proyecto, progreso, arquitectura

ISSN: 2171-6897
[email protected]
Universidad de Sevilla
España

Sainz Gutiérrez, Victoriano

REPENSAR LA VIVIENDA, REINVENTAR LA CIUDAD. LA TRANSFORMACIÓN DEL
BARRIO BARCELONÉS DE LA MINA
proyecto, progreso, arquitectura, núm. 5, noviembre, 2011, pp. 108-128
Universidad de Sevilla
Sevilla, España

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REPENSAR LA VIVIENDA, REINVENTAR LA CIUDAD.

LA TRANSFORMACIÓN DEL BARRIO BARCELONÉS DE LA MINA
RETHINKING HOUSING, REINVENTING THE CITY. THE TRANSFORMATION OF THE LA
MINA DISTRICT OF BARCELONA
Victoriano Sainz Gutiérrez

Proyecto, Progreso, Arquitectura. N5 “Vivienda colectiva: sentido de lo público”.Noviembre 2011. Universidad de Sevilla. ISSN 2171–6897 / ISSN–e 2173–1616 / 11–03–2011 recepción – aceptación 11–10–2011
RESUMEN En el actual contexto de búsqueda de alternativas más sostenibles para la construcción de la ciudad, la renovación
urbana se presenta como un ámbito privilegiado para la reflexión y la práctica de la arquitectura y el urbanismo. En este sentido,
la intervención sobre los polígonos de vivienda masiva construidos en las ciudades españolas hace cuarenta o cincuenta años
—muchos de los cuales se hallan sometidos en la actualidad a procesos de degradación y marginalidad de cierta envergadura— es
una de las experiencias de mayor interés por su notable complejidad, ya que en ellos se entrelazan de manera inseparable los
aspectos físicos y sociales. Este artículo se centra en uno de los casos españoles más relevantes de este tipo de intervenciones: el
plan para la transformación del barrio barcelonés de la Mina, desarrollado en torno a un Plan Especial de Reordenación y Mejora
aprobado en 2002 y ya ejecutado en gran parte. Por la sensatez de sus planteamientos y por la operatividad de sus propuestas,
la actuación ha sido objeto de numerosos reconocimientos a nivel nacional e internacional. Vivienda colectiva y espacio público
constituyen dos de los ejes que vertebran todo el proyecto urbano de la Mina; aquí se presta particular atención al análisis de las
actuaciones relacionadas con el tejido residencial y a las estrategias para relacionar las nuevas manzanas habitacionales con un
renovado sistema de espacios libres.
PALABRAS CLAVE Renovación urbana, polígonos residenciales, vivienda social, espacio público, Barcelona.

SUMMARY In the current search for more sustainable alternatives for the construction of the city, urban renewal is presented as a
prime area for the reflection and practice of architecture and urbanism. In this connection, the work on the massive housing estates
built forty or fifty years ago in Spanish cities, many of which are currently subject to considerable degradation and marginalization,
is one of the more interesting experiences because of its considerable complexity, as the physical and social aspects are insepara-
bly intertwined in them. This article focuses on one of the most notable Spanish cases of this type of intervention: the plan for the
transformation of the La Mina district of Barcelona, developed within a Special Redevelopment and Improvement Plan approved
in 2002, and now largely completed. The intervention has been the subject of numerous national and international awards for the
wisdom of its approach and the effectiveness of its proposals. Collective housing and public space are two of the central themes of
the whole urban project of La Mina. Here, particular attention is given to the analysis of the actions related to the residential fabric
and strategies for linking the new residential blocks with a renewed system of open spaces.
KEY WORDS Urban renewal, housing estates, public housing, public space, Barcelona.

Persona de contacto/ Corresponding autor: [email protected]. Escuela Técnica Superior de Arquitectura. Universidad de Sevilla.

V. SAINZ. “Repensar la vivienda, reinventar la ciudad. La transformación....”. Proyecto, Progreso, Arquitectura. Noviembre 2011. Universidad de Sevilla. ISSN 2171–6897 / ISSN-e 2173–1616
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1. Barcelona: los polígonos residenciales

del sector de Levante (1974).

LA RECUPERACIÓN DE UNA HERENCIA Habida cuenta de que se trataba de un problema de

E
E
l de la vivienda ha sido un problema endémi- carácter urbano, la reflexión sobre la vivienda colectiva no
co de las grandes ciudades a lo largo de todo se redujo a la forma del edificio residencial; se desarrolló
el siglo XX. Facilitar un alojamiento digno a las en varios niveles, que abarcan desde la tipología edifica-
masas obreras que se trasladaban del campo a la ciu- toria y la implantación de los edificios en la parcela hasta
dad fue uno de los grandes retos que la industrialización la relación de las viviendas con los espacios libres y los
planteó a la ciudad. Desde posiciones diversas y con equipamientos necesarios para el buen funcionamiento
planteamientos muy diferentes entre sí, los maestros del del conjunto2. Salvo casos excepcionales, las numero-
Movimiento Moderno trataron de responder a ese reto, sas actuaciones que se derivaron de esa experiencia in-
que les proporcionó un inmejorable banco de pruebas vestigadora estuvieron centradas en la escala del barrio
para ensayar soluciones de proyecto. En este sentido es y sirvieron para conformar, con mayor o menor fortuna,
posible considerar la Weissenhofsiedlung de Stuttgart, las periferias urbanas de las grandes ciudades europeas
construida para la muestra del Werkbund de 1927 con durante la segunda posguerra. De hecho, en la actua-
la participación de buena parte de los arquitectos que ya lidad, una parte importante de la ciudad heredada está
habían alcanzado un reconocimiento internacional, como constituida por barrios construidos de acuerdo con los
el primer manifiesto urbano de aquella nueva cultura del criterios de seriación y estandarización que presidieron
habitar. La fundación, al año siguiente, de los Congresos el proyecto racionalista para la ciudad moderna. Así, los
Internacionales de Arquitectura Moderna (CIAM) marcaría polígonos residenciales, diseñados como piezas autóno-
el comienzo de la ardua y compleja tarea de llegar a una mas, proyectados de manera unitaria y construidos de
sistematización teórica común, a través de la definición una sola vez, se convirtieron en una de las más relevan-
de aquel conjunto de principios que van de la Declaración tes ‘formas de crecimiento’ de las ciudades de nuestro
de La Sarraz (1928) a la Carta de Atenas (1933)1. entorno3 (figura 1).

1. Consultar AYMONINO, Carlo (ed.): La vivienda racional. Ponencias de los Congresos CIAM 1929-1930. Barcelona: G. Gili, 1973.
2. Para una visión sintética de esa experiencia pueden consultarse BENEVOLO, Leonardo, MELOGRANI, Carlo, GIURA LONGO, Tommaso: La proyectación de la
ciudad moderna. Barcelona: G. Gili, 1978; MARTÍ ARÍS, Carlos (ed.): Las formas de la residencia en la ciudad moderna. Barcelona: UPC, 1991.
3. Consultar SOLÀ-MORALES, Manuel de: Las formas de crecimiento urbano, Barcelona: UPC, 1997, pp. 87-102.

