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Biodiversidad en Bosques de Magdalena

Documento en el cual se encuentra infromación sobre la diversidad ecologica y clima de la Sierra Nevada de Santa Marta

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ANALISIS FÍSICO DEL SUELO Y COMPARACIÓN DE LA BIODIVERSIDAD

EN VARIOS BOSQUES DE LA SIERRA NEVADA DE SANTA MARTA Y PNN


TAYRONA EN EL DEPARTAMENTO DEL MAGADALENA.

PRESENTADO POR:
Jhon Fernando Reinel Hernández
Marcos Fidel Mercado Martínez
Neider Andres Petro López
José Alejandro Padilla Lozano
David Daniel Reza López

PRESENTADO A:
MSc. Juan Carlos Linares Arias

UNIVERSIDAD DE CÓRDOBA
FACULTAD DE CIENCIAS BÁSICAS
PROGRAMA DE BIOLOGÍA

MONTERÍA – 2019
INTRODUCCIÓN
Colombia cuenta con una prodigiosa riqueza natural, ocupa el segundo lugar
entre los doce países con mayor diversidad biológica del mundo, después de
Brasil (Bryant, 1997). La riqueza en biodiversidad de Colombia tiene diversas
manifestaciones. En su territorio se encuentra el 10% de la biodiversidad del
planeta no obstante que solamente representa el 0.7% de la superficie
continental mundial. Ocupa el tercer lugar entre los doce primeros países del
mundo en diversidad biológica y endemismos combinados, después de Brasil e
Indonesia. Es el primer país en diversidad de vertebrados, exceptuando los
peces. Es el primer país en diversidad de aves y anfibios, el segundo en
diversidad de peces de agua dulce, el tercero en réptiles y el cuarto en
mariposas. La riqueza en aves ha llamado la atención mundial de científicos,
viajeros y aficionados a la ornitología: sus 1752 especies representan cerca del
19% de todas las especies y del 60% de las identificadas en Suramérica
(Mittermeier, 1997).
El Dominio Caribe Se constituye en el límite septentrional de la Región
Neotropical al colindar con la R. Holártica extendiéndose por casi todo México,
América Central, las Antillas y parte de la costa Atlántica de América del Sur.
Este dominio se caracteriza por la presencia de tipos de vegetación muy
heterogéneos, que van desde las selvas húmedas hasta los matorrales
desérticos. La fauna es de transición entre las regiones Neotropical y Neártica,
con marcado origen Sudamericano, aunque en términos generales, se considera
una fauna pobre, pero con alto grado de endemismos (Parra, 2005).
La Provincia Caribe se extiende principalmente por el Mar Caribe y el complejo
insular de las Antillas (Mayores y Menores). Los tipos de vegetación son muy
diversos, heterogéneos y característicos de las áreas limitadas de cada una de
las islas que lo componen, de allí su particularidad y singularidad (Parra, 2005).
MARCO TEORICO
Las provincias biogeográficas se definen como “territorios extensos que poseen
un gran número de especies y algunos géneros endémicos. Además, tiene
grupos afines de series y geoseries de vegetación propios o exclusivos, así como
peculiares y característicos patrones de zonación altitudinal de la vegetación”.
La diversidad natural y la complejidad geográfica de nuestro país nos muestra
un territorio ubicado en la zona Ecuatorial tropical con una estructura horizontal-
vertical que se extiende por una superficie superior a los 2.000.000 de Km2 y
que comprende tanto territorios continentales de más de 1.141.000 Km2, como
marítimos-insulares que abarcan aproximadamente 530.000 Km2 en el mar
Caribe y 330.000 Km2 en el Océano Pacífico (Parra, 2005).
PROVINCIA DEL MACIZO DE LA SIERRA NEVADA DE SANTA MARTA
Se caracteriza por presentar todos los pisos térmicos existentes en Colombia y
un clima húmedo con una distribución bimodal de lluvias. Su vegetación presenta
toda una transición que va desde las selvas húmedas y cálidas de las tierras
bajas, a los bosques nublados de montaña, los páramos y las nieves perpetuas,
en las que existe una gran afinidad con la biota de la Cordillera de los Andes,
especialmente con las Cordilleras Oriental de Colombia, de Mérida y de la costa
de Venezuela, con un alto grado de endemismos (Parra, 2005).
BOSQUE SECO TROPICAL
Los bosques secos son definidos como las formaciones vegetales donde la
precipitación anual es menor a 1.600 mm con una temporada seca de al menos
cinco a seis meses, en que la precipitación totaliza menos de 100 mm
(Pennington et al. 2000a). Consecuentemente, los procesos ecológicos son
marcadamente estacionales y la productividad primaria neta es menor que en
los bosques húmedos, porque sólo se da en la temporada de lluvias. Estos
bosques además son de menor altura y área basal que los bosques tropicales
húmedos (Moony et al. 1995; Linares-Palomino, 2004).
BOSQUE HUMEDO TROPICAL
Gran parte de la superficie de la región tropical de Suramérica está ocupada por
lo que se denomina como bosque húmedo tropical (bh-T) y las sabanas de tierras
bajas (Van der Hammen 1992). Los bosques húmedos tropicales se caracterizan
