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Dia de La Madre

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La importancia de llamarse Ernesto

Dice Paco Nieva que La importancia de llamarse Ernesto es «un perfecto sueño de teatro, una
comedia despiadada y excéntrica, perfecta, bella y onírica como la vida de una rosa en las
extrañas paredes de un jardín vertical». Una rosa delicada que nos recuerda aquello efímero y
revelador que tiene la belleza y la vida.

Wilde escribió un guiño perfecto lleno de sabiduría dramatúrgica y de inteligencia vital. Con sus
réplicas desacomplejadas hace que la verdad explote en la cara de los espectadores, que se
sienten constantemente interpelados.

Wilde obra una gran cantidad de territorios por donde se pasean sus personajes: el amor, el
deseo, los orígenes, el compromiso, la hipocresía, la identidad y, sobre todo, la libertad, la suya
tan estimada libertad, para poder ser quien era, y que lo llevó a la prisión al poco de escribir La
importancia de llamarse Ernesto. Este sentimiento de libertad está presente en toda la función.
Y quizás la concreción más clara de esta libertad la vemos en dos de los personajes femeninos,
Gwendolen y Cecily, que viven con tanta o más intensidad su vida soñada que su vida real. ¿Dónde
están los límites de cada uno de nosotros? ¿Por qué nos autocensuramos? ¿Cómo podemos llegar
a ser, con plenitud, nosotros mismos?

Aunque quizás cueste de ver, puesto


que nos encontramos ante una comedia
luminosa, dentro de La importancia…
hay también una fuerte pulsión de
muerte. Como toda obra de arte que
nos resuena, después de más de cien
años de su creación, lo que nos explica
Wilde de cómo vivir está
profundamente ligado al hecho de que
esto de existir (que sepamos nosotros)
solo pasa una vez y que nuestra
«estancia» en este mundo solo tiene
sentido si llegamos a ser libres.
Mucho ruido pocas nueces
Acto Primero
Escena I
Delante de la casa de Leonato.
Entran LEONATO, HERO, BEATRIZ y otros personajes, con un MENSAJERO.
LEONATO.—Veo por esta carta que don Pedro de Aragón llega esta noche a
Mesina.
MENSAJERO.—Debe de hallarse muy próximo, pues no estaba a tres leguas
de
aquí cuando le he dejado.
LEONATO.—¿Cuántos caballeros habéis perdido en esta acción?
MENSAJERO.—Sólo unos pocos de cierto rango, y ninguno de renombre.
LEONATO.—Una victoria vale por dos cuando el vencedor regresa al hogar con
las filas completas.
Hallo aquí que don Pedro ha colmado de honores a un florentino llamado
Claudio.
MENSAJERO.—Muy merecidos por su parte y justamente otorgados por don
Pedro. Ha superado las promesas de su edad, realizando bajo apariencias de
cordero hazañas de león. Verdaderamente, ha superado las mejores
esperanzas
a un extremo que no esperéis pueda deciros cómo.
LEONATO.—Tiene aquí en Mesina un tío que se alegrará muchísimo al saberlo.
MENSAJERO.—Ya le he enviado unas cartas y ha mostrado sumo júbilo; a un
grado tal que el gozo no pudo exteriorizarse con la moderación debida sin una
marca de tristeza.
LEONATO.—¿Rompió a llorar, tal vez?
MENSAJERO.—Con gran abundancia.
LEONATO.—¡Un tierno desbordamiento de ternura! No hay rostros más leales
que los que así se bañan en llanto. ¡Cuánto mejor es llorar de alegría que
alegrarse del lloro!
BEATRIZ.—Por favor, el signior Mountanto ¿ha regresado de la guerra o no?
MENSAJERO.—No conozco a nadie así llamado, señora. Ninguna persona de
viso había en el ejército con semejante nombre.
LEONATO.—¿Por quién preguntáis, sobrina?
HERO.—Se refiere mi prima al signior Benedicto de Padua. MENSAJERO.—
¡Oh! Ha regresado, y tan jovial como siempre.
BEATRIZ.—Fijó un cartel aquí en Mesina, retando a Cupido al arco; y el bufón
de
mi tío, al leer el reto, le contestó por Cupido y le desafió a la saetilla de cazar
gorriones. Decidme, ¿a cuántos hombres ha dado muerte y se ha engullido en
estas guerras? ¿A cuántos ha matado tan sólo? Porque, a la verdad, yo he
prometido comerme todo lo que matara.
LEONATO.—A fe, sobrina, que tratáis con excesiva dureza al signior Benedicto;
pero él se desquitará con vos, no lo dudo.
MENSAJERO.—Ha prestado buenos servicios en estas guerras, señora.
BEATRIZ.—Tendríais víveres rancios, y os ayudó a comerlos; es un valentísimo
gastrónomo; posee un estómago excelente.
MENSAJERO.—Es también un buen soldado, señora.
BEATRIZ.—Un buen soldado ante una dama; pero ¿qué es frente a un caballero?
MENSAJERO.—Un caballero frente a un caballero, un hombre frente a un
hombre, adornado con toda clase de honrosas virtudes.
BEATRIZ.—Eso es, efectivamente; no otra cosa sino un hombre adornado; mas,
en cuanto al adorno... Bien, todos somos mortales.
LEONATO.—Señor, no toméis en mal sentido las palabras de mi sobrina. Hay
una especie de guerra chistosa entre ella y el signior Benedicto. Jamás se
encuentran sin que se entable entre ambos una escaramuza de ingeniosidades.
BEATRIZ.—¡Ay! Nada suele ganar en ello. En
nuestra última contienda, cuatro de sus cinco sentidos salieron malparados, y
ahora no le queda más que uno
para el gobierno de todo su ser.
Así que, si le
resta ingenio bastante para
mantenerse en calor, consérvelo,
a fin de distinguirse
de su caballo, por cuanto es el
único atributo que le queda para
pasar por una
criatura racional. ¿Quién es
ahora su compañero inseparable?
Cada mes tiene
uno nuevo, que jura ser hermano
suyo.
Copenhagen

