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Mis Defectos de Caracter Taller

El documento habla sobre defectos de carácter y formas de eliminarlos. Menciona el Método de las Fichas de Póquer que sugiere escribir virtudes y defectos en fichas para trabajar en ellos de forma aleatoria. También dice que nuestros defectos producen incapacidades y que es necesario esforzarse para eliminarlos y reemplazarlos por virtudes.
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Mis Defectos de Caracter Taller

El documento habla sobre defectos de carácter y formas de eliminarlos. Menciona el Método de las Fichas de Póquer que sugiere escribir virtudes y defectos en fichas para trabajar en ellos de forma aleatoria. También dice que nuestros defectos producen incapacidades y que es necesario esforzarse para eliminarlos y reemplazarlos por virtudes.
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MIS DEFECTOS DE CARACTER

ENCONTRE QUE EN CADA DEFECTO QUE SE ELIMINABA, HABIA


ESCONDIDO UN ELEMENTO POSITIVO

Me gusta leer mucho sobre el tema del alcoholismo y las adicciones en general. En este
momento estoy leyendo un libro que escribió el que hasta ahora se cree fue el primer
sacerdote católico en ingresar a la comunidad de Alcohólicos Anónimos en busca de ayuda.
Su nombre era Ralph Pfau. El padre Pfau escribió varios libros sobre el Programa usando
el pseudónimo John Doe (la versión en inglés de Fulano de Tal) que me han interesado
muchísimo. El que actualmente estoy leyendo me ha sido de mucha ayuda para mantener
mi sobriedad emocional, cosa que me cuesta bastante por mis defectos.

De todo lo que he leído lo que hasta ahora me ha llamado la atención es que afirma que
nuestra esencia es una materia simple e indivisible. No podemos actuar bien y actuar mal
porque somos una sola cosa y esa incoherencia, ese conflicto, esa inconsistencia nos hace
infelices. Para él, una forma muy efectiva de eliminar los defectos de carácter es detectar el
predominante y enfocarse en trabajarlo diariamente. Los demás irán desapareciendo junto
con él.

Sin embargo decía que algunas personas podrían no sentirse bien con ese método y
mencionó otro llamado el Método de las Fichas de Póquer. Sugiere escribir en fichas de
póquer, aunque se puede usar otra cosa, los nombres de los defectos que hallamos en
nuestro inventario. En el otro lado escribimos la virtud que se le opone. En la mañana
tomamos una ficha al azar y nos proponemos practicar esa virtud. En la noche la volvemos
a poner junto con otras y las mezclamos. Al otro día se toma al azar alguna que puede ser la
misma.

Nuestras incapacidades y la ingobernabilidad de nuestra vida son producto de nuestros


defectos de carácter. Un esfuerzo sincero y contínuo para eliminarlos es necesario para
vivir bien. Su lugar será reemplazado por las virtudes. Nuestra meta es alcanzar una vida
mejor y no solo pasarla superando crisis, lo que nos obliga a ser constantes en ese proceso
de cambio de actitudes.
NADIE SE PUEDE LIBERAR DE SUS ERRORES Y MALOS HABITOS SI PRIMERO
NO LOS ESTUDIA

No sé lo que quiero, me quejo de todo, porque tengo mucha confusión, no sé lo que quiero,
que es lo que me conviene y que es lo que no me conviene No hay viento favorable para un
barco sin rumbo (séneca)

DEFECTOS. PECADOS Los pecados o vicios capitales son aquellos a los que la naturaleza
humana está principalmente inclinada.

1. lujuria. «Exceso o demasía en algunas cosas»


2. pereza. La pereza (en latín, acidia) es el más «metafísico» de los pecados capitales, en
cuanto está referido a la incapacidad de aceptar y hacerse cargo de la existencia de uno
mismo. Es también el que más problemas causa en su denominación. La simple
«pereza», más aún el «ocio», no parecen constituir una falta. Hemos preferido, por
esto, el concepto de «acidia» o «acedía». Tomado en sentido propio es una «tristeza de
ánimo» que aparta al creyente de las obligaciones espirituales o divinas, a causa de los
obstáculos y dificultades que en ellas se encuentran. Bajo el nombre de cosas
espirituales y divinas se entiende todo lo que Dios nos prescribe para la consecución
de la eterna salud (la salvación), como la práctica de las virtudes cristianas, la
observación de los preceptos divinos, de los deberes de cada uno, los ejercicios de
piedad y de religión. Concebir pues tristeza por tales cosas, abrigar voluntariamente,
en el corazón, desgano, aversión y disgusto por ellas, es pecado capital. Tomada en
sentido estricto es pecado mortal en cuanto se opone directamente a la caridad que nos
debemos a nosotros mismos y al amor que debemos a Dios. De esta manera, si
deliberadamente y con pleno consentimiento de la voluntad, nos entristecemos o
sentimos desgano de las cosas a las que estamos obligados; por ejemplo, al perdón de
las injurias, a la privación de los placeres carnales, entre otras; la acidia es pecado
grave porque se opone directamente a la caridad de Dios y de nosotros mismos.
Considerada en orden a los efectos que produce, si la acidia es tal que hace olvidar el
bien necesario e indispensable a la salud eterna, descuidar notablemente las
obligaciones y deberes o si llega a hacernos desear que no haya otra vida para vivir
entregados impunemente a las pasiones, es sin duda pecado mortal.
3. gula. Actualmente la gula (en latín, gula) se identifica con la glotonería, el consumo
excesivo de comida y bebida. En cambio en el pasado cualquier forma de exceso podía
caer bajo la definición de este pecado. Marcado por el consumo excesivo de manera
irracional o innecesaria, la gula también incluye ciertas formas de comportamiento
destructivo. De esta manera el abuso de substancias o las borracheras pueden ser vistos
como ejemplos de gula. En La Divina Comedia de Alighieri, los penitentes en el
Purgatorio eran obligados a pararse entre dos árboles, incapaces de alcanzar y comer
las frutas que colgaban de las ramas de estos y por consecuencia se les describía como
personas hambrientas.La gula representada por Pieter Brueghel en su obra Los siete
pecados mortales o los siete vicios.
4. ira. La ira (en latín, ira) puede ser descrita como un sentimiento no ordenado, ni
controlado, de odio y enfado. Estos sentimientos se pueden manifestar como una
negación vehemente de la verdad, tanto hacia los demás y hacia uno mismo,
impaciencia con los procedimientos de la ley y el deseo de venganza fuera del trabajo
del sistema judicial (llevando a hacer justicia por sus propias manos), fanatismo en
creencias políticas y religiosas, generalmente deseando hacer mal a otros. Una
definición moderna también incluiría odio e intolerancia hacia otros por razones
como raza o religión, llevando a la discriminación. Las transgresiones derivadas de la
ira están entre las más serias, incluyendo homicidio, asalto, discriminación y en casos
extremos, genocidio.

La ira es el único pecado que no necesariamente se relaciona con el egoísmo y el


interés personal (aunque uno puede tener ira por egoísmo). Dante describe a la ira
como «amor por lajusticia pervertido a venganza y resentimiento».

5. envidia. Como la avaricia, la envidia (en latín, invidia) se caracteriza por un deseo
insaciable, sin embargo, difieren por dos grandes razones: Primero, la avaricia está
más asociada con bienes materiales, mientras que la envidia puede ser más general;
segundo, aquellos que cometen el pecado de la envidia desean algo que alguien más
tiene, y que perciben que a ellos les hace falta, y por consiguiente desean el mal al
prójimo, y se sienten bien con el mal ajeno.

La envidia va tan flaca y amarilla porque muerde y no come.

Francisco de Quevedo

Dante Alighieri define esto como «amor por los propios bienes pervertido al deseo de
privar a otros de los suyos». En el purgatorio de Dante, el castigo para los envidiosos
era el de cerrar sus ojos y coserlos, porque habían recibido placer al ver a otros caer.
6. avaricia. La avaricia (en latín, avaritia) es —como la lujuria y la gula—, un pecado de
exceso. Sin embargo, la avaricia (vista por la Iglesia) aplica sólo a la adquisición de
riquezas en particular. Tomás de Aquino escribió que la avaricia es «un pecado contra
Dios, al igual que todos los pecados mortales, en lo que el hombre condena las cosas
eternas por las cosas temporales». En el Purgatorio de Dante, los penitentes eran
obligados a arrodillarse en una piedra y recitar los ejemplos de avaricia y sus virtudes
opuestas. «Avaricia» es un término que describe muchos otros ejemplos de pecados.
Estos incluyen deslealtad, traición deliberada, especialmente para el beneficio
personal, como en el caso de dejarse sobornar. Búsqueda y acumulación de
objetos, robo y asalto, especialmente con violencia, los engaños o la manipulación de
la autoridad son todas acciones que pueden ser inspiradas por la avaricia. Tales actos
pueden incluir la simonía.
7. soberbia. En casi todas las listas de pecados, la soberbia (en latín, superbia) es
considerado el original y más serio de los pecados capitales, y de hecho, es la principal
fuente de la que derivan los otros. Es identificado como un deseo por ser más
importante o atractivo que los demás, fallando en halagar a los otros.

En El paraíso perdido de John Milton, dice que este pecado es cometido por Lucifer al
querer ser igual que Dios.

Genéricamente se define como la sobrevaloración del Yo respecto de otros por


superar, alcanzar o superponerse a un obstáculo, situación o bien en alcanzar un
estatus elevado y subvalorizar al contexto. También se puede definir la soberbia como
la creencia de que todo lo que uno hace o dice es superior, y que se es capaz de superar
todo lo que digan o hagan los demás. También se puede tomar la soberbia como la
confianza exclusiva en las cosas vanas y vacías (vanidad) y en la opinión de uno
mismo exaltada a un nivel crítico y desmesurado (prepotencia).

Soberbia (del latín superbia) y orgullo (del francés orgueil), son propiamente
sinónimos aun cuando coloquialmente se les atribuye connotaciones particulares cuyos
matices las diferencian. Otros sinónimos son: altivez, arrogancia, vanidad, etc. Como
antónimos tenemos: humildad, modestia, sencillez, etc. El principal matiz que las
distingue está en que el orgullo es disimulable, e incluso apreciado, cuando surge de
causas nobles o virtudes, mientras que a la soberbia se la concreta con el deseo de ser
preferido a otros, basándose en la satisfacción de la propia vanidad, del Yo o ego. Por
ejemplo, una persona Soberbia jamás se "rebajaría" a pedir perdón, o ayuda, etc.
Existen muchos tipos de soberbia, como la vanagloria o cenodoxia, también
denominada en las traducciones de la Biblia como vanidad, que consiste en el
engreimiento de gloriarse de bienes materiales o espirituales que se poseen o creen
poseer, deseando ser visto, considerado, admirado, estimado, honrado, alabado e
incluso halagado por los demás hombres, cuando la consideración y la gloria que se
buscan son humanas exclusivamente. La cenodoxia engendra además otros pecados,
como la filargiria o amor al dinero (codicia) y la filargía o amor al poder.

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Pecao Virtud Descripción

Soberbia Humildad Es la característica que define a una persona modesta,


(en latín, humilitas) alguien que no se cree mejor o más importante que los
demás en ningún aspecto; es la ausencia de soberbia.

Avaricia Generosidad Hábito de dar y entender a los demás. En momentos


(en latín, generositas) de desastres naturales, los esfuerzos de la ayuda son
con frecuencia proporcionados, voluntariamente, por
los individuos o los grupos que actúan de manera
unilateral en su entrega de tiempo, de recursos, de
mercancías, dinero, etc.

La generosidad es una forma de altruismo y rasgo de


la filantropía, como puede verse en las personas
anónimas que prestan servicios en unaOrganización sin
ánimo de lucro.

Lujuria Castidad Comportamiento voluntario a la moderación y


(en latín, castitas) adecuada regulación deplaceres y/o relaciones
Pecao Virtud Descripción

sexuales, ya sea por motivos de religión o social. No es


lo mismo que abstinencia sexual.

Ira Paciencia Actitud para sobrellevar cualquier contratiempo y


(en latín, patientia) dificultad.

Gula Templanza Moderación en la atracción de los placeres y procura el


(en latín, temperantia) equilibrio en el uso de los bienes creados. Asegura el
dominio de la voluntad sobre los instintos y mantiene
los deseos en los límites de la honestidad.

Envidia Caridad Empatía, amistad.