por ser ecosistemas con gran complejidad estructural y ambiental, además de
que albergan la mayor diversidad de especies de plantas del mundo,
concentrando cerca del 50% de las especies descritas (Gentry 1993). La
extensión del bh-T en Colombia es de 415.000 km2, lo cual equivale al 36.5%
del territorio nacional. Este tipo de bosque se distribuye a través de las
principales regiones biogeográficas del país, como lo son las tierras bajas del
Pacífico o Chocó Biogeográfico, la Amazonía y algunos sectores de la Orinoquia
y las estribaciones de los Andes, en los valles medios de los ríos Magdalena y
Sinú, en los valles bajos de los ríos Cauca y San Jorge y en la cuenca del río
Catatumbo (IAvH 1997).
BOSQUE HÚMEDO TROPICAL PREMONTANO
El ámbito de precipitación para esta zona de vida varía entre 1200 y 2200 mm,
como promedio anual, se presenta un periodo efectivo seco de 3,5 a 5 meses
(Bolaños et al, 2005). En esta zona se presentan extensas áreas de suelos
volcánicos, fértiles donde el bosque original mayormente ha desaparecido,
ejemplo el Valle Central (Fournier, 1980).
Entre las especies características de esta zona de vida están los géneros
Nectandra, Persea, Cinnamomun de la Familia Lauraceae, Cupania de la Familia
Sapindaceae, Eugenia de la familia Myrtaceae, Cedrela salvadorensis (cedro),
Cedrela tonduzii (cedro dulce), Albizia adinocephala (carboncillo), Dendropanax
arboreus (fosforillo) (Monge 2007).
BOSQUE HÚMEDO TROPICAL MONTANO
El rango de precipitación oscila entre 1850 y 4000 mm como promedio anual, es
muy característico de esta zona de vida la presencia de neblina durante largos
periodos durante el día y en transcurso del año (Bolaños et al, 2005). Por esta
característica se le llama bosque de nuboso o de neblina. Los terrenos de esta
zona de vida son en su mayoría de topografía accidentada, con ladera expuesta
vientos (que traen mucha humedad). Esta formación se ubica en la Cordillera de
Talamanca, donde domina el género Quercus (Con más de 10 especies), Alnus
acuminata (jaúl), Cornus disciflora (lloró), Magnolia poasana (magnolia). Un buen
ejemplo son los bosques del Cerro de la Muerte (Monge 2007).
SUBPARAMO
Los páramos forman una eco-región neotropical de altura, entre el límite forestal
superior y las nieves perpetuas. Se encuentran distribuidos a lo largo de los
Andes húmedos entre Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela, con extensiones
hasta Costa Rica y Panamá. Los páramos tienen una importancia fundamental
para millones de personas y representan una multiplicidad de significados y
valores: hábitats en los que se encuentran especies endémicas, ecosistemas
capaces de brindar servicios ambientales fundamentales (agua principalmente),
espacios de importancia cultural, entre otros. Así: “Los páramos constituyen
espacios de vida y territorios sagrados para los pueblos indígenas que habitan
en o alrededor de ellos, además de lo cual juegan un papel fundamental en la
subsistencia de diversas poblaciones tradicionales y locales asentadas en las
zonas altas de las montañas [son ejes] de cohesión social y [determinan] los
modos de vida de los habitantes de las tierras altas” (Hofstede 2014).
OBJETIVOS
OBJETIVO GENERAL
Comparar la diversidad de flora y fauna presentes en el PNN Tayrona, bh-T
montano, bh-T premontano y subpáramo en la sierra nevada de Santa Marta,
Magdalena.
OBJETIVOS ESPECIFICOS
 Identificar las familias vegetales y rasgos funcionales presentes en los
diferentes sitios de muestreo.
 Identificar los diferentes grupos taxonómicos de fauna presentes en los sitios
de muestreo.
 Describir las propiedades físicas del suelo en los diferentes sitios de
muestreo.
DISEÑO METODOLÓGICO
ÁREA DE ESTUDIO
El área de estudio se localiza en Santa Marta, que se encuentra ubicada entre
los 11° 15’ – 11° 22’ N y 73° 57’ – 74° 12’ W y comprende las bahías de Gaira,
Santa Marta y el PNNT. El clima del área puede calificarse como seco y cálido
ya que entre diciembre y abril (época seca) la precipitación es baja (menos del
20% anual) y ocurre un aumento de los vientos Alisios. Mientras que entre mayo
y noviembre (época lluviosa) la intensidad de los vientos disminuye y se da una
mayor precipitación (52% del total anual), especialmente entre septiembre y
noviembre. La precipitación anual promedio esta alrededor de los 350 mm y el
promedio anual de temperatura del agua es de 27 °C (Casas, 2010).
4.2 SITIOS DE MUESTREO
PARQUE NACIONAL NATURAL TAYRONA
El PNN se localiza en jurisdicción del municipio de Santa Marta, Magdalena,
Colombia, entre el oriente de la localidad de Taganga y el tramo terminal del
cauce del río Piedras (11º 21' y 11º 15' 53" Norte y 73º 54' 06" y 74º 12' 32"
Oeste), con una longitud de 35 km y un ancho máximo de 6.5 km a partir del
borde del Mar Caribe (Carbono & García, 2010).

