'C '.·.· . .

.· .· . .lA_IJEMOCRIICII
::·.:.-._:::-_:·{\:·:--.::--.--:_

r
i•···.·· · · · · ·
!
.· R'PUBl~CJNA
1
¡r .1r.1tírna, ve•
· · iiSio.•·•c··;-1·,r •1· •·s· ·• •. o
uoñuorrolrigio.
: ..: ~:._. .-, . . . ·. . ', ·-- .. _._.. . ....:. . ... .- .
. ·:. .. . . . . . ·- : . . . .. . . . " . . . .
 ÁNTONI DOMENECH B~rcelona, 19S2. Militante desde muy joven ANTONI DOMÉNECH
en la resistencia antifranquista. Estudió Filosofía y Dere-
cho en la Universici,tciclt: Barcelona. En esta ciudad se formó
conprofesores heleriistas, filósofos de la ciencia y príncí-
pal111ent.e con el filó.sofp•• pqlíttc:oyJógico . comunista Manuel
·.. Sacristán. 'J'ambiénfe~tudió filosofía y Teoría Social en la
Univ~rs~da_d Goetpe:g<= francfort y t:11 elInstituto de Filoso-
fía cleJ3e.rlíri•..E:n.1osañ6sde.estancia en la República Federal LA DEMOCRACIA
Alemana mantuvó. ~strec:ha a111istad c.on filósofos e historia-
d.pres ,111arxista~hID.i§#el994es catedré.Üco .de Filosofía de
las.Ciencias Sodalés y Morales en la Universidad de Barcelo- REPUBLICANA
.
11a; Ha p11JJHcadq :Óf la ética a la política.
aesc:püa t:Il.Jengua castellana,
la rci..zón i11erte (1989). influyente en
De la razón erótica
la filosofía política
El eclipse de la fraternidad.
lraternal v.el
· ... ·.·.·· Una reyisfr5n republicana de la tradición socialista (2004) in-
· . ··.· vgstiga.ción sobreel · significado profundo de la fraternidad SOCIAllS 'O
· rev<>lµcioriaria.Ha sido conferenciante en numerosas univer-
sidades europeas e iberoamericanas y ha desarrollado una
interisá.1abor editorial en habla castellana como introductor
con uorrofrigio
y/Qtradu<::tor de importantes pensadores de las más varia-
das corrientes. Es miembro de la sección española del Basic
Incomelíerat Network ( Red Renta Básica) y editor general de
la revista política internacional Sin Permiso.

EDITORIAL DE CIENCIAS SOCIALES, LA HABANA, 2017

 ! ·.
'j

,
INDICE

Prólogo/ XI
¿Quiénes somos todos?/ XI
Nota del autor/ 1
l. APUNTES HISTÓRICO-FILOSÓFICOS SOBRE
IA LIBERTAD REPUBLICANA/ 3
. Edícíón: Enic}Viari . . . ..
. . Diseño interior y de. cubierta: Flavia M. Sopo Arzuaga Cristianismo y libertad republicana (Un poco de historia
.. Corrección: Natacha Fajardo Álvarez
· Emplane digital: Madeline Martí del Sol sacra y un poco de historia profana) / 5
El cristianismo y la pérdida de amor a la libertad / 7
Las dos espadas / 1 O
Apología de la dominación y renuncia al mundo / 12
[i . © Antoni Do~e~ech, 2017 El silencio· de la mujer / 16
[' '....... ·. > .© Sobre la presente edición: . La dominación y la propiedad traen su origen
ü - ... :::: ·. Editorial de Ciencias Sociales, 2017
¡¡ -.~ ·. : :Ó,·.. : ·. ·.
¡I .
en la "caída"/ 22
Protoliberales y protorrepublicanos: grietas
!1:/\:,,
!><. . • .·>· .
.··ISB.N- 978-959-06-1861-1 en la teocracia pontificia / 3 7
Roma, la Babíloniade todos los vicios:
regresa la renuncia al mundo / 46
ll:};;i(·.··· :EstiI11~-do lector, le estaremos muy agradecidos si nos hace llegar su opinión, · Vuelta a Pablo/ 51
< pC>r escrito, acerca de este libro y de nuestras ediciones. Democracia, virtud y propiedad / 62
Anteayer, ayer y hoy/ 62
La esperanza filosófica de Ratzinger y la política
de Benedicto/ 129
Filo_sofía, lengua castellana y modernidades / 13 2
V
. ·~r-· .
Dominación, derecho, propiedad y economía política Socialismo / 3 54
popular (un ejercicio de historia de los conceptos) / 15 5 Tres posibilidades soctalístas ,' 3 5 7
Dominación/ 156 El futuro del socialismo republicano / 3 5 9
Derecho y libertad republicana / 15 7
Propiedad / 15 9 111. UNIVERS,IDAD, FILOSOFÍA Y CIENCIAS SOCIALES / 363
Economía política tiránica y economía política Izquierda académica, democracia republicana
popular / 164 e ilustración/ 365
Addendum: del genio de la libertad republicana al ángel La autonomíauníversítaria y sus enemigos ! 3 77
de la historia de Walter Benjamín / 176 Autonomía universitaria: ¿regreso a los años 30? / 3 77
Economía política y tradición histórica republicana: Crisis de la Universidad, crisis de ias ciencias sociales
el caso de Adam Smith / 180 · y unas palabras sobre el Nobel a Elínor Ostrom / 384
Libertad republicana, democracia y propiedad/ 189 El retroceso del espacio público errIá vida ·
Los cuatro problemas básicos de la tradición histórica social y económica/ 385 .
republicana recibida por el mundo moderno / 192 El retroceso del espacio público en la enseñanza
Problemas del republicanismo moderno, superior /389
y Adam Smíth / 194 La "crisis" de las ciencias sociales y el retroceso
del espacio público/ 391
IIJ.EL LEGADO DE LA DEMOCRACIA REVOLUCIONARIA
Unas palabras sobre el Premio Nobel de Economía 2009
FRATERNAL / 2 2 1
a Elinor Ostrom / 399
Entrevista político-filosófica a Antoni Domenech / 223 IV. MARX, MARXISMO, DEMOCRACIA REPUBLICANA/ 405
Fraternidad, un valor republicano eclipsado/ 260
Ortega y el "niño mimado de la historia" qué se puede El Republicanismo y la crisis del rawlsismo metodológico
aprender políticamente del uso incongruo (Nota sobre método y sustancia normativa
de una metáfora conceptual/ 280 en el debate republicano/ 407
Republicanismo, feminismo y socialismo/ 32 5 Cuatro rasgos característicos del estilo del
La dicotomía público/privado y su evolución metodológico"/ 410
histórica/ 329 Cómo interactúan esos cuatros rasgos.
Conclusión / 3 3 7 Algunas conclusiones provisionales / 412
La metáfora de la fraternidad republicano-democrática La moda republicana y la crisis
revolucionaria y su leg~ al socialismo de la filosofía política académica/ 424
contemporáneo/ 339 Republicanismo: lo metodológico
Palabras, expresiones metafóricas y metáforas y lo sustantivo / 429
conceptuales/ 339 En el 125 aniversario de la muerte de
La expresión metafórica fraternidad y distintas metáforas ¿Qué fue del "marxismo analítico"? ··
conceptuales de la fraternidad / 342 (En la muerte de Gerald A. echen)
El Estado moderno, los grandes poderes La reconstrucción funcionalista de
privados y la tolerancia / 346 de la historia" de Karl Marx/
Republicanismo pre y posabsolutísta / 346 Actitud ante la llamada "ciencia
Democracia y sociedad civil / 3 51

VI
 El individualismo metodológico y las limitaciones
de fa teoría de la elección racional/ 465
Teoría económica, economía política y socialismo / 468 1
La crisis del utilitarismo en la filosofía 1
1
del derecho, política y moral/ 473 ·' .¡
. El "marxismo analítico" y la filosofía política
posutilitarista / 484 ·. . · · · t
Carta a un amigo físíco interesado en el socialismo. ·1
i
de mercado y el estatus científíco de Ia teoría ·
económica académica/ 500 · . ·. .. . · · · .· . . .". · r _ .... ·:1:.
1
t ·.
La herencía.neoclásíca y la falsificación de Walras / 500 !
Planificación socialista, democracia y autorítarísmo.y 503 1'

Memoria, ideario y práctica de la democracia . · · . · l

Un repaso sobre el vínculo entre republícanísmo
y el socialismo / 5 06
Testimonio gráfico / 5 3 7
· · ll Para María Julia Bertomeu, mujer de curiosidad deliciosa,
r]· 1 •·· ciudadana sin tacha, tierna compañera de vida, de estudio
y de combate. · ·
1 '
t

1
¡
.. ·.·:. ·:
j
i .··· .
¡
¡
!
1

l:
¡
1r\ .
l:-/?:. ..
j.

·¡···'
 '
,' !
!

1:
PRÓLOGO
!

1
i -.'
'
t ·:·
i
! '
!
!
!! '
¡· ¿ Quiénes somos todos?
!
! -. · En un~ caricatura de los años 30 del siglo pasado, Eduar-
i .: do Abela hizo decir a su personaje El Bobo, mientras .. este j
!
I· contemplaba una imagen de José Martí: "Maestro, cuando
usted dijo: 'con todos y para el bien de todos', ¿a quién se
¡ . refería?". Abela enunció así, con su humor característico, un
f
· / ', tema crucial; tanto para la filosofía política como· para la po-
· !I . lítica prácdtic~, que podemos llamar "el problema de quiénes
somos to os . ..
¡ · Este libro de Antoni Dornenech es una respuesta exhaus-
tíva -histórica, filosófica, política, moral, económíca-« al
· Í
!!.· ..··.·..

problema señalado por Abela. En ella, el todos al que se re-

feria Martí es el horizonte y el resultado de la democracia. · .~.. 1
!
I·. .

Domenech historia cómo Aristóteles consideró a la de- · ·'1

1 ·· md o1crac1ia -tras la experiencia de la Atenas revolucionaria. ··Í
. ¡· '. · . e sigo v a.n.e, con los gobiernos de Ephialtes y Pericles- .,·.·,. ~
como el gobierno de los pobres libres. A diferencia de la i1
1... . república romana, donde no floreció la democracia plebeya; . . 1
1 el empeño ateniense com~rendió que_el todos debía_ c?;men.~ -: d
1 zar por elaborarse a partir de dos nucleos: la abolición .d~ . :1
! la esclavitud por deudas (la fuente principal de esclay!tu<:l . : : \1
¡< en la época, junto a las personas capturadas conio,b,ci{Jp q(_. , · ·g
J guerra) y la redistribución de la tierra (entonces el P!i115ip~l.n)/ :;>I
b!en objeto de propiedad). _En ~~ conjunción, ambas ,9Jr1enr:<) ;-. .Ji
buscaban emanc1p:~10n de los escl•~q~.srflt~~~,li~c I
1 ·
Et., . sienes la

IM ··~~·· ~~I
 Antoni Doménech I La democracia repum1cana rrmernw y e1 sociuusmo lun yun v 1, iy,u
1

pobres libres del orden subcivil de dominación que los i de una misma relación. Para su ideario, la dependencia
excluía de la vida política. Por ese camino, se llegó también j es esclavitud. Martí aseguraba: "Esclavo es todo aquel que
a reconocer el derecho de palabra para las mujeres. Así en- ! trabaja para otro que tiene dominio sobre él" .1 Félix Vare-
contraban la clave para poder constituir una sociedad efec- . la afirmaba algo similar: "solo es verdaderamente libre el
)" tivamente civil, civilizada, en la cual pudiesen acceder todos /. q1ue.no pue.?; ser ·esc1lavo, y esta prerrogativa solo conviene
a la superficie de la vida cívica. t ·. a virtuoso ; Es ese avo aquel que debe subsistir pidiendo
Con ese sentido, la'dernocracía devino luego el movimien- 1. . cotidianamente permiso, el que no cuenta con algún tipo
to hacia la uníversalízacíón efectiva de la ciudadanía, hacia . t •..: de propiedad que le permita estructurar una base material
la ascensión a la categoría de ciudadanos de todos los ha- j propia para la reproducción independiente. de su existencia.
r_· .· Sín'embargo, la versión olígárquica del republicanismo dise-
bitantes de la polis, en aras de conformar efectivamente un
todos capaz de autogobernarse. Según Domenech autor del ¡ ', ña la concentración del poder en: manos de los ciudadanos
propietarios, mientras que 'la corriente dernorrepublícana
ya clásico El eclipse de la fraternidad. Una revisión republi-
l
i__':

can~ de la tr~dición s.ocial~sta, ese ha sido desde entonces, y 1

< diseña la constitución política del todos.
en ngor, el signo de Identidad de los movimientos políticos >''El reparto de la propiedad, o el control social sobre el
demorepublicanos. . ejercicio de esta, que viene hoy a ser lo mismo, consuma
La continuidad de dicho empeño en el tiempo mantuvo un hecho democrático: si la libertad equivale a ausencia de
los sentidos históricos de aquellas reivindicaciones demo- dependencia -es libre el que no depende de otro para vi-
cráticas: abogó por la emancipación de los africanos y de vir- la democratización de la propiedad provee a todos los
los aborígenes americanos esclavizados por el naciente ca- . ciudadanos de garantías sobre su existencia, y abre así la
pitalismo -y más tarde contra la subsunción de las muje- puerta a la plena universalización de la ciudadanía.
res bajo el orden patriarcal- y por la democratización de ', Ese es también el republicanismo de Marx, obviado por
. las lecturas Simplificadas sobre el marxismo: "Un ser no se
las relaciones laborales para los "esclavos a tiempo parcial",
como le llamaba Aristóteles a los trabajadores asalariados: ¡1 considera a sí mismo independiente si no es su propio amo,
obreros, campesinos, herreros, tenderos, tabaqueros, y en · · · y es su propio amo cuando debe su existencia a sí mismo".'
general, todos aquellos que trabajaban con sus manos, con . El autor de El capital afirmaba que el asalariado necesita pe-
un objetivo específico: recuperar la democracia contra la dir permiso a diario a otro (nombrado con esa palabra horríso-
conve_r~ión de_ la r~pública en instrumento de gobíerno para na: "patrón") para poder subsistir. De acuerdo con ello, Marx
ben~f1c10de neos mdustriales y de prósperos hacendados. consideró el régimen asalariado, de modo similar a Aristóte-
S1 lo antes dicho hubiese sido la tónica del curso histórico - les, como trabajo semiesclavo. .
recorrido desde entonces hasta hoy, la pregunta de El Bobo El republicanismo no democrátíco, en Kant por ejemplo,
· no tendría sentido. En paralelo a la respuesta democrática al · comprendió que los ciudadanos pasivos eran todos aque-
problema de quiénes somos todos, otra corriente, también llos que estaban bajo Ia dependencia de otro =-menores.
>

