SUPREMA. - Resolucion - 1 - 20230720170457000528222
SUPREMA. - Resolucion - 1 - 20230720170457000528222
PODER JUDICIAL
CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA DE AMAZONAS
CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA
AMAZONAS - Sistema de
SALA CIVIL DE CHACHAPOYAS
Notificaciones Electronicas SINOE _______________________________________
SEDE CENTRAL - JR. ORTIZ
ARRIETA CDRA. 11 -
EXPEDIENTE Nº : 00012-2023-0-0101-SP-CI-01
CHACHAPOYAS,
Vocal:CHAVEZ RODRIGUEZ Jorge DEMANDANTE : ELIAS CRUZ VALDIVIA
FAU 20159981216 soft
Fecha: 20/07/2023 16:25:38,Razón:
RESOLUCIÓN
DEMANDADO : CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA DE AMAZONAS
JUDICIAL,D.Judicial: AMAZONAS /
CHACHAPOYAS,FIRMA DIGITAL MATERIA : ACCIÓN DE AMPARO
PONENTE : DRA. ESPERANZA TAFUR GUPIOC
CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA
AMAZONAS - Sistema de
Notificaciones Electronicas SINOE
SENTENCIA
SEDE CENTRAL - JR. ORTIZ
ARRIETA CDRA. 11 -
CHACHAPOYAS,
Vocal:CRISPIN QUISPE Alejandro RESOLUCIÓN NÚMERO TRES
FAU 20159981216 soft
Fecha: 20/07/2023 16:33:42,Razón:
RESOLUCIÓN
Chachapoyas, veinte de julio del año dos mil veintitrés
JUDICIAL,D.Judicial: AMAZONAS /
CHACHAPOYAS,FIRMA DIGITAL
1
en Adición de Funciones Sala Penal Liquidadora-Chachapoyas, de la Corte
Superior de Justicia de Amazonas; y Arturo Vilcarromero Silva Juez
Superior Titular de la Sala de Apelaciones y Liquidadora de Chachapoyas
de la Corte Superior de Justicia de Amazonas; por la presunta violación de
los derechos constitucionales a la presunción de inocencia y a la debida
motivación.
1.2.2. Mediante resolución número uno, de fecha diecisiete de enero de dos mil
veintitrés, se resuelve admitir a trámite la demanda de hábeas corpus
planteada por Elías Cruz Valdivia a favor de su hijo Willy Dennis Cruz
Llaja, la misma que la interpone contra los miembros integrantes del Poder
Judicial, representado por su Procurador Público y contra el fiscal
provincial de la Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Chachapoyas-
Juan Carlos Rodas Díaz. En tal orden, a través de la resolución número
dos, de fecha treinta de enero de dos mil veintitrés, se resuelve declarar
improcedente la demanda de Habeas Corpus interpuesta por Elias Cruz
Valdivia a favor del sentenciado-beneficiario Willy Dennis Cruz Llaja.
1.2.3. Con resolución número tres, de fecha veintidós de marzo de dos mil
veintitrés, se dispuso declarar inadmisible el recurso de apelación
interpuesto por el recurrente por extemporáneo, y se resuelve declarar
consentida la resolución número dos, de fecha treinta de enero del dos mil
veintitrés, que declaró improcedente la demanda de Hábeas Corpus que
interpuso el recurrente a favor de su hijo Willy Dennis Cruz Llaja. En ese
contexto, por escrito de fecha veintiocho de marzo de dos mil veintitrés el
ahora accionante presenta recurso de apelación contra la resolución
número tres.
