CONTESTA TRASLADO. MANIFIESTA. SE RECHACE.
Exmo Tribunal:
JORGE ALEJANDRO AGÜERO, Abogado, Tº VI Fº 114 del
C. A. Mercedes, legajo previsional Nº 064932-4, (Tels. 02326 - 45 - 2409 y
02325 – 15 – 68 - 2221 emails: [email protected];
[email protected]; [email protected]), C.U.I.T. Nº
23-24462581-9, I.V.A. Responsable Monotributo e Ingresos Brutos Nº 23-
24462581-9, constituyendo domicilio procesal en Lagos Nº 1.050 (Estudio
Assaf y Asoc.) de esta ciudad y domicilio electrónico en
[email protected] en estos autos caratulados:
“BASILE, Rubén Darío c/ MARTINEZ HOWARD, Eduardo Rudecindo y
otros s/ DESPIDO” (Expte. 41.501) al Exmo Tribunal me presento y
respetuosamente digo:
I.- CONTESTA TRASLADO. MANIFIESTA. SE RECHACE:
Que por el presente vengo a contestar el traslado conferido
por el Exmo. Tribunal en el cual se me corre traslado de la liquidación
practicada por el demandado, solicitando desde ya su implacable
rechazo. Se tenga presentes.
Para ello, debo destacar los siguientes puntos:
a) Palabras para comenzar a entendernos:
El demandado se presenta con desdén en las presentes
actuaciones, exactamente 8 años, 8 meses y 13 días después de haber
suscripto un acuerdo que desde ya nunca cumplió y pretende abonar
dicha suma sin actualización ni penalidad alguna, abonando solamente un
paupérrimo interés calculado a una tasa totalmente alejada de cualquier
posibilidad de recomposición de la deuda por entonces contraída.
En efecto: Aquel 19 de Octubre de 2015, si Basile hubiera
percibido los $ 24.000 del acuerdo, hubiera podido comprar libremente
u$s 1.503,76 y su capital hoy sería de $ 2.045.113,60, a lo que
deberíamos adicionarle intereses al menos a una tasa pura fija durante
todo este lapso.
Pero hay aún más: Un litro de leche entera de primera
marca estaba por entonces en $ 8,50 y hoy cuesta alrededor de $ 1.400,
con lo cual para adquirir los 2.823,52 litros de lecho que compraba con
ese dinero en 2015, hoy deberá contar con un capital de $ 3.952.941,17.
Y seguimos soslayando la tasa de interés aplicable…
La fuente de lo que sostenemos en este parágrafo se puede
consultar muy fácilmente en cualquier sitio de la web con solo colocar
cuanto costaba el dólar en 2015 y cuánto cuesta ahora en 2024 y de igual
modo con la leche entera.
b) Improcedencia de la vía intentada:
Resulta ser que el presente expediente (conforme el
incumplimiento señalado) dio lugar a la promoción de las actuaciones
“BASILE, Rubén Darío c/ MARTINEZ HOWARD, Eduardo Rudecindo y otro/a
S/ EJECUCION DE CONVENIO” (Expte. 45.157) y es allí donde (a nuestro
entender) debería debatirse esta cuestión, ya que al iniciarse la ejecución
peticionamos (además de lo que venimos exponiendo) que se liquide el
capital “con más dos veces y media los intereses conforme la tasa que
percibe el Banco de la Provincia de Buenos Aires en sus operaciones de
descuento a treinta días (tasa activa) conforme el art. 275 de la L.C.T. (se
acompaña copia del acuerdo homologado), y su actualización en caso de
que al momento del efectivo pago no estuviera vigente la ley de
convertibilidad 23.928 conforme el texto vigente a la fecha…”
Como se ve, dejamos en claro al expresa reserva del análisis
que seguiremos en los puntos que infra desarrollaremos.
