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Exportación de Servicios

El documento analiza el requisito de inscripción en el Registro de Exportadores de Servicios establecido por la Ley No. 30641. Argumenta que este registro no cumple con su objetivo de verificar que los servicios califiquen como exportaciones, y que debería eliminarse o modificarse para que la inscripción no sea un requisito constitutivo.

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Exportación de Servicios

El documento analiza el requisito de inscripción en el Registro de Exportadores de Servicios establecido por la Ley No. 30641. Argumenta que este registro no cumple con su objetivo de verificar que los servicios califiquen como exportaciones, y que debería eliminarse o modificarse para que la inscripción no sea un requisito constitutivo.

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Exportación de Servicios: ¿Es realmente necesario el Nuevo

Registro de Exportadores?
La autora hace comentarios respecto a la Ley No. 30641 y a su
reglamento.
20 abril, 2018

El Impuesto General a las Ventas (IGV) es un tributo que grava el consumo


de bienes y servicios en el Perú. Consecuentemente, la exportación de
bienes y servicios no está sujeta al IGV porque el consumo de los mismos
se realiza en el extranjero. Asimismo, el exportador tiene el derecho de
solicitar la compensación o devolución del saldo a favor del exportador (en
adelante, “SFE”), constituido por el IGV que gravó las adquisiciones de
bienes y servicios en el país necesarios para llevar a cabo las referidas
exportaciones.

El 1 de septiembre de 2017 entró en vigencia la Ley No. 30641 que, entre


otras disposiciones, contenía modificaciones a la Ley del IGV para fomentar
la exportación de servicios en el Perú.

Hasta antes de la entrada en vigencia de la referida norma, calificaban


como exportación de servicios únicamente aquellas operaciones
contempladas en la lista cerrada contenida en el Apéndice V de la Ley del
IGV, y siempre que se cumplieran determinadas condiciones.

La Ley No. 30641 eliminó esta restricción al concepto de exportación de


servicios y estableció que cualquier prestación de servicios calificará como
una exportación, siempre y cuando se cumplan los siguiente cuatro
requisitos: (i) se presten a título oneroso desde el país hacia el exterior (es
decir, se ejecuten íntegramente en el Perú); (ii) el exportador sea una
persona domiciliada en el país; (iii) el usuario o beneficiario del servicio sea
una persona no domiciliada en el país; (iii) el uso, explotación o
aprovechamiento de los servicios tenga lugar en el extranjero. La norma
agregó un quinto requisito -si se quiere, formal- al señalar que “para efecto
de lo señalado en el párrafo precedente  [para que el servicio se considere
exportado]  el exportador de servicios deberá, de manera previa, estar
inscrito en el Registro de Exportadores de Servicios a cargo de la
SUNAT”  (el agregado entre corchetes es nuestro).

Cuando salió publicada la Ley No. 30641, la discusión que se generó en


torno al requisito de la previa inscripción en el Registro de Exportadores de
Servicios a cargo de la SUNAT (en adelante, “el Registro”) era si el mismo
era un requisito meramente declarativo o si, más bien, era constitutivo de
la operación de exportación.

Al revisar los antecedentes de la referida ley, nos encontramos con el


Dictamen de la Comisión de Comercio Exterior y Turismo del Congreso de
la República[1] -recaído en las observaciones del Presidente de la República a
la autógrafa de diversos proyectos de ley para fomentar la competitividad
en las exportaciones de servicios-. Así, en el referido Dictamen dicha
comisión propuso como texto legislativo que el Registro tenga  “carácter
declarativo para efectos de aplicar el sistema del Saldo a Favor del
Exportador”. No obstante, el Dictamen de la Comisión de Economía, Banca
y Finanzas e Inteligencia Financiera del Congreso de la República [2] -recaído
en las mismas observaciones- no incluyó el texto propuesto por la Comisión
de Comercio Exterior y Turismo y, además, sostuvo que el referido
registro “tiene por objeto que se verifique el cumplimiento de las cuatro
condiciones para ser considerado como exportador de servicios”. De
acuerdo con el texto publicado de la Ley No. 30641, es claro que el mismo
no recogió la propuesta legislativa de la Comisión de Comercio Exterior y
Turismo del Congreso de la República.

Posteriormente, el 22 de noviembre de 2017 se publicó el Reglamento de la


Ley No. 30641, a través del Decreto Supremo No. 342-2017-EF (en
adelante, “el Reglamento”), en el cual se estableció que “A fin de
considerar los servicios como exportación, el exportador de servicios debe,
de manera previa a dichas operaciones, estar inscrito en el Registro de
Exportadores de Servicios a cargo de la SUNAT”. En el mismo sentido, el
Reglamento también estableció que los servicios que se realicen a partir de
la entrada en vigencia de la Ley No. 30641 (1 de septiembre de 2017) y
hasta la entrada en vigencia de la Resolución de Superintendencia que
regule el referido Registro, se considerarán como exportación de servicios,
siempre que el exportador cumpla con inscribirse en el Registro dentro de
los dos meses siguientes a la publicación de la mencionada resolución. El
Reglamento añadió que, si no se cumplía con dicha regularización, los
servicios realizados en dicho período no se considerarán como exportación
de servicios.

