Charlie y la fábrica de chocolate (resumen)
Charlie Bucket (Freddie Highmore) es un niño amable y educado de 11 años que
vive en la pobreza en una pequeña casa a las afueras de la ciudad, junto a sus
padres y sus cuatro abuelos. Todos ellos dependen del sueldo del padre de
Charlie (Noah Taylor), que trabaja en una fábrica de pasta dentífrica colocando
tapas en los tubos de crema dental. Al final de la calle se encuentra la fábrica de
chocolate de Willy Wonka (Johnny Depp), donde trabajaba Joe (David Kelly), el
abuelo de Charlie, durante su juventud. A pesar del gran éxito que tenía en su
momento el Sr. Wonka con su fábrica, los otros fabricantes de dulces comenzaban
a estar celosos de las creaciones del Sr. Wonka y comenzaron a infiltrar espías
dentro la fábrica, para así robar sus recetas secretas y de esta forma plagiar las
creaciones del Sr. Wonka. Dichos robos de recetas llegaron a tal grado que un día
y sin previo aviso el Sr. Wonka tomó la decisión de cerrar la fábrica para siempre y
despedir a todos sus empleados. Sin embargo, durante un día inesperado,
empezó a salir humo de las chimeneas indicando que la fábrica volvió a operar
nuevamente, pero ninguno de los trabajadores recuperaron sus empleos y nadie
ha vuelto a ver al Sr. Wonka desde entonces y que además, las puertas de la
fábrica siempre se han mantenido cerradas y solo se abren cuando los dulces van
a ser entregados en los camiones a las diferentes tiendas. 3
Un día, el Sr. Wonka anuncia que los cinco niños que encuentren cinco billetes
dorados ocultos al azar en tabletas de chocolate Wonka podrán visitar la fábrica y
solo uno de ellos ganará un gran premio especial. Unos días más tarde, Charlie le
pregunta a su padre por qué no fue a trabajar a la fábrica de crema dental y este
simplemente se limita a mencionar que en su empleo le dijeron que podía tomarse
unos días como vacaciones. Sin embargo, poco después se revela que en
realidad no se trataban de ningunas vacaciones, ya que debido al aumento de
las caries en los niños causado por el consumo excesivo de chocolate y por la
búsqueda de los billetes dorados hicieron que aumentara la demanda de cremas
dentales, y con las ganancias consecuentes que recibían ante el panorama, la
fábrica se modernizó y adquirió una máquina robótica que coloca las tapas aún
más rápido, eliminando de esta forma el puesto del Sr. Bucket y sus compañeros.
Los cuatro primeros billetes son encontrados respectivamente por Augustus Gloop
(Philip Wiegratz) (Augusto Gloop en Hispanoamérica), un niño obeso y glotón
de Düsseldorf, Alemania; Veruca Salt (Julia Winter), una niña mimada, consentida
y algo malcriada de Londres, Reino Unido; Violet Beauregarde (AnnaSophia Robb)
(Violeta Beauregarde en Hispanoamérica), una niña presuntuosa y competitiva
de Atlanta que mastica chicle sin parar y por último Mike Teavee (Jordan Fry)
(Miguel Teavee en Hispanoamérica), un niño arrogante y agresivo de Denver,
obsesionado con la televisión y los videojuegos, quien a su vez odia el chocolate.
Charlie desea encontrar un billete, pero debido al poco dinero del que dispone su
familia solo puede permitirse una tableta al año, por su cumpleaños. La tableta
que compran los padres de Charlie no contiene el billete, ni tampoco la siguiente
que compra con el dinero que le da el abuelo Joe. Charlie pierde toda esperanza
cuando oye hablar a dos hombres diciendo que el último billete ha sido encontrado
en Rusia. Mientras camina en dirección a su casa, Charlie encuentra un billete de
10 dólares en la calle, casi cubierto por la nieve y decide comprar otra tableta para
disfrutarla tranquilamente, mientras que en el periódico se anuncia que el billete
encontrado en Rusia resultó ser falso. Cuando Charlie entra una tienda, compra
un chocolate con el billete que encontró en la calle y justo cuando el abre el
envoltorio y para su sorpresa, encuentra el último billete dorado en su interior. Allí
mismo, otros clientes de la tienda intentan comprárselo, pero el dueño de la tienda
le dice que no se lo dé a nadie y se lo lleve a su casa.
