Loco por mi hermanita

Escrito por... Marqueze

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Hetero, filial-hermanos. Con los padres fuera de casa, de vacaciones, solos todo el
d�a y una calentura inmensa en el cuerpo, los dos hermanos se excitan mutuamente.

Cuando yo contaba con 17 a�os, como todo chico a esa edad, empezaba a sentir
intensamente irrefrenables deseos carnales por el sexo femenino, ya que todas las
mujeres me parec�an deseables, las j�venes por ser j�venes y las m�s mayores por
tener ese atractivo de la experiencia. Me hac�a pajas continuamente, pensando en
todas las chicas que pasaban por mi mente: mi vecina, mis compa�eras del instituto,
alguna amiga de mi hermana, las estrellas de la televisi�n, en fin que estaba
bastante salido.

El caso es que por entonces despert� en mi una gran atracci�n por mi hermana
Noelia, que ten�a 20 a�os y estaba buen�sima (y sigue est�ndolo). Todos mis amigos
me lo dec�an, que ten�a una hermana que no me la merec�a de lo buena que estaba,
que ten�a un polvo, que ten�a un cuerpo de locura, etc� El caso es que, quiz�
alentado por ellos, me fij� en ella, m�s como mujer que como hermana y poco a poco
me di cuenta de lo que ten�a en casa.

Noelia es alta, m�s que yo, con el pelo casta�o, largo, casi hasta media espalda,
sus ojos son muy bonitos, color caramelo, sus labios grandes, muy sensuales y con
un color sonrosadito que los hace muy deseables, tiene una cara preciosa, sus tetas
redondas, duras y muy bien puestas , su culo impresionante, de esos culitos que
siempre deseas acariciar y chupar como si de un pastel se tratase, sus piernas
preciosas, largas, muy morenitas y con unos muslos divinos. En fin, era y es un
bomb�n. Quiz�s pens�is que exagero, pero no es as�, pues much�sima gente lo dice y
es de esas chicas que hace volver la vista en la calle a todos los t�os para
mirarla, esta como un tren, en serio.

A sus 20 a�os estaba m�s que apetecible y gracias a su belleza pod�a permitirse el
lujo de cambiar de novio casi cada semana. Adem�s ella sab�a c�mo estar a�n m�s
hermosa, vistiendo con ropas ajustadas, vestidos cortos y ce�idos y haciendo esos
movimientos que a m� me volv�an loco.

Hasta entonces s�lo hab�amos compartido nuestros juegos infantiles como hermanos,
pero despu�s no pod�a evitar sentirme muy atra�do sexualmente por ella. Yo ya hab�a
empezado a observar m�s a Noelia, pero la primera vez que salt� la chispa en m� y
dese� a mi hermana como mujer, en un instinto animal incontrolable, fue una ma�ana
de verano, en uno de esos d�as que yo me levantaba con una calentura matinal propia
de un adolescente. Nada m�s saltar de la cama, pas� por la cocina y estaba Noelia,
prepar�ndose el desayuno. Llevaba un camis�n muy cortito y justo cuando yo pasaba
por la puerta la encontr� agachada frente a la nevera buscando algo, la vista de
sus largas y morenas piernas junto a su postura ense�ando sus braguitas metidas por
su precioso culo, me pusieron como un toro, pues se me puso dura como una piedra.
Por un momento sent� el instinto de meterle mano, pero no lo hice, claro. Espiando,
escondido tras la puerta, observ� todos sus movimientos, consiguiendo que tuviera
una erecci�n mayor de lo habitual. Por primera vez me hice una paja monumental en
el ba�o pensando en mi hermana, sintiendo un gusto mayor que otras veces, hasta que
los chorros de semen llegaron a salpicar mi cara.

As�, poco a poco, cada d�a que pasaba la deseaba m�s y m�s, y me atormentaba con la
idea de acariciarla, besarla y met�rsela hasta el fondo. Por un lado yo pensaba que
aquello no estaba bien, pero mi polla no pensaba lo mismo.

Otro d�a Noelia me hab�a vuelto a poner como una moto, se hab�a comprado unos
pantalones muy ajustados color crema y cuando yo estaba en mi cuarto tumbado en la
cama oyendo m�sica, entr� de repente con esos pantalones que le sentaban de miedo.
Se coloc� muy cerca de m� y d�ndose un giro me pregunt�:

� ��Qu�? , �c�mo me quedan?� � Sus sensuales movimientos consiguieron una nueva

erecci�n de mi polla. Contest� un poco atontado observando sus muslos apretados
bajo esa ce�ida prenda y c�mo su culo se mostraba m�s redondo y resping�n:

� �Te sientan muy bien� � ��No me marcan mucho aqu�?�

Me hizo esa pregunta inocentemente se�alando su sexo

. Bueno, yo cre�a que iba a reventar, mientras mi pene palpitaba de excitaci�n. Su

chochito se marcaba precioso, algo abultado y la tela se met�a un poco en su
rajita, lo que unido al color del pantal�n color carne, parec�a estar desnuda de
cintura para abajo. Intent� contestar con naturalidad:

� �No, la verdad es que te queda muy bien, en serio�

Luego sali� de mi cuarto meneando las caderas con movimientos enloquecedores, se

volvi� hacia m� al llegar a la puerta y me sonri� con malicia. Estaba seguro que
hab�a notado mi erecci�n y ella sab�a que me pon�a cachondo, que me ten�a loco y me
provocaba a�n m�s sabi�ndolo. Nada m�s cerrar la puerta, me saqu� mi aprisionada
polla y me masturb� otra vez con ganas y es que no me la quitaba de la cabeza.

Otras veces la espiaba cuando estaba en su cuarto en braguitas y sujetador o cuando

se depilaba las piernas o cuando estaba dormida en la cama tapada solo con un corto
camisoncito, cada d�a que pasaba me gustaba m�s y m�s.

Una vez, estaba yo jugando con el ordenador que ten�a Noelia en su cuarto, cuando
de pronto, entr� ella tapada con una toalla reci�n salida de la ducha. Estaba
preciosa con su carita brillante, sus lindos ojos, su pelo mojadito y su cuerpo
tapado con una blanca toalla. Se secaba el pelo con otra toalla y me preguntaba:

� ��Qu� haces?�. � Yo disimul� y le dije que estaba haciendo un trabajo para clase.

� �Me quer�a vestir�� � �Pero es que tengo que acabar esto��

Lo cierto es que no ten�a que acabar nada, pero disimul�, con la intenci�n de que
si ten�a la oportunidad de ver c�mo se vest�a o mejor dicho se desvest�a, esa pod�a
ser una buena oportunidad. Quiz�s mi jugada saliera mal y fuera a cambiarse al
ba�o. Pero afortunadamente no fue as�.

-�Bueno si me prometes no darte la vuelta, te dejo seguir con tu tarea�

Yo cre�a estar en el cielo, pues colocando la pantalla del ordenador

estrat�gicamente pod�a verla c�mo se vest�a perfectamente, reflejada en el monitor.
No es que la visi�n fuera perfecta, pero me conform�. Como un ni�o bueno le
contest�:

-�Vale, te prometo que no me dar� la vuelta�

A continuaci�n de espaldas a m� dej� caer la toalla al suelo, pudiendo mostrarme en

el reflejo del ordenador su espl�ndida figura completamente desnuda, su espalda
mojada, su redondo culo y sus piernas� Yo estaba armado de nuevo y pensando en la
paja que me iba a cascar despu�s. Luego, despu�s de secarse todo el cuerpo, pude
ver c�mo se colocaba de perfil, en una imagen a�n m�s maravillosa de su silueta,
con sus lindas tetas, su vientre liso, sus muslos� Empez� a darse una crema por
todo el cuerpo, supongo que body milk o algo as�. Qu� alucine, ver c�mo se esparc�a
la crema por sus tetas mientras estas se apretujaban en sus manos, c�mo luego se
echaba ese mejunje por los muslos, por los brazos, por la cintura� Yo babeaba.

