Sin Dios Nada Podemos Hacer | Jesús es la Fuente (Juan 15:5)
Una de las frases o pensamientos más resaltantes y populares entre los creyentes cristianos, es que “sin
Dios nada podemos hacer”. Esta expresión encierra una de las mayores verdades de toda la existencia
humana, demostrando que nuestra vida tiene una total dependencia de Dios. La Biblia expresa esta
verdad en Juan 15:5, describiendo a Jesús como la fuente de nuestra vida, y que sin él no podemos
llevar fruto. Así mismo esta verdad nos enseña que todo lo que tenemos proviene de Dios, y que solo
conectados a él podemos ser verdaderamente fructíferos. Por tal razón, hoy debemos preguntarnos:
¿Jesús es la fuente de nuestra vida? ¿Por qué sin Dios nada podemos hacer?
«Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque
separados de mí nada podéis hacer» Juan 15:5 (RV 60)
La noche que iba a ser entregado, Jesús habló muchas cosas a sus discípulos luego de haber comido el
cordero pascual y lavar sus pies. Entre las palabras que dijo aquella noche, Jesús se comparó con una
vid, es decir con una planta o árbol de uvas (Jn.15:1). En esta misma analogía, Jesús también les dice a
los discípulos que ellos son como ramas (pámpanos) unidos a la vid, la cual es él. De esta manera, el
Señor les afirmó que sólo podían dar fruto permaneciendo unidos a él, ya que separados de él, nada
pueden hacer (Jn.15:5).
Al describirse como la Vid Verdadera, Jesús se describe a sí mismo como la fuente de nuestra vida, es
decir que todo proviene de él. Una fuente es el lugar de origen del sustento, alimento, provisión,
fortaleza, vida o vitalidad, de algo o alguien. Así mismo, Jesús dijo que unidos a la verdadera fuente que
es él, podremos tener frutos, que son verdaderos resultados. Todo esto significa que para poder tener
resultados o frutos verdaderamente duraderos, debemos estar unidos a la fuente perdurable y
verdadera que es Jesús. Solo podremos dar frutos verdaderos cuando estamos conectados a la fuente
verdadera, ya que sin Dios nada podemos hacer.
Todo lo Bueno que tenemos proviene de Dios| Jesús es la Fuente de nuestra Vida
«Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay
mudanza, ni sombra de variación» Santiago 1:17 (RV60)
La escritura de Santiago 1:17 afirma que todo lo bueno y perfecto que podamos tener, es una dádiva
que viene de Dios. Esto significa, que todo lo bueno que tenemos es un regalo que Dios nos da,
simplemente porque él es la fuente de nuestra vida. Al considerar que todo lo que tenemos es un regalo
de Dios, debemos de pensar que es por su bondad y no por méritos propios.
a) Las Riquezas y bienes, provienen de Dios.
Disfrutar del fruto de nuestro trabajo, es un regalo que Dios nos da (Ec.519). Cuando comemos,
bebemos, viajamos o compramos algún bien para disfrutarlo, debemos de tener en cuenta que todo lo
bueno proviene de Dios. Esto nos ayudará a mantenernos humildes para comprender que el derecho a
disfrutar lo que tenemos, es solo porque Dios así lo quiere. Claramente esto significa que sin Dios nada
podemos hacer.
b) La Autoridad que tenemos proviene de Dios
Jesús dijo a Pilato que la autoridad que éste tenía sobre él, solo era debido a que Dios se lo permitía
(Jn.19:11). Esto significa que la influencia que pueda generar cualquier investidura, posición o jerarquía
que tengamos, solo puede ser dada por Dios. También esto nos hace pensar en que somos responsables
de ejercer bien la autoridad que Dios nos ha otorgado y no abusar de ella. Tener una posición de
autoridad en el hogar, trabajo, iglesia, o comunidad, es un regalo de Dios para servir a otros con justicia
(Rom.13:1). No debemos abusar de la autoridad que Dios nos ha dado, utilizándola para beneficio
propio, sino para honrar a Dios (Rom.13:3; Ef.5:9; Col.3:21; 6:1).
c) El Crecimiento de la Iglesia y el Avance del Evangelio provienen de Dios
Solo podemos tener frutos de éxito en la obra de Dios, porque Dios es quien da el crecimiento
(1ªCor.3:7). Cuando la iglesia del primer siglo comenzó la predicación del evangelio, Dios hacía crecer el
número de creyentes que serían salvos (Hch.2:47). Esto trajo como consecuencia, que los principales
sacerdotes y saduceos, llevaran a los apóstoles ante el concilio para prohibirles hablar de Jesús
(Hch.5:27-28).
