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Temas Estructura Socioeconomica de México

El documento presenta una introducción al curso de Estructura Socioeconómica de México. Explica que el curso analizará el desarrollo económico de México desde 1940 hasta la actualidad usando conceptos como estructura, superestructura, infraestructura, cambio estructural y coyuntural. También define términos clave como análisis socioeconómico, estructura económica y cambio social. Finalmente, introduce brevemente las ideas de Karl Marx sobre la estructura y superestructura de la sociedad.

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Temas Estructura Socioeconomica de México

El documento presenta una introducción al curso de Estructura Socioeconómica de México. Explica que el curso analizará el desarrollo económico de México desde 1940 hasta la actualidad usando conceptos como estructura, superestructura, infraestructura, cambio estructural y coyuntural. También define términos clave como análisis socioeconómico, estructura económica y cambio social. Finalmente, introduce brevemente las ideas de Karl Marx sobre la estructura y superestructura de la sociedad.

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Introducción de aprendizajes esperados en la materia Estructura Socioeconómica de

México
El propósito de la materia se fija en desarrollar en el estudiantado habilidades y actitudes
que favorezcan la reflexión y el análisis de la realidad socioeconómica, a través de la
revisión conceptual, teórica y metodológica del desarrollo económico y de las políticas
implementadas por el Estado Mexicano en el periodo 1940 a la actualidad, con el fin de que
actúe de manera comprometida y eficaz en su entorno socioeconómico. Analizaremos la
realidad socioeconómica de su comunidad, región, estado o país utilizando conceptos,
categorías y teorías que le permitan reflexionar sobre las diferencias y desigualdades de su
entorno favoreciendo su consciencia social. Se examinará reflexivamente el impacto de los
fenómenos económicos, tomando en cuenta la diversidad de contextos, su relación con el
cambio social y cómo inciden en la vida cotidiana de nuestra comunidad.
Conceptos básicos y categorías de análisis socioeconómicos.
Análisis socioeconómico
Se refiere al estudio de la combinación de los elementos sociales y económicos que
conforman una sociedad. En primer lugar, debemos tener clara la definición de economía,
siendo esta la disciplina que aborda las relaciones sociales desde cuatro procesos
fundamentales: producción, intercambio, distribución y consumo de bienes y servicios; los
primeros son objetos materiales susceptibles de compra y venta; y los segundos son
prestaciones que satisfacen necesidades. De manera general estamos hablando de la
forma en que una sociedad genera la riqueza y de cómo la distribuye entre sus habitantes.
Conceptos básicos
Estructura. - Es el conjunto de elementos que conforman la sociedad desde la perspectiva
de la economía, esto es, ubicamos cuáles son las partes que conforman y hacen posible la
actividad económica, cómo están organizadas, qué funciones cumplen y cómo hacen
posible cada una de ellas la actividad económica en su conjunto y bajo determinadas
condiciones propias a cada una de las economías nacionales. Según Carl Marx, la sociedad
cuenta con una estructura económica determinada por el modo de producción. A lo largo
de la historia la sociedad ha transcurrido por diversos modos de producción que van de lo
que Marx denominó comunismo primitivo, al esclavismo, feudalismo, socialismo y
capitalismo; cabe aclarar que no necesariamente todas las sociedades han cursado de
manera lineal por cada uno de los modos de producción y que cada uno de ellos le
corresponde una estructura económica particular.
Superestructura. - Conjunto de elementos e instituciones de la vida social que dan
sustento y legitiman las relaciones entre los individuos en una sociedad. Se materializa en
una sociedad a través de una estructura ideológica y una jurídico-política. Marx y Engel
postulan que para estudiar la sociedad no se debe partir de lo que los hombres dicen,
imaginan o piensan, sino de la forma en que producen los bienes materiales necesarios
para su vida.
Infraestructura. - Son obras que realiza el Gobierno, favoreciendo el crecimiento y la
productividad de las empresas. Se refiere al desarrollo carretero, ferroviario, portuario,
aeroportuario, de telecomunicaciones, de agua potable y saneamiento, etc. Dependerá de
las condiciones naturales y sus actividades económicas.
Cambio estructural. - Es aquél que afecta de manera abrupta la estructura del sistema
modifica en el largo plazo las relaciones sociales además de los mecanismos de interacción
entre quienes conforman la sociedad. En base a la teoría estructural funcionalista, los
cambios estructurales son inherentes a la sociedad y se presentan en forma estable y
gradual, ya que debe adaptarse para lograr un equilibrio.
Ejemplos: Reforma al artículo 27 Constitucional, nos habla sobre la tenencia de la tierra:
“La tierra y su producto es para quien lo trabaja”; artículo 123 Constitucional, jornada laboral
de 8 horas.; reformas energéticas, educativas, hacendarias. Etc.
Cambio coyuntural. - (Coyuntura es la combinación de factores y circunstancias en un
momento determinado). Es a corto plazo y está vinculado con factores pasajeros, donde se
desestabiliza la estructura social, económica o política.
Por ejemplo, inestabilidad económica, como son durante los procesos electorales en los
que hacen campañas diversas de programas sociales, que el mismo gobierno otorga con
la finalidad de lograr simpatizantes para el partido político en campaña; o campañas
emergentes, que se presentan durante las situaciones de vulnerabilidad en algunas
regiones del país, como desastres naturales, pobreza extrema, campañas de vacunación,
etc.
El Cambio social
El cambio social en toda cultura es acumulativo y, al tiempo, conservadora, lo que otorga
estabilidad y continuidad. La estabilidad y continuidad se da por las costumbres y los
hábitos, así como a través de la transmisión de valores y saberes de generación en
generación. Generación. Los cambios se dan desde dentro de la sociedad (innovaciones:
descubrimientos e inventos) y desde fuera (difusión o propagación coercitiva, o no), es una
alteración apreciable del sistema de organización social. También puede definirse como
“tránsito entre dos momentos de estabilidad y equilibrio". Incluye aspectos como el éxito o
fracaso de sistemas políticos y de fenómenos como la globalización y la democratización.
El cambio ocurre cuando una organización que ha gozado de armonía se desestabiliza y
deja de ser útil. Esto provoca una crisis, por la inestabilidad existente que trae como
consecuencia...una NUEVA ORDENACIÓN SOCIAL.
Estructura económica
Según Karl Marx, en todas las sociedades es posible distinguir dos secciones: la primera
es la estructura económica, que se encarga de la producción de bienes de consumo y
servicios. Por ende, es el modo o sistema de producción según el cual las sociedades se
organizan para producir bienes destinados al consumo, desde los básicos hasta los
superfluos. Un sistema económico puede tener modelos que influyen sobre el proceso
productivo sin modificarlo de manera radical, pues sus características fundamentales se
mantienen.
En la actualidad, el sistema económico de mayor difusión en el mundo es el capitalismo,
que ha adquirido esa condición debido al neoliberalismo, uno de sus modelos, que empezó
a aplicarse en México a finales de 1982.
En cuanto al sistema de producción, está constituido por las fuerzas productivas (el trabajo
y los medios de producción, como las maquinas) y las relaciones de producción como la
tierra, las fábricas y las empresas).
Superestructura. La superestructura, en cambio, es el conjunto de elementos de la vida
social que caracterizan a una sociedad, que son determinados por la estructura económica
y a su vez la legitiman. Aquí se incluyen las formas sociales de conciencia, como religión,
ciencia, filosofía, cultura; en suma, las instituciones políticas, religiosas, científicas,
culturales y jurídicas. De acuerdo con lo que el materialismo histórico propone, la
superestructura depende de las condiciones económicas en las que vive cada sociedad, es
decir, del sistema económico; por ello, se encuentra subordinada a los intereses de los
grupos que la han creado, de tal forma que regula y legitima las relaciones que existen en
la sociedad, pero la estructura económica es la que determina la superestructura de cada
periodo histórico.
Infraestructura Por otra parte, la infraestructura es el conjunto de obras, equipamientos,
instalaciones y servicios que se requieren para el desarrollo de la actividad productiva de
un país, entre ellos se encuentran las vías de comunicación (carreteras, puertos marítimos,
vías de ferrocarril, puentes, aeropuertos, teléfono, telégrafo), los servicios básicos
(suministro de energía eléctrica, agua potable, alcantarillado, drenaje), la urbanización
(calles pavimentadas o empedradas, alumbrado público, viviendas, escuelas, hospitales),
las presas y los sistemas de riego.
CARLOS MARX Y EL MARXISMO
Carlos Marx es uno de los pensadores más influyentes de la historia. Durante el siglo XX,
casi una tercera parte del mundo vivió según sus ideas. Su obra es principalmente una
crítica al capitalismo y se considera como la “Biblia” del obrero.
Carlos Marx vivió durante la Revolución industrial. Aunque no fue un obrero (fue un hombre
con educación universitaria), vivió en la pobreza: por sus ideas revolucionarias no le daban
trabajo y hasta lo corrieron de varios países. Como vivió en la miseria (3 de sus hijos
murieron por falta de medicinas y su esposa también falleció), entendió perfectamente las
condiciones que sufrió el proletariado durante la Revolución industrial: salarios de hambre,
condiciones insalubres, hacinamientos, jornadas de trabajo de 12 a 16 horas diarias, falta
de seguridad y de higiene en el trabajo, labor de menores de edad y de mujeres
embarazadas, ausencia de día de descanso semanal y de vacaciones, etc.
Por todo lo anterior, fue el primer investigador social en estudiar científicamente la pobreza
y la explotación (para buscar la forma de terminar con ellas). Marx se planteó las siguientes
preguntas: ¿por qué existe la pobreza? ¿Por qué existen las diferencias económicas entre
los seres humanos? ¿Por qué existe la explotación del hombre por el hombre? ¿Por qué
existen las clases sociales?
Según Marx, el origen de la explotación —y de la pobreza— está en la economía (recuerda
que la economía trata sobre todo lo relativo al dinero). Es en la economía donde se reparte
la riqueza, y donde se define quién es pobre y quién es rico. Por eso, según el marxismo,
la economía es la base de la sociedad.
TIPOS DE CAMBIO SOCIAL.
Antes de comenzar a estudiar lo que entendemos por cambio social y cuáles son los tipos
de cambio social que existen, es importante resaltar que la sociedad, tal como la
conocemos, está en constante proceso de transformación y ha atravesado distintas etapas.
Pero... ¿qué es una evolución social? Se entiende por evolución social al conjunto de
trasformaciones que conoce una sociedad durante largo tiempo, es decir, durante un lapso
que rebasa la vida de una o varias generaciones, por lo que los pequeños cambios se
esfuman, subsistiendo el efecto acumulativo de un gran número de cambios. Podemos
tomar un ejemplo de la física para una mejor comprensión, el proceso de congelamiento,
donde pequeños cambios en la temperatura del agua terminan por acumularse y crear un
estado diferente de la materia, o un nuevo orden. Esta misma idea es la que se encuentra
atrás de la evolución social: Pequeños cambios cuantitativos derivan en cambios
cualitativos. Retomando nuestro tema, se entiende por cambio social aquellas
transformaciones observables y verificables dentro de periodos breves, de manera que una
misma persona pueda, durante su vida o un corto tiempo de ella, seguir su desarrollo y
conocer su resultado.
Existen dos tipos de cambio social: Cambio coyuntural y cambio estructural.
Cambio coyuntural, también llamado de equilibrio, que consiste en buscar corregir la
situación de desequilibrio que enfrente alguna o algunas de las partes del sistema, pero sin
que ello implique grandes transformaciones en el sistema. También podemos entenderlo
como una reforma o ajustes al sistema, ya que las relaciones de producción no se
modifican, y los cambios sólo se presentan dentro del ámbito institucional, entendido éste