Por lo tanto, solicitamos desde ya el rechazo de la liquidación
practicada con la que se pretende intentar la cancelación de las acreencias
generadas en autos, pero ejecutadas en otro expediente. Con costas.
c) Denuncia hecho nuevo sobreviniente:
Que sin perjuicio de haber solicitado en la ejecución como
se dijo que se condene al demandado al íntegro pago del capital
reclamado “con más dos veces y media los intereses conforme la tasa que
percibe el Banco de la Provincia de Buenos Aires en sus operaciones de
descuento a treinta días (tasa activa) conforme el art. 275 de la L.C.T. (se
acompaña copia del acuerdo homologado), y su actualización en caso de
que al momento del efectivo pago no estuviera vigente la ley de
convertibilidad 23.928 conforme el texto vigente a la fecha…”, y que ello
además se sostuvo en su oportunidad en el capitulo I de la demanda
originaria cuando se dijo que “en un futuro y en su caso, se mantiene el
reclamo por indexación y/o actualización que por ley corresponda, desde
el momento en que dichas sumas se han devengado hasta el efectivo
pago, mas gastos y costas del proceso…”, se ha dado (como se sabe)
una reciente jurisprudencia de la S.C.B.A. que admite la actualización del
capital y decreta la inconstitucionalidad de la Ley 23.928, lo cual es un
hecho (que por el presente se denuncia) que ha ocurrido y es conocido
recientemente, con posterioridad a la traba de la Litis, a la homologación
del acuerdo e incluso a su ejecución.
En efecto, en autos: "Barrios, Héctor Francisco y otra contra
Lascano, Sandra Beatriz y otra s/ Daños y perjuicios" ( S.C.B.A. Causa
C124096. Fallo del 18/04/2024) el más alto tribunal provincial declaro “la
inconstitucionalidad sobrevenida del art. 7 de la ley 23.928, según ley
25.561, del mismo modo que su inaplicabilidad al caso, a fin de disponer
una equitativa actualización del crédito adeudado…”
Para decidir ello sostuvo entre otras cosas que:
“Como es conocido, las recurrentes crisis financieras y,
entre otros problemas, los trastornos que ocasiona la inflación, impactan
fuertemente en las relaciones jurídicas. En las últimas décadas se
aprobaron e implementaron diversas normas legales y reglamentarias, así
como variados programas, que contenían medidas de todo calibre,
destinados a resolver esta problemática. Una de las más trascendentes
fue la ley 23.928, de convertibilidad, reformada por la ley 25.561,
denominada de emergencia social, económica, administrativa, financiera
y cambiaria. V.1.b. El encuadre en esas normas, y su interpretación,
fueron objeto de diversos esquemas de decisión jurisprudencial que, ya
en la actualidad, en un contexto de acusada inestabilidad económica,
generan una perturbación severa para la justa composición de los
conflictos. La inflación que aqueja a la economía del país ha sido -y es-
un factor tan corrosivo para el equilibrio negocial y, en términos más
amplios, para la realización eficaz de los derechos, que la evidencia de
sus efectos lesivos debe ser plenamente afrontada... el ceñido esquema
que impone la ley antes citada, en más de un supuesto facilita la licuación
del capital adeudado y provee soluciones alejadas de los intereses
económicos en presencia. Ello explica que haya proliferado un conjunto
de regulaciones de distinta índole y jerarquía que, eludiendo o
exceptuada la prohibición legal, han consagrado mecanismos de ajuste o
indexación, de modo puntual o sectorial… El alza generalizada de los
precios y la depreciación monetaria, agravados en los últimos tiempos, y
fuertemente en el último bienio, parece una constante. Estos hechos
notorios impulsan el replanteo de la doctrina legal de este Tribunal… Era
visible el pronunciado desgaste de la plataforma en la que se había
montado la regla prohibitiva de la actualización… El abordaje del
problema que se plantea en este caso franquea el ingreso a un campo de
excepción: la inconstitucionalidad sobreviniente (Fallos 308:2268;
316:3104; 317:756; 319:324; 321:1058; 328:566; entre otros)… En la
especie, la brecha entre un sistema de mantenimiento del capital
adecuado por medio de su actualización más una tasa de interés puro y el
sistema hasta ahora aplicado -de capital nominal más intereses a la tasa
pasiva BIP (de la anterior doctrina legal)- arroja una pérdida más que
considerable en perjuicio del reclamante… El corolario de todo lo
expuesto es inequívoco: el art. 7 de la ley 23.928, texto según ley 25.561,
en su aplicación al caso, debe ser descalificado porque desconoce el
principio de razonabilidad, el derecho de propiedad del reclamante y no
permite proveer una tutela judicial eficaz (arts. 1, 17, 18, 28 y concs.,
Const. Nac.)…”
Como advertimos, este hecho nuevo sobreviniente no altera
el objeto litigioso, aunque obviamente aporta material fáctico vinculado a
las pretensiones iniciales. No modificará la estructura básica de la relación
procesal, pero aportara ‘complementos’ a los invocados antes de la traba
de la litis, o que pueden ocurrir o aparecer luego.