SIERRA NEVADA DE SANTA MARTA


Es un macizo montañoso situado en el extremo noroccidental de Suramérica, al
norte de la república de Colombia, entre los 10º 01' 05'' y 11º 01' 11'' Norte y
entre los 72º 36' 16'' y 74º 12' 49'' Oeste. El régimen de lluvias está definido en
gran parte, por el movimiento de la zona de convergencia intertropical (ZCIT),
distinguiéndose en general dos estaciones lluviosas, de abril a junio y de agosto
a principios de diciembre, alternadas por dos estaciones secas, de diciembre a
marzo y de junio a agosto (veranillo de San Juan) (Mayr et al. 1997, 1998).
METODOLOGÍA
Para el muestreo de la vegetación se realizaron 4 transectos en general de
acuerdo Gentry, repartidos en los sitios de muestreo. En el PNN se realizaron
dos que correspondían al bs-T y al bh-T; en la sierra nevada de Santa Marta se
realizaron dos de acuerdo a la altitud, que corresponden al bh-T premontano y
bh-T montano. En el subpáramo se realizó una parcela de 10 m x 10 m. Para el
muestreo de la fauna, se observó la fauna asociada a los 4 transectos y a la
parcela realizada respectivamente.

Para la medición de la textura del suelo se basó en la técnica de la botella, que


consistió en adicionar suelo en una botella, después llenarla de agua y agitar.
Gracias al tamaño y densidad de las partículas se forman capas, las cuales se
miden y corresponden a la arena, limo y arcilla respectivamente.
En cada transepto se observaban las siguientes variables: presencia de rocas
afloradas, desnudes del suelo, profundidad de la hojarasca y pendiente del
terreno.

Para la determinación de los especímenes vegetales hasta familia se basó en


comparar registros fotográficos con guías visuales como la de Bitácora de flora
(Marín & Parra, 2015), guía taxonómica (Gentry, 1993) entre otros.
Para el muestreo de la fauna, en cada uno de los transeptos realizamos
observación directa, a cada observación se le realizó registro fotográfico y
escrito. Algunos organismos fueron identificados hasta el taxón orden, familia y
género, cabe resaltar que la identificación se realizó por conocimientos previos
de los integrantes del grupo.

