Envejecimiento e Institucionalización Geriátrica, Capítulo Del Dr. Daniel Matusevich
Envejecimiento e Institucionalización Geriátrica, Capítulo Del Dr. Daniel Matusevich
institucionalización geriátrica
1. Introducción
- 117 -
Este t1·ab<:1jo se plantea un r·ecor1·ido <:l través de los dife-
1·entes aspectos que configuran el universo del viejo institu
cionétlizado, él partir de una investigación realizada en dis
ti11tas instituciones ge1·iát1·icé1s ele la ciudéld de Buenos Aires.
El n1isn10 toma con10 ele111entos de 'tnálisis las Vé11·iables qt1e
11emos considerado mas significativas: los aspectos n1édicos,
sociales y psicológicos que ca1·acterizan este fenómeno.
A parti1· de los datos recogidos elabo1·amos algunas hi
pótesis que intentan dar cuenta ele las distintas instancias
en to1·no a la vejez y su relación con la institucionalización
ge1·iát1·ica, pa1·a intenta1· echa1· luz sobre esta cuestión que,
sin duda, a 111edida que pasa el tiempo adquiere cada ºvez
mayo1· relevancia a la 1101·a de pens<:1r la inserción social de
este sector de la población.
2. Aspectos demográficos
- 11 8 -
1,as consecuencias del �1u111ento del p1·c)111eclio de años
ele vidél oc:asi<)n,1, co1110 se mencion<11-,l ante1·io1·mente, el
'lt11nento y el envejecimiento de la p<)l1l,1cié)n. Se ve1·ifica el
inc1·en1ent<) paulc.1tinc) de lél p1·opc>rc�ié>r1 de pe1·sc>nas de 65
años o i1·1ás, c1ue en nt1est1·c) país se é1cerc<1 al 8o/o de lc.l po
})l,ición. CalJe n1encioné11· que pode111<)S h'lbl<1r de pobla
ción envejecida cuando le:t p1·oporción de pe1·son<:1s n1ayo
res ele 65 añ<)S supe1·a al 7°/o ele 1<:1 p<)l1l<lcié)n t<)tal 1.
Asin1isn1<) se asiste C:l <)t1·0 fenó11·1eno que consiste en el
envejecimie11to de la población vieja. H<1t1se1· sostiene que
vivin1os en t.in ''mundo encanecido'', algt1nos inclt1so hé1-
}Jlt:1n de la lJa1·re1·e:1 divisoriC:l de los 75 años qt1e sepe:11�1 <l los
llc. jóvenes ''iejos de C:1quellos co11ocidos come) ''iejos
\riejc>s, qt1e sería11 los n1ás afectel. elos p<)1· l<l i11c,1paci<l.ad físi
ca, pc)r la enfer111edad c1·ónica y pc>1· lc.1 dependencia. Den
tro de este st1l)grt1po preelo1nin<-ln 1�1s n11.1jeres, CU)'<l p1·opc)1·
cióh tiende a at1111entar él 1nediela qt1e a,r,_lnza I,1 edad2.
El en,1ejecin1iento ele 1�1 polJlé1ción es tC-ll qL1e pe:1ra expli
car estos ce:1n1bios se l1�tbla ele Jc.1 inversión de la pirámi
de poblacional. En tanto fenón1eno s<>· c�ial, lc.1 vejez plan
tea t1na cuestión a la conciencic.1 colecti\ra, n1ient1·,1s qt1c t1·<:1-
dicional1nente se la c.1sc)cii1ba únicc.11nente a un fenór11eno
indi,ricl11�1l.
3. Envejecimiento e institucionalización:
-119 -
Cuando hablamos de envejecimiento debemos tener en
cuenta la variable cronológica, dada por los ritmos biológi
cos, la variable psicológica, verificada por la posibilidad de
responder a las presiones sociales; y la variable sociológi
ca, determinada por el g1·ado de participación de un indivi
duo en el entramado social. La síntesis de estas variables
nos dará una constante que nos permitirá evitqr enfoques
reduccionistas al acercarnos a este tema.
