también sea de dominio público entre los estudiantes, académicos y
personas interesadas de la comunidad momposina y de otras regiones.

En este sentido, la clasificación tipológica del material hallado tiene las siguientes
características (ver fichas 1 a 7) en la Tradición Incisa – Alisada.

Tipo 1: Rojo bañado

Ficha 1 / TRB DESCRIPCIÓN


Textura: compacta, ligeramente laminar
Núcleo: presente
Inclusiones: arena de río fina
Pasta Dureza (Escala de Moh): 4-6
Paredes: 5 a 15 mm
Color predominante: Rojizo en la superficie externa 5YR6/6 reddish yellow
pero desaparece con facilidad debido a la erosión; gris claro en la superficie
interna 2.5 YR 6 gray
Superficie Manchas de cocción: si
Calidad del alisado: buena
Baño: si / Engobe: no
Bruñido: no
Técnica manufactura: enrollado
Erosión: presente en algunos fragmentos
Decoración Incisiones a modo de líneas, puntos, muescas. Aplicaciones a manera de
cordones y pequeñas figuras con incisiones.
Bordes Evertidos y directos con labios redondeados
Funciones Uso doméstico y ritual (vasijas funerarias)
Formas Vasijas globulares, vasijas de cuerpo aquillado
Identificables
Fotografías 79 a 82

62
Tipo 2. Habano Inciso Fino

Ficha 2 / THIF DESCRIPCIÓN


Textura: compacta, ligeramente laminar
Núcleo: ausente
Pasta Inclusiones: arena de río fina
Dureza (Escala de Moh): 3-5
Paredes: 5 a 10 mm
Color predominante: Habano claro en la superficie externa 5 YR 5/2 grayish
brown.
Manchas de cocción: no
Superficie Calidad del alisado: buena
Baño: si / Engobe: no
Bruñido: no
Técnica manufactura: enrollado
Erosión: presente en algunos fragmentos
Pared: 5 a 10 mm
Incisiones a modo de líneas, diseños geométricos incisos, aplicaciones
Decoración alrededor del cuerpo de las vasijas con punteaduras.
Evertidos y directos con labios rectos; evertidos con decoraciones incisas y
Bordes labios redondeados.
Funciones Uso doméstico y ritual (funerario)
Formas Copas, copones, vasijas globulares, vasijas trípodes, platos y cuencos.
Identificables
Fotografías 83 a 85

Tipo 3: Habano Alisado Sencillo

Ficha 3 / THAS DESCRIPCIÓN


Textura: compacta, granulosa
Núcleo: no
Inclusiones: arena de río fina
Pasta Dureza (Escala de Moh): 4-6
Paredes: 5 a 10 mm
Color predominante: habano 7.5YR4/2 grayish brown y 7.5YR5/3
dull brown
Manchas de cocción: visibles en algunos fragmentos
Superficie Calidad del alisado: buena
Baño: si / Engobe: no
Bruñido: no
Técnica manufactura: enrollado
Erosión: presente en algunos fragmentos
Decoración Incisiones a manera de pequeñas muescas en el borde
Bordes Evertidos y directos
Funciones Uso doméstico y ritual
Formas Identificables Vasijas globulares, vasijas mamiformes.
Fotografías 86 a 89

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Tipo 4: Tosco Granuloso

Ficha 4 / TTG DESCRIPCIÓN


Textura: tosca granulosa
Núcleo: no
Fragmentación: irregular sin seleccionar
Pasta Inclusiones: arena de río
Dureza (Escala de Moh): 4-5
Paredes: 5 a 10 mm
Color predominante: habano claro 5YR6/3 dull reddish brown
Manchas de cocción: visibles en algunos fragmentos
Calidad del alisado: regular
Superficie Baño: si / Engobe: no
Bruñido: no
Técnica manufactura: enrollado
Erosión: presente en algunos fragmentos
Decoración Aplicaciones a modo de agarraderas.
Bordes Evertidos y directos
Funciones Uso doméstico
Formas Identificables Vasijas globulares de base anular
Fotografías 90

Tipo 5: Tosco Achurado

Ficha 5 / TTA DESCRIPCIÓN


Textura: tosca granulosa
Núcleo: no
Inclusiones: arena de río sin seleccionar
Pasta Dureza (Escala de Moh): 4-5
Paredes: 15 a 20 mm
Color predominante: habano claro 5YR6/3 dull reddish brown
Manchas de cocción: visibles en algunos fragmentos
Calidad del alisado: regular
Superficie Baño: si / Engobe: no
Bruñido: no
Técnica manufactura: enrollado
Erosión: presente en algunos fragmentos
Decoración Líneas incisas burdas paralelas que se cruzan con otras formando
un achurado
Bordes Evertidos con labio redondeado
Funciones Uso doméstico
Formas Identificables Vasijas globulares y subglobulares
Fotografías 91 y 92

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Tipo 6: Negro a Café Bruñido

Ficha 6 / TNCB DESCRIPCIÓN


Textura: compacta
Núcleo: no
Inclusiones: arena de río fina
Pasta Dureza (Escala de Moh): 4-6
Paredes: 5 a 10 mm
Color predominante: marrón oscuro grisáceo 7.5YR4/1 brownish
gray
Manchas de cocción: no
Superficie Calidad del alisado: muy bueno
Baño: si Engobe: no
Bruñido: si
Técnica manufactura: enrollado
Erosión: no
Decoración Líneas incisas finas
Bordes Evertidos con labio redondeado
Funciones Uso doméstico y ritual
Formas Identificables Copas y vasija de base trípode
Fotografías 93 a 95

Tipo 7: Rojo con Engobe Crema

Ficha 7 / REC DESCRIPCIÓN


Textura: compacta, ligeramente laminar
Núcleo: presente
Inclusiones: arena de río sin seleccionar
Pasta Dureza (Escala de Moh): 4-6
Paredes: 10 a 15 mm
Color predominante: Anaranjado opaco 7.5YR6/4 dull orange. Donde el
engobe se mantiene tiende al 7.5YR8/2 light gray
Manchas de cocción: si
Superficie Calidad del alisado: buena
Baño: si / Engobe: si
Bruñido: no
Técnica manufactura: enrollado
Erosión: presente en algunos fragmentos
Decoración Incisiones ungulares en el borde.
Bordes Evertido con labio ligeramente redondeado
Funciones Uso doméstico
Formas No identificable en la muestra
Identificables

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Fotografía 79: Cerámica Rojo Bañado

Fotografía 80: Cerámica Rojo Bañado Fotografía 81: Cerámica Rojo Bañado

Fotografía 82: Cerámica Rojo Bañado Fotografía 83: Cerámica Habano Inciso Fino

66
Fotografía 84: Cerámica Habano Inciso Fino Fotografía 85: Cerámica Habano Inciso Fino

Fotografía 87: Cerámica Habano Alisado


Fotografía 86: Cerámica Habano Alisado Sencillo
Sencillo

Fotografía 89: Cerámica Habano Alisado


Fotografía 88: Cerámica Habano Alisado Sencillo
Sencillo
(soporte)
(asa)

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Fotografía 90: Cerámica Tosco Granuloso Fotografía 91: Cerámica Tosco Achurada

Fotografía 92: Cerámica Tosco Granuloso Fotografía 93: Cerámica Negro a Café Bruñido

Fotografía 94: Cerámica Negro a Café Bruñido Fotografía 95: Negro a Café Bruñido

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En el análisis de la clasificación cerámica también acogemos el aporte de Therrien
et al (2002) para la cerámica colonial. Las fichas 8 y 9 sintetizan los tres estilos que
los autores identifican con sus respectivos tipos y características.

En la ficha 8, el primero de estos estilos - el Crespo Contacto - alude


particularmente a cerámica indígena. Según la descripción dada por los autores, el
tipo Crespo Fino es parecido al tipo “Habano Inciso Fino”. El tipo Crespo Café
Arenoso se asemeja al “Tosco Granuloso” y el tipo Crespo Rojo Arenoso es similar
al “Rojo Bañado”. A nuestro juicio, se mantienen en la Tradición Incisa – Alisada,
pero, con variantes locales.

Ficha 8. Clasificación cerámica de contacto (Therrien et al 2002)


Estilo Tipo Característica

Pasta arenosa de grano muy fino, compacta y de color rojizo a gris


oscuro. Conformado por vasijas de paredes delgadas (0,6 a 0,8 cm).
Conformado por vasijas como cuencos, ollas, jarras y otras formas
Crespo Fino redondeadas. Su superficie es muy lisa y se halla decorada con
incisiones en forma de red o con una tira de arcilla aplicada cuyas
incisiones le dan una apariencia de cadena. Desaparece al comienzo
del periodo colonial.

Crespo Varios rasgos lo diferencian del anterior. Pasta de color café,


Contacto ocasionalmente presenta un núcleo gris a negro; granulosa; con
inclusiones de mica y cuarzo fácilmente visibles. Algunos fragmentos
Crespo Café tienen hollín en la superficie externa (sugiere posible uso para
Reproduce la
manufactura de los Arenoso cocción alimentos). Vasijas en forma de budares, tinajas y ollas con
tipos cerámicos paredes gruesas (0,8 a 1,5 cm). Se reduce notoriamente al comienzo
prehispánicos. del periodo colonial.

Parece haber sido el más popular antes y después de la conquista


española. Pasta de textura arenosa y compacta, con tinte rojo
magenta a café. Vasijas en forma de copas, cuencos de borde
Crespo Rojo invertido y recto, ollas, budares pequeños y otras formas
Arenoso redondeadas con cuello o más achatadas, como ollas cuenco. Dada
la diversidad de formas, el grosor de las paredes varía entre 0,6 y 1
cm.

Los estilos del periodo colonial se indican en la ficha 9, los cuales tomamos como
referencia en nuestro análisis de la cerámica.

69
Ficha 9. Clasificación cerámica colonial (Therrien et al 2002)
Estilo Tipo Característica
Conserva los rasgos de la pasta y acabado de la superficie del estilo
anterior, pero se introduce al repertorio de formas los bacines.
Crespo Café Indígenas y afros usaron esta vasija para emular los hábitos de
Arenoso higiene de los españoles y además las elaboraron. Al final de periodo
Crespo colonial desaparecen casi por completo (en Cartagena entre 1700 y
1750).
colonial
Conserva también las características de la pasta. Introduce motivos
Características decorativos elaborados con sellos (presión sobre arcilla húmeda,
decorativas y formas Crespo Rojo posible influencia africana) y la aplicación de rollos de arcilla en los
que sugieren la
influencia de
Arenoso, bordes. Las formas cambian a vasijas globulares de cuello evertido
tradiciones como la variedad que pueden ser pequeñas, de paredes delgadas o gruesas, o
europea y africana. torneado grandes para uso culinario; igualmente ollas grandes de cuello
invertido. También se hallan vasijas pequeñas delicadas, quizás para
guardar bálsamos, aceites, etc. Se vuelven corrientes las pailas de
cerámica con rollo extra de arcilla pegado en el borde.

Sigue la tradición española, producida en la fábrica de loza jesuita de


Cartagena con técnicas usadas en España: cocción a altas
temperaturas en hornos especializados, modelado mediante ruedas
Cartagena de torno y aplicación frecuente de un baño de cal en una o ambas
Rojo superficies. Pasta generalmente de color rojizo o anaranjado intenso.
compacto Arcilla de grano fino, sin desgrasante visible y compacta. Vasijas de
formas variadas para diferentes usos: grandes como botijas de bases
planas; fines higiénicos como lebrillos; iluminación como lámparas de
aceite; consumo alimentos como platos, tazas, pocillos y escudillas.
El grosor de las paredes varía entre 0,6 y 1,2 cm.

Cartagena Cartagena Mismo tipo anterior pero varían las formas. Vasijas de paredes muy
Rojo delgadas (0,4 a 0,6 cm), en su mayoría pocillos o envases de
Criollo Colonial
Compacto, esencias (globulares con cuello) que exhiben, por lo general, un baño
variedad fino blanco en ambas caras. El color de la pasta varían varía de crema a
Fabricado
/ baño blanco anaranjado claro. Conocido comúnmente como bizcocho
localmente, pero
cartagenero.
basa sus formas y
decorados en el
repertorio español. Presenta las mismas características del Cartagena Rojo Compacto,
pues este último es la base (bizcocho o jahuete) sobre la cual se
aplican los esmaltes que diferencian a un tipo del otro. La loza es
vidriada con plomo el cual se funde cuando es introducida
nuevamente en un pequeño horno para opacar el color mediante
Mayólica
óxido de estaño, técnica conocida como itálica. El estaño le da una
Cartagena
base blanca mate a las vasijas sobre la que se pueden agregar
distinto óxidos (cobre para el verde, cobalto para el azul, manganeso
para el negro y antimonio para el amarillo) que componen los motivos
decorativos. Formas comunes son los platos, bacines, lebrillos, tazas,
pocillos, jarros, floreros y candelabros. Las paredes son
generalmente delgadas (0,4 a 0,8 cm).

70
Además, destacamos el aporte de Cifuentes (2002: 33-43) al relacionar ciertas
actividades con los objetos de cerámica. De acuerdo con el autor y colaboradores,
hay objetos indicadores de las actividades de almacenar, cocinar, consumir, asear /
sanar y entretener.

En este sentido, durante la colonia, la necesidad de los españoles de conservar su


rutina y sobrevivir en un mundo ajeno a su cultura en el continente europeo propició
la creación de ciertas fábricas donde se reprodujera la materialidad a la que
estaban habituados. Se destaca, entonces, la producción de cerámica Mayólica
Mompox, generalmente de color rojo intenso, fabricada con torno, decorada con los
colores negro y verde. Esta cerámica agrupa formas para el servicio de alimentos
como tazones, tazas y platos y se ubica entre 1650 y 1770. También se halla el
Vidriado Mompox, de arcilla de grano fino y textura compacta, generalmente de
color rojizo intenso, elaborada mediante torno, usualmente sin decoración, cuyas
formas identificadas son: bandejas, lebrillos, platos, escudillas, cuencos, tazas y
tazones. Además formas relacionadas con el aseo como bacines y lebrillos. Se
ubica entre 1650 y 1770.

De la tradición europea, son comunes las botijas, las cuales se presentan en dos
variantes: la primera, de arcilla con inclusiones semejantes al talco y tonalidades
que van del gris al rosado. La segunda, con presencia de mica como desgrasante y
colores típicos como el crema y el amarillo rosáceo. Entre 1470 y 1570 (periodo
temprano, ambas superficies son tratadas con baño blanco. En el periodo medio
(1550-1800), las capas blancas tienden a desaparecer y la superficie no es tan
suave. Durante el periodo tardío (1780-1850) la superficie interna presenta
acanaladuras concéntricas. Este recipiente básicamente fue empleado en el
transporte y almacenamiento de líquidos y aceites. Proceden de España, pero hay
referencias de que también se elaboraron en los talleres americanos (Ibíd).

Igualmente importante para el registro arqueológico de Mompox son la cerámica


Sevilla Azul sobre Azul y Azul sobre Blanco, ambas de pasta compacta con poca
evidencia de desgrasante, y una textura similar a la tiza. La superficie presenta una
capa de esmalte de estaño, la técnica de manufactura del objeto es el torno. Las
formas más frecuentes se relacionan con el consumo de alimentos como platos,
tazones y tazas. Su cronología es 1530 a 1650 (Ibíd).

Comparativamente, la loza industrial, se caracteriza por una pasta muy fina con
poco desgrasante visible, el color de las arcillas es blanco y la superficie altamente
vitrificada. La decoración es variada, con técnicas como el azul diluido, los sellos, la
impresión por transferencia, los diseños florales pintados a mano, entre otros. Las
formas comunes son los platos, tazones, tazas y bandejas. El lugar de procedencia
es Inglaterra (Ibíd).

71
En la fotografías 96 a 106 se ejemplifican algunos de los tipos de cerámica colonial.

Fotografía 96: Cerámica mayólica Sevilla azul sobre azul

72
Fotografía 97: Cerámica mayólica Sevilla Fotografía 97: Cerámica mayólica
azul sobre azul azul sobre blanco

Fotografía 98: Cerámica mayólica blanca Fotografía 99: Cerámica mayólica blanca

Fotografía 100: Cerámica mayólica Cartagena Fotografía 101: Cerámica mayólica vidriado
blanca verde

73
Fotografía 102: Cerámica mayólica Aranama Fotografía 103: Cerámica vidriada colonial
Policromo tardía

Fotografía 105: Cerámica Cartagena rojo


Fotografía 104: Borde de botija
compacto (bordes de botijas)

Fotografía 106: Cerámica Cartagena rojo


compacto

74
Respeto a la loza industria, Therrien et al (2002) señalan que:

La producción de loza fina o semiporcelana se inició en Europa a


mediados del siglo XVIII y obedeció a los intentos por imitar la
porcelana china, popular en occidente. Al comienzo las piezas se
destacaban pintándolas a mano, pero hacia 1790, cuando se
perfeccionaron las técnicas industriales que permitían fabricarlas en
mayor volumen, se impuso la decoración impresa por transferencia:
en una placa de cobre se gravaba un motivo; a ésta se le untaban
minerales –cobalto para obtener el azul– y, luego, con esto se
impregnaba un papel encerado que era transferido al plato. Hacia
1830, la producción lograba abastecer no sólo el mercado europeo
sino el de otras latitudes (…) (Ibíd).

Las fotografías 107 a 116 ejemplifican la loza industrial de los siglos XIX y XX en
Mompox.

Fotografía 107: Loza industrial, impresión


por transferencia

75
Fotografía 108: Loza industrial, impresión por Fotografía 109: Loza industrial, impresión por
transferencia transferencia

Fotografía 110: Loza industrial, impresión por Fotografía 111: Loza industrial vidriada
transferencia policroma

Fotografía 112: Loza industrial, impresión por Fotografía 113: Loza industrial vidriada
transferencia policroma

76
Fotografía 114 Loza industrial Fotografía 115: Loza industrial

Fotografía 116: Loza industrial moderna

4.2. Vidrio

En los periodos históricos, la diversidad de materiales no perecederos


que entraron a formar parte del menaje doméstico fue grande:
cerámica, vidrio, hierro, seda, porcelana, entre otros, con los que se
elaboraron diversos objetos que pasaron a satisfacer las necesidades
de ricos y pobres. No obstante este panorama, no existen estudios
sobre estos otros materiales en el ámbito colombiano que permitan
conocer sobre sus características, usos y significados en los periodos
históricos y establecer comparaciones con otros países en que se han
realizado estos trabajos (Ortiz 2007: 1)

77
Algunos autores, a partir del estudio del vidrio, han aportado elementos para
aproximarse a la comprensión de la vida cotidiana, las costumbres y los estilos de
vida de las poblaciones. Otros han propuesto que además de las características
formales, se puede indagar acerca de los patrones de la cultura material en general.
También se ha usado el vidrio como marcador cronológico, elaborando
clasificaciones basadas en ciertos atributos como los bordes, cuellos, bases, entre
otros. En este sentido, Ortiz (Ibíd.: 2-3) sostiene que el vidrio es el objeto que
presenta la mayor variedad de colores, formas y procedencias, por lo tanto, puede
ser indicador cronológico excelente.

Para el siglo XVIII, la producción local en la península ibérica


disminuyó y fue incapaz de suplir la demanda, el vidrio importado
inundó a España y de allí fue reexportado, legal o ilegalmente, a las
Américas. Si bien la intención de la corona española era que el
comercio fuera centralizado, restringido y registrado, pretendiendo
que los orígenes y los períodos de entrada de los bienes del viejo
mundo fueran bien conocidos, la realidad fue diferente. La laxitud de
los controles y la alta demanda de productos hispánicos alimentaban
el contrabando, que aseguraba la entrada de productos foráneos,
tales como lociones, productos de belleza, tónicos o bebidas
alcohólicas de otros países europeos y que están presentes en el
registro arqueológico desde el siglo XVII. (Ibíd.: 6).