1.2.4. Mediante resolución número cuatro, de fecha treinta de marzo de dos mil
veintitrés, se resolvió conceder el recurso de apelación interpuesto por
Elias Cruz Valdivia contra la resolución número tres del 22 de marzo de
2023, que declaró consentida la resolución número dos del 30 de enero de
2023, y declaró inadmisible el recurso de apelación interpuesto por Elías
Cruz Valdivia a favor de su hijo, por extemporáneo. A su turno, a través de
la resolución número seis, de fecha diez de abril del año dos mil veintitrés,
se dispuso confirmar la resolución número tres, de fecha veintidós de
marzo del año dos mil veintitrés, que declaró inadmisible el recurso de
apelación interpuesto por el recurrente en favor de su hijo Willy Dennis
Cruz Llaja, la cual a su vez declaro consentida la resolución número dos,
de fecha treinta de enero del dos mil veintitrés.
1.2.5. Que, de los considerandos expuestos por el Segundo Juzgado de
Investigación Preparatoria, en razón de la resolución número tres, de fecha
22 de marzo de 2023, se tiene lo siguiente: En cuanto al segundo
considerando ha señalado: “De la revisión de los actuados, tenemos que la
citada resolución fue notificada a la casilla electrónica y domicilio real de
los sujetos procesales, tal como consta del cargo de entrega de cédulas
electrónicas de notificación V cédula física dirigido a estos (…)”. Sobre lo
citado, indica que, el Juzgado habría transgredido el principio a una debida
motivación de las resoluciones judiciales y, en consecuencia, sus derechos
constitucionales a la tutela jurisdiccional efectiva y al debido proceso; ello
en virtud de que, conforme se ha resuelto en el presente proceso, no existe
2
sustento legal ni fáctico que lo ampare, sosteniéndose una posición en la
cual si se habría generado una debida notificación al recurrente, señalando
que eso se realizó mediante notificación electrónica y con cédula de
notificación.
1.2.6. Finalmente, respecto al considerando tercero de la resolución citada,
señala que, como bien especifica el órgano jurisdiccional, alejándose de su
fundamento bajo el cual supuestamente se habría pretendido ante todos
los medios de notificación previstos por Ley, para que se le notifique al
recurrente sobre la resolución número dos, establece que si fue notificado
porque así se “evidencia” de la cédula de notificación señalada; sin
embargo, consigna que esta notificación fue realizada bajo puerta, lo cual
no cumple con lo previsto en el artículo 161° del C ódigo Procesal Civil, que
dispone: “Si el notificador no encontrara a la persona a quien va a
notificarla resolución (...), le dejará aviso para que espere el día indicado
en este con el objeto de notificarlo”, puesto que, como se ha alegado
líneas arriba, el recurrente jamás recibió un aviso previo del notificador,
más aún, la cédula de notificación y su contenido solo se habría botado
bajo puerta, como cualquier documento sin relevancia alguna,
demostrándose con ello una vulneración de su derecho de defensa.
1.3. AUTO ADMISORIO.- Por resolución número uno de fecha veintitrés de junio de
dos mil veintitrés que obra de folios 41 a 42, se declaró inadmisible la demanda,
y habiéndose subsanado la misma dentro del término de ley, mediante
resolución número dos de fecha seis de julio de dos mil veintitrés, que obra de
folios 55 a 57, se admitió a trámite la demanda sobre Proceso Constitucional de
Amparo, confiriéndose traslado a la parte demandada por el término de diez días
a fin de que conteste la demanda.
3
1.4.3. Si tenemos en consideración que la demanda de amparo fue interpuesta
recién el 12 de junio del 2023, se puede apreciar que ello se realizó en
exceso del plazo determinado por ley, es decir, fuera de los 30 días hábiles
siguientes a la notificación de la resolución cuestionada. Aunado a ello,
conforme al artículo 9, el amparo procede respecto de resoluciones
judiciales firmes dictadas con manifiesto agravio a la tutela procesal
efectiva, que comprende el acceso a la justicia y el debido proceso. Es
improcedente cuando el agraviado dejó consentir la resolución que dice
afectarlo. Así las cosas, la demanda deviene en improcedente por
extemporánea, pues el paso del tiempo ha hecho que el demandante
pierda el derecho de acción respecto de las pretensiones planteadas en la
demanda, esto es, por el vencimiento de plazo establecido por ley.