RESULTADOS Y ANALISIS
VEGETACIÓN
Bosque húmedo tropical
En el bh-T Se registraron un total de 66 individuos repartidos entre 14 familias y
4 morfotipos, la familia con mayor abundancia fue Arecaceae con 14 individuos
seguido de Araceae y Cyclantaceae (figura 1). La gran abundancia de palmas
en los bosques tropicales húmedos se encuentra en parte asociadas con los
climas cálidos y húmedos que caracterizan estos ecosistemas (Ávalos et
al. 2005); otras de las características es que en el sotobosque son muy evidentes
varios tipos de hierbas gigantes con grandes hojas, como los platanillos
(Heliconia), anturios y afines (Araceae).
La familia registrada con mayor área basal (DAP m2/ha) fue Moraceae con 0,20
m2/ha, seguido de la familia Meliaceae y Liliaceae (figura 2). De acuerdo a Gentry
(1990), unas de las familias dominantes de árboles en el bosque húmedo tropical
es la Moraceae (familia de los higuerones), Anonaceae (familia de los
guanábanos) entre otras.
Figura 1. Número de individuos por familia en el bosque húmedo tropical.

Figura 2. Área basal (DAP m2/ha) por familia en el bosque húmedo tropical.
0.0025

0.0020
densidad (ha)

0.0015

0.0010

0.0005

0.0000
Moraceae Meliaceae Liliaceae morfo 2 Annonaceae

Figura 3. Densidad (ha) de familia en el bosque húmedo tropical.


La densidad (ha) mejor representada en el boque húmedo tropical fue por la
familia moraceae, quien obtuvo un 0.0019 números de individuos por hectárea,
seguida de la familia meliaceae y liliaceae. Esto demuestra la alta riqueza de
estas familias y su radiación adaptativa a las condiciones húmedas de este tipo
de bosque.

Figura 4. Numero de familia por biotipo en el bosque húmedo tropical.


El hábito de crecimiento o biotipo mejor representado en el bosque húmedo
tropical muestreado en términos de abundancia de familia, fue arbusto,
representado con 8 familias, seguido de árbol (5) y lianas (3); mientras que las
palmas, fueron las formas de vida menos representadas con tan solo 2 familias
(Arecaceae y Cyclantaceae) (Figura 4).
Bosque seco tropical
En el bs-T Se registraron un total de 42 individuos repartidos entre 9 familias, la
familia con mayor abundancia fue Fabaceae con 12 individuos seguido de
Arecaceae (8) y Piperaceae (7); mientras que las familias con menor número de
individuos fue Apocynaceae y Lauraceae, ambas con 1 individuo (figura 5). En
general los datos de abundancia a nivel taxonómico de familia, coinciden con los
presentados por Morelo (2013) para los bosques secos tropicales de Colombia,
según los cuales la familia con mayor dominancia es Fabaceae. El predominio
de las fabáceas, está ampliamente documentado para las tierras bajas del
Neotrópico, incluyendo el bosque seco tropical (Gentry 1996, Aguirre et al. 2006),
y es corroborada con los resultados de este estudio.
La familia registrada con mayor área basal para el bs-T fue Luraceae con 0,15
m2/ha, seguido de Fabaceae (0,12 m2/ha) y Moraceae (0,09 m2/ha) (figura 6). De
acuerdo a Linares-Palomino (2004), Estos bosques son de menor área basal que
los bosques tropicales húmedos, lo cual se corrobora con los datos obtenidos en
este estudio; se puede decir que es a causa de la mayor precipitación que se
presenta en los bh-T por lo tanto, menos déficit hídrico.
Figura 5. Número de individuos por familia en el bosque seco tropical.

Figura 6. Área basal (DAP m2/ha) por familia en el bosque seco tropical.
0.0016
0.0014
0.0012
densidad (ha)

0.0010
0.0008
0.0006
0.0004
0.0002
0.0000
Lauraceae fabaceae Moraceae Malvaceae

Figura 7. Densidad (ha) de familia en el bosque seco tropical


La familia fabácea es la mejor representada en todos los bosques secos
tropicales, lo que no afirma del todo la figura 7, esto se debe a que las parcelas
estudiadas o los transeptos realizados estuvieran en zonas de mayor dominancia
por la familia laurácea, por la distribución de estas familias en bosque o por la
capacidad de dispersión que pueden tener especies lauráceas.

