Tema 2
El Estatuto de Autonomía
de la Comunidad de Madrid:
estructura y contenido.
Las competencias de la Comunidad
de Madrid: potestad legislativa,
potestad reglamentaria
y función ejecutiva.
La Asamblea de Madrid:
composición, elección y funciones.
REFERENCIAS LEGISLATIVAS
• Constitución española de 1978.
• Ley Orgánica 3/1983, de 25 de febrero, Estatuto de Autonomía de
la Comunidad de Madrid.
• Ley 1/1983, de 13 de diciembre, del Gobierno y Administración de
la Comunidad de Madrid.
• Reglamento de la Asamblea de Madrid de 30 de enero de 1997.
Auxiliares. Comunidad de Madrid
Guion-resumen
1. El Estatuto de Autonomía: estructura y 2.5. Procedimientos de ampliación de
contenido competencias
1.1. Introducción 2.6. Convenios con otras Comunidades
1.2. El Estatuto de Autonomía: Autónomas
contenido 2.7. Competencias en materia de
1.3. Estructura del Estatuto Tratados Internacionales
2. Las competencias de la Comunidad de 3. La Asamblea Legislativa: composición,
Madrid funciones y potestades
2.1. Competencias legislativas plenas 3.1. Introducción
2.2. Competencias de desarrollo 3.2. La Asamblea Legislativa
legislativo del ordenamiento estatal
2.3. Función ejecutiva
2.4. Competencias en materia de
enseñanza
2-2
El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
1. El Estatuto de Autonomía: estructura y contenido
1.1. Introducción
Madrid ha accedido a su autonomía como Comunidad uniprovincial de régimen
general. Las alternativas que se barajaron eran las siguientes:
— Primera, y la que sin duda ha sido menos tenida en cuenta: conceder un
Estatuto especial para Madrid-Área Metropolitana, incluyendo el resto de la
provincia en las Comunidades Autónomas limítrofes.
— Segunda: incluir la provincia de Madrid en el seno de alguna de las Comuni-
dades castellanas, fundamentalmente en Castilla-La Mancha.
— Tercera: constituir Madrid en Comunidad Autónoma uniprovincial.
Han existido defensores de una u otra vía, pero lo cierto es que Madrid es una
Comunidad que organiza su autogobierno de conformidad con la Constitución española
y su Estatuto de Autonomía, cuyo territorio “es el comprendido dentro de los límites de la
provincia de Madrid” (arts. 1 y 2 del Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid,
aprobado por Ley Orgánica 3/1983, de 25 de febrero).
El proceso por el que Madrid accede a su autonomía está rodeado de características
singulares que le diferencian en gran medida del que han seguido el resto de las Comu-
nidades Autónomas. En efecto, ha carecido de un sistema provisional de autonomía,
“régimen preautonómico”, se ha constituido en Comunidad uniprovincial en virtud de la
Ley Orgánica dictada en base al art. 144.a) de la Constitución, y, extremo éste de menor
importancia, el Proyecto de Estatuto inicialmente presentado a las Cortes se tuvo por
caducado en virtud del art. 207 del Reglamento del Congreso, al ser aquéllas disueltas. El
nuevo Proyecto presentado se tramitó por el procedimiento de urgencia al fin de poder
llegar a tiempo a las elecciones para las Asambleas Legislativas de las Comunidades Autó-
nomas, celebradas en el mes de mayo de 1983.
Quizá por no haberse dado hasta muy tarde una solución definitiva a la posibilidad
de incluir Madrid en la región castellano-manchega, la provincia madrileña ha carecido
de un régimen preautonómico. Los órganos de Gobierno de la Comunidad, además, han
sustituido directamente la Diputación Provincial, pues ni siquiera se ha previsto en el
Estatuto la existencia de una Asamblea Provisional de Madrid.
El caso madrileño no es el único en el que se ha accedido directamente, sin trá-
mites intermedios, a la autonomía. La autonomía de Madrid parte de cero; no se ha
producido ningún tipo de transferencias, ni siquiera en el período transcurrido desde
la aprobación del Estatuto hasta las elecciones para la Asamblea. Por ello, era necesario
alcanzar cuanto antes el nivel de transferencias suficientes para permitir que el Estatuto
sea realmente efectivo.
Según el art. 143.1 de la Constitución, “en el ejercicio del derecho a la
autonomía reconocido en el art. 2 de la Constitución... las provincias con entidad
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Auxiliares. Comunidad de Madrid
regional histórica podrán acceder a su autogobierno y constituirse en Comunidades Autóno-
mas con arreglo a lo previsto en estel Título VIII y en los respectivos Estatutos.”
La Constitución, por tanto, autoriza, sin duda alguna, la creación de Comunidades
Autónomas uniprovinciales. Ahora bien, en este caso, el principio dispositivo que rige en
sus más amplios términos para todas aquéllas, se ve matizado por una exigencia sin la que
parece no ser posible acceder a la autonomía: la presencia de “entidad regional histórica”
de la provincia en cuestión. Por ello, se ha dicho que, “al margen de los casos muy notorios,
la Constitución ha establecido una prohibición con reserva de excepción en relación con dichas
iniciativas uniprovinciales”, pues caso de no concurrir aquel presupuesto necesario, ningu-
na provincia podrá acceder en solitario a la autonomía si no lo autorizan previamente las
Cortes Generales mediante Ley Orgánica (art. 144.1 de la Constitución).
El concepto “entidad regional histórica” ha sido objeto de críticas en base a su ambi-
güedad y, sobre todo, debido a las importantes consecuencias que derivan de su inexis-
tencia en una determinada provincia, pues impide el libre juego del principio dispositivo
territorial, al quedar condicionado a una autorización parlamentaria previa, sin la cual
aquél no tiene virtualidad alguna. Por ello, frente a quienes defienden una aplicación exi-
gente de tal requisito, conforme establece el art. 143 de la Constitución, otros consideran
que en ningún caso puede ser un obstáculo a la voluntad autonómica de un territorio,
o indican que “resulta difícil compartir como criterio básico, para reorganizar el Estado,
el histórico, dejando en un segundo plano la realidad presente”, por lo que, más que un
requisito estricto, la exigencia de entidad regional histórica constituye un concepto mera-
mente orientador.
Lo cierto es, sin embargo, que la falta de “entidad regional histórica” ha sido apre-
ciada en el caso de Madrid, y, por ello, aplicando esctritamente los arts. 143.1 y 144
de la Constitución, se ha hecho preciso acudir a la vía prevista en el apartado a) de este
último: mediante Ley Orgánica, y por motivos de interés nacional, las Cortes Generales
han autorizado la constitución de la Comunidad de Madrid como Comunidad Autónoma
uniprovincial. En realidad, en repetidas ocasiones se había afirmado que el procedimiento
del art. 144.a) era particularmente apropiado para Madrid, y, en definitiva, el principio
dispositivo fue sustituido por la decisión de las Cortes Generales, mediante la autorización
contenida en la Ley Orgánica 6/1982, de 7 de julio, cuyo art. 1 dispone: “Se autoriza
a la provincia de Madrid, por razones de interés nacional, para constituirse en Comunidad
Autónoma.” Los motivos por los que se adoptó tal decisión se recogen en el Preámbulo
de la Ley, que merece la pena transcribir:
“El 26 de junio de 1981 tuvo entrada en las Cortes Generales el acuerdo de la Excelen-
tísima Diputación Provincial de Madrid por la que se iniciaba el proceso autonómico de su
provincia. La Constitución, en su art. 144, dispone que las Cortes Generales, por motivos de
interés nacional, pueden, según el inciso a), ‘autorizar la constitución de una Comunidad
Autónoma cuando su ámbito territorial no supere el de una provincia y no reúna las condicio-
nes del apartado 1 del art. 143’ (...).
