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Tipeos Civil

1) El documento discute las diferentes teorías sobre la simulación de acuerdos legales según autores doctrinarios y los códigos civiles peruanos de 1952, 1936 y 1984. 2) Explica que el Código Civil de 1984 distingue claramente la simulación absoluta de la relativa, a diferencia de códigos anteriores, y establece la nulidad de cualquier acuerdo con simulación absoluta. 3) Señala que la jurisprudencia peruana ha declarado nulos acuerdos simulados que causaban perjuicio, pero

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1) El documento discute las diferentes teorías sobre la simulación de acuerdos legales según autores doctrinarios y los códigos civiles peruanos de 1952, 1936 y 1984. 2) Explica que el Código Civil de 1984 distingue claramente la simulación absoluta de la relativa, a diferencia de códigos anteriores, y establece la nulidad de cualquier acuerdo con simulación absoluta. 3) Señala que la jurisprudencia peruana ha declarado nulos acuerdos simulados que causaban perjuicio, pero

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CAP I

ASPECTOS CONCEPTUALES IMPORTANTES A CONSIDERAR

Doctrinas legales me he permitido en un concepto de observación para desconocer los


aspectos conceptuales a través de los siglos lo que en punto como es el tratar de un
Jurídico de que no es una simulación lo que es actuado.
1. JUS INTENDI (COSA)
2. EL JUS FRUENDI (A TODOS SUS FRUTOS)
3. EL JUS ABUTENDI (POTESTAD DE HERIR ABUSAR)
Es que no se pueda permitir en ambos en una negociación lo que me permite en mi
apreciación que el acto es presumir y obtener sin ver si no una premisa de enseñanza
como una semilla en su riego cabe decir que una descripción es una simulación
negociada que puede ser copia en el día día que es una compra consecuencia de
costumbre con la decisión de voluntad de atender una necesidad de participación
sostenida en la verdad de un cuerpo en existencia de un objeto inmobiliario o móvil.
4. EL JUS DISPOALDI (DISPOSICION DEL BIEN)
5. EL JUS VINDICANDI (EL PODER DE REINVINDICAR DE UN SUPUESTO
PROPIETARIO O DE UN INVITADO POSEEDOR)
Es un aspecto indicado por el Dr. Ferrara de Analizar la perspectiva de ausencia como
evadida en los actos (Aspecto Psicológico) y mi parecer.
2- La Simulación en los códigos civiles 1952 Peruanos
A) Cód. C. de 1952
No incorporo el acto o el negocio Jurídico aquí se antepone el Juris Canonic
Benedicto XV entonces a su vez estarían en una Simulación de Negociación
retorica que el conocimiento también haya negociado en termino amplio y en
la verdad de los actos por conocimiento.
En Simulación de un acto quiero definir un acto que se dio en un negociado de
enseñanza porque si en lo escrito nos lleva a viajar en la Negociación simulada
entonces cabe decir que toda compra es un negociado simulado entonces cabe decir
que toda compra es un negociado simulado en virtud en lo antes referido el Dr.
Francisco Sayán García – Es injusto poseedor un fraude en el conocimiento no es una
norma un negociado? En verdad me reservo el derecho de dicernir a mención de la
norma contenida que es expuesta en un colado de artículos.
Si vamos al concepto textualmente que en tesis se manifiesta consentimiento entre las
