EL QUE QUIERE SER EL MAYOR
“Palabra fiel: Si alguno anhela obispado, buena obra desea…” 1 Timoteo 3:1
Cuándo empezó nuestro romance eterno con Jesús, en nosotros surge el responder a
Dios con el corazón agradecido, anhelar servirle a Dios, Y ser usados por su presencia
son de los deseos más puros de un creyente y la señal inequívoca de su crecimiento
espiritual
Busquemos siempre servir
La mayoría de la sociedad desde sus diferentes esferas no está preocupada por el
bienestar de las personas en lo absoluto; un político normalmente no está enfocado en
servir a la gente, esto citando una de las tantas profesiones desperdiciadas por la
corrupción en el mundo.
Jesús vino a revolucionar aquello, él puso en nosotros el amar servir sin un interés
egoísta, puso el deseo de no ser exaltados por una posición.
“Entonces Jesús, llamándolos, dijo: sabéis que los gobernantes de las Naciones se
enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad Más entre
vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro
servidor, Y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo, como el hijo
del hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por
muchos.” Mateo 20:25-28
“Sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y
estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la
muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre
que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que
están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra…” Filipenses 2:7-10
Quien dedica su vida a servir a las personas en busca de su encuentro con Jesús, lo
demás vendrá por añadidura. ¡Busquemos convertirnos en siervos no en alguien que
pretende que lo vean como un grande!
Mantengamos un corazón sano
En el servicio, es donde se juega un papel muy importante y trascendental en nuestro
crecimiento. El corazón será sopesado, quien no corrige su corazón, no estará listo
para cada prueba que el servicio trae: pruebas de obediencia, sujeción, por citar
algunos ejemplos. Entonces si no las pasas, no podrás desarrollar a totalidad tu
propósito, puesto que tu corazón ya no será el correcto.
“Entonces se le acercó la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, postrándose
ante el y pidiéndole algo. Él le dijo: ¿Qué quieres? Ella dijo: orden aquí en tu reino se
sienten estos dos hijos míos, el uno a tu derecha y el otro a tu izquierda entonces Jesús
respondiendo, dijo: no sabéis lo que pedís. ¿podéis beber del vaso que yo he de beber, Y
ser bautizados con el bautismo con que yo soy bautizado? y ellos dijeron: podemos Él
les dijo: a la verdad de mi vaso beberéis y con el bautismo con que soy bautizado,
seréis bautizados; pero el sentaros a mi derecha y a la izquierda, no es mío darlo, sino
aquellos para quienes está preparado por mi padre. Cuando los diez oyeron esto, se
enojaron contra los dos hermanos.” Mateo 20:20-24
Cuando las intenciones son las incorrectas, no podremos esperar que los resultados en
nuestro servicio sean correctos. Veamos líderes amargados, cristianos frustrados, sin
una dirección clara. No es que Dios lo metió allí, es que no permitieron dejarse formar
en el correcto corazón de amar.
(Habacuc 2:3-5/Proverbios 26:1)
El reto es ser aprobado por Dios
¡Dejémonos formar! Nuestro servicio es para los hombres, los hombres han sido
asignados para hacer nuestras autoridades delegadas por Dios, son la representación
de una autoridad mayor.
“Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón;
Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad,
Y guíame en el camino eterno.” Salmos 139:23-24
Dios probara nuestro corazón usando personas de “menos experiencia” que nosotros
para formar carácter y ver si servimos con toda nuestra la disposición. También abra
momentos donde pareciera que nadie ve nuestro servicio, pero esto sólo será
sopesado para ver a quién realmente le servimos, para personas o Dios.
Los “últimos” o sea de mejor actitud frente al servicio a Dios y su gente serán ubicados
como primeros, Dios ama quien comparte y desarrolla en El un corazón que solo busca
presentar la salvación con todas las fuerzas y a toda persona.
¡Bienvenidos a la preciosa aventura de servir!
¡Somos los obreros del Gran Dios!
Jesús dijo a sus discípulos: "Muchos de los primeros serán los últimos, y muchos de los
últimos serán los primeros. (Referencia a Mateo 19:23-30)