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ASPECTOS BÁSICOS DEL MANEJO DEL FÓSFORO - Carlos Putul

El documento describe los aspectos básicos del manejo del fósforo en plantas. El fósforo es un nutriente esencial que cumple funciones vitales como la fotosíntesis y la formación de ácidos nucleicos. Las plantas absorben fósforo del suelo principalmente a través de las raíces en forma de iones fosfato. Una vez dentro de la planta, el fósforo se incorpora a compuestos orgánicos importantes y se transporta a otras partes de la planta donde es esencial para procesos como el cre

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ASPECTOS BÁSICOS DEL MANEJO DEL FÓSFORO - Carlos Putul

El documento describe los aspectos básicos del manejo del fósforo en plantas. El fósforo es un nutriente esencial que cumple funciones vitales como la fotosíntesis y la formación de ácidos nucleicos. Las plantas absorben fósforo del suelo principalmente a través de las raíces en forma de iones fosfato. Una vez dentro de la planta, el fósforo se incorpora a compuestos orgánicos importantes y se transporta a otras partes de la planta donde es esencial para procesos como el cre

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ASPECTOS BÁSICOS DEL MANEJO DEL FÓSFORO

El fósforo (P) es uno de los 17 nutrientes esenciales para el crecimiento de las


plantas. Sus funciones no pueden ser ejecutadas por ningún otro nutriente y se
requiere un adecuado suplemento de P para que la planta crezca y se reproduzca
en forma óptima. El P se clasifica como un nutriente primario, razón por la cual es
comúnmente deficiente en la producción agrícola y los cultivos lo requieren en
cantidades relativamente grandes. La concentración total de P en los cultivos varía
de 0.1 a 0.5 %.

Hay que ver primero lo que se entiende por fosforo (elemento cuyo simbol químico
es P) y por el fosfato, compuesto que las plantas absorben primordialmente y que
se representa por la formula P2O5.

El P penetra en la planta a través de las capas externas de las células de los pelos
radiculares y de la punta de la raíz. La absorción también se produce a través de
las micorrizas, que son hongos que crecen en asociación con las raíces de
muchos cultivos. El P es absorbido por la planta principalmente como ion orto
fosfato primario (H2PO4-), pero también se absorbe como ion fosfato secundario
(HPO4=), la absorción de esta última forma se incrementa a medida que se sube
el pH. Una vez dentro de la raíz, el P puede quedarse almacenado en esta área o
puede ser transportado a las partes superiores de la planta. A través de varias
reacciones químicas el P se incorpora a compuestos orgánicos como ácidos
nucleicos (ADN y ARN), fosfoproteínas, fosfolípidos, enzimas y compuestos
fosfatados ricos en energía como la adenosina trifosfato (ATF). El P se mueve en
la planta en forma de iones orto fosfato y como P incorporado en los compuestos
orgánicos formados. De esta forma el P se mueve a otras partes de la planta
donde estará disponible para más reacciones.

Ciclo del P en los suelos

Formas y funciones del P en plantas


Formas del P en los suelos
Fuentes de P
Análisis de P en los suelos
Eficiencia de uso del P
El P juega un papel vital virtualmente en todos los procesos que requieren
transferencia de energía en la planta. Los fosfatos de alta energía, que son parte
de la estructura química de la adenosina di fosfato (ADF) y de la ATF, son la
fuente de energía que empuja una multitud de reacciones químicas dentro de la
planta. La transferencia de los fosfatos de alta energía del ADF y ATF a otras
moléculas (proceso denominado fosforilación), desencadena una gran cantidad de
procesos esenciales para la planta.

La reacción química más importante en la naturaleza es la fotosíntesis. Esta


reacción utiliza energía luminosa, en presencia de clorofila, para combinar el
dióxido de carbono y el agua en azúcares simples. En este proceso, la energía
solar es capturada en la ATF e inmediatamente este compuesto está disponible
como fuente de energía para muchas otras reacciones dentro de la planta. Por
otro lado, los azúcares formados se usan como bloques para construir otras
células estructurales y compuestos para almacenamiento.

Concentración de P en la solución del suelo

Capacidad búfer del suelo para P

Alta capacidad búfer → reposición rápida de P

Raíces

Tamaño sistema radicular

Limitaciones al crecimiento

Eficiencia de toma

Humedad en suelo

El P en un componente vital de las substancias que forman los genes y


cromosomas. De esta forma, este elemento es parte esencial de los procesos que
transfieren el código genético de una generación a la siguiente, proveyendo el
mapa genético para todos los aspectos de crecimiento y reproducción de la planta.

El adecuado suplemento de P es esencial para el desarrollo de nuevas células y


para la transferencia del código genético de una célula a otra, a medida que se
desarrollan nuevas células.

Abundante cantidad de P se acumula en las semillas y en el fruto donde es


esencial para la formación y desarrollo de la semilla.

El P es también parte de la fitina, que es la principal forma de almacenamiento de


P en la semilla. Alrededor del 50% del P total en las semillas de las leguminosas y
del 60 al 70% en los cereales se almacena como fitina o compuestos muy
parecidos. Un mal suplemento de P puede reducir el tamaño, número y viabilidad
de las semillas.

Las células de las plantas pueden acumular nutrientes en concentraciones


muchos mayores a las que están presentes en la solución del suelo que les rodea.

Esta condición permite que las raíces extraigan nutrientes de la solución del suelo
donde se encuentran en concentraciones muy bajas.