(en latín, caritas)

Pereza Diligencia Es el esmero y el cuidado en ejecutar algo. Como toda


(en latín, diligentia) virtud se trabaja, netamente, poniéndola en práctica;
significa cumplir con los compromisos, no ser inactivo,
no caer en la pereza, proponerse metas fijas y
cumplirlas en su tiempo, poner entusiasmo en las
acciones que se realizan.
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1.-AUTOESTIMA BAJA

a.inconsciente

b.exagerada necesidad de reconocimiento. necesito que los demas me digan las cosas
positivas que no soy capaz de decirme a mi misma

c.exagerada necesidad de ser comprendida en lugar de comprender yo

d.complejo de inferioridad
e.falta de identidad (Necesitas estímulos externos para sentirte vivo. Siempre tienes que
estar haciendo algo de acuerdo a la aceptación o el rechazo de otros. Te sientes bien o mal
dependiendo de la opinión de otros).

f.orgullosa, Falsa soberbia que es consecuencia de una baja autoestima. iinflar el ego. El
orgullo hace que uno califique de imbeciles a los que no estan de acuerdo con uno. es una
compensacion de una baja autoestima

¿Asumo actitudes de vanagloria, altivez?


¿Me produce engreimiento que se hable de mi?
¿Soy acaso hipocrita?
¿Pretendo ser lo que no soy?
¿Soy terco?
¿Rehuso a renunciar a mi capricho a mi voluntad?
¿Nunca doy mi brazo a torcer?
¿Soy voluntarioso?¿ Me causa resentimiento todo lo que contraria mi voluntad?
¿Me peleo cada vez que mis deseos son amenazados?
¿Soy desobediente a someterme a las decisiones de quienes legitimamente son mis
superiores?
¿Rehuso someterme a la voluntad de DIos?

2.-BIENKEDA. Necesidad exagerada de agradar a los demas. Procuras siempre ser


aceptado por otros, aunque no te aceptes a ti mismo y aunque tengas que actuar en contra
de tus creencias. Mas importancia al parecer que al ser, de cara a la galeria. Miedo al
rechazo. Mas importancia a lo que piensan los demas de a lo que pienso yo misma

3.-COMODONA. Pereza, lo que para mi es mas comodo, mas que pereza es falta de
motivacion( personalidad depresiva)

4.- COMPROMISO 0%, darlo todo, perseverancia 0%. no me involucro en nada

5.-CRITICONA.

Actitud enjuiciadora. Emito automaticamente ( sin pararme a reflexionar) juicios de valor


para mi y para los demas. Sacar faltas a todo y a todos. Focalizando en lo negatio en lugar
de fijarme en lo positivo. Etiquetacion. Filtro mental. Mente cerrada. Mucha conciencia
ajena y poca conciencia propia. Juzgar-- comprension. Autocomplacencia. No etiquetar a
una persona por su conducta, las personas somos mucho mas que simples etiquetas. Sacarle
falta a todo y a todos y maximizar esas faltas, obviando las cosas buenas que tienen.

Intolerante. Aceptar a los demas como son, con sus defectos, sin caer en la critica facil. El
que este libre de pecado que tire la primera piedra. Inflexible

6.-DEPENDIENTE. Necesidad de tener a alguien al lado que sea mas que yo, que me
protega porque yo no puedo sola, me siento invalida, que me de seguridad porque no confio
en mis posibilidades

7.-DEPRESIVA. Tendente a la depresion, a sentirme triste, melancolica, apatica, sin ganas,


sin entusiasmo, sin motivacion, anhedonia, incapaz de disfrutar de la vida, siempre cansada,
sin energia, fatiga cronica. Tendencia a abandonarme, falta de ilusion.MUY
NEGATIVA.No es fácil encontrar lo bueno en cada persona y en cada circunstancia, si así
lo fuere, todos lo harían. Tendemos más a menudo a ver las fallas o problemas de una
persona, ocurridas en diferentes circunstancias. Como en todo, el pensar en una forma
positiva es algo que debe ser aprendido y toma tiempo par ser bueno en esto.

Por eso, aprender a pensar positivamente acerca de nosotros y del mundo que nos rodea, es
una importante destreza para desarrollarla mientras aún somos jóvenes

8.-DESHONESTA. mentirosa, falta de compromiso. Digo que lo voy a hacer y luego no lo


hago. Autoengaño, negacion, racionalizaciones, excusas. me provoca enredos mentales. La
excusitis es la enfermedad del fracaso

9.-EGOCENTRICA. egoismo, yo, mi, me, conmigo. Todo gira en torno a mi y a lo que
deseo

a.desconsiderada. no mentalizar ni analizar bien

b.todo es culpa mia, personalizacion

c.despistada, olvidadiza, dispersa, falta de atencion

d.timidez

¿Me molesta que otros sean felices o que tengan exito, tal como si esa felicidad o ese exito,
fuese algo que me lo hubiesen quitado a mi?
¿Censuro lo bueno que hacen otros porque, para mis adentros, quisiera haberlo hecho yo,
por el honor y el prestigio que eso trae?
¿Soy envidioso al grado de tratar de menguar la personalidad de alguien intrigando
insidiosamente contra el ?
¿Propago chismes?
¿Es real el aprecio que muestro por otros?

10.FANTASIOSA. futurizo, poco realista, metas imposibles, vana ilusion, me impide vivir
el hoy. Proyección: Fantaseas sobre lo que sucederá y te sorprendes cuando la realidad no
resulta como la imaginaste.

11.-HIPERSENSIBLE, mal tomada, susceptibilidad exagerada, pienso que tu piensas,


suposiciones. Hipersensibilidad: Eres excesivamente sensible, reaccionas demasiado a las
situaciones, crees que si alguien está enojado tiene que ver contigo. Si alguien no te sonríe
o utiliza un tono fuerte te sientes rechazado

12.-IRRESPONSABLE / INMADURA EMOCIONAL ( egocentrismo infantil)

a.impuntual, tarde, mal y nunca. me cuesta una vida levantarme por la mañana

b.protestona

c.quejica ( victimizacion)

d.reina de las excusas

13.-MANIPULADORA Y FACILMENTE MANIPULABLE. Manipulacion emocional.


dando pena, victimismo. Quiero controlar a todo y a todos

14.-MIEDOSA. falta de fe. ver tabla de miedos

miedo a la evaluacion de la mirada ajena ( no me atrevo a pedir un aumento de sueldo,


reclamar dinero que hace tiempo prestamos a un amigo, me da verguenza protestar en una
tienda, aunque me hayan cobrado de mas )

15.-NEUROTICA, amargada, colgar jeta, autoconmiseracion, cara asco. ser desagradable,


reproches, echar en cara, desquite narcisista
neurotico es un individuo que enfrenta los problemas de una vida adulta con pensamientos,
sentimientos y actitudes infantiles con un cuerpo de adulto

16.-OBSESIVA, poco cabal, poco racional

17.-OPACA DE MI MISMA. analfabeta emocional, incapaz de reconocer mis emociones,


hacer ABC, de comprenderme. No se manejar emociones basicas como la ira o el
miedo. Incapacidad para expresar emociones: La mayor parte del tiempo te sientes
entumecida emocionalmente y no encuentras las palabras que reflejan tus pensamientos y
sentimientos. Te da miedo decir lo que verdaderamente sientes.

18.-PASIVA. No hago nada en la realidad, tan solo lo hago una y otra vez en mi cabeza.
Doy miles de vueltas a lo mismo, para luego no hacer nada. Palos de ciego agotadores, no
llego a ninguna conclusion, no iniciativa, consecuencias de mi sobreproteccion. Me dejo
llevar por lo que siento, me dejo llevar por las emociones. No pienso con la cabeza.
Irreflexiva. Pensamientos recurrentes absurdos. No pensamiento critico- obediencia ciega.
Mis emociones dictan mis acciones

19.-PERMISIVA, FALTA DE LIMITES. NO FIRME NO CONTUNDENTE

20.-RENCOROSA, resentimientos. Me resiento cuando no hacen lo que yo quiero o como


yo quiero que lo hagan . Cuando las cosas no salen como yo quiero. contratiempo

21.-RETORCIDA, complicadora maxima.mente enrevesada. HAZLO FACIL

22.-SOLITARIA. Tendencia a aislarme y a hacerlo todo yo sola,. No se pedir ayuda a los


demas, poco comunicativa, yo me lo trago todo para mi, yo puedo con
todo. Aislamiento: No te sientes a gusto en ningún lugar

23.-TOLERANCIA A LA FRUSTRACION BAJA

a.adicta al exceso de lo que me satisface. nunca es suficiente. siempre quiero mas. nunca
llego. falta de limites

b.busqueda exagerada de gratificacion inmediata (Quieres lo que quieres, en el momento


que quieres, como lo quieres ¡YA!)

c.exigencia desmedida a mi y a los demas ( falta de tolerancia)


e.falta de limites. no me hago respetar, demasiado sumisa, demasiado suave (No sabes
dónde termina tu propia persona y empieza la otra, frecuentemente le dices a otros lo que
deben hacer)

f.gula

g.impaciente. lo quiero todo a la vez,y todo ya

h.impulsiva saco conclusiones precipitadas. lectura del pensamiento. adivinacion. nula


capacidad de reflexion,necesidad de gratificacion inmediata. Falta de control de
impulsos: Una vez que se te mete una idea en la cabeza no descansas hasta que
compulsivamente la llevas a cabo. Una vez que empiezas algo no te detienes hasta que
terminas, muchas veces rompiendo con tu equilibrio.

i.me doy por vencida facilmente. muchos pensamientos negativos concentrados

pereza, falta de accion.

j.perfeccionismo. si no puedes hacerlo a la perfección prefieres no hacerlo. todo o nada.


blanco o negro (Estás totalmente equivocado o nunca te equivocas, una situación o es
blanca o es negra, nunca es gris). . extremos emocionales hasta el minimo detalle (De la
molestia al ataque de ira, del miedo al pánico, del bienestar a la euforia. Es todo o
nada ) .Falta de moderación: Todo lo que haces lo llevas al exceso, te llevas a ti mismo a
los extremos Postergacion

24.-VICTIMA. tragica, dramatica, tendencia a catastrofizar. terribilitis, tendencia a ver solo


lo negativo, maximizacion de lo negativo y minimizacion de lo positivo. autocompasion.
regodearme en el dolor, dar vueltas y vueltas al problema, siempre sobre lo mismo, sin
enfocarme en la solucion, quejas. Todo es culpa mia( responsabilidad excesiva) sindrome
del martir. Atracción por el dolor: te sientes impulsado a buscar situaciones y/o personas
que llegar a causarte dolor. Victima de los demas, de las diferentes circunstancias de la
vida, no pudiendo hacer nada para cambiar las cosas, de esta manera tan comoda y
engañosa no me consigo hacer responsable de mi vida ni arquitecta de mi destino

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inconsciente

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transformar defectos en virtudes

PRINCIPIO DE POLARIDAD DE LA MIRADA PEDAGÓGICA "EDUCAR


EMPODERANDO"

"Todo defecto es una virtud en potencia que se está expresando en su polo opuesto porque
se vive desde un estado de necesidad emocional o mental. Así, por ejemplo, la
perseverancia se expresa como tozudez cuando partimos de la necesidad de autoafirmarnos.
El educador que es consciente de este principio no tiene que recurrir a censurar o reprimir
los defectos de sus hijos o alumnos, para él un defecto es la semilla de un don."

----------------------------------

paranoia ( pensar cosas que no son reales, que solo ocurren en tu imaginacion, dos personas
se rien y tu piensas que es de ti, son siempre fantasias pero siempre pensando mal) tu ves
un grupo y estan hablando y piensas que estan hablando de ti, que te estan criticando

hacer muchas cosas a la vez y no hacer ninguna ( cabeza loca, desorden mental)

--

Cuando nos disponemos a escribir el cuarto paso (12 pasos de A.A.) nos surge la necesidad
de saber más a cerca de los defectos de carácter, algo que nos amplié el panorama el cual
estamos afrontando, quisiéramos saber en que consiste cada uno de los defectos. Bueno,
encontre algo acerca de eso.
En la revista virtual “POIESIS”, está este artículo interesantísimo acerca de los “Defectos
de carácter”, bien vale la pena leerlo completo...........