Despu�s se gir� otro poco y entonces pude contemplarla de frente, su cara, sus
tetas, su ombligo, sus piernas y por supuesto su co�ito bien recortado. Tuve que
oscurecer la imagen del monitor para observarla mejor y yo pensaba que me mor�a y
mi polla no aguantaba m�s en su prisi�n. Puso una pierna sobre la cama y empez�
como a palparse en su entrepierna, supongo que mir�ndose el vello de su pubis, por
si estaba bien depilado, y ya lo creo que lo estaba. Sigui� as� toc�ndose las
ingles y sus pelitos, yo no sab�a si estaba excitada, pero me lo parec�a, quiz�s
porque yo estuviera all�, o quiz�s supiera que yo la estaba observando reflejada en
la pantalla y estaba ofreci�ndome un bonito show, el caso que no parec�a importarle
que yo estuviera all�, aunque de espaldas a ella. Despu�s cogi� unas braguitas
blancas de su caj�n se las ajust� en sus preciosas caderas y a continuaci�n se puso
un sost�n blanco tambi�n.

� �Ya estoy visible�

Me di la vuelta y aun estaba en ropa interior, me qued� mir�ndola embobado y ella

lo not� y sonri� de nuevo con malicia, luego se puso unos jeans y una camiseta, se
sec� el pelo con el secador de mano, se acerc� a m� por la espalda y me dio un beso
en la mejilla, impregn�ndome con su olor a hembra.

� �Hasta luego hermanito

Sali� del cuarto con un gracioso meneo de caderas. Yo me levant�, bastante

empalmado y cog� la toalla con la que hab�a estado sec�ndose y que aun estaba
tirada en el suelo, me la acerqu� a la cara y estuve oli�ndola, desprend�a un aroma
riqu�simo y all� mismo me masturb�, corri�ndome encima de la toalla.

La noche de San Juan de aquel a�o fui invitado por Noelia a una hoguera que hac�an
sus amigos en el jard�n de su casa. Ella estaba guap�sima con una minifalda blanca,
un top verde con el ombliguito al aire y unos zapatos de tac�n. Normalmente no
sal�a con ella ni con sus amigos, pero ese d�a no dud� en acompa�arla con su
pandilla, que por cierto los chicos estaban loquitos por ella. Mi hermana ten�a
unas amigas que estaban muy bien, pero no tanto como ella, sin duda era la que
estaba m�s buena de todas. Encendimos la hoguera, bebimos unas litronas y con un
cassette pusimos algo de m�sica, estuvimos bailando, riendo y bebiendo toda la
noche. En uno de los bailes lentos yo me qued� sentado en una tumbona mientras casi
todos los dem�s estaban emparejados. Noelia estaba bailando con Juan Luis, uno de
sus amigos, muy apretujados y sus manos se deslizaban por la espalda y la cintura
de ella, llegando incluso a rozar su culito. Yo estaba algo celoso, pues deseaba
estar en el papel de su compa�ero. De pronto mi sue�o se cumpli� y mi hermana se
dirigi� a mi invit�ndome a bailar:

� �Vamos, baila conmigo Ra�l� � �Pero si no s 酔 � �Bueno, no importa, yo te

ense�o�.

Me agarr� por una mano y me sac� a bailar. Nuestro cuerpos chocaron y yo cre�a
estar en la gloria.

� �Vamos abr�zame por la cintura�

Al tiempo que me ayudaba a estrechar su cintura, ella colocaba sus manos en mis
hombros. Torpemente comenc� a bailar y Noelia iba corrigiendo mis movimientos. Qu�
maravilla poder acariciar su cinturita desnuda.

� �P�gate m�s a m�, tonto, que no muerdo�

Nuestros dos cuerpos se juntaron a�n m�s. Sus tetas se apretujaban en mi pecho,
pues ella era algo m�s alta que yo, mi pene otra vez a tope se apretaba contra su
tripita y ella deb�a notarlo, pero no parec�a importarle. De pronto me pregunt�:

� ��Te pone cachondo bailar conmigo?�

Creo que me puse colorado como un tomate y contest� un �S� casi inaudible. Ella me
susurr� al o�do como un ronroneo:

� ��A que es divertido?�

�Ser�a que ella tambi�n se pon�a caliente bailando conmigo? . As� estuvimos
mientras dur� aquella canci�n que se me hizo corta. Despu�s son� otra m�sica m�s
movida y tras unos cuantos bailes y unas cuantas copas, regresamos a casa muy
tarde. Al llegar al portal ella pas� por delante m�o ofreci�ndome sus
espectaculares piernas por detr�s, subiendo la escalera. �Y si meto mi mano entre
sus muslos?, pensaba para m�. No lo hice. Fuimos cada uno a nuestro cuarto a dormir
y claro yo me casqu� otra de mis ardientes pajas pensando en ella.

Una ma�ana, yo me estaba duchando tranquilamente, cuando not� que alguien hab�a
entrado en el ba�o. De pronto se abri� la cortina de la ducha por completo
apareciendo mi hermana tan s�lo con un bikini diminuto de color azul celeste,
tap�ndole a duras penas, sus hermosas tetas y cubri�ndole lo justo el triangulo de
su maravilloso co�ito. Su piel morena se resaltaba en aquel reducido bikini. Me
qued� alelado observando su figura. Sin importarle que yo estuviera desnudo, hizo
un giro sobre s� misma y me pregunt�:

� �Me he comprado este bikini, �te parece demasiado sexy?�

Al instante y como un resorte mi polla se hab�a puesto m�s dura que nunca, en una
erecci�n incontrolable. Sus ojos se dirigieron a mi tieso pene, que yo intent�
tapar bastante avergonzado. Ella se ri� a carcajadas diciendo:

� �Veo que si, que es muy sexy �.

Despu�s sali� del ba�o y todav�a pude o�r sus risas por el pasillo. C�mo me pon�a
la hija de puta, me ten�a loco. Comenc� a masturbarme con ganas pensando en lo
guap�sima que estaba con aquel bikini, cuando not� que alguien me espiaba por una
abertura de la cortina de la ducha. De nuevo era ella. Abri� la cortina otra vez. �
Me pill� en plena faena!�

Con su p�cara sonrisa me pregunt�:

� ��Te estas masturbando por m�?� � Por un momento no supe qu� contestar, cre�
morirme, pues de seguro que iba con el cuento a mis padres. Trat� de disimular.

� �No, no, s�lo me estoy enjabonando�

Volvi� a re�rse con ganas.

� �Venga t�o, que no soy tonta� .

Su espectacular cuerpo se ensalzaba a�n m�s con ese bikini y mi polla no hab�a
bajado absolutamente nada. Sin apartar la vista de mi polla que se encontraba
atrapada entre mis manos me dijo:

� �Por m� puedes seguir�no te vas a quedar as� � Despu�s se march� y pude o�r c�mo
se re�a otra vez. Despu�s de haberse marchado continu� masturb�ndome imagin�ndola
con su bikini y c�mo me chupaba la polla con sus carnosos labios. Me corr�
salpicando los azulejos con mi semen.

