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Violencia Sexual

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Violencia Sexual

La violencia sexual es una incitación o coacción Para que un niño se dedique a


cualquier actividad sexual Ilegal o psicológicamente perjudicial, O la utilización de
un niño con fines de Explotación sexual comercial, utilización de un niño para la
producción de imágenes O grabaciones sonoras de abusos sexuales, La
esclavitud sexual, La explotación sexual en el turismo o la industria de viajes, La
trata Y la venta de niños con fines sexuales Y el matrimonio forzado.

¿Qué es el abuso sexual a niñas y niños? Podemos entenderlo cuando una


persona de la misma o mayor edad, los obliga a tener contacto sexual a través de
caricias, besos o tocamientos; a ver y escuchar pornografía o exhibir los genitales
y/o a manifestar cualquier comportamiento de tipo sexual.

Las formas más comunes en que niñas y niños pueden ser abusados sexualmente
son al tocar sus genitales u otras partes de su cuerpo; tener contacto buco-genital
del abusador(a) con la niña o el niño; utilizarlos en la elaboración de material
pornográfico; obligarlos a ver películas, revistas o fotos y exhibir o tocar los
genitales del abusador (a).

Principales características de las personas que


abusan sexualmente a niñas y niños

quienes llevan a cabo esta práctica, emplea su poder,de autoridad y fuerza, así
como el engaño y la mentira; puede ser un familiar, conocido de la familia, vecino,
profesor, cuidador e incluso el padre o la madre. abusan de la confianza que se le
tiene y utilizan premios; amenazan verbalmente, propician castigos, tienen
conductas no esperadas, generan miedo o violencia física. Si detectas alguna de
estas características en alguna persona o la niña o niño que está a tu cuidado te
expresa algún sentimiento o preocupación por esas conductas, ¡atención!, no
dejes que esta situación crezca, créele, haz caso de sus palabras y actúa para
evitar que sea víctima de abuso sexual.
Etapas del abuso sexual

El abuso sexual a niñas y niños lleva consigo una serie de situaciones a las que
debemos estar atentos para prevenirlo, en algunas ocasiones pueden ser
inadvertidas y ponen en peligro su vida e integridad.

El abuso sexual inicia con la seducción; la persona abusadora realiza con la niña o
el niño actividades que le son divertidas y le gustan, a fin de ganarse su confianza.
El segundo paso es la interacción abusiva en donde el abusador continúa con
juegos eróticos y sexuales como besos, caricias y tocamientos en genitales.
Un tercer momento es el secreto para mantener la relación abusiva, a través de la
“ley del silencio”, el chantaje o las amenazas por parte de la persona abusadora, y
como cuarto paso se encuentra la divulgación, que se da cuando la niña o el niño
ya no toleran el abuso y deciden contarlo, cuando son sorprendidos por otra
persona o cuando aparecen síntomas que generan sospecha.
Finalmente, está la represión o retractación que ocurre cuando la niña o el niño se
sienten descalificados por las personas adultas en lo que dice, niegan la evidencia
de los hechos o en ocasiones es presionado para retractarse de lo ocurrido.

Como personas adultas responsables del cuidado y protección de niñas y niños


debemos estar atentos a todo cuanto nos comenten y creerles lo que nos dicen,
nunca dejar de poner atención y siempre estar al pendiente de sus conductas las
actividades que realizan y las personas con quienes conviven.
Características que propician que una niña o un niño sea víctima
de abuso sexual

las características que propician que una niña o un niño sea víctima de abuso
sexual y las podemos dividir en:
Individuales como la baja autoestima; la timidez o retraimiento; la dificultad para
establecer límites; la actitud de sumisión y la dificultad para decidir.
Familiares como el hecho de vivir separados de sus padres o personas viviendo
temporalmente en casa; el aislamiento dentro del entorno familiar; la necesidad de
afecto y atención no satisfechas; la escasa o nula educación sexual o alguna
discapacidad.
Finalmente, las características sociales, están vinculadas con el ejercicio de la
prostitución en su entorno; la orfandad; el hecho de pertenecer a una minoría
étnica; vivir o trabajar en la calle y, el abuso de drogas y/o alcohol.
Como padres, cuidadores, educadores y o tutores nunca debemos perder de vista
dichas características si queremos niñas y niños felices, libres de abuso sexual, de
aquí que platicar con ellas y ellos y, brindarles toda nuestra confianza, es una
tarea fundamental que contribuirá a su prevención.

