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REPÚBLICA BOLIVARIA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN


COLEGIO MATER SALVATORIS
MARACAIBO

ELIAS Y ELISEO
LOS PROFETAS NO ESCRITORES

Fernández Luccia
López Lohan

Junio 2024
INTRODUCCIÓN

El objeto de este trabajo es hacer una sinopsis o síntesis del relato bíblico sobre
dos de los principales profetas de Israel: Elías y Eliseo.

Ambos vivieron alrededor del siglo IX A.C., en el Reino del Norte de Israel. Tras el
reinado de Salomón el pueblo hebreo se dividirá en dos reinos: El de Israel, al
norte, y el de Judá al sur. El reino de Israel será siempre más permeable a las
influencias de los pueblos vecinos, incluyendo sus dioses y creencias. Judá, por el
contrario, será más fiel hacia los preceptos del Señor.

Es por ello que en este breve trabajo descubriremos como este clima de división
geográfica y política influyó en la importante misión de los profetas de anunciar la
voluntad de Dios para la conversión de este pueblo.
1.- ¿QUIÉNES SON?

Elías fue, según la Biblia, un profeta hebreo. Su nombre significa "Él es Yahveh".
Era oriundo de Tishbé, en la región de Galaad y al oriente del río Jordán.

Eliseo fue un profeta hebreo escogido como el sucesor del profeta Elías durante
el reinado de los reyes Joram, Jehú, Joacaz y Joás.

2.- ¿CUÁL ES SU MISIÓN?

La Misión del Profeta Elías fue la de conducir al Pueblo judío de regreso al


verdadero Dios, ofreciendo en el Monte Carmelo un sacrificio grato a Dios y
desenmascarando así la falsedad de la idolatría de los sacerdotes de Baal.

Por su parte, la Misión del Profeta Eliseo fue la de continuar la misión de Elías
como profeta de Dios en Israel durante 50 años. Antes de que Elías fuera
arrebatado al cielo, Eliseo le pidió que le dejara en herencia parte de su espíritu
para poder ser su sucesor.

3.- ÉPOCA Y LUGAR DONDE APARECEN LOS PROFETAS

Vivieron alrededor del siglo IX A.C. en el Reino de Israel o Reino del Norte

4.- ¿EN QUE LIBROS DE LA BIBLIA APARECEN?

Sus vidas se describen en los relatos hebreos en el 1er y 2do Libro de los Reyes

5.- NARRA SUS HISTORIAS

Su vida se describe en los relatos hebreos en 1el Libro de Reyes capítulos 17 al


21 y 2do Libro de los Reyes capítulos 1 al 2.

Según el relato bíblico en el Libro de los Reyes, Elías nació en Tisbé de Galaad.
Un dia, viendo las maldades e idolatrías cometidas por el rey Ajab, dijo: «Vive
Yahveh, Dios de Israel, a quien sirvo. No habrá estos años rocío ni lluvia más que
cuando mi boca lo diga.»

Entonces el mismo Dios mandó a Elis a salir de ahí y esconderse cerca del rio
Jordán diciéndole q bebiera del torrente y que Él encargaría a los cuervos que lo
alimentaran, y así lo hizo hasta que se secó el torrente debido a la sequía por falta
de lluvia.
Entonces fue enviado por Dios a Sarepta de Sidón donde una viuda le dio de
comer aun sin tener nada y en agradecimiento Elías hizo un milagro y no se acabó
la harina en la tinaja ni se agotó el aceite en la orza, según la palabra que Yahveh
había dicho por boca de Elías. Luego de esto el hijo de la viuda enfermó y Elías,
orando a Dios, hizo que volviera a la vida.

Pasado mucho tiempo, fue dirigida la palabra de Yahveh a Elías, al tercer año,
diciendo: «Vete a presentarte a Ajab, pues voy a hacer llover sobre la superficie de
la tierra.»

Abdías fue al encuentro de Ajab y le avisó, y Ajab partió al encuentro de Elías.


Cuando Ajab vio a Elías lo insultaba, pero Elías le echó en cara su idolatría y el
haber abandonado al único y verdadero Dios.

Elías propuso al rey Ajab reunir a todos los sacerdotes del falso dios Baal, para
poner a prueba cual era el verdadero Dios. Aquel que hiciera bajar fuego del cielo
y consumir la ofrenda demostraría que era el verdadero Dios. Primero los
sacerdotes del falso dios Baal hicieron danzas y cantos invocando a su ídolo. Pero
nada sucedió. Luego Elías preparó su ofrenda, la empapó de agua e invocó a
Yahveh Dios, quien envió fuego desde el cielo y lo consumió todo. Así todos se
convencieron y alabaron a Yahveh como único Dios. Después de esto cayó
nuevamente lluvia sobre la tierra terminando la sequía.