Figura 8. Numero de familia por biotipo en el bosque seco tropical.


El hábito de crecimiento en el bs-T mayor representado fue árbol, representado
con 4 familias, seguido de arbusto y liana, ambas con 2 familias (figura 8). El
dato de biotipo mayor abundante concuerda con Mendoza-C. (1999) para el
bosque seco tropical de la región caribe, en donde demostró que la distribución
de la riqueza de especies de acuerdo con los hábitos de crecimiento, los árboles
presentaron el 52.5% de las especies y las lianas representaron el 31 % de ese
estudio.
Bosque húmedo tropical Premontano
En el bh-T Premontano se registraron 53 individuos, siendo los helechos (división
Pterophyta) los más abundantes con 24 individuos, seguido de la familia Araceae
(6) y Moraceae (5) de la división Magnoliophyta (figura 9). La importancia y
representatividad en el área de estudio de la familia Araceae, es favorecida
posiblemente por la quebrada intermitente presente, la cual genera ambientes
húmedos, propicios para el desarrollo de las especies de esta familia
(Cuatrecasas, 1958), La presencia de las familias Rubiaceae y Melastomataceae
(figura 9), para este tipo de zonas de vida, son indicadoras de áreas de bosque
secundario (López et al, 2015).
La familia con mayor área basal fue Malvaceae con 0,49 m2/ha seguido de
Boraginaceae (0,29 m2/ha) y el morfotipo 4 (0,16 m2/ha) y la familia con menor
área basal fue Moraceae (figura 10); mientras que Cascante y Estrada (2001)
determinaron que la familia con mayor área basal en el bh-T Premontano es
Moraceae seguido de Fabaceae.
Figura 9. Número de individuos por familia en el bh-T Premontano.

Figura 10. Área basal (DAP m2/ha) por familia en el bh-T Premontano.

0.60

0.50

0.40
densidad (ha)

0.30

0.20

0.10

0.00
Malvaceae Boraginaceae morfo 4 Moraceae

Figura 11. Densidad (ha) de familia en el bh-T Premontano


En este tipo de bosques las especies dominantes son arboles de gran tamaño y
arbustos relativamente adaptados al gradiente altitudinal, los individuos de esta
familia dominante se caracterizan no solo por su gran tamaño para la
competencia de luz y albergamiento de especies de aves entre otros animales y
plantas epifitas, si no la gran medida de su DAP para el sostenimiento en esos
tipos de suelos de lavado.

Figura 12. Numero de familia por biotipo en el bh-T Premontano.


El hábito de crecimiento o biotipo vegetal mejor representado en el bosque
húmedo tropical Premontano, en términos de abundancia de familia, fue el
arbustivo con 6 familias, seguido de árbol con 4 y lianas con 2 (figura 12). Al igual
que López et al. (2015) donde pudo determinar que el hábito de crecimiento en
el bh-T premontano más común es el arbustivo seguido del estrato arbóreo.
Bosque húmedo tropical Montano
En el bh-T montano se registraron 65 individuos, en donde la familia más
abundante es Arecaceae con 33 individuos, seguido del grupo de los helechos
(división Pterophyta) con 19 individuos, Para el resto de las familias y morfotipos
se presentan una abundancia parecida entre 3 y 1 individuo (figura 13). Estos
resultados contrastan con los obtenidos por Bach et al. (2003) en el grupo de
mayor abundancia donde fueron las pteridofitas, seguido por Melastomataceae;
mientras que Cabrera (2005) determino en su estudio que la familia con mayor
número de individuos es Arecaceae (334) compartiendo con los datos obtenidos
en este estudio.
La familia con mayor área basal fue Myrtaceae con 0,64 m2/ha, seguido de
Meliaceae y el morfotipo 3 (figura 14). En un estudio realizado por Rasal (2012)
en Perú, de bosques montanos, donde demostró que las familias con la mayor
cobertura relativa para estos bosques, fueron Lauraceae, Myrtaceae,
Myrsinacea y Sapotaceae. Solo estando presente la familia Myrtaceae en ambos
estudios con una significativa área basal.
Figura 13. Número de individuos por familia en el bh-T Montano

Figura 14. Área basal (DAP m2/ha) por familia en el bh-T montano
0.70

0.60

0.50
densidad (ha)

0.40

0.30

0.20

0.10

0.00
Myrtaceae Meliaceae morfo 3

Figura 15. Densidad (ha) de familia en el bh- Montano


La familia myrtaceae posee especies con árboles muy grandes dominantes en
regiones de gran altitud debido a sus adaptaciones fisiológicas y morfológicas
para presentar poblaciones considerables en estas zonas con gran oferta de
frutos que atraen gran variedad de aves.