En . nuestra sociedad es muy frecuente relacionar enveje
cimiento con institucionalización; el rápido crecimiento de
las residencias geriátricas constituye una de las característi
cas que marca el ritmo de los tiempos que nos toca vivir.
La atención a este sector de la población se profesionaliza
cada vez más, estando en manos de asistentes sociales,
acompañantes terapéuticos y personal de cuidados especia
les, dejando así de lado lo que esta más relaciona.do con lo
afectivo y familiar, si se quiere, con lo artesanal de hacerse
cargo de los que están envejeciendo o de los que quizás ya
enve1ec1eron.
• •
- 1 20 -
institucionalizaciones, merecen mencionarse especialmen
te:
• Las consecuencias de los accidentes cerebro-vascula-
res
• Las discapacidades motoras (secuelas de fracturas,
Parkinson, artrosis graves)
• Los procesos con déficit cognitivos (demencias)
• Los trastornos sensoriales (visuales, auditivos)
• La diabetes.
2) Causas psicológicas: dentro de este grupo encontra
mos:
• los temores a morir abandonado
• los sentimientos de representar una molestia para los
demás
· • trastornos afectivos
trastornos ps1cot1cos cron1cos
. / . """ .
- 1 21 -
t�1 clos inconvenientes significati\'OS: poi· un lado, es muy
011e1·os<·> y poi· el otro, no es le) suficientemente conocido
poi· lc)S p1·ofesioné1les t1·é1tantes que mt1y f1·ect1ente111ente
piens(:ln como única opción <.l la instituciont:1lización. Mu
c}1,1s veces se <1duce 1<1 necesidael de que el lugar de resi
clencia p1·esente característict:1s é11·quitectónicas especiales,
C<)t11() si t·ue1·,1 i111p()Sible moelificar el p1·opio don1icilio del
viejo en 1·elt:1ción él sitt1aciones co1no pueden se1· el baño, la
C<)Cin,1 o lt:1s esc<1leras. Lel11· plantea que los conocin1ientos
en este can1po dejan bast<:1nte que clesear. y<1 que los pro
t'esionales ele este 1·an10 Ct:,11·ecen de unél �1dect1adt:l fc>1·111a
cié)n ge1·ontológica3. El <1111biente t:1elect1aelo pé11·t:l la vidél ele
un viejo es mt.1cl10 1nás qt1e 1(:1 li111piez<1 y los diseños t:lr·qui
tectónicos de ª''anz,1da.
El G.lnálisis ele 1<1s eliversas catlSélS ele institucion<1lizé1ción
pc)ne de n1cl. niti' esto qt1e las 111is111<1s están 111uy inter1·elacio
n<.1cl<:1s, sie11do t11t1cl1e:1s veces elit!cil clete1·minar específic<1-
111ente por· qué se institucionaliza él un viejo Lowentl1al
pl,1ntea que la institucionalización se prodt1ce en la i1·1ayo-
1·ít:1 de l<)S ct:1sos ct1<:1ndo la pe1·sona a Cé11·go del ct1ielaeio del
viejo se élgot() física, e111ocion,1l o fin,1ncie1·amente, 111ás que
en 1·el,1ción él t1n e111peo1·a1niento de 1�1s condiciones elel vie-
,
- 1 22 -
n10. pc>drían ser· que las 111uje1·es se tienen que hace1· cargc)
de le:1s personas dependientes o qt1e a los va1·ones les cotn-·
pete la 1·esp<Jnsabiliclt:1c.l económice:1
Se:1bem<)S que un gr<:1n nú111er<) · ele viejos que ¡)adece11
ti·<:1sto1·nc)S físicos, psicológicos o sociales nunca ingresa a
un ge1·iát1·ico, lo que nos pe1·mite pensa1· qt1e qt1izás sea la
n1�lnera en que se enlC:lZC:ln estos f,1cto1·es la que define el
clestin<) vital del \riejo. Resulta interesante 1nencione:11· que
en los Este:1dos lJnidos se estirne:1 que po1· cada persona in
g1·esada en una residencia, ot1·C1: s clos o más, tan1bién in<:a
pacitC:l<las, viven con su fa111ilia y son atendidas po1· la 1nis
n1a.