Ese d�a, durante la comida, no dejaba de mirarme y de sonre�rme con malicia,

mientras mis padres no parec�an percatarse. C�mo sab�a la muy zorra que yo estaba
completamente cachondo con s�lo mirarla. Durante toda la tarde pasaba donde yo
estaba con sus insinuantes movimientos, sus maliciosas sonrisas, vistiendo con su
bikini bajo una camiseta muy cortita que permit�a ver su culito y sus muslos.
Cuando ella se fue a la playa, me hice cuatro pajas m�s por su culpa.

Despu�s de lo del d�a anterior, parec�a que Noelia hac�a todo a prop�sito: sus
movimientos sensuales delante m�o provoc�ndome y excit�ndome, con sus ajustados
pantalones, luego se cambiaba y pasaba a mi cuarto con un vestidito corto con
tirantes, con un hermoso escote. Despu�s volv�a a pasar por mi habitaci�n en ropa
interior y otra vez tapada con un albornoz amarillo tras haberse duchado.

Una de esas veces cuando yo estaba en mi cuarto, ella me llam� desde el suyo:

� �Ra�l, �puedes ayudarme?�.

Cuando llegu� a su habitaci�n estaba sentada tras la cortina de su ventana, subida

en el pollete pint�ndose las u�as de las manos de color rosa p�lido. Estaba apoyada
en la pared con sus piernas dobladas y tapada con su cortito albornoz amarillo. La
luz que entraba por la ventana la iluminaba como una piedra preciosa, estaba
resplandeciente, �c�mo pod�a tener una hermana tan guapa y que estuviera tan
buena?. No sab�a si era un regalo divino o si al contrario era un castigo del
demonio, que me mostraba a mi hermana y yo no la pod�a catar.

� ��Qu� quieres?� � ��Puedes pintarme las u�as de los pies?, es que no me he dado
cuenta de hacerlas primero y tengo las manos reci�n pintadas��

Ella sab�a que yo no ten�a ni idea de pintar las u�as, pero sin duda lo que quer�a
era ponerme cachondo.

� ��Yo?, pero si no s�. � �Venga que es muy f�cil, yo te digo c�mo hacerlo..� � Qu�
guapa estaba con su pelo mojado y con sus piernas flexionadas. Yo estaba en ba�ador
y mi pene ya empezaba a subir por momentos. A duras penas, con las indicaciones de
ella comenc� a pintarle las u�as de sus lindos pies. De vez en cuando me correg�a:

� �As� no, tonto, as�.

Yo alzaba mi mirada por sus largu�simas piernas y a su preciosa cara reci�n

duchadita. En un aparente descuido ella entreabri� un poco sus piernas y la
abertura del albornoz me permiti� ver buena parte de sus muslos y� � qu� grata
sorpresa ! a tan s�lo unos cent�metros pod�a ver su co�ito, sus ingles depiladas,
sus pelitos bien recortados formando una hilera alrededor de su sonrosada rajita.
�Qu� maravilla! No pod�a disimular una tremenda erecci�n en mi ba�ador. Era la
primera vez que ve�a un co�o y tan cerquita, qu� hermoso me pareci�. Ella se dio
cuenta y sin separar las piernas me pregunt�:

� ��Te gusta lo que ves?�.

Yo me cort� un poco y segu� disimulando pintando sus u�as como si no hubiera o�do
su comentario. Solt� una peque�a carcajada y abriendo algo m�s sus piernas me dijo:

� �Venga, puedes mirarlo, seguro que es el primer co�ito que ves �no?�

Sin duda disfrutaba haci�ndome sufrir, pero a m� no me importaba, pues el poder

observar su magn�fico cuerpo era lo m�s alucinante que me pod�a suceder, me
pod�an pinchar que yo no sangraba�

Yo la mir� muy sonrojado y dije:

� �S�, la verdad es que nunca hab�a visto uno�. � ��Y� ?, �que te parece?� �
�Precioso�

Ella parec�a divertirse mucho con mi timidez y mi excitaci�n. De vez en cuando mis
ojos no pod�an evitar mirar de nuevo su sexo y a ella parec�a encantarle, pues
segu�a en su postura con las piernas ligeramente abiertas. Qu� situaci�n, que
visi�n tan magn�fica. Cuando hube terminado con mi tarea de pintarle las u�as, me
agarr� por el cuello y me dio un leve , aunque muy tierno, besito en los labios.

� �Gracias hermanito�

Me fui al ba�o a pajearme de nuevo. Despu�s comprend� que su petici�n para pintarle
las u�as, no era m�s que una estratagema para provocarme y ponerme cachondo. Al
pasar de nuevo por su cuarto, ya estaba vestida y me pregunt� con su mal�fica
sonrisa:

� ��Ya te has desahogado?�

Yo no dije nada, aunque le devolv� la sonrisa.

Varios d�as m�s tarde, tras varias sesiones de lucimiento por su parte y con gran
arte por cierto, pues Noelia sab�a moverse con una sensualidad terrible, con
miradas que a m� me parec�an lascivas y con una forma de vestir tremendamente sexy,
me invit� a ir a la playa con ella, pues sus amigas no pod�an ir. La acompa��
encantado. Al llegar a la playa con mucho erotismo se quit� su short vaquero y su
camiseta y debajo llevaba el peque��simo bikini azul que la hac�a a�n m�s guapa.

Al bajarme los pantalones ella pudo notar como mi pene marcaba una monta�a bajo el
ba�ador. La muy cabrona sab�a que me ten�a torturado y me dijo con sorna:

� �C�mo te pone este bikini, �eh?� � Al rato me pidi� que le untara el bronceador y
lo hice encantado, se solt� el cord�n del ba�ador, se tumb� boca abajo en la toalla
y con su mano se recogi� el pelo para que su desnuda espalda quedara libre y yo
pudiera extenderle la crema. Su espalda es fina, muy suave y morenita, me encantaba
tocarle la espalda y llegar hasta rozar el comienzo de sus senos, pero tampoco me
atrev� a m�s, luego le di m�s crema por la parte posterior de sus muslos y viendo
como su peque�a braguita me mostraba un delicioso culo. De buena gana le hubiera
pegado un bocado.

Creyendo que hab�a acabado, me dijo que continuara por delante. Se tumb� boca
arriba y �zas! se retir� el sost�n. Sus dos hermosas y morenitas tetas aparecieron
por primera vez a pocos cent�metros de mi, redondas, preciosas y remarcadas por dos
ros�ceos pezones que estaban erectos. Me qued� atontado y empalmado mir�ndola.

� �Venga, �a qu� esperas?, �nunca has visto unas tetas?�.