El movimiento de nutrientes dentro de la planta depende en mucho del transporte


a través de las membranas de las células, proceso que requiere de energía para
contrarrestar las fuerzas de osmosis.

Muchos de los suelos en las regiones tropicales, tienen un nivel muy bajo de
fosforo aprovechable.

Los rendimientos de los cultivos generalmente son muy bajos, a menos que se
apliquen fertilizantes fosfatados, con el fin de aumentar el nivel de fósforo
aprovechable en el suelo, es necesario añadir altas cantidades de fertilizantes
fosfatados a los suelos rojos y a los derivados de cenizas volcánicas.

Estos suelos tienen la capacidad de inmovilizar grandes cantidades de fertilizante


fosfatados. El desarrollo de prácticas de fertilización seguras y la interpretación de
análisis de suelos para fósforo, deben tener en cuenta la química y la reacción del
fósforo en el suelo.

Factores del suelo que influyen en la fijación


De fosforo
pH

Efecto de cationes

Efecto de aniones

Grado de saturación por P

Materia orgánica

Tiempo

Temperatura

Inundación

Manejo de fertilización fosforada

El fósforo inorgánico consiste primordialmente de fosfato, de hierro y aluminio y


fosfatos ocluidos relativamente insolubles, en los cuales el fósforo se encuentra
asociado con el hierro y aluminio. Los fosfatos de calcio están presentes
solamente en muy pequeñas cantidades.

Los suelos derivados de cenizas volcánicas contienen muy altas cantidades de


fósforo si se comparan con otros suelos de los trópicos.

A pesar de que los suelos derivados de cenizas volcánicas tienen un alto


contenido de fósforo total, los cultivos que crecen en ellos generalmente
responden marcadamente a la fertilización con fósforo. Esto sugiere que la
habilidad de las plantas para tomar las formas “activas” del fósforo inorgánico es
muy diferente para el caso de los suelos volcánicos, comparados con la de otros
suelos. Las formas del fósforo inorgánico presentes en un suelo, están
relacionadas con el grado de meteorización química que haya tenido lugar. Los
factores que determinan la formación de los compuestos de fósforo en el suelo
son:

a) Actividad de los cationes


b) pH
c) Productos de solubilidad de los compuestos del fósforo.
d) Propiedades mineralógicas del suelo
e) Condiciones de topografía y drenaje.
La transformación de los fosfatos de un compuesto a otro está controlada
principalmente por el pH. A medida que los suelos se tornan ácidos, las
actividades del hierro y el aluminio aumentan y los fosfatos de Calcio
relativamente solubles, se convierten en compuestos de hierro y aluminio menos
solubles.

El régimen de humedad del suelo también produce un efecto importante en las


formas del fósforo presente. Suelos en áreas con estación marcada de sequía de
humedad, tienen una alta proporción de su fósforo inorgánico en formas de fosfato
de hierro, lo mismo se encontró que el mal drenaje favorece la formación de
fosfatos de aluminio.

Los fertilizantes fosfatados cuando se añaden a un suelo ácido mineral,


reaccionan con los compuestos de hierro y aluminio para formar compuestos de
fósforo poco solubles.

Los factores que influyen en el suministro del fosforo para las plantas han sido
representados por Gunary y Sultan, en la siguiente forma:
K1
Psuelo P en la solución del suelo Difusión Raíces
de la planta
K2

Capacidad Intensidad
Tasa

La concentración del fósforo en la solución del suelo es importante en la


nutrición vegetal debido a que las raíces de las plantas absorben fósforo de
esta solución. El movimiento del fósforo hacia las raíces por difusión para
reemplazar al que ha sido tomado por las plantas, es dependiente del
gradiente de concentración de fósforo en la solución y de las interacciones
entre el fósforo de la solución y de la fase sólida. La cantidad de fósforo en la
solución del suelo es una función de la capacidad de adsorción del fósforo y
del porcentaje de la saturación de la capacidad de adsorción.
En suelos ácidos minerales, la capacidad de adsorción está determinada
principalmente por las cantidades y naturaleza de los óxidos hidratados de
hierro y aluminio y de las cantidades de aluminio intercambiable.

La actividad microbial es afectada por diferentes factores entre los que se


destacan:
• Temperatura: la mineralización del fósforo aumenta marcadamente cuando
la temperatura es de 30°C o mayor.

• Humedad: los diferentes niveles de humedad, hasta un 70% de saturación,


no parece influir mucho en los cambios de la tasa de mineralización, pero cuando
las condiciones se toman más anaeróbicas, el fósforo disponible aumenta, aunque
parece bastante probable que se confundan las reacciones de mineralización y de
solubilización de fósforo inorgánico.

• Reacción del suelo: la mineralización más adecuada ocurre en medios


próximos a la neutralidad.

Sin embargo, el encalamiento de suelos naturalmente ácidos puede no producir


los efectos esperados, porque el calcio, y también el magnesio, inhiben la acción
de las hidrolasas fosfóricas.

Es conocido que los suelos derivados de cenizas volcánicas (andisoles) tienen un


alto poder de fijación de P. por otro lado, existe evidencia de que el efecto
residual de aplicación alta de este elemento es variable. Los principales
resultados sobre el efecto residual de P en andisoles se pueden resumir de la
siguiente manera:

1. Existen diferencias en la capacidad de fijación de p por los andisoles, en


suelos recientes el aluminio activo asociado con los complejos (Al – humus) seria
el responsable de la fijación.