Nuest1·a expe1·i.encia ele entrevista1· a viejos revela que los
111is1nos en pri111e1· lt1g<.11· dese,1n vivir con l<)S hijos y C<)n los
nietos, er1 segundo lt1gar p1·efie1·en lél C<)nvivencia con el es
poso o espc)sa seguido poi· 1"1 vida en soledad CC)1nbir1�1da
con ten1poradas en le:1 casa ele los 11ij<)S, y poi· (1ltimo eligen
vivir en una residencia5.
- 1 23 -
tán envejeciendo y con los que están muriendo está llena
de dificultades para los que pertenecen a otros grupos eta
6
rios .
Por otro lado, resulta sugerente analizar a los geriátricos
desde los lineamientos teóricos de Erving Goffman, quien
sostiene que dichas instituciones fueron erigidas para cui
dar a las personas que parecen ser incapaces e inofensivas,
las coloca dentro del grupo de las instituciones totales7:
aquellas que tienen una tendencia absorbente y totalizado
ra, con obstáculos que se oponen a la interacción social
con el exterior. El atributo central para comprender el fun
cionamiento de este tipo de instituciones es que en ellas se
rompe la lógica de la vida cotidiana: todas las actividades
se desarrollan en un mismo lugar; no existe separación es
pacial, una misma autoridad rige para todo, las personas es
tán permanentemente acompañadas por otras personas, ha
ciendo juntas lo mismo, las actividades están · programadas
y la secuencia de las mismas es impuesta a través de nor
mas explícitas y del personal especializado; el plan de ac
tividades responde a los objetivos de la institución, sin dis
criminar de acuerdo a necesidades específicas y personales.
Goffman señala que como consecuencia de todo esto, la
actividad principal del personal que trabaja en estas institu
ciones es la vigilancia: controlar que todos hagan lo que se
les exige y evitar que se perturbé el clima de sometimien
to general.
- 1 24 -
estructurado, con preguntas simples y múltiples. Se encues
tó al total de la población de los tres geriátricos selecciona
dos en el área de Capital Federal. El trabajo de recolección
de datos se efectuó entre enero y marzo de 1996.
El total de casos estudiados fue de 59 viejos de ambos
sexos distribuidos en las tres instituciones mencionadas. En
relación a estas últimas cabe destacar que se ubican en un
nivel socioeconómico medio-alto, en los barrios de Villa
Urquiza y Constitución. Como características salientes, pre
sentan habitaciones privadas y semiprivadas de hasta tres
camas, comedor común, espacios abiertos representados
por jardines o patios, ascensores, asistencia medica clínica
y psiquiátrica permanente, kinesiología, actividades recrea
tivas (laborterapia, actividades musicales, lecturas. salidas
grupales).
- 1 25 -
clos y solte1·os es n1�1yor entre los l101nl)1·es (12.500/o cont1·a
3.920/o casé1dos y 250/o contra 7.84 °/o solteros). (Ct1aclro N1·0
1).
CARACTERÍSTICAS DE LA POBLACIÓN
Promedio de edad: 85 años
CUADRO Nro. 1
HOMBRES MUJERES
BASE: 59 CASOS
-1 26-
tJ. 11·e11zpo ele i11te1·11c;1ció11
El 83.<15 <Yo de }()S viej<)S estu(liételc_)s llevt:t 111ás ele seis n1e
ses de pe1·111�tnenc-ia en la institt1ción, u11 12.25cyo lle\,.<-t n1e
nos ele seis 111eses ele institucio11(:tlizé1<�i()n y, p<)1· (1lti1110, lJn
1 .69% 11ace seis 111eses qL1e está inte1·n<1ei<>. He111os consic.le-
1·(:1(lo con10 tope e.le tie111po l<)S seis 111eses debielc> '1 ql1e
c1·ee111os c.¡ue ese es t1n tie111p<) suficiente p�11·,1 1(:1 i11�1y<)1·í<t
de las inst,1n<.�i,1s 111éelicL1s qt1e reqt1ieren 1·e}1(:1 l)il it�1ción.