Lo cierto es que s� las hab�a visto a otras mujeres en la playa y siempre me

gustaba observarlas, pero nunca se las hab�a visto a ella y menos desde tan
cerquita. Comenc� a esparcir la crema por su cintura, por sus hombros y sus brazos,
pero no me atrev�a a pasar mis manos por sus pechos. Ella cogi� una de mis manos y
la pos� en su teta derecha diciendo:

� �Venga, tonto, dame la crema en las tetas que si no se me queman, no te vas a

cortar por eso �no?, somos hermanos�� .
Mi verga hac�a esfuerzos por salirse del ba�ador. Lentamente empec� a darle el
bronceador por su teta derecha y luego la otra, y poco a poco fui perdiendo la
timidez y disfrutando de aquellas esponjosas y suaves tetas, que ten�an un tacto
suave, muy suave, despu�s termin� con sus muslos y ella abri� un poco las piernas,
permiti�ndome esparcir mejor la crema por todas partes, de vez en cuando mis dedos
rozaban la costura de la braguita de su bikini �qu� gozada!. Luego fue ella la que
quiso darme la crema y primero me coloqu� boca abajo y sus suaves manos comenzaron
a acariciar mi espalda, lo hac�a muy suavemente con mucha ternura, despu�s mis
muslos y d�ndome la vuelta mis hombros, mis brazos y mi pecho, cosa que hizo tener
mi pene erecto durante toda la operaci�n. Aunque ella se daba cuenta perfectamente
de mi apurada situaci�n, no hizo ning�n comentario como si fuera la cosa m�s
natural del mundo.

Despu�s de un buen rato tomando el sol, decidimos darnos un ba�o en el mar. Jugamos
en el agua, como hac�amos siempre, salpic�ndonos y empuj�ndonos bajo el agua,

y haciendo nuestras peleas como dos cr�os, aunque ya no lo �ramos.

De pronto ella buce� y desapareci�. Cuando quise darme cuenta estaba bajo el agua
entre mis piernas y de una golpe me baj� el ba�ador hasta los tobillos y se alej�
nadando con la prenda en sus manos, me hab�a dejado en pelotas bajo el agua. Sent�
algo de verg�enza y quise vengarme, entonces nad� r�pidamente donde ella estaba e
intent� bajarle sus braguitas pero se resisti� mucho protestando, hasta que lo
logr� dej�ndola desnudita, llev�ndome sus braguitas. As� estuvimos jugando un rato.
S�lo pod�a ver su cuerpo desnudo difuminado bajo el agua, pero para m� era
suficiente y el s�lo hecho de estar yo desnudo y ella tambi�n, era m�s que
alucinante.

Luego nos devolvimos las prendas, nos las pusimos bajo el agua y volvimos a la
arena a seguir tomando el sol. Ella se qued� adormilada y yo no la quit� la vista
de encima en ning�n momento recorriendo todo su magn�fico cuerpazo.

El domingo por la ma�ana mis padres se fueron de vacaciones y nos dejaron en casa
solos, pues yo ten�a que estudiar para recuperar en septiembre las asignaturas que
me quedaron y Noelia tambi�n se qued� pues ten�a que trabajar, pues ella era
entonces dependienta en una tienda de ropa. Antes de partir con el coche, mi padre
nos dijo su acostumbrada frase:

� �Que se�is buenos�

Esa misma ma�ana cuando yo estaba afeit�ndome en el ba�o, pues ya empezaba a tener
barba de hombre, entr� mi hermana y dijo que ten�a prisa y que se iba a duchar,
despreocup�ndose de que yo estuviera all�, se coloc� de espaldas a m�, se quit� una
blusa que llevaba, se solt� el sujetador, dej�ndolo caer al suelo y luego su falda
y sus braguitas, qued�ndose en pelotas de espaldas a m�, mostr�ndome su desnudo
cuerpo. Otra vez mi polla se iz� como un resorte. Con toda naturalidad abri� los
grifos de la ducha y agach�ndose prob� la temperatura del agua. En esa posici�n
pod�a ver como su chochito sobresal�a entre sus muslos y me mostraba de nuevo su
rajita. Se col� en la ducha, mientras yo terminaba de afeitarme, con una erecci�n
may�scula.

Esa tarde y esa noche mi hermana me provocaba con sus vestiditos, o pase�ndose en
ropa interior, o haciendo esas posturas tan sensuales. Despu�s de cenar uno frente
al otro, ella empez� a comer un pl�tano, y yo no pod�a m�s, sus labios bordeaban la
punta de la fruta, luego con mucha sensualidad lo chupaba con su lengua, para luego
darle peque�os mordisquitos mientras me miraba fijamente a los ojos. Me estaba
matando, todas sus insinuaciones y sus provocaciones eran demasiado para m� y en un
arranque animal pens� violarla all� mismo, aunque no sab�a si ella era consciente
de ello, tuve que contenerme.

Los dos d�as siguientes fueron mortales para m�. Mi padre nos hab�a encargado que
pint�ramos las paredes del garaje, pues estaban llenas de manchas de humedad. El
caso es que entre los dos nos dispusimos a pintar. Prepar� los botes y las brochas
y cuando lleg� Noelia al garaje, yo me empalm� de nuevo al verla. Como hac�a mucho
calor Noelia se puso una camiseta vieja muy ajustada y cortita que descubr�a su
cintura y su ombligo, la camiseta se ce��a tanto a sus curvas que se ve�a que no
llevaba sost�n, dibujando sus tetas bajo la tela y resaltando sus pezones como dos
botones, llevaba tambi�n unos pantalones de lycra azules, muy cortos y
ajustad�simos que llegaban a ense�ar el comienzo de sus posaderas, adem�s se
marcaban perfectamente dibujadas sus braguitas bajo el pantal�n. Yo me dediqu� a lo
duro, d�ndole al rodillo y ella utilizaba un pincel haciendo las esquinas y los
rincones donde yo no llegaba. Yo ten�a el bote muy cerca de m� y ella iba y ven�a a
por pintura mene�ndose delante m�o y poni�ndome como una moto. Creo que alguna vez
pudo notar mi erecci�n bajo el pantal�n. Mi hermana no parec�a tener bastante con
pasearse delante m�o y comenz� a rozarme una y otra vez con su cuerpo. Primero me
pas� las tetas por la espalda con la disculpa de coger un trapo o pintar alg�n
recoveco, cada vez que notaba sus tetas en mi espalda mi polla daba un respingo.
Luego por un lado rozaba sus caderas con las m�as y alguna vez su mano acariciaba
mi trasero como si fuera accidentalmente. Ya no pod�a m&aac

ute;s y fue mucho m�s duro cuando yo estaba pintando una pared y la muy zorra se
coloc� delante m�o pues ten�a el bote de pintura a mis pies, se agach� mostr�ndome
su culo y ech�ndose hacia atr�s se sob� bien sobado su trasero contra mi verga. Yo
cerr� los ojos para sentirla m�s intensamente, que gozada poder tener el culo de mi
hermana pegado a mi erguida polla. Notando mi empalmada, ella se dio la vuelta con
carita dulce:

� ��Que tienes ah� tan duro hermanito?� � A continuaci�n se ri� con ganas. Le
encantaba hacerme sufrir.

Esa noche casi no pude dormir y quise que toda mi tortura tuviese alg�n premio,
aunque como he dicho el s�lo hecho de observarla ya era demasiado.

A la ma�ana siguiente, el d�a amaneci� muy caluroso y de nuevo Noelia me sorprendi�

acerc�ndose a mi cuarto vestida tan s�lo con un camis�n de seda brillante de color
gris muy corto de tirantes. Yo todav�a estaba tumbado en la cama, desnudo bajo las
s�banas, pues el calor era sofocante.

� �Buenos d�as Ra�l� � �Hola�

Su espl�ndida figura se ensalzaba con ese mini camis�n que formaba arrugas con sus
movimientos y pensar que debajo estaba desnudita, me electrizaba. Con su habitual
sonrisa me dijo:

� �Bueno, lev�ntate ya, que quiero lavar las s�banas� � �S�, ahora voy� � �No
venga, date prisa y lev�ntate ya que quiero poner una lavadora pronto� � �Vale,
pero sal un momento, es que estoy sin ropa� � �Vaya, �te va a dar verg�enza que te
vea tu hermana desnudo?� � �Bueno yo��

Yo notaba que mi hermana se hab�a levantado m�s excitada de lo normal, quiz� por el
calor o por el hecho de que estuvi�ramos solos en casa o vete tu a saber, pero
quer�a verme en bolas, estaba claro.

