VÍNCULOS AFECTIVOS

Y RELACIONES SALUDABLES
Buenos días muchachos, actualmente vivimos días difíciles, días de pandemia que causan graves
daños a nuestra sociedad, a nuestra familia y a nuestras emociones, la angustia de tener un
familiar enfermo o el dolor de perder a un ser querido, incluso pensar en la posibilidad de que
estas cosas nos pase, es lo que nos provoca miedo, y por eso para evitar que esta situación
llegue a nuestras casas, pues lo adecuado es no
salir, no estar cerca de otra persona, o no tocar
a otra persona. Afortunadamente el porcentaje
de contagio de un día al otro está disminuyendo,
hace 3 días era 8%, anteayer era 6%, ayer era 4%
y hoy estamos, bueno hoy estamos 9%, maso
menos, vamos disminuyendo, son buenas noticias,
pero por ahora solo se aplana la curva, pasarán
meses para que esto acabe, por ello es necesario
quedarse en sus casas.
Hace poco mi cabello estaba largo, y me
incomodaba, bajo estas condiciones, ir a un
barbero no es lo recomendable, debido a que
estás cerca de alguien, por ello había escuchado
que algunas personas se cortaban a si mismos, entonces con
ansias intenté hacerlo, me parecía interesante y divertido, y ya ven, igual les recomiendo, a
ustedes si no tienen problema atrévanse. En general estos tiempos son importantes para
descubrir nuestros talentos, no vivir solo encerrados, sino también buscar cosas divertidas e
interesantes que hacer. Busquen esas emociones respetando la cuarentena.
Bueno, ¿QUÉ VAMOS A APRENDER HOY?
Esta clase nos permitirá evaluar y comprender los vínculos afectivos
de pareja que establecen las y los adolescentes como expresión de
su sexualidad. Como saben ya por la clase anterior, la sexualidad no
es solo sexo, sino también querer conocer a alguien o compartir
momentos. También podremos explicar cómo la autonomía, el
respeto y la responsabilidad permiten construir relaciones
saludables y equitativas, así como expresar respeto por las formas
de vivir y pensar la sexualidad de mujeres y hombres en el marco de
los derechos y rechazando todo tipo de estereotipos de género que
llevan a la discriminación.
Les narraré una historia, que podría pasarle a cualquiera:

¿CÓMO TENGO QUE HACER PARA QUE ME QUIERAS?

Miguel y Valeria son dos estudiantes de 4to de secundaria. Como compañeros de aula,
compartieron muchos momentos; y, luego de un tiempo, empezaron a sentir mucha
atracción el uno por el otro. Y fue así como llegaron a ser enamorados. Tanto los padres
de Valeria como de Miguel saben de esta relación.
En el colegio se acerca la fiesta de promoción de los estudiantes de 5to. Y Leonardo,
estudiante de 5to, y amigo de la infancia de Valeria, le ha pedido a esta que sea su pareja
de promoción. Valeria está muy entusiasmada por ir a la fiesta, y lo comenta en casa.

Valeria: Mamá, papá, les quiero contar que seré pareja de promoción de Leonardo.
Mamá: Que bueno, hijita, pero no se vaya a molestar Miguel. ¿Él ya sabe? Deberías
pedirle permiso para que no tengas problemas.
Padre de Valeria: No le digas eso a nuestra hija. Ella puede tomar sus decisiones. Aunque,
Valeria, no está de más que se lo comuniques.

Valeria piensa que esa decisión es solo suya, y que está en la libertad de ir o no a la fiesta.
Quiere ser pareja de Leonardo y quiere disfrutar de la fiesta junto a sus compañeros y
compañeras.
En el colegio, Valeria se encuentra con su amiga Lucía, y le cuenta que Leonardo le ha
pedido que sea su pareja de promoción, y que su mamá le ha dicho que debería pedirle
permiso a Miguel, porque se puede molestar.

Lucía: ¡Ay, Valeria! ¿Para qué te haces problemas? Simplemente miéntele a Miguel.
¿Acaso es tu papá? ¡Solo es tu enamorado!

Valeria se queda pensando en la recomendación de su mamá y en el consejo de su amiga…

Por la tarde, Valeria se encuentra con Miguel y, por respeto a él, decide contarle sobre la
petición de su amigo Leonardo. Miguel no lo tomó bien.

Miguel: ¡Pero yo no quiero que lo acompañes! ¡Tú eres mi enamorada!

Valeria: Pero ¿cuál es el problema de que vaya con uno de mis mejores amigos a la fiesta?
Miguel: Porque es un momento especial. Bailarán juntos y, seguramente, aprovechará
para hacer algo más. Y yo terminaré como un tonto.
Valeria: ¿Acaso desconfías de mí?
Miguel: ¡Claro que confío! Pero no necesariamente confío en él, y no soporto la idea de
que el resto esté hablando a mis espaldas… Incluso si no sucede nada.
Valeria: Deberías confiar más en mí y preocuparte menos por lo que puedan pensar los
demás.
Miguel: Así pienso y no me vas a cambiar. Si tú vas con él a la fiesta, terminamos. No
puedo creer que, después de un año de relación, me salgas con esto.