partes como tratamiento de simulación que el Negocio no es sino la actuación
compartida entre la vida y en vida por mas facultadas que puedan ser testamentarias
como el ejemplo de la fábrica de gaseosas en requisitos de validez del contratos.
a) Conocimiento de las partes
b) La capacidad para contratar
c) Cosa cierta que sea materia de contrato
d) Causa justa para obligarse
El referelegislatit en 1847 historia de los siglos XVIII, XIX, y XX la edificación en un siglo
quien la hace nos encontramos disculpenmo no quiero meterlos cuando los caudales
no los cree yo los caudales de los riegos o por entender caudales por propiedad de una
riqueza
b) C. Civil 1936 el Art 1094 la simulación no es reprobada por la Ley cuando a nadie
perjudica ni tiene un fin ilícito he aquí una Simulación de un acto que es sanción en lo
ilícito y me pregunto qué negociado tienen las armas que la ley aprueba y a quien
perjudica en lo licito y lo ilícito por cosa como objeto de un negocio es muy confuso o
mido en siembra del pillaje en Mención es acaso que el acto simulado tiene voluntad
propia e lo actuado y quien interviene si no hay segundo y niego el tiempo transcurrido
el espacio que fue sujeto de derecho en lo simulado de simulación encontraremos que
es la atención de una propuesta debo interpretar para interponer el acto voluntario
que tiene rasgos y estructuras en una libre democracia lo que no se negocia es lo que
se observa en lo simulado o en simulación es un principio de derecho ver la intención
que es la verdadera paradosa se puede vestir de polo.
C: código c de 1984
Por su parte.
c) el código civil de 1984
Por su parte, el artículo 190° del Código Civil vigente establece que "Por la simulación
absoluta se aparenta celebrar un acto jurídico cuando no existe realmente voluntad
para celebrarlo". Por su parte, el artículo 219° inciso 5 del mismo Código indica que El
acto jurídico es nulo, cuando adolezca de simulación absoluta. Como se puede advertir
el tratamiento legislativo vigente es diferente al que existió en el Código Civil de 1936,
toda vez que en dicha norma sólo se sancionaba con nulidad el negocio jurídico con
simulación absoluta, siempre que éste afecte los intereses de terceros o tenga fines
ilícitos; en cambio, la actual legislación civil sanciona con nulidad todo negocio jurídico
celebrado con simulación absoluta, sin importar si tiene o no fines ilícitos o si afecta o
no intereses de terceros, lo cual consideramos constituye una regulación, por lo menos
incompleta.
El Código de 1984 distingue claramente la simulación absoluta de la simulación
relativa, lo que no hizo el Código de 1936. Por el art. 190, que, no tiene antecedente en
el Código anterior, da una noción de la primera precisando: (...)
El Código de 1984 tiene una referencia expresa a la simulación parcial, de la que se
colige su distinción de la simulación total, distinción sobre la que tampoco se
pronunció el Código de 1936.
El mismo art. 192 hace referencia a la simulación interpósita persona, lo que no hizo el
Código de 1936: (...)
Ninguna de las dos normas ha sido receptada por el Código de 1984. La distinción de la
simulación en lícita e ilícita fluye de la referencia que el art. 191 hace al posible
perjuicio de un tercero y de la referencia al "tercero perjudicados”