Además:

(…) sólo hasta el siglo XX se produjo el vidrio localmente, por lo que


su obtención, especialmente en el altiplano cundiboyacense,
dependería de su importación y traslado a través de difíciles caminos
de herradura que contribuyeron con su alto costo y escasez; es obvio
entonces que el acceso a este material estaba restringido a individuos
que detentaban una posición económica o social acomodada. Ello se
evidencia también en la documentación histórica, donde es notoria la
ausencia de objetos de vidrio en los inventarios domésticos para los
primeros años de la colonia, salvo para los grupos sociales más altos.
(Ibíd.: 7).

Por otra parte, debido a los distintos usos que se le ha dado a las botellas de vidrio,
éstas pueden considerarse marcadores de actividades y comercios específicos, por
ejemplo, farmacéutico (remedios, medicinas y tónico), bebidas alcohólicas y no
alcohólicas, alimentos, cosméticos (perfumes, esencias y colonias), entre otros.

78
En la plaza de Santa Bárbara y la Albarrada Sur, sólo se encontraron algunos
fragmentos, entre los que se destacan los incluidos en las fotografías 117 y 118.
Debido a esto, una aproximación a la antigüedad y el método de producción se hizo
comparándolos con las imágenes y descripciones del trabajo de Ortiz (Ibíd.).

Fotografía 117: Fragmentos de botellas

Fotografía 118: Fragmentos de vidrio

79
Como referencia, la figura 4 ejemplifica los colores de interés para la clasificación
del vidrio.

Figura 4. Colores de referencia

Aqua Azul cobalto Verde oliva Transparente Ámbar

A partir del color, Ortiz (Ibíd.: 45) señala que el aqua es un color antiguo, presente
en el registro arqueológico de Cartagena y la Sabana de Bogotá. En principio fue
utilizado para contener bebidas, luego para productos estéticos, y a partir del siglo
XX es escaso en el registro arqueológico.

El azul cobalto, fue patentado en 1744, por lo que se estima que a partir del siglo
XVIII podría estar presente en el registro arqueológico. Se considera que su uso
estuvo limitado a botellas de uso medicinal, como jarabes, vigorizantes y citrato de
magnesia (Ibíd.: 45).

El verde oliva es uno de los colores más antiguos, el de más bajo costo y el más
fácil de producir. Está asociado a botellas de licor de los siglos XVI, XVII y XVIII y
muy escaso a partir de 1850, en el registro arqueológico (Ibíd.: 42).

La categoría transparente - según Ortiz – es compleja, pues está presente en


grandes cantidades en el registro arqueológico y en todas las categorías de uso de
las botellas, pero es escaso para los primeros siglos del periodo colonial. Sólo el
vidrio producido a finales del siglo XIX podría datarse con cierta precisión por la
evidencia del uso de descolorantes (Ibíd.: 45).

La categoría ámbar también es compleja, pues agrupa tonalidades de vidrio antiguo


utilizado tanto en bebidas alcohólicas como en productos estéticos y medicinales.
Este color es muy común en las botellas de los siglos XIX y XX. De acuerdo con la
autora:

Como elemento diagnóstico no son muy útiles debido al amplio


margen de tiempo en el que se presentan y en muchos tipos de
botellas, pero pueden servir los siguientes datos: no es usual
encontrarlo en botellas anteriores a 1890, su variante media es la
más común a partir de 1920 y actualmente es el color preferido a la
hora de fabricar botellas de cerveza. (Ibíd: 47)

80
En el fragmento circular de la fotografía 99 se aprecia que corresponde a la base de
una botella y que tiene la marca del molde con el número “22”. Esto indica que fue
producido industrialmente. Dicha producción se inició en Estados Unidos en 1903 y
sólo hasta 1949 se adoptó esta técnica en Colombia, por la industria Peldar (Ibíd:
30).

En nuestra investigación, la mayoría de los fragmentos de vidrio se obtuvieron en la


prospección en la plaza Santa Bárbara y uno en la Albarrada de los Ángeles (cerca
de la plaza de La Concepción).

Las plazas, en tanto, espacios públicos, eran los centros de encuentro y de


comercio activo donde el río era la vía de ingreso de éstos y otros productos desde
el periodo colonial hasta el siglo XX.

4.3. Líticos

En la investigación se obtuvieron cinco elementos líticos: dos asociados al


salvamento del contexto arqueológico sector manjol y tres en la prospección de la
plaza Santa Bárbara (apiques 13, 15 y 17).

En el sector manjol, uno de los artefactos, posiblemente elaborado en chert, pudo


haberse usado a manera de hacha (fotografías 119). Este presenta una superficie
bien pulida y fue trabajado a partir de un canto rodado. El otro objeto tiene forma
alargada, pero se halló roto y sin bordes de uso diferenciables. De acuerdo con el
hallazgo, pareciera que los dos fueron rotos intencionalmente antes de la formación
del sitio de cementerio.

Fotografía 119: Fragmento de hacha Fotografía 120: Artefactos


hallado junto a individuo 01 líticos apiques 13 y 17

81
En los apiques 13 y 17 de la prospección, en el suroeste de la plaza, se hallaron
otros dos artefactos (fotografía 120), posiblemente de chert, elaborados a partir de
cantos rodados. Uno de estos se halló roto en un extremo y el otro, redondeado con
borde de uso a modo de hacha. El segundo artefacto se encontró en buen estado y
tiene la forma bien definida de un hacha.

En el apique 15 de la prospección, también en el sector suroeste de la plaza, se


halló un instrumento de arenisca para pulir, quizás otros líticos. Esto se infiere de la
forma y desgaste en uno de los extremos.

Fotografía 121: Instrumento para


pulir, hallado en el apique 15.

4.4. Metal

Los objetos de metal hallados en la investigación corresponden a cuatro clases:


ajuar funerario, uso bélico, uso comercial y uso industrial.

En la primera de éstas se ubican una nariguera de oro (fotografías 73 y 122) y una


nariguera de tumbaga (aleación de cobre y oro), asociadas al individuo 05 del
contexto arqueológico sector manjol.

Fotografía 122: Nariguera de oro


(individuo 05, salvamento manjol)
82
De la segunda clase de objetos se obtuvo un proyectil de mosquete de 20”
(fotografía 123). Esta arma de fuego se empleó desde el siglo XVI hasta el siglo XIX
d.C. Igual que su predecesor el arcabuz, se caracteriza, porque, tanto el proyectil
como el propelente (pólvora) son cargados por la boca del cañón.

Fotografía 123: Proyectil de mosquete


(diámetro: 20 mm; peso: 30 gr; color gris)

La tercera clase de objetos está representada por una moneda acuñada durante el
periodo de los Estados Unidos de Colombia. Este sucedió a la Confederación
Granadina en 1861 (acción confirmada con la Constitución Política de 1863) y fue
reemplazado por la República de Colombia en 1886. Durante ese periodo se
acuñaron monedas en las respectivas casas de Bogotá, Popayán y Medellín. No
obstante:

En el periodo de los Estados Unidos de Colombia las tres casas de


moneda soportaron los vaivenes nacionales y la escasez de oro y
plata para acuñar. Hubo diversas disposiciones sobre amonedación,
como la del 26 de mayo de 1866, que autorizó rebajar la ley de las
monedas de plata, a excepción del peso (…) (Banco de la República
2005)

La Convención de Rionegro había promulgado en 1863 una nueva


Constitución para el país, que cambio su nombre por el de Estados
Unidos de Colombia. Aunque la nueva Constitución no modifico el
trajinado sistema monetario, el caos era ya alarmante. Fuera de la
moneda extranjera había en circulación multitud de piezas nacionales
de muchas épocas y denominaciones. A partir de 1874, para subsanar
la falta de moneda fraccionaria, contrató el gobierno en el extranjero la
acuñación de moneda de níquel de baja denominación. (Henao 1996)

83
En las fotografías 124 y 125 se aprecian los dos lados de la moneda hallada
durante el monitoreo en la plaza Santa Bárbara. Debido al desgaste y oxido no es
visible el año en que fue acuñada y el valor en centavos. En la fotografía 126 se
muestra, a modo comparativo, una moneda con características similares, de cinco
céntimos.

Fotografía 124: Moneda hallada en Fotografía 125: Moneda hallada en la


la plaza Santa Bárbara (cara) plaza Santa Bárbara (sello)

Fotografía 126: Moneda de cinco


céntimos (Imagen google)

La cuarta clase corresponde a objetos elaborados en hierro. En el capítulo II se


expuso que durante el periodo colonial los objetos de este metal eran importados,
pues no había industria local. Sólo a partir de la década de 1820 se empieza a
producir este metal en el país, en la ferrería de Pacho (Cundinamarca), siguiéndole
a ésta otras tres grandes ferrerías en el siglo XIX (Mayor 1993).

Tanto en la prospección como en el monitoreo en la plaza Santa Bárbara y la


Albarrada Sur se encontraron fragmentos oxidados de objetos de hierro. La mayoría
indistinguibles en su forma y función. Los más representativos se muestran en las
fotografías 127 a 130. La identificación de éstos se realizó conversando con

84
personas de la comunidad momposina y comparando con objetos que conservan
en sus casas.

Fotografía 127: Clavos de hierro Fotografía 128: Gancho (rejas)

Fotografía 130: Fragmento de


Fotografía 129: Lima media caña
caldero

4.5. Cuentas de collares y huesos labrados

Esta clase de evidencias se encontró asociada a contextos funerarios. Con el


individuo 05 (femenino) del sector de salvamento manjol se encontraron dos tipos
de cuentas de collar: 1- elaboradas con fragmentos de conchas y caracoles de la
especie Oliva scripta (fotografía 131) y 2- elaboradas con piedras rojas finamente
trabajadas y pulidas (fotografía 132).

Fotografía 131: Cuentas de collar Fotografía 132: Cuentas de collar

85
Con el individuo 02 del sector de salvamento manjol se encontraron tres cuentas de
collar, de las cuales dos son de caracol de la especie Olivia scripta y una tercera
elaborada en concha (bivalvo) no identificada (fotografía 133).

Fotografía 133: Cuentas de collar


Fotografía 134: Cuentas de collar
(individuo 02, salvamento manjol)
(individuo 16, monitoreo)

En el monitoreo arqueológico, asociados a los fragmentos de huesos humanos del


individuo 16 (antiguo mercado La Concepción), se encontraron varias cuentas de
collar elaboradas con fragmentos de conchas (fotografía 134). Además, un
fragmento de hueso animal labrado con incisiones a manera de líneas paralelas en
uno de sus extremos (fotografía 135). Otro similar se encontró en el monitoreo en la
plaza Santa Bárbara.

Fotografía 135: Hueso labrado en el extremo


(largo 6 cm) asociado al individuo 16

4.6. Ladrillos y tejas

La mayor muestra de fragmentos de ladrillos y tejas, posiblemente del periodo


colonial, se encontró en el sector de salvamento del atrio de la capilla. Estos
formaban parte del apisonado de tierra y argamasa (fotografía 42 del capítulo III y
fotografías 136).

86
Fotografía 136: Detalle ladrillo hallado
junto a la entrada de la capilla, plaza
Santa Bárbara

De acuerdo con lo expuesto en el contexto regional arqueológico (capítulo II), una


de las primeras industrias en la Villa de Santa Cruz de Mompox fue la elaboración
de ladrillos y tejas, empelando hornos con leña (Di Filipo 2010: 39). Esta labor se
ha mantenido hasta hoy día con hornos similares a los de antaño (fotografías 137 a
139).

Fotografía 137: Horno ladrillera Mompox Fotografía 138: Horno ladrillera Mompox

Fotografía 139: Producción de ladrillo en


Mompox

87
Las personas que por tradición producen teja en estos hornos, en Mompox,
diferencian cuatro tipos: 1- española grande de arcilla cuidadosamente
seleccionada y de alta calidad; 2- española pequeña, usada para adornar ventanas,
3- teja elaborada por los “abuelos”, que mantenía una buena calidad y 4- teja
industrial de hoy día, de menor calidad.

4.7. Macrorrestos de animales

En la prospección y monitoreo tanto en la plaza de Santa Bárbara como en la


Albarrada Sur se encontró un gran número de fragmentos de huesos animales
(tablas 1, 2, 4, 6 y 8, 10 y 12 del anexo 1). Aproximadamente, el 70% de los
fragmentos corresponde a ganado vacuno; el 25% a tortuga (sobre todo de río) y
5% a otras especies: cerdo, manatí, caimán y peces. Las fotografías 140 a 159
ejemplifican los macrorrestos analizados y la ficha 9 ilustra las especies
identificadas y señala los lugares donde se encontraron.

Fotografía 140: Metacarpo Fotografía 141: Fragmento hueso


(Bos taurus) sacro (Bos taurus)

Fotografía 142: Astrágalos Fotografía 143: Falange y hueso del


extremidades (Bos taurus) carpo (Bos taurus)

88
Fotografía 144: Fragmento de costilla Fotografía 145: Fragmento de
(Bos taurus) mandíbula (Bos taurus)

Fotografía 146: Premolar superior Fotografía 147: Molar inferior


(Bos taurus) (Bos taurus)

Fotografía 148: Colmillo


(Sus scrofa)

89
Fotografía 149: Huesos de manatí
(Trichechus manatus)

Fotografía 150: Tortuga de río


(Podocnemis lewyana)

Fotografía 151: Húmero Fotografía 152: Hueso de la caparazón


(Podocnemis lewyana) (Podocnemis lewyana)

90
Fotografía 153: Hueso caparazón Fotografía 154: Hueso caparazón
(Podocnemis lewyana) (Podocnemis lewyana)

Fotografía 155: Huesos caparazón Fotografía 156: Vértebras y placas


(Trachemys callirostris) dérmicas (Caiman esclerops)

Ficha 9. Identificación de macrorrestos animales


Nombre Nombre
Ilustración Hallazgos
científico común

Plaza y portales de Santa Bárbara,


Bos taurus Res Albarrada de San Rafael, Portales
de la Marquesa.

Sus scrofa Cerdo Portales de Santa Bárbara

91
Nombre Nombre
Ilustración Hallazgos
científico común

Trichechus
Manatí Antiguo mercado La Concepción
manatus

Caiman
Caimán Albarrada Los Ángeles
esclerops

Plaza y portales de Santa Bárbara,


Podocnemis Tortuga de Albarrada de San Rafael, Portales
lewyana río de la Marquesa, A. del Alba, A. El
Campillo

Trachemys Portales de Santa Bárbara,


Icotea
callirostris Albarrada Los Ángeles

Cuenta de collar individuo 02,


Oliva scripta Caracol
sector salvamento manjol

Imágenes google

Si bien el Bos taurus y la Podocnemis Lewyana son las especies más


representativas en la muestra arqueológica, es significativo el hallazgo de unos
fragmentos de huesos de Trichechus manatus, no sólo porque hoy día está en vía
de extinción sino por las alusiones de su importancia en diferentes documentos. Al
respecto:

El manatí, animal extraño para los españoles, que lo asemejaron a su


mítica sirena, también sufrió esta arremetida de exterminio, producto
principalmente de un nuevo mito, que se da cuando les pareció que su
carne tenía 7 sabores (pollo, cerdo, pescado, res y otros). Su grasa
también fue utilizada para alumbrado y con su piel se elaboraban
látigos, los cuales sirvieron para azotar esclavos. Con un pedazo de

92
esta piel, los barberos asentaban el filo de sus navajas y los nativos
fabricaban escudos de guerra. Don Juan de Castellanos en sus
Elegías, da informe sobre la abundancia de Manatíes en la región de
Mompox: “Hay manatíes, pesca de deleite, cuya grosura tienen por
aceite. Es este río de ellos abundoso sin le faltar invierno ni verano; es
pece grande y en sabor gustosos, para los achacosos no bien sano;
en guisados y en tiempo tenebroso esta manteca tienen á la mano
según ala la cola, y á manera la boca que parece de ternera. Tantos
tasajos da como un ternero y alguno como mas crecidas reses; indios
algunos usan de su cuero haciendo dél adargas y paveses que no
puede pasar indio flechero, y hacen paca mella los reveses: son torpes
en remanso y en corriente, y ansí los pescan indios fácilmente”
(Castellanos 1589 en Di Filipo 2010: 47)

4.7. Evidencias óseas humanas

El análisis de los restos óseos humanos se fundamentó en determinar la cuarteta


básica: estatura, sexo, tendencia del patrón racial y edad en el momento del
fallecimiento. Además, la identificación de patologías.

La mayoría de los huesos estaban bastante deteriorados. Sobre todo los que se
encontraron en la Albarrada de San Rafael, la Albarrada del Alba y el antiguo
mercado de La Concepción.

En el sector de salvamento manjol, a pesar del deterioro natural, se pudo obtener


información valiosa sobre contexto funerario del siglo XVI d.C., de acuerdo con lo
ya expuesto en el capítulo III, numeral 3.2.1. Respecto a los infantes (quizás
neonatos) de las vasijas v2, v3 y v7, sólo se pudieron obtener algunos fragmentos
pequeños de huesos de cráneo mediante la técnica de flotación de la tierra,
utilizando agua y cedazos.

En las siguientes fichas se muestran los datos obtenidos en el registro in situ y en el


análisis de laboratorio.

En las fotografías in situ se alcanza a observar la forma de algunos huesos, pero


éstos estaban muy deteriorados y no se lograba conservarlos como unidades. Por
esta razón, las fotos en laboratorio muestran menos huesos. Otro detalle es que los
cráneos tocaba dejarlos con la tierra en su interior para mantener la forma y los
huesos juntos.

93
4.8.1. Ficha 10 análisis de restos óseos humanos individuo 01

FOTOGRAFÍAS
In situ Plato asociado a modo de máscara

En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de los Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
situ brazos piernas
cabeza
Norte (cráneo) Decúbito dorsal Extendidos con Extendidas a lo Esqueleto
– sur (pies). (Boca arriba) manos sobre las largo del cuerpo articulado, no
Cráneo ingles. completo por
inclinado hacia deterioro natural
la clavícula de los huesos.
izquierda.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario, directo, sin mortaja, plato de cerámica indígena sobre el rostro,
una cuenta de collar y un colmillo (Jabalí) sobre el pecho, fragmentos de hacha y cerámica
cerca a la cabeza.

ESTATURA
165 cm, tomada in situ a todo el esqueleto.

SEXO
Posiblemente masculino. Se infiere a partir de la estatura y robustez de los huesos largos.

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido a partir de los incisivos en pala y la cerámica asociada al
enterramiento.

94
EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE
Entre 18 y 22 años, inferido por desgaste dental (Lovejoy en Rodríguez 1994:122)

OBSERVACIONES CRANEO
No es posible determinar la forma ni algún otro rasgo específico por el deterioro de los
huesos

DENTICION
Desgaste Patologías
Moderado. Sugiere un individuo joven Cálculo dental en el premolar superior
derecho

ESQUELETO POSTCRANEAL
Huesos robustos

PATOLOGIAS
Ninguna observable

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula Clavícula
Parietales x Escápula Escápula
Temporales x Húmero x Húmero x
Occipital x Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo x Radio x Radio x
Faciales x Carpos Carpos
Maxilar superior x Metacarpos Metacarpos x
Maxilar inferior x Falanges Falanges
Costillas Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales Rótula x Rótula x
Vértebras dorsales Tibia x Tibia x
Vértebras lumbares Peroné x Peroné x
Sacro Tarsos x Tarsos x
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos Metatarsos x
pubis) Falanges Falanges

95
4.8.2. Ficha 11 análisis de restos óseos humanos individuo 02

FOTOGRAFÍAS
In situ En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
situ los brazos piernas
cabeza
Noroccidente Decúbito dorsal Brazos Extendidas a lo Cuentas de
(torso) – (Boca arriba). estirados con largo del cuerpo collar sobre el
nororiente las manos cuerpo.
(pies). sobre los Fragmentos de
muslos. cerámica cerca
de la pierna
izquierda.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario, directo, sin mortaja, cuentas de caracol (Olivia scripta)

ESTATURA
No determinable.

