1.
LOS SERES VIVOS: CARACTERÍSTICAS Y NIVELES DE ORGANIZACIÓN
Características:
● Son sistemas abiertos, ya que intercambian materia y energía con el entorno.
● Presentan una proporción muy alta de ciertos elementos como el Carbono, el
Hidrógeno, el Nitrógeno, el Oxígeno, entre otros.
● Están formados por células (pueden ser una o muchas). Estas células poseen
información genética almacenada en una molécula llamada ADN, una membrana
plasmática que delimita la célula y permite generar un medio interno constante, una
red de procesos químicos que se desarrollan mayormente en el citoplasma y
receptores que permiten “percibir” el entorno, es decir, recibir señales.
● Tienden a una homeostasis, que es la capacidad de mantener su medio interno
relativamente constante y estable a pesar de los cambios del entorno.
● Realizan metabolismo, que es el conjunto o red de las reacciones e interacciones
químicas propias de los seres vivos y que permite el aprovechamiento y la
transformación de la materia y la energía.
● Presentan irritabilidad, que es la capacidad de reaccionar ante estímulos, ya sean
internos o externos e interaccionar con el entorno.
● Se reproducen, es decir, generan descendencia.
● Crecen y se desarrollan: el crecimiento es el aumento irreversible de volumen de
un individuo (por un aumento en su número de células o por expansión de las
células existentes) y el desarrollo se relaciona, en el caso de muchos organismos
pluricelulares, con la diferenciación (especialización) celular.
● Provienen de un mismo ancestro común y su material genético es el ADN. Este ADN
fue experimentando cambios, mutaciones, a lo largo del tiempo y esto permitió que
los organismos evolucionen a través de múltiples generaciones.
● Son sistemas autopoiéticos: los seres vivos son sistemas que tienen la capacidad
de autoorganizarse, autogenerarse y autorregular sus propios procesos y su
organización.
● Son sistemas complejos: están constituidos por componentes que están
interconectados, que son interdependientes, cuyos límites (donde empieza y termina
cada uno) son difusos o permeables y que presentan características emergentes
distintas a la suma de las características de cada componente que lo constituye.
Niveles de organización:
Se trata de “sistemas” donde el conjunto de elementos que los conforman se comporta
como un todo interrelacionado.
Los niveles subatómico, atómico, molecular, macromolecular y subcelular corresponden a lo
abiótico o materia inerte.
NIVELES DE ORGANIZACIÓN EN ORDEN DECRECIENTE
Biosfera: conjunto de todos los seres vivos del planeta y de sus interrelaciones con el
entorno.
Ecosistema: distintas comunidades de organismos en interacción junto a los
componentes abióticos (selva, sabana).
Comunidad: dos o más poblaciones de especies que conviven e interactúan en un mismo
hábitat (distintas especies de peces de la laguna de Chascomús).
Población: miembros de la misma especie (de cualquier organismo vivo, tanto uni como
pluricelular) que conviven en el mismo área (población de hormigas, población de hongos,
pejerreyes de la laguna de Chascomús).
Organismo pluricelular complejo: agrupación funcional de sistemas de órganos en
animales y plantas vasculares.
Sistemas de órganos: agrupación funcional de distintos órganos (sistema respiratorio,
sistema digestivo, etc.).
Órganos: agrupación funcional de distintos tejidos (corazón, pulmones, hojas, etc.).
Algunos gusanos solo alcanzan este nivel de complejidad.
Tisular (referente a tejidos): asociaciones coordinadas y especializadas de células.
Puede tratarse de distintos tejidos pertenecientes a organismos pluricelulares (por
ejemplo a algunos animales) como el conectivo, el epitelial o el muscular pero también de
seres como algunos hongos, chromistas o incluso animales como las medusas donde
este es el máximo nivel de complejidad alcanzado.
Celular: unidad más pequeña de la vida que puede llevar a cabo funciones vitales.
Integración de estructuras subcelulares. Los procariontes y los eucariontes unicelulares
como protozoos, chromistas y algunos hongos solo llegan hasta este nivel de
organización.
Subcelular: agrupación funcional de distintas biomoléculas y sus respectivas
interacciones bioquímicas (virus, membranas biológicas, organelas como mitocondrias y
cloroplastos, ribosomas, etc.).
Macromolecular: unión de moléculas más pequeñas (polisacáridos, proteínas, ADN).
Molecular: unión estable de átomos entre sí (agua, monosacáridos, aminoácidos,
nucleótidos, lípidos, etc.)
Atómico: átomos de elementos (hierro, calcio, etc.).
Subatómico: electrones, protones, neutrones.
