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Roncancio & Velez 2011

Este documento describe la selección de nueve especies animales como "valores objeto de conservación" para el subsistema de áreas protegidas de los Andes occidentales de Colombia. Estas especies incluyen cuatro carnívoros, incluidos dos felinos, mamíferos acuáticos, un ave, un ungulado, un primate y un roedor. La selección se realizó usando el enfoque de "especies del paisaje" para definir especies sombrilla, piedra angular y bandera con el fin de generar planes de
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Roncancio & Velez 2011

Este documento describe la selección de nueve especies animales como "valores objeto de conservación" para el subsistema de áreas protegidas de los Andes occidentales de Colombia. Estas especies incluyen cuatro carnívoros, incluidos dos felinos, mamíferos acuáticos, un ave, un ungulado, un primate y un roedor. La selección se realizó usando el enfoque de "especies del paisaje" para definir especies sombrilla, piedra angular y bandera con el fin de generar planes de
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Rev. Acad. Colomb. Cienc. Ex. Fis. Nat.

43(166):52-64, enero-marzo de 2019


doi: http://dx.doi.org/10.18257/raccefyn.719

Artículo original Ciencias Naturales

Valores objeto de conservación del subsistema


de áreas protegidas de los Andes occidentales, Colombia
Néstor Javier Roncancio-Duque*, Laura Alejandra Vélez Vanegas

Dirección Territorial Andes Occidentales, Parques Nacionales Naturales de Colombia, Bogotá, D.C., Colombia

Resumen

Para planificar el manejo de la conservación de la biodiversidad y de los recursos naturales se deben formular
objetivos específicos y medibles que permitan evaluar la efectividad de la gestión. Su formulación específica
para cada uno de los componentes de la biodiversidad o de los servicios ecosistémicos derivados de sus procesos
ecológicos no es práctico, pues ello no ayuda a una gestión ambiental efectiva. Por lo tanto, se deben seleccionar
unos elementos sustitutos que representen los objetivos de la conservación y las situaciones de manejo que deben
resolverse para alcanzarlos. En este sentido, como paso inicial para revisar la planeación del manejo de todo el
territorio, el equipo del Subsistema de Áreas Protegidas Andes Occidentales (SAO) llevó a cabo la selección de
esos elementos sustitutos denominados “valores objeto de conservación” usando el enfoque de especies del paisaje,
el cual permite definir un grupo de especies animales que cumplen funciones de especies sombrilla, piedra angular
y bandera. En el SAO se definieron nueve especies, entre las cuales se encuentran cuatro carnívoros, incluidos dos
felinos, mamíferos acuáticos, un ave, un ungulado, un primate y un roedor. Con ello se aspiraba a generar un plan de
manejo concertado con todos los actores del territorio para lograr su conservación efectiva y consolidar la estructura
ecológica del subsistema. © 2019. Acad. Colomb. Cienc. Ex. Fis. Nat.
Palabras clave: Objetivos de conservación; Especies de paisaje; Manejo efectivo.

Values of conservation objects in the West Andean protected areas subsystem

Abstract

In order to plan the conservation management of the biodiversity and of natural recourses in general, we must
formulate specific and measurable goals to assess how effective such management is. It is not practical to define such
goals for each component of the biodiversity and the ecosystem services derived from the ecological process, as
this does not allow for an effective environmental management. Thus, it is necessary to select some surrogate items
representing the conservation goals and the management situations that must be resolved to achieve them. In this
sense, and as an initial step to review and fit its management plan to the whole territory, the West Andean protected
areas subsystem (SAO) team selected those surrogate items and called them values of the conservation objects. The
selection was done using the Landscape Species Approach to define a group of animals as umbrella, keystone and
flagship species. We selected nine species: four carnivorous including two felids, as well as aquatic mammals, a
bird, an ungulate, a primate, and a rodent. With this, we expected to come up with management plans based on the
cooperation with all relevant stakeholders in the territory for an effective conservation effort aimed at consolidating
the ecological structure of this subsystem. © 2019. Acad. Colomb. Cienc. Ex. Fis. Nat.
Key words: Object of conservation; Landscape species; Effective management.

Introducción medibles y llevar a cabo un monitoreo efectivo que permita


adaptar las acciones de manejo en el marco de un proceso de
Mediante la gestión ambiental se busca conservar toda la
adopción estructurada de decisiones (Holling, 1978; Lyons,
biodiversidad en un territorio o, por lo menos, dentro de
et al., 2008). La pretensión es que, al lograr un escenario
una estructura ecológica que permita mantener la oferta
de conservación efectivo para los objetos sustitutos, se
de servicios ecosistémicos en un paisaje determinado. No
conserve toda la biodiversidad que está en simpatría con
obstante, no es eficiente planear e implementar estrategias
ellos (Marcot & Flather, 2007).
de conservación para cada uno de los componentes de
la diversidad biológica (Roberge & Angelstam, 2004).
Por lo tanto, se hace necesario seleccionar una serie de *Correspondencia:
elementos sustitutos que representen las situaciones de Nestor Javier Roncancio Duque; [email protected]
Recibido: 9 de agosto de 2018
manejo (objetivos de conservación, amenazas y causas en el Aceptado: 14 de febrero de 2019
paisaje), en torno a las cuales se puedan formular objetivos Editor: Jaime Cantera

