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Apocalipsis 13, Las Potencias de Los Cielos y Los Siete Sell

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Autor: x 1

APOCALIPSIS 13, LAS POTENCIAS DEL CIELO


Y LOS SIETE SELLOS

El orden cronológico de las visiones apocalípticas.


Por visión apocalíptica llamemos a cualquier visión que aparezca en los
libros así llamados apocalípticos, los cuales son, mayormente, los de Daniel y
Apocalipsis.
En cada una de las visiones que encontramos en dichos libros siempre ocurre
que siguen un orden cronológico desde el pasado hacia el futuro, siempre hacia
adelante en el tiempo. Dentro de una misma visión, nunca se produce un retroceso
en el tiempo de un versículo al siguiente, siempre avanza hacia el futuro a medida
que avanza el texto.
Por ejemplo, esto lo podemos notar fácilmente en el libro de Daniel, que es
más simple que el Apocalipsis. Si tomamos por ejemplo la primera visión del libro,
la del capítulo 2, donde hallamos la imagen del sueño de Nabucodonosor, con su
cabeza de oro, pecho de plata, vientre de bronce, piernas de hierro y pies de hierro y
barro cocido, encontraremos que sigue un orden cronológico estricto, comenzando
con el primer imperio mundial, el de Babilonia, simbolizado por la cabeza de oro, y
así los imperios subsiguientes, hasta llegar a la intervención de la piedra que golpea a
la imagen en sus pies, poniendo fin a los reinos de este mundo y dando comienzo al
eterno reino de Dios. Es fácil de notar que sigue un orden de avance en el tiempo. La
visión abarca los versículos de Daniel 2: 31 – 35, y luego viene la interpretación. En
los versículos 31 al 35 notamos que siempre se produce un avance en el tiempo,
jamás la visión retrocede en el tiempo. Lo mismo podemos decir de la interpretación,
en los versículos 37 al 45. El orden es simple, la cronología es lineal, siempre avanza
en el mismo sentido.
Podemos asimismo analizar todas las otras visiones proféticas del libro de
Daniel que relatan la sucesión de la historia (capítulos 7, 8, 9, 11 y 12) y llegaremos a
la misma conclusión: siempre van hacia delante en el tiempo. Nunca retroceden
mientras se está en una misma visión. Al cambiar la visión, lógicamente que
retrocedemos en el tiempo, porque a veces se vuelve al punto de partida, pero la regla
estricta es que una misma visión jamás retrocede en el tiempo en el orden lógico de
los versículos.
Autor: x 2

Lo mismo ocurre en el libro del Apocalipsis. A pesar de ser éste un libro


mucho más complicado, respeta el mismo principio del orden cronológico dentro de
una misma visión. Podemos corroborarlo con relativa facilidad en la visión de las
siete iglesias de Apoc. caps. 2 y 3; en los siete sellos de Apoc. 6, 7 y 8; en las
trompetas de Apoc 9, y así sucesivamente. Debemos siempre tener en cuenta un
detalle muy importante: cuándo termina una visión y comienza otra. Porque allí sí se
produce un retroceso en el tiempo. La regla, tanto para el libro de Daniel como para
el de Apocalipsis, es sencilla: dentro de una misma visión el tiempo siempre
adelanta, sólo se produce un retroceso cuando comienza una nueva visión.

El orden cronológico en el capítulo 13 de Apocalipsis.

Para estudiar Apocalipsis 13 debemos primeramente identificar cuántas


visiones contiene, y dónde comienzan y terminan. Notamos que la primera visión se
halla en los versículos 1 – 10, y que aparece una segunda visión del 11 – 18. Leamos
el capítulo completo, observando detenidamente cuando la escena cambia, y se
describe la aparición de otra bestia, comenzando otra visión (vs. 11).
Apocalipsis 13:

1. Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía
siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un
nombre blasfemo.
2 Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su
boca como boca de león. Y el dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad.
3 Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue
sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia,
4 y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la
bestia, diciendo: ¿Quién como la bestia, y quién podrá luchar contra ella?
5 También se le dio boca que hablaba grandes cosas y blasfemias; y se le dio
autoridad para actuar cuarenta y dos meses.
6 Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar de su nombre,
de su tabernáculo, y de los que moran en el cielo.
7 Y se le permitió hacer guerra contra los santos, y vencerlos. También se le
dio autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación.
8 Y la adoraron todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban
escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el principio del
mundo.
9 Si alguno tiene oído, oiga.
Autor: x 3

10 Si alguno lleva en cautividad, va en cautividad; si alguno mata a espada, a


espada debe ser muerto. Aquí está la paciencia y la fe de los santos.
(Aquí termina la primera visión, y comienza la siguiente):
11 Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos
semejantes a los de un cordero, pero hablaba como dragón.
12 Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace
que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal
fue sanada.
13 También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender
fuego del cielo a la tierra delante de los hombres.
14 Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha
permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que
le hagan imagen a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió.
15 Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la
imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase.
16 Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos,
se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente;
17 y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o
el nombre de la bestia, o el número de su nombre.
18 Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la
bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis.
Ahora bien, teniendo en cuenta siempre este importante y sencillo principio del orden
cronológico de una misma visión, analicemos las dos visiones de Apocalipsis 13.

La primera visión
(Apocalipsis 13: 1 – 10.)

1. Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que
tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus
cabezas, un nombre blasfemo.
2 Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso,
y su boca como boca de león. Y el dragón le dio su poder y su trono, y grande
autoridad.
Veamos lo que el espíritu de profecía dice al respecto:

“En el capítulo 13 (versículos 1-10, V.M.), se describe otra bestia, "parecida


a un leopardo," a la cual el dragón dio "su poder y su trono, y grande autoridad." Este
símbolo, como lo han creído la mayoría de los protestantes, representa al papado, el
Autor: x 4

cual heredó el poder y la autoridad del antiguo Imperio Romano. . . Esta profecía,
que es casi la misma que la descripción del cuerno pequeño en Daniel 7, se refiere
sin duda al papado.” CS 492.
3 Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal
fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia,
4 y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron
a la bestia, diciendo: ¿Quién como la bestia, y quién podrá luchar contra ella?