SEXO
No determinable por la ausencia de huesos indicadores.

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide) inferido a partir de la cerámica asociada al enterramiento

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


No determinable debido a la ausencia de huesos indicadores

OBSERVACIONES CRANEO
No tenía

DENTICION
Desgaste Patologías
No determinable No determinable

96
ESQUELETO POSTCRANEAL
Incompleto

PATOLOGIAS
Posible anomalía en la superficie articular de una de las vertebras

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 – 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal Clavícula Clavícula
Parietales Escápula Escápula x
Temporales Húmero Húmero x
Occipital Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo Radio x Radio x
Faciales Carpos Carpos
Mandíbula superior Metacarpos x Metacarpos x
Mandíbula inferior Falanges x Falanges x
Costillas x Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales x Rótula Rótula x
Vértebras dorsales x Tibia Tibia
Vértebras lumbares x Peroné Peroné
Sacro x Tarsos Tarsos x
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos Metatarsos x
pubis) Falanges Falanges x

97
4.8.3. Ficha 12 análisis de restos óseos humanos individuo 03

FOTOGRAFÍAS
In situ Cráneo

En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de los Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
situ brazos piernas
cabeza
Oriente Decúbito Derecho: Ambas Esqueleto
(cráneo) – ventral (boca extendido con la flexionadas. El articulado.
occidente abajo) mano en el talón de la Posible
(piernas muslo y el derecha sobre chamana.
flexionadas) derecho la nalga
ligeramente izquierda y la
recogido y con otra junto a
la mano en la ésta.
ingle

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario directo sin mortaja, con fragmentos de cerámica asociados.

ESTATURA
Fémur de 41 cm tomado in situ. Ecuación: 2,59 x (41) + 49,74 = 155 cm. (Genovés en
Rodríguez 1994: 195)

SEXO
Femenino de acuerdo con las características del cráneo

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido a partir de la cerámica asociada al individuo

98
EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE
Alrededor de 50 años inferido por la sinostosis de las suturas craneales. No se pudieron
establecer otros indicadores debido a la incompletitud de los huesos del esqueleto
poscraneal, ni por desgaste dental debido a la ausencia de la mayoría de las piezas

OBSERVACIONES CRANEO
Mesocéfalo

DENTICION
Desgaste Patologías
Incisivos con alto grado de desgaste dental Reabsorción alveolar debida en la mayoría
en los dos incisivos que contiene la de las piezas del maxilar inferior
muestra.

ESQUELETO POSTCRANEAL
Inserciones musculares marcadas en los fémures

PATOLOGIAS
No diferenciables

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula x Clavícula
Parietales x Escápula x Escápula x
Temporales x Húmero x Húmero x
Occipital x Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo x Radio x Radio x
Faciales x Carpos x Carpos x
Maxilar superior x Metacarpos x Metacarpos x
Maxilar inferior x Falanges x Falanges x
Costillas x Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales x Rótula x Rótula x
Vértebras dorsales x Tibia x Tibia x
Vértebras lumbares x Peroné x Peroné x
Sacro x Tarsos x Tarsos x
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos x Metatarsos
pubis) Falanges x Falanges x

99
4.8.4. Ficha 13 análisis de restos óseos humanos individuo 04

FOTOGRAFÍAS
In situ Cráneo

En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de los Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
situ brazos piernas
cabeza
Noroccidente Decúbito dorsal Derecha Extendidas a lo Esqueleto
(cráneo) – (boca abajo) extendida con la largo del articulado.
nororiente con la cabeza mano en el cuerpo.
(pies). inclinada hacia muslo e
Cráneo la clavícula izquierda
inclinado hacia izquierda. ligeramente
clavícula recogida y con
izquierda. la mano en la
ingle

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario, directo, sin mortaja.

ESTATURA
Entre 165 y 170 cm inferido por las siguientes ecuaciones:
Fémur 44 cm. 2,26 x (44) + 66,38 = 165,8.
Tibia 39 cm. 1,96 x (39) + 93,75 = 170,1 (Genovés en Rodríguez 1994: 195)

100
SEXO
Masculino de acuerdo con las características del cráneo.

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido por los incisivos en pala.

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


Entre 45 y 50 años inferido por la sinostosis de las suturas craneales. No se pudieron
establecer otros indicadores debido a la incompletitud de los huesos del esqueleto
poscraneal.

OBSERVACIONES CRANEO
Mesocéfalo

DENTICION
Desgaste Patologías
Marcado acorde a una persona de 45 - 55 Cálculo dental
años (Lovejoy en Rodríguez 1994: 123)

ESQUELETO POSTCRANEAL
Incompleto

PATOLOGIAS
No diferenciables

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula x Clavícula
Parietales x Escápula x Escápula
Temporales x Húmero x Húmero x
Occipital x Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo x Radio x Radio x
Faciales x Carpos x Carpos
Maxilar superior x Metacarpos x Metacarpos x
Maxilar inferior x Falanges x Falanges
Costillas x Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales x Rótula x Rótula x
Vértebras dorsales x Tibia x Tibia x
Vértebras lumbares x Peroné x Peroné x
Sacro x Tarsos x Tarsos x
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos x Metatarsos x
pubis) x Falanges x Falanges x

101
4.8.5. Ficha 14 análisis de restos óseos humanos individuo 05

FOTOGRAFÍAS
In situ Cráneo

En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de los Posición de
cuerpo y la Otros detalles
situ brazos las piernas
cabeza
Occidente Decúbito dorsal Extendidos con Extendida a lo Esqueleto
(cráneo) - (mandíbula las manos al largo del cuerpo articulado, no
oriente inferior lado de los completo por
(piernas) orientada hacia muslos deterioro natural
la clavícula de los huesos
derecha)

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario, directo, sin mortaja, cuentas de caracol (Olivia scripta) y dijes de
piedra roja pulida sobre la ingle izquierda; nariguera de oro y nariguera de tumbaga.

ESTATURA
Fémur: 42 cm. Ecuación: 2,59 x (42) + 49,74 = 158,5 cm.
Tibia: 35 cm. Ecuación: 2,72 x (35) + 63.78 = 158,9 cm. (Genovés en Rodríguez 1994:
195)

SEXO
Femenino de acuerdo con las características del cráneo.

102
PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido a partir de los incisivos en pala y el ajuar funerario
asociado.

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


Entre 20 y 25 años, inferido por la sinostosis de las suturas craneales. No se pudieron
establecer otros indicadores debido a la incompletitud de los huesos del esqueleto
poscraneal. Por desgaste dental del maxilar inferior el estimativo es similar. (Lovejoy en
Rodríguez 1994: 122)

OBSERVACIONES CRANEO
Mesocéfalo

DENTICION
Desgaste Patologías
Moderado acorde a una persona de 20 - 25 Ninguna en particular.
años.

ESQUELETO POSTCRANEAL
Fémur derecho y tibia izquierda completos. Los demás huesos fragmentados.

PATOLOGIAS
No diferenciables

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula x Clavícula
Parietales x Escápula x Escápula
Temporales x Húmero x Húmero x
Occipital x Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo x Radio x Radio x
Faciales x Carpos Carpos
Maxilar superior x Metacarpos x Metacarpos x
Maxilar inferior x Falanges x Falanges x
Costillas x Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales Rótula Rótula
Vértebras dorsales Tibia x Tibia x
Vértebras lumbares Peroné x Peroné x
Sacro Tarsos x Tarsos x
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos x Metatarsos x
pubis) Falanges x Falanges x

103
4.8.6. Ficha 15 análisis de restos óseos humanos individuo 06

FOTOGRAFÍAS
In situ Plato asociado a modo de máscara

En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de los Posición de
cuerpo y la Otros detalles
situ brazos las piernas
cabeza
Occidente Decúbito dorsal Extendidos con Extendida a lo Cráneo roto por
(cabeza) - (boca arriba) las manos al largo del cuerpo la construcción
oriente lado de los del Manjol.
(piernas) muslos

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario, directo, sin mortaja, plato de cerámica indígena sobre el rostro

ESTATURA
160 cm tomada in situ a todo el esqueleto.
Ecuación: 2,26 x (43.4) + 66.38 = 164 cm. (Genovés en Rodríguez 1994: 195)

SEXO
Posiblemente masculino. Se infiere a partir de la forma de la mandíbula y la escotadura
ciática de la pelvis.

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido a partir de los incisivos en pala y el ajuar funerario

104
asociado.

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


Posiblemente entre 20 y 25 años, inferido por el desgaste dental del maxilar inferior. Si
bien el cráneo esta desarticulado las suturas craneales sugieren que es un adulto joven
(Lovejoy en Rodríguez 1994: 122)

OBSERVACIONES CRANEO
Cráneo destruido por la construcción del manjol

DENTICION
Desgaste Patologías
Ninguna especifica Presencia del tercer molar en la mandíbula
inferior. Punto de caries en la superficie
oclusal del tercer molar inferior derecho.

ESQUELETO POSTCRANEAL
Marcadas inserciones musculares en los fémures.

PATOLOGIAS
No diferenciables.

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula Clavícula x
Parietales x Escápula Escápula
Temporales x Húmero x Húmero x
Occipital x Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo Radio x Radio x
Faciales x Carpos Carpos
Maxilar superior x Metacarpos x Metacarpos
Maxilar inferior x Falanges Falanges
Costillas x Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales Rótula Rótula x
Vértebras dorsales x Tibia x Tibia x
Vértebras lumbares x Peroné x Peroné x
Sacro Tarsos x Tarsos x
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos Metatarsos x
pubis) Falanges Falanges

105
4.8.7. Ficha 16 análisis de restos óseos humanos individuo 07

FOTOGRAFÍAS
In situ Patología fémur derecho

En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
situ los brazos piernas
cabeza
Suroccidente Decúbito dorsal Brazo derecho Extendida a lo Esqueleto
(cráneo) - (boca arriba) extendido con la largo del cuerpo articulado, no
nororiente mano sobre la completo por
(pies) con la pelvis. Brazo deterioro natural
cabeza izquierdo de los huesos.
inclinada hacia flexionado con
la clavícula la mano en la
izquierda. garganta.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario, directo, sin mortaja

ESTATURA
Entre 155 y 160 cm, tomada in situ

SEXO
Posiblemente masculino por algunos rasgos del cráneo, la incompletitud de huesos
indicadores dificulta tomar el dato con exactitud

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido a partir de los incisivos en pala y el ajuar funerario

106
asociado

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


Adulto de edad indeterminada, no se conservan huesos ni dientes suficientes que permitan
determinar éste dato

OBSERVACIONES CRANEO
No es posible determinar la forma ni algún otro rasgo especifico por el deterioro de los
restos óseos

DENTICION
Desgaste Patologías
No determinable No determinable

ESQUELETO POSTCRANEAL
No determinable

PATOLOGIAS
Reducción de la cabeza del fémur derecho, quizás por una necrosis avascular o isquémica
debido a la pérdida del flujo de sangre que irrigaba la cabeza del fémur, como resultado de
un trauma en la cadera (contusión)

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula x Clavícula x
Parietales x Escápula x Escápula x
Temporales x Húmero x Húmero x
Occipital x Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo Radio x Radio x
Faciales Carpos x Carpos
Maxilar superior Metacarpos x Metacarpos x
Maxilar inferior Falanges x Falanges x
Costillas x Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales x Rótula Rótula
Vértebras dorsales x Tibia x Tibia x
Vértebras lumbares x Peroné x Peroné x
Sacro x Tarsos x Tarsos x
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos x Metatarsos x
pubis) Falanges x Falanges x

107
4.8.8. Ficha 17 análisis de restos óseos humanos individuo 08

FOTOGRAFÍAS
In situ En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación Posición de los Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
in situ brazos piernas
cabeza
Acumulación No determinable No determinable No determinable Esqueleto
oriente – destruido por la
occidente. construcción del
manjol hace dos
décadas.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Compuesto por un grupo de restos óseos acompañado de fragmentos de cerámica.

ESTATURA
No determinable

SEXO
No determinable

PATRON RACIAL
No determinable

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


No determinable

OBSERVACIONES CRANEO
No determinable

DENTICION
Desgaste Patologías
No determinable No determinable

ESQUELETO POSTCRANEAL
Fragmentos de huesos dispersos
108
PATOLOGIAS
Indicios de osteoartritis en una vértebra lumbar. Esta patología es un trastorno
degenerativo que afecta las articulaciones, el resultado visible son neoformaciones del
cartílago osificado en la superficie articular (osteofitos). En procesos avanzados produce el
daño funcional de la articulación, inestabilidad y dolor. Usualmente se presenta en
personas mayores de 45 años, aunque hay factores de riesgo asociados a la actividad
física (lesiones articulares) y tendencias congénitas que hacen que ocurra en personas
más jóvenes.

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula x Clavícula x
Parietales x Escápula Escápula
Temporales x Húmero x Húmero x
Occipital Cúbito x Cúbito
Otros cráneo Radio x Radio x
Faciales Carpos Carpos
Maxilar superior Metacarpos Metacarpos
Maxilar inferior Falanges Falanges
Costillas x Fémur Fémur
Vértebras cervicales Rótula Rótula
Vértebras dorsales Tibia x Tibia x
Vértebras lumbares Peroné Peroné
Sacro Tarsos Tarsos
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos Metatarsos
pubis) Falanges Falanges

109
4.8.9. Ficha 18 análisis de restos óseos humanos individuo 09

FOTOGRAFÍA
En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación Posición de los Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
in situ brazos piernas
cabeza
No No No determinable No determinable Esqueleto
determinable determinable destruido por la
construcción del
manjol hace dos
décadas.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


No determinable

ESTATURA
No determinable

SEXO
No determinable

PATRON RACIAL
No determinable

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


No determinable

OBSERVACIONES CRANEO
No determinable

DENTICION
Desgaste Patologías
No determinable No determinable

ESQUELETO POSTCRANEAL
No determinable
110
PATOLOGIAS
No determinable

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal Clavícula Clavícula
Parietales Escápula Escápula
Temporales Húmero x Húmero x
Occipital Cúbito Cúbito
Otros cráneo Radio Radio
Faciales Carpos Carpos
Maxilar superior Metacarpos Metacarpos
Maxilar inferior Falanges Falanges
Costillas Fémur Fémur
Vértebras cervicales Rótula Rótula
Vértebras dorsales Tibia x Tibia
Vértebras lumbares Peroné Peroné
Sacro Tarsos Tarsos
Pelvis (Ilio, isquio, Metatarsos Metatarsos x
pubis) Falanges Falanges

111
4.8.10. Ficha 19 análisis de restos óseos humanos individuo 10

FOTOGRAFÍAS
In situ Cráneo

En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de los Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
situ brazos piernas
cabeza
Noroccidente Decúbito dorsal Brazos Piernas Esqueleto
(cráneo) - (boca arriba) extendidos. extendidas a lo articulado, no
suroriente largo del completo por
(pies) cuerpo. deterioro
natural de los
huesos.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario, directo, sin mortaja. Enterrado bajo y transversal de los individuos
05 y 06. Encima y debajo del cuerpo se encontraron fragmentos de cerámica indígena

ESTATURA
124 cm tomado in situ

SEXO

112
No se cuenta con indicadores que permitan su identificación

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido a partir de la cerámica indígena asociada al individuo

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


Entre 9 y 10 años, inferido a partir de la secuencia de la formación y erupción dental de los
indígenas americanos (Ubelaker en Rodríguez 1994: 74)

OBSERVACIONES CRANEO
Mesocéfalo

DENTICION
Desgaste Patologías
Desgaste severo en la superficie oclusal de Punto de caries en la superficie oclusal del
los premolares superiores e inferiores de premolar superior derecho
leche

ESQUELETO POSTCRANEAL
Fémur derecho y tibia izquierda completos. Los demás huesos se hallaron fragmentados

PATOLOGIAS
No determinables

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula x Clavícula
Parietales x Escápula x Escápula x
Temporales x Húmero x Húmero x
Occipital x Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo x Radio x Radio x
Faciales x Carpos Carpos
Maxilar superior x Metacarpos Metacarpos
Maxilar inferior x Falanges Falanges
Costillas x Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales x Rótula Rótula
Vértebras dorsales x Tibia Tibia
Vértebras lumbares x Peroné x Peroné
Sacro Tarsos Tarsos
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos Metatarsos
pubis) Falanges Falanges

113
4.8.11. Ficha 20 análisis de restos óseos humanos individuo 11

FOTOGRAFÍAS
In situ Patología

En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
situ los brazos piernas
cabeza
Suroccidente Decúbito lateral Extendido con Extendida a lo Esqueleto
(cráneo) - izquierdo. la mano largo del cuerpo articulado, no
Nororiente derecha en la completo por
(pies) ingle deterioro natural
de los huesos.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario, directo, sin mortaja.

ESTATURA
No determinable

SEXO
Posiblemente masculino por algunos rasgos de la mandíbula, la incompletitud de huesos
indicadores dificulta tomar el dato con exactitud

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido a partir de incisivos en pala y del contexto arqueológico

114
EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE
Adulto de edad indeterminada no se conservan huesos que permitan determinar éste dato.

OBSERVACIONES CRANEO
Cráneo con deformación lateral debido a la presión de la tierra.

DENTICION
Desgaste Patologías
Severo en los molares , moderado en los Ninguna identificable.
incisivos

ESQUELETO POSTCRANEAL
Ausencia de la mayoría de los huesos y los que se conservaron tienen fracturas post
morten.

PATOLOGIAS
Fractura en la diáfisis del fémur derecho. En vida no hubo reducción de la fractura por lo
tanto las partes del hueso solidificaron de manera paralela.

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula x Clavícula
Parietales x Escápula Escápula
Temporales x Húmero x Húmero x
Occipital x Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo x Radio x Radio x
Faciales x Carpos Carpos
Maxilar superior x Metacarpos Metacarpos
Maxilar inferior x Falanges Falanges
Costillas Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales x Rótula Rótula
Vértebras dorsales Tibia x Tibia x
Vértebras lumbares Peroné Peroné
Sacro Tarsos Tarsos
Pelvis (Ilio, isquio, Metatarsos Metatarsos
pubis) Falanges Falanges

115
4.8.12. Ficha 21 análisis de restos óseos humanos individuo 12

FOTOGRAFÍAS
En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación Posición de los Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
in situ brazos piernas
cabeza
Cabeza en Cabeza en No determinable No determinable Esqueleto no
posición posición vertical completo por
vertical mirando al deterioro
mirando al occidente natural de los
occidente huesos

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Posible enterramiento primario directo sin mortaja. La disposición de la cabeza y las
vertebras sugieren que fue enterrado en posición fetal o de pie, pero no se encontraron
otros huesos

ESTATURA
No determinable

SEXO
No determinable

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido a partir del contexto de asociación.

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


18 meses. Inferido por la secuencia en la formación y erupción dental (Ubelaker en
Rodríguez 1994:73)

OBSERVACIONES CRANEO
No es posible determinar la forma ni ningún otro rasgo especifico.