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Las autoridades ambientales y entidades de apoyo, elementos sustitutos de la biodiversidad y de los servicios
como las ONG y la academia, hacen ejercicios de selec- ecosistémicos. En dicha selección se recurrió al enfoque
ción de objetos sustitutos, los cuales reciben el nombre de de especies paisaje (Coppolillo, et al., 2004), en el cual se
objetos de conservación o valores objeto de conservación selecciona un conjunto de especies animales a las que se les
en algunos escenarios. Algunas veces, tácitamente la selec- puede determinar un rango de hogar y de necesidades de
ción se apega a conceptos como especie sombrilla (Branton dispersión individual (Baguette, et al., 2013) con base en
& Richardson, 2011; Fleishman, et al., 2000; Roberge & criterios de heterogeneidad y área mínima para satisfacer
Angelstam, 2004; Wilcox, 1984), especie focal (Lambeck, su requerimientos ecológicos, la vulnerabilidad local frente
1997) o especie piedra angular (keystone) (Caro & a las actividades humanas, la funcionalidad ecológica
O’Doherty, 1999). Sin embargo, en la mayoría de los casos (Sattler, et al., 2014) y el reconocimiento e interacción
la selección se hace bajo un criterio de rareza de la especie, con las poblaciones humanas (Coppolillo, et al., 2004).
es decir, aquellas con distribución restringida (endémicas) o Este tipo de selección de objetos sustitutos ecológicamente
bajas densidades, y en otros casos se limita únicamente a un justificada combina de manera ponderada las características
criterio de carisma, especies bandera (Sergio, et al., 2006; de las especies sombrilla, focal, piedra angular y bandera
Western, 1987) vulnerabilidad o, simplemente, a oportu- (Rasmussen, 2014).
nidades de gestión, confundiendo, muchas veces, especies
Materiales y métodos
indicadores con especies objetivo (Caro & O’Doherty,
1999; Feinsinger, 2001). En cualquier caso, la selección de Área de estudio. La Dirección Territorial Andes Occiden-
los sustitutos no responde a un criterio ecológico (Andelman tales de Colombia abarca un área de 15.844.104 hectáreas
& Fagan, 2000; Lindenmayer, et al., 2014; Sergio, et al., distribuidas en 188 ecosistemas que van desde zonas areno-
2008), no está justificada con referentes cuantitativos bien sas y ríos hasta bosques de páramo pluvial en orobiomas
definidos y, por ello, puede estar permeada por el sesgo de los diferenciados para cada vertiente de las cordilleras, zonas
participantes en el proceso (Jarro-Fajardo, 2011; Nekaris, nivales y afloramientos rocosos (Ríos-Franco & Valencia,
et al., 2015; Stevens, et al., 2011; Zambrano, 2010). 2014). Este paisaje conserva cerca de 6,67 millones de hec-
Estas debilidades metodológicas tienen consecuencias táreas (42 %) de bosques y áreas seminaturales, mientras que
que se reflejan en un gran número de elementos sustitutos los territorios agrícolas ocupan alrededor de 8,88 millones de
redundantes para un mismo paisaje, los cuales en muchos hectáreas (56 %). Aproximadamente 200.000 hectáreas son
casos no están ligados de manera directa a ninguna situación áreas húmedas y superficies de agua naturales y artificiales.
de manejo. Es así como los planificadores de la conserva- El uso del suelo está principalmente asociado a ganadería
ción se ven abocados recurrentemente a la formulación extensiva (pastos), cultivos de café, caña de azúcar y arroz,
de planes de manejo de especies en los que se repiten las y cerca de 600 centros urbanos que demandan los servicios
estrategias de intervención para un mismo paisaje sin ecosistémicos de las áreas de conservación (Figura 1).
objetivos espacialmente explícitos (Angelstam, et al., 2003; Selección de los valores objeto de conservación (VOC).
Sanderson, et al., 2002), lo que resulta en planes de manejo Para la selección de los VOC de la Dirección Territorial se
muy generales cuya implementación no es efectiva y, si lo empleó el método de especies paisaje (Landscape Species
llega a ser, no contribuye a tener un sistema eficazmente Approach), con la aproximación conceptual propuesto en
gestionado (Rondinini, et al., 2011). los boletines 2, 3 y 4 del Living Landscapes Program de
La consecuencia de esta selección sin justificación la Wildlife Conservation Society (WCS) (2001-2002) y
ecológica es la dificultad para determinar los indicadores el manual técnico 5 de este mismo programa (Stringberg,
adecuados y establecer planes de monitoreo ajustados a la 2007). El objetivo inicial del método es elegir un conjunto
planificación de las acciones de manejo (Rondinini, et al., limitado de especies animales a cuyos individuos se les
2011). En este sentido, atendiendo a la concepción genera- pueden definir valores de dispersión y que puedan representar
lizada de que la investigación transversal es necesaria para todos los objetivos de conservación definidos para el paisaje
la conservación, se hacen ingentes esfuerzos para la reco- y sirvan para monitorizar la efectividad de las estrategias
lección de datos que no se enfocan en resolver los vacíos implementadas (Elzinga, et al., 2001; Sergio, et al., 2008).
de información requerida para el manejo, con lo cual los La selección de los valores objeto de conservación, o especies
recursos disponibles se desperdician (Caro & O’Doherty, paisaje, se basó en cinco criterios: 1) el área, es decir, las
1999; Sergio, et al., 2008). especies que necesiten mayor cantidad de área para sostener
En este contexto, y en aras de revisar y actualizar la poblaciones viables; 2) la heterogeneidad, o sea las especies
planificación para la conservación de su territorio de acción, que requieren más tipos de cobertura vegetal, o asociaciones
el equipo del Subsistema de Áreas Protegidas de los Andes vegetales naturales y zonas de manejo (diferentes tipos
Occidentales (SAO) llevó a cabo el proceso de selección de de aproximación para el manejo, por ejemplo, la de
valores objeto de conservación en la perspectiva de resol- las jurisdicciones administrativas), para satisfacer sus
ver los aspectos metodológicos deficientes para así hacer requerimientos ecológicos; 3) la vulnerabilidad, es decir,
una selección mínima y complementaria (no redundante) de las especies que hoy sufren el impacto, o pueden sufrirlo

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Figura 1. Subsistema de los Andes Occidentales, Colombia