2. La capacidad de fijación de P de los suelos resistentes es alta y


aparentemente difícil satisfacer todo el poder de fijación

3. El análisis de suelo no predice adecuadamente el estado del para ciertos


cultivos y se hace necesario determinar parámetros adicionales para predecir
adecuadamente los requerimientos de P.

4. Diferentes cultivos tiene diferentes niveles críticos de P en un mismo


andisol.
Los suelos derivados de cenizas volcánicas (Andisoles) cubren una gran extensión
de América Central y América del Sur. La fracción arcilla de estos suelos está
dominada por alófana e imogolita (minerales amorfos de rango corto) que
provienen de la meteorización de los materiales piroclásticos producto de
recientes deposiciones volcánicas. Investigación conducida en los últimos años ha
demostrado que los complejos humus aluminio (Al) juegan también un significativo
papel en el comportamiento de los Andisoles.

Una de las características más importantes de los Andisoles es su capacidad para


inmovilizar (fijar) fósforo (P) en la superficie de los minerales amorfos. Esta es la
principal limitante química de los Andisoles. Aparentemente, la capacidad de
fijación de P de los Andisoles varía con el tipo de arcilla presente y esto a su vez
cambia el efecto residual de las aplicaciones de fosfato. En ciertos cultivos, los
estudios de calibración, no han logrado correlacionar adecuadamente el contenido
de P en el suelo con las recomendaciones de fertilización.

Inicialmente se consideró que la fijación de P en los Andisoles ocurría solamente


en las superficies activas de la alófana y la imogolita. Los mecanismos de fijación
de P en la alófana e imogolita incluyen procesos como quemiadsorción,
desplazamiento de silicio (Si) estructural y precipitación. Sin embargo, se ha
reconocido la importancia de los complejos humus-Al en este proceso. La fracción
humus en Andisoles forma fácilmente complejos con metales como el Al. El
carbono (C) atrapado en estos complejos es inactivo y deja de ser parte del
Carbono de activo de la fracción orgánica.

El fósforo del suelo se presenta casi exclusivamente como orto fosfatos derivados
del ácido fosfórico, H3PO4, Ca y Al. Los compuestos formados pueden
encontrarse en forma de sales en solución, sales cristalinas o sales absorbidas por
los coloides del suelo. El ion fosfato puede, además, ser directamente absorbido
por los coloides del suelo o puede formar enlaces de gran estabilidad con los
hidróxidos de Fe, Al o Mn que forman parte de los coloides del suelo. Estos
últimos constituyen el "fósforo fijado".
Las principales formas de fosfatos orgánicos son el fosfato de inositol y los ácidos
nucleicos. Tanto el inositol como los ácidos nucleicos parecen tener origen
principalmente microbiano. El nivel de fósforo orgánico en los suelos puede variar
entre un 3 y un 85% del fósforo total.

Las principales formas de fosfato inorgánico son las que se muestran en la tabla
siguiente. Todas ellas son de menor solubilidad que los compuestos fosfatados
orgánicos.

La abundancia relativa de cada uno de estos compuestos variará de acuerdo al


origen del suelo, a los niveles de materia orgánica y al pH. Estimaciones relativas
de formas inorgánicas de fósforo según variaciones en el pH.

Un esquema general de las formas de fósforo en el suelo se presenta en la Figura


5. Las plantas absorben fósforo en forma de H2P04 -, ion que queda disponible al
solubilizarse o romperse cualquiera de los compuestos fosfatados. Los equilibrios
de reacción llevan a que la mayor parte del fósforo del suelo se encuentre en
formas de baja o muy baja disponibilidad. Sólo un porcentaje muy bajo (entre 0,1
ppm y 0,3 ppm) se encuentra realmente en solución, plenamente disponible para
plantas y microorganismos (Figura 5).

Los equilibrios de reacción entre las distintas formas de fósforo dependerán de los
coloides y minerales presentes en el suelo, el pH, la actividad micro biológico, la
presencia de enzimas y ácidos orgánicos y la intensidad de la demanda del
nutriente. Mientras la composición y pH del suelo son características inalterables o
muy difíciles de alterar. Los agentes de origen biológico son posibles de manejar,
y prácticamente todos ellos tienden a mantener el fósforo en sus estados de
mayor disponibilidad. Por lo mismo, los agentes biológicos son fundamentales
para asegurar un mejor y mayor uso del fósforo del suelo.

1. Presencia de una demanda permanente del elemento

Dado que el fósforo en solución es repuesto a medida que se agota, una demanda
activa y permanente induce a una oferta en permanente renovación. La intensidad
del flujo hacia formas más disponibles en un momento determinado puede seguir
siendo baja, pero si el consumo se mantiene en forma permanente, las cantidades
totales solubilizadas -y por tanto la absorción total- se elevan. Los mecanismos
que permiten mantener una demanda permanente son todos aquellos que
aseguran un crecimiento y una actividad radicular y microbiológica óptima.

2. Abundante presencia de ácidos orgánicos en el suelo

Un gran número de ácidos orgánicos tienen la capacidad de solubilizar fosfatos


mediante complejación del calcio, aluminio y fierro, dejando así al ion fosfato en
estado soluble. La reacción podría graficarse como se muestra en la figura 3. Los
ácidos más activos en el suelo parecen ser el cítrico, oxálico, glucónico, láctico,
málico. Los ácidos húmicos y fúlvicos cumplen el mismo papel que los anteriores.
El ácido carbónico que se forma a partir del C02 proveniente de la respiración
microbiana y radicular, aunque no es un ácido orgánico, también actúa en forma
similar – especialmente en relación a los fosfatos de Calcio.