1
Inciso modificado por el Artículo Único de la Ley N° 26470 publicada el 12/06/1995.
4
consentir la resolución que dice afectarlo. El habeas corpus procede cuando una
resolución judicial firme vulnera en forma manifiesta la libertad individual y la tutela
procesal efectiva. Se entiende por tutela procesal efectiva aquella situación jurídica de
una persona en la que se respetan, de modo enunciativo, sus derechos de libre acceso
al órgano jurisdiccional, a probar, de defensa, al contradictorio e igualdad sustancial en el
proceso, a no ser desviado de la jurisdicción predeterminada ni sometido a
procedimientos distintos de los previstos por la ley, a la obtención de una resolución
fundada en derecho, a acceder a los medios impugnatorios regulados, a la imposibilidad
de revivir procesos fenecidos, a la actuación adecuada y temporalmente oportuna de las
resoluciones judiciales y a la observancia del principio de legalidad procesal penal”.
2
Sentencia del Tribunal Supremo Español N°998/2004, de fecha 20 de septiembre del 2004.
3
Sentencia del Tribunal Supremo Español N°1228/2005 , de fecha 24 de octubre del 2005.
4
Sentencia del Tribunal Constitucional contenido en el expediente N°07222-2005-PHC.
6
como un derecho constitucional que asiste a todos los justiciables. El
derecho a la motivación de las resoluciones judiciales no garantiza una
determinada extensión de la motivación, por lo que su contenido
constitucional se respeta, prima facie, siempre que exista: a)
fundamentación jurídica, que no implica la sola mención de las normas a
aplicar al caso, sino la explicación y justificación de por qué tal caso se
encuentra o no dentro de los supuestos que contemplan tales normas; b)
congruencia entre lo pedido y lo resuelto, que implica la manifestación de
los argumentos que expresarán la conformidad entre los pronunciamientos
del fallo y las pretensiones formuladas por las partes; y, c) que por sí
misma exprese una suficiente justificación de la decisión adoptada, aun si
esta es breve o concisa, o se presenta el supuesto de motivación por
remisión”.
5
“Artículo 9°. Procedencia respecto de resoluciones j udiciales. El amparo procede respecto de resoluciones judiciales
firmes dictadas con manifiesto agravio a la tutela procesal efectiva, que comprende el acceso a la justicia y el debido
proceso. Es improcedente cuando el agraviado dejó consentir la resolución que dice afectarlo. El habeas corpus
procede cuando una resolución judicial firme vulnera en forma manifiesta la libertad individual y la tutela procesal
efectiva. Se entiende por tutela procesal efectiva aquella situación jurídica de una persona en la que se respetan, de
modo enunciativo, sus derechos de libre acceso al órgano jurisdiccional, a probar, de defensa, al contradictorio e
igualdad sustancial en el proceso, a no ser desviado de la jurisdicción predeterminada ni sometido a procedimientos
distintos de los previstos por la ley, a la obtención de una resolución fundada en derecho, a acceder a los medios
impugnatorios regulados, a la imposibilidad de revivir procesos fenecidos, a la actuación adecuada y temporalmente
oportuna de las resoluciones judiciales y a la observancia del principio de legalidad procesal penal.”.
8
2.7.4. En ese orden de ideas se entenderá entonces que, a través del proceso de
amparo, no se pueden revisar las sentencias dictadas por los Jueces
ordinarios que actúan en la esfera de su competencia respetando
debidamente los derechos fundamentales de orden procesal. En ese
sentido, mutatis mutandis, es aplicable la doctrina establecida por la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos en torno a la “fórmula de la cuarta
instancia”, según la cual el Juez de Amparo no puede hacer las veces de un
tribunal de alzada para examinar supuestos errores de derecho o de hecho
que puedan haber cometido los tribunales que hayan actuado dentro de los
límites de su competencia6.
