AÑO DE LA UNIDAD, LA PAZ Y EL DESARROLLO”
INFRACCIÓN Y SANCIONES
NOMBRE : KARLITA AMANDA DE LOS ANGELES AREVALO TORRES
CARRERA: CONTABILIDAD
CICLO : I
TURNO : NOCHE
Magister : Bethel flores canta
AULA : 105
INFRACCIONES Y SANCIONES TRIBUTARIAS
CONCEPTO DE INFRACCIÓN TRIBUTARIA:
Según el art. 164 del código tributario es infracción tributaria, toda
acción u omisión que importe la violación de normas tributarias,
siempre que se encuentre tipificada como tal en el presente Título o en
otras leyes o decretos legislativos.
De la definición anterior tenemos que una infracción implica el
incumplimiento por parte de los deudores tributarios de normas de
naturaleza tributaria que disponen deberes u obligaciones de carácter
formal o sustancial (en el caso de retenciones o percepciones de
tributos). Para ello, se entiende que la conducta entendida como
“infractora” ha sido tipificada previamente como tal.
Elementos de la infracción tributaria
a. Elemento sustancial o antijuridicidad:
Con base en el principio de tipicidad de la infracción anteriormente
descrito, tenemos que una de las características de la infracción
tributaria es la de ser antijurídica, pues importa la violación de normas
tributarias expresamente establecidas.
En efecto, la acción u omisión en que consiste la infracción tributaria
es contraria a una prohibición o a un mandato positivo expresamente
tipifi cado en una norma tributaria, la cual establece la infracción y la
sanción correspondiente a esta.
Así, el elemento sustancial es el incumplimiento de una obligación
legalmente establecida, esto es, para que exista una infracción debe
existir previamente una obligación establecida por la ley de realizar
una conducta determinada.
La Administración Tributaria no podrá sancionar las conductas u
omisiones incurridas por los deudores tributarios, si estas no han sido
previamente establecidas por norma expresa como obligaciones
tributarias pues, en este caso, no existe violación de norma tributaria
alguna.
b. Elemento formal o tipicidad:
De lo anterior podemos afirmar también que la infracción tributaria es
típica, pues debe encontrarse expresa y precisamente tipificada como
tal en una norma legal. Es decir, si la acción u omisión no encaja
dentro de determinada clase de infracción no existirá infracción
alguna.
Este elemento tiene su sustento en el principio de legalidad
establecido en el inciso d) de la Norma IV del Título Preliminar del
Código Tributario vigente, según el cual solo por ley o por decreto
legislativo se pueden defi nir y establecer las infracciones tributarias.
Así para que exista una infracción tributaria, además del
incumplimiento de una obligación formal o sustancial, debe existir
también el derecho de la Administración de sancionarlo, esto es, que
dicha conducta haya sido considerada por el ordenamiento legal como
una infracción y se haya fijado la sanción.
c. Elemento objetivo:
El artículo 165 del Código Tributario establece que las infracciones se
establecen de manera objetiva, esto es, que basta el incumplimiento
de la obligación tributaria y que dicho incumplimiento haya sido
tipificado como infracción para que se configure esta, no importando o
valorándose las razones que hayan motivado dicho incumplimiento.
En efecto, para que exista infracción no será necesario establecer que
el deudor tributario ha actuado con dolo o con culpa, bastando con
probar la comisión del hecho previsto en la ley como infracción para
que esta quede configurada y proceda la sanción administrativa
correspondiente.
JURISPRUDENCIA
RTF Nº 07013-1-2005 (18/11/2005)
De acuerdo con lo dispuesto por el artículo 165 del Código Tributario
mencionado, la infracción se determina en forma objetiva, es decir, sin
tener en cuenta la intencionalidad o las circunstancias que pudieran
justificar su comisión por lo que el hecho que la recurrente alegue que
se deben analizar las circunstancias que originaron la omisión, no
desvirtúan la configuración de la infracción.
Determinación de un impuesto a pagar mayor al realmente
determinado no constituye infracción
La empresa JR S.A.C., en la declaración-pago de IGV y Renta
correspondiente al mes de marzo de 2012, no determinó monto alguno
por regularizar. Sin embargo, como la mencionada declaración se
terminó de elaborar casi al final del día del vencimiento para su
presentación, y al no contar con Clave SOL, la empresa consignó
como monto a pagar un nuevo sol (S/. 1.00) para poder presentarlo en
una agencia bancaria. ¿Se ha cometido alguna infracción tributaria por
esta acción?