Introducción:
En contraste con nuestra época, la ética medieval poseía claras delimitaciones. De esta
manera el hombre medieval cuenta con una suerte de código de conducta que le señala
claramente como debe ser su actuar. Esta codificación tiene su base, por un lado, en las
llamadas “Virtudes Cardinales”, verdaderas llaves maestras que posibilitan el ejercicio de
una conducta conforme con lo que es éticamente correcto. Por otro lado, los “Pecados
Capitales” (denominados así por ser “cabeza” o principio de todos los demás pecados)
muestran claramente la cuna de todo lo moralmente reprobable. Esta codificación moral,
que si bien fue formulada en el medioevo tiene una sorprende actualidad, está cruzada
transversalmente por una problemática ética fundamental: la posibilidad de acoger
hospitalariamente al “otro”, al prójimo (el que está próximo) como una persona válida por
sí misma. Dicho de otra manera el entender a los seres humanos que están frente a mí,
cualquiera sea su condición, como un “interlocutor válido”, como un fin en sí mismo.
Como veremos más adelante, Lo que verdaderamente constituye el mal moral es entender
al “otro” como un “medio”, como un objeto que puede ser utilizado para el propio
beneficio, en conformidad al principio del “amor a sí mismo”. Veamos a continuación una
síntesis de la definición de cada uno de estos concepto, nos hemos basado en un antiguo
pero esclarecedor “diccionario de teología” (se han alterado la redacción, la extensión y la
ortografía castellana antigua en función de la comprensión, así mismo se han traducido
algunas citas que en el texto original aparecen en latín)

Pecados Capitales
1. La Soberbia.
Es el principal de los pecados capitales. Es la cabeza de “todos” los restantes pecados.
Recordemos que por esta falta, según la teología cristiana, el hombre fue expulsado del
jardín del paraíso. Es una ofensa directa contra Dios, en cuanto el pecador cree tener más
poder y autoridad que Dios. En general es definida como “amor desordenado de sí mismo”.
Según Santo Tomás la soberbia es “un apetito desordenado de la propia excelencia”. Se
considera pecado mortal cuando es perfecta, es decir, cuando se apetece tanto la propia
exaltación que se rehúsa obedecer a Dios, a los superiores y a las leyes. Se trata de
renunciar a Dios en cuanto es Verdad y sentido conductor de la existencia e instalarse a sí
mismo como Verdad suprema e infalible y como fundamento de la acción humana. De la
misma manera, y guardando las distancias, se aplica al respeto y a la consideración que los
subordinados le deben a las autoridades legítimamente constituidas. De la soberbia se
desprenden las siguientes faltas menores:
La vanagloria: es la complacencia que uno siente de sí mismo a causa de las ventajas que
uno tiene y se jacta de poseer por sobre los demás. Así mismo, consiste en la elaborada
ostentación de todo lo que pueda conquistarnos el aprecio y la consideración de los demás.
La Jactancia: falta de los que se esmeran en alabarse a sí mismos para hacer valer
vistosamente su superioridad y sus buenas obras. Sin embargo, no es pecado cuando tiene
por fin desacreditar una calumnia o teniendo en miras la educación de los otros.
El Fausto: consiste en querer elevarse por sobre los demás en dignidad exagerando, para
ello, el lujo en los vestidos y en los bienes personales; llegando más allá de lo que permiten
sus posibilidades económicas.
La altanería: Se manifiesta por el modo imperioso con el que se trata al prójimo, hablándole
con orgullo, con terquedad, con tono despreciativo y mirándolo con aire desdeñoso.
La ambición: Deseo desordenado de elevarse en honores y dignidades como cargos o título,
sólo considerando los beneficios que les son anexos, como la fama y el reconocimiento.
La hipocresía: simulación de la virtud y la honradez con el fin de ocultar los vicios propios
o aparentar virtudes que no se tienen.
La presunción: consiste en confiar demasiado en sí mismo, en sus propias luces, en
persuadirse a uno mismo que es capaz de efectuar mejor que cualquier otro ciertas
funciones, ciertos empleos que sobrepasan sus fuerzas o sus capacidades. Esta falta es muy
común porque son rarísimos los que no se dejan engañar por su amor propio, los que se
esfuerzan en conocerse a sí mismos para formar un recto juicio sobre sus capacidades y
aptitudes.
La desobediencia: es la infracción del precepto del superior. Es pecado mortal cuando esta
infracción nace del formal desprecio del superior, pues tal desprecio es injurioso al mismo
Dios. Pero cuando la violación del precepto no nace del desprecio sino de otra causa y
considerando la materia y las circunstancias del caso, puede ser considerada una falta
menor.
La pertinacia: consiste en mantenerse adherido al propio juicio, no obstante el
conocimiento de la verdad o mayor probabilidad de las observaciones de los que no piensan
como el sujeto en cuestión.
El remedio radical contra la soberbia es la humildad. Según el cristianismo, “Dios abate a
los soberbios y eleva a los humildes (Luc. 14)
2. La Acidia (Pereza).
Es el más “metafísico” de los Pecados Capitales en cuanto está referido a la incapacidad de
aceptar y hacerse cargo de la existencia en cuanto tal. Es también el que más problemas
causa en su denominación. La simple “pereza”, más aún el “ocio”, no parecen constituir
una falta. Hemos preferido, por esto, el concepto de “acidia” o “acedía”. Tomado en sentido
propio es una “tristeza de animo” que nos aparta de las obligaciones espirituales y divinas,
a causa de los obstáculos y dificultades que en ellas se encuentran. Bajo el nombre de cosas
espirituales y divinas se entiende todo lo que Dios nos prescribe para la consecución de la
eterna salud (la salvación), como la práctica de las virtudes cristianas, la observación de los
preceptos divinos, de los deberes de cada uno, los ejercicios de piedad y de religión.
Concebir pues tristeza por tales cosas, abrigar voluntariamente, en el corazón, desgano,
aversión y disgusto por ellas, es pecado capital.
Tomada en sentido estricto es pecado mortal en cuanto se opone directamente a la caridad
que nos debemos a nosotros mismos y al amor que debemos a Dios. De esta manera, si
deliberadamente y con pleno consentimiento de la voluntad, nos entristecemos o sentimos
desgano de las cosas a las que estamos obligados; por ejemplo, al perdón de las injurias, a
la privación de los placeres carnales, entre otras; la acidia es pecado grave porque se opone
directamente a la caridad de Dios y de nosotros mismos.
Considerada en orden a los efectos que produce, si la acidia es tal que hace olvidar el bien
necesario e indispensable a la salud eterna, descuidar notablemente las obligaciones y
deberes o si llega a hacernos desear que no haya otra vida para vivir entregados
impunemente a las pasiones, es sin duda pecado mortal.
Son efectos de la pereza:
La repugnancia y la aversión al bien que hace que este se omita o se practique con notable
defecto.
La inconsistencia en el bien, la continua inquietud e irresolución del carácter que varía, a
menudo, de deseos y propósitos, que tan pronto decide una cosa como desiste de ella, sin
ejecutar nada.
Una cierta pusilanimidad y cobardía por la cual el espíritu abatido no se atreve a poner
manos a la obra y se abandona a la inacción.
La desesperación de considerar que la salvación es imposible, de tal manera que lejos de
pensar el hombre en los medios de conseguirla se entrega sin freno alguno a sus propias
pasiones.
La ociosidad, la fuga de todo trabajo, el amor a las comodidades y a los placeres.
La curiosidad o desordenado prurito de saber, ver, oír, que constituye la actividad casi
exclusiva del perezoso.
En el fondo, la acidia se identifica con el “aburrimiento”. Pero no con ese aburrimiento
objetivo que nos hace escapar de una cosa, de una situación o de una persona en particular.
Más bien se refiere al “aburrimiento” que sentimos frente a la existencia toda, frente al
hecho de existir y de todo lo que esto implica. La vida nos exige trabajo, esfuerzo para
actuar según lo que se debe, esfuerzo que no es ni gratuito ni fácil. Cuando no somos
capaces de asumir este costo (este trabajo) y desconocemos aquello que debemos “hacer”
en la existencia, la vida humana se transforma en un vacío que me causa “horror”; se
transforma en un vacío que me angustia y del cual escapamos constantemente casi sin
darnos cuenta. De hecho ‘aburrimiento’ significa originariamente “ab horreo” (horror al
vacío). Decíamos que la acidia es el más metafísico de los pecados capitales parque implica
no asumir los costos de la existencia, de escapar constantemente de hacer lo que se debe,
por no saber lo que se debe.
3. La Lujuria.
Tradicionalmente se ha entendido la lujuria como “appetitus inorditatus delectationis
venerae” es decir como un apetito desordenado de los placeres eróticos. La tradición
cristiana subdividió este pecado en la simple fornicación, el estupro, el rapto, el incesto, el
sacrilegio, el adulterio, el pecado contra la naturaleza, comprendiendo bajo esta última
especie, la polución voluntaria, la sodomía y la bestialidad. La lujuria sería siempre un
“pecado mortal” pues involucra directamente la utilización del otro, del prójimo, como un
medio y un objeto para la satisfacción de los placeres sexuales.
Hay en este pecado dos grandes principios en juego: el verdadero concepto del amor y la
finalidad de la sexualidad. El cristianismo –y gran parte de la tradición clásica
especialmente la griega–, entienden por “amor” algo muy distinto de lo que el mundo
contemporáneo comprende. El concepto de amor tiene una importancia central en el
cristianismo. De hecho Dios mismo es identificado con el amor. Para el cristiano el amor es
“superabundancia”, capacidad de dar y de darse, “caritas”, en definitiva: caridad, una de las
tres Virtudes Teologales. De esta manera el amor implica un donarse, un darse por el otro,
por el prójimo. Recordemos la segunda parte del único mandamiento que anuncia el Nuevo
Testamento: “…amar al prójimo como a sí mismo”. El amor cristiano, y también el griego,
está, de esta forma, desligado en su origen de cualquier tipo de sexualidad, incluso de la
corporeidad. Lo erótico es una consecuencia, un plus totalmente prescindible. La casi
sinonimia entre amor y sexo es producto de la modernidad. El “hacer el amor” como
sinónimo de “relación sexual” es el mejor ejemplo de lo anterior. La Lujuria sería entonces
totalmente contraria al amor –y a Dios– entendido en términos cristianos. El pecado de la
lujuria no considera al otro como una “persona” válida y valiosa en sí misma, como un fin
en sí misma por el cual tendríamos que darnos. El otro pasa a ser un objeto una cosa que
satisface la más fuerte de las satisfacciones corporales, el placer sexual. Aun más, el sujeto
mismo que incurre en un acto lujurioso se convierte a sí en un objeto, que olvida o
suspende su propia dignidad.Por otro lado, para el pensamiento cristiano la sexualidad tiene
una finalidad preestablecida, única y clara. La reproducción y la perpetuación de la especie.
Esta clara finalidad da también sentido a la existencia del hombre ordenado su acción en
vista del amor de Dios. La lujuria, en cambio, que no tiene en vistas la finalidad de la
reproducción y que por esto pierde todo sentido, se convierte en una acción bacía, sin
sentido, que de alguna manera nadifica al hombre y lo aleja del Ser de Dios.
4. La Avaricia.
La teología cristiana explica el pecado de la avaricia como “amor desordenado de las
riquezas”, es desordenado, continua, “porque lícito es amar y desear las riquezas con fin
honesto en el orden de la justicia y de la caridad, como por ejemplo, si se las desea para
cooperar más eficazmente con al gloria de Dios, para socorrer al prójimo etc. El crimen de
la avaricia no lo constituyen las riquezas o su posesión, sino el apego inmoderado a ellas;
“esa pasión ardiente de adquirir o conservar lo que se posee, que no se detiene ante los
medios injustos; esa economía sórdida que guarda los tesoros sin hacer uso de ellos aun
para las causas más legítimas; ese afecto desordenado que se tiene a los bienes de la tierra,
de donde resulta que todo se refiere a la plata, y no parece que se vive para otra cosa que
para adquirirla.”
“La avaricia, por consiguiente, es pecado mortal siempre que el avaro ame de tal modo las
riquezas y pegue su corazón a ellas que está dispuesto a ofender gravemente a Dios o a
violar la justicia y la caridad debida al prójimo, o a sí mismo.”
En la avaricia se ven claramente los elementos comunes a todos los pecados. Por una lado,
el avaro pierde el verdadero sentido de su acción poniendo el fin en lo que debería ser un
medio, en este caso la obtención y la retención de las riquezas. Lo que importa al
cristianismo es que el prójimo reciba, en justicia, la caridad que todos le debemos al
menesteroso. La avaricia es directamente contraria a la caridad en cuanto es un “no dar”,
más aun en privar a otros de sus bienes para tener más que retener. Por otro lado, el privar
al otro de sus bienes, muchas veces con malas artes, y retener estos bienes en perjuicio del
otro, es también negar al otro en su calidad de persona, de fin en sí. Se lo utiliza para
satisfacer, mediante la acumulación de riquezas, el principio del amor a sí mismo.
Son “hijos” o faltas menores de la avaricia: el fraude, el dolo, el perjurio, el robo y el hurto,
la tacañería, la usura, etc.
5. La Gula.
Como “uso inmoderado de los alimentos necesarios para la vida” es definido este pecado.
La definición teológica se complementa con que “el placer o deleite que acompaña al uso
de los alimentos, nada tiene de malo; al contrario, en el efecto de una providencia especial
de Dios para que el hombre cumpliese más fácilmente con el deber de su propia
conservación. Prohibido es, empero, comer y beber hasta saciarse por ese solo deleite que
se experimenta”. De esta manera, la religiosidad latina especifica estas faltas en:
proepropere: comer antes de tiempo o cuando se debe abstener de comer, por ejemplo en
los días de ayuno señalados por la Iglesi; laute: cuando se comen manjares que superan las
posibilidades económicas de la persona; nimis cuando se bebe o se come en perjuicio de la
salud de la persona; ardenter: cuando se como con extrema voracidad o avidez a manera de
las bestias. La gula se transforma en pecado en los siguientes casos:
Cuando por el solo placer de comer se llega al hurto o se reduce a la familia a la
mendicidad.
Cuando el deleite en el comer se reduce a un fin único y preponderante en la vida.
Cuando es causa de graves pecados como la lujuria y la blasfemia.
Cuando trasgrede los preceptos de la Iglesia en los días de ayuno y de abstinencia de ciertos
alimentos.
Cuando se provoca voluntariamente el vómito para continuar el deleite de la comida.
Cuando se auto infiere grabe daño a la salud o sufrimiento a si mismo y a los que lo rodean.
Además de lo dicho por la teología tradicional, la gula tiene un aspecto que no debemos
dejar de considerar. La gula es la manifestación física de un apetito más profundo y
significativo. El que cae en las tentaciones de la gula, no sólo quiere consumir comida.
Quiere, de alguna manera, ingerir todo el universo. Asimilar, hacer suyo, todo lo exterior,
reducir todo lo otro a sí mismo. En este sentido la gula se mimetiza estrechamente con la
lujuria, se trata de ponerse por sobre lo otro, reducirlo, objetivarlo y hacerlo suyo. De esta
manera el “glotón” se transforma en el único centro de referencia, en conformidad con el
principio del amor a sí mismo. El asimilar, reducir, el universo en general y al prójimo en
particular a sí mismo es la más radical negación del otro.
6. La Ira.
“Appetitus inordinatus vindictae” es decir, un “apetito desordenado de venganza”. “Que se
excita –continua la definición latina– en nosotros por alguna ofensa real o supuesta.
Requiérase, por consiguiente, para que la ira sea pecado, que el apetito de venganza sea
desordenado, es decir, contrario a la razón. Si no entraña este desorden no será imputado
como pecado”. De esto ultimo se desprende que habría una ira “buena y laudable” si no
excede los límites de una prudente moderación y tiene como fin suprimir el mal y
reestablecer un bien. “El apetito de venganza es desordenado o contrario a la razón, y por
consiguiente la ira es pecado, cuando se desea el castigo al que no lo merece, o si se le
desea mayor al merecido, o que se le infrinja sin observar el orden legítimo, o sin
proponerse el fin debido que es la conservación de la justicia y la corrección del culpable.
Hay también pecado en la aplicación de la venganza, aunque esta sea legítima, cuando uno
se deja dominar por ciertos movimientos inmoderados de la pasión. De esta manera la ira se
convierte en pecado gravísimo porque vulnera la caridad y la justicia. Son hijos de la Ira: el
maquiavelismo, el clamor, la indignación, la contumelia, la blasfemia y la riña”.
De la definición anterior se desprende que la ira es el uso de una fuerza directa o verbal que
trasgrede los límites de la legitima restitución de un bien ofendido. La violencia, entendida
como el uso de la fuerza, si es desmedida, es claramente una anulación del otro. En el
asesinato, por ejemplo, que no corresponde a la legítima defensa, se pretende
evidentemente la nadificación del otro. En el leguaje, mediante la ofensa o el improperio,
encontramos también el deseo de perjuicio e incluso de nulidad del otro.
Es importante hacer notar que el uso de la fuerza en contra del prójimo no siempre es un
mal moral. Debe ser entendida como un mal menor si el fin por el cual se realiza no es sólo
la anulación del otro sino que persigue fines legítimos como la conservación de la vida
propia o de terceros. Tal es el caso de la “guerra legítima” que procura evita la propia
muerte o la privación de la legítima libertad a mano de un invasor, la legítima defensa. El
uso de la fuerza se justifica también cuando se procura, con esto, el bien del otro, evitando
de esta manera un daño mayor que el dolor que se infringe.
La ira se convierte en pecado gravísimo cuando nuestro instinto de destrucción sobrepasa
toda moderación racional y, desbordando todo límite dictado por una justa sentencia, se
desea sólo la inexistencia del prójimo.
7. La Envidia
La envidia es definida como “Desagrado, pesar, tristeza, que se concibe en el ánimo, del
bien ajeno, en cuanto este bien se mira como perjudicial a nuestros intereses o a nuestra
gloria: tristia de bono alteriusin quantum est diminutivum propiae gloriae et excellentiae”
De esta manera, para saber si la envidia es una falta moral, es necesario investigar el
verdadero motivo que produce la tristeza que se siente frente al bien que posee el prójimo.
De esta manera la envidia no es pecado cuando
Nos entristecemos por el cargo, potestad o bienes materiales alcanzado por quien no los
merece y podría hacer mal uso de esa autoridad causando grave daño a sus semejantes.
Sentimos insatisfacción por los bienes que posee quien no los merece y en vista de que
nosotros le daríamos mejor fin. Por ejemplo, el que abunda en riquezas haciendo mal uso
de ellas: los avaros que no hacen uso de sus bienes ni para beneficio propio ni para el de los
demás.
Otras veces, nos entristecemos, no tanto de lo que el otro posee como del hecho de que
nosotros carecemos de ese bien, si esta constatación nos muestra el tiempo y las
oportunidades perdidas y alienta nuestro propio sentido de superación.
La envidia es falta gravísima, cuando nos incomoda y angustia a tal grado el bien o los
bienes materiales del otro, que deseamos verlo privado de aquellos bienes que
legítimamente a conseguido y al que, nosotros, por nuestra impotencia, no hemos logrado
conseguir. De esta manera, este deseo de ver privado al otro de sus bienes nos puede
conducir a procurar, por todos los medios, a efectivamente quitarle esos bienes o de hacer
ver, con el uso del chismorreo, que aquel no debería poseer lo que posee. La mentira, la
traición, la intriga, el oportunismo entre otras faltas se desprenden de esta tristeza frente al
bien ajeno y a nuestra propia incapacidad de acceder a tales bienes.
TALLER DEFECTOS DE CARACTER OACOLOMBIA