Madrid, provincia en la que se encuentra la capital de España y sede de las
instituciones democráticas del Estado y del Gobierno de la Nación, cuenta con
una población cercana al 12% del total de la nación española. Si a esto se añade
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El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
la importancia de su desarrollo urbano, la circunstancia de contar con un núcleo importantí-
simo de servicios y actividades de todo tipo y el que por su situación resulte ser un centro de
comunicaciones de primerísimo orden, se justifica plenamente que esta provincia, utilizando
los medios que la Constitución y disposiciones complementarias ponen a su alcance, pueda
constituirse en Comunidad Autónoma.
Al mismo tiempo, convergen en la autonomía de la provincia de Madrid unas peculia-
ridades propias, derivadas del hecho ya reseñado de albergar en ella la capital de la nación
española y de sus instituciones, circunstancia ésta que exigirá en el futuro el tratamiento legal
adecuado para dar respuesta al especial status que concurre en la Villa de Madrid.
Por todo ello, resulta manifiesta la existencia de los motivos de interés nacional que justi-
fican la elaboración por las Cortes Generales de una Ley Orgánica a tenor de lo establecido en
el art. 144 de la Constitución, toda vez que no se dan en la provincia de Madrid las condiciones
necesarias para su individualización como entidad regional histórica para culminar el proceso
autonómico iniciado por su Corporación Municipal.”
De esta forma, por razones de interés nacional, se daba luz verde al proceso autonó-
mico iniciado por la Diputación Provincial de Madrid. Luz verde que fue prevista en los
Acuerdos Autonómicos de 1981 suscritos por el Gobierno de la nación –entonces en manos
de UCD– y el PSOE. En ellos, al configurar el mapa autonómico, se consideraba a Madrid
como Comunidad Autónoma uniprovincial, integrada por el territorio de su provincia, y se
establecía el siguiente procedimiento para constituirla: “1°. La Diputación adoptará el acuerdo
de que la provincia de Madrid se constituya en Comunidad Autónoma uniprovincial, según lo
previsto en el art. 144.a) de la Constitución, y los partidos políticos presentes en la Diputación
formalizarán, a tal efecto, la correspondiente proposición de Ley ante las Cortes Generales. 2°. Los
municipios de la provincia solicitarán la autonomía y la elaboración del Estatuto, todo ello por la
vía del art. 143 de la Constitución. 3°. El Estatuto así elaborado se someterá a la aprobación de
las Cortes Generales mediante la correspondiente Ley Orgánica.”
En conclusión, la iniciativa del proceso autonómico, aunque partió de la Diputación
Provincial de Madrid, quiebra el principio dispositivo, puesto que han sido las Cortes
Generales quienes han autorizado la constitución de la Comunidad. A partir de ese
momento, si no antes, comenzó formalmente la elaboración del Estatuto, que fue apro-
bado por la Ley Orgánica 3/1983, de 25 de febrero, siendo publicado en el BOE el día
1 de marzo de 1983, fecha en la que entró en vigor.
1.2. El Estatuto de Autonomía: contenido
El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid fue aprobado por la Ley
Orgánica 3/1983, de 25 de febrero, y ha sido modificado en diversas ocasiones:
— La primera modificación la llevó a cabo la Ley Orgánica 2/1991, de
13 de marzo, que simplemente reformó el Estatuto para establecer
que las elecciones deberán celebrarse el cuarto domingo de mayo
de cada cuatro años.
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Auxiliares. Comunidad de Madrid
— La segunda modificación del Estatuto se llevó a cabo por la Ley Orgánica
10/1994, de 24 de marzo, de ampliación de competencias de la Comunidad de
Madrid.
— La tercera modificación ha sido llevada a cabo por la Ley Orgánica 5/1998, de
7 de julio.
Según la propia Exposición de Motivos de la Ley Orgánica 5/1998 era indis-
pensable acometer una reforma en profundidad del Estatuto que, además de
introducir mejoras técnicas en la redacción del mismo, satisfaciera dos objetivos
fundamentales:
• En primer lugar, se ha juzgado necesaria una reforma significativa del
marco institucional de la Comunidad de Madrid que afecta tanto al
Gobierno autonómico y sus mecanismos de control, como, fundamental-
mente, a la Asamblea.
• El segundo objetivo básico de la reforma es permitir la elevación del nivel
competencial de la Comunidad de Madrid.
— La última modificación tuvo lugar por Ley 29/2010, de 16 de julio, de régimen
de cesión de tributos del Estado a la Comunidad de Madrid y de fijación del
alcance y condiciones de dicha cesión. En concreto reformó el apartado 1 de la
disposición adicional primera. (La modificación de esta disposición no supone
reforma del Estatuto).
El párrafo 2.° del art. 147 de la Constitución establece cuál debe ser el contenido
mínimo de los Estatutos de las Comunidades Autónomas llamadas de régimen general.
El Estatuto de la Comunidad de Madrid recoge todas las previsiones a que se refiere
el citado precepto.
En efecto, contiene:
a) La denominación de la Comunidad.
b) La delimitación de su territorio.
c) La denominación, organización y sede de las instituciones autónomas propias.
d) Las competencias asumidas dentro del marco establecido en la Constitución y
las bases para el traspaso de los servicios correspondientes a las mismas.
Junto a estas determinaciones mínimas exigibles en todos los Estatutos, a las que hay
que añadir lo relativo a su reforma –art. 147.3–, hay otra serie de materias no impues-
tas por la Constitución, pero que pueden incluirse en los mismos. El Estatuto se ocupa,
al igual que el resto de los aprobados y haciendo gala de la calificación de
norma institucional básica de la Comunidad, de todo cuanto de forma
sustancial afecta a Madrid, excediendo, en el marco de la Constitución, las
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El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
determinaciones contenidas en el art. 147.2 de la misma. Tan sólo hay una importante
remisión a una futura ley: la regulación de las relaciones entre las instituciones estatales,
municipales y autonómicas en el ejercicio de sus respectivas competencias.
1.3. Estructura del Estatuto
La estructura del Estatuto es la siguiente:
a) Título Preliminar (arts. 1 a 7):
— El art. 1 señala que Madrid es una Comunidad Autónoma que organiza su
autogobierno de conformidad con la Constitución española y el presente
Estatuto, que es su norma institucional básica; su denominación es la de
Comunidad de Madrid.
— El art. 2 declara que el territorio de la Comunidad es el comprendido den-
tro de los límites de la provincia de Madrid.
— El art. 3 dispone que la Comunidad de Madrid se organiza territorialmente
en municipios.
— El art. 4 hace referencia a la bandera, el escudo, el himno y la fiesta de la
Comunidad de Madrid.
— El art. 5 establece que la capital de la Comunidad es la villa de Madrid.
— El art. 6 aclara que la villa de Madrid, por su condición de capital del
Estado y desde las Instituciones generales, tendrá un régimen especial,
regulado por ley votada en Cortes.
— El art. 7 dispone que son ciudadanos de la Comunidad de Madrid los espa-
ñoles que tengan vecindad administrativa en cualquiera de sus municipios.
b) Título Primero: “De la Organización Institucional de la Comunidad de
Madrid” (arts. 8 a 25):
— El art. 8, como artículo introductorio, dispone que los poderes de la
Comunidad de Madrid se ejercen a través de sus instituciones de autogo-
bierno: la Asamblea, el Gobierno y el Presidente de la Comunidad.
— Capítulo Primero: “De la Asamblea de Madrid” (arts. 9 a 16).
La Asamblea:
• Representa al pueblo de Madrid.