� �Venga Ra�l� � �Pero es que�� � ��Qu� pasa?, �que la tienes como un garrote?�

Ri� a carcajadas otra vez por mi situaci�n, ya que era cierto lo que dec�a, pues
ten�a una empalmada brutal. Luego me dijo:
� �Somos hermanos, no creo que nos vayamos a asustar por vernos desnudos� Total ya
nos hemos visto otras veces� � �S�, pero �� � ��Cu�l es el problema?, �te quedas
m�s tranquilo si me desnudo yo tambi�n?�

Esa frase hizo que todo mi cuerpo se estremeciera y los pelos se me pusieron de
punta, igual que mi pene. Pregunt� incr�dulo:

� ��C�mo?� � �S� tonto, �que si quieres verme desnuda a m�?� � �S�, claro que me
gustar�a� � �Si es una tonter�a hombre, es la cosa m�s natural del mundo, al fin y
al cabo somos hermanos. �Pues no te he ba�ado yo miles de veces cuando eras m�s
peque�o?� � �Ya, pero ya no somos cr�os��

De nuevo sus risas.

� �Te excitar�a mucho verme en pelotas �verdad?�

C�mo lo sab�a la muy putilla. Yo no pod�a m�s, estaba totalmente empalmado y muy
muy excitado.

� �S� que me gustar�a verte desnuda�� � �Pues no hay problema hombre��

Se puso en pie, se quit� un tirante del camis�n, luego el otro y la vaporosa tela
cay� r�pidamente a sus pies. �Qu� maravilla! �Qu� preciosidad!. Creo que me qued�
con la boca abierta observ�ndola, me qued� embobado, atontado, alelado,
agilipollado. Qu� cuerpo m�s perfecto ten�a: su preciosa cara, sus redondas tetas
con sus rosados pezones, su cintura plana y estrechita, sus anchas caderas, sus
muslos, sus piernas, su hermoso pubis recortado. Mi hermana ten�a cuerpo de diosa,
o al menos a m� me lo parec�a. Ella insisti�:

� �Bueno, �qu�?, �qu� tal?�

Creo que yo me qued� inmovilizado porque mi cuerpo no respond�a.

� �Estas buen�sima Noelia �sabes?� � �Gracias hermanito, pero ahora te toca a ti�

Intent� salir de la cama con naturalidad, pero en el fondo estaba algo cortado.
Cuando lo hice, evidentemente mi polla estaba como una piedra. Me sent� en la cama
y ella sonri� observando mi miembro.

� �Con 17 a�os, vaya aparato que tienes� � ��Te gusta?� � �S�, est� muy bien, es
m�s grande que algunos de los que he

visto� � �Has visto muchos?�

Ella se ri�.

� �Bueno no demasiados, pero s� he visto alguno, desde luego el tuyo supera la

media� � �Con ese cuerpo que tienes hermanita, habr�s destrozado a m�s de uno�

Volvi� a re�rse, con esa linda sonrisa que la hac�a a�n m�s hermosa y m�s deseable.
No quitaba la vista de mi polla. Luego se sent� a mi lado y me dijo:

� ��Te excita verme as�? � �S�, mucho, �no se nota?� � �Ja,ja, ja� Luego te
masturbar�s otra vez �no? � � �Claro Noelia, me tienes loco� � �Lo cierto es que me
gusta que te pongas cachondo por mi culpa� Se me ocurre una idea, como pap� y mam�
no est�n y como hace tanto calor podemos ir desnudos por casa, as� no te perder�s
detalle y te lo pasar�s en grande vi�ndome desnuda y yo a ti, porque tambi�n me
gusta verte desnudo �qu� te parece?� � Era incre�ble, mi hermanita, ese sue�o que
ten�a en la cabeza desde hac�a tiempo, se me iba a mostrar enterita en bolas, s�lo
para m�. �Alucinante!. Contest� entusiasmado:

� �Me parece genial�

As� lo hicimos, aunque al principio yo estaba algo nervioso, luego fue mucho m�s
divertido, pues de vez en cuando ten�a cerca a mi hermanita sin ropa y eso
provocaba una y otra erecci�n en mi polla. A ella eso le gustaba y le excitaba , a
m� no digamos.

Mientras desayun�bamos, ella se levantaba continuamente y se paseaba delante m�o

con su espl�ndido cuerpo desnudo provoc�ndome, agach�ndose cuando met�a la ropa en
la lavadora, acerc�ndose a m�, preparando la comida y ella disfrutaba tambi�n
observ�ndome y mirando mis continuas empalmadas. Alguna vez pasaba muy cerca de m�
y nuestros cuerpos se rozaban, cada roce era como un chispazo. Era algo extra�o y
divertido a la vez, pues nunca lo hab�amos hecho, pero a los dos nos gustaba.

Despu�s de comer (tambi�n desnuditos), nos sentamos a tomar unos bombones helados
en el sof� mientras ve�amos la tele. Ella sacaba y met�a su helado de la boca,
succion�ndolo con la boca y con la lengua mientras sus ojos me miraban lascivos. Me
provocaba con esos gestos, con esas miradas y adem�s tenerla desnuda a unos
cent�metros de m�, era lo mejor que me pod�a pasar en la vida. Mi polla volv�a a
ponerse a tope. Ella se qued� mirando mi tieso aparato:

� �Vaya erecci�n tienes Ra�l �todav�a no te has masturbado hoy?� � �No a�n no� �
�Pues no deber�as quedarte con esa calentura�

Me dec�a eso con esa boquita brillante por el helado y con sus labios carnosos en
forma de coraz�n que yo deseaba tener rodeando mi polla. Yo miraba su desnudez
boquiabierto. Ella me gui�� un ojo.

� ��Te parezco sexy?� � ��Sexy?, creo que tienes un cuerpo perfecto� � ��Te parezco
m�s atractiva que otras chicas?� � �Claro, eres la mujer de mis sue�os� � �Pero soy
tu hermana.� � �Pero�es que t� me provocas Noelia� � De nuevo su risa.

� ��De veras?, dime �c�mo te provoco?� � �S�, me vuelves loco, con tu cuerpo, con
tus andares, con tus posturas, con tus insinuaciones, al final tengo que ir al ba�o
y me pajeo como loco, como nunca lo hab�a hecho, te imagino c�mo te desnudas ante
m� y c�mo me acaricias y c�mo te meto la polla en tu co�ito��

A Noelia se le dilataban las pupilas y las mejillas se le sonrosaban, algo que

denotaba su excitaci�n. Su cara resplandec�a y su excitaci�n iba en aumento. De
nuevo me sorprendi�.

� ��Te gustar�a masturbarte vi�ndome as�, desnudita?� � �No, es que me da

verg�enza� � ��Por qu�?, no seas tonto, �no te haces miles de pajas imagin�ndome?,
pues aprovecha y hazlo vi�ndome, a m� no me importa, adem�s me gustar�a verte c�mo
lo haces� � Claro que me apetec�a, pero sent�a cierto reparo de hacerlo delante de
ella, nunca me hab�a pajeado delante de nadie.

� �Me da corte�� � �Venga, me gustar�a verte y me excita saber que lo haces por m�

De nuevo su frase me sorprendi� y me excit� mucho. Contest� ruborizado.