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En el caso español, la introducción del modelo pues- también como una oportunidad para reorientar el creci-
to a punto por la cultura arquitectónica racionalista se lle- miento urbano, centrándolo en el ‘reciclaje’ de aquellos
varía a cabo, paradójicamente, a través de unas ordenan- tejidos que requieren una profunda transformación. Esas
zas de edificación aprobadas por el Instituto Nacional de actuaciones constituyen también una ocasión para re-
la Vivienda en la inmediata posguerra, cuya finalidad era pensar las cuestiones relacionadas con la vivienda social,
regular la construcción de viviendas protegidas. Su apli- que fue –no lo olvidemos– una de las piedras de toque de
cación generalizaría el empleo del bloque abierto en los la arquitectura moderna.
polígonos residenciales destinados a la vivienda social
de promoción pública, construidos entre los últimos años CONSTRUIR SOBRE LO CONSTRUIDO: EL RETORNO
cincuenta y los primeros setenta del siglo pasado4. Como A LA SENSATEZ
ya ha sido subrayado por la abundante bibliografía que el Tras una década en la que nuestras ciudades parecían
fenómeno ha generado, la incompleta puesta en práctica haber perdido el norte, embarcadas en una desafora-
de los principios del racionalismo y la escasa sensibilidad da ampliación del parque inmobiliario y en una curiosa
con que fueron proyectados muchos de aquellos polígo- apuesta por incorporar pretenciosas arquitecturas ‘de
nos se encuentran entre las mayores limitaciones, desde marca’, la actual crisis económica puede significar una
el punto de vista arquitectónico, de una experiencia que invitación a recuperar la mesura y la sensatez, una lla-
con frecuencia llevó consigo además, para la población mada a reflexionar sobre las cuestiones que de verdad
que los habitaba –en su inmensa mayoría pertenecien- importan a la arquitectura y a la ciudad. Y esas cuestiones
te a las clases más desfavorecidas–, importantes dosis tienen menos que ver con las individualidades y las origi-
de segregación social y de infradotación en cuanto a los nalidades que con los esfuerzos colectivos para afron-
servicios. tar las demandas reales de los ciudadanos. Desde esta
Con el transcurso del tiempo los problemas en esos perspectiva parecen converger, por una parte, la urgencia
barrios se han multiplicado5: a la degradación física del de reducir drásticamente el consumo de suelo y energía
tejido edificado, agravada por su escasa calidad cons- que la urbanización indiscriminada provoca y, por otra,
tructiva, y a la escasez de plazas de aparcamiento o al la necesidad de recuperar el interés por las cuestiones
insuficiente tratamiento de los espacios libres comunes, disciplinares en las que reside el significado de la arqui-
ideados como ‘zonas verdes’ que nunca llegaron a ser tectura como práctica social, es decir, con una concreta
tales, ha habido que añadir la elevada marginalidad so- incidencia en la vida de sus habitantes.
cial derivada de la concentración en ellos de importantes El rechazo del formalismo y la mercantilización a los
contingentes de población inmigrante o con bajo nivel de que buena parte de la arquitectura actual se encuentra
renta. La conveniencia de llevar a cabo actuaciones de sometida, en un mundo en el que ciertamente las con-
rehabilitación, reforma e integración en los polígonos de diciones han cambiado, no nos exime de buscar modos
vivienda masiva venía dejándose sentir desde los años de volver a hacer operativo aquel núcleo de cuestiones
ochenta6, pero ahora, en el contexto del nuevo paradig- fundamentales en torno a las cuales se había desarrolla-
ma de la sostenibilidad, la intervención en la ciudad exis- do la práctica de la arquitectura dentro de la tradición mo-
tente aparece no sólo como una urgente necesidad, sino derna. Si aspiramos a seguir haciendo una arquitectura

4. Para la valoración de esa experiencia urbanística, véase TERÁN, Fernando de: “Evolución del planeamiento de núcleos urbanos nuevos”. Ciudad y Territorio,
nº 1, 1969, pp. 13-23.
5. Un buen resumen de la problemática actual de los polígonos se puede ver en LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: “La escala pormenorizada: cómo intervenir en los
tejidos urbanos existentes”. En AA. VV.: Un urbanismo docente. Bilbao: Universidad del País Vasco, 2009, pp. 115-118.
6. Consultar FERRER, Amador, “Polígonos de viviendas: reparación o transformación”. Ciudad y Territorio, nº 57-58 (1983), pp. 51-65. Me he ocupado del con-
texto de esos planteamientos en SAINZ GUTIÉRREZ, Victoriano: El proyecto urbano en España. Génesis y desarrollo de un urbanismo de los arquitectos. Sevilla:
Junta de Andalucía & Universidad de Sevilla, 2006.

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abierta a la vida, atenta a las exigencias del tiempo en vivienda masiva de los años sesenta y setenta se con-
que vivimos, que no renuncie a ser un hecho cultural y vierten en un ámbito privilegiado para explorar nuevas
que, por consiguiente, sea capaz de expresar lo mejor formas, más sostenibles, de construcción de la ciudad,
de nuestras aspiraciones como profesionales y como centradas en la recuperación de la ciudad existente. Se
ciudadanos, resulta imprescindible no perder de vista trata de ser capaces de diseñar operaciones complejas,
que “la arquitectura es la escena fija de las vicisitudes del que precisan tanto de un proyecto de rehabilitación de los
hombre”7; ahí radica su importancia: en su capacidad espacios domésticos como de una propuesta de remo-
para crear relaciones entre las personas y los lugares. delación de los espacios públicos, y simultáneamente de
Estamos, pues, de nuevo a la busca de una ‘arquitectura los intersticios que los articulan, por cuanto “el proyecto
urbana’, pero bien entendido que, antes aun que en las urbano no está en la unidad formal del conjunto, ni en la
personas o en los lugares, “hay que buscar la urbanidad pura congestión ni en el respeto al contexto por sí mismo,
en las cosas”8. sino en los elementos y episodios concretos que relacio-
Esa “urbanidad material” reivindicada Solà-Morales nan las personas con las cosas”10.
tiene poco que ver, claro está, con las firmas y las mar-
cas de los arquitectos del star system, porque éstas por LA MINA, TRIBULACIONES DE UN CONFLICTIVO BA-
sí mismas no garantizan nada. Tiene todo que ver, en RRIO BARCELONÉS
cambio, con la atención a la componente material de las Entre las actuaciones recientes encaminadas a la trans-
cosas: “La urbanidad resulta de la articulación de cosas formación de un tejido residencial organizado alrededor
urbanas, que no depende de las funciones o la actividad, de la vivienda colectiva destaca sin duda la del barrio
sino de la materia de muros y esquinas, en desniveles y fa- barcelonés de la Mina, que recibió el Premio Nacional
chadas, en calzadas, aceras, ventanas, portales y vitrinas, de Urbanismo de 2006. El de la Mina es uno de aque-
en rampas y semáforos, en alineaciones y retranqueos, en llos polígonos construidos en los años del desarrollismo
gálibos y voladizos, en siluetas y anuncios, en plataformas para hacer frente al gravísimo déficit de vivienda de las
y vacíos, huecos y descampados. No como los detalles grandes ciudades españolas entonces en proceso de in-
de townscape, sino como materia continua del espacio dustrialización. De los polígonos de la capital catalana,
construido”9. Cosas todas ellas quizá no demasiado bri- cuyo punto de arranque estuvo en el Plan de Urgencia
llantes, incluso aparentemente triviales, pero que cons- Social de 1958, se ha dicho que “constituyen uno de los
tituyen el soporte de la variedad y la diversidad en que episodios más tristes de la Barcelona moderna. Producto
consiste la vida urbana. de la dictadura política, de la estrechez económica y del
Por eso, esta urbanidad de la arquitectura es necesa- raquitismo cultural, han marcado el territorio urbano con
rio procurarla en la periferia tanto o más que en el centro una señal lamentable. Pero la denuncia de las grandes
urbano. Porque la mayor riqueza de la ciudad contem- deficiencias –de intención, de procedimiento, de gestión,
poránea, lo que ésta tiene de más característico, está de calidad– no puede ocultar su enorme trascendencia
precisamente en esos ámbitos a menudo problemáticos urbanística”11: basta pensar que, en conjunto, esos ba-
y necesitados de una intervención que les restituya una rrios ocuparon más de 900 hectáreas de suelo, una su-
cualidad urbana que quizá no han tenido nunca, pero a perficie equivalente a la del ensanche de Cerdà, y que
la que tienen derecho. Es aquí donde los polígonos de albergaron casi 130.000 viviendas.