Corno se puede advertir del comentario realizado por el autor Vidal Ramírez, si bien es
cierto que describe el notable cambio en la regulación del Código Civil de 1984,
también es cierto que no motiva las razones o justificaciones que habría considerado el
legislador o la doctrina para ese cambio en la regulación sobre el terna relativo a la
simulación absoluta. Por su parte, el Dr. Rómulo Morales, comentando el artículo 190'
del Código Civil Peruano vigente, establece que la simulación del negocio jurídico,
puede ser considerada desde cuatro teorías doctrinarias:

Primera teoría: Simulación es la declaración de un contenido de voluntad no real,


emitida conscientemente y de acuerdo entre las partes, para producir con fines de
engaño la apariencia de un negocio jurídico que no existe o es distinto de aquel que
realmente se ha llevado a cabo (FERRARA)". La nulidad del contrato simulado hallaría
fundamento en la falta de voluntad de contenido: la simulación sería uno de los casos
en los cuales la declaración no produce el efecto indicado porque la voluntad no
corresponde a la declaración (WINDSCHEID, SCIALDJA Y STOLFI) (...)
Segunda teoría: Simulación ofrece el espectáculo de que las partes emiten una
declaración y una contradeclaración dentro del mismo negocio, de suerte que ambas
se neutralizan recíprocamente. No debe creerse que existan dos negocios que se
excluyen sucesivamente.
En el elemento de la declaración está contenida también la contradeclaración —
aunque se fije posteriormente por escrito- y la una se neutraliza por la otra: de modo
que el negocio en conjunto conduce a un efecto nulo, puesto que lle'va el resultado
dinámico que se deriva de la totalidad de las declaraciones que comprende (KOHLER).
Así, la simulación es el resultado de dos declaraciones que se anulan entre ellas;
aquella por virtud de la cual se contrata y aquella en la que se manifiesta que se hace
aparentemente; la primera falsa desde un punto de vista ontológico y potencialmente
verdadera o relevante desde el punto de vista jurídico; la segunda verdadera
antológicamente pero legalmente irrelevante. (...)
Tercera teoría: La declaración simulatoria es querida y no sólo para ocultar o engañar;
se quiere crear una apariencia y para un fin determinado (DE CASTRO Y BRAVO). El
dato necesario y suficiente que identifica la simulación es sobre todo la apariencia
intencional de un negocio que por acuerdo de las partes no se corresponde en todo o
en parte de su relación. La simulación integra por tanto una hipótesis de ineficacia del
contrato por voluntad de las partes (BIANCA). (...)
Cuarta teoría: la primera posición causalista expresa que el propósito efectivo de las
partes sería incompatible con la causa del negocio simulado en cuanto excluiría la
realidad del propósito típico del negocio. El negocio simulado no puede obtener tutela
del ordenamiento por falta de causa y por eso es considerado nulo. El acuerdo
simulatorio priva al contrato simulado de su causa, en la medida en que manifiesta la
voluntad de las partes en dar vida sólo a una apariencia. De esta manera, por faltar la
causa, el negocio o contrato ostensible estará viciado de nulidad (PUGLLAITI). (...)
Situación similar ocurre con el inciso 2 del artículo 2001° del Código Civil de 1984, la
misma que establece un plazo de siete (07) años como plazo prescriptorio, respecto de
la acción indemnizatoria derivados para las partes de la violación de un acto simulado.
De la jurisprudencia:
Desde la vigencia del Código Civil de 1984, se han emitido pronunciamientos judiciales
diversos. En muchas ocasiones se han declarado nulos determinados negocios jurídicos
simulados, debido a que estos causaban un perjuicio a alguna de las partes o a un
tercero; sin embargo, en diversos pronunciamientos judiciales se ha analizado la
institución de la simulación, sin tener en cuenta el elemento "perjuicio" o "la
vulneración de una norma legal"
Así por ejemplo, la Corte Suprema en el expediente 183-88 mediante resolución
judicial de fecha 29,03.1989 conceptualizó la simulación de la siguiente manera:
Como se puede apreciar, la Corte Suprema efectúa una. Conceptualización de lo que es
la simulación, señalando además qué se necesitaría para ejercitar la acción judicial de
nulidad; sin embargo, no considera en ningún momento el elemento "perjuicio" "o
vulneración de de la ley".
A lo anterior, debemos añadir que el artículo 220° del Código Civil Peruano establece
que la Nulidad de un negocio jurídico puede ser declarada de oficio por el Juez, cuando
ésta resulte manifiesta. Este criterio ha sido ratificado por diversos pronunciamientos
emitidos por la Corte Suprema, en los cuales se ha dejado en claro que dicha
atribución del Juez no es absoluta, por ende, debe respetarse el derecho al debido
proceso y el derecho de defensa. Podemos mencionar al respecto las Casaciones1843-
1998-ICA, 1324-2005-
Cabe citar la Casación antes mencionada No- 1324-2005-PUNO, en la cual la Corte
Suprema estableció lo siguiente: Que, en tal sentido, no obstante que esta Sala
Suprema considera que sí resulta factible —aunque no se haya demandado
expresamente- declara de oficio la nulidad de un acto jurídico, sin embargo, para el
caso en concreto ello no resulta viable, toda vez que al girar el análisis de los
Juzgadores en torno a la validez de un acta notarial, era indispensable contar con los
elementos de juicio necesarios para establecer la configuración de la causal de nulidad
que se ampara, como es el tener a la vista el expediente notarial, así como integrar la
relación procesal al Notario Público que tuvo a su cargo el trámite del proceso no
contencioso de sucesión intestada, a fin de evitar su indefensión, presupuestos que no
se han configurado en autos (...)
3. El tratamiento de la simulación en los Códigos Civiles Extranjeros:
3. El tratamiento de la simulación en los Códigos Civiles Extranjeros:
Resulta importante mencionar que existen diversos ordenamientos jurídicos foráneos
que reconocen la validez de la figura civil denominada "simulación absoluta de los
actos jurídicos".