·. re~ublicana, ha afirmado algo distinto. La tradición olígár-

. quica del republicanismo ha sostenido que todos se refiere 1 José Martí: "La futura esclavitud", en Obras completas, Edito-
· . '; · ·~ los ricos, a los propietarios, a los que son libres porque su rial de Ciencias Sociales, La Habana, 1991, t. 15, p. 391.
... _ 1ndepe?-dencia material les confiere la capacidad de obrar 2 Félix Varela: Cartas a Blptdio. Sobre la Impiedad, la sugestión
•·como libres. y el [anatismo en sus relaciones con la Sociedad, Editorial Cu-
.... : . Ciertamente, el republícanísmo, en cualquiera de sus ver- bans, Miami, 1996, p. 66. .· · ·.·. · ·· · •·
3 Carlos Marx: Manuscritos econámicos yfilosóficos de 1884,
.··••·. siones, asoció siempre la libertad y la propiedad como pares ro, Madrid, 1977, p. 138. ·

XII XIII
 Antom vomenecn LM WCll!Vl..l CA,l;.(L,,l I c;p1..tUltl..-C.4f .(1,,1, / I W<.C.I I iw., )' VL JV'-"ivu&yr• u, '"-" • .. ':::,}...,• • ....,. ¡, ~!:} ~...,

mujeres, sirvientes, maestros domésticos-. Por esta razón, liberalismo. La diferencia establecida por este entre la "liber-
no debían poseer independencia civil ni derechos políticos tad de los antiguos" frente a la "libertad de los modernos"
de ciudadanía. La distinción kantiana entre ciudadanos pa- permitiría considerar a la propiedad como un problema de
sivos y activos se estructuró sobre esta base, pero .su aspira- distribución del mercado y no como un derecho político de
ción primera no era la de excluir directamente a los pobres libertad. Por ese camino, la libertad liberal -matizada solo
. . . .. ·.

dela .polítíca, sino impedir que el poder de los propietarios en el liberalismo igualitario, que mantiene la separación en-
controlara para su. exclusivo beneficio el proceso político. tre libertad y propiedad, pero justifica los límites a la líber-
Un proceso basado en el dominio de los poderosos obliga a tad en aras de la igualdad de todos- es compatible con la
los que dependan de ellos a obedecer su criterio y corrompe dependencia, con .la desigualdad social, con la polarización
el resultado: la minoría de los ricos se apodera del proceso del ingreso, 1a exclusión, la corrupción, el faccionalismo de
a través de la manipulación, la compra o la imposición del la clase poseedora, el combate contra los derechos del traba-
voto de todos aquellos que, por ser dependientes, no pue- jo. Asimismo, resulta por igual compatible con la atribución
den sostener una voluntad propia. Como se puede observar, de grandes grupos económicos privados de imponer sus in-
aunque excluir a los ciudadanos pasivos de derechos po- tereses frente a las demandas de la ciudadanía, a través del
líticos como el voto no es una solución democrática, sí es Estado como ínstrumentocorporatívo de Ia.riqueza,
consistente con el ideal de que solo los independientes son Para esta versión "todos" eran los ciudadanos "activos",
libres. .las "clases vivas". Los ciudadanos mejor capacitados para
Sin embargo, a partir del siglo xix, el liberalismo -'-res- gobernar son los dotados de propiedad, pues los avalan los
puesta surgidaen Europa occidental como contrarreforma a triunfos que su talento ha conquistado en un mercado con·
la Revolución francesa, como argumenta Doménech, aunque . siderado como libre, eficiente y competitivo.
cumplió por razones específicas funciones progresistas y /o El republicanismo oligárquico y el liberalismo confluyen
revolucionarias en América Latina- reconstruyó la historia entonces en su carácter elitario: han defendido el gobier-
del republicanismo para presentarlo como "liberal", y aun no de los pocos, de los ricos, de los "mejores", de los más
como "democrático", al tiempo que dejaba intactas las rela- "ilustrados", y han consagrado la exclusión o la limitación
ciones de dependencia propias del orden burgués. de poder para los pobres, las mujeres, los indígenas, los ne-
El liberalismo consolidó durante los últimos dos siglos gros y los trabajadores (con la salvedad hecha otra vez del
una visión sobre el orden social basada en tres pilares an- liberalismo igualitario). En ello se basa su rechazo otrora por
tidemocráticos: el monopolio "legítimo" de la acumulación la política de masas y ahora por la participación ciudadana,
privada exclusiva y excluyente, la desposesión de la propie- que han justificado a través del racismo y recursos institu-
dad común y de los derechos del común sobre el ejercicio de cionales como el voto censitario y el sufragio masculino, ca-
cualquier forma de propiedad, y la destitución de poder de lificado por más de un siglo como "sufragio universal", aun
los ya desposeídos de propiedad. El liberalismo se oponía a con la exclusión de todas las mujeres.
la tradición republicana clásica, incluida la oligárquica, pues Martí afirmaba que la República cubana debe sert'con to-
disociaba la libertad de la propiedad. En la nueva concep- dos y para el bien de todos" desde la tradición democrática
ción, la libertad pasaba a ser parte de una esfera "política", republicana. La pregunta por el quiénes somos todos supo-
mientras que la propiedad pertenecía solo a la esfera "eco- ne también la pregunta por el cómo llegamos a ser todos.
nómica", era un derecho exclusivo de ámbito privado. Los textos de Domenech aquí recopilados ofrecen una ruta
Esta separación se comunicaba -sostiene Domenech-« para comprenderlo a partir del análisis de dos ejes dernorre-
con el 'interés perseguido por Bentham en la elaboración del publicanos: a) cómo todos pueden ejercer efectivamente poder

XIV XV
~~
 Antoni Doménech LU UE:!fYIUC..ruc..1u r ep uuu« .. u11u I'."""'' "''" 1 ... , ~v ... , .... v .. ,. -··· ,, •..• ,. ·~--

político y b) cómo todos pueden quedar incluidos en la esfe- . sostén del ejercicio de _poder en la República que aspiraba a
ra considerada "económica". establecer. ·.
Según la explicación del también autor de De la ética a la · A la comprensión fiduciaria del poder le es consustancial el
política: De la razón erótica a la razón inerte, el primero de . reconocimiento de derechos de resistencia ante la arbitrariedad
esos contenidos remite a la fiduciarización del poder, al po- . del poder y la corrupción de la representación. El derecho de
derIímítado, controlado por la ciudadanía y obligado de tal resistencia es la vía democrática de recuperar la soberanía
manera a servir a los intereses del común. :-el todos .autodetermínado-efrente a sus usurpadores. El
Él uso de los · términos ministros, servidores públicos,
comisionados, comisarios, da cuenta de estalógíca de fun-
padre jesuita Juan de
Mariana =-maestro de la Escuela de
Salamanca, a Ja que .se sumaba el padre Las Casas, tan ad-
cionamiento político según la cual el elegido debe quedar mirado por Martí-> fue.elprímero en fundamentar con este
obligado· a su elector a través de mecanismos efectivos de ¡ ' sentido el tiranicidio; corno derecho de resistencia allí don-
mandato, rendíctón de cuenta, transparencia en la actuación ., > de la aútorídad real se ejerciese de modo despótico, cues-
Y revocación, que permitan preservar la soberanía -el poder '. tión que siglos despuésretorna Locke -comó lo hicieron en
de todos- .sobre el gobierno. Locke recuperó la figura roma- . Cuba los beligerantes' contraladomínacíón. española.
na de la agencia fíduclaría para nombrar al representante .· · Los textos de este libro demuestran cómo esa línea de-
como un trustee: alguien en quien se ha delegado confianza mocrática llega hasta las declaraciones de 1948 de Naciones
para gobernar y está obligado a atenerse a lo que como bien Unidas (NN.UU~) sobre los derechos humanos, como derechos
común ha sido .deftnido por sus electores. Rousseau hizo lo ,' 'inalienables de las personas y corno nexo de relación legíti-
mismo 'con las figuras del mandante, el mandato y el manda- ' ·. ma entre la soberanía y el gobierno. Es la misma corriente
tario para asegurar la no delegabilidad de la soberanía. . por la que se luchó en Cuba enlas guerras de independencia
Martí sigue ese sentido en la organización de la Guerra .• . del siglo xix, cuya cultura política forma las convicciones de
Necesaria por la independencia de Cuba. Las bases secretas ,.i. Marti y que él mismo expresa luego de modo paradigmático.
del Partido Revolucionario Cubano (PRC) estipulaban el ca- :t · La fraternidad masónica Gran Oriente de Cuba y las Anti-
rácter de mandato imperativo del encargo otorgado por las ·! . llas (GOCA), que en sus liturgias preludió contenidos del pro-
asociaciones revolucionarias al delegado: podían exigir de ij grama ideológico de 1868, proclamaba "la libertad del linaje
este cuantas explicaciones requiriesen para el mejor conoci- · . humano, la libertad del pensamiento, la libertad de examen,
miento 'del espíritu y métodos con que el delegado cumpliría la libertad religiosa, la libertad personal, la libertad polítíca, la
su mandato. Los altos cargos del PRC quedaron sometidos a 1
~.
__
.• ,,·
¡,,.,,.·
.. _·• ··· •.

'.· libertad de reunirse, la soberanía de las naciones, la líber-

la elección y la rendición de cuentas anual ante sus bases y f • .tad de imprenta, la libertad de .cambío, el Hábeas Corpus,
el general en jefe de· la futura guerra -según el Manifiesto 'i ' el juicio por jurado y la igualdad social", 5 un completo pro-
de Montecristi- sería electo de modo directo por todos los 1_1 .' ·· grama demorepublicano, que se materializa por i1gu~l endla1s J
·¡
,, miembros activos del Ejército Libertador.4 Para Martí los mé- • ·.· exigencias de Carlos Manuel de Céspedes de abo icion e a
- · todos de la futura República deberían estar contenidos en los esclavitud, sufragio universal, gobierno elegido por el pue-
métodos de la guerra por conquistarla. Si tales eran los mé- blo, enseñanza laica y derecho al levantamiento armado en
todos, la comprensión fiduciaria de la representación sería el defensa de la patria (en nombre de la "virtud"). Estos conté-

• Mario G. Castillo Santana: "Fuerza por la unión, no unión por la · 5 · Rafael Acosta de Arriba: Los silencios quebrados de San Loren- - •. ·
fuerza", en Espacio Laical, 201 O, año 6, no. l, pp. 115-117. zo, Editorial José Martí, La Habana, 1999, pp. 104-105. . .
XVI XVII
··~~··.
. '·. ·.
 Anrom uomenecn

nidos se encuentran, asimismo, en el constitucionalismo de de las formas más severas, aun corriendo el riesgo de ser
Ignacio Agramonte y en el pensamiento de Antonio Maceo, . ellos los blancos de los fusilazos de la columna española" .8
formado inicialmente en el ideario de GOCA, que desarrolló A Maceo sus soldados le escribieron que respetaban su "va-
luego sobre la base de las ideas de independencia nacional, lor en el combate" del mismo modo que su "amor a la ley",
democracia republicana, libertad de conciencia, libertad de El republicanismo democrático responde al problema de
prensa, tolerancia política y religiosa y Estado laico." quiénes somos todos también por este otro lugar: pretende cí-
La garantía del ejercicio del poder por parte del todos se vilizar el ámbito de las relaciones sociales reconduciendo
encuentra, según muestra asimismo Domenech, en el derecho -. a situaciones de igualdad civil y política la dominación de
y la ley. Varela afirmaba: "El hombre no manda a otro hom- ', unos seres sobre otros por razones de clase, género, edad,
bre, la ley los manda a todos"." La ley resulta el instrumento color de la piel. Domenech recuerda que
del común para hacer política estatal. De ahí la necesidad de la famosa fraternité jacobina expresaba la necesidad
la plena parlamentarización de la política, defendida, tanto ·
Í. • .]

de emancipar de la dominación patriarcal-patrimonial al

por Carlos Marx (en la forma de la deliberación colectiva en conjunto de las "clases domésticas", de incorporar a la
asambleas y comunas) como por Hans Kelsen (en órganos di- sociedad civil, hermanándolas en ella, al grueso de las
rectamente llamados parlamentarios). En el mismo punto se clases sociales subalternas, sometidas a una inveterada
encuentra la razón del privilegio concedido a la ley, no a los loi de famill es ubcivil (Montesquieu) que, por lo mismo
decretos (estos son instrumentos del gobierno, no de la sobe- .. que las mantenía fuera de la vida civil, las excluía tam-
ranía), como forma de componer una voluntad sobre la que bién de cualquier posibilidad remota de control de la
todos tienen derecho de intervenir. La libertad está en la ley vida política supracívíl.
o contra ella -la ley se debe resistir cuando' es ilegítima y se
deben tener capacidades ciudadanas para reformarla-, pero La traducción contemporánea de este contenido fraternal
la libertad no existe fuera de la ley, pues en ese "afuera" radi- sería la lucha contra la potestad arbitraria del varón sobre la
ca la arbitrariedad del poder unipersonal. La ley realiza así el mujer, del patrón sobre los obreros, del profesor sobre los
ideal democrático: la política como propiedad de todos. alumnos, de los padres sobre los hijos, de los blancos sobre
El alcance atribuido a la ley, y a la legalidad, se vivía en 'los-noblancos. con un horizonte: inundar de libertad repu-
la Cuba del siglo xrx como valor primordial de la guerra de blicana; descolonizándolas, todas las relaciones de poder.
métodos republicanos. Un cronista cuenta que un día, en el \ El republicanismo democrático defiende, por ende, ~n
ingenio Godínez, se celebraba un juicio, mientras las tropas concepto holístíco de diversidad, capaz de soportar una CIU-
españolas avanzaban disparando sobre el lugar. "Los gene- dadanía texturizada por las diferencias de clase, raza, ed~~·
rales Gómez y Maceo, que se encontraban en el batey oyendo género, origen nacional. La diversidad deviene una políti-
el dictamen del auditor de guerra, para disponer inmediata- ca capaz de comprender demandas plurales y, sobre tod~,
mente la ejecución del fallo que pronunciara el tribunal, hu- de garantizar que sujetos distintos se encu~ntr~n ~n condí-
bieron de arrostrar a pie firme las certeras descargas de los ciones de apropiarse y participar del espacio publlco. E~ el
españoles mientras se llenaban los requisitos legales, por camino, la fraternidad significa un proceso de descolo.mza-
entender que aquella sanción penal necesitaba revestirse ción de la matriz del poder, para emancipar las rel~c10~es
' sociales de las distintas dominaciones existentes al íntenor
6 Armando Vargas Araya: El Código Maceo. El general Antonio en
América Latina, Imagen Contemporánea, La Habana 2012.
· 7 Félix Varela: Obras escogidas, 3t., Imagen Contemporánea, La 8 Eduardo Torres-Cuevas: Antonio J:1aceo. Las ideas que sosti~~e 1
el arma, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 1995, p. . ·
Habana, 2001,p. 17.
XVIII XIX
·,~.,,,..··
 Antoni Doménech La democracia republicana fraternal y el socialismo con gorro tnqio