7. ROSSI, Aldo: La arquitectura de la ciudad. Barcelona: G. Gili, 1971, p. 51.

8. SOLÀ-MORALES, Manuel de: “Para una urbanidad material” (2005). En ID.: De cosas urbanas. Barcelona: G. Gili, 2008, p. 146.
9. Ibid., p. 147.
10. Ibid., p. 148.
11. SOLÀ-MORALES, Manuel de: Diez lecciones sobre Barcelona. Los episodios urbanísticos que han hecho la ciudad moderna. Barcelona: COAC, 2008, p. 467.
Una completa información en FERRER, Amador: Els polígons de Barcelona. L’habitatge massiu i la formació de l’àrea metropolitana. Barcelona: UPC, 1996.

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2. Núcleo de chabolas del Camp de la Bota,

cuyos ocupantes fueron realojados en el
barrio de la Mina.
3. Bloques de la Mina Nueva, recién termi-
nada su construcción (1974).
4. Estructura urbana del barrio de la Mina
antes de su transformación (PERM, 2002).

2 3

Situado en el sector de Levante y dentro del término chabolismo en las grandes ciudades españolas durante
municipal de Sant Adrià de Besòs, el polígono de la Mina los años sesenta. Este origen marcaría desde el principio
fue promovido por el Patronato Municipal de la Vivienda, la posterior evolución del barrio, que no tardó en expe-
dentro del plan de supresión del chabolismo elaborado rimentar un rápido proceso de deterioro social y físico,
en los años sesenta por la Comisión de Urbanismo de convirtiéndose en uno de los más conflictivos de la peri-
Barcelona, entidad encargada de gestionar el Plan Co- feria barcelonesa, estigmatizado por la marginalidad y el
marcal de 1953. Aunque tuvo una gestación larga, que aislamiento (figuras 2 y 3).
arranca en los años cincuenta, los bloques de viviendas La idea inicial del barrio, en la que los bloques lineales
no llegarían a edificarse hasta la primera mitad de los se- estaban colocados de tal modo que creaban entre ellos
tenta12. Estaba destinado a alojar la población instalada unos espacios libres de escala menuda para facilitar su
en núcleos de chabolas de las inmediaciones, entre otros apropiación (Mina Vieja), se perdió en la segunda fase
la del denominado Camp de la Bota; puede ser conside- de la actuación, cuya idea era compactar la edificación
rado, por tanto, como una de aquellas ‘unidades vecina- para permitir la aparición de espacios libres más amplios
les de absorción’ que se construyeron para erradicar el (Mina Nueva). Se pasó así de los primeros bloques de

12. El primer proyecto para el futuro barrio de la Mina data de los últimos años cincuenta, aunque hasta 1969 no se adquirieron los terrenos donde iría situa-
do. En 1970 se inició la construcción de los primeros bloques, la denominada Mina Vieja (casi 850 viviendas), que estuvo asociada a una zona contigua para
actividades productivas, conocida como la Mina Industrial, de origen probablemente irregular. La segunda fase de la construcción del barrio corresponde a
los bloques de la Mina Nueva (1.871 viviendas), levantados entre 1972 y 1974; al año siguiente el barrio ya contaba con más de 15.000 habitantes. Para una
visión de conjunto de la historia de la Mina, consultar ROCA ALBERT, Joan: “Variants i invariants en la trajectòria històrica del polígon de la Mina”. En AA. VV.:
Urbanisme i barris en dificultats. El cas de la Mina. Barcelona: Fundació Carles Pi i Sunyer, 2004, pp. 189-212.

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doble crujía, con cinco plantas y menor tamaño, a los gran- será, como veremos, uno de los argumentos fundamen-
des bloques en ‘H’ de once plantas, construidos mediante tales del nuevo proyecto para la transformación del barrio
muros portantes de hormigón13. Por otra parte, los equi- (figura 4).
pamientos de proximidad, situados en la zona central del Y es que los diversos intentos de modificar la problemá-
polígono por su supuesta capacidad de convertirse en el tica situación por la que, ya desde la primera década de su
‘corazón’ (core) del barrio, constituyeron en realidad, al dis- existencia, atravesaba el barrio, no consiguieron prosperar.
ponerse como elementos cerrados sobre sí mismos, una Ni la formulación de programas sociales y políticas específi-
barrera que lo dividía en dos y dificultaba las relaciones cas para aquel ámbito, ni las operaciones de rehabilitación
transversales en el interior del barrio. Se producía con ello de las viviendas o de remodelación de los equipamientos14,
la paradoja de que la parte más pública del polígono, la de ni la creación del inmediato parque urbano del Besòs, aco-
las dotaciones, era a la vez la más introvertida, la menos metidos a lo largo de los años ochenta, sirvieron para invertir
abierta y relacional. Dar la vuelta a esta compleja realidad una tendencia que los años no hicieron más que agravar15.

13. Consultar IBARBUREN, Alicia, OLMEDO, Carlos: “La Mina: un polígono del Patronato Municipal de la Vivienda de Barcelona”. Jano, nº 21, 1974, pp. 51-66.
14. La intervención más representativa de esos años, desde el punto de vista arquitectónico, es probablemente el proyecto de Miralles para el acondiciona-
miento de los locales del centro cívico; consultar MIRALLES, Enric, PINÓS, Carme: “Entre suelo y cielo. Centro social La Mina, Barcelona”. Arquitectura Viva, nº
28, 1993, pp. 54-57.
15. Así lo señalaban los arquitectos responsables del plan de transformación del barrio: “La Mina ha vivido en los últimos treinta años tentativas de transfor-
maciones, desde el derribo total hasta el esponjamiento parcial, generando al mismo tiempo una conciencia de desconfianza y descrédito hacia las diferentes
acciones emprendidas por la Administración pública” JORNET, Sebastià, LLOP, Carles, PASTOR, Joan Enric: “La Mina, transformación urbana del barrio”. Qua-
derns d’Arquitectura i Urbanisme, nº 240, 2004, p. 146.

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5. El barrio de la Mina en su actual contexto

urbano (2002).
6. Ordenación física indicativa del Plan Es-
pecial de la Mina (PERM, 2002).

Por si esto fuera poco, la construcción de la ronda litoral Especial redactado a comienzos de los años noventa
hizo aparecer una nueva barrera que vino a incrementar para reordenar la margen derecha del río Besós se apun-
aún más el aislamiento físico del barrio. Sólo a media- taba: “La actuación en la Mina es una operación de gran
dos de los años noventa, con la puesta en marcha de las alcance y de extraordinaria complejidad, en la que sería
actuaciones tendentes al acondicionamiento de los terre- preciso coordinar acciones de política social, financiera
nos del frente costero que habrían de acoger el Fórum y urbanística que no se pueden limitar al ámbito territorial
de las Culturas de 2004, planteado como la creación de y social que actualmente ocupa el barrio. En cambio, sí
una nueva centralidad urbana en un entorno hasta enton- que es posible emprender la operación con posibilidades
ces fuertemente degradado, cambiaron radicalmente las de éxito en el contexto territorial más amplio de toda la
condiciones de contorno de un enclave caracterizado por margen derecha del Besós […]. El objetivo de romper las
su condición periférica y marginal (figura 5). barreras físicas, infraestructurales y sociales que aíslan el
barrio de su entorno metropolitano se puede conseguir si
UN PLAN ESPECIAL PARA LA REORDENACIÓN Y LA las operaciones de transformación urbanística que son
MEJORA DEL BARRIO previsibles en los territorios circundantes se desarrollan
Entre las causas del fracaso de los numerosos esfuerzos de manera coordinada con tendencia a reforzar los vín-
realizados para transformar el barrio cabe señalar la au- culos de cohesión del tejido urbano, físico y social. Para
sencia de un verdadero abordaje integral de los proble- que esto sea posible hay que instrumentar la ejecución
mas: la arquitectura sola difícilmente puede modificar una del planeamiento con una entidad de gestión única con
realidad cuya problemática tiene una honda raíz social; capacidad para coordinar la acción de los diferentes
es necesario crear sinergias que multipliquen el efecto de agentes públicos y privados que han de intervenir en la
las distintas acciones emprendidas. Por eso, ya en el Plan transformación del sector”16.

