0% encontró este documento útil (0 votos)
27 vistas34 páginas

YESA

El monasterio de Leire en Navarra fue fundado probablemente en el siglo IX y alcanzó su apogeo en la época románica cuando los abades de Leire también servían como obispos de Pamplona. La iglesia románica actual fue consagrada en 1057 y el monasterio recibió donaciones de la familia real y la nobleza navarras, acumulando una gran riqueza. Tras ser abandonado en el siglo XIX, el monasterio fue restaurado en el siglo XX y hoy alberga una comunidad benedictina.
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
0% encontró este documento útil (0 votos)
27 vistas34 páginas

YESA

El monasterio de Leire en Navarra fue fundado probablemente en el siglo IX y alcanzó su apogeo en la época románica cuando los abades de Leire también servían como obispos de Pamplona. La iglesia románica actual fue consagrada en 1057 y el monasterio recibió donaciones de la familia real y la nobleza navarras, acumulando una gran riqueza. Tras ser abandonado en el siglo XIX, el monasterio fue restaurado en el siglo XX y hoy alberga una comunidad benedictina.
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 34

1503-1536 Yesa.

qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1503

YESA / 1503

YESA

El monasterio de Leire, el más importante del reino de Navarra durante los siglos del románico,
se enrisca apartado del mundo en la ladera meridional del Arangoiti, en un emplazamiento que
domina la cuenca del Aragón (y en consecuencia el Camino de Santiago), junto a una importan-
te cañada ganadera. Dista 50 km de Pamplona, que se recorren por la N-240 (futura A-15) direc-
ción Huesca hasta pasar Liédena. Antes de llegar a Yesa hay que tomar la desviación de 4 km
(NA-2113) que conduce hasta la abadía. Abandonada tras los procesos desamortizadores del
siglo XIX, mediado el siglo XX recuperó la presencia monacal benedictina, de tal forma que hoy
constituye un importante foco de espiritualidad así como un centro cultural y turístico relevante.

Monasterio de San Salvador de Leire

C
ARECEMOS DE DATOS VERIFICABLES acerca de la fun- nástico vivido en el Imperio Carolingio y que irradió a la
dación del cenobio. Autores antiguos lo hacían vertiente sur del Pirineo en la primera mitad de la novena
remontar a época visigoda, obnubilados por la centuria. Ya entonces era un centro de acendrada vida reli-
rudeza de su arquitectura. La noticia constatable más anti- giosa con una biblioteca de cierto empaque. No obstante,
gua aparece en la famosa carta de San Eulogio de Córdo- es posible que existiera con anterioridad un núcleo here-
ba, que recorrió varios cenobios pirenaicos en el 848. Por dero de actividades eremíticas evolucionadas en la tradi-
eso hay quien relaciona su fundación con el impulso mo- ción monástica hispano-visigoda. En el siglo IX recibió las

Exterior del monasterio


1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1504

1504 / YESA

reliquias de las santas Nunilo y Alodia. Su importancia en efectiva benedictinización del monasterio, gracias a la
el panorama de la iglesia navarra de los siglos X y XI se labor del primer abad que introdujo la reforma gregoriana,
acrecienta por la cercanía a la familia regia, de la que llegó Raimundo (1083-1121), de probable origen francés. Vere-
a ser panteón. También recibió donaciones de la nobleza mos que poco después se emprendió la terminación de la
navarra, que se fueron incrementando progresivamente. iglesia con formas del pleno románico de tradición com-
Unas y otras proporcionaron a la abadía un rico patrimo- postelano-languedociana llegadas a Navarra a través de la
nio centrado en las cuencas de Lumbier-Aoiz y Pamplona, catedral pamplonesa. La segunda mitad del siglo XII no fue
en los cercanos valles pirenaicos (especialmente Salazar y fácil para el cenobio, que vivió enfrentamientos con la
Roncal) y en lugares escogidos de la Ribera; incluía tam- catedral pamplonesa y asistió a una disminución de su
bién en menor número rentas en Aragón y Castilla. importancia en el panorama de la iglesia navarra. El reco-
Un hecho fundamental para su apogeo en época nocimiento de su exención respecto del prelado pamplo-
románica consistió en el nombramiento de los abades nés en 1174 fue efímero, pues dos papas de finales del XII
legerenses como obispos de Pamplona. La figura de los revocaron tal privilegio. La crisis culminaría en el siglo XIII
obispos-abades es clave no sólo en la importancia del con la sustitución de los benedictinos por los cistercienses,
cenobio como institución, sino también en la sustitución que provocó un conflicto entre monjes negros y blancos
del antiguo templo prerrománico por otro románico con- de nefastas consecuencias ya en época gótica.
sagrado en 1057. Por esos mismos años se constata una El monasterio de Leire fue el primero de los edificios
cercanía a Cluny por dos vías: la posible presencia de uno románicos navarros en llamar la atención de los estudio-
de sus abades en el monasterio borgoñón y las limosnas sos. Tras la exclaustración definitiva, ni siquiera la presen-
que a Cluny hicieron los reyes de Pamplona, protectores cia del panteón regio evitó que en pocas décadas el con-
de Leire. Sin embargo, la abadía legerense nunca pertene- junto se convirtiera en “ruinas venerables”, vendidas en
ció a la familia cluniacense. En fecha discutida del siglo XI, pública subasta (1867). En esas fechas se redactaron
según Fortún en el último tercio del siglo, se produjo la memorias de carácter histórico. En 1875 fue objeto de una

Estado del conjunto a comienzos del siglo XX (Archivo de la Institución Príncipe de Viana. Fondo Comisión de Monumentos)
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1505

YESA / 1505

monografía por parte de Madrazo, quien igualmente le dio un primer periodo de abandono. Vino luego el reco-
consagró un extenso capítulo de su conocida obra sobre nocimiento del valor de su arquitectura medieval, con el
Navarra y Logroño de 1886. A partir de ahí, Lampérez, inicio de labores de mantenimiento y restauración, la rea-
Serrano Fatigati y eruditos locales como Altadill y otros pertura de la iglesia a comienzos del siglo XX y la renova-
miembros de la Comisión de Monumentos de Navarra le ción de la vida monástica benedictina (1954), con la con-
dedicaron su atención. Dejando atrás los pioneros, y espe- siguiente intervención en los edificios antiguos. Entre los
cialmente desde la publicación del documento relativo a la jalones de esta recuperación progresiva hay que citar la
consagración de 1057, todo estudio sistemático del romá- Declaración como monumento histórico de 1867 y la
nico español, ya sea realizado en la península, ya fuera, lo inmediata incautación por la Comisión de Monumentos
menciona con mayor o menor extensión. Entre los hitos Históricos y Artísticos de Navarra, las reparaciones urgen-
que han jalonado el conocimiento de su arquitectura y tes de los años 70 y 80 del siglo XIX, el primer proyecto de
escultura cabe mencionar las aportaciones de Biurrun, restauración firmado por Ramiro Amador de los Ríos
Lacarra, Tyrrell, Íñiguez, Cabanot, Lojendio, etc. En los (1888), las obras iniciadas en 1894, las inauguradas en
últimos años he propuesto revisiones de sus dos fases 1910, los sucesivos arreglos de la cripta (inicialmente en
románicas que aquí comentaré. Asimismo resultan impres- 1919-1920, seguidos por las excavaciones que dirigió Íñi-
cindibles las publicaciones de Martín Duque, quien dio a guez) y la constante atención que le dedicó la Diputación
la imprenta su colección documental, y Fortún, que ha lle- Foral de Navarra a partir de 1940-1943, con la reanuda-
vado a cabo un magistral seguimiento de la trayectoria his- ción de las obras en la cripta y tejados, la habilitación de
tórica del cenobio. la iglesia durante los años 50 y 60 del siglo XX, y la reno-
Como acabamos de ver, Leire resultó dramáticamente vación de la cubierta de los ábsides en 1988. Monumento
afectado por el proceso desamortizador que culminó en grande y complejo, sigue exigiendo continuo manteni-
1835 con la exclaustración definitiva de la comunidad que miento por parte de la comunidad benedictina y del
secularmente lo venía habitando. A partir de entonces se Gobierno de Navarra.

Planta del conjunto

0 1 2 3 4 5m
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1506

1506 / YESA

0 1 2 3 4 5m

Alzado norte

Sección longitudinal

0 1 2 3 4 5m
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1507

YESA / 1507

0 1 2 3 4 5m 0 1 2 3 4 5m

Alzado este Alzado oeste

Planta de la iglesia

0 1 2 3 4 5m
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1508

1508 / YESA

PRIMERA FASE: CRIPTA Y CABECERA aparejo utilizado: sillares de la durísima piedra local trabaja-
dos a puntero que alcanzan alturas de hilada de 60 y 70 cm.
En la iglesia legerense se distinguen con nitidez dos Cada piedra está tallada para el lugar que ocupa, de forma
fases constructivas románicas y su posterior terminación que los tendeles no son perfectamente horizontales, sino
con una gran bóveda tardogótica. La primera fase románica que trazan suaves curvas, lo que denota un trabajo propio de
consistió en la edificación de una nueva cabecera, por los comienzos del románico. Este aparejo ha sido relaciona-
delante del templo prerrománico que excavó y dio a cono- do con la tradición hispana de origen visigótico, pero no
cer Íñiguez (sus restos ocupaban la mayor parte del subsue- hemos de soslayar el prestigio que entonces tenía la utiliza-
lo de la nave única). El motivo de la ampliación no es fácil ción de grandes piedras escuadradas en la construcción en
de confirmar. Se ha escrito que la iglesia prerrománica pudo otros lugares de Europa. A raíz del descubrimiento por Íñi-
haber quedado gravemente dañada por una razia musulma- guez de la cimentación de un muro recto bajo la zona de los
na, quizá la de Almanzor por la Canal de Berdún o la de Abd ábsides, del que no se conservan fotografías, se ha especula-
el Malik de 1005 por Aragón. Sin embargo, no hay confir- do con un hipotético primer proyecto de ampliación inspi-
mación documental de este ataque. Con mayor probabili- rado en la tradición hispana, secuela formal de la cabecera
dad la nueva construcción fue consecuencia del nuevo prerrománica legerense. Pero mientras no se lleven a cabo
rumbo o la revitalización alcanzada por el cenobio en las nuevas excavaciones no podremos confirmar que fuese un
primeras décadas del siglo XI. Examinemos primero el edifi- muro constructivo o bien un mero cierre pétreo al Este de la
cio para luego especular acerca de sus motivaciones. antigua iglesia.
La primera fase incluye cripta y cabecera con tres naves La cripta parece haberse ejecutado para salvar el desni-
rematadas en tres ábsides escalonados, semicirculares tanto vel del terreno, por lo que se extiende bajo las tres naves,
al interior como al exterior. Llama la atención el poderoso constituyendo una auténtica “iglesia baja” como en ejempla-