3. Fomentar la presencia de hongos micorrizas en el suelo

Los hongos micorrícicos son hongos pertenecientes a diversas especies que


establecen una asociación simbiótica -llamada micorriza- con la mayor parte de las
especies vegetales a través de sus raíces. Mientras las plantas entregan energía
al hongo, éste entrega agua y nutrientes a la planta. Las micorrizas son
especialmente eficientes en aumentar los niveles de abastecimiento de fósforo.

Los mecanismos utilizados por los hongos micorrícicos para aumentar la


capacidad de absorción parecieran ser la producción de gran cantidad de micelios,
lo que aumenta el volumen del suelo explorado y la superficie de absorción.
También es importante la capacidad para acumular fósforo intracelularmente en
forma activa, contra fuertes gradientes de concentración. Esto permite a las
micorrizas extraer fósforo en forma más eficiente, especialmente de soluciones de
muy baja concentración. Un factor adicional de eficiencia de extracción es que las
raíces con micorrizas se mantienen funcionales durante más tiempo.

Se ha detectado la presencia de hongos micorrízas en prácticamente todo tipo de


suelos, pero su población y actividad dependerán de condiciones ambientales. La
presencia de nutrientes solubles y agroquímicos, los extremos de humedad
(especialmente el exceso) y los extremos de temperatura disminuyen su actividad
y capacidad de crecimiento. La presencia de materia orgánica y la actividad
biológica del suelo tienen efectos positivos, aunque determinadas especies de
hongos, bacterias y nemátodos pueden alimentarse de hongos micorrícicos.

Diversos estudios indican que, en un amplio rango de condiciones, el estímulo del


crecimiento y actividad de las micorrizas ya presentes en el suelo mediante
manejo ambiental puede ser suficiente para lograr un efecto importante sobre la
nutrición de la planta. Sin embargo, en suelos altamente erosionados o en la
producción de plántulas para trasplante, la introducción de micorrizas mediante
inoculación pareciera ser una medida complementaria necesaria.

Los mecanismos recién descritos resumidamente involucran una compleja red de


interrelaciones, formas de control, elementos tampón y vías de retroalimentación
imposibles de presentar en esta discusión. Desde el punto de vista del manejo
agrícola, sin embargo, la inducción de estos mecanismos se basa en sólo unas
pocas medidas convergentes. Estas son:

a) Aplicación de materia orgánica al suelo, lo que permite reciclar


cantidades importantes de nutrientes e induce altos niveles de actividad biológica.
Esta a su vez fomentará la presencia de micorrizas, aumentará los ácidos
orgánicos en el suelo y protegerá a éste contra los extremos de humedad.
Simultáneamente, la materia orgánica mejorará la estructura del suelo, facilitando
un mayor grado de exploración y actividad radicular.

b) Mantener el suelo cubierto el mayor tiempo posible, mediante cubierta


muerta o viva, ya que ello estimulará la actividad microbiológica y radicular al
controlar los extremos de humedad y especialmente los de temperatura. Si se
utiliza cubierta viva, la mayor presencia de raíces también estimulará la actividad
microbiana a través de los exudados y restos radiculares.

c) Evitar compuestos tóxicos en el suelo, ya que todos ellos disminuyen la


actividad biológica y sus efectos asociados. Los compuestos más tóxicos son los
fungicidas y herbicidas. Algunos insecticidas pueden no tener un efecto directo
sobre la actividad microbiológica total del suelo, pero los procesos de degradación
de estos compuestos pueden alterar la composición de las poblaciones en el
suelo, alterando así la eficiencia de los mecanismos de solubilización y/o
aprovechamiento de los nutrientes.

d) Evitar fertilizantes solubles, los fertilizantes solubles constituyen otra


fuente de toxicidad para los microorganismos. Simultáneamente, la presencia de
fósforo soluble disminuye la eficiencia en la acción de las micorrizas, ya que la
absorción de fósforo soluble de manera directa y a tasas normales permite ahorros
significativos de energía en comparación con los procesos de solubilización y
acumulación activa. Por lo tanto, si la fertilización orgánica aparece como
insuficiente, los fertilizantes a aplicar deben ser de baja solubilidad (por ejemplo,
roca fosfórica).

e) En praderas, evitar el envejecimiento de raíces, ya que ello disminuirá la


actividad radicular. Esto implica evitar el envejecimiento de la parte aérea de la
pradera, por lo que el pastoreo controlado e intensivo -con momentos de consumo
lo más cercanos al óptimo pasa a ser una herramienta importante.
Las medidas anteriores tendrán su mayor efectividad si se aplican en forma
combinada entre sí o con otras medidas de protección y recuperación de suelos. A
su vez, los efectos pueden no verse sino hasta después de un tiempo variable de
aplicación. Algunas mediciones efectuadas por el CET en suelos de origen
volcánico (Chile, zona de Temuco) y en suelos de origen calcáreo, indican
aumentos de hasta 8 veces en el nivel de fósforo soluble al cabo de tres a cinco
años.

El fósforo es un elemento clave de la molécula de (DNA) ácido


desoxirribonucleico. Aunque parezca extraño, más del 50 % del fósforo orgánico
del suelo puede encontrarse en forma de DNA.