Solución:
Tal como lo señala el artículo 164 del Código Tributario, para que una
acción u omisión que transgreda normas tributarias califique como
infracción, debe estar tipificada como tal. En este sentido, del anterior
enunciado debemos analizar si el hecho de consignar un impuesto por
pagar mayor al realmente determinado, transgrede alguna norma
tributaria y si esta conducta se encuentra tipificada como infracción.
Realizando el análisis antes descrito, tenemos que nuestro Código
Tributario no ha previsto como conducta infractora la determinación de
pagos en exceso, por el contrario, el artículo 38 del Código en
mención permite solicitar la devolución de los pagos indebidos o en
exceso realizados además de los intereses correspondientes.
Asimismo, del análisis efectuado a las tablas de infracciones y
sanciones del Código Tributario, resulta que ninguna de las conductas
previstas como infracciones se refieren a la realización de pagos
indebidos y/o en exceso, por lo que esta no se encuentra tipificada
como conducta infractora.
En consecuencia, el hecho de que la empresa JR S.A.C. haya
considerado un impuesto a pagar mayor al realmente determinado no
configuraría la comisión de infracción tributaria alguna.
DETERMINACIÓN DE LA INFRACCIÓN:
El Código Tributario establece que la infracción será determinada en
forma objetiva y sancionada administrativamente con penas
pecuniarias, comiso de bienes, internamiento temporal de vehículos,
cierre temporal de establecimiento u oficina de profesionales
independientes y suspensión de licencias, permisos, concesiones o
autorizaciones vigentes otorgadas por entidades del Estado para el
desempeño de actividades o servicios públicos.
¿Qué significa determinación objetiva de la infracción?
Para determinar la comisión de una infracción se consideran
únicamente los hechos, sin que sea relevante la intencionalidad, esto
es, el dolo o culpa, del sujeto que incurre en la misma, lo que verifica
con la comprobación de que la consecuencia de la conducta ejercida
por el sujeto infractor encuadra en la descripción típica de una
infracción.
No obstante, el Tribunal Fiscal ha establecido en algunas
resoluciones, determinados supuestos que eximen de la sanción que
le corresponda a la infracción advertida. Tales supuestos son el caso
fortuito o fuerza mayor (Resolución Nº 3565 del 10.06.68, hechos
imputables a la Administración, etc.
En el control del cumplimiento de obligaciones tributarias
administradas por la SUNAT, se presume la veracidad de los actos
comprobados por los agentes fiscalizadores, de acuerdo a lo que se
establezca mediante Decreto Supremo. Al respecto, sugerimos revisar
el Reglamento del Fedatario Fiscalizador.
CLASES DE SANCIONES TRIBUTARIAS
Las sanciones tributarias constituyen la pena administrativa que se
impone al responsable de la comisión de una infracción tributaria.
Tienen naturaleza preventiva y buscan incentivar el cumplimiento de
una obligación tributaria.
Conforme ya lo habíamos adelantado, la facultad sancionadora de la
Administración Tributaria es reconocida expresamente por el artículo
82 del Código Tributario, por lo que, determinada una infracción
tributaria, la Administración dentro de los parámetros de actuación
permitidos por la ley, puede determinar cuál será la sanción aplicable.
Dicha facultad sancionadora se verá reflejada en la aplicación de las
siguientes sanciones:
i) Multa,
ii) Comiso,
iii) Internamiento temporal de vehículos,
iv) Cierre temporal de establecimiento u oficina de profesionales
independientes,
v) Suspensión de licencias, permisos, concesiones o autorizaciones
vigentes otorgadas por entidades del Estado para el desempeño de
actividades o servicios públicos.
Como podemos ver, las sanciones administrativas antes descritas
pueden ser de dos tipos:
i) Patrimoniales y
ii) Limitativas de derechos.