• Ejerce la potestad legislativa de la Comunidad.
• Aprueba y controla el Presupuesto de la Comunidad.
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Auxiliares. Comunidad de Madrid
• Impulsa, orienta y controla la acción del Gobierno.
• Y ejerce las demás competencias que le atribuyen la Constitución, el
presente Estatuto y el resto del ordenamiento jurídico.
— Capítulo Segundo: “Del Presidente” (arts. 17 a 21).
El Presidente de la Comunidad de Madrid:
• Ostenta la suprema representación de la Comunidad y la ordinaria
del Estado en la misma.
• Preside y dirige la actividad del Gobierno.
• Designa y separa a los Vicepresidentes y a los Consejeros.
• Y coordina la Administración.
— Capítulo Tercero: “Del Gobierno” (arts. 22 a 25). El Gobierno de la
Comunidad de Madrid es el órgano colegiado que dirige la política de
la Comunidad de Madrid, correspondiéndole las funciones ejecutivas y
administrativas, así como el ejercicio de la potestad reglamentaria en mate-
rias no reservadas en este Estatuto a la Asamblea.
c) Título Segundo: “De las Competencias de la Comunidad” (arts. 26 a 33).
d) Título Tercero: “Del Régimen Jurídico” (arts. 34 a 44):
— Capítulo Primero: “Disposiciones Generales” (arts. 34 a 36): en el que,
por ejemplo, se señala que la Comunidad de Madrid, como ente de Dere-
cho Público, tiene personalidad jurídica y plena capacidad de obrar.
— Capítulo Segundo: “De la Administración” (arts. 37 a 41): corresponde a
la Comunidad de Madrid, la creación y estructuración de su propia Admi-
nistración Pública.
— Capítulo Tercero: “Del control de la Comunidad de Madrid” (art. 42 a
44), en el que se afirma que las Leyes de la Asamblea están sujetas úni-
camente al control de constitucionalidad del Tribunal Constitucional y se
prevé, tras la Ley Orgánica 5/1998, que el control económico y presupues-
tario de la Comunidad de Madrid se ejerza por la Cámara de Cuentas, sin
perjuicio del que corresponda al Tribunal de Cuentas.
e) Título Cuarto: “De la Organización Judicial” (arts. 45 a 50), el Tribunal
Superior de Justicia es el órgano jurisdiccional ante el que se agotarán las suce-
sivas instancias procesales, sin perjuicio de la jurisdicción que corresponde al
Tribunal Supremo.
f) Título Quinto: “Economía y Hacienda” (arts. 51 a 63), la
Comunidad de Madrid goza de autonomía financiera y es titular
de bienes de dominio público y patrimonio y hacienda propios.
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El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
g) Título Sexto. “De la Reforma del Estatuto” (art. 64):
La iniciativa corresponderá al Gobierno o a la Asamblea de Madrid, a propuesta
de una tercera parte de sus miembros, o de dos tercios de los municipios de la
Comunidad cuya población represente la mayoría absoluta de la Comunidad de
Madrid.
La propuesta de reforma requerirá, en todo caso, la aprobación de la Asamblea
por mayoría de dos tercios y la aprobación de las Cortes Generales mediante
Ley Orgánica.
Si la propuesta de reforma no es aprobada por la Asamblea o por las Cortes
Generales, no podrá ser sometida nuevamente a debate y votación de la Asam-
blea hasta que haya transcurrido un año.
h) Dos Disposiciones Adicionales, la primera hace referencia a los tributos que
se ceden a la Comunidad y la segunda dispone que la celebración de elecciones
atenderá a lo que dispongan las Cortes Generales, con el fin exclusivo de coor-
dinar el calendario de las diversas consultas electorales.
i) Siete Disposiciones Transitorias, referentes al traspaso de servicios, bienes,
funcionarios, etc., a la Comunidad.
j) Una Disposición Final, determinando la entrada en vigor el mismo día de su
publicación en el BOE (la publicación tuvo lugar el día 1 de marzo de 1983).
2. Las competencias de la Comunidad de Madrid
La Comunidad de Madrid, al haber accedido a la autonomía por la vía establecida
en el art. 143 CE, sólo podía, en principio, asumir competencias en el marco del art. 148
CE, tal y como efectivamente sucedió.
No obstante, transcurrido el plazo de cinco años establecido en el propio art. 148.2
y en el antiguo art. 25.1.d) del Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid, era
posible ampliar su marco competencial en el ámbito del art. 149 CE. Esta ampliación de
competencias fue objeto de consenso entre las diversas fuerzas políticas que se reflejó en
los Acuerdos Autonómicos de 28 de febrero de 1992. Para dar efecto a estos Acuerdos se
elaboró la Ley Orgánica 9/1992, de 23 de diciembre, de Transferencia de Competencias
a las CCAA que accedieron a la autonomía por la vía del art. 143 CE. La Comunidad de
Madrid incorpora el contenido de esta Ley a su Estatuto, tal y como la misma preveía,
llevando a cabo una reforma del mismo que sería aprobada por la Ley Orgánica 10/1994,
de 24 de marzo, que daría lugar a un nuevo sistema competencial de la Comunidad.
Ahora bien, como ya se ha indicado, la Ley Orgánica 5/1998, de 7 de julio, señala
como uno de sus objetivos la elevación del nivel competencial de la Comu-
nidad de Madrid. En este sentido, la citada Ley Orgánica ha llevado a cabo
una profunda reforma del Título Segundo del Estatuto, que ha quedado
configurado de la siguiente forma.
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Auxiliares. Comunidad de Madrid
Los artículos 33 y 34 del Estatuto establecen que:
“El Derecho propio de la Comunidad de Madrid, constituido por las leyes y normas regu-
ladoras de las materias de competencia plena de la Comunidad Autónoma, es aplicable con
preferencia a cualquier otro en el territorio de Madrid. En todo caso, el Derecho estatal tiene
carácter supletorio del Derecho propio de Madrid”.
“Las competencias de la Comunidad de Madrid se entienden referidas a su territorio.
En las materias de su competencia, le corresponde a la Asamblea de Madrid la potetad
legislativa en los términos previstos en el Estatuto, correspondiéndole al Consejo de Gobierno
la potestad reglamentaria y la función ejecutiva.
Las competencias de ejecución de la Comunidad de Madrid llevan implícita la correspon-
diente potestad reglamentaria para la organización interna de los servicios, la administración
y, en su caso, la inspección.”
2.1. Competencias legislativas plenas
Artículo 26:
La Comunidad de Madrid, en los términos establecidos en el presente Estatuto, tiene
competencia exclusiva en las siguientes materias:
— Organización, régimen y funcionamiento de sus instituciones de autogobierno.
— Creación o supresión de municipios, alteración de los términos municipales
comprendidos en su territorio y creación de circunscripciones territoriales pro-
pias, en los términos previstos en el artículo 3 del presente Estatuto.
— Procedimiento administrativo derivado de las especialidades de la organización
propia.
— Ordenación del territorio, urbanismo y vivienda.
— Obras públicas de interés de la Comunidad, dentro de su propio territorio.
— Ferrocarriles, carreteras y caminos cuyo itinerario discurra íntegramente en el
territorio de la Comunidad de Madrid y, en los mismos términos, el transporte
terrestre y por cable. Centros de contratación y terminales de carga en materia
de transportes terrestres en el ámbito de la Comunidad.
— Instalaciones de navegación y deporte en aguas continentales, aeropuertos y
helipuertos deportivos, así como los que no desarrollen actividades comerciales.