Cuando Gamaliel vio esto, dijo a los miembros del concilio que si el mensaje anunciado por los apóstoles
era de Dios, nada podía detenerlos (Hch.5:34-39). Con estas palabras, Gamaliel estaba afirmando que si
esa obra era de Dios, nada la podía destruir. De la misma forma entendemos, que la obra de Dios solo
avanza porque Dios le garantiza su éxito, ya que sin Dios nada podemos hacer.
Lo Malo también proviene de Dios | Sin Dios, aún el Diablo NO puede hacer nada
«…¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos?… Job 2:10 (RV 60)
Para sorpresa de muchos escépticos, tanto lo bueno como malo que nos ocurre proviene de parte de
Dios. Esta verdad la afirmó Job cuando fue herido por Satanás con una sarna maligna, aceptando su
procedencia divina (Job.2:10). Salomón también afirmó que lo bueno y lo malo que nos ocurre son cosas
de Dios, y que nadie sabe lo que hay después (Ec.7:14). Por su parte, el profeta Jeremías reconoció esto,
al ver la destrucción de Jerusalén por parte del ejército de Nabucodonosor (Lam.3:38).
Entender esta verdad nos enseña que los momentos malos tienen un propósito divino, y que estos nos
ayudarán para bien si amamos a Dios (Rom.8:28). Cabe destacar que no es Dios quién creó el mal que
nos ocurre, sino que lo permite para lograr un bien mayor en nosotros. De la misma manera debemos
entender que aún Satanás debe tener la aprobación de Dios para actuar en contra nuestra (Job.1:12-
2:7). Basta decir que aún Satanás no puede hacer nada si Dios no se lo permite o aprueba.
Todo lo puedo en Cristo que me Fortalece | Sin Dios nada podemos hacer
«Todo lo puedo en Cristo que me fortalece» Filipenses 4:13
Así como afirmamos que sin Dios nada podemos hacer, de la misma manera se puede decir que en Dios
todo lo podemos. En su carta a los filipenses, el apóstol Pablo manifiesta haber aprendido a estar
satisfecho frente a cualquier circunstancia de escasez o necesidad (Flp.4:12). Esta capacidad de
enfrentarse a la adversidad con gozo, solo podía ser provista por medio de Cristo quien le daba fortaleza
para superarla (Flp.4:13). La capacidad y el poder que cada persona necesita para enfrentarse a las
pruebas, solo provienen de Dios quien es la fuente de nuestra vida.
No con ejército, ni con fuerza, sino con el Espíritu de Dios | Sin Dios nada podemos hacer
Una de las escrituras que manifiesta claramente que sin Dios nada podemos hacer se encuentra en el
libro del profeta Zacarías (Zac.4:6). Cuando Zacarías vio la visión del candelabro junto a los dos olivos, el
ángel del Señor le dijo que le enviara un mensaje a Zorobabel. Allí Dios le decía a Zorobabel, que la
reconstrucción del templo de Dios no dependía de ejércitos, ni de fuerza humana. Antes bien, la
culminación exitosa de esa obra era el resultado de depender del Espíritu de Dios. Esta dependencia
total del Espíritu de Dios, es evidencia irrevocable de que sin Dios nada podemos hacer.
Todo lo que es de Dios permanece | Solo podemos dar Frutos en Cristo
El capítulo de Juan 15, nos enseña porqué sin Dios nada podemos hacer. Todos nosotros deseamos ser
fructíferos, es decir que deseamos tener éxito o resultados en todo lo que nos propongamos. Para que
esos resultados sean duraderos y permanentes, debemos de permanecer conectados a la vid verdadera.
Solo conectados a Cristo podemos ser verdaderamente fructíferos y nuestro fruto ha de permanecer
(Juan 15:4-6).
La permanencia de nuestro fruto, requiere constancia y perseverancia de permanecer en Dios. Tener
resultados perdurables es evidencia de que estamos conectados a Cristo. Jesús es la fuente de nuestra
vida, y solo en él podemos alcanzar el verdadero éxito, ya que sin Dios nada podemos hacer.
Dios te bendiga!!!