Las sanciones administrativas patrimoniales estarían conformadas por
las multas y el comiso de bienes; mientras que las sanciones
limitativas de derecho estarían conformadas por el internamiento
temporal de vehículos, el cierre temporal de establecimiento u oficina
de profesionales independientes y la suspensión de licencias,
permisos, concesiones o autorizaciones vigentes otorgadas por
entidades del Estado para el desempeño de actividades o servicios
públicos.
a) Multa, de acuerdo a lo establecido en el segundo párrafo del
artículo 180 del Código Tributario. Dentro de las que podemos
encontrar por ejemplo: i) UIT, ii) Ingresos netos, iii) Ingresos
Cuatrimestrales, iv) el tributo omitido y v) el monto no entregado.
b) Comiso de bienes, de acuerdo a lo establecido en el artículo 184
del Código Tributario, mediante la cual se afecta el derecho de
posesión o propiedad del infractor sobre los bienes vinculados a la
infracción, limitándose su derecho de uso o consumo.
c) Internamiento temporal de vehículos, de acuerdo a lo establecido
en el artículo 182 del Código Tributario, mediante la cual se afecta el
derecho de posesión o propiedad del infractor sobre bienes tales como
vehículos, limitándose su derecho de uso.
d) Cierre temporal de establecimiento u oficina de profesionales
independientes, de acuerdo a lo establecido en el artículo 183 del
Código Tributario, tiene como objetivo limitar el derecho a la
realización de actividades empresariales en locales cerrados.
e) Suspensión de licencias, permisos, concesiones o
autorizaciones vigentes, este tipo de sanciones son del tipo
administrativas, conocidas también como sanciones limitativas de
derechos, pues contrariamente a lo que sucede con las multas y el
comiso de bienes (sanciones de carácter patrimonial), la suspensión
de licencias, permisos, concesiones o autorizaciones, limitan la
posibilidad de seguir gozando de un derecho ganado previamente u
otorgado por una entidad estatal.
Cabe anotar que las sanciones antes descritas son las únicas
reconocidas como tales por nuestro ordenamiento jurídico tributario,
no pudiéndose en consecuencia, aplicar sanciones distintas a estas
cuando estemos frente a conductas infractoras de normas tributarias.
1. CAUSALES EXIMENTES DE SANCIÓN E INAPLICACIÓN DE
INTERESES
Como indicáramos anteriormente, para que se configure una infracción
y por consiguiente proceda la aplicación de una sanción tributaria,
debe configurarse el incumplimiento de una obligación tributaria
establecida expresamente por una norma tributaria.
Ahora bien, puede suceder que en algunos casos el incumplimiento
del deudor tributario se deba a ciertas deficiencias en la redacción de
la norma que podría llevar a una interpretación equivocada de esta
induciéndolo a “error”. Es en estas situaciones que el legislador ha
considerado conveniente eximir de responsabilidad al sujeto infractor.
Tales casos se encuentran contemplados en el artículo 170 del Código
Tributario, y comprende los siguientes supuestos:
i) interpretación equivocada de una norma
ii) duplicidad de criterio en la aplicación de una norma.
Existen otros supuestos que liberarían de la aplicación de sanciones
como: i) los hechos imputables a la Administración Tributaria; y, ii) la
fuerza mayor o caso fortuito.
i. Interpretación equivocada de una norma, de acuerdo a lo
establecido en el numeral 1 del artículo 170 del Código Tributario.
Según el supuesto indicado en el referido numeral, es la ambigüedad,
oscuridad o falta de claridad de una norma la que origina que el
contribuyente no pague monto alguno por concepto de la deuda
tributaria relacionada con dicha interpretación equivocada.
En efecto, la incertidumbre en la aplicación de la norma es tal que el
mismo precepto legal exige que posteriormente se disponga una
aclaración en su aplicación, la cual se aplicaría retroactivamente. En
este caso, la interpretación adoptada por el deudor tributario es
diferente de la adoptada posteriormente por el legislador (Ley), el
reglamentador (Decreto Supremo o Resolución de Superintendencia)
o el Tribunal Fiscal, situación que determina un tributo omitido.
Este punto nos lleva a plantearnos las siguientes preguntas: ¿En todos
los casos debe admitirse el efecto retroactivo de una disposición
interpretativa, pese a que la opción adoptada por el contribuyente fue
válida en su momento?, ¿qué sucede si la norma interpretativa agrava
la situación del contribuyente?