El siguiente taller se encuentra enmarcado en el trabajo del Cuarto y Sexto Paso. El


objetivo del siguiente taller es solamente dar una visión inicial y/o complementar nuestro
trabajo de inventario personal, el cual debe realizarse apoyándonos en nuestra literatura y
en los mencionados textos de O.A. con el apoyo y guía de nuestro padrino o madrina. De
ninguna manera se le puede considerar como un sustituto para nuestro programa de 12
Pasos. Sugerimos a los grupos, en sus reuniones o cuando lo estimen conveniente, tratar por
separado cada uno de ellos. Nota: Se envían todas estas preguntas como material de trabajo
también utilizable a nivel individual y se sugiere hacer el taller con las que se considere
conveniente de acuerdo al tiempo estipulado para su realización. En el libro de Los Doce
Pasos y Doce Tradiciones de A.A se observa al respecto: “Al ser creados fuimos dotados de
instintos para un propósito. Sin ellos, no seríamos seres humanos completos… Por lo tanto,
estos deseos –de relaciones sexuales, de seguridad material y emocional y de
compañerismo- son perfectamente necesarios y apropiados- y sin duda provienen de Dios.
No obstante, estos instintos, tan necesarios para nuestra existencia, a menudo sobrepasan
con mucho los límites de su función apropiada. Poderosa y ciegamente y muchas veces de
una manera sutil, nos impulsan, se apoderan de nosotros e insisten en dominar nuestras
vidas. Nuestros deseos de sexo, de seguridad material y emocional, y de un puesto
eminente en la sociedad a menudo nos tiranizan. Cuando se salen así de sus cauces, los
deseos naturales del ser humano le crean grandes problemas; de hecho, casi todos los
problemas que tenemos, tienen su origen aquí… Casi todo grave problema emocional se
puede considerar un caso del instinto descarriado. Cuando esto ocurre, nuestros grandes
bienes naturales, los instintos, se han convertido en debilidades físicas y mentales. Al echar
una mirada honesta al pasado y descubrir quiénes éramos y lo que habíamos hecho,
consiguió que comenzáramos a entendernos mejor. Esta comprensión de nosotros mismos
era el comienzo de nuestra sanación emocional. Muchos de nosotros habíamos vivido
nuestras vidas hasta este día con un secreto Taller Defectos de Carácter en Abstinencia 2
sentimiento de vergüenza. En lo profundo de nuestros corazones guardábamos la sensación
de ser indignos e insignificantes. A menudo esta vergüenza nacía de nuestras culpas
irresueltas y de errores cometidos en el pasado y a los que nunca nos habíamos enfrentado.
El Cuarto Paso del Programa de Recuperación de OA : Llama a examinar nuestras vidas
hasta el día de hoy, escribiendo todas las acciones y hechos importantes de naturaleza ética
o moral, nuestros sentimientos acerca de ellos, y los rasgos de carácter de los cuales
nacieron estas acciones. Nuestros problemas de la infancia han estado controlando nuestras
acciones y nuestros sentimientos durante años, a menudo lo han hecho sin que tan siquiera
nos diéramos cuenta. A medida que encaramos los problemas, estos pierden el poder que
tienen para sobrecogernos y controlarnos. Nuestras cadenas de obsesión mental se van
rompiendo una a una, y entonces somos capaces de conocer y hacer la voluntad de Dios
más fácilmente, sin la necesidad de protegernos de los sentimientos incómodos a través de
la comida compulsiva. "Cuando llegamos al Cuarto Paso y lo completamos, podemos
constatar lo que se afirma en el folleto de CCA "Una invitación para ti", que dice:
comenzamos a salir del desastre emocional en el que nos mantuvo la comida compulsiva,
para experimentar una vida mas llena y satisfactoria". Tomado del sexto paso de OA:
Porque nos es tan difícil abandonar nuestros defectos? Una de las razones más importantes
es el miedo. Nos sentimos cómodos con nuestros viejos moldes de pensamiento y actitudes,
aun cuando sabemos que son dañinos. No tenemos idea de cómo comportarnos sin ellos, ya
que fue la única forma que conocimos para enfrentar la vida. Mientras más nos esforzamos
por liberarnos de nuestros defectos, pareciera como si más nos dejáramos controlar por
ellos. No entendimos bien el Sexto Paso cuando lo leímos, y por lo tanto, nos sentimos
completamente frustrados al tratar de practicarlo. Aquí es donde aprendemos un factor
clave acerca del Programa, y una verdad importante acerca de nosotros mismos: somos tan
impotentes ante nuestros defectos de carácter, como lo somos ante la comida. Necesitamos
la ayuda de Dios para liberarnos de ellos. Solos no podemos. Ahora, el paso siguiente
consistirá en reconocer que esos viejos moldes de pensamiento y acción, que nos sirvieron
en su momento para hacerle frente a la vida, ya cumplieron su función, y ahora ya no nos
sirven. Nos damos cuenta de cuanto daño nos hacemos al aferrarnos a ellos. Así como
tuvimos que "tocar fondo" en cuanto a nuestra forma compulsiva de comer, también
tendremos que "tocar fondo" con cada uno de estos defectos. Solo cuando estemos
plenamente conscientes de que nos cuestan mucho mas de lo que nos dan, estaremos
"enteramente dispuestos" a ser liberados de nuestros defectos de carácter. Al enfrentar el
Sexto Paso tenemos que reconocer y admitir nuestro temor natural al cambio. Pero como
nos sentimos capaces de llegar a cualquier extremo con tal de recuperarnos, lo llevamos a la
práctica. Taller Defectos de Carácter en Abstinencia 3 De ahora en adelante, no
permitiremos que el miedo nos impida hacer lo que es mejor para nosotros. Después de
todo, hemos enfrentado los cinco primeros Pasos, practicándolos a pesar de nuestro miedo,
y aquí estamos vivos para poder contarlo. Al llegar al Sexto Paso, hemos comenzado a
acostumbrarnos a hacer las cosas que en el pasado nos causan más temor. La recompensa
por practicar el Sexto Paso es grande, al igual que con los cinco primeros; aun cuando al
principio no lo percibamos claramente, nuestro compromiso por efectuar los cambios
necesarios, nos ha dado un poder extraordinario para enfrentarnos a los retos de la vida
diaria. Ya no nos resistimos al cambio aferrándonos desesperadamente al pasado. De ahora
en adelante trataremos de estar siempre dispuestos a aceptar cualquier transformación que
Dios quiera realizar en nosotros. El libro de Los Doce Pasos y las Doce Tradiciones de A.A
explica: Para evitar caer en la confusión discutiendo sobre los nombres que se deben dar a
estos defectos, utilicemos una lista universalmente aceptada de las principales flaquezas
humanas- los siete pecados capitales: 1. Soberbia, 2. Avaricia, 3. Lujuria, 4. Ira, 5. Gula, 6.
Envidia, 7. Pereza Todas estas flaquezas generan el miedo que es, en sí mismo, una
enfermedad del alma. Luego, el miedo a su vez, genera más defectos de carácter. Un temor
exagerado de no poder satisfacer nuestros instintos nos lleva a codiciar los bienes de otros,
a tener avidez de sexo y de poder, a enfurecernos al ver amenazadas nuestras exigencias
instintivas, a sentir envidia al ver realizadas las ambiciones de otra gente y las nuestras
frustradas. Comemos más, bebemos más y tratamos de coger más de lo que necesitamos de
todo, temiendo que nunca tendremos lo suficiente. La perspectiva de trabajar nos asusta tan
profundamente que nos hundimos en la pereza. Holgazaneamos y tratamos de dejarlo todo
para el día de mañana, o si trabajamos, lo hacemos de mala gana y a medias. Estos temores
son como plagas que van royendo los cimientos sobre los que tratamos de construir una
vida.” De lo anterior se deduce la vital importancia de realizar el trabajo del Cuarto Paso
para nuestra recuperación. 1*ORGULLO (SOBERBIA) No es casualidad que la soberbia
encabece la lista. Porque la soberbia, que conduce a la auto justificación y que está siempre
espoleada por temores conscientes o inconscientes, es la que genera la mayoría de las
dificultades humanas y es el principal obstáculo al verdadero progreso. La soberbia nos
hace caer en la trampa de imponer en nosotros mismos y en otra gente exigencias que no se
pueden cumplir sin pervertir o abusar de los instintos que Dios nos ha dotado. Cuando la
satisfacción de nuestro instinto de sexo, de seguridad y de disfrutar de la compañía de
nuestros semejantes se convierte en la única meta de nuestras vidas, entonces aparece la
soberbia para justificar nuestros excesos. Taller Defectos de Carácter en Abstinencia 4 
Arrogancia, vanidad, engreimiento, exceso de amor propio.  Afán desmedido de ser
preferido a otros, altanería o satisfacción de lo propio con menosprecio de los demás. 
Exceso de magnificencia o pompa, pagado de sí mismo, farisaísmo.  Cólera e ira
expresados con altivez injuriosa.  Para un soberbio todas las bondades de la vida como el
dinero, la salud, el bienestar, etc., provienen de él y no de Dios.  La soberbia nos hace
juguetes de las pasiones y nos proporciona máscaras.  Muchas veces tenemos la soberbia
disfrazada de humildad falsa.  La soberbia nos hace ser nuestra propia moral.  Crea
hipocresía, terquedad y agresividad. Conduce a difamar a personas para resaltar nuestra
propia virtud. Conduce a descalificar a otros.  Genera los otros defectos de carácter. LA
CUALIDAD OPUESTA AL ORGULLO ES LA HUMILDAD.  La humildad es la verdad
de nosotros mismos vista con honradez y conocimiento.  Es la admisión, aceptación y
aprobación de nuestras cualidades como un desafío espiritual para cultivarlas y
enriquecerlas.  Es la admisión y aceptación, pero no aprobación de nuestras emociones
negativas (defectos) como un reto espiritual para auto controlarlos, no reprimirlos.  La
persona humilde:  Admite acepta y aprueba sus capacidades como un don de Dios.  Está
consciente de sus limitaciones y espera a través de la acción y la fe en un Dios
misericordioso.  Tiene una mente abierta hacia las cosas que la vida le plantea, pues sabe
que Dios se ha hecho cargo de la dirección de su vida.  Es sensible a las manifestaciones
de Dios en la naturaleza (percibe a Dios en sus actos).  Está conforme con lo que Dios le
ha dado (pero no es conformista), ya que sabe que Dios le da lo que necesita.  Valora lo
bueno que hay en él, sin caer en alardes de soberbia.  Valora lo bueno que hay en los
demás, sin halagos ni adulaciones falaces.  La humildad es la raíz de la fe, pues una firme
creencia en Dios, exige confianza en nosotros mismos y en los demás.  La humildad
implica manejar el "justo medio". PREGUNTAS DE TRABAJO 1. ¿Tuve exceso de amor
propio? 2. ¿Manejé mi soberbia como humildad falsa disfrazada? 3. ¿Por mis
conocimientos o habilidades me envanecí? 4. ¿Pregunté a mis padres "porqué me habían
traído al mundo"? 5. ¿Difamé a mi prójimo hasta hacer resaltar mi propia "virtud"? 6. ¿Mi
