Universidad Autónoma de Santo Domingo
PRIMADA DE AMÉRICA / Fundada el 28 de octubre
de 1508
Tarea 3. Unidad #3 de Contabilidad General
Tutora académica: Realizado por:
Lidia Rony Almonte Parra
100707241
San Francisco de Macorís, septiembre 2024
1. Definir transacción.
Transacción: Flujo económico que refleja creación, transformación, intercambio, transferencia
o extinción de un valor económico y entraña traspasos de propiedad de bienes o activos
financieros, prestación de servicios o suministro de mano de obra y capital.
2. Defina cuenta contable
Una cuenta contable es un registro individual dentro del sistema contable de una empresa, que
se utiliza para clasificar y organizar las transacciones financieras. Cada cuenta contable refleja
un tipo específico de activo, pasivo, patrimonio, ingreso o gasto, permitiendo un seguimiento
detallado del estado financiero de la empresa. Estas cuentas forman parte del **plan de
cuentas y son esenciales para la elaboración de los estados financieros, como el balance
general y el estado de resultados.
3. Diga los elementos que componen una cuenta y defina cada uno
Una cuenta contable está compuesta por varios elementos clave, los cuales permiten su
correcta identificación, uso y registro. Estos son:
Código de cuenta: Es un número o código alfanumérico asignado a la cuenta, que permite su
identificación única dentro del plan de cuentas. Este código facilita la organización y
clasificación de las cuentas.
Nombre o título de la cuenta: Es la denominación de la cuenta que describe el tipo de
transacciones que se registran en ella. Por ejemplo, “Caja”, “Cuentas por cobrar” o “Gastos de
venta”.
Naturaleza de la cuenta: Indica si la cuenta tiene un saldo deudor (como los activos y gastos) o
acreedor (como los pasivos, ingresos y patrimonio). Esta característica determina cómo se
incrementa o disminuye la cuenta.
Descripción o detalle: Es una breve explicación de la función o propósito de la cuenta,
ayudando a entender qué tipos de transacciones deben registrarse allí.
Saldo inicial: Es el monto con el que comienza la cuenta en un periodo contable, que puede ser
un valor deudor o acreedor según la naturaleza de la cuenta.
Movimientos (débitos y créditos): Son los registros de las transacciones que afectan a la
cuentas. Un débito es un aumento en cuentas de activo o gasto y una disminución en cuentas
de pasivo, ingresos o patrimonio. Un crédito es lo contrario: aumenta los pasivos, ingresos o
patrimonio y disminuye los activos o gastos.
Saldo final: Es el resultado de sumar los movimientos al saldo inicial, mostrando el monto que
queda al final del periodo contable. Este saldo puede ser deudor o acreedor, dependiendo de la
naturaleza de la cuenta.
Estos elementos son fundamentales para la correcta administración y análisis financiero de una
empresa.
4. Defina catálogo de cuentas.
El catálogo de cuentas, también conocido como plan de cuentas, es un listado ordenado y estructurado
de todas las cuentas contables que utiliza una organización para registrar sus transacciones financieras.
Cada cuenta dentro del catálogo está identificada por un código y un nombre, y se clasifica según su
naturaleza (activos, pasivos, patrimonio, ingresos y gastos).
El objetivo del catálogo de cuentas es facilitar el registro sistemático y organizado de las operaciones
financieras, asegurando que cada transacción se asigne correctamente a su cuenta correspondiente, lo
que permite la generación de estados financieros precisos y confiables. Además, el catálogo de cuentas
puede ser personalizado según las necesidades específicas de la empresa, permitiendo un control más
detallado de sus finanzas.
5. Defina que son cuentas reales y cuenta nominales.
Las cuentas contables se dividen en cuentas reales y cuentas nominales, según el tipo de transacciones
que registran y su permanencia en los estados financieros.
Cuentas reales: También conocidas como cuentas permanentes, son aquellas que reflejan los bienes,
derechos, obligaciones y el patrimonio de una empresa. Estas cuentas permanecen abiertas al final de
cada periodo contable, ya que sus saldos se trasladan de un periodo a otro.
•Incluyen las cuentas de activo, pasivo y patrimonio, que se reflejan en el balance general.
Ejemplos: Caja, Cuentas por cobrar, Edificios (activos); Proveedores, Préstamos (pasivos); Capital social
(patrimonio).
Cuentas nominales: También llamadas cuentas temporales, registran los ingresos, gastos, costos y
pérdidas de la empresa durante un periodo contable. Estas cuentas se cierran al final de cada periodo, y
su saldo se transfiere a las cuentas de resultados (generalmente a la cuenta de “pérdidas y ganancias”).