— Proyectos, construcción y explotación de los aprovechamientos
hidráulicos, canales y regadíos de interés de la Comunidad. Aguas
nacientes, superficiales, subterráneas, minerales y termales, cuando
discurran íntegramente por el ámbito territorial de la Comunidad
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El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
de Madrid. Ordenación y concesión de recursos y aprovechamientos hidráuli-
cos, canales y regadíos cuando las aguas discurran íntegramente por el ámbito
territorial de la Comunidad de Madrid.
— Pesca fluvial y lacustre, acuicultura y caza.
— Tratamiento singular de las zonas de montaña.
— Instalación de producción, distribución y transporte de cualesquiera energías,
cuando el transporte no salga de su territorio y su aprovechamiento no afecte a
otra Comunidad. Todo ello sin perjuicio de lo establecido en los números 22.ª
y 25.ª del apartado 1 del artículo 149 de la Constitución.
— Publicidad, sin perjuicio de las normas dictadas por el Estado para sectores y
medios específicos, de acuerdo con las materias 1.ª, 6.ª y 8.ª del apartado 1 del
artículo 149 de la Constitución.
— Ferias y mercados interiores, incluidas las exposiciones.
Establecimiento de bolsas de valores y establecimiento y regulación de centros
de contratación de mercancías, conforme a la legislación mercantil.
— Cooperativas y entidades asimilables, mutualidades no integradas en la Seguri-
dad Social, conforme a la legislación mercantil.
— Artesanía.
— Denominaciones de origen, en colaboración con el Estado.
— Fomento del desarrollo económico de la Comunidad de Madrid, dentro de los
objetivos marcados por la política económica nacional.
— Archivos, bibliotecas, museos, hemerotecas, conservatorios de música y danza,
centros dramáticos y de bellas artes, y demás centros de depósito cultural o colec-
ciones de análoga naturaleza, de interés para la Comunidad de Madrid, que no
sean de titularidad estatal.
— Patrimonio histórico, artístico, monumental, arqueológico, arquitectónico y
científico de interés para la Comunidad, sin perjuicio de la competencia del
Estado para la defensa de los mismos contra la exportación y la expoliación.
— Fomento de la cultura y la investigación científica y técnica.
— Promoción y ordenación del turismo en su ámbito territorial.
— Deporte y ocio.
— Promoción y ayuda a la tercera edad, emigrantes, minusválidos y
demás grupos sociales necesitados de especial atención, incluida la
creación de centros de protección, reinserción y rehabilitación.
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Auxiliares. Comunidad de Madrid
— Protección y tutela de menores y desarrollo de políticas de promoción integral
de la juventud.
— Promoción de la igualdad con respecto a la mujer que garantice su participación
libre y eficaz en el desarrollo político, social, económico y cultural.
— Fundaciones que desarrollen principalmente sus funciones en la Comunidad de
Madrid.
— Vigilancia y protección de sus edificios e instalaciones.
— Coordinación y demás facultades en relación con las políticas locales, en los
términos que establezca la Ley Orgánica.
— Casinos, juegos y apuestas con exclusión de las apuestas mutuas
deportivo-benéficas.
— Espectáculos públicos.
— Estadística para fines no estatales.
— Servicio meteorológico de la Comunidad de Madrid.
En el ejercicio de estas competencias corresponderá a la Comunidad de Madrid la
potestad legislativa, la reglamentaria y la función ejecutiva que se ejercerán respetando,
en todo caso, lo dispuesto en la Constitución española.
De acuerdo con las bases y la ordenación de la actividad económica general y la polí-
tica monetaria del Estado, corresponde a la Comunidad de Madrid, en los términos de lo
dispuesto en los artículos 38, 131 y en las materias 11.ª y 13.ª del apartado 1 del artículo
149 de la Constitución, la competencia exclusiva en las siguientes materias:
— Ordenación y planificación de la actividad económica regional.
— Comercio interior, sin perjuicio de la política general de precios, de la libre cir-
culación de bienes en el territorio de Estado y de la legislación sobre defensa de
la competencia.
— Industria, sin perjuicio de lo que determinen las normas del Estado por razones de
seguridad, sanitarias o de interés militar y las normas relacionados con la indus-
trias que estén sujetas a la legislación de minas, hidrocarburos y energía nuclear.
— Agricultura, ganadería e industrias agroalimentarias.
— Instituciones de crédito corporativo público y territorial. Cajas de Ahorro.
— Sector público económico de Madrid, en cuanto no esté contemplado por otros
preceptos de este Estatuto.
La Comunidad de Madrid participará, asimismo, en la gestión del sector
público económico estatal, en los casos y actividades que procedan.
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El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
2.2. Competencias de desarrollo legislativo del ordenamiento estatal
Artículo 27:
En el marco de la legislación básica del Estado y, en su caso, en los términos que
la misma establezca, corresponde a la Comunidad de Madrid el desarrollo legislativo, la
potestad reglamentaria y la ejecución de las siguientes materias:
— Régimen local.
— Régimen jurídico y sistema de responsabilidad de la Administración Pública de
la Comunidad de Madrid y los entes públicos dependientes de ella, así como el
régimen estatutario de sus funcionarios. Contratos y concesiones administrati-
vas, en el ámbito de competencias de la Comunidad de Madrid.
— Régimen de los montes y aprovechamientos forestales, con especial referencia
a los montes vecinales en mano común, montes comunales, vías pecuarias y
pastos.
— Sanidad e higiene.
— Coordinación hospitalaria en general, incluida la de la Seguridad Social.
— Corporaciones de Derecho público representativas de intereses económicos y
profesionales. Ejercicio de las profesiones tituladas.
— Protección del medio ambiente, sin perjuicio de la facultad de la Comunidad de
Madrid de establecer normas adicionales de protección. Contaminación biótica
y abiótica. Vertidos en el ámbito territorial de la Comunidad.
— Régimen minero y energético.
— Protección de los ecosistemas en los que se desarrollen la pesca, acuicultura y
caza. Espacios naturales protegidos.
— Defensa del consumidor y del usuario, de acuerdo con las bases y la ordenación de la
actividad económica general y la política monetaria del Estado, las bases y coordina-
ción general de la sanidad, en los términos de lo dispuesto en los artículos 38, 131 y
en los números 11.ª, 13.ª y 16.ª del apartado 1 del artículo 149 de la Constitución.
— Prensa, radio, televisión y otros medios de comunicación social. La Comunidad
de Madrid podrá regular, crear y mantener su propia televisión, radio, prensa y,
en general, todos los medios de comunicación social para el cumplimiento de
sus fines.
— Ordenación farmacéutica y establecimientos farmacéuticos, sin perjuicio de lo
dispuesto en la materia 16.ª del apartado 1 de artículo 149 de la Constitución.
— Bienes de dominio público y patrimoniales cuya titularidad corres-
ponda a la Comunidad, así como las servidumbres públicas en
materia de sus competencias.
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Auxiliares. Comunidad de Madrid
2.3. Función ejecutiva
Artículo 28:
Corresponde a la Comunidad de Madrid la ejecución de la legislación del Estado en
las siguientes materias:
— Gestión de la asistencia sanitaria de la Seguridad Social, de acuerdo con lo
previsto en la materia 17.ª del apartado 1 del artículo 149 de la Constitución,
reservándose el Estado la alta inspección conducente al cumplimiento de la
función a que se refiere este precepto.
— Gestión de las prestaciones y servicios sociales del sistema de Seguridad Social:
IMSERSO. La determinación de las prestaciones del sistema, los requisitos para
establecer la condición de beneficiario y la financiación se efectuarán de acuer-
do con las normas establecidas por el Estado en el ejercicio de sus competencias
de conformidad con lo dispuesto en la materia 17.ª del apartado 1 del artículo
149 de la Constitución.
