UNIVERSIDAD NACIONAL JOSÉ FAUSTINO SÁNCHEZ CARRIÓN
ESCUELA DE POSGRADO
CURSO:
CRIMINALÍSTICA
CICLO:
I–A
TEMA 06:
INVESTIGACIÓN EN LA ESCENA DEL CRIMEN
DOCENTE:
DR. MIGUEL ANTONIO CABANILLAS PEZO
HUACHO – PERÚ
2021
INVESTIGACIÓN EN LA ESCENA DEL CRIMEN
Al practicarse la inspección ocular, el investigador debe estar imbuido de que son necesarias dos
condiciones fundamentales para que sea eficaz su intervención:
1. La minuciosidad:
El investigador no debe subestimar nada de lo que se encuentre en la escena del delito, por más
insignificante que parezca de entrada, por que puede ser la clave decisiva en el proceso
investigativo; y que no debe dejar nada por observar y considerar en la escena del delito y en
sus adyacencias, porque de todo ello puede extraer conclusiones para determinar si esta en
presencia de un hecho real o simulado.
2. La imparcialidad:
No debe rechazar nada por si o por medio de sus auxiliares técnicos por el solo hecho de que se
oponga a la hipótesis que inicialmente se formulara con respecto al hecho investigado; por que
esa hipótesis puede ser falsa y, si no ha recolectado todo cuanto oportunamente estuvo a su
alcance recolectar, difícilmente podrá contar con posterioridad con los elementos que le señalen
la verdadera senda investigativa.
Si la investigación de un hecho delictivo se traduce en un fracaso, la causa de ello en términos
generales radicara en la investigación inadecuada que se practique en el lugar de los hechos. Se
puede decir que el éxito de la diligencia dependerá de cómo se actué en los primeros 15
minutos.
Todas las medidas que toma el funcionario investigador para tomar la intervención de sus
auxiliares técnicos a través del registro y documentación fotográfica y planimetría del estado
originario de la escena del delito y sus adyacencias con todo su contenido y de la posición,
ubicación y características de los testigos mudos determinados y/o revelados por los distintos
especialistas y que han de permitir suministrar la evidencia del hecho criminal, viene a
conformar lo que se ha dado en llamar el retrato del lugar del hecho.
El croquis o plano viene a constituir el esqueleto y la fotografía el músculo que permite
conformar el retrato esa entidad que se llama lugar del hecho o escena del delito; tanto mas
fielmente logrado, cuanto más estrictamente se observen los procedimientos fotográficos y
topográficos.
Dada la gran variedad de actuaciones, no es posible estatuir un procedimiento rutinario,
aplicable a todos los casos; pero si es procedente enumerar las normas y principios básicos,
sujetos desde luego a experimentar las modificaciones que requiera cada caso en lo particular.
Las diversas etapas que integran una investigación son:
1. Procedimiento preliminar:
Al recibir la denuncia, de inmediato debe anotar:
La fecha, la hora exacta en que se recibió la llamada, medio por el cual se recibió la llamada,
nombre del delincuente o el de la persona que tuvo conocimiento de los hechos.
Al llegar al lugar de los hechos deberá anotar:
Hora exacta de llegada, la dirección correcta, una información breve acerca del estado del tiempo.
El agente investigador procederá a obtener la certidumbre de que el sujeto esta realmente muerto.
En la mayoría de los casos la confirmación es fácil, pero en ocasiones la muerte es el
resultado de actividades que no la hacen fácilmente identificables, tales como la sofocación, la
asfixia por sumersión, la electrocución, etc. en esos casos se procederá a realizar tan pronto
como sea posible maniobras resucitatorias, como puede ser la respiración artificial y se solicitara
la presencia del personal destinado a impartir con eficiencia los primeros auxilios.
2. Protección del lugar de los hechos:
Establecida la convicción de que el sujeto esta realmente muerto, el investigador, tomara las
precauciones necesarias para proteger la integridad del escenario, incluyendo desde luego la
posición del cadáver. La necesidad de aislar el lugar de los hechos se impone con vista a preservar
el cadáver y lo que lo rodea, tal como se encontraba cuando acaeció la muerte. De no actuar así, los
objetos serán removidos, los muebles quedarán colocados en sitios diferentes, se removerán
pruebas valiosas o se imprimirán huellas dactilares que no corresponden a los presuntos indicios.
Si el cadáver se encuentra en un espacio abierto, al aire libre, las circunstancias que concurren en la
investigación pueden variar considerablemente, pero las precauciones y los objetivos siguen siendo
los mismos.
