ESPACIO PEDAGOGICO:
Seminario de Investigación de Historia
TRABAJO:
Importancia teórica de la historia
ALUMNO:
Jose Indalesio Galindo Bueso 0501-1992-05708
La Ceiba Atlántida, 17 de febrero del 2021.
IMPORATANCIA TEORICA DE LA HISTORIA
Uno de los problemas principales de la Historia reside, precisamente, en la definición del concepto.
De ello se han desarrollado extensos debates considerando diferentes perspectivas de las cuales
destacan dos: la primera la considera como el relato del pasado humano (con sus particularidades
relevantes correspondientes), y la segunda como (todo) el pasado humano en sí.
La importancia de la definición de la palabra Historia no es menor, pero ello no debe constituir un
problema al momento de realizar el trabajo del historiador, pues si bien la palabra nace (y se fortalece)
en el sentido de investigación y narración de pasado, el historiador ahora sabe perfectamente que la
historia no está ligada únicamente a las evidencias que han sobrevivido a la desaparición o el olvido,
y que ellas mismas responden a una realidad inmutable la cual constituye nuestro objeto de estudio.
Por otro lado, es posible que la herencia del conocimiento de la realidad de hace miles de años hasta
el instante más cercano de nuestro pasado haya sido manipulado (voluntaria o involuntariamente) tanto
por los investigadores o relatores de la historia como por los propios actores, y aunque ello no significa
que el pasado real se modifique no existe otra forma de acceder a él que contradiga esa verdad
sobreviviente.
En el afán de acercarse a esta realidad inmutable el investigador intenta postrarse en un punto neutral
que pueda equilibrar, por decirlo de alguna manera, las dos acepciones principales de la Historia, o
sea, el de emplear las evidencias del pasado para construir y conocer dicho pasado (historia-realidad)
y finalmente narrarla (historia-conocimiento), no obstante el propio ser para otro de la historia-
conocimiento (teniendo en cuenta que es la única que se encuentra a nuestro alcance) limita este
objetivo.
La importancia del historiador reside en recortar cada vez más la distancia entre la historia-
conocimiento y la historia-realidad, para ello debe ser consciente de su responsabilidad en la emisión
de teorías derivadas de investigaciones despertadas por un interés particular en el hecho, y con él una
postura subjetiva innegable. El correcto empleo de los conocimientos y experiencias propias del
historiador es el de usarlos como referentes de un pasado ajeno. De igual forma la aprehensión de ese
pasado lejano ha de servir como modelo para un presente que se vuelve historia a cada instante.
No obstante, varios elementos hacen pensar en la importancia de la historia en la construcción de un
saber, sobre todo porque en su definición ya contiene la necesidad de tenerla en cuenta para cualquier
elaboración de ciencia, o disciplina. La teoría y la practica conjugadas hacen de la historia un Arte
narrativo, un arte que no deja que las cosas pasen así por que si; es un arte que permite un testimonio
de la existencia, de lo que compone al hombre, podríamos decir que ese arte se dedica a hacer existir
por ejemplo aquello que definía Lacan, no una memoria biológica sino una rememoración, es decir la
misma historia.
La historia es una ciencia que nos permite conocer ese pasado para entender el presente que vivimos
y construir nuestro futuro. Una de las principales razones por las que es importante estudiar historia en
la actualidad es para entender el cambio de la sociedad actual y cómo surge la sociedad en la que
vivimos.
Es importante que las personas se vinculen con la realidad de su país que les ayude a construir una
sociedad mejor. Saber de la actualidad, no es preocuparse sólo de los programas de televisión, las redes
sociales o los juegos en red… es buscar en profundidad las razones para explicar la propia identidad,
para comprender la moral de la sociedad, para entender a la gente, pero, sobre todo, para tener un
criterio propio a la hora de analizar las interpretaciones contradictorias que surgen en el día a día.
Aprender historia despierta la curiosidad. No hay que dejarla de lado porque ayuda a que entendamos
mejor los procesos sociales, los inventos o los descubrimientos científicos. Este saber nos resultará
más fácil a la hora de inventar o desarrollar cosas nuevas, sin tener que empezar desde el principio. Y
de ahí, otra razón más por la que es importante aprender historia.
En una sociedad como la actual, donde prima la inmediatez, nos preguntamos si la carrera de historia
tiene futuro. Y es que la historia no es una de las ramas de la ciencia que puede, por ejemplo, salvar
una vida con un trasplante de corazón. Los efectos de su conocimiento se ven a más largo plazo. Así,
una persona que aprende historia se la considera como alguien culta y refinada, frente a aquellos que
no saben nada de la materia y se les tacha de iletrados.