2. LA DIVERSIDAD DE LOS ORGANISMOS VIVOS
Todos los organismos actualmente presentes en la Tierra derivan de un grupo de células
originales, al que muchas veces se denomina como LUCA por sus siglas en inglés (Last
Universal Common Ancestor o Último Ancestro Común Universal). Este grupo de
organismos fue evolucionando, gracias a cambios de su ADN, a lo largo de miles de
millones de años hasta llegar a los organismos presentes en la actualidad.
Existen dos formas de clasificar, según su dominio o según su reino:
Bacteria Unicelulares, autótrofos y/o
heterótrofos. Ej: cianobacteria, E. Coli
Archaea
Eukarya Cromista: unicelular o pluricelular,
autótrofos. Ej: algas.
Protozoa: unicelulares, heterótrofos. Ej
amebas.
Fungi (hongos):
unicelulares/pluricelulares, heterótrofos.
Ej: levaduras, hongos de sombrero.
Plantae: pluricelulares, autótrofos. Ej:
cactus, pinos.
Animalia: pluricelulares, heterótrofos.
Ej: perros, humanos.
Dentro de los ecosistemas, los seres vivos se relacionan entre sí por medio de las redes
tróficas, que son complejas transferencias de nutrientes y de energía. Dentro de estas
redes, la interconexión entre los organismos al momento de alimentarse y de ser el alimento
de otros es muy compleja.
➔ En la base de una red trófica se encuentran los productores, organismos autótrofos
como plantas, algas o bacterias fotosintéticas, capaces de sintetizar sus propias
biomoléculas a partir de sustancias inorgánicas como el agua y el dióxido de
carbono. Los autótrofos son la base energético- nutricional de los ecosistemas
terrestres.
➔ Los consumidores, por otro lado, son organismos heterótrofos que se alimentan de
otros organismos, es decir, que incorporan materia orgánica elaborada por otros. Y
mientras que los consumidores primarios se nutren de plantas (herbívoros), de algas
o incluso de cianobacterias, los consumidores secundarios y terciarios (carnívoros)
se alimentan de los primarios y/o secundarios respectivamente.
➔ En cambio, los descomponedores (hongos, ciertas bacterias, etc.), degradan los
restos orgánicos de los seres vivos y los transforman en moléculas inorgánicas u
orgánicas más pequeñas que serán reutilizadas por productores y otros
consumidores. Su rol tiene que ver con el reciclado de la materia.
3. LA CÉLULA COMO UNIDAD DE LOS SERES VIVOS
Según la teoría celular:
● Todos los seres vivos están formados por al menos una célula. Por ello se dice que
es la unidad morfológica (de estructura) de los seres vivos. Es el elemento mas
pequeño que puede ser considerado como algo vivo.
● Las funciones vitales de los seres vivos ocurren dentro de las células. Por ello la
célula es la unidad funcional de los seres vivos.
● Toda célula proviene de otra preexistente.
● Las células contienen el material hereditario.
Organización celular:
Ciertas estructuras celulares son comunes a todas:
● Una membrana plasmática, que delimita la célula y permite generar un medio
interno diferenciado del exterior gracias a ser selectivamente permeable a
determinadas sustancias. Esta membrana se conforma por lípidos (una bicapa
lipídica), proteínas e hidratos de carbono asociadas a los mismos.
● Una o varias moléculas de ADN (ácido desoxirribonucleico), dependiendo del tipo de
organismo, que porta la información genética de la célula.
● El citoplasma, que es el lugar físico donde ocurre gran parte de las reacciones
metabólicas de la célula. Se conforma por el citosol, una matriz acuosa, y por el
conjunto de las distintas estructuras subcelulares contenidos en él.
● Los ribosomas, las estructuras donde se lleva a cabo la síntesis de las proteínas.
Podemos diferenciar a las células, de acuerdo a su organización interna, en dos grandes
grupos:
Célula procariota: los procariotas carecen de un núcleo celular, es decir de una membrana
que rodea el material genético. Suelen tener un tamaño mucho más reducido que los
eucariontes y una velocidad de reproducción mucho mayor: muchas bacterias pueden
dividirse cada 20 minutos. Algunos procariotas poseen estructuras características llamadas
pilis o fimbrias. Ellas le otorgan la capacidad de adherirse y acercarse a la estructura.
Gracias a los pilis pueden enlazar otras bacterias y transferir plásmidos, material genético
“extracromosómico”, a otras células.
Célula eucariota: presencia de núcleo, unicelulares o pluricelulares, mayor complejidad y
mayor tamaño, presencia de compartimentos membranosos intracelulares.