Consideramos que en estos casos los hechos anteriores a la
publicación de la norma interpretada no necesariamente deben quedar
regulados por la interpretación “auténtica” efectuada por el legislador,
máxime cuando el contribuyente puede contar con una argumentación
razonable que sustente su interpretación (más benigna), pensar lo
contrario significaría vulnerar el principio de seguridad jurídica.
Para que proceda el supuesto en comentario será necesario, primero,
que el contribuyente no pague la deuda originada a fi n de que se
pueda alegar esta causal, pues de lo contrario, esto es, de pagarse la
deuda, estaríamos frente a una obligación tributaria ya extinguida.
En segundo lugar, será necesario se emita una norma o resolución del
Tribunal Fiscal que aclare la ambigüedad de la norma en cuestión.
En tercer lugar, la norma que se emita o la resolución que expida el
Tribunal Fiscal relacionada con dicha aclaración, debe señalar
expresamente que es de aplicación el numeral 1 del artículo 170.
De cumplirse con las tres condiciones antes descritas, se producen las
siguientes consecuencias:
- No procederá que se apliquen aquellos intereses devengados desde
el día siguiente del vencimiento de la obligación tributaria hasta los
diez (10) días hábiles siguientes a la publicación de la aclaración en el
diario oficial El Peruano.
- No se aplicarán las sanciones correspondientes a aquellas
infracciones originadas por la interpretación equivocada de la norma
hasta los diez (10) días hábiles siguientes a la publicación de la
aclaración en el diario oficial El Peruano.
Cabe precisar que el Código Tributario no establece como condición
determinante para la “improcedencia de intereses y sanciones” que se
deba presentar alguna declaración rectificatoria, o se tenga que
efectuar alguna subsanación. Por lo tanto, basta la ocurrencia de las
condiciones antes descritas.
Como ejemplo de lo anterior podemos citar la Resolución de
Observancia Obligatoria N° 1644-1-2006, emitida por el Tribunal
Fiscal, que se origina de la Resolución N° 07528-2-2005(9), también
de carácter obligatorio, mediante la cual se dispuso que las normas
que establecen el ajuste por inflación del balance general para fines
tributarios (Decreto Legislativo N° 797) no resultan “aplicables en
épocas de deflación, tal como ocurrió en el ejercicio 2001 (…)”.
Si bien mediante la segunda resolución se modificó sustancialmente la
interpretación efectuada por la propia Sunat según Directiva N° 001-
2002/SUNAT, la cual “precisó” la aplicación de las citadas normas de
ajuste por inflación en los casos en que el factor de re expresión
resultare inferior a la unidad; no se estableció si era de aplicación el
numeral 1 del artículo 170 del Código Tributario.
En ese sentido, mediante Resolución N° 01644-1-2006 (la primera
resolución citada), el Tribunal Fiscal dispuso que de conformidad con
el numeral 1) del artículo 170 del Código Tributario “no procede aplicar
intereses ni sanciones por la incorrecta determinación y pago del
Impuesto a la Renta que se hubiera generado por la interpretación
equivocada sobre los alcances de las normas contenidas en el
Decreto Legislativo N° 797 en virtud de lo dispuesto por la Directiva N°
001-2002/SUNAT”.
Como se puede apreciar, el Tribunal Fiscal exceptuó de la obligación
de pagar intereses y sanciones a los contribuyentes que efectuaron el
ajuste por inflación (deflación) en el ejercicio gravable 2001.
En este caso, si la nueva interpretación determinó que algún
contribuyente haya incurrido en alguna omisión en el pago del
Impuesto a la Renta del ejercicio 2001, resultaba posible eximirse de
cualquier responsabilidad, efectuando el pago del tributo hasta el 2 de
mayo de 2006. Por el contrario, si el pago no se producía, debía
empezar a computarse intereses a partir del 3 de mayo de 2006.
En el caso de las posibles sanciones por declarar cifras o datos falsos,
entendemos que estas nunca se habrían generado.
CASO PRÁCTICO
¿Procede el conteo como rectificatoria de la presentación de una
nueva DDJJ correspondiente a un mismo tributo y periodo
producto de una norma aclaratoria?
