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Proceso de Embargo Judicial en Coahuila

El documento describe el proceso de embargo judicial en México. Explica que el embargo es una medida cautelar ordenada por un juez para asegurar el cumplimiento de una obligación legal o sentencia. Detalla las etapas del procedimiento de embargo, que incluyen la notificación al deudor, el registro e inventario de bienes, su avalúo y, de ser necesario, su posterior remate. También señala que los bienes embargados quedan bajo la guardia y custodia de un depositario judicial responsable de su protección y conservación hasta la resolución del caso
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Proceso de Embargo Judicial en Coahuila

El documento describe el proceso de embargo judicial en México. Explica que el embargo es una medida cautelar ordenada por un juez para asegurar el cumplimiento de una obligación legal o sentencia. Detalla las etapas del procedimiento de embargo, que incluyen la notificación al deudor, el registro e inventario de bienes, su avalúo y, de ser necesario, su posterior remate. También señala que los bienes embargados quedan bajo la guardia y custodia de un depositario judicial responsable de su protección y conservación hasta la resolución del caso
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SALMA GUZMAN GUERRERO

XIMENA CHAVEZ SILVA


El secuestro judicial o embargo es una medida cautelar que se lleva a cabo
únicamente por orden expresa de un juez. Su propósito es afectar uno o varios
bienes de propiedad privada para asegurar el cumplimiento de un proceso legal
en curso o para satisfacer una demanda ejecutiva basada en una sentencia
condenatoria.

En las providencias precautorias y en los aseguramientos de los juicios universales,


el secuestro judicial tiene carácter cautelar. En cambio, en casos de consignación,
juicio ejecutivo y diligencias de ejecución de una sentencia, transacción o convenio
judicial, el secuestro judicial es considerado formal y definitivo. En estos casos, se
busca garantizar el cumplimiento efectivo de la obligación o el acuerdo
establecido.

Es importante destacar que el secuestro judicial o embargo debe llevarse a cabo de


acuerdo con las disposiciones legales y procedimientos establecidos en el sistema
jurídico correspondiente.
El auto de ejecución tiene efectos significativos en los casos en que se requiere llevar a
cabo una ejecución forzosa a través de un embargo. En estos casos, el auto de
ejecución tiene la fuerza de un mandamiento formal que exige al deudor realizar el
pago de la deuda. Si el deudor no realiza el pago inmediatamente, se procederá a
embargar los bienes suficientes para cubrir el monto que se debe ejecutar. En
resumen, el auto de ejecución otorga la autoridad legal para exigir el pago al deudor
y tomar medidas de embargo si no se cumple con la obligación

En el caso de ejecución de una sentencia, no será necesario realizar un requerimiento


de pago si ha transcurrido el plazo establecido para el cumplimiento voluntario por
parte del deudor. Sin embargo, en otros casos, el requerimiento de pago se realizará
durante la diligencia de embargo.
Orden en el señalamiento de bienes por embargar.

Las partes en el juicio, ejecutante o ejecutado, según sea el caso, realizarán el señalamiento de bienes
para embargo con sujeción al orden siguiente:
1. Los consignados como garantía de la obligación que se reclama.
2. Dinero.
3. Créditos o valores de inmediata realización.
4. Alhajas.
5- Frutos y rentas de toda especie.
6. Bienes muebles no comprendidos en las fracciones anteriores.
7. Bienes raíces.
8. Sueldos o comisiones cuando conforme a la ley sean embargables.
9. Créditos de no inmediata realización.
El ejecutante podrá señalar los bienes que han de ser objeto del secuestro, sin sujetarse al orden
establecido en este artículo, en los siguientes casos:
a) Si para hacerlo estuviere autorizado por el obligado en virtud de convenio
expreso.

b) Cuando los bienes que señale el deudor no fueren bastantes, o si no se


sujeta al orden que se establece
en este artículo.

c) En caso de que los señalados estuvieren en lugar diverso de aquel en donde


se sigue el juicio.

d) No se proporcionen los datos precisos de la ubicación y registro de los


bienes, o no se justifique su
legítima propiedad.
En Coahuila, existen ciertos bienes que están exceptuados de ser embargados. Estos incluyen:

I. Los bienes que forman parte del patrimonio de familia, siempre y cuando estén debidamente inscritos
en el Registro Público, de acuerdo con la Ley para la Familia de Coahuila de Zaragoza.

II. La casa que constituye el hogar conyugal, siempre y cuando su valor, según avalúo catastral, no
supere el equivalente al valor diario vigente de veinticinco unidades de medida y actualización.

Adicionalmente, se añade que la casa en la que habiten personas adultas mayores de sesenta años
también está exceptuada de embargo, siempre y cuando cumpla con los siguientes requisitos:

A) El valor de la vivienda no puede exceder el equivalente al valor diario vigente de veinticinco unidades
de medida y actualización, elevado al año.