ESTRUCTURAS EXCLUSIVAS DE ORGANISMOS EUCARIOTAS
Nucleo Celular Compartimiento rodeado por una membrana que contiene al
material genético, el ADN
Mitocondrias Organelas membranosa implicadas en la respiración celular
cuyo objetivo es la síntesis de ATP a partir de la ruptura de
moléculas como la glucosa. Presentes en casi todos los
organismos eucariotas
Cloroplastos Organelas membranosas implicadas en el proceso de
fotosíntesis. Presentes en plantas y algas (cromistas)
Peroxisomas Organelas membranosas que participan en procesos de
detoxificación de ciertas sustancias como por ejemplo el
etanol
Sistema de endomembranas Sistema de membranas internas de las células eucariotas
que divide la célula en un sistema de compartimentos
funcionales y estructurales.
Citoesqueleto desarrollado Red de filamentos proteicos que da soporte y forma a la
célula, organizando las estructuras internas. Participa
también en los procesos de locomoción, tráfico intracelular
de sustancias y división celular.
Vacuola central Presente en plantas. Se trata de una gran vesícula rodeada
por una membrana que permite mantener la turgencia de la
célula.
Estructuras presentes en organismos procariotas y organismos eucariotas:
Membrana plasmática Delimita la célula. Presenta permeabilidad selectiva frente a
determinadas sustancias. En general se conforma por una
bicapa de fosfolípidos con proteínas asociadas. En
eucariontes animales: contiene colesterol. En procariontes:
es el lugar donde se desarrollan diversas funciones
relacionadas con la respiración celular y la fotosíntesis.
Siempre presente.
ADN Molécula portadora de la información genética. Se trata de
una molécula en forma de doble hélice formada por dos
cadenas. En procariontes: una sola molécula circular
dispersa en el citoplasma En eucariontes: distintas
moléculas lineales dentro del núcleo celular. Siempre
presente.
Citoplasma Lugar físico donde ocurren gran parte de las reacciones
metabólicas de la célula. Se conforma por el citosol, una
matriz acuosa, y por el conjunto de los orgánulos celulares
contenidos en él como los ribosomas, las mitocondrias y los
peroxisomas. En eucariotas, el citoplasma rodea al núcleo y
está limitado por la membrana plasmática. Siempre
presente.
Ribosomas Estructura celular ubicada en el citoplasma, lugar físico de
la síntesis de proteínas celulares. En eucariotas su tamaño
es de 80S y, en procariontes, de 70S. Siempre presentes.
Pared celular Estructura rígida presente en algunos organismos que
rodea la membrana plasmática brindando protección y
sostén a las células. En eucariontes está presente en
plantas (de celulosa), hongos (de quitina) y algas (de
celulosa). En bacterias está formada por peptidoglicano o
mureína.
Flagelos Se trata de apéndices móviles extracelulares. Su función se
relaciona con el desplazamiento de las células. Pueden
estar presentes en algunos procariontes y eucariontes (ej:
espermatozoides).
Cápsula y/o biofilm Estructura rígida o laxa que rodea la pared celular y está
presente en algunos procariontes y eucariontes como
hongos. Les permite adherirse a estructuras (dientes) o
protegerse de la ingestión por parte de otros organismos.
Tipos de nutrición Heterótrofa: se basa en la incorporación de biomoléculas
sintetizadas por otros organismos (proteínas, lípidos, etc).
Son organismos heterótrofos los animales, los protozoos,
los hongos y algunas bacterias.
Autótrofa: consiste en la síntesis de biomoléculas (glucosa)
a partir de sustancias inorgánicas, por ejemplo agua y
dióxido de carbono. Un ejemplo sería la fotosíntesis. A este
grupo pertenecen las plantas, las algas y las cianobacterias.
División celular Proceso que implica la generación de células hijas a partir
de una célula madre. Puede tratarse de una fisión binaria
(en procariontes) o mitosis o meiosis (en eucariontes).
Comparación entre Procariotas y Eucariotas:
Procariotas Eucariotas
Nucleo celular Ausente Presente
Material ADN circular ubicado en el Varias moléculas de ADN
Genético (ADN) citoplasma formando el nucleoide lineales, asociadas a histonas
Plásmidos (ADN contenidas en el núcleo En
extracromosómico) mitocondrias y cloroplastos: ADN
circular
Pared Celular Formada por peptidoglucano o En animales y protozoos: ausente
mureína En plantas y algas: formado por
celulosa En hongos: formada por
quitina
Compartimentos Ausentes Presentes: Núcleo, Sistema de
membranosos endomembranas, peroxisomas y
mitocondrias Solo en vegetales:
vacuolas, cloroplastos y
glioxisomas.