— Crédito, banca y seguros, de acuerdo con la previsiones de las reglas 6.ª, 11.ª y
13.ª del apartado 1 del artículo 149 de la Constitución.
— Asociaciones.
— Ferias internacionales que se celebren el la Comunidad de Madrid.
— Museos, archivos, bibliotecas y otras colecciones de naturaleza análoga de titu-
laridad estatal cuya gestión directa no se reserve al Estado. Los términos de la
gestión serán fijados mediante convenios.
— Aeropuertos y helipuertos con calificación de interés general cuya gestión direc-
ta no se reserve al Estado.
— Pesas y medidas. Contraste de metales.
— Reestructuración e implantación de sectores industriales, conforme a los planes
establecidos por la Administración General del Estado.
— Productos farmacéuticos.
— Propiedad intelectual e industrial.
— Laboral. De conformidad con la materia 7.ª del apartado 1 del artículo 149 de
la Constitución, corresponde al Estado la competencia sobre legislación laboral
y la alta inspección. Quedan reservadas al Estado todas las competencias en
materia de migraciones interiores y exteriores, fondos de ámbito nacional y de
empleo, sin perjuicio de lo que establezcan las normas del Estado en la materia.
— Transporte de mercancías y viajeros que tengan su origen y destino
en el territorio de la Comunidad de Madrid, sin perjuicio de la
ejecución directa que se reserva el Estado.
2-14
El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
En el ejercicio de estas competencias corresponderá a la Comunidad de Madrid la
administración, ejecución y, en su caso, inspección, así como la facultad de dictar reglamen-
tos internos de organización de los servicios correspondientes, de conformidad con las nor-
mas reglamentarias de carácter general que, en desarrollo de su legislación, dicte el Estado.
2.4. Competencias en materia de enseñanza
Artículo 29:
En relación con la enseñanza, la Comunidad de Madrid asumirá las competencias
y funciones que le correspondan en el marco de la legislación general o, en su caso, de
las delegaciones que pudieran producirse, fomentando en ambos casos, en su ámbito, la
investigación y cuantas actividades favorezcan el bienestar social y el acceso a la cultura
de los habitantes de Madrid.
Finalmente, “corresponde a la Comunidad Autónoma las competencias de desarrollo
legislativo y ejecución de la enseñanza en toda su extensión, niveles y grados, modalidades y
especialidades, de acuerdo con lo dispuesto en el art. 27 de la Constitución (...), y sin perjuicio
de las facultades que atribuye al Estado, el número 30 del apartado 1 del art. 149 y de la alta
inspección para su cumplimiento y garantía.”
2.5. Procedimientos de ampliación de competencias
Artículo 30:
La Comunidad de Madrid podrá asumir competencias sobre materias no previstas en
el presente Estatuto mediante la reforma del mismo o por decisión de las Cortes Genera-
les, adoptada a través de los procedimientos previstos en la Constitución.
La Comunidad de Madrid, mediante acuerdo de la Asamblea, podrá solicitar a las Cor-
tes Generales la aprobación de leyes marco o leyes de transferencia o delegación, que atri-
buyan, transfieran o deleguen facultades a las Comunidades Autónomas y, específicamente,
a la de Madrid.
2.6. Convenios con otras Comunidades Autónomas
Artículo 31:
La Comunidad de Madrid podrá celebrar convenios de cooperación con otras Comu-
nidades Autónomas, en especial con las limítrofes, para la gestión y prestación de servicios
propios de la competencia de las mismas. La celebración de los citados convenios, antes
de su entrada en vigor, deberá ser comunicada a las Cortes Generales. Si las Cortes Gene-
rales o alguna de las Cámaras manifestaran reparos en el plazo de treinta días, a partir
de la recepción de la comunicación, el Convenio deberá seguir el trámite
previsto en el apartado siguiente. Si transcurrido dicho plazo no se hubiesen
manifestado reparos al Convenio, entrará en vigor.
2-15
Auxiliares. Comunidad de Madrid
La Comunidad de Madrid podrá establecer acuerdos de cooperación con otras
Comunidades Autónomas, previa autorización de las Cortes Generales.
La Comunidad Autónoma de Madrid, por su tradicional vinculación, mantendrá
relaciones de especial colaboración con las Comunidades castellanas, para lo cual podrá
promover la aprobación de los correspondientes acuerdos y convenios.
2.7. Competencias en materia de Tratados Internacionales
Artículo 32:
La Comunidad de Madrid podrá solicitar del Gobierno de la Nación la celebración
de tratados o convenios internacionales en materias de interés para Madrid.
La Comunidad de Madrid será informada de la elaboración de los tratados y con-
venios internacionales y en las negociaciones de adhesión a los mismos, así como en los
proyectos de legislación aduanera, en cuanto afecten a materias de su específico interés.
Recibida la información, el Gobierno de la Comunidad emitirá, en su caso, su parecer.
La Comunidad de Madrid adoptará las medidas necesarias para la ejecución, dentro
de su territorio, de los tratados y convenios internacionales y de los actos normativos de
las organizaciones internacionales, en lo que afecten a las materias propias de competen-
cia de la Comunidad de Madrid.
3. La Asamblea Legislativa: composición, funciones y
potestades
3.1. Introducción
En la configuración institucional de las CCAA, el art. 152.1 CE sitúa en lugar cen-
tral al Parlamento mediante dos grandes notas: la considera como el máximo órgano
representativo de la CA al señalar que será elegido por sufragio universal y le atribuye las
funciones fundamentales de todo el conjunto institucional: aprobar las leyes y elegir al
Presidente de la CA y del Gobierno.
Los Estatutos de Autonomía han explicitado y desarrollado tales notas, por una parte
afirmando expresamente la relación pueblo-Parlamento que implican las elecciones y
afirmando su carácter inviolable; por otra parte, detallando las competencias de los Par-
lamentos a partir de las funciones básicas.
Efectivamente, la fuerza del Parlamento en la democracia proviene de ser la única
institución elegida directamente por todo el pueblo, y constituir por ello su representa-
ción principal. El Gobierno, por mayoritario que sea, constituye el reflejo de una parte del
electorado; sólo el Parlamento permite el contraste entre todas las fuerzas
políticas y actúa con procedimientos que ponen de relieve el pluralismo de
la sociedad. Esto es tan válido para las instituciones centrales como para las
autonómicas.
2-16
El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
El carácter de la relación Parlamento-pueblo en las CCAA resulta equivalente al que
la Constitución establece para las Cortes respecto al conjunto del pueblo español en el
art. 66.1 CE. Eso significa que la Constitución misma parte de un concepto complejo de
pueblo español, por una parte como conjunto y como tal titular de la soberanía política,
y por otra parte como suma de unidades diversas y diferenciadas en las distintas naciona-
lidades y regiones que integran España.
Esta segunda dimensión fundamenta no sólo la posición de las instituciones auto-
nómicas, en primer lugar del Parlamento, sino también las funciones de las mismas en
el Estado como conjunto. Conviene tener presente que la soberanía no corresponde al
Estado, sino al pueblo, que la ejerce tanto de forma conjunta como diversificada, a tra-
vés de las respectivas instituciones configuradas por la Constitución, las centrales y las
autonómicas.
La representación del pueblo de cada nacionalidad o región por el Parlamento res-
pectivo exige el carácter global de la relación y hace imposible el mandato imperativo,
aunque la prohibición de éste en los Estatutos, como en la Constitución respecto a las
Cortes, tenga actualmente una funcionalidad distinta a la original y sirva principalmente
para conceder a los parlamentarios una garantía frente a las decisiones de los partidos
políticos por los que fueron elegidos.
