Versículos Leídos y que me han causado interés
Juan 3:16
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a
su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no
se pierda, mas tenga vida eterna.
Juan 1:1
Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que
hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos
contemplado, y palparon
Juan 14:6
Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida;
nadie viene al Padre, sino por mí.
Mateo 28:19
Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones,
bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del
Espíritu Santo;
Romanos 3:23, 24
Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria
de Dios siendo justificados gratuitamente por su gracia,
mediante la redención que es en Cristo Jesús
Efesios 2:8
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto
no de vosotros, pues es don de Dios;
Génesis 1:1
En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
Hechos 1:8
Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre
vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en
Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último
de la tierra.
2 Timoteo 3:16
E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad:
Dios fue manifestado en carne, Justificado en el Espíritu,
Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en
el mundo, Recibido arriba en gloria.
Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para
enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en
justicia
Romanos 10:9
Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y
creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los
muertos, serás salvo.
Mateo 7: 13, 14
Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta,
y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos
son los que entran por ella;
Porque estrecha es la puerta, y angosto el camino
que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.
Hebreos 10:25
No dejando de congregarnos, como algunos tienen por
costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis
que aquel día se acerca.
Lucas 19:10
Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que
se había perdido.
Apocalipsis 3:20
He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz
y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él
conmigo.
Génesis 22:1-2 y 9-12
Aconteció después de estas cosas, que probó Dios a Abraham,
y le dijo: Abraham. Y él respondió: Heme aquí.
Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, y vete
a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de
los montes que yo te diré.
Y cuando llegaron al lugar que Dios le había dicho, edificó allí
Abraham un altar, y compuso la leña, y ató a Isaac su hijo, y lo
puso en el altar sobre la leña.
Y extendió Abraham su mano y tomó el cuchillo para degollar a
su hijo.
Entonces el ángel de Jehová le dio voces desde el cielo, y dijo:
Abraham, Abraham. Y él respondió: Heme aquí.
Y dijo: No extiendas tu mano sobre el muchacho, ni le hagas
nada; porque ya conozco que temes a Dios, por cuanto no me
rehusaste tu hijo, tu único.
Gálatas 5: 17
Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu
es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis
lo que quisiereis.
Gálatas 5: 19 - 22
Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio,
fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías,
enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones,
herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas
semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya
os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no
heredarán el reino de Dios.
Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia,
benignidad, bondad, fe,
Mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus
pasiones y deseos.
Romanos 8: 5, 6
Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne;
pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu.
Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del
Espíritu es vida y paz.
1 Corintios 6: 19
¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el
cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois
vuestros?
Juan 10:10
El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he
venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.
Josue 1: 1, 2
Aconteció después de la muerte de Moisés siervo de Jehová, que
Jehová habló a Josué hijo de Nun, servidor de Moisés, diciendo:
Mi siervo Moisés ha muerto; ahora, pues, levántate y pasa este
Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que yo les doy a los hijos
de Israel.
Romanos 3:24
Siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la
redención que es en Cristo Jesús,
Romanos 5:17
Filipenses 4:6
Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras
peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción
de gracias.
Amos 5: 4
Pero así dice Jehová a la casa de Israel: Buscadme, y viviréis;
Apocalipsis 3: 20 1 de Pedro 5:6
He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre
la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.
Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os
exalte cuando fuere tiempo;
Hechos 3:19
Convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que
vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio,
Efesios 1:17
Para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria,
os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de
él.
Hechos 13: 7
que estaba con el procónsul Sergio Paulo, varón
prudente. Este, llamando a Bernabé y a Saulo,
deseaba oír la palabra de Dios.
Santiago 5:16
Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros,
para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho.
Isaias 53: 4 – 5
Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros
dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y
abatido.
Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros
pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga
fuimos nosotros curados.
3 Juan 1:2
Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y
que tengas salud, así como prospera tu alma.
1 Corintios 12: 4 – 11 y 28 – 31
Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo.
Y hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo.
Y hay diversidad de operaciones, pero Dios, que hace todas las
cosas en todos, es el mismo.
Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para
provecho.
Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro,
palabra de ciencia según el mismo Espíritu;
a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por
el mismo Espíritu.
