4.
Foro Proceso de Paz - Desarrollo rural y tierra - Ana María Ibáñez
Bienvenida y mensaje sobre la importancia del acuerdo agrario.
00:34
- El sector rural ha sufrido abandono estatal y conflicto armado.
01:04
- Acuerdo con las FARC: acceso a la tierra y derechos de propiedad.
01:20
- Creación de un fondo de tierras para pequeños campesinos.
02:04
- Desarrollo rural y producción agrícola: potencial desaprovechado en Colombia.
02:43
- Pobreza rural: planes de vivienda, agua potable y educación necesarios.
03:15
- Solo el 41.6% de la población rural tiene acceso a la tierra.
05:11
- Alta concentración de la propiedad rural en Colombia.
06:01
- Índice Gini muestra desigualdad en la distribución de tierras.
08:20
- Despojo de tierras fácil debido a la informalidad en la propiedad.
09:14
- Uso ineficiente de la tierra: baja dedicación a agricultura.
10:49
- Pobreza rural alta, con brechas significativas respecto a la población urbana.
14:54
- Conclusiones: necesidad de políticas para mejorar el mercado de tierras.
15:48
- Inversión en áreas rurales es crucial para reducir la pobreza.
00:08
La presentación se centra en la importancia de los acuerdos en la Habana, especialmente el
acuerdo agrario, que es necesario independientemente de los avances en las negociaciones
con las FARC. Se destaca que el sector rural colombiano ha sido históricamente
desatendido por el Estado y ha sufrido las consecuencias del conflicto armado.
00:34
Se presentan tres temas fundamentales del acuerdo con las FARC: acceso a la tierra y
derechos de propiedad, desarrollo rural y producción agrícola, y pobreza rural. En cuanto al
acceso a la tierra, se busca aumentar el acceso para pequeños productores y formalizar
derechos de propiedad a través de un fondo de tierras, un proceso de formalización de
precios campesinos, la actualización del catastro y la creación de una jurisdicción agraria.
02:04
El desarrollo rural y la producción agrícola son cruciales, ya que Colombia no está
aprovechando su potencial agrícola. Se proponen políticas para limitar la frontera agrícola y
estimular a los productores mediante créditos, subsidios, asistencia técnica y provisión de
bienes públicos. En relación a la pobreza rural, se plantean planes de vivienda, acceso a
agua potable, educación y un sistema de protección social, dado que la población rural
carece de un sistema adecuado en comparación con la urbana.
03:10
Se menciona que solo el 41.6% de la población rural tiene acceso a la tierra, y de este
porcentaje, un 89.2% se considera propietario, aunque solo el 52.3% tiene un título de
propiedad formal. La concentración de la propiedad rural es un problema significativo, con
un índice de Gini de 0.85 en el año 2000, lo que indica una alta desigualdad en la
distribución de la tierra.
05:11
La informalidad en la propiedad de la tierra es un problema extendido, afectando tanto
áreas rurales como centros productivos. Se presentan datos sobre la población desplazada,
que tenía un acceso a la tierra superior al promedio rural, pero con una propiedad más
informal. Se estima que alrededor de 2.1 millones de hectáreas serán difíciles de recuperar
para la población desplazada debido a la falta de títulos formales.
09:14
La ineficiencia en el uso de la tierra es alarmante, con solo un 5.9% de las tierras dedicadas
a la agricultura, a pesar de que 21 millones de hectáreas deberían serlo. La falta de acceso a
créditos y seguros para pequeños campesinos limita la inversión en tierras, con solo un 21%
accediendo a créditos en los últimos tres años.
11:20
La ley de tierras y restitución se ha centrado en devolver tierras a la población campesina,
pero esto no es suficiente para abordar la pobreza rural. Se comparan los niveles de
consumo entre poblaciones rurales y urbanas, mostrando que los rurales están por debajo de
los urbanos en términos de pobreza.
12:27
La pobreza rural es alta, afectando a casi el 50% de la población, y la brecha entre pobreza
urbana y rural se ha ampliado. Se presentan cifras sobre el acceso a servicios básicos y
analfabetismo, destacando que un 67.7% de la población rural se considera pobre en
comparación con un 35.3% de la población urbana.
14:01
Se observa que las diferencias en el desempeño educativo entre niños urbanos y rurales son
significativas, con los niños rurales enfrentando desventajas desde una edad temprana. Esto
sugiere que la pobreza rural puede perpetuarse en las siguientes generaciones.
15:04
Se concluye que es esencial implementar políticas para mejorar el acceso a la tierra y
reducir la pobreza rural, independientemente de los avances en el proceso de paz con las
FARC. La concentración de la propiedad y la informalidad son problemas críticos que
deben abordarse para alcanzar un desarrollo rural sostenible.