Producto de un decreto supremo que precisa temas relativos al cálculo
de un tributo, se produjeron omisiones, las cuales para poder ser
subsanadas, requieren de la reliquidación de este, mediante la
presentación de una rectificatoria. ¿Esta declaración rectificatoria entra
al conteo para determinar la infracción relativa a la presentación de
más de una rectificatoria correspondiente al mismo tributo y periodo?
Solución:
El artículo 170 del Código Tributario tiene como finalidad que el
contribuyente no se vea perjudicado cuando determina un menor
impuesto o, simplemente, no determina impuesto alguno por la
aplicación indebida de una norma, cuya interpretación es ambigua e
imprecisa.
En ese sentido, si luego de aclarada la norma resulta que el
contribuyente es omiso en el pago de impuestos, no les será de
aplicación las sanciones que se originen producto de tales omisiones y
tampoco los intereses que se hubieran devengado.
Por lo anterior, tenemos que si producto de la norma aclaratoria el
contribuyente debe rectificar las declaraciones efectuadas, estas no
deberían tomarse en cuenta para el conteo del número de
rectificatorias realizadas, pues tienen su origen en una interpretación
indebida realizada por la Administración Tributaria. En ese sentido, en
el supuesto de que las declaraciones rectificatorias que se deban
efectuar sean las segundas o siguientes, estas no deberán tomarse en
cuenta a efectos de la configuración de la infracción tipificada en el
numeral 5 del artículo 176 del Código Tributario: “Presentar más de
una declaración rectificatoria relativa al mismo tributo y periodo
tributario”.
ii. Duplicidad de criterio en la aplicación de la norma,
De acuerdo a lo establecido en el numeral 2 del artículo 170 del
Código Tributario. En este supuesto se exime de la aplicación de
intereses y sanciones al contribuyente, debido a que este actuó
conforme al criterio de interpretación de la norma dado a conocer por
la Administración Tributaria (incluyendo al Tribunal Fiscal), y que luego
cambió.
En efecto, se libera del pago de intereses y de sanciones a aquellos
sujetos que incurrieron, respectivamente, en omisiones en el pago de
tributos o infracciones tributarias producto de la aplicación del criterio
anterior adoptado por la Administración Tributaria, pues cuando se da
el cambio de criterio, se denota que estos fueron inicialmente
inducidos en error.
La duplicidad de criterios puede verse materializada a través de las
normas emitidas por la Sunat, esquelas, avisos, oficios, informes,
resoluciones que resuelven reclamos, etc. En el caso del Tribunal
Fiscal, cuando emite sus resoluciones al resolver procedimientos
contenciosos tributarios.
Así pues, los intereses y sanciones no se aplicarán solo respecto de
los hechos producidos mientras el criterio anterior estuvo vigente.
Cabe anotar que si el cambio de criterio es producto de un acto
administrativo referido a un contribuyente en particular, solo surte
efecto respecto de ese contribuyente y no de los demás.
iii. Hecho imputable a la Administración Tributaria
Conforme ya lo habíamos adelantado, mediante la Directiva N° 007-
2000/SUNAT, la Administración Tributaria considera que no debe
sancionarse aquella infracción cuya comisión se debe principalmente a
un acto de la Administración Tributaria, que ha imposibilitado el
cumplimiento de la respectiva obligación tributaria.
De producirse la comisión de una infracción por un hecho imputable a
la Administración Tributaria, la multa que se hubiera pagado será
considerada como un pago indebido.
iv. Fuerza mayor o caso fortuito
En este aspecto, es el Tribunal Fiscal el que ha incluido elementos
subjetivos al momento de determinar la comisión de una infracción.
2. INTRANSMISIBILIDAD DE LAS SANCIONES
El artículo 167 del Código Tributario dispone que “por su naturaleza
personal, las infracciones tributarias no son transmisibles a los
herederos y legatarios, extinguiéndose con la muerte del infractor”.
Así nuestro Código reconoce que la responsabilidad por infracciones
tributarias es de carácter personal, en tal sentido no puede afectar el
patrimonio de un tercero (herederos), en la medida que estos no han
incurrido en una infracción tributaria.