De las normas antes citadas, es evidente que la inscripción previa en el


Registro a cargo de la SUNAT es un requisito constitutivo a efectos de que
un servicio califique como exportación de servicios. De esa manera, si no se
cumple con el referido registro previo, la operación no calificará como
exportación de servicios y, por lo tanto, estará sujeta al IGV y el
exportador no tendrá derecho al SFE.

Ahora bien, como mencionamos previamente, para el legislador la finalidad


del referido Registro era que se verifique el cumplimiento de los requisitos
establecidos en la Ley del IGV para que una operación califique como
exportación de servicios: es decir, que sea una operación onerosa desde el
país al exterior, prestada por un sujeto domiciliado a uno no domiciliado y
que el uso explotación o aprovechamiento tenga lugar en el extranjero.

No obstante, es claro que la implementación del Registro por parte de la


SUNAT no cumple con la finalidad establecida en el párrafo anterior. La
Resolución de Superintendencia No. 312-2017-SUNAT (que entró en
vigencia el 28 de noviembre de 2017) establece que los requisitos para el
Registro son tener número de RUC activo, no tener condición de no habido
y estar sujeto al Régimen General del Impuesto a la Renta (IR), Régimen
Especial del IR o al Régimen MYPE. Asimismo, en el referido registro se
debe indicar el tipo de servicio a exportar y, si son varios, señalar aquel por
el que se estima que se obtendrán mayores ingresos.

Como puede apreciarse, al indicar únicamente el tipo de servicio a exportar


en el referido Registro, la SUNAT no puede bajo ninguna circunstancia
verificar si una determinada operación cumple con los cuatro requisitos
establecidos en la Ley del IGV para calificar como una exportación de
servicios (salvo que el prestador del servicio esté domiciliado en el Perú).
Por lo tanto, el Registro no cumple la finalidad contemplada inicialmente
por el legislador.

A mayor abundamiento, consideramos que el referido Registro tampoco


califica como un mecanismo de control o herramienta de fiscalización para
evitar que el exportador se beneficie indebidamente de una devolución de
SFE. Ello, porque el legislador ha tomado medidas adicionales a efectos de
que la SUNAT pueda analizar si corresponde o no la devolución del SFE en
una exportación de servicios. Así, el Reglamento también modificó el
Reglamento de Notas de Créditos Negociables estableciendo que el plazo
general para obtener la devolución del SFE en una exportación de servicios
es de 45 días hábiles (a diferencia de los 5 días hábiles – con una extensión
de 15 adicionales- aplicable en la exportación de bienes).
Excepcionalmente, dicho plazo puede verse reducido a 20 días hábiles si el
exportador cumple con determinados requisitos que demuestran el
cumplimiento de obligaciones tributarias formales [3] e incluso hasta a un día
hábil cuando: (i) el exportador afiance el monto del SFE con una garantía y,
además se cumplan los requisitos antes mencionados; o (ii) el exportador
se encuentre en el listado publicado por la SUNAT en junio y diciembre de
cada año para lo cual dicho exportador debe cumplir ciertas condiciones
especiales que permitan a la SUNAT determinar un alto nivel de
cumplimiento de las obligaciones tributarias por parte del contribuyente [4].

De otro lado, nótese que la Ley No. 30641 también indicó que califica como
exportación de servicios aquellos que hayan sido prestados parcialmente en
el extranjero. Sin embargo, en este caso no se exige como requisito previo
la inscripción en el Registro. No entendemos cuál es la lógica de esta
diferenciación, puesto que es claro que la única diferencia entre ambas
operaciones es el lugar de prestación efectiva del servicio, información que
tampoco se pide incluir en el Registro.

En virtud de lo antes expuesto, es claro que el Registro no cumple con la


finalidad requerida inicialmente por el legislador (de verificar el
cumplimiento de los requisitos establecidos en la Ley del IGV para que una
operación califique como exportación de servicios) y tampoco califica como
una herramienta de fiscalización o de control de la SUNAT para evitar una
devolución indebida del SFE.

Por lo tanto, consideramos que dicho Registro debería eliminarse puesto


que la misma información podría ser incluida en el Registro Único de
Contribuyentes de la SUNAT. Ahora bien, si es que se decide mantener el
referido Registro, consideramos que a través de una modificación legislativa
se debería establecer que la inscripción previa no es un requisito
constitutivo para que una operación califique como exportación de servicios
y, por tanto, la única consecuencia de no inscribirse previamente debería
ser la comisión de una infracción tributaria sancionada con una multa. De lo
contrario, dicho Registro continuará generando una carga administrativa
innecesaria al exportador puesto que la misma no tiene ninguna
funcionalidad de fiscalización ni recaudatoria para la SUNAT.