Figura 16. Numero de familia por biotipo en el bh-T Montano.


Los hábitos de crecimiento o biotipos vegetales mejor representados en bh-T
montano son el estrato arbustivo y arbóreo, ambos con 4 familias y la forma de
crecimiento con menor abundancia en términos de familia fueron las palmas con
una familia (Arecaceae) (figura 16).
DISCUSIÓN
De los diferentes bosques en estudio, el bosque que presento mayor numero
familias registradas fue el bosque húmedo tropical, seguido del bosque seco
tropical; mientras que el bh-T Montano y bh-T premontano presentaron una
menor riqueza a nivel taxonómico de familia en comparación con los demás
bosques. De acuerdo a Gentry (1982), los bosques húmedos representan un
claro ejemplo de la continuidad o discontinuidad de comunidades vegetales en
el neotrópico; en las últimas tres décadas, numerosos estudios han demostrado
que esta región posee la mayor diversidad de especies y hábitats presentes en
el mundo. Se ha estimado que más de un 50% de los recursos mundiales de
plantas y animales es originario de las zonas tropicales húmedas (German
Bundestag, 1990).
El habito de crecimiento que más se presentó en todos los bosques fue el estrato
arbustivo, excepto en el bs-T que fue el estrato arbóreo. En general mostraron
un área basal heterogéneo, el mayor dato registrado de esta variable fue en el
bh-T Montano (0,64 m2/ha) que corresponde a la familia de Myrtaceae, mientras
que en el bosque seco tropical presento el menor dato (0,15 m2/ha,) que
corresponde a la familia Lauraceae.
SUBPÁRAMO

Figura 17. Porcentaje de abundancia de familia en el subpáramo.


En el muestreo realizado en el Subpáramo (2310 msnm), se encontraron 8
familias de plantas con flores y el grupo de Pteridophyta (helechos) plantas sin
flores, que son los más abundantes con un 43% de abundancia, seguido de la
familia Melastomataceae con un 20% y la familia Bromeliaceae con un 15%
(figura 13). Estas bajas tasas de riqueza se deben a que las zonas de Páramos
y Subpáramos son considerados ecosistemas extremos para la vida (Morales y
Estévez 2006) pues presentan condiciones ambientales tales como: humedad
de hasta 85% (Banco de Occidente 2001), suelos ácidos (pH entre 3,9 y 5,4
unidades), baja presión atmosférica, y temperaturas del aire bajas que durante
el día pueden oscilar entre el punto de congelación y los 20 °C (Granados et al.
2005), Lo que condiciona a la vegetación a tener una alta tasa de endemismo
por sus adaptaciones morfológicas y fisiológicas en el gradiente altitudinal pero
a su vez una baja riqueza de especies vegetales
FAUNA
TABLA 1. Registro de la fauna presente en cada bosque.
GRUPO bh-
TAXONÓMICO bhT bsT Tpm bh-Tm Subparamo
Myriapoda X X (2)
Trochilidae X
Anura X (2)
Coleoptera X (2) X (2)
Anolis X (3)
Araneae X (5)
Hymenoptera X (2) X(3)
Lepidoptera X (5) X(4)
Orthoptera X (3)
Diptera X (2)
Dendrobatidae X
Hemipteros X
TOTAL 14 9 7 5 4

0
Coleoptera

Coleoptera
Myriapoda

Hymenoptera

Myriapoda

Lepidoptera

Hymenoptera

Lepidoptera
Anolis

Orthoptera
Anuros
Trochilidae

Araneae

hemipteros

Diptera
dendrobatidae

bhT bsT bh-Tpm bh-Tm Subparamo

Figura 18. Abundancia de los diferentes grupos taxonómicos de fauna registrados en


cada bosque.