A pesar de los desarrollos teóricos que nos brindan luces y ciertos patrones para
identificar a un posible abusador sexual, no se puede caer en la trampa de reducir
un fenómeno tan complejo como el que se ha expuesto a la revisión exclusiva de
las características mencionadas, por lo que se debe tener muy presente la
premisa básica de que los agresores sexuales presentan un mínimo desarrollo de
sus habilidades sociales, al igual que en sus estrategias de afrontamiento; que
sumado a las circunstancias contextuales facilitan la comisión de la conducta
sexual abusiva y partiendo de esta consideración guiar la plena identificación de
estos sujetos vulneradores.
características que pueden presentar niñas y niños abusados
sexualmente

Entre dichas características se pueden observar conductas diferentes a las que


venían realizando de manera cotidiana como tener pesadillas, dificultad para
dormir o mojar la cama cuando ya no lo hacían; muestran conocimiento o
comportamiento sexual, no propios de su edad y que no han sido aprendidos en
su entorno familiar ni escolar.
Asimismo, expresan temor por una persona en particular y se resisten a estar
solos en casa y/o asistir a la escuela.
Una vez más, reiteramos la importancia de estar atentos a las señales que nos
dan las niñas y los niños, ya que a veces relacionamos el cambio de sus
conductas con meros “caprichos”, como el hecho de no querer ir a su centro
escolar. Estemos atentos a todo y pensemos que un simple “capricho” nos puede
indicar que el menor está en riesgo.
Características:

 Temor al contacto o a los acercamientos físicos.


 Conductas regresivas (berrinches, incontinencia, actuar
 como bebé), agresividad o sumisión extrema.
 Problemas alimenticios (falta de o demasiado apetito).
 Inhibición para jugar o realizar sus actividades cotidianas.
 Temor exagerado a una persona adulta en concreto.
 Beber alcohol o consumir drogas.
 Aislamiento o depresión.
 Bajo rendimiento escolar.
 Negativas a bañarse o quitarse la ropa, o utilizar muchas
 capas de ella.
 Dañar sus juguetes o pertenencias.
 Utilizar lenguaje sexual explícito no acorde a su edad.
 Representar conductas sexuales en dibujos, juegos o interacciones con
otras personas.
 Alteraciones del sueño (pesadillas, insomnio).
 Conductas sexualizadas no acordes a su edad (masturbación, curiosidad
sexual exagerada o juegos sexuales inapropiados : simular posiciones
sexuales, intentar tocar, oler o besar los genitales de otra persona).

Físicamente, pueden ser indicadores de una agresión sexual:

 Ropa interior manchada o rasgada.