como la superestructura, y por ello se dice que no trastoca las relaciones sociales objetivas
o reales desde una perspectiva marxista.
Cambio estructural consiste en una modificación de la organización social en su totalidad,
se desprende de una transformación en sus relaciones sociales de producción. Los cambios
estructurales trastocan todas las formas de organizaciones sociales hasta ahora existentes,
y transforma todas las costumbres prevalecientes en la sociedad.
MODELOS ECONOMICOS DE MEXICO (1970-1982)
Aprendizaje Esperado: Utiliza de manera crítica los modelos económicos para analizar las
características presentes en su entorno promoviendo conductas constructivas en su
comunidad.
INTRODUCCION AL TEMA
Los actuales escenarios regionales, nacionales e internacionales se caracterizan por los
acelerados cambios en los ámbitos económico, social, cultural, científico y tecnológico. Ante
el problema de salud mundial generado por la aparición, presencia y permanencia del Covid
19, nunca imaginamos el gran impacto que este generaría en la economía global pero más
en nuestro país, todos fuimos testigos del encarecimiento de los productos básicos; el
hecho de no poder salir a trabajar afectó financieramente a muchas familias.
Los medios de comunicación informaron cómo los gobiernos de cada país incluido el
nuestro, tuvieron que reajustar el plan de desarrollo económico para beneficiar social,
política y económicamente a sus países. Jamás pasó por nuestra mente el alto efecto social
que este virus traería, millones de familias tuvimos que vivir la separación afectiva, de
empatía y acompañamiento familiar, bajo estrictas indicaciones de sana distancia. Sin
embargo, en nuestro país al igual que todo el mundo y su gente, no puede detenerse; por
el contrario, nos toca hacer la parte que nos corresponde para salir adelante.
Enmarcando está situación actual, en este segundo bloque de la asignatura de Estructura
Socioeconómica de México analizaremos varios aspectos de la política económica
mexicana de la segunda mitad del siglo XX hasta nuestros días. Podrás identificar muchas
de las particularidades históricas y socioeconómicas que sentaron bases de las
instituciones, políticas públicas y sociedad que en la actualidad nos definen y distinguen
como país en el concierto internacional.
El Estado benefactor y su proyecto modernizador nacionalista
Ya consolidada la estructura política, durante la década de los 40, el Estado diseña un
proyecto de crecimiento económico (modelo de sustitución de importaciones) que, revestido
de una imagen protectora de justicia social, tuvo como meta la industrialización basada en
la transferencia de recursos provenientes del campo (en particular, de la explotación del
trabajo campesino). El detalle consiste en que, aunque se trataba de una economía dirigida,
se dejó en manos de la iniciativa privada el desarrollo de las actividades productivas. Este
proyecto tuvo como base un "pacto social" entre los "factores de la producción". Ambos,
patrón y trabajador, aceptaron el "tutelaje del Estado": el primero porque era el principal
beneficiario (a través de todas las políticas que se instituyeron para estimular el crecimiento
de la industria), el segundo porque el Estado, vistiéndose de una imagen paternalista, se
autodenominó "protector del trabajador". El Estado, al mismo tiempo que adopta una
retórica populista (obrerista y agrarista), instrumentaba políticas de bienestar social,
fundaba toda una serie de instituciones que tenían como objeto proporcionar ciertos
servicios sociales y asistenciales a los trabajadores y creaba también las condiciones
favorables para que la burguesía, que hasta aquel entonces había sido débil y
numéricamente escasa, se desarrollará y fortaleciera: construyó la infraestructura necesaria
para la industria, hubo exención de impuestos, servicios subsidiados, mano de obra
controlada y barata, protecciones arancelarias. Desde aquel tiempo, se estableció entre los
dos sectores hegemónicos (burocracia y burguesía) una relación muy estrecha y, aunque
por momentos ha podido ocurrir que la segunda quisiera sacudirse de la tutela de la primera,
los conflictos surgidos entre ambas han sido más bien verbales que auténticos, ya que la
burguesía ha gozado de ventajas inmensas bajo el ala protectora del Estado. Esta relación
sigue siendo determinante, incluso en la actual reestructuración en la que la acción del
Estado se retrae en beneficio del laissez faire económico. El proyecto de gestión que la
burocracia presentó como "vía nacionalista hacia el desarrollo", prevaleció hasta 1982. A
nombre del crecimiento económico y del progreso, y a pesar de la retórica populista que
pretendía haber logrado el bienestar social, este proyecto produjo una sociedad
extremadamente desigual en la que, después de cierto auge en los años 60 (en 1960, el
ingreso No. Independencia (1810-1821) Revolución Mexicana (1910-1919) México actual
(hasta 1970) 1 2 3 43 ESTRUCTURA SOCIOECONÓMICA DE MÉXICO DGB/DCA/09-
2020 anual per cápita se había elevado a algo más de 300 dólares) ,10 la riqueza tendió a
concentrarse en una minoría cada vez más reducida.
Por otra parte, el proyecto de industrialización (sustitución de importaciones),
eminentemente proteccionista, no logró ir más allá de las primeras etapas; su implantación
resultó muy costosa, sus productos fueron de mala calidad y, a causa de los bajos ingresos
de las mayorías, no se consiguió crear un mercado interno amplio. Por lo demás, se
consolidó una burguesía con escaso espíritu de empresa, acostumbrada a las ganancias
fáciles y a depender de la protección del Estado. Este proyecto favoreció también el
surgimiento de una inmensa burocracia.1 Este modelo comenzó a manifestar sus primeros
síntomas de agotamiento a finales de la década de los 60, pero no se modificó sino hasta
mediados de la década de los 80.
Política de Sustitución de Importaciones
La decisión de México en cuanto a la liberalización de su comercio y, en consecuencia, su
participación en acuerdos comerciales con otras naciones, se explica por el agotamiento de
la política de sustitución de importaciones vigente desde la década de los cuarenta hasta
mediados de los setenta y que, en alguna medida, el éxito exportador petrolero logró
extender hasta 1981. El propósito de esta política, de acuerdo con Brugger, consistió en
desarrollar un mercado interno y evitar así una balanza de pagos deficitaria que limitara el
crecimiento del país. Para esto, se consideró que el fomento de la industria nacional debía
darse por medio de dos mecanismos: a) la protección de la industria mediante aranceles y
cuotas de importación, para evitar el incremento de la competencia mundial, según el
argumento de la industria naciente, y b) la generación de divisas suficientes para importar
bienes intermedios y de capital destinados a la producción industrial. El modelo de
sustitución de importaciones se puede dividir en tres etapas: la primera, de 1946 a 1956,
tuvo como principal objetivo la modernización del sector agrario; la segunda, de 1956 a
1970, buscó el aumento de la producción de bienes intermedios y de consumo duradero,
promovió la disminución de apoyos estatales y sus principales fuentes de divisas fueron la
inversión extranjera directa y el crédito externo; en la tercera etapa, entre 1970 y 1982, se
fomentaron las industrias petrolera y eléctrica, la creación de empresas con recursos
estatales y privados, y las exportaciones de petróleo fueron la fuente principal de divisas.
El modelo sustitutivo de importaciones surge en el sexenio de Lázaro Cárdenas, cuando se
experimentó un auge económico provocado –en gran medida– por la demanda
estadounidense y debido a la economía de guerra que esta nación mantenía. Esto permitió
el surgimiento de pequeños industriales, quienes unidos a los grupos fuertes habían
sorteado la época de la revolución, constituyeron la industria manufacturera nacional. Sin
embargo, los primeros fueron quienes se vieron fuertemente impulsados durante la
segunda guerra mundial, lo cual los llevó a conformar un nuevo grupo que, por medio de la
Cámara Nacional de la Industria de Transformación, estableció un programa de desarrollo
basado en la industrialización, vigente prácticamente hasta 1982. Los resultados de este
programa fueron notables: durante estos años, se observaron óptimas tasas de crecimiento
en rubros como el de la producción manufacturera, con 6.3% anual en promedio, y el
Revueltas, A. (1993) “Las reformas del Estado en México: del Estado benefactor al Estado
neoliberal Política y Cultura”, Universidad Autónoma Metropolitana Unidad Xochimilco
Distrito Federal, México. Núm. 3, invierno, 1993, pp. 215-229 44 ESTRUCTURA
SOCIOECONÓMICA DE MÉXICO DGB/DCA/09-2020 de la agricultura, que creció 3.4%;
en particular, sectores como la industria de la construcción y la eléctrica crecieron 8 y 7 por
ciento, respectivamente. Al mismo tiempo que se promueve de manera importante la
inversión privada, también hay un ingreso relevante de inversión extranjera directa –aunque
limitada a 49% de participación accionaria– y un impulso igualmente importante de la
inversión pública, estos son motivos que ayuda a explicar el rápido crecimiento del producto
interno bruto (PIB) y el proceso de acumulación. En las primeras décadas de la sustitución
de importaciones se buscó promover tanto la educación como el desarrollo de
infraestructura (lo cual provocó un aumento sostenido de la productividad y el surgimiento
de nuevas oportunidades de negocios), lo que a su vez estimuló la inversión privada. El
comportamiento tan cercano entre ambos tipos de inversión evidencia su carácter
complementario durante esta etapa. Ambas variables caen a partir de la década crítica de
los ochenta, pues las condiciones para la acumulación se derrumbaron a partir, de 1982.
MODELO DE DESARROLLO ESTABILIZADOR
A finales de la década de los cincuenta, se presentaron dificultades para continuar con el
mismo esquema de desarrollo económico, debido al aumento en la inflación, que de 1945
a 1955 tuvo una tasa promedio anual del 9.2%. Por otro lado, el déficit de la balanza
comercial se acentuó aceleradamente, la captación de divisas se desplomó en forma
considerable, ocasionando que el déficit fiscal aumentará, el que se pretendió superar a
partir del endeudamiento externo e interno. La acumulación de los rezagos productivos
generados por el casi nulo desarrollo del sector industrial de bienes durables y de capital, y
por las limitantes dadas por las restricciones a las importaciones, lo que contribuyó a la
búsqueda de un nuevo esquema que permitiera dar continuidad al desarrollo planeado.
Estos signos de debilitamiento de la economía nacional plantearon el rediseño de políticas
públicas que reorientaron el crecimiento económico que se había logrado, pero donde se
mantuvieron sin variación, fueron principalmente las políticas salarial y agropecuaria, en
tanto que la política comercial se iría ajustando en forma paulatina según el avance del
nuevo esquema. Se acentuó la política fiscal y monetaria, donde el sector público fue el
motor de la actividad económica.
Bajo este esquema, el nuevo modelo de desarrollo económico se le denominó: “modelo de
desarrollo estabilizador”. “Este período generalmente se conoce como “Desarrollo
Estabilizador”. Durante este período el PIB creció 6.7% anual, con una tasa de inflación del
3% anual en tanto que el tipo de cambio permaneció fijo. La inversión incrementó su
participación en el PIB de 14.8% en 1955 a 20% en 1970”.
El Estado proporcionaría las inversiones necesarias para establecer la infraestructura
fundamental que requería la industria, como ferrocarriles, electricidad, comunicaciones,
petróleo, siderurgia, la creación de plantas productoras de bienes de capital, etc.,
compartiendo el proceso de desarrollo del país. Esto se debió a que los particulares
requerían de enormes recursos para invertirlos en estos sectores de la economía, los cuales
eran indispensables para el desarrollo industrial. Esta participación del Estado fue
determinante, pues permitió, además, que amplios sectores de la población fueran
incorporados a los servicios de seguridad social en todo el país.
Para apoyar la inversión privada se instrumentaron esquemas que incentivaron a este
sector por medio del establecimiento de estímulos fiscales, subsidios, depreciación
acelerada de los activos 45 ESTRUCTURA SOCIOECONÓMICA DE MÉXICO
DGB/DCA/09-2020 fijos, lo que permitió la evasión fiscal que se realizaba de manera
selectiva, y fijó tasas impositivas preferenciales a los sectores de más altos ingresos.