B) El propietario de la vivienda debe ser únicamente el adulto mayor que la habita.

En resumen, los bienes exceptuados de embargo en Coahuila incluyen el patrimonio de familia, la casa
del hogar conyugal dentro de ciertos límites de valor, y la vivienda de personas adultas mayores que
cumplan con requisitos específicos.
En Coahuila, están exceptuados de embargo los siguientes bienes:

Bienes del patrimonio familiar.


Casa del hogar conyugal dentro de ciertos límites de valor.
Casa habitada por personas adultas mayores que cumplan requisitos específicos.
Menaje de casa básico.
Instrumentos y utensilios necesarios para el trabajo.
Libros y equipos de profesiones liberales.
Maquinaria agrícola indispensable.
Armas y objetos relacionados con cargos públicos.

En Coahuila, además de los bienes mencionados anteriormente, también están protegidos


de embargo:

XIII. Renta vitalicia.


XIV. Sueldos y salarios, con excepciones en deudas alimenticias.
XV. Asignaciones a pensionistas.
XVI. Pensiones alimenticias forzosas.
XVII. Rentas periódicas necesarias para el sustento del deudor, su cónyuge y sus hijos.
XVIII. Terrenos ejidales y parcelas individuales.
XIX. Sumas anticipadas a empresarios de obras públicas.
XX. Propiedad de bienes poseídos fiduciariamente.
XXI. Bienes destinados a servicios esenciales.
XXII. Lugares y edificaciones para cementerios.
XXIII. Otros bienes prohibidos de embargo según el Código Civil o leyes especiales.
El artículo 943 establece que si un funcionario judicial decreta un embargo sobre
bienes que son considerados inembargables, dicho funcionario será responsable y
estará sujeto a sanciones disciplinarias de acuerdo a la Ley Orgánica del Poder Judicial
para el Estado. Esto es independiente de cualquier responsabilidad legal y de la
posibilidad de que el juez declare nulas las actuaciones de oficio.
La diligencia de embargo es el procedimiento mediante el cual se ejecuta el embargo de bienes de un deudor
para asegurar el cumplimiento de una obligación o de una sentencia judicial. En México, la diligencia de
embargo se lleva a cabo de la siguiente manera:

1. Orden judicial: El proceso comienza con la emisión de una orden judicial que autoriza el embargo de los
bienes del deudor.

2. Notificación: El deudor es notificado de la orden de embargo y se le informa de los bienes que serán
embargados.

3. Registro: El actuario judicial realiza un inventario detallado de los bienes a embargar, indicando su
descripción, valor estimado y ubicación.

4. Embargo: Los bienes son embargados y quedan bajo la custodia del actuario judicial. Se levanta un acta de
embargo que describe los bienes embargados.

5. Avalúo: Se realiza un avalúo de los bienes embargados para determinar su valor de mercado.

6. Publicación: Se publica un edicto o aviso de embargo en un medio de comunicación oficial para informar a
terceros sobre la existencia del embargo.

7. Remate: En caso de que el deudor no cumpla con la obligación o sentencia, los bienes embargados pueden
ser rematados en una subasta pública para satisfacer la deuda.
La guardia y custodia de los bienes embargados se refiere a la responsabilidad de
mantener y proteger los bienes embargados durante el proceso legal. Una vez que se ha
realizado el embargo, los bienes embargados quedan bajo la custodia de una autoridad
designada, como un actuario judicial o un depositario designado por el tribunal.

La guardia implica asegurarse de que los bienes embargados no sufran daños, pérdidas o
deterioro mientras están bajo custodia. Esto puede implicar medidas como el resguardo
seguro de los bienes, la prevención de acceso no autorizado a los mismos y la adopción de
medidas de seguridad adecuadas.

La custodia implica tener la responsabilidad legal de los bienes embargados. Esto incluye
mantener un registro detallado de los bienes, realizar inventarios periódicos, documentar
cualquier cambio en su estado o ubicación, y garantizar que los bienes estén disponibles
cuando sea necesario para procedimientos legales posteriores, como el remate.
Las reglas para llevar a cabo el procedimiento de guardia y custodia de bienes embargados pueden estar
establecidas en el Código de Procedimientos Civiles A continuación, se mencionan algunas reglas generales
que suelen aplicarse:

1. Designación del depositario: El tribunal designa al depositario encargado de la custodia de los bienes
embargados. Esta designación puede ser realizada por el juez o por acuerdo de las partes involucradas en el
proceso.

2. Toma de posesión y registro: El depositario toma posesión física de los bienes embargados y realiza un
inventario detallado de los mismos. El inventario debe incluir una descripción precisa de los bienes, su
estado, ubicación y valor estimado.

