Nombre: Sergio Torres Castillo NIF: 738233
Metáfora de escritorio:
Usaremos el ejemplo de metáfora del escritorio de un sistema operativo, ya que es un
concepto unificador usado por las interfaces gráficas de usuario para interactuar más
fácilmente con el computador.
La metáfora de escritorio trata al monitor de un
computador como si fuera el escritorio físico del
usuario, sobre el cual pueden ser colocados los
objetos tales como documentos, imágenes,
carpetas… Cuando se abre un documento, se abre en
una ventana que representa una copia en papel del
documento colocado en el escritorio. También
tenemos pequeñas aplicaciones como una
calculadora, una libreta de notas…
En este aspecto se asemeja completamente a lo que es un
escritorio físico. Sin embargo, con el paso del tiempo se han
buscado más características y más usabilidad en la interfaz. Se ha
determinado que es más importante que mantener la esencia de
la metáfora. Algunos ejemplos de estas implementaciones son la
papelera de reciclaje en el escritorio, volúmenes de disco y de red
y que normalmente no son algo encontrado en un escritorio. Otras
características muy extendidas actualmente son la barra de menú,
barra de tareas, centro de notificaciones… que no tienen ninguna
relación con el escritorio en el mundo real.
Dicho esto, nos parece una metáfora adecuada para asentar las
bases o funciones básicas que debe tener un escritorio como
interfaz gráfica. Al tratarse de algo común en la vida real, nos resulta sencillo sin tener muchos
conocimientos el poder realizar acciones básicas como abrir un documento, escribir en él, usar
las carpetas para organizar nuestros archivos, utilizar la calculadora en caso de querer realizar
cálculos matemáticos, escribir notas…
Por el contrario, actualmente los escritorios (como hemos dicho anteriormente) son más
complejos como interfaz ya que disponen de más elementos.
Algunos de ellos, como por ejemplo la papelera de reciclaje que no la solemos encontrar en un
escritorio físico (aunque si la podemos tener junto a él), no son fieles a la metáfora, pero sí que
resultan muy iterativos con el usuario. Simplemente cuando no queremos algo lo tiramos a la
basura y en el caso de que no hayamos vaciado la papelera, lo seguiremos teniendo allí. Esto
análogamente en el mundo real seria como tirar un documento que no queramos a la papelera
que tenemos junto al escritorio.
Otros elementos como la barra de tareas, que no tienen nada que ver con dicha metáfora,
pueden resultar más difíciles de utilizar en un primer momento (sobre todo para personas que
no estén familiarizadas con estos conceptos de tener varias tareas abiertas y poder restaurar
cuando queramos las que tenemos abiertas) ya que no se asemeja a algo que nosotros
tengamos en un escritorio y tampoco le da nombre a algo común con lo que pueda resultar
análogo.
Ingeniería Informática de la Universidad de Zaragoza - IPO