3. Descripción del lugar
Se realiza médiante tres métodos o procedimientos
Procedimiento escrito
Fotográfico
Topográfico
a. Procedimiento escrito
Satisfechas las tareas preliminares, el investigador procederá a formular por escrito una descripción
completa del cadáver y de lo que lo rodea. Esta labor se realiza sin mover el cadáver, los objetos y
los muebles, sin alterar las huellas y los indicios. La descripción tomara en cuenta el sexo, la edad
aparente, la complexión, el color de piel del cabello de la cabeza y de otras regiones con población
pilosa, las características de las prendas de vestir y las señales particulares que sean accesibles a la
inspección. Si hay sangre se anotara su condición de fresca o de seca. Las soluciones de
continuidad en la ropa pueden corresponder a desgarros, o bien, al paso de los agentes vulnerantes,
ya sean estos proyectiles de armas de fuego o armas blancas. Las manos de las victimas deban ser
objeto de minucioso examen, se tomará nota si están empuñando armas u otros objetos, o bien, si
estos se encuentran en sus inmediaciones, asimismo, si presentan evidencia de lesiones, de
desperfectos en las uñas o de manchas de sangre.
Por lo general, a la descripción del cadáver sigue la del lugar en donde se encuentra, consignando
lo referente a las puertas, ventanas y mubles, sus relaciones entre sí y con respecto al cadáver. Las
armas deben ser descriptas sin tocarlas.
Se revisarán las paredes, el techo, el piso y otros dispositivos mobiliarios al llevar a cabo una
búsqueda de impactos, ya sean de proyectiles de armas de fuego o de otras armas u objetos
arrojados.
No se descuidará lo relativo a la presencia y ubicación de cápsulas vacías. Ante las posibilidades de
envenenamiento por más remotas que sean, es de elemental previsión examinar los vasos, tazas,
botellas u otros recipientes, así como los envases de medicamentos u otras sustancias.
Es conveniente enfatizar que nunca se escribe demasiado al describir minuciosamente y
detalladamente todo lo que se encuentre en el lugar de los hechos.
A veces mucha más importancia que la inspección del espacio concreto en el que se desarrollo la
tragedia, tiene la de sus alrededores y cercanías.
A pesar de ser el más antiguo de los procedimientos nunca debe aplicarse por si solo si se quiere
dar una versión exacta del lugar del hecho.
Muchas veces el funcionario policial se ve constreñido a aplicar el exclusivo procedimiento escrito
por no contar con el auxilio de técnicos que le brinden su colaboración para apelar los
procedimientos topográficos, fotográficos y grabaciones. Lo menos que pueden hacer el
investigador es confeccionar un croquis de urgencia o de emergencia y/o tomar fotografías con
maquinas de manipuleo elemental.
Cuando se trata de hechos delictuosos cometidos en el interior de un edificio, el retrato debe
hacerse desde afuera hacia adentro, primero se consigna la calle y numero que le corresponde,
calles linderas y dependencias, indicando si existe algún rastro o huella reveladora del acceso del
delincuente y por ultimo con mas lijo de detalles, el lugar o dependencia donde se consumo el
hecho.
b. Procedimiento fotográfico
La utilización adecuada de la cámara fotográfica es siempre de gran importancia. No debe
olvidarse que las buenas intenciones no sustituyen a la experiencia y al adiestramiento.
La fotografía adecuada en este tipo de trabajo requiere la intervención de un experto provisto de un
equipo adecuado. Es preferible esperar una o varias horas y lograr su cooperación a confiar en un
aficionado.
El cadáver debe ser fotografiado desde todos los ángulos posibles recurriendo en su caso al uso de
un lente gran angular o bien a una escalera. Los orificios correspondientes a los proyectiles ya
sean que estén en las paredes o en los muebles pueden requerir el uso de una cámara de doble
fuelle para lograr máxima precisión.
Las impresiones fotográficas útiles requieren tiempo suficiente y el auxilio de un experto en esta
clase de trabajo.
El registro y documentación fotográfica de una escena del delito y sus adyacencias, debe hacerse
cubriendo las mismas etapas señaladas al hablar de los procedimientos escrito y topográfico. Tal
operación debe llevarse a cabo desde afuera hacia adentro y en sentido de las agujas del reloj, en
forma espiramidal, tratando de documentar todas las etapas cubiertas por el delincuente: de donde
vino, de que medios se valió para llegar al lugar, que paso dio y como hizo para introducirse al
interior del edificio, que desplazamiento tuvo luego de llegar al local donde concretaría sus
designios delictuosos y, una vez en la escena, como actuó para llegar a concretarlos; todo ello
perfectamente acreditado por la captación de los indicios materiales extrínsecos cosechados
por los técnicos especializados que actúan como auxiliares del investigador.
Con el procedimiento fotográfico se trata de alcanzar una reconstrucción ideal del hecho delictuoso
cometido.
