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Cintillo-Aljibes Algarrobal

Esta ruta recorre la zona alta de los cortados de Ubrique, con miradores elevados sobre un amplio y hermoso paisaje. La ruta pasa por áreas recreativas, aljibes, cortijos y ofrece variados ecosistemas y vestigios de la vida campesina. El paisaje está dominado por calizas y presenta cañones, simas y cuevas.

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Cintillo-Aljibes Algarrobal

Esta ruta recorre la zona alta de los cortados de Ubrique, con miradores elevados sobre un amplio y hermoso paisaje. La ruta pasa por áreas recreativas, aljibes, cortijos y ofrece variados ecosistemas y vestigios de la vida campesina. El paisaje está dominado por calizas y presenta cañones, simas y cuevas.

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ÁREA RECREATIVA EL CINTILLO – ALJIBES DEL ALGARROBAL (SIERRA BAJA)

(© Grupo de Senderismo El Tercer Tiempo)

Localización Parque Natural Sierra de Grazalema. Dejamos atrás tanta belleza para adentrarnos en un
Sierra de Ubrique. mundo totalmente distinto, dominado por calizas
Distancia Ruta mixta. 9 km. desnudas, laberintos cársticos y cantiles verticales. El
Duración Unas 3:00 H + paradas. camino continúa bien trazado y comienzan de
Desniveles Salida/Llegada: 750 m. inmediato las sorpresas: a nuestra izquierda, un
Max./Min/Acum: 905/750/480 m. sumidero natural con forma de estrecho desfiladero al
Dificultad Baja. que un derrumbe ha llenado de lajas horizontalmente
Permisos No encajadas entre sus paredes; a nuestra derecha, unas
enhiestas formaciones monolíticas tras las que asoma
PERFIL la lejana estampa de la Silla. Un poco más adelante, el
primero de los miradores, desde el que vemos en la
distancia y encaramado a una altísima pared, el
balcón natural del Chaparral o Saltadero al que nos
dirigimos. Al fondo de su hoya natural Ubrique
aparece blanco y recoleto, mostrando con claridad su
evolución desde un antiguo y minúsculo casco pegado
a las peñas hasta la gran expansión urbana de nuestros
días. La vista nos revela la existencia de una primera
meseta sobre los cortados de Ubrique, inapreciable
desde la población. Al final de la misma se elevan las
DESCRIPCIÓN enormes paredes que sustentan la meseta superior a la
Ruta de singular belleza que nos llevará hasta la zona que llegaremos en breve. Llama la atención la buena
alta de los cortados que acunan a la población de factura del camino, sustentado por un talud y con una
Ubrique. El desnivel y la verticalidad de sus paredes especie de gigantesco pretil sobre el vacío, hecho de
favorecen la existencia de miradores muy elevados roca natural desbastada.
sobre un amplio y hermoso paisaje. Es igualmente El camino zigzaguea entre un entorno de piedra
interesante por la variedad de entornos y ecosistemas descarnada y derrumbes colonizados por ejemplares
que ofrece y, sobre todo, por la huella dejada por el notables de encina, a veces encajados en grietas
hombre tras siglos de vida campesina. inverosímiles. Pasaremos otra valla, el Portillo de los
Dejaremos el coche en el área recreativa de El Contrabandistas, junto a una covacha y, tras poco
Cintillo, justo donde termina el trazado de la vía más de media hora más de subida, llegaremos a la
romana que sube desde Ubrique a Benaocaz. Frente a meseta superior, situada al pie de varios cerros. Es el
la curva donde la carretera tuerce hacia la Manga de Algarrobal y los cerros de la Sierra Baja, otro cambio
Villaluenga, veremos una cancela de grandes drástico sobre el entorno que traíamos. Cierran la
dimensiones que franquea el paso a un camino bien llanura varias alturas que ocultan a nuestra vista las
empedrado llamado por los benaocaceños vereda de zonas del Saltillo (hacia Villaluenga) y el Chaparral,
la Sierra Baja. Pasaremos otra valla y pronto destacándose entre todas, a nuestra izquierda, el
coronaremos esta primera parte del sendero para Atochar (1.146 m.) El sendero nos adentra en un
adentrarnos propiamente en la zona de los cortados. bellísimo y llano mundo de montaña, sólo apto para la
En la curva donde se tuerce podremos hacer una explotación ganadera y al que imaginamos en todo su
parada para disfrutar del paisaje. A nuestra espalda, el esplendor en días de nevada. Una piedra de gran
blanco caserío de Benaocaz, el puerto de don tamaño marca la bifurcación del camino. Podríamos