salud, bienestar y dinero me lo achacaba a mí mismo y no a Dios? 7. ¿Admití mi
personalidad y la aceptaba como un don de Dios? 8. ¿Valoré lo bueno que hay en los
demás? Taller Defectos de Carácter en Abstinencia 5 9. ¿Acepté mis defectos o los
reprimí? 10. ¿Creé que mis problemas se originaban por las circunstancias no y no por mí
mismo? 11. ¿Manejé el dinero para manipular? 12. ¿Manejé el poder para manipular? 13.
¿Busqué el prestigio? 14. ¿Usé el dinero para alcanzar poder y prestigio o viceversa? 15.
¿Pretendí alcanzar el triunfo a través de medios ilícitos o lícitos? 16. ¿Estuve conforme con
mi salario y posición económica? 17. ¿Fui vanidoso con la ropa? 18.¿Disfruto de la
satisfacción de mis "atractivos sexuales" con menosprecio de los demás?. 19.¿Con altanería
me ufano de poseer carro, casa propia y otros bienes materiales a diferencia de otras
personas? 2* AVARICIA  Afán inmoderado de atesorar riquezas.  Una persona avara es
ambiciosa, mezquina, tacaña, ruin, egoísta, usurera y codiciosa.  La avaricia es un apego
desorientado a los bienes terrenos.  Muchas veces nos creamos necesidades ficticias. 
Queremos lujos y acaparamos.  Sacamos ventaja a costa de la necesidad de otros. 
Anteponemos el dinero al deber y a la salud, justificando nuestro proceder.  La avaricia es
el lago envenenado donde prosperan los defectos de carácter, especialmente la soberbia y
lujuria. Con la soberbia viene el desenfreno al transformar a las criaturas de Dios (nuestros
hermanos) en maquinas y medios para hacer dinero y con la lujuria nos lleva por el camino
de satisfacer las más bajas inclinaciones del corazón (subconsciente) y de los sentidos
(instintos).  Para adquirir dinero y bienes materiales, el avaro es capaz de usar medios
ilícitos, alterar las mercancías y los precios, defraudar el trabajo de los demás, limitar el
sustento familiar, evadir impuestos y aportaciones, no desquitar su salario, y practicar toda
clase de fraudes y engaños. LA CUALIDAD OPUESTA A LA AVARICIA ES LA
LARGUEZA Generosidad, dadivosidad, esplendidez, altruismo.  Cuando das sin esperar
recompensa o reconocimiento.  Es el "saber dar" sin poner en peligro el bienestar personal
y familiar (no es derrochar). Fácilmente olvidamos que Dios nos tomará cuenta de cómo
hemos administrado nuestros bienes.  El avaro al querer llenar su vida, solo consigue
vaciarla; mientras que el virtuoso de la largueza maneja el dinero como un medio y no
como un fin. Taller Defectos de Carácter en Abstinencia 6  El justo camino para el uso del
dinero lo establecen la prudencia, la justicia y la caridad.  La largueza nos supone meditar
que el dinero, aunque lo ganamos con el sudor de nuestra frente realmente es una bondad
de Dios.  Escuchamos el consejo de Dios: “No atesoréis riquezas donde la polilla y el orín
la roen y donde el ladrón las roba. Atesorad más bien tesoros en el Cielo, pues donde está tu
tesoro, ahí está tu corazón". PREGUNTAS DE TRABAJO 1. ¿Mi mente piensa en función
del dinero o bienes materiales’ 2. ¿Estuve conforme con lo que Dios me dio (no
conformista), ya que Dios sabía lo que yo necesitaba? 3. ¿Fui honrado en mis relaciones
comerciales? 4. ¿Fui ambicioso y egoísta en mis tratos comerciales? 5. ¿Supe dar sin poner
en peligro el bienestar familiar y personal? 6. ¿Fui despilfarrador? 7. ¿Fui usurero en los
prestamos de dinero? 8. ¿Fui mezquino con el sustento o bienestar familiar? 9. ¿Codicie los
bienes materiales de otros? 10. ¿Evadí mis impuestos y no justifiqué mi salario? 11. ¿Alteré
precios de mercancías o mi salario real? 12. ¿Hasta qué grado he sido avaricioso, miserable,
tacaño? 13. ¿Hasta qué punto he sido generoso, espléndido o altruista? 14. ¿Agredí verbal o
físicamente por cuestiones materiales? 15. ¿Me alteré o injurié injustamente a causa del
dinero? 16. ¿Fui prudente en el aspecto material? 17. ¿Mantuve a raya el concepto
materiales y consumista de la vida? 18. ¿Justifiqué mis necesidades materiales ficticias? 19.
¿Defraudé y engañé a otros? 20. ¿Antepuse el dinero a mi salud, justificando mi proceder?
21. ¿Me desprendí de lo que me sobraba para hace el bien? 22. ¿Me perjudiqué a mí mismo
en la búsqueda egoísta de satisfacciones materiales? 23. ¿Cuando ya tuve una
independencia económica, busqué desquitarme de lo que me había negado la vida en el
aspecto material? 24. ¿Pedí dinero o me llené de tarjetas de crédito sin importarme si
pagaría? 25. ¿Me hicieron desgraciado los reveses económicos? 26. ¿Identifiqué mi trabajo
con el dinero? 27. ¿Cuando me llegaban esas derramas periódicas de dinero, como los
aguinaldos, las cajas de ahorros o el reparto de utilidades que cauce les daba? 28. ¿solo tuve
deseos y no propósitos materiales definidos? 29. ¿Tuve la voluntad de ahorrar para las
emergencias? 30. ¿Fui conformista con "irla pasando"? Taller Defectos de Carácter en
Abstinencia 7 3. LA LUJURIA La lujuria es un apetito desordenado de los deleites
carnales. Es un apego morboso a los placeres de la carne. Es un desequilibrio entre las
pasiones y la razón. Es el placer por el placer. Cuando hacemos el acto sexual de cuerpo
presente con nuestra pareja, pero con la mente centrada en otra persona. Cuando lanzamos
palabras lascivas a una persona para acceder sexualmente a ella sin respetar su estado
emocional. Cuando obramos con chantaje en el acto sexual al cobrarnos o pagar un favor.
Cuando cometemos excesos sexuales aún en contra de nuestra salud. Cuando a la llamada
del sexo acudimos morbosamente, convirtiendo una relación sexual en solo un acto sexual.
LO OPUESTO A LA LUJURIA ES UN IDEAL RECTO. Este lo determina Nuestro Poder
Superior y le pedimos la fortaleza para llevarlo a cabo. Se cultiva con oración, vigilancia
(autocontrol) y meditación. Los esposos se guardan fidelidad y los solteros evitan las
ocasiones en que ceder ocasionaría problemas con autocontrol y vigilancia a las
tentaciones. Un ideal recto es integrador y no una tortura inútil; debe verse con realismo y
no con histeria, asumiendo que tanto el hombre como la mujer son seres humanos con los
mismos instintos naturales. No implica estar reprimido, sino auto controlado, en donde se
disfrute un sentido de liberación. PREGUNTAS DE TRABAJO 1.-¿Me he remitido a mi
Poder Superior para permitirle moldear un ideal recto para mí? 2. ¿He pedido fortaleza a mi
Poder Superior para llevar a cabo su voluntad? 3. ¿Me pregunto si la relación sexual que
deseo llevar a cabo es egoísta o no? 4. ¿Enmarco el acto sexual en el amor?. 5.
¿Autocontrolo el deseo sexual a través de alejarme prudentemente de mis "fuentes de
alergia", pero no lo reprimo?. 4. LA IRA Pasión del alma que mueve a indignación y enojo,
cólera, irritación grande. Deseo de injusta venganza, pasión que hace que nos alteremos e
injuriemos injustamente. La ira es una emoción honesta cuando nos enojamos con nosotros
mismos, pero se vuelve defecto de carácter cuando la ejercemos en contra de los demás
como una justificación de nuestra debilidad o la debilidad de otros. El iracundo es un ser
infeliz, ya que sus deseos de venganza se vuelven obsesivos y como es cobarde, sus
venganzas las prepara en la mente y las motiva con torturas inimaginables, siendo sus
principales víctimas, personas inocentes (esposas, hijos, alumnos, etc.,) La ira genera una
cadena de desquites del más fuerte al más débil. Taller Defectos de Carácter en Abstinencia
8 El iracundo obra por impulso y después le viene el remordimiento La ira es como un lente
de aumento que agranda las cosas. El iracundo destruye la concordia y la amista lo que le
aísla de los demás. Pregunta a tus hijos que es lo que más les disgusta de ti y seguramente
te responderán que tu "maldito genio". La ira es hija directa de la soberbia; nos molesta que
nos llamen la atención (con justificación o sin ella), nos molesta que nos nieguen un
servicio. Nos molestan los policías, los curas, los maestros, los burócratas y "Juan". Nos
molesta el tráfico las colas, los gritos de los hijos, el que nos pidan dinero y mil cosas más.
Externamos nuestra ira de mucha maneras; rompemos muebles, agredimos verbal o
físicamente, hacemos caprichos infantiles tratando de producir sentimientos de culpa. LA
CUALIDAD OPUESTA A LA IRA ES LA TOLERANCIA Respeto y consideración hacia
las opiniones practicas ajenas. Tener paciencia con los demás. Dominar el temperamento.
Vigilar a ese descarriado miembro que es la lengua (pensar antes de hablar y no hablar para
pensar). La tolerancia no implica reprimirnos, no manifestar lo que realmente es sin
sentirnos culpables, ya que para todo hay palabras. A las personas abusivas de nuestra
tolerancia debemos hablarles con firmeza, para hacerles ver que somos mansos pero no
memos. Somos tolerantes y no reprimidos, cuando externamos con mesura y sensatez
nuestro juicio y diferencia de opinión. Somos tolerantes cuando respetamos la autonomía
de los demás en su forma de hablar, pensar y actuar (sean necios o no). La comprensión y la
tolerancia son hermanos gemelos y la bondad de este binomio, es la sobriedad en el
temperamento. Una sugerencia: antes de explotar y generar un resentimiento que puede
durar minutos, horas o años, se sugiere meditar y rezar en voz baja lentamente (una, dos o
más veces), las primeras once palabras de la oración de la Serenidad o del Padre Nuestro.
PREGUNTAS DE TRABAJO 1. ¿Descargué mi ira contra las personas inocentes? 2. ¿Me
molesté porque me llamaran la atención? 3. ¿Produje sentimientos de culpa en otros? 4.
¿Fui tolerante con demás? 5. ¿Respeté y consideré las opiniones y practicas ajenas en
cuestiones materiales? 6. ¿Fui tolerante en mis relaciones comerciales? 7. ¿Usé cierta dosis
de firmeza para hacer sentir a los "manipuladores" que era manso, pero no memo? 8. ¿Cuál
era mi actitud respecto a los mecánicos, burócratas, técnicos, peluqueras, profesores y otros
prestadores de servicios cuando no fui complacido? 9. ¿Expresé sensatamente la razón de
mi enojo a la persona implicada o me desquité con ella o traté de producirle culpa para
castigarla? Taller Defectos de Carácter en Abstinencia 9 5. LA GULA (Es necesario aclarar
que dado el hecho de que los 12 Pasos son utilizados por adictos a diversas sustancias, para
los no comedores compulsivos el uso excesivo de alimento es tratado como gula. Nosotros
debemos mantenernos enfocados en nuestro uso excesivo de alimento como obsesión y
compulsión y regirnos por los parámetros de OA) Falta de moderación en la comida o en la
bebida. Abuso del placer que Dios nos ha conferido de comer y de beber lo que
necesitamos para nuestra subsistencia. El goloso hace de su vientre su Dios. -El goloso