2.7.5. Ahora, como se puede constatar de los hechos expuestos en la demanda,
vemos que la supuesta agresión que se denuncia sobre el derecho a la
defensa y al debido proceso, en realidad se esconde un cuestionamiento de
los criterios expuestos en la resolución cuestionada (resolución número tres),
por parte del órgano jurisdiccional. En efecto, si bien se sostiene que la
resolución número tres, al declarar inadmisible el recurso de apelación por
extemporáneo, ha quebrantado el derecho a la defensa y al debido proceso,
empero, lo cierto es que, no es la ausencia de las garantías del debido
proceso lo cuestionado en el presente, sino el criterio del Juez del Segundo
Juzgado de Investigación Preparatoria al haber declarado la inadmisibilidad
del recurso de apelación interpuesto por Elías Cruz Valdivia, así como
consentida la resolución número dos, la misma que declaró improcedente la
demanda de Hábeas Corpus, interpuesta por el recurrente; lo cual como ya se
expresó precedentemente, dicha controversia se encuentra fuera de la
competencia ratione materiae del proceso constitucional de amparo.
2.7.6. Sumado a ello, es de tener en cuenta que, la configuración constitucional del
derecho al debido proceso sustantivo no autoriza a que los Jueces
constitucionales ingresen a analizar asuntos cuya resolución forma parte de lo
que es propio de la jurisdicción ordinaria. En los de la materia, mediante la
alegación del recurrente de que en el proceso de Habeas Corpus incoado por
su persona, se afectó el derecho a la defensa y al debido proceso sustantivo;
en esencia pretende cuestionar los criterios aducidos por el Juez del Segundo
Juzgado de Investigación Preparatoria, al expedir la resolución número tres,
declarando la inadmisible el recurso de apelación formulado por el ahora
actor.
2.7.7. En ese sentido, si se acepta una pretensión de esa naturaleza, el amparo
terminaría desvirtuado en su esencia; en razón que, de instrumento procesal
para proteger la esfera constitucionalmente protegida de los derechos
fundamentales, se convertiría en un instrumento semejante al recurso de
casación para resolver errores in procedendo; esto es, en un proceso en el
seno del cual se pueda revisar la legalidad de los actos procesales expedidos
por los jueces. No otro puede ser el efecto de admitirse, por ejemplo, que en
este proceso se evalúe si las razones expresadas por un juez de la
jurisdicción ordinaria satisfacen las exigencias propias del principio de
legalidad al que se encuentra sometida la nulidad de dichos actos procesales;
por lo que, a tenor de lo anotado supra, apuntamos que la pretensión alegada
6
Sentencia del Tribunal Constitucional Expediente 0759-2005-PA/TC.
9
por el emplazante no tiene sustento constitucional alguno, en consecuencia,
la demanda debe desestimarse.
2.7.8. En concordancia con lo reseñado líneas antes, el Tribunal Constitucional en el
expediente STC N°3883-2007-AA/TC , dejó precisado: “Que este Tribunal ya
ha establecido en anteriores casos que la interpretación del derecho ordinario
y la apreciación de los hechos son temas que, en la mayoría de los casos
corresponde a las instancias inferiores del Poder Judicial. Estos criterios, aun
cuando sean errados (STC 6149- 006-AA/TC, fundamento 19), no pueden ser
revisados por el Tribunal, por lo menos los casos en los que no tengan
incidencia directa en el significado de la protección dispensada por un
derecho fundamental”; en esa coherencia, en el expediente STC N°4164-
2005-PA/TC, ha manifestado lo siguiente: “(…) Este Tribunal tiene dicho, en
jurisprudencia constante y uniforme, que mediante el proceso de amparo, el
Juez Constitucional no se encuentra autorizado para ventilar y resolver
cuestiones que son de competencia, ratione materiae, de la jurisdicción
ordinaria. Tampoco es un proceso que tenga la virtualidad de convertirse en
un mecanismo de revisión de lo decidido por los órganos jurisdiccionales, ya
sea porque se conciba al proceso de amparo, como un recurso de casación, o
ya porque se considere que la jurisdicción constitucional constituye una
instancia superior a la jurisdicción ordinaria (…)”.