16. CANTALLOPS, Lluís, RIBAS, Manuel, ROCA, Estanislau: “El pla del marge dret del Besòs a Sant Adrià”. Papers. Regió Metropolitana de Barcelona, nº 13,
1993, pp. 63-64. Sobre los cambios recientes que se han producido en el entorno del barrio, consultar AA. VV.: La reforma urbanística del Besòs. Barcelona:
Ajuntament de Barcelona, 2006.

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7. Principales actuaciones del Plan Espe-

cial de la Mina (Avance PERM, 2001).

En esta línea, la transformación del barrio arranca las condiciones de habitabilidad, y transformar por com-
precisamente con la constitución en el año 2000 de un pleto el espacio central ocupado por los equipamientos,
Consorcio en el que participan los ayuntamientos de Sant mediante una actuación descrita como “una intervención
Adrià y Barcelona, la Diputación y la Generalitat, cuyo ob- radical: un destripamiento […] que es a la vez ruptura y
jetivo es dirigir y ejecutar dicha transformación. Los traba- sutura”18. Los redactores pretendían con ello crear un eje
jos preparatorios para la redacción de un Plan Especial de urbano que sirviera de condensador de los tres principios
Reordenación y Mejora se iniciaron ese mismo año con básicos en torno a los cuales gira todo el plan: centrali-
unos estudios de base en los que se analizaban los pro- dad, diversidad e intercambio; se trataba de “reciclar para
blemas sociales, la situación de las viviendas y las alter- optimizar un espacio urbano mal configurado desde su
nativas para la reordenación urbana del barrio, descartan- origen”19 (figura 6).
do desde un principio tanto la simple rehabilitación como La apuesta por la diversidad es tal vez el punto más
la remodelación integral, ya intentadas anteriormente. Se importante del plan de transformación del barrio de la
optó, en cambio, por una solución híbrida, esbozada en Mina. No se busca sólo una diversidad física, relativa
el Avance y terminada de perfilar en sus últimos detalles a la definición de los espacios y los tipos edificatorios,
en el Plan Especial de 2001, aprobado definitivamente en sino también social y económica, que posibilite la diver-
200217. Esa solución pasaba por mantener la edificación sificación del tipo de personas que viven en el barrio y
residencial existente, mejorando los núcleos de acceso y de las actividades productivas que en él se desarrollan:

17. Para una sintética exposición del Plan Especial y sus propuestas, consultar LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: Ordenar el territorio, proyectar la ciudad, rehabilitar
los tejidos existentes. La relevancia del planeamiento a través de los Premios Nacionales de Urbanismo 2004, 2005 y 2006. Madrid: Ministerio de la Vivienda,
2009, pp. 121-165.
18. JORNET, Sebastià, LLOP, Carles, PASTOR, Joan Enric: art. cit., p. 146.
19. LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: “Entrevista con los arquitectos Sebastià Jornet, Carles Llop y Joan Enric Pastor”. En ID., Ordenar el territorio, proyectar la ciudad,
rehabilitar los tejidos existentes, cit., p. 169.

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“Incrementar adecuadamente el parque de viviendas para supone una intervención radical: un sventramento central
no desplazar a ninguna familia, favorecer el desarrollo de en el lugar que ocupaban los equipamientos, una actua-
las familias en el propio barrio, al mismo tiempo que abrir ción que es al mismo tiempo una ruptura para generar una
el barrio a otras personas que puedan compartir la buena nueva sutura urbana. Sebastià Jornet lo explica muy bien
posición urbana y el nivel dotacional y de equipamiento cuando dice: ‘cortar para volver a coser, pero poniendo
del mismo”20. Sólo desde esta perspectiva se pueden una buena cremallera (urbana, por supuesto) en lugar de
valorar adecuadamente unas decisiones urbanísticas y un triste zurcido’. Es deshacer para generar nuevas condi-
arquitectónicas que no son separables de los programas ciones de hábitat”23. De este modo, sobre el espacio que
sociales que han acompañado al desarrollo del plan. La se libera con el derribo de los centros docentes existentes
finalidad de todo ello no es otra que generar unas nuevas y del antiguo centro cívico, se proyecta un gran paseo
condiciones en la vida del barrio, aun cuando los redac- central, en torno al cual se sitúan algunos de los nuevos
tores sean muy conscientes de que los cambios físicos y equipamientos de proximidad del barrio, mezclados con
los cambios sociales tienen ritmos temporales diversos21. manzanas residenciales que albergan usos comerciales
En todo caso, la urbanización de la nueva rambla y la in- en la planta baja (figura 7).
troducción del tranvía, los equipamientos de referencia Esa nueva avenida ajardinada, que quiere asumir así
del barrio, el tratamiento de los espacios libres existentes un valor de centralidad y convertirse en el nuevo elemento
o el proyecto de las nuevas manzanas están planteados de referencia del barrio, está diseñada como una rambla
desde aquella urbanidad de la arquitectura que reclama- de 40 metros de ancho, ejecutada por partes entre 2002 y
ba Solà-Morales, con unos criterios de calidad y cuidado 2004. Hay que destacar su cuidada sección, que permite
de los aspectos más materiales de la construcción que combinar tráficos de transporte público (tranvía ya en fun-
son ya en sí mismos un estímulo para esa otra urbani- cionamiento), vehículos privados y peatones, privilegian-
dad, la cívica, de la que el barrio también se encuentra do este último a través de la creación de un paseo cen-
necesitado22. tral arbolado (14 metros) y amplias aceras (4 metros). El
espacio destinado a la calzada a cada lado del paseo (9
EL PROYECTO DE LOS NUEVOS ESPACIOS PÚBLICOS metros) se distribuye entre la plataforma reservada para
El argumento central sobre el que se ha apoyado toda el tranvía, un carril para la circulación rodada y el espacio
la nueva actuación en el barrio lo constituye la decisión para el aparcamiento en cordón de vehículos particula-
de intervenir en su parte más pública, la ocupada por los res. Se pretende con todo ello permitir un nivel moderado
equipamientos de los que en su día se dotó al barrio. Al de tráfico privado, que posibilite tanto el acceso de los
estar organizadas como recintos cerrados, lejos de cons- residentes a sus viviendas como la carga y descarga de
tituir un elemento que facilitase la convivencia en el interior mercancías en tramos previamente delimitados, sin so-
del mismo, esas dotaciones locales se habían convertido meter al espacio público más representativo del barrio
en una barrera que dividía la Mina en dos. “La propuesta a los inconvenientes que necesariamente comporta el

20. Ibid., p. 167.

21. “En diez años se puede realizar una total transformación física del barrio y, de hecho, en el caso del barrio de la Mina, seis años después de la aprobación
del Plan Especial, ya se llevan ejecutadas más del 80% de las actuaciones físicas previstas en el mismo. Sin embargo, en el caso de las transformaciones
sociales, las cosas siempre van más lentas. Se ha llegado a afirmar que hace falta una generación entera para la consecución de la transformación social de
un barrio; en el caso de la Mina, esto no será una excepción” (ibid., p. 170).
22. Es obvio que todo ello no se lleva a cabo sin unos precisos costes sociales, como ha explicitado DELGADO, Manuel: La ciudad mentirosa. Fraude y miseria
del ‘modelo Barcelona’. Madrid: Catarata, 2007, pp. 129-175. A este respecto es interesante constatar una vez más, aunque no sea algo novedoso, el diferente
punto de vista que suelen asumir los arquitectos en relación con el hecho urbano, según se enfrenten a él como profesionales de las ideas o como profesiona-
les del lápiz; es algo de lo que, a propósito de Barcelona, ya quedó constancia en MOIX, Llàtzer: La ciudad de los arquitectos. Barcelona: Anagrama, 1994.
23. LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: “Entrevista con los arquitectos Sebastià Jornet, Carles Llop y Joan Enric Pastor”, cit., p. 169.