La industria manufacturera creció en la década de los setenta a una tasa promedio anual
del 7.14%. Dicho crecimiento fue superior al de servicios, el cual fue del 6.7%, 4.7% el del
sector primario y 6.6% en total. Dicho crecimiento desencadenó una intensa sustitución de
importaciones, como la automotriz, equipo y maquinaria eléctrica, productos químicos y
hule. “Esto generó las condiciones ideales para el posterior crecimiento del sector
exportador, incrementando así los coeficientes de exportación de los sectores de bienes de
consumo durable y de capital, así como el desarrollo de la industria manufacturera en la
frontera norte. Incluso las empresas transnacionales tendrían una influencia decisiva en la
expansión de los sectores de punta, en particular en la industria automotriz, de maquinaria
no eléctrica, de implementos eléctricos y de productos químicos”.
Este esquema subsidiario al sector industrial, logró mantener el crecimiento deseado, en
detrimento del sector agropecuario, quien continuó deteriorando su desarrollo y
manteniendo una dependencia profunda de los precios de garantía, lo que desincentivo la
inversión en el sector. Solamente los grandes productores del norte del país lograron
beneficios, gracias a los subsidios y a los cambios tecnológicos que incorporaron en la
producción agrícola.
En cambio, los minifundios se convirtieron en una trampa, pues los bajos niveles de
productividad y la imposibilidad de obtener subsidios adecuados los hundió en una crisis
productiva. Los campesinos, pequeños productores, no gozaban de los beneficios de
seguridad social, puesto que eran productores independientes. Las grandes centrales
campesinas iniciaron un proceso de negociación para que se les incluyera en dicha
seguridad social. “Es en este periodo cuando se observa el crecimiento de la clase media,
pues los salarios reales se incrementaron a una tasa promedio anual de 4.5%. Incluso la
pobreza alimentaria cayó de 64.3% en 1956 a 24.3% en 1968”.
El gobierno buscó la recuperación de la confianza de los productores agrícolas privados al
dar certidumbre a los derechos a la propiedad, y al realizar las negociaciones agrarias por
medio de las centrales oficialistas como la CNC, pues se convirtieron en la extensión
administrativa reconocida por el Estado. “A los agricultores y también, en alguna medida,
los campesinos se les subsidio. Mucho más a los que disponían de las mejores tierras: de
riego y de buen temporal. Los precios a los que adquirían sus insumos (agua, semillas,
fertilizantes, almacenamiento, transporte) estaban subsidiados. Lo mismo sucedía con la
tasa de interés de los préstamos (de avío y refaccionario) que los bancos nacionales de
crédito agrícola otorgaban”.

