FICHA DE LA OBRA
Mosaico de las Cuatro Estaciones
Siglo IV-V d.C.
Teselas de caliza, cerámica, mármol y pasta vítrea. Asemejado al mosaico de Vicenza (Italia)
Museo de San Isidro
COMENTARIO
En el año 1860 tres académicos de la Real Academia de la Historia, José Amador de los Ríos,
Juan de Dios de la Rada y Cayetano Rosell sacaron a la luz pública la existencia de restos
romanos en la Corte de Madrid de manera documentada. Los hallazgos se habían descubierto
en el año 1819, y en el volumen que redactaron los investigadores se sustentaba la idea de
considerar que la Corte se había edificado sobre un asentamiento romano. Fue en el mismo
año, 1860, cuando un alumno de la cátedra de Arqueología y Numismática descubrió la
existencia de este mosaico romano en el suelo de una habitación en una quinta de los
Carabancheles, en la casa de los condes de Montijo concretamente. Así, los tres catedráticos ya
nombrados concluyeron definitivamente la presencia romana a poca distancia de la Villa y
Corte. Se trata del primer descubrimiento arqueológico romano importante en Madrid.
El mosaico estuvo en época romana situado en un comedor o triclinium lujoso en el interior de
una domus. Esta hipótesis se ha comprobado ya que el tipo de decoración que presenta el
mosaico solía situarse en comedores de villas. Lo más probable es que el mosaico perteneciese
a una familia romana que celebraba banquetes en la villa en honor al dios Baco. En el mosaico
vemos representadas las cuatro estaciones, presenta temática báquica, y las estaciones se
representan simbolizadas en diferentes ciclos vegetales. Eugenia de Montijo realizó una
restauración de los fragmentos superior e inferior izquierdos, reforzando el borde del mosaico
con cal, cerámica y teselas de mármol. Más adelante, en 1982, fue nuevamente restaurado por
Santiago Ferrete Ponce, incrustando telas de algodón con cola donde las teselas del mosaico se
habían deteriorado.
En conjunto, la obra mide 5,5 x 4,3 metros. Las teselas utilizadas son de color rojo, rosado,
ocre, azul, negro, verde y blanco. Tiene un patrón ornamental de estilo simple. El vértice mejor
conservado es el superior derecho, que representa el otoño a través de los racimos de uvas,
una mujer morena con una corona de pámpanos y tallos de vid en la cabeza. La mujer viste una
túnica romana. En el fragmento superior izquierdo, por las ramas secas que se conservan,
evocan a la estación invernal. En el derecho inferior, se pueden observar flores, por lo cual
representa la primavera. La parte central contiene una figura que ha sido asociada a la
representación del dios Baco, ya que muestra una pantera manejada por una correa, tal y
como aparece Baco en otras representaciones. El patrón decorativo que se utiliza en los
espacios restantes son las esvásticas a modo decorativo, forma de ornamentación extendida
por todo el imperio romano y que había adquirido la simbología de la antigua Grecia. Ç
BIBLIOGRAFÍA
Carabanchelhyp. (2021, 6 mayo). HISTORIA DEL MOSAICO DE CARABANCHEL. Carabanchel
Historia y Patrimonio.
https://carabanchelhistoriaypatrimonio.home.blog/2021/05/06/historia-del-mosaico-de-
carabanchel/
De Carabanchel, A. V. (2021, 20 mayo). El mosaico de Carabanchel. avocesdecarabanchel.es.
https://www.avocesdecarabanchel.es/cultura/el-mosaico-de-carabanchel
De Madrid Área De Las Artes, A. (s. f.)., MEMORIA DE MADRID
http://www.memoriademadrid.es/buscador.php?accion=VerFicha&id=116599&num_id=18&n
um_total=29
About: Mosaico de Carabanchel. (s. f.).
https://es.dbpedia.org/page/Mosaico_de_Carabanchel
AUTOR DE LA FICHA
Noa Caperochipi Matos
