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Llegar A Marte - Escena Única Adela Basch

Este documento presenta una conversación telefónica confusa entre Roberto y Mariana donde parecen hablar de temas diferentes sin escucharse realmente. A través de una serie de malentendidos y referencias equívocas a palabras con doble sentido, exploran si quieren salir en una cita aunque parece que hablan de cosas completamente distintas.

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Este documento presenta una conversación telefónica confusa entre Roberto y Mariana donde parecen hablar de temas diferentes sin escucharse realmente. A través de una serie de malentendidos y referencias equívocas a palabras con doble sentido, exploran si quieren salir en una cita aunque parece que hablan de cosas completamente distintas.

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ESCENA ÚNICA

(La acción transcurre simultáneamente en la casa de Roberto y la


casa de Mariana, separadas en el escenario por un biombo. Ambos
hablan por teléfono)

MARIANA: Roberto, lo siento mucho, pero no sé si alguna vez podré


llegar a amarte.
ROBERTO: Pero, yo no te pedí que fueras a Marte, te pregunté si
querías salir conmigo.

MARIANA: ¿Quién habló de ir a Marte? Tendrías que poner los pies


en la tierra.

ROBERTO: ¿Con este frío? Prefiero tenerlos en un par de medias,


sobre todo si son de lana.

MARIANA: (Irritada) ¿De la Ana? ¿Quién es ésa?

ROBERTO: ¿Quién habló de Ana? A mí sólo me importás vos.

MARIANA: ¿Cómo te voy a importar... si vos vivís acá? Para


importarte tendrías que estar en el extranjero.

ROBERTO: (Meloso) ¡Imposible! No soportaría estar lejos de vos.


Prefiero que no me importes.

MARIANA: (Llorosa) Ves, al final no te importo nada.

ROBERTO: (Desesperado) No digas eso, te amo y siempre voy a


amarte.

MARIANA: ¿Siempre vas a Marte? ¿Qué es eso? Tendrías que ser


más realista.

ROBERTO: ¿Realista, yo? Realistas eran los españoles que no


querían nuestra independencia, y yo soy criollo.

MARIANA: Pero eso era en la época de la colonia.

ROBERTO: ¿La época de la colonia? ¿Y cuál es? Porque yo uso


colonia en cualquier momento del año, sea invierno o verano.

MARIANA: ¿Y qué tienen que ver las estaciones?

ROBERTO: (Muy entusiasmado) ¡Muchísimo! Podemos encontrarnos


en la estación de tren y salir a pasear juntos.

MARIANA: Mirá, Roberto, no sé si la idea de salir con vos me produce


interés.

ROBERTO: Claro, las ideas no producen interés, lo que puede


producir interés es el dinero puesto en un banco.

MARIANA: Mirá, me estás invitando a salir, y yo te digo que no sé si


quiero.

ROBERTO: (Lloroso) ¡Pero Mariana! No digas eso. Me destrozás, me


quebrás en dos, me dejás partido.

MARIANA: Es que no sé si sos un buen partido.

ROBERTO: ¿Pero cómo voy a ser yo un buen partido? Si querés ver


un buen partido, vayamos el domingo a la cancha a ver a Estudiantes
y Defensores de Belgrano.

MARIANA: ¡Sí, vayamos! Me encantan los estudiantes que defienden


a nuestros próceres.

TELÓN

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