SISMOLOGÍA EN VENEZUELA
Un sismo no es más que un fenómeno que implica la liberación de energía
acumulada en forma de ondas sísmicas, dichas ondas ocasiona la propagación
de perturbaciones del campo de tensiones que generan pequeños movimientos
en las placas tectónicas, trayendo como consecuencia una sacudida fuerte y
pasajera de la parte solida de la tierra (corteza terrestre).
En Venezuela se han presentado una serie de sismos o movimientos telúricos
desde antes de la llegada de los colonizadores hasta la actualidad, siendo los
más notables y entre los cuales destacan los siguientes:
El de mayor Magnitud
Ocurrió en el año 1766 con una magnitud de 7,9 en la escala de Richter.
Este sismo se considera el más grande la historia venezolana, se sintió
en varias partes del país, la ciudad de cumana quedo totalmente
destruida, en otros estados fueron reportados daños y se desconoce el
número total de muertos.
12 de Abril de 1878
Un terremoto de 6,3 en la escala de Richter sacudió las poblaciones de
los Valles del Tuy, Charallave, Ocumare, Yare y Santa Lucía. El
epicentro se registró en Cúa, estado Miranda.
El más destructivo
Sacudió la ciudad de caracas en al año 1812 presentando una magnitud
entre 7,7 y 8,0 en la escala de Richter, tuvo una duración de dos minutos
dejando como saldo entre 10.000 y 20.000 muertos.
3 de Agosto de 1950
Un sismo de intensidad 6,6 sacudió a las poblaciones de San Antonio
del Táchira, Colón y Ureña, con epicentro en las áreas comprendidas
entre las fallas de Boconó y Carache, en el estado Trujillo, a 18 km de
distancia.
Horas más tarde, otro movimiento telúrico de la misma magnitud se
registró el distrito Morán del estado Lara, causando el derrumbe de vías
de penetración hacia Guárico, Chabasquén, Los Humocaros y Sanare.
Lo mismo ocurrió con puentes, líneas telefónicas y telegráficas.
Colapsaron los servicios de agua y luz, principalmente.
Se estima que las pérdidas materiales fueron de unos Bs. 500.000.000
de la época. Además, se contabilizaron unos 15 muertos, 80 heridos y
miles de familias perdieron sus casas.
El más devastador en Sucre
Fue registrado en el año 1997 con una magnitud de 6,9 en la escala de
Richter devastando así gran parte de Cariaco en el estado Sucre,
dejando unas 70 personas muertas.
Caracas tiembla
Ocurrió el 29 de julio del año 1967 en la capital venezolana dejando como
saldo alrededor de 300 muertos, 2000 heridos, 80 mil personas sin vivienda y
pérdidas materiales superiores a los 450 millones de bolívares (768 millones de
dólares para el 2017), tuvo una magnitud de 6,5 a 6,7 y su epicentro se localizó
a 20 kilómetros de Caracas.
Debido a la gran cantidad de pérdidas humanas y los daños materiales
ocasionados se toma como iniciativa para realizar una serie de actos científicos
y administrativos siendo eventualmente lo que impulsó la creación de una
entidad gubernamental dedicada a la investigación de las causas que
provocaron las fallas en varios edificios de la capital Venezolana y el Litoral
Central, así como la determinación de las causas, características y
consecuencias de ese sismo y de los sismos en Venezuela, es asi que por
Decreto Presidencial se ordena la creación de FUNVISIS ( Fundación
Venezolana de Investigaciones Sismológicas), como fundación del Estado que
“realiza, en forma permanente, investigaciones y estudios sismológicos” (Art. 1
del decreto presidencial No. 1.053 del 26 de julio de 1972, y publicado el 27 de
julio de ese año en la Gaceta Oficial No. 29.864).
Dicha entidad tiene como objetivo principal traducir el comportamiento de las
fallas productoras de terremotos en Venezuela para la protección de la vida
humana mediante la aplicación de los más completos y complejos métodos de
prevención, detección y reducción de riesgos por fenómenos asociados a los
inevitables movimientos de la corteza terrestre.