Fernando, la zona del Ojo de Moro y, destacando torcer a la izquierda y tomar un camino bien trazado
sobre todos, la sierra del Pinar. Tuvimos la suerte de paralelo a una alambrada que pronto nos dejaría en
contemplar el fenómeno de la formación rápida de unos cercados de alambre cubiertos de alta hierba y
nubes a partir de un viento muy frío condensado sobre utilizados, al parecer, para la repoblación de conejos,
el Torreón y que las arrastraba después como pero antes nos acercamos al primero de los aljibes.
hilvanadas sobre el valle. Frente a nosotros, el castillo Campo a través retomamos el sendero antes señalado
de Aznalmara recortado contra el Albarracín y La y sólo un poco más adelante, llegamos a uno de los
Peñuela, que había ido descubriendo su silueta dos cortijos que visitaremos en nuestra ruta: la casa
conforme ganábamos altura. A nuestros pies, una del Algarrobal. Una antigua cerca de piedra encierra
bellísima nava, la Vega Redonda, destacando entre un llano con nogales de buen porte y un curioso aljibe
peñascos sobre el valle que recorre la calzada de forma circular que antaño contó con fosa de
medieval. Por fin, a nuestra izquierda la sierra de la decantación perimetral y que aún conserva la
Silla con la fortaleza de Cardela a su costado. canalización del agua de lluvia desde el tejado hasta
su interior. Todavía encontramos las ruinas del cortijo con pesar el mirador y, a la altura del segundo cortijo,
antiguo y una casita de nueva construcción en un empezamos a torcer ligeramente hacia el norte para
paisaje idílico y evocador de la vida familiar en el llegar a un aljibe en reparación, también rodeado de
campo. A partir de aquí, tomaremos dirección oeste nogales, y de allí a la piedra que nos sirvió de
para llegar al segundo de los cortijos a visitar, lugar referencia en la bifurcación. Despedimos con la vista
sorprendente donde los haya. Para empezar, cuenta la lejana cumbre del Berrueco y descendemos hasta el
con un hermoso plantío de 21 nogales grandes, sanos Cintillo.
y bien cuidados, rodeado de una cerca de piedra. Ante
ella, otro aljibe, esta vez más interesante aún que el ASPECTOS DE INTRERÉS
anterior. Dispone de una curiosa cuenca de captación Geología. Debido al dominio de la roca caliza, de un
de las escorrentías de un terreno que se va inclinando característico color grisáceo, presenta un paisaje muy
ya hacia el borde de los cortados. Allí se realiza una accidentado, con múltiples cañones y áreas
primaria decantación de lodos para dirigir el agua endorreicas que dan lugar a importantes circulaciones
perfectamente encauzada hacia el edificio. Éste la subterráneas, numerosas simas, grutas y cuevas. Nos
recibe en una segunda fosa que la termina de depurar situamos en en la Sierra de Ubrique.
antes de introducirla en el interior por tres orificios. Fauna. Se pueden apreciar: alcaudón común,
También vemos las aguas del tejado dirigidas hacia el petirrojo, curruca, ruiseñor, grajilla, mirlo, carbonero,
interior. Sorprende el excelente estado de colirrojo, pinzón vulgar, verdecillo, verderón,
conservación del conjunto, limpio de lodos y de jilguero, zorzal, águila culebrera, avión común,
suciedad por una propiedad que demuestra su cariño buitres, etc. Cabras, ovejas, vacas y cerdos.
hacia el medio rural, evidente también en el cuidado Flora. Acebuches, algarrobos, encinas y un
de la magnífica arboleda. Disfrutamos un rato del sol sotobosque denso y variado: aulagas, retamas,
otoñal tamizado por el ramaje y abandonamos el ardiviejas, lentiscos, jaras, matagallos,… Zonas de
enclave para recorrer los 500 metros que nos separan pastizal y pequeños bosquetes de nogales.
de nuestro objetivo: la balconada natural del
Saltadero, a 150 metros de altura sobre la primera CARACTERÍSTICAS DEL RECORRIDO
meseta. La caída es vertiginosa y la vista inenarrable. Muy variado, desde el amplio camino empedrado del
Ubrique se desparrama a nuestros pies en medio de un inicio (Vereda de Sierra Baja), hasta sendas poco
paisaje difícil de igualar ante el que nos solazamos perceptibles, algunas de ellas simples escorrentías. En
disfrutando de la vista y del silencio. Abandonamos ningún momento presenta especial dificultad.

Cartografía del Instituto Geográfico Nacional

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