Valeria se queda pensando en la reacción de Miguel y no sabe qué decisión tomar. Piensa
que debería conversar con su tutor.
 ¿Qué harías si estuvieras en el lugar de Valeria o de
Miguel?

¿Qué opinas de las recomendaciones de los padres de

Valeria? ¿Estás o no de acuerdo con estas? ¿Por qué?

¿Por qué crees que Miguel reacciona de esa manera con

Valeria? ¿Se justifica su actitud de algún modo? ¿Por qué?

EVITANDO LA VIOLENCIA EN LAS RELACIONES AFECTIVAS

Ya habíamos tratado respecto a la afectividad, en este caso Valeria
y Miguel sintieron atracción y se enamoraron, esta afectividad se
muestra como la capacidad que nos permite expresar sentimientos
y emociones. Sin embargo, a veces, el sentimiento de querer a
alguien puede llevarnos a situaciones de riesgo; en particular, si la
identidad femenina manifiesta dependencia emocional y
subordinación, aunque también suele ocurrir en el varón. Muchas
veces toleramos situaciones que pueden parecernos injustas.
Ciertos patrones socioculturales podrían generar situaciones de
fastidio, tensión e incluso violencia. Por ejemplo, el caso de Valeria,
que piensa que si no le pide permiso o si hace algo que no le parece
a su pareja, eso le traerá problemas.

En el Perú, muchas veces esto termina en violencia: gritos,

chantajes, golpes, amenazas, etc. Sin embargo, la violencia en las
relaciones afectivas suele empezar de modo más sutil. Esto empieza
con actitudes y gestos que, a primera vista, parecen inofensivos. Por
ejemplo, la inseguridad de Miguel pudo haberse expresado así:

1. De vez en cuando le pide el celular para saber con quienes se escribe o conversa.
2. Suele estar a la defensiva cada vez que un amigo conversa a solas con ella: aprovecha para
abrazar a Valeria, suele hostigar con bromas al amigo, se mete abruptamente en la
conversación.
3. En sus conversaciones, expresa una actitud de dominio sobre ella tanto en un plano afectivo,
sexual entre otros: “a Valeria la tengo bien controlada”, “sé cómo se trata una mujer”, “ella
sabe lo que me gusta”, “ya sabe que me tiene que pedir permiso para cualquier salida que
tenga”.
4. Controla su manera de vestir: si considera que algo es muy provocativo, la hace sentir mal.
ESTEREOTIPOS DE GÉNERO EN LAS RELACIONES DE PAREJA
Bueno, ¿Qué son los estereotipos de género?, son creencias que
están fuertemente arraigadas en una determinada cultura o
sociedad acerca de cómo son, o cómo deben ser, las mujeres y los
hombres.
Como sabemos, Valeria y Miguel ya tienen un año de relación de
pareja; pero Miguel está mostrando actitudes que dan muchas
alertas que podrían avisarnos que existe situaciones de violencia en
esta relación. Si no reconocemos comportamientos con cargas
violentas o de estereotipos de género podríamos dejarlos pasar y
considerarlas normales. En ocasiones la familia también puede
darnos mensajes que nos hace considerar normales los estereotipos
de género, como es el caso de la madre de Valeria.

ESTEREOTIPOS DE GÉNERO EN EL PERÚ

Como vimos en la página anterior, muchas creencias alrededor de
las relaciones de pareja expresan estereotipos de género. Este
problema, lamentablemente es transversal, pues atraviesa a
distintas generaciones de personas: abuelos, padres, tíos y sobrinos.
Algunos se pueden manifestar de esta manera:

• Los hombres no pueden tener amigas. Si las tiene, es homosexual

o debe estar esperando la oportunidad para demostrar algún
interés sexual.
• Las mujeres no deben mostrar iniciativa o interés antes que un
hombre, pues esto expresaría que son “fáciles”.
• Hay dos tipos de mujeres: las que les gusta presumir, mostrarse,
exponerse; y otras que deben ser buenas y comprensivas,
maternales.
• Un hombre con pareja debe mostrarse dominante, protector y
celoso frente a una pareja a la que suele verse como “posesión” o
“trofeo”. Esto le haría ver más valiente y aguerrido.
• Una mujer debe tolerar algunos maltratos o infidelidades porque
es parte de su naturaleza soportar las “necesidades” de un hombre
(o lo que un hombre ve necesario). A la inversa es intolerable.

Listo, ahora que hemos aprendido acerca de las relaciones saludables, es hora
de dejar una actividad, y será esta. Para eso en tu cuaderno contestarás
estas preguntas, ¿Qué actitudes de Miguel pueden reconocer en
ustedes?, ¿Crees que es justificable la violencia en algún caso? ¿Por
qué? Y ¿Por qué consideras que es difícil cuestionar o enfrentar
actitudes o gestos violentos en las relaciones de pareja?