 Dictamen de la Comisión de Comercio Exterior y Turismo del Congreso de


[1]

la República (22 de junio de 2017), recaído en las observaciones del


Presidente de la República a la Autógrafa de la “Ley que sustituye e
incorpora artículos en el Texto Único Ordenado de la Leu del Impuesto
General a las Ventas e Impuesto Selectivo al Consumo, aprobado por
Decreto Supremo No. 055-99-EF y normas modificatorias para fomentar la
competitividad en las exportaciones de servicios”. (Proyecto de Ley
543/2016-PE) (Acumulación: Proyectos de Ley 212, 271, 1216 y
1486/2016-CR). Recuperado
de: http://www.leyes.congreso.gob.pe/Documentos/2016_2021/Dictamene
s/Proyectos_de_Ley/00543DC03MAY20170622.pdf

 Dictamen de la Comisión de Economía, Banca, Finanzas e Inteligencia


[2]

Financiera del Congreso de la República (23 de junio de 2017), recaído en


la Autógrafa de Ley Observada No. 543/2016-PE, los Proyectos de Ley 212-
2016-CR, 271/2016-CR, 1216/2016-CR y 1486/2016-CR que proponen
fomentar la competitividad en las exportaciones de servicios. Recuperado
de: http://www.leyes.congreso.gob.pe/Documentos/2016_2021/Dictamene
s/Proyectos_de_Ley/00543DC09MAY20170623.pdf

 Al respecto, en la Exposición de Motivos del Reglamento se establece lo


[3]

siguiente: “Sobre la propuesta cabe mencionar que se admite la posibilidad


de que se reduzca el plazo a veinte (20) días para aquellos exportadores de
servicios que cumplan determinadas condiciones identificadas en base a la
metodología de gestión de riesgos, las cuales perimitirían asumir que el
exportador no es de riesgo o que por lo menos representa un riesgo
menor. (…).”

 En relación a este plazo de un día hábil, la Exposición de Motivos del


[4]

Reglamento establece lo siguiente: “Se modifica el artículo 12 y se


incorpora el artículo 12-A al Reglamento de Notas de Crédito Negociables a
fin de establecer que para el caso de las solicitudes de devolución por
operaciones de exportación de servicios solo los sujetos que cumplan con
determinadas condiciones puedan acceder a la posibilidad de que la SUNAT
les entregue las notas de crédito negociables dentro del día hábil siguiente
a la fecha de presentación de la solicitud, si es que presentan una garantía
o se encuentren en el listado que publicará la SUNAT en su portal. En el
caso de la alternativa de la presentación de una garantía las condiciones
establecidas son similares a las planteadas para que resulte aplicable la
reducción a veinte (20) días del plazo para emitir y entregar las Notas de
Crédito Negociables. (…) Tratándose del listado que publicará la SUNAT, se
establece que para poder ser incluidos por la SUNAT deben cumplir las
mismas condiciones que actualmente se exige conforme lo dispuesto en el
numeral 12.2 del artículo 12 del Reglamento de Notas de Crédito
Negociables  [para la devolución del SFE al día hábil siguiente de
presentada la solicitud en el caso de exportación de bienes]. Dichas
condiciones tienen por finalidad acelerar el proceso de devolución a
contribuyentes que evidencien un alto nivel de cumplimiento. (…)” (el
agregado entre corchetes es nuestro)