Según el diccionario Webster, la palabra "orgánico" se refiere a la rama de la


química que estudia los compuestos que contienen carbono. Por lo tanto, el
fósforo orgánico pertenece a los compuestos que contienen carbono y fósforo.
(Que son compuestos inorgánicos) A diferencia de los fosfatos de calcio, sodio o
amonio, los compuestos de fósforo orgánico son compuestos extremadamente
complejos que se originan a partir de la descomposición de la caña o paja del
maíz y otros cultivos por los microorganismos del suelo.

Porque la planta que fertilizamos está finalmente relacionada con el


enriquecimiento del suelo para futuros cultivos. El proceso funciona de la siguiente
forma: sabemos que la planta absorbe el fósforo de los aniones (H2PO4)-1 y
(HPO4)-2 que se encuentran en solución en el suelo. Estos fosfatos inorgánicos
se adicionan fácilmente al suelo añadiendo fertilizantes comerciales.

Sin embargo, durante el proceso de crecimiento, la planta convierte el fósforo


inorgánico en fósforo orgánico. ¿En qué cantidad? Por ejemplo: un cultivo de maíz
que produce 12 Ton/ha contiene aproximadamente 13 Kg de fósforo orgánico en
el grano y la misma cantidad en los residuos y las raíces que quedan sin
emplearse. Esto último es importante ya que el fósforo orgánico residual pasará a
formar parte de la reserva de fósforo del suelo y servirá para futuros cultivos.
También se encuentran en el suelo, lo que se conoce como fosfatos inorgánicos
"inmovilizados" que son los fosfatos inutilizables por la planta. Estos fosfatos
incluyen los fosfatos de hierro, de calcio y de aluminio. Los suelos tienen
diferentes propiedades en cuanto a inmovilización o fijación se refiere; las cuales
dependen del pH, de varios iones metálicos, del origen del suelo mismo y los
minerales que " ligan " al fósforo.

Cuando se incorporan fosfatos inorgánicos al suelo, el equilibrio puede inclinarse


en favor de la inmovilización o fijación. Por otro lado, conforme la materia orgánica
se descompone (o mineraliza) el equilibrio puede inclinarse hacia la formación de
fosfatos disponibles para la planta. Es importante notar que el agricultor puede
promover la descomposición de materia orgánica y liberar fosfatos (y nitrógeno)
durante los meses de Julio y Agosto, periodo de lluvias y altas temperaturas.

En primer lugar, debe manejar los residuos de cosecha y granja adecuadamente


para formar materia orgánica. En segundo lugar, el pH del suelo debe ser ajustado
para maximizar la actividad microbiana. En tercer lugar, debe haber humedad,
temperatura y aireación del suelo adecuadas para promover un ambiente
microbiano activo. La lluvia o la irrigación proveen al suelo de humedad, pero la
temperatura depende de la Madre Naturaleza. En lo que respecta al manejo del
suelo, recordemos que nuestro objetivo del programa de "Maximización de la
Productividad" es producir un suelo profundo y de baja densidad el cual maximiza
la aireación y la actividad microbiana.

La "mineralización" de los suelos acelera la pérdida de fosfatos que se convierten


en uno de los ingredientes más necesitados en los cultivos de altos rendimientos.
El proceso de mineralización se lleva a cabo por los microorganismos del suelo
que se alimentan de los residuos y después mueren. Estas células muertas se
convierten en un material negro que conocemos como materia orgánica. Cuando
la materia orgánica es finalmente producida, contiene una cantidad substancial de
fósforo orgánico (tabla 2). Como se puede observar, en la capa de 0 a 15 cm, un
suelo con 3 por ciento de materia orgánica puede contener aproximadamente
1,000 Kg. de fósforo (expresado como P2O5) por hectárea. El fósforo orgánico de
la materia orgánica no es inmediatamente asimilable para la planta. Como
mencionamos anteriormente, este fosfato debe ser convertido de nuevo a su
forma inorgánica para ser asimilado. Sin embargo, esto no debe preocuparnos
puesto que al formarse la materia orgánica, el fosfato orgánico ha sido
almacenado por el productor y será liberado en el suelo en su forma más
asimilable cuando el cultivo más lo necesite: durante el periodo de máximo
crecimiento.

Durante el proceso de "mineralización" el fósforo inorgánico, así como el nitrógeno


y otros nutrientes, se harán disponibles bajo condiciones apropiadas de
temperatura, pH, humedad y buen manejo del suelo.

Cantidades aproximadas de Fósforo orgánico en la materia orgánica del suelo

(Expresado como P2O5)

Porcentaje de M.O. en el suelo (0-15 cm) 1% 3% 5%


Cantidad aproximada de P2O5 (Kg/ha) 340 1.020 1.700
Otro interesante punto de vista es comparar al fósforo orgánico en los suelos de
cultivo con el rumen de las vacas. Los ganaderos saben que a pesar de que sus
animales ingieran grandes cantidades de ensilado, de maíz o de milo, pueden
desarrollar serias deficiencias de fósforo. El fósforo orgánico en el alimento
(fósforo Phytin) es muy poco asimilable para los animales. Para compensar esta
deficiencia y aumentar la digestión, es necesario suplementar el alimento para
ganado monocálcico o dicálcico.

El resultado es:

1) una mayor eficiencia de la alimentación,

2) Un aumento de peso,

3) Un mejoramiento general de la salud.