2.7.9. Por su parte, la STC N°759-2005-PA/TC y la STC N°2533-2005-PA/TC , han
indicado que “el amparo contra resoluciones judiciales tiene por objeto
controlar que las resoluciones que se hayan podido expedir dentro de un
proceso judicial, lo hayan sido con respeto del contenido constitucionalmente
protegido del derecho a la tutela procesal, en los términos del artículo 4º del
Código Procesal Constitucional. Asimismo, tenemos expresado como
precedente constitucional que en el seno del amparo no se puede cuestionar
el criterio expuesto por un juez o tribunal de justicia al resolver un tema que
es de su competencia, pues ni el amparo es un recurso de casación, ni éste
abre las puertas de la justicia constitucional para que ésta termine
constituyéndose en una instancia judicial más, a modo de prolongación de las
que existen en la jurisdicción ordinaria”.
2.7.10. A mayor abundancia sobre el criterio adoptado y recogido del Tribunal
Constitucional, el Tribunal Constitucional Federal Alemán hace varias
décadas, dando lugar a la ya célebre “fórmula Heck”, al igual de que la
fórmula de la “cuarta instancia”, que desde entonces ha regido su
fundamentación en casos como el presente, señaló: “La estructuración del
proceso, la determinación y valoración de los elementos de hecho, la interpretación
del derecho ordinario y su aplicación a los casos individuales son asuntos de los
tribunales competentes para tal efecto, y se encuentran sustraídos de la revisión
posterior por parte del Tribunal Constitucional Federal; sólo en caso de la violación de
un derecho constitucional específico por parte de un tribunal, puede el Tribunal
Constitucional Federal entrar a conocer el asunto (…). Los procesos de subsunción
normales dentro del derecho ordinario se encuentran sustraídos del examen posterior
del Tribunal Constitucional Federal, siempre y cuando no se aprecien errores de
interpretación relacionados fundamentalmente con una percepción incorrecta del
significado de un derecho fundamental, especialmente en lo que respecta a la
10
extensión de su ámbito de protección, y cuando su significado material también sea
de alguna importancia para el caso legal concreto”7.
2.7.11. Finalmente, no encontrándose los hechos y el petitorio de la demanda
reseñados al contenido constitucionalmente protegido de los derechos
constitucionales invocados, es de aplicación el numeral 1) del artículo 7° del
Nuevo Código Procesal Constitucional. Siendo así, la demanda debe ser
desestimada; por ende, deviene en improcedente.
2.7.12. Por otro lado, sin perjuicio de lo anterior, debemos añadir que, en los de la
materia, hemos observado que, si bien en la pretensión principal se cuestiona
el decreto de mero trámite contenido en la resolución número siete, de
fecha 10 de mayo de 2023, expedido por el Segundo Juzgado de
Investigación Preparatoria de Chachapoyas, el mismo que obra a folios 13;
sin embargo, los fundamentos que sustentan la demanda, están referidos a
cuestionar la resolución número tres, de fecha 22 de marzo de 2023, que
corre a folios 19, mediante la cual se declaró la inadmisibilidad del recurso de
apelación interpuesto por Elías Cruz Valdivia, así como consentida la
resolución número dos, que resolvió improcedente la demanda de Habeas
Corpus, formulada por el recurrente; en dicho mérito, resulta laudable que, el
quebrantamiento al derecho de defensa y al debido proceso del accionante,
se habría producido a través de la resolución número tres, la misma que al
haber sido impugnada a sido confirmada por resolución número seis, de fecha
10 de abril de 2023, expedida por la Sala Penal de Apelaciones y Liquidadora
de Chachapoyas; en dicho contexto, computando el plazo estipulado en el
artículo 45 del Nuevo Código Procesal Constitucional, para interponer la
demanda de amparo contra resoluciones judiciales, apreciamos que en este
caso en concreto, la demanda ha sido formulada fuera del plazo legal; esto
es, fuera de los treinta días hábiles, que establece el ordenamiento jurídico
constitucional (habiendo considerado erróneamente el demandante el
cómputo del plazo a partir de la resolución número siete); por ende, conforme
a estos argumentos, la demanda también resulta improcedente en aplicación
del numeral 7) del artículo 7° del Nuevo Código Pro cesal Constitucional;
máxime, si el artículo 9 del mismo cuerpo normativo, ha estipulado que: “Es
improcedente la demanda cuando el agraviado dejó consentir la resolución
que dice afectarlo” (énfasis nuestro).