Que en autos “VIEYTES de FERNÁNDEZ, Juana, Suc. c/ Provincia de
Buenos Aires.” (C.S.J.N. 295:973. Fallo del 23/09/1976 Publicado en Rev.
Jur. Arg. LA LEY 1976-429) la parte actora en su alegato, solicito que las
sumas de alquileres adeudadas que reclamaba, se reajusten por la
depreciación monetaria hasta el momento del efectivo pago y la
accionada se opuso considerando que el pedido era extemporáneo, a lo
que la C.S.J.N. dijo que “el rubro mencionado puede solicitarse aun en el
alegato, siempre que se dé oportunidad a la otra parte de hacer valer las
defensas que estime corresponderle (Fallos, t. 287, p. 205 Rev. La Ley, t.
152, p. 421; ref. Fallos, t. 283, p. 213).
Por ello es que no se violenta la regla del art. 331 del
C.P.C.C.B.A. y cctes. por cuanto se pedirá se corra el pertinente traslado
de ser necesario.
Conforme ello, solicito se tenga presente al momento de
dictar sentencia y para la etapa de liquidación lo antes expuesto. Se tenga
presente.
d) Plantea conversión del reclamo a pesos argentinos oro
(ley 1.130):
En este orden de ideas, y sin perjuicio del reclamo en pesos
de intentado en la ejecución, vengo a solicitar su conversión en pesos
argentinos oro o pesos oro sellados
En la búsqueda de la tan preciada intangibilidad del capital
frente a los avatares, giros y manipulaciones de los indicadores de la
economía, el mercado y las estadísticas, el valor de dicha moneda se
determina de acuerdo al valor del oro en el mercado internacional.
El 5 de noviembre de 1881 se sancionó la ley 1.130 (de
unificación de la amonedación nacional) la que determinó la
convertibilidad de la moneda nacional a oro, y la emisión de una moneda
que se denominó “Argentino oro”. Esta moneda era equivalente a $m/n 5
(cinco pesos moneda nacional), casi igual al Soberano Inglés (99,12%).
En 1885 se suspendió la convertibilidad, para retomarse en 1899, con la
Ley N° 3871, la que establecía una paridad de $1 oro igual a $m/n 2,2727.
A partir de 1899 y hasta 1929, el peso moneda nacional se mantuvo en
casi la misma relación con el dólar estadounidense ($m/n 2,35 equivalían
a 1 dólar estadounidense), con algunas fluctuaciones a partir de 1914
(donde si bien se suspendió la convertibilidad, se mantuvieron las “reglas
del juego” del patrón oro) y hasta 1927, donde se restableció legalmente,
para ser abandonada en 1929. (BCRA Argentinos Oro (1881-1896)
(bcra.gob.ar)
Esta ley continua vigente porque nunca fue derogada por lo
cual esta moneda sigue siendo legal, inusual o de uso poco frecuente,
claro esta, pero de uso legal al fin . Y siendo ley monetaria vigente.
(Código Civil y Comercial Comentado Tratado exegetico. Dir. General Jorge H.
Alterini. Tomo IV - Dir del tomo Felix A. Trigo Represas-Rubén H. Compagnucci
de Caso Pág. 186. Editorial La Ley).
Dicha moneda es usual y habitual en el ámbito marítimo y
aeronáutico. (Arts. 27, 176, 331, 337, Ley 20.094 y arts. 144, 145, 163 del
Código Aeronáutico ley 17.285)
La C.S.J.N. lejos de cuestionar dicha monedala convalido en
“Carello, Juan M y O C/ Camba Cuá SA, JA, 1997-II-220” y en “Freggiaro,
Roberto M. C/ Aeroclub Luján y otros S/ daños y perjuicios” del 12/9/2006
Cám. Civ y Com Meredes .Bs As (citados en la obra Codigo Aeronautico
Comentado y Anotado – Eduardo Néstor Balian Págs. 358/361. Editorial Astrea)
El Juzgado en lo Civil y Comercial Nº 3 de Avellaneda-Lanús
en autos: “MMI c/ Salvatela SA s/ Daños Y Perj. Incump. Contractual (Exc.