de la sociedad, con el objetivo de construir políticamente el del comercio de los granos" resultó el nombre "científico"
todos. Sde los granos y de las harínas.!? Esa "liberación" desató dos
" La i?t~gr~ción del todos dentro de la esfera considerada guerras por las subsistenciás. En ese contexto, la demanda-
~c.?nom1ca_ entra en el territorio del "derecho a fa existen- rle una "economía política popular" no equivalía a una eco-
cia . En esa idea democrática, de Robespierre y de Tom Paí- nomía "pequeña": o "artesanal", sino a las "costumbres en
ne, entre otros, el hecho de haber nacido personas otorga común" que habían encontrado en. el control de la expan-
el derecho .~e proteger la vida humana. Ese es el sentido de sión de la ganancia capitalista la garantía de la subsistencia
la .declara~10n fra.ncesa de 1789: los hombres nacen y per- personal y comunal, esto es, una posibilidad de organizar
~anec~n l!bre~ e iguales. Rousseau lo decía de esta manera: la economía en función dela vida de todos. Esa idea se ac-
que nmgun ciudadano sea suficientemente opulento como tualiza hoy a través de perspectivas críticas de la "economía
par~ comprar a otro:, ni ninguno tan pobre como para ser delcrecimiento'' '· cuando. se mide este último. en términos
obligado ,ª vende~se .9 Thomas Jefferson, con sil ideal de monetarios y externaliZa los costos políticos, humanos, so-
prop1;tanos-trabaJadores-independien tes, constituye otra ciales y ambientales .de la actívidad mercantil.
v)¡~wn d~ntro de la tendencia, que defiende la índependen-
era -del fiud.ada~o en la figura del propietario-trabajador,
el
Martí compartía núcleo de esta doctrina republicana
. crítica de la expansión capitalista en su preocupación por
aun~u~ olvidar la presencia de la esclavitud. el "con todos y· para el bien de todos" -. Su República debía
S1gu1end? la argumentación de Domenech, la traducción satisfacer "el anhelo y la necesidad de cada ciudadano, sin
contemporánea de estos principios conduce al control des- .·..· · distinción de razas ni de clases, mediante la abolición de
d.e ade.ntro de la empresa capitalista. El objetivo es constítu- .: todas las desigualdades sociales y de una equitativa distri-
cionalízar ;sta forma. despótica de organízacíón política de
bución de la riqueza" .11 Martí agregaba: El "suelo es la única
la e,c?nomia, cor~elanva a la forma liberal de organización
propiedad plena del hombre y tesoro común que a todos [ ... ]
política d~, la sociedad. Los expedientes de este control son
iguala y enriquece, por lo que, para la dicha de la persona y
la expansión de l.o.s derechos del trabajo frente a los dere-
chos de la rentabilidad capitalista. la calma pública, no se ha de ceder, ni fiar a otro, ni hipote-
car jamás" .12 A partir del mismo juicio, Céspedes luchó por
En el [ondo, e~te co~~lict~ ?e. dere:cilq.s.expresa la guerra ·
entre la. econom1.a pohnca ~1ramca1~: delcapítaltsmo y lo que · destruir de raíz el aparato de la economía sacarócrata cuba-
Robespíerre llamo ·. econorma política popular", Los agentes na, y Manuel Sanguily presentó una moción al senado de la
burgueses del modo de.,prod~<;ción capitalista habían logra- República surgida en 1902 -a la larga no discutido- que
do, en v1speras de la Revolución francesa "liberar" el precio buscaba prohibir la enajenación de la tierra y de los bienes
de la harma cond~n~ban a no comer pan a la mayoría de
los franc~ses -el umco alimento que llegó a tener el precio
d~l sal.~no de un mes una rebanada de pan~. Los "econo-
m1s~as pensaron -como afirma Florence Gauthier- que la 10 Florence Gauthier: "Sociología crítica". Entrevista con Florence
subida de los precios de los granos era una medida correcta Gauthier-Joan Tafalla; 4 de mayo de 2012. http:dedma.word-
porque permitiría enriquecer a los productores y a los ven- press.com/2012/05/04/entrevista_con_Florenc~_Gau thier _so-
bre Robespierre.y _la_revolucion_Joan_Tafalla/ (Ultimo acceso:
dedores de granos Y, por consiguiente, al fisco. "La libertad
· . . 25 de julio de 2012).
11 Raúl Roa: El santo derecho a la herejía. La idea de/socialismo
cubano en Raúl Roa García de 1935 a 1958, ICIC, Juan Marine-
9 J%an Ja~ques Rousseau: El contrato social o Principios del dere- llo-Ruth Casa Editorial, La Habana, 2010, p. 150.
e o politico, Tecnos, Madrid, 2002, p. 51. 12 José Martí: Obras completas, ed. cít., p. 170.
XX XXI
 Antoni Doménech La democracia republicana fraternal y et sociausmo t·v,1 yvrrv 1riyw ·,:::c·.:::,·,:"·'.:2;. ··
---------------------~.,;..·=····;,....;'"··'.'>•.•:>'i>'';o•:
. El .mísmo problema lo recoge Marx cuando defiende que
el futuro poscapitalista adquiriría la forma desmercantili-
zada de una asociación republicana de productores libres e
Significa, por el contrario, civilizar la sociedad a través:d~·_i\{füfüt:1
políticas que rompan los lazos .de dependencia personal
· social e impidan el control de la cosa pública por parte de <> · · ·
v·:r{t.
independientes. En nuestros días, ese programa equivale a un grupo privilegiado y excluyente de poder. Ningún ~()q~f
la constítucíonalízacíón del trabajo asalariado, a la búsque- •. supracívíl=-nt podderes.pri1vad1os~et.conómictos1me· apodc~rd.ea.~d/~dllt/. : \/-.
da de alternativas de 'organízacíón colectiva de la economía, .. rocratícos+ pue e acumu ar eg1 1mamen e a pa. 1 , , . : - . ~ . .: . ..
al establecimiento de la función social de la propiedad, a . cÜsputar a la soberanía -.al todos autogobernado+ st1.4~f#f;f\(t:t \
la democratización de la propiedad ya no como "reparto" cho a definir 'el .bíen común, Por ello; la república.mªxti4~tiªt;~f{/ .
sino como control de los trabajadores -ciudadanos- consu- .. debía erigirse "sin interferencias, ni sumisiones, ni hippJt2ii··,x,:.-
midores sobre el proceso productivo, el consumo y la distri- que la subordinen, esclavízándola, al iriterés P()lít.i<:()}f\~Q~. "''"º
bución, y a la responsabilidad social y ambiental que se le nómico de su casta dominante" .13 •· \i+i;i&,;;1,'1:'
p~f!lti
-Ó; , · • · · .. •

debe fijar tanto a la propiedad común como a la propiedad /,:¿Qué. relevancia tiene todo lo dicho hasta aquí
individual. . · Cuba .de hoy? .. .. .· . . . . , . . . "'.["
. La construcción política del todos ha de quedar soportada .. Empiezo. por la relevancia que tíene para su histori{l.
e:ntonces por el acceso democrático a la propiedad. Su obje- gµerras independentistas del ·siglC>:x1x cubano, ~on su~;~ff
tivo es empoderar a los ciudadanos en el escenario mismo .tro constituciones, tenían como.objetívo conqm~ta.r,llJ,?,!}'~
de Iaproduccíón, para que puedan sostener y reproducir pública independiente. Con los años, · ése par.de g~l~gt·-
materíalmanra interacciones igualitarias en la esfera públi- perdió la relación que tenían .,-era un único y miSillP}?8J,~:.
ca. Ese sentido de la propiedad como derecho de libertad . yo? y quedó solo "la independencia'.' como el pro.~rflW.lL
ha sido rescatado contemporáneamente, entre otras, por las . aquellas luchas. Sin embargo, la independencia temª'J'/~H
constituciones de Ecuador y de Bolivia. Durante las últimas ma importancia que la República (esta era la forma poh~JP~.
décadas, la contrarreforma neoliberal logró limitar -o elí- social de la independencia) como ideal por alcanzar;JX\};-f(;
min~r-,i~s r_eferencias a la función social de la propiedad, , . Maceo afirmaba formar parte "de esta Repl)bUca_.cl,~J!!9
que habían sido consagradas en la mayor parte de las cons- . •.• crátíca, que ha sentado como base -príncípal l~ lib~Ft~9lt}1
tituciones democráticas de la primera- mitad del siglo xx. En .. igualdad y la fraternidad y que no -reconoce Jera,;q9l~~ti{
su capítulo sexto (titulado precisamente "derechos de liber- ' .. iC::éspedes; por su parte, aseguraba: "Derrocada la auwR,t~B~
tad"), la Constitución ecuatoriana reconoce el "derecho a la L '< .española en Cuba, lanzados los enemigos de la lfüerta<:l:::,iji:t
propiedad en. todas sus formas, con función y responsabili- ¡ < remotos confines del Atlántico envueltos en sus pal:>~l!~J;
dad so,cial y ambiental. El derecho al acceso a la propiedad r - desgarrados y cargados de sus propias cadenas, aquí.11:. ·
se hará efectivo con la adopción de políticas públicas ( ... J", ; / \. drá existir otro gobierno que el republicano [ ... ] LaJ1p~:f>
Algo similar hace la constitución de Bolivia: "Toda persona L < más radical es la piedra angular en que se asienta Y-Wltt
tiene
.. derecho
.
a la propiedad privada individual o colectiva '
· · siempre que esta cumpla una función social".
> se sostendrá nuestra República" .15 Manuel Sanguily lq;:~s
: : bfó,con entera precisión: "La independencia llegó .a;§,.,
· •· >La respuesta democrática al problema de Abela afirma medio imprescindible, pero no era su única ni mucb<>,>
q~e'. ~lfódos supone una sociedad civil autogobernada. Afír- ~µ más preciada y alta finalidad, que solo se complel~:>
, ma~ el ~arácter civil de esa sociedad no procura in visibilizar
his; qe.~1gllaltjapes sociales que atraviesan su constitución, ni
d~Ja.r:,devt:r cómo el poder económico particularde grupos
·. YP~r~onas_se traduce en un poder político sectario a su favor.

XXII
• '"'<!.!.Y>' •
 Antoní Doménech
en 1959. Manuel Sanguily afirmaba en 1924: "Mirando hadl '
todas las conquistas o aspiraciones de la democracia, cuya atrás ¿cabría pensar propiamente que la República no es la de-
cifra y compendio, cuya expresión cabal es la República" .16 rivación legítima, sino acaso Iaadulteracíón, ya que no la
No es el lugar para abundar en estas pruebas de la con- antítesis, de los elementos originarios creados y mantenidos
vicción demorepublicana de los independentistas cubanos. por la revolución, que la engendrarony constituyeron? Por-
Solo apunto que quedan fuera de estas consideraciones la que en realidad parecendos mundoscontrapuestos: el uno,
influencia de la Revolución francesa (solo por curiosidad minoría candorosa y heroica, todo desinterés y sacrificio [la
apunto que en La Habana, en los años previos a 1789, circuló Revolución]; y el otro, maybría accidental y traviesa, toda
El Robespíerre habanero, como par de El Robespierre espa- negocios y dinero [la Repúblícal''," · · ·
ñol), tanto enMartí como en el ideario y el constitucionalis- · Ahora bien, la forma de gobierno que regula 1a Constitu-
mo independentista, así como en los orígenes mismos de la ción vigente es, también, una república: Preguntar qué re-
nación cubana. Recuérdense apenas estos ejemplos: el es- levancia tiene todo lo dicho hasta aquí para la Cuba de hoy
cudo nacional está coronado por el gorro frigio, símbolo de es preguntar por algo tan obvio como laJmportanda de la
la libertad republicana tras 1789; el triángulo de la bandera democracia. Pero normalmente cuesta mucho trabajo percí-
nacional, que sostiene la estrella solitaria, es símbolo repu- lo obvio. El maestroAntoniÚomenechayu,da a quien lea
blicano; la torre de la Plaza· de Marte, en Santiago de Cuba, páginas -que yo .apénas heIntentado glosa(aquí- a
también presidida por el gorro frigio, es el homenaje de los con la democracia. y conla república: explica de
mambises a la República de 1902; el regalo que ese año hizo forma francamente adictiva -porque la libertad esla sustan-
la República francesa al pueblo cubano fue una réplica de da más adictiva entre todas las cónocidas+ que república
la Marianne, · símbolo de la Revolución francesa, y el título equivale a democracia y que democracia tiene que significar
originario del Himno Nacional cubano, "La bayarnesa", está revolución. Una revolución cuyo principal objetivo es res-
inspirado en "La marsellesa". Al fin, en Cuba se luchó, sin . ponderle a El Bobo su pregunta: que cuando se diga "con
duda, por una República. todos y para el bien de todos" nos estemos refiriendo tanto
No obstante, el republicanismo oligárquico fue el estable- a todos los seres que viven y conviven como libres e iguales ¡
cido eh América Latina tras la independencia de España, fun- como a la lucha, contra todas las dominaciones, por conquis-
dado sobre la exclusión de las mayorías indígenas, negras tar esa forma de vida para el completo "linaje humano". 1
'!
y mestizas y del 'conjunto de los pobres libres y fue ese el ¡

régimen ínstauradoen Cuba entre 1902 y 1933. La causa Juuo Ct:SAR GUANCHE,
del sórdido prestigio de "aquella República" -'-que otorgaba La Habana, julio de 2016
sentidoa la pregunta de El Bobo- radica en su perfil oligár-
quico y excluyente, no en su carácter republicano.
Así, el ídeárío republicano posee una imagen conflictiva
en Cuba por su desenvolvimiento en el siglo xx nacional. El
hecho de llamar "República" al régimen imperante desde 1902
hasta 1959 y "Revolución" al que lo sucedió, expresa este
problema, pero no hace parte de su solución. Con todo,
esta distinción entre Revolución y República no comenzó

16 Manuel Sanguily: Brega de libertad, Publicaciones del Míníste- 7 Manuel Sanguíly: Brega de libertad, ed. cit., p. 304.
.: ·~~
. río de Educación, Dirección de Cultura, La Habana, 1950, p. 15.
XXV
XXIV
··+·· ____
· · · ·:·:_=-:": ·::/.i-i·:"i/-"i(.:.·)::·.::}1

............... -··,;,,.\_,.,. _;,. e-

 ¡

l
.1.¡
ol

l NOTA DEL AUTOR

!
·:!
.¡
:e¡

li .
:¡ / .

\!: .. .
. . !f i/ .
}f i .:
.if \ Este libro contiene un conjunto hasta ahora disperso de tra-
):)f: bajos, notas, entrevistas y apuntes publicados· entre 1999
f <. y2012. Muchos amigos y colegas jóvenes han venido insis-
·¡ · · tiendo desde hace tiempo en la utilidad de reunirlos en un
if < Volumen y hacerlos más fácilmente accesibles al posible pú-
ijf blíco interesado. Ninguno logró hasta ahora vencer la pasiva
;{ti r~;~~~~irn~~1::: q~=~~~~an:e temo- de una especie de
~Fi> .. A mi han de heredarme
< < mis propios deseos:
que hago ajeno al punto
lo que acá me dejo.: · . .
. /<}( Solo a la amable y enérgica tenacidad deJulio César Cuan-
. < chese debe este volumen, que me obliga a reapropiarme de
J~xtos varios dejados acá.y allá en los tres últimos lustros. El
.Jihrp.se distribuye aquí en cuatro bloques temáticos.
·· .·. El.primer bloque está constituido por distintos textos en
•: . /t9rno a la historia de la libertad política republicana. Varios
t(cl.é esos textos guardan una relación más o menos mediata
i >con mi viejo libro De la ética a la política. De la razón erótica
.i a.1arazón inerte.1 ·.