116
DENTICION
Desgaste Patologías
No determinable No determinable

ESQUELETO POSTCRANEAL
No determinable

PATOLOGIAS
No determinable

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula Clavícula
Parietales x Escápula Escápula
Temporales x Húmero Húmero
Occipital x Cúbito Cúbito
Otros cráneo x Radio Radio
Faciales x Carpos Carpos
Maxilar superior x Metacarpos Metacarpos
Maxilar inferior x Falanges Falanges
Costillas Fémur Fémur
Vértebras cervicales x Rótula Rótula
Vértebras dorsales x Tibia Tibia
Vértebras lumbares Peroné Peroné
Sacro Tarsos Tarsos
Pelvis (Ilio, isquio, Metatarsos Metatarsos
pubis) Falanges Falanges

117
4.8.13. Ficha 22 análisis de restos óseos humanos individuo 13

FOTOGRAFÍA
En laboratorio

PROCEDENCIA
Area de salvamento manjol, plaza Santa Bárbara

DISPOSICION
Posición del
Orientación Posición de los Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
in situ brazos piernas
cabeza
Cabeza en Cabeza en No determinable No determinable Esqueleto no
posición posición vertical completo por
vertical mirando al deterioro
mirando al occidente natural de los
occidente huesos

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Posible enterramiento primario directo sin mortaja. La disposición de la cabeza y las
vertebras sugieren que fue enterrado en posición fetal o de pie, pero no se encontraron
otros huesos.

ESTATURA
No determinable

SEXO
No determinable

PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido a partir del contexto de asociación

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


Dos años, inferido por la secuencia en la formación y erupción dental (Ubelaker en
Rodríguez 1994:73)

OBSERVACIONES CRANEO
No es posible determinar la forma ni ningún otro rasgo especifico

DENTICION
Desgaste Patologías
No determinable No determinable

118
ESQUELETO POSTCRANEAL
No determinable

PATOLOGIAS
No determinable

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula Clavícula
Parietales x Escápula Escápula
Temporales x Húmero Húmero
Occipital Cúbito Cúbito
Otros cráneo Radio Radio
Faciales Carpos Carpos
Maxilar superior x Metacarpos Metacarpos
Maxilar inferior x Falanges Falanges
Costillas Fémur Fémur
Vértebras cervicales x Rótula Rótula
Vértebras dorsales Tibia Tibia
Vértebras lumbares Peroné Peroné
Sacro Tarsos Tarsos
Pelvis (Ilio, isquio, Metatarsos Metatarsos
pubis) Falanges Falanges

119
4.8.14. Ficha 23 análisis de restos óseos humanos individuo 14

FOTOGRAFÍAS
In situ En laboratorio

PROCEDENCIA
Monitoreo Albarrada de San Rafael

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
situ los brazos piernas
cabeza
Cabeza hacia N.D. Brazo pegado No determinable Esqueleto
el norte al cuerpo destruido por
las obras de
instalación de
una tubería
hace varios
años.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Posible enterramiento primario directo sin mortaja.

ESTATURA
No determinable

SEXO
No determinable

PATRON RACIAL
No determinable

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


No determinable

OBSERVACIONES CRANEO
No determinable

DENTICION
Desgaste Patologías
No determinable No determinable

120
ESQUELETO POSTCRANEAL
No determinable

PATOLOGIAS
No determinable

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal Clavícula Clavícula
Parietales Escápula Escápula
Temporales x Húmero x Húmero
Occipital x Cúbito Cúbito
Otros cráneo x Radio Radio
Faciales Carpos Carpos
Maxilar superior Metacarpos Metacarpos
Maxilar inferior Falanges Falanges
Costillas Fémur Fémur
Vértebras cervicales Rótula Rótula
Vértebras dorsales Tibia Tibia
Vértebras lumbares Peroné Peroné
Sacro Tarsos Tarsos
Pelvis (Ilio, isquio, Metatarsos Metatarsos
pubis) Falanges Falanges

121
4.8.15. Ficha 24 análisis de restos óseos humanos individuo 15

FOTOGRAFÍAS
In situ In situ

En laboratorio En laboratorio

PROCEDENCIA
Monitoreo Albarrada del Alba

DISPOSICION
Posición del
Orientación in Posición de los Posición de
cuerpo y la Otros detalles
situ brazos las piernas
cabeza
Occidente Decúbito dorsal Flexionados con Extendida a lo Esqueleto
(cráneo) - (boca arriba). la mano en el largo del cuerpo articulado, no
oriente (pies), vientre. completo por
cabeza deterioro natural
inclinada hacia de los huesos y
la clavícula afectado por
derecha. obras en la
Albarrada hace
varios años.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


Enterramiento primario, directo, sin mortaja

ESTATURA
No determinable

SEXO
Posiblemente masculino por algunos rasgos de la mandíbula y el cráneo

122
PATRON RACIAL
Amerindio (mongoloide), inferido por incisivos en pala

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


Adulto de edad indeterminada. No se conservan huesos que peritan precisar este dato

OBSERVACIONES CRANEO
No es posible determinar la forma ni algún otro rasgo especifico por el deterioro de los
restos óseos

DENTICION
Desgaste Patologías
Notorio en la mayoría de los dientes No determinable

ESQUELETO POSTCRANEAL
Ausencia de la mayoría de los huesos y los que se conservaron tienen fracturas post
morten

PATOLOGIAS
No determinable

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal Clavícula Clavícula x
Parietales x Escápula x Escápula
Temporales x Húmero Húmero x
Occipital x Cúbito x Cúbito x
Otros cráneo x Radio Radio x
Faciales x Carpos Carpos
Maxilar superior x Metacarpos x Metacarpos x
Maxilar inferior x Falanges Falanges
Costillas x Fémur x Fémur x
Vértebras cervicales Rótula Rótula x
Vértebras dorsales x Tibia x Tibia x
Vértebras lumbares x Peroné Peroné x
Sacro Tarsos x Tarsos x
Pelvis (Ilio, isquio, x Metatarsos x Metatarsos x
pubis) Falanges x Falanges

123
4.8.16. Ficha 25 análisis de restos óseos humanos individuo 16

FOTOGRAFÍAS
In situ En laboratorio

Cuentas de collar Huesito labrado con incisiones

PROCEDENCIA
Monitoreo punto de inicio línea eléctrica en el edificio del antiguo mercado de La
Concepción.

DISPOSICION
Posición del
Orientación Posición de los Posición de las
cuerpo y la Otros detalles
in situ brazos piernas
cabeza
No No No determinable No determinable Esqueleto
determinable determinable destruido por la
construcción del
antiguo
mercado. Se
encontraron
asociados a los
fragmentos,
cuentas de
collar y un
huesito labrado
con incisiones.

DESCRIPCION DEL ESQUETO Y ENTERRAMIENTO


No determinable

ESTATURA
No determinable

SEXO
No determinable
124
PATRON RACIAL
Posiblemente amerindio (mongoloide), inferido por los elementos asociados.

EDAD EN EL MOMENTO DE LA MUERTE


No determinable.

OBSERVACIONES CRANEO
No es posible determinar la forma ni algún otro rasgo especifico por el deterioro de los
restos óseos.

DENTICION
Desgaste Patologías
Notorio en la mayoría de los dientes. No determinable

ESQUELETO POSTCRANEAL
Completamente destruido post mortem

PATOLOGIAS
No determinable

PORCENTAJE COMPLETITUD DEL ESQUELETO


0 - 20 21 - 40 41 - 60 61 – 80 81 -100
X

FRAGMENTOS DE HUESOS
Hueso Nº Lado izquierdo Nº Lado derecho Nº
Frontal x Clavícula Clavícula
Parietales x Escápula Escápula
Temporales x Húmero x Húmero
Occipital Cúbito Cúbito
Otros cráneo x Radio Radio x
Faciales Carpos Carpos
Maxilar superior Metacarpos Metacarpos
Maxilar inferior Falanges Falanges
Costillas Fémur Fémur
Vértebras cervicales Rótula Rótula
Vértebras dorsales Tibia Tibia
Vértebras lumbares Peroné Peroné
Sacro Tarsos Tarsos
Pelvis (Ilio, isquio, Metatarsos Metatarsos
pubis) Falanges x Falanges x

125
CAPÍTULO V

PLAN DE MANEJO Y PROTOCOLOS

De acuerdo con las indicaciones del Instituto Colombiano de Antropología e Historia


(ICANH), un programa de arqueología preventiva comprende un conjunto de
actividades diseñadas para preservar el patrimonio arqueológico de la nación
durante un lapso de tiempo determinado. En este caso, la información bibliográfica
y el reconocimiento en campo sientan las bases para la formulación de un plan de
manejo arqueológico.

La normatividad sobre preservación del patrimonio arqueológico (Ley 1185 de 2008


y Decreto 763 de 2009) indica que hay que agotar todas las instancias para prever
cualquier afectación de dicho patrimonio.

En el municipio de Santa Cruz de Mompox se recomiendan medidas preventivas


orientadas a la preservación de hallazgos fortuitos y a la presentación al ICANH de
un plan de intervención tanto por la alcaldía cuando se llevan a cabo obras públicas
como por particulares cuando se realizan actividades de remodelación en sus
propiedades.

En este sentido, siguiendo los lineamientos del ICANH, se propone no sólo el plan
de manejo, con medidas de estricto cumplimiento, sino un protocolo para hallazgos
fortuitos y un protocolo para las exposiciones - a manera de museos – y
colecciones de referencia con evidencias arqueológicas.

PROPUESTA DE PLAN DE MANEJO DEL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO Y


PROTOCOLOS PARA HALLAZGOS FORTUITOS, EXPOSICIONES A MANERA DE
MUSEOS Y COLECCIONES DE REFERENCIA

OBJETIVO

Acoger medidas preventivas en jurisdicción del municipio de Santa Cruz de Mompox, de


acuerdo con el régimen legal vigente (Ley 1185 de 2008 y Decreto 763 de 2009) y los
lineamientos técnicos del Instituto Colombiano de Antropología e Historia sobre
preservación del patrimonio arqueológico.

METAS

126
PROPUESTA DE PLAN DE MANEJO DEL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO Y
PROTOCOLOS PARA HALLAZGOS FORTUITOS, EXPOSICIONES A MANERA DE
MUSEOS Y COLECCIONES DE REFERENCIA

Desarrollo de las actividades arqueológicas necesarias en el 100% de las áreas que se


vayan a intervenir con obras civiles y/o de restauración.

Implementación al 100% de los procedimientos adecuados para el manejo de exposiciones


y colecciones de referencia arqueológicas.
EVALUACIÓN
ASPECTO IMPACTOS ELEMENTO AFECTADO
Arqueología Pérdida, daño y/o afectación
Evidencias arqueológicas
preventiva del patrimonio arqueológico.
ETAPA DE APLICACIÓN TIPO DE MEDIDA
Pre-operativa X Prevención X
Obras civiles y/o de restauración X Control X
ACCIONES A DESARROLLAR

Etapa pre-operativa:

Las investigaciones que se han realizado en el área urbana de Santa Cruz de Mompox, los
antecedentes de hallazgos en las jurisdicciones rurales del municipio y la información
contenida en los documentos históricos de archivo y publicados, muestran que esta es una
zona de alto potencial arqueológico. Por lo tanto, es necesario prever que todo proyecto
que implique excavaciones en el suelo es susceptible de hallazgos arqueológicos.

Es obligación de la alcaldía, con aprobación del Concejo Municipal, establecer un


presupuesto de arqueología para todo proyecto de desarrollo urbano o rural donde se
intervenga el suelo, particularmente los contemplados en el plan de desarrollo de cada
gobierno. Igualmente, exigir que todo proyecto que vaya a llevar a cabo entidad del Estado
o entidad privada donde se intervenga el suelo, tenga previsto un presupuesto para la
implementación de un programa de arqueología preventiva.

El programa de arqueología implica:

1- Contar con el asesoramiento de un antropólogo o arqueólogo de pregrado o de


maestría con experiencia específica en la realización de programas de arqueología
preventiva y trámites de autorizaciones para intervenciones arqueológicas ICANH.

127
PROPUESTA DE PLAN DE MANEJO DEL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO Y
PROTOCOLOS PARA HALLAZGOS FORTUITOS, EXPOSICIONES A MANERA DE
MUSEOS Y COLECCIONES DE REFERENCIA

2- Evaluar con el profesional antropólogo / arqueólogo el alcance del proyecto y el tipo


de hallazgos arqueológicos factibles de encontrar según los antecedentes de
investigación.

3- Tramitar una autorización ICANH, a cargo de un antropólogo / arqueólogo con


experiencia en programas de arqueología preventiva, para la etapa de prospección
arqueológica que debe llevarse a cabo antes del inicio de las obras. Si las obras se
van a realizar en zona urbana, donde se dificulta una prospección por el método
convencional de verificación mediante apiques para detectar la presencia o
ausencia de evidencias arqueológicas, entones, la autorización ICANH deberá
tramitarse para la actividad de monitoreo o acompañamiento a las obras civiles y
para el salvamento de todo tipo de vestigios arqueológicos. Si las obras se van a
realizar en zona rural, la investigación debe contemplar tres momentos específicos
con presupuestos para cada uno.

3.1. Prospección antes del inicio de las obras civiles, análisis de las evidencias y los
datos de la investigación y presentación de un plan de manejo arqueológico al
ICANH basado en los resultados de esa labor.

3.2. En caso de hallazgos arqueológicos, trámite de una autorización ICANH para


realizar la actividad de recate antes del inicio de las obras.

3.3. Durante las obras civiles, llevar a cabo la actividad de monitoreo o


acompañamiento por parte de un arqueólogo para el salvamento de las evidencias
que de manera fortuita se encuentren o que no se hubieren detectado en las etapas
anteriores de prospección y rescate.

Se recomienda consultar con el coordinador del grupo de arqueología del ICANH la


posibilidad de una autorización que incluya las tres etapas: prospección, “eventual” rescate
y monitoreo. Para esto es importante diferenciar los presupuestos de cada etapa. La
autorización la expide el ICANH a nombre del profesional antropólogo / arqueólogo.

También es recomendable a mediano plazo fomentar estudios basado en sensores


remotos. Este tipo de arqueología no intrusiva podría ayudar a orientar la planeación de
obras de desarrollo donde hay riesgo de afectación de patrimonio arqueológico.

128
PROPUESTA DE PLAN DE MANEJO DEL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO Y
PROTOCOLOS PARA HALLAZGOS FORTUITOS, EXPOSICIONES A MANERA DE
MUSEOS Y COLECCIONES DE REFERENCIA

Toda comunicación con el Instituto Colombiano de Antropología e Historia se debe dirigir al


coordinador del grupo de arqueología en la calle 12 # 2 - 41 Bogotá D.C., Colombia.
Conmutador (571) 4440544.

Etapa operativa

Esta etapa alude a la ejecución de la obra civil y/o restauración donde vaya a haber
intervención del suelo. Para su inicio es obligatorio tener un plan de manejo arqueológico
sustentado con el resultado de una prospección arqueológica.

En el caso de los proyectos urbanos, donde se dificulta la prospección de la manera


convencional, debe haberse tramitado con antelación una autorización para monitoreo y
salvamento arqueológico. Esto implica que haya un profesional antropólogo / arqueólogo,
con experiencia específica en programas de arqueología preventiva, acompañando las
actividades donde se intervenga el suelo, pues se trata de verificar la presencia o ausencia
de vestigios arqueológicos enterrados y de los que no se tiene conocimiento.

En los proyectos urbanos en áreas no construidas y rurales, donde no se haya realizado


previamente la prospección arqueológica y su construcción es urgente, sobre todo en
casos contingentes por situaciones imprevistas, entonces, se debe consultar con el
coordinador del grupo de arqueología del ICANH el procedimiento a seguir. De ahí la
importancia de contar con el asesoramiento de un antropólogo / arqueólogo que
eventualmente pueda solicitar una autorización ICANH para monitoreo y salvamentos.

Todo antropólogo / arqueólogo debe tener en cuenta que la implementación de un


programa de arqueología preventiva va acompañada de la realización de un programa de
arqueología pública que incluye:

Impartir talleres o conversatorios de arqueología a todo el personal de obra, extensivos a


integrantes de la comunidad local. Temas: campo de acción de la arqueología, régimen
legal vigente (Ley 1185 de 2008 y Decreto 763 de 2009), papel de la entidad rectora
(ICANH), contexto arqueológico local y regional, etapas de la arqueología preventiva, plan
para hallazgos fortuitos y datos de contacto con el ICANH.

129
PROPUESTA DE PLAN DE MANEJO DEL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO Y
PROTOCOLOS PARA HALLAZGOS FORTUITOS, EXPOSICIONES A MANERA DE
MUSEOS Y COLECCIONES DE REFERENCIA

PROTOCOLO PARA HALLAZGOS FORTUITOS

Se entiende por hallazgo fortuito toda evidencia arqueológica de la que no se tenía


conocimiento y que se encuentra durante una actividad donde hay remoción de suelo o
intervención en la superficie de éste.

La conservación del patrimonio arqueológico debe ser compromiso de todos,


particularmente si hay antecedentes arqueológicos importantes como en Santa Cruz de
Mompox, por lo tanto, la actitud debe ser igual para todo proyecto o actividad,
independiente de la presencia en ese momento de un profesional de arqueología;
específicamente si se trata de proyectos que no requieren de un permiso ambiental
expedido por una autoridad ambiental tanto del sector público como privado, pues, para
esos proyectos es de obligatorio cumplimiento la implementación de un programa de
arqueología preventiva.

En este orden de ideas, un protocolo de hallazgos fortuitos es un conjunto de pasos que


toda persona puede seguir si en una actividad encuentra algún tipo de vestigio
arqueológico. Estos pasos son:

I- Detener temporalmente la actividad en el lugar del hallazgo.


II- Realizar un encerramiento de protección o cubrir el hallazgo para evitar pérdida,
daño o alteración de éste.
III- Contactar a un arqueólogo para que evalúe el hallazgo y lleve a cabo los
procedimientos de ley, empezando por el trámite de una autorización ICANH.
IV- Contactar al Instituto Colombiano de Antropología e Historia. Calle 12 No. 2-41
Bogotá D.C., Colombia. Conmutador (571) 4440544.
V- Implementar la actividad de rescate de las evidencias (responsabilidad del
arqueólogo) y de la información asociada a éstas en el contexto del hallazgo.
VI- Elaboración de un informe para el ICANH.
VII- Tener presente que la tenencia de todo elemento o material arqueológico que se
recupere deberá gestionarse ante el ICANH y diligenciarse la ficha de registro para
bienes inmuebles de esta institución. Además:

Los encuentros de bienes pertenecientes al patrimonio arqueológico que se realicen


en el curso de excavaciones o exploraciones arqueológicas autorizadas, se
informarán al Instituto Colombiano de Antropología e Historia, en la forma prevista
en la correspondiente autorización. (Ley 1185 de 2008, parágrafo 1, artículo 3º).

130
PROPUESTA DE PLAN DE MANEJO DEL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO Y
PROTOCOLOS PARA HALLAZGOS FORTUITOS, EXPOSICIONES A MANERA DE
MUSEOS Y COLECCIONES DE REFERENCIA

PROTOCOLO PARA EL MANEJO DE EXPOSICIONES A MANERA DE MUSEOS Y


COLECCIONES DE REFERENCIA

De acuerdo con la normatividad vigente, sólo las colecciones debidamente registradas ante
el ICANH pueden contener piezas arqueológicas.

En el caso de Mompox, la exposición - en la casa de la Academia de Historia - de piezas


obtenidas en los proyectos “Espacios de Vida” del Ministerio de Cultura, en 2014, es un
referente importante para el medio académico momposino y para la industria del turismo
local.

No obstante, la riqueza arqueológica del municipio ofrece la posibilidad de que nuevas


piezas sean expuestas en otros salones. Para esto se recomienda:

I- Registrar ante el ICANH toda pieza arqueológica que hay sido incautada por las
autoridades o que se reciba mediante donaciones o que forme parte de investigaciones
arqueológicas.

II- Solicitar al ICANH asesoramiento para un posible montaje de exposición permanente.


Igualmente, hay otras entidades como el Museo del Oro que podrían asesorar esta
intención.

III- Incluir en los planes de desarrollo y gestionar ante el Consejo Municipal un rubro
orientado al mantenimiento y la renovación de las exposiciones arqueológicas. Esto para
evitar que las colecciones queden guardadas a merced del deterioro y daños fortuitos.