Estado Expte. N°: AL-21344-2021)” lo aplico para establecer un monto de
condena luego de tener probada con ejemplos concretos la
desvalorización de la moneda, diciendo que “es notable y el paso del
tiempo indefectiblemente repercute de manera negativa para quien resulta
ser acreedor de sumas de dinero…”
Lo hizo en base a la equidad que “es un valor moral que
hace a una justicia conmutativa…”
Y tuvo en consideración que “…el art. 7 de la Ley 23.928
resulta acorde y se condice en una economía con índices medios de
estabilidad, pero no en el marco económico actual… donde tales
disposiciones violan derechos constitucionales que en materia de
reparación integral de daños y cuestiones de naturaleza económica se
encuentran protegidos por los artículos 14, 16, 17, 19, 33, 75 incisos 22
23 y concordantes de la Constitución Nacional…”
Teniendo en cuenta que la moneda del argentino oro dejo de
ser acuñada ya fin de que el deudor pueda cumplir con su obligación en
debida forma la misma deberá ser convertida al momento de su efectivo
pago. Para establecer dicho calculo, deberá establecerse el valor en dicha
moneda a la fecha de el/los sucesos que dan origen al reclamo, para
luego establecerse la conversión a pesos de curso legal (o la moneda que
lo reemplace) al momento de su efectivo pago, para lo cual podrán
obtenerse dichos valores de la página:
https://www.bcra.gob.ar/PublicacionesEstadisticas/
Cotizacion_argentino_oro.asp .
Asi obtenemos el siguiente calculo:
Monto de la demanda al 19/10/2015 $ 24.000,00
Valor Argentino oro a Octubre 2015 $ 2.448,56
Conversión A$O 9,80
TOTAL A$O 9,80
Ello sin perjuicio de la adición de un interés conforme lo
solicitado en el proceso de ejecución. Se tenga ello presente y asi se
provea.
e) A todo evento: mantiene reserva sobre actualización
monetaria:
Si V.S. no aplicara como corresponde a nuestro entender, la
conversión de la liquidación en pesos a pesos argentinos oro, creemos
que el precedente “Barrios” citado es (atento la firmeza adquirida y la
conformación de sus votos) doctrina legal por lo que posee fuerza
vinculante indirecta.
Estando la presente causa en trámite, resulta menester su
consideración por cuanto la C.S.J.N. revocó una sentencia en la que no
se había ponderado la necesidad del reajuste numerario de la
indemnización como medio de salvaguardar el alcance real del
resarcimiento, evitando así que prácticamente se desconociese la norma
de fondo y por ende, el menoscabo de la verdad jurídica objetiva y de los
derechos de propiedad y defensa en juicio (CSN, Sent. del 21-07-1981,
‘Capdevilla c/ Municipalidad de la Capital’, Fallos 303:1005)
Lo propio había hecho el máximo tribunal en el caso "Valdez
c/ Citioni", (mayo 3 de 1979, en D.T. 1979-356), donde declaró
inconstitucional una norma que por elegir un mecanismo indexatorio
inadecuado, agraviaba los arts. 14, 14 bis y 17 de la Constitución
Nacional. En ese fallo, la Corte sostuvo, que: “...no puede el proceso
inflacionario tornar inequitativa la remuneración y romper con el equilibrio
que deben guardar las recíprocas contraprestaciones en el contrato de
trabajo...”.
La Corte Suprema ha afirmado en “Intertelefilms SA
c/Provincia del Chubut”, 04.11.1997 que: ”El ajuste por depreciación
monetaria se funda en la inviolabilidad de la propiedad privada”.
La Sala X de la Cámara del Trabajo de la Ciudad de
Córdoba, en “Rodríguez, Pedro E. c/ Carlos A Meana y otro - Demanda",
del 22.03.2002, estableció: El artículo 10 de la Ley 23.928, modificado por
el Art. 4 de la ley 25.561,desde que mantiene derogada -a partir del 1° de
abril de 1991- todas las normas legales o reglamentarias que establecen
o autorizan la indexación por precios, actualización monetaria, variación
de costos o cualquier otra forma de repotenciación de las deudas,
impuestos, precios o tarifas de los bienes, obras o servicios es razonable
en su aplicación con la vigencia de la ley de convertibilidad, ley 23.928.