 Irritación, picor o dolor en la zona genital.
 Dificultad para caminar o sentarse.
 Infecciones urinarias u orales.
 Somatizaciones: malestar generalizado; dolores de cabeza, estomacales o
mareos; temblores;
 Irritación de la piel y comezón, entre otras.
¿Cómo detectar y atender a sus hijas o hijos que sufrieron
violencia sexual?
La violencia sexual consiste en conductas intencionales de contenido sexual
realizadas por personas hacia niñas, niños y adolescentes, ya sea que las lleven a
cabo con ellos(as), los(as) obliguen a observarlos o los hagan ejecutarlos, en un
contexto donde la persona que la ejerce utiliza la fuerza o los convence mediante
engaños, mentiras o manipulación.
Constituyen delitos las siguientes conductas de violencia sexual:
 Hostigamiento sexual: asediar reiteradamente, con fines lascivos, a una
persona menor de edad valiéndose de una posición jerárquica derivada de
sus relaciones laborales, docentes, domésticas o cualquier otra que
implique subordinación.
 Estupro: realizar cópula con persona mayor de 15 y menor de 18 años,
obteniendo su consentimiento por medio de engaño.
 Pornografía de personas menores de 18 años: procurar, obligar, facilitar o
inducir, a una o varias personas menores de edad, a realizar actos sexuales
o de exhibicionismo corporal con fines lascivos o sexuales, reales o
simulados, con el objeto de video grabarlos, fotografiarlos, filmarlos, exhibir-
los o describirlos a través de cualquier medio impreso o electrónico .
También serán responsables de este delito quienes impriman, video graben,
fotografíen, filmen, describan, reproduzcan, almacenen, distribuyan,
vendan, compren, arrienden, expongan, publiciten, transmitan, importen o
exporten material pornográfico.
Turismo sexual: promover, publicitar, invitar, facilitar o gestionar que una o
más personas viajen al interior o exterior del país para realizar actos
sexuales reales o simulados con una o varias personas menores de 18
años.
 Comunicación de Contenido Sexual con Personas Menores de Dieciocho
Años de Edad: quien haciendo uso de medios de radiodifusión,
telecomunicaciones, informáticos o cualquier otro medio de transmisión de
datos, contacte a una persona menor de dieciocho años de edad, y le
requiera imágenes, audio o video de actividades sexuales explícitas, actos
de connotación sexual, o le solicite un encuentro sexual.
 Pederastia: quien se aproveche de la confianza, subordinación o
superioridad que tiene sobre un menor de dieciocho años, derivada de su
parentesco en cualquier grado, tutela, curatela, guarda o custodia, relación
docente, religiosa, laboral, médica, cultural, doméstica o de cualquier índole
y ejecute, obligue, induzca o convenza a ejecutar cualquier acto sexual, con
o sin su consentimiento.
 Abuso sexual: ejecutar u obligar a una niña, niño o adolescente (con o sin
violencia), para sí o en otra persona, actos sexuales sin el propósito de
llegar a la cópula. También se considera abuso sexual cuando se obligue al
agraviado(a) a observar un acto sexual, o a exhibir su cuerpo. Son actos
sexuales, los tocamientos corporales, los que representen actos sexuales o
los que obliguen a la víctima a representarlos.
 Violación: introducción del pene en el cuerpo de una persona menor de
edad por vía vaginal, anal o bucal, o bien por vía vaginal o anal, de
cualquier elemento, instrumento, o cualquier parte del cuerpo humano
distinta del pene, con fines sexuales.
 Corrupción de personas menores de 18 años: obligar, inducir, facilitar o
procurar que una niña, niño o adolescente realice actos de exhibicionismo
corporal o sexuales simulados o no, con fin lascivo o sexual; comerciar,
distribuir, exponer, circular u ofertar a niñas, niños y adolescentes, libros,
escritos, grabaciones, filmes, fotografías, anuncios impresos, imágenes u
objetos de carácter pornográfico , reales o simulados, de manera física o a
través de cualquier medio.
 Lenocinio: explotar el cuerpo de niñas, niños y adolescentes para obtener
un lucro; inducirlos(as) a la prostitución; o sostener directa o indirectamente
lugares de explotación sexual de personas menores de edad.

Se piensa que las personas que ejercen violencia sexual son siempre ajenas a las
familias; que las niñas, niños y adolescentes mienten o fantasean sobre su
ocurrencia; que sólo se presenta en sectores vulnerables de la población donde
hay problemas como pobreza , alcoholismo, drogadicción u otros, o que las
agresiones sexuales no causan daño a las víctimas.