En virtud de que el gasto público fue el eje del financiamiento del nuevo esquema de
desarrollo, se requirió de grandes recursos para tal tarea. Recursos que se obtuvieron, en
principio de las recaudaciones directas debidas a los impuestos, los ingresos por la renta
petrolera, la principal fuente de ingresos comerciales, y por el endeudamiento exterior e
interior. Otro mecanismo utilizado para obligar al sistema bancario privado a financiar el
creciente déficit público fue el de cajones de crédito y el encaje legal. “Los recursos del
encaje legal, que se depositaban en el Banco de México, además de regular la liquidez y
parcialmente financiar el gasto público, podrían ser utilizados para fomentar ciertas
actividades prioritarias (i.e. industria mediana y pequeña, la agricultura) a través de los
fondos de fomento. Los bancos podían cubrir parte del requisito del encaje legal, operando
créditos a través del sistema de fideicomisos de fomento que el gobierno federal estableció
en el Banco de México y en Nacional Financiera.”
Se otorgaron recursos financieros a través de la banca, por medio de fondos que
fomentaban las inversiones en actividades que se consideraban convenientes. Entre las
principales actividades, estuvieron la vivienda, industria, turismo y agricultura. El gobierno
ofreció un trato privilegiado otorgando estímulos a la banca y dándole garantías adicionales,
donde los trabajadores bancarios también fueron beneficiados con prestaciones superiores
al resto de los trabajadores de la industria. 46 ESTRUCTURA SOCIOECONÓMICA DE
MÉXICO DGB/DCA/09-2020
Un elemento importante que cabe destacar, es que durante este periodo no se presentaron
factores externos que alteraran el ritmo interno de la economía del país, y que, por otra
parte, los términos de intercambio no sufrieron fluctuaciones importantes. Un panorama de
considerable estabilidad monetaria contribuyó a complementar el panorama. Un aspecto
que cabe resaltar es que, durante la década de los sesenta, a pesar de la ineficiencia de
algunas empresas, estas siguieron siendo beneficiarias del proteccionismo, lo que creció
exponencialmente sus utilidades en detrimento de los consumidores y de la eficiencia
productiva. “La protección industrial es necesaria y conviene a los países en proceso de
desarrollo. La utilizaron en todo momento los países hoy desarrollados. Algunos de ellos la
siguen practicando. Lo que no conviene es tener una protección indefinida, sin reglas ni
tiempos establecidos para posteriormente liberarse de ella.
En el caso de México, en realidad se estaba protegiendo a muchas empresas extranjeras
que operaban en el país” Este escenario resultó muy atractivo para el capital exterior
siguiendo diferentes formas de incorporación a la economía nacional, ya sea estableciendo
inversión física nueva, incorporando su capital a empresas ya establecidas con buen
funcionamiento, y comprando completamente las empresas exitosas.

Dentro de este esquema de proteccionismo se exacerbó la implantación de mecanismos


que garantizaban las inversiones de los particulares, sobre todo, las empresas extranjeras.
“Esa industria apoyada, subsidiada, estimulada y protegida contra la competencia del
exterior contó, además y como si lo anterior no fuera suficiente, con la garantía de que. En
caso necesario, el gobierno intervendría para salvar a las empresas en dificultades
financieras.
Factores que incidieron en la crisis del modelo
Sin embargo, este panorama no era como se lo imaginaban los políticos y los primeros
exponentes, ya que la inversión no creció como se pretendía; aunado a que, un conjunto
de empresas extranjeras se había aprovechado de los beneficios del proteccionismo. La
recaudación fiscal dejaba mucho que desear, pues las grandes compañías disfrutaban de
los estímulos fiscales y no pagaban impuestos. La balanza comercial era
considerablemente deficitaria, pasó de 447.7 millones de dólares en 1960 a 1210.9 en 1970,
las exportaciones crecieron entre 1950 y 1960 en 49.7%, en tanto que las importaciones en
113.5%, y para la década de los sesentas el crecimiento fue de 75% y de 111%
respectivamente, el país pasó de ser un exportador neto a uno importador. El ingreso
salarial decrecía en forma considerable; el desempleo creció. Sin embargo, el subempleo
aumentó considerablemente debido principalmente a la crisis del agro, la que fomentó la
migración del campo a las ciudades. Los gastos de gobierno crecieron en forma
exponencial, la inversión pública creció en el sector industrial entre 1950 y 1970 cerca del
1300%, en tanto que en el sector agropecuario solamente lo hizo en el 660% y en el de
comunicaciones y transportes en 412% en dicho periodo, el presupuesto de egresos del
gobierno federal representó cerca del 80% el sector paraestatal, erogaciones adicionales y
la deuda pública. El crecimiento de las manufacturas fue insuficiente para lo que se
esperaba, tan solo en la década de los sesenta creció en 139%. “La manufactura de bienes
intermedios pesados, de consumo durable y el sector de bienes de capital se beneficiaron
de los altos precios de sus productos, de los bajos costos de sus insumos y de los bajos
precios de los bienes de capital importados.
El modelo de desarrollo estabilizador comenzaba a mostrar signos importantes de
debilitamiento, donde una concentración acentuada de la riqueza y un fuerte
empobrecimiento de amplios sectores de la población acompañaron el desenlace. Por una
parte, la transformación demográfica que se genera en el país, motivada por el desarrollo
industrial, donde el crecimiento de la población urbana hizo crecer las grandes ciudades,
como la Ciudad de México, con una enorme zona metropolitana, con extensas zonas
marginadas, y una zona industrial ubicada al norte de la periferia, así como el naciente
corredor industrial entre la ciudad de Toluca-Lerma-la Marquesa, la ciudad de Monterrey
con una amplia zona industrial, que generó también extensas zonas marginadas, la ciudad
de 47 ESTRUCTURA SOCIOECONÓMICA DE MÉXICO DGB/DCA/09-2020
Guadalajara, que al igual que las otras ciudades, contó con una zona industrial y amplias
zonas marginadas. Esta explosión demográfica trajo consecuencias: la población demandó
servicios urbanos, educación, trabajo y servicios de salud. La polarización social se hizo
más evidente, muchos empobrecidos, una numerosa clase media y una muy reducida clase
adinerada. El 10% de las familias poseía el 42% del ingreso, en tanto que el 40% de la
población de más bajos ingresos tenía menos del 11%.
En cuanto a educación la situación era bastante crítica, en 1970 la tasa de analfabetismo
medida en la población mayor a los seis años de edad era del 12%, el 35% de la población
mayor de seis años no tenía educación escolarizada, y el 22% de dicha población tenía
educación primaria. La eficiencia terminal de la primaria era de 75%.
En el campo la situación era verdaderamente precaria, ya que el 60% de la propiedad
privada total estaba en manos del 1% de los propietarios, en tanto que el 5% la poseían el
80% de los propietarios, dicha concentración extrema de la propiedad agrícola condujo a
las grandes migraciones hacia las ciudades. Los precios de los productos agrícolas se
mantuvieron bajos con el propósito de sostener los altos márgenes de ganancia en la
industria, estos se controlaron en el esquema de precios de garantía, lo que desincentivo
la inversión en el agro. La concentración de la propiedad agrícola, la ineficiencia productiva
de los pequeños productores y ejidatarios condujo a minar la actividad productiva, dejó de
ser un país generador esencial de productos agrícolas. “Se pensó, de manera esquemática,
que mientras mayor fuera el excedente social, mayor sería el ritmo de acumulación y, por
tanto, más amplias y más potentes serían las fuerzas productivas. Lo cierto fue que una
enorme proporción del excedente social no fue utilizado ni para impulsar la tasa de empleo
productivo ni para añadirla al acervo de la planta productiva, sino para mantener un alto
nivel de consumo dispendioso de una minoría de privilegiados usufructuarios del desarrollo.
La industria mexicana estaba esencialmente orientada a un mercado urbano interno, había
obtenido un exagerado proteccionismo manteniendo aranceles proteccionistas, control de
las importaciones y estímulos fiscales. “Esta situación junto con el congelamiento del precio
de los bienes y servicios públicos redujo el gasto social del sector público. Al tiempo que el
crecimiento poblacional generaba una creciente necesidad de programas de salud y
educación, lo que generó una vulnerabilidad fiscal, pues las finanzas dependían cada vez
más del endeudamiento externo.