¿Qué significa la herida mortal, y cuándo le fue ocasionada a la bestia?

“La herida mortal que le fue ocasionada se refiere a la caída del papado en
1798.” CS 636

Allí se cumplieron los 1.260 años de la primera supremacía papal, período


varias veces citado en la Biblia (Daniel 7: 25; Apoc 12: 6; Apoc 12: 14).

“Este período, como fue indicado en capítulos anteriores, empezó con la


supremacía del papado, en el año 538 de J. C., y terminó en 1798. Entonces, el papa
fue hecho prisionero por el ejército francés, el poder papal recibió su golpe mortal y
quedó cumplida la predicción: "Si alguno lleva en cautiverio, al cautiverio irá." CS
492.
De modo que al hablar de la herida mortal, nos ubicamos en el tiempo al fin
del período de los 1.260 años, es decir, en 1798. Lo que se describe a continuación,
siguiendo el orden cronológico, debe ser posterior a ese año. Se habla del sanamiento
de la herida mortal, y de una acción muy especial que la bestia haría a partir de ese
sanamiento, descripta en los versículos siguientes. La pregunta que nos interesa
ahora es ¿cuándo se produce el sanamientode la herida, de manera que pueda el
papado hacer su obra aquí descripta? Veamos la respuesta del comentario bíblico
adventista y de EGW:

Fue sanada.
“En los años que transcurrieron después de la Revolución Francesa se
produjo un reavivamiento gradual del sistema papal. El papa sufrió un nuevo golpe
en 1870, cuando le fueron quitados los Estados papales. Un suceso importante
aconteció en 1929 cuando, por el tratado de Letrán, el poder temporal le fue
restaurado al papa. Recibió entonces el gobierno de la Ciudad del Vaticano, una
sección de la ciudad de Roma, que ocupa una extensión de unas 44 hectáreas. Sin
embargo, el profeta contempla que hay una restauración mucho mayor. Vio la herida
completamente curada, como lo insinúa el texto griego. Juan vio, además, que
Autor: x 5

después de la curación "todos los moradores de la tierra" -excepto unos pocos fieles-
adoraron a la bestia (vers. 8; cf. CS 636). Esta adoración aún se halla en el futuro.
Aunque el papado recibe el homenaje de ciertos sectores, enormes conjuntos
humanos no le rinden pleitesía. Pero esto cambiará. La bestia del vers. 11 "hace
que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal
fue sanada" (vers. 12).” 7CBA, p. 832.
Ahora veamos lo que dice el Conflicto de los siglos:

“Después de eso, dice el profeta, "su herida mortal fue sanada; y toda la tierra
maravillóse, yendo en pos de la bestia." San Pablo dice claramente que el hombre de
pecado subsistirá hasta el segundo advenimiento. (2 Tesalonicenses 2:8.) Proseguirá
su obra de engaño hasta el mismo fin del tiempo, y el revelador declara refiriéndose
también al papado: "Todos los que moran en la tierra le adoraron, cuyos nombres no
están escritos en el libro de la vida." (Apocalipsis 13: 8). Tanto en el Viejo como en
el Nuevo Mundo se le tributará homenaje al papado por medio del honor que se
conferirá a la institución del domingo, la cual descansa únicamente sobre la
autoridad de la iglesia romana.” CS 636

Es evidente, entonces, que si bien la herida mortal ha estado sanándose


progresivamente desde hace muchos años, su sanamiento total aún está en el futuro,
y se producirá cuando se dicten las leyes dominicales que restaurarán su supremacía
y su obra persecutoria. De manera que podemos afirmar, del simple principio de que
una visión no retrocede en el tiempo, que todos los versículos que hablan de la obra
del papado al sanarse su herida, están en el futuro, esto es, a partir del versículo 3 en
adelante, hasta el final de la visión, el versículo 10.
Continuemos con los versículos 5 al 8:

5 También se le dio boca que hablaba grandes cosas y blasfemias; y se le


dio autoridad para actuar cuarenta y dos meses.
6 Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar de su
nombre, de su tabernáculo, y de los que moran en el cielo.
7 Y se le permitió hacer guerra contra los santos, y vencerlos. También
se le dio autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación.
8 Y la adoraron todos los moradores de la tierra cuyos nombres no
estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el
principio del mundo.
Aquí notamos varias cosas:

1. El tiempo de esta segunda supremacía: 42 meses. (v.5)


Autor: x 6

2. Hablará blasfemias: su doctrina y la imposición forzosa de la


santificación del falso día de reposo, el domingo. (v.6)
3. Una gran persecución contra el pueblo de Dios. (v. 7).
4. Pero todos los que sigan a este poder se perderán (v. 8).
Todo esto está en el futuro. Comentando desde el versículo 4 al 17 señala
EGW:
"Es del interés de todos entender que es la marca de la bestia, y cómo
podemos escapar de la terrible amenaza de Dios. ¿Por qué los hombres no están
interesados por saber lo que constituye la marca de la bestia? Ex. 31:12-17. La
cuestión del sábado será el problema en el gran conflicto en el que todo el mundo
tendrá una parte. Apoc. 13: 4 -17.” Review and Herald, 27 de Abril de 1911.
Hay por lo menos otra cita que sostiene que Apoc 13: 4 – 7 se halla en el
futuro, de la cual daremos sólo la referencia: “UNPUBLISHED MANUSCRIPTS”,
Volumen 5, pág. 175.
Acerca de la persecución futura de la segunda supremacía papal, dice EGW:

“A los que obedezcan con toda conciencia a la Palabra de Dios se les tratará
como rebeldes. Cegados por Satanás, padres y madres habrá que serán duros y
severos para con sus hijos creyentes; los patrones o patronas oprimirán a los criados
que observen los mandamientos. Los lazos del cariño se aflojarán; se desheredará y
se expulsará de la casa a los hijos. Se cumplirán a la letra las palabras de San Pablo:
"Todos los que quieren vivir píamente en Cristo Jesús, padecerán persecución." (2ª
Timoteo 3: 12). Cuando los defensores de la verdad se nieguen a honrar el domingo,
unos serán echados en la cárcel, otros serán desterrados y otros aún tratados como
esclavos. Ante la razón humana todo esto parece ahora imposible; pero a medida que
el espíritu refrenador de Dios se retire de los hombres y éstos sean dominados por
Satanás, que aborrece los principios divinos, se verán cosas muy extrañas.
Muy cruel puede ser el corazón humano cuando no está animado del temor y del
amor de Dios.” CS 665, 666.

