ADORACIÓN SÁBADO 24-02
Exposición al santísimo: Señor, aquí estoy
Introducción:
A veces es tan difícil poder ver para dentro nuestro, estamos
muy metidos en todas nuestras ocupaciones, en el trabajo,
estudio, casa, familia y amigos, que sentimos que no tenemos
tiempo para parar y preguntarnos ¿cómo estoy, qué me
inquieta, qué es lo que Dios quiere que trate de cambiar hoy?
En este tiempo que Dios nos regala junto a Él, nos pide que
nos hagamos un momento para pensar esas preguntas.
Cancion: instrumental
Evangelio:
Mt 5, 43-48
Jesús dijo a sus discípulos: “Ustedes han oído que se dijo:
Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo. Pero yo les digo:
amen a sus enemigos, rueguen por sus perseguidores; así
serán hijos del Padre que está en el cielo, porque él hace salir
el sol sobre malos y buenos y hace caer la lluvia sobre justos e
injustos. Si ustedes aman solamente a quienes los aman, ¿Qué
recompensa merecen? ¿No hacen lo mismo los publicanos? Y
si saludan solamente a sus hermanos, ¿Qué hacen de
extraordinario? ¿No hacen lo mismo los pagamos? Por lo
tanto, sean perfectos como es perfecto el Padre que está en el
cielo.”
Canción: Jesús estoy aquí
Meditación (1):
¿Jesús, qué quieres de mí?
Soy débil, Señor y no tengo mucho para ofrecer, solo toda mi
nada, solo soy una pobre criatura, que no encuentra descanso
si no es en tu presencia.
Si tan solo pudiera tocar tu manto con los dedos de mi mano,
se que eso me sanaría y me enseñaría a ser mejor, no solo
conmigo, sino, también, con los demás…
¿Le ofrezco a Dios todos esos dolores y cargas cuando ya no
tengo fuerzas?
¿Le ofrezco esos malos sentimientos que no me dejan reflejar
el Amor que él me tiene y tiene hacia los demás?
¿Cómo ser signo de contradicción, Señor? ¿Cómo ser
diferente, si tú no transformas Todo mi Ser?
Sé que muchas de las cosas que hago, te hieren, hoy quiero
pedirte perdón por ellas y que transformes, con Tú Amor,
todo lo malo, en cosas buenas, hacia vos y hacia mis
hermanos.
Canción: De lo alto
Meditación (2):
¿Qué personas y/o actitudes, me hacen perder de vista el
Amor que Dios quiere para mí y los demás?
Hoy, pensando, me di cuenta que hay cosas que me molestan,
que me hieren, que me parecen injustas, que no me dejan
estar tranquilo; estas cosas, muchas, vienen de personas que
me hacen mal o no las sé tratar. En varias de estas ocasiones
en las que las paso mal, me olvido del otro y me alejo
inmediatamente para pensar en mi.
Pero, hoy, Dios me recuerda algo muy importante y es que Él
está en todos mis hermanos, en el que me hiere, en el que me
pide ayuda y se me hace difícil ayudar, en el que nos saca
canas y en el que en vez de ayudar nos complica más todo; y
nos pide que lo amemos tanto a Él, que podamos verlo en
todos lados, hasta en esas personas y que lo amemos a través
de ellos. Así mismo nos pide que seamos más como Él, que
perdonemos y amemos, a todos, aunque nos hieran,
justamente como él nos perdona y nos ama con toda su vida
entregada en Cruz, por nosotros.
¿Cómo es nuestra actitud hacia aquellos que nos hicieron
algún daño?
Que difícil se nos hace, muchas veces el ofrecer la otra mejilla
Señor, tratar a los demás con amor y respeto incluso cuando
nos tratan injustamente, pero se que, de tu mano, todo lo
puedo.
Canción: Tu modo
Dinámica:
Entregamos oración
Al amar a nuestros enemigos y orar por ellos, reflejamos el amor
incondicional de Dios que vive en nuestro corazón y nos convertimos
en el verdadero ejemplo de hijo de nuestro padre celestial.
Sabiendo esto, muchas veces, nos preguntamos: ¿De qué
forma podemos, nosotros, ser diferentes? ¿Qué acción de
bien podríamos entregarle a Dios para con ellos?
Explicamos la dinámica.
Canción: Vive
Canción: Quiero ser santo, señor
Cierre:
"Amen a sus enemigos y rueguen por sus perseguidores"
Jesús nos invita a ser un poco más parecidos a Él, y
superar nuestros instintos, pidiéndonos así que nos
esforcemos en vivir de acuerdo en los principios del amor
y la misericordia. En vez de responder al odio con odio,
podemos mostrar amor y compasión incluso hacia las
personas que nos tratan mal, para así buscar la
reconciliación y la paz.
Guardamos el Santísimo con : Memorial.
Te pido Señor que, en los momentos en los que mí enojo
es más grande que mí amor, no te vayas de mí lado.
Que tu presencia traiga Luz y Fe inquebrantables a mí
vida para enfrentar con valentía cada situación difícil que
se me presente.