Jezabel, la esposa del rey se enfureció y amenazó a Elías, por lo que él tuvo
miedo y se fue de ahí para ocultarse. Caminó 40 días por el desierto. Se molestó
con Yahveh Dios y se deseó la muerte, pero el Señor le daba de comer y además
le permitió sentir su presencia en la brisa suave. Con todo esto retomó Elías su
misión, pues Dios le ordenó que ungiera a Jehú como rey de Israel y a Eliseo
como el profeta que lo reemplazaría.

Fue y ungió a Jehú como nuevo rey de Israel. Partió de allí y encontró a Eliseo,
hijo de Safat, que estaba arando. Había delante de él doce yuntas y él estaba con
la duodécima. Pasó Elías y le echó su manto encima.

Eliseo, comprendiendo el gesto, abandonó los bueyes, corrió tras de Elías y le


dijo: «Déjame ir a besar a mi padre y a mi madre y te seguiré.» Le respondió Elías:
“Anda, vuélvete, y has según dices”.

Volvió atrás Eliseo, tomó el par de bueyes y los sacrificó, asó su carne con el yugo
de los bueyes y dio a sus gentes, que comieron. Después se levantó, se fue tras
de Elías y entró a su servicio.
Después de esto sucedió que Ajab rey de Israel y su esposa quiseron adueñarse
de la viña de Nabot, y como él se resisitiera hicieron que lo asesinara. Elias
entonces denunció la conducta del rey, profetizando de qué manera moriría y
como el mal recaería sobre él y toda su familia.

Cuando Ajab oyó estas palabras desgarró sus vestidos y se puso un sayal sobre
su carne, ayunó y se acostó con el sayal puesto; y caminaba a paso lento. Dijo
entonces Yahveh Dios: “Por haberse humillado en mi presencia, no traeré el mal
en vida suya; en vida de su hijo traeré el mal sobre su casa”

Posteriormente Elías y Eliseo se pusieron en camino a Guilgal. Elías le insistía a


Eliseo que se quedara, pero Eliseo se negó a apartarse de su lado, y siguió
caminando con él.

Cuando hubieron pasado el rio Jordán, dijo Elías a Eliseo: «Pídeme lo que quieras
que haga por ti antes de ser arrebatado de tu lado.» Dijo Eliseo: «Que tenga dos
partes de tu espíritu.»

Elías le dijo: «Pides una cosa difícil; si alcanzas a verme cuando sea llevado de tu
lado, lo tendrás; si no, no lo tendrás.»

Iban caminando mientras hablaban, cuando un carro de fuego con caballos de


fuego se interpuso entre ellos; y Elías subió al cielo en el torbellino.

Eliseo le veía y clamaba: « ¡Padre mío, padre mío! ¡Carro y caballos de Israel!
¡Auriga suyo!» Y no le vio más. Asió sus vestidos y los desgarró en dos.
Tomó el manto que se le había caído a Elías y se volvió, parándose en la orilla del
Jordán. Tomó el manto de Elías y golpeó las aguas diciendo: ¿Dónde está
Yahveh, el Dios de Elías?» Golpeó las aguas, que se dividieron de un lado y de
otro, y pasó Eliseo.

Habiéndole visto la comunidad de los profetas que estaban enfrente, dijeron: «El
espíritu de Elías reposa sobre Eliseo.» Fueron a su encuentro, se postraron ante
él en tierra.

Comienza entonces la vida y misión de Eliseo quien hizo muchos milagros,


ayudando a las viudas a multiplicar sus alimentos y a los enfermos a recobrar la
salud. Todo esto sin dejar de anunciar el mensaje que Yahveh Dios le daba. El
primer milagro de Eliseo fue las aguas del manantial de Jericó. Multiplico el aceite
en la casa de una viuda y resucita a un niño sunamita fallecido de una enfermedad
a la cabeza.
Uno de los milagros más memorables de su misión profética fue la curación de
Naamán el sirio, jefe del ejército del rey de Aran, quien padecía de lepra. Eliseo
mando que se bañara 7 veces en el rio Jordán, y él obedeciendo lo hizo y quedo
sanado.

Finalmente, en su lecho de muerte predijo que el rey Joás derrotaría tres veces a
los bravos sirios.
CONCLUSION

La lección que podemos aprender de Elías y Eliseo es la siguiente: Éxito es


fielmente seguir el rol que Dios tiene para ti—y no cómo te comparas con otros o
cuánta apreciación puedas obtener de los demás

Eliseo nos muestra que para ir hacia nuestro destino, tenemos que salir de nuestra
zona de confort. ¿Su compromiso con Dios es inmediato y completo como el de
Eliseo?

Damos gracias al Señor por los modelos del pasado y del presente de los cuales
podemos aprender. Sin embargo, los mayores modelos y los mejores maestros no
pueden quitar el pecado, ni limpiar nuestros corazones. Esa obra ha sido
designada exclusivamente al Señor Jesucristo. “Y dará a luz un hijo, y le pondrás
por nombre Jesús, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados”

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