3. Obligaciones del depositario: El depositario tiene la responsabilidad de custodiar y conservar los bienes
embargados de manera diligente y segura. Debe tomar las medidas necesarias para evitar daños, pérdidas
o deterioro de los bienes.

4. Medidas de seguridad: El depositario debe implementar medidas de seguridad adecuadas para proteger
los bienes embargados. Esto puede incluir sistemas de vigilancia, control de acceso, aseguramiento físico de
los bienes y cualquier otra medida necesaria para garantizar su protección.

5. Control de acceso: El depositario debe controlar y registrar cualquier acceso a los bienes embargados.
Solo se permite el acceso a personas autorizadas por el tribunal y se registra la identidad de quienes
ingresan a los bienes embargados.
Dentro del proceso de embargo de bienes, el depositario judicial tiene varias funciones importantes. Estas funciones
incluyen:

1. Toma de posesión: El depositario judicial toma posesión física de los bienes embargados en nombre del tribunal. Esto
implica asegurarse de que los bienes sean identificados, localizados y resguardados de manera adecuada.

2. Custodia de los bienes: El depositario es responsable de la custodia de los bienes embargados durante el proceso. Esto
implica proteger los bienes de daños, pérdidas o deterioro, y tomar medidas para asegurar su integridad.

3. Administración de los bienes: El depositario administra los bienes embargados de acuerdo con las instrucciones y
órdenes del tribunal. Esto puede incluir tomar decisiones sobre su mantenimiento, conservación y eventual disposición.

4. Registro y documentación: El depositario lleva un registro detallado de los bienes embargados, incluyendo una
descripción completa de los mismos, su estado, ubicación y valor. Esta documentación es importante para mantener un
registro preciso de los bienes y para informar al tribunal sobre su estado.

5. Control de acceso: El depositario controla y registra cualquier acceso a los bienes embargados. Solo se permite el
acceso a personas autorizadas por el tribunal, como los funcionarios judiciales, las partes involucradas en el caso o sus
representantes legales. El control de acceso ayuda a asegurar la integridad de los bienes y prevenir cualquier
interferencia no autorizada.

6. Informes y rendición de cuentas: El depositario presenta informes periódicos al tribunal sobre el estado de los bienes
embargados. Estos informes pueden incluir detalles sobre el estado de conservación de los bienes, eventos relevantes
relacionados con su administración y cualquier cambio significativo en los bienes. La rendición de cuentas es
fundamental para mantener al tribunal y a las partes informadas sobre la situación de los bienes embargados.
Cuando se embargan créditos, se aplican las siguientes disposiciones:

1. Se notifica al deudor para que retenga el pago y lo ponga a disposición del juzgado. Se le advierte que incurre en doble
pago si no cumple con esta orden.

2. El acreedor contra quien se dictó el embargo no puede disponer de los créditos y se le notifica de esta restricción, bajo pena
de sanciones legales.

3. Si se asegura el título del crédito, se nombra un depositario responsable de su custodia y protección. El depositario también
puede tomar acciones legales para hacer efectivo el crédito.

4. Si los créditos son objeto de litigio, se notifica al juzgador correspondiente y se informa al depositario nombrado. El
acreedor debe colaborar con el depositario en el juicio y continuar con el procedimiento, pero no puede realizar actos que
afecten el crédito embargado.

5. Al notificar el embargo al tercero deudor, se le solicita que informe sobre las deudas que tiene con el ejecutado y las
condiciones de pago. El tercero también debe revelar embargos anteriores y cesiones aceptadas relacionadas con el deudor.
Si el tercero no cumple con esta declaración, se presume que debe la cantidad embargada y puede enfrentar acciones legales
por parte del depositario. El tercero debe proporcionar pruebas de sus afirmaciones cuando sea requerido por el juzgador.
El secuestro sobre muebles que no sean dinero, alhajas, valores o créditos realizables
se refiere a la medida cautelar mediante la cual se retienen y aseguran bienes muebles
(tales como objetos, equipos, vehículos, entre otros) que no son dinero en efectivo,
joyas, valores negociables o créditos cobrables. En otras palabras, se trata de
embargar y tomar posesión de bienes muebles tangibles que no tienen un valor
monetario inmediato o que no son fácilmente convertibles en efectivo.

El propósito de esta medida es garantizar que los bienes queden bajo la custodia y
control del tribunal, evitando así que sean enajenados, dañados o desaparezcan
durante el curso de un proceso legal. El secuestro sobre muebles se lleva a cabo como
parte de un procedimiento judicial y se realiza a través de la notificación al deudor o
poseedor de los bienes, quien deberá retenerlos y ponerlos a disposición del juzgado.

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