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en el futuro, de las actividades humanas en términos de la & Valencia, 2014), la cual relaciona 188 tipos diferentes de
gravedad, la reversibilidad y la proporción del área afectada; ecosistemas, se escogieron 19 de ellos (Tabla 1), los cuales
4) la funcionalidad ecológica, o sea, las especies que cum- resultaron de unir aquellos que representaban un mismo tipo
plen más funciones dentro del ecosistema (polinización, de cobertura y piso bioclimático, ya que no se consideró que
degradación de materia orgánica, depredación, exclusión una mayor diferenciación generara un efecto en términos de
competitiva, etc.), y 5) la importancia socioeconómica, representatividad para alguna de las especies candidatas. Por
referida a las especies que, en términos culturales o eco- ejemplo, los bosques de páramo en la clasificación original
nómicos, tengan mayor significación positiva o negativa y se dividían en pluviales, muy húmedos, húmedos o secos
puedan, además, ser especies bandera o carismáticas. Las y, además, por cordilleras (3) y por vertientes (2), lo que
especies seleccionadas fueron aquellas que cumplieron de resultaba en hasta 24 tipos diferentes de ecosistemas para
manera más ajustada con estos criterios. cada tipo de bosque y piso bioclimático.
En este sentido, fue necesario contar con los paráme- Para cada uno de los 19 tipos de ecosistema, se deter-
tros y los criterios de selección. Los primeros recogen la minó su área de ocupación en el paisaje y se especificó el
información acerca del paisaje en el cual se va a hacer la valor de nivel de uso necesario para considerarlo como valor
selección de los valores objeto de conservación. En este objeto de conservación (Tabla 1). En cuanto a los tipos de
caso, se referían al número de ecosistemas, biomas o tipos “hábitat”, se consideró que debían incluirse cuando el nivel
de asociaciones vegetales del paisaje, los tipos de zonas de de uso fuera de dos o más en una escala de 0 a 3 (ver criterios
manejo, el área que ocupan, las actividades humanas que se de selección).
dan en el paisaje y que sean, o puedan llegar a convertirse Zonas de manejo. El Subsistema de los Andes Occiden-
en una amenaza para la conservación de la biodiversidad y tales (SAO) está divido en cuatro subsistemas temáticos:
los servicios ecosistémicos. Asimismo, se decidió recoger Sistema Departamental de Áreas Protegidas de Antioquía
la información sobre el rango de hogar con datos continuos. (SIDAP Antioquia), Sistema Regional de Áreas Protegidas
Además, se determinó cuantitativamente el momento en que del Eje Cafetero (SIRAP Eje Cafetero), SIRAP Macizo y
se podía considerar que un tipo de cobertura, ecosistema o SIDAP Nariño, los cuales tienen diferentes estructuras, tipos
zona de manejo estaba representado por una especie. Por
último, se relacionaron las funciones ecológicas presentes
Tabla 1. Ecosistemas naturales remanentes de la territorial Andes
en el paisaje y se definió a partir de qué valor se podía Occidentales y el nivel de representación del VOC para cada tipo
considerar que las representaba una especie. de hábitat según los criterios de selección.
En cuanto a los criterios de selección, se propuso
inicialmente una serie de especies candidatas que cum- No. Tipo de ecosistema Área (ha) Nivel de uso
plieran con uno o más de los criterios. Con base en los del VOC
criterios definidos tienden a seleccionarse especies de 1 Arbustal andino 1.117.774 2
vertebrados grandes, mamíferos, aves o reptiles producto de
2 Arbustal basal 539.727 2
la relación alométrica entre el tamaño corporal y el rango
de hogar (Sinclair, 2003; Wilcox, 1984), y la relación 3 Arbustal de páramo 184.129 2
positiva entre la masa y la distancia de dispersión (Jenkins, 4 Arbustal subandino 277.828 2
et al., 2007). Pensando en las oportunidades de gestión, 5 Bosque andino 1.142.389 2
las cuales son mayores para las especies que se encuentran 6 Bosque basal 1.827.898 2
en alguna categoría de vulnerabilidad, se utilizaron los 7 Bosque de páramo 371.586 2
libros rojos de mamíferos, aves y reptiles de Colombia
8 Bosque subandino 960.723 2
(Castaño-Mora, 2002; Renjifo, et al., 2002; Rodríguez-
Mahecha, et al., 2006). Además, después de un ejercicio 9 Cuerpo de agua andino 4.753 2
de intercambio de observaciones sobre la metodología con 10 Cuerpo de agua basal 24.120 2
el comité técnico del Subsistema, se adicionaron algunas 11 Cuerpo de agua de páramo 756 2
especies de peces, con lo que se determinaron, finalmente, 12 Cuerpo de agua subandino 73 2
28 especies candidatas entre mamíferos, aves y peces (Tabla
13 Herbazal andino 41.761 2
1S, https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/
downloadSuppFile/719/3526). 14 Herbazal basal 258.863 2
A continuación, se presenta el proceso de gestión de la 15 Herbazal de paramo 357.542 2
información seguido para cada uno de los cinco criterios y 16 Herbazal subandino 111.853 2
las especies candidatas. 17 Humedal basal 115.305 2
Criterio 1. Heterogeneidad. 18 Humedal subandino 707 2
Parámetros de selección. Tipos de “hábitat”. A partir
19 Ríos 80.445 2
de la clasificación de ecosistemas hecha para determinar las
prioridades de conservación en el Subsistema (Ríos-Franco VOC: valores objeto de conservación

