QUERIDO PADRE, MADRE O TUTOR (A):
Ha llegado el fin de esta aventura, llegarán más a la vida de tu hijo (a), y a la tuya, pero este ciclo
escolar ya está a punto de terminar…
Y con él toca “devolverte” a tu hijo, aquel que desde agosto del 2022 me ha escuchado cuatro horas
diarias, ha seguido mis instrucciones, me ha acompañado en este mundo del saber.
Aquel pequeño que hoy ha cambiado y seguirá cambiando, hemos celebrado logros, enfrentado
dificultades, pero vendrán otras y tú eres el único que puede ayudarlo a vencer los grandes retos de
esta vida, que más que nadie sabe que no es fácil.
Hoy te doy un abrazo desde mi escritorio, perdón si devuelvo a tu hijo(a) con algunas resistencias, con
algunos cambios que vas a notar en un futuro, espero que le hagan un hombre o una mujer de bien.
Como maestro no soy perfecto, pero créeme que intenté de todo para poder enseñar con el corazón, a
veces con muchos regaños y llamadas de atención, pero te prometo que eran necesarios.
Espero aprecies que ahora es un poco más alto, más sabio, pero sobre todo más maduro, y que lo que
ha aprendido a veces se le olvidará y volverá a los berrinches, no lo regañes tan fuerte, está creciendo
y no siempre será un niño. Apreciemos juntos los logros y metas que se ha propuesto, que está
consiguiendo.
Gracias por permitirme ser el maestro de quinto de tu hijo, fui muy feliz y los llevo ya en mi corazón,
nos veamos o no después, créeme que encontrarán en mí siempre un apoyo y guía, un abrazo
Atentamente:
Profe. ESCRIBIR NOMBRE