En el ganado al igual que en el humano, aproximadamente el 20 % del fósforo se


encuentra en los tejidos blandos en forma de cientos de compuestos orgánicos
complejos. El fósforo en los tejidos blandos es necesario para metabolizar los
carbohidratos y las grasas. Es un componente de todas las células vivas.

¿Qué tan importante puede ser el fósforo? Cuando se sustrae de la dieta de los
pavos jóvenes, éstos mueren en sólo 10 días.

Un ingrediente supremo...

En la agricultura moderna, cuando los rendimientos de maíz se aproximan a 12 ó


15 Ton/ha, el fósforo orgánico toma una importancia significativa en lo que
respecta al manejo de los residuos. La adición de los residuos no debe convertirse
en un problema. Al contrario, puede ser la solución en lo que respecta al manejo
de nutrientes para la obtención de altos rendimientos.

Sin lugar a dudas, el fósforo orgánico juega un papel muy importante en nuestra
búsqueda para la obtención de suelos de alta productividad capaces de producir
altos rendimientos.

EL FOSFORO (P) es esencial para el crecimiento de las plantas. No puede ser


sustituido por ningún otro nutriente. La planta debe tener P para cumplir su ciclo
normal de producción.

ES UNO DE LOS TRES NUITRIENTES PRINCIPALES. LOS OTROS DOS SON


EL NITROGENO Y EL POTASIO LA TABLA SIGUIENTE MUESTRA ALGUNOS
CULTIVOS Y LAS CANTDIADES DE P2O5 QUE ABSORBEN DEL SUELO.
Cantidad de fósforo absorbido por varios cultivos.

Absorción
Rendimiento De P2O5 en
Cultivo toneladas Todo el cultivo, kg
Alfalfa 18.0 134
Bananas 55.0 52
Frijol 2.0 15
Café 2.1 12
Maíz 10.0 102
Algodón (fibra) 1.1 57
Grano de sorgo 9.0 94

Maní 4.5 45
Arroz 7.8 67
Soya 4.0 65
Caña de azúcar 112.0 112

Tomates 90.0 97
Trigo 4.0 46

El contenido de fósforo en los fertilizantes se expresa como equivalente de “P205”,


a pesar de que no existe el P205 como tal en los materiales fertilizantes. La
designación de P2O5 es una expresión convencional estándar del contenido
relativo de P. En este texto, algunos datos se expresan en términos de P y otros
como P205. Para convertir P en P205, se multiplica por 2.29 y para convertir P205
en P se multiplica por 0.43.

Las plantas absorben la mayoría del P como el ion orto fosfato primario (H2PO4-).
Las plantas también absorben pequeñas cantidades de P como ion orto fosfato
secundario (HPO4=). El pH del suelo influye en gran parte en la absorción de
estas dos formas de P por la planta. Las plantas pueden utilizar otras formas de P,
pero en menores cantidades que el orto fosfato.

El P desempeña un papel importante en la fotosíntesis, la respiración, el


almacenamiento y transferencia de energía, la división y crecimiento celular y
otros procesos que se llevan a cabo en la planta. Además, promueve la rápida
formación y crecimiento de las raíces. El P mejora la calidad de la fruta, hortalizas
y granos y es además vital para la formación de la semilla.

La concentración de P es más alta en la semilla que en ninguna otra parte de la


planta madura, como lo indica la siguiente tabla.

Cultivos Parte de La Rendimiento Porcentaje De


planta (Kg/ha) P
Maíz Grano 9.4 0.22
Tallos y hojas 8.4 0.17
Algodón Semillas 2.2 0.66
Tallos y hojas 2.8 0.24
Maní Grano 4.5 0.20
Tallos y hojas 7.2 0.26
Arroz Grano 6.7 0.28
Paja 7.8 0.09
Soya Grano 3.4 0.42
Paja 7.8 0.18
Trigo Grano 4.0 0.42
Paja 6.1 0.12

EN QUE AYUDA EL FOSFORO A LA PLANTA:

1. El P ayuda a las raíces y a las plántulas a desarrollarse rápidamente.


2. Permite soportar inviernos rigurosos
3. Aumenta la eficiencia del uso del agua.
4. Acelera la madurez, lo cual es importante para la cosecha y para la calidad
del cultivo.
5. Contribuye a aumentar la resistencia a las enfermedades en algunas
plantas.
6. Es indispensable para la trasferencia de energía en células vivas, y en la
fotosíntesis de las plantas. Entre muchas otras virtudes.
Una interacción se da cuando el nivel de un factor, relacionado con la producción,
influye en la respuesta de otro factor. Una interacción positiva ocurre cuando el
resultado de utilizar prácticas combinadas, es mayor que la suma del efecto
individual de las prácticas utilizadas.
Esas interacciones positivas han servido como justificación, con bases científicas,
para el desarrollo de los programas "balanceados" de nutrición vegetal. Las
interacciones positivas del fósforo (P) con otros nutrientes están bien
documentadas. Además, las interacciones con P se han identificado con otros
factores de la producción como son, variedades o fechas de siembra.

Las interacciones positivas del P con otros nutrientes esenciales para el


crecimiento de las plantas han sido documentadas, en reportes de investigación,
con muchos cultivos. Ciertas prácticas culturales junto con las condiciones del
clima pueden ser muy útiles como indicadores de las posibles interacciones en la
utilización del P.