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8. Sección tipo de la rambla (Proyecto de

urbanización, 2002).
9. Vista aérea de la nueva rambla, con las
nuevas viviendas en construcción.
10. La rambla de la Mina, con el tranvía
que comunica el barrio con Badalona y el
centro de Barcelona.

tráfico rápido, ni a las limitaciones de accesibilidad roda- o el polideportivo, quiere significar que la rambla no se
da que podría haber comportado la creación de un eje entiende como un elemento aislado, sino como la espina
exclusivamente peatonal (figura 8). dorsal de todo el sistema de espacios públicos del ba-
La voluntad de que la rambla se convierta en el espa- rrio, caracterizado por su continuidad y su complejidad.
cio de relación más importante del barrio explica que en A lo cual contribuye también el modo en que se ha plan-
sus inmediaciones se hayan situado los tres equipamien- teado la organización de la edificación en las manzanas
tos colectivos considerados más relevantes, con objeto residenciales, con la aparición de calles peatonales y
de visibilizar el cambio que se desea dar a la Mina: la espacios comunitarios que sirven para conectar visual y
biblioteca, el colegio y la comisaría de policía. Se desea físicamente la rambla con los bloques de la Mina Vieja y
subrayar con ello la importancia que los aspectos rela- Nueva, creando así un espacio público más rico y com-
cionados con la formación de la población y la seguridad plejo24 (figuras 9 y 10).
ciudadana tienen para romper con la problemática que La búsqueda de esas ‘transparencias’ a través del
el barrio arrastra casi desde su fundación. Además, la interior del tejido edificado deviene una de las claves de
posición en situaciones más periféricas de otros equipa- la diversidad tipológica que se pretende para la nueva
mientos, tales como el instituto de enseñanza secundaria edificación residencial. Pero antes de ocuparnos de las

24. Así lo han señalado los propios redactores del Plan Especial: “Los [espacios] interbloques no se conciben como espacios complementarios, sino más
bien como un ámbito articulado desde y con la rambla. De ahí que los cortes de los grandes bloques [de la Mina Nueva] se concibieran en el proyecto como
pórticos de tres plantas de altura pasantes hacia el interbloque. De este modo estos espacios dejan de ser interbloques para formar parte de un entramado
de distintas formas de lugares públicos” (ibid., p. 170).

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características de los edificios de viviendas conviene LAS ACTUACIONES SOBRE EL TEJIDO RESIDENCIAL
quizá dejar apuntado que, a pesar del esfuerzo realizado Ya ha quedado señalado que el plan de transformación
en el diseño de los espacios públicos, con un mobiliario de la Mina, frente a lo que proponían los postulados del
urbano de la misma calidad que el del centro urbano, urbanismo racionalista, ha reducido la superficie de los
esa ‘urbanidad material’ antes mencionada no hace sino equipamientos, incrementando el número de viviendas
predisponer al civismo; no cabe esperar, por tanto, inge- del barrio: “La apuesta en conjunto se hace por la mezcla
nuamente, que ella sola, por importante que sea, deter- intensa de viviendas, tipológicamente diferentes, espacial-
mine la transformación de la Mina, pues ya “sabemos mente diversas, de factura constructiva menor, ocupadas
que es otra morfología –la social– la que tiene siempre por residentes actuales y nuevos, y complementadas con
la última palabra acerca de para qué sirve y qué significa una significativa presencia de actividades económicas
un determinado lugar construido”25. De ahí la relevancia complementarias. Con la idea de densidad urbana sur-
de los programas sociales de acompañamiento imple- ge el concepto de ‘compacidad física’, una condición
mentados en paralelo a los cambios físicos, toda vez compleja capaz de definir algo que tiene que ver con la
que los redactores del Plan Especial son perfectamen- continuidad y la discontinuidad espacial de los polígonos,
te conscientes de que, “sin que medien actuaciones y que hace referencia a la distancia entre las piezas y a la
cambios en la dinámica social del barrio, los cambios relación entre ellas, así como a la calidad y coherencia de
urbanísticos no llegarán por sí mismos a inflexionar lo los espacios vacíos que definen”27. Veamos, pues, ahora
que parece un proceso de deterioro y marginación sin cómo se han concretado esas actuaciones sobre la vi-
solución”26. El cambio de tendencia que en este sentido vienda colectiva en el barrio, tanto en lo que se refiere a
parece vislumbrarse en el barrio resulta esperanzador, la rehabilitación de los bloques existentes como en lo re-
aunque hará falta tiempo para poder valorar los resulta- lativo al proyecto de las nuevas manzanas residenciales
dos en su justa medida. propuestas por el Plan Especial.

25. DELGADO, Manuel: El espacio público como ideología. Madrid: Catarata, 2011, p. 73.
26. Citado por LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: Ordenar el territorio, proyectar la ciudad, rehabilitar los tejidos existentes, cit., p. 156.
27. JORNET, Sebastià, LLOP, Carles, PASTOR, Joan Enric: art. cit., p. 147.

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11. Nuevos ascensores en los bloques de

la Mina Vieja.
12. Esquema de los nuevos accesos a los
bloques de la Mina Nueva (PERM, 2002).

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13. Condiciones de la edificación para la

manzana R 5b (PERM, 2002).

La propuesta para los bloques del viejo polígono es urbano de la Mina. Pero más que determinadas pro-
quizá la parte más convencional de la actuación. Sólo puestas de los maestros del Movimiento Moderno –pien-
se proyecta la demolición del bloque en ‘H’ más próxi- so, por ejemplo, en la variedad de espacios libres del
mo a la calle Venus y de los dos tramos centrales de proyecto de Le Corbusier para Saint-Dié-des-Vosges–,
los bloques más largos, para facilitar las circulaciones lo que aquí se ha querido revisitar desde unas nuevas
transversales en el interior del barrio; sobre los edificios claves es el imaginario de esa otra tradición moderna de
restantes, que son la mayor parte de los construidos en la que habló Solà-Morales30: la del Team 10 y su ansiada
los años setenta, la intervención ha consistido básica- recuperación de una relación amable entre la arquitectu-
mente en la instalación de ascensores en siete de los ra y sus habitantes; la referencia al proyecto de Bakema
trece bloques de la Mina Vieja, adosándolos a las fa- y Van den Broek para el Lijnbaan, en Rótterdam, resulta
chadas traseras junto a las cajas de escaleras, y en la explícita a este respecto31.
reordenación de los accesos a los bloques en ‘H’ de El instrumento al que se confía la definición de la
la Mina Nueva, duplicando los portales que ahora dan nueva edificación residencial es una ‘ordenanza flexible’
alternativamente a la calle interior entre bloques y a las que, “lejos de concretar de forma muy precisa la nueva
calles perimetrales; todo ello acompañado de la reorde- ordenación, [propone] una normativa abierta que ga-
nación de los espacios libres entre bloques, con la con- rantice los elementos invariantes del proyecto y que dé
siguiente modificación del viario rodado en la parte más también un alto grado de libertad a la nueva arquitectura,
antigua del barrio. Se prevé que las familias afectadas conscientes de que el buen ejercicio de la arquitectu-
por esta operación urbanística sean realojadas en las ra siempre debe comportar una mejora sustancial de
nuevas manzanas residenciales de promoción pública, la ordenación final establecida”32. A partir de unos con-
situadas sobre la rambla que constituye el eje urbano ceptos comunes a toda la ordenanza, como los tipos
principal de la actuación28 (figuras 11 y 12). de alineación, las unidades volumétricas o la atención
Como acabamos de ver, en torno a ese nuevo eje prestada a los áticos, se pormenorizan las determina-
se han organizado las nuevas manzanas residenciales, ciones para cada manzana, buscando esa diversidad
que pretenden conformar un espacio urbano complejo tipológica que permita disminuir el tamaño del ‘grano’
por la diversa relación que se establece entre los volú- del tejido urbano. De hecho, cada manzana responde
menes edificados y los espacios libres, tanto públicos a una disposición diferente de volúmenes, con diversas
como privados: “Frente a la plenitud sórdida del bloque, alturas y bajos comerciales organizados en torno a los
proponemos los acentos y las singularidades urbanas de espacios libres de la manzana, que en unos casos tie-
las nuevas arquitecturas del barrio”, afirman los redacto- nen un uso público y en otros son de uso comunitario:
res del Plan Especial29. Es la riqueza espacial que puede una combinación de ‘dados’ de planta cuadrada de 22 x
generar el encuentro de las arquitecturas con la calle, 22 metros, ‘barras’ de viviendas pasantes de 15 metros
cuando está resuelto de un modo abierto y sin rigideces de fondo y ‘travessers’ o bloques de 10 metros de fondo
innecesarias, lo que se persigue con el nuevo proyecto y elementos singulares (figuras 13 y 14).