Modelo de Desarrollo Compartido (1970 -1982) con inflación.


En los años 70’s el gobierno tenía que decidir como parte de la política económica, mantener el
control y la participación en las actividades económicas o liberalizar la economía. En el ámbito
internacional el comercio mundial se había expandido y la tendencia de los países era apostar por
construir economías “abiertas” aún, cuando se reconocía el papel regulador del Estado como
promotor del desarrollo. El propósito de que el eje de la inversión nacional lo ejerciera el sector
público, era que, con los ingresos de la explotación y producción de los yacimientos petroleros, se
financiara la inversión en infraestructura productiva, la creación de plantas productoras de bienes
de capital, y la ampliación de la cobertura de seguridad social a todo el país, bajo un esquema salarial
que permitiera su crecimiento real. Se optó por el modelo compartido que era una política
económica de corte populista, caracterizado por una participación subsidiaria del Estado para suplir
o fortalecer la inversión privada. El nivel de inversión del gobierno se mantuvo con un gasto público
deficitario, que fue de 2.5 por ciento del PIB en 1971 y del 14.1 en 1981. La deuda pasó de 6 mil
millones de dólares en 1971 a 20 mil millones de dólares a final del sexenio. Si bien es cierto, el gasto
público es un motor importante del crecimiento en nuestro país, estuvo vinculado al crecimiento de
la deuda interna y externa, así como los recursos derivados de la extracción y exportación del
petróleo. El descubrimiento en 1970 de yacimientos de petróleo, permitió financiar una parte
importante del gasto público que se orientó a la creación de infraestructura productiva, generación
de empresas productoras de bienes de capital. Por otro lado, la distribución del ingreso desigual,
permaneció casi intacto. La situación de la economía mexicana durante el periodo no permitió que
ésta creciera más rápido para generar más empleos y un incremento en el nivel de vida de la
población a través del PIB por habitante.
Para 1973 se da una aceleración en el crecimiento de la economía y se crean instituciones como el
INFONAVIT, para el financiamiento de vivienda y otros fideicomisos que incluían fondos para el
rescate de empresas. En un período de seis años, el país enfrentó tres devaluaciones del peso
mexicano. En 1976 después de 22 años, se devaluó de $12.50 a $20.50 por dólar. En febrero de 1982
pasó de 20.50 a 38 pesos. La última devaluación ocurrió en septiembre de 1982, cuando se devaluó
de 22 a 70 pesos por dólar, una cifra histórica que afectó seriamente las condiciones de vida de la
población. En ese año la tasa de crecimiento del PIB fue negativa, su crecimiento fue de apenas -0.5
por ciento. La inflación creció de manera acelerada al pasar del 5 por ciento en 1971 a 98.8 % en
1982. En el período 1970-1975, con una inflación promedio superior a la de EE. UU. Y con el peso
sobrevaluado, se estimulaban las importaciones y resultaba menos ventajosas las exportaciones
mexicanas. Esta situación pronto se reflejó en una balanza comercial poco favorable para nuestro
país. La caída de los salarios en 0.6 % promedio anual, se vio reflejado en una disminución del poder
adquisitivo. El saldo de la deuda pública con el exterior ascendió en ese año a 58,874.2 millones de
dólares. Al desplomarse la captación de divisas procedentes del petróleo, inmediatamente se
hicieron evidentes los desequilibrios estructurales de la economía junto con el déficit externo, el
fiscal, la reducción del ahorro interno, el excesivo endeudamiento externo e interno y la
acumulación de rezagos productivos. En conjunto, estos elementos condujeron a una caída de la
actividad económica y a la reducción del ingreso per cápita. Este desequilibrio provocó la
devaluación impactando negativamente sobre la deuda externa y repercutiendo en la confianza de
los agentes económicos. Estas fueron las bases de fugas de capital. El fin del ciclo de expansión
económica, apoyado en el auge petrolero, puso de manifiesto el agotamiento del modelo, que se
vio agudizado por la presencia de fenómenos de índole externo, con desajustes macroeconómicos
a niveles nunca antes vistos en el país, que llevó a revisar la estrategia macroeconómica. Es evidente
que la crisis de 1976 representó la primera gran manifestación de los problemas estructurales e
institucionales de la estructura productiva de la economía mexicana y de las contradicciones mismas
del patrón de crecimiento seguido desde la década de los cuarenta.

La situación social: crecimiento poblacional, urbanización, pobreza y desigualdad de


1940 – 1982
Un repaso de lo ya visto en otras secciones de este bloque nos lleva a señalar cómo la población
creció de 19 millones y medio a casi 67 millones de habitantes. De igual forma, cómo la población
rural equivalía al 65 por ciento en 1940 y para 1980, la población urbana era ya del 66 por ciento.
En este apartado, te pido pongas atención a los datos relacionados con la pobreza y desigualdad y
a los beneficios brindados por las estrategias económicas.

Periodo 1970 -1982.


La clase media que en 1970 era del 25 % y la clase rica, continuaron beneficiándose ahora con el
modelo compartido. Las bases se habían dado desde el estabilizador y ahora se daba continuidad a
los servicios que desde las instituciones se brindaba en términos de educación, salud, pensiones y/o
jubilaciones, acceso a la vivienda, infraestructura urbana, equipamiento de las ciudades, centros de
recreación y cultura, acceso a becas. No obstante el auge petrolero, en estos años previos y
posteriores a la crisis de 1976, el empleo comenzó a faltar, se acentuó la migración del campo a las
ciudades y a la Unión Americana, los salarios y el costo de la canasta básica, fueron en detrimento
de la clase trabajadora. Esta etapa fue vivida por la población, como de crisis y devaluaciones
continuas, que comenzaron a tener efectos nocivos en el modo de vida cotidiano. Una clase media
que veía cómo de manera rápida perdía poder adquisitivo y cada vez, le alcanzaba menos su salario,
que iba a pique cada año. La clase pobre fue la que más lo padeció y la llamada economía informal
creció a pasos agigantados al crecer el desempleo a cifras altas. Los pobres se hicieron más pobres
y la concentración de la riqueza se concentró en un grupo reducido. En el país, se mantenían las
desigualdades geográficas, por la actividad productiva y las diferencias notorias entre las ciudades
y el campo mexicano.

Fortalecimiento del sistema de partido único y movimientos sociales.