confunde los medios con los fines (no solo de pan vive el hombre). La gula provoca
exigencias en la familia, descuidando otros aspectos de ella. La gula se presenta con más
frecuencia en las deshoras de los alimentos En nuestras celebraciones procuramos que no
fuera a faltar la comida, aunque los otros elementos fuesen de menor calidad o cantidad. No
nos importa exponernos al insomnio, al vomito o la diarrea con tal de darle gusto al
estómago. (postrecitos, cenitas, traguitos, etc.). LA CUALIDAD OPUESTA A LA GULA
ES LA TEMPLANZA Medirse hasta donde realmente se necesita el alimento (sobriedad en
el comer y en el beber). La virtud de la templanza, como todas las virtudes, debe cultivarse;
una ingesta sana y moderada de acuerdo a nuestras necesidades individuales. La templanza
implica que el Pan nuestro de cada día es lo único que necesitamos hoy. La templanza nos
invita a reflexionar que la comida tiene su tiempo y su lugar, y cualquier desorden traerá
consecuencias en nuestro organismo, tanto físicas como mentales y espirituales. La
templanza trae a raya el concepto materialista y consumista de la vida. La templanza nos
motiva a concienciar que el producto de nuestro trabajo no debemos canalizarlo en su
mayor parte a la satisfacción egoísta de nuestro estomago. Las reservas mentales de la Gula
pueden desviarse hacia el café, cigarrillo, bocadillos, etc. PREGUNTAS DE TRABAJO 1.
¿Utilicé el dinero para abusar del comer y beber? 2. ¿Provocó mi gula desajustes
financieros en mi hogar? 3. ¿Fui dado a realizar fiestas para disfrazar mi gula en el comer y
beber? 4. ¿Abuso del café en las reuniones de cualquier tipo? 5. ¿Ingiero algún alimento
que no esté en mi plan de comidas? 6. ¿Ingiero más alimentos de los que necesito incluso
estando en el plan de comidas? 7. ¿Soy moderado en el comer y suspendo el alimento en
ese punto en el cual me siento satisfecho? Taller Defectos de Carácter en Abstinencia 10 6.
LA ENVIDIA Disgusto, tristeza o pesar del bien ajeno. En lugar de que nos alegremos por
el bienestar de otros, nos da pesar. Nos duele el triunfo del amigo o del enemigo. La envidia
se manifiesta con más amplitud en grupos homogéneos de personas. Conduce a la celotipia
del bien ajeno y a maldecir. Somos envidiosos cuando nos provoca disgusto que alguno de
nuestros familiares sean triunfadores en sus hogares, negocios o vidas. Cuando nos enoja
que nuestros parientes nos hayan robado el cariño de las personas a las que les tenemos
afecto especial. Cuando nos "enfermamos" por aquellos que tienen más conocimientos que
nosotros. Cuando nos conmiseramos envidiando el trabajo de otros (sobre todo el sueldo),
la suerte que tienen en el amor, así como su posición y sus relaciones. Cuando ocultamos la
información sobre algún negocio o plan que somos incapaces de llevar a cabo, pero
tampoco queremos que otro lo haga. Cuando censuramos lo bueno que hacen otros, por
nuestra incapacidad o mediocridad para realizar tales tareas. En combinación con la
avaricia, acaparamos las cosas con tal que otros no se beneficien. En combinación con la
falta de aceptación, envidiamos la personalidad de nuestro prójimo en cuanto a su estatura,
sus facciones, su "ángel", etc. Cuando expresamos cosas negativas hacia las personas que
tienen educación y principios o cualquier cosa de la que carecemos. LA CUALIDAD
OPUESTA A LA ENVIDIA ES LA CARIDAD (AMOR) La caridad es un
desprendimiento espiritual, más que material. Es un amor adulto a los demás. Para poder
amar a otros es necesario amarse a sí mismo. La caridad es una de las tres Virtudes
teologales (fe, esperanza y caridad o amor) que consiste en amar a Dios sobre todas las
cosas y a nuestro prójimo como a nosotros mismos. La caridad hace al hombre ser un
instrumento o conducto de Dios. Cuando alguien esta alegre, el hombre caritativo y
amoroso se alegra y si encuentra tristeza, entonces consuela. El desprendimiento en la
caridad es anónimo y con sacrificio. Dar lo que nos sobre cualquiera lo hace. El dar sin
recibir es la virtud de O.A., es el dar sin esperar recompensa. PREGUNTAS DE TRABAJO
1. ¿Puedo aceptar la posición económica de mi prójimo (dinero y bienes materiales), sin
mediar la envidia, ni el resentimiento? 2. ¿Estoy contento con mi trabajo u oficio o envidio
la ocupación de alguien? 3. ¿Estuve contento con los padres que me tocaron o envidié los
de otra persona? 4. ¿Estuve contento con la familia que me tocó o envidié la de otra
persona? 5. ¿Envidié a personajes "públicos o de la historia"? 6. ¿Envidié el prestigio y
poder de otros? 7. ¿Envidié la personalidad de otros? 8. ¿Me disgusté o entristecí del bien
ajeno? Taller Defectos de Carácter en Abstinencia 11 9. ¿Oculté información sobre algún
negocio o plan que yo era incapaz de llevar a cabo? 10. ¿Acaparé bienes materiales con tal
de que mi prójimo no se beneficiara? 11. ¿Envidié el sueldo de otros? 12. ¿Comparto mis
conocimientos técnicos? 13. ¿He envidiado a aquel "imbécil" (según yo), que tiene mejor
puesto en la empresa? 14. ¿Soy caritativo o amoroso con mi compañero escuchando sus
quejas o problemas?. 15. ¿Soy caritativo o amoroso con mi amigo compartiéndole la
experiencia de cómo superar algún problema cuando pide mi opinión? 16. ¿Soy caritativo
con mis hijos orientándoles y no imponiendo agresivamente reglas en su vida?. 7. LA
PEREZA Enfermedad de la voluntad que nos hace descuidar nuestro deber y nos aleja del
trabajo y del esfuerzo. Ociosidad, indolencia, apatía, desidia, holgazanería, dejadez,
negligencia, flojedad, vagancia, mendicidad profesional, y poco cuidado en las cosas que
hay que hacer. Es un síntoma de depresión y es sinónimo de mediocridad. Hay pereza
mental y pereza física. Negligencia en el cumplimiento del deber. Demora en la ejecución
de un buen propósito. Indecisión para finalizar un asunto. Aplazamiento para otro día de los
que puede hacerse en el acto. Lentitud en alguna tarea de trabajo. El perezoso posterga las
cosas (no hace hoy lo que puede hacer mañana). Decaimiento en el bien obrar, tanto en el
terreno material como el espiritual. Hace conformista al perezoso, le genera la mediocridad
de su vida y se conforma "con ir pasando". El perezoso ya no lucha por evitar una posible
catástrofe. La inconsistencia es una pereza disfrazada, ya que intentamos varias cosas a la
vez, pero ninguna terminamos. La pereza nos impide leer un libro que requiera cierto
esfuerzo y nos inclinamos por la "literatura barata". El perezoso se queja amargamente de
que sus asuntos van mal, sin poner acción para encauzarlos. La pereza nos hace ser tibios o
descuidados en nuestro trabajo, en nuestro aseo personal, en nuestras oraciones y vida
religiosa, en nuestras enfermedades, y en general en todas nuestras necesidades físicas,
mentales y espirituales. Somos perezosos cuando hacemos dependencia de las comodidades
cotidianas (coche, calculadora, etc.) o cuando somos negligentes par el acto sexual con la
compañera y olímpicamente nos volteamos. Cuando somos pusilánimes para esas
actividades que nos pueden capacitar y tercamente decimos "ya estoy viejo o no sirvo para
eso". Cuando dejamos a otra persona la responsabilidad de esos compromisos cotidianos,
juntas, inscripciones, velatorios, convivencias, juntas escolares, etc. Desatendemos la
comunicación con la familia y el día que queremos opinar sobre la autónoma de la casa
tenemos problemas. Taller Defectos de Carácter en Abstinencia 12 LA CUALIDAD
OPUESTA A LA PEREZA ES LA DILIGENCIA Prontitud, presteza, voluntad de hacer
las cosas, acción, actividad. El trabajo es un don de Dios, y no es el trabajo el que nos va a
matar, sino la angustia de no hacerlo. Estamos en este mundo para mejorarlo y esto lo
logramos siendo diligentes. ¿Qué mundo vamos a dejar a nuestros hijos?. Somos diligentes
cuando tomamos la aptitud de terminar un trabajo y la mantenemos firme hasta el final. Las
metas intermedias son la clave. La persistencia, el entusiasmo, y la creatividad son aliadas
poderosas para la diligencia. La fe genuina y autentica en uno mismo (tal vez no del tamaño
del grano de la mostaza) es el "combustible" para la persistencia, el entusiasmo y la
creatividad en la diligencia de nuestros problemas. Solo se necesita calidad de Fe y no
cantidad para la acción y la actividad. Somos diligentes cuando nos dedicamos a realizar
gustosamente nuestro trabajo actual desde la primera hasta la última hora. Somos diligentes
cuando hacemos "un poquitín mas" en nuestro trabajo, sin el pensamiento egoísta de
esperar recompensa. Somos diligentes cuando despapelamos el escritorio y de cinco o diez
problemas solucionamos uno a la vez. El sano juicio (prudencia) aunado a la diligencia nos
previene en contra de lo superfluo o de los excesos en nuestros asuntos. Aristóteles dijo:
“Sustituye el ocio y los vicios que te hacen infeliz, por el trabajo y las virtudes serás
dichoso, y no pedirás al cielo que te libre de unos males cuyo remedio esta en tus manos.
Por otro lado Sócrates estableció: No es perezoso únicamente el que nada hace, sino
también el que podría hacer algo mejor de lo que hace (lo bueno es enemigo de lo mejor).
El salario es de acuerdo al trabajo. PREGUNTAS DE TRABAJO 1. ¿Fui inconsciente con
mis compromisos? 2. ¿Postergué las cosas? 3. ¿Intente hacer varias cosas a la vez pero
ninguna terminé? 4. ¿Me incliné por la "lectura chatarra"? 5. ¿Hice dependencia de las
comodidades cotidianas? 6. ¿Dejé los compromisos familiares a mi compañera? 7. ¿Tomé
decisiones y las mantuve firmas hasta el final? 8. ¿Fue diligente para el trabajo? 9. ¿Soy
diligente tomando la actitud de que esos 15 minutos que dispongo para hacer oración! son
para hacer oración!? 10. ¿Soy diligente actuando con prontitud en mis asuntos?
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 Orgullo 37
 Soberbia 34
 Lujuria 33
 Baja Autoestima 30
 egoísmo 28
 Falta de fe 26
 Deshonestidad 23
 Terquedad 22
 Pereza 22
 Ira 18
 Egocentrismo 17
 Negación 13
 Envidia 11
 Infidelidad 10
 Miedo 8
 Gula 6
 Grandeza 5
 Conmiseración 4
 Autoengaño 3
 Codependiente 3
 Resentimientos 3
 Postergación 3
 Celos 3
 Vanidad 3
 Apego 2
 Culpa 2
 Autosuficiencia 2
 Búsqueda de aceptación 2
 Manipulación 2
 Comodidad 2
 Desconfianza 1
 Falta de agradecimiento 1
 Posesividad 1
 Irritabilidad 1
 Apatía 1
 Desorden 1
 Falta de confianza 1
 Perfeccionismo 1
 Mal genio 1
 Ego 1
 Aislamiento 1
 Control 1
 Intolerancia 1
 Mala administración del dinero 1
 Imprudencia 1
 Inconstancia 1
 Necedad 1
 Depresión 1
 Inseguridad 1
 vergüenza 1
 Seriedad 1
 Pasiva 1
 Sencillez 1
 Frialdad 1
 Pertenencia 1
 Confiar rápido 1
 Sentimiento de soledad 1
 Negatividad 1
 Desorganización 1
 Candidez 1