IV- Las piezas arqueológicas que no se expongan deberán mantenerse en un lugar seguro,
debidamente catalogadas con las fichas de registro de bienes muebles del ICANH. Es
importante que grupos como, por ejemplo, los vigías del patrimonio del municipio, se
interesen en verificar con cierta regularidad que el material se mantiene en buenas
condiciones y dar los llamados de alerta si hay riesgo de pérdida, daño o afectación.

RESPONSABLES DE LA IMPLEMENTACIÓN

131
PROPUESTA DE PLAN DE MANEJO DEL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO Y
PROTOCOLOS PARA HALLAZGOS FORTUITOS, EXPOSICIONES A MANERA DE
MUSEOS Y COLECCIONES DE REFERENCIA

En el sector público, es de la Administración Municipal la responsabilidad de la


implementación y el cumplimiento de los programas de arqueología preventiva en los
proyectos de infraestructura y desarrollo. Específicamente, es competencia del alcalde, la
secretaría de gobierno y la secretaría de cultura.

Teléfono: (57 + 5) 6855039 Correo electrónico: contactenos@santacruzdemompos-


bolivar.gov.co Dirección: Carrera 2 No. 18A-25 - Palacio Municipal de San Carlos - Santa
Cruz de Mompós - Bolívar – Colombia. Horario de atención: Lunes - Viernes: 8:00 a.m. a
12:00m y de 2:00 p.m. a 6:00 p.m.

Igualmente, la responsabilidad de verificar que la implementación de los programa de


arqueología preventiva se lleve a cabo para todo proyecto en sitio de interés histórico es
tanto de la Administración Municipal como de toda organización interesadas en la
preservación del patrimonio arqueológico, como, por ejemplo, la Academia de Historia de
Mompox, el Grupo Vigías del Patrimonio, la Veeduría Amor por Mompox, las Juntas de
Acción Comunal y los vecinos del proyecto, entre otros.

INDICADORES DE SEGUIMIENTO Y MONITOREO

META INDICADOR TIPO DE REGISTRO

Implementar el 100% de las Autorización ICANH


actividades propuestas en el
programa de arqueología Informes de investigación
preventiva. avalados por el ICANH
(Actividades realizadas /
Implementar al 100% los actividades indicadas) x 100 Actas y registros fotográficos
procedimientos adecuados para el
manejo de exposiciones y Fichas de registro de bienes
colecciones de referencia muebles formato ICANH
arqueológicas.
CRONOGRAMA DE EJECUCIÓN

Prospección: antes de las obras civiles


Rescate: antes de las obras civiles
Monitoreo y salvamentos: durante las obras civiles
Arqueología pública: durante las obras civiles y al finalizar el proyecto

132
PROPUESTA DE PLAN DE MANEJO DEL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO Y
PROTOCOLOS PARA HALLAZGOS FORTUITOS, EXPOSICIONES A MANERA DE
MUSEOS Y COLECCIONES DE REFERENCIA

COSTOS

* Programa de arqueología preventiva

Honorarios antropólogo / arqueólogo


Gastos trámites autorizaciones: papelería y cartografía
Transportes
Gastos trabajo de campo: auxiliares, herramientas, utensilios
Análisis especiales: dataciones por C14 y antropología forense u otros si se requiere
Gastos informe ICANH: papelería y cartografía

* Exposiciones a manera de museos y colecciones de referencia

Honorarios curador de la exposición / museo


Seguridad del sitio donde se hallan las piezas arqueológicas
Mantenimiento y reparaciones del mobiliario de la exposición
Restauraciones de piezas de exposición a cargo de un profesional de la especialidad

133
CAPÍTULO VI

ARQUEOLOGÍA PÚBLICA Y DIVULGACIÓN

El programa de arqueología pública tuvo tres momentos. El primero corresponde a


las charlas de inducción impartidas al personal de obra durante la prospección, las
cuales se repitieron a las cuadrillas de obreros durante el monitoreo.

Los temas tratados fueron: 1- ¿Qué es arqueología? 2- Régimen legal vigente, 3-


Fases de la arqueología preventiva y 4- La arqueología de Mompox. Las fotografías
156 a 162 corresponden a algunas de las charlas de inducción. Copia de las listas
de asistencia se incluye en el anexo 3.

Fotografía 156: Charla de inducción de Fotografía 157: Charla de inducción de


arqueología, dic. 2013 arqueología, dic. 2013

Fotografía 158: Charla de inducción de Fotografía 159: Charla de inducción de


arqueología, ene. 2014 arqueología, ene. 2014

134
Fotografía 160: Charla de inducción de Fotografía 161: Charla de inducción de
arqueología, ene. 2014 arqueología, mar. 2014

Fotografía 162: Notas informativas a los obreros durante los monitoreos

El segundo momento corresponde a las actividades de socialización de la labor


arqueológica a la comunidad momposina. Esto se desarrolló con tres tipos de
actividades: 1- recorridos con el grupo de vigías del patrimonio en 2013, auspiciado
por el Ministerio de Cultura (fotografías 163 y 164), 2- conferencias a la comunidad
momposina cada dos meses en la casa sede de la Academia de Historia, donde se
les exponía el avance de la investigación (fotografías 165 a 169) y 3- taller de
sensibilización sobre patrimonio a jóvenes vigías del patrimonio, auspiciado por el
Ministerio de Cultura (fotografías 170 a 172).

135
Fotografía 163: Charla a vigías del patrimonio, Fotografía 164: Recorrido con los vigías del
nov. 2013 patrimonio, nov. 2013

Fotografía 165: Charla Academia de Historia, nov. 2013

Fotografía 166: Charla Academia de Historia, Fotografía 167: Charla Academia de Historia,
nov. 2013 feb. 2014

136
Fotografía 168: Charla Academia de Historia, Fotografía 169: Charla Academia de Historia,
jun. 2014 jun. 2014

Fotografía 170: Taller de patrimonio, Fotografía 171: Taller de patrimonio,


mayo 2014 mayo 2014

Fotografía 172: Taller de patrimonio, mayo 2014

137
El tercer momento del programa de arqueología pública estuvo centrado en la
exposición del material arqueológico más representativo en la casa sede de la
Academia de Historia. Para esta exposición, auspiciada por el Ministerio de Cultura,
la antropóloga Catalina Cavelier elaboró un guión que fue dado a conocer al ICANH
y coordinó el montaje de la exposición inaugurada el 10 de septiembre. El Ministerio
se hizo cargo de la exposición hasta la primera semana de octubre de 2014 y la
Administración Municipal asumió el compromiso de mantenerla de forma
permanente.

Previo a la inauguración, en presencia de un representante del Ministerio de Cultura


– arquitecto Andrés Narváez –, se entregaron los objetos arqueológicos obtenidos
durante la investigación en la plaza Santa Bárbara y la Albarrada Sur a la secretaria
de gobierno de Mompós – Sra. Sandra Salazar –. Para formalizar la tenencia, el
Alcalde Municipal – Sr. José Orlando Rojas – dirigió oficio al ICANH junto con la
Ficha de Registro de Tenedores de Bienes Muebles del Patrimonio Arqueológico de
la Nación (copia del radicado se adjunta en el anexo 4). Las fotografías 173 a 176
corresponden a la exposición en la Academia de Historia.

Fotografía 173: Exposición Academia de


Fotografía 174: Exposición Academia de
Historia,
Historia, sept. 2014
sept. 2014

Fotografía 175: Exposición Academia de Fotografía 176: Inauguración exposición


Historia, sept. 2014 Academia de Historia, sept. 2014

138
En la exposición y colección de referencia quedaron los objetos diagnósticos y
representativos de la investigación. Junto con éstos también se entregaron los
obtenidos en la plaza San Francisco y Albarrada Norte, que corresponden a otro
informe (Romero y Zarama 2014).

Respecto a los restos óseos humanos, macrorrestos animales, fragmentos de


cerámica, vidrio y metales oxidados, no expuestos o incluidos en la colección de
referencia; se consultó con representantes de los grupos interesados por el
patrimonio arqueológico en Mompox, la Administración Municipal, el Ministerio de
Cultura y el ICANH para ubicarlos en un sitio seguro. Tomando como ejemplo la
experiencia en otros países se acogió la propuesta de colocarlos en una bóveda de
cemento en el cementerio.

Esto también tiene que ver con la percepción hacia la muerte, para el caso de los
esqueletos, y el deseo de que no salga de Mompox ninguna evidencia arqueológica
hallada en el municipio. Estas evidencias quedan disponibles para las futuras
generaciones de investigadores momposinos. En el anexo 4 se incluye la
aprobación del ICANH a dicha solicitud. En las fotografías 177 a 180 se ilustra la
actividad.

Fotografía 177: Reunión en la Secretaría


Fotografía 178: Cementerio de Mompox
de Gobierno, traspaso de la tenencia

Fotografía 179: Construcción de la bóveda Fotografía 180: Bóveda debidamente


de 2 x 2 x 3,5 m señalizada

139
La bóveda tiene una placa en mármol que dice “Evidencias arqueológicas plaza
Santa Bárbara proyecto Ministerio de Cultura – 2014”

En la bóveda también se colocaron por separado los objetos obtenidos en la plaza


San Francisco y la Albarrada Norte (tema de otro informe final de investigación),
con su respectiva placa alusiva.

Copia del acta de ubicación de los objetos en el cementerio, con veeduría de


interventoría y presencia del delegado de la Administración Municipal, se adjunta en
el anexo 4. La coordenada de referencia de la bóveda es: 961615 E – 1513367 N.

140
CAPITULO VII

CONCLUSIONES

El conjunto de evidencias obtenidas en las actividades de prospección,


salvamentos y monitoreo en la plaza Santa Bárbara y la carrera primera (Albarrada
Sur) contribuye a ampliar el conocimiento de base sobre la arqueología en la zona
urbana de Mompox.

Las fuentes documentales señalan que finalizando la tercera década del siglo XVI
d.C., habitaban la isla donde se fundó la villa de Santa Cruz de Mompox, indígenas
malibues. Referencias a su cultura material, por lo menos desde una visión de la
arqueología, se ha encontrado en diferentes sitios de la Depresión Momposina,
particularmente cerámica de la tradición Incisa – Alisada. En la plaza de Santa
Bárbara, se encontró un sitio funerario del siglo XVI d.C., donde no sólo es posible
asociar los enterramientos con dicha tradición cerámica, sino, identificar una
práctica funeraria con indicios de que uno de los individuos pudo haber ocupado
una posición relacionada en términos antropológicos con el chamanismo y dos más
con elementos de protección en sus rostros a manera de máscaras mortuorias.
Igual de importante, es la disposición espacial de los trece individuos allí
encontrados y la presencia de diez vasijas de las cuales tres contenían evidencias
de restos óseos humanos, quizás de neonatos.

Restos de otros dos enterramientos indígenas también se encontraron en la


Albarrada del Alba (sector de la Albarrada Sur) y en el antiguo edificio de mercado
de La Concepción. Además, fragmentos de cerámica de la tradición Incisa – Alisada
dispersos por la Albarrada. Esto sugiere que antes de la conquista hispana la ribera
del río formaba parte de un asentamiento indígena extenso donde los espacios de
vivienda se hallaban muy cerca de los espacios funerarios.

Otro hallazgo interesante es un apisonado de tierra y argamasa con fragmentos de


ladrillos, teja y cerámica junto a la entrada de la capilla de la Santa Caridad del
Ecce Homo, contigua al templo de Santa Bárbara (terminado de construir en 1613).
Espacialmente, en este sector de la plaza predomina la cerámica colonial en
comparación con la cerámica indígena y la loza industrial (tabla 9, anexo 1).
Posiblemente, el apisonado fue una adecuación durante el periodo colonial para
evitar los encharcamientos por la lluvia y las crecidas del río en la entrada del
recinto sagrado.

141
En los portales de Santa Bárbara dos concentraciones de fragmentos de cerámica
indígena, colonial y republicana, en proporciones más o menos similares (tablas 5 y
7, anexo 1), indican que en época reciente, siglo XX, se intervino el lugar con obras
civiles, dejando estas acumulaciones con el material posiblemente estratificado
hallado en un sector difícil de precisar. Con esto queremos resaltar el hecho de que
buena parte de la plaza de Santa Bárbara y prácticamente toda la Albarrada Sur
fueron objeto de intervenciones sucesivas para las instalaciones de redes de
servicios públicos domiciliarios y los acabados de la plaza y la vía. Por lo tanto, es
significativo que el sitio funerario precolombino y el apisonado colonial se hubiesen
preservado.

Otro tipo de evidencia, permite corroborar el uso de la plaza y los portales de Santa
Bárbara como lugar de mercado. Se trata de los macrorrestos de animales.
Proporcionalmente, los huesos de res se encontraron en mayor número, seguido de
tortuga de río y, significativamente en menor proporción, otras especies (ficha 9,
capítulo IV). La información histórica muestra la vocación ganadera de Mompox en
época colonial, de acuerdo con G. Di Filipo, la cría de ganado servía para
abastecerse (comunidad momposina) y abastecer a Cartagena. La abundancia de
huesos de res sugiere la comercialización de este producto en el lado oriental de la
plaza, opuesto al templo colonial y cercano al río. Conservando las diferencias
históricas, hoy día, este lado es un sitio de comercio (bebidas y alimentos
procesados) y reuniones de esparcimiento. La plaza, como tal, muestra dos
ámbitos, el del culto religioso dentro y fuera de la capilla (pues la entrada al templo
es por el callejón de Santa Bárbara, calle 14) y el de reuniones para dialogar y
consumir.

Los macrorrestos también se hallaron en alta proporción en la Albarrada de San


Rafael, contiguo o prolongación de los portales de Santa Bárbara, disminuyen
notoriamente en los Portales de la Marquesa, donde se hallan algunas de las casas
más prestantes de la época colonial (v. gr. residencias de los marqueses) y siguen
siendo escasos en las Albarradas del Alba, El Campillo y Los Ángeles. Con la
particularidad de que en éstos últimos predominan los de tortuga.

El vidrio y objetos de hierro, aunque proporcionalmente se hallaron en menor


número que la cerámica y los macrorrestos (tablas anexo 1), dan cuenta de la
comercialización de productos importados, traídos de España u otros países,
porque la fabricación del vidrio y la producción de hierro en Colombia es más bien
reciente, siglo XX.

La fabricación de ladrillo y teja de barro cocido, es tal vez la industria más antigua
de la villa de Santa Cruz de Mompox, que aún se mantiene, pues se inició para
abastecer el sector de la construcción, cuya demanda indiscutiblemente habría sido

142
para las casonas coloniales, los almacenes de comercio, los edificios públicos, la
muralla de la albarrada, los templos y las viviendas en general.

Con base en las fuentes históricas y los datos arqueológicos, conocemos algunos
lugares donde vivieron los antiguos indígenas en épocas prehispánicas en la isla de
Mompox, siendo la ribera de la ciudad uno de ellos. La pregunta a responder es
¿por qué vivieron ahí? La respuesta nos la ofrece el análisis espacial del sitio, un
camellón relativamente alto que coincide longitudinalmente con el río, en cuyos
alrededores las crecientes de éste fertilizan los suelos, haciéndolos propicios para
la agricultura. Además, las ciénagas cercanas ofrecían buenas oportunidades de
aprovechamiento de los recursos naturales. El carácter de isla también brindaba
una posición defendible a incursiones de grupos rivales.

En el caso de Mompox, como asentamiento hispano, los historiadores momposinos


todavía se preguntan cuál habría sido la ventaja comparativa frente a otros sitios
para emplazar el asentamiento. Al mismo tiempo responden que al ya haber un
asentamiento indígena, disponían de mano de obra y del conocimiento de éstos
para el aprovechamiento del entorno. Con el tiempo, la villa ganó una posición
estratégica en la ruta de navegación y flujo de comercio por el río Magdalena hacia
y desde el litoral Caribe y el interior del Nuevo Reino de Granada. Cuando en el
siglo XIX, cambió drásticamente el cauce principal del río quedando relativamente
aislado el puerto de Mompox en la naciente república, la población momposina se
mantuvo aprovechando los aún abundantes recursos naturales, la ganadería y la
minería. Personas de raigambre en la comunidad sostienen que “si bien el comercio
lícito e ilícito de la época se vieron afectados, el hogar no se abandona”.

Debido a la naturaleza de la investigación, enmarcada en un programa de


arqueología pública, centrado en el monitoreo a unas obras de remodelación de
determinados espacios públicos: plaza Santa Bárbara y la Albarrada Sur; y
subrayando que la prospección se realizó simultánea al inicio de la obra porque
dependía de ésta para demoler las superficies de concreto y que los salvamentos
en sí son hallazgos fortuitos pues no se tenía referencia de ellos; el aporte de ésta
no se mide por las respuestas a grandes interrogantes sobre el modo de vida de las
poblaciones precolombinas o colonial hispana para las que se deben diseñar
programas de investigación de mediano y largo alcance, sino por la contribución al
detalle de la cultura material de cada periodo. Detalle importante para la comunidad
momposina, interesada desde el comienzo del trabajo en lo que se iba
encontrando, y lo que cada hallazgo aporta para responder sus propias preguntas.

Al final, es la comunidad momposina, dueña de su saber, la que debe compilar,


contrastar la información y reescribir su historia como legado a las próximas
generaciones.