· i, Antoni Domenech: De la ética a la política. De la razón erótica

·· · a la razón inerte, Editorial Crítica, Barcelona, 1989.
1
 El segundo, que gira en torno a la fraternidad republicana
democrático-revolucionaria y su legado normativo al socia-
lismo contemporáneo, está compuesto por obras -textos,
entrevistas- directa o indirectamente relacionados con mi
libro de El eclipse de la fraternidad. Una revisión republicana
de la tradición socialista. 2

El tercer bloque reúne textos de crítica académica: una cu-

riosa entrevista con un estudiante mexicano sobre izquierda
académica e Ilustración, además de dos escritos -también
p:ara auditorio estudiantil, esta vez barcelonés- sobre la au-
tonorriía universitaria y sobre la crisis actual de la universi-
dad y el lugar de las ciencias sociales en esa crisis.
El cuarto bloque se centra en Marx, el marxismo y la tra-
dición política republicano-democrática. Marx dijo una vez
-refiriéndose a Lassalle- que la esencia del sectarismo
consiste en presentarse como inaugurador fundacional de
una corriente radicalmente nueva de pensamiento y de ac-
ción. Buena parte de la falsificación que de Marx han hecho
J. APUNTES HISTÓRICO-FILOSÓFICOS
distintos "marxismos" del siglo xx consistió precisamente en SOBRE LA LIBERTAD REPUBLICANA
eso, en desfigurarlo y simplificarlo -y desmentirlo= como
creador de una doctrina tan mostrenca y mefítica, como secta-
ria. Cuando, en cambio, se ve a Marx y a Engels, por lo pronto,
como parte de la tradición del movimiento obrero contempo-
ráneo, y más de fondo, como parte y continuación de una
inveterada tradición histórico-política -la del republicanis-
mo democrático-revolucionario-, no solo se restaura la ver-
dad histórica sobre la obra de unos pensadores y hombres
de acción sin par, lo que no es poca cosa, sino que se abre una
ventana a la recuperación de su formidable legado científico y
político, para pensar de modo fresco e inteligente el presente.
· los textos que contiene cada uno de los bloques temá-
ticos están· ordenados cronológicamente. Mucho agradezco
al Instituto Cubano del Libro, y particularmente a la señora
Gladys Hernández y ala editora Enid Vian, el esmero puesto
en las tareas de edícíón,
ANTONI · DOMENECH

2 .Antoní Domenech: El eclipse de la fraternidad. Una revisión repu-

blicana de la tradición socialista, Editorial Crítica, Barcelona, 2004.
2
 .reivíndicar críticamente los temas que el liberalismo había
abandonado.
. . Ahora, esta entrevista narra la apropiación del republica-
'nismo por otro Jugar: reconstruye la historia de la democra-
MEMORIA, IDEARIO Y PRÁCTICA DE LA DEMOCRACIA 'cia "plebeya", de la democracia "fraternal" y del socialismo
marxista como contenidos esenciales de la tradición republi-
UN REPASO SOBRE EL VÍNCULO Cana, precisamente como aquellos que le otorgan su carácter
ENTRE REPUBLICANISMO Y EL SOCIAIJSMO·-:.
. . democrático.
El entrevistado, el catedrático catalán Antoni Doménech, es
una de las grandes autoridades en el tema dentro del ámbito
'europeo. Resistente en su Juventud al franquismo, ha dedi-
.cado su obra a la teoría y la memoria de la democracia, que
considera "la idea más poderosa de la historia". Como parte
de esa investigación, ha traducido libros señeros para este
debate, como Liberalismo político, de Rawls, y Republicanis-
mo, de Pettit. Ahora, si bien De la ética a la política. De la
El republicanismo es una tradición política de más de dos mil razón erótica a la razón inerte' el primer libro de Doménech
años, que en los últimos dos siglos había estado cubierta en resulta un debate muy interesante para la filosofía política y
gran medida por la historia del liberalismo. Este presentó las moral republicana, es con El eclipse de la fraternidad. Una
grandes conquistas republicanas como una larga evolución revisión republicana de la tradición socialista2 que produce
"liberal'.'. Sin embargo, el liberalismo tiene fecha muy recien- '.Una obra considerada canónica sobre el tema.
te de origen: fue bautizado como tal apenas en 1812. La evo- .·• Filósofo ilustrado, marxista prebolchevique u "originario",
lución liberal ha sido, en rigor, la de la oposición a las tesis . formado, como corresponde a esta tradición, en los campos
republicanas, en particular sobre dos conceptos esenciales: la • de la historia, la filosofía, la economía, las matemáticas Y la
libertad y la propiedad. · lingüística =discipulo de Manuel Sacristán, acaso el marxista
Un neorepublicanismo académico, recuperado en distintas más importante del siglo xx español+, es un pensador tan
versiones a partir de los años 60 del pasado siglo, goza hoy erudito como incómodo y heterodoxo. La entrevista es un bo-
de gran relevancia en el debate académico y la política prác- tón de muestra: su pensamiento revisa integralmente la his-
tica, en debate académico, por ejemplo, con el comunitarismo y toria de la filosofía tenida como estándar hasta hoy, lo que
el propio liberalismo. Nombres como Bernard Bailvn, Gordon se extiende hasta el marxismo. Pero su labor está lejos de ser
S. Wood, J. G. A. Pocock, Ouentin Skinner, Philip Pettit, han únicamente académica. Junto a un grupo de colegas de diver-
.sos países han dado vida a un proyecto editorial Y político
protagonizado en distintos momentos, y por diferentes vías,
O nombrado Sin Permiso (www.sinpermiso.info), que con más de
un revival · académico neorepublicano. De su mano, ganó
30 mil lectores diarios, aspira a devenir una corriente de opi-
nuevamente un lugar como la tradición central de la historia
nión y práctica política, que acompañe y analice las luchas
política, originada en el mundo clásico y proyectada hacia
políticas de nuestro tiempo por la democracia, la república Y
nuestros días, informando en el trayecto las revoluciones in-
glesa, holandesa y norteamericana, todo ello como forma de
Antoni Domenech: De la ética a la política. De la razón erótica
a la razón inerte, Crítica, Barcelona, 1989. . .,
* Entrevista del ensayista cubano Julio César Guanche al profe· Antoni Domenech: El eclipse de la fraternidad. Una rev1szon re·
sor Antoni Dornenech. publicana de la tradición socialista, Crítica, Barcelona, 2004.
507
506
 Antoni Doménech La democracia republicana fraternal y el socialismo con gorro frigio

la revolución, pues comprende que la ecuación que las rela- Así, pues, en resolución, una buena parte de la socialdemo-
ciona es la condición de su posibilidad. cracia marxista de la II Internacional, ya antes de la I Guerra
Usted ha afirmado que para cualquier marxista de los Mundial, y tanto en la derecha -reformista-evolucionis-
años 30 del pasado siglo era una perogrullada -una ver- ta- como en la izquierda "maxímalísta", era perfectamente
dad obvia- decir que el marxismo era parte de la tradición consciente del republicanismo democrático-revolucionario
republicana. ¿Cómo se perdió esa identidad? ¿Con cuáles in- de Marx y Engels. Lo que pasa es que, en vez de entender ese
tendones se ha fabricado esa disociación entre marxismo republicanismo como la tradición filosófico-política en que
republicanismo? ¿Cuáles son sus consecuencias? conscientemente se ubicaban los viejos -con consecuencias
En reaHdad, para decirlo más propiamente, lo que sub- que permean todo su pensamiento, incluidos el núcleo de
sístía todavía entre los marxistas de los años 20 y los 30, su análisis e ideario económico y su concepción de la vida
erala memoriade que el marxismo originario era autocons- jurídica y de la vida social en general-, lo consideraron un
cíenternente republicano, es decir, que Marx y Engels, venían anacronismo, explicable por su adhesión a las experiencias
de la tradición política republicano-democrática. Pero ya el táctico-políticas juveniles de la Europa de 1848.
viejo Engels, en los años 90 del siglo XIX, se deseperaba con Cuando Lenin y los socialdemócratas bocheviques pare-
sus· amigos y. discípulos directos, dirigentes de la socialde- cieron desafiar a la socialdemocracia mayóritaria interna-
mocracia marxista alemana (SPD) -Bebel, Kaustky, Berns- cional en las revoluciones rusas de 190 5 y 1917 -el "todo
tefn~ por su incapacidad para plantear abiertamente, bajo el poder a los soviets" leninista fue un calco de todo punto
la Monarquía constitucional guillermina, la lucha por la Re- consciente de la táctica de Robespierre en agosto de 1792,
pública democrática. · i que desembocó en el derrocamiento de la monarquía Y la
Sin lograr esta República, los avances parlamentarios que · proclamación de la l República-, la explicación más común
se. alcanzaran no podían llevar políticamente muy lejos den- y tácitamente aceptada fue que la. Rusia de principios del
tro ele una Monarquía sin sufragio universal pleno y no parla- siglo xx se parecía mucho a la Alemania (y a la Europa occi-
mentaria -sino solo constitucional-. Desde la: "ízquíerda", dental) de 1848.
Rosa Luxemburgo planteó de forma abierta esta batalla, en ¿Y cuándo, entonces, se perdió la conciencia de que el
1910, dentro del Partido Socialista Alemán (SPD por sus. si- marxismo originario veni.á de la tradición política republicano-
glas en alemán), sin mucho éxito. En Francia, bajo la III Repú- democrática? .
blica, .Iaures, desde la "derecha" y con mejores resultados, Pues en la misma época en que empezó a hablarse de "de-
dio la misma batalla de afirmación republícano-democrátíca mocracia burguesa", un oxímoron que no puede encontrarse
=-presentando al socialismo obrero francés como el gran he- una sola vez en las obras de Marx yEngels. Max Weber Y Rosa
redero de la I República revolucionaria francesa de 17937" Luxemburgo, por ejemplo, hablaron de "democracia burgue-
contra.la pseudoortodoxia marxista socialdemócrata de Jules sa" en el mismo sentido en que el viejo Marx y sobre todo el
Guesde, (Dicho sea de paso: una de las insuficiencias originar viejo Engels habían hablado de "democracia pura", un con-
rías del socialismo español ha sido la influencia de Guesde cepto que no denotaba un régimen político: "democracia>
sobre Pablo Iglesias: no tuvo el Partido Socialista Español para la tradición democrática no ha significado tanto un "re-
(PSOE) ni una Rosa Luxemburgo -en el ala ízquíerda+ ni
gimen político", como el movimiento social y político del de·
un Guesde -en el ala derecha-, lo que le cortó muy
mos (de los trabajadores que viven por sus manos, del "cuarto
namente de la lucha políticamente consciente por la Estado" -la burguesía era el "tercer Estado"-).
blíca democrática: la vida efímera y el trágico final de la
"Democracia pura" y luego "democracia burguesa" síg-
República española -bien narrada en el opúsculo de
niñeaba a finales del XIX y comienzos del xx el movimiento
Los bakuninistas en acción- no es ajena a ello).

508 509
 Antoni Domenech La democracia republicana fraternal y el socialismo con gorro trtqto

social, en decadencia histórica, de las capas y estratos po- sino la mejor, la más perceptiva, profunda e inteligentemen-
pulares feroz y rápidamente expropiados y desposeídos por te demoledora que se escribió entonces en cualquier lengua.
la tremenda dinámica capitalista de la belle epoque (1871- Ahora, se ha hablado de "democracias burguesas", como
1914), de los restos, esto es, de un "cuarto Estado" en proce- también se habla de "democracias liberales" ...
so de proletarízacíón. Sí, es extraordínario. Figúrese: salvo en Francia (en donde
Fue el eficaz aparato de propaganda bolchevique el que la III República les fue regalada por un Bismarck vencedor
acuñó el término "democracia burguesa" en el sentido que , con cálculo político que se reveló errado -las repúblicas
ahora se atribuye al "marxismo": en plena Guerra Civil, com- serían siempre débiles desde el punto de vista militar-), sin
batíendoavída o muerte contra una contrarrevolución apo- ninguna otra excepción, la constitucionalización de la demo-
yada por los aliados -la República estadounidense, la III cracia, entendida sencillamente como régimen con sufragio
República francesa y una monarquía británica ya por com- universal y control parlamentario del gobierno, fue intro-
pleto parlamentaria y dotada del sufragio universal (mas- ducida siempre y por doquiera por gobiernos obreros tras
culino), que otorgó el primer gobierno obrero laborista de el desplome de las monarquías meramente constituciona-
MacDonald en 1918-, los bolcheviques en el poder usaron vles (sin control parlamentario) continentales: en Alemania,
por vez primera el término "democracias burguesas" para en noviembre de 1918, tras proclamar la I Rep·ública, por el
referirse a esos regímenes políticos. gobierno de los dos partidos socialdemócratas (el '.'mayo-
Excepciones muy importantes a esa pérdida de autocon- ritario" y el "independiente" -en el que estaban reunidos,
ciencia republicana acontecida a partir de ahí, se dan preci- . otra vez, Kautsky, Bernstein y Rosa Luxemburgo-); los la-
samente en América Latina. En Argentina, con la influencia boristas, ya se ha dicho, concedieron el sufragio universal
de .Iaures, están los socialistas republicanos Alfredo Pala- (masculino) con el primer gobierno laborista de MacDonald
cios y Carlos Sánchez Viamonte. En Perú, está el comunista en 1918 (y el femenino, en 1927, bajo su segundo gobierno);
Mariátegui (que acuñó el interesante concepto de "falsas re- lo mismo en Austria, en Hungría, etc., y 13 años después, en
públicas" para los regímenes políticos latinoamericanos que España, con un gobierno de coalición entre el Partido Socia-
fundaron su independencia política en la exclusión del grueso lista Obrero Español (PSOE) y distintas fuerzas de izquierda.
de la población indoamericana). Y en Cuba, por supuesto, burguesa republicana.
aparte del extraordinario antecedente del demócrata revo- Lo extraordinario es esto: los viejos partidos liberales deci-
luctonarío José Martí -que es, además, y dicho sea entre monónicos, monárquicos y abiertamente hostiles a la demo-
guiones, un clásico de la lengua castellana contemporánea+, cracia, encarnizadamente defensores del sufragio censitario,
está Raúl Roa, sobre el que no osaré decir nada, siendo como opuestos al sufragio universal y -salvo en Inglaterra- al
es usted un gran especialista en este formidable escritor y régimen parlamentario de control del ejecutivo; esos viejos
político marxista, que .nunca perdió la autoconciencia repu- · partidos liberales de honoratiores, que habían dominado la
blicano-democrátíca del marxismo originario: su necrológica escena política de las monarquías constitucionales europeas
deStalin =-ínclutda, si no recuerdo mal, en la antología que del siglo xrx y comienzos del xx, desaparecieron para siempre
de sus escritos hizo hace años la fina erudita y polígrafa de la escena con la llegada de la democracia republicana par-
cubana Ana 'Caíro=? probablemente es una de las mejores, lamentaria.
Observe usted que, desde 1918, ningún partido liberal
ha vuelto a ganar unas elecciones en Europa. Pero a esos
3 Se refiere al texto de Raúl Roa "El padrecíto rojo", reproducido regímenes democrático-parlamentarios, traídos 'sin otra ex-
.. en Ana Cairo (comp.): Raúl Roa: Imaginarios, Editorial de Cien- cepción que la francesa por el ascenso al poder de partidos
cias Sociales, La Habana, 2008.
510 511
 Anioru uomenecn