“Los dos ejércitos se mantendrán distintos y separados, y esta distinción será


tan señalada que muchos que se convenzan de la verdad se pasarán al lado del pueblo
que guarda los mandamientos de Dios. Cuando esta gran obra se lleve a cabo en la
batalla, antes del conflicto final, muchos serán encarcelados, muchos, para salvar sus
vidas, huirán tanto de las grandes ciudades como de las poblaciones pequeñas, y
muchos serán mártires por causa de Cristo al permanecer firmes en favor de la
verdad...” 3MS 454
Si todo esto está en el futuro, entonces no debemos pasar por alto el versículo
5, que nos habla del tiempo que durará esa persecución: 42 meses, es decir, 1.260
Autor: x 7

días literales, días de 24 hs cada uno. Es obvio que no pueden ser días proféticos,
pues sino tendríamos que esperar una segunda supremacía papal de 1.260 años, lo
cual es imposible, ya que el mundo simplemente no puede tantos años. Además, no
se cumplirían los seis mil años de duración del pecado sobre la tierra, de los cuales
habla claramente EGW CS 572

Aquí debemos detenernos a considerar una objeción: algunos pueden señalar


que esos 42 meses se refieren al pasado, a la primera supremacía de los 1.260 años
pasados. Pero vimos ya dos evidencias de que están en el futuro, en primer lugar, la
ubicación del versículo 5, posterior al sanamiento de la herida, y en segundo lugar,
que Elena de White ubica Apoc 13: 4 – 17 completamente en el futuro. Pero
continuando con la objeción, también es cierto que EGW dice que esos 42 meses son
los mismos 1.260 años de la primera supremacía. Veamos una cita al respecto:

“Los "cuarenta y dos meses" y los "mil doscientos sesenta días" designan el
mismo plazo, o sea el tiempo durante el cual la iglesia de Cristo iba a sufrir bajo la
opresión de Roma. Los 1260 años del dominio temporal del papa comenzaron en el
año 538 de J. C. y debían terminar en 1798” CS 309.

¿Qué ocurre entonces aquí? ¿Hay contradicción en el Espíritu de profecía?


¿Falla aquí la regla del avance del tiempo en una misma visión? Nada de eso. Es
sencillo: a veces una profecía tiene doble aplicación, como en el caso de Apocalipsis
13, y en ese caso debemos hablar de una aplicación principal, y de otra secundaria.
La aplicación principal involucra a todos los versículos de la visión, y la
secundaria, sólo a algunos. Evidentemente Apocalipsis 13 se refiere, primariamente,
al futuro, a la segunda supremacía papal, y secundariamente, al pasado, a los 1.260
años de la primera supremacía. Evidencia de eso es que algunos versículos de la
visión no pueden jamás aplicarse al pasado, sino sólo al futuro. En el versículo 7 se
habla de una autoridad sobre “toda tribu, pueblo, lengua y nación”, cosa que no
ocurrió en el pasado, ya que hubo amplios sectores del mundo donde el papado no
tuvo alcance (la América precolombina, la lejana China, etc.) Esto sólo se aplica al
futuro. También el versículo 8, donde dice que “la adoraron todos los moradores de
la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue
inmolado desde el principio del mundo.” Sólo en el conflicto final será cierto que
todos los que sigan al poder de Roma se perderán, eso es lo mismo que dice el
mensaje del tercer ángel a causa de la marca de la bestia: Apoc 14: 9, 10: “Y el tercer
ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y
recibe la marca en su frente o en su mano, él también beberá del vino de la ira de
Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego
y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero”. Si aplicáramos el versículo de
Autor: x 8

Apoc 13: 8 al pasado, entonces deberíamos concluir que todos los católicos que
vivieron entre el 538 y el 1.798 se han perdido irremisiblemente, lo cual sería
absurdo.

Lo mismo ocurre, por ejemplo, en Mateo cap. 24. Primariamente se aplica a


la segunda venida de Cristo, y secundariamente a la destrucción de Jerusalén. Es fácil
de ver que toda la profecía de Mateo 24 tiene aplicación a la segunda venida de
Cristo, pero no todos los versículos se pueden aplicar a la destrucción de Jerusalén,
por ejemplo, el versículo 14, el 21, el 30, y varios más.

Concluimos, entones, que habrá una segunda supremacía papal, que será un
tiempo muy difícil para los hijos de Dios, y que la misma durará 42 meses, es decir,
1.260 días literales.

Terminemos esta primera visión con los versículos 9 y 10:

9 Si alguno tiene oído, oiga.


10 Si alguno lleva en cautividad, va en cautividad; si alguno mata a
espada, a espada debe ser muerto. Aquí está la paciencia y la fe de los santos.

