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Actividad Lectura Tipo Icfes. LITERATURA GRIEGA

El texto analiza el concepto de las Musas en la mitología griega, explicando su origen como hijas de Zeus y Mnemosine y su función de inspirar a los poetas. También resume los primeros testimonios literarios sobre ellas en la Ilíada de Homero y la Teogonía de Hesíodo, donde se explica más su naturaleza divina y cómo inspiraron al poeta Hesíodo.

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Actividad Lectura Tipo Icfes. LITERATURA GRIEGA

El texto analiza el concepto de las Musas en la mitología griega, explicando su origen como hijas de Zeus y Mnemosine y su función de inspirar a los poetas. También resume los primeros testimonios literarios sobre ellas en la Ilíada de Homero y la Teogonía de Hesíodo, donde se explica más su naturaleza divina y cómo inspiraron al poeta Hesíodo.

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Actividad lectura tipo icfes: LITERATURA DE LA ANTIGÜEDAD.

GRADO ONCE
PAIPA
2021

LAS MUSAS

Las Musas - o la Musa, porque son una y varias a la vez- son hijas de Zeus y de
Mnemosine. El mito memora que cuando Zeus hubo vencido a los Titanes,
consultados los restantes dioses sobre si faltaba algo, habrían respondido que era
menester la presencia de seres que con sus cantos celebraran la gloria
imperecedera de Zeus: fue entonces cuando surgieron las Musas y surgieron
precisamente de la unión de Zeus y Mnemosine, quien, en cierto modo, representa
la memoria de la victoria de Zeus.

En cuanto a la interpretación de la palabra "musa", O.Bie sugiere que es una


abstracción. Tal abstracción - según Biese daría en tres direcciones diferentes: 1) un
sentido personificado: musa pensada como divinidad; 2) un sentido concreto u
objetivo: "canto, poesía, música", es decir, composición musical o poética, y 3) un
sentido abstracto o subjetivo, entendido como "inspiración, entusiasmo, facultad
poética".

Los primeros testimonios literarios vinculados con su culto pueden rastrearse en la


Ilíada de Homero. En dicha epopeya, las Musas se invocan en el Proemio: "Canta,
oh Musa, la cólera del pélida Aquiles". Vemos, pues, que es la Musa quien
verdaderamente canta y que el poeta es sólo un "oyente" de ese efluvio divino.

Pero es en la Teogonía de Hesiodo donde se explica la naturaleza divina de las


Musas, su filiación, su función y de qué modo lo inspiraron: "Son ellas quienes un día
a Hesiodo enseñaron un bello canto cuando él apacentaba sus rebaños al pie del
divino Helicón. Y he aquí las primeras palabras que me dirigieron las diosas, Musas
del Olimpo, hijas de Zeus que tiene la égida: 'Pastores de los campos, tristes oprobios
de la Tierra que no sois más que vientres! Nosotras sabemos contar mentiras que
parecen verdades, pero también sabemos - cuando lo queremos- proclamar
verdades'. Así hablaron las hijas verdaderas del gran Zeus y, por bastón, me
ofrecieron una vara soberbia de olivo floreciente; después me inspiraron acentos
divinos para que glorificara lo que será, lo que fue, mientras me ordenaban
celebrar la raza de los bienaventurados siempre vivientes, y a ellas mismas, al
principio y al final de cada uno de mis cantos”.

A partir del Proemio de la Teogonía hesiódica se fortalece la idea según la cual el


poeta es un ser inspirado que, con una rama de olivo en la mano, canta a los dioses
inmortales, y cuyo canto - qué es un canto celebrante- no es más que la misma voz
de la Musas, siempre presente.

(Texto tomado de la introducción de Hugo Bauza a Walter Otto, Las


musas. Origen divino del canto y del mito, Buenos Aires, Editorial Universitaria, 1981,
pág. 7-12.)
1. El autor del texto anterior cita a O.Bie para

A. generalizar su posición sobre el tema a través de un ejemplo.


B. sustentar su posición a través de lo dicho por una autoridad en el tema.
C. explicar su posición sobre el tema a través de una relación causa-efecto.
D. contradecir su posición a través de lo dicho por una autoridad en el tema.

2. En el texto anterior, la cita más importante para la argumentación del


autor es la que toma de

A. la Ilíada, de Homero, porque aporta los primeros antecedentes sobre el tema


tratado.
B. la Teogonía, de HesÌodo, porque sirve para explicar la posición desarrollada por
el autor.
C. la Ilíada, de Homero, porque sirve para contrastar la posición desarrollada por
el autor.
D. la Teogonía, de HesÌodo, porque aporta algunos ejemplos sobre el tema
tratado.

3. El pero con el cual se inicia el cuarto párrafo del texto anterior introduce
una información que

A. tiene una relación de igualdad con lo planteado anteriormente.


B. expresa una contradicción entre lo que se ha dicho y lo que se va a decir.
C. especifica lo que se ha dicho anteriormente.
D. niega la información que se ha suministrado con anterioridad.

4. La tesis central del texto anterior plantea que la Musa era

A. una composición de género poético y musical.


B. una divinidad que habitaba en el panteón olímpico.
C. quien inspiraba al poeta y hablaba a través de él.
D. sinónimo de canto celebrante, poesía y música.

5. La información del texto anterior se encuentra organizada de la siguiente


forma:

A. testimonios literarios del culto a las Musas, tres posibles sentidos de la palabra
"musa", origen y conclusión.
B. introducción al culto de las Musas, etimología de la palabra "musa", testimonios
literarios, origen y conclusión.
C. etimología de la palabra "musa", origen, testimonios literarios, introducción al
culto y conclusión.
D. origen de las Musas, tres posibles sentidos de la palabra "musa", primeros
testimonios literarios y conclusión.