A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento
de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro,
interpretación de lenguas.
Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu,
repartiendo a cada uno en particular como él quiere.
Y a unos puso Dios en la iglesia, primeramente apóstoles, luego
profetas, lo tercero maestros, luego los que hacen milagros,
después los que sanan, los que ayudan, los que administran, los
que tienen don de lenguas.
¿Son todos apóstoles? ¿son todos profetas? ¿todos maestros?
¿hacen todos milagros?
¿Tienen todos dones de sanidad? ¿hablan todos lenguas?
¿Interpretan todos?
Procurad, pues, los dones mejores. Más yo os muestro un camino
aun más excelente.
Juan 9:1
MATEO 5:3-11
Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el
reino de los cielos.
Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán
consolación
Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por
heredad
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque
ellos serán saciados
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán
misericordia
Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios
Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados
hijos de Dios.
Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la
justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os
persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.
MATEO 5:22 -24
Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano,
será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su
hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga:
Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego.
Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu
hermano tiene algo contra ti,
deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero
con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda
MATEO 6:1
Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para
ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de
vuestro Padre que está en los cielos.
TEMA DE ENSEÑANZA
MATEO 6:2-4
Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti,
como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para
ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su
recompensa.
Mas cuando tú des limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu
derecha,
para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en lo
secreto te recompensará en público.
MATEO 6:7
Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que
piensan que por su palabrería serán oídos.
MATEO 6:16-17
Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas; porque
ellos demudan sus rostros para mostrar a los hombres que
ayunan; de cierto os digo que ya tienen su recompensa .
Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro,
MATEO 6:19-21
No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín
corrompen, y donde ladrones minan y hurtan
sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín
corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan.
Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro
corazón
MATEO 6: 31 – 33
No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué
beberemos, o qué vestiremos?
Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro
Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas
estas cosas os serán añadidas
MATEO 7: 1 – 3
No juzguéis, para que no seáis juzgados.
Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la
medida con que medís, os será medido.
Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no
echas de ver la viga que está en tu propio ojo?
MATEO 9: 11 – 12
Cuando vieron esto los fariseos, dijeron a los discípulos: ¿Porqué
come vuestro Maestro con los publicanos y pecadores?
Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de
médico, sino los enfermos.
MATEO 10:28
Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden
matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el
cuerpo en el infierno.
MATEO 11.28-30
Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os
haré descansar.
Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso
y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas
porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga
MATEO 13: 14
De manera que se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dijo:
De oído oiréis, y no entenderéis; Y viendo veréis, y no percibiréis.
MATEO 14:15 – 21 (CUANDO JESUS MULTIPLICO LOS PANES Y
LOS PECES)
Cuando anochecía, se acercaron a él sus discípulos, diciendo: El
lugar es desierto, y la hora ya pasada; despide a la multitud, para
que vayan por las aldeas y compren de comer.
Jesús les dijo: No tienen necesidad de irse; dadles vosotros de
comer.
Y ellos dijeron: No tenemos aquí sino cinco panes y dos peces.
Él les dijo: Traédmelos acá.
Entonces mandó a la gente recostarse sobre la hierba; y tomando
los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo,
bendijo, y partió y dio los panes a los discípulos, y los discípulos
a la multitud.
Y comieron todos, y se saciaron; y recogieron lo que sobró de los
pedazos, doce cestas llenas.
Y los que comieron fueron como cinco mil hombres, sin contar
las mujeres y los niños.
MARCOS 3:13-19
13Después subió al monte, y llamó a sí a los que él quiso; y vinieron a
él. 14Y estableció a doce, para que estuviesen con él, y para enviarlos a
predicar, 15y que tuviesen autoridad para sanar enfermedades y para
echar fuera demonios: 16a Simón, a quien puso por sobrenombre
Pedro; 17a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan hermano de Jacobo, a
quienes apellidó Boanerges, esto es, Hijos del trueno; 18a Andrés, Felipe,
Bartolomé, Mateo, Tomás, Jacobo hijo de Alfeo, Tadeo, Simón el
cananista, 19y Judas Iscariote, el que le entregó. Y vinieron a casa.