Ribosomas 70 s 80 s y 70 s
Citoesqueleto Presente (rudimentario) Presente
División celular Fisión binaria Mitosis / Meiosis
Tipo de Autótrofa / heterótrofa Animales, hongos y protozoos:
nutrición Heterótrofa Cromistas (algas) y
plantas: Autótrofa
4. VIRUS Y OTROS AGENTES INFECCIOSOS
Diversos factores, como los desplazamientos de personas en poco tiempo (por turismo,
comercio internacional o migraciones), la deforestación y el cambio climático, pueden
favorecer la emergencia de nuevos virus y/o acelerar la propagación de los ya existentes.
Entre los agentes infecciosos no formados por células, además de los virus, podemos
nombrar a los viroides y a los priones, que infectan a organismos vegetales y al sistema
nervioso de algunos animales, respectivamente.
Virus:
Podemos describir algunas de sus principales características:
● No están formados por células, por lo que no cuentan con una membrana plasmática
ni citoplasma ni ribosomas. Por ello no presentan un metabolismo propio y tampoco
pueden regular su medio interno (homeostasis).
● Necesitan de una célula viva para multiplicarse dado que requieren de su maquinaria
metabólica y de estructuras subcelulares como los ribosomas y mitocondrias, entre
otros elementos celulares. Por esta razón se los considera parásitos intracelulares
obligados.
● Contienen un genoma (material genético) que puede ser ADN (ácido
desoxirribonucleico) o ARN (ácido ribonucleico).
● Presentan proteínas de fijación que les permiten infectar a las células.
● De acuerdo al tipo de virus, pueden transportarse de una célula a otra por distintas
vías (por vía aérea, por fluidos corporales como sangre, semen, saliva o incluso por
materia fecal).
Los virus cuentan con varias estructuras en común:
● El material genético o genoma (ADN o ARN) que porta los genes, es decir, la
información necesaria para formar las nuevas partículas virales o viriones.
● Una cápside de naturaleza proteica, que protege y rodea al material genético y
que puede adoptar distintas formas.
● Las proteínas de fijación (en algunos casos se denominan espículas o spikes)
están presentes en las superficies virales y permiten al virus unirse e ingresar a las
células que van a infectar. Si un virus carece de estas proteínas, no podrá ingresar
y, por ende, tampoco infectar a la célula. Estas proteínas actúan como antígenos, es
decir, estructuras que el cuerpo reconoce como extrañas y contra las cuales genera
anticuerpos (proteínas del sistema inmune relacionadas con procesos de defensa).
Esto nos permite detectar la presencia de una infección viral analizando la presencia
de anticuerpos específicos contra un virus en la sangre del paciente.
● Una envoltura lipídica, que rodea la cápside, pero que no siempre está presente.
Cabe aclarar que no se trata de una membrana plasmática, dado que no presenta
una permeabilidad selectiva ni rodea un citoplasma celular. Se trata de un fragmento
de membrana que perteneció a la última célula que infecta este agente. Los virus
que cuentan con una envoltura membranosa de naturaleza lipídica son más fáciles
de eliminar con detergentes ya estos que la desintegran y, junto a ella, se pierden
los antígenos virales.
Se denomina partícula viral o “virión” a una unidad viral completa y con capacidad de
infectar a otros organismos. Por otro lado, el concepto de virus se suele referir
generalmente al conjunto de estas partículas o a una familia viral determinada.
El ácido nucleico viral (ADN o ARN) es clave para la multiplicación del virus ya que aporta
toda la información necesaria para la formación de nuevas partículas virales. Sin embargo,
será la célula infectada la que interpretará, es decir, decodificará, la información contenida
en el ADN o ARN viral para la formación de nuevas partículas virales. Los virus no se
multiplican por un proceso de división similar a las células, sino que sus componentes se
“ensamblan” dentro de las células y luego se liberan. Al infectar una célula, a partir de una
única partícula viral, se pueden originar miles de partículas. Esta infección puede llevar
incluso a la muerte de la célula infectada.
El ciclo viral o ciclo de multiplicación viral es el conjunto de pasos o etapas desde que el
virus es reconocido por la célula hasta la formación de nuevas partículas virales en el
interior celular y su liberación al espacio extracelular.
➢ Ciclo viral en células procariotas: el primer paso de una multiplicación viral consiste
en introducir el ADN o el ARN dentro de la célula. En el caso de los bacteriófagos o
fagos, deberán perforar la pared celular procariota e introducir a través del orificio su
material genético. La cápside quedará fuera de la célula y será descartada.