28. En el actual contexto de crisis económica, el Ayuntamiento ha decidido recientemente no derribar el bloque de la calle Venus, el más degradado del barrio
y en el que residen un millar de personas, por temor a que los bancos no den a las familias los créditos para los realojos.
29. LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: “Entrevista con los arquitectos Sebastià Jornet, Carles Llop y Joan Enric Pastor”, cit., p. 169.
30. SOLÀ-MORALES, Manuel de: “Otra tradición moderna” (1987). En ID.: De cosas urbanas, cit., pp. 200-214.
31. “Nos gusta el referente del proyecto de Van den Broek & Bakema de Lijnbaan, en Rotterdam, y el dibujo en el que unos niños de la mano de sus padres
establecen la metáfora de la diversidad de piezas que enriquecen el paisaje urbano, pero sobre todo la relación de las personas con su paisaje urbano” (LÓPEZ
DE LUCIO, Ramón: “Entrevista con los arquitectos Sebastià Jornet, Carles Llop y Joan Enric Pastor”, cit., p. 169). Nótese que tanto el de Saint-Dié (1945-1946)
como el de Lijnbaan (1948-1953) son proyectos para la reconstrucción posbélica de sendos ‘centros’ urbanos.
32. Citado por LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: Ordenar el territorio, proyectar la ciudad, rehabilitar los tejidos existentes, cit., p. 137.

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El tipo de manzana residencial propuesto pretende, realizado ha construido cuatro, con diversas alturas
pues, combinar por una parte las ventajas del tejido (figuras 15 y 16).
urbano del ensanche, a través de la estructura reticu- La discreta arquitectura residencial resultante, que
lar y el zócalo de la planta baja alineado a vial, donde no busca singularizarse a través de caprichosas diso-
se localizan los accesos a las viviendas y la actividad nancias estilísticas33, es en gran medida fruto de la com-
comercial, y por otra las del bloque abierto de la tra- plicidad con que ha sido aplicada esa ordenanza flexible
dición moderna, con su fragmentación en volúmenes propuesta por el Plan Especial. Ello se debe sin duda a
independientes, que hace innecesarios los patios inte- la utilización del concurso de arquitectura para la adju-
riores y permite que todas las viviendas sean exterio- dicación de los proyectos de las manzanas de vivienda
res. Ese compromiso urbano de la arquitectura con la protegida, pero probablemente también al escaso tiem-
calle hace posible, a su vez, la creación de numerosos po transcurrido entre la redacción de la ordenanza y su
espacios intermedios entre lo doméstico y lo público aplicación, lo que ha permitido establecer una relación
(de uso comunitario, aunque estrictamente hablando fluida entre los arquitectos responsables del planeamien-
sean de dominio privado), como un reflejo más de los to y los que han proyectado la arquitectura residencial.
diversos modos de articularse los espacios libres urba- Así, la arquitectura del suelo y la de los edificios se entre-
nos en el entramado construido a partir de la rambla. lazan, mediadas por la ordenanza, en un único proyecto
Las manzanas ya construidas, cuyo proyecto ha sido para construir la ciudad. Una ciudad reinventada, donde
redactado por diferentes arquitectos, permiten ilustrar la reflexión está centrada, más que en el diseño ensimis-
la variedad de resultados conseguidos mediante los mado de unos objetos, en la redefinición de la distancia
distintos modos de entender y aplicar las ordenanzas entre las cosas. Porque la diversidad y la mezcla perse-
propuestas para cada manzana por el Plan Especial. guidas con el plan de transformación de la Mina tienen
En este sentido, la tendencia a la fragmentación en su primera y más inmediata manifestación en la mezcla
piezas pequeñas se ha mostrado provechosa: en la de las distancias urbanas. Y es que a fin de cuentas el
manzana 5b, por ejemplo, donde la ordenanza pro- urbanismo no es más que la búsqueda de esa “distan-
ponía tres volúmenes exentos, el proyecto finalmente cia justa” a la que se suele referir Bernardo Secchi34.

33. Es ésta una clara diferencia con otras actuaciones recientes de vivienda social, como las promovidas por la Empresa Municipal de la Vivienda en los PAU
de Madrid.
34. Consultar SECCHI, Bernardo: “La ciudad contemporánea y su proyecto”. En FONT, Antonio (ed.): Planeamiento urbanístico. De la controversia a la renova-
ción. Barcelona: Diputació de Barcelona, 2003, pp. 113-115.

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14. Proyecto ganador del concurso para la

manzana R 5b. BAMMP arquitectos.
15 y 16. Nuevas manzanas con edificios de
vivienda protegida, situadas sobre la ram-
bla de la Mina.

15 16

¿HACIA OTRO MODO DE AFRONTAR LOS RETOS DE decidido, la necesidad de articular en un plan que integre
LA VIVIENDA SOCIAL? los aspectos físicos, sociales, económicos y culturales
Sólo con el transcurso del tiempo estaremos en condicio- del problema.
nes de apreciar adecuadamente las luces y las sombras La coordinación de las Administraciones actuan-
de la transformación que se- está llevando a cabo en el tes y la implicación de los vecinos han sido claves en la
barrio de la Mina; hasta la fecha ha recibido numerosos búsqueda de la transversalidad y la concertación de las
parabienes35, pero aún es pronto para valorar sus resul- actuaciones36, pues han permitido que se desarrollen al
tados. De cualquier modo, parece claro que el caso de ritmo previsto, al menos las relativas a la transformación
la Mina reviste especial interés por el modo en que se ha urbanística. En todo momento se ha procurado que en la
afrontado la renovación urbana en un contexto tan difícil y Mina lo físico y lo social vayan de la mano, pues los res-
complicado como el de un barrio especialmente desfavo- ponsables del plan de transformación sabían bien que,
recido y conflictivo, cuya problemática ciertamente tras- sin que mediaran “actuaciones y cambios en la dinámica
ciende el problema de la vivienda social. En el proceso social del barrio, los cambios urbanísticos no llegarían por
en curso en la Mina, las múltiples cuestiones a tener en sí solos a modificar lo que parecía un proceso de dete-
cuenta para salir airosos de la prueba no han sido sos- rioro y marginación sin solución”37. Es en este contexto,
layadas; antes bien, han constituido el punto de partida además, donde la intervención sobre el soporte físico del
de la operación. Quizá la insuficiencia de las medidas to- barrio –la construcción de nuevas viviendas y la mejora
madas con anterioridad ha llevado a que en esta ocasión de las existentes, la reurbanización de los espacios libres,
se asuma desde el comienzo, de un modo consciente y la implementación de una estrategia para la movilidad o

35. Además del Premio Nacional de Urbanismo de 2006, la actuación ha recibido también el Premio Europeo de Urbanismo en 2010 y ha sido incluida en el
VIII Catálogo de Buenas Prácticas del Comité Hábitat español.
36. Ciertamente, el Ayuntamiento de Barcelona y la Diputación no se incorporaron inmediatamente al Consorcio de la Mina, y cuando lo hicieron, fue más por
la proximidad del barrio a los terrenos del Fórum que por un especial interés por los problemas de sus habitantes.
37. Citado por LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: Ordenar el territorio, proyectar la ciudad, rehabilitar los tejidos existentes, cit., p. 156.