En Francia.- El Código Civil de 1804, regula lo siguiente:


Artículo 1321: Las contraescrituras no pueden surtir efecto sino entre las partes
contratantes; no producen efecto contra terceros.
En Argentina.- El Código Civil vigente, regula lo siguiente:
Artículo 957: La simulación no es reprobada por la ley cuando a nadie perjudica ni
tiene un fin
En Colombia.- El Código Civil vigente, regula lo siguiente:
Artículo 1766: Las escrituras privadas, hechas por los contratantes para alterar lo
pactado en escritura pública, no producirán efecto contra terceros.
En Uruguay.- El Código Civil vigente, regula lo siguiente:
Artículo 1580: Los contradocumentos surten efecto entre los contrayentes y sus
herederos, pero no pueden perjudicar a sus sucesores por título singular, los cuales se
consideran como terceros.
En Paraguay.- El Código Civil vigente, regula lo siguiente:
Artículo 305.- La simulación no es reprobada por la ley cuando a nadie perjudica ni
tiene un fin ilícito.
Artículo 306.- Se podrá anular el acto jurídico, cuando por la simulación se perjudica a
un tercero ❑ se persigue un fin ilícito. En tal caso, los autores de aquella sólo podrán
ejercer entre sí la acción para obtener la nulidad, con arreglo a lo dispuesto por este
Código sobre el enriquecimiento sin causa.
En Bolivia: El Código Civil vigente, regula lo siguiente:
Artículo 545: La prueba de la simulación demandada por terceros puede hacerse por
todos los medios, incluyendo el de testigos. Entre las partes solo puede hacerse
mediante contradocumento u otra prueba escrita que no atente contra la ley o el
derecho de terceros.
En Ecuador: El Código Civil vigente, regula lo siguiente:
Artículo 1724: Las escrituras privadas hechas por los contratantes, para alterar lo
pactado en escritura pública, no surtirán efecto contra terceros.
Del análisis exegético de tales ordenamientos jurídicos extranjeros, se puede concluir
que en principio se reconocen determinados efectos a los negocios jurídicos
simulados, siempre que no se afecten derechos de terceros, así como cuando no se
transgreda ninguna norma jurídica. No obstante ello, en diversos ordenamientos se
regula la existencia del contradocumento, figura no incluida en nuestra legislación.
4. Pronunciamientos judiciales referidos a la simulación absoluta de los negocios
jurídicos:
A continuación, precisaremos diversos pronunciamientos emitidos por las Cortes
Superiores y la Corte Suprema, lo cual podría darnos una idea clara sobre "el estado de
la cuestión" a nivel judicial.
En contra de la propuesta de investigación:

 "La acción de nulidad por simulación no puede ser alegada si no por aquellos en
cuyo beneficio la hubiera establecido la ley, de lo cual se infiere que sólo puede
pedirla quien ha sido parte en el contrato impugnado y no un extraño en la
vinculación contractual. El fundamento de este derecho que la ley civil
concede, radica en la necesidad de protegerlos de los riesgos derivados de la
inexperiencia de los manejos dolosos desplegados para inclinar su voluntad en
determinado sentido." (Exp. 06-86-Cusco, Normas Legales No. 171. Pág. 239)
 "Los efectos del negocio jurídico representado por la causa, punto fundamental
para la simulación, guardan plena concordancia con una de las características
de esta institución jurídica, cual es el propósito de promover en perjuicio de la
Ley o de terceros ajenos al negocio una falsa creencia sobre la realidad de lo
declarado.
La controversia no debe resolverse bajo el esquema que al actor le incumbe
probar los hechos constitutivos y al demandado acreditar los hechos
modificativos, impeditivos, extintivos invocados en su propio mecanismo, sino
que en materia de simulación, al doctrina reconoce la llamada carga probatoria
dinámica, al que se encuentra referida a situaciones jurídicas, esto es,
situaciones de expectativa, esperanza de la conducta jurídica que ha de
producirse, según la cual, la carga de probar se traslada a quien se encuentra
en mejores condiciones para producirla.
 En la simulación absoluta se aparenta celebrar un acto jurídico cuando en
realidad no se constituye ninguno, esto es, existe un concierto de voluntades
para presentar un acto jurídico que no responde a la voluntad real de las
partes, de manera que no producirá consecuencias jurídicas entre las partes
porque la causa en este supuesto significa crear una apariencia de vinculación
jurídica entre estas, apariencia que no corresponde a la realidad y que sólo
sirve de medio para producir engaño a terceros. Así, en este supuesto existe un
acto simulado el que se muestra ante los demás —que es nulo de acuerdo a la
norma citada-, y por otro lado no existe ningún acto jurídico disimulado, oculto
a la vista de los demás, no existe nada, las partes no desean celebrar acto
jurídico alguno. (...)" (Expediente No. 747-08, Sentencia de Vista del
16.07.2008, Cuarta Sala Civil de la Corte Superior de Lima, En Jurisprudencia
Civil de la Corte Superior -2006¬2008- Gaceta Jurídica, Págs. 28 y 29)
A favor de la propuesta de investigación:

 "Que el artículo 193 del Código Civil establece que la acción para solicitar la
nulidad del acto simulado puede ser ejercida por cualquiera de las partes o por
el tercero perjudicado. Que el recurrente ha precisado en su escrito de
demanda que no ha sido parte de los contratos cuya nulidad se solicita, sino los
demandados, en consecuencia, que el interés que alega es el de tercero
perjudicado. Que debe entenderse como tercero perjudicado a aquella persona
que sin haber intervenido en la celebración del negocio como parte de él, sin
embargo se ve perjudicado por sus efectos. Que el perjuicio causado no se
presume, sino que debe ser probado judicialmente por quien reclame la
nulidad." (Cas. N° 735-96. Diálogo con la. Jurisprudencia N° 38. Enero 2001.
Pág. 241)
 "La simulación es aquella declaración de un contenido de voluntad no real,
emitida conscientemente y de acuerdo entre las partes, para producir con fines
de engaño la apariencia de un negocio jurídico que no existe o que es distinto
de aquel que realmente se ha llevado a cabo; y tiene las siguientes
características: a) Disconformidad entre la voluntad real y la manifestación: lo
más característico de la simulación es la divergencia intencional entre voluntad
interna y voluntad manifestada, y que lo interno, lo querido, lo externo y lo
declarado están en oposición consciente; en efecto, las partes no quieren el
negocio , quieren solamente hacerlo aparecer, y por eso emiten una
declaración disconforme con su voluntad, que predetermina la nulidad del acto
jurídico y, al mismo tiempo, sirve para provocar una ilusión falaz de su
existencia; concierto entre las partes para producir el acto simulado (...) c)
Propósito de engañar: Como la simulación se dirige a producir un acto
aparente, el propósito de engañar es una característica inherente; el engaño va
dirigido a los terceros, no debe confundirse la intención de engañar con la de
dañar." (Sentencia del 20.05.2008, expediente 1667-07, Cuarta Sala Civil de
Lima)