143
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151
ANEXO 1

TABLAS DE REGISTROS
PROSPECCIÓN, SALVAMENTOS Y MONITOREO

152
Tabla 1. Relación de apiques, coordenadas y evidencias arqueológicas
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

1 Plaza S. Bárbara 1513175,71 962410,23 Metal


1 Plaza S. Bárbara 1513175,71 962410,23 Macrorrestos
2 Plaza S. Bárbara 1513174,29 962408,17

3 Plaza S. Bárbara 1513171,48 962402,84 Macrorrestos

4 Plaza S. Bárbara 1513169,66 962400,09

5 Plaza S. Bárbara 1513167,83 962397,34 Cerámica


5 Plaza S. Bárbara 1513167,83 962397,34 Metal
6 Plaza S. Bárbara 1513166,01 962394,6 Cerámica
6 Plaza S. Bárbara 1513166,01 962394,6 Metal

7 Plaza S. Bárbara 1513164,19 962391,85 Metal


8 Plaza S. Bárbara 1513166,94 962390,02 Macrorrestos
8 Plaza S. Bárbara 1513166,94 962390,02 Cerámica
9 Plaza S. Bárbara 1513168,36 962392,08
10 Plaza S. Bárbara 1513170,18 962394,83
11 Plaza S. Bárbara 1513172 962397,58
11 Plaza S. Bárbara 1513172 962397,58 Macrorrestos
12 Plaza S. Bárbara 1513173,83 962400,33 Macrorrestos
13 Plaza S. Bárbara 1513176,63 962405,65 Lítico
13 Plaza S. Bárbara 1513176,63 962405,65 Cerámica
14 Plaza S. Bárbara 1513178,31 962408,4
15 Plaza S. Bárbara 1513181,06 962407,13 Cerámica
15 Plaza S. Bárbara 1513181,06 962407,13 Metal
15 Plaza S. Bárbara 1513181,06 962407,13 Lítico
16 Plaza S. Bárbara 1513179,78 962404,52 Macrorrestos

17 Plaza S. Bárbara 1513176,57 962399,44 Lítico


18 Plaza S. Bárbara 1513174,34 962396 Macrorrestos
19 Plaza S. Bárbara 1513172,93 962393,01 Macrorrestos
20 Plaza S. Bárbara 1513171,51 962390,95 Cerámica
21 Plaza S. Bárbara 1513169,69 962388,2

22 Plaza S. Bárbara 1513171,89 962386,23


23 Plaza S. Bárbara 1513173,86 962388,44 Metal
23 Plaza S. Bárbara 1513173,86 962388,44 Cerámica
24 Plaza S. Bárbara 1513175,08 962390,43
25 Plaza S. Bárbara 1513182,13 962402,01

153
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

26 Plaza S. Bárbara 1513183,95 962404,76 Macrorrestos


27 Plaza S. Bárbara 1513186,99 962403,47 Cerámica
28 Plaza S. Bárbara 1513185,17 962400,72
29 Plaza S. Bárbara 1513178,23 962389,3
30 Plaza S. Bárbara 1513177,01 962387,31
31 Plaza S. Bárbara 1513175,19 962384,56
32 Plaza S. Bárbara 1513177,93 962382,73
33 Plaza S. Bárbara 1513179,35 962384,79 Macrorrestos
33 Plaza S. Bárbara 1513179,35 962384,79 Cerámica
34 Plaza S. Bárbara 1513180,58 962386,79
35 Plaza S. Bárbara 1513187,51 962398,21
36 Plaza S. Bárbara 1513189,33 962400,96
37 Plaza S. Bárbara 1513191,94 962399,68
38 Plaza S. Bárbara 1513190,66 962397,08
39 Plaza S. Bárbara 1513183,73 962385,66
40 Plaza S. Bárbara 1513182,51 962383,66
41 Plaza S. Bárbara 1513180,68 962380,91
42 Plaza S. Bárbara 1513182,89 962378,94
43 Plaza S. Bárbara 1513184,85 962381,15
44 Plaza S. Bárbara 1513186,08 962383,14
45 Plaza S. Bárbara 1513193,01 962394,56 Cerámica
46 Plaza S. Bárbara 1513194,83 962397,31 Cerámica
46 Plaza S. Bárbara 1513194,83 962397,31 Macrorrestos
47 Plaza S. Bárbara 1513197,44 962396,04 Cerámica
48 Plaza S. Bárbara 1513196,16 962393,43 Macrorrestos
49 Plaza S. Bárbara 1513189,23 962382,01 Metal
49 Plaza S. Bárbara 1513189,23 962382,01 Cerámica
50 Plaza S. Bárbara 1513188 962380,02
51 Plaza S. Bárbara 1513186,18 962377,27
52 Plaza S. Bárbara 1513188,53 962374,75
53 Plaza S. Bárbara 1513190,35 962377,5
54 Plaza S. Bárbara 1513191,58 962379,5
55 Plaza S. Bárbara 1513198,51 962390,92
56 Plaza S. Bárbara 1513200,33 962393,67
57 Plaza S. Bárbara 1513202,93 962392,39 Metal
58 Plaza S. Bárbara 1513201,66 962389,79 Metal
58 Plaza S. Bárbara 1513201,66 962389,79 Macrorrestos

154
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

58 Plaza S. Bárbara 1513201,66 962389,79 Cerámica


58 Plaza S. Bárbara 1513201,66 962389,79 Cerámica
59 Plaza S. Bárbara 1513194,76 962377,92
60 Plaza S. Bárbara 1513193,5 962376,37 Cerámica
61 Plaza S. Bárbara 1513191,68 962373,62 Cerámica
62 Plaza S. Bárbara 1513194,43 962371,8 Macrorrestos
63 Plaza S. Bárbara 1513195,85 962373,86
64 Plaza S. Bárbara 1513197,23 962375,91 Macrorrestos
65 Plaza S. Bárbara 1513204,01 962387,27
66 Plaza S. Bárbara 1513205,83 962390,02
67 Plaza S. Bárbara 1513208,58 962388,2 Cerámica
68 Plaza S. Bárbara 1513207,16 962386,14
69 Plaza S. Bárbara 1513200,62 962374,35
70 Plaza S. Bárbara 1513199 962372,73 Cerámica
70 Plaza S. Bárbara 1513199 962372,73 Macrorrestos
71 Plaza S. Bárbara 1513196,78 962369,29
72 Plaza S. Bárbara 1513199,93 962368,15
73 Plaza S. Bárbara 1513201,2 962370,76 Cerámica
74 Plaza S. Bárbara 1513202,64 962372,77
75 Plaza S. Bárbara 1513209,5 962383,63
76 Plaza S. Bárbara 1513211,33 962386,38
77 Plaza S. Bárbara 1513213,93 962385,1
78 Plaza S. Bárbara 1513212,66 962382,5
79 Plaza S. Bárbara 1513210,54 962376,98 Cerámica
80 Plaza S. Bárbara 1513208,73 962374,09
81 Plaza S. Bárbara 1513206,32 962371,83
82 Plaza S. Bárbara 1513204,5 962369,08
83 Plaza S. Bárbara 1513202,68 962366,33
84 Plaza S. Bárbara 1513188,48 962339,62 Apisonado colonial
85 Plaza S. Bárbara 1513190,44 962341,83 Apisonado colonial
86 Plaza S. Bárbara 1513192,27 962344,58 Apisonado colonial
87 Plaza S. Bárbara 1513194,09 962347,32 Apisonado colonial
88 Plaza S. Bárbara 1513195,91 962350,07
89 Plaza S. Bárbara 1513197,73 962352,82
90 Plaza S. Bárbara 1513199,55 962355,57
91 Plaza S. Bárbara 1513201,38 962358,32
92 Plaza S. Bárbara 1513203,2 962361,07

155
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

93 Plaza S. Bárbara 1513205,02 962363,82


94 Plaza S. Bárbara 1513206,84 962366,57
95 Plaza S. Bárbara 1513208,67 962369,32 Cerámica
96 Plaza S. Bárbara 1513210,49 962372,07
97 Plaza S. Bárbara 1513212,31 962374,81
98 Plaza S. Bárbara 1513214,87 962378,72
99 Plaza S. Bárbara 1513216,75 962381,43
100 Plaza S. Bárbara 1513219,33 962380,09
101 Plaza S. Bárbara 1513217,99 962377,52
102 Plaza S. Bárbara 1513214,64 962374,35 Macrorrestos
103 Plaza S. Bárbara 1513212,82 962371,6 Macrorrestos
104 Plaza S. Bárbara 1513211 962368,85 Macrorrestos
105 Plaza S. Bárbara 1513209,17 962366,1
106 Plaza S. Bárbara 1513208,17 962362,69
107 Plaza S. Bárbara 1513206,35 962359,94
108 Plaza S. Bárbara 1513204,53 962357,19
109 Plaza S. Bárbara 1513202,71 962354,44
110 Plaza S. Bárbara 1513200,88 962351,69
111 Plaza S. Bárbara 1513199,06 962348,94
112 Plaza S. Bárbara 1513197,24 962346,19 Apisonado colonial
113 Plaza S. Bárbara 1513195,42 962343,44 Apisonado colonial
113 Plaza S. Bárbara 1513195,42 962343,44 Cerámica
114 Plaza S. Bárbara 1513193,59 962340,7 Apisonado colonial
114 Plaza S. Bárbara 1513193,59 962340,7 Macrorrestos
115 Plaza S. Bárbara 1513191,77 962337,95 Apisonado colonial
115 Plaza S. Bárbara 1513191,77 962337,95 Cerámica
116 Plaza S. Bárbara 1513193,97 962335,98 Apisonado colonial
116 Plaza S. Bárbara 1513193,97 962335,98 Macrorrestos
116 Plaza S. Bárbara 1513193,97 962335,98 cerámica
117 Plaza S. Bárbara 1513195,94 962338,18 Apisonado colonial
117 Plaza S. Bárbara 1513195,94 962338,18 Cerámica
118 Plaza S. Bárbara 1513197,76 962340,93 Apisonado colonial
118 Plaza S. Bárbara 1513197,76 962340,93 Macrorrestos
118 Plaza S. Bárbara 1513197,76 962340,93 Cerámica
119 Plaza S. Bárbara 1513199,44 962344,23 Apisonado colonial
119 Plaza S. Bárbara 1513199,44 962344,23 Macrorrestos
120 Plaza S. Bárbara 1513201,95 962346,57 Cerámica

156
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

120 Plaza S. Bárbara 1513201,95 962346,57 Macrorrestos


121 Plaza S. Bárbara 1513203,23 962349,18 Cerámica
121 Plaza S. Bárbara 1513203,23 962349,18 Macrorrestos
122 Plaza S. Bárbara 1513205,05 962351,93
123 Plaza S. Bárbara 1513206,88 962354,68
124 Plaza S. Bárbara 1513209,1 962358,12
125 Plaza S. Bárbara 1513210,92 962360,87
126 Plaza S. Bárbara 1513212,34 962362,92
127 Plaza S. Bárbara 1513220,28 962374,95
128 Plaza S. Bárbara 1513222,17 962377,66 Cerámica
129 Plaza S. Bárbara 1513224,74 962376,33
130 Plaza S. Bárbara 1513223,41 962373,75
131 Plaza S. Bárbara 1513215,49 962361,79
132 Plaza S. Bárbara 1513213,67 962359,04
133 Plaza S. Bárbara 1513211,85 962356,29
134 Plaza S. Bárbara 1513210,03 962353,54
135 Plaza S. Bárbara 1513208,2 962350,8 Cerámica
136 Plaza S. Bárbara 1513206,38 962348,05
137 Plaza S. Bárbara 1513204,56 962345,3
138 Plaza S. Bárbara 1513202,74 962342,55 Apisonado colonial
138 Plaza S. Bárbara 1513202,74 962342,55 Macrorrestos
139 Plaza S. Bárbara 1513200,91 962339,8 Apisonado colonial
139 Plaza S. Bárbara 1513200,91 962339,8 Cerámica
140 Plaza S. Bárbara 1513203,12 962337,83 Cerámica
141 Plaza S. Bárbara 1513205,08 962340,03 Macrorrestos
141 Plaza S. Bárbara 1513205,08 962340,03 Cerámica
142 Plaza S. Bárbara 1513206,91 962342,78
143 Plaza S. Bárbara 1513208,73 962345,53
144 Plaza S. Bárbara 1513210,55 962348,28
145 Plaza S. Bárbara 1513212,37 962351,03 Cerámica
146 Plaza S. Bárbara 1513214,2 962353,78
147 Plaza S. Bárbara 1513216,02 962356,53 Cerámica
148 Plaza S. Bárbara 1513217,84 962359,28
149 Plaza S. Bárbara 1513219,66 962362,03
150 Plaza S. Bárbara 1513221,34 962364,78
151 Plaza S. Bárbara 1513225,7 962371,18 Macrorrestos
152 Plaza S. Bárbara 1513227,58 962373,89

157
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

153 Plaza S. Bárbara 1513230,15 962372,56


154 Plaza S. Bárbara 1513228,82 962369,98
155 Plaza S. Bárbara 1513224,64 962363,64
156 Plaza S. Bárbara 1513222,81 962360,9
157 Plaza S. Bárbara 1513221,14 962358,15
158 Plaza S. Bárbara 1513219,17 962355,4
159 Plaza S. Bárbara 1513217,35 962352,65
160 Plaza S. Bárbara 1513215,52 962349,9
161 Plaza S. Bárbara 1513213,7 962347,15
162 Plaza S. Bárbara 1513211,88 962344,4
163 Plaza S. Bárbara 1513210,06 962341,65
164 Plaza S. Bárbara 1513208,23 962338,9 Cerámica
164 Plaza S. Bárbara 1513208,23 962338,9 Vidrio
165 Plaza S. Bárbara 1513206,41 962336,16 Cerámica
165 Plaza S. Bárbara 1513206,41 962336,16 Vidrio
166 Plaza S. Bárbara 1513204,84 962333,36
167 Plaza S. Bárbara 1513206,79 962331,44
168 Plaza S. Bárbara 1513208,76 962333,64
169 Plaza S. Bárbara 1513210,58 962336,39 Vidrio
170 Plaza S. Bárbara 1513212,26 962339,14 Metal
171 Plaza S. Bárbara 1513214,23 962341,89 Cerámica
172 Plaza S. Bárbara 1513216,05 962344,64
173 Plaza S. Bárbara 1513217,87 962347,39
174 Plaza S. Bárbara 1513219,69 962350,13 Ladrillo
175 Plaza S. Bárbara 1513221,37 962352,88
176 Plaza S. Bárbara 1513223,89 962355,78
177 Plaza S. Bárbara 1513225,16 962358,38
178 Plaza S. Bárbara 1513227,39 962361,82
179 Plaza S. Bárbara 1513231,11 962367,42
180 Plaza S. Bárbara 1513232,99 962370,12 Macrorrestos
181 Plaza S. Bárbara 1513235,57 962368,79
182 Plaza S. Bárbara 1513234,23 962366,21
183 Plaza S. Bárbara 1513230,13 962360
184 Plaza S. Bárbara 1513228,31 962357,25
185 Plaza S. Bárbara 1513226,49 962354,5 Metal
186 Plaza S. Bárbara 1513224,67 962351,75 Ladrillo
187 Plaza S. Bárbara 1513222,84 962349

158
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

188 Plaza S. Bárbara 1513221,02 962346,26


189 Plaza S. Bárbara 1513219,2 962343,51
190 Plaza S. Bárbara 1513217,38 962340,76 Cerámica
191 Plaza S. Bárbara 1513215,55 962338,01 Macrorrestos
191 Plaza S. Bárbara 1513215,55 962338,01 Cerámica
191 Plaza S. Bárbara 1513215,55 962338,01 Metal
192 Plaza S. Bárbara 1513213,73 962335,26
193 Plaza S. Bárbara 1513211,91 962332,51 Cerámica
194 Plaza S. Bárbara 1513212,29 962327,79
195 Plaza S. Bárbara 1513214,26 962330 Cerámica
195 Plaza S. Bárbara 1513214,26 962330 Macrorrestos
196 Plaza S. Bárbara 1513216,08 962332,75 Cerámica
197 Plaza S. Bárbara 1513217,9 962335,49 Metal
198 Plaza S. Bárbara 1513219,72 962338,24 Cerámica
198 Plaza S. Bárbara 1513219,72 962338,24 Vidrio
199 Plaza S. Bárbara 1513221,55 962340,99
200 Plaza S. Bárbara 1513223,37 962343,74
200 Plaza S. Bárbara 1513223,37 962343,74
201 Plaza S. Bárbara 1513225,19 962346,49
202 Plaza S. Bárbara 1513226,87 962349,24
203 Plaza S. Bárbara 1513228,84 962351,99 Metal
204 Plaza S. Bárbara 1513230,66 962354,74
205 Plaza S. Bárbara 1513236,52 962363,65 Macrorrestos
206 Plaza S. Bárbara 1513238,41 962366,35 Macrorrestos
207 Plaza S. Bárbara 1513241,11 962364,47
208 Plaza S. Bárbara 1513239,44 962362,1
209 Plaza S. Bárbara 1513233,81 962353,61 Cerámica
210 Plaza S. Bárbara 1513232,13 962350,31 Cerámica
211 Plaza S. Bárbara 1513230,16 962348,11 Metal
212 Plaza S. Bárbara 1513228,34 962345,36 Cerámica
213 Plaza S. Bárbara 1513226,52 962342,61
214 Plaza S. Bárbara 1513224,7 962339,86
215 Plaza S. Bárbara 1513223,02 962337,11
216 Plaza S. Bárbara 1513221,05 962334,36
217 Plaza S. Bárbara 1513219,23 962331,61
218 Plaza S. Bárbara 1513217,41 962328,87
219 Plaza S. Bárbara 1513215,59 962326,12

159
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

220 Plaza S. Bárbara 1513217,79 962324,15


221 Plaza S. Bárbara 1513219,75 962326,35
222 Plaza S. Bárbara 1513241,94 962359,88
223 Plaza S. Bárbara 1513243,82 962362,59
224 Plaza S. Bárbara 1513246,13 962362,29
225 Plaza S. Bárbara 1513244,55 962360,36
226 Plaza S. Bárbara 1513243,28 962357,75 Cerámica
227 Plaza S. Bárbara 1513240,91 962354,86 Cerámica
228 Plaza S. Bárbara 1513239,63 962352,26 Cerámica
229 Plaza S. Bárbara 1513237,95 962348,96 Cerámica
230 Plaza S. Bárbara 1513235,58 962346,07
231 Plaza S. Bárbara 1513233,76 962343,32
232 Plaza S. Bárbara 1513322,78 962344,68
233 Plaza S. Bárbara 1513230,14 962338,27 Restos óseos humanos
233 Plaza S. Bárbara 1513230,14 962338,27 Cerámica
234 Plaza S. Bárbara 1513227,99 962335,73
235 Plaza S. Bárbara 1513226,72 962333,13
236 Plaza S. Bárbara 1513224,9 962330,38
237 Plaza S. Bárbara 1513223,07 962327,63
238 Plaza S. Bárbara 1513221,25 962324,88
239 Plaza S. Bárbara 1513219,27 962322,25
240 Plaza S. Bárbara 1513213,34 962309,89
241 Plaza S. Bárbara 1513215,31 962312,09
242 Plaza S. Bárbara 1513217,13 962314,84
243 Plaza S. Bárbara 1513218,95 962317,59
244 Plaza S. Bárbara 1513215,22 962308,85
245 Plaza S. Bárbara 1513217,18 962311,06 Macrorrestos
246 Plaza S. Bárbara 1513219 962313,8
247 Plaza S. Bárbara 1513220,83 962316,55
248 Plaza S. Bárbara 1513221,62 962319,74
249 Plaza S. Bárbara 1513223,6 962322,37
250 Plaza S. Bárbara 1513225,42 962325,12
251 Plaza S. Bárbara 1513227,24 962327,87
252 Plaza S. Bárbara 1513229,07 962330,61
253 Plaza S. Bárbara 1513230,89 962333,36
254 Plaza S. Bárbara 1513232,71 962336,11
255 Plaza S. Bárbara 1513234,53 962338,86

160
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

256 Plaza S. Bárbara 1513236,51 962341,49 Restos óseos humanos


256 Plaza S. Bárbara 1513236,51 962341,49 Cerámica
257 Plaza S. Bárbara 1513238,33 962344,24 Restos óseos humanos
258 Plaza S. Bárbara 1513240,16 962346,99 Cerámica
259 Plaza S. Bárbara 1513241,98 962349,74
260 Plaza S. Bárbara 1513243,8 962352,49
261 Plaza S. Bárbara 1513245,62 962355,24
262 Plaza S. Bárbara 1513247,44 962357,99
263 Plaza S. Bárbara 1513249,03 962359,93
264 Plaza S. Bárbara 1513250,79 962360,15
265 Portales de S. Bárbara 1513249,48 962358,32
266 Portales de S. Bárbara 1513240,51 962337,57
267 Portales de S. Bárbara 1513245,6 962347,71
268 Portales de S. Bárbara 1513247,42 962350,46
269 Portales de S. Bárbara 1513252,19 962356,43
270 Portales de S. Bárbara 1513253,49 962358,27
271 Portales de S. Bárbara 1513256,07 962356,93
272 Portales de S. Bárbara 1513254,34 962354,42
273 Portales de S. Bárbara 1513250,46 962349,17
274 Portales de S. Bárbara 1513248,78 962345,88
275 Portales de S. Bárbara 1513243,88 962335,9
276 Portales de S. Bárbara 1513246,16 962334,02
277 Portales de S. Bárbara 1513250,98 962343,91
278 Portales de S. Bárbara 1513252,8 962346,66
279 Portales de S. Bárbara 1513257,18 962351,98
280 Portales de S. Bárbara 1513258,91 962354,5
281 Portales de S. Bárbara 1513261,48 962353,16
282 Portales de S. Bárbara 1513260,31 962350,78
283 Portales de S. Bárbara 1513255,95 962345,53
284 Portales de S. Bárbara 1513254,13 962342,78
285 Portales de S. Bárbara 1513252,31 962340,03
Concentración de
286 Portales de S. Bárbara 1513250,49 962337,28
cerámica
286 Portales de S. Bárbara 1513250,49 962337,28 Macrorrestos
286 Portales de S. Bárbara 1513250,49 962337,28 Metal
287 Portales de S. Bárbara 1513249,52 962332,48
288 Portales de S. Bárbara 1513251,8 962330,6
289 Portales de S. Bárbara 1513252,83 962334,77