Esto se refiere, sin duda al momento en que el poder del papado llegará a su
fin y destrucción, lo cual se describe en varios textos, por ejemplo Apoc. 17: 15 – 17;
Apoc 18: 6 – 24, y otros. Elena de White comenta al respecto, haciendo notorio el
cumplimiento literal de la muerte por espadas:

“Los hombres ven que fueron engañados. Se acusan unos a otros de haberse
arrastrado mutuamente a la destrucción; pero todos concuerdan para abrumar a los
ministros con la más amarga condenación. Los pastores infieles profetizaron cosas
lisonjeras; indujeron a sus oyentes a menospreciar la ley de Dios y a perseguir a los
que querían santificarla. Ahora, en su desesperación, estos maestros confiesan ante el
mundo su obra de engaño. Las multitudes se llenan de furor. "¡Estamos perdidos! -
exclaman- y vosotros sois causa de nuestra perdición"; y se vuelven contra los falsos
pastores. Precisamente aquellos que más los admiraban en otros tiempos
pronunciarán contra ellos las más terribles maldiciones. Las manos mismas que los
coronaron con laureles se levantarán para aniquilarlos. Las espadas que debían
servir para destruir al pueblo de Dios se emplean ahora para matar a sus
enemigos. Por todas partes hay luchas y derramamiento de sangre.” CS 713, 714.
Autor: x 9

La segunda visión del capítulo 13.


(Apocalipsis 13:11-18.)

11 Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a los
de un cordero, pero hablaba como dragón.
12 Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la
tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue
sanada.
13 También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del
cielo a la tierra delante de los hombres.
14 Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer
en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen
a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió.
15 Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen
hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase.
16 Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les
pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente;
17 y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el
nombre de la bestia, o el número de su nombre.
18 Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia,
pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis.
En cuanto a esta segunda visión del capítulo 13 del Apocalipsis, su
interpretación no ofrece dificultades, ya que ha sido explicado con todo detalle por el
Espíritu de profecía, y no parece tener más que una sola aplicación.

Sabemos que cuando se produce un cambio de visión, generalmente se


repasa el período de tiempo de la anterior visión, de manera que se vuelve al punto de
partida, o a un punto cercano, para resaltar algunos detalles importantes que añaden
conoci-miento a la profecía, y así van completando el cuadro. ¿Cuál, entonces, será el
punto de partida para esta segunda visión del capítulo 13? La misma de la primera
visión: 1798, cuando se infringe a la primera bestia la herida mortal. Este año es a la
vez el punto final de la segunda aplicación de la primera visión, de modo de
producirse una continuidad cronológica entre la aplicación secundaria de la primera
visión, y la aplicación única de la segunda visión de Apoc 13. Esto es plenamente
confirmado por el Espíritu de profecía:
Autor: x 10

“¿Cuál era en 1798 la nación del nuevo mundo cuyo poder estuviera
entonces desarrollándose, de modo que se anunciara como nación fuerte y grande,
capaz de llamar la atención del mundo? La aplicación del símbolo no admite duda
alguna. Una nación, y sólo una, responde a los datos y rasgos característicos de esta
profecía; no hay duda de que se trata aquí de los Estados Unidos de Norteamérica.
Una y otra vez el pensamiento y los términos del autor sagrado han sido empleados
inconscientemen-te por los oradores e historiadores al describir el nacimiento y
crecimiento de esta nación.El profeta vio que la bestia "subía de la tierra"; y, según
los traductores, la palabra dada aquí por "subía" significa literalmente "crecía o
brotaba como una planta." Y, como ya lo vimos, la nación debe nacer en territorio
hasta entonces desocupado.” CS 493

El resto de la visión está completamente explicada en el mismo capítulo del


Conflicto de los Siglos, y sabemos que se refiere a la imposición de la ley dominical
por parte de los Estados Unidos en apoyo al papado, con la consiguiente persecución
mediante leyes restrictivas al comercio de los que no reciban la marca de la bestia, y
la muerte como último recurso para los que se mantengan fieles de todas formas.
Podemos leer esto con todo detalle en las páginas 492 – 503 del mismo libro.

LAS POTENCIAS DEL CIELO


Consideraremos ahora la relación entre las señales celestiales, la tribulación
de la persecución papal y el sexto sello de Apocalipsis 6.
Tengamos en cuenta lo que antes hallamos, de que la supremacía papal se
repite, con la consiguiente persecución (gran tribulación), que en el primer caso fue
de 1.260 años, y en la segunda persecución será de 1.260 días literales.
Veamos ahora la relación de las señales celestiales con la persecución papal.
Por señales celestiales, digamos primeramente que llamaremos así a la sucesión de
cuatro eventos sobrenaturales que aparecen como señal de la segunda venida de
Cristo. Las podemos leer en el sexto sello (Apoc 6: 12 y 13), en el discurso profético
de Jesús (S. Mateo 24: 29; S.Marcos 13: 24 y 25; S. Lucas 21: 25), y en algunos de
los profetas (Isaías 13: 10; Ezequiel 32: 7; Joel 2: 31). Siempre se relacionan con la
segunda venida del Señor Jesucristo. Y tanto en Apocalipsis como en el discurso
profético de Jesús, las señales celestiales vienen después de la persecución papal.
Veamos los textos:

Apoc 6: 9 - 17:
Autor: x 11

9 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido
muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían.
10 Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero,
no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra?
11 Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un
poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos y sus
hermanos, que también habían de ser muertos como ellos.
12 Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto; y el sol se
puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre;
13 y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus
higos cuando es sacudida por un fuerte viento.
14 Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y
toda isla se removió de su lugar.
15 Y los reyes de la tierra, y los grandes, los ricos, los capitanes, los poderosos, y
todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los
montes;
16 y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del
rostro de aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero;
17 porque el gran día de su ira ha llegado; ¿y quién podrá sostenerse en pie?
Notemos aquí la ubicación de las cuatros señales cósmicas (terremoto; sol
negro, luna como sangre y las estrellas que caen del cielo). Ocurren inmediatamente
después del clamor simbólico de los sacrificados en una gran persecución (los 1.260
años de la primera supremacía papal), y antes de la segunda venida de Cristo.
Veamos el texto del discurso profético de Jesús:

S. Marcos 13: 24 y 25:


“Pero en aquellos días, después de aquella tribulación, el sol se
oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las
potencias que están en los cielos serán conmovidas.”