� �No

me atrevo� � �Venga, �quieres que yo te provoque? �pongo alguna pose sexy? �quieres
que me masturbe yo tambi�n?�
Sin dejarme responder mi hermana se tumb� boca arriba en el sof� y comenz� a pasar
la lengua por sus labios en una pose muy er�tica, con una mano se acariciaba las
tetas y se pellizcaba los pezones con la otra iba bajando por su cintura hasta
llegar a su co�o, abri� sus piernas y empez� a estimularse con dos dedos el
cl�toris y los labios vaginales. �Vaya panorama!

Dud� en principio, pero con aquella escena, mi mano obedeci� a mi hermana y comenc�
a masturbarme suavemente, con lentitud, disfrutando de lo que ten�a delante,
observando su hermoso cuerpo y vi�ndola c�mo se masturbaba ella. Noelia arqueaba su
espalda para mostrarme con mucha sensualidad todo su cuerpo, abriendo ligeramente
las piernas, para que yo pudiera ver bien su conejito. Me percat� que su rajita
estaba brillante debido a lo cachonda que estaba.

� �Qu� polla m�s linda tienes Ra�l, c�mo me gusta verte masturbarte� � �A m�
tambi�n me gusta verte c�mo te acaricias� � Ella cerraba los ojos, soltando gemidos
y jadeos. Su cuerpo brillaba por el sudor. Mi polla estaba a punto de reventar.
Noelia empez� a respirar m�s profundamente, sus labios parec�an hincharse y sus
pezones estaban erectos. De repente su respiraci�n se hizo entrecortada, jade� con
m�s fuerza lo que me hizo entender que estaba teniendo un orgasmo, lo cual me llev�
a correrme a m�, soltando varios chorros de semen que cayeron por la alfombra y el
sof�.

Noelia se qued� tumbada un rato recuper�ndose y yo tambi�n. Ella me sonri�:

� �Ha sido bonito �verdad?� � �Ya lo creo� � ��Mejor que imaginarme?� � �Desde
luego. �Y t�? Lo has pasado en grande �no?� � �S�, he tenido un orgasmo genial�

Ella tuvo que marcharse, pues hab�a quedado con unas amigas, se duch�, se visti� y
me dio un besito en los labios.

-�Tenemos que repetirlo hermanito�

La estuve esperando toda la tarde, pero lleg� a casa muy tarde, a eso de las 11 de
la noche. Yo estaba desnudo, sentado en el sof�. Al verme me pregunt�:

� ��Me estabas esperando?� � �S� Noelia, tengo ganas de verte desnuda otra vez� �
�Ven, me voy a dar un ba�o, estoy empapada de sudor�

La acompa�� hasta el ba�o y prepar� el agua. Llevaba una minifalda de cuadros y una
blusa blanca anudada a la cintura, su ombligo parec�a llamarme para que me lo
comiera. Mientras se soltaba la trenza que llevaba el pelo me pregunt�:

� �Te has masturbado ya ? � �No, quiero hacerlo vi�ndote� � �Ja, ja, ja, te gusta
m�s as� �eh?� � �S�, mucho� � ��Quieres desnudarme t�?�

Bueno, ya estaba otra vez, me iba a matar con tanto placer, �c�mo pod�a negarme a
algo as�?

� �S�, claro� � Primero le quit� el nudo de la blusa y uno a uno le fui quitando
los botones de la blusa, dej� caer al suelo la prenda y llevaba un sost�n color
azul. Se dio la vuelta se sostuvo la melena y con alguna dificultad le desabroch�
los corchetes del sujetador. Volvi� a ponerse frente a m� y me sonre�a. A todo esto
mi nabo estaba apuntando al cielo y a ella le encantaba verme as�. Le baj� un
tirante, luego el otro y el peque�o sost�n cay� al suelo tambi�n. Sus erectos
pezones me miraban. Le solt� la cremallera de la falda que estaba en un costado y
se desliz� hasta el suelo. Sus braguitas azules eran muy peque�itas y algo
transparentes, pod�a verse el vello de su pubis a trav�s de ellas. Me qued� un rato
parado.
� �Venga hijo, �a qu� esperas?�

Obedec� como un ni�o bueno y mientras me agachaba iba bajando las braguitas por los
muslos. La despelot� pasando unos momentos m�s que excitantes. Qui�n me lo hubiera
dicho unos d�as antes, ni yo mismo me lo hubiera cre�do. Me agarr� de la mano con
la suya, una suave y peque�a mano que terminaba en unos preciosos dedos y unas
afiladas y bonitas u�as, me encantaban sus manos.

� �Ven, vamos a ducharnos juntos�

Pasamos juntos a la ba�era cogidos de la mano. Agarr� la ducha de mano y comenz� a

mojarse con el agua templada, su cuerpo brillaba y el agua se deslizaba por su piel
formando unos r�os de los que yo deseaba beber. Despu�s me moj� a m� con la ducha
qued�ndonos empapaditos. Mi polla segu�a firme y dura sin importarle el agua que le
ca�a encima. Tom� un poco de gel en una de sus manos, hizo que me girara de
espaldas a ella y comenz� a enjabonarme el pelo, d�ndome peque�os masajes, despu�s
hizo lo mismo con mi espalda. Sus caricias eran suaves, tiernas, sensuales, sus
finas manos eras captadas por todos los poros de mi piel. Baj� sus manos por mi
cintura y enjabon� mi culo para luego meter su mano por la raja, hasta llegar a mi
ano. Pegu� un bote, pues era una especie de cosquilleo y de gusto a la vez. En
alguna de sus lentas y concienzudas pasadas por mi culo aplic�ndome el jab�n, sus
tetas rozaban mi espalda, pudiendo notar c�mo se me clavaban sus duros pezones. Me
enjabon� los muslos, me dio la vuelta, yo estaba como un t�tere, me dejaba hacer lo
que ella quisiera.

� �Cu�nto hac�a que no te ba�aba Ra�l� � �S�, hace mucho tiempo, pero me gusta m�s
as�, los dos juntitos en la ba�era�

Ri� otra vez. Se lleno las manos nuevamente de gel y me hizo una nueva aplicaci�n
por los hombros, el pecho, el ombligo, los brazos� Se agach� para lavarme los
muslos y las piernas y subi� con su mano hasta mis huevos, los sob� con dulzura. Mi
polla rebotaba y yo notaba un gusto enorme en todo mi cuerpo. Me agarr� la polla
con su mano, cuando lo hice me tuve que agarrar a los grifos pues aquello hizo
tambalearme, me ech� la piel hacia atr�s y con la otra mano me enjabono suavemente
el glande. Se recre� con mi polla que ten�a una dureza mayor de la habitual, yo
cre�a que iba a estallar como un petardo. Vaya masaje me hizo la muy cabrona. Dio
una palmada en mi culete y dijo:

� �Te toca, chato�

No lo dud� ni un segundo, tomando algo de gel en mi mano, comenc� a acariciar su

cuerpo, primero su espalda suave y brillante, le enjabon� el pelo metiendo mis
dedos en sus suaves cabellos, acarici� su cintura, sus brazos, su culo� hice lo
mismo que ella, met� mi mano entre sus gl�teos y llegu� hasta su ano, ella solt� un
gemido. Se dio la vuelta y se la ve�a impaciente para que le diera unos masajes por
delante, lo hice encantado. Enjabon� sus hombros, sus brazos, su cinturita, le
dediqu� un buen masaje a sus tetas y a sus pezones, cosa que le agrad� mucho, pues
cerraba los ojos y apoyaba su mano en mi hombro. Baj� por sus muslos, primero por
la parte externa y luego desde los tobillos fui subiendo lentamente, muy
lentamente, acariciando la parte interna de sus muslos rozando sus ingles, mi mano
acarici� su vello p�bico y luego met� un dedo en su rajita siguiendo toda su
longitud. Mi hermana segu�a con los ojos cerrados, comenz� a jadear y a respirar
muy fuerte. Quit� mi mano de su co�ito, pero ella me agarr� la mano y me dijo:

� �No me dejes as�, sigue Ra�l, por favor�

Se la ve�a cachond�sima y segu� acariciando su pubis, sus ingles para rozar con la
yema de mis dedos su h�meda rajita arriba y abajo, encontr� lo que me pareci� el
cl�toris, algo desconocido para m�, fue entonces cuando sus jadeos se convirtieron
en gemidos y alg�n peque�o gritito, que me encantaba. Estaba d�ndole placer a esa
mujer, que era mi hermana, pero que era una fant�stica mujer con un fant�stico
cuerpo. Lleg� al orgasmo y continu� con los ojos cerrados sintiendo en lo m�s hondo
de su cuerpo todo el placer. Luego abri� los ojos y en un susurro me dijo:

� �Qu� gusto me has dado hermanito� � Todav�a est�bamos llenos de jab�n, pero no
nos importaba ya que est�bamos disfrutando como nunca, al menos yo. No pude evitar
empezar a pajearme teniendo a Noelia tan cerca, tan hermosa, tan sensual, tan
cachonda, pero ella separ� mi mano de mi polla y la agarr� con su mano.

� �D�jame a mi, quiero hac�rtelo yo�

Me masturbaba lentamente, con mucho cari�o, con mucha suavidad, haciendo que mi
glande apareciera grande y brillante cada vez que la piel de mi verga bajaba. Qu�
bonito ver su mano agarr�ndome la polla. Ella apoy� su espalda en la pared, subi�
una pierna hasta ponerla en el borde de la ba�era.

� �Ac�rcate m�s a mi Ra�l e imagina que me estas f

ollando �vale? � �Siii�

Yo casi no pod�a hablar. Me acerqu� a ella hasta casi quedarnos pegados y sigui�
paje�ndome a mayor velocidad. Puso la punta de mi polla a pocos mil�metros de su
chochito, mi glande rozaba los enjabonados pelitos de su entrepierna y alguna vez
rozaba su rajita. Sus tetas acariciaban mi pecho y yo cre�a morirme de placer:

-� �Qu� gusto Noelia, qu� gusto�!�

Sus labios se comieron literalmente los m�os en un beso ardiente. Su lengua busc�
la m�a dentro de mi boca. Sigui� masturb�ndome. Yo cerr� los ojos y no pude
aguantar m�s.

� �Me corro , me corro��

Apenas dije eso, cuando de mi polla salieron varios chorros de semen que chocaron
contra su co�ito, sus muslos, su tripita, llegando alguna gota hasta sus pechos.
Seguimos bes�ndonos y mordi�ndonos los labios. Yo me sent�a sencillamente en el
cielo. La mejor paja que nunca me hubiera podido hacer yo. Fue maravilloso.

Volvimos a besarnos abrazados, pegando nuestros cuerpos, jugando con nuestras

lenguas y acariciando nuestros desnudos cuerpos.

� �Noelia, �puedo dormir contigo esta noche?� � �Claro que s� tonto�. � As� fue,
despu�s de habernos secado mutuamente, nos acostamos en la cama de mis padres
abrazados, yo pegu� mi pecho contra su espalda y enseguida me qued� dormido.

Cuando me despert� por la ma�ana, deb�an ser las 7 m�s o menos, Noelia continuaba
dormida frente a mi. Levant� las s�banas para observarla mejor. Qu� guapa y qu�
buena estaba la condenada. Acaricie sus tetas, su pelo, despu�s su co�ito, cuando
se despert�. Se estir� adormilada.

� �Hola hermanito, �qu� tal has dormido?� � �Como nunca� � �Anoche lo pasamos bien
�eh?� � �Creo que nunca voy a olvidar ese momento� � �Ja, ja , ja � Yo todav�a
estoy cachonda, me diste un gusto enorme, �sabes?�

Mi polla volvi� a ponerse como un palo al o�rle decir aquello. Me qued� observando
su desnudez, con todo detalle, fij�ndome en sus ojos, su pelo, su carita de
adormilada, sus tetas, sus piernas, todo, todo, todo.
� �T� no eres consciente de lo buena que estas, �sabes? , vuelves locos a los t�os
y a m� m�s que a ninguno, estas que triscas hermana� � Mis palabras tambi�n la
excitaban y se tumb� boca arriba en la cama magre�ndose todo su cuerpo ofreci�ndome
un panorama que cualquier hombre hubiera deseado, tener a una preciosidad tumbada
junto a ti sob�ndose por todos lados. Despu�s se incorpor�, observ� c�mo yo me
masturbaba vi�ndola, acerco su cara a la m�a y me bes� en los labios. Sac� la
lengua y dibujo el contorno de mis labios con ella, despu�s est�bamos bes�ndonos,
mordi�ndonos�. Se separ� de m� y me sonri�. Su sonrisa, estando desnuda, se me
hac�a a�n m�s resplandeciente. Se�alando mi polla me pregunt�:

� ��Quieres que te lo haga yo?� � Estaba claro que mi hermana estaba muy caliente

� ��Te gustar�a chuparme las tetas?� � �S� que me gustar�a� � �Pues venga, �a qu�
esperas?� � Me tumb� boca arriba, ella se incorpor� y abriendo las piernas se sent�
sobre mis rodillas, su sexo estaba a pocos cent�metros del m�o, sigui� paje�ndome y
sus tetas quedaron a la altura de mi boca. Se agarr� al cabecero de la cama con una
mano y me empotr� sus tetas en la cara. Mis labios y mi lengua empezaron a lamer
aquellas magn�ficas protuberancias mamarias que sab�an deliciosas. Mis dientes
rozaban sus pezones y me lengua juguete� con uno de ellos, lo que produjo que mi
hermana soltara un intenso gemido.

Ella segu�a masturb�ndome, cada vez con mayor velocidad, mientras yo cerraba los
ojos y sent�a aquel profundo gusto en mi interior. Abr� un momento los ojos y ella
no apartaba la mirada de mi glande que parec�a gustarle y no se decid�a pero
parec�a que deseaba com�rselo. Mi sue�o se estaba cumpliendo y no sab�a c�mo iba a
acabar todo aquello, aunque camino llevaba de ser maravilloso. De pronto, casi sin
poder controlarlo tuve un orgasmo y mi semen ba�� de nuevo su desnudo cuerpo, ella
se esparci� toda la leche por el cuerpo como si fuera una pomada. Despu�s volvi� a

besarme dulcemente en los labios.

� �Tengo que irme a trabajar Ra�l, esta noche te har� otro regalito, �de acuerdo?�
� �S� Noelia, te esperar� impaciente� � Se duch�, se visti� y se fue a trabajar.
Todo ese d�a estuve nervioso y excitado pensando en el �regalito� que me iba a dar
mi hermana.