2.7.13. En esa congruencia y sindéresis, el Tribunal Constitucional en la STC
N°02389-2013-PA/TC, fj.3, ha dejado establecido lo siguiente: “(…) En
reiterada jurisprudencia se ha precisado que una resolución judicial adquiere
carácter firme cuando se han agotado todos los medios impugnatorios
legalmente previstos, siempre que estos tengan la posibilidad real de revertir
los efectos de la resolución que se impugna (STC 2494-2005-AA/TC,
fundamento 16). Esto implica, como también tiene dicho, que se hayan
agotado los recursos previstos por la ley procesal de la materia, pues es
improcedente cuando el agraviado dejó consentir la resolución que dice
afectarlo. Y es que el amparo no es un medio para subsanar las
deficiencias procesales o eventuales descuidos de las partes en el
trámite de un proceso judicial”.
7 STC N°9746-2005-PHC/TC (fj.5), citando a la Bverjge 18, 85, Sentencia del 10 de junio de 1964.
11
III. PARTE RESOLUTIVA.
Por estos fundamentos expuestos; la Sala Civil de Chachapoyas de la Corte
Superior de Justicia de Amazonas, administrando justicia a nombre de la Nación.
RESUELVEN:
3.1. TÉNGASE por apersonado al proceso al Procurador Público Adjunto a cargo de
los Asuntos Judiciales del Poder Judicial, por consignada su casilla electrónica
N°89588, por señalado el correo electrónico
[email protected], y el celular 974565337, para la recepción
de enlaces o links derivados del proceso; y el correo electrónico
[email protected], para la recepción de notificaciones.
3.2. TÉNGASE POR CONTESTADA la demanda, por parte del Procurador Público
Adjunto a cargo de los Asuntos Judiciales del Poder Judicial, en los términos que
indica y con los fundamentos que expone, agréguese sus anexos a los autos. Al
primer otrosí: Por delegadas las facultades de representación a favor de los
letrados que indica. Al segundo otrosí: téngase presente.
3.3. DECLARAR IMPROCEDENTE la demanda interpuesta por ELIAS CRUZ
VALDIVIA, contra del señor JUEZ DEL SEGUNDO JUZGADO DE
INVESTIGACIÓN PREPARATORIA DE CHACHAPOYAS; y, los JUECES
INTEGRANTES DE LA SALA PENAL DE APELACIONES Y LIQUIDADORA
DE CHACHAPOYAS; sobre PROCESO CONSTITUCIONAL DE AMPARO; en
consecuencia.
3.4. ORDENARON que, consentida o ejecutoriada la presente resolución se REMITA
al Archivo de la Corte Superior de Justicia de Amazonas.
3.5. DEJAR SIN EFECTO la programación de la audiencia para el día veintidós de
agosto de dos mil veintitrés, programado mediante la resolución número dos de
fecha seis de julio del año dos mil veintitrés.
3.6. NOTIFÍQUESE con las formalidades de Ley.
S.S.
TAFUR GUPIOC
CHÁVEZ RODRÍGUEZ
CRISPÍN QUISPE
12