Acerca de la tribulación mencionada, ya Jesús había dicho de ella en el


versículo 19: “porque aquellos días serán de tribulación, cual nunca ha habido de
la creación que Dios creó, hasta este tiempo, ni la habrá”.

La misma idea se expresa en S. Mateo 24: 21, 29 y 30.

Encontramos siempre la misma sucesión de eventos:

1º Gran tribulación (persecución papal).


2º Las señales cósmicas.
Autor: x 12

3º La Segunda Venida de Cristo.

Al respecto confirma el espíritu de profecía:

“En su conversación con los discípulos en el Monte de los Olivos, después de


describir el largo período de prueba por el que debía pasar la iglesia, es decir, los mil
doscientos sesenta años de la persecución papal, acerca de los cuales había prometido
que la tribulación sería acortada, el Salvador mencionó en las siguientes palabras
ciertos acontecimientos que debían preceder su venida y fijó además el tiempo en que
se realizaría el primero de éstos: "En aquellos días, después de aquella aflicción, el
sol se obscurecerá, y la luna no dará su resplandor." (S. Marcos 13: 24). Los 1260
días, o años, terminaron en 1798. La persecución había concluido casi por completo
desde hacía casi un cuarto de siglo. Después de esta persecución, según las palabras
de Cristo, el sol debía obscurecerse. Pues bien, el 19 de mayo de 1780 se cumplió
esta profecía.” CS 351.

Aquí notamos que Elena de White hae referencia al cumplimiento de estas


señales después de la primera persecución papal, una verdadera y prolongada
tribulación. Sin embargo, éste es un cumplimiento secundario, ya que el
cumplimiento primario está en el futuro, como está en el futuro la peor persecución
de la historia, como lo señala Jesús en S. Marcos 13: 19: “porque aquellos días serán
de tribulación, cual nunca ha habido de la creación que Dios creó,. . . ni la habrá”

Es evidente que se trata, en primera aplicación, a la persecución final, no de


la primera, ya que Jesús habla claramente que no habrá otra, ésta será la última, y que
será la peor de todas. También EGW confirma esto:

“Las persecuciones que sufrieron los protestantes de parte del romanismo, y


por las cuales la religión de Jesucristo casi llegó a ser aniquilada, serán sobrepasadas
cuando se unan el protestantismo y el papado.” Maranata, p. 192
.
“Quienes vivan en los días finales. . . sabrán lo que significa ser perseguidos
por causa de la verdad.” Maranata, p. 193.

Muchos hijos de Dios darán su vida por la verdad en la próxima persecución:


Autor: x 13

“Cuando esté por producirse esta obra grandiosa en la batalla, antes del
último gran conflicto, muchos serán encarcelados, muchos huirán de las ciudades y
los pueblos para salvar su vida, y muchos otros soportarán el martirio por amor de
Cristo al levantarse en defensa de la verdad.” Maranata, 197; 3MS 454. Eventos de
los últimos días, p. 151

Jesús ya lo había dicho:

“Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis aborrecidos


de todas las gentes por causa de mi nombre” S. Mateo 24: 9
Concluyendo, nos queda claro que se repiten, al igual que en la primera
supremacía papal, la sucesión de los eventos siguientes:

1. La supremacía papal, con persecuciones y muertes de fieles.


2. Las señales celestiales. Ya no se verán sólo en los EEUU, sino que serán
para que todo el mundo lo pueda observar. (S. Mateo 24: 30 y 31)
Que finalmente desembocan en un único y glorioso suceso: la Segunda
Venida de nuestro amado Salvador Jesucristo.

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La cuestión de los siete sellos.


Aquí surge una cuestión muy importante. Si la sucesión de la persecución y
las señales celestiales se repiten, ¿no tendrán que repetirse el quinto y el sexto sello,
los cuales, como ya vimos, señalan estos eventos? ¿Y no tendrán que repetirse
también el primero, segundo, tercer y cuarto sellos? Los siete sellos, que comienzan
en el capítulo 6 del Apocalipsis, describen diferentes etapas por las que atraviesa la
iglesia de Cristo hasta la consumación final. Repasemos la interpretación tradicional
que de los siete sellos los adventistas hemos tenido, que creo correcta, y que nos
servirá para encontrar un significado más profundo en los siete sellos, una segunda y
asombrosa aplicación, tal vez la aplicación más primaria, que se aplica
exclusivamente al tiempo el fin. Pero repasemos primero la aplicación de los siete
sellos a los dos mil años de historia de la iglesia cristiana

a) El primer sello: Apoc. 6: 1, 2:

“Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro
seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira. Y miré, y he aquí un
caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y
salió venciendo, y para vencer.”
Autor: x 14

Citando al Comentario Bíblica Adventista, “Los adventistas del séptimo día


en general han sostenido que el primer caballo representa a la iglesia de la era
apostólica (31 - 100 d. C.).” CBA t.7, p. 792. El caballo blanco bien puede
representar la pureza de la misma, en doctrina y práctica, y el jinete vencedor, las
grandes victorias que dicha iglesia conquistó, a causa del poder divino que la
acompañaba.
b) El segundo sello: Apoc 6: 3, 4:

“Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente, que decía:


Ven y mira. Y salió otro caballo, bermejo; y al que lo montaba le fue dado poder
de quitar de la tierra la paz, y que se matasen unos a otros; y se le dio una gran
espada.”
Nuevamente podemos citar al Comentario Bíblica Adventista: “El
simbolismo del segundo jinete describe muy bien las condiciones bajo las cuales
vivió la iglesia desde el año 100 hasta el 313 d. C., poco más o menos (cf. com. cap.
2:10). Las violentas persecuciones que sufrió a manos de los emperadores romanos
están simbolizadas por el jinete que a una "gran espada" y que tiene el poder de
"quitar de la tierra la paz". CBA, t. 7, p. 792
c) El tercer sello: Apoc 6: 5, 6:

“Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente, que decía: Ven y
mira. Y miré, y he aquí un caballo negro; y el que lo montaba tenía una balanza
en la mano. Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía:
Dos libras de trigo por un denario, y seis libras de cebada por un denario; pero
no dañes el aceite ni el vino.”