Datos Importantes
Nadie puede acercarse a ti, ver tu cuerpo, tomarte fotografías o tocarte. Puedes
decidir quién quieres que te abrace, te bese y quién no. Nadie puede obligarte a
hacerlo.
Es agradable cuando mamás y papás, las y los abue los, tías, tíos, primas, primos,
maestras, maestros, amigas, amigos u otras personas te demuestran su cariño y
amor con abrazos o besos.
Sin embargo, algunas personas pueden intentar tocarte con otra intención que no
sea una muestra de cariño, por ejemplo:
 Cuando alguien trata de tocarte, o te toca, por encima o debajo de tu ropa
interior.
 Si alguien te lleva a un lugar solitario para quitarte la ropa.
 Cuando alguien te observa mientras te bañas, vistes, cambias de ropa o
vas al baño.
 Si te toman fotografías sin ropa, o te muestran fotos y videos de personas
desnudas, sin que nadie se dé cuenta.
 Cuando te hacen caricias en el cuerpo o te dan besos que te hagan sentir
incómodo(a).
 Pedirte u obligarte a tocar, acariciar o besar el cuerpo de una persona por
encima o bajo su ropa interior, o a que la veas tocarse a sí misma.
Las personas que intentan tocarte para causarte daño, tal vez te digan que lo
hacen porque te quieren y te pidan que no le cuentes a nadie, que sea un secreto,
o que si lo haces te harán daño a ti o a tu familia o que te van a separar de ella.
También te pueden decir que, si no dices nada, te comprarán dulces o juguetes
muy bonitos
Las personas que intentan tocarte sin tu autorización pueden ser:
 Personas que no conoces.
 Alguien de tu familia o amigas(os) o personas que conozcan a tus
familiares.
 Alguien con quien convives muy seguido en la escuela, colonia, centro
deportivo, templo religioso, o lugares donde pasas mucho tiempo.
 Las personas que te cuidan cuando mamá y papá no están o quienes
ayudan a limpiar la casa.
 Niñas y niños más grandes que tú o personas adultas.
Algunas herramientas de prevención
1. Proporcionar apoyo, cariño, seguridad, confianza y escuchar las opiniones e
inquietudes de niñas, niños y adolescentes.
2. Garantizar ambientes familiares respetuosos y libres de violencia.
3. Enseñar a sus hijas e hijos, desde temprana edad, el nombre
de las partes de su cuerpo, incluyendo los genitales, pues quienes ejercen
violencia sexual suelen utilizar nombres de objetos o animales para referirse a
ellos y engañar a las víctimas.
4. Hacerles saber que ninguna persona, aunque sea familiar, puede tocar su
cuerpo y mucho menos sus genitales, ni hacerles caricias que los(as) incomoden.
5. Si niñas, niños y adolescentes manifiestan que hay personas que los molestan,
no ignorar su relato, ellos(as) general- mente no mienten cuando reportan un
posible abuso.
6. Procurar no perder de vista a sus hijos(as) en eventos: fiestas, comercios,
parques, paseos o actividades fuera de su hogar (incluidas las escolares y
religiosas).
7. Buscar información sobre las conductas de violencia sexual, los factores de
riesgo y protección, y el perfil de las personas que la ejercen.
8. Evitar enseñar a sus hijas(os) conductas de obediencia absoluta hacia las
personas con frases como “haz todo lo que la maestra(o) te diga”.
9. Inculcar a sus hijas e hijos a rechazar obsequios a cambio de cualquier
condición o petición.
10. Informarles sobre la importancia de que nadie debe tomar le fotografías sin su
consentimiento.
11. Supervisar los sitios web que visitan sus hijos(as), así como sus amistades en
las redes sociales.
12. Participar en su proceso educativo, estar pendientes de sus relaciones con
compañeras(os), profesores(as), autoridades y personal escolar. Acudir a las
juntas y actividades de prevención de la violencia organizadas por la escuela.
13. Enseñar a sus hijas(os) a diferenciar un tocamiento positivo de uno negativo

La ley
El Artículo 12 de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes
establece que es obligación de toda persona que conozca de casos de violación a
los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes, hacerlo del conocimiento
de las autoridades, a efecto de que se investiguen y sancionen.
En caso de detectar o sospechar que alguna niña, niño o adolescente sufre
violencia sexual, se deben denunciar los hechos ante la Procuraduría o Fiscalía
General de Justicia, misma que, por lo general, cuenta con agencias
especializadas en la atención de ese tipo de casos.
Es recomendable que si la persona agraviada presenta signos visibles de
agresión, no se le asee ni alimente hasta que se le practique un examen médico
por parte de las autoridades. Niñas, niños y adolescentes tienen derecho a que
sus madres, padres o tutores los acompañen durante to das las diligencias; a que
se les proporcione atención prioritaria y respetuosa; que se escuche su opinión, y
que se dirijan a ellas(os) con un len guaje adecuado a su edad, madurez y
desarrollo cognitivo y emocional, así como a recibir servicios para su
rehabilitación, todo en atención a su interés superior.
También puede acudirse a las Procuradurías de Protección de Niñas, Niños y
Adolescentes municipal, estatal o federal, las cuales verificarán si la persona
menor de edad se encuentra en una situación de riesgo; podrán formular la
denuncia correspondiente ante las Fiscalías y solicitarles medidas de protección
para los(as) agraviados(as); asimismo, elaborarán un plan de restitución de
derechos.
En México, conforme al Protocolo de Actuación para quienes imparten justicia en
Casos que involucren Niñas, Niños y Adolescentes, que publicó a Suprema Corte
de Justicia de la Nación, los jueces y juezas deberán decretar medidas
(especiales, provisionales o definitivas) y condiciones para el manejo de tensión y
estrés que se genere cuando comparezcan ante alguna autoridad para la
protección del niño(a) víctima y deberán apegarse al principio de menor
separación de su familia, en aras de su interés superior.
La violencia sexual es un delito contra niñas, niños y adolescentes que transgrede
sus derechos y causa graves daños que impiden su desarrollo integral.