Derogada la misma en lo vinculado con la paridad cambiaria y generado
un aumento del costo de la vida, según parámetros que serán utilizados
entre otros aspectos para el pago de las obligaciones de los deudores del
sistema financiero, aparece... irrazonable... que... se encuentre
desguarnecido frente al envilecimiento del dinero por una mera
prohibición legal, que a todas luces aparece como irrazonable y violatoria
del derecho de propiedad y de justamente garantizar lo que pretendía la
ley de convertibilidad y sus decretos reglamentarios: "mantener incólume
el contenido de la pretensión".
El Estado debe regular la situación, estableciendo
“correctores flexibles pero objetivos” que –a la postre- permitan delinear
un esquema seguro de contratación y comercialización. La ley de
convertibilidad no fue suficiente; hoy tampoco lo es y requirió de un
instrumento olvidado por muchos operadores jurídicos: la ley de
desindexación Nº 24.283, que hoy está vigente. (Cfme. MOLINA
SANDOVAL, Carlos: “Prohibición de indexar, inflación y una realidad que no
puede ignorarse Articulo del 11 de Diciembre de 2013. Publicado en Revista
Comercio y Justicia https://comercioyjusticia.info/factor/economia/prohibicion-de-
indexar-inflacion-y-una-realidad-que-no-puede-ignorarse/)
El art. 1 de dicha ley 24.283 dice que “cuando deba
actualizarse el valor de una cosa o bien o cualquier otra prestación,
aplicándose índices, estadísticas u otro mecanismo establecido por
acuerdos, normas, sentencias, la liquidación judicial o extrajudicial
resultante no podrá establecer un valor superior al real y actual de dicha
cosa o bien o prestación, al momento del pago.”
Por ultimo es dable destacar la doctrina de la C.S.J.N. en los
autos “Vieytes” citados: “…Que entrando a considerar la sustancia de la
solicitud en cuestión, cabe señalar que en situaciones regidas por los
principios de la justicia conmutativa, como la de autos, ha de estarse a la
igualdad estricta de las prestaciones recíprocas conforme a las
circunstancias del caso, y no siendo el dinero un fin ni un valor en sí
mismo sino un medio que, como denominador común, permite
conmensurar cosas y acciones muy dispares en el intercambio, aquella
igualdad exige que la equivalencia de las prestaciones recíprocas
responda a la realidad de sus valores y al fin de cada una de ellas;
situación equitativa que resulta alterada cuando, como en el caso, por
culpa del deudor moroso la prestación nominal a su cargo ha disminuido
notablemente su valor real, su poder adquisitivo, por influencia de factores
que no dependen del acreedor.
El principio de la reparación justa e integral, admitido pacíficamente por la
jurisprudencia, ha de entenderse en un sentido amplio de compensación
justa e integral de manera que permita mantener la igualdad de las
prestaciones conforme al verdadero valor que en su momento las partes
convinieron y no una numérica equivalencia teórica que ha perdido su
originaria medida representativa; aquel denominador común, a que se
hizo referencia "supra", afectado por progresiva depreciación, ya no
resulta apto en su signo nominal para conmensurar con adecuada
equidad prestaciones cuyo cumplimiento se ha distanciado en el tiempo
por la mora culpable o la conducta ilegítima de quien ha permanecido
deudor. En tal situación, de no actualizarse los créditos conforme a
pautas que equilibren los valores tenidos en cuenta en el origen de la
obligación, no se daría el necesario ajuste que exige la justicia, pues
mientras el derecho del ahora deudor fue plenamente satisfecho, el del
que permaneció acreedor por culpa de aquél se vería correspondido sólo
en infima parte. Si la demandada hubiera cumplido sus obligaciones al
tiempo en que debió hacerlo, no se habría visto compelida al pago de la
deuda actualizada, por lo cual, dependiendo el reajuste de la propia
conducta del deudor, resulta inaceptable cualquier planteo constitucional
(Fallos, t. 275, p. 218; t. 276, p. 40; t. 277, p. 251; t. 280, p. 395). Por
estas consideraciones y las análogas vertidas por esta Corte en las
causas "Camusso Vda. de Marino, Amalia c. Perkins S. A. s/demanda",
de fecha 21 de mayo de 1976 (Rev. La Ley, t. 1976C, p. 72) y "Valdez.
José R. c. Gobierno nacional s/reincorporación", resuelto en la fecha,
corresponde hacer lugar al reajuste del crédito de la actora por
depreciación monetaria.