Sigamos citando al Comentario Bíblico Adventista, esta vez en un párrafo


más extenso, por el valor del simbolismo aquí representado, como pronto veremos:

“Si el caballo blanco simbolizaba victoria y pureza (ver com. vers. 2), Puede
considerarse que el caballo negro indica derrota, o que su color simboliza una mayor
corrupción de la fe.”

Una balanza.

. . . “Puede considerarse que este símbolo describe la condición espiritual dentro de


la iglesia después de la legalización del cristianismo en el siglo IV, cuando se
unieron la iglesia y el Estado. Después de esa unión, la iglesia se preocupó
Autor: x 15

mayormente por los asuntos seculares, y en muchos casos se produjo una falta de
espiritualidad. . .
Esta balanza también puede interpretarse como símbolo de una indebida
preocupación por las cosas materiales. Ya no se trata de una guerra victoriosa, como
en el caso del primer jinete (ver com. vers. 2), ni representa un abundante
derramamiento de sangre como en el segundo (ver com. vers. 4), sino que su efecto
es ahora aún más terrible: “hambre”

Dos libras.

Gr. jóinix, una medida que aproximadamente equivale a un litro (ver t. V, p. 52).
Esta cantidad de grano representaba la ración diaria de alimento para un obrero.

Un denario.
Gr. d'nárion, moneda de plata que pesaba menos de 4 g (ver t. V, p. 51). El
"denario" romano era el salario diario de un obrero común (ver Mat. 20:2). Por lo
tanto, esta ración de trigo para un día por el trabajo de un día representaba apenas el
alimento indispensable para un obrero y su familia, si es que no significaba morirse
de hambre. Según los precios de los cereales que da Cicerón (Contra Verres iii. 81)
para Sicilia, los que menciona Juan eran unas 8 ó 16 veces más altos que los precios
normales. Pero a pesar del hambre era posible sobrevivir. Así ha protegido Dios
siempre a sus hijos en tiempos de necesidad.

Cuando este pasaje se aplica al período de la historia cristiana que siguió a la


legalización del cristianismo, alrededor de 313-538 d. C. (cf. pp. 769-770), las
palabras del anónimo locutor pueden interpretarse como una indicación de la
preocupación general por las cosas materiales.

Cebada.

Este grano era más barato que el trigo, como lo indican los precios que se dan (ver 2
Rey. 7:18). La cebada era un alimento común entre los pobres, y se usaba como
forraje para los animales (ver com. Juan 6:9).

No dañes.

La voz que anuncia el alto costo del trigo y de la cebada, también ordena que no
deben destruirse inútilmente el aceite y el vino.

El aceite ni el vino.
Autor: x 16

Eran los dos líquidos comunes en la alimentación en el mundo antiguo. Algunos han
interpretado que simbolizan la fe y el amor, que debían ser conservados frente al
materialismo que dominó a la iglesia después de su legalización por Constantino en
el siglo IV.” CBA t. 7, pp. 792, 793
d) El cuarto sello: Apoc 6: 7, 8:

“Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente, que
decía: Ven y mira. Miré, y he aquí un caballo amarillo, y el que lo montaba
tenía por nombre Muerte, y el Hades le seguía; y le fue dada potestad sobre la
cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad, y
con las fieras de la tierra.”
Dice entonces el CBA, t. 7, p. 793:
Amarillo

“. . . el color del temor y de la muerte. Con el caballo pálido los tiempos de


la aflicción llegaron a una espantosa culminación.”
“La enumeración, espada, hambre, muerte (o pestilencia, ver com.
"mortandad") y fieras, puede considerarse como una descripción del deterioro
progresivo de la civilización que viene después de la guerra. Los estragos de la
espada, que mata a los hombres y destruye las cosechas, producen el hambre, la que
causa el deterioro de la salud y produce pestilencias; y cuando éstas han cobrado su
tributo, la sociedad queda tan debilitada que no puede protegerse contra los ataques
de las fieras.”
“Cuando el cuarto jinete se aplica a un período particular de la historia
cristiana, parece representar la situación especialmente característica del período que
va desde el año 538 al 1517, poco más o menos, o sea el comienzo de la Reforma.”
Durante este período recordemos que ocurrió la espantosa persecución papal,
(correspondiente a su primera supremacía), que derramó la sangre de millones de
hijos de Dios, una persecución mucho más terrible y exhaustiva que la que la iglesia
sufriera bajo el imperio romano pagano, como se describe en el segundo sello.
El quinto sello: Apoc 6: 9 – 11:

“Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían
sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. Y
clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no
juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra? Y se les dieron
vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo,
hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que
también habían de ser muertos como ellos.”
Autor: x 17

Es muy interesante, nuevamente, la explicación dada por el Cometario


Adventista:

“Parece que el simbolismo del quinto sello fue presentado para animar a los
que se enfrentaban al martirio y a la muerte, para darles la seguridad de que a
pesar del triunfo aparente del enemigo, finalmente llegaría su vindicación. Este
incentivo era especialmente animador para los que vivían en los tiempos de las
terribles persecuciones del fin de la Edad Media; pero más aún durante el tiempo de
la Reforma y después (c. 1517-1755; ver pp. 44-70; com. vers. 12). A ellos les habrá
parecido que el largo período de opresión nunca acabaría. El mensaje del quinto
sello les confirmó que la causa de Dios triunfaría finalmente. Los que pasen por el
último gran conflicto recibirán el mismo estímulo (ver 2JT 151). CBA t. 7 p. 794.