socialistas obreros, se les llama ahora democracias "libera- ¿Cómo puede ligarse "república democrática" y "dictadura
les", o "democracias burguesas". La eficaz propaganda bol- del proletariado"?
chevique contra las "democracias burguesas", entendible en · Esta es, en efecto, una pregunta muy importante, y per-
la situación desesperada de la Guerra Civil, consiguió rega- rníte entender mejor lo que se quiere decir cuando se habla
lar a la "burguesía" (al "tercer Estado") y al "liberalismo" el .de la tradición política republicana en que se halla el pensa-
resultado político capital de la lucha de cuatro generacio- miento de Marx.
nes del "cuarto Estado", y particularmente, del movimiento La idea de "dictadura" de Marx (y Engels) no tenía nada que
obrero industrial. (Recuerde que en el Manifiesto comunista, · ver con lo que entendemos por "dictadura" en el siglo xx. En la
Marx y Engels presentan el socialismo y el comunismo como filosofía política y del derecho tradicional, hasta bien entra-
un "ala de la democracia", es decir, como una parte -con do el siglo xx, la "dictadura" era una institución republicana
tendencia al ascenso, dada la dinámica ferozmente expro- perfectamente definida en el derecho romano: en situación
piadora del capitalismo industrial- del movimiento político extrema de guerra civil, el "pueblo romano" -en realidad, el
del "cuarto Estado", del menu peuple robespierreano). · Senado fuertemente oligárquico- encargaba, como fidei-
. Lo que vino después es de sobra conocido: la idea de que comitente, a un dictator (en calidad de fideicomisario), una
la democracia es "burguesa" (o al menos, que hay una "de-. comisión: la tarea de restaurar el orden' civil republicano
mocracia burguesa", oponible a otra no burguesa) terminó - amenazado por el desgarro social y militar. Ese encargo es-
por ser una consigna legitimatoria y perfectamente mani- taba limitado a un período de tiempo -normalmente, seis
pulable por el régimen de terror estalinista que empezó a meses-, transcurrido el cual, el dictator. como mero fidei-
imponerse en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas comisario que era, tenía que rendir cumplida cuenta ante
(URSS) a partir de 1928. Hoy podemos probar concluyente- · el senado y responder de sus actos. Esa noción comisaria
mente que Stalin -que no era un analfabeto- tuvo perfecta de "dictadura" es la clásica,, la que puede usted encontrar
conciencia de eso; vamos, que lo hizo a sabiendas, como en todos los escritores políticos importantes hasta el siglo xx:
puede verse en los Diarios de Dimitrov, uno de los documen- Marat, por ejemplo, en 1792, exigió a Robespierre que se
tos más importantes publicados en los últimos años como convirtiera en dictador republicano (a lo que el Incorrup-
fuente para la investigación de la historia del comunismo esta- tible se negó); y todavía en mayo/junio de 1936, en plena
linista. Por ejemplo: Dimitrov anota una conversación con . conspiración militar y civil contra la II República española,
Stalin del 6 de diciembre de 1948, en donde este dice re- el gran civilista Felipe Sánchez Román -redactor del Pro-
dondamente que, para Marx y Engels, "la mejor forma de grama del Frente Popular en las elecciones de febrero de
dictadura del proletariado" era "la república democrática", 1936- aconsejó al presidente Manuel Azaña que instaurara
lo que "para ellos significaba una república democrática en la una "dictadura republicana" para destruir a la reacción y sal-
que el proletariado tenía un papel dominante, a diferencia de var la República (a lo que don Manuel se negó, tal vez para
las repúblicas suiza o americana"; y esa república con pre- desdicha de mi patria).
ponderancia obrera tenía "forma parlamentaria" .4 Con distintos acentos en los últimos años de su vida, Marx
y Engels pensaban o intuían que los burgueses y las clases
rectoras capitalistas no se allanarían fácilmente a un triunfo
4 Ivo Banac (ed.): The Diary of Georqi Dimitrov, Yale Uníversítv ·dela democracia (el fascismo europeovino a confirmar su
Press, New Haven, Londres, pp. 450-451. Otro ejemplo: el 7 de
abril de 1934, anota Dimitrov esta observación de Stalin: "Los intuición), y que lo más probable era un período de transi-
. obreros europeos están históricamente vinculados con la de- ción turbulento, quizá guerracivilista, que exigiría una dic-
mocracia parlamentaría" [ ... ] y "no entienden que nosotros no tadura republicana fideicomisaria, es decir, con plazo fijo
tengamos parlamentarismo" (pp. 12-13). ·
512 513
 Antoni Doménech i.a aemocracza repunncana fraternal y el sociatismo con gorro frigio

y obligada a dar cuentas al fideicomitente (al démos), y a monarquía orleanista solo votaban los varones muy ricos:
eso le llamaron, en un esquema de razonamiento tradicio- 2 % de la población masculina con mayor patrimonio de-
nalmente republicano, "dictadura del proletariado". clarado) y sin forma parlamentaria de gobierno: existía un
Desgraciadamente para la suerte de este concepto marxía- Parlamento, pero ese parlamento no tenía capacidad para
no originario, "dictadura" ha venido a significar en el siglo xx derribar gobiernos; la formación del gabinete ejecutivo era
algo muy distinto: las de Stalin, Mussolini, Hitler, Franco e potestad exclusiva del rey constitucional, y su elección y su
tutti quanti no han sido dictaduras comisarias, sino terribles continuidad en el ejercio del poder no dependían de lama-
tiranías soberanas, sin plazo definido -el III Reích tenía que yoría o minoría parlamentaria, sino solo de la voluntad real.
durar "mil años"-, ni, obviamente, necesidad de rendición El "liberalismo" nació en Europa occidental (incluida Gran
de cuentas a nadie (salvo, acaso y muy parcialmente, como Bretaña) como reacción a la I República democrática fran-
en el caso de Hitler y de Mussolini, a la oligarquía indus- cesa: era, pues, antirrepublicano, antidemocrático (sufragio
trial, financiera y terratiente que le financió -los Krupps, masculino censitario) y antiparlamentario.
los Thyssen, los Abs, los Pferdemenge, etc.-, y que parlo Por eso es un anacronismo -aparte de materialmente fal-
mismo, fue penalmente condenada eh la segunda parte de so- decir que Locke o Kant o AdamSmith eran "liberales". Lo
los Juicios de Nuremberg después de la Guerra Mundial). que hizo luego el liberalismo decimonónico, cuyo concepto
Dicho sea de paso: esto le da a usted un buen indicio de de "libertad" es básicamente el de Hobbes -el gran enemigo
que el 'republícanísmo revolucionario de Marx y Engels, del absolutista de la República inglesa de 1649, y de la tradición
"marxismo originario", contra lo que pensó la socialdemo- republicana mediterránea clásica: o sea, ubicado en las antí-
cracia marxistá alemana del cambio de siglo, significa en podas de Locke- es anexarse como propia, desfigurándola,
su obra, mucho más que al acotado mundo de sus juveniles la tradición política histórica de la libertad republicana. Y
experiencias políticas cuarentaiochescas ... luego, gracias en buena parte al regalo de los "marxistas"
· El liberalismo ha rescrito esa historia y presenta como his- del siglo xx, fabricar académicamente, como "democrático",
toria liberal lo que en realidad es la historia del republica- su propio pasado.
nismo. En su lectura, ¿cuál es el origen del liberalismo? ¿Qué Usted afirma que el tema de la democracia en Marx que-
sentidos politicos despliega y defiende? da reenfocado +extendido, profundizado, rindiendo nuevas
Así, es, en efecto. A eso han contríbuído muchas cosas. consecuencias-, si se analiza a este como un republicano.
Unade ellas, no desde luego la más importante en términos Pero, vayamos por partes, ¿qué hace a Marx un pensador
de política real, pero sí una de las más importantes desde el republicano?
punto de vista de la investigación científica historiográfica, Primero, es necesario leerlo directamente, como hay que
es la práctica habitual de una historia de las ideas políti- leer a cualquier autor convertido en un clásico, es decir, por
cas completamente desentendida de la historia de los con- lo pronto, con la debida acribia -esto es, exactitud, minu-
ceptos. "Liberalismo" es un término nacido en 1812, en las ciosidad- filológica y copla necesaria atención a la historia
Cortes españolas de Cádiz , y consagrado en la Francia de contextualízada de los conceptos. Cuando se hace esto, en-
la monarquía orleanista (traída por la "revolución" de ju- tonces salta a la vista que la formación básica de Marx (como
lio de 1830). Su significado en la Europa decimonónica era jurista romanista, discípulo de Savigny, como helenista y
inequívoco: los partidos liberales eran partidos monárqui- luego como economista político, estudioso de Adam Smith
cos moderados, y partidarios de una monarquía meramente y David Ricardo, entre muchos otros, y finalmente, en su
constítucíonal, no absolutista (es decir, con un rey embrida- compromiso político inicial, como admirador de la democra-
do por una ley fundamental), con sufragio censitario (en la cia revolucionaria de la I República francesa de 1793), tiene

514 515
 Antoni Domenecn La aemocracia repuoucana ¡ raiernai y er sociuusrno con yurru ¡ng10

una clara ascendencia republicana, que podemos localizar en menos como filósofo del derecho, porque decía cosas como
cuatro puntos fundamentales: 1. su concepción antíhobbesiana estas, que sonaban muy raras. Como todos los filósofos ge-
dé la ley y del derecho; 2. su concepción de la libertad como ;nuinafnente políticos, fue una persona muy comprometida
un derecho constitutivo inalienable; 3. su concepción fideico- con la política práctica de su tiempo (recuerde que Arístó-
misaria de la autoridad y del poder políticos (en la tradición de Jeles participó en el asesinato de Alejandro, el joven Ma-
nuestro Juan de Mariana, de John Locke y de Robespierre, por ·. quiavelo en la conspiración republicana de la Florencia de
decirlo sumariamente), en tanto le impone un contenido de co- Savonarola, y para qué hablar de Marx). Hobbes fue un acti-
misión que se encarga a alguien en caso y tiempo vo conspirador, incluso desde su exilio en París, y su repu-
y controlado siempre por el fideicomitente; y 4. su concepción r tación era bastante siniestra: el reaccionario, el enemigo del
fiduciaria de la naturaleza de la propiedad de los medios de - parlamento largo de Cromwell, el mayor defensor del abso-
· existencia y de producción. .: lulismo del decapitado Carlos- I, el enemigo encarnizado de
Empecemos por el principio y avancemos paso a paso. En iJa República inglesa de 1649, el tipo que estaba dispuesto
primer lugar, usted está diciendo que el derecho y la ley .a recuperar la vieja idea helenística de las monarquías pos-
la única y misma cosa, que el derecho no se opone a la ley talejandrinas, que llegaron a considerar al soberano como
que la ley es el fundamento de la libertad. nomos empsychós (o lex animata, en el latín antirrepublica-
Esto fue obvio prácticamente hasta el xvm. Para la tradición no del imperio romano tardío); de ahí su siniestra fórmula:
republicana, la libertad política es una creación del derecho
. .
auctoritas non veritas f'acit leqem.
y de la ley. La mayoría de los escritores políticos importan- La idea hobbesiana de la ley como grillete fue rescatada,
tes pensaba así por la enorme y duradera influencia del de- ·. a modo de reacción a la I República francesa y a los Dere-
recho romano republicano. Pero hubo una excepción muy chos Humanos y Cíudadanos de la Revolución, por Jeremy
importante en el xvn, que sostuvo exactamente lo contrario: Bentham a fines del siglo xvm y comienzos del xix: "los dere-
fue Hobbes. Hobbes afirmaba, particularmente en Leviathan chos son un sinsentido, y los derechos humanos, un sinsen-
y en De Cive, que derecho y ley son cosas opuestas: Law is tido elevado a la enésima potencia". Y luego, refabricada a
a fetter; Riqht is freedom, and they differ like contraries, se gran escala a lo largo del xrx, hasta convertirla en la posición
dice redondamente en De Cive (XIV, 3). dominante en la filosofía académica del derecho, práctica-
La. ley positiva objetiva sería un "grillete" (fetter) que ata mente hasta hoy. Austin -el gran jurista británico inme-
o restringe la libertad de las personas; en cambio, el dere- diatamente posterior a Bentham- canonizó con la debida
cho, o los derechos, serían materia "subjetiva": los derechos \ pompa académica esta tesis, que terminó formulada de ma-
serían capacidades, poderes de los individuos para hacer nera más o menos precisa en el utilitarismo y el positivismo
cosas y emprender cursos de acción, capacidades o poderes jurídicos del siglo xx,
subjetivos más o menos autoatribuidos que engendrarían El positivismo jurídico tiene como idea básica que las leyes
obligaciones en otros. Hobbes, como filósofo político, no . son órdenes, incontestadas e incontestables, dictadas por el
fue muy importante en su época. Su conversión en gran fi- soberano, normas positivas que actúan como grilletes o res-
lósofo .de la política fue, hasta cierto punto, una fabricación tricciones de la libertad. Esa concepción, parte, como ya
anacrónica del siglo xrx (al estilo de la que se 'hizo, dicho sea he dicho, de la reacción conservadora a la Revolución fran-
de 'pasada, con Rousseau: Mably, por ejemplo, fue bastante cesa, es completamente opuesta a lo que podríamos des-
más importante para sus coetáneos, incluido Robespierre). · cribir como el sentido común iusfilosófico hasta finales del
Hobbes fue importante como metafísico, pero no fue to· siglo xvm, y resulta incompatible con la herencia filosófica y
rnado muy en serio en su tiempo como filósofo político Y · jurídica del derecho romano y de la Ilustración dieciochesca.