Aprender historia también ayuda a dirimir la importancia que han tenido para nuestro tiempo algunos
hombres y mujeres que gracias a su coraje, inteligencia o tesón han traído hasta nuestros días la
sociedad que somos. Cómo se enfrentaron en el pasado a las dificultades y las herramientas para
resolverlas son las claves para destacar la importancia de aprender historia. En muchos casos, los
argumentos de unos y otros fueron contradictorios. La gran cantidad de datos ayudan a sumergirse en
esta apasionante materia, que es un ejemplo de belleza y conocimiento a lo largo del tiempo.
Pero quizá el elemento más significativo por el que aprender historia es importante es que esta materia
ayuda a pensar. Las vueltas que han dado las sociedades desde la prehistoria hasta la actualidad han
profundizado en la diversidad, en la contradicción, en el uso del poder para imponer… y conocer cuáles
han sido esos caminos nos ayuda a consolidar nuestro propio criterio sobre la sociedad. Algunos
teóricos señalan que la historia es como una rueda de molino que siempre vuelve. Conocer nuestra
identidad como personas y sociedades y encaminar nuestros pensamientos hacia esa diversidad son las
claves para forjarnos un futuro mejor.
La historia debe ser estudiada por ser esencial para los individuos y para la sociedad. Hay muchos
caminos para discutir las funciones de este campo de estudio, pues puede ser interpretada en diversas
maneras, la utilidad de la historia, sin embargo, se basa en dos hechos fundamentales:
1. Ayuda a entender a las personas y a la sociedad
Todos los seres humanos somos historias vivas. Por mencionar algunos ejemplos que pueden parecer
obvios: utilizamos tecnologías que no inventamos nosotros mismos y hablamos lenguas que son
heredadas del pasado; vivimos en sociedades con culturas complejas, tradiciones y religiones que no
han sido creadas en el momento.
El estudio del pasado es esencial para ubicar a las personas en el tiempo; necesitamos saber de dónde
venimos, para saber a dónde vamos. Conocer la historia es esencial para comprender la condición del
ser humano, esto le permite construir, avanzar y si es necesario cambiar. Ninguna de estas opciones se
puede emprender sin entender el contexto y puntos de partida. Vivimos en el aquí y en el ahora pero
hay una larga historia detrás que se desarrolló para ser lo que somos hoy.
2. La historia nos ayuda a entender el mundo en el que vivimos
Una mirada a lo que ocurrió en el pasado, nos da un panorama completo de por qué el mundo es como
es, no solo nuestra en realidad si no en el contexto global, incluyendo otras culturas y desde luego, la
naturaleza. Aprender sobre las causas y efectos de los eventos en la historia de la humanidad, nos
brinda mejores herramientas para tratar los conflictos entre las naciones y los individuos. Estudiar la
historia de los cambios ambientales nos da la oportunidad de mejorar nuestro estilo de vida y prevenir
la extinción de plantas y animales que pueden alterar nuestros ecosistemas.
Va más allá de “cuándo” y “dónde”
Además de ubicar los hechos en un momento y en un lugar específico, esta disciplina nos enseña a
pensar. Contemplar las experiencias que sucedieron antes de nosotros nos invita a reflexionar POR
QUÉ ocurrieron, permite a la humanidad mirar su propio reflejo, bueno o malo, y aprender de él. Esta
perspectiva nos da la posibilidad de sobrevivir a lo largo del tiempo. Entender las causa y efecto de
ciertas acciones nos ayuda a aprender de los errores de nuestros ancestros y de nosotros mismos con
la finalidad de transformar el mundo en un mejor lugar para vivir.
Hay diferentes formas de crear o de analizar la historia y eso dependerá obviamente de la ideología, la
postura o el conocimiento que el historiador en cuestión tenga de manera previa. De cualquier manera,
sea cual sea esa postura, toda forma de historia contribuirá para seguir construyendo el pasado y nuestra
visión sobre el mismo de mil maneras diferentes, pero igual de útiles e interesantes.
El comportamiento humano puede ser impredecible en ocasiones, pero una mejor comprensión, a
través del estudio de la historia puede proporcionar información de gran valor para las futuras
generaciones. El análisis de nuestro pasado nos deja lecciones muy valiosas que sirven para predecir
de algún modo, las consecuencias de nuestras acciones en el futuro, sin tener que pagar un precio muy
alto por ello.