Las fotografías deben tomarse con una cámara de doble fuelle. Se tomarán placas antes de que se
limpie la sangre, las suciedades; se tomarán obras de las lesiones después de haber limpiado
cuidadosamente la piel circunvecina. Las impresiones se tomarán a corta distancia para precisar sus
detalles.
Las tomas a distancia no ofrecen gran utilidad en casos de heridas por bala o arma blanca.
Es de particular importancia sobre todo cuando se fotografían las heridas que se tome la precaución
de colocar en un lugar adecuado un fragmento de cinta métrica, para comprobar fácilmente la real
extensión de las heridas y de algunos otros elementos accesorios cuya interpretación es
trascendente.
También cuando no se ha podido identificar el cadáver de la victima de un hecho delictuoso, por
medio de sus impresiones digitales o por el reconocimiento de sus allegados nada mas indicado
que tomar fotografías, en condiciones tales que le comuniquen la mayor apariencia de vida.
Esta operación es lo que se conoce con el nombre de aliño del cadáver y consiste en que después de
haberse cumplido las etapas ineludibles del registro y documentación de su posición en la escena
del delito por medios fotográficos y topográficos y el medico legista se procede a ubicarlo sobre
una silla como si estuviera naturalmente sentado; seguidamente, se le coloca sobre la cara una
crema común de tocador para contrarrestar la lividez cadavérica, se le da un leve color en los
labios y mejillas; luego se abren los párpados, se le levan los ojos arrojándoles suero fisiológico
con una jeringa y se le inyecta aceite de resino o glicerina para comunicarles brillo.
Estando bien aliñado el cadáver se procede a tomarle varias fotografías para escoger los mejores y
luego exhibirlas o hacerlas conocer al grueso del público a través de publicaciones periodísticas o
proyecciones televisivas.
c. Procedimiento topográfico
El técnico debe actuar en estrecho contacto con el investigador al realizar la inspección ocular o
escuchar su realización, para luego hacerse su propia composición del lugar y saber que es lo que
debe respetar a través del croquis y por que. Se debe procurar el desarrollo mental del croquis antes
que su desarrollo topográfico.
El investigador a continuación elaborar un esquema del lugar de los hechos procediendo de la
siguiente manera: trazara un boceto de la habitación incluyendo las puertas, las ventanas, la
chimenea y las demás características que ofrezca después con trazos convencionales se ubicaran
los muebles, tales como el piano, las sillas, la cama, etc. finalmente se delinea el cadáver de
acuerdo con la relación que guarde con lo anotado. Se procederá a continuación a medir las
dimensiones de la habitación y de los detalles que le son inherentes, así como las distancias que
guarda el cadáver con respecto a ellas y a los muebles y objetos que haya en el inventario de la
habitación.
Distintas clases de croquis
Dos clases de croquis pueden confeccionarse a levantarse:
1. El de urgencia o de emergencia:
Es el que se levanta o debe levantar el propio investigador al realizar la inspección ocular, para
consignar en el todas las medidas, ubicación de cosas o elementos vinculados al hecho delictuoso
investigado: rastros, manchas, etc. para contar con un elemento que le permita recordar todo cuanto
ha de consignarse en el relato por medio del procedimiento escrito, a fin de no omitir nada que
pueda resultar de importancia, ya que no debe fiarse exclusivamente de su memoria para llenar
cumplidamente su objetivo, por que ella es falible. Es por eso que a este croquis también se lo ha
denominado la ayuda memoria del investigador. Para la confección de este croquis, el investigador
deberá contar con lápiz, papel milimetrado o cuadriculado de medidas conocidas, metro
plegable y una regla graduada en centímetros para con tales elementos, ver facilitado su tarea de
representar lugares y objetos, con acotación de las medidas exactas que tome por si mismo o que le
facilite el planista cuando, pudiendo contar con su colaboración, actúan simultáneamente en la
inspección ocular.
2. El croquis regular:
Es el que debe confeccionar el técnico planista, observando todos los requisitos y exigencias
topográficas, con la utilización de instrumental adecuado: brújula, cinta métrica, regla graduada
en centímetros y milímetros, para todos los datos que debe recoger en el lugar del hecho; mesa de
dibujo, escuadras, reglas T, compases, en las oficinas técnicas, para la confección a escala del
plano definitivo y la observancia de todos los requisitos.
Reglas de Hans Gross.
El plano debe estar orientado de acuerdo a los puntos cardinales que también figuran en él. No
debe estar sobrecargado, no debe contener nada que no este directamente vinculado con el
hecho investigado ya que la fotografía se encarga de registrar y documentar el contenido total
de la escena del delito y de sus adyacencias
El planista debe por si mismo tomar y verificar las medidas, no pudiendo confiar esta operación
de otra persona extraña a la especialidad. No debe confiar en su memoria para acotar o
enmendar algo que debe figurar en el croquis. Todo debe anotarlo en el lugar mismo, porque la
memoria humana es falible.