BDO
Exporto servicios, ¿los gravo con IGV?
por Miluska Tintaya | 23 octubre 2017
Esta debe ser la pregunta que más de una empresa exportadora de servicios seguramente se
viene haciendo desde el 1 de setiembre de 2017, en que entró en vigencia la Ley N° 30641,
Ley que Fomenta la Exportación de Servicios y el Turismo[1] (en adelante, la Ley), la cual
incorporó algunos cambios a la Ley del IGV con la finalidad de ampliar el rango de las
operaciones de exportación de servicios que pueden gozar de la inafectación al IGV.
Sólo para ponernos en contexto, recordemos que antes de la vigencia de la Ley en cuestión
para que un servicio reciba el tratamiento antes indicado, además de cumplir con los
requisitos típicamente exigidos para estos efectos (onerosidad, que el exportador sea una
persona domiciliada en el país, que el usuario del servicio sea una persona no domiciliada en
el país y que el uso, explotación o aprovechamiento del mismo tuviera lugar en el extranjero),
el mismo debía encontrarse expresamente recogido en la lista contenida en el Apéndice V de
la Ley del IGV. No obstante, a partir del 1 de setiembre de 2017 este último condicionamiento
ha sido dejado sin efecto, vale decir, a partir de esta fecha, en principio, cualquier servicio que
cumpla con los requisitos en mención debería ser considerado como exportado y, por tanto,
inafecto al IGV.
Digo “en principio” dada la novedad que trae la Ley en comentario: la incorporación de un
sexto párrafo al artículo 33° de la Ley del IGV estableciendo un aparente condicionamiento del
régimen antes descrito a una cuestión formal, esto es, la inscripción del exportador de
servicios, de manera previa, en un Registro de Exportadores de Servicios que la SUNAT
debe regular.
A continuación cito la parte pertinente del nuevo texto del artículo 33° de la Ley del IGV
(poniendo énfasis en su sexto párrafo):
“(…)
Los servicios se considerarán exportados cuando cumplan concurrentemente con los
siguientes requisitos:
a) Se presten a título oneroso desde el país hacia el exterior, lo que debe demostrarse
con el comprobante de pago que corresponda, emitido de acuerdo con el reglamento de
la materia y anotado en el Registro de Ventas e Ingresos.
b) El exportador sea una persona domiciliada en el país.
c) El usuario o beneficiario del servicio sea una persona no domiciliada en el país.
d) El uso, la explotación o el aprovechamiento de los servicios por parte del no
domiciliado tengan lugar en el extranjero.
Para efecto de lo señalado en el párrafo precedente el exportador de servicios deberá, de
manera previa, estar inscrito en el Registro de Exportadores de Servicios a cargo de la
SUNAT.
(…)”
Asimismo, la 4° Disposición Complementaria Final (DCF) de la Ley N° 30641 señala lo
siguiente:
“Mediante resolución de superintendencia, la SUNAT establecerá las normas
complementarias que sean necesarias para la implementación del Registro de
Exportadores de Servicios a su cargo, así como los requisitos, condiciones y
procedimiento que deberán cumplir los exportadores”
En resumen, la incorporación de esta regla plantea, al día de hoy, al menos dos
interrogantes: (1) dado que la SUNAT aún no ha emitido la norma que crea y regula el
Registro de Exportadores de Servicios, ¿se puede entender que el régimen de exportación de
servicios se encuentra suspendido hasta la dación de dicha norma?, y (2) una vez creado el
Registro de Exportadores de Servicios ¿el incumplimiento de la inscripción previa de un
exportador en el mismo supondría la no aplicación de la inafectación al IGV?.
Pues bien, de una lectura integral de la Ley N° 30641 no advierto la existencia de una “vacatio
legis” o alguna disposición que condicione el inicio de su vigencia a que la SUNAT apruebe las
normas complementarias necesarias para la implementación del Registro de Exportadores de
Servicios a su cargo, por lo cual desde mi perspectiva la Ley en cuestión debería entenderse
plenamente vigente desde el 1 de setiembre de 2017.
Asimismo, desde una perspectiva técnica, considero que lo correcto es que se entienda que el
requisito de la inscripción previa en el Registro de Exportadores de Servicios es uno de
naturaleza formal y no constitutivo para que las empresas puedan acceder al tratamiento de
exportación de servicios, más allá de la literalidad del párrafo en cuestión. 
Entre otras razones, porque la 1° DCF de la Ley ha sido clara al establecer que su entrada en
vigencia se dará a partir del primer día calendario del mes siguiente al de su publicación (esto
es, a partir del 1 de setiembre de 2017) y que será de aplicación a las operaciones que se
realicen a partir de su vigencia, sin reservas ni condiciones, y además se ha derogado el
Apéndice V de la Ley del IGV también a partir de esa fecha. Si no se considerase ya aplicable
el nuevo régimen, en este momento no se podría tratar como exportación de servicios ni
siquiera a las operaciones que siempre recibieron este tratamiento por haber estado
comprendidas en el citado Apéndice V. A ello se puede agregar que otorgar el carácter de
sustancial a la inscripción de los exportadores en el mencionado Registro iría en contra de las
razones que motivaron la dación de la Ley N° 30641.
No obstante, debemos admitir que en tanto no se apruebe el ya mencionado Registro y se
aclare el real alcance del sexto párrafo del artículo 33° de la Ley del IGV, hoy el tenor de esta
regla representa un riesgo para los exportadores de servicios, quienes deberán definir la
posición que adoptarán sobre el particular en coordinación con los usuarios de los servicios
que son quienes asumirían finalmente la eventual carga fiscal del IGV.
Esta definición cobra mayor relevancia tratándose de los exportadores que normalmente
gozan del Saldo a Favor Materia de Beneficio (SFMB), quienes eventualmente tendrían que
evaluar si retienen o no sus expedientes de solicitud de devolución o compensación a la
expectativa de ver qué es lo que dispondrán las normas reglamentarias y complementarias
que deben emitirse en torno a este tema.
Como se sabe el 30 de este mes vence el plazo con que cuenta el Poder Ejecutivo para emitir
las normas reglamentarias de la Ley en comentario. Esperemos que por esta vía puedan
aclararse las interrogantes que hemos planteado en este documento, en aras de la seguridad
jurídica y del fomento de la competitividad de las exportaciones.

Sunat determina los casos de exportaciones de


servicios
Entidad recaudadora toma en cuenta lo dispuesto en la
normativa relativa al IGV.
21/2/2020

La Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat)


determinó las operaciones de comercio exterior que califican como exportaciones de
servicios para efectos tributarios.

Fue mediante el Informe N° 011-2020-SUNAT/7T0000, emitido por la Intendencia


Nacional Jurídico Tributario al responder una consulta formulada por un contribuyente.

Directrices

Conforme al documento jurídico, la entidad recaudadora establece que se


considerarán exportaciones de servicios a aquellos brindadas por una empresa
domiciliada a una no domiciliada, destinadas a facilitar la venta de productos de esta
última en el extranjero a clientes domiciliados, los cuales se retribuyen con base en un
porcentaje de la facturación que obtenga la empresa no domiciliada por esas ventas.

Ello en la medida en que estos servicios cumplan con los requisitos dispuestos en los
ítems i. y ii. del inciso b) del numeral 1 del artículo 9 del Reglamento de la Ley del
Impuesto General a las Ventas (IGV), así como con todos los demás requisitos fijados
para el efecto por el quinto párrafo del artículo 33 de esa ley.

De acuerdo con estas disposiciones, los servicios se considerarán exportados cuando


cumplan concurrentemente diversos requisitos, entre los cuales figura que se presten
a título oneroso desde el país hacia el exterior, lo que debe demostrarse con el
comprobante de pago que corresponda, emitido de acuerdo con el reglamento de la
materia y anotado en el Registro de Ventas e Ingresos.