Incluyen las cuentas de ingresos y gastos, que se reflejan en el estado de resultados
Ejemplos: Ventas, Servicios prestados (ingresos); Sueldos, Publicidad, Materiales (gastos).
En resumen, las cuentas reales muestran la situación financiera continua de la empresa, mientras que las
cuentas nominales registran el rendimiento durante un periodo específico y se cierran para determinar el
resultado neto (ganancia o pérdida).
6. Defina activos de acuerdo a las NIF y otros conceptos.
De acuerdo con las Normas de Información Financiera (NIF) en México, un activo se define como un
recurso controlado por una entidad, que ha sido obtenido o generado como resultado de operaciones
pasadas y del cual se espera que en el futuro generen beneficios económicos, como flujos de efectivo o
ahorro en costos.
Características de un activo según las NIF:
Control por parte de la entidad: La empresa debe tener la capacidad de obtener los beneficios del
activo y restringir el acceso de terceros a esos beneficios.
Origen en operaciones pasadas: El activo debe haber sido adquirido o generado en transacciones
anteriores, como la compra de un bien o la recepción de un derecho.
Beneficios económicos futuros: Se espera que el activo contribuya, directa o indirectamente, a la
generación de flujos de efectivo o que ayude a reducir costos.
Otros conceptos de activos:
Activos corrientes: Son aquellos que la empresa espera convertir en efectivo, vender o consumir en el
transcurso del ciclo operativo normal o dentro de un año. Ejemplos: efectivo, cuentas por cobrar,
inventarios.
Activos no corrientes: También llamados activos fijos o activos a largo plazo, son aquellos que no se
espera convertir en efectivo en un corto plazo. Ejemplos: propiedades, planta, equipo, inversiones a largo
plazo.
Activos tangibles: Recursos físicos que se pueden tocar, como edificios, maquinaria, vehículos.
Activos intangibles: Recursos que no tienen forma física pero generan beneficios económicos.
Ejemplos: patentes, marcas, derechos de autor, fondo de comercio.
En resumen, un activo representa todo aquello que tiene valor económico para una entidad y que
contribuye al desarrollo de sus actividades operativas.
7. Clasificación del activo.
La clasificación del activo se refiere al proceso de ordenar y agrupar los recursos económicos de una
empresa según sus características, liquidez y el tiempo estimado para que generen beneficios. Esta
clasificación es fundamental para la contabilidad, ya que facilita la presentación de los estados
financieros, particularmente el balance general, permitiendo identificar cómo están distribuidos los activos
de la empresa y su capacidad para cumplir con las obligaciones a corto y largo plazo.
8. Defina pasivos de acuerdo a las NIIF y otros conceptos.
De acuerdo con las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), un pasivo se
define como una obligación presente de la entidad derivada de sucesos pasados, cuya
liquidación se espera que resulte en la salida de recursos que incorporan beneficios
económicos, como el pago de efectivo o la entrega de otros activos.
Características de un pasivo según las NIIF:
Obligación presente: La entidad tiene una obligación actual, ya sea legal o implícita, que surge
de eventos pasados.
Origen en sucesos pasados: El pasivo proviene de una transacción o evento ocurrido
previamente, como la recepción de bienes o servicios a crédito.
Salida de recursos: Para cumplir con la obligación, la empresa deberá transferir recursos
(dinero, bienes o servicios), lo que implica una disminución de los beneficios económicos de la
entidad.
Otros conceptos de pasivos:
Pasivos corrientes (a corto plazo): Son aquellas obligaciones que la empresa espera liquidar en
el transcurso de un ciclo operativo normal o dentro de un año. Estos pasivos se liquidan
generalmente con activos circulantes o con la creación de otros pasivos corrientes.
Ejemplos:
Proveedores (cuentas por pagar).
Préstamos bancarios a corto plazo.
Obligaciones acumuladas (sueldos por pagar, impuestos por pagar).
Anticipos de clientes.
Pasivos no corrientes (a largo plazo): Son aquellas obligaciones que no se espera liquidar en el
corto plazo, es decir, que su vencimiento es superior a un año o al ciclo operativo de la
empresa. Estos pasivos suelen incluir obligaciones más grandes y con plazos de pago
extendidos.
Ejemplos:
Préstamos bancarios a largo plazo.
Obligaciones por bonos emitidos.
Provisiones a largo plazo (pensiones, indemnizaciones).
Deudas con proveedores a largo plazo.
Pasivos financieros: Obligaciones que requieren un pago futuro en efectivo o instrumentos
financieros. Estos pueden incluir contratos de deuda o derivados.
Pasivos contingentes: Son obligaciones posibles que surgen de eventos pasados, cuya
existencia se confirmará solo por la ocurrencia o no de uno o más eventos inciertos en el futuro.