El croquis debe ser hecho a escala. La escala varia con la mayor o menor extensión del lugar a
representar a través del plano. A mayor extensión, menor escala, a menor extensión, mayor será
la escala. La escala aplicada debe consignarse en el plano para su total y mejor interpretación.
De acuerdo a esto, se pueden confeccionar 3 tipos de planos que, yendo de afuera hacia adentro en
relación a la escala del delito y sus adyacencias, son los siguientes:
1. Croquis de la localidad: Debe contener la ubicación de la casa, edificio o lugar donde se
cometió el hecho delictuoso, consignando la calle y numero, casas linderas, calles transversales, si
fuera una zona urbanizada. Si la casa o edificio estuvieran rodeado de baldíos o campos, hay que
ubicar puntos de referencia que pueden estar constituidos por: cursos de agua, puentes, árboles,
caminos de acceso, fondos linderos, etc. amen de los puntos cardinales. Todo esto es fundamental
para dar una idea exacta de ubicación del inmueble o lugar, para que sea posible su precisa
determinación en cualquier momento y cualquier situación. En caso necesario puede emplearse
signos convencionales de uso común. Se señalan rastros, huellas, etc. indicativos de
desplazamiento del individuo delincuente.
2. Plano del inmueble: Contendrá la representación del edificio o casa con el esquema de sus
diversos pisos, sus diferentes dependencias, jardines, habitaciones, con señalamiento del lugar,
local, etc. donde se consumo el hecho delictuoso para su exacta localización.
3. Plano de la escena del delito o de detalle: Este se limita exclusivamente a registrar la escena
del delito, representando su conformación, el lugar ocupado por el cadáver, el sitio donde se
encontró el arma empleada, los muebles u objetos removidos, las impresiones, rastros, manchas y
huellas diversas dejados por el autor, señales de impacto, etc.; vale decir, todo aquello directamente
relacionado o vinculado al hecho investigado.
En muchos casos es aconsejable no aplicar el exclusivo dibujo lineal sino recurrir al plano llamado
de proyección horizontal o de proyección cúbica o con abatimiento o de Kenyers, denominación
esta ultima que responde al nombre de su autor.
Se llama plano con abatimiento porque la habitación se presenta con trazados lineales totalmente
en un plano, como si se abatieran las paredes y el techo o cielo raso para que queden a un mismo
nivel con el piso. De ahí su denominación plana con abatimiento y también horizontal.
Este plano se confecciona sobre cartulina y una vez terminado, se le hacen incisiones en las
uniones del piso con las paredes y de una de estas con el techo. Al plegarse las distintas partes
tendremos perfectamente reproducido el interior de la habitación.
Si queremos observar su contenido, levantamos las partes correspondientes al techo o abatimos la
cartulina que representa una de sus paredes. Se emplea la misma técnica que se enseña a los niños
en la escuela para construir el cubo, poliedros, etc. De ahí que también a este plano se le llame de
proyección cúbica.
Algunos autores, como Soderman y O´Connell, le llamaron también proyección horizontal plástica.
La proyección horizontal es la que se usa únicamente para confeccionar el plano de la escena del
delito o de detalles.
El plano de proyección cúbica reúne material extraordinario por su gran valor representativo
y reconstructivo, ya que además de fijarse meticulosamente y al milímetro todos los
detalles que aparecen en la escena del delito y que están directamente relacionados con él,
brinda la oportunidad de hacer la representación objetiva de la trayectoria de los proyectiles
cuando, habiéndose empleado armas de fuego, tales elementos se encuentran depositados sobre el
piso después de haber huellas de impactos o rebotes sobre las paredes o techos de la habitación.
Todos los planos deben contener indispensablemente las referencias para que se pueda entrar en
conocimiento del significado de cosas representadas y señaladas con las correspondientes
llamadas.
Para confeccionar estos planos, ordinariamente se aplica el método de las coordenadas, mediante el
cual se puede fijar la posición de puntos determinados, estableciendo sus distintas perpendiculares
a una línea que sirve de base común.
También puede aplicarse los siguientes métodos: el de las coordenadas polares, el transversal, el
polar o radical y el de la triangulación.
TAREA 06
Teniendo en cuenta el tema sobre la investigación en la escena del crimen, desarrollado por el
docente y el material recibido, además de su investigación proceda a constestar el siguiente
cuestionario, el cual deberá subirlo al aula virtual de la Escuela de Posgrado, para su respectiva
calificación.
1. ¿Explique en qué consiste la condición de imparcialidad en la investigación en la escena del
crimen?
2. ¿Porqué es necesario el croquis de urgencia o emergencia en la investigación en la escena del
crimen?
3. Comente sobre las reglas que establece Hans Gross en la investigación en la escena del
crimen.