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17. El entorno de la rambla: en primer tér-

mino, el nuevo centro docente; detrás, la
manzana R 5b, ya construida.

17

la localización de nuevos equipamientos de proximidad– impulsar de manera sostenida los cambios sociales que
puede cumplir su función, reactivando la vida urbana del el barrio necesita.
barrio y su relación con la del resto de la ciudad. Por lo demás, sólo así la cuestión de la vivienda colecti-
Pero, a pesar de esa voluntad expresada por el plan va volverá a quedar colocada en el lugar que le correspon-
de transformación urbanística de servir como catalizador de: el de la construcción de la ciudad como hecho a la vez
para la transformación socioeconómica del barrio y de físico y social, complejo y diverso. Es ahí donde alcanza
los avances que ya se han producido por las acciones todo su sentido una arquitectura que, al pretender ser ante
sociales implementadas (reducción del absentismo es- todo ‘urbana’, se sabe formando parte de una realidad que
colar, disminución de la delincuencia, mayor inserción va más allá de los puros límites de la parcela en la que se
laboral), se sigue echando en falta un programa ver- halla situada, sin que tenga que renunciar por ello a esa ra-
daderamente integral que articule de manera concreta zonable autonomía que le corresponde como pieza dentro
y operativa las actuaciones físicas y las de carácter so- del conjunto. Es entonces cuando la urbanidad de la arqui-
cial38. Ese programa requeriría continuidad a medio plazo tectura posibilita que la atención a los aspectos materiales
y dotación presupuestaria suficiente, pues de otro modo –y, por tanto, físicos, espaciales– no distraiga de su com-
se corre el serio riesgo de que los cambios en la ciudad ponente colectiva; más aún, permite que se convierta en el
‘de piedra’ queden como una intervención aislada, cuyos ámbito privilegiado para la afirmación de su carácter civil,
efectos no lleguen a borrar el estigma que pesa sobre el público, como espacio de relación entre las personas y las
barrio y, en consecuencia, impidan su integración en la cosas. Y esto no sólo es válido para la arquitectura más o
ciudad. Sin embargo, hasta la fecha el Consorcio no ha menos excepcional de los edificios singulares, sino ante
llegado a definir ese programa, por cuanto las acciones todo para esa arquitectura ordinaria y silenciosa que es la
en curso no pasan de ser actuaciones puntuales, sin lle- de los edificios residenciales. El de la Mina bien puede ser
gar a constituir verdaderas políticas públicas capaces de un buen ejemplo de ello (figura 17).

38. Para una crítica al modo en que se han articulado lo social y lo físico en el plan de transformación de la Mina, consultar BORJA, Jordi, FIORI, Mirela: “El cas
de la Mina: alcuns aspectes de la seva transformació urbanístico-social”. En AA. VV.: Urbanisme i barris en dificultats. El cas de la Mina, cit., pp. 35-44.

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Victoriano Sainz Gutiérrez (Madrid, 1961) es arquitecto por la Universidad de Sevilla, donde también se doctoró con una tesis
sobre las ideas urbanísticas de Aldo Rossi. En la actualidad ejerce como Profesor Titular en la ETSA de Sevilla, en cuyo Departamento
de Urbanís­tica y Ordenación del Territorio ha coordinado el Programa de Doctorado “Ciudad, Pai­saje y Territorio”. Ha publicado, entre
otros, los siguientes libros: La cultura urbana de la posmodernidad (1999), El proyecto urbano en España (2006) y Aldo Rossi: la
ciudad, la arquitectura, el pensamiento (2011).

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 N1_EL ESPACIO Y LA ENSEÑANZA DE LA ARQUITECTURA
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Autor imagen y fuente bibliográfica de procedencia