Planta de la cripta

0 1 2 3 4 5m
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1509

YESA / 1509

res ultrapirenaicos. Se distingue por tanto de otras criptas mente asentaron una columnata continua. Ahora bien, no
meramente litúrgicas, situadas sólo bajo la capilla mayor y renunciaron a los arcos doblados en la separación de las
que alcanzaron cierta difusión en el primer románico cata- naves extremas, lo que implicó cimacios de enorme des-
lán, donde se cubrían con bóvedas de arista sobre columni- arrollo y capiteles acordes. Los fustes de las columnas se
llas. Las dimensiones necesarias en Leire (las naves centrales redujeron al mínimo: tienen de media 40 cm de diámetro y
alcanzan 15,65 m de longitud; la altura ronda los 4,50 m), la son desiguales en altura; en algún caso poseen plintos por
exigencia del uso de un gran aparejo y la inseguridad a la debajo del solado. Se ha pensado que alguno de los capite-
hora de realizar los abovedamientos determinaron una solu- les fue reaprovechado de basas romanas procedentes de
ción atípica: la partición longitudinal del espacio corres- alguna construcción cercana (¿Tiermas?). Íñiguez rebajó el
pondiente a la nave central mediante una arquería, lo que pavimento pero no encontró un nivel común de arranque de
dio como resultado una cripta de cuatro naves estrechas, fustes. La sensación de agobio y rudeza que se experimenta
que se reparten una anchura total de unos 13,50 m (que al recorrer la cripta deriva de la aplicación de unas solucio-
aumenta hacia los pies). Para los soportes acudieron a la nes de planta y alzados no experimentadas previamente. La
alternancia pilar-columna. Dispusieron pilares de triple rin- división de la nave central en dos solventó alguno de los
cón por debajo de los pilares compuestos de núcleo cruci- problemas edificatorios pero fue poco feliz a la hora de la
forme de la iglesia y los combinaron con columnas de fustes utilización de los espacios, ya que el altar principal queda
raquíticos. A la hora de compartimentar en dos el espacio por debajo de la arquería axial.
situado bajo la nave central de la iglesia, renunciaron a los La ornamentación escultórica de esta primera fase
pilares, que hubieran hecho impracticable la cripta y resul- románica se reserva a capiteles y canecillos. En los capiteles
taban innecesarios, pues sólo tenían que soportar el peso de de la cripta se emplean volutas que nacen de bolas acompa-
las propias bóvedas y el pavimento de la iglesia. Simple- ñadas de incisiones paralelas, cabrios incisos, recuadros

Cripta (CMA)
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1510

1510 / YESA

triangulares y superficies lisas con baquetones verticales en te los entestes de las bóvedas laterales con sus respectivos
las esquinas. Alguno de estos motivos parece haber sido eje- ábsides. Da la sensación de que el maestro fue solventando
cutado una vez asentada la pieza. Se aprecia cierta selección sobre la marcha las vicisitudes de una obra emprendida con
en su ubicación: los diseños más torpes aparecen en las una monumentalidad inusual. Desde luego, es mucho más
arquerías laterales, que precisan capiteles de mayores difícil abovedar con este material y disposición que con las
dimensiones pues han de recibir los arcos doblados nacidos habituales bóvedas de arista mediante mampostería emplea-
de los pilares de triple esquina; los más cuidados, dentro de das en el primer románico catalán. Pero, como acertó a ver
la tosquedad general, corresponden a la arquería central. La Íñiguez, el arquitecto supo aprender de su propia práctica,
distribución parece corresponderse con el habitual progreso de modo que la bóveda del ábside meridional está mejor
constructivo, puesto que normalmente se alzaban primero conseguida que la del septentrional. La revisión de las cua-
los muros perimetrales y luego los pilares, y aún dentro de tro ventanas conduce a idénticas conclusiones: algunos
estos antes los que se correspondían con los de la iglesia vanos fueron retallados por debajo de los tendeles, lo que
superior. Los motivos en sí mismos no son tan raros: Caba- demuestra que no todo estaba decidido de antemano, sino
not encontró paralelos en iglesias italianas y francesas de la que el tamaño de los huecos y su abocinamiento eran sus-
primera mitad del siglo XI. En cuanto a las volutas nacidas en ceptibles de cambios sobre la marcha. Y lo mismo podemos
bolas, hallazgos recientes bajo la catedral de Pamplona decir de los soportes, ya que hay capiteles con dobles cima-
prueban que el tema de tallos y remates de esquematización cios monolíticos, otros con cimacios sencillos o carentes de
vegetal nacidos en bolas formaba parte del repertorio él; también hay ménsulas, dovelas que sobresalen en ciertos
empleado en el prerrománico navarro. arcos, etc. Soluciones todas ellas que se manifiestan variadas
El examen detenido de las bóvedas acredita las insegu- e improvisadas, de gran monumentalidad y rudeza.
ridades y torpezas cometidas por los constructores, que Aunque la cripta se construyó con finalidad estructu-
parecen enfrentarse por primera vez a la complejidad de ral, para mantener la ampliación oriental de la iglesia al
abovedar con aparejo de gran tamaño y dureza. Podría jus- nivel de la prerrománica, los monjes aprovecharon el espa-
tificarse que no supieran resolver bien el encuentro entre cio como lugar de culto. Siglos más tarde allí se conserva-
superficies curvas de ejes perpendiculares, pero llama la ban reliquias, lo que coincide con la costumbre románica
atención que tampoco solucionaran con un único expedien- de dedicar estos espacios a tal uso. Además consta en la

Pasaje detrás de la cripta


(Foto: Fundación para la
Conservación del Patrimonio
Histórico de Navarra)
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1511

YESA / 1511

Cripta (CMA)
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1512

1512 / YESA

documentación un interés creciente a lo largo del siglo XI lo que constituye buena prueba de la irradiación comarcal
por incluir en los diplomas los nombres de los santos cuyas de ciertas soluciones del románico legerense.
reliquias custodiaba el cenobio. El acceso desde la iglesia se En el mismo impulso constructivo edificaron la cabe-
realizaba originalmente por una escalera situada en la nave cera de la iglesia con sus tres naves y la torre emplazada
de la epístola, que iluminaban dos ventanas de las que hoy sobre la nave de la epístola. Las dimensiones interiores son
sólo queda a la vista su mitad superior. Antes de las refor- algo distintas que en la cripta: las naves tienen 14,75, 17,35
mas del siglo XX el acceso tenía lugar por otra escalera situa- y 14,18 m de longitud (la anchura viene a ser la misma, en
da justo al otro lado, en la nave septentrional. La puerta de torno a 13,50, también ensanchándose hacia los pies) y
la cripta, que salva el imponente grosor de muro mediante altura dispar: las laterales 9,27 y 9,39 m, y la central 10,64.
tres arquivoltas, se encuentra en el primer tramo de su nave Hacia el exterior ninguna moldura indica el cambio. Se
septentrional; es preciso descender varios escalones para ven, eso sí, las ventanas de las naves por encima de las de
acceder a este espacio oscuro y recóndito, que nos permite la cripta, sólo tres ventanas, una por ábside. Tampoco aquí
experimentar las condiciones del nacimiento de un gran los vanos se enmarcan con elementos ornamentales: ni
arte monumental. Por detrás de la cripta y por delante de la columnas ni arcos baquetonados distraen de la sobriedad
cimentación de la iglesia prerrománica se construyó un del muro. Los huecos son amplios, mayores que los de la
paso abovedado, con el aparejo propio de esta primera fase. cripta, hasta el punto que el central prescinde de abocina-
Habría constituido el acceso al cenobio prerrománico miento interior (en los planos antiguos de Íñiguez en la
desde el camino que venía por el sur. La idea de disponer ventana central sí fue representado abocinamiento, de
un paso abovedado por debajo de la iglesia detrás de la modo que bien hubo una regularización a la hora de trazar
cripta tendrá continuidad en Loarre y Sos de Rey Católico, el plano, bien se amplió el hueco en alguna de las sucesivas

Ábsides
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1513

YESA / 1513

intervenciones en la iglesia). En ambas caras un arco senci- prerrománica que generalmente abandonará el románico
llo, a paño con la superficie mural, enmarca el vano pro- pleno (en comarcas cercanas, especialmente en aquellas
piamente dicho. Por cierto, el arco interior dibuja un traza- con fuerte presencia de propiedades legerenses, perdurarán
do en herradura, quizá recuerdo de alguno empleado en el las iglesias románicas rurales sin contrafuertes, en lo que
edificio prerrománico. Conforme ganan altura, el tamaño parecen ser secuelas de las fórmulas de nuestro cenobio). La
de los sillares es algo menor. Las superficies murales se pro- cornisa descansa en canecillos ornamentados con motivos
longan sin interrupciones hasta la cornisa. También por los muy repetidos en el románico pleno: varias cabecitas
lados los paramentos se extienden sin articulación de con- humanas o animales, figuras masculinas de cuerpo comple-
trafuertes u otros elementos, en lo que constituye una per- to (Íñiguez reconoció en alguno parejas enlazadas), boto-
duración de las continuidades murales propias de época nes y adornos vegetales, retículas, barril y entrelazo. Todos

Interior de la iglesia (Foto: Fundación para la Conservación del Patrimonio Histórico de Navarra)
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1514

1514 / YESA

Capiteles de la iglesia. Primera fase (cabecera y naves)