Además, según las mismas normas, se especifica que los servicios se considerarán
prestados desde el país hacia el exterior cuando la prestación del servicio por parte de
la persona domiciliada en el país se realice íntegramente en el Perú; y el uso, la
explotación o el aprovechamiento de los servicios por parte del no domiciliado tenga
lugar en el extranjero.

Para esto último se considerará el lugar donde ocurre el primer acto de disposición del
servicio, entendido como el beneficio económico inmediato que el servicio genera al
usuario no domiciliado.

La administración tributaria toma en cuenta, además, que la exportación de servicios


no está afecta al IGV.

Exclusiones

La Sunat señala que no constituyen exportación de servicios la que efectúa una


empresa domiciliada a una no domiciliada en virtud de un contrato de mandato sin
representación, por el cual la primera debe realizar los trámites de importación
definitiva de los bienes que la segunda ha vendido en el extranjero a clientes
domiciliados en el país, a efectos de entregarles tales bienes. Considera que el
mandatario se obliga a realizar uno o más actos jurídicos, por cuenta y en interés del
mandante, y que el mandato comprende los actos para los cuales ha sido conferido y
los necesarios para su cumplimiento.

12. Ley que Fomenta la Exportación de


Servicios y el Turismo
Base Legal
Ley N.° 30641 “Ley que fomenta la exportación de servicios y el turismo”(Pub.17/08/2017).
Entró en vigencia el 01/09/2017.
Decreto Supremo N.° 342-2017-EF “Modifican el Reglamento del Impuesto General a las
Ventas e Impuesto Selectivo al Consumo, el Decreto Supremo N° 122-2001-EF que regula el
Beneficio a Establecimientos de Hospedaje que presten servicios a Sujetos No Domiciliados y
el Reglamento de Notas de Crédito Negociables, aprobado mediante Decreto Supremo N°
126-94-EF”(Pub. 22/11/2017). 
Resolución de Superintendencia N.° 312-2017/SUNAT Dictan normas referidas al Registro
de Exportadores de Servicios, incorporan sujetos obligados a llevar los registros de ventas e
ingresos y de compras de manera electrónica y designan emisores electrónicos del Sistema
de Emisión Electrónica – SEE (Pub. 27/11/2017).
Documento de Implantación N.° 001-2017-DNS de 29/11/2017
13. Ley que Fomenta la Exportación de
Servicios y el Turismo
Ley N° 30641
(Pub. 17/08/2017)
El 17 de agosto del presente año fue publicada la Ley N° 30641, que fomenta la exportación
de servicios y el turismo, cuyo objeto tiene por finalidad modificar la legislación del impuesto
general a las ventas aplicable a las operaciones de exportación de servicios, a fin de fomentar
la competitividad de nuestras exportaciones, mejorar la neutralidad del impuesto y eliminar
distorsiones en su aplicación a este tipo de operaciones, como lo establece el artículo 1° de la
referida Ley. 
REGISTRO DE EXPORTADORES DE SERVICIOS A CARGO DE LA SUNAT
La Ley N° 30641 crea el Registro de Exportadores de Servicios a cargo de la SUNAT, por lo
que conforme lo dispuesto en la Cuarta Disposición Complementaria Final de la
misma, mediante resolución de superintendencia, la SUNAT establecerá las normas
complementarias que sean necesarias para la implementación de dicho Registro, así como los
requisitos, condiciones y procedimiento que deberán cumplir los exportadores. 
MODIFICACIONES E INCORPORACIONES EN LA PRESENTE LEY
La citada Ley ha modificado el quinto párrafo del artículo 33° del Texto Único Ordenado de la
Ley del Impuesto General a las Ventas e Impuesto Selectivo al Consumo, aprobado mediante
el Decreto Supremo 055-99-EF y normas modificatorias, señalando que los servicios se
considerarán exportados cuando cumplan concurrentemente con los siguientes requisitos:
a) Se presten a título oneroso desde el país hacia el exterior, lo que debe demostrarse con el
comprobante de pago que corresponda, emitido de acuerdo con el reglamento de la materia y
anotado en el Registro de Ventas e Ingresos.
b) El exportador sea una persona domiciliada en el país.
c) El usuario o beneficiario del servicio sea una persona no domiciliada en el país.
d) El uso, la explotación o el aprovechamiento de los servicios por parte del no domiciliado
tengan lugar en el extranjero.
En concordancia con la presente modificatoria, la Segunda Disposición Complementaria Final
señala que para establecer que el uso, explotación o aprovechamiento de los servicios por
parte del no domiciliado tiene lugar en el extranjero se evaluarán las condiciones contractuales
de cada caso en particular, a fin de determinar qué han estipulado respecto del lugar donde se
lleva a cabo el primer acto de disposición del servicio, entendido como el beneficio económico
inmediato que este genera al usuario no domiciliado.
Para efecto de lo señalado en el párrafo precedente, dispone la modificación del quinto
párrafo del artículo 33°, por el que el exportador de servicios deberá, de manera previa, estar
inscrito en el Registro de Exportadores de Servicios a cargo de la SUNAT. 
TAMBIÉN SE CONSIDERA EXPORTACIÓN LAS SIGUIENTES OPERACIONES.
La Ley establece que, también se considera exportación las siguientes operaciones:
"9. Los servicios de alimentación (incluye servicios de alimentación tipo catering); traslados;
transporte turístico (terrestre, aéreo, ferroviario, acuático, teleféricos y funiculares de pasajeros
con origen y destino desde el mismo punto de embarque); espectáculos de folklore nacional;
teatro; conciertos de música clásica; ópera; opereta; ballet; zarzuela; espectáculos deportivos
declarados de interés nacional; museos; eventos gastronómicos; mediación u organización de
servicios turísticos; servicios de traducción; turismo de aventura y otras actividades de turismo
no convencional (turismo vivencial, social y rural comunitario) que conforman el paquete
turístico prestado por operadores turísticos domiciliados en el país, a favor de agencias,
operadores turísticos o personas naturales, no domiciliados en el país, en todos los casos. 
A propuesta del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, mediante decreto supremo
refrendado por el ministro de Economía y Finanzas, se podrá incorporar otros servicios que
conforman el paquete turístico".
(Modificación del numeral 9 del artículo 33°)
 