Cabe anotar que estas disposiciones únicamente están referidas a la
aplicación de aquellas sanciones por infracciones cometidas hasta el
momento de la muerte del causante, mas no así al pago de impuestos,
en cuyo caso la obligación tributaria sí es transmisible a los herederos
o sucesores a título universal hasta el valor de los bienes o derechos
que reciban (artículo 25 del Código Tributario), así como la
responsabilidad solidaria que le correspondería como adquirentes.
JURISPRUDENCIA
RTF N° 04979-5-2003 (03/09/2003)
En vista de la apelación hecha en cabeza de una sucesión, contra
varios valores emitidos por la Administración, entre ellos una
resolución de multa, el Tribunal Fiscal considera que en aplicación del
artículo 167 del Código Tributario, que establece la intrasmisibilidad de
la infracciones y sanciones tributarias, por tener estas naturaleza
personal, la resolución de multa que se emitió al haberse incurrido en
la infracción tipificada en el numeral 1) del artículo 178 del mismo
Código, debe dejarse sin efecto, debido a que la sanción que se
establece en dicha resolución se deriva de las omisiones detectadas
por operaciones que realizó la contribuyente fallecida y no así la
recurrente.
CASO PRÁCTICO
Intransmisibilidad de las sanciones
El Sr. Frank Lupo fallece en abril de 2012. Dicho señor mantenía una
deuda con la Administración Tributaria, la cual estaba conformada por
un tributo y una sanción. A la masa hereditaria se le trasladarán todos
los derechos y obligaciones del causante. ¿Procede transmitir la
sanción tributaria a la masa hereditaria?
Solución:
De conformidad con el artículo 871 del Código Civil, la masa
hereditaria tendrá la obligación del pago de las deudas del causante
hasta el momento de la partición, momento en el cual cada uno de los
herederos responde de esas deudas en proporción a su cuota
hereditaria.
En ese sentido, los herederos están obligados al pago de las deudas
generadas por el causante.
No obstante, en este caso los herederos serán los obligados al pago
de la deuda tributaria originada por el tributo y no por la sanción, pues
de conformidad con el artículo 167 del Código Tributario, estas deudas
son intransmisibles.
3. IRRETROACTIVIDAD DE LAS NORMAS SANCIONADORAS
El artículo 168 del Código Tributario establece que “las normas
tributarias que supriman o reduzcan sanciones por infracciones
tributarias, no extinguirán ni reducirán las que se encuentren en
trámite o en ejecución”.
Por la especialidad del derecho tributario consideramos que no existe
identidad sustancial alguna entre infracciones administrativas y delitos
penales, razón por la cual no sería de aplicación el principio de
retroactividad de las normas establecido en el citado artículo 103,
según el cual “ninguna ley tiene fuerza ni efectos retroactivos, salvo en
materia penal, cuando favorece al reo”. Lo contrario implicaría
reconocer además un posible privilegio al infractor frente al
contribuyente cumplidor.
No obstante la prohibición expresa de la norma bajo comentario, en
nuestro ordenamiento jurídico se han dictado una serie de normas
tributarias que benefician al deudor infractor con la extinción de las
multas que se encuentran impagas, tales son los casos de las normas
que aprueban amnistías bajo el ropaje del mal llamado
“fraccionamiento especial de deudas tributarias”. Siendo uno de los
requisitos para el goce del mencionado beneficio de extinción, la
regularización de la infracción tributaria cometida.
Por otro lado, la norma hace referencia a aquellas sanciones que se
encuentran en trámite o en ejecución. En este caso cabría
preguntarnos si la irretroactividad solo es de aplicación respecto de
infracciones que ya han sido detectadas y sobre las cuales ya se
emitió una resolución de multa que es materia de cobro por parte de la
Administración Tributaria; y no respecto de aquellas infracciones que
aún no han sido detectadas, sobre las cuales sí procedería aplicar el
beneficio de reducción o extinción de la sanción que posteriormente se
diera. Creemos que esto en la práctica sí es posible, pues conforme ya
lo habíamos mencionado, se suelen aprobar fraccionamientos que
benefician al deudor infractor con la extinción de las multas que se
encuentran impagas, siempre que subsanen la infracción tributaria
cometida.