1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1515

YESA / 1515

estos motivos se labraron toscamente y están deteriorados. incluso figurativos humanos, como las tres cabecitas de un
No resultarían extraños en una pobre ermita rural, por lo cimacio que igualmente flanquea un ábside o el personaje
que sólo se entienden en Leire dentro del ambiente prime- erguido que se arrincona en un lateral de otro. Cabe poner
rizo y rudo que caracteriza esta fase. en contacto estas primicias figurativas con los canecillos de
Por dentro encontramos tres naves de ejes paralelos los que antes hemos hablado. Algunos de los motivos más
cubiertas con bóvedas de cañón sobre fajones y sin transep- cuidados se ubican en las inmediaciones de los ábsides. Se
to. Cada una dispone de dos tramos y termina en el corres- constata, eso sí, un desapego de las normas clásicas (dupli-
pondiente ábside que traza un semicírculo peraltado, sin los cación de algunos collarinos). Las dimensiones de los capi-
ensanchamientos característicos de los anteábsides. Cada teles son dispares, pero no tanto como en la cripta. Las
semicilindro tiene una ventana en el eje, con ensancha- novedades resultan explicables por la incorporación de
miento exterior y abocinamiento interno (salvo la central ya motivos que se estaban desarrollando en focos artísticos más
descrita). Los dos tramos de las naves se articulan mediante renovadores a un taller ya consolidado, que mantenía nota-
pilares compuestos de sección cruciforme, que significan ble continuidad en sus principales patrones ornamentales, al
una relevante apuesta en la línea de lo que será más habitual tiempo que dejaba entrar con mayor facilidad motivos nue-
en el románico pleno. El pilar compuesto cruciforme fue una vos en lugares secundarios (cimacios, canecillos).
novedad de finales del siglo X en Francia (catedral de Or- La nave septentrional tiene una puerta que abre a un
léans) que se recrea en importantes edificios de la primera patio donde se supone estuvo el claustro. Un capitel exento
mitad del XI (por ejemplo en la torre pórtico de Saint- con las habituales bolas y volutas fue localizado en una
Benoît-sur-Loire, con ángulos achaflanados) y acabará esquina hace décadas, vestigio quizá de una arquería claus-
imponiéndose. Los tramos de la nave central vienen a ser tral. La puerta presenta cierta evolución en comparación
cuadrados; los de las laterales, más estrechos, obviamente con la de la cripta, en la medida en que en sus jambas vemos
son rectangulares. Tanto los arcos de separación de naves una columna a cada lado, con capiteles que reiteran los
como los formeros son doblados y tienden al semicírculo, motivos más frecuentes. Pero aquí también advertimos la
pero su traza un tanto torpe los hace rebajados (y alguno falta de conocimiento de elementales normas constructivas,
casi de herradura). Sin duda los constructores tenían inten- ya que dos arquivoltas descansan sobre un mismo capitel.
ción de alzar nuevos tramos de naves. Dejaron preparados Sobre el segundo tramo de la nave lateral fue levanta-
los muros perimetrales y los pilares. Los arranques de bóve- da una torre de dimensiones típicamente románicas. Es
das de las tres naves se sitúan a la misma altura y la central una construcción maciza, perforada a media altura por tri-
carece de iluminación directa, de modo que sigue las fór- ples ventanas. Íñiguez la relacionó con torres aragonesas
mulas que serán más frecuentes en el románico del Poitou. (del tipo de Lárrede, de la que difiere en aparejo, modali-
Cada tramo de nave meridional se iluminaba mediante un dad de arcos y ubicación de vanos) e incluso sirias. Desde
amplio ventanal; en cambio, en el muro norte no abrieron luego, la conjunción de una serie de peculiaridades, como
vanos, lo que va a marcar una norma generalizada en el su ubicación sobre un tramo de nave lateral, el aparejo
románico navarro, cuya arquitectura rural casi siempre pres- empleado, la ausencia de motivos ornamentales que ani-
cinde de vanos septentrionales. En el tramo inmediato al men sus superficies y la disposición de vanos en el centro
ábside de la nave de la epístola vemos dos lucillos abiertos de su alzado, hacen de la torre legerense una obra singu-
en el muro. Tienen medidas semejantes: casi dos metros de lar, sin paralelos en el arte peninsular.
frente por tres de altura. Las dimensiones y labra de sus Evidentemente, la edificación de obra tan magna por sí
dovelas los distinguen de su entorno mural, lo que prueba misma y, sobre todo, en comparación con lo existente en el
que fueron añadidos. Según Moret allí estuvieron enterra- entorno ha de ser producto de tres circunstancias. Primero,
dos los restos de los miembros de la familia regia navarra. de un momento de prosperidad, en que pudieron desviarse
Probablemente el traslado desde su emplazamiento primiti- excedentes para la construcción. Segundo, de una voluntad
vo en el templo prerrománico se produjo con la ampliación de acometer tal empresa. En esas fechas no se aprecia una
del pleno románico. generalizada renovación de fábricas en el reino pamplonés
El repertorio ornamental de las naves es algo más rico ni en los territorios más cercanos, pero sí más allá de las
que el de la cripta. Se mantienen como motivos más difun- mugas (para Francia tenemos el excepcional testimonio del
didos las volutas que nacen en bolas y los cabrios; además, monje Raúl Glaber, que dio fe de una renovación generali-
incluye nuevos diseños vegetales (como la roseta de la zada de templos a comienzos del siglo XI; para Cataluña, la
embocadura del ábside septentrional o la palmeta invertida), prueba de sucesivas consagraciones de edificios importantes
otros geométricos (círculos concéntricos, triángulos) e en los años 30 y 40 de dicha centuria). Hemos de concluir
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1516

1516 / YESA

Portada norte de la iglesia


1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1517

YESA / 1517

Capitel exento que supuestamente


procede del claustro
(Foto: Fundación para la
Conservación del Patrimonio
Histórico de Navarra)

que fueron impulsos externos (como también fueron exter- los obispos-abades se dio en la persona de Sancho, que un
nos los modelos arquitectónicos) los que incidieron en la documento dudoso califica como maestro de Sancho el
voluntad de quienes tomaron la decisión de edificar la nueva Mayor. En diplomas más tardíos consta su condición de
iglesia. Y en tercer lugar, la dirección de obras por parte de canciller regio. Bajo su abadiato no sólo alcanzó uno de sus
un arquitecto singular, que supo compensar su falta de prác- períodos más brillantes la vinculación tradicional del
tica de las soluciones que quiso implantar con un variado cenobio con la monarquía pamplonesa, sino que se dio una
conocimiento de recursos llamados a contar con enorme particular sintonía entre las personas del rey y el prelado.
continuidad en el pleno románico. Es además verosímil -a mi juicio- la identificación de este
Por lo que se refiere a la prosperidad económica, dis- Sancho con el homónimo “obispo de los pamploneses” que
ponemos de estudios detallados del devenir de Leire, fruto estuvo en Cluny y según Jotsaldo, biógrafo de San Odilón,
de la investigación de Luis Javier Fortún. En el segundo fue recordado por el santo al final de su vida (asunto dis-
cuarto del siglo XI, período que se corresponde con la cutido por quienes argumentan que Jotsaldo lo confundió
construcción de cripta y cabecera, el proceso de recepción con un obispo homónimo de Aragón).
de donaciones acababa de iniciarse. No parece que las Que cripta y cabecera se corresponden con la consa-
heredades entonces aportadas pudieran por sí solas espo- gración de 1057 es algo que desde hace décadas aceptan
lear al promotor para emprender tan costosa obra. Pero todos los estudiosos, aunque no siempre fue así (anterior-
por las mismas fechas se produjo otro cambio significati- mente se tuvo por prerrománica o se pensó en que databa
vo. Sancho III el Mayor (1004-1035) instauró hacia 1024 de la consagración de 1098). En cuanto a la fecha de ini-
el sistema de obispos-abades, ensayado previamente de ciación del nuevo templo, la donación de Sancho el de
forma transitoria. En el curso de su “restauración” de la Peñalén de 1057 relacionada con la consagración revela
sede episcopal pamplonesa, el rey obtuvo un incremento que su padre, García el de Nájera, llevaba tiempo desean-
de los recursos económicos de la mitra, mediante la entre- do asistir a esa ceremonia, que significaba la puesta en uso
ga de diversos bienes y el reconocimiento del derecho del de un edificio cuya construcción se habría dilatado en el
prelado a percibir las tercias episcopales en todas las tiempo excesivamente. Pero ningún documento aclara si la
parroquias de la diócesis. De esta forma, en las décadas de nueva construcción había sido emprendida por el propio
1020-1040 el abad de Leire vivió un período de franca García o por su padre Sancho III el Mayor, a quien publi-
pujanza en lo económico. La implantación de la figura de caciones antiguas y recientes han considerado su promo-
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1518