Repasando conceptos, recordemos que el sexto sello comienza con las cuatro
señales cósmicas, para luego describir una escena de la Segunda Venida del Señor
Jesús. Pero hemos dicho que los sellos se repiten, exceptuando, lógicamente, el
suceso culminador de los mismos, la Segunda Venida, un evento único y futuro. Se
repite la primera mitad del sexto sello, las señales celestiales. Se repite el quinto
sello, el reclamo simbólico de los mártires. Lo lógico es pensar que se deberían
también repetir los cuatro primeros sellos. Si así fuera, ¿en qué punto de partida en el
tiempo ubicamos al priemr sello? Este asunto es sumamente importante. Veamos las
evidencias bíblicas:
1º) Si los primeros cuatro sellos representan, como vimos en una primera
instancia, las cuatro primeras etapas de la iglesia de Cristo en la tierra, y por ende el
primer sello representa la iglesia apostólica, cuando la verdad y la pureza
caraterizaban a los hijos de Dios, y se manifestaban en la iglesia todos los dones,
inluyendo el de profecía, entonces un segundo cumplimiento del primer sello debe
referirse a un momento en la iglesia cristiana en el cual la verdad es restaurada, se
produce un reavivamiento, y se vuelven a manifestar los dones del espíritu en su
plenitud. Pues bien, esto solamente volvió a ocurrir, desde los días de los apóstoles,
con el glorioso movimiento adventista en sus comienzos. A partir de 1844 se restauró
la verdad, y apareció un pueblo que cumplió la descripción de la profecía: “guardan
los mandamienrtos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo” [el Espíritu de
Profecía] (Apoc 12: 17; 19:10)
Respecto de dicho movimiento, dice Elena de White:

“Entre todos los grandes movimientos religiosos habidos desde los días de
los apóstoles, ninguno resultó más libre de imperfecciones humanas y engaños de
Satanás que el del otoño de 1844. Ahora mismo, después del transcurso de muchos
Autor: x 18

años, todos los que tomaron parte en aquel movimiento y han permanecido firmes en
la verdad, sienten aún la santa influencia de tan bendita obra y dan testimonio de que
ella era de Dios.” CS 453.

2º) Otra evidencia para comenzar los siete sellos con el movimiento
adventista de 1844, es la similaridad entre la “voz de trueno” con que se abre el
primer sello (Apoc 6:1), y los siete truenos de Apoc 10:3; sabemos bien que Apoc 10
se refiere a la experiencia del chasco del movimiento adventista en 1844. Ver 2 MS
123, 124; Maranata p. 16

3º) Aún una tercera evidencia se halla en la “corona” con que aparece el
jinete del primer sello, que aparece también en el mensaje a la iglesia de Filadelfia
(Apoc 6:11); iglesia que representa al movimiento adventista de 1844 ver CS 483

Una vez establecido que los sellos recomienzan en 1844, apliquémoslos al


pueblo de Dios desde aquel momento. Los cuatro primeros sellos, si nuestro análisis
es válido, deberían representar cuatro períodos por los cuales debería pasar la iglesia
adventista el séptimo día, el remanente final del pueblo de Dios.

LOS PRIMEROS CUATRO SELLOS Y


LOS ADVENTISTAS DEL SÉPTIMO DÍA

1. El primer sello: Apoc 6: 1 y 2:

“Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro
seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira. Y miré, y he aquí un
caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y
salió venciendo, y para vencer.”

Sobre este punto no necesitamos insistir, ya que hemos establecido


claramente que se aplica al comienzo glorioso del movimiento adventista del séptimo
día. Podemos volver a leer lo que el CBA dice sobre esto (ver pág. 12 de este mismo
folleto).
2. El segundo sello: Apoc 6: 3 y 4:

“Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente, que decía:


Ven y mira. Y salió otro caballo, bermejo; y al que lo montaba le fue dado poder
de quitar de la tierra la paz, y que se matasen unos a otros; y se le dio una gran
espada.”
Autor: x 19

Aunque no pretendo agotar el tema, creo que una interesante aplicación de


este segundo sello a la iglesia adventista sería al período de expansión misionera que
ocurrió en la segunda mitad del siglo 19 y primera mitad del 20, en especial después
de la organización en 1863. El caballo rojo significaría el estandarte ensangrentado
de Cristo, muchas veces mencionado por Elena de White como insignia de nuestra
sagrada misión, en contraste con el negro de Satanás. (Ver p. ej. Servicio Cristiano,
p. 259). La gran espada y el que se quite de la tierra la paz nos recuerdan las palabras
de Cristo en S. Mateo 10: 34: “No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no
he venido para traer paz, sino espada.” La gran espada también nos recuerda a la
Palabra de Dios (Hebreos 4:12). Y el hecho de “matar”, bien puede representar la
predicación de la sagrada e inmutable Ley de Dios, que bien sabemos es un mensaje
poderoso, distintivo de la Iglesia Adventista, que produce una profunda convicción
de pecado que espiritualmente “mata” al pecador, para darle la posibilidad de nacer
de nuevo por el poder del Espíritu Santo (ver 2ª Cor 3: 6; Romanos 7: 9 – 13).
El tercer sello: Apoc 6: 5 y 6:

““Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente, que decía: Ven y
mira. Y miré, y he aquí un caballo negro; y el que lo montaba tenía una balanza
en la mano. Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía:
Dos libras de trigo por un denario, y seis libras de cebada por un denario; pero
no dañes el aceite ni el vino.”