Introducción
El abuso sexual contra niños, niñas y adolescentes es una de las peores formas
de violencia contra la niñez y adolescencia. A pesar de que constituye un problema
creciente en el mundo, la mayoría de los casos no son detectados ni denunciados.
A diferencia del maltrato físico cuyo diagnóstico depende de la posibilidad de ver
las lesiones y de la negligencia adulta hacia el bienestar infantil que se diagnóstico
al ver niños privados de los cuidados parentales básicos (desnutridos, no
escolarizados, sin cuidados médicos básicos, entre otras formas de vulneración
de sus derechos)-, la detección del niño que fue o está siendo víctima de abuso
sexual depende de escucharlo para saber qué pasó.
La importancia de escuchar al niño cuando toma la palabra radica en que su
desarrollo frecuentemente es la más importante, poderosa y, en muchas
ocasiones,
la única evidencia del abuso cometido en su contra. Por ese motivo, es
imprescindible prestarles atención, privacidad y escucharlos sin juzgarlos.
En la mayoría de los casos detectados no suele haber lesiones físicas que
funcionen
como indicios para determinar quién fue el agresor ni hay una conducta específica
o prototípica que los niños víctimas presenten. Tampoco suele haber testigos, ya
que quien comete un abuso sexual suele hacerlo a escondidas. Todos estos
factores,
sumados a mitos enraizados y prejuicios culturales que operan en detrimento de
los
niños cuando toman la palabra para develar sus pareceres, hacen que el
diagnóstico y posterior denuncia sean una tarea compleja. También opera una
premisa falsa que sostiene que “si no hay lesión, no hubo abuso”. Esto agrava la
situación porque sin detección los niños no reciben tratamiento, ni protección ni
justicia.
En la mayor parte de los casos judicializados los abusos son cometidos por
conocidos y familiares, que acceden con facilidad al niño y aprovechan la
confianza
nacida en la convivencia. Suelen reiterarse en el tiempo, durante meses e incluso
años, antes de ser descubiertos.

Índice
Estadísticas
 En 2021, 41.8 % de las mujeres de 15 años y más manifestó haber vivido
alguna situación de violencia en su infancia (antes de cumplir 15 años).
 En 2022, de acuerdo con datos de las Fiscalías Generales de Justicia
estatales, el delito de violación registró su máximo en el grupo de 10 a 14
años y ocurrió 4.7 veces más en niñas que en niños de esta edad, con 4
197 y 884 casos, respectivamente.
 33.6 % de niñas y adolescentes de 12 a 17 años que usaron internet o
celular, entre julio 2021 y agosto 2022, recibió fotos o videos de contenido
sexual y a 32.3 % le hicieron insinuaciones o propuestas de ese tipo, frente
a 18.2 y 12.0 % de niños y adolescentes hombres.
Bibliografía
https://www.gob.mx/difnacional/articulos/sabes-que-es-el-abuso-sexual-a-
ninas-y-ninos?idiom=es

https://www.cndh.org.mx/sites/default/files/documentos/2022-02/
F_Violencia_Sexual_NNA.pdf

https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/aproposito/2023/
EAP_VCM_23.pdf

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