1518 / YESA

tor, dado que está demostrado su permanente interés por ejecución de una obra en concreto exige aportar las razones
Leire (mientras que el hijo inclinó progresivamente sus que lo justifiquen, de tal forma que nos aproximaremos más
intereses hacia Nájera) y en general por el monacato a la verdad histórica en la medida en que seamos capaces de
(como desiderator et amator agmina moncorum lo califica un cro- acumular más evidencias. Hemos apuntado que en el peque-
nista navarro del siglo XI). Un inicio en la década de 1020 ño reino navarro no consta la ejecución de grandes obras a
sería acorde con la lentitud derivada del sistema de talla de comienzos del XI, pero sí en otros lugares, como Cataluña y
sillares empleado en esta fase y con las favorables circuns- varias regiones francesas, entre ellas Borgoña, donde está
tancias vividas en tiempos de Sancho III el Mayor (además Cluny. Por eso de nuevo los historiadores se han inclinado
de lo dicho, su dominio de un extenso territorio en el básicamente hacia tres posturas: o bien Leire sigue fórmulas
norte de la Península y sus probados intereses ultrapirenai- catalanas adecuadas a las posibilidades locales, o bien
cos, curiosamente vinculados a la zona del Poitou de la emplea fórmulas ultrapirenaicas en las que el referente clu-
que antes hemos hablado, podrían haber favorecido la lle- niacense pudo ser decisivo, o bien es fruto de tradiciones
gada al reino pamplonés de un maestro de lejana proce- hispanas occidentales.
dencia y con conocimiento de obras señaladas de su tiem- Conservamos cartas que evidencian la amistad que unió
po). La construcción es radicalmente novedosa con a Sancho III con el abad Oliba, introductor del románico
respecto a lo poco conservado del prerrománico navarro. lombardo en Cataluña y paradigma de obispo-abad. Por ello
Desde luego, lo es en su planta con relación a la iglesia diversos historiadores han supuesto que la idea de renovar
previa de Leire. Y también en su alzado en comparación el edificio y quizá también el modelo arquitectónico vinie-
con el prerrománico navarro, aragonés y riojano, todos ron de Cataluña. En una de las misivas dirigidas a Sancho III,
ellos correspondientes a templos de dimensiones menores. Oliba menciona la “corrección de los monasterios”, concep-
Son muchos los grandes edificios románicos iniciados to dentro del cual –según Lacarra– cabría incluir la recupe-
como consecuencia del nuevo rumbo emprendido por la ración material de los que lo necesitaran tras las campañas
institución de la que dependen. Este parece haber sido el musulmanas. Me parece más ajustada la interpretación de
caso de Leire en la década de 1020, cuando coinciden el García de Cortázar, para quien el contexto de la expresión
renovado interés del monarca y el éxito de la figura del obis- es claro, por lo que la “corrección” ha de entenderse en sen-
po-abad. Hay autores que defienden que también bajo San- tido jurídico-eclesiástico. Varios historiadores han esgrimi-
cho III se produjo la introducción de la regla de San Benito do ciertas semejanzas entre la planta de Leire y algunas igle-
o al menos un inicio de benedictinización del cenobio, aun- sias catalanas, pero desde hace más de sesenta años también
que sólo fuera una “siembra de estímulos benedictinos” uti- se han expuesto las diferencias en los detalles de dichas
lizando la expresión de García de Cortázar. A partir de estas plantas y, sobre todo, en los alzados. Dentro de las cabece-
afirmaciones, propuse ver la construcción del nuevo templo ras triabsidadas escalonadas, de extendidísimo uso en el pre-
como efecto y manifestación del posible intento de bene- rrománico y el románico de todo Occidente, se agrupan
dictinización del cenobio. En cambio para otros, y especial- múltiples variantes que ayudan a diferenciar las filiaciones
mente para Fortún, la benedictinización no fue efectiva arquitectónicas. Y en concreto, ninguna de ellas figura entre
hasta finales de siglo, por lo que no cabría atribuirle papel las formas promovidas directamente por Oliba, quien dotó
relevante en la decisión de alzar una nueva iglesia. a Ripoll de una cabecera de siete ábsides abiertos a un enor-
Profundizar en el modelo arquitectónico que inspiró la me transepto; en Cuxa añadió tras pequeños ábsides por
renovación del templo legerense ha de ser nuestro siguien- detrás de la antigua capilla mayor recta, que se mantuvo aso-
te paso. La idea de construir una nueva iglesia y el modelo ciada a un amplio transepto en cuyos extremos edificó
arquitectónico a seguir no siempre estuvieron en época poderosas torres; y en la catedral de Vic dispuso una cripta
medieval inseparablemente relacionados. Muchas veces el subdividida en tramos cubiertos con bovedillas de aristas y
incentivo de construir algo nuevo procede de un modelo y una iglesia de nave única, con capilla mayor absidal hiper-
las concretas soluciones arquitectónicas vienen de otro u trofiada en comparación con los cuatro pequeños ábsides
otros. Muchos factores influían a la hora de materializar una que la flanqueaban abiertos al transepto. Otras obras rela-
idea: materiales, recursos económicos, maestros constructo- cionadas aunque terminadas tras la muerte de Oliba sí son
res y escultores disponibles, referentes preexistentes, tradi- triabsidadas escalonadas, pero muy diferentes a Leire, como
ciones locales, etc. Ciertamente la arquitectura monástica San Vicente de Cardona, donde cripta y capilla mayor se
medieval ofrece todo tipo de grados a la hora de seguir alejan de la abadía navarra. Por tanto, el referente arquitec-
determinados patrones, por lo que dirimir dentro de la tónico de Leire no pudo ser el primer románico emprendi-
amplia casuística qué factores fueron determinantes en la do por Oliba. Por otra parte, Bango demostró que al fin y al
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1519

YESA / 1519

Torre
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1520

1520 / YESA

cabo Oliba fue “promotor de la tendencia cluniacense” en lo Otros historiadores han vuelto sus ojos hacia Occi-
que se refiere a la ordenación de espacios en las cabeceras. dente, buscando en la arquitectura previa de León, Casti-
Y no hay otros edificios de tres naves del primer románico lla, La Rioja e incluso Aragón obras comparables. Aquí
catalán anteriores o coetáneos de Leire con una cabecera encontraron aparejos de notable tamaño bien trabajados.
semejante. Ni que decir tiene que las diferencias con el pri- Asimismo arcos peraltados, capiteles decorados (si bien
mer románico catalán son acusadísimas en el alzado, ya que con repertorios mucho más ricos y clásicos que los lege-
no se emplean antes de final del siglo XI los pilares com- renses), pilares compuestos (pero no cruciformes) e inclu-
puestos, ni la alternancia de pilar de triple rincón con so algún caso de combinación pilar-columna (no del
columna, y los poco frecuentes capiteles, cimacios e impos- mismo tipo que los de Leire), así como de abovedamiento
tas decorados incluyen motivos de repertorios muy distintos de naves de ejes paralelos con o sin transepto. Sin embar-
al legerense. La articulación ábsides-naves es completamen- go, estos elementos pertenecen a tradiciones arquitectóni-
te distinta. Por no hablar de los muros: el aparejo gigantes- cas distintas y nunca aparecen juntos en un mismo perío-
co de Leire, tan definitorio de su materialidad por dimen- do y territorio que hubiera podido servir como referente.
siones y labra, nada tiene que ver con el sillarejo pequeño Por otra parte los diseños de planta, especialmente la cabe-
golpeado a martillo que se emplea en el románico de tradi- cera, resultan radicalmente diferentes de los empleados en
ción lombarda. Justamente este tipo de material condicionó nuestra abadía. Lo comentado anteriormente sobre un
la apariencia exterior del primer románico catalán, con sus capitel prerrománico pamplonés avala la hipótesis de ante-
lesenas, arquillos y otros recursos ornamentales que con- cedentes locales de muy difícil valoración.
trastan con la severidad, monumentalidad y lisura de los Cabanot con gran acierto estableció que los sencillos
muros legerenses. Y lo mismo sucede con las torres: dos alzó diseños escultóricos legerenses no son un unicum en la
Oliba en Cuxa, en los extremos del transepto que no existe Europa de comienzos del románico, sino que ensayos
en Leire; una sobrevivió a los pies de Ripoll; la de Vic queda decorativos con cabrios y volutas fueron abordados en
en el lateral norte, todas con la habitual sucesión de vanos Francia e Italia, lo que ha sido corroborado por nuevos
en altura, muy diferente de Leire, por no hablar de las reali- hallazgos de los últimos años. No sólo los capiteles, sino
zadas más tarde, en cualquier lugar del templo, puesto que la elevada valoración del aparejo monumental en la Fran-
ninguna viene perforada por un único nivel de vanos en el cia de la primera mitad del siglo XI, cuyas alabanzas han
centro de su desarrollo. quedado escritas, y el deseo de abovedamiento con piedra
Esto no significa que Leire fuera reacio a cualquier labrada (distinto de las bóvedas catalanas anteriores a
solución procedente del primer románico de los condados, 1050) coinciden con los primeros pasos de un nuevo arte
ya que –como advirtió Íñiguez– las puertas de cripta e igle- monumental desarrollado en distintos lugares de Francia y
sia presentan una delgada rosca exterior muy semejante a en el que Cluny parece haber jugado un gran papel. Evi-
la que vemos, por ejemplo, en Loarre. Se trata de un com- dentemente estamos hablando en esas fechas de Cluny II,
portamiento muy normal en el arte románico, en el que los la iglesia del abad Mayolo que Odilón abovedó, sustituida
artistas no rechazan la asimilación de formas de distinto por Cluny III en la segunda mitad del siglo XI. Lo que los
origen en una misma obra. Otro nexo de unión con expe- siglos habían preservado de Cluny II quedó completamen-
riencias arquitectónicas de Cataluña y Rosellón se encuen- te arrasado años después de la Revolución Francesa, por lo
tra en la disposición de tres naves paralelas abovedadas, que su conocimiento resulta muy deficiente. Según los
que podría obedecer a tradiciones hispanas puesto que la estudios arqueológicos emprendidos por Conant, contaba
vemos en otros lugares de la Península. Ahora bien, ya con tres naves, amplio transepto y varias capillas escalona-
hemos dicho que será la disposición que caracterice la das al final de largos tramos en que quizá se combinaran
arquitectura del pleno románico en el Poitou, territorio pilares con columnas. Y digo quizá porque aunque así fue-
con el que Sancho III mantuvo relaciones directas. Ningu- ron representados en el plano de Conant, historiadores
no de los templos catalanes y roselloneses donde aparecen rigurosos como Vergnolle desconfían de cualquier hipóte-
las tres naves abovedadas, debido a sus pequeñas dimen- sis planteada con respecto a su alzado. En iglesias relacio-
siones y a su escasa relevancia desde el punto de vista his- nadas con Cluny II durante la primera mitad del XI se aco-
tórico, pudo haber servido de referente para la gran metieron renovaciones arquitectónicas diversas que tienen
empresa legerense. En conclusión, aunque las indicaciones en común el anhelo de monumentalidad. Conant las carac-
de Oliba pudieran haber incentivado al rey a la hora de terizó con una lista de elementos de la que extraemos las
reformar y proteger los monasterios, está claro que el aplicadas en Leire: tres naves y en ocasiones tres ábsides
modelo arquitectónico no vino de allí. escalonados, generoso uso de la sillería, robustos pilares
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1521