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de gobernabilidad, posicionamiento y estados de avance en Tabla 2. Zonas de manejo de la Territorial Andes occidentales y el
términos de la consolidación e implementación de los planes nivel de representación del VOC para cada una según los criterios
de acción. Estos cuatro escenarios se concibieron como los de selección.
factores políticos y de gestión determinantes para abordar el No. Zonas de manejo Área (ha) Nivel de uso del VOC
manejo (planificación e implementación de las acciones y
el monitoreo) en los diferentes sectores del paisaje. En este 1 Antioquia 6.296.422 2
sentido, se estableció que los cuatro subsistemas temáticos 2 Eje cafetero 3.196.752 2
serían las zonas de manejo que debían quedar representadas 3 Macizo 4.810.684 2
por los valores objeto de conservación, se determinó su área
4 Nariño 3.507.300 2
y se les asignó el valor de nivel de uso con el cual quedarían
representados como valor objeto de conservación (Tabla 2). VOC: valores objeto de conservación
Asimismo, se consideró que las zonas de manejo quedaban
representadas cuando el nivel de uso fuera de 2 o más en
una escala de 0 a 3 (ver criterios de selección). ocupada por cada especie candidata, se ajustaron los polí-
Criterios de selección. Se determinó qué tanto repre- gonos de distribución de la Unión Internacional para
sentaba cada una de las especies candidatas a los 19 la Conservación de la Naturaleza (UICN), teniendo en
ecosistemas y a las cuatro zonas de manejo, así: “0= La cuenta el rango altitudinal de localización de la especie.
población de la especie candidata no usa este tipo de hábitat Por ejemplo, para el mono aullador rojo, el polígono de
o zona de manejo. Esta especie, o nunca ha sido vista allí, la UICN se extiende desde el borde oriental de la región
o solo se la ha visto de manera ocasional (por ejemplo, un Pacífico hasta la Amazonia brasilera, incluidas las partes
animal explorando este terreno). 1= La población de la más altas de las cordilleras Central y Oriental (>5.000 m).
especie candidata usa este tipo de hábitat o zona de manejo. La presencia del mono aullador se ha confirmado solo hasta
Sin embargo, dada la abundancia y persistencia de esta espe- los 3.200 msnm (Hernández-Camacho & Cooper, 1976),
cie, es muy poco probable que sufra un fuerte impacto si se por lo tanto, el área por encima de dicha altitud se sustrajo
produce una disminución en la extensión, calidad o acceso del polígono. Posteriormente se calculó la proporción de la
al hábitat o zona de manejo. La especie puede compensar Dirección Territorial Andes Occidentales con respecto al
fácilmente esas reducciones haciendo uso de otros hábitats área de distribución de la especie. La gestión de la infor-
o zonas. 2= La población de la especie candidata es alta- mación se llevó a cabo en el laboratorio de Sistemas de
mente dependiente de este tipo de hábitat o zona de manejo, Información Geográfica de la Dirección Territorial Andes
aunque no requiere de él para su persistencia. Una reducción Occidentales de Parques Nacionales Naturales de Colombia
en la extensión, calidad o acceso a este hábitat o zona de con el programa ArcGis 9.2.
manejo tendrá impactos significativos sobre la abundancia Criterio 3. Vulnerabilidad
y la distribución de la especie candidata en el paisaje; sin Parámetros de selección. Para definir la vulnerabilidad
embargo, la perdida de este muy probablemente no causará de cada especie de paisaje, se tuvieron en cuenta las activi-
su extinción local. Este valor puede considerarse como una dades humanas que se hubieran convertido o pudieran llegar
selección apropiada si las observaciones de una especie a convertirse en una amenaza para la conservación de la
indican que pasa una cantidad considerable de tiempo en biodiversidad o los servicios ecosistémicos. Queda implí-
el hábitat o zona de manejo, aunque no quede claro si es cito que no toda actividad humana es necesariamente una
que técnicamente “requiere” de este. 3= La población de amenaza, ya que ello depende de la gravedad, la proporción
una especie candidata requiere este tipo de hábitat o zona del área afectada y la resiliencia del sistema (especie,
de manejo para cumplir con su ciclo de vida. Si el hábitat o comunidad, etc.). Se definieron 15 actividades humanas:
zona de manejo es destruido, la especie se extinguirá local- tala para cultivos y ganadería, quema, extracción de madera,
mente.” (Stringberg, 2007). y flora no maderable, cacería por conflicto, consumo y
Criterio 2. Área comercio, introducción de especies animales y vegetales,
Parámetros de selección. Se definió que el rango de minería, construcción de vías y represas, disposición de
hogar se registraría con valores continuos. residuos en áreas de conservación y ecoturismo. Asimismo,
Criterios de selección. Además de la estimación del para cada actividad humana se determinó la urgencia y la
rango de hogar para cada especie, se tuvo en cuenta si había probabilidad de que ocurriera. “La urgencia define cuán
distancias de dispersión largas (> a 10 km), si la conectivi- pronto ocurrirá una actividad humana en particular: 0= Si
dad (calificados como “SI” o “No”) y la proporción de ocurre no lo hará en los próximos 10 años. 1= Si ocurre,
área ocupada por la especie en el paisaje eran importantes. podría ser en los próximos 3 a 10 años. 2= Si ocurre, podría
Para incluir la estimación del rango de hogar se revisaron ser en los próximos 1 a 3 años. 3= La amenaza ya está
publicaciones que documentaran estudios para cada especie ocurriendo y se debe actuar de inmediato. La probabilidad
y se consultaron expertos de los diferentes grupos (Tabla de que la actividad ocurra es el grado de incertidumbre aso-
1S). Para determinar la proporción de área del paisaje ciado con una actividad humana particular y se determina