161
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

290 Portales de S. Bárbara 1513254,51 962338,06


291 Portales de S. Bárbara 1513256,48 962340,27 Cerámica
292 Portales de S. Bárbara 1513258,3 962343,02 Cerámica
293 Portales de S. Bárbara 1513262,46 962348,77
294 Portales de S. Bárbara 1513264,32 962350,73
295 Portales de S. Bárbara 1513267 962349,56
296 Portales de S. Bárbara 1513265,83 962347,17
297 Portales de S. Bárbara 1513261,45 962341,88
298 Portales de S. Bárbara 1513259,63 962339,14
299 Portales de S. Bárbara 1513257,95 962335,84 Cerámica
300 Portales de S. Bárbara 1513255,44 962333,49
301 Portales de S. Bárbara 1513255,16 962329,06
302 Portales de S. Bárbara 1513257,44 962327,18
303 Portales de S. Bárbara 1513258,88 962331,27
304 Portales de S. Bárbara 1513260,15 962333,87
305 Portales de S. Bárbara 1513261,98 962336,62 Cerámica
Concentración de
306 Portales de S. Bárbara 1513263,8 962339,37
cerámica
306 Portales de S. Bárbara 1513263,8 962339,37 Macrorrestos
307 Portales de S. Bárbara 1513268,12 962344,61
308 Portales de S. Bárbara 1513269,84 962347,12
309 Portales de S. Bárbara 1513272,42 962345,79
310 Portales de S. Bárbara 1513271,24 962343,41
311 Portales de S. Bárbara 1513266,95 962338,24
312 Portales de S. Bárbara 1513265,13 962335,49
313 Portales de S. Bárbara 1513263,3 962332,74 Cerámica
314 Portales de S. Bárbara 1513261,48 962329,99
315 Portales de S. Bárbara 1513260,8 962325,64
316 Portales de S. Bárbara 1513263,08 962323,77
317 Portales de S. Bárbara 1513263,83 962327,48
318 Portales de S. Bárbara 1513265,65 962330,23
319 Portales de S. Bárbara 1513267,47 962332,98
320 Portales de S. Bárbara 1513269,3 962335,73
321 Portales de S. Bárbara 1513273,53 962340,84
322 Portales de S. Bárbara 1513275,26 962343,35
323 Portales de S. Bárbara 1513277,83 962342,02
324 Portales de S. Bárbara 1513276,65 962339,64
325 Portales de S. Bárbara 1513272,45 962334,59

162
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

326 Portales de S. Bárbara 1513270,62 962331,85


327 Portales de S. Bárbara 1513268,8 962329,1 Macrorrestos
327 Portales de S. Bárbara 1513268,8 962329,1 Metal
328 Portales de S. Bárbara 1513266,98 962326,35
329 Portales de S. Bárbara 1513266,45 962322,22
329 Portales de S. Bárbara 1513266,45 962322,22
330 Portales de S. Bárbara 1513268,73 962320,35 Macrorrestos
331 Portales de S. Bárbara 1513269,33 962323,83
332 Portales de S. Bárbara 1513271,15 962326,58 Cerámica
333 Portales de S. Bárbara 1513272,97 962329,33 Cerámica
334 Portales de S. Bárbara 1513274,79 962332,08
335 Portales de S. Bárbara 1513278,94 962337,07
336 Portales de S. Bárbara 1513280,67 962339,58 Macrorrestos
337 Portales de S. Bárbara 1513283,38 962337,7
338 Portales de S. Bárbara 1513282,07 962335,87 Macrorrestos
339 Portales de S. Bárbara 1513281,06 962332,65 Macrorrestos
340 Portales de S. Bárbara 1513279,24 962329,9 Cerámica
341 Portales de S. Bárbara 1513277,42 962327,15
342 Portales de S. Bárbara 1513275,6 962324,4
343 Portales de S. Bárbara 1513273,78 962321,65
344 Portales de S. Bárbara 1513271,95 962318,9
345 Portales de S. Bárbara 1513283,28 962329,97
346 Portales de S. Bárbara 1513284,36 962333,3 Cerámica
347 Portales de S. Bárbara 1513286.08 962335,81
348 Portales de S. Bárbara 1513175,71 962410,23 Macrorrestos
349 A. de San Rafael 1513289,89 962332,06
350 A. de San Rafael 1513291,72 962331,91
351 A. de San Rafael 1513291,35 962331,24
352 A. de San Rafael 1513293,97 962329,51 Macrorrestos
353 A. de San Rafael 1513294,34 962330,18 Macrorrestos
354 A. de San Rafael 1513297,17 962328,48
355 A. de San Rafael 1513296,8 962327,81 Macrorrestos
356 A. de San Rafael 1513299,42 962326,09
357 A. de San Rafael 1513299,79 962326,76
358 A. de San Rafael 1513302,62 962325,06 Macrorrestos
359 A. de San Rafael 1513302,25 962324,39 Macrorrestos
360 A. de San Rafael 1513304,87 962322,67

163
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

361 A. de San Rafael 1513305,24 962323,34


362 A. de San Rafael 1513308,08 962321,64
363 A. de San Rafael 1513307,7 962320,97
364 A. de San Rafael 1513310,33 962319,24 Macrorrestos
365 A. de San Rafael 1513310,7 962319,91
366 A. de San Rafael 1513313,65 962318,31
367 A. de San Rafael 1513312,89 962317,3
368 A. de San Rafael 1513315,62 962315,46 Macrorrestos
369 A. de San Rafael 1513316,61 962316,58
370 A. de San Rafael 1513319,37 962314,72 Macrorrestos
371 A. de San Rafael 1513318,25 962313,27
372 A. de San Rafael 1513320,93 962311,2
373 A. de San Rafael 1513322,22 962312,84
374 A. de San Rafael 1513324,88 962310,9 Macrorrestos
375 A. de San Rafael 1513323,6 962309,26
376 A. de San Rafael 1513326,22 962307,26
377 A. de San Rafael 1513327,5 962308,9
378 A. de San Rafael 1513330,19 962306,83
379 A. de San Rafael 1513328,85 962305,24
380 A. de San Rafael 1513331,35 962303,34
381 A. de San Rafael 1513332,69 962304,93
382 A. de San Rafael 1513335,31 962303,02 Macrorrestos
383 A. de San Rafael 1513333,97 962301,43
384 A. de San Rafael 1513336,7 962299,59 Macrorrestos
385 A. de San Rafael 1513337,91 962300,98
386 A. de San Rafael 1513340,46 962298,85 Cerámica
387 A. de San Rafael 1513339,33 962297,4 Cerámica
388 A. de San Rafael 1513342,02 962295,33
389 A. de San Rafael 1513343,3 962296,97
390 A. de San Rafael 1513345,97 962295,03 Macrorrestos
391 A. de San Rafael 1513344,68 962293,39 Macrorrestos
392 A. de San Rafael 1513347,3 962291,38
393 A. de San Rafael 1513348,59 962293,03 Macrorrestos
394 A. de San Rafael 1513351,28 962291,11
395 A. de San Rafael 1513350 962289,47 Macrorrestos
396 A. de San Rafael 1513352,39 962287,91 Macrorrestos
397 A. de San Rafael 1513353,69 962289,53

164
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

398 A. de San Rafael 1513356,33 962287,52


399 A. de San Rafael 1513355,03 962285,9
400 A. de San Rafael 1513357,94 962284,14 Macrorrestos
401 A. de San Rafael 1513358,89 962285,69
402 A. de San Rafael 1513361,59 962283,86
403 A. de San Rafael 1513360,49 962282,23
404 A. de San Rafael 1513363,33 962280,61
405 A. de San Rafael 1513364,37 962282,27
406 A. de San Rafael 1513367,1 962280,42
407 A. de San Rafael 1513365,99 962278,66
408 A. de San Rafael 1513368,73 962277,13
409 A. de San Rafael 1513369,84 962278,89
410 A. de San Rafael 1513372,7 962277,37
411 A. de San Rafael 1513371,6 962275,6
412 A. de San Rafael 1513374,45 962273,95
413 A. de San Rafael 1513375,56 962275,71
414 A. de San Rafael 1513378,3 962273,89 Macrorrestos
415 A. de San Rafael 1513377,2 962272,13 Macrorrestos
416 A. de San Rafael 1513380,21 962270,56
417 A. de San Rafael 1513381,32 962272,32
418 A. de San Rafael 1513384,17 962270,66
419 A. de San Rafael 1513383,07 962268,9 Macrorrestos
420 A. de San Rafael 1513385,88 962267,17 Macrorrestos
421 A. de San Rafael 1513386,98 962268,93
422 A. de San Rafael 1513389,86 962267,31
423 A. de San Rafael 1513388,76 962265,54
424 A. de San Rafael 1513391,61 962263,88 Macrorrestos
425 A. de San Rafael 1513392,72 962265,64
426 A. de San Rafael 1513394,46 962262,18
427 A. de San Rafael 1513395,57 962263,95
428 A. de San Rafael 1513398,41 962262,47
429 A. de San Rafael 1513397,25 962260,74
430 A. de San Rafael 1513400,09 962259,05
431 A. de San Rafael 1513401,07 962260,88
432 A. de San Rafael 1513404,02 962259,32
433 A. de San Rafael 1513402,9 962257,56 Cerámica
434 A. de San Rafael 1513405,78 962255,69 Macrorrestos

165
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

435 A. de San Rafael 1513407 962257,38


436 A. de San Rafael 1513409,74 962255,54
437 A. de San Rafael 1513408,52 962253,85 Macrorrestos
438 A. Portales de la Marquesa 1513411,26 962252,01
439 A. Portales de la Marquesa 1513413,17 962253,3
440 A. Portales de la Marquesa 1513415,73 962252,07
441 A. Portales de la Marquesa 1513414,39 962250,47
442 A. Portales de la Marquesa 1513417,03 962248,54
443 A. Portales de la Marquesa 1513418,36 962250,14
444 A. Portales de la Marquesa 1513421,28 962248,45
445 A. Portales de la Marquesa 1513419,95 962246,86
446 A. Portales de la Marquesa 1513422,67 962244,98
447 A. Portales de la Marquesa 1513424 962246,58
448 A. Portales de la Marquesa 1513426,74 962244,59
449 A. Portales de la Marquesa 1513425,41 962243
450 A. Portales de la Marquesa 1513427,92 962241,16
451 A. Portales de la Marquesa 1513429,25 962242,76
452 A. Portales de la Marquesa 1513432,05 962240,84
453 A. Portales de la Marquesa 1513430,72 962239,24
454 A. Portales de la Marquesa 1513433,43 962237,42
455 A. Portales de la Marquesa 1513434,76 962239,01
456 A. Portales de la Marquesa 1513437,36 962236,98 Macrorrestos
457 A. Portales de la Marquesa 1513436,03 962235,39 Macrorrestos
458 A. Portales de la Marquesa 1513438,63 962233,36
459 A. Portales de la Marquesa 1513439,97 962234,96 Macrorrestos
460 A. Portales de la Marquesa 1513442,48 962232,89
461 A. Portales de la Marquesa 1513441,15 962231,29
462 A. Portales de la Marquesa 1513443,69 962229,13
463 A. Portales de la Marquesa 1513445,03 962230,73
464 A. Portales de la Marquesa 1513447,63 962228,7
465 A. Portales de la Marquesa 1513446,3 962227,11
466 A. Portales de la Marquesa 1513448,9 962225,08
467 A. Portales de la Marquesa 1513450,23 962226,67
468 A. Portales de la Marquesa 1513452,83 962224,65
469 A. Portales de la Marquesa 1513452,16 962222,6
470 A. Portales de la Marquesa 1513453,91 962220,88
471 A. Portales de la Marquesa 1513455,24 962222,48

166
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

472 A. Portales de la Marquesa 1513457,84 962220,45


473 A. Portales de la Marquesa 1513456,51 962218,85
474 A. Portales de la Marquesa 1513459,08 962216,7
475 A. Portales de la Marquesa 1513460,41 962218,3
476 A. Portales de la Marquesa 1513463,02 962216,27
477 A. Portales de la Marquesa 1513461,68 962214,68
478 A. Portales de la Marquesa 1513464,28 962212,65
479 A. Portales de la Marquesa 1513465,62 962214,24
480 A. Portales de la Marquesa 1513467,95 962211,98
481 A. Portales de la Marquesa 1513466,61 962210,38
482 A. Portales de la Marquesa 1513469,21 962208,35
483 A. Portales de la Marquesa 1513470,55 962209,95
484 A. Portales de la Marquesa 1513473,15 962207,92
485 A. Portales de la Marquesa 1513471,81 962206,32
486 A. Portales de la Marquesa 1513474,06 962203,87 Macrorrestos
487 A. Portales de la Marquesa 1513475,4 962205,46
488 A. Portales de la Marquesa 1513477,69 962203,05 Macrorrestos
489 A. Portales de la Marquesa 1513476,35 962201,45
490 A. Portales de la Marquesa 1513478,69 962199,19
491 A. Portales de la Marquesa 1513480,02 962200,79
492 A. Portales de la Marquesa 1513482,63 962198,76
493 A. Portales de la Marquesa 1513481,29 962197,16
494 A. Portales de la Marquesa 1513483,76 962194,99
495 A. Portales de la Marquesa 1513485,1 962196,59
496 A. Portales de la Marquesa 1513487,7 962194,56
497 A. Portales de la Marquesa 1513486,36 962192,96
498 A. Portales de la Marquesa 1513488,97 962190,93
499 A. Portales de la Marquesa 1513490,3 962192,53
500 A. Portales de la Marquesa 1513492,6 962190,19
501 A. Portales de la Marquesa 1513491,26 962188,59
502 A. Portales de la Marquesa 1513493,58 962186,15
503 A. Portales de la Marquesa 1513494,92 962187,75
504 A. Portales de la Marquesa 1513497,52 962185,72 Cerámica
505 A. Portales de la Marquesa 1513496,18 962184,13 Macrorrestos
506 A. Portales de la Marquesa 1513498,78 962182,1 Cerámica
507 A. Portales de la Marquesa 1513500,12 962183,69 Cerámica
508 A. Portales de la Marquesa 1513502,72 962181,67

167
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

509 A. Portales de la Marquesa 1513501,38 962180,07 Macrorrestos


510 A. Portales de la Marquesa 1513503,72 962177,81 Macrorrestos
511 A. Portales de la Marquesa 1513505,05 962179,4
512 A. Portales de la Marquesa 1513507,66 962177,38
513 A. Portales de la Marquesa 1513506,32 962175,78
514 A. Portales de la Marquesa 1513508,79 962173,61
515 A. Portales de la Marquesa 1513510,13 962175,2
516 A. Portales de la Marquesa 1513512,73 962173,18
517 A. Portales de la Marquesa 1513512,05 962171,12
518 A. Portales de la Marquesa 1513514 962169,55
519 A. Portales de la Marquesa 1513515,33 962171,15
520 A. Portales de la Marquesa 1513517,93 962169,12
521 A. Portales de la Marquesa 1513516,6 962167,52
522 A. Portales de la Marquesa 1513519,2 962165,5
523 A. Portales de la Marquesa 1513520,54 962167,09
524 A. Portales de la Marquesa 1513523,14 962165,06
525 A. Portales de la Marquesa 1513521,8 962163,47
526 A. Portales de la Marquesa 1513525,55 962162,88
527 A. del Alba 1513528,3 962161,06 Cerámica
528 A. del Alba 1513531 962159,11 Cerámica
529 A. del Alba 1513532,11 962160,62 Cerámica
530 A. del Alba 1513534,86 962158,8
531 A. del Alba 1513533,64 962157,1 Macrorrestos
532 A. del Alba 1513536,18 962154,92 Macrorrestos
533 A. del Alba 1513537,61 962156,98
534 A. del Alba 1513540,38 962154,74 Macrorrestos
535 A. del Alba 1513538,85 962152,92
536 A. del Alba 1513541,42 962150,86
537 A. del Alba 1513542,95 962152,67
538 A. del Alba 1513545,51 962150,6
539 A. del Alba 1513543,99 962148,79
540 A. del Alba 1513546,48 962146,61
541 A. del Alba 1513548,08 962148,53
542 A. del Alba 1513551,3 962146,72
543 A. del Alba 1513550,41 962144,31
544 A. del Alba 1513552,37 962142,76
545 A. del Alba 1513553,92 962144,71

168
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

546 A. del Alba 1513556,54 962142,71


547 A. del Alba 1513554,99 962140,75
548 A. del Alba 1513557,5 962138,88
549 A. del Alba 1513558,92 962140,94
550 A. del Alba 1513561,41 962138,97
551 A. del Alba 1513559,99 962136,91
552 A. del Alba 1513562,57 962134,8
553 A. del Alba 1513563,99 962136,86
554 A. del Alba 1513566,73 962135,03
555 A. del Alba 1513565,31 962132,98
556 A. del Alba 1513568,06 962131,15
557 A. del Alba 1513569,48 962133,21
558 A. del Alba 1513572,23 962131,39
559 A. del Alba 1513570,81 962129,33 Macrorrestos
560 A. del Alba 1513573,56 962127,51 Cerámica
561 A. del Alba 1513574,98 962129,57
562 A. del Alba 1513577,73 962127,74 Macrorrestos
563 A. del Alba 1513576,31 962125,69
564 A. El Campillo 1513581,62 962128,02 Macrorrestos
565 A. El Campillo 1513583,68 962126,6
566 A. El Campillo 1513586,43 962124,78
567 A. El Campillo 1513588,87 962123,16
568 A. El Campillo 1513589,55 962124,31
569 A. El Campillo 1513592,6 962122,99
570 A. El Campillo 1513591,61 962121,34
571 A. El Campillo 1513594,36 962119,51
572 A. El Campillo 1513595,35 962121,17
573 A. El Campillo 1513597,8 962118,84
574 A. El Campillo 1513597,11 962117,69
575 A. El Campillo 1513600,44 962115,31
576 A. El Campillo 1513601,12 962116,46
577 A. El Campillo 1513602,51 962114,51
578 A. El Campillo 1513603,35 962111,24
579 A. El Campillo 1513604,48 962108,75
580 A. El Campillo 1513603,56 962105,82
581 A. El Campillo 1513605,61 962104,4
582 A. El Campillo 1513606,82 962106,24

169
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

583 A. El Campillo 1513609,23 962103,99


584 A. El Campillo 1513608,36 962102,58
585 A. El Campillo 1513611,11 962100,76
586 A. El Campillo 1513611,97 962102,16
587 A. El Campillo 1513614,43 962099,84
588 A. El Campillo 1513613,86 962098,94
589 A. El Campillo 1513616,61 962097,11
590 A. El Campillo 1513617,36 962098,11
591 A. El Campillo 1513620,17 962096,37
592 A. El Campillo 1513619,36 962095,29
593 A. El Campillo 1513621,95 962093,32
594 A. El Campillo 1513623,01 962094,72
595 A. El Campillo 1513626,12 962093,55
596 A. El Campillo 1513624,3 962090,8
597 A. El Campillo 1513628,53 962089,74
598 A. El Campillo 1513629,95 962091,79
599 A. El Campillo 1513632,01 962090,37
600 A. El Campillo 1513630,59 962088,31
601 A. El Campillo 1513633,34 962086,49 Macrorrestos
602 A. El Campillo 1513634,76 962088,55
603 A. El Campillo 1513637,51 962086,73
604 A. El Campillo 1513636,09 962084,67
605 A. El Campillo 1513638,6 962082,23
606 A. El Campillo 1513640,43 962084,98
607 A. El Campillo 1513643,65 962083,98
608 A. El Campillo 1513642,52 962080,83
609 A. El Campillo 1513644,75 962079,7
610 A. El Campillo 1513646,17 962081,76
611 A. El Campillo 1513649,29 962080,68
612 A. El Campillo 1513647,54 962077,88
613 A. El Campillo 1513650,34 962076,13
614 A. El Campillo 1513651,7 962078,23
615 A. El Campillo 1513654,5 962076,49
616 A. El Campillo 1513653,14 962074,39
617 A. El Campillo 1513655,94 962072,65
618 A. El Campillo 1513657,3 962074,74
619 A. El Campillo 1513660,1 962073