La denominación de las Asambleas Legislativas o Parlamentos varía en cada Comu-
nidad Autónoma, respondiendo a veces a la tradición:
— Parlamento: País Vasco, Cataluña, Galicia, Andalucía, Canarias, Baleares.
— Cortes: Valencia, Aragón, Castilla-La Mancha, Navarra, Castilla y León.
— Asamblea: Cantabria, Murcia, Extremadura, Madrid.
— Diputación General: La Rioja, o
— Junta General: Asturias.
La duración ordinaria de las Legislaturas es de cuatro años.
3.2. La Asamblea Legislativa
Viene regulada en el Capítulo Primero del Título I del Estatuto de Autonomía, bajo
el epígrafe: “De la Asamblea de Madrid”. El Reglamento de la Asamblea de Madrid fue
aprobado por el Pleno en su sesión de 30 de enero de 1997, derogando el anterior de 18
de enero de 1984.
2-17
Auxiliares. Comunidad de Madrid
LA ASAMBLEA LEGISLATIVA
REGLAMENTO Aprobado por el Pleno de 30 de enero de 1997
Ordinarias
FUNCIONAMIENTO Sesiones
Extraordinarias
Presidente
– Presidente
Mesa – 3 Vicepresidentes
– x3 Secretarios
a) Administrativos
Diputación Permanente
ÓRGANOS
Pleno
– Permanentes
Comisiones
– No Permanentes
Grupos Parlamentarios
b) Políticos
Junta de Portavoces
– Diputados
– Grupos Parlamentarios
POTESTAD LEGISLATIVA Iniciativa legislativa – Gobierno
– Pueblo
– Ayuntamientos
3.2.1. La Asamblea de Madrid: concepto
La Asamblea representa al pueblo de Madrid, ejerce la potestad legislativa de la
Comunidad, aprueba y controla el Presupuesto de la Comunidad, impulsa, orienta y
controla la acción del Gobierno y ejerce las demás competencias que le atribuyen la
Constitución, su Estatuto y el resto del ordenamiento jurídico.
Según el Reglamento de la Asamblea: “la Asamblea se constituye en Cámara Única y
es inviolable”.
3.2.2. Constitución
La sesión constitutiva tendrá lugar dentro de los veinticinco días siguientes a la pro-
clamación de los resultados (art. 10.7 EA).
Según los arts. 9 y siguientes del Reglamento de la Asamblea:
— Celebradas elecciones a la Asamblea, ésta se reunirá en sesión constitutiva el día y
hora fijados en el Decreto de convocatoria. En su defecto, la Asam-
blea se constituirá a las doce horas del vigésimo quinto día siguiente
a la proclamación de los resultados electorales si fuera hábil o, en
caso contrario, a las doce horas del inmediato día hábil anterior.
2-18
El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
— La sesión constitutiva de la Asamblea será presidida inicialmente por el Dipu-
tado electo de mayor edad de los presentes, asistido, en calidad de Secretarios,
por los dos más jóvenes.
— El Presidente abrirá la sesión y, por los Secretarios, se dará lectura al Decreto
de convocatoria, a la relación de Diputados electos y, en su caso, a los recursos
contencioso-electorales interpuestos, con indicación de los Diputados electos
que pudieran quedar afectados por la resolución de los mismos.
— Se procederá seguidamente, a la elección de la Mesa, el Presidente será aquel
Diputado que en primera votación obtenga mayoría absoluta. Si no la obtu-
viera, se repetirá la eleción entre los dos Diputados que más votos hubieran
obtenido, resultando elegido el que más votos obtenga en la nueva votación.
Serán Vicepresidentes y Secretarios los que sean elegidos por mayoría simple.
— Concluidas las votaciones, los elegidos ocuparán sus puestos.
— A continuación, el Presidente prestará y solicitará de los restantes miembros de
la Mesa y de los demás Diputados electos promesa o juramento de acatamiento
de la Constitución y del Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid, a
cuyo efecto se procederá al llamamiento de los restantes miembros de la Mesa,
por orden de precedencia, y de los demás Diputados, por orden alfabético.
— Cumplidos los anteriores trámites, el Presidente declarará constituida la Asam-
blea y, acto seguido, levantará la sesión.
— La constitución de la Asamblea será notificada por el Presidente al Rey, al Sena-
do, al Gobierno de la Nación y al Presidente de la Comunidad de Madrid.
3.2.3. Composición
La Asamblea estará compuesta por un Diputado por cada 50.000 habitantes o fracción
superior a 25.000, de acuerdo con los datos actualizados del censo de población. El man-
dato de los Diputados termina cuatro años después de su elección o el día de la disolución
de la Cámara en los supuestos previstos en el Estatuto.
Los Diputados no estarán ligados por mandato imperativo alguno.
Serán electores y elegibles todos los madrileños mayores de dieciocho años de edad
que estén en pleno goce de sus derechos políticos. La Comunidad Autónoma facilitará el
ejercicio del derecho al voto a los madrileños que se encuentren fuera de la Comunidad
de Madrid.
3.2.4. Circunscripción electoral y elecciones
Una ley de la Asamblea regulará las elecciones, que serán convocadas
por el Presidente de la Comunidad, de conformidad con lo dispuesto en el
Estatuto. La circunscripción electoral es la provincia.
2-19
Auxiliares. Comunidad de Madrid
Para la distribución de escaños sólo serán tenidas en cuenta las listas que hubieran
obtenido, al menos el 5% de los sufragios válidamente emitidos.
Las elecciones tendrán lugar el cuarto domingo de mayo de cada cuatro años, en los
términos previstos en la Ley Orgánica que regula el Régimen Electoral General.
Es importante destacar la Ley 11/1986, de 16 de diciembre, Electoral de la Comuni-
dad de Madrid, modificada por la Ley 5/1995, de 28 de marzo, la Ley 12/2003, de 26 de
agosto y la Ley 4/2006, de 22 de diciembre, que dispone lo siguiente:
1. La convocatoria de elecciones se realiza por Decreto del Presidente de la Comu-
nidad, que se expedirá en la forma requerida para dar cumplimiento a lo dis-
puesto en el Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid y en la Ley
Orgánica del Régimen Electoral General, el día quincuagésimo quinto anterior
a la fecha de la celebración de las elecciones.
2. El Decreto de convocatoria, que será publicado al día siguiente de su expedi-
ción en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid, fecha en la que entrará
en vigor, señalará la fecha de las elecciones, que habrán de celebrarse el cuarto
domingo de mayo del año que corresponda, o el día quincuagésimo cuarto
posterior a la convocatoria en el supuesto de disolución anticipada.
3. Cuando se produzca el supuesto previsto en el art. 18.5 del Estatuto de Autono-
mía, el Presidente de la Asamblea lo comunicará al Presidente de la Comunidad
al día siguiente del vencimiento del plazo que aquel precepto señala. El Decreto
de Convocatoria de elecciones deberá ser expedido ese mismo día y se publicará
en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid al día siguiente hábil, fecha
en la que entrará en vigor; el Decreto de convocatoria señalará la fecha de las
elecciones, que se celebrarán el primer domingo siguiente al quincuagésimo
cuarto día posterior a la convocatoria. En todo lo demás, será de aplicación lo
previsto en este artículo.
4. Se entiende por campaña electoral, a efectos de esta Ley, el conjunto de acti-
vidades lícitas organizadas o desarrolladas por los candidatos, partidos, federa-
ciones, coaliciones o agrupaciones de electores en orden a la captación libre de
votos.
La campaña electoral comienza el día trigésimo octavo posterior a la convocato-
ria, dura quince días y termina a las cero horas del día inmediatamente anterior
a la votación.
Durante el desarrollo de la campaña electoral, el Consejo de Gobierno podrá
realizar campaña institucional orientada exclusivamente a fomentar la participa-
ción de los electores en la votación sin influir en la orientación de ésta.