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con un valor entre 0 y 1 (por ejemplo, si se piensa que hay mayor orden, degradación de materia orgánica, depredación
un 25 % de probabilidad de que se construya una represa, y dispersión de semillas, polinización, disturbio mecánico,
se debe ingresar 0,25).” (Stringberg, 2007). Todas las acti- control de plagas e interacción competitiva.
vidades humanas relacionadas en la Dirección Territorial Criterios de selección. Cada especie candidata se cali-
Andes Occidentales obtuvieron una calificación de 3 en ficó según la importancia de su papel con respecto a cada una
cuanto a la urgencia y de 1 en cuanto a la probabilidad de de las funciones ecológicas consideradas, así: “0= La especie
que ocurriera. no desempeña ningún papel en esa función. 1= Se piensa
Criterios de selección. La vulnerabilidad de cada que la especie tiene algún efecto o tiene poco efecto. 2= La
espe-cie candidata en el paisaje se determina a partir de su especie tiene un efecto claro. 3= La especie tiene un efecto
estatus de conservación (Castaño-Mora, 2002; Renjifo, et fuerte” (Stringberg, 2007) (Tabla 5S, https://www.raccefyn.
al., 2002; Rodríguez-Mahecha, et al., 2006) y un índice co/index.php/raccefyn/article/downloadSuppFile/719/3530).
de amenaza que integra la gravedad con que cada actividad Criterio 5. Importancia socioeconómica
humana afecta la especie, la capacidad de recuperación de Parámetros de selección. Para determinar la importan-
esta una vez se elimina esa actividad humana, y la propor- cia socioeconómica de cada especie candidata en el paisaje,
ción de área que ocupa la especie en el paisaje afectado se consideró si tenía un valor económico positivo o negativo
por dicha actividad humana. “La gravedad es la medida y un valor cultural positivo o negativo (una misma especie
en que una amenaza particular disminuye la abundancia en el paisaje puede tener valores culturares y económicos
y la distribución local de la especie, así: 0= Ninguna o tanto positivos como negativos). Además, se consideró su
positiva. 1= Poca, es decir, un efecto medible, aunque potencial como especie emblemática o bandera.
pequeño sobre la densidad o la distribución. 2= Alguna, Criterios de selección. Cada especie fue calificada
por su efecto sustancial sobre la densidad o la distribución, según las cinco opciones, así: “0= Especie sin significación.
aunque la erradicación local es poco probable. 3= Seria, 1= Especie con alguna significación. 2= Especie con gran
ya que la erradicación local es probable.” (Stringberg, significación.” (Stringberg, 2007) (Tabla 3).
2007). El tiempo de recuperación se refiere a “cuán rápido Posteriormente se calcularon los puntajes originales
la población puede recuperarse de los impactos de una y normalizados para cada criterio y el puntaje agregado
amenaza particular (que está ocurriendo o puede ocurrir) para cada especie (para los detalles de las ecuaciones, ver
si es que esta es eliminada. El tiempo de recuperación se el Manual técnico 5 del Living Landscapes Program de
define seleccionando uno de los siguientes valores: 0= Stringberg, 2007) (Tabla 6S, https://www.raccefyn.co/
Inmediato o en menos de 1 año. 1= Recuperación entre 1 index.php/raccefyn/article/downloadSuppFile/719/3531).
y 10 años. 2= Recuperación entre 10 y 100 años. 3= La Análisis de datos. Antes de iniciar la selección de los
recuperación puede tomar más de 100 años o simplemente valores objeto de conservación, se definieron los siguientes
puede que no ocurra. La proporción de área afectada es la parámetros: el margen de error para seleccionar especies
proporción estimada de la distribución local de la especie con puntajes agregados similares; el valor de corte para
(en el paisaje) que es afectada por una amenaza particular, definir cuándo una amenaza individual estaba representada
así: 0= La distribución local no se ve afectada. 1= Menos por una especie dentro del conjunto final del valor objeto
del 10 % de la distribución local se ve afectada. 2= 10 a 25 de conservación, y el valor mínimo requerido del estatus
% de la distribución local se ve afectada. 3= 25 a 50 % de de conservación. El margen de error y el valor de corte
la distribución local se ve afectada. 4= Más de la mitad de para que una amenaza quedara representada fueron de
la distribución local se ve afectada.” (Stringberg, 2007). 5 % y 0,5, respectivamente. Además, dado que todas las
Para determinar la proporción del área afectada por especies candidatas estaban clasificadas bajo algún criterio
cada actividad humana y cada especie candidata, se usó de amenaza, todas se incluyeron en la categoría de estatus
la metodología de CORINE Land Cover adaptada para de conservación.
Colombia, escala 1: 100.000 (Ideam, 2010), recurriendo En el proceso de selección final de los valores objeto
a la función “Clip” de la Shape Management Tool del Arc de conservación participaron los comités técnicos de
Gis 9,2. Todas las especies candidatas se calificaron según los subsistemas y se usó el programa Landscape species
todas las actividades humanas y los tres criterios (Tablas 2.0 como herramienta de apoyo para los cálculos y las
2S, https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/ diferentes iteraciones. En cuanto a la selección de los
downloadSuppFile/719/3527, 3S, https://www.raccefyn. valores objeto de conservación del subsistema, se escogió
co/index.php/raccefyn/article/downloadSuppFile/719/3528 la especie con el mayor puntaje agregado. Al escoger la
y 4S, https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/ primera especie se extrajeron los tipos de “hábitat”, las
downloadSuppFile/719/3529). zonas de manejo, las actividades humanas y las funciones
Criterio 4. Funcionalidad ecológicas que representaba.
Parámetros de selección. Se relacionaron 10 funciones A continuación, se escogió la especie con el puntaje
ecológicas que dan lugar en el paisaje de la territorial Andes agregado más alto que representara nuevos tipos de
Occidentales: herbívora, depredación de primer, segundo y hábitat, zonas de manejo, actividades humanas o funciones

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Tabla 3. Calificación de la importancia socioeconómica de cada especie candidata

Nombre común Potencial especie bandera Valor cultural local Valor económico
Positivo Negativo Positivo Negativo
Mono aullador rojo 2 1 0 1 0
Pato colorado 1 1 1 1 1
Mono araña negro 2 2 0 2 0
Mono araña café 2 1 0 1 0
Lorito cadillero 1 0 0 0 0
Tangara multicolor 1 1 0 0 0
Paujil de pico azul 2 2 0 2 0
Guagua loba 2 2 0 2 0
Cacique candela 1 0 0 0 0
Mono churuco 2 2 0 2 0
Perico paramuno 2 1 0 0 0
Nutria 2 0 1 2 2
Loro orejiamarillo 2 1 0 1 0
Águila crestada 2 0 2 0 2
Jaguar 2 1 1 0 2
Pava caucana 2 1 0 2 0
Zambullidor plateado 1 0 0 0 0
Puma 2 0 0 0 2
Danta centroamericana 2 2 0 2 0
Danta común 2 2 0 2 0
Danta de páramo 2 2 0 2 0
Oso de anteojos 2 0 2 0 2
Cóndor 2 2 2 0 0
Sabaleta 0 0 0 2 0
Mojarra negra 0 0 0 2 0
Bagre blanco 0 0 0 2 0
Mico tití gris 2 0 0 0 2
Manatí 2 2 0 2 0