El 11e<:ho ele <1t1e i11ás elel 8ü<Y<i esté ,,i,1ie11cJo en el ge1·iá
t1·ico h4:1ce n1ás de seis n1eses 11<)S 11at)l�1 (le éste ('()ITI<J 1t1g(.11· �-
ge>
L
-
C(l Sél ..
-1 27-
están constituidas por familiares y en un 10,17 % los viejos
son v.isitados por amigos.
Si bien estos datos ponen de manifiesto la presencia fa
miliar, un 900/o de los viejos son visitados con una frecuen
cia semanal, literalmente en calidad de visitas'' que puede
implicar simplemente el mero trámite que representa el
aprovisionamiento de medicamentos, pañales, etc. requeri
dos por la institución.
Es frecuente que durante la visita de los familiares se
susciten situaciones de gran tensión e incomodidad. Habi
tualmente, las mismas se generan por el sentimiento de cul
pa con el que generalmente se quedan los familiares al vi
sitar al viejo, y que tiene que ver con la impresión de que
una vez finalizada la visita se lo devuelve a su soledad. Las
visitas no pueden llenar el vacío derivado d�l sentimiento
de marginación de la corriente de vida del propio grupo de
pertenencia. Así, la molestia que provoca esta tensión su
mada al hecho de que la visita implica .tiempo, tienen co
mo consecuencia que la distancia entre una y otra vaya au
mentando.
Siguiendo a Vincent podemos decir que un tercio de los
ancianos ingresados en hogares y residencias reciben sola
mente la visita mensual o trimestral de rigor8.
Dos son las conclusiones que podemos extraer del bajo
porcentaje de visitas por parte de amigos: por un lado, los
amigos de los viejos que quedan vivos también son viejos
y por el otro, el impacto que les provoca contemplar lo que
pudiera ser su posible destino hace que prefieran mante
nerse alejados.
En algunas ocasiones es el mismo personal del geriátri
co el que sugiere a la familia espaciar o suspender las visi
tas para facilitar la adaptación del viejo a la nueva situación
o simplemente con el i·azonamiento de que al familiar no
- 1 28 -
le haría bien contemplar el ''espectáculo'' que representa el
viejo institucionalizado.
d. Salidas
- 1 29 -
chaza posibilidades reales en función de una supuesta fal
ta de deseo o aduciendo problemas físicos.
Podemos decir que se produce un fenómeno en parale
lo que es que a medida que el tiempo pasa y el viejo se
adapta a los nuevos códigos que representan la vida en la
institución, se va produciendo una desadaptación a la vida
en el mundo exterior, se genera así una situación de extra
ñamiento y temor que hace que al viejo le sea cada vez mas
difícil transponer el umbral de la institución. Es entonces
que se escuchan frases como ''está mejor adentro que afue
ra'' , ''para que lo vamos a sacar si no quiere salir''; ''lo tra
tan tan bien''.
En un sentido más amplio no esta de más interrogarse
acerca del sentido de la salida en la institucionalización ge
riátrica; aquellos viejos que salen solos desarrollan una sen
sación de superioridad con respecto a los internados que
no lo hacen, provocando· una división en el grupo entre los
''sanos'' y los ''enfermos'', que genera contradicciones difí
ciles de sostener entre el personal y en el mismo grupo de
viejos. En general se observa una especie de alianza entre
el personal de menor jerarquía y aquellos viejos con un ma
yor nivel de autovalidez, ocasionándose situaciones difíci
les de sobrellevar para los huéspedes más deteriorados que
pueden ser víctimas de maltratos de distinto tipo, desde no
ser atendidos adecuadamente en su singularidad hasta ser
discriminados en las distintas actividades.
Una situación habitual e ilustrativa es la ubicación de los
distintos grupos de viejos en general aquellos más deterio
rados o que no pueden deambular por cuenta propia son
colocados en los lugares mas alejados u ocultos de la insti
tución, lejos de la vista del resto de los internados y de oca
sional�s visitantes, como si fuera necesario preservar a los
demás de la visión de los que son mas dependientes.