Los resultados muestran que la diversidad disminuye conforme se incrementa la


altitud lo que concuerda con otros estudios como los realizados por Palacios-
Vargas y Castaño-Meneses (2002) en un bosque de Quercus-Abies, y por Shen
et al. (2005) para las montañas del Tíbet en China. Esto es posible debido a que
cuando se incrementa la altitud, las condiciones del clima se vuelven más
extremas, lo que afecta a la riqueza y diversidad (Hodkinson 2005). Por lo que
las bajas temperaturas podrían ser una limitante en la distribución de las mismas
especies. Estudios en zonas tropicales, muestran que en altitudes intermedias
(1.500 m), la densidad y riqueza de especies presenta valores máximos,
problamente asociado a que en tales altitudes se tienen una mayor productividad
en la comunidad vegetal, y las condiciones ambientales permiten un menor costo
para mantener las funciones en dichas altitudes (Janzen 1973). En nuestro
estudio, se observó una reducción en el número de taxones, conforme se
incrementó la altitud. Este patrón en la disminución de la riqueza de taxones, ha
sido registrado para suelos en una montaña del Tibet (Shen et al. 2005), para
diferentes hábitats en una montaña de Alemania Central (Perner et al. 2005), en
briofitas en montañas de Nueva Zelanda y Australia (Andrew et al. 2003), y para
México, en musgos corticícolas (Cutz-Pool et al. 2006; Mejía- Recamier y Cutz-
Pool 2007). Los dos principales factores que han sido propuestos para explicar
tales patrones son el tipo de vegetación (Richardson et al. 2005), y las
condiciones climáticas, particularmente humedad y temperatura. Para nuestro
estudio, la temperatura, más que el tipo de vegetación podría resultar el factor
limitante para la distribución de los taxones, particularmente en las altitudes de
2.300 m y 2.500 m, donde las temperaturas resultan menores que las
observadas en los pisos inferiores. Para los invertebrados, se ha encontrado que
las temperaturas bajas determinan indirectamente la reducción en la riqueza de
los taxones, debido a la reducción en recursos y nichos explotables (Hodkinson
2005).

VARIABLES DEL SUELO.


Tabla 2. Desnudez del suelo y afloración de rocas en los diferentes bosques
Desnudez del Afloración de
Bosques suelo rocas
bhT Hojarasca NO
bsT Semidesnudo SI
bh-Tpm Hojarasca SI
bh-Tm Semidesnudo SI
Subparamo Hojarasca NO
Figura 19. Profundidad de la hojarasca por cada bosque.
En cuanto a la intercepción del suelo del bosque, numerosos estudios muestran
que la capa de hojarasca es un importante componente hidrológico en el control
de la trasferencia de agua y energía entre el dosel arbóreo y el suelo (Pitman
1989). En áreas tropicales la producción de nueva fitomasa es equiparable a la
deposición y descomposición de restos vegetales, de modo que en estas
condiciones se tienen en estos ecosistemas un ciclo cerrado de elementos
nutritivos. En este sentido las hojas desempeñan un papel importante en relación
con la dinámica y estabilidad de estos ecosistemas, pues constituyen una fuente
importante de energía y nutrientes para la edafofauna y las plantas. Se afirma
que en condiciones tropicales, las hojas contribuyen entre 60 y 70% con la
producción total del material vegetal (Bray y Gorhan, 1964). Esto explica él
porqué de la profundidad de hojarasca en ambos ecosistemas. Siendo para el
bosque humedo tropical la mayor profundidad de hojarasca (7 cm). Con respecto
a subparamo y bosque humedo tropical montano que tuvieron profundidad de
hojarasca 6 y 5 cm respectivamente. Y mientras que en bosque seco y bosque
humedo tropical montano suelo semidesnudo y afloracion de rocas.
Tabla 3. Porcentajes de arena, limo y arcilla en cada bosque
Textura del suelo
Bosque Arena Arcilla/limo
bhT 42,60% 58,40%
bsT 53,50% 47,50%
bh-Tpm 29,52% 70,48%
bh-Tm 27,58% 72,42%
Subparamo 31,30% 68,7%