516 517

e
---···
 Antoni Doménech La democracia republicana fraternal y e1 socia/is··

De su éxito en la práctica puede dar testimonio el que, Estas son las palabras de un romanista y d .
contra lo afirmado por los ignorantes manuales de histo- una concepción jurídica clásica, ilustrada y rep
ria de las .ideas al uso, los derechos humanos prácticamente es, también, en cierto sentido, el último filósq
_desaparecieran del derecho constitucional en todo el mundo Esta es otra de las causas de que hoy resulte ·.
durante 150 años: desde el golpe de Estado termidoriano comprender, pues la hostilidad a la Ilustración .. · \
contraRobespíerre en 1794 hasta la Declaración de Nacio- mo político decimonónico europeo fue, entre otras
nes Unidas (NN.UU.) de 1948. Contra lo que suele creerse de contra lo que dice la vulgata, una reacción a la ra
forma acrítica, los derechos humanos no regresaron en serio de los valores éticos, políticos, estéticos y epístemél
al lenguaje del derecho constitucional, sino después de la ilustrados- ha contribuido a desfigurar retrospectívá
catástrofe de la 11 Guerra Mundial, con la victoria militar y su pensamiento. .. . · i/:.
política contra el nazifascismo y la Declaración de NNUU. ¿Qué significa, en segundo lugar, que la libertad sea '\ .
Pues bien; la visión iusfilosófica del joven Marx sobre este líenable"? .a,.
tema era de todo punto antihobbesiana, y podemos conjetu- Esta tesis es capital: si la libertad es una creación de l~i.
rar que le viene de su formación iusrromanista. Me limitaré ley, soy libre porque la ley me ha constituido como libre. i
a citarle, en traducción apresurada, este texto de 1842, que Soy libre porque tengo derechos "constitutivos", porque hay .: ·
se explica por sí mismo: leyes que me constituyen como libre.
Esté tipo de derechos constitutivos se distingue de los
Lejos de ser la ley de prensa una medida represiva con- "instrumentales", porque no puedo alienarlos, no puedo
tra la libertad de prensa, un mero medio para prevenir venderlos o regalarlos. Si tengo derecho de propiedad priva-
con la pena la repetición del delito, lo que debería es da sobre cualquier bien -un derecho instrumental-, puedo
más bien considerarse que la ausencia de· una legisla- venderlo o regalarlo más o menos como me acomode, pero
ción sobre la prensa excluye a la libertad de prensa de no puedo regalar ni vender' mi ciudadanía española ni mi
la esfera de la libertad jurídica, pues la libertad jurídi- derecho de sufragio (eso es un delito en cualquier Estado
camente reconocida existe en el estado como ley y solo de derecho, porque la matriz del derecho público contem-
como ley. Las leyes no son reglas represivas contra Ia 'poráneo es republicana, no "liberal": luego veremos eso). No
libertad, Io mismo que la ley de los graves tampoco es puedo vender o regalar mi derecho a la vida (firmar contra-
una regla represiva contra el movimiento, porque.iaun tos voluntarios de asesinato está fuera de la ley: no puedo
-. cuando como ley de la gravitación ciertamente impulsa firmar un contrato válido de asesinato, dando mi consenti-
los eternos movimientos de los cuerpos en el mundo, miento a que otro me mate a cambio de dinero, o de cual-
como ley, empero, de la caída, se abate sobre mí si la quier otra cosa). Los contratos de esclavitud voluntaria son
violo y me empeño en danzar en el aire. Las leyes, son, írritos y nulos de pleno derecho: no puedo firmar un contra-
antes bien, las normas positivas, luminosas, universa· to vendiéndome como esclavo a nadie.
les, merced a las cuales la libertad ha ganado una exís- · La importancia de este enunciado no puede ser mayor: si
. tencía impersonal, teórica, independiente del capricho el derecho público con que hoy contamos no fuese de molde
del individuo. Un código de, leyes es la biblia de la líber: i' republicano, con origen en el derecho romano (en el que,
tad ele un pueblo.5 · obvio es decirlo, eran nulos de pleno derecho los contratos
voluntarios de esclavitud), estarían permitidos los contra-
· 5 Karl Marx: "Debatten über Prefsfreíheít und Publikation der}r tos voluntarios de compra-venta de esclavos y los contratos
Landstandíschen Verhandlungen, Rhenische Zeítung, 12 maLL "libres" de asesinato.
· 1842", en MEW, t. I. (Traducido por Antoni Dornenech).
518 519
 Antoni Doménech La democracia republicana fraternal y el socialismo con gorro tnaio
Esta concepción romanista clásica de la inalienabilidad Y en eso, que es una reformulación crucial del concepto de
de la libertad fue objeto de un gran debate íusñlosóñco en -. libertad republicana clásica, fue seguido por Hugo Grocio,
el mundo moderno. En cierto sentido, puede decirse que la ;von Pufendorfv.por.Hobbes. En cambio, Locke y Kant siguie-
reafirmación moderna del carácter inalienable de la libertad ron atenidos al concepto republicano clásico de la ínalíena-
civil o política fue desarrollado por la Escuela de Salaman- . bilidad de la libertad, reafirmada por los salmantinos.
ca en la primera mitad del siglo xvr, y que esa reafirmación . La innovación suarezíana no sólo permitiría justificar fi-
sentó uno de los pilares de la filosofía política republicana •· losóficamente la conquista y la servidumbre coloniales, sino
del mundo moderno y contemporáneo, precisamente en res- también, en Europa, . el trabajo asalariado (considerado por
puesta crítica -y autocrítica- a la "conquista y destrucción Aristóteles, por Cicerón y por.toda la .tradícíón republicana
de las Indias" por los encomenderos españoles (y portugue- Clásica, la·democrática y la antídemocrátíca, como "esclavi-
ses). El g~~n dom~n~co Francisco de Vitoria y sus discípu- tud a -tíernpo parcial"). · · '. · . .·· ·.
los, también domínicos, Domingo de Soto y Bartolomé de ·. ·(Dicho sea dé paso, el fiscal Cook, que instruyó la causa
las Casas, y luego, el gran polígrafo jesuita, Juan de Mariana •· que llevó al patíbulo a Carlos I de Inglaterra, no se privó
-autor de un maravilloso tratado sobre el tiranicidio (Sobre · de invocar expressis verbis en su requisitoria Ia autoridad
el rey Y las instituciones regias), de comienzos del xvn=- de- filosófica de Juan de Mariana. De lo .que llevamos dicho, así
fendieron todos la inalienabilidad de la libertad. Ese debate : pues, resulta claro que el núcleo polítíco-ñlosófico del pro-
tuvo consecuencias fundamentales, no se olvide, se dio en :· grama de las revoluciones populares republicanas moder-
un contexto de oposición decidida de la esclavización y ava- nas europeas de los siglos xvn y xvm ,--Holanda, Inglaterra,
sallamiento económico y político de las poblaciones ameri- ·. Francia- se fraguó en muy buena medida en la España del
canas originarias. siglo xvt, señaladamente con la reacción de los iusfilósofos
El principal contendiente de los defensores salmantinos •. salmantinos, radicalmente críticos con la "conquista y des-
de esas poblaciones fue, como es harto sabido, el erudito (y . truccíón de las Indias")."
traductor de Aristóteles) Sepúlveda, el primer intelectual or-
gáníco, por así decirlo, del partido de los encomenderos colo-
nizadores del Nuevo Mundo. Sepúlveda argumentaba todavía Suárez de la Biblioteca Digital Hispánica dela Biblioteca Nacio-
de forma tradicional, neoaristotélica (los indios serían "escla- nal de España. . ·
·•. 7 Todavía a finales del siglo xrx, antes de que los "neomarxístas"
v?s por naturaleza", y por lo mismo, incapaces de libertad), a la MacPherson (con su necia e influyente idea del "individua-
sm atreverse a revisar la noción clásica de libertad inaliena- lismo posesivo", que confunde todo, y en particular, a Locke
ble. Pero, tras la derrota pólítíca -que no filosófica- de lo con Hobbes), .antes de que los neotomistas a la Vílley (con su
que tal vez .podríamos llamar el partido español, antícoloní- arbitraria e insostenible tesis del "subjetivismo" iusfilosófico
~ador Y anttesclavísta, de la libertad republicana, comenzó a moderno frente al pretendido ~objetivismo" del derecho roma-
no), o antes de que los liberales a la Berlín (que se asombra-
Imponerse otra visión, anticlásíca, de la libertad más eficaz ba del ciudadano libre kantiano como "fin en sí mismo", no
ideológicámente a la larga que el ideario de SepúÍveda. "instrumental", cuando cualquier estudioso medianamente sol.-
El gran filósofo tardoescolástico Francisco Suárez fue el vente sabe que esa idea, lugar común donde los haya, la sa~o
primero en disputar el carácter inalienable de la libertad.6 Kant del derecho civil romano, para el que la marca esencial
de la esclavitud es ser, precisamente, instrumentum vocale, a
diferencia del ciudadano romano libre, que es, desde el punto
6 Apuntaba: "por lo mismo que el hombre es dueño de su liber- de vista jurídico, fin en sí mismo -(una idea que estaba ~~ en
t~d, es posible venderla o enajenarla". ("Defensio fidei catho- Aristóteles, para el que el.esclavo es orqanon emp~yches, ms-
hcae _et apo~tolicae ad versus anglicanae secta errores", en trumento animado")-; todavía, digo, a finales del siglo xrx, Lord
Francisco Suarez: Ópera, en Obras digitalizadas de Francisco . Acton podía escribir como la cosa más natural del mundo esto:
520 521
Lr
 Antoni Doménech La democracia republicana fraternal y el socialismo con gorro rrzgw ··

Cicerón recuerda en los Oficios que mientras el contra- se convierta en un "aparato" separado e independiente de la
to de obra (locatio conductio opera) se considera en el de- sociedad y se "libere" de esta es lo que resulta un fenómen?
. recho civil republicano romano como un contrato entre específicamente moderno, que ha obligado hasta hoy a expii-
"hombres libres", el contrato de servicios tlocatio conductio car esa separación como "democrática", si mantiene una vincu-
operarum), característico del trabajo asalariado, no es una lación a través de la legalidad y la legitimidad. Si el mundo
relación entre hombres (republicanamente .Iíbres), pues se clásico hubiese conocido este problema es muy probable que
funda en el hecho de que quien vende su fuerza de trabajo la palabra empleada para describirlo fuese "despotismo"·
a otro no puede vivir, existir socialmente, sin pedir permiso a ¿Qué hay de nuevo en taconcepción fiduciaria del poder en
otro, aliena parcialmente su libertad. Cuando Adam Smith el republicanismo moderno, Marx incluido?
y luego Marx hablan del trabajo asalariado como de la "es- Sí. Locke fue quien .elaboró el contenido moderno de la
clavitud moderna", siguen esa tradición republicana clásica. ñduciarizacíón del poder, una estructura conceptual re-
Conforme al derecho civil republicano romano, quien firma cibida del derecho civil privado romano. La idea es que la
un contra to de servicios, no puede ser· sui turis, ciudadano autoridad política ha de eritenderse como un fideicon:iiso:
. libre, de derecho propio, sino, como los esclavos (y las mu- los magistrados políticos no son sino fideicomisarios, flele.s
jeres no huérfanas o no viudas), alguien no libre, no propia- servidores -minister signífca precísmente sirviente- del ñ-

mente ciudadano, sino sujeto a "derecho ajeno", alieni iuris deicomitente, que es el conjunto de los ciudadanos libres. La
(de aquí la idea kantiana, hegeliana y marxiana de la "alie- palabra de que se sirve Locke en el Segunqo Tratado del g~-
nación" de las clases subalternas, privadas de propíedadv bierno civil es trustee, la rraduccíón.al inglés de "fideicomi-
medios de existencia propios). La impugnación del trabajo sario". Aunque la autoridad política sea real -en eso sigue,
asalariado -convertido por el capitalismo moderno en la re- obviamente, a nuestro regícída.Juan de Mariana-, esa auto-
lación social de producción preponderante- por parte .de ridad no es sino fideicomisaria: los ciudadanos, en cuanto
Marx trae, pues, su origen normativo o iusfilosófico en su fideicomitentes, encargan a un fideicomisario la tare~ de la
defensa republicana de la inalienabilidad de la libertad (y en gobernación, y por lo mismo, pueden deponerlo sin mas que
su afirmación republicano-democrática de la universaliza- sentirse subjetivamente traicionados en su confianza.8
cióµ social y política de la libertad inalienable). Hay que observar que una relación füleicomisaria es muy
Usted ha mencionado, en tercer lugar, la concepción fidu- distinta de una relación jurídica contractual. Los contratos
ciaria del poder como uno de los núcleos del republicanismo, entre libres son siempre contratos idealmente inconte~t.a-
al que tributa Marx dentro del republicanismo específicamen- bles, en la medida en que la distribución de la inform~c10n
te moderno. Sin embargo, esa era la concepción del poder entre las partes es simétrica (todos los contratantes, díspo-
público propia del mundo clásico. El hecho de que el Estado nen de la misma información). En cambio, una relacion civil
e

"el grueso de las ideas políticas de. Milton, Locke y Rousseau,

puede encontrarse en el grave latín de los jesuitas súbditos de 8 En la Teoría de los sentimientos morales, ed. cit. (I.iii.~ .3), Adam
la Corona española, como Lessíus, Molina, Mariana y Suárez". Smith dejó dicho esto: "Que los reyes so~ l_os servidores del
John Neville Fíggts y Regínald Vere Laurence (comps.): (Lord pueblo, y que han de ser obedecidos! re~ist1~os! depuestos ~
Acton: The History of Freedom and Other Essays, Macmillan, castigados, según requiera la c?nvemencia pública, e~ la doc
Londres, 1907, cap. III). Por otra parte, para la influencia de trina de la razón y de la filosofía; pero n~ es la doctrma de l~
· Juan de Mariana sobre el republicanismo revolucionario fran- Naturaleza". La cé17bre idea de .Kant,. segun la c.ual la ,~evolf _
cés, cfr. Florence Gauthier: "De Juan de Mariana a Robespte- · cíón francesa habna sido el primer mtento seno de mo~a 1
.rre", en Sin Permiso, 15 octubre 2006 (http://www.sinpermiso. zación de la naturaleza" ha de entenderse como comentario a
info/textos/index.php?id= 79 7). este pasaje de Smith.
522 523
 Antoni Doménech La democracia republicana fraternal y el socialismo con gorro frigio