Mayores rendimientos ocasionan mayor demanda de nutrientes derivados de las


reservas del suelo y de los fertilizantes aplicados. El objetivo es suplir los
nutrientes necesarios durante los momentos de mayor absorción de estos por el
cultivo.

Los suelos ácidos y el encalado alteran la disponibilidad de nutrientes para las


plantas en crecimiento. Un buen encalado puede mejorar la disponibilidad de P en
muchos cultivos. El mal encalado o sobre encalado, puede reducir la disponibilidad
de P y micronutrientes tales como el hierro (Fe), zinc (Zn), manganeso (Mn) o boro
(B) y aumentar la disponibilidad de molibdeno (Mo).

El cambio hacia métodos de labranza reducida puede alterar la forma de


aplicación de los fertilizantes y muchas veces los resultados pueden ser que el P
se acumule en la parte superficial del suelo. Las bajas temperaturas, alta humedad
y materia orgánica pueden reducir la disponibilidad y la utilización de P por ciertos
cultivos.

Densidades altas de siembra en cultivos como la soya, trigo, cebada, o algodón,


dan como consecuencia, por supuesto, un número mayor de plantas por hectárea.
Sin embargo el tamaño individual de estas es menor y el volumen de suelo
explorado por las raíces se reduce. Así, un suelo más fértil, con mayor cantidad y
mejor distribución de P es benéfico para un buen desarrollo del cultivo.
La adaptación agronómica de variedades e híbridos mejorados por la ingeniería
genética proveen mayor tolerancia a herbicidas específicos y/o plagas e
insecticidas. Los requerimientos de nutrientes utilizando los sistemas de "sitio
específico "están siendo evaluados para un mejor manejo del P.

Cambios en la topografía y la zona de crecimiento de la raíz pueden ser


consecuencia del método de nivelación, labranza más profunda o de
conservación. La pérdida de suelo a través de la erosión debe de ser controlada
para aumentar la disponibilidad de P.

LA INTERACCIÓN DE NUTRIENTES Y EL FÓSFORO.

Nitrógeno (N). El fósforo y el N están involucrados en funciones vitales para las


plantas como lo son: la fotosíntesis, formación de proteína y la fijación (simbiótica)
de N. El beneficio principal de la aplicación en banda de fertilizantes con P y N
amoniacal es el incremento de absorción de P por las plantas debido a que la
solubilidad del P se incrementa.

Además, fertilizantes con N-amoniacal aumentan la absorción de P por las


plantas, mejorando así el crecimiento del cultivo y la eficiencia del fertilizante
fosfatado. Ejemplos de las interacciones N/P se muestran en las siguientes tablas.

La interacción N/P afecta la producción de maíz. (Illinois).

N (Kg/ha) P2O5 (Kg/ha) Producción (Ton /ha) Incremento (Ton/ha)


0 0 2.538 ***
224 0 3.150 0.567
0 179 3.654 1.071
224 179 7.749 5.166

La interacción N/P afecta los rendimientos y las ganancias en la producción


del trigo (Colorado).

N (Kg/ha) P2O5 (Kg/ha) Producción Costo de producción Rendimiento


(Ton /ha) Dlls/ha Dlls/ha neto Dlls/ha
0 0 2.144 241.97 0.11 24.70
34 0 2.814 256.77 0.09 29.64
34 34 3.015 275.27 0.09 29.64
67 0 2.546 271.57 0.10 14.82
67 67 3.886 308.57 0.08 86.46

La respuesta del cultivo a las aplicaciones de P pueden mejorarse haciendo


ajustes en el momento, dosis y método de aplicación. Todo lo anterior varía con
las propiedades físicas y químicas del suelo, el manejo de sistemas de cultivo para
altos rendimientos y las condiciones de estrés como la sequía, heladas y
deficiencia de nutrientes. Muchas interacciones entre los nutrientes se han
encontrado en cultivos como el maíz, trigo, hortalizas y frutales.

La detección y diagnóstico temprano en la temporada de cultivo de la deficiencia


de P y otros nutrientes puede ayudar a disminuir las pérdidas en el rendimiento,
calidad y ganancias para el agricultor. Inspecciones de campo, junto con análisis
de suelo y planta ayudan mucho al proveer datos para correcciones inmediatas y/o
para la siguiente temporada de cultivo.

La producción global de alimentos tiene lugar en un complejo sistema agrícola que


requiere de insumos que interaccionan dinámicamente entre si. La principal
responsabilidad de la persona a cargo del manejo de cualquier sistema agrícola es
la de cosechar un producto, que luego sale de la finca en forma de grano, frutas,
fibra, carne, leche, etc. En estos productos se exportan también nutrientes
esenciales para los cultivos, entre ellos el fósforo (P).

El balance del P disponible para las plantas se puede describir esquemáticamente


de la siguiente forma:

Pérdidas: En la cosecha que sale de la finca, escorrentía superficial y erosión del


suelo y fijación en formas no disponibles.

Ganancias: Fertilizantes fosfatados y meteorización muy lenta de los minerales


primarios. Redistribuciones: Desechos animales y humanos y residuos de cultivos.

Con excepción de la pequeña contribución hecha por la meteorización de los


minerales primarios, los fertilizantes fosfatados representan la única fuente nueva
de P disponible que ingresa en el sistema. El P en los residuos animales y
vegetales que se originaron en el suelo y por esta razón no son ganancias sino
simplemente redistribuciones de P dentro del sistema.