Respecto de la similitud entre la descripción de este sello con la condición


actual de la iglesia adventista del séptimo día, sugiero volver a leer lo que el
comentario bíblico dice sobre este sello (pags 12 y 13 de este folleto). No voy a
expresar mi opinión personal, pero sugiero también al amable lector que analice las
instituciones adventistas actuales, tanto las médicas, como las educativas, como la
obra de las publicaciones, y aún las iglesias. ¿Dónde está el interés primordial? ¿En
cumplir fielmente, con amor desinteresado, la sagrada comisión evangélica que
Cristo nos confió, o hay otros asuntos materiales que ocupan el primer lugar? Si así
fuera, entonces la descripción el tercer sello se ajustaría a la actual IASD, y
consiguiente-mente los hijos de Dios tenemos aquí una razón para preocuparnos y
emprender un reavivamiento y reforma en todo lo que está a nuestro alcance. No
obstante, la mayor preocupación nos la da la descripción del cuarto sello, que sería el
futuro de la IASD:
El cuarto sello: Apoc 6: 7, 8:

“Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente, que
decía: Ven y mira. Miré, y he aquí un caballo amarillo, y el que lo montaba
tenía por nombre Muerte, y el Hades le seguía; y le fue dada potestad sobre la
Autor: x 20

cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad, y
con las fieras de la tierra.”

La iglesia de Cristo en el pasado, entró en un proceso de apostasía que la


llevó del materialismo a la negación de la verdad y de los mandamientos de Dios, y
finalmente se convirtió en un terrible poder perseguidor que derramó la sangre de los
fieles (538 – 1798). ¿Será posible que ésa sea la historia futura de la IASD? ¿Negará
la iglesia adventista los mandamientos de Dios, su sagrado mensaje distintivo, para
muy luego convertirse en perseguidora de los que quieran seguir siendo fieles?
Anhelaríamos de todo corazón que esto jamás llegue a ocurrir, pero tristemente
debemos reconocer que Elena de White confirma plenamente lo que sugiere con
claridad el cuarto sello:
a) Sus dirigentes renegarán del Sábado y apoyaran la ley dominical:

“El Señor tiene una controversia con su pueblo profeso en estos últimos días.
En esta controversia hombres en las posiciones de responsabilidad tomarán un curso
directamente opuesto al seguido por Nehemías. Ellos no sólo ignorarán y
despreciarán el Sábado, sino que también intentarán mantenerlo alejado de los demás
enterrándolo bajo la basura de costumbres y tradiciones. En las iglesias y en las
grandes reuniones al aire libre, los ministros urgirán al pueblo sobre la necesidad de
guardar el primer día de la semana. Hay calamidades en el mar y tierra: y estas
calamidades aumentarán, un desastre seguirá al otro; y la pequeña hueste de
concienzudos observadores del sábado serán señalados como los que están trayendo
la ira de Dios en el mundo por su descuido del domingo.” Review and Herald, 18 –
03 – 1884.
b) Entregará a los católicos a los fieles que quieran seguir obedeciendo a
Dios
“Vi que Dios tenía hijos que no reconocen ni guardan el sábado. No han
rechazado la luz referente a él. Y al empezar el tiempo de angustia, fuimos
henchidos del Espíritu Santo, cuando salimos a proclamar más plenamente el sábado.
Esto enfureció las otras iglesias y a los adventistas nominales, pues no podían
refutar la verdad sabática, y entonces todos los escogidos de Dios, comprendiendo
claramente que poseíamos la verdad salieron y sufrieron la persecución con
nosotros.” Primeros escritos, pp. 33, 34

“Yo vi que la iglesia nominal y los Adventistas nominales, como Judas, nos
entregarán a los Católicos para obtener su influencia para luchar contra la
verdad. Los santos serán entonces un pueblo oscuro, poco conocido para los
Católicos; pero las iglesias, y los Adventistas nominales que conocen nuestra fe y
costumbres (porque ellos nos odiaron a causa del Sábado, ya que no pudieron
Autor: x 21

refutarlo) traicionarán a los santos y los denunciarán a los Católicos como los que
desprecian las instituciones del pueblo; es decir, que ellos guardan el Sábado y
desprecian el domingo.” Spalding Magan Collection, p. 1
Sé que esto puede ser muy sorprendente para el lector, pero se sorprendería
aún más si supiese que parte de esto último ya está comenzando a acontecer,
lamentablemente; se perfila rápidamente el cumplimiento total de esta profecía. Que
Dios nos ayude a ser fieles hasta el fin, no importa el precio, sabiendo que la corona
de la vida tiene un valor infinito.

Sólo nos restaría repasar los sellos quinto, sexto y séptimos, pero nos
limitaremos a decir o necesario para los fines de este estudio, que el quinto sello es el
reclamo simbólico de los mártires de la segunda persecución papal, escrito para
consuelo de los que enfrentarán el martitrio y la muerte (ver CBA, pág. 794, en la
pág. 14 de este folleto). Y el sexto sello, como ya vimos claramente, repetirá las
señales cósmicas a nivel mundial (ya no sólo en los Estados Unidos), y entonces se
producirá el evento único y glorioso de ¡LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO!,
con los sucesos del séptimo y último sello. Al respecto, veamos un último
comentario inspirado:

“Pensé en el día cuando los juicios de Dios caigan sobre el mundo; cuando la
negrura y horribles tinieblas envuelvan los cielos como un saco de cilicio. . . Mi
imaginación previó lo que será ese momento cuando la poderosa voz del Señor
ordene a sus ángeles: “Id, y derramad sobre la tierra. . .” Apocalipsis 6 y 7 están
llenos de significado. Terribles son los juicios de Dios revelados. Los siete ángeles
delante de Dios, recibieron su comisión. A ellos les fueron dadas siete trompetas. El
Señor saldrá para castigar a los habitantes de la tierra. . . Cuando las plagas de Dios
caigan sobre la tierra, caerá granizo sobre los impíos del peso de un talento.”
Manuscrito 59, 1895.

Este estudio es un aporte al glorioso MOVIMIENTO LAICO


ADVENTISTA que Dios en su providencia está levantando en todo el planeta tierra.
¡Gloria a Jesucristo!

Para adquirir más información con respecto a este u otros temas,


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Apocalipsis 13,
Las potencias del cielo
Y los siete sellos

Por:

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05-11-2002.
Iquique-Chile.

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