YESA / 1521

compuestos, capiteles tallados con follaje y figuras grotes- inserta en un momento de gran creatividad y desarrolla
cas, y macizas bóvedas de cañón con fajones. También incipientemente muchas de las constantes del pleno romá-
fueron normales otros rasgos no empleados en nuestra nico. Sin duda tenía nociones de lo ultrapirenaico, puesto
iglesia, como el dilatado transepto y las bóvedas de arista que empleó formas desconocidas en la Península como el
(difíciles de trazar con un aparejo tan grande). Y es que el pilar compuesto cruciforme, su alternancia 1-1 con colum-
seguimiento de Cluny II nunca fue uniforme, especialmen- nas, el abovedamiento a notable altura (muy superior a lo
te no generó una imitación fiel de su planta, dado que ofre- existente por entonces en los condados catalanes), la orna-
cía un modelo algo antiguo, alzado a mediados de la cen- mentación geométrica y vegetal, etc., y muy probable-
turia anterior y pronto sustituido por Cluny III. Este es el mente incorporó tradiciones hispanas ya reseñadas. Se
modo en el que pudo influir sobre la edificación de Leire comportó como otros grandes creadores, extrayendo lo
en tiempos de Odilón, amigo de Sancho III y probable- que le convenía del magma del que nacieron las grandes
mente del abad Sancho. creaciones del románico pleno. Aquí radica la importancia
Un arquitecto audaz, con conocimientos de cantería, de Leire, no en la perfección de sus soluciones, sino justa-
que aceptó emprender una obra singular fue el verdadero mente en la temprana aceptación de un reto de gran
responsable del resultado final. La actividad del maestro se monumentalidad (a nivel hispano, claro), al que dio res-

Interior de la iglesia. Primera fase (CMA)


1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1522

1522 / YESA

puesta un maestro sin soluciones preconcebidas para todas SEGUNDA FASE: MUROS PERIMETRALES Y PORTADAS
las estructuras que exigía el proyecto. Y por eso en Leire
sentimos como en pocos lugares el nacimiento de la arqui- La segunda fase consistió en la prolongación de los
tectura monumental románica, esa génesis que antiguos muros perimetrales y la terminación mediante una monu-
historiadores hubieran descrito como los primeros vagidos mental fachada occidental, pero no sabemos cómo resol-
de un estilo llamado a triunfar en toda Europa. vieron las cubiertas, si llegaron a abovedar la ampliación o
La iglesia quedó inacabada. Parece que los muros bien ejecutaron una cubierta de madera sobre antiguos
perimetrales enlazaron con los prerrománicos. Quizá ese soportes prerrománicos recrecidos en una solución provi-
era el proyecto inicial: la edificación de una nueva cabe- sional que perduraría hasta su sustitución por la bóveda
cera que conectara con las naves antiguas. Este compor- tardogótica. Los muros se alzaron con aparejo bien escua-
tamiento fue mucho más frecuente de lo que suponemos drado de menores dimensiones que el consagrado en
en época románica. Todavía hay en Francia y en España 1057, articulados interiormente mediante arcos ciegos,
muestras del sistema de edificación por partes (de este uno por tramo, que enmarcan las ventanas adornadas con
modo actuó el propio abad Suger cuando añadió a las arcos abocelados sostenidos por columnillas con los
naves carolingias de Saint Denis una cabecera y una correspondientes capiteles. La existencia de una inscrip-
fachada occidental que significaron el nacimiento del ción en el primer contrafuerte septentrional de esta segun-
gótico). Una vez alcanzada la conexión con la iglesia da fase con el texto MAGI[S]TER FULCHERIUS ME FECIT ha
prerrománica, los monjes legerenses pensaron que podría sido interpretada como identificadora de quien dirigió las
darse por culminada la campaña y dejaron para otro obras, de origen francés. En el mismo muro y flanqueada
momento la continuación. Que estaba prevista una pro- por marcas de cantero en forma de P se leyó otra inscrip-
longación es algo evidente, ya que los soportes quedaron ción con la palabra AZNAR. Entre los monjes de este nom-
preparados para recibir nuevos arcos de separación de bre documentados en la primera mitad del siglo XII, al
naves que extendieran las tres hacía Occidente. Pero menos uno escribió diplomas en la década de 1120.
merece la pena comentar otras circunstancias que quizá En el muro sur abrieron una puerta, que fue exterior y
iluminen acerca de lo que pudo suceder. Por una parte, hoy comunica con una capilla. Pensada como acceso a la
en la época en que se llevó a cabo la consagración (1057) iglesia por el lado del camino, consta de tres arquivoltas de
se había producido una novedad. No sólo había muerto medio punto constituidas por bocel liso entre medias cañas,
el abad Sancho, impulsor de las obras, sino que había y chambrana apenas moldurada. Las arquivoltas descansan
sido nombrado obispo de Pamplona un antiguo prior de en columnas de fuste monolítico, con capiteles decorados.
Leire, mientras que el abad legerense Fortunio era obispo El paso de los siglos ha deteriorado los motivos: palmetas
de Álava. El ensayo no tuvo éxito por lo que se volvería inscritas en herraduras, tallos, máscara de la que brotan aba-
temporalmente a la situación previa. Eso significa que a nicos rematados en bolas, otra vez palmetas inscritas en
partir de 1054 el abad de Leire dejó de contar con las herraduras con hojas angulares, máscara con tallos triples
rentas episcopales. ¿Determinó esa circunstancia la inte- anudados, y tallos triples con racimos y hojas talladas a
rrupción de las obras y la consagración de lo ya edifica- bisel. El tímpano, organizado como los más antiguos
do? Por otra parte, el examen del muro septentrional evi- mediante dintel completado con pieza curva, incluye un
dencia una serie de titubeos en el aparejo del contacto crismón de seis brazos, con las habituales alfa y omega col-
entre fábricas. Advertimos una continuidad un tanto gadas de la X, y con un travesaño pequeño en el seno de la
torpe de los grandes sillares, que se montan escalonada- P; la S se cruza con la prolongación del palo de la P. Lo sus-
mente sobre una inicial cesura y parecen extenderse tentan dos ménsulas, la de la izquierda parece adornada con
hacia el Oeste con un seguimiento más rudimentario de una cabeza de buey y la de la derecha lleva un león de cuya
los tendeles. ¿Habría fallecido el maestro director de las boca salen dos piernas. Es el habitual tema del monstruo
obras, emprendidas décadas atrás, lo que provocaría una devorador de tanta difusión en el románico navarro a partir
parada inicialmente no deseada? Estos interrogantes no de la catedral de Pamplona y con antecedentes tolosanos.
empañan una realidad: la fase consagrada en 1057 resul- La combinación buey-león según textos de época románica
taba suficiente para que la próspera comunidad legerense evocaba la ornamentación del templo de Salomón. La puer-
pudiera desarrollar la liturgia en un espacio mucho más ta está perfectamente trabada con el muro meridional y la
monumental y bello que el prerrománico, por lo que ventana que hay a su lado muestra doble abocinamiento.
abad, monjes y familia regia pudieron dar por cumplidos En las ventanas se despliega un repertorio ornamental
sus objetivos y por cerrada una etapa. en el que figuran de nuevo asuntos propios del pleno romá-
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1523

YESA / 1523

Exterior desde el lado norte

Interior con los muros


perimetrales de
la segunda fase (CMA)
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1524

1524 / YESA

Portada del lado sur Capitel de una ventana

nico languedociano: tallos enlazados cuyos remates se abren ficables por el tiempo en que fueron redactados, como la
como abanicos terminando en botones, hojas grandes que afirmación de Madrazo de que se trata de una obra encar-
enmarcan palmetas, tallos sinuosos que se abren en semipal- gada por los cluniacenses y ejecutada con toda rapidez
metas, máscaras de esquina de cuyas bocas salen patas de cuando recuperaron el cenobio en los años setenta del siglo
largos tarsos y uñas y, sobre todo una pareja de aves que XIII. Se trata de una entrada realmente monumental, consti-
enlazan sus cabezas para picar sus patas delanteras. Estos tuida por tímpano sobre parteluz (la anchura del vano alcan-
dos últimos temas parecen desarrollar otros que figuraban za 2,90 m) y cuatro arquivoltas, más un cúmulo de relieves
en la portada occidental de la catedral de Pamplona. Con- repartidos por enjutas y jambas. Está protegida por un teja-
cretamente el de las aves es, para Íñiguez y quienes lo han dillo restaurado que sigue las pautas del que hubo con ante-
estudiado, “más avanzado de tipo que los anteriores” por el rioridad. En el tímpano se alinean seis personajes erguidos
modo como están hechos el cuerpo, el plumaje y los cuellos de tamaño decreciente (hay sitio para un séptimo del que ya
pelados. Coincido en esta apreciación, que se une a muchos no quedaban vestigios en 1875). En el centro la figura
otros indicios presentes en la portada legerense para pensar mayor representa a Cristo, con nimbo crucífero y gesto de
que la decoración de esta segunda fase es posterior a la puer- bendición mientras sujeta un libro ante el pecho. Reposa los
ta catedralicia pamplonesa. pies descalzos sobre dos leones (?), uno sin melena. A su
La obra escultórica de mayor empeño se encuentra en derecha María alza sus manos ante el pecho en un gesto de
el hastial. Se trata de la famosa Porta Speciosa (puerta hermo- significados variables en el románico y reposa sus pies cal-
sa) que ha interesado a tantos estudiosos y aficionados, y zados sobre un cuadrúpedo sin cabeza de pezuña hendida.
sobre la que se han escrito juicios peregrinos, algunos justi- A continuación San Pedro porta las llaves en la derecha y un
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1525

YESA / 1525

libro en la izquierda; a sus pies dos cuadrúpedos. Y por últi-


mo un escriba, que con el estilo traza algo sobre una tablilla
y lleva a sus pies una liebre. A la izquierda del Señor apare-
ce otra figura masculina portando un libro en la mano
izquierda y cruzando la derecha ante su regazo; ha sido
identificado con Santiago por la cercanía de la ruta jacobea
y también con San Juan, que formaría la habitual pareja con
María; el animal bajo sus pies está roto. A su lado hay una
figura descabezada, que muestra la palma derecha y sujeta
un libro con la izquierda, de lo que deducimos que sea un
apóstol; bajo sus pies descalzos un cuadrúpedo con garras y
largas orejas. Las figuras están rodeadas por palmetas inscri-
tas grandes y desiguales.
Vienen luego las arquivoltas, infestadas de motivos sin
orden aparente, donde la imaginación de los escultores ha
ido combinando un repertorio limitado de elementos de la
manera más variada. La interior está formada por un bocel
adornado en su parte superior con tallos de diversa con-
formación terminados en frutos granulosos, capullos y
otras formas vegetales; y en la inferior por motivos seme-
jantes a los que se unen máscaras, cabezas humanas con y
sin barba, al derecho y al revés, alternando desordenada-
mente con cuadrúpedos, flores, hojas, caracoles, pájaros,
espigas y tallos. La segunda arquivolta cuenta entre sus
Portada occidental (Porta Speciosa) a comienzos del siglo XX
(Archivo de la Institución Príncipe de Viana. Fondo Comisión de Monumentos)