Los defectos de carácter

1.- Egoismo:
Inmoderado amor de uno mismo que le hace pensar únicamente en su interés personal.
Egocentrismo.
Tendencia a considerarse el centro del Universo. (Aquí se hace lo que yo diga y punto.) Al
egocéntrico le parece que el mundo gira a su alrededor. "Al estar ensimismada en mi propia
vida no me doy cuenta de las opiniones negativas que hacen los demás de mí, sólo busco
escuchar o ver aquellas opiniones positivas que los demás hagan de mí, lo que trato
constantemente deseo es defender mi mundo y no tome en cuenta paradojicamente las
opiniones de los demás, no les considero pues sólo pienso en lo que yo quiero, lo que yo
pienso, lo que yo deseo.

En el grupo se suele decir: yo quiero mis huevos al gusto. Suelo creer que lo que yo quiero
los demás tienen que cubrir mis deseos que en muchas ocasiones pueden ser caprichos. Mi
actitud infantil me hace sentir que yo soy la que manda yo soy la que decide como quiere y
cuando quiere que se hagan las cosas. No me pongo a pensar que existen otras personas que
pueden pensar distinto a mi o que incluso no quieren complacerme o bien que pueden
incluso estar viviendo lo mismo que yo el vivir en su egoismo los aisla también.

Lo que yo trato de cuidar es mi mundo, y sólo veo por mi y lo que muchos dicen: "primero
yo, luego yo y después yo" es una manera de ignorar a los demás pero no se desea ser
ignorado, se desea ser el centro de atención, de las miradas y aquellas que sean las positivas
no las negativas, cabe la pena aclarar, según yo. Esta autoimagen de ser el más importante
de ser "la última coca del desierto", de tener una actitud de "diva" no es otra cosa que parte
de la soberbia, el exceso de poder y manipulación sobre los otros.

Le gustaría bailar pero no se atreve a hacerlo, porque siente temor a parecer torpe. Al
acometer cualquier empresa, siente pánico de dar una impresión desventajosa de sí mismo,
porque podría perjudicar la fachada postiza que le presenta a la gente.
¿Estoy siempre únicamente pensando en mi interés personal?
¿Me creo el centro del Universo?
¿Atiendo primero mis necesidades que las de mi familia?
¿En las reuniones me siento la persona más importante?
¿Siento excesivo temor cuando me dispongo a bailar?
¿Pretendo aparecer ante los demás como una persona importante?
¿Presento ante otros una "fachada" postiza?

"Vivo el narcisismo, la autoimagen idealizada de ser yo la persona más importante del


mundo de la gente de mi alrededor, ignorando sus necesidades y creo esta idea de mi
misma perfecta en la que quiero que nadie se de cuenta que si los veo y que si son ellos
parte de mi mundo también, y creo una vida falsa, postiza, fantaseosa de que no pierdo mi
poder sobre los demás y que todos deben estar a mi disposición y servicio, cuanta hostilidad
y miedo a amar a los otros para incluirlos en mi mundo"

2.- La autojustificación:

Tendencia a justificarse a sí mismo, a probarse a uno mismo que tiene la razón. Alto grado
del arte de justificar la manera de beber, de comer y la conducta de uno, haciendo
malabarismos mentales. Pretextos que llamamos razones.
¿Me estoy justificando constantemente a mi mismo por errores, aduciendo algunas de estas
razones o pretextos?

"La autojustificación es una manera inconsciente de protegerme de una crítica externa. La


crítica externa puede también ser interna. Si veo que he cometido un error o falta u otra
persona me lo señala quiero salvar mi auto-imagen y lo que hago es como salvar mi acción.
Es una manera de poder librar la crítica de la otra persona. Si autojustificarme bien puede
traerme problemas con los demás pues los demás se derán cuenta que uno se esta
autoengañando y lo señalarán también entonces es difícil salir del círculo vicioso. La
autojustificación suele ser una manera de rescatar la autoimagen dañada ante los
demás,aunque esto implique que uno también tenga que engañarse a uno mismo."

3.- Falta de honradez en la manera de pensar:

Carencia de probidad, de integridad en las reflexiones que uno hace. Es otra forma de
mentir, hasta es posible que usemos como base una hipótesis de hechos y verdades, pero a
través de una serie de malabarismos mentales, llegamos precisamente a la conclusión que
nos habíamos propuesto llegar.
l. ¿Uso algunos de estos malabarismos o racionalizaciones?

o a) A partir de mañana, vida nueva...


o b) Si no fuera por mi mujer ( esposo) y mis hijos...
o c) Si no fuera por mi suegra...
o d) Si pudiera empezar de nuevo...
o e) Una copa me ayudará a pensar sobre este asunto..
o f) Es que hay gente que me ataca los nervios, no 1as soporto...
o g) Si en un principio hubiera hecho las cosas de otra manera...

"La mentira es una manera de cambiar la versión o la historia de las cosas, es como una
edición sobre los hechos acontecidos. Si bien esa no es la realidad es una manera de
justificarse ya sea echandole al otro la culpa de una acción que uno hizo o buscando un
pretexto para no cambiar la conducta de uno mismo. Si los razonamientos que uno se hace
muchas veces son interpretaciones de la realidad. Entonces uno puede interpretar las cosas
a la mejor conveniencia de uno y uno puede llegar a autoengañarse momentaneamente,
muchas veces no hay una mala intención verdaderamente uno puede usar la exageración o
las promesas como una manera de asegurarle al otro que uno va a modificar una conducta o
un hábito que uno dice que quiere cambiar. El hábito se cambia cuando ya no hay otra
opción no se llega a cambiar por tener buenas intenciones sino porque ya no puede uno
seguir con el mal hábito por más tiempo pues las consecuencias son más sufribles que el
autodiciplinarse"

4.- Engreimiento

Envanecimiento, orgullo (1 de los 7 pecados capitales)


Cuando cometo una falta y me lo señalan, ¿cuál es mi reacción? ¿Me molesto?
¿Siento lastimado mi amor propio cuando admito mi impotencia ante algo?
¿Hace el orgullo que yo sea mi propia ley, mi propio juez en cuestiones de moral, mi propio
Dios?
¿Es para mí el orgullo una fuente de censura, de murmuración mal intencionada, de
difamación y de destrucción de carácter?
¿El orgullo hace que yo trate de justificar mis faltas, porque estoy renuente a admitir que
estoy equivocado?

"Si yo acepto que tengo un ego muy grande, que soy una persona egocéntrica que se cree la
última cocacola del desierto o bien que soy presumida en qué lugar me estoy poniendo.
Pues bien el ser engreida no es algo que uno canta a los cuatro vientos. La gente
normalmente rechaza a los engreídos. Si una persona señala un defecto, error o cualquier
falla entonces mi autoimagen es dañada. Si soy una persona engreída me siento ofendida
pues han dañado mi autoimagen y además que no han creido que soy la mejor persona
como yo misma lo creo entonces estoy en peligro que otros también lo lleguen a creer,
entonces mi ira sale a defender mi comunmente llamado "ego" y lo que hago es yo creer
que soy quien tengo la razon y menosprecio lo que otros dicen de mí y los desapruebo,
descalifico. Si mi forma de vivir no sigue la ley divina inclusive puedo llegar a querer, a
decir o a ser atea, yo me convierto en mi propia ley, en mi propio dios y juzgo al otro de
obrar con dolo con mala intención y de difamarme. Es difícil convencer a un narcisista que
vive en el error y más convencer al orgulloso o soberbio que hay un poder superior y que
no es uno mismo"

5. -Resentimiento

Disgusto que se experimenta por algo. Es el desagrado emanado de un daño, real o


imaginario, que va acompañado de exacerbación, de odio. Es uno de los defectos que más
nos perjudica.
¿He sentido odio contra el patrón cuando me han despedido del trabajo?
¿Me he encolerizado contra aquellas personas que me advertían que estaba obrando mal en
algo?
¿He odiado a alguien a quien se le reconozca el cabal desempeño de sus obligaciones?
¿Tengo resentimiento contra alguna persona?
¿Tengo resentimiento contra a1gún grupo de personas?
¿Contra instituciones?
¿Contra religiones?
¿Contra ideas?
El resentimiento saca a relucir lo peor de nuestra inmadurez emocional y causa aflicciones
tanto a uno mismo como a otros.

"El resentir es volver a vivenciar el dolor o el enojo o la situación incómoda. La ira


acumulada por no haber reaccionado en el momento necesario de ponerle límite al otro, de
defenderse, de huir de una situación incómoda o de protegerse es primero hacia uno mismo.
Y luego hacia el agresor. Para estar resentido con el otro primero debo de estar resentido
conmigo mismo. Si yo no puedo darme cuenta que estoy resentido con migo misma y me
digo y le canto al mundo entero mi queja sobre la situación que me incomoda, duele, enoja
y que aun no dejo pasar u olvidar entonces reafirmo mi idea que mi enojo es ante el otro.
Pongo mi responsabilidad en el otro. Es una manera de victimizarme ante la situación en la
que yo debí haberme protegido y no lo hice. Es una manera de autoengañarse y echar la ira
hacia afuera que es más bien una ira hacia uno mismo pero uno no lo puede ver pues es una
manera muy dolorosa de ver que uno se equivocó y que uno fue vulnerable principalmente.
El problema de fallar es que uno no quiere aceptarlo. Es más facil aceptar que el otro fue el
que se equivocó y que daño que aceptar que uno mismo fue el que se dañó y que uno
mismo es el que se equivocó. Cuando yo logro aceptar que yo tengo parte de
responsabilidad de esta situación que me lastima pues dejo de acusar y culpar al otro
aunque también esté involucrado en esta situación de enojo, dolor e incomodidad. Una
manera de evitar el resentir es darse cuenta que uno pudo haber tomado otra decisión y que
por algo uno no la tomó y que aunque uno se arrepienta uno no pudo haber tomado otra
decisión y que no tiene caso dolerse nuevamente ante la situación dolorosa."