CASO PRÁCTICO
Sanción en cobranza coactiva durante promulgación de nuevo
régimen de gradualidad La empresa Cuore S.A.C. tiene deuda
tributaria por concepto de tributos, multas e intereses, la cual se
encuentra en cobranza coactiva desde el mes de julio de 2010. En
agosto de 2010, se publica un nuevo régimen de gradualidad más
flexible al cual la empresa Cuore S.A.C. desea acogerse para rebajar
la multa que tiene en cobranza coactiva. ¿Será posible acoger la multa
en cobranza coactiva a este nuevo régimen de gradualidad? Solución:
En aplicación del artículo 168 del Código Tributario, las infracciones en
trámite o ejecución no podrán ser reducidas, menos extinguidas, por
normas tributarias que posteriormente a este hecho sean
promulgadas. En este orden de ideas, Cuore S.A.C. no podrá acoger
las multas que tiene en cobranza coactiva al nuevo régimen de
gradualidad.
4. FORMA DE EXTINCIÓN DE LAS MULTAS
Según resulta del artículo 27 del Código Tributario, las sanciones por
infracciones tributarias, en caso de constituir sanciones pecuniarias, se
extinguen mediante los siguientes medios: i) pago, ii) compensación,
iii) condonación, iv) consolidación, v) por Resolución de la
Administración declarando la deuda como de cobranza dudosa o de
recuperación onerosa y vi) otros que se establezcan por leyes
especiales.
5. APLICACIÓN DEL RÉGIMEN DE GRADUALIDAD
Según resulta del artículo 166 del Código Tributario, en virtud de la
facultad discrecional de determinar y sancionar administrativamente
las infracciones tributarias, la Administración Tributaria puede aplicar
gradualmente las sanciones, en la forma y condiciones que ella
establezca, fi ando los parámetros o criterios que correspondan para
determinar el monto de las sanciones establecidas.
Es en función de dicha facultad discrecional que la Sunat ha aprobado
un Régimen de Gradualidad de Sanciones, en virtud del cual el monto
de una sanción, cuando estamos ante sanciones de multa, puede
hasta extinguirse por la existencia de una circunstancia atenuante
como puede ser la subsanación voluntaria. Actualmente, dicho
régimen de gradualidad de sanciones es regulado por la Resolución
de Superintendencia Nº 063-2007/SUNAT.
CASO PRÁCTICO
Extinción de la sanción mediante pago
La empresa Alfa S.A.C. ha cometido infracción tributaria, por lo que
tiene una deuda correspondiente a la sanción impuesta ascendente a
S/. 5,000, incluidos intereses. Asimismo, la empresa tiene fondos
suficientes en su cuenta de detracciones con los cuales desea
cancelar la multa. ¿Procede realizar el pago, y por ende extinguir la
sanción, con los fondos correspondiente a la cuenta de detracciones?
Solución:
De conformidad con el artículo 24 de la Resolución de
Superintendencia N° 183-2004/SUNAT, los depósitos efectuados en la
cuenta de detracciones servirán exclusivamente para el pago de las
deudas tributarias que mantenga el titular de la cuenta en calidad de
contribuyente, por lo que al ser las sanciones deuda tributaria procede
la cancelación mediante cheque no negociable emitido por este
contribuyente.
De esta manera se extingue la sanción, ya que se satisface el criterio
de pago estipulado en el artículo 32 del Código Tributario.
6. PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN DE LA ADMINISTRACIÓN
TRIBUTARIA PARA APLICAR SANCIONES
Según resulta del artículo 40 del Código Tributario, la acción de la
Administración para aplicar sanciones o exigir el pago de una sanción
pecuniaria prescribe a los cuatro (4) años, o a los seis (6), cuando no
se ha presentado la declaración respectiva (de ser el caso), contados
a partir del 1 de enero siguiente a la fecha en que se cometió la
infracción o, de no ser posible determinarla, a la fecha en que la
Administración detectó la infracción.
JURISPRUDENCIA
RTF N° 7645-4-2005 (14/12/2005)
De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 43 del Código Tributario
aprobado por Decreto Legislativo Nº 816, el plazo de prescripción de la
facultad sancionadora de la Administración Tributaria respecto de la
infracción tipificada en el numeral 5 del artículo 178 del citado Código
consistente en no pagar dentro de los plazos establecidos los tributos
retenidos o percibidos, es de diez (10) años.