ecológicas. Una especie puede tener un puntaje agregado el primero en todos los resultados. La danta de páramo y
muy alto, pero si no representa nuevos elementos con rela- el jaguar se seleccionaron en tres de los cuatro ejercicios.
ción a una especie previamente seleccionada, no se la tiene Además, el mono churuco se seleccionó en dos análisis, en
en cuenta como valor objeto de conservación para evitar la tanto que la nutria y la guagua loba se seleccionaron cada
redundancia de los esfuerzos de conservación en el paisaje. uno en una de las iteraciones (Tabla 4).
Cuando varias especies presentaron un valor agregado
Discusión
que no se diferenciaba significativamente en cuanto al mar-
gen de error predefinido, se evaluó cuál especie presentaba El oso andino depende principalmente de los bosques
mayores oportunidades de gestión y esta se seleccionaba. altoandinos y de páramo. Está presente en los cuatro sub-
sistemas temáticos, lo que no lo hace dependiente exclu-
Resultados sivamente de uno de ellos (Tabla 5), y está asociado a 12
En cuatro ejercicios iterativos llevados a cabo por el de las 15 actividades humanas que podrían traducirse en
equipo técnico de la Dirección Territorial Andes Occi- amenazas directas para la biodiversidad en este paisaje,
dentales (DTAO) y en algunos subsistemas temáticos se siendo particularmente significativo el efecto de la cacería
seleccionaron como valores objeto de conservación el por conflicto (Tabla 7S, https://www.raccefyn.co/index.php/
oso, el puma, el pato colorado y el manatí, siendo el oso raccefyn/article/downloadSuppFile/719/3532).

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Tabla 4. Especies Valor Objeto de Conservación (VOC) seleccionadas para la Territorial Andes Occidentales.

Orden Asesores en Biología de la Equipo técnico de Comité técnico de Comité técnico de


conservación de SINAP y DTAO DTAO SIRAP Macizo SIRAP Eje Cafetero
1 Oso andino Oso andino Oso andino Oso andino
2 Puma Jaguar Puma Puma
3 Pato colorado Pato colorado Danta de páramo Danta de páramo
4 Danta de páramo Mono churuco Pato colorado Jaguar
5 Jaguar Manatí Nutria Pato colorado
6 Mono churuco Puma Manatí Guagua loba
7 Manatí     Manatí
Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SINAP)
Sistema Regional de Áreas Protegidas (SIRAP)
Dirección Territorial Andes Occidentales (DTAO)

Tabla 5. Representación de las zonas de manejo (subsistemas temáticos) para los valores objeto de conservación del Subsistema Andes
Occidentales

VOC Antioquia Eje cafetero Macizo Nariño


Pato colorado 0 3 3 3
Guagua loba 2 2 2 1
Mono churuco 3 0 3 0
Nutria 2 2 2 2
Jaguar 3 1 1 2
Puma 2 2 2 2
Danta de páramo 1 2 2 2
Oso de anteojos 2 2 2 2
Manatí 3 0 0 0
VOC: valores objeto de conservación

El puma es la especie con mayor representación de eco- La danta de páramo representa casi todos los ecosiste-
sistemas dentro del subsistema (14/19) (Tabla 5), lo cual está mas del bosque altoandino hacia arriba, incluidos los cuer-
asociado con su amplia distribución altitudinal. Se distribuye pos de agua. Depende en buena parte de la efectiva gestión
en los cuatro subsistemas temáticos (Tabla 5) y es vulnerable en todos los subsistemas, aunque en menor proporción del
a 11 de las 15 actividades humanas relacionadas (Tabla 7S), SIDAP Antioquia. La especie está afectada particularmente
entre las cuales se destaca la cacería para consumo de espe- por la cacería por conflicto, asociada probablemente con el
cies que hacen parte de su dieta, lo cual degrada su hábitat. cultivo de papa, y a la cacería para consumo.
El pato colorado representa los cuerpos de agua andi- El jaguar está asociado con ocho de los diez ecosistemas
nos y de páramo, no el SIDAP Antioquia, y está asociado por debajo de los sistemas subandinos, pero principalmente
principalmente a la introducción de especies animales, espe- con los bosques basales. Depende fundamentalmente de
cíficamente a la trucha arcoíris (Oncorhynchus mykiss) y a la efectiva gestión en el SIDAP Antioquia, y la actividad
otras actividades que generan la degradación de su hábitat, humana que más lo afecta directamente es la cacería por
incluida la minería. conflicto, además de la reducción o degradación de los
El manatí representa exclusivamente los ecosistemas bosques basales debido a la cacería para consumo de las
acuáticos basales únicamente en el SIDAP Antioquia, por lo especies que hacen parte de su dieta.
tanto, dentro del SAO depende exclusivamente de la efec- El mono churuco depende exclusivamente de los bos-
tiva gestión ambiental en ese subsistema. Esta especie se ha ques en zonas basales y subandinas, además de dos sub-
visto fuertemente afectada por la introducción de especies sistemas temáticos sin continuidad, el SIDAP Antioquia y
vegetales y la cacería por consumo. el SIRAP Macizo. La tala rasa para cultivos y pasturas y la