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(SAMBRICIO, Carlos. Madrid y sus anhelos urbanísticos: memorias inéditas de Secundino Suazo 1919-1940. Madrid: Nerea, 2003, p.55); página 21, 5(a) (TREIB, Marc y
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Ana María: Isamu Noguchi. Un estudio espacial. Nueva York / Valencia: The Monacelli Press / IVAM, 2001, p.29, 31); página 27, 9 (EYCK, Aldo van: Aldo van Eyck: Works. Basel:
Birkhäuser, 1999, p.74, 75); página 30, 10m (FRIEDBERG, M. Paul: Process Architecture No.82, 1989, p.26, 29); página 34, 1 (majesty’s stationery office: Special report.
design construction and materials of various types of small dwelling houses in Scotland. Edinburgh. 1917, ficha F) ; página 36, 2 (BOESIGER, Willy, LE CORBUSIER: Le Corbusier
und Pierre Jeanneret. IHR Gesmetes Werk von 1929-1934. Zurich: Editorial Boesiger, 1935, p. 163); página 38, 3 (SCALBERT, Irénée: A right of diference: the archtecture of
Jean Renaudie. París: Edición del Centre Pompidou, 2004, p. 153. Fotografía de Gabriele Basilico), 4 (DUNHAM-JONES, Ellen, WILLIAMSON, June: Retrofitting suburbia. Urban
design solutions for redesigning suburbs. Hoboken (New Jersey): Editorial John Wiley & Sons, Inc. 2009, p. 24), 5 (CARRILLO MESSA, Diego. Materiales Básicos para El Proyecto
Integral del Hábitat. Propuestas para El Salvador, C.A. Barcelona: Editorial Fundació UPC, 2007, p. 24); página 40, 6 (VVAA: Total housing: alternatives to urban sprawl.
Barcelona: Editorial Actar, 2010, p. 247. Fotografías de Tadeuz Jalocha y Cristóbal Palma), página 41, 7 (BÜKLE, von J Christoph: Morger & Degelo architekten. Zurich: Editorial
Verlag Niggli AG, 2000, p. 117), 8 (VVAA: Total housing: alternatives to urban sprawl. Barcelona: Editorial Actar, 2010, p. 51. Fotografía de Johan Foweling); página 42, 9 (VVAA:
Total housing: alternatives to urban sprawl. Barcelona: Editorial Actar, 2010, p. 293. Fotografía de Roland Krauss); página 43, 10 (Fotografía de Roger Sauquet); página 47,1
(MONTEYS, Xavier; FUERTES, Pere: Casa collage. Un ensayo sobre la arquitectura de la casa. Barcelona: Editorial Gustavo Gili S.A., 2001. pp. 35), 2 (VIDOTTO, Marco: Alison +
Peter Smithson. Barcelona: Editorial Gustavo Gili S.A., 1997. pp. 127); página 49, 3 (Fotografía de Robert Burri, Magnum), 4 (KOOLHAAS, Rem: Delirio de Nueva York. Barcelona:
Editorial Gustavo Gili S.A., 2004. pp. 82); página 50, 5 (Le Corbusier. Hacia una arquitectura. 3ª ed. Barcelona: Ediciones Apóstrofe S.L., 1998. pp. 74); página 52, 6
(RAEBURN, Michael; WILSON, Victoria: Le Corbusier Architect of the Century. London: Arts Council of Great Britain and authors, 1987. pp. 32); página 53, 7 (BOESIGER, Willy;
STONOROV, Otto: Le Corbusier et Pierre Jeanneret. Oeuvre complète. 12ª ed. Zurich: Les Editions d´Architecture, 1988. pp. 42), 8 (BOESIGER, Willy; STONOROV, Otto: Le
Corbusier et Pierre Jeanneret. Oeuvre complète. 12ª ed. Zurich: Les Editions d´Architecture, 1988. pp. 42); página 54, 9 (BOESIGER, Willy; STONOROV, Otto: Le Corbusier et
Pierre Jeanneret. Oeuvre complète. 12ª ed. Zurich: Les Editions d´Architecture, 1988. pp. 41), 10 (VIDOTTO, Marco: Alison + Peter Smithson. Barcelona: Editorial Gustavo Gili
S.A., 1997. pp. 35), 11 (VIDOTTO, Marco: Alison + Peter Smithson. Barcelona: Editorial Gustavo Gili S.A., 1997. pp. 35); página 56, 12 (VIDOTTO, Marco: Alison + Peter Smithson.
Barcelona: Editorial Gustavo Gili S.A., 1997. pp. 37); página 57, 13 (RAEBURN, Michael; WILSON, Victoria: Le Corbusier Architect of the Century. London: Arts Council of Great
Britain and authors, 1987. pp. 88), 14 (SAMONÁ, Alberto: Ignazio Gardella e il professionismo italiano. Roma: Officina Edizioni, 1986. pp. 107); página 62, 1 (SMITHSON, Alison
y Peter. 1952. Van Den Heuvel, Dirk. From the house of the future to a house of today. Rotterdam. Editorial 010 Publishers. 2004); página 69, 2 y 3 (SMITHSON, Alison y Peter.
1952. The Charged Void Architecture. Nueva York. Editorial The Monacelli Press. 2001); página 65, 4 (POLLOCK, Jakson; SMITHSON, Alison y Peter. Urban Structuring. Londres.
Editorial Estudio Vista / Reinhold Art Paperback. 1967), 5 (SMITHSON, Alison y Peter. The Charged Void Urbanism. Nueva York. Editorial The Monacelli Press. 2004); página 66,
6 (HERDENSON, Nigel. ~1950. SMITHSON, Alison y Peter. The Charged Void Urbanism. Nueva York. Editorial The Monacelli Press. 2004), 7 (SMITHSON, Alison y Peter. The
Charged Void Architecture. Nueva York. Editorial The Monacelli Press. 2001), 8 (SMITHSON, Alison y Peter. 1954. VIDOTTO, Marco. Alison y Peter Smithson Obras y Proyectos.
Editorial GG. 1997); página 68, 9 (INDEPENDENT GROUP, SMITHSON, Alison y Peter. 1956. This is Tomorrow. Whitechapel Gallery. Catálogo de la exposición. Londres. 1956),
10 (INDEPENDENT GROUP, SMITHSON, Alison y Peter. 1956. This is Tomorrow. Whitechapel Gallery. Catálogo de la exposición. Londres. 1956); página 69, 11 (SMITHSON,
Alison y Peter. 1952. The Charged Void Architecture. Nueva York. Editorial The Monacelli Press. 2001), 12 (SMITHSON, Alison y Peter. 1963. WEBSTER, Helena. Modernism
Without Retoric. Londres. Editorial Academy Editions. 1997); página 70, 13 (SMITHSON, Alison y Peter. 1956. WEBSTER, Helena. Modernism Without Retoric. Londres. Editorial
Academy Editions. 1997), 14 (SMITHSON, Alison y Peter. The Charged Void Urbanism. Nueva York. Editorial The Monacelli Press. 2004); página 77, 78, 79, 1 a 3 (dibujos
realizado por Francisco Bonilla Cubero y dirigido por Rosa María Añón); página 80, 4 (Imagen a la izquierda JONES, Peter Blundell. Architectural Review. Nº 1124. Octubre,
1990. Imagen de la derecha: Amadeo Ramos Carranza. Stuttgart. Agosto, 2011); página 81, 5 (Pedro Villamor. Stuttgart. Julio, 2011); página 82, 6 (Amadeo Ramos Carranza.
Stuttgart. Agosto, 2011); página 84, 7 (BÜRKLE, J Christoph: Hans Scharoun. Zurich: Artemis, 1993; p. 114); página 85, 8 (Dibujos realizados por Francisco Bonilla Cubero y
dirigido por Rosa María Añón. Fotografías de Amadeo Ramos Carranza. Stuttgart. Agosto, 2011); página 86, 9 (Dibujos realizados por Francisco Bonilla Cubero y dirigido por
Rosa María Añón. Fotografías de Amadeo Ramos Carranza. Stuttgart. Agosto, 2011); página 87, 10 (Amadeo Ramos Carranza. Stuttgart. Agosto, 2011); página 88, 11 (Amadeo
Ramos Carranza. Stuttgart. Agosto, 2011); página 93, 1 (fotografía de Alberto Altés Arlandis); página 96, 2 (fotografía de Alberto Altés Arlandis); página 98, 3 (Wikipedia
Commons. Acceptera), 4 (Wikipedia Commons. Kollektivhuset, John Ericssonsgatan (Sven Markelius)); página 99, 5 (fotografía de Alberto Altés Arlandis); página 100, 6, 7 y 8
(fotografía de Alberto Altés Arlandis); página 102, 9 (http://www.a-hus.se y Gert Wingård Architects. Publicidad del proyecto 1-tonne-hus); página 103, 10 (Google Maps,
Ortofoto), 11 y 12, (fotografía de Alberto Altés Arlandis); página 104, 13 (Fotograma de la película extraído del material disponible para prensa en la web del director. http://
www.ulrichseidl.com/); página 105, 14 (Fotogramas capturados de la película La Haine); página 106, 15 (fotografía de Alberto Altés Arlandis); página 109, 1 (LÓPEZ DE LUCIO,
Ramón: Ordenar el territorio, proyectar la ciudad, rehabilitar los tejidos existentes. Madrid: Ministerio de la Vivienda, 2009, p. 127); página 112, 2 (Archivo fotográfico del
Consorcio del barrio de la Mina), 3 (Archivo fotográfico del Consorcio del barrio de la Mina); página 113, 4 (Ayuntamiento de Sant Adrià del Besós, Plan Especial de Reordenación
y Mejora del barrio de la Mina, 2002); página 114, 5 (Ayuntamiento de Sant Adrià del Besós, Plan Especial de Reordenación y Mejora del barrio de la Mina, 2002); página 115,
6 (Ayuntamiento de Sant Adrià del Besós, Plan Especial de Reordenación y Mejora del barrio de la Mina, 2002); página 116, 7 (Ayuntamiento de Sant Adrià del Besós, Avance
del Plan Especial de Reordenación y Mejora del barrio de la Mina, 2001); página 118, 8 (Ayuntamiento de Sant Adrià del Besós, Proyecto de Urbanización de la nueva Rambla
del barrio de la Mina, 2002), página 119, 9 y 10 (Archivo fotográfico del Consorcio del barrio de la Mina); página 120, 11 (LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: Ordenar el territorio,
proyectar la ciudad, rehabilitar los tejidos existentes. Madrid: Ministerio de la Vivienda, 2009, p. 148); página 121, 12 (Ayuntamiento de Sant Adrià del Besós, Plan Especial de
Reordenación y Mejora del barrio de la Mina, 2002); página 123, 13 (Ayuntamiento de Sant Adrià del Besós, Plan Especial de Reordenación y Mejora del barrio de la Mina,
2002); página 124, 14 (LÓPEZ DE LUCIO, Ramón: Ordenar el territorio, proyectar la ciudad, rehabilitar los tejidos existentes. Madrid: Ministerio de la Vivienda, 2009, p. 141);
página 125, 15 y 16 (Archivo fotográfico del Consorcio del barrio de la Mina); página xx, 17 (Archivo fotográfico del Consorcio del barrio de la Mina)