Las proporciones de arena, limo y arcilla en los suelos determinan su textura, la


cual tiene gran influencia sobre la productividad y condiciona, en buena parte, el
tipo de vegetación que puede desarrollarse. Los que tienen un porcentaje
elevado de arena suelen ser incapaces de almacenar agua y retener nutrientes
para permitir el crecimiento de la vegetación. Los que contienen una proporción
mayor de arcillas y limos son depósitos excelentes de agua y atrapan minerales
que pueden ser utilizados con facilidad por las plantas. Los muy arcillosos
tienden a acumular un exceso de agua y su textura viscosa impide, con
frecuencia, una aireación suficiente para el crecimiento normal de la vegetación.
Los bosques húmedos tropicales, los suelos zonales correspondientes –
conocidos genéricamente como latosotes – son por lo genera antiguos y
profundos, debido a la pronunciada meteorización química causada por las latas
precipitaciones; la capa orgánica superficial es muy delgada y los horizontes o
capas inferiores que tienen poco desarrollo. Siendo así los bosques tropical,
motano y premontano tienen mayor porcentaje de arcilla y limo siendo
potencialmente depositos de agua y minerales para las plantas.
Con respecto a los bosques en general, el que tuvo mayor porcentaje de arena
fue el bosque seco tropical, dado a que éste retiene menos agua, con respecto
al porcentaje de arcilla-limo no varía mucho, sin embargo cambia porque hay
menores precipitaciones y por lo cual un menor lavado.
Los suelos típicos de páramo son negros y húmedos. Precisamente debido a la
alta humedad y al clima frío, la descomposición de materia orgánica es muy
lenta, lo que hace que se acumule una gruesa capa de suelo orgánico. El suelo
es retenido por una intrincada red de raíces y rizomas que hacen parte de la
cubierta vegetal continua de los páramos en buen estado.
CONCLUSIÓN
El estudio de la relación entre el suelo, clima, fauna y vegetación es fundamental
para interpretar al ecosistema ya que estos son de gran importancia para
mantener un equilibrio, la vegetación mantiene la humedad del suelo, al que
contribuye a su fertilidad mediante el mantillo, precisamente, raíces y hojas
detienen el escurrimiento de aguas que, en lugar de lavar y arrasar la cubierta
superficial hacia los ríos o los mares, penetran lentamente hacia el subsuelo. Así
mismo las plantas transpiran, y ese vapor de agua se eleva hacia la atmósfera,
influyendo en la formación de las nubes. De este modo, la vegetación atraería
las lluvias y moderaría la temperatura, pues determinaría veranos más frescos e
inviernos más templados. La evaluación de suelos, es de suma importancia
desde el punto de vista biológico, las características del suelo más importantes
son su permeabilidad, relacionada con la porosidad, su estructura y su
composición química. Los suelos retienen las sustancias minerales que las
plantas necesitan para su nutrición vegetal y que se liberan por la degradación
de los restos orgánicos.
La fauna representa un factor importante en cada bosque ya que todas las
especies asociadas a la vegetación, agua, aire y suelo proporcionan estabilidad
y contribuyen con los servicios ecosistemicos de cada bosque, dicho de otra
manera estos colaboran con la reproducción de muchas especies vegetales por
medio de la dispersión de semillas y la polinización, además de hacer parte de
la gran red trófica que se da en los bosques también son buenos bioindicadores
de perturbación de los ecosistemas.
La vegetación cumple un rol en determinación y composición del clima. Ya que
su distribución en la tierra depende de los factores climatológicos y de los suelos.
Tiene tanta importancia que inclusive se llega a catalogar a los climas según el
tipo de vegetación. Así mismo se observó durante los recorridos que el clima
tiene influencia sobre la vegetación y fauna existente en las regiones. Existe una
relación muy estrecha entre el tipo de clima de un lugar, el tipo de vegetación y
fauna que crece y se desarrolla en él.
En los bosques de las estaciones muestreadas existieron grupos comunes con
alta frecuencia y abundancia relativa que difieren de los grupos de mayor
frecuencia y abundancia relativa de las zonas altas. Lo anterior sugiere una
diferenciación altitudinal en cuanto a los comportamientos poblacionales de las
especies que conforman estos grupos a medida que se asciende en el gradiente.
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