"10. Los servicios complementarios al transporte de carga que se realice desde el país hacia
el exterior y el que se realice desde el exterior hacia el país, necesarios para que se realice
dicho transporte, siempre que se realicen en zona primaria de aduanas y que se presten a los
transportistas de carga internacional o a sujetos no domiciliados en el país que tengan
titularidad de la carga de acuerdo con la documentación aduanera de tránsito internacional.
Constituyen servicios complementarios al transporte de carga necesarios para llevar a cabo
dicho transporte, los siguientes: 
a. Remolque.
b. Amarre o desamarre de boyas.
c. Alquiler de amarraderos.
d. Uso de área de operaciones.
e. Movilización de carga entre bodegas de la nave.
f. Transbordo de carga.
g. Descarga o embarque de carga o de contenedores vacíos.
h. Manipuleo de carga.
i. Estiba y desestiba.
j. Tracción de carga desde y hacia áreas de almacenamiento.
k. Practicaje.
l. Apoyo a aeronaves en tierra (rampa).
m. Navegación aérea en ruta.
n. Aterrizaje-despegue.
ñ. Estacionamiento de la aeronave".
(Modificación del numeral 10 del artículo 33°)
 
"11. El suministro de energía eléctrica a favor de los sujetos domiciliados en las zonas
especiales de desarrollo (ZED). El suministro de energía eléctrica comprende todos los cargos
que le son inherentes contemplados en la legislación peruana".
(Incorporación del numeral 11 del artículo 33°)

 
"12. La prestación del servicio que se realiza parcialmente en el extranjero por sujetos
generadores de rentas de tercera categoría para efectos del impuesto a la renta a favor de
una persona no domiciliada en el país, siempre que su uso, explotación o aprovechamiento
tenga lugar en el extranjero".
(Incorporación del numeral 12 del artículo 33°)

DEVOLUCIÓN DE IMPUESTOS A TURISTAS


Asimismo ha sido modificado el segundo párrafo del artículo 76°, en el sentido que, para
efecto de la devolución de impuestos a turistas, se considerará como tales a los extranjeros no
domiciliados que se encuentran en territorio nacional por un período no menor a 2 días
calendario ni mayor a 60 días calendario por cada ingreso al país, lo cual deberá acreditarse
con la tarjeta andina de migración y el pasaporte, salvoconducto o documento de identidad
que de conformidad con los tratados internacionales celebrados por el Perú sea válido para
ingresar al país, de acuerdo a lo que establezca el reglamento.
(Modificación del segundo párrafo del artículo 76°)

 
DEROGACIÓN DE APÉNDICE V
La presente Ley deroga el Apéndice V del Texto Único Ordenado de la Ley del Impuesto
General a las Ventas e Impuesto Selectivo al Consumo, aprobado por el Decreto Supremo
055-99-EF y normas modificatorias.(Disposición Complementaria Derogatoria Única)
 

REGLAMENTACIÓN DE LA LEY
Asimismo señala que en un plazo de 60 días calendario desde la entrada en vigencia de la
Ley, el Poder Ejecutivo, mediante decreto supremo refrendado por el ministro de Economía y
Finanzas, establecerá las normas reglamentarias para la aplicación de lo dispuesto en la
presente ley.(Disposición Complementaria Derogatoria Única)
 

VIGENCIA DE LA LEY
Finalmente dispone que, entra en vigencia el primer día calendario del mes siguiente al de su
publicación y será de aplicación a las operaciones que se realicen a partir de su vigencia.
(Primera Disposición Complementaria Final)