En esta sección, analizaremos los elementos del sistema de partido único de nuestro país, e hizo
que, durante más de 70 años, el PRI se mantuviera de forma ininterrumpida en el gobierno, sin que
otras opciones políticas pudieran competir en igualdad de circunstancias. La base de tal continuidad
fue una serie de alianzas y redes que permitieron su permanencia.
Las instituciones políticas en el período 1940 -1982.
Juan Felipe Leal (1974) y Jorge Carpizo coinciden en que el Estado mexicano estuvo conformado por
una peculiar combinación de tres elementos:
• Democracia representativa. Concibe al país como una república, compuesta por estados libres y
soberanos en todo lo que concierne a su régimen interior, unidos por un pacto federal. La
Constitución establece la igualdad de los hombres ante la ley, las garantías individuales, la soberanía
del pueblo mediante representantes electos por sufragio, la división de poderes (ejecutivo,
legislativo y judicial).
• Presidencialismo. Preeminencia presidencial: La Constitución de 1917, establece que el presidente
de México tiene el derecho de iniciar leyes y de emitir decretos, convirtiéndose en otro poder
legislativo. Tiene facultades de nombrar y remover a las autoridades judiciales. Provoca que los
poderes judicial y legislativo, queden disminuidos y estén supeditados a él. La soberanía de los
estados y municipios, están sujetos al presidente en turno. Analistas coinciden en el poder absoluto
del presidencialismo mexicano.
• El corporativismo. Los artículos 27 y 123 constitucionales otorgaron al presidente de la República
amplias facultades para legislar sobre las relaciones de propiedad y de trabajo, con lo que se volvió
el “Arbitro Supremo” del país, y dio paso a la conformación de toda una estructura corporativa. De
tal manera, que los conflictos obrero-patronales, estuvieron 56 ESTRUCTURA SOCIOECONÓMICA DE
MÉXICO DGB/DCA/09-2020 regulados por el Estado, quien a través de tribunales de Conciliación y
Arbitraje debía “conseguir el equilibrio de los diferentes factores de la producción, armonizando los
derechos del trabajo con los del capital”.
Surgieron así una variedad de organismos tripartitas, tales como Tribunales Laborales, o la Comisión
Nacional de Salarios Mínimos. Se trataba de organismos corporativos porque estaban organizados
por el Estado, del cual recibían su reconocimiento y reglas de operar, de manera directa y expresa,
por ramas específicas de actividad y de manera vertical. Los sindicatos, las organizaciones ejidales y
campesinas, las confederaciones de industriales o de comerciantes, los colegios de profesionales,
etc. estaban agrupados en este sistema corporativo donde la última palabra la tenía el gobierno y
el presidente y estaban afiliados de alguna manera al Partido Nacional Revolucionario, Partido de la
Revolución Mexicana y Partido Revolucionario Institucional, que era el mismo partido que fue
cambiando de nombre. Las agrupaciones que no estaban de acuerdo y querían ser independientes,
tuvieron muchos conflictos que derivaron en amplios movimientos sociales que más adelante se
describirán. Este esquema político se fue consolidando con base a un acuerdo básico y fue el soporte
de un largo periodo de relativa estabilidad económica, política y social.
Las instituciones políticas en el período 1970-1982.
Luis Echeverría asumió la presidencia, cuestionado en su mandato, ya que él era Secretario de
Gobernación durante el movimiento estudiantil del 68 e importantes sectores de la comunidad
universitaria no lo aceptaban. En un intento por disminuir este rechazo, se le asignó a la UNAM un
presupuesto que creció en un 1,688 por ciento y ofrecieron plazas en su la administración federal a
varios egresados de la UNAM. En ese periodo, había varios sectores de la sociedad ubicables en la
clase media, los sindicatos independientes, los movimientos campesinos y la guerrilla que
empujaban fuertemente a abrir caminos para crear alternativas a una sociedad altamente
controlada. Ante esa presión, a finales de 1971 se concretaron tres reformas a la Ley Electoral
consistentes en: 1) Aumentar del número de habitantes de los distritos electorales; 2) Reducción de
la edad para ser diputado (21 años) y senador (30 años); 3) Disminución del porcentaje de votación,
de 2.5 a 1.5, para que los partidos políticos conservarán su registro y obtuvieron diputaciones de
partido. En 1973 se realizaron las elecciones para diputados y los resultados no mostraron grandes
avances en la conformación plural del poder legislativo.
La Cámara de Diputados, por ejemplo, quedó de nuevo integrada por una mayoría aplastante del
PRI aunque con la presencia inicial de diputados de partido. Como reflejo de lo anterior, algunos
grupos optaron por la vía armada para tratar de cambiar la situación en el país.
Durante la presidencia de Luis Echeverría, hasta 1972 se prohibieron las manifestaciones públicas
de oposición, situación que violaba la Constitución. En contraste, el presidente Echeverría aceptó a
varias personas exiliados de España y América del Sur. En 1976, José López Portillo tomó posesión
como presidente y las directrices de su gobierno fueron: 1) Reforma Económica, 2) Reforma Política
y 3) Reforma Administrativa.
Por lo que toca a la Reforma Política, en 1977 se aprobó por el Congreso la Ley Federal de
Organizaciones Políticas y Procesos Electorales (LFOPPE), a partir de cambios en 17 artículos de la
Constitución. Se elevó a rango constitucional el reconocimiento de los partidos políticos como
entidades de interés público, se amplió el sistema de partidos y su participación en el Congreso.
Como parte de los cambios, se eliminó la figura de los diputados de partido y se introdujo el sistema
mixto de representación proporcional. Asimismo, se redujeron los requisitos para que los partidos
políticos obtuvieran su registro con dos categorías: definitivo y el condicionado. Además, se
reconoció la personalidad a las asociaciones políticas. Fue así que el Partido Demócrata Mexicano
(PDM), el Partido Comunista Mexicano (PCM) y el Partido Socialista de los Trabajadores (PST)
obtuvieron su registro condicionado y otras asociaciones políticas nacionales de izquierda pudieron
participar electoralmente en alianza con otro partido. En las elecciones para diputados de 1979, la
LI Legislatura de la Cámara de Diputados se perfiló en lo que según Efrén Arellano (2012) ha sido
considerada la primera legislatura plural, en la cual la oposición alcanzó 28% del total de los
diputados. En esta etapa, además, el número de partidos políticos con presencia en esta Cámara se
incrementó a siete en el LI Legislatura (1979-1982) y a ocho en la LII (1982-1985). Estas nuevas reglas
tuvieron un efecto político adicional: permitieron encauzar diversos grupos y activistas —con
influencia regional, sindical y universitaria— hacia la arena legislativa.
Movimientos Sociales.
En este apartado se hará una breve reseña de los principales movimientos sociales del periodo. Su
importancia radica en que te ayudarán a comprender su papel en la sociedad como promotores de
cambio. Varios estudiosos del tema, lo definen así: “Un movimiento social es un actor colectivo que
interviene en el proceso de cambio social” (Rudolph Haberle, 1951). “Los movimientos sociales son
iniciativas colectivas destinadas a realizar cambios en el orden social” (Lang y Lang, 1961).
Movimiento campesino Rubén Jaramillo, 1942. Inició con una huelga en el ingenio azucarero de
Zacatepec, debido a que los campesinos productores de caña vendían sus cosechas al ingenio y eran
mal pagadas y los obreros tenían bajos salarios, por lo que exigían mejoras. Jaramillo compitió dos
veces a gobernador y no se le reconoció el triunfo. Obtuvo dos amnistías y en 1962, fue asesinado
con su esposa e hijos, sin que se esclareciera este hecho.
“Caravana del hambre” del movimiento minero 1951. Se hizo una caminata desde Nueva Rosita,
Coahuila hasta la capital del país, con 5 mil mineros y sus familias, porque las dos empresas Mexican
Zinc y la Carbonífera de Sabinas del consorcio American Smelting and Refining Company (ASARCO),
no respetaron el contrato colectivo de trabajo y les impusieron un líder patronal. Los mineros
protestaron por el fraude, exigieron su aumento salarial y fueron despedidos. Nueva Rosita fue
sitiada por el ejército y se suspendieron las garantías individuales.
Movimiento Ferrocarrilero 1958-1959. Estalló la huelga por aumento salarial y para limpiar al
sindicato de dirigentes corruptos. Hubo paros escalonados en Ferrocarriles Nacionales. Los líderes
Demetrio Vallejo y Valentín Campa fueron detenidos y estuvieron 11 años en prisión. Nueve mil
ferrocarrileros fueron despedidos y muchos detenidos.
Asalto al cuartel de Madera, Chihuahua, 1965. Un grupo de maestros, campesinos y estudiantes
atacó el cuartel militar de Ciudad Madera, Chihuahua. Participaron el profesor Arturo Gámiz y el
doctor Pablo Gómez, que murieron junto con seis compañeros y otros seis militares. Los militares
pasearon los cuerpos muertos por el pueblo, como un escarmiento para todo el poblado. El Ejército
buscó por toda la región e hizo detenciones arbitrarias de campesinos y niños que fueron
torturados. La raíz del problema eran los latifundios, cacicazgos e injusticia.
Movimiento estudiantil de 1968. Participaron estudiantes de la UNAM, IPN y de la Universidad
Autónoma Chapingo. De julio a octubre, los estudiantes de la UNAM e IPN, plantearon demandas
de mejora en la educación y el país. El ejército invadió Ciudad Universitaria y varias escuelas e hizo
detenciones arbitrarias. El rector de la UNAM encabezó la marcha al haberse violado la autonomía
de la UNAM y dijo: “Se juegan en esta jornada no sólo los destinos de la Universidad y el Politécnico.
Continuaremos luchando por los estudiantes, contra la represión y por la libertad de la educación
en México”.
El 2 de octubre en el mitin, ocurrió la matanza de personas, muchos de ellos estudiantes, en la plaza
de las Tres Culturas. Los líderes del CNH fueron aprehendidos y llevados al Campo Militar No. 1.
Cientos de estudiantes y maestros fueron encarcelados en Lecumberri. A la fecha la cifra de muertos
y heridos es incierta.