No se reconocen en el balance, pero se revelan en notas a los estados financieros si es probable
que ocurran.
Clasificación de los pasivos:
Los pasivos.
9. Clasificación del pasivos.
La clasificación del pasivo es el proceso de ordenar y agrupar las obligaciones financieras de una
empresa en función de su vencimiento, naturaleza y otras características relevantes. Esta clasificación es
esencial para presentar de manera clara y comprensible las deudas y compromisos de la entidad en los
estados financieros, específicamente en el balance genera.
10. Defina capital o patrimonio de acuerdo a las NIIF y otros conceptos.
El capital o patrimonio se refiere a la parte residual de los activos de una entidad después de deducir
todos sus pasivos. Según las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), el patrimonio se
define como la suma de las aportaciones de los propietarios de la entidad, más las ganancias
acumuladas y otros componentes que afectan el capital, como las reservas y ajustes por revaluación.
Características del capital o patrimonio según las NIIF:
Residual: El patrimonio representa lo que queda para los propietarios de la entidad una vez que se han
pagado todas las obligaciones (pasivos).
Aportes de los propietarios: Incluye el capital social, que son las contribuciones iniciales y adicionales
realizadas por los accionistas o socios.
Ganancias acumuladas: Representa las utilidades retenidas que no han sido distribuidas como
dividendos, y que se reinvierten en la empresa.
Otros componentes: Puede incluir reservas, ajustes por revaluación de activos, y otros elementos que
afectan el patrimonio de la entidad.
Otros conceptos relacionados con el patrimonio:
Capital social: Es el valor total de las aportaciones realizadas por los accionistas o socios a la entidad.
Puede estar representado por acciones ordinarias y preferentes.
Reservas: Son utilidades retenidas que la empresa ha decidido no distribuir como dividendos, y que se
reservan para un propósito específico, como reinversión en la empresa o cubrir posibles pérdidas futuras.
Ganancias o pérdidas acumuladas: Reflejan el resultado de las operaciones acumuladas de la
empresa desde su inicio, menos los dividendos distribuidos a los accionistas.
Ajustes por revaluación: Son cambios en el valor de los activos que se reflejan en el patrimonio,
resultado de revaluaciones realizadas según criterios establecidos por las NIIF.
Clasificación del patrimonio:
El patrimonio puede clasificarse en:
Patrimonio de los propietarios: Incluye el capital social y las reservas.
Patrimonio atribuible a los propietarios de la controladora: En grupos empresariales, refleja el
patrimonio que corresponde a los propietarios de la entidad controladora.
Intereses no controladores: Refleja la parte del patrimonio de las subsidiarias que no está
controlada por la entidad matriz.
Resumen:
El capital o patrimonio es una medida clave de la solidez financiera de una empresa, ya que indica la
cantidad de recursos que los propietarios tienen invertidos en la entidad. Una mayor proporción de
patrimonio en relación con los pasivos sugiere una mejor capacidad de la empresa para absorber
pérdidas y financiar su crecimiento.
11. Clasificación del patrimonio o capital.
La clasificación del patrimonio o capital se refiere a la organización y agrupación de los diferentes
componentes que conforman el patrimonio de una entidad. Esta clasificación permite entender mejor la
estructura financiera de la empresa y cómo se han financiado sus operaciones. A continuación, se
presentan las principales categorías en las que se puede clasificar el patrimonio:
Capital social:
Acciones ordinarias: Representan la propiedad de la empresa y dan derecho a los accionistas a votar en
asambleas y a recibir dividendos.
Acciones preferentes: Ofrecen a los accionistas prioridad en el pago de dividendos y en la liquidación
de activos, pero generalmente no otorgan derechos de voto.
Ganancias acumuladas:
Se refiere a las utilidades que la empresa ha generado a lo largo de su existencia y que no han sido
distribuidas como dividendos a los accionistas. Estas ganancias se reinvierten en la empresa para
financiar su crecimiento y operaciones.
Reservas:
Son utilidades retenidas que se han reservado para un propósito específico, como reinversión en el
negocio, cobertura de pérdidas futuras o cumplimiento de requerimientos legales. Las reservas pueden
ser:
Reservas legales: Establecidas por la legislación que exige una proporción de las utilidades a ser
reservadas.
Reservas estatutarias: Determinadas por la empresa según sus estatutos sociales.
Reservas voluntarias: Creadas por decisión de la administración para fines específicos.
Ajustes por revaluación:
Reflejan los cambios en el valor de los activos que se han revaluado. Esto puede incluir incrementos en el
valor de propiedades, planta y equipo, que se ajustan en el balance para reflejar su valor justo.
Otros componentes del patrimonio:
Dividendos declarados: Montos de utilidades que se han declarado pero no se han pagado a los
accionistas.