- 1 30 -
e. Patología psiquiátrica
- 1 31 -
de a exacerbar los síntomas orgánicos y afectivos ya exis
tentes, promovidos por la monotonía, la falta de estímulos,
el aislamiento y la reglamentación que impe1·a en las insti
tuciones geriátricas. Estas situaciones no tienen que ver ne
cesariamente con la ausencia de actividades especiales o
con la falta de entrenamiento del personal sino que no se
debe perder de vista que la vida pasa por afuera del geriá
trico y esto es registrado por los huéspedes más allá del de
terioro cognitivo que pudieran llegar a poseer.
Resulta interesante revisar y vincular los factores de ries-
-
- 1 32 -
geriátricas se han convertido en el sitio para los viejos con
trastornos mentales debido a la tendencia de los hospitales
a reducir los ingresos de pacientes viejos en los servicios de
psiquiatría y a la subutilización de los servicios ambulato
rios por parte de esta franja poblacional.
La mayoría de los autores consultados acuerda en que
muchos de los síntomas atribuidos a los efectos de la insti
tucionalización coinciden con aquellos que forman parte
de los diversos cuadros psicopatológicos, lo que complica
profundamente la realización de diagnósticos diferenciales.
Entre ellos, es fundamental indicar el deterioro en el fun
cionamiento independiente que se intensifica con la insti
tucionalización, y que Kahn define como ''discapacidad ex
cesiva''1º. La misma se manifiesta en una amplia gama de
dificultades en el funcionamiento que exceden a las espe
rables para una determinada condición física. El geriátrico
contribuye a su agudización, en la medida que provee de
masiada asistencia, por ejemplo, cuando el personal se
ocupa de vestir, asear y alimentar a aquellos que pueden
hacerlo por sus propios medios, o incluso movilizar a los
viejos en sillas de ruedas cuando pueden caminar. Como
consecuencia, muchos pierden capacidades que tenían an
tes del ingreso y se desarrolla un vínculo de dependencia
por el cual se demanda ayuda aún cuando no es necesaria.
Una vez instalada esta situación se torna bastante difícil di
ferenciar si estos síntomas corresponden a cuadros depre
sivos, trastornos cognitivos o son simples efectos de la ins
titucionalización.
f Medicación psiquiátrica
-1 33-
años recibieron un promedio de 13 prescripciones por año,
esta misma encuesta mostraba que entre el 67% y el 80%
de los viejos recibió medicación, mientras que ese valor au
mentaba hasta el 970/o al tratarse de viejos institucionaliza
dos11. En 1986 los psicofármacos ocupaban el quinto lugar
entre las drogas prescriptas a los pacientes ancianos, si bien
las personas mayores de 65 años constituyen el 120/o de la
población total, consumen el 37º/o del total de las drogas in
dicadas anualmente.
Siguiendo al profesor Salvarezza debemos evitar caer en
el prejuicio de equiparar vejez con enfermedad porque en
tonces se estaría interpretando el fenómeno del e�vejeci
miento como un problema exclusivamente médico.
Se obtuvieron datos comparativos entre la medicación
que los viejos recibían antes de institucionalizarse y la me
dicación psiquiátrica actual (Cuadro Nro. 2):
BASE: 59 casos.
- 1 34 -
Benzodiq,cepinas
Con respecto a estos psicofármacos no se observa una
modificación significativa en relación al momento del in
greso; un 50.84°/o los recibía antes de su llegada al geriátri
co mientras que un 52.54º/o los consumía en el momento de
la realización del estudio.
Mayoritariamente la indicación de las mismas está rela
cionada con el tratamiento del insomnio. Las cifras encon
tradas coinciden con las de otros estudios que plantean que
la prevalencia del insomnio entre los viejos es al menos de
un 50 °/o. Los viejos tienen un sueno menos profundo, con
despertares más frecuentes, requieren un tiempo mayor pa
ra conciliarlo, el sueño total es menor y una vez perdido,
el tiempo que demoran en volver a conciliarlo es mayor.