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quema son las actividades humanas que más lo afectan al ser pretende integrar los objetivos de manejo y articular las
una especie dependiente de doseles altos. El mono churuco actividades de cada estrategia.
también se ve afectado por la cacería para consumo. Es claro que el tamaño usual de las áreas protegidas no
La nutria depende de la asociación de bosques sub- alcanza para conservar poblaciones viables de la mayoría de
andinos y basales con los ríos y cuerpos de agua y está en estas especies (Noss, et al., 1996), y es en este sentido que
los cuatro subsistemas temáticos. Además de ser vulnera- se decidió consolidar el SINAP. Sin embargo, para definir
ble a las actividades que generan la degradación de su los objetivos de manejo en esta escala de paisaje se hace
hábitat, es la especie del paisaje más vulnerable a la cacería necesario determinar la disponibilidad actual de hábitat de
para comercio. estas especies, inicialmente siguiendo métodos basados en
Por último, la guagua loba depende exclusivamente de principios fundamentales y, posteriormente, validándolos
los bosques altoandinos, desde Antioquia hasta el Macizo, y con modelos estadísticos (Craighead & Cross, 2007), a
se ve afectada principalmente por la cacería para consumo partir de lo cual se definen sus necesidades de conectividad
y, además, por la reducción y la fragmentación de su hábitat. (Clark, 2004). La estructura ecológica principal de este
Cinco de los nueve valores objeto de conservación son paisaje emergería de la red ecológica conformada por las
grandes mamíferos. Los grandes mamíferos, principalmente áreas mínimas requeridas en cuanto a estructura y confi-
los grandes carnívoros, se han usado como sustitutos en guración para mantener poblaciones viables de las especies
diferentes categorías: como especie piedra angular (Sinclair, paisaje (Baguette, et al., 2013, Lambeck, 1997; Roberge
2003; Ucarli, 2011), bandera (Clark, 2004; Ucarli, 2011) & Angelstam, 2004).
o sombrilla (McKelvey, et al., 2000; Ucarli, 2011). No Esta aproximación asume que debido a sus carac-
obstante, su potencial como objeto sustituto depende del terísticas, estas especies son adecuadas como elementos
contexto asociado y qué tanto representa los objetivos de sustitutos de la biodiversidad. Sin embargo, es necesario
conservación y las situaciones de manejo (Sergio, et al., probar esta hipótesis verificando empíricamente la riqueza
2008, 2006). También se seleccionaron especies de otros y la abundancia en grupos indicadores (Sergio, et al., 2008).
niveles de la cadena alimenticia que permiten incrementar la Para el caso particular de los indicadores de abundancia
eficacia al combinar estrategias de conservación (Hanley, et ideales para el monitoreo de poblaciones animales, se pue-
al., 2005; Keuroghlian, et al., 2009). den incluir tamaños poblacionales, densidades o sustitutos
El oso andino se ha usado como objeto sustituto en según la proporción o cantidad de área usada u ocupada,
Ecuador desde la perspectiva de especie bandera. Sin asumiendo que a mayor abundancia mayor será el área usada
embargo, se reconoce que se hizo pensando en un público u ocupada por una especie en un territorio, y, por ende,
general y no en las comunidades locales, las cuales tenían su supervivencia, fecundidad y crecimiento. El indicador
interacciones económicas negativas con la especie como seleccionado depende de la capacidad de implementar las
resultado de la actividad depredadora de este úrsido contra metodologías disponibles para cada uno.
el ganado bovino (Clark, 2004). Tácitamente se lo reconoce Entre las metodologías disponibles que permiten tener
como una especie sombrilla y piedra angular que puede estimaciones más precisas, ya que permiten calcular la pro-
servir de herramienta efectiva de conservación, aunque su babilidad de detección y el área de muestreo real, se cuenta
eficacia debe comprobarse empíricamente (Sanderson, et con los modelos de ocupación (MacKenzie, et al., 2002), el
al., 2002). En general, los grandes felinos se han concebido muestreo por distancia (Buckland, et al., 2001), el método de
como especies piedra angulares o carismáticas (McKelvey, marca y recaptura (Nichols, 1992), así como un método que
et al., 2000) y el jaguar, por ejemplo, se ha propuesto como permite estimar densidades con cámaras trampa sin necesi-
especie paisaje para bosques atlánticos en Brasil (Cullen dad del reconocimiento individual (Rowcliffe, et al., 2008).
Jr, 2006). Por otra parte, diversas especies de nutrias se han Los modelos de ocupación estiman la proporción del
usado como objetos sustitutos y la nutria americana se ha área (o parches) ocupada o usada y pueden emplearse en
propuesto explícitamente como especie sombrilla para el áreas relativamente grandes, dados los recursos y la capa-
Neotrópico (Stevens, et al., 2011). cidad logística implícitas, y en organismos susceptibles
En Colombia y en los países vecinos existen programas de ser detectados con cualquier tipo de registro (directo o
o iniciativas de conservación del oso en diferentes escalas de siguiendo rastros). Por otro lado, el muestreo por distancias
paisaje (Arjona, et al., 2012, Boher, et al., 1994, Rodríguez, conviene en áreas moderadamente grandes y organismos
2001, Rodríguez, et al., 2003), de la danta de montaña con abundancias relativamente altas que sean detectables
(Lizcano, et al., 2004), de felinos, incluidos el jaguar y el por observación directa. No obstante, hay variaciones que
puma (Castaño-Uribe, et al., 2013) y de la guagua loba permiten recurrir al muestreo por distancias utilizando
(Saavedra-Rodríguez, et al., 2012), así como propuestas de rastros, siempre y cuando sea posible estimar la tasa de
gestión que incluyen los corredores para el jaguar, el oso y el producción y de desaparición del rastro.
manatí planeados por Corantioquia (González-Caro, et al., El método de marca y recaptura es aplicable en áreas
2014 ), y otros para el puma y el mono churuco están siendo relativamente pequeñas, con tamaños poblacionales modera-
contemplados por el SIDAP Antioquia, con los cuales se dos y organismos susceptibles de ser capturados, marcados,