Portada occidental
(Porta Speciosa)
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1526

1526 / YESA

motivos ornamentales animales variados de largas patas, tocando instrumentos diversos, un avaro con la enorme
con garras o pezuñas, alguno mordiéndose la pata, grifos y bolsa al cuello, un espinario, dos hombres de grandes ore-
otros híbridos, aves que se pican el dorso, la pata o llevan jas, uno de ellos portando dos redomas, una serpiente
hojas o bolas en el pico, cabezotas humanas y animales (de enroscada, contorsionistas, cabezas de fiera y humanas en
las fauces de una salen dos manos), hombres en cuclillas, distintas formas y actitudes, con gorros o barbas bífidas o
etc. La tercera vuelve a emplear el esquema del bocel flan- largos cabellos, etc. Como se ve, un sin fin de motivos,
queado por motivos diversos, entre ellos cabezas de fieras, varios de ellos habitualmente de carácter negativo, que no
cuadrúpedos patilargos, cabezas humanas, aves que se parecen guardar orden ni mensaje. Las arquivoltas están
picotean diversas partes del cuerpo, pez, bota, redoma, separadas por molduras decorativas con palmetas inscritas,
una arpía que se pica el dorso, etc.; y por debajo del bocel entrelazos, animales alargados, cabezas de cuyas bocas
otra vez tallos variados, una mano, garras, etc. La cuarta brotan tallos y ajedrezado.
arquivolta es semejante a la segunda en cuanto que las En las enjutas los temas se distribuyen empezando por
figuras ocupan la parte sobresaliente de un diseño achafla- la parte superior izquierda del observador, donde encon-
nado. Hay otra vez aves, animales variados muchos de tramos un primer grupo de figuras grandes: San Miguel
ellos patilargos, con o sin melena, cabra, mujer y hombre matando al dragón, Cristo flanqueado por San Pablo y San
que se mesan los cabellos, figuras en cuclillas, músicos Pedro, y santo descabezado con libro (hay quien ha visto

Porta Speciosa. Tímpano y arquivoltas


1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1527

YESA / 1527

en este cuarteto la Transfiguración, con lo que en vez de mando al Juicio Final y junto al esqueleto avaricioso vemos
Pablo estaría representado Santiago, pero la figura aparece un híbrido. Por debajo del esqueleto y del personaje del
con calvicie y a la derecha de Cristo, lo que hace más pro- pez, en la enjuta derecha, vuelven a figurar relieves de gran
bable la primera hipótesis). Ya hacia el centro los relieves tamaño: una figura deteriorada irreconocible, una Anun-
se hacen más pequeños, obligados por la altura que van ciación con el ángel alzando la cruz y la Visitación con las
alcanzando las arquivoltas. Siguen dos jóvenes acompaña- primas unidas en un tenue abrazo bajo un torso angelical.
das por una gran mano (¿Nunilo y Alodia con la Dextera Debajo de la Visitación vemos un entrelazo vegetal con
Domini?), otra joven de pie junto a una que inclina la cabe- pámpanos y racimos, entre los que asoma una cabecita.
za ante otro personaje (¿martirio de las santas?), figura de Volviendo a la parte baja de la enjuta izquierda, un santo
pie con una serpiente que recorre sus piernas (personifica- con báculo y un recuadro de entrelazo. Por debajo de la
ción de la lujuria según Cuadrado), personaje sentado muy moldura que continúa los cimacios, en el lado norte se
estropeado y, ya pasado el centro hacia la derecha, un colocaron un león, un santo y otro león que tiene bajo sus
esqueleto con bolsa, representación de la avaricia en la garras un personaje; en el lado sur se conserva el león supe-
línea del pórtico de Moissac, junto a él otro sentado quizá rior, pero han desaparecido el santo y el otro león.
con una gran bolsa al cuello, una cabeza monstruosa de Debemos preguntarnos hasta qué punto los autores de
cuya boca brotan rayos (¿Leviatán?), una figura esqueléti- la portada procuraron presentar un programa coherente o
ca con sudario sujetando a un joven y un personaje llevan- simplemente una yuxtaposición de temas, y también en
do sobre su hombro un enorme pez (tema asociado a qué medida todos y cada uno de los elementos que en ella
representaciones de vicios). Debajo de las santas y del aparecen comportan un contenido en clave religiosa o
Leviatán un joven y un ángel hacen sonar los cuernos lla- simbólica. Recientemente he propuesto que la portada sea

Porta Speciosa. Tímpano


1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1528

1528 / YESA

leída como otras de la primera fase de las grandes portadas


románicas españolas, que yuxtaponían ideas sin priorizar
claramente una a la que las demás sirvieran de comple-
mento. Así, un primer grupo de relieves corresponderían a
los titulares del cenobio, que desde 1098 eran el Salvador
y la Virgen María. Para exaltar la figura de Cristo se dis-
puso la figura central del tímpano y la del Salvador flan-
queado por santos de la enjuta izquierda; para figurar a
María, también una talla del tímpano y las escenas de
Anunciación y Visitación de la enjuta derecha, menores en
tamaño y ubicadas en lugar menos relevante. Junto a esta
idea central vendrían una serie de relieves dedicados al Jui-
cio Final, que sabemos fueron una constante de las puertas
occidentales en el románico pleno. Entre ellos se cuentan
los trompeteros de las enjutas, las cabezas monstruosas, la
figura deteriorada con bolsa al cuello y el esqueleto que
sujeta a una mujer. Un tercer grupo de labras estarían dedi-
cadas a otros santos cuyas reliquias se veneraban en la aba-
día: el martirio de las santas Nunilo y Alodia, el abad iden-
tificable con Virila y otras figuras que quizá aludieran a
San Marcial o a los Santos Emeterio y Celedonio. Estos
programas imperfectamente organizados caracterizan
importantes obras del románico pleno hispano. Los vemos
en Platerías, Puerta del Cordero de San Isidoro de León,
incluso Ripoll ya mediado el siglo XII. Los programas con
una idea principal rectora, siempre una Maiestas Domini, que
se sitúa en el centro y a la que se subordinan y completan
los restantes elementos escultóricos, triunfarán en la
península a partir de 1160.
Estilísticamente todas las figuras humanas comparten
los rasgos principales de su derivación compostelano-lan-
guedociana y se diferencian en detalles menos relevantes.
Aunque hay tres modos de componer las caras, todas coin-
ciden en el ondulamiento de las superficies del rostro, lo
que cuenta con paralelos en la amplia tradición tolosana.
Las diferencias en el modo como sobresalen las bocas, en
el tratamiento de los mofletes o en los párpados se repar-
ten de forma asistemática por los distintos relieves de tím-
pano, arquivoltas y enjutas. Del mismo modo, hay distin-
tos patrones a la hora de resolver las vestimentas, pero
coinciden de nuevo en fórmulas languedocianas, con el
predominio de las amplias bandas curvas paralelas para el
cuerpo y las incisiones curvas en forma de gancho coloca-
das a un lado y otro alternativamente para las piernas.
También aquí las diferencias derivan de factores como la
mayor o menor pericia del maestro que las aplica, el marco
de cada imagen (que permite ensanchamientos campani-
formes en el tímpano pero no en las enjutas), identidad y
postura de la persona a vestir, etc. Estas soluciones no apa-
Porta Speciosa. Detalles de las arquivoltas recen diferenciadas por áreas, de modo que el tímpano se
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1529

YESA / 1529

Porta Speciosa.
Cristo flanqueado
por San Pablo y
San Pedro

Porta Speciosa.
Posible
representaciones
de las santas
Nunilo y Alodia
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1530