3.2.5. Diputados: prerrogativas e incompatibilidades
— La adquisición de la condición plena de Diputado, requerirá, en
todos caso, la prestación de la promesa o juramento de acatamiento
2-20
El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
de la Constitución y el Estatuto de Autonomía (art. 10 EA); el Reglamento de la
Asamblea exige así mismo, la presentación en la Secretaría General de la creden-
cial y cumplimentar la declaración de actividades.
— La Mesa declarará formalmente la adquisición de la plena condición de
Diputado.
— Los derechos, prerrogativas y deberes serán efectivos desde el momento de su
proclamación como Diputado electo.
— Los Diputados tendrán el tratamiento de Ilustrísima y en los actos parlamen-
tarios usarán el tratamiento de Señoría. El Presidente tendrá el tratamiento de
Excelencia. Una Ley de la Asamblea regulará las causas de incompatibilidad e
inelegibilidad para las elecciones de la misma.
— Los Diputados gozarán, aún después de haber cesado en su mandato, de invio-
labilidad, por las opiniones manifestadas en el ejercicio de sus funciones.
— Durante su mandato no podrán ser detenidos ni retenidos por actos delicti-
vos cometidos en el territorio de la Comunidad de Madrid, sino en el caso de
flagrante delito, correspondiendo decidir, en todo caso, sobre su inculpación,
prisión, procesamiento y juicio al Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
— Fuera de dicho territorio la responsabilidad penal será exigible en los mismos
términos, ante la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo. Los Diputados per-
cibirán una asignación económica suficiente, que les permita cumplir eficaz
y dignamente su función. La Mesa fijará cada año la cuantía de la asignación
económica de los Diputados y sus modalidades garantizando en todo caso su
adecuada relación con la responsabilidad y dedicación de los Diputados.
— Según la Ley Orgánica 12/1991, de 10 de julio, que modifica la Ley de Enjuicia-
miento Criminal, los Presidentes de las Asambleas Legislativas de las Comuni-
dades Autónomas podrán prestar declaración en su despacho oficial, sin acudir
al llamamiento del Juez.
— Los Diputados no estarán ligados por mandato imperativo.
3.2.6. Funcionamiento
a) La Asamblea elige entre sus miembros al Presidente, la Mesa y la Diputación
Permanente.
El Presidente es elegido por mayoría absoluta de los miembros de la Cámara.
Si no obtuviera en primera votación dicha mayoría, se repetirá la elección entre
los que hayan alcanzado las dos mayores votaciones y resultará elegido el que
obtenga más votos.
La Mesa es el órgano rector de la Cámara y ostenta la represen-
tación colegiada de ésta. Está compuesta por el Presidente de la
2-21
Auxiliares. Comunidad de Madrid
Asamblea, tres Vicepresidentes y tres Secretarios. El Presidente dirige y coordina
la acción de la Mesa.
La Diputación Permanente estará compuesta por el Presidente, por los restan-
tes miembros de la Mesa y por el número de Diputados que, con un mínimo
de 20, establezca la Mesa, oída la Junta de Portavoces.
La Mesa, oída la Junta de Portavoces, establecerá asimismo el número de miem-
bros de la Diputación Permanente que corresponderá a cada Grupo Parlamen-
tario, en proporción a su importancia numérica en la Asamblea, garantizándose
en todo caso el derecho de todos los Grupos Parlamentarios a contar cuando
menos con un representante.
Los miembros de la Diputación Permanente serán designados por el Pleno, a
propuesta de los Grupos Parlamentarios, de acuerdo con lo previsto en el apar-
tado anterior.
b) La Asamblea se dota de su propio Reglamento, cuya aprobación y reforma serán
sometidas a una votación final sobre su totalidad, que requerirá el voto afirma-
tivo de la mayoría absoluta de los Diputados (aprobado, como hemos dicho, el
30 de enero de 1997).
c) Los Diputados de la Asamblea se constituirán en Grupos Parlamentarios, cuyos
Portavoces integrarán la Junta de Portavoces, que se reunirá bajo la presidencia
del Presidente de la Asamblea (art. 13.2 EA).
Los Diputados en número no inferior a 5 podrán constituirse en Grupo Parla-
mentario. La Constitución de los Grupos Parlamentarios se hará dentro de los
cinco días siguientes a la sesión constitutiva de la Asamblea, mediante escrito
dirigido a la Mesa firmado por todos los Diputados que deseen constituir el
Grupo.
En ningún caso podrán constituir Grupo Parlamentario separado Diputados
que pertenezcan a una misma formación política o que hubieran concurrido a
las elecciones autonómicas en una misma candidatura.
d) La Asamblea funcionará en Pleno y Comisión. El Pleno es el órgano supremo de
la Asamblea, será convocado por el Presidente, a iniciativa propia, o a petición,
al menos, de un Grupo Parlamentario o de la quinta parte de los Diputados.
La Asamblea se constituirá en Comisiones Permanentes y no permanentes.
Las Comisiones, salvo norma en contrario, estarán compuestas por el número
de Diputados que en cada caso establezca la Mesa, oída la Junta de Portavoces.
Las Comisiones Permanentes deberán constituirse dentro de los 20 días siguien-
tes a la sesión constitutiva, y pueden ser:
1. Legislativas.
2. No legislativas.
2-22
El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
Son Comisiones Permanentes Legislativas (según el Reglamento de la
Asamblea):
— Comisión de Estatuto de Autonomía, Reglamento y Estatuto del Diputado.
— Comisión de Presupuestos.
— Comisión de Mujer.
— Comisión de Juventud.
— Las que se constituyen de acuerdo con la estructura del Gobierno. (En
la actualidad son, además de las anteriores, las Comisiones de Cultura
y Turismo; de Presidencia, Justicia y Portavocía del Gobierno; Medio
Ambiente, Administración Local y Ordenación del Territorio; Sanidad,
Políticas Sociales y Familia; Educación y Deporte; Transportes, Vivienda e
Infraestructuras).
Son Comisiones Permanentes no Legislativas (según el Reglamento de la
Asamblea):
— Comisión de Vigilancia de las contrataciones.
— Comisión para las Políticas Integrales de la Discapacidad.
— Las que se constituyen en virtud de disposición legal: solo existe una de
este tipo, Comisión de Control del Ente Público Radio Televisión Madrid.
Son Comisiones no permanentes (según el Reglamento de la Asamblea):
Se crean eventualmente para un fin concreto. Se extinguen a la finalización del
trabajo encomendado, y en todo caso, al concluir la legislatura.
De Investigación.
Podrán ser:
De Estudio.
e) El Reglamento de la Asamblea determinará las relaciones entre esta y el
Gobierno, la composición y funciones de la Diputación Permanente, los
períodos ordinarios de sesiones, el número mínimo de Diputados para la
formación de Grupos Parlamentarios (5 miembros) y el procedimiento legis-
lativo, las funciones de la Junta de Portavoces y el procedimiento de elección
de los Senadores representantes de la Comunidad de Madrid. Los Grupos
Parlamentarios participarán en las Comisiones y Diputación Permanente en
proporción al número de sus miembros.
f) La Asamblea se reunirá en sesiones ordinarias y extraordinarias.
Los períodos ordinarios de sesiones serán dos al año: el primero
de septiembre a diciembre y el segundo de febrero a junio.
2-23
Auxiliares. Comunidad de Madrid
Entre los períodos ordinarios de sesiones y en los supuestos de expiración del
mandato o de disolución de la Asamblea funcionará la Diputación Permanente,
a la que corresponde velar por los poderes de la Cámara y cuantas otras atribu-
ciones le confiera el reglamento. Tras la celebración de elecciones, la Diputación
Permanente dará cuenta al Pleno de la Asamblea, una vez constituida ésta, de
los asuntos tratados y de las decisiones adoptadas.