 "En la simulación absoluta se aparenta celebrar un acto jurídico cuando en


realidad no se constituye ninguno, esto es, existe un concierto de voluntades
para presentar un acto jurídico que no responde a la voluntad real de las
partes, de manera que no producirá consecuencias jurídicas entre las partes
porque la causa en este supuesto significa crear una apariencia de vinculación
jurídica entre estas, apariencia que no corresponde a la realidad y que sólo
sirve de medio para producir engaño a terceros."
 "La simulación requiere de la concertación de las dos partes para celebrar un
acto jurídico aparente en perjuicio de terceros" (Cas. N° 276-99- Lambayeque,
El Peruano, 17-09-2000, Pág. 6310)
"Para que la simulación se pueda dar en un acto jurídico es menester que concurran
por lo menos dos elementos: el propósito de provocar una falsa creencia sobre la
realidad de lo declarado y el acuerdo de simulación.
Al haberse burlado la acreencia de la demandante perjudicándola económicamente,
debe ampararse la nulidad del acto jurídico por simulación, pues se ha acreditado que
la demandada transfirió el inmueble, con fecha posterior a la pretensión dinerada de la
demandante a su hermana, la misma. que no ha demostrado solvencia económica
para la adquisición del inmueble"
De las diversas sentencias emitidas por los distintos órganos jurisdiccionales se pueden
efectuar los siguientes comentarios:
 Existen diversos pronunciamientos judiciales, en los que se considera la nulidad
de un negocio jurídico simulado (en forma absoluta), por el sólo hecho de
producirse un concierto de voluntades, para aparentar un negocio que en el
fondo no existe con el propósito de engañar a terceros. En ese sentido, en esta
primera postura, no consideran el perjuicio a terceros ni la afectación de alguna
norma legal, seguramente, porque estos elementos no son considerados en
nuestra legislación sustantiva; en consecuencia, es suficiente el acuerdo
simulatorio y el propósito de engaño.