6.- Intolerancia

Falta de indulgencia hacia lo que no se puede impedir. Renuncia a transigir con creencias
(religiosas o políticas), ideas, costumbres, etc., que difieren de las de uno.
Odio a otros por el hecho de ser:

 a) Si rompo con esa querida que tengo, me va a hacer un escándalo y mi mujer


que nada sabía, se va a enterar del enredo en que estaba yo metido.
 b) No es justo que mi mujer tenga un disgusto, así es que mejor deje que las cosas
sigan igual.
 c) La "otra" no tiene ninguna culpa...
 d) Si le digo a mi esposa cuánto fue lo que realmente me dieron de gratificación,
todo el dinero se va a ir en pagar cuentas atrasadas, así que mejor no se lo digo y
que viva en paz.
 e) Mi esposa viste bien; en la casa no falta nada, mis hijos van a un buen colegio;
qué más quieren?

"Cuando yo no tomo decisiones para evitar un conflicto o para no ser señalado por los
demás por estar haciendo mal pues lo único que hago es evitar tomar responsabilidad de
mis actos, y no tener consecuencias sino evadirlas. Cuando me hago como dicen
popularmente "de la vista gorda" es decir que como que no veo lo que sucede o como que
no quiero moverme de donde yo estoy cómodo pues lo único que hago es que como bien
dicen que el problema se haga bolsón, que los problemas me lleguen hasta el cuello hasta
que ya es inevitable y la consecuencia me llega. Es un hecho que lo que el "hombre
sembrare eso también segará" yo sé que muchas veces saco provecho de que los demás no
sepan algo y de allí pueda yo tomar ventaja. La gente normalmente dice a "rio revuelto
ganancia de pescador" o bien dicen "ya me tocaba" uno se puede pasar cualquier regla por
encima si uno desea justificar su acción y bien mucho más si no hay quien se lo señale a
uno y uno no siente que tiene que entregarle cuentas a nadie y mucho menos a un poder
superior."

o 7.- Impaciencia

Carencia de la cualidad de saber esperar con tranquilidad las cosas que tardan.
¿Cuando alguien me hace esperar, recuerdo mis impuntualidades?
¿Soy paciente en 1as reuniones, en el cine, en la Iglesia, en el mercado, en el tráfico,
etc. ?

"Todos tenemos una visión de lo que es importante y urgente para uno. Si yo deseo
estar haciendo otra cosa y quiero que la otra persona tenga el mismo ritmo de vida que
yo tengo y no lo logro manipular me empiezo a impacientar. La manera en la que yo
me impaciento es cuando yo empiezo a sentir enojo, mi cuerpo se llena de energía y
muchas veces empiezo a caminar, a mover la pluma, el pie, como deteniendome de
irme y gritar en ira y al mismo tiempo quererle hacer ver al otro de una forma
relativamente sutil que ya no quiero esperar más, que empiezo a sentir que estoy
perdiendo el tiempo al estarle esperando. En México muchos de los trámites en las
oficinas pueden provocarme impaciencia pues yo lo que menos deseo tengo es de
esperar y sé que es una realidad inevitable. El esperar ¿que me hace sentir? que
diferencia hay entre estar en ese lugar esperando que algo suceda a estar afuera ya
haciendo otra cosa, la diferencia igual y no es en el tiempo en sí sino es un problema
de quererse imponer ante el otro. Yo quiero hacer mi voluntad ser ingobernable no
gobernable y dependiende de tu ritmo de vida. Qué difícil es aceptar que dependemos
de otros y que no todos pueden tener el ritmo de vida que tenemos nosotros o
viceversa. Muchas veces otros llegan a sentir impaciencia con uno mismo"

8.- Envidia

a) Mi vecino cambia de auto cada año porque le está yendo bien en los negocios, pero
yo siento que me está haciendo quedar mal a mí; para tratar de salvar las apariencias,
¿hago lo posible por ridiculizarlo?
b) Mi cuñado es un hombre dedicado a su familia, trabajador y decente. ¿Digo yo de él
que es un tipo infuloso porque quisiera ser como él?
c) ¿No me he dicho alguna vez: "Si yo hubiese tenido las oportunidades que fulano de
tal ha tenido, estaría tan bien o mejor que el"?
"Cuanto hace sufrir la envidia, es algo tan común y tan oculto. Pocas personas llegan a
confesarle a la persona a la que envidian que le envidian pues es algo que puede causar
muchos problemas. El envidiar es algo que si puede ser evitable pero no es facil de
hacer. Requiere de mucho auto control. Es decir si yo dejo de compararme con el otro
y dejo de ver que su pasto es más verde que el mío, todo es cuestión de percepción. Si
yo tan solo pudiera ver que lo que tengo y hago tiene que ver con mis propias
capacidades y que si no tengo algo es porque no lo he conseguido simplemente así.
Las decisiones de los otros no deberían influenciarnos tanto y menos para auto
atacarnos y dañarnos. La envidia puede ser muy dolorosa especialmente porque nos
hace ver nuestra frustración, nos hace ver nuestra carencia y no nos hace ver que es lo
que sí hemos logrado y qué si tenemos. Yo no puedo ver que otros me envidian y si
cuando yo envidio. Cuando yo llego a envidiar algo de una persona generalmente no
veo el global de toda la persona y su circunstancia de vida si tan solo pudiera darme
cuenta que una persona es como un conjunto de circunstancias no sólo las cosas lindas
que nos brillan los ojos y que anhelamos y deseamos tener o lograr."

9.- Hipocresía

Vicio que consiste en la afectación de una virtud o cualidad que uno no tiene.
a) ¿Hago obsequios valiosos para calmar la tormenta que desato con mis malas
acciones?
b) Me compro cosas diciéndome que las necesito, pero a mis hijos, esposo o alguna
persona cercana, ¿no les habría podido resolver una real necesidad?
c) ¿Soy de los que deja pasmada a la gente con sus profundos conocimientos, pero no
tiene un minuto de su tiempo para dedicarlo a la familia?
d) ¿Hasta qué grado es real lo que pretendo ser ante los demás?

"Tan comunes las frases de "Farol de la calle obscuridad de la casa" o bien el querer
quedar bien con los demás y no quedar bien con uno mismo. Es más facil ver afuera lo
que uno no ve hacia adentro. El cambio interno es el que hace o provoca el cambio
externo y no al revés."

10.-Morosidad

Lentitud, tardanza en hacer una cosa. Posponer las cosas que uno sabe que tiene que
hacer. Dejar las cosas para mañana.
a) ¿Ha habido cosas sin importancia, pero que tenía que hacer, las cuales dejé para
después, hasta llegar el momento en que me fue imposible hacerlas?
b) ¿Me mimo haciendo las cosas "a mi modo" o trato que haya orden y disciplina en el
desempeño de mis obligaciones cotidianas?
c) ¿Desempeño a gusto los encargos que se me hacen?
d) ¿Creo que me están cargando la mano o es que soy demasiado flojo y orgulloso?
e) ¿Creo que las cosas triviales se vuelven importantes, cuando se hacen por amor a
Dios?

"El que una persona deje sus responsabilidades para luego, es un hábito en donde lo
que no hay es gobernabilidad sino ingobernabilidad y rebeldía. Es decir esta pasividad
es una manera agresiva de no hacer algo bueno por mí, no hay un compromiso y lo
que me deja son sentimientos de pérdida de oportunidades o inclusive es una manera
de no aprovechar las cosas que muchas veces el medio nos provee."

11.- Auto-conmiseración

Compasión, sensibilidad excesiva por el mal que padece uno mismo. Defecto insidioso
de la personalidad y señal de peligro, al que se debe estar muy alerta.
a) ¿He dicho "Si yo tuviera dinero no tendría que preocuparme"?
b) ¿Me estoy lamentando constantemente de mi situación económica?
c) ¿Me conmisero demasiado en mis asuntos emotivos?
d) ¿Tengo la idea de que a mí nadie me quiere?
Cuando alguien siente auto-conmiseración, conviene visitar la sala de cancerosos de
un hospital, para poder tener en cuenta las bendiciones y beneficios que uno ha
recibido.

"Es una manera de darse atención y buscar la atención de los demás en un hecho que
es lamentable el estar sufriendo por algo. Cuando veo lo mal que la paso, lo mal que
estoy y me enfoco en lo que no me toca, en lo que carezco, en lo que me preocupo lo
único que puedo ver son pretextos para quedarme allí, no estoy buscando soluciones o
bien respuestas o alternativas sino que me estoy encasillando a una situación que
mantengo. Puede llegar a ser cómoda la auto-conmiseración, no hay movimiento, no
hay acción hay pasividad para buscar ser rescatado por alguien. Quiero que otros
reafirmen mi valía y lo hago llorando, quejándome, es una manera de no buscar en mi
misma la valoración."
12.- Susceptibilidad excesiva

Exceso de delicadeza, de genio. Nimiedad de carácter.


a) Saludo a un conocido, pero este no me contesta. ¿Me siento entonces desairado y
molesto sin pensar que tal vez no me haya visto o reconocido?
b) Si no me invitan a una reunión o si no se me invita a hablar en una sesión, entonces
¿entra en juego mi imaginación y llego a la conclusión, de que es por que les soy
antipático?

"Cuando soy susceptible excesivamente logro ver lo que otros dicen: "moros con
trinchetes" es decir: me siento atacada de algo que no fui atacada. Lo que sucede es
que la interpretación hacia las circunstancias llega a ser más poderosa que la misma
circunstancia. Es decir yo doy por hecho que lo que interpreté es la realidad, no llego a
confrontar a la persona a decirle por ejemplo te estoy saludando porque no me
contestas...y cuestionarle y ver que es lo que sucede. El no saber que es lo que la otra
persona hace o el porque hace lo que hace nos puede hacer conflicto cuando lo que
interpretamos es algo que va en contra de uno. Si yo en vez de estar pensando en por
qué la otra persona hizo o no lo que hizo y mejor lo pregunto entonces me torturo
pensando en que seguramente lo hizo o no lo hizo para dañarme. El peor error es que
uno se invente problemas o historias que no son las que sucedieron y que la otra
persona pudo ni haberse enterado de la situación."

13.- Miedo

Sentimiento de inquietud por un peligro real o imaginario. Si aceptamos ponernos en


las manos de Dios y encaramos con honradez lo que realmente somos, entonces el
fantasma del miedo desaparece.
a) ¿Siento temor en determinados días, sin que haya motivo justificado?
b) ¿Siento miedo de quedarme sin trabajo, de quedarme solo, sin razón para ello?
c) ¿Me invade la inquietud por peligros irreales?
d) ¿He puesto mi vida y mi voluntad al cuidado de Dios?
e) ¿Qué hago cuando me invade el temor, el miedo, la inquietud?

"El miedo a la incertidumbre a no tener manera de sobrevivir a sentir vacío, soledad, a


no poder con la situación que se presente se resuelve depositando estas limitaciones
ante el poder superior. Cuando logro depositar mi miedo al fracaso, mi miedo a no
tener sustento y a no poder sobrevivir ante mi poder superior y creer que seré
rescatada por él entonces ya no tengo necesidad de protección de otros, puedo confiar
con fe en que seré sustentada por el poder superior y que aun en situación de peligro
sabré que hacer con su guia. El problema del miedo es que uno siente el desamparo en
primer lugar porque uno mismo se desampara y mucho más puede uno creer que otros
lo harán con uno ya que uno fue el que primero lo hizo con uno mismo y pues por eso
uno cree que el poder superior lo hará con uno mismo también. El chiste del miedo es
que nos alerte no que nos paralice. El propósito del miedo es hacernos ver que
podemos tener un problema y que hay que resolverlo no tanto que no podremos
sobrellevarlo pues no estamos solos el poder superior va con nosotros. El único chiste
es creer que el poder superior ve por nuestro bien y que va con nosotros no estamos
sólos aunque tengamos miedo, incertidumbre, vacío y soledad."

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