El terremoto impulsó el avance de las investigaciones sismológicas en
Venezuela y la construcción de edificaciones antisísmicas.
Un poderoso sismo, sin pérdidas humanas o materiales
El 21 de Agosto del año 2018 Venezuela sintió nuevamente como la tierra se
estremecía por un sismo de magnitud 7,3 según la escala de Richter, a pesar
de haber sido un sismo de alta magnitud no se reportaron pérdidas humanas ni
daños materiales, la explicación a esto se debe a que Venezuela se encuentra
en el límite de dos placas: la del Caribe, que bordea la parte norte occidental
del país, y la suramericana que bordea el resto del país, según explica la
Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas, Funvisis.
Según Funvisis, los sismos son “uno de los mayores riesgos potenciales en
Venezuela en cuanto a pérdidas humanas y económicas”, debido a que cerca
del 80% de la población venezolana vive en zonas de alta amenaza sísmica,
siendo esta variable un gran riesgo que aumenta con la elevación del índice
demográfico y las grandes obras de infraestructura.
La investigación sismológica como mandato constitucional en Venezuela
La constitución de la República Bolivariana De Venezuela (1999) en su artículo
322 establece lo siguiente:
“La seguridad de la Nación es competencia esencial y responsabilidad del
Estado, fundamentada en el desarrollo integral de ésta y su defensa es
responsabilidad de los venezolanos y venezolanas; también de las personas
naturales y jurídicas, tanto de derecho público como de derecho privado, que
se encuentren en el espacio geográfico nacional”.
El mismo texto detalla en el artículo 332 que la Seguridad Ciudadana demanda
de “una organización de protección civil y administración de desastres”,
encargada de resguardar a la población contra los peligros y de las catástrofes
que se presenten así como también a recuperarse de sus efectos inmediatos,
así como a facilitar las condiciones necesarias para su supervivencia .
La investigación sismológica es un acto de ejercicio de soberanía con evidente
impacto en la Seguridad de la Nación, tal como quedó evidenciado en el
terremoto de Caracas de 1967, así como en otros eventos de esta naturaleza,
donde el direccionamiento anticipado de los recursos del Estado en
administración desastres tiene un impacto inmediato para salvar las vidas de
millones de venezolanos; antes, durante y después del evento sísmico.
En este orden de ideas, la Ley Orgánica de Seguridad de la Nación (2001)
regula “la actividad del Estado y la sociedad, en materia de seguridad y
defensa integral” (Art. 1), indicando además que “El Estado tiene la obligación
de vigilar que las actividades tecnológicas y científicas que se realicen en el
país no representen riesgo para la seguridad de la Nación” (Art. 14), en cuyo
caso, por omisión, es decir, no realizando investigaciones sismológicas,
estaríamos introduciendo severos riesgos sísmicos, como medida que combina
el peligro sísmico, con la vulnerabilidad y la posibilidad de que se produzcan en
ella daños por movimientos sísmicos en un período determinado; así como
dejando al Pueblo en estado de inopia en peligros sísmicos, esto es, ante el
desconocimiento de la probabilidad de que se produzca una cierta aceleración
del suelo por causas sísmicas.
La seguridad y la defensa organizada por el Estado, regida por los principios de
integridad territorial, cooperación, solidaridad, concurrencia y
corresponsabilidad, tiene la misión de garantizar la independencia y la
soberanía de la nación, asegurar la integración territorial, la seguridad de
la nación, la participación activa en el desarrollo nacional, la cooperación en el
mantenimiento del orden interno y la defensa del ejercicio democrático de la
voluntad popular consagrada en la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela y leyes de la República La seguridad y defensa propenden a la
preservación del Estado de Derecho, al bienestar colectivo, la protección de
bienes y recursos nacionales y la satisfacción de los intereses de una nación
libre y soberana. Que ambos son bienes que buscan para su bienestar tanto de
una persona como de un país.