El P presente en los fertilizantes fosfatados sirve para reemplazar en el suelo el P


exportado en la cosecha y para mejorar la fertilidad de los suelos deficientes en
este elemento. Si no existiese este reemplazo la producción de alimentos no
podría sostenerse.

¿Cuánto del fosfato aplicado es disponible?

Debido a que el fosfato forma muy diversos compuestos en el suelo, la cantidad


disponible para el ciclo de cultivo o el año de aplicación, generalmente fluctúa
entre el 10% y el 30 %.

Mucho del fosfato no disponible durante el primer año será disponible durante los
años que siguen. Algunas estimaciones han mostrado que después de 2, 5 y 8
años, cerca de 45, 65 y 75 por ciento del fosfato aplicado ha sido asimilado por los
cultivos, respectivamente. En consecuencia, el fosfato usado por el cultivo en un
año dado, es una combinación de los fosfatos aplicados en ese año y una parte de
lo que está disponible de años anteriores.

¿Cuál es mejor, fertilizante fosforado líquido o sólido?

El fosfato reacciona y forma los compuestos anteriormente mencionados sin


importar si la fuente original es líquida o sólida. Los fosfatos sólidos se disuelven y
luego reaccionan con los diferentes elementos y "fracciones" minerales en la
solución del suelo. Los fertilizantes líquidos, solo "se saltan" el paso de la
disolución. Comparaciones usando la misma forma de fosfato en forma líquida o
sólida no han mostrado diferencias significativas en cuanto a efectividad entre las
dos formas.

Cuando se aplica el fertilizante fosforado con nitrógeno amoniacal el fósforo se


hace más disponible para la planta que cuando se aplica sin nitrógeno. La
influencia del N en la absorción de P es bastante clara en las primeras etapas del
crecimiento. En algunos casos hasta el 65% del P de la planta proviene del
fertilizante en las primeras etapas del crecimiento.
¿Existen diferencias entre los fertilizantes fosforados?

Algunos de los fertilizantes fosforados más comunes son el súper fosfato de calcio
triple (TSP o súper triple), el fosfato mono amónico (MAP), el fosfato di amónico
(DAP), el súper fosfato de calcio simple (súper simple) y el poli fosfato de amonio
(APP). Las cuatro primeras fuentes son sólidas en su presentación comercial. Las
tres primeras TSP, MAP y DAP en solución acuosa tienen pH´s aproximados de
1.5, 3.5 y 8.0, respectivamente. Estos valores de pH son momentáneos, sin
embargo, pueden tener efectos en la absorción inmediata de P y otros nutrimentos
para la planta. Los poli fosfatos de amonio, normalmente líquidos, tienen un pH
cercano a la neutralidad. Existen pocas diferencias prácticas en relación con la
efectividad agronómica en las diferentes fuentes de fertilizante. Sin embargo,
existen algunas consideraciones que hay que tomar en cuenta:

Aún cuando la porción amoniacal de los fertilizantes fosforados que forman parte
del MAP o DAP resultara en reacciones ácidas netas, los fertilizantes de reacción
inicial más ácida, como el MAP y el TSP, pueden tener un poco más efectividad
bajo condiciones donde el pH del suelo es alcalino, los niveles de P disponible son
bajos y las dosis de fertilizantes requeridas son altas. Las ventajas pueden no
resultar en incrementos de rendimiento pero la posible liberación temporal de otros
nutrimentos (micronutrientes principalmente) puede aumentar cuando se modifica
el pH de la solución del suelo más cercana a la raíz de la planta. Los resultados a
largo plazo pueden variar de acuerdo al manejo de la fuente según el tipo de suelo
y cultivo.

CUIDANDO EL FOSFORO Y EL POTASIO

Hay muchas variables que conducen a inconsistencias en los análisis y resultados


en las investigaciones de suelos. Esta información conflictiva ha ocasionado
acalorados debates entre los científicos y ha conducido a no poca confusión entre
los agricultores en relación a cuanto fosforo o potasio deben usar y los mejores
métodos de aplicación. Se ha demostrado en estudios que una alta dosis de
fosforo suministrada en una sola aplicación puede incrementar los rendimientos en
los años subsiguientes. Por lo que ha llevado a los científicos a proponer que una
sola dosis optima de fosforo puede producir más grano en un periodo de varios
años que la misma cantidad aplicada a la tierra cada año en pequeñas
proporciones. Por lo que se sugiere que el costo de una aplicación fuerte de
fosforo debería ser considerada como una inversión a largo plazo, que se amortiza
durante varios años. Suspensión rápida: sin embargo estudios en otras áreas
indican que el fosforo no aprovechado de inmediato puede ser completamente
asimilado 14 meses después de su aplicación, El Doctor Don Sanders, un
especialista en fertilidad de suelos de la Universidad de Nebraska señala que
extensas investigaciones han demostrado que los cereales menores responden
menos ante aplicaciones a la siembra que en aplicaciones posteriores de fosforo,
particularmente en aquellos suelos que tienen un contenido e bajo a medio de
fosforo. Por lo que la universidad está cambiando sus recomendaciones de
aplicación “solíamos decirle a los agricultores que solo necesitaban la mitad de
fosforo en aplicaciones a la siembra para conseguir los mismos beneficios que
con una aplicación basal”, explica el Doctor Sanders. “pero ahora estamos
convencidos que aplicando casi la misma cantidad de fosforo a la siembra y la otra
mitad después, obtendremos más retorno en la inversión de fosforo”.

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