Lo hasta aquí expuesto supone una innegable situación de
vulnerabilidad del crédito que mantiene mi cliente frente a la devaluación
constante y sostenida de la moneda.
Es por eso que subsidiariamente acompaño (tal como lo
hiciera la propia SCBA en Barrios - fallo cit) una breve comparativa de los
posibles índices para actualizar la presente deuda de valor:
Interés directo Monto total
o de Tasa interés
Capital sobre capital Ajuste Capital final
ulo aplicable
Pasiva digital
6% anual del BIP s/capital
actual al 26/10/15
19/03/11 al 26/10/15 No corresponde del 26/10/15 al $ 147.834,03
a legal $ 24.000
$ 6.635,84 06-06-24
$ 117.198.19
6% s/capital
6% anual del por IPC INDEC al ajustado del
ón 1 al 26/10/2015 $
19/03/11 al 26/10/15 31-01-24 26/10/15 al
DEC $ 24.000 15.357.108,73
$ 6.635,84 $11.752.687,37 06-06-24
$3.419.549,04
6% s/capital
6% anual del ajustado del
ón 2 al 26/10/2015 por CER al 31-01-24 $
19/03/11 al 26/10/15 26/10/15 al
r el CER $ 24.000 $9.318.443,49 12.214.599,93
$ 6.635,84 06-06-24
$2.711.284,11
6% s/ capital
ajustado del
ón 3 6% anual del por RIPTE al 31-01-
al 26/10/2015 26/10/15 al $
según 19/03/11 al 26/10/15 24
$ 24.000 06-06-24 10.451.603,07
TE $ 6.635,84 $ 7.952.794,40
$
2.313.936,34
al 26/10/2015 Valor argentino Oro
6% s/ capital
ón 4 $ 24.000 Capital al
ajustado del
según Valor en 26/10/2015 $ArO 14,87
No corresponde 26/10/15 al
sula argentino Oro ($ $ 24.000 $ 6.588.099,22
06-06-24
no Oro 2.448,56) ($2.448,56)
$ArO 5,07
$ArO 9,80 $ArO 9,80
Se tenga todo ello presente.
f) A todo evento. plantea inconstitucionalidad de la ley
23.928:
Las actuales condiciones inflacionarias impactan
negativamente en el reclamo del cliente, crédito que devendrá reconocido
en este proceso judicial, pues el paso del tiempo puede derivar en la
licuación de la acreencia de mi defendido.
La imposibilidad de indexar los créditos a partir de 1º de abril
de 1991, creo un mecanismo, arbitrario e injusto, en perjuicio del derecho
de propiedad e igualdad que ostenta el actor.
En el choque de intereses entre el patrimonio del acreedor y
del deudor, la ley contraviniendo garantías constitucionales, se define en
beneficio del segundo y en perjuicio del primero. La indexación que se no
se reconoció a partir del 1º de abril de 1991 (pero en particular, desde la
salida de ella con el dictado de la Ley 25.561), beneficio a valores reales y
no nominales de la moneda, al demandado deudor, en juicios en los que
su duración promedio es de entre tres y cuatro años y que la inflación
según la experiencia histórica, puede dejar relativizado el crédito a un
valor irrisorio.
La inflación afecta severamente a las personas de bajos
ingresos fijos y dentro de este segmento a las más desprotegidas. Al
erosionar el poder de compra de sus salarios, haberes previsionales o
ayudas sociales, se les priva la posibilidad de acceso a bienes de
significación vital para la satisfacción de las necesidades más elementales
(v. "Los Principios Rectores sobre la Extrema Pobreza y los Derechos
Humanos", Naciones Unidas. Oficina del Alto Comisionado, el Consejo de
Derechos Humanos por consenso el 27/09/2012,
resolución21/11.https://www.ohchr.org/sites/default/files/Documents/
Publications/OHCHR_ExtremePovertyandHuman Rights_SP.pdf).
Como se ve, el sistema incentiva deliberadamente a no
cumplir o profundizar la morosidad con estrategias que aletarguen el
proceso.
Los jueces (entendemos asi) deben proveer medidas de
protección judicial efectiva (arts. 18, Const. nac. y 15 Const. prov.),
incluso descalificando la norma legal o reglamentaria prohibitiva del
condigno reajuste de lo debido.