En la parte posterior del billete, se indican instrucciones relacionadas con la visita,
como que esta tendrá lugar al día siguiente por la mañana y que cada niño puede
ir acompañado de un adulto. El abuelo Joe se ofrece a acompañar a Charlie, pero
este cuenta que le han ofrecido dinero a cambio del billete y está dispuesto a
venderlo. Sin embargo, su abuelo George lo convence para que se lo quede,
diciéndole que el dinero es algo muy común que imprimen a diario y que el billete
dorado es mucho más valioso, ya que solo existen cinco en el mundo y son los
únicos que habrá, y cuando Joe ve el billete, se levanta de la cama bailando. Al
día siguiente, los visitantes llegan a la fábrica y conocen al Sr. Wonka,
descubriendo que es un hombre peculiar, solitario e incapaz de pronunciar la
palabra "padres". El recorrido muestra cómo el fantástico e increíble lugar es
operada por unos seres llamados Oompa-Loompas (Deep Roy y voz de Danny
Elfman), procedentes de Loompalandia. Según el propio Wonka, los encontró
mientras estaba en aquel país cuando intentó encontrar sabores bastante exóticos
para sus propios dulces. A pesar de que los Oompa-Loompas comían orugas que
tienen un sabor repugnante y que los mezclaban con otros ingredientes como los
escarabajos rojos y la corteza de arbombón (que también tienen un sabor poco
horrible), el alimento que más deseaban son los granos de cacao. Wonka les
revela que habló con el líder de los Oompa-Loompas para estos fueran con él a la
fábrica y cambio les pagaría a todos un sueldo de comer todos los granos de
cacao que quieran, por lo que el líder de los Oompa-Loompas y sus súbditos
aceptaron el trato y desde ese momento le brindan su lealtad a Wonka.
Dentro de la fábrica, uno a uno, los otros cuatro niños se meten en problemas
debido a su mal comportamiento y se ven obligados a abandonar la visita antes de
tiempo: Augustus, quien se había caído al río de chocolate cuando trataba de
beber de él y es succionado por un tubo que transporta el chocolate a otros
lugares de la fábrica; Violet, quien ignora las advertencias de Wonka cuando
prueba un chicle experimental que aún estaba imperfecto, se vuelve azul y se infla
hasta convertirse en un arándano gigante; Veruca, quien intentaba quedarse con
una de las ardillas encargadas de la selección de nueces, pero éstas en represalia
la atacan y la consideran una "nuez hueca", para posteriormente arrojarla por el
conducto de basura junto con su padre y finalmente Mike, quien tras burlarse de
un invento de Wonka que sirve para teletransportar una tableta de chocolate a
través de la televisión, trata de teletransportarse él mismo y queda reducido a un
minúsculo tamaño. Cada vez que uno de los niños es eliminado de la visita, los
Oompa-Loompas los despiden con un número musical dedicado a cada uno de
ellos.
Al ser el único niño que queda, Charlie es el ganador y Wonka lo acompaña a él y
al abuelo Joe hasta su casa en un ascensor de cristal volador. Desde el cielo ven
cómo los otros cuatro niños abandonan la fábrica: Augustus, cubierto de
chocolate; Violet, quien logró recuperar su tamaño normal, ahora tiene un cuerpo
muy elástico y flexible, pero sigue siendo azul; Veruca y su padre salen de la
fábrica cubiertos de basura, y Mike sale con unas dimensiones desproporcionadas
al haber sido estirado en un intento fallido por recuperar su tamaño normal.
Adicionalmente, la madre de Augustus (Franziska Troegner) se da cuenta de que
la adicción de su hijo a los dulces es muy mala y el padre de Veruca ( James Fox)
finalmente decide dejar de malcriar a su hija. Tras llevar a Charlie a su casa,
Wonka anuncia cuál es el premio especial: la fábrica. Wonka se dio cuenta de que
necesitaba un heredero y organizó el concurso para encontrarlo, debido a que
estaba comenzando a envejecer. Sin embargo, no le permite a Charlie llevar a su
familia con él, por lo que este rechaza la oferta.
Días más tarde, se muestra que la situación de los Bucket ha mejorado, puesto
que lograron reparar el techo de la casa y que el padre de Charlie volvió a trabajar
otra vez en la fábrica de crema dental, esta vez reparando la máquina que lo había
reemplazado y ahora con un mejor sueldo que el que tenía previamente. Charlie
descubre que Wonka en su niñez (Blair Dunlop) tuvo una infancia difícil junto a su
padre, el Dr. Wilbur Wonka (Christopher Lee), un reconocido dentista que le
prohibió comer dulces y lo hizo usar un aparato dental de gran tamaño. Pero
cuando Wonka probó los dulces por primera vez, quiso dedicarse a fabricarlos en
contra de los deseos de su padre, pero después Wonka se marchó de la casa
para realizar su sueño. Sin embargo, cuando Wonka volvió después de esa noche,
este descubrió que su padre y la casa habían desaparecido sin dejar rastro.
Más tarde, los últimos dulces de Wonka no están vendiéndose muy bien y este
asocia su infelicidad al mal momento de su empresa, por lo que él decide ir a
buscar a su padre con la ayuda de Charlie. Cuando visitan al Dr. Wilbur,
descubren que este ha seguido la trayectoria de su hijo a lo largo de los años y
además que aún se siente culpable por todos los malos tratos propinados a su
hijo. Finalmente, ambos se reconcilian después de mucho tiempo separados y de
no verse uno al otro. Tras esta reconciliación familiar, ese mismo día, Wonka
volvió a proponerle otra vez la oferta a Charlie sobre la fábrica, la cual este último
finalmente aceptó pero con una sola condición, que toda la familia de Charlie vaya
a vivir con él dentro de la fábrica y Wonka acepta los términos del joven.
Al día siguiente, mientras él y Charlie trabajan juntos desarrollando nuevos
productos, estos finalmente regresan a casa para cenar, donde la familia Bucket
también invita a Wonka a comer con ellos y donde también este último le da las
gracias a Charlie por ayudarlo a arreglar sus diferencias con su padre.