14. Decreto Supremo N° 342-2017-EF


(Pub. 22/11/2017)
 El día 22 de noviembre fue publicado el Decreto Supremo N° 342-2017-EF que tiene por
objeto adecuar el Reglamento de la Ley del IGV e ISC a lo previsto en la Ley N° 30641, Ley
que fomenta la exportación de servicios y el turismo, así como efectuar algunas
modificaciones al Decreto Supremo N° 122-2001-EF, que establece las normas
reglamentarias del numeral 4 del artículo 33° del TUO de la Ley del IGV e ISC, y al
Reglamento de Notas de Crédito Negociables, aprobado mediante el Decreto Supremo N°
126-94-EF y normas modificatorias.
Cabe precisar que la Segunda Disposición Complementaria Transitoria regula las operaciones
realizadas antes de la implementación del Registro de Exportadores, habiéndose dispuesto lo
siguiente: 
 “Los servicios comprendidos en el quinto párrafo del artículo 33° del Decreto que se realicen
a partir del 1 de setiembre de 2017 hasta la fecha de entrada en vigencia de la Resolución de
Superintendencia que regula el Registro de Exportadores de Servicios, se considerarán como
operaciones de exportación, siempre que el exportador cumpla con inscribirse en el
mencionado registro dentro de los dos (2) meses siguientes a la publicación de la mencionada
resolución.
 De no cumplir con lo señalado en el párrafo precedente, los servicios realizados en dicho
periodo no se considerarán como operaciones de exportación. 
 Para efecto de determinar el momento en que se realizan los servicios se utilizarán las
mismas reglas que se aplican para efecto del nacimiento de la obligación tributaria del IGV en
el caso de servicios”. 
 El presente decreto supremo contiene las modificaciones siguientes:
 a) Del Capítulo VIII del Título I del Reglamento de la Ley del IGV e ISC, aprobado por el
Decreto Supremo Nº 29-94-EF y normas modificatorias (Artículo 3)
 b) Del inciso g) del artículo 11°-A del Reglamento de la Ley del IGV e ISC, aprobado por el
Decreto Supremo Nº 29-94-EF y normas modificatorias (Artículo 4) 
 c) Del inciso e) del artículo 1°, el inciso a) del primer párrafo y el segundo párrafo del artículo
7°, el segundo párrafo del artículo 8° y el artículo 9° del Decreto Supremo N° 122-2001-EF
(Artículo 6)
 d) Del artículo 8° del Reglamento de Notas de Crédito Negociables (Artículo 7)
 e) Del primer párrafo del artículo 11° del Reglamento de Notas de Crédito Negociables
(Artículo 8)
 f) El encabezado del primer párrafo del artículo 12° del Reglamento de Notas de Crédito
Negociables (Artículo 10) 
 
Asimismo contiene las incorporaciones siguientes:
 a) Del inciso k. al artículo 1° del Decreto Supremo N° 122-2001-EF (Artículo 5)
 b) Del artículo 11°-A del Reglamento de Notas de Crédito Negociables (Artículo 9)
 Finalmente, las Disposiciones Complementarias Transitorias Primera y Tercera establecen lo
siguiente:
 Primera.- Operaciones que se realizan a partir de la vigencia de la ley.
 Para efecto de lo previsto en la primera disposición complementaria final de la ley el momento
en que se realizan las operaciones se determina utilizando las mismas reglas que se aplican
para el nacimiento de la obligación tributaria del IGV en el caso de servicios y de venta de
intangibles, según corresponda.
 Tercera.- Aplicación de las modificaciones introducidas en el Reglamento de Notas de Crédito
Negociables
 Las modificaciones al Reglamento de Notas de Crédito Negociables a que se refieren los
artículos 8, 9, 10 y 11 del presente decreto supremo, se aplican respecto de las solicitudes de
devolución que se presenten a partir de su entrada en vigencia.

15. Resolución de Superintendencia N°


312-2017/SUNAT
(27/11/2017)
El día 27 de noviembre fue publicada la Resolución de Superintendencia N° 312-2017/SUNAT, mediante la
cual se dictan normas referidas al Registro de Exportadores de Servicios, también se incorporan sujetos
obligados a llevar los registros de ventas e ingresos y de compras de manera electrónica, así como se designan
emisores electrónicos del Sistema de Emisión Electrónica – SEE.
En principio, debe señalarse que respecto a los escritos presentados con anterioridad a la vigencia de las
normas que regulan el Registro de Exportadores de Servicios, la Disposición Complementaria Transitoria ha
dispuesto que, los sujetos que, con anterioridad a la entrada en vigencia de las normas que regulan el Registro
contenidas en la presente resolución, hubieren presentado escritos a la SUNAT manifestando su voluntad de
inscribirse en el mismo, deben presentar la solicitud a que se refiere el artículo 3 y cumplir con los requisitos
señalados en el artículo 2. 
Esta resolución entró en vigencia a partir del 28 de noviembre del presente, salvo tratándose de los artículos 2
al 7 y de la Única Disposición Complementaria Transitoria, los mismos que entraron en vigencia el 1 de
diciembre de 2017, conforme lo establece esta última disposición. 
Por otro lado, debe indicarse que, del artículo 1° al 7° se ha normado respecto a las definiciones que contiene
la resolución, los requisitos que se exigen para la inscripción en el Registro de Exportadores de Servicios, la
solicitud de inscripción en el respectivo Registro, la validación del cumplimiento de los requisitos, la
Constancia de la inscripción en el Registro, la exclusión del Registro, así como su reinscripción en el mismo.
Por su parte, el artículo 8° efectúa modificaciones a la Resolución de Superintendencia N° 379-2013/SUNAT
para incorporar obligados a llevar registros de ventas e ingresos y de compras de manera electrónica. 
En este sentido, dispone que, estarán obligados a llevar los registros de manera electrónica, por las
operaciones o actividades realizadas a partir del 1 de enero de 2018, aquellos sujetos que hubieren realizado
y/o realicen por lo menos una operación de exportación a que se refiere el quinto párrafo o los numerales 4, 6,
9, 10. 11 y 12 del artículo 33° de la Ley del IGV en el periodo comprendido entre el 1 de setiembre de 2017 y
el 31 de diciembre de 2017, siempre que al 1 de enero de 2018 cumplan las condiciones que en la misma
resolución se establecen.
También estarán obligados a llevar los registros en forma electrónica los sujetos que realicen una operación
de exportación a que se refiere el quinto párrafo o los numerales 4, 6, 9, 10, 11 y 12 del artículo 33° de la Ley
del IGV, por las operaciones o actividades efectuadas a partir del primer día del periodo en el que realicen
dicha primera operación de exportación, siempre que en ese día cumplan las condiciones señaladas en los
literales a) al f) del numeral anterior. 
Se señala un cronograma para los sujetos comprendidos en la obligación establecida en el artículo 2, debiendo
a dichas fechas, cerrar los registros llevados en forma manual o en hojas sueltas o continuas, previo registro
de lo que corresponda anotar en estos.
Asimismo se establecen disposiciones respecto de los efectos de la obtención de la calidad de generador en el
SLE-PLE y del cambio de llevado de los registros electrónicos en el SLE- PORTAL AL SLE-PLE.
El artículo 9° dispone la designación como emisores electrónicos del Sistema de Emisión Electrónica para la
emisión de facturas, notas de crédito y notas de débito a los sujetos que a partir del 1 de enero de 2018
realicen una o más operaciones de exportación a que se refiere el quinto párrafo y/o los numerales 4, 6, 9, 10,
11 y 12 del artículo 33° de la Ley del IGV y solo respecto de esas operaciones, siempre que la SUNAT no les
haya asignado dicha calidad a la fecha de entrada en vigencia de esta resolución y que se encuentren acogidos
al Régimen General, al Régimen Especial o al Régimen MYPE Tributario. 
 