Estos movimientos eran signos de que el modelo instrumentado ya no estaba Cumpliendo sus
objetivos, ya que incluso los sectores medios de la población urbana y no sólo la clase trabajadora
demandaban mejoría en su nivel de vida y a nivel político, exigían la ampliación de la vida
democrática, a través de su protesta ante los mecanismos de control social y en los espacios
laborales, a través de exigir la salida de líderes sindicales corruptos.
Movimiento estudiantil 1971. Fue la primera gran movilización estudiantil luego de la matanza del
2 de octubre de 1968 en Tlatelolco. El día de la marcha un grupo de paramilitares conocido como
los Halcones, atacaron a los estudiantes. Los halcones entraron al hospital Rubén Leñero y a la Cruz
Verde a agredir a los jóvenes hospitalizados. La matanza quedó impune y muchos años después,
Luis Echeverría fue llevado a juicio por su participación en los hechos del 68 y el 71. Al final fue
exonerado por falta de pruebas suficientes en su contra.
Trabajadores del Sindicato Único de Trabajadores del Instituto Nacional de Energía Nuclear 1972-
1976. Buscaban su autonomía. Emplazaron a huelga: 1) solución del conflicto mediante elecciones
democráticas; 2) la no intervención de la patronal en asuntos sindicales y 3) reinstalación de los
trabajadores despedidos. Próximo a terminar el plazo para estallar la huelga, el ejército invadió las
instalaciones de los trabajadores y de la CFE. La patronal decidió unilateralmente terminar el
contrato colectivo de trabajo y despedir a cientos de trabajadores.
Electricistas 1975 y 1976. La Tendencia Democrática de los electricistas, disputaron el control del
sindicato a la dirigencia oficialista por Fidel Velázquez y lograron entre 1975 y 1976 las
movilizaciones más grandes de muchas décadas por la autonomía sindical. El SUTERM y CTM,
llevaron a cabo un Congreso ilegítimo y expulsaron a la parte democrática. En 1976 los electricistas
fueron acordonados en el Monumento a la Revolución por soldados y policías. Se reprimió a la
Tendencia Democrática y se interrumpió la nacionalización y la unidad sindical.
Nuevo orden económico Internacional
El orden económico internacional que emergió de la posguerra y que estuvo vigente por
más de tres décadas entró en crisis a mediados de la década de 1970, sentando las bases
para el surgimiento de un nuevo orden económico sustentado en las premisas de carácter
neoliberal y en el proceso de globalización.
La implementación del nuevo arreglo institucional a escala mundial que tuvo lugar a finales
del siglo XX no logró resolver los graves problemas de desigualdad, pobreza y marginación
de los países y sectores menos desarrollados.
En la mayor parte de las naciones, el retiro del Estado significó la reducción de los
esquemas de asistencia social y la desarticulación de las industrias nacionales, las cuales
fueron paulatinamente desplazadas por el capital transnacional.
A lo largo de las siguientes páginas analizaremos de forma detallada como fue el proceso
de integración de México a este nuevo orden económico, cuáles fueron los principales
mecanismos que fueron la base para instrumentar la transición en nuestro país, y qué
implicaciones tuvo en términos sociales y económicos.
El llamado Nuevo Orden Económico Internacional es una expresión que se utiliza para
designar, a grandes rasgos, la reformulación o reconstrucción del sistema internacional
financiero, que incluye sus aspectos monetarios, crediticios, cambiarios y comerciales, los
cuales surgen a partir de ciertos acontecimientos políticos y económicos de escala regional
o global que van ocurriendo conforme evoluciona la economía. Al mismo tiempo, se formula
desde la correlación de fuerzas entre los Estados hegemónicos (Borja, 2012: 700).
Después de la Primera y la Segunda Guerra Mundial, el mapa geopolítico del planeta buscó
los intereses internacionales políticos, económicos y militares entre las naciones
vencedoras beneficiadas por la guerra. Existen tres principales características de esta
nueva correlación de fuerzas vencedoras (Green, 1975):
1. La bipolaridad norteamericana-soviética, que confronto durante cuatro décadas los
sistemas económicos capitalista y socialista en el marco de la denominada Guerra Fría.
2. El surgimiento de nuevos países independientes, principalmente en Asia y África, que se
incorporaron a un sistema internacional fuertemente estructurado y que, junto con otros
países subdesarrollados, conformaron un bloque estratégico para afrontar en condiciones
menos desfavorables la negociación con las naciones desarrolladas.
3. El imperativo de la cooperación económica internacional para el desarrollo de los países
menos adelantados, en particular aquellos afectados por la guerra y los recién constituidos
por la acción descolonizadora de las Naciones Unidas.