fideicomisaria está basada precisamente en la distribución como sostienen tantos filósofos despistados; sino la trasla-
asimétrica de la información entre las partes. · ción a la concepción del poder y la autoridad política de una
El fideicomitente (o "principal") tiene interés en que se viejísima tradición íuscívíl, de todo punto realista, amplia y
haga algo, pero no tiene normalmente ni información ni tradicionalmente aceptada en la regulación normativa de las
tiempo . suficientes para actuar por sí mismo. Piénsese en relaciones fiduciarias - asimétricas desde el punto de vista in·
la refa~ió.n entre un paciente (fideicomitente o "principal") formativo- entre agentes privados (republicanamente) libres.
Y el medico que le trata (el fideicomisario): el fideicomisa- Vamos, entonces, al cuarto y último punto en la caracteriza-
rio (o "agente) sí tiene la información, pero, en cambio, no ción básica de la tradición republicana moderna mencionado
ne~esaria1:1e~te e~tá en su interés actuar en el sentido que por usted, el de la concepción fiduciaria de la propiedad.
quiere el fídeícornirsnrs o principal. Cualquier contrato civil Está relacionada esta cuestión con la anterior, con la de
que se firmara entre ambos sería tendencialmente contesta· la concepción fiduciaria del poder y la autoridad política,
ble (porque al principal -y al posible juez que tuviera que tanto en lo conceptual, como en lo histórico.
entender del caso= con dificultad le resultaría accesible la Si vemos la historia europeo-occidental medieval y mo-
información para saber si el agente, en caso de que las cosas derna -de donde surge lo que ahora llamamos "capitalis-
vayan mal, ha actuado de modo eficiente y honrado. La tra- · mo" (un sustantivo, por cierto, que Marx y Engels nunca
dícíónjurídíca republicana ha considerado este tipo de rela- emplearon: luego quizá haya ocasión de entrar en eso, que
cienes entre privados -ubicuas en cualquier sociedad civil no carece de importancia)-, síechamos, digo, una mirada a
con una división del trabajo mínimamente compleja- corno esa historia, nos damos cuenta de lo siguiente. ·
muy peligrosas para Ialíbertad del fideicomitente o principal El tipo de propiedad privada que luego se ha considerado
(~or. las 1~m:nsas posibilidades de fraude abiertas al agente -anacrónica y de forma exagerada- "típicamente romana",
fídeícomísarío). Por eso en las relaciones fiduciarias la tradi- es decir, el de una propiedad privada excluyente y exclusiva,
ción jurídica republicana ha tendido a dar al fideicomitente que autorizaba al propietario a un uso y abuso (tus utendi
la posibilidad -que no existe en los contratos civiles- de et abutendñ ilimitados de aquello de que de modo legal se
romper unilateralmente su relación con el fideicomisario sin apropiaba privadamente (bienes muebles e inmuebles), sin
más que manifestar su pérdida de confianza en él. ' que nada ni nadie (ni particulares ni magistrados) pudiera
. En esa tradición está el celebérrimo dictum (lockeano) de interferir en la "libertad" del propietario privado para pro-
Robespíerre: el pueblo es bueno, y el magistrado corruptible, ceder 'corno le acomodara con su hacienda, esa noción de
Y por I.o mismo, el pueblo puede deponer al magistrado en propiedad privada era relativamente marginal en la Europa
cualquier momento, sin más que manifestar su pérdida de occidental medieval, y casi quedó reducida a la propiedad
confianza en él. O de su idée [ixe (que viene de Juan de Maria- alodial de tierras. 9
na, como, dicho sea de paso, la propia Martanne, símbolo has·
ta ~~Y de la República francesa), según. la cual, la autoridad 9 El propietario medieval de tierras aloidales (con una propiedad
política debe temer siempre al pueblo: una población incapaz privada que, por lo mismo que estaba libre de toda carga ~eno-
de amedrentar al poder político es una población esclava una . rial se consideraba -con razon- como opuesta a la propiedad
o d~minio privado de tipo feudal, en donde el propietario está
c?lección más o menos amorfa de individuos sujetos ali~pe- de jure avasallado al príncipe o al monarca), llegó a conside-
num, una masa de súbditos, no un pueblo republicanamente rarse -con menos razón- un resto de propiedad privada inin-
constituido. terf erible de tipo romano. A mediados del siglo xvm, el célebre
Esto no es una tesis antropológica más o menos "moder- jurista británico Blackstone hizo esta conocida definición de
na" sobre la "bondad" humana (en este caso, del "pueblo"), la propiedad privada (de raíz supuestamente romana):. the sale
and despotic dominion whicn one man claims and exercises over
524 525
 LQ lleYrWC(UUU f~f)UVULUtlU JI Ult:1 ll"1t Y <-• .,u._,,..,.,rfLV <.vtt !:1Vt 'V I !}!:1!.!!'.t.
Antoni Doménech
el mundo -incluidas las mujeres- Y sus "juntas df JJµ~,
En la Política de Aristóteles se especifica que hay cua- gobierno". .: ;/ki
tro tipos básicos de propiedad: 1. la propiedad común con El desarrollo de las monarquías de origen germánico ~n r:y.~. fr
apropiación común; 2. la propiedad común con apropiación ropa occidental está basado en buena medida en un~ alianza{;
privada; 3. la propiedad privada con apropiación común; y, entre la democracia municipal, fundada en la prop~edad ~n ·;,{
por último, 4. la propiedad privada con apropiación privada. común, y los monarcas, contra los repetidos Y P?rfiados in- · · ·
Esta última, que más o menos se identifica con la rareza que ten tos de los señores fe u dales de apropiarse pnvad~mente
era la propiedad alodial medieval, es lo que se ha venido de los comunes y, al propio tiempo, liberarse o desvincular
en llamar, a partir del siglo xix, propiedad "liberal" clásica. su propiedad de la relación fideico~isari~ .. · , . .
En cambio, las tres primeras, en la Europa occidental bajo- Cuando Colón regresa de su pnmer viaje a Amenca,. lo
medieval tendieron a versé así: todas las tierras y recursos hace con. un cargamento de indígenes esdavizado_s, que
naturales eran en realidad propiedad del príncipe, del rey o ofrece a li reina Isabel como presente en su e~trevista en
del emperador de turno, y era el soberano el que concedía, Granada en 1492. E Isabel, de todo punto consciente de que
como una especie de fideicomiso, la apropiación o privada o su monarquía se fundaba en la promesa ~nH_servil, reprende
común de esos recursos. y castiga .duramen te a Colón, y. manda Iíberar Y devolver a
La propiedad privada de tipo feudal (el mannor inglés;· los esclavizados a su lugar de ongen.1° Cuando el rey Jua~ de
el domaine francés, el señorío español, el Grundherrschaft · Jnglaterra concede la Carta Magna a ~us súbditos a comien-
alemán) no era un dominium plenum, sino un domintum utiie · zos del siglo xm, h~bitualmente co:1s1~er~d~ u~ documento
=Incluída la jurisdicción señorial-e concedido a modo de fi- · l<protolibera:r· de derechos y garanuas tndívíduales -habea~
deicomiso por el soberano; en calidad de fideicomitente que corpus, etc-:-, la concede junto con otra carta, _de la que nun
velaba por el bien común o la utilidad social de la apropia- . ca se habla, la Carta de los bosques, garanuzan~o a esos
ción privada del bien en cuestión. Por otro lado, la llamada · mismos súbditos la conservación de su acceso Y disfrute de
propiedad comunal de tierras, bosques, ríos, lagos, etc., sig- los commons (de aquí "juan sin tierra", [ohn Lackland). Una
niñeaba la entrega, también en fideicorriiso, de un recurso y otra cosa van ligadas en la Magna Charta: como dere';,h~~
d(Jfa11laridad pública para su apropiación en común a una. y garantías individuales frente al poder (fre~.te ~l Pº~.er pu
comunidad (la Allmende o la gemeine Mark, en territorios 'blíco" o real, no menos que frente al poder privado de las
germánicos, la commune en Francia, los ejidos en Espafia,. jurisdicciones. señoriales)." . .. .
o los commons en Inglaterra). Las tierras comunales fueron . Con muy distintos acentos en I_nglater~a, en ~rancia, en
en buena medida la fuente principal de libertad popular en. los territorios germánicos y en Espana. el afianzam1ent_o de las .·. .
la Europa occidental medieval e incipientemente moderna, y monarquías absolutas en Europa occidental e~ los siglos xvI:.·,., . .
en España, tanto en Castilla como en el Reíno de Aragón y Ca-· y xv1J.significa 'la progresiva ruptura de esa al!a11z_a.: ~ntre ~,
taluña, la base de la gran tradición española de democracia democracia popular comunera y las monarqmas, Y}~ ..pue
municipal o comunera, con sus "concejos abiertos" a todo ta del absolutismo monárquico co_nso~i?ado al S;f!~lCW del .
cercamiento dé tierras y la privauz_acion, te1:1de~t'.~a!ment:
excluyente y exclusiva, de los medíos de existencia. De 1
the extemal thinqs of the world, in total exclusion of the riqht
of any other individual in the universe ("el exclusivo y despóti- io VerJeanDurilont: La controversia de Valladolid, Encuentro, Ma-
co dominio que un hombre exige sobre las cosas externas del drid, 2010. ·F. unerues and
mundo, con total exclusión del derecho de cualquier otro indi- 11 Ver: Peter Linebaugh:The Magna Ca~ta Manz,esto: 1
. viduo en el universo"). Y esa visión pasó a considerarse en el Commons far All, Uníversítv, Califorma Press, Los Angeles, 2008 .
xtx como la concepción liberal clásica de la propiedad privada.
527
526
 La democracia repuo11cana ¡rarernai y ei sutiuw,mu curi yurru ¡ nyw

gigantesca oleada de luchas de clases en que se vertebró el trabajo personal (el programa jeffersoniano Ór~ginari?, de la
este proceso durante siglos nació en la Inglaterra meridio- República norteamericana de pequeños campesmo~ - gra1:-
nal del siglo xvi el núcleo de la dinámica económica, social y jeros"-, por ejemplo)." con exclusión de la propiedad pn-
política que ahora llamamos "capitalismo". Y no, dicho sea
de paso, como triunfo, según sostiene el "marxismo" vulgar 12 No solo los bienes c~munales; también ~a propiedad privt~ª
del siglo xx, sino como derrota de las clases populares: el fundada en el trabajo personal, normat1vamente compatí e
"capitalismo" moderno no es una evolución natural y "su- con el republicanismo democránco !radicional, es socavada
perior" del "feudalismo" europeo-occidental; es más bien el por la dinámica económica del cap1tahsmo. E!!!ender esto _es lo
que convierte al joven republic_ano-democratl~~. revolu~1on~
resultado de la victoria política de las viejas clases recto- río Marx en un socialista republicano moderno. La P1:'?p1eda
ras terratenientes, de las burocracias absolutistas, de la alta privada del trabajador sobre sus medios de P!oducc1on es e 1
finanza, del alto clero y del tercer Estado (burgués) frente fundamento del la pequeña empresa, la pequena empresa, una
a las luchas seculares de los campesinos, y en general, de condición necesaria del desarrollo ~e la produ~c10n Y de la
libre individualidad del mismo trabaJa?_or. Por cierto que est~
quienes vivían por sus manos, del cuarto Estado, del démos, ·ti 0· de modo de producir ~xiste ta~b1en en el seno ~e la so
del menu peuple robespíerreano. cfedad esclavista [mediterranea antigua), de la la serv1dur~re
La victoria política -'-que cierra provisionalmente siglos ersonal [medieval] y en otras socie?ades fundadas e_n re acto-
de rebeliones.Tnsurreccíones y revoluciones populares- de p · 1 s de dependencia Pero solo florece [ ... } alh donde el
nes socia e · d líb d 1 s condiciones e
lo que Robespierre llamó atínadamente la "economía polí- trabajador es un propietario priva o, 1 r~ e a . d
instrumentos de trabajo hechos por el mismo, el campesino e
tica tiránica" sobre lo que no menos atinadamente llamó su tierra el artesano. de sus herramientas, en. cuyo 11:aneJo. ~s
"economía política popular"; Lejos de ser una "revolución un virtu~so. Ese modo de producir trae consigo la d1_spers10n
de la tierra y del resto de medios de pro~1;1cc10n. ~q mis!?.º qu~
burguesa", la Revolución francesa fue, a la vez, la última
gran jacquerie medieval y -con la I República democrática la concentración de estos últimos, también esa d1fPerts1~n t
cluye la cooperación, la división del tr~b~JO en_ el sero e }~
de 1793~ el primer combate anticapitalista y anticolonialis- mismos recesos productivos, el dominio socia Y a regu a
ta serio, heredero directo del movimiento obrero socialista cíón de l~ naturaleza, el libre desarrollo de las fuerzas produJ~
de los siglos XiX. y XX, entendido históricamente, claro está, tí ( ) Si llega a un cierto grado de desarrollo, ese 11:odo
1~idu~ir.
como la'. contínuacíón, tras la Primera Revolución Industrial, en endra los medios materiales para su propia ?esa-
p arición def mundo. Tiene que ser aniquilado, Y es aniquilado.
del programa republicano-democrático de la "economía po- ~u ani uílacíón, la transformación de los medíos de producción
lítica popular" encarnado en la divisa de la "fraternidad"). dispe~os en medios socialmente concentra~os <·:·>· De aquí la
El soberano republicano-democrático -el pueblo- se . . ón de tierra Y suelo y medios de vida e mstrumentos
convierte así en el propietario último de los recursos y las ~P~iib!j~ sufrida [bajo la dinámica capitalista) yor eldgr~J"
ulares. Esa terrible desposeston pa ~c1 .~
riquezas de la nación, y todas las formas de propiedad exís- so dr/:a~!t~~1 ~~~blo constituye la prehistoria d~! capital .
rentes sori fideicomisos de la República. Eso excluye, obvio por . MEW t XXIII pp. 789ss. (Iraduccíón de An-
es decirlo, a la propiedad "liberal" clásica, exclusiva y exclu- f:;i
d ..
~t::!e~~). Las' d~s definiciones ac~so más pre n~?tes
. lí ,, que ha dado Marx en su vida estan en a mea
1
yente, y quedan como posibilidades abiertas a una Repúbli-
ca democrática, universalizadora de la libertad republicana: a! s~oc~~}~~3acomprensión histór.ico:dinámica d~ la f~erzas
t p d l modo de producir capitalista, como cíentiñco. y,
l. la propiedad común comúnmente apropiada (como las rec orasolí~ico o como filósofo normativo. en s~ volu~tad. ~e
tierras ejidales, por ejemplo); 2. la propiedad privada co- d~~~r~llar el viejo programa democr~tic? de umv~rsahzac10~
múnmente apropiada (las cooperativas de trabajadores); y 3. de la libertad republicana bajo un ~a~1tahsmo m~derno e_n ~l,e
la propiedad privada individualmente apropiada fundada en no despliegue industrial: 1) el socíalísmo como e~prop~ac~?n
tadores" , y 2) el socialismo como asociacion
d e 1os exprop1
528 529
 .¡,,,¡VI. y~""'''~"'..,.I ,..,_ .. ..,, • ..,.t"'._. .. _ ..., I' ••• .,. , •••• ~