TEXTO No. 2

MITOS, VIAJES, HÉROES

Cinco civilizaciones antiguas, Babilonia, Egipto, Israel, Grecia y Roma, tuvieron un


estrecho contacto que originó lo que hoy conocemos como mundo occidental.
Entre ellas, la cultura griega fue la más influyente y decisiva en la formación de
nuestra cultura y, desde el punto de vista histórico y social, contribuyó en gran
medida al desarrollo de las formas de pensamiento y de la concepción del mundo
actual; también aportó temas, formas, estilos e incluso géneros literarios, como la
épica, la lírica, la tragedia y la comedia.

Con respecto a los poemas épicos, los más conocidos e importantes de la literatura
griega son la Ilíada y la Odisea, compuestos y transmitidos oralmente por poetas
itinerantes, llamados aedos y rapsodas, y cantados en celebraciones de carácter
civil y religioso; los temas se refieren a las leyendas de la guerra de Troya, como en
la Ilíada, y al relato del viaje de regreso de algunos héroes a su patria, y de las
dificultades y peripecias para lograrlo, como en el caso de Ulises en la Odisea. Es
quizás este último el héroe épico que ha logrado trascender los límites de la
mitología y épica griegas para convertirse en un símbolo universal, ya que logra
adaptarse a una sociedad más abierta y evolucionada.

En este poema vemos al héroe, en su viaje de regreso, enfrentando y superando,


gracias a las artimañas de su inteligencia, grandes obstáculos y peligros,
representados por seres míticos como los cíclopes, los lestrigones, los lotófagos, las
sirenas, las rocas errantes, etc. Sin embargo, dentro del largo viaje que emprende
el héroe Odiseo para volver a su patria, Ítaca, debe vivir contra su voluntad una
espeluznante aventura: ir camino del Mundo de los Muertos con el encargo de
consultar allí, en el Hades (la Mansión de los Muertos), al adivino Tiresias. Odiseo,
descorazonado, emprende la ruta hacia el Hades a preguntar al adivino cómo
regresar a su casa, a Ítaca. Este tema del descenso al Hades es común en la
literatura épica, pues ya otros héroes griegos habían bajado al reino de las sombras.
Es el caso de Orfeo, quien bajó a liberar a Eurídice; el de Heracles, quien fue a
cumplir una prueba de fuerza: traerse al enorme perro guardián de tres cabezas,
el Cancerbero monstruoso, y el de Teseo, quien entró para raptar a la reina de los
muertos, Perséfone.

También Virgilio, poeta romano, dirigirá a Eneas al Hades con un afán profético
nacional, y Dante, en la Divina comedia, cargará su descripción del reino infernal
con un tremendo conocimiento teológico, propio de la época. Este viaje a la
Mansión de los Muertos también fascinó a héroes de otras culturas como la oriental
mesopotámica: aquí, el héroe Gilgamés va al mundo de ultratumba a sacar, del
fondo de las aguas de la muerte, la planta de la vida eterna, la cual pierde
irremediable y trágicamente.

En el viaje que realiza Odiseo, a diferencia del viaje de Gilgamés, el héroe poco
espera después de la muerte, las almas vagan como tristes fantasmas nostálgicos
de la vida que perdieron; en cambio, en la saga mesopotámica el héroe siente
una fascinante atracción por ese universo espectral y por los invaluables secretos
que ese Otro Mundo encierra.

En el viaje de Odiseo se encarna el talante del griego de la época arcaica, que,


además de cruzar y surcar el Mediterráneo para fundar colonias en sus costas, viaja
lejos a comerciar y a conocer nuevas gentes y tierras. El viaje al Hades es un motivo
más en la serie de aventuras marinas de Odiseo y, en cierto modo, sirve para
marcar el último límite de sus enrancias y aventuras. El mundo de los muertos es lo
más lejos que puede peregrinar cualquier héroe, demostrando con esto, en
definitiva, la estatura mítica del héroe, a quien se le atribuye el más esforzado
arrojo, valentía y empeño.

Carlos García Gual, Mitos, viajes, héroes (Madrid, Taurus, 1985)

6. Según la información contenida en el texto anterior, es posible inferir que


los seres con los que se encuentra Odiseo en su viaje de regreso (lotófagos,
cíclopes, lestrigones, sirenas) cumplen, dentro del relato, la función de

A. ayudantes.
B. oponentes.
C. guías.
D. dadores.

7. En el texto anterior se afirma que el héroe griego Odiseo y el héroe


mesopotámico Gilgamés asumen posturas diferentes con respecto al descenso al
Mundo de los Muertos, porque

A. para Odiseo representa una oportunidad de conocer nuevas gentes y


tierras, y para Gilgamés tiene un verdadero sentido de trascendencia.

B. para Gilgamés representa un sitio más en el andar del héroe, y para Odiseo, un
destierro del mundo terrenal.

C. para Odiseo representa el camino para acceder a secretos y misterios ultra-


terrenos, y para Gilgamés, una experiencia más real y cotidiana.
D. para Gilgamés representa un mundo triste, de polvo y corrupción, y para
Odiseo, el sitio de reencarnación de las almas.

8. Según el texto anterior, es posible afirmar que el narrador de los


acontecimientos que ocurren en la Odisea es

A. el autor de la Odisea.
B. el protagonista de la Odisea.
C. la esposa de Odiseo.
D. una de las musas de la Odisea.

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