Uno de los principales legados del orden económico internacional emergido de la posguerra
fue la creación del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial (BM) —en un
principio Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF)- los cuales surgieron de
la Conferencia Monetaria y Financiera de Bretton Woods, convocada en julio de 1944 por
las Naciones Unidas. Como veremos más adelante, estas instituciones, diseñadas en un
principio para garantizar la estabilidad del sistema monetario internacional y ayudar a la
reconstrucción de Europa, desempeñaron un papel clave en la reestructuración económica
mundial y en el establecimiento del orden vigente hasta nuestros días.
Durante la década de 1970, el orden económico internacional emanado de la posguerra
comenzó a mostrar signos de fractura.
En 1971, la hegemonía económica y política de Estados Unidos sufrió un importante revés
al declarar la no convertibilidad del dólar en oro. En 1973, ocurre la denominada "primera
crisis del petróleo" a partir de la determinación de la Organización de Países Exportadores
de Petróleo (OPEP) de imponer un embargo a las naciones desarrolladas entre ellas
Estados Unidos, por su apoyo a Israel durante la guerra de Yom Kippur, situación que se
tradujo en un incremento de los precios internacionales del crudo y, por tanto, de las
materias primas.
En medio de una crisis financiera generalizada que afectó de manera particular a las
naciones industrializadas del primer mundo, la Asamblea General de las Naciones Unidas
aprueba, en 1974, la Declaración sobre el establecimiento de un Nuevo Orden Económico
Internacional. Dicho documento planteaba la urgencia de establecer un nuevo orden
basado en la equidad, la igualdad soberana, la interdependencia, el interés común y la
cooperación de todos los Estados, para reducir las brechas económicas y sociales entre los
países industrializados con economías independientes y los países periféricos o con
economías dependientes. La declaración de la ONU planteaba que el nuevo orden
económico internacional debía sustentarse en el pleno respeto de los siguientes principios.
a) La igualdad soberana de los Estados; la libre determinación de todos los pueblos; la
inadmisibilidad de la adquisición de territorios por la fuerza; la integridad territorial y la no
injerencia en los asuntos internos de otros Estados.
b) La más amplia cooperación entre todos los Estados miembros de la comunidad
internacional, basada en la equidad que permita eliminar las disparidades existentes en el
mundo y asegurar la prosperidad de todos.
c) La plena y efectiva participación, sobre una base de igualdad, de todos los países en la
solución de los problemas económicos mundiales, teniendo presente la necesidad de lograr
el desarrollo acelerado de las economías dependientes o en desarrollo, y prestando al
mismo tiempo particular atención a la adopción de medidas especiales en favor de los
países menos adelantados sin litoral e insulares; así como los más afectados por las crisis
económicas y los desastres naturales.
d) El derecho de cada país a adoptar el sistema económico y social que considere más
apropiado para su propio desarrollo, sin sufrir como consecuencia de ello ninguna
discriminación. e) La plena soberanía permanente de los Estados sobre sus recursos
naturales y todas sus actividades económicas. A fin de salvaguardar esos recursos todo
Estado tiene derecho a ejercer un control efectivo sobre ellos y su explotación, con medios
ajustados a su propia situación; incluso el derecho de nacionalización o transferencia de la
propiedad a sus nacionales, siendo este derecho una expresión de la plena soberanía
permanente del Estado. No se puede someter a ningún Estado a cualquier tipo de coerción
económica, política o de otra índole para impedir el libre y pleno ejercicio de este derecho
inalienable.
f) El derecho de todos los Estados, territorios y pueblos sometidos a la ocupación extranjera,
al dominio foránea o colonial o el apartheid, a la restitución de sus recursos naturales y a la
total indemnización por la explotación, el agotamiento y el deterioro de sus recursos
naturales y todos los demás recursos de esos Estados, territorios y pueblos.
g) La reglamentación y supervisión de las actividades de las empresas transnacionales
mediante la adopción de medidas en beneficio de la economía nacional de los países donde
esas empresas realizan sus actividades, sobre la base de la plena soberanía de esos
países.
h) El derecho de las economías dependientes y de los pueblos de territorios bajo
dominación colonial y racial, y ocupación extranjera, a lograr su liberación y recuperar el
control efectivo de sus recursos naturales y sus actividades económicas.
i) La prestación de asistencia a las economías dependientes y a los pueblos y territorios
sometidos a la dominación colonial y extranjera, la ocupación foránea, la discriminación
racial o el apartheid, o que son víctimas de medidas económicas, políticas o de cualquier
otro tipo encaminadas a aplicar coerción sobre ellos con el fin de conseguir que subordinen
el ejercicio de sus derechos soberanos y obtener de ellos ventajas de cualquier especie, y
se hallan sometidos al neocolonialismo en todas sus formas, y que han establecido o están
tratando de establecer un control efectivo sobre sus recursos naturales y actividades
económicas que han estado o siguen estando bajo control extranjero.
j) El establecimiento de relaciones justas y equitativas entre los precios de las materias
primas, los productos primarios, los bienes manufacturados y semi-manufacturados que
exportan los países en desarrollo y los precios de las materias primas, los productos
básicos, las manufacturas, los bienes de capital y el equipo que importen con el fin de lograr
un mejoramiento continuo en su insatisfactoria relación de intercambio y la expansión de la
economía mundial.
k) La prestación de asistencia activa a las economías en desarrollo por toda la comunidad
internacional, sin condiciones políticas ni militares.
l) La garantía de que uno de los principales objetivos del sistema monetario internacional
reforzado será promover el progreso de los países en desarrollo y asegurarles una corriente
suficiente de recursos reales.
m) El mejoramiento del carácter competitivo de los productos naturales que rivalizan con
los productos sustitutivos sintéticos.
n) El trato preferencial y sin reciprocidad a los países en desarrollo, siempre que sea
factible, en todas las esferas de la cooperación económica internacional cuando ello sea
posible.
o) La creación de condiciones favorables para la transferencia de recursos financieros a los
países en desarrollo o de economías dependientes.
p) La facilitación a los países en desarrollo del acceso a los adelantos de la ciencia y la
tecnología modernas, la promoción de la transmisión de tecnología y la creación de una
tecnología autóctona en la forma y las modalidades que convengan a su economía.
q) La necesidad de que todos los Estados pongan fin al despilfarro de los recursos
naturales, incluidos los productos alimenticios.
r) La necesidad de que los países en desarrollo consagren todos sus recursos a la causa
del desarrollo.
s) El refuerzo-mediante medidas individuales y colectivas, de la cooperación económica,
comercial, financiera y técnica mutua entre los países en desarrollo, principalmente en
forma preferencial.
t) La facilitación del papel que las asociaciones de productores pueden desempeñar, dentro
del marco de la cooperación internacional y en cumplimiento de sus objetivos, la prestación
de asistencia para promover el crecimiento sostenido de la economía mundial y la
aceleración del desarrollo de los países en desarrollo.
La idea de un nuevo orden económico internacional, en el que los países en desarrollo o
de economías dependientes tuvieran el mismo poder de decisión que de las naciones
desarrolladas, no prosperó. Antes bien, otros organismos, como el Grupo de los Siete (G-
7) y la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), que agrupaban a los
países desarrollados, cobraron mayor protagonismo, ampliando durante esos años sus
funciones e influencia.
Por otro lado, la crisis de la deuda que afrontaron los países en desarrollo durante la década
de 1980 limitó severamente su poder de negociación.
De la agenda planteada originalmente en la Declaración sobre el establecimiento de un
Nuevo Orden Económico Internacional, se retomaron sólo los aspectos relacionados con la
asistencia económica, comercial y financiera, y la promoción del crecimiento sostenido de
la economía mundial.
Como vimos previamente, a través de los organismos financieros, monetarios, crediticios y
comerciales nacidos en Bretton Woods (FMI y BM), se impuso a las naciones en desarrollo
un amplio programa de reformas económicas de carácter neoliberal, orientadas a reducir la
participación del Estado, eliminar los obstáculos al comercio internacional y liberar la
economía.
En este contexto, cobraron importancia los organismos promotores y reguladores del
comercio internacional, en particular la Organización Mundial del Comercio (OMC),
institución creada durante la década de 1990 con la intención de reducir los aranceles
aduaneros, abatir los obstáculos al comercio internacional y eliminar el trato discriminatorio
en las relaciones mercantiles.

La caída del muro de Berlín, a finales de la década de 1980, marcó el surgimiento de un


nuevo orden económico internacional acaudillado por Estados Unidos. Dicho orden cobró
una nueva dimensión a inicios del nuevo siglo con la promulgación de la nueva doctrina de
seguridad nacional formulada por el gobierno norteamericano a raíz de los atentados
terroristas del 11 de septiembre del 2001.
A partir de esa fecha, el enfoque del liderazgo a través de la cooperación multilateral fue
reemplazado por el unilateralismo, y las estrategias de contención y disuasión, que tan
buenos resultados ofrecieron durante la Guerra Fría y los años subsecuentes, fueron
descartadas a favor de la doctrina de la acción preventiva en el ejercicio de la legítima
defensa (Borja, 2012). Por otro lado, buena parte de la discusión global se trasladó de la
promoción de la globalización y la defensa de los intereses comerciales, a la lucha global
contra el terrorismo.
CONCLUSION MODELO NEOLIBERAL
El Modelo Neoliberal en el que vivimos actualmente (en México y en la mayor parte del mundo), se
ha aplicado desde 1982. Ha sido instrumentado tanto por gobiernos del Partido Revolucionario
Institucional (PRI), como del Partido Acción Nacional (PAN). Del PRI, por los presidentes Miguel de
la Madrid Hurtado, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León y Enrique Peña Nieto; y
del PAN por Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa. Consiste en que el Gobierno se sale
cada vez más de la economía y el país se abre a la inversión extranjera. El neoliberalismo sigue los
postulados del modelo clásico de crecimiento económico y está en contra del estado de bienestar,
de la economía de tipo mixta y mucho más, la de corte izquierdista, parte del orden económico
internacional vigente es la aparición del neoliberalismo como nuevo modelo económico global.
Como resultado de la crisis económica de 1976 y principios de los ochenta, México tuvo que transitar
a un nuevo Modelo Económico Neoliberal, el cual le fue impuesto a nuestro país desde el exterior,
por instituciones financieras como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Para poder
aplicar este nuevo modelo económico se tuvieron que realizar una serie de reformas, que
popularmente se llaman “reformas estructurales”, el neoliberalismo, sus características y sus
manifestaciones a nivel mundial y en México, las consecuencias que ha traído consigo la aplicación
del proyecto neoliberal en nuestro país.

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