1530 / YESA

distinguiera de las arquivoltas y éstas de las enjutas, sino visibles en su desarrollo. El diseño de tímpanos mediante
que en un espacio y otro localizamos los distintos recursos, piezas que se completan hasta alcanzar el semicírculo
combinados con sus variantes. El examen, por ejemplo, de cuenta con paralelos, entre los que señalaremos los geo-
Cristo flanqueado por santos de la enjuta izquierda nos gráficamente cercanos de Jaca y Huesca. Y el modo de
sitúa dentro de un grupo de evidente unidad iconográfica componer mediante relieves cuadrangulares de distinta
y compositiva en el que se han empleado a la vez modos altura no extrañará a quien conozca Platerías o Commin-
de hacer atuendos que, de aparecer en diferentes lugares, ges. La organización de las enjutas por medio de relieves
podrían atribuirse a maestros distintos (y a distintos cuadrangulares que se despliegan por debajo de la cornisa
momentos de ejecución). Compárense las mangas de los hasta ocupar la mayor parte del resalte se corresponde con
brazos derechos de los cinco personajes y se constatarán unas pautas del eje Compostela-Tolosa, ya que así era Pla-
cuatro maneras distintas de acometerlos, maneras que se terías y según Durliat también la puerta occidental de
reparten también por muchas otras figuras del tímpano y Saint-Sernin, dedicada a un ciclo hagiográfico del titular.
las arquivoltas. Razonamientos similares podrían esgrimir- Cronología y autoría van íntimamente relacionadas,
se sobre los tratamientos de rostros, cabellos, barbas, pies, puesto que varios estudiosos han puesto toda la segunda
el tamaño de las manos, gestos y posturas, expresiones, fase en relación con una segunda consagración fechada en
etc. Este y muchos otros casos que no podemos pormeno- 1098 y con la llegada de maestro Esteban al reino navarro.
rizar demuestran que la portada occidental de Leire es el Para algunos habría trabajado en Leire antes de ser contra-
resultado del trabajo de un único taller, integrado por tado para la catedral de Pamplona, quizá traído por el
escultores pertenecientes a la tradición languedociana obispo Peláez (iniciador de las obras catedralicias de San-
(para emitir un juicio sobre el estilo de los diferentes relie- tiago de Compostela) cuando, expulsado de su sede, se
ves resulta aconsejable utilizar fotografías adecuadas, ya refugió en tierras aragonesas. Según un documento rehe-
que el tipo de plegados cambia de apariencia según la cho, Diego Peláez asistió a dicha consagración de Leire.
dirección de la luz y en la actualidad en Leire reciben dis- Nadie duda de la relación entre ciertos elementos escultó-
tinta iluminación las figuras altas y las bajas; por eso es ricos legerenses y algunos de los cinco capiteles de la por-
aconsejable contar con las imágenes tomadas en condicio- tada catedralicia de Pamplona, especialmente las aves que
nes óptimas por Uranga publicadas en la revista Príncipe se picotean las patas, los tallos que terminan en cabezas de
de Viana en 1958). Los restos de pintura reconocibles en aves o la omnipresencia de los leones de dorsos curvados
las orlas de los vestidos del tímpano prueban que la puer- y largas patas. A su vez estos capiteles conectan con obras
ta estuvo policromada. compostelanas. Pero ¿cuál fue el orden de ejecución? En el
Varios autores han hablado de una hipotética ejecu- capítulo sobre la sede pamplonesa explico por qué consi-
ción de la puerta en dos fases. Sin llegar a los extremos de dero que Pamplona es posterior a Compostela. Veamos
Madrazo, que suponía los relieves del tímpano “fragmen- ahora que, del mismo modo, Leire es posterior a Pamplo-
tos de escultura carlovingia incrustados en esta portada, na y al binomio Toulouse-Santiago. Cuando se examinan
residuos acaso de la reedificación que en el siglo IX costeó despacio las obras legerenses nos damos cuenta de que
Íñigo Arista”, otros estudiosos han juzgado que las irregu- ninguna alcanza la calidad en la talla del capitel de las aves
laridades del tímpano justificaban otorgar a sus tallas una de Pamplona, pero se copian todos sus recursos. Quien
cronología más antigua, anterior a 1098, e imaginar un ponga en parangón las aves que se pican las patas de la
montaje definitivo posterior. Pero estos autores difieren a catedral con las de la abadía comprobará que las propor-
la hora de asignar el resto de las piezas a comienzos o a ciones y los volúmenes de Pamplona están más logrados
mediados del siglo XII, o incluso más tarde. Así, para (no es posible extender la comparación a los leones de
Tyrrell las arquivoltas serían posteriores al tímpano, pero lomos arqueados y largas patas, por el deterioro que afec-
de comienzos de dicha centuria, mientras que para otros ta al capitel pamplonés). Si descendemos a nivel de deta-
eran las figuras de la esquina superior derecha las más tar- lle, el trenzado de las colas de las aves está perfectamente
días (hay quien las ha considerado góticas). A mi juicio la conseguido en Pamplona y sólo torpemente insinuado o
puerta se ejecutó tal y como se programó en relación con resuelto en el capitel y en las arquivoltas de Leire (porque
la fachada. Ya se previó su gran desarrollo cuando recorta- el motivo se repite una y otra vez). Lo mismo afirmo del
ron la longitud del último tramo para engrosar el hastial modo como se resuelven los vástagos que unen dorsos de
(donde también embutieron una escalera). La torpeza a la aves y volutas en Pamplona, copiados en Leire (y en igle-
hora de colocar las palmetas grandes y desiguales en torno sias valdorbesas). En Leire no hay sino la sombra y el eco
a las figuras del tímpano no desentona con otras rudezas de la maestría.
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1531

YESA / 1531

Porta Speciosa. Relieves


de la enjuta derecha

Porta Speciosa. Santo con báculo Porta Speciosa. Santo


1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1532

1532 / YESA

Porta Speciosa. Capiteles

Son muchos los rasgos estilísticos e iconográficos que Lescar, etc. En este sentido se entienden las semejanzas
tienen en común Leire, Toulouse y Santiago. Tengo el que Melero ha visto con Moissac, porque ésta última por-
convencimiento de que en buena medida derivan de Pam- tada constituye una obra culminante de las manera tolosa-
plona, pero el hecho de conservar sólo una mínima mues- nas, pero Leire coincide con Moissac en lo propiamente
tra de la escultura de la gran catedral iruñesa hace que tolosano (decoración de orlas, plegados en bandas curvas
reluzcan los recuerdos tolosanos y compostelanos. Las paralelas, etc.) y no en lo más específico de Moissac, como
figuras del tímpano legerense con animales bajo los pies la exquisitez en el canon de las figuras, sus ritmos zigza-
repiten una composición con antecedentes en la Puerta gueantes, incluso descoyuntados, la dulzura de los rostros,
Miègeville tolosana, de la segunda década del siglo XII, y las terminaciones en M de los pliegues verticales, etc. La
en Platerías. La manera de hacer las mangas con anillos de dependencia de Toulouse nos proporciona incluso térmi-
notable volumetría también aparece en Toulouse, tanto en nos cronológicos fiables, no sólo por las obras hasta ahora
el San Pedro como en canecillos de la misma puerta. Tam- señaladas, sino porque la cabeza que abre la boca entre dos
bién tienen origen tolosano (y en ocasiones paralelos com- aves situada casi en el centro de la segunda arquivolta lege-
postelanos) el modo de hacer los labios de las figuras del rense recuerda fuertemente a las de los personajes acucli-
tímpano, la composición de rostros, el desplazamiento de llados de bocas redondeadas de la Puerta Occidental de
las orejas, las terminaciones de plegados en triángulo y Saint Sernin, obra de último taller de calidad de esa igle-
rombo hendidos, la presencia de una onda de mayor resal- sia, que parece haber quedado interrumpida hacia 1118 (o
te sobre el vientre en las vestiduras, los leones de dorso al capitel nº 154 del mismo templo). Igualmente, la coin-
curvo, etc. Véase al efecto como irradiaron todas estas cidencia en la ubicación de los trompeteros y de los leones
soluciones en Valcabrère, Saint Bertrand de Comminges, laterales entre Leire y Platerías no parece meramente
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1533

YESA / 1533

Porta Speciosa. Capiteles

casual; triángulos hendidos y plegado en ganchos alternos había visto la singular portada occidental de Jaca, que sería
aparecen en capiteles de la capilla de Santa Fe composte- copiada en Artaiz por un maestro de formación legerense.
lana, consagrada por el obispo de Pamplona en 1105; plie- La composición de la puerta confirma que su fecha no
gues en filete vertical figuran en Leire y en distintos per- puede ser temprana. Compartimos la afirmación de Gai-
sonajes de Platerías, etc. Son, en consecuencia, muchos los llard de que Leire ha de ser “necesariamente posterior a la
rasgos que comparte Leire con Toulouse y Compostela, Puerta de Platerías de Santiago”. La decoración de las
siempre resueltos en la puerta legerense sin la perfección y arquivoltas con boceles habitados o la inclusión de figura-
plenitud de que hacen gala las impresionantes iglesias ción en molduras intermedias no existen en el románico
tolosana y jacobea. En consecuencia y dadas las relaciones anterior a 1115; en cambio, será una constante en obras a
demostrables entre Pamplona y Santiago, la hipótesis más partir del segundo cuarto del siglo XII. Pero tampoco puede
probable es que en buena medida todas estas fórmulas de ser muy tardía, porque componer un tímpano con una
raíz languedociana llegaran a nuestra abadía a través de la sucesión de figuras erguidas verticales parece impensable
escultura de la catedral de Pamplona (a lo hasta ahora en una abadía de esta importancia en la segunda mitad del
comentado habría que añadir la presencia del plegado en siglo XII. No sería fácil explicar que una obra ajena a las
triángulo invertido hendido de la figura sedente de la por- fórmulas características del tercer cuarto de dicho siglo,
tada occidental de Pamplona conservada en el Museo de especialmente en lo relativo a la flora y demás repertorios
Navarra). Las limitaciones en extensión de esta publica- ornamentales, hubiese sido realizada para un monasterio
ción no permiten que nos extendamos en estas cuestiones. de la importancia que todavía pretendía tener Leire en esas
Por otra parte, la existencia de un león bajo cuyas garras fechas. Además, alguna figura en concreto, como el santo
yace una figura humana hace pensar en que el jefe de taller con báculo de la enjuta izquierda tiene un único pliegue
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1534

1534 / YESA

vertical en la pierna, fórmula que es “reliquia” de un siste- en todo ello intervino el mismo taller, pudo haberse ejecu-
ma de plegados presente en las columnas de Platerías y lla- tado antes de 1110. Por esa razón hace años busqué otra
mado a desaparecer. Por último, si retrasamos mucho explicación. Las ceremonias de consagración o dedicación
Leire, las obras que parecen derivar de su portada (San de iglesias se realizan bajo determinadas circunstancias.
Nicolás de Sangüesa, Artaiz, Navascués, etc.), habrían de No son necesarias tras la ampliación de unas naves hacia
posponerse a unas fechas en las que ya habrían irrumpido occidente (y existen centenares de ejemplos que lo
en estas comarcas otros repertorios propios del románico demuestran). En cambio, la revisión de la documentación
tardío. Por mucha que fuera la decadencia del cenobio, es de Leire da cuenta de un hecho que sí pudo causar una
difícil admitir que encargaran una portada de estas carac- nueva consagración a la que fueran convocados los más
terísticas en unas fechas para las que resultaría absoluta- altos estamentos del reino y del entorno. En esa fecha se
mente retardataria, cuando los últimos rescoldos de la tra- produjo un cambio en la titularidad del monasterio. Antes
dición languedociana habían quedado relegados a iglesias de 1098 todos los documentos considerados auténticos
rurales de valles sin importancia. hablan de San Salvador de Leire, mientras que después de
En resumen, la puerta de Leire fue realizada por un esa fecha aparece la abadía con la dedicación de San Sal-
maestro “secundario” –así lo calificó Gaillard– acompaña- vador y Santa María Madre de Dios. En consecuencia, la
do de colaboradores, todos formados en el lenguaje lan- consagración de 1098 puede ponerse en conexión con el
guedociano-compostelano (el mismo que se manifiesta en cambio de dedicación, un acto cuya trascendencia social
la puerta occidental de Pamplona) en fechas necesaria- somos incapaces de medir (podrían invocarse ceremonias
mente posteriores a la desaparecida puerta pamplonesa y a religiosas comparables de los siglos XIX y XX, carentes de
las obras tolosanas citadas. El taller legerense, de induda- dimensión arquitectónica y de cuya trascendencia social
ble cohesión a tenor de la reiteración de determinados ras- –auténticos hitos en cuanto a poder de convocatoria de
gos formales, probablemente habría llegado a Leire des- masas– queda constancia).
pués de colaborar en la puerta pamplonesa, ejecutada El monasterio de Leire reúne, como hemos visto, dos
antes de la consagración de 1127 (puesto que en seguida fases de ejecución singular en el panorama del románico
se iniciaron las obras del claustro dirigidas por otro escul- navarro y peninsular. Ambas coinciden en presentar con
tor de mayor calidad). Así que las obras de la Porta Specio- cierta rudeza fórmulas artísticas de gran empeño. Y ambas
sa pudieron haber comenzado en la década 1120-1130, destacan por su significado artístico, que rebasa el ámbito
antes de que se evidenciara el declive del cenobio. Dado navarro para proporcionar valiosa información acerca del
que en Artaiz tenemos la confluencia de un artista forma- modo como nacieron y evolucionaron soluciones arqui-
do en Leire con otro integrante del taller del claustro pam- tectónicas y figurativas que constituyeron la savia del
plonés, en una obra pequeña que suponemos ejecutada de románico.
una vez, el estilo de Leire todavía perduraba en Navarra
hacia 1135-1140. Por tanto, el marco temporal de 1120- Texto y fotos: JMA - Planos: APA

