I.
CRECIMIENTO PERSONAL Y ESPIRITUAL
03. Seleccionar y leer un libro sobre liderazgo o desarrollo juvenil, y presentar su
opinión con respecto a la lectura en dos páginas.
Nombre del Libro: El Líder Sabio
Autor: Pr. Alejandro Bullón
Resumen del Libro:
El Libro “El Líder Sabio” es un Libro de mucha enseñanza, donde en el primer capítulo
nos conduce a pedir sabiduría a Dios, teniendo en cuenta que el título universitario, el
cargo en alguna oferta laboral, los años vividos, eso no nos garantiza nada, tal vez y
es una manera para desarrollar la sabiduría, pero ninguna de estos factores nos da la
verdadera sabiduría, este maravilloso libro nos motiva a ser líderes que inspiren,
motiven y animen a otras personas para avanzar, para lograrlo necesitamos pedir
sabiduría a Dios.
Una de las enseñanzas es que al andar con Dios obtendremos la sabiduría para ser
líderes, nos hace referencia de lo que dice la biblia acerca de la vid y los pámpanos,
así como los pámpanos no dan frutos si no están junto a la vid, de la misma manera
nosotros no tendremos la sabiduría que nos da Dios, debemos permanecer en Dios
para tener un buen liderazgo, El líder Sabio necesita tener una estrecha comunión con
Dios, al punto que podamos decir “ya no vivo yo, mas Cristo vive en mi”, en ese
momento llegaremos a sentir la verdadera presencia de Dios y tomaremos buenas
decisiones en nuestro liderazgo.
Necesitamos como líderes sabios tener el mismo sentir que tuvo Jesús, que siendo el
rey del universo se despojó de todo, incluso de si mismo, y vino a servir y morir por
cada uno de nosotros, ese sentir que debemos tener es del servicio, el líder sabio
tiene que servir a sus colaboradores, no mandar o querer todo hecho , más bien
debemos despojarnos de esos malos deseos de liderazgo, de motivaciones
incorrectas y debemos tener motivaciones sanas para poder de esta manera ser
líderes conforme al corazón de Dios.
El líder sabio necesita que Jesús sea el centro de su vida, nosotros necesitamos tomar
buenas decisiones y es solo Dios quien nos ayuda a ver más allá del problema y nos
ayuda a tomar las mejores decisiones, debemos comprender que el liderazgo no se
trata de mandar o estar por encima del resto, necesitamos pedir opiniones a nuestro
colaboradores para así poder tomar una buena decisión, muchas veces como seres
humanos creemos que tenemos la razón y este es un gran error porque al momento
que pensamos de esa manera actuamos de una manera errada y las consecuencias
pueden ser feas, pedir opinión nos ayuda a entender a las personas que están a
nuestro alrededor y también se puede aprender mucho de ellos.
No debemos tomar las decisiones solos, más aun si tenemos cerca a personas o
líderes que han tenido su recorrido en el camino que estamos pasando, debemos
entender que el que pide opinión no pierde liderazgo, más bien es apreciado y
admirado por aquellas personas.
El líder sabio es soñador y visionario, muchas veces nos convertimos en lideres
mediocres que vemos el problema y nos tiramos para atrás y no llevamos a cabo los
sueños y planes que muchas veces ya se tiene planificado, no vemos más allá del
problema, nos enfocamos en la realidad del ser humano y olvidamos lo más
importante, olvidamos que Dios estará allí para acompañarnos en la lucha y hacer
frente a las dificultades que muchas veces se presentan, he escuchado a muchos
líderes quejándose de los problemas que pasa el club en vez de sentarse junto a sus
directiva y dialogar sobre lo ocurrido, pedir dirección a Dios y buscar una solución,
Dios es un Dios de milagros y grandes cosas, pero los seres humanos limitamos el
poder de Dios y las cosas grandes que Dios puede hacer por nosotros y por nuestra
gente.
Hay muchos capítulos y uno que me llamo la atención hablaba sobre ser justo, el líder
sabio debe ser justo y esto es algo que no se ve mucho, nuestra naturaleza humana
nos lleva a ser injusto con las personas e incluso injustos con otros clubes de
conquistadores, una vez más es importante recalcar que necesitamos de la compañía
y dirección de Dios para poder ser líderes justos.
Todo parte desde allí, cuando en nuestra mente y nuestro corazón no está el servir a
los demás y el amor a Dios, tendemos a ser injustos y empezamos a pensar que todo
está bien y que las consecuencias no aparecerán, pero el líder sabio debe aprender a
ser justo con todos, sin exención.