Intereses no controladores (o intereses minoritarios): Parte del patrimonio de las subsidiarias que no
es propiedad de la entidad controladora, relevante en grupos empresariales.
Resumen de la clasificación del patrimonio:
Capital social: Acciones ordinarias y preferentes.
Ganancias acumuladas: Utilidades retenidas no distribuidas.
Reservas: Utilidades reservadas para propósitos específicos.
Ajustes por revaluación: Cambios en el valor de los activos.
Otros componentes: Dividendos declarados, intereses no controladores.
Esta clasificación del patrimonio permite a los inversionistas, analistas y administradores entender la
fuente de financiamiento de la empresa y su capacidad para generar valor a largo plazo
12. Defina la ecuación contable e indique su formula.
La ecuación contable es una relación fundamental en contabilidad que establece la conexión entre los
activos, pasivos y el patrimonio de una empresa. Esta ecuación es la base del sistema de partida doble,
que asegura que todas las transacciones financieras se registren de manera equilibrada.
Definición:
La ecuación contable indica que los recursos (activos) de una entidad son financiados por deudas
(pasivos) y por la inversión de los propietarios (patrimonio). En otras palabras, lo que posee la empresa
(activos) siempre es igual a lo que debe (pasivos) más lo que pertenece a los propietarios (patrimonio).
Fórmula:
La ecuación contable se expresa de la siguiente manera:
Activos = Pasivos + Patrimonio
Elementos de la ecuación:
Activos: Son todos los bienes y derechos que posee la empresa, que pueden generar beneficios
económicos futuros.
Pasivos: Son las obligaciones y deudas que tiene la empresa con terceros, que deben ser pagadas en el
futuro.
Patrimonio: Representa la inversión de los propietarios en la empresa, que incluye el capital social y las
ganancias acumuladas.
Importancia de la ecuación contable:
Equilibrio financiero: Asegura que el balance general de una empresa esté equilibrado, donde todos los
recursos tienen una fuente de financiamiento.
Base para la contabilidad: Fundamental para el registro de transacciones contables, garantizando que
cada operación afecte a al menos dos cuentas.
Análisis financiero: Permite a los interesados (inversionistas, acreedores) evaluar la salud financiera y la
estructura de capital de la empresa.
En resumen, la ecuación contable es un principio básico que fundamenta la contabilidad y permite
comprender cómo se relacionan los recursos y obligaciones de una entidad.
13. Concepto de partida doble.
El principio de partida doble es un concepto fundamental en contabilidad que establece que cada
transacción financiera afecta al menos a dos cuentas y que el efecto total en el activo siempre es igual al
efecto total en el pasivo y patrimonio. Este principio asegura que la ecuación contable (Activos = Pasivos
+ Patrimonio) se mantenga siempre en equilibrio.
14. Mencione los principios de la partida doble.
Los principios de la partida doble son fundamentales para el registro y la elaboración de los estados
financieros. Estos principios aseguran que cada transacción se registre de manera completa y
equilibrada. A continuación se mencionan los principales principios relacionados con la partida doble:
1. Equilibrio de la Ecuación Contable:
Cada transacción afecta al menos a dos cuentas, garantizando que la suma de los débitos sea siempre
igual a la suma de los créditos. Esto mantiene la ecuación contable (Activos = Pasivos + Patrimonio) en
equilibrio.
2. Registro en Doble Entrada:
Cada transacción se registra como un débito en una cuenta y un crédito en otra. Esto implica que cada
vez que hay un aumento en una cuenta, debe haber una disminución en otra, o viceversa.
3. Diferenciación de Cuentas:
Se deben distinguir entre cuentas de activos, pasivos, patrimonio, ingresos y gastos. Cada tipo de cuenta
tiene su propio tratamiento contable y su efecto en el balance general y el estado de resultados.
4. Consistencia:
El mismo tratamiento contable debe aplicarse a transacciones similares a lo largo del tiempo. Esto
permite que la información financiera sea comparable y fiable.
5. Veracidad y Fiabilidad:
Las transacciones deben registrarse de manera precisa y en el momento adecuado, asegurando que la
información presentada en los estados financieros sea veraz y confiable.
6. Imparcialidad:
Los registros contables deben ser objetivos y no influenciados por sesgos personales, asegurando que la
información refleje la verdadera situación financiera de la empresa.
7. Materialidad:
Los principios contables deben aplicarse en función de la importancia relativa de la información. Las
transacciones que no afectan significativamente las decisiones de los usuarios pueden ser tratadas de
manera más flexible.
8. Prudencia:
Este principio implica que se deben considerar los posibles riesgos y pérdidas al hacer estimaciones
contables, evitando sobrestimar ingresos o activos.