vada individualmente apropiada fundada en la explotación preceptos constitucionales harto distintos, y en este punto
del trabajo ajeno (de esclavos o de asalariados, "esclavos a crucial de la concepción republicana fiduciaria de la pro-
tiempo parcial"). piedad -no en otros-«, con preceptos menos democráticos,
Por poner un ejemplo concreto, y no reducirnos solo a más restrictores de la libertad parlamentaria.
esquemas conceptuales, usted puede ver desplegada como , Es muy interesante observar que ninguna de esas consti-
acción constitucional esa idea republicano-democrática (y tuciones democráticas que regulaban el régimen de propie-
socialista) de la fiduciarización de la propiedad, por ejem- dad inspiradas en el artículo 2 7 mexicano ha sobrevivido.
plo, en el famoso artículo 2 7 de la Constitución mexicana El estalinismo terminó con la Constitución soviética de 1918
de 1917. Ese artículo declaraba que la propiedad (también y con su regulación fiduciaria de la propiedad. Las constitu-
la privada) cumple una "función social", y -de fundamental ciones de las democracias restauradas tras la II Guerra Mun-
importancia~ que la determinación de esa función social y dialen Europa (como la alemana, la austríaca y, en 1978, la
de su cumplímíento quedaba exclusivamente en manos del monárquico-parlamentaría española) blindaron hasta cierto
L~gislador (es decir, del Parlamento). Ese artículo fue pla- punto determinados derechos sociales (ahora amenazados por
gia?º por Hugo Preuss en la redacción de la República de la ofensiva neoliberal de los últimos lustros), pero al pre·
We1mar (1919), por el demócrata Kelsen y el socialista Karl cío de blindar también, en contrapartida, 'un esquema no
Renn~r en la redacción de la Constitución de la I República republicano-fiduciario, no propiamente democrático, de la
austnaca.(1919) y por Luis Jiménez de Asúa en la redacción propiedad, un esquema -c-"economía social de mercado"- po-
de la Constitución de la U República española (1931). En . líticamente intocable incluso en el caso de disponer de ma-
buena parte, también por los redactores de la Constitución yorías parlamentarias abrumadoras.
soviética de 1918.13 Ese artículo permitió a los mexicanos .·. Y finalmente, en lo tocante a la propia República de México,
ac.ometer la Refor,ma Agraria, y a la República· española, lo el neoliberalismo de Salinas se encargó a finales de los años 80
m.1smo. Fue ~l articulo más odiado por la oligarquía índus- de "reformar" la Constitución revolucionaria aboliendo -entre
tríal, terrateniente y financiera alemana que financió a Hitler, otros, pero muy señaladamente- el celebérrimo artículo 27.
asi como por las clases rectoras austríacas que apoyaron a De acuerdo, ya ha descrito los cuatro puntos que conside-
· 1os fascistas clericales del golpista Dolfuss. Lo mismo en Es- ra claves como núcleos de la tradición republicana, sin los
paña. El fascismo europeo destruyó a esas repúblicas her- cuales no puede entenderse el significado del marxismo ori-
manas, Y la restauración de la . democracia en la segunda ginario. Resumamos: la tradición liberal sería una tradición
posguerra, tras la derrota política del fascismo, se hizo con reciente, decimonónica. Esa tradición es una reacción a la Re-
volución francesa. Tiende a una visión de la ley, de ascenden-
republicana de productores libres e iguales que se apropian en cia nobbesíano-utilüarista, como algo opuesto a los derechos.
comu? de los medios de producción". {Cfr. Antoni Doménech: Tiene, además, una concepción de la "libertad" poco amiga
El eclipse de la fraternidad, Crítica, Barcelona, particularmente de la inalienabilidad de la misma. Tiene también una noción
. los caps. IV y V). . no [ideicomisaría de la autoridad política. Y, en cuarto lu-
l3 F~e inspirándose en el espíritu de esta disposición constítu- gar, tiende a ver los derechos de propiedad como derechos
. cíonal que los bolcheviques proclamaron en agosto de 1917:
"La .tenencia de ~a t~err.a debe ser sobre una base de igualdad: de propiedad y apropiación exclusiva y excluyente, no como
la _tle~ra debe distribuirse entre los trabajadores conforme a dimanantes de un fideicomiso.
. cntenos de trabajo o de consumo, según sean las condiciones .' Los idearios de los partidos liberales histórico-realmente
locales: No debe haber absolutamente ninguna restricción a las existentes en la Europa del xrx tendían, en efecto, a artícu-
\formas d~ tenencia de la tierra: familiar, estanciera, comunal o larse programáticamente en torno a esos cuatro puntos. En
. cooperauva". ·
530 531
 --· -•., • ' ""' .- • •-""" • • • ' ... ~ •• ,~ • ' • •., ' ~ • I ' " . -

por el socialista francés, de origen madrileño, Louis Blanc

varios países de América Latina, por motivos obvios relacio- en el París de 1852). La aceptación de este sustantivo ha
n_a_dos_ con el hecho de que fue tomando pie en la Constitu- contribuido en algo a perder de vista el carácter histórico,
c10~ liberal de ~ádiz de 1812 que lograron progresivamente como fuerza o conjunto de fuerzas dinámicas históricas,
su independencía republicana, "liberalismo" tiene unas con- de lo que Marx llamó "modo de producir capitalista". El pa-
no_tac10ne~ mas progresistas o aun revolucionarias: eso es roxismo de esa visión ahistórica del "capitalismo" lo repre-
así, todavía hoy, en Colombia o en Ecuador, por ejemplo. sentó el marxismo académico estructuralista francés de los
Pero observe que no hay partidos nominalmente "liberales" años 60 y los 70, luego tan influyente en todo el mundo,
salvo, de form~ relevante desde el punto de vista institucio~ empezando por Inglaterra (a través de la segunda época de
nal, en C~lombia, en ninguna República histórica, solo en las la New Left Review) y terminando por América Latina. Gentes
monarq~1~s meramente c?nstitu~ionales: no en Argentina, como Althusser y sus amigos presentaron el "capitalismo"
no en México, no_en Francia. Los partidos liberales práctica- como una especie de sistema estructuro-funcionalmente
mente desaparecieron como fuerza política de peso en toda integrado, con su base económica, sus .funcionales sobre-
Europa con la llegada de las repúblicas democráticas (o de estructuras estatales, jurídicas e ideológicas, sus "aparatos
la plena parlamentarízación de las monarquías, como en el ideológicos de Estado" y toda esta cháchara _vaciada de em-
caso bntan~co o el caso sueco) tras la Gran Guerra, en 1918: píria, teóricamente escolástica e históricamente falsaria.
en Alemama, en Austria, en la España de la 11. República. Marx dedicó buena parte de su juventud, Y toda su ma-
Nunca h~bo un partido "liberal" en la República estadouní- durez, hasta su temprana muerte, a los 65 años, al estudio
d_en~e (Tíberal" significa hoy allí -y desde los años 30 del analítico-empírico de un conjunto de fuerzas dinámicas his-
s1gl? xx- cual~uier_ cosa que suene a izquierda, pero no ha tóricas, a las que llamó "modo de producir capitalista", Y
habido un_ partído liberal). Canadá, en cambio, súbdito de la al impacto causal de esas fuerzas en el c?njunto de la ~ida
Corona británica, tiene un partido "liberal". . económica, social, política y espiritual. Primero se centro en
r:
. Marx dijo a comienzos de la década de los años so del
siglo xrx El 18 de Brum~rio de Luis Bonaparte) algo pre-.
momto~10. l~ forma republicana de gobierno en Europa era
Inglaterra, el lugar de nacimiento de su dinamismo, Y lu~go
a la expansión de esas fuerzas dinámicas a escala mundial.
Ubre de todo eurocentrismo, Marx murió investigando con
r:voluc10nana y subversiva, inasimilable por el sistema de- la misma curiosidad la misma amplitud de intereses cientí-
bido al anquilosamiento de la división de la sociedad euro- ficos y el mismo vig~r intelectual de siempre; sabiéndose ig-
pea en clases, mientras que, en los Estados Unidos, con unas norante, y muy autocrítico de la obra hecha, como todos los
bar~eras de clase más difuminadas, con mayor movilidad grandes sabios, pero sabiendo a ciencia cierta, entre otras
social, con r:n~nor pr.es~ncia de fuerzas sociales y cultura- cosas, que no hay un "capitalismo" canónico (con su ba:5e,.su
~es, con trad1_c10nes históricamente asentadas y transmitidas sobreestructura, y antecedido por otro sistema econom1co
íntergeneracíonalmente de economía política popular (o de con su base y su sobreestructura funcionalmente ada~tada
lo que el historiador Edward P. Thompson llamó "economía a la base, etc.), sino muthas formas en que es~ comJ?leJ.º d~
~o~al de la multitud") y resistencia a la economía política ti- fuerzas dinámicas que es el "modo de produ,c:r capitalista
:amca, la forma repub~i~ana de Estado _:que no la república puede tener impacto causal y remodelar pohtica, e_co1;~m1-
mtegralmente democrática= era asimilable por el capitalis- -ca, ecológica Y.espiritualmente a distintas formas h1sto!1cas
mo norteamericano. de la-vidasocial en distintas culturas, en distintos contmen-
Marx tenía una visión histórica -y el último Marx todavía tes, en distintos pueblos y en distintas encrucijadas tempo-
~e u~a ~orm~. m~s acentuada- de lo que nosotros ll~mamos
capitalismo . ( Capitalismo" es un neologismo inventado rales y geopolíticas.

533
532
 ........... ••• .. , • •"' - • •• - • •• , .. r· • .,... •• .. • •• • ... ' • ....• .... , '~ .... ~ .,.. • - • .. • • • .. "', •~ •· • ' • ::,¡.,' , .,. I • "':J ... v

En el Manifiesto comunista de 1848, una obra absoluta-

derecho laboral democrático, y gracias a nosotros existe la
mente maestra· del difícil género literario que es el panfleto OIT, cuyo lema fundacional -"el trabajo no es una mercan-
político, Marx y Engels no solo realizaron una crítica devas- cía" - es también cosa nuestra. ,
tadora y profética del "capitalismo", desu poder destructor · . Nosotros, y no la burguesía o el "capitalismo!' ~emos traí-
y autodestructor, de su injusticia, de su miseria política, de do el sufragio universal (el masculino y el femenmo); noso-
su mezquindad moral; también hicieron grandes alabanzas tros .hemos traído las repúblicas, los regímenes plenament~
de la capacidad tecnológicamente innovadora del modo de parlamentarios, los sindicatos obreros y los .~oderno~ parti-
producir capitalista y de la burguesía industrial moderna, de su dos políticos de masas (tan distintos de los v1eJOS partidos de
impulso mundializador de la vida económica, de su poder honoratiores conservadores o liberales del xix). Nosotros, Y no
disolvente de estructuras sociales y políticas decadentes o los burgueses o el "capitalismo" hemos conseguido ,derrotar
anquilosadas: "todo lo sólido se desvanece en el aire". al nazifascismo y traer. de vuelta, 150 años des~ue~ de su
No hay sino recordar la carta a Vera Zasulich de 1881 so- eclipse ·termidoriano, los inalienabl~s -por_ constitut1:7?s de
bre la posibilidad de que la vieja comuna rural rusa pudiera · la libertad- derechos humanos. civiles, sociales Y políticos.
ahorrarse los horrores y los dolores de la. privatización y . Nosotros, y no los burgueses hemos luchado por la de~co-
desposesión capitalistas europeo-occidentales y atreverse a lonízacíón y .la autodeterminación d~ los p~ebl?s ~ome~1dos
una .transícíón directa hacia una vida económica tecnológi- del mundo. Nosotros, y no la burguesia o el capttalísmo , he-
camente avanzada de impronta socialista, para darse cuenta . mos construido cooperativas obreras (800 millones de perso-
de que el viejo Marx había corregido treinta y pico años des- nas trabajan hoy en distintos tipos de ellas); nosotros, Y no los
pués su optimismo trágico-progresista, heredado de Hegel . burgueses o el "capitalismo", hemos desarrollado Y ensa~cha-
-"la historia avanza por sus peores lados"-, de 1848. do el sector público y la regulación pública de la ec~nor1:ua ..
Pues bien; han pasado cerca de 130 años desde la muerte · Muchos de nosotros, y no los burgueses o los · capltal~s-
de Marx. El actual es un mundo en el que las fuerzas dinámi- tas", hemos resistido y combatido hasta la ~uerte ª.l fas~1s-
cas del capitalismo han seguido actuando, en muchas cosas, mo y a las terribles tiranías políticas del siglo xx.. (mc.lm~o
de las formas presagiadas por Marx; en otras, de manera el estalinismo). Nosotros, y no los burgueses o el capit~hs-
impensable para Marx. Pero ese mundo nuestro no es solo mo", hemos renovado el arte, la música, la cultura Y ~a ~1en-
un mundo social y política y espiritualmente hecho en régimen cía del siglo xx: Einstein y Bertrand Russell er~n. socialistas
de exclusividad por la burguesía industrial y modelado en (y pacifistas antimperialistas); Pica,ss_o era socíalísta, Brecht
exclusiva por las· fuerzas históricas dinámicas que Marx lla- era socialista; Hans Eisler, snostasovicb Y John Lenn?n e~an
mó "modo de· producir capitalista". Es un mundo modelado socialistas; Rosa Luxemburgo, Alexa.ndra Kollonta~, ~nd~
y construido· también, a la contra, por nosotros, por el mo- Kahlo, Joan Robinson y Margarita Nelken f~e!on socialistas:
vimiento obrero, por las clases populares, por los pueblos · Chaplin, Visconti y Luis Buñuel fueron sociahs~a~; Ma~had?,
colonizados, por los humillados y condenados de la Tierra. cernuda, Miguel Hernández, Neruda eran socialistas, Alejo
Nosotros, y no los burgueses o el "capitalismo", hemos Carpentier, Julio Cortázar y Jo~é ~aría Arguedas ~ran socia-
construido el molde republicano de nuestro derecho públí- listas; los dos historiadores mas importantes (y citados) ~el
co actual. Nosotros, y no los burgueses o el "capitalísrno", sígloxx -Marc Bloch y Edward P. Thompson- fueron s?cia-
hemos logrado instituir jurídicamente en ámbttos.crucíales "' .· listas republicanos de gorro frigio. Noa~ Chomsk~, el mte-
de la vida social el carácter inalienable de la libertad huma=<) lectual público más citado de nuestr~s días, Y M_ano Bunge,
na. Incluso en zonas. tle máxima y vital importancia para lo~::' el más destacado filósofo latinoamericano del siglo xx, son
burgueses y para el "capítalísmo": nosotros, y no )qs bur-
gueses o el "capitalismo", hemos desarrollado el 'moderno socialistas.
535
534
··~~·· . ·~y,·.
 Y no los burgueses o el "capitalismo", sino nosotros com-
batimos hoy contra el neoliberalismo, esa contrarrevolución
en marcha dispuesta a borrar de la historia, precisamente,
la parte tan importante y decisiva del mundo presente que,
con ensayos audaces y errores a veces colosales ___:y hasta
con crímenes vergonzosos para los que no cabe siquiera la in-
dulgencia solicitada por Brecht en su hermoso poema A los
por nacer-, nosotros hemos sabido construir con tanto sa-
crificio, tanto empeño, tanta inteligencia, tanta terquedad y
tan heroica voluntad de lucha. · ·
Pretenden áhora dejar la vía políticamente expedita a una
tardoburguesía brutal y vulgar y a la recrecida furia expro-
piatoria de· unas fuerzas .dínámtcas tardocapitalistas des-
tructoras en grado superlativo. Dejar el paso franco a los
"des creadores de la Tierra", como les llamó el último Manuel
Sacristán, para volver a enseñorearse del mundo a cubierto '; T.ESTIMONIÓ (;RÁFICO
de un imperio sostenido por ilotas. ¡No pasarán!
7 cari:c~turas cOntrarrevolucionarias
~ antirrepublic:.~nas en la Inglaterra liberal .de la época

. .
~-~~··
; ~ó
.

. ·.
~

536