Primero, de nuevo, la bienvenida a todos a a este foro.
El principal mensaje que quiero dar en la presentación de hoy es que los acuerdos que se
están haciendo en La Habana y en particular el acuerdo agrario, que ya está bastante
avanzado, son necesarios independientemente de si se hace la paz con las FARC o no, o
sea, si se llega a un acuerdo político con las FARC o no.
¿Por qué?
Porque el sector rural colombiano ha sufrido un, pues, un abandono casi total del estado,
como decía Daniel, en algunas regiones la única presencia del estado son los aviones que
asperjan o directores de parques nacionales, y además han han estado sometidos en muchas
regiones del país al conflicto, han sido quienes más han enfrentado los rigores del conflicto
armado.
Antes de de de darles unas reflexiones, quiero mostrar cuál ha sido el acuerdo al que se
llegó con las FARC para que lo tengamos en mente. Yo lo agrupé en tres temas que son
fundamentales.
El primer tema es acceso a la tierra y derechos de propiedad, cómo aumentar el acceso a la
tierra para los pequeños productores y para los campesinos, y cómo formalizar los derechos
de propiedad.
El acuerdo tiene cuatro puntos, una creación de un fondo de tierras, en donde se le va a dar
tierras con el objetivo de darle tierras, como les digo, a los pequeños campesinos, aquellos
que no tengan tierras o que tengan tierras insuficientes.
También se va a hacer un proceso de formalización de predios campesinos que ya se inició
con la ley de víctimas, una actualización información catastral, el catastro de Colombia, que
es donde está toda la información de las tierras, la información física de las tierras está muy
desactualizado, hay municipios que llevan décadas sin ser actualizadas el catastro, y la
creación de una jurisdicción agraria que es fundamental para la solución de conflictos y,
sobre todo, para la protección de derechos de propiedad, que en Colombia ha sido bastante
precario.
Otro tema importante es el desarrollo rural y la producción agrícola. Yo les voy a dar unas
cifras, pero Colombia realmente no aprovecha su potencial agrícola.
Es también un mito que nosotros tenemos tierras por todos lados muy fértiles, pero sí
tenemos unas regiones con tierras fértiles y claramente están desaprovechadas.
El acuerdo plantea la delimitación de la frontera agrícola y además una cantidad de
políticas de estímulo a los a los productores agrícolas, sobre todo a través de créditos, de
subsidios, de asistencia técnica, de capacitación, de de ecuación de tierras, de provisión de
bienes públicos que son fundamentales para el proceso productivo agropecuario y de
recuperación de de tierras.
Por último, el acuerdo habla de pobreza rural, a mi juicio, la parte más fuerte del acuerdo es
realmente esta, estas dos son muy vagas y y realmente no es muy claro cómo lo van a llevar
a cabo, y en pobreza rural plantean hacer planes de vivienda, agua potable, educación y
montar un sistema de protección social para la población rural, que cuando ustedes
comparan la población urbana y la población rural, el sistema de protección social es
bastante deficiente en las áreas rurales.
Entonces, con esto en mente quiero darles unas cifras y darles una reflexión de por qué,
independientemente si hace el acuerdo con las FARC, estas políticas se deben hacer, estas
políticas realmente son muy importantes para el país.
Lo primero es el acceso de la tierra. Cuando uno mira la población rural en Colombia, las
encuestas de calidad de vida que hace el DANE, muestra que realmente solamente dos de
cada cinco pobladores campesinos tienen acceso a la tierra.
Y cuando estoy hablando acceso a la tierra no es propiedad formal, sino cualquier tipo de
acceso, o sea, puede ser arrendamiento, puede ser simplemente colonización de tierras, todo
tipo de arreglos para tener acceso.
Entonces solamente un cuarenta y uno punto seis por ciento de la población rural tiene
acceso a la tierra, y el tamaño promedio de los predios que tienen es de nueve punto treinta
y nueve.
Cuando nosotros cogemos esas personas que tienen acceso a la tierra y les preguntamos
cuál es el tipo de acceso que tienen, un ochenta y nueve punto dos por ciento dicen ser
propietarios, y ahorita me refiero un poco a eso, un trece punto cinco son arrendatarios y el
resto tiene otro tipo de accesos a la tierra.
Como es evidente, los propietarios tienen unas tierras muchísimo más grandes que los
arrendatarios. El tamaño de los predios de los arrendatarios es apenas de cuatro punto ocho
hectáreas.
¿A qué me refiero cuando los las personas dicen ser propietarios? Porque muchas personas
realmente no son propietarios de la tierra, no tienen un título de propiedad formal que los
acredite como propietarios de la tierra.
De esos, entonces, solamente un cincuenta y dos punto tres por ciento realmente son
propietarios de la tierra.