acto jurídico que no responde a la voluntad real de las partes, de manera que no
producirá consecuencias jurídicas entre las partes porque la causa en este supuesto
significa crear una apariencia de vinculación jurídica entre estas, apariencia que no
corresponde a la realidad y que sólo sirve de medio para producir engaño a
terceros."24
"La simulación requiere de la concertación de las dos partes para celebrar un acto
jurídico aparente en perjuicio de terceros" (Cas. N° 276-99- Lambayeque, El Peruano,
17-09-2000, Pág. 6310)
"Para que la simulación se pueda dar en un acto jurídico es menester que concurran
por lo menos dos elementos: el propósito de provocar una falsa creencia sobre la
realidad de lo declarado y el acuerdo de simulación.
Al haberse burlado la acreencia de la demandante perjudicándola económicamente,
debe ampararse la nulidad del acto jurídico por simulación, pues se ha acreditado que
la demandada transfirió el inmueble, con fecha posterior a la pretensión dinerada de la
demandante a su hermana, la misma. que no ha demostrado solvencia económica
para la adquisición del inmueble"25
De las diversas sentencias emitidas por los distintos órganos jurisdiccionales se pueden
efectuar los siguientes comentarios:
Existen diversos pronunciamientos judiciales, en los que se considera la nulidad de un
negocio jurídico simulado (en forma absoluta), por el sólo hecho de producirse un
concierto de voluntades, para aparentar un negocio que en el fondo no existe con el
propósito de engañar a terceros. En ese sentido, en esta primera postura, no
consideran el perjuicio a terceros ni la afectación de alguna norma legal, seguramente,
porque estos elementos no son considerados en nuestra legislación sustantiva; en
consecuencia, es suficiente el acuerdo simulatorio y el propósito de engaño. contrario,
el acto jurídico en sentido estricto es aquel acto por el cual por su sola realización el
ordenamiento jurídico le atribuye efectos jurídicos."31
Es importante recalcar que el negocio jurídico constituye una realidad misma y, por
tanto, tiene pleno poder para producir sus propios efectos, los cuales - como indica
Battista Ferri- son reconocidos por el ordenamiento jurídico y se vuelven operantes, en
consecuencia, la intervención del ordenamiento jurídico ocasiona una "juridificación
de los efectos empíricos" producidos por el acto de autonomía negocial celebrado por
las partes, se produce, pues, una correspondencia de los efectos jurídicos a las
disposiciones tomadas por las partes. 32
Consideramos importante citar los tipos de Ineficacia que se reconocen
doctrinariamente, a efectos de delimitar los conceptos que se citarán a continuación.
En ese sentido, es importante referir que en principio los negocios jurídicos son
celebrados por las partes con la natural intención de que produzcan válidamente los
efectos que éstas pretenden, según su propio reglamento de intereses. No obstante
ello, en diversas ocasiones los negocios jurídicos nunca despliegan sus efectos, debido
a un defecto de origen o terminan cesando tales efectos por un acto o hecho posterior
a su celebración que trae dicha consecuencia.
La Ineficacia estructural es aquella que se presenta al momento mismo de la
celebración del acto jurídico, es decir, se trata de un acto jurídico afectado por una
causal de ineficacia desde el momento mismo de su celebración o formación. (...)
Concepto de negocio jurídico simulado:
El profesor Hernán Cortés señalaba que "la simulación consiste: en el ocultamiento de
la realidad, mostrando una cosa distinta de aquella. (...) De esta forma, el acto externo,
que es observado por los extraños, aparece como cierto, siendo que él no trasunta el
estado volitivo de sus protagonistas, ni la verdad exacta de la voluntad creadora que lo
genera"34; por su parte, el profesor Francesco Galgano indica que: "Hay simulación
cuando los contratantes crean, con su declaración, sólo la apariencia exterior de un
contrato, del cual no quieren sus efectos (. .), o crean la apariencia exterior de un
contrato diverso del querido por ellos"
El autor Jorge Mosset Iturraspe, citando a Pugliatti, señala que:
"(...) en la simulación se dan dos declaraciones combinadas por la unidad de la
intención, de modo tal que una de ellas —la del acuerdo simulatorio- destruye la causa
de la otra —la del negocio simulado-, "dejando en vida sólo el despojo y dejando
subsistente, por ello, la apariencia de negocio" El acuerdo simulatorio priva de causa
—vale decir de función económica y jurídica- al negocio simulado.
Etimología: Según el Dr. Aníbal Corvetto Vargas: 'Tiene de dos palabras latinas: "simul"
que significa igual y "actio", acción, y quiere decir según esta etimología, el concierto o
la inteligencia de dos o más personas para dar a una cosa la apariencia de otra."
Señala el Dr Francisco Ferrada:
En el lenguaje corriente, simular significa "hacer aparecer lo que no es, mostrar una
cosa que realmente no existe". El origen etimológico conforme este concepto (...)
simular es hacer similar, dar aspecto y semejanza a lo no verdadero. Así se simula una
enfermedad, un peligro un viaje. (...)
Los requisitos del negocio simulado son, por tanto, los tres siguientes:
1. Una declaración deliberadamente disconforme con la intención
2. Concertada de acuerdo entre las partes.
3. Para engañar a terceras personas."
Continúa señalando el Dr. Ferrada:
La simulación es el resultado de un acuerdo entre los contratantes y sale, por lo
mismo, del campo de los actos unilaterales. Para completar la idea del negocio
simulado debemos insistir sobre los fines que se proponen las partes al recurrir a ese
artificio. Su propósito puede ser lícito o fraudulento. No debe olvidarse que una
simulación puede combinarse por las partes sin propósito de fraude. Y esto, no sólo en
la simulación relativa, sino también en la absoluta. Intereses legítimos, como la
necesidad de sustraerse a disgustos o solicitaciones, o un fin de vanidad o de réclame,
o el interés de conservar el crédito y ciertas apariencias sociales, pueden dar lugar a la
producción de una apariencia, con plena seriedad de las partes, sin causar una lesión
en el derecho de los terceros”

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