Los fagos pueden multiplicarse gracias a dos mecanismos alternativos:
● Pasos de un CICLO LÍTICO VIRAL:
1- Fijación o adsorción: el fago se une a los receptores de la célula por medio
de sus proteínas de fijación.
2- Penetración: el fago inyecta el ADN dentro de la célula bacteriana.
3- Síntesis y replicación: la célula bacteriana sintetiza a partir de la
información genética viral las distintas biomoléculas necesarias para formar
las partículas virales.
4- Ensamblado: los componentes virales se ensamblan formando partículas
virales.
5- Lisis de la célula y liberación de las partículas virales: por acción de los
nuevos viriones se induce la ruptura, es decir, la lisis de la célula
hospedadora y se liberan las partículas virales infectantes.
● Pasos de un CICLO LISOGÉNICO VIRAL: En este caso se repiten los pasos 1 y 2
pero la diferencia reside en que el ADN del fago se integra en el ADN bacteriano.
Este ADN viral integrado en el ADN de la bacteria se denomina profago y cada vez
que la bacteria se divida se replicará junto al ADN viral. Determinados cambios en el
entorno de la bacteria pueden revertir este proceso y transformar el profago en un un
virus activo. En este caso se desencadenará un ciclo lítico (con sus fases de
replicación, ensamblaje y liberación) que llevará a la ruptura de la célula
hospedadora. Cabe aclarar que en diversas infecciones causadas por bacterias
(como la escarlatina, la difteria y el síndrome urémico hemolítico), la capacidad de
generar el daño se debe a la presencia de fagos integrados en el ADN bacteriano y
no a la bacteria en sí. Estos profagos portan la información genética para generar
toxinas que vuelven más patógena a la bacteria.
➢ Ciclos virales en células eucariotas: existen distintas maneras de ingresar y
multiplicarse en las células eucariontes. Esto dependerá, entre otras cosas, si es un
virus envuelto o desnudo. Se ejemplifica el ciclo de multiplicación viral
correspondiente a un virus de ARN como es el SARS-CoV-2:
1- Fijación o adsorción: Los virus se unen de manera específica a ciertos receptores de la
célula por medio de sus antígenos virales.
2- Penetración (a) y decapsidación (b): Las partículas virales ingresan a la célula mediante
la invaginación de la membrana plasmática de la célula. A continuación pierde la cápside.
3- Síntesis: la célula sintetiza (fabrica) a partir de la información genética viral las distintas
biomoléculas del virus (proteínas y ARN viral). Para ello aporta sus propias biomoléculas,
estructuras celulares como ribosomas y mitocondrias y la energía celular.
4- Ensamblaje: Los componentes virales se ensamblan formando los nuevos viriones.
5- Liberación: la célula hospedadora libera a las partículas virales. En este proceso,
porciones de la membrana plasmática rodean a las cápsides virales y se forma así la
envoltura viral. De esta manera, los nuevos viriones abandonan la célula rodeados de una
envoltura que proviene de la 8 membrana plasmática de la célula hospedadora. A partir de
ahora los virus están en condiciones de infectar células vecinas. De esta manera prosigue el
ciclo de infección.
¿Cómo detectar una infección viral?
Muchas veces los detectamos por la sintomatología pero para confirmar su presencia y
saber de qué virus se trata se deben hacer estudios de laboratorio:
● Análisis directos: detectan la presencia del virus por medio de su material genético
(ADN o ARN) o de sus proteínas virales (antígenos).
● Análisis indirectos: se realizan en la sangre y se analiza la presencia de
anticuerpos generados por el paciente contra el virus. Cabe aclarar que estos
anticuerpos también aumentan luego de una vacunación.
¿Evolucionan los virus?
El material genético de los virus puede modificarse, es decir, puede mutar, al igual que el de
los organismos formados por células. Estos cambios, originados muchas veces por errores
durante el proceso de copiado del ADN o del ARN, pueden llevar, entre otros, a que el virus
se fije o que ingrese más rápidamente a las células.
Viroides y Priones:
Los viroides están conformados exclusivamente por una molécula de ARN que no porta
información genética, pero que interfiere con la interpretación, es decir con el
procesamiento, de la información genética de las células que ellos infectan. Son agentes
infecciosos causales de enfermedades de importancia económica en plantaciones. Por otra
parte, los priones están constituídos exclusivamente por proteínas. Infectan a células del
sistema nervioso central y son responsables de patologías neurodegenerativas letales
características de mamíferos, también conocidas como encefalopatías espongiformes
transmisibles. Una problemática importante es que son resistentes a los procesos de
esterilización que se utilizan habitualmente para eliminar los distintos tipos de agentes
infecciosos.