Debido a que los hipnóticos más frecuentemente utiliza
dos disminuyen el tiempo total del sueño R.E.M., al suspen
derlos se produce un efecto rebote, con lo cual este sínto
ma de abstinencia empeora los problemas que supuesta
mente debiera mejorar. Asimismo, el uso continuo genera
.
- 1 35 -
rio común que es el del geriátrico y no el del viejo con lo
cual lo que se medica no es el insomnio sino las dificulta
des para adaptarse a las normas de la institución.
El abuso y la dependencia a las benzodiacepinas son si
tuaciones relevantes en la población de viejos debido a que
su uso prolongado es muy frecuente en este grupo etario.
Son conocidas las complicaciones potenciales del uso pro
longado de benzodiacepinas
• sedación diurna: los viejos son más propensos a ma
nifestar somnolencia, fatiga y ataxia.
• trastornos cognitivos: afectan la n1emoria, la atención
y el tiempo de reacción. Por otra parte, suministradas a per
sonas con trastornos cognitivos preexistentes, pueden oca-
•
- 1 36 -
n1ento de los niveles plasmáticos de digital ocasionado por
la.s benzodiacepinas y que puede requerir un ajuste de la
dosis. Por otra parte, los antiácidos disminuyen la absorción
de este grupo de psicofármacos y la cimetidina demora su
depuración.
-• depresión respiratoria y otros problemas respiratorios:
las personas que padecen de Enfer1nedad Pulmonar Obs
tructiva Crónica (EPOC) habitualmente tienen trastornos en
la calidad del sueño por lo cual muchas veces se les . indi
ca benzodiacepinas, que pueden provocar hipoventilación.
Estas complicaciones muchas veces son evitables a par
tir de . la utilización de 1·ecursos no farmacológicos para el
insomnio13, para cuya in1plementación se hace necesario
una estructura de atención muy personalizada, difícil de lo
grar en un geriátrico, donde existe una tendencia a homo
geneizar las demandas.
Neurolépticos
Se observa un significativo incremento . en la prescrip-
.
- 1 37 -
Los más frecuentes son los delirios de contenido persecu
torio y los delirios somáticos. Entre los primeros, lo más ha
bitual es que giren alrededor de un único tema o de temas
interconectados, sobre todo en relación a conspiraciones
por parte de los familiares o vecinos, y en los casos de per
sonas institucionalizadas, los perseguido·res son los compa
ñeros residentes o el personal a cargo. Los delirios somáti
cos generalmente involucran el tracto gastrointestinal y fre
cuentemente expresan el temor del viejo a padecer cáncer.
Estudios realizados indican que las conductas paranoi
des y la desconfianza se encuentran en un 170/o de las per
sonas no institucionalizadas. Esto evidencia la sensación de
los viejos de vivir en un entorno social que les es altamen
te hostil, situación que se intensifica en los casos en los que
se los ingresa en un geriátrico, convalidando de alguna ma
nera los temores y las sospechas en relación a los familia
res.
Respecto a los efectos secundarios de este grupo de psi
cofármacos es importante destacar los efectos anticolinérgi
cos y la sedación, sobre todo con los neurolépticos sedati
vos, los efectos extrapiramidales, a tener especialmente en
consideración en pacientes con enfermedad de Parkinson y
el riesgo de disquinesias tardías.
Antidepresivos
Los datos recogidos arrojaron un 6.78% de viejos medi
cados con antidepresivos antes del ingreso, esta cifra tuvo
un ligero incremento al 8.470/o tras la institucionalización,
acercándose a los porcentuales de prevalencia de cuadros
depresivos descriptos anteriormente de aproximadamente
el 9%.