1140 habría visto la realización de Porta Speciosa. Las con-


clusiones relativas al plazo que un taller medieval necesi-
taba para ejecutar una obra como esta portada son muy Bibliografía
dispares (en función del número de maestros trabajando,
ALTADILL, J., s. a., pp. 685 y 692-694; ARAGONÉS ESTELLA, E., 1994a, I,
de los recursos económicos, etc.), lo que significa que las pp. 141-145; ARAGONÉS ESTELLA, E., 1996a, pp. 65-66, 125-127, 148-
fechas antedichas han de entenderse como una horquilla 153 y 162; ARBEITER, J. y NOACK-HALEY, S., 1999, pp. 365-369; AZCÁ-
dentro de la cual se habría realizado la obra. Tras Leire, la RATE, J. M. de, 1976, pp. 139-141; BANGO TORVISO, I. G., 1988, pp. 51-
decoración de arquivoltas con boceles habitados siguió 66; BANGO TORVISO, I. G., 1992, pp. 178-183; BANGO TORVISO, I. G.
evolucionando, como vemos en Uncastillo y Echano (dir.), 2006, II, pp. 674, 678 y 816; BIURRUN Y SOTIL, T., 1936, pp. 9 y
63-69; BONNERY, A. et alii, 2000, pp. 141-146; CABANOT, J., 1978, pp.
(Olóriz). 21-50; CABANOT, J., 1987, pp. 39-70; CAMPS CAZORLA, E., 1935 (1945),
Claro que no se puede soslayar una evidencia tan pp. 26-28; CAÑADA JUSTE, A., 1992, pp. 380-386; CHUECA GOITIA, F.,
poderosa como la documentación que atestigua una 1965, pp. 182-183 y 226; CMN, IV**, 1992, pp. 629-639; CONANT, K.
segunda consagración de 1098. En principio, y así fue J., 1991, p. 201, 205 y 338-339; CORTÉS ARRESE, M., 1986, pp. 41-44;
aceptado por los estudiosos, cabría suponer que esa cere- CORTÉS ARRESE, M., 1988, pp. 65-71; CUADRADO LORENZO, M. F., 1993,
pp. 229-245; DRAH, 1802, pp. 440-441; DURLIAT, M., 1964, pp. 70-71;
monia se correspondió con la conclusión de una fase DURLIAT, M., 1986, pp. 81-101; DURLIAT, M., 1993, pp. 51-52 y 131;
arquitectónica. Pero considero probado que ni la amplia- DURLIAT, M. y ALLÈGRE, V., 1969, passim; FERNÁNDEZ-LADREDA AGUADÉ,
ción del templo ni la realización de la portada, dado que C., 1991, pp. 101-108; FERNÁNDEZ-LADREDA, C., MARTÍNEZ DE AGUIRRE,
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1535

YESA / 1535

J. M. y MARTÍNEZ ÁLAVA, C. J., 2002, pp. 60-70 y 95-102; FORTÚN PÉREZ P., 1845-1850 (1985), pp. 168-169; MADRAZO, P. de, 1875, pp. 207-
DE CIRIZA, L. J. (dir.), 1991, pp. 275-295; FORTÚN PÉREZ DE CIRIZA, L. 233; MADRAZO, P. de, 1886, I, pp. 525-564; MANN, J., 2003, pp. 232-
J., 1993a, passim; FORTÚN PÉREZ DE CIRIZA, L. J., 2007, pp. 11-57; GAI- 248; MARTÍN DUQUE, A. J., 1983, passim; MARTÍN DUQUE, A. J., 2004,
LLARD, G., 1938, p. 239; GAILLARD, G., 1956, pp. 121-130; GAILLARD, pp. 19-41; MARTÍN DUQUE, A. J. et alii, 1991, pp. 220-224; MARTÍNEZ DE
G., 1964b, pp. 182-185; GARCÍA DE CORTÁZAR, J. A., 2004, pp. 213-269; AGUIRRE, J., 1996a, pp. 275-281; MARTÍNEZ DE AGUIRRE, J., 2005, pp.
GEN, voz “Leire”, 1990, VI, pp. 488-495; GÓMEZ GÓMEZ, A., 1996, pp. 372-384; MELERO MONEO, M. L., 1992, pp. 12-14; MEZQUÍRIZ IRUJO,
83-86 y 92; GÓMEZ MORENO, M., 1934, pp. 150-152; GOÑI GAZTAMBI- M. A., 2004, pp. 161-170; MOLINA PINEDO, R., 1985, passim; MORAL
DE, J., 1963, pp. 149-213; GOÑI GAZTAMBIDE, J., 1975, p. 372; GOÑI CONTRERAS, T., 1967, pp. 127-153; MORAL CONTRERAS, T., 1988, pas-
GAZTAMBIDE, J., 1979a, I, pp. 153-177, 191-199, 303-308, 370-371 y sim; MORET, J. de, 1648 (1890), I, p. 46 y II, p. 344; MUTILOA POZA, J.
441-454; GUDIOL RICART, J. y GAYA NUÑO, J. A., 1948, pp. 119-122 y M., 1981, pp. 53-166; NAVALLAS REBOLÉ, A. y LACARRA DUCAY, M. C.,
142; ÍÑIGUEZ ALMECH, F., 1966, pp. 189-220; ÍÑIGUEZ ALMECH, F., 1967, 1986, pp. 309-310; OCAÑA EIROA, F. J., 2003, p. 43; OCAÑA EIROA, F. J.,
pp. 265-275; ÍÑIGUEZ ALMECH, F., 1970, pp. 363-364; ITURGÁIZ CIRIZA, 2006, pp. 743-774; OCÓN ALONSO, D., 1996, pp. 59-61; ORLANDIS, J.,
D., 1998, p. 145; ITURRALDE y SUIT, J., 1916, pp. 299-396; JOVER HER- 1976, pp. 358-361; PALOL, P. de y HIRMER, M., 1967, pp. 60-61 y 69;
NANDO, M., 1994, pp. 50-64; KING, G. G., 1920, I, pp. 210-229; KÜNS- PÉREZ DE URBEL, F. J., 1950, pp. 302-304 y 453-454; PORTER, A. K., 19
TLER, G., 1978, pp. 44-45; LACARRA, J. M., 1972, I, pp. 218-222; LACA- I, 218 y 240 y VI, 711-716; QUINTANILLA MARTÍNEZ, E., 1995, pp. 72-
RRA, J. M. y GUDIOL, J., 1944, pp. 221-272; LACARRA DUCAY, J. M., s. a., 89; SENÉ, A., 1966, pp. 365-368; SUREDA PONS, J., 1985, pp. 278-282;
passim; LAMPÉREZ y ROMEA, V., 1908-1909, I, 315 y 533, y II, 222-226; SERRANO FATIGATI, E., 1901a, pp. 13-14 y 19; TORRES BALBÁS, L., 1934,
LINAGE CONDE, A., 1973, II, pp. 104-105; LINAGE CONDE, A., 1985, pp. pp. 177 y 181; TYRRELL, C., 1958, pp. 305-335; URANGA GALDIANO, J.
57-93; LOJENDIO, L. M. de, 1967, pp. 60-120; LOJENDIO, L. M. de, s. a. E. e ÍÑIGUEZ ALMECH, F., 1973, II, pp. 41-51 y 79-80 y 88-89; YARZA, J.,
(TCP 28), pp. 10-23; LOJENDIO, L. M. de, 1975 (TCP 85), pp. 11-12; 1979, pp. 160-162 y 216-217; WHITEHILL, W. M., 1941 (1968), pp.
LÓPEZ, C. M., 1962, passim; LÓPEZ, C. M., 1964, pp. 139-168; MADOZ, 205-208.

Imagen de la Virgen con el Niño

T
ALLA DE MADERA POLICROMADA de veintiocho centí- Nuestra Señora de Yesa
metros de altura. Procedente de la ermita de Santa
María de Yesa, próxima a su cementerio, se conser-
va en una casa particular de la localidad en mal estado, tra-
tada únicamente contra los xilófagos. Se trata de una ima-
gen sedente y frontal, con el Niño sobre la rodilla
izquierda. María viste túnica y manto que le cubre el brazo
izquierdo y deja libre el derecho, cayendo luego sus extre-
midades inferiores en vertical sobre la pierna correspon-
diente; se toca con un velo ceñido a la cabeza, cuyos bor-
des presentan un diseño en zigzag que recuerda al del tipo
“Pamplona-Irache”. La indumentaria de Jesús se reduce a la
túnica. La profesora Fernández-Ladreda la define como de
estilo puramente románico y le da una cronología del
periodo final del siglo XII o principios del XIII.

Texto y fotos: AAA

Bibliografía

CLAVERÍA ARANGUA, J., 1941-1944, I, pp. 512-513; CMN, IV**, 1992, p.


658; FERNÁNDEZ-LADREDA AGUADÉ, C., 1989, pp. 389-390.
1503-1536 Yesa.qxd:1503-1536 Yesa 14/2/08 13:32 Página 1536

También podría gustarte