Lleg� a casa sobre las 9 de la noche y yo estaba esper�ndola otra vez desnudo,
tumbado en el sof�. Al entrar en el sal�n me pregunt�:

� ��He tardado mucho?� � �Me ha parecido una eternidad�

Se coloc� de pie frente a donde yo estaba tumbado y comenz� a quitarse cada una de
las prendas que llevaba encima. Me sent� para observarla mejor. Primero se despoj�
de uno de sus zapatos de tac�n, luego el otro, luego se sac� la camiseta de
tirantes sin nada de debajo y sus tetas rebotaron, despu�s se quit� los botones de
la bragueta de su ajustado pantal�n de color naranja y a continuaci�n sus braguitas
blancas. Otra vez me qued� extasiado viendo a mi hermana desnuda frente a mi.
Mec�nicamente comenc� a masturbarme con aquella magn�fica visi�n.

Sin decir nada, me empuj� sobre el sof� y me qued� tumbado boca arriba, ella cay�
sobre mi cintura, apoy� sus manos en mi pecho, me sonri� y su culo comenz� a
moverse r�tmicamente alante y atr�s sobre la punta de mi polla que yo cre�a que iba
a estallar en cualquier momento, pude notar c�mo su h�meda rajita abarcaba mi pene
y le masajeaba siguiendo toda su longitud, d�ndome un gusto tremendo, notando como
sus jugos embadurnaban mi pene. Los dos solt�bamos gemidos. Sus tetas oscilaban
arriba y abajo al ritmo que llevaban sus caderas sobre mi cuerpo. As� estuvo un
buen rato sobando su sexo contra el m�o. De pronto fren� en seco, se me qued�
mirando y me dijo:
� �Esto que estamos haciendo hermanito �estar� bien?� � �Est� de puta madre,
hermana� � �Pero Ra�l, somos hermanos� � �No, somos un chico y una chica que
quieren gozar a tope, yo estoy descubriendo contigo lo que es el placer, no puedo
tener mejor profesora�

Creo que estuve ocurrente con aquella frase, porque a mi hermana se le olvidaron
todos los prejuicios y todos sus temores. Se desliz� hacia atr�s bes�ndome el
pecho, la cintura, se arrodill� entre mis piernas, bes� mis muslos hasta colocar su
cara frente a mi polla. Cuando menos me lo esperaba, sus carnosos labios hab�an
bordeado la punta de mi polla y estaba chup�ndome, bes�ndome y mordi�ndome todo el
nabo y su mano acariciaba mis huevos. Empez� a bajar sus labios por toda la largura
de mi pene y me hizo una mamada espectacular. Sus labios se apretaban contra mi
erguido miembro y sus ojos me dedicaban una tierna mirada. Era la primera mamada
que me hac�an y no tard� en soltar unos chorros de semen que salpicaron en su boca,
su cara, sus tetas y su pelo. Ella estaba disfrutando, se le notaba.

Agarr�ndome la polla y calada con mi semen por toda la cara me pregunt�:

� �As� es mucho mejor �no?�

Yo no pod�a articular palabra, estaba como ido, mis piernas temblaban, mi polla
daba espasmos y mi respiraci�n era fatigosa.

Se puso en pie , me incorpor� sentado y ella se coloc� entre mis piernas y

ofreci�ndome su co�ito me dijo:

-��Te gustar�a com�rtelo?� � �S� Noelia, t�mbate en la alfombra� � Se ech� en el

suelo boca arriba y yo puse mi cabeza entre sus piernas, empec� por besarle sus
suaves muslos, luego la cintura, el pubis, las ingles, hasta que mi lengua
descubri� su h�medo chochito. Aquel sabor tan rico, que a�n recuerdo, era algo que
no me imaginaba, me sab�a delicioso y ella me agarraba del pelo con fuerza
sintiendo un placer intenso, soltando peque�os alaridos y gemidos. No tard� en
tener un orgasmo cuando mi lengua sabore� su cl�toris. Por un momento me asust�
pues dej� de respirar, parec�a haberse desmayado, pero no era as�, s�lo durante
unos segundos contuvo la respiraci�n y a continuaci�n solt� un gemido muy largo:

� �Aaaaaauuuuuuuuhhhhh, qu� gusto, qu� gusto, mmmmm, qu� bien Ra�l�� � Para
entonces mi polla empezaba a recuperarse de nuevo y ella se percat� y me dijo algo
que nunca me hubiera esperado:

� ��Quieres follarme Ra�l?&

quot; � �Siiiii�

Mi respuesta fue casi inmediata.

� �Pues vas a ver c�mo por fin la vas a tener dentro de m�, eso que siempre has
imaginado, quiero hacerte disfrutar ese momento, quiero que me folles como loco,
quiero que me partas en dos�

Entonces ella se incorpor� y volvi� a meterse mi pene en la boca haciendo que se

pusiera como una piedra. La vista de mi polla desapareciendo en su preciosa boca me
encantaba.

Otra vez me coloc� tumbado sobre el sof�, abri� las piernas, acerc� su sexo al m�o
y agarr�ndome la polla la pas� arriba y abajo por su rajita cuando de pronto se
sent� sobre mi introduci�ndose mi miembro lentamente en su interior. Por un momento
mi vista se nublo, pude ver el cielo, las estrellas y el m�s all�. Nunca hab�a
sentido un placer tan grande e intenso. Toda mi polla entr� en el co�o de mi
hermana. Los m�sculos de su vagina se aferraban a mi falo y en un mete y saca
fren�tico, comenz� a follarme como una loba, mientras gritaba y gem�a con fuerza.
Se puede decir que pr�cticamente mi hermana me viol� (aunque yo me dej� ,claro). Un
nuevo orgasmo la invadi� y repiti� mi nombre.

� �Ra�l, Ra�l, Ra�l�. ayyyyy, Ra�l�

Ella segu�a subiendo y bajando por mi polla y sus tetas bailaban al comp�s de sus
movimientos. Despu�s se levant� se coloc� en cuclillas d�ndome la espalda y empez�
a botar de nuevo sobre mi pene mientras yo la agarraba por la cintura y las
caderas. Cerr� los ojos y daba gemidos que a m� me extasiaban. Mi polla se hinch�
dentro de su cuevita y me corr� intensamente en su interior. No pod�a imaginar que
un polvo fuera tan maravilloso. Creo que desde entonces amo el sexo y a mi hermana,
por supuesto, pues me dio algo que yo no conoc�a, con una maestr�a y una ternura
incre�bles.

Permanecimos unidos unos momentos recuper�ndonos de tanto frenes�.

� �Lo has hecho muy bien hermanito, nunca me hab�an dado tanto gusto, follas de
maravilla�

Me sent� muy contento de o�rla decir eso. Luego estuvimos charlando sobre lo
ocurrido y nos re�mos pensando en la cara de nuestros padres si nos hubieran
pillado.

Durante los 15 d�as que duraron las vacaciones de mis padres, mi hermana Noelia y
yo seguimos con nuestros er�ticos juegos, durmiendo juntos, follando a diario y yo
aprend� nuevas posturas, nuevos placeres y nuevas experiencias que mi hermana me
regal� y me ense�� y que recuerdo hoy como si el tiempo no hubiera pasado.

Ahora Noelia, que sigue estando tan buena como antes, est� casada con un arquitecto
y se puede decir que vive muy bien. Yo voy a visitarla a su casa a menudo. Cuando
no est� mi cu�ado, volvemos a revivir los d�as pasados como lo hac�amos entonces,
nunca he sentido con ninguna mujer tanto placer como el que viv� y sigo viviendo
con mi hermana.

Tartufo