Escrita por el escritor y dramaturgo británico Michael Frayn, es una de las


obras de teatro más famosas y está basada en hechos reales.
Específicamente, en una junta que ocurrió en el año 1941, entre los físicos
Niels Bohr y Werner Heisenberg. En ese entonces, acontecía la Segunda
Guerra Mundial; y Niels y Werner se encuentran trabajando en proyectos de
armas, pero para bandos opuestos.

Aunque no se sabe con certeza qué fue lo que discutieron en esa junta, la
obra teatral imagina lo que platicaron. Ambos protagonistas tienen una pasión
por la ciencia, pero al mismo tiempo, están en conflicto, al estar
desarrollando armas que potencialmente podrían aniquilar el mundo.

En resumen, se trata de una de las obras de teatro más famosas que explicita
la importancia de la memoria histórica, la ambición y el arrepentimiento.

sala de teatro de obras más famosas.


Volad juntos pero jamás
atados
Los alumnos de valores de 2º de primaria han hecho un teatro titulado "Volad
Juntos pero jamás atados". Esta es una leyenda de los indios Sioux
norteamericanos. Una pareja de amigos indios, Toro Bravo y Nube Azul piden
consejo a los Chamanes del pueblo. Ellos siempre quieren estar juntos y los
chamanes les mandan una tarea arriesgada. Cuando la cumplen regresan a la
aldea. Allí con los chamanes aprenden que si están siempre juntos y no son
libres, al final, se harán mucho daño.
Cosas de madre
Niña 1: Saben, estaba pensando que… yo creo que… si, casi estoy convencida,
es más creo que es así, definitivamente…no podía ser de otra manera. Sí.

– Niña 2: Esta chica está media chiflada…. Hey amiga, que pasa, por qué estás
hablando sola, que es eso… haz sufrido alguna decepción, tu gato anaranjado
se puso verde o algo así.Dime, de qué estás convencida….(Al público) Que
raro… parece que no escucha….Pero… acaso estás sorda… (Si parece autista)
dime cuál es el final de la oración, por favor dime…

– Niña 1: (Al público) Mmm, ¿qué?

– Niña 2: Dime cuál es el final de la oración, por favor dime…

– Niña 1: Ahhhhhhh….. Esta chica parece tener cara de inteligente, le


preguntaré… No sé si te habrás dado cuenta de algo…

– Niña 2: De algo como qué…


– Niña 1: Primero dime, ¿cómo te llamas?

– Niña 2: Mi nombre es Jacinta.

– Niña 1: Jacinta, dime ¿alguna vez te has puesto a pensar?

– Niña 2: ¿Pensar? Claro, he pensado que tengo que tratar de no pensar


tanto… (Al público) hay esta chica es medio rara…a ver que más tienes por
decir….

– Niña 1: Dime Jacinta, ¿no crees que todas las mamás se parecen?

– Niña 2: No, mi mamá no es igual a las mamás de mis compañeras,


definitivamente no.

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