Dicho control de constitucionalidad, deben ejercerlo de oficio
todos los órganos judiciales de los países que han ratificado la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, puesto que el control
de convencionalidad, impone que deban descalificarse las normas
internas que se opongan a dicho tratado, dado que resultaría un
contrasentido aceptar que la Constitución Nacional por un lado confiere
rango constitucional a la mencionada Convención (art. 75, inc. 22),
incorpora sus disposiciones al derecho interno y, por consiguiente, habilita
la aplicación de la regla interpretativa -formulada por su intérprete
auténtico, es decir, la Corte Interamericana de Derechos Humanos- que
obliga a los tribunales nacionales a ejercer de oficio el control de
convencionalidad, y se impida, por otro lado, que esos mismos tribunales
ejerzan similar examen con el fin de salvaguardar su supremacía frente a
normas locales de menor rango. (Cfme. C.S.J.N. Fallos 335:2333 del 27 de
noviembre de 2012. Autos: “Rodríguez, Pereyra Jorge Luis y otra c/ Ejército
Argentino s/ daños y perjuicios”. Id SAIJ: FA12000216)
Con otras palabras, para la determinación del capital en
función de la naturaleza de la prestación u obligación debida, será preciso
que vuestro órgano (e incluso, los de segunda instancia) expresen la
cuantía de la condena al valor actual a la fecha de su pronunciamiento.
Con una visión integral, debe realizar adecuaciones en las
relaciones jurídicas concernidas, en cuanto fuere necesario para observar
la incolumidad del crédito (conf. causa "Martínez" (S.C.B.A. causa C.
119.088, de 21-II-2018).
La doctrina legal de la S.C.B.A. ha devenido a esta hora,
inadecuada en cuanto mantiene como única respuesta el reconocimiento
de los intereses calculados a la tasa pasiva sobre el capital de origen.
Debe ser revisada, juntamente con la revisión de la aplicabilidad a
ultranza de la regla del nominalismo.
El bloqueo que surge del art. 7 de la ley 23.928, reformado
por la ley 25.561, hace mella en el equilibrio de las prestaciones y
conduce a la merma de su virtualidad regulatoria, así como a su ineficacia
para orientar las expectativas de los agentes económicos. En tales
circunstancias, el criterio vigente entra en crisis.
Por todo ello, remitiéndose a los fundamentos expuestos y
fallos citados, se solicita la declaración de inconstitucional de la ley 23.928
(arts. 7 y cctes) en cuanto ordena no indexar el crédito reclamado en
autos y se aplique la correspondiente actualización del crédito.
II.- PETITORIO:
Por todo lo expuesto, se solicita:
a) Me tenga por contestado el traslado de la liquidación que
antecede en los términos de ley;
b) Se rechacen la presentación del demandado por
improcedente en estos autos;
c) Se tenga por denunciado el hecho sobreviniente
(sentencia dictada en "Barrios, Héctor Francisco y otra contra Lascano,
Sandra Beatriz y otra s/ Daños y perjuicios" (S.C.B.A. Causa C124096. Fallo
del 18/04/2024);
d) Se haga lugar al planteo de conversión del reclamo de
autos a pesos argentinos oro (a$o ley 1.130);
e) Se tenga presente la reserva de mantener planteo sobre
actualización monetaria (ante la eventualidad de no considerar el reclamo
converso a pesos argentinos oro - a$o ley 1.130);
f) Se decrete la inconstitucionalidad del la Ley 23.928 y
25.561 en cuanto imponen el deber de no actualizar las deudas,
considerando asi a la que es objeto de autos, como deuda de valor y
permitiendo la aplicación del índice respectivo en caso de no considerar el
reclamo converso a pesos argentinos oro (a$o ley 1.130);
g) Se corra traslado a la demandada y al Ministerio Publico
en su caso.
Proveer de conformidad,
SERÁ JUSTICIA.
2.- SE INTIME:
Atento a que el domicilio del actor consignado en estos
autos tal como surge del informe de la Oficial de Justicia interviniente, no
es en donde efectivamente habita, solicito se tenga por notificado al
mismo en el domicilio constituido o en su defecto, en los estrados del
juzgado (cfme. Arts. 40 y 41 C.P.C.C., aplicables a este proceso
analógicamente de acuerdo a lo dispuesto por el art. 63 de la L.P.L.B..A.).
Proveer de Conformidad que,
SERA JUSTICIA