De todas formas, debemos señalar que en los Estados
Unidos se estima que entre el 15º/o y el 25% de los viejos
- 1 38 -
1·esidentes en ge1·iátricos sufren de depresión mayor, siendo
ésta la primer causa de suicidios en la vejez. Algunos auto
res sostienen que como efecto del pasaje al geriátrico se ve
rifica un déficit en el diagnóstico y tratamiento de trastor
nos potencialmente reversibles como seria el caso de las
depresiones. Esto podría intentar explicar las discrepancias
en los valores. En algunas situaciones los síntomas de la se
rie depresiva son considerados como elementos normales
del envejecimiento o como productos de la geriatrización,
por lo que no son tratados pudiendo registrarse el efecto
de la cronificación.
En este punto es interesante mencionar al Dr. Salvarez
za, quien alerta sobre el peligro de pasar por alto depresio
nes donde parece no haberlas, como en los casos de de
presiones enmascaradas por varias formas de trastornos del
S.N .A y por manifestaciones orgánicas de disturbios funci_o
nales. Pero al mismo tiempo pueden darse situaciones in
versas en los casos en que parecen existir, pero en realidad
corresponden a reacciones y conductas defensivas puestas .
en juego en circunstancias dolorosas de la vida, a las que
los viejos tienen más probabilidades de asistir.
En cuanto a los grupos de antidepresivos disponibles,
los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina
(I.R.S.S.) constituyen un importante aporte para el trata
miento de los cuadros depresivos en · general y de los vie
jos en particular, debido a que generalmente son bien tole
rados y presentan un espectro de efectos secundarios me
nos severos que los tricíclicos y los inhibidores de la mo
noaminooxidasa (IMAO). .
Los efectos secundarios más comunes son:
• los trastornos gastrointestinales (náuseas y diarreas)
• el insomnio y las disfunciones sexuales, que por otra
parte son dosis-dependientes, permitiendo mediante la re-
- 1 39 - .
ducción de la dosis el control de los mismos.
A diferencia de los I. R.S.S., los antidepresivos tricíclicos
p1·esentan efectos secunda1·ios que pueden ser eventual
mente graves en los viejos y particularmente en los mayo
res de 75 años. Entre ellos debemos mencionar:
• los efectos cardíacos como el enlentecimiento de la
conducción, que puede provocar bloqueos y arritmias
• la hipotensión ortostática con el riesgo consecutivo de
caídas y fracturas
• el aumento de la frecuencia cardíaca, de importancia
en aquellos con insuficiencia cardíaca.
• los efectos anticolinérgicos, como la sequedad de bo
ca, la constipación y la retención urinaria. Además de tener
sus complicaciones, pueden resultar potencialmente graves
en los viejos que suelen estar polimedicados con drogas
que poseen propiedades anticolinérgicas como algunos an
tiparkinsonianos y los antipsicóticos.
En la vejez también se incrementa el riesgo de toxícidad
en el S.N.C: trasto1·nos cognitivos, convulsiones y delirium.
Así, podemos concluir que el grupo de los I.R.S.S. per
mite el tratamiento de los cuadros depresivos con un ran
go de mayor seguridad y ampliando el número de viejos
que pueden beneficiarse con un tratamiento antidepresivo.
Antiparki1?Sonia11os y estimulantes
En ambos casos se observa una disminución en la pres
cripción de estos grupos de psicofármacos: de un 15.25 %
a un 1 1.86 O/o para los primeros y de un 1 0 . 16 o/o a un 1 .69o/o
para los segundos. Esta variación podría estar vinculada a
los efectos secundarios que · fundamentaln1ente están rela
cionados con síndromes confusionales y excitación parado
ja!.
- 1 40 -
6. conclusiones
- 1 41 -
de la cultura la presencia de las generaciones mayores, que
. cumplirían la función de vinculo intergeneracional a través
de la memoria oral y vivencia! que no puede ser reempla
zada ni por las técnicas informáticas de comunicación ni
por el ''bullicio massmediático''.
El geriátrico altera la posibilidad de contacto diario y co
tidiano Con los que ya envejecieron, así como también di..
ficulta la naturalidad y espontaneidad de dicho intercam
bio. ¿Cómo adaptarse· a los nuevos códigos cuando la ex-
.
- 1 42 -
. .
te generan mayor tens1on y sent1m1entos negativos en sus
. ,,, .
- 1 43 -
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