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liberados y reconocidos durante todo el experimento. Esta pueden tener mayor o menor incidencia dependiendo de
metodología tiene como limitante que no estima el área de los requerimientos ecológicos de cada especie. Además, el
muestreo, la cual debe calcularse con base en las distancias conocimiento de los hábitats de dichos valores contribuye
de dispersión de algunos individuos, lo cual puede afectar la a una mejor planificación de la gestión del territorio y la
traducción del tamaño poblacional a densidades. conservación de las diferentes especies. Por ello, se pretende
Por último, la estimación de la densidad mediante ampliar su selección y conocimiento en todo el ámbito
cámaras trampa y sin necesidad de reconocimiento indi- andino para obtener información a una mayor escala.
vidual es una metodología aplicable a varios vertebrados
terrestres medianos y grandes; con ella pueden explorarse
Información suplementaria
áreas inferenciales variables, pero ello implica una gran
cantidad de cámaras o la capacidad de moverlas frecuen-
Tabla 1S. Especies candidatas definidas para el Subsistema Andes
temente para obtener los tamaños de muestra adecuados.
Occidentales. Vea la tabla 1S en: https://www.raccefyn.co/index.
Dado el tamaño de la DTAO y el hecho de que la php/raccefyn/article/downloadSuppFile/719/3526
mayoría de los valores objeto de conservación selecciona- Tabla 2S. Actividades humanas: calificación según la gravedad
dos eran organismos que se detectan con dificultad y cuya con que cada actividad humana afecta la especie candidata. 0=
abundancia es relativamente baja, se planteó un plan de ninguna o positiva, 1= poca-efecto medible aunque pequeño
monitoreo para los indicadores de abundancia siguiendo el sobre la densidad o la distribución, 2= alguna – efecto sustancial
método de Mackenzie (2002), el cual permite usar cualquier sobre la densidad o la distribución, aunque la erradicación local
tipo de registro (incluidos los tomados mediante técnicas de es poco probable, 3= la erradicación local es probable. Vea la
tabla 2S en: https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/
‘fototrampeo’). Además, se planteó implementar el método
downloadSuppFile/719/3527
de Rowcliffe (2008) para medir la densidad poblacional Tabla 3S. Actividades humanas: calificación según la capacidad de
y evaluar si se lograban estimaciones con la suficiente recuperación de la especie una vez removida la actividad humana.
precisión para poder detectar cambios en caso de haberlos 0= inmediato o en menos de 1 año, 1= Recuperación entre 1-10
(poder estadístico). años, 2= Recuperación entre 10-100 años y 3= Recuperación puede
En algunos casos las especies paisaje podrían no tomar más de 100 años o simplemente puede que no ocurra. Vea
cobijar algunas cuya distribución geográfica es restrin- la tabla 3S en: https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/
gida y cuyos requerimientos ecológicos son específicos, o downloadSuppFile/719/3528
Tabla 4S. Actividades humanas: proporción de área de paisaje
sobre las cuales hay amenazas particulares (Andelman &
que ocupa la especie afectada por la actividad humana. 0= La
Fagan, 2000; Fontaine, et al., 2007; Lindenmayer, et al., distribución local no es afectada, 1= < 10% de la distribución
2014). En este sentido, es necesario analizar cuáles de esos local es afectada, 2= 10% - 25% de la distribución local es
componentes de la biodiversidad podrían requerir acciones afectada, 3= 25% - 50% de la distribución local es afectada.
particulares, lo que complementaría la lista. Normalmente, 4 = Más de la mitad de la distribución local es afectada. Vea la
en estas adiciones se integran especies que necesitan estra- tabla 4S en: https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/
tegias de conservación basadas en el desplazamiento de downloadSuppFile/719/3529
organismos vivos (reintroducciones, refuerzos, suplementos Tabla 5S. Calificación de funciones ecológicas de las especies. 0=
La especie no desempeña ningún papel en esa función, 1=Se piensa
o introducciones) (UICN, 1998), pues sus poblaciones están
que la especie tiene algún efecto o tiene un efecto débil, 2= La
tan reducidas y aisladas que el garantizar únicamente el especie tiene un efecto claro y 3= La especie tiene un efecto fuerte.
mantenimiento o recuperación de su hábitat no garantiza la Vea la tabla 5S en: https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/
recuperación de las poblaciones. article/downloadSuppFile/719/3530
Por lo tanto, una vez determinada la disponibilidad de Tabla 6S. Puntajes agregados de importancia socioeconómica para
hábitat y las áreas con mayor probabilidad de conectividad, casa especie candidata. Vea la tabla 6S en: https://www.raccefyn.
se deberá consultar a los expertos de otros grupos, y a co/index.php/raccefyn/article/downloadSuppFile/719/3531
botánicos, herpetólogos, entomólogos, para evaluar cuáles Tabla 7S. Amenazas directas para los VOC seleccionados para el
organismos deben ser incluidos, con el fin de complementar Subsistema Andes Occidentales. Vea la tabla 7S en: https://www.
raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/downloadSuppFile/719/3532
los valores objeto de conservación.
Conclusiones
El presente estudio representa el primer aporte para la Agradecimientos
Dirección Territorial Andes Occidentales sobre la selección Al comité técnico del Subsistema Andes Occidentales
de valores objeto de conservación que pueden ser elementos y a los comités técnicos de los Subsistemas temáticos
sustitutos de la biodiversidad y los servicios ecosistémi- SIDAP Antioquia, SIRAP Eje Cafetero y SIRAP Macizo,
cos en el SAO. A partir de esta selección se hace nece- por respaldar esta iniciativa y permitir su continuidad.
sario analizar la distribución del hábitat actual y futuro de Al director y a todo el equipo técnico de la Dirección
dichos objetos de conservación teniendo en cuenta que está Territorial Andes Occidentales de Parques Nacionales
determinada por diferentes parámetros físicos y bióticos que Naturales de Colombia, por realimentar continuamente el

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Milena del Pilar Marrugo, por las sugerencias en la edición especies clave. Fundación Herencia Ambiental Caribe,
del documento y a Fernando Ayerbe Quiñones y otros ProCAT Colombia, The Sierra to Sea Institute. Santa
especialistas de los diferentes grupos, por la información Marta, Colombia.
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Contribución de los autores Sustainable Forestry. 18 (2-3): 223-236.
Coppolillo, P., Gómez, H., Maisels, F., Wallace, R. (2004).
Néstor Javier Roncancio recopiló y analizó la información Selection criteria for suites of landscape species as a basis
primaria y secundaria, y redactó y editó el documento final. for site-based conservation. Biological Conservation. 115
Laura Alejandra Vélez Vanegas contribuyó a la recopilación (3): 419-430.
de la información secundaria, la redacción y la edición del Craighead, F.L., Cross, B. (2007). Identifying Core Habitat
documento final. and Connectivity for Focal Species in the Interior
Cedar-Hemlock Forest of North America to Complete
Conflicto de intereses a Conservation Area Design. USDA Forest Service
Los autores del manuscrito declaran que no tienen conflicto Proceedings. 49: 1-16.
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