Las sesiones extraordinarias habrán de ser convocadas por el Presidente de la
Asamblea a petición del Gobierno, de la Diputación Permanente, de una cuarta
parte de los Diputados o del número de Grupos Parlamentarios que el regla-
mento determine. Las sesiones extraordinarias deberán convocarse sobre un
orden del día determinado.
Para deliberar y adoptar acuerdos la Asamblea habrá de estar reunida reglamen-
tariamente y con asistencia de la mayoría de sus miembros. Los acuerdos debe-
rán ser aprobados por la mayoría de los miembros presentes, salvo en aquellos
supuestos para los que el Estatuto, el reglamento o las leyes exijan mayorías
especiales.
g) El Reglamento regula la publicidad de las sesiones y los quórum y las mayorías
requeridas. En todo caso, para la deliberación y adopción de acuerdos, la Asam-
blea ha de estar reunida reglamentariamente y con asistencia de la mayoría de
sus miembros si el Estatuto, el Reglamento o las leyes no exigen otras mayorías
más cualificadas.
3.2.7. Atribuciones
La Asamblea elige de entre sus miembros al Presidente de la Comunidad de Madrid
y controla la acción del Gobierno y de su Presidente.
El Reglamento establecerá las iniciativas parlamentarias que permitan a la Asamblea
ejercer el control ordinario del Gobierno y obtener del mismo y de la Administración de
la Comunidad la información precisa para el ejercicio de sus funciones. El Reglamento
regulará asimismo el procedimiento a seguir para la aprobación por la Asamblea, en el
ejercicio de sus funciones de impulso, orientación y control de la acción de gobierno, de
resoluciones o mociones de carácter no legislativo.
Corresponde, igualmente, a la Asamblea:
a) La aprobación y el control de los Presupuestos de la Comunidad y el examen y
aprobación de sus cuentas.
b) El conocimiento y control de los planes económicos.
c) Acordar operaciones de crédito y deuda pública.
d) La ordenación básica de los órganos y servicios de la Comunidad.
2-24
El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
e) El control de los medios de comunicación social dependientes de la Comunidad.
f) La potestad de establecer y exigir tributos.
g) La interposición del recurso de inconstitucionalidad y la personación ante el Tri-
bunal Constitucional, en los supuestos y términos previstos en la Constitución
y en la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional.
h) La solicitud al Gobierno de la Nación de la adopción de proyectos de ley y la
remisión a la Mesa del Congreso de los Diputados de proposiciones de ley,
delegando ante dicha Cámara a los miembros de la Asamblea encargados de su
defensa.
i) La designación de los Senadores que han de representar a la Comunidad, según
lo previsto en el artículo 69.5 de la Constitución. Los Senadores serán designa-
dos en proporción al número de miembros de los grupos políticos representa-
dos en la Asamblea. Su mandato en el Senado estará vinculado a su condición
de miembros de la Asamblea.
j) La ratificación de los convenios que la Comunidad de Madrid concluya con
otras Comunidades Autónomas, para la gestión y prestación de servicios pro-
pios de la competencia de las mismas. Estos convenios serán comunicados de
inmediato a las Cortes Generales.
k) La ratificación de los acuerdos de cooperación que, sobre materias distintas a las
mencionadas en el apartado anterior, concluya la Comunidad de Madrid con
otras Comunidades Autónomas, previa autorización de las Cortes Generales.
l) La recepción de la información que facilitará el Gobierno de la Nación sobre tra-
tados y convenios internacionales y proyectos de normativa aduanera en cuanto
se refirieran a materias de específico interés para la Comunidad de Madrid.
m) La fijación de las previsiones de índole política, social y económica que, de
acuerdo con el artículo 131.2 de la Constitución, haya de suministrar la Comu-
nidad de Madrid al Gobierno de la Nación para la elaboración de proyecto de
planificación.
n) La aprobación de planes generales de fomento relativos al desarrollo económi-
co de la Comunidad de Madrid, en el marco de los objetivos señalados por la
política económica nacional.
ñ) Cuantos otros poderes, competencias y atribuciones le asignen la Constitución,
el presente Estatuto y las leyes.
2-25
Auxiliares. Comunidad de Madrid
3.2.8. Potestad legislativa
A) Materias afectadas e iniciativa
La Asamblea ejerce la potestad legislativa en las materias de competencia exclusiva de
la Comunidad de Madrid recogidas en el artículo 26 de su Estatuto.
Igualmente ejerce la potestad legislativa en las materias previstas en el artículo 27 del
Estatuto, así como en aquéllas que se le atribuyan, transfieran o deleguen en virtud de lo
dispuesto en los apartados 1 y 2 del artículo 150 de la Constitución.
La iniciativa legislativa corresponde a los Diputados, a los Grupos Parlamentarios y
al Gobierno, en los términos que se establezcan en el Reglamento de la Asamblea. Por
ley de la Asamblea se podrá regular el ejercicio de la iniciativa legislativa popular y de los
Ayuntamientos, para las materias a las que se refiere el primer párrafo.
Las proposiciones de Ley de la Asamblea podrán ser adoptadas a iniciativa de:
— Un Diputado con la firma de otros cuatro miembros de la Cámara.
— Un Grupo Parlamentario con la sola firma de su portavoz.
B) Iniciativa legislativa popular y de los Ayuntamientos
Por Ley de la Asamblea se podrá regular el ejercicio de la iniciativa legislativa popular
y de los Ayuntamientos, para aquellas materias que pertenezcan al ámbito de actuación de
la Comunidad de Madrid. La Ley 6/1986, de 25 de junio, regula estas materias; dispone
que la iniciativa popular o de los ciudadanos madrileños requiere la recogida de 50.000
firmas, en un plazo máximo de tres meses, garantizándose por la intervención de fedatario
y control de la Mesa de la Asamblea. Respecto de los Ayuntamientos, se requiere acuerdo,
por mayoría absoluta del Pleno de la Corporación y, además, que concurra alguna de estas
circunstancias:
a) Que sean tres o más Ayuntamientos cuyos Municipios cuenten en conjunto
con un censo superior a 50.000 electores.
b) Que se trate de diez o más Ayuntamientos limítrofes, cualquiera que sea el
número de electores.
Entre otras materias se excluyen de esta iniciativa, las materias de naturaleza tributa-
ria y las relativas a la organización de las instituciones de autogobierno.
C) Delegación legislativa
La Asamblea solamente podrá delegar la potestad de dictar normas con
rango de ley en el Gobierno de acuerdo con lo establecido para el supuesto
de delegación de las Cortes Generales en el Gobierno de la Nación, en los
artículos 82, 83 y 84 de la Constitución.
2-26
El Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid
La Asamblea podrá delegar en el Gobierno de la Comunidad la potestad de dictar
normas con rango de Ley (Decretos Legislativos) con las siguientes excepciones:
a) Las que afecten al ordenamiento básico del Gobierno o al régimen jurídico de
la Administración de la Comunidad de Madrid.
b) Las que regulen la legislación electoral.
c) Todas aquellas normas que, por su carácter institucional, requieran un procedi-
miento especial para su aprobación.
D) Promulgación de las leyes
Las leyes aprobadas por la Asamblea serán promulgadas en nombre del Rey por
el Presidente de la Comunidad, que ordenará su publicación en el Boletín Oficial de la
Comunidad de Madrid y en el Boletín Oficial del Estado, entrando en vigor al día siguien-
te de su publicación en aquél, salvo que en las mismas se disponga otra cosa.
2-27