170
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

620 A. El Campillo 1513658,74 962070,9


621 A. El Campillo 1513661,16 962068,46
622 A. El Campillo 1513662,9 962071,25
623 A. El Campillo 1513665,7 962069,51
624 A. El Campillo 1513664,34 962067,41
625 A. El Campillo 1513666,76 962064,97
626 A. El Campillo 1513668,5 962067,77 Macrorrestos
627 A. Los Ángeles 1513672,15 962067,79
628 A. Los Ángeles 1513675,6 962065,56 Cerámica
628 A. Los Ángeles 1513675,6 962065,56 Vidrio
629 A. Los Ángeles 1513677,65 962064,14
630 A. Los Ángeles 1513681,38 962062,45
631 A. Los Ángeles 1513682,95 962060,2
632 A. Los Ángeles 1513685,58 962058,17
633 A. Los Ángeles 1513688,42 962056,54
634 A. Los Ángeles 1513691,29 962054,93
635 A. Los Ángeles 1513694,12 962053,24
636 A. Los Ángeles 1513696,96 962051,6
637 A. Los Ángeles 1513700,48 962049,55
638 A. Los Ángeles 1513702,59 962048,21
639 A. Los Ángeles 1513705,31 962046,72
640 A. Los Ángeles 1513708,29 962045,08 Cerámica
641 A. Los Ángeles 1513711,11 962043,45 Macrorrestos
642 A. Los Ángeles 1513714,88 962041,61
643 A. Los Ángeles 1513716,87 962040,1
644 A. Los Ángeles 1513719,53 962038,15
645 A. Los Ángeles 1513722,2 962036,21 Macrorrestos
646 A. Los Ángeles 1513724,86 962034,26
647 A. Los Ángeles 1513727,52 962032,31
648 A. Los Ángeles 1513730,14 962030,31
649 A. Los Ángeles 1513732,8 962028,36
650 A. Los Ángeles 1513735,46 962026,41
651 A. Los Ángeles 1513738,13 962024,47
652 A. Los Ángeles 1513740,79 962022,52
653 A. Los Ángeles 1513743,88 962021,25
654 A. Los Ángeles 1513746,55 962019,3
655 Calle 14 1513212,73 962304,59

171
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

656 Calle 14 1513210,05 962300,37


657 Calle 14 1513207,37 962296,15
658 Calle 14 1513204,7 962291,92
659 Calle 144 1513202,02 962287,7
660 Calle 14 1513199,35 962283,48
661 Calle 14 1513196,67 962279,25
662 Calle 14 1513193,99 962275,03
663 Calle 14 1513191,32 962270,81
664 Calle 14 1513188,56 962266,64
665 Calle 14 1513185,9 962262,4
666 Calle 14 1513183,24 962258,17
667 Calle 16 1513525,21 962156,7
668 Calle 16 1513521,91 962152,94
669 Calle 16 1513518,69 962149,09
670 Calle 16 1513515,4 962145,26
671 Calle 16 1513512,18 962141,51
672 Calle 16 1513508,94 962137,71
673 Calle 16 1513505,75 962133,94
674 Calle 16 1513502,41 962130,11
675 Calle 16 1513499,16 962126,3
676 Calle 16 1513495,94 962122,48
677 Calle 16 1513492,65 962118,77
678 Calle 16 1513489,39 962114,93
679 Calle 16 1513486,16 962111,12
680 Calle 16 1513482,88 962107,34
681 Calle 16 1513479,64 962103,49
682 Calle 16 1513476,32 962099,66
683 Calle 16 1513473,88 962096,61
684 Calle 16 1513470,89 962092,57
685 Calle 16 1513468,25 962088,45
686 Calle 16 1513465,64 962084,38
687 Calle 17 A 1513663,89 962061,49
688 Calle 17 A 1513660,7 962057,64
689 Calle 17 A 1513657,51 962053,79
690 Calle 17 A 1513654,21 962050,03
691 Calle 17 A 1513651,02 962046,19
692 Calle 17 A 1513647,72 962042,43

172
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

693 Calle 17 A 1513644,24 962038,83


694 Calle 17 A 1513640,96 962035,06
695 Calle 17 A 1513637,48 962031,47
696 Calle 17 A 1513634,01 962027,88
697 Calle 17 A 1513630,53 962024,28
698 Calle 17 A 1513627,05 962020,69
699 Calle 17 A 1513623,53 962017,14
700 Calle 17 A 1513619,85 962013,75
701 Calle 17 A 1513616,18 962010,36
702 Calle 17 A 1513612,5 962006,98
703 Calle 17 A 1513608,82 962003,59
704 Calle 17 A 1513605,12 962000,22
705 Calle 17 A 1513601,45 961996,83
706 Calle 17 A 1513597,76 961993,46
707 Calle 17 A 1513594,07 961990,09
708 Calle 17 A 1513590,38 961986,71
709 Calle 17 A 1513586,69 961983,34
710 Calle 17 A 1513584,41 961981,4
711 S. Bárbara 1513194,83 962397,31
712 S. Bárbara 1513197,44 962396,04
713 S. Bárbara 1513196,16 962393,43
714 S. Bárbara 1513196,16 962393,43
715 Calle del Medio 1.513.581,80 961.985,67
716 Calle del Medio 1.513.578,49 961.989,41
717 Calle del Medio 1.513.575,17 961.993,15
718 Calle del Medio 1.513.571,73 961.996,77
719 Calle del Medio 1.513.568,20 962.000,32
720 Calle del Medio 1.513.564,68 962.003,87
721 Calle del Medio 1.513.561,07 962.007,33
722 Calle del Medio 1.513.557,18 962.010,48
723 Calle del Medio 1.513.553,23 962.013,54
724 Calle 17 1.513.547,66 962.011,73
725 Calle 17 1.513.543,85 962.008,50
726 Calle 17 1.513.539,63 962.005,81
727 Calle 17 1.513.535,99 962.002,26
728 Calle 17 1.513.532,27 961.999,01
729 Calle 17 1.513.528,34 961.995,58

173
COORD. COORD.
APIQUE LUGAR EVIDENCIA
NORTE ESTE

730 Calle 17 1.513.524,57 961.992,30


731 Calle 17 1.513.520,85 961.988,90
732 Calle 17 1.513.517,21 961.985,46
733 Calle 17 1.513.513,57 961.982,01
734 Calle 17 1.513.509,95 961.978,57
735 Calle 17 1.513.507,29 961.974,37
736 Calle 17 1.513.503,17 961.971,56
737 Calle 17 1.513.499,55 961.968,08
738 Calle 17 1.513.495,88 961.964,71
739 Calle 17 1.513.492,21 961.961,33
740 Calle 17 1.513.488,41 961.957,84
741 Calle 17 1.513.484,73 961.954,45
742 Calle 17 1.513.481,04 961.951,06
743 Calle 17 1.513.477,54 961.947,75
744 Calle 17 1.513.473,20 961.944,58
745 Calle 17 1.513.469,51 961.941,25
746 Calle 17 1.513.465,85 961.937,89
747 Calle 17 1.513.462,20 961.934,53
748 Calle 17 1.513.458,79 961.931,39
749 Calle 17 1.513.455,12 961.927,96
750 Calle 17 1.513.451,53 961.924,34
751 Calle 17 1.513.448,01 961.920,80
752 Calle 17 1.513.444,50 961.917,26
753 Calle 17 1.513.440,99 961.913,72
754 Calle 17 1.513.437,14 961.909,84
755 Calle 17 1.513.433,90 961.905,94
756 Calle 17 1.513.431,25 961.902,08
757 Calle 17 1.513.428,39 961.897,91
758 Calle 17 1.513.425,54 961.893,76
759 Calle 17 1.513.422,49 961.889,82
760 Calle 17 1.513.425,41 961.884,64
761 Carrera 3 1.513.429,19 961.881,10
762 Carrera 3 1.513.753,08 962.011,66
763 Carrera 3 1.513.755,64 962.009,94

174
Tabla 2. Evidencias obtenidas en la prospección (mediante apiques) según su procedencia
y clase

(D = decorado / N D = No decorado)

Cerámica Macro Total


Vi-
Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases Líti- Me- - por
dri
Ubicación co tal rresto sector
o
s
D ND D ND D ND D ND D ND
Plaza de Santa 2 3
Bárbara 45 2 382 2 26 26 1 49 119 705
0 3
Portales de
1 2 7 5 34 15 6 150 220
Santa Bárbara
Albarrada San
192 192
Rafael
Albarrada
Portales La 3 1 1 1 3 136 145
Marquesa
Albarrada del
2 15 62 79
Alba
Albarrada
135 135
Campillo
Albarrada Los
3 8 3 2 46 2 6 1 50 121
Ángeles
Callejón S.
Bárbara / 1 1
Calle 14
Callejón de La
Marquesa /
Calle 16
Calle La
Choperena / 1 1 2
Calle 17 A
Calle Los
Ángeles /
Calle 17
Calle del
Medio
Mercado La
concepción
3 4
56 1 13 477 4 47 27 1 55 846
Total 0 3
evidencias 1600
671 27 1 55 846

175
Tabla 3. Tipos cerámicos obtenidos en la prospección
(D = decorado / N D = No decorado)

Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases


Tipo
D ND D ND D ND D ND D ND
Rojo Bañado 3 1 17 87 1 3
Habano Inciso Fino 1 1 1
Habano Alisado Sencillo 2 2 52
Tosco Granuloso 6 12 7 4 82 7
Tosco Achurado 1 3 1 1 9 3
Negro a Café Bruñido
Rojo con Engobe Crema 5 12 69 1 9
Mayólica (Colonial) 1 4 1 23 2
C/gena Rojo Compacto (Colonial) 1 7 2 5 50 6
Loza Industrial 13 12 3 15 104 2 17

Tabla 4. Evidencias obtenidas en el corte 1 (ampliación de la prospección apique 306)


(D = decorado / N D = No decorado)

Cerámica Macro Total


Vi-
Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases Líti- Me- - por
dri
Nivel (cm) co tal rresto nivel
o
s
D ND D ND D ND D ND D ND
0 - 20
21 - 40 2 5 10 1 18
41 - 60 1
14 10 74 94 9 30 242
1
61 - 80 14 4 9 5 32
1
30 15 78 113 10 35
Total 1
evidencias 292
257 35

Tabla 5. Tipos cerámicos obtenidos en el corte 1 (ampliación de la prospección)


(D = decorado / N D = No decorado)

Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases


Tipo
D ND D ND D ND D ND D ND
Rojo Bañado 3 4 2 2 30 4
Habano Inciso Fino
Habano Alisado Sencillo 3 4 6 4 6 6
Tosco Granuloso
Tosco Achurado
Negro a Café Bruñido
Rojo con Engobe Crema 2 2 2 1
Mayólica (Colonial) 3 4 5 28 8
C/gena Rojo Compacto (Colonial) 6 4 25
Loza Industrial 40 3
Fragmentos que no se logró precisar 10 40
si son de uno u otro tipo

176
Tabla 6. Evidencias obtenidas en el corte 2 (ampliación de la prospección apique 286)
(D = decorado / N D = No decorado)

Cerámica Macro Total


Vi-
Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases Líti- Me- - por
dri
Nivel (cm) co tal rresto nivel
o
s
D ND D ND D ND D ND D ND
0 - 20
21 - 40 4 1 5 16 3 7 36
41 - 60 2
32 2 19 135 1 2 10 26 255
8
61 - 80 2 2 2 5 40 2 3 56
3
34 1 4 29 191 1 4 16 7 26
Total 4
347
evidencias
314 7 26

Tabla 7. Tipos cerámicos obtenidos en el corte 2 (ampliación de la prospección)


(D = decorado / N D = No decorado)

Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases


Tipo
D ND D ND D ND D ND D ND
Rojo Bañado 16 7 12 2 2
Habano Inciso Fino
Habano Alisado Sencillo 1 9 1 4 18
Tosco Granuloso 5 8 15 4
Tosco Achurado
Negro a Café Bruñido 5 2 2
Rojo con Engobe Crema
Mayólica (Colonial) 5 11
C/gena Rojo Compacto (Colonial) 4 23 1 8
Loza Industrial 7 6 18
Fragmentos que no se logró precisar 118
si son de uno u otro tipo

Tabla 8. Evidencias obtenidas en el salvamento del atrio de la capilla


(D = decorado / N D = No decorado)

Cerámica Macro Total


Vi-
Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases Líti- Me- - por
dri
Nivel (cm) co tal rresto nivel
o
s
D ND D ND D ND D ND D ND
0 - 20
21 - 40 2 5 24 57 28 116
41 - 60 12 39 128 9 35 223
61 - 80 9 9
2 17 63 194 9 63
Total
348
evidencias 276 9 63

177
Tabla 9. Tipos cerámicos obtenidos en el salvamento del atrio de la capilla
(D = decorado / N D = No decorado)

Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases


Tipo
D ND D ND D ND D ND D ND
Rojo Bañado 2 23
Habano Inciso Fino
Habano Alisado Sencillo 1 16
Tosco Granuloso
Tosco Achurado
Negro a Café Bruñido
Rojo con Engobe Crema
Mayólica (Colonial) 2 2 63
C/gena Rojo Compacto (Colonial) 12 155
Loza Industrial
Fragmentos que no se logró precisar
si son de uno u otro tipo

Tabla 10. Evidencias obtenidas en el salvamento junto al manjol


(D = decorado / N D = No decorado)

Cerámica Macro Total


Vi-
Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases Líti- Me- - por
Nivel (cm) dri
co tal rresto nivel
* o
s
D ND D ND D ND D ND D ND
0 - 40 3 9 6 6 24
41 - 80
81 - 100 121 121
101 - 120
121 – 140 60 103 15 4 300 1 3 9 495
141 - 160 19 50 2 71
161 - 180 20 20
181 - 200 18 18
79 106 15 4 518 1 3 9 2 6 6
Total
749
evidencias 735 2 6 6

* El nivel 121 – 140 incluye los fragmentos de las vasijas funerarias antes de reconstruirlas.

Tabla 11. Tipos cerámicos obtenidos en el salvamento junto al manjol

Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases


Tipo
D ND D ND D ND D ND D ND
Rojo Bañado 42 48 15 4 287 1
Habano Inciso Fino 7 54 3 9
Habano Alisado Sencillo 29 18 84
Tosco Granuloso 1
Tosco Achurado
Negro a Café Bruñido 1 6 6
Rojo con Engobe Crema
Mayólica (Colonial)
C/gena Rojo Compacto (Colonial)
Loza Industrial
Fragmentos que no se logró precisar 33 87
si son de uno u otro tipo

178
Tabla 12. Evidencias obtenidas en el monitoreo según su procedencia y clase
(D = decorado / N D = No decorado)

Cerámica Macro Total


Vi-
Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases Líti- Me- - por
dri
Ubicación co tal rresto sector
o
s
D ND D ND D ND D ND D ND
Plaza de Santa
8 48 254 1 2 5 38 356
Bárbara
Portales de
Santa Bárbara
Albarrada San
5 1 26 3 4 14 53
Rafael
Albarrada
Portales La 4 5 4 4 20 37
Marquesa
Albarrada del 1
Alba 1 4 23 11 28 82
5
Albarrada 1
Campillo 4 2 13 16 17 1 22 89
4
Albarrada Los
7 3 9 27 13 2 1 2 23 87
Ángeles
Callejón S.
Bárbara /
Calle 14
Callejón de La
Marquesa /
Calle 16
Calle La
Choperena / 1 1 9 11
Calle 17 A
Calle Los
Ángeles /
Calle 17
Calle del
Medio
Mercado La
concepción
5 1
15 100 320 1 46 6 1 16 145
Total 4 1
evidencias 715
547 6 1 16 145

Tabla 13. Tipos cerámicos obtenidos en el monitoreo


Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases
Tipo
D ND D ND D ND D ND D ND
Rojo Bañado 7 5 16 36 1 8
Habano Inciso Fino 8
Habano Alisado Sencillo 7 46 8
Tosco Granuloso 32 2
Tosco Achurado 4
Negro a Café Bruñido 2 2 9
Rojo con Engobe Crema 4 1 24
Mayólica (Colonial) 15 2 3 8
C/gena Rojo Compacto (Colonial) 5 4 33 6
Loza Industrial 18 77 14
Fragmentos que no se logró precisar si son de uno u otro tipo 140

179
Tabla 14. Evidencias obtenidas en el corte 3 (monitoreo Albarrada San Rafael)
(D = decorado / N D = No decorado)

Cerámica Macro Total


Vi-
Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases Líti- Me- - por
dri
Nivel (cm) co tal rresto nivel
o
s
D ND D ND D ND D ND D ND
0 - 20
21 - 40
41 - 60 45 45
61 - 80 2
17 2 8 55 2 105
1
2
17 2 8 100 2
Total 1
150
evidencias
150

Tabla 15. Tipos cerámicos obtenidos en el corte 3 (monitoreo Albarrada de San Rafael)
(D = decorado / N D = No decorado)

Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases


Tipo
D ND D ND D ND D ND D ND
Rojo Bañado 19 12 3 58 2
Habano Inciso Fino
Habano Alisado Sencillo 2 5 2 34
Tosco Granuloso 1
Tosco Achurado
Negro a Café Bruñido 5
Rojo con Engobe Crema 2
Mayólica (Colonial)
C/gena Rojo Compacto (Colonial) 5
Loza Industrial
Fragmentos que no se logró precisar 50
si son de uno u otro tipo

Tabla 16. Evidencias obtenidas en el corte 4 (monitoreo Albarrada del Alba)


(D = decorado / N D = No decorado)

Cerámica Macro Total


Vi-
Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases Líti- Me- - por
dri
Nivel (cm) co tal rresto nivel
o
s
D ND D ND D ND D ND D ND
0 - 20
21 - 40 1 4 1 6 83 1 1
41 - 60
61 - 80
1 4 1 6 83 1 1
Total
97
evidencias 97

180
Tabla 17. Tipos cerámicos obtenidos en el corte 3 (monitoreo Albarrada del Alba)
(D = decorado / N D = No decorado)

Bordes Cuello Cuerpo Asas Bases


Tipo
D ND D ND D ND D ND D ND
Rojo Bañado 1 3 35
Habano Inciso Fino
Habano Alisado Sencillo 1 1 3 9
Tosco Granuloso 1 15
Tosco Achurado
Negro a Café Bruñido
Rojo con Engobe Crema 5
Mayólica (Colonial) 1
C/gena Rojo Compacto (Colonial) 3
Loza Industrial 1 6 1 1
Fragmentos que no se logró precisar 10
si son de uno u otro tipo

**

181
ANEXO 2

FECHAS CARBONO 14
BETA ANALYTIC

182
183
184
185
186
ANEXO 3

LISTAS ASISTENCIA
CHARLAS Y CONFERENCIAS

187
188
189
190
191
192
193
194
195
196
197
198
199
200
201
202
ANEXO 4

DOCUMENTOS DISPOSICIÓN FINAL


OBJETOS ARQUEOLÓGICOS

203
204
205
206
207
208
209
210
211
ANEXO 5

DENUNCIA EXTRAVÍO OBJETO


EXPOSICIÓN ACADEMIA DE HISTORIA

212
213
214
215
ANEXO 6

CARTOGRAFÍA

216

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