Finalmente, el artículo 10 de esta resolución, establece los efectos de la incorporación al Sistema de Emisión
Electrónica y concurrencia de la emisión electrónica  y de la emisión en formatos impresos, disponiendo que
los sujetos deben emitir facturas electrónicas, notas de crédito electrónicas y notas de crédito electrónicas en
el Sistema de Emisión Electrónica por la operaciones de exportación a que se refiere el quinto párrafo y/o los
numerales 4, 6, 9, 10, 11 y 12 del artículo 33° de la Ley del IGV que realicen, por lo que deben considerarse
adicionalmente las disposiciones que se señalan expresamente en la Resolución de Superintendencia N° 300-
2014/SUNAT y otras normas en lo que resulte pertinente. 

16. Documento de Implantación N°


001-2017-DNS

GESTION

¿Cuáles son los requisitos para


exonerarse del IGV en la
exportación de servicios?
La ley generaría una menor recaudación del IGV a final del año, pero podría
aumentar la base tributaria del Impuesto a la Renta.

Actualizado el 18/08/2017 a las 05:38


La exportación de servicios ya no estará gravada por el Impuesto
General a las Ventas (IGV), gracias a la nueva ley promulgada por
el Estado.

La principal característica de la ley es que elimina el apéndice V,


que enumeraba una lista de operaciones que calificaban como
exportación de servicios.

"Si un servicio no estaba incluido en esta lista, por más que


cumpliera los requisitos generales, no iba a poder gozar de la
exoneración del IGV", explicó a Gestion.pe Pablo Sotomayor, socio
del Estudio Miranda & Amado.

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Hoy cualquier servicio exportado no será gravado por el IGV, con


la única condición de cumplir con los siguientes requisitos.

1. El servicio debe prestarse a título oneroso desde el país hacia el


exterior. Esto debe demostrarse con el comprobante de pago
correspondiente, "emitido de acuerdo con el reglamento de la
materia y anotado en el Registro de Ventas e Ingresos", señala la
ley.

2. El exportador tiene que ser una persona domiciliada en el país.

3. El usuario o beneficiario del servicio tiene que ser una persona


no domiciliada en el país.

4. El uso, la explotación o el aprovechamiento de los servicios por


parte del no domiciliado deben ocurrir en el extranjero.

ConsecuenciasEl efecto más obvio de la aplicación de la ley (a


partir del 1 de septiembre) es la menor recaudación tributaria por
concepto del IGV.
No obstante, "la medida generará mayor competitividad en las
exportaciones de servicios", detalló Sotomayor.

El experto señaló que la consecuencia más próxima es el menor


ingreso fiscal. Pero, "si se generan los incentivos correctos, podría
replicar mayores ingresos a las empresas, y por consiguiente,
mayor Impuesto a la Renta", reveló.

Se presten a título oneroso desde el país hacia el exterior, lo que debe demostrarse con el
comprobante de pago que corresponda, emitido de acuerdo con el reglamento de la materia y
anotado en el Registro de Ventas e Ingresos. b) El exportador sea una persona domiciliada en el
país. c) El usuario o beneficiario del servicio sea una persona no domiciliada en el país. d) El uso, la
explotación o el aprovechamiento de los servicios por parte del no domiciliado tengan lugar en el
extranjero.

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