100% encontró este documento útil (1 voto)
468 vistas3 páginas

Ensayo Fe y Cultura

Jesucristo nació en Belén y predicó en Galilea, realizando milagros como curar enfermos. La fe cristiana surge a partir de los misterios y milagros de Jesús, quien a través de sus discípulos transmitió sus enseñanzas para despertar la fe en él y cumplir su mandato de salvación. Los cristianos mantienen su fe en Jesús a través de la oración, el estudio de la palabra de Dios y realizando buenas obras, con la certeza de alcanzar el reino de los
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
100% encontró este documento útil (1 voto)
468 vistas3 páginas

Ensayo Fe y Cultura

Jesucristo nació en Belén y predicó en Galilea, realizando milagros como curar enfermos. La fe cristiana surge a partir de los misterios y milagros de Jesús, quien a través de sus discípulos transmitió sus enseñanzas para despertar la fe en él y cumplir su mandato de salvación. Los cristianos mantienen su fe en Jesús a través de la oración, el estudio de la palabra de Dios y realizando buenas obras, con la certeza de alcanzar el reino de los
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 3

Introducción

Jesucristo nació en Belén, un pueblo de Judea. Vivió en una época de


expectativas mesiánicas y apocalípticas y fue bautizado por Juan el Bautista en el
Río Jordán. Durante su vida en la tierra, recorría toda Galilea predicando y
enseñando los principios de salvación, la vida eterna y el reino de Dios. En el
curso de su ministerio realizó muchos milagros, curó enfermos, paralíticos,
endemoniados, leprosos y tuvo un gran dominio sobre las cosas de la naturaleza y
sobre el hombre. A partir de esto nos preguntamos, ¿cómo la imagen histórica de
Jesucristo ayuda a la fe y esperanza de su pueblo, en su palabra? Es importante
identificar y reconocer como a partir de la historia de Jesús el pueblo de hoy cree
en su palabra y transmite sus enseñanzas a través de las generaciones mediante
la predicación de las Sagradas Escrituras en todas las ciudades y países del
mundo, siempre encaminados en alcanzar la vida eterna y el reino de Dios en
todas sus manifestaciones. El objetivo de este escrito es explicar mediante hechos
históricos de la vida de Jesús, el origen de la fe cristiana y el surgimiento del
pueblo de Dios, y como este profetiza su palabra en todo el mundo.

Cuerpo

La fe de la iglesia (pueblo de Dios) surge precisamente a partir de los misterios y


milagros del Señor Jesucristo y enhebra otra vez el credo de Israel, en la medida
en que mueve a confiar y obedecer a un Dios que merece ser creído.

La liberación del pueblo de Israel de la esclavitud, la promesa de que al Pueblo de


Dios le sería otorgada su propia tierra en Canaán y el pacto realizado en el monte
Sinaí son revelaciones divinas de gran importancia. Dios a través de los
mandamientos dio normas para la vida de Israel, y leyes para que el pueblo de
Israel profetizara su fe. Es así como la iglesia de hoy con las buenas acciones
hacia el prójimo y la predicación de su palabra obedece sus mandamientos y
cumple su palabra en búsqueda de la salvación y la vida eterna.

Los pasajes bíblicos que nos hablan de Cristo han sido escritos todos sin
excepción por discípulos suyos. Todos los cristianos pueden comprender cada
uno estos porque son parte de la misma iglesia que los produjo, es decir, son
parte del pueblo de Dios. El trayecto de la vida del señor Jesús llega a los
hombres por medio de escritores cristianos creyentes de la resurrección de Jesús,
quienes recopilaron los sucesos de su vida en la tierra para anunciarlo al mundo
entero y de esta manera despertar y sostener la fe de la humanidad en Cristo, así
como también incitar a cumplir su mandato y caminar con paso firme en su senda
que conduce a la salvación y al perdón de los pecados.

La fe cristiana en sí misma es una realidad histórica: la Iglesia ha creído en Cristo


a lo largo de los siglos. La fe se basa en una obediencia libre a Cristo y al Padre,
en respuesta al llamado de Dios a creer en Él porque en el pasado otorgó pruebas
de confiabilidad tal como sus milagros y sus obras y también en el futuro cumplirá
su palabra, los que siguieron su palabra y caminaron de su mano, en el día del fin
ascenderán al reino de los Cielos y gozarán del paraíso a su lado.

Al tener conocimiento de las grandes bendiciones que se puede recibir por medio
de la fe en Jesucristo, así como lo tuvo el pueblo de Israel; se debe procurar un
aumento de la fe en él mediante la oración acerca de las necesidades, esperanzas
y deseos que cada ser humano tiene y también escuchando y estudiando la
Palabra de Señor. La fe implica una historia, la experiencia temporal de un Dios
que ama al hombre y lo libera para que con su creatividad, comience otra vez la
historia y la conduzca firme en el camino del bien hacia su fin.

Conclusión

Nuestra fe está evidencia el amor hacia Dios, es una historia rescatada desde los
tiempos en los que Jesús estuvo en la tierra e hizo muchas obras a favor del
mundo. Todos los cristianos mantenemos nuestra fe latente en él y todos los días
procuramos hacer buenas obras que Cristo a través de sus mandamientos nos
invita a realizar. Así como el pueblo de Israel fue liberado de la esclavitud gracias
a su fe, nosotros los cristianos podemos llegar a su reino también a través de
nuestra oración y el respeto a su ley. Nosotros estamos firmes en la palabra de
Dios porque tenemos la certeza que cuando el vendrá nos llevara consigo a la
vida eterna. ¿Trataríamos de estudiar y aprender si no creyéramos que vamos a
obtener sabiduría y conocimiento? ¿Trabajaríamos todos los días si no
esperáramos lograr algo con ello? ¿Plantaría un campesino si no esperara
cosechar? Todos los días actuamos con la esperanza de algo, a pesar de no ver
el resultado final, eso es la fe en Jesús. Creemos en el porque existe, porque él
quiere que nos salvemos alcancemos la felicidad, habitar en todos nosotros, dirigir
nuestras vidas, porque nos ha dado a conocer su amor a través de su hijo amado
el señor Jesucristo, ha creado todo el universo y porque responde el sentido y fin
de nuestras vidas.

También podría gustarte