El resto, el cuarenta y siete punto ciento cuarenta y siete punto siete por ciento no son
propietarios formales, no tienen un título de propiedad.
¿Por qué se dio esto? Por reformas agrarias incompletas, por todo el proceso de
colonización y de titulación de baldíos que siempre ha quedado incompleto.
Pero además de un poco acceso a la tierra, en Colombia hay un problema muy grande, y es
que la tierra está sumamente concentrada.
O sea, la propiedad rural en Colombia está sumamente concentrada. Estos son unos índices,
GINI, que hemos calculado aquí en la facultad de economía, que nos muestra qué tan
concentrada está la propiedad rural en Colombia.
Cuando el índice GINI llega a cero, quiere decir que está muy bien distribuida la tierra
cuando está cercano a cero.
Si hay cien hectáreas y cien personas, cada persona tiene una hectárea, está distribuido
equitativamente y cuando está cercano a uno es que no está bien distribuida, es decir que
unos cuantos pocos tienen un alto porcentaje de la Tierra.
Y nuestro índice GINI para el dos mil era cero punto ochenta y cinco, supremamente alto.
Si ustedes lo comparan con otros países de América Latina, que América Latina es una de
las de las continentes con más desigualdad, pues Colombia es uno de los ganadores.
Y lo importante además es que a partir los índices GINI no se mueven mucho en el tiempo,
pero en dos mil siete se vio un incremento importante en el índice GINI, y ya para dos mil
once íbamos en cero punto ochenta y siete.
¿Por qué se dio este incremento tan importante? Porque entraron muchos nuevos
propietarios a comprar tierras, y también porque los que ya existían agrandaron los predios
que tenían.
Y además esta concentración, porque cuando uno habla de concentración e informalidad, se
imagina áreas alejadas y aisladas del país, y eso no es cierto.
Realmente la concentración y la enfermedad se da a lo largo de todo el territorio nacional y
eso es lo que les quiero montar mostrar con estos grabes mapas.
Esto es el Gini de Tierras, Antioquia no está porque Antioquia tiene su propio catastro, pero
es muy similar AAA estos dos departamentos entre los cuales está.
Entonces, cuando ustedes ven el Ginny de Tierras, principalmente, el rojo es cuando está
muy concentrado y cuando está en amarillo es cuando la tierra no está muy concentrada.
Fíjense que la concentración de la tierra realmente está en los principales centros
productivos del país, no en las áreas aisladas de Colombia.
Cuando uno ve la informalidad, sí es muy claro que la informalidad de nuevo cuando está
en rojo es porque está muy concentrado y en amarillo es cuando está menos concentrado, la
informalidad sí se da más en áreas periféricas que están en procesos de colonización de
baldíos.
Sin embargo, hay municipios en los principales centros productivos que sí tienen unas altas
informalidades de la propiedad de la tierra. Y hay municipios que tienen más del setenta y
uno por ciento de su tierra bajo arreglos informales.
Si uno tiene todo este panorama que les estoy mostrando y además le añade el conflicto,
obviamente, era esta era una unas condiciones muy propicias para que hubiera un despojo
de tierra grande, porque la propiedad de la tierra estaba bajo arreglos informales, sobre todo
en áreas donde había muy poca presencia del estado.
Entonces, cuando uno mira las encuestas de población desplazada, esta es una encuesta que
hicimos con Andrés hace bastantes años, los los desplazados, cincuenta y cinco por ciento
tenían acceso a la tierra, un poco más que los pobladores rurales, como les acabo de
mostrar.
Los predios eran más grandes que el promedio de la población rural de ahora, trece punto
tres hectáreas, pero lo que sí era diferente es la propiedad de la tierra de la población
desplazada era muchísimo más informal.
Un treinta y uno punto tres por ciento tenía un porcentaje con título formal de propiedad. O
sea, despojar tierras en estas condiciones para las personas que lo hicieron fue bastante
fácil.
Los cálculos que nosotros hemos hecho, que difieren mucho de cálculos que se han hecho
en otros lados, nosotros somos un poco más conservadores, nos muestra que alrededor de
dos punto uno millones de hectáreas van a ser muy difíciles de recuperar, y van a ser para la
población desplazada, y van a ser muy difíciles de recuperar, precisamente, porque le que
les es lo que les estoy contando.
Son títulos de tierras que no tienen título de propiedad formal y cuya propiedad es muy
difícil de acreditar.
La ley de tierras establece una cantidad de de condiciones y de mecanismos para hacerlo, y
seguramente se podrán recuperar algunas. Eso es muchísima tierra, y nosotros somos muy
conservadores en los cálculos.
Es tres punto cuatro veces lo que el gobierno fue capaz de entregar en programas de
reforma agraria entre el noventa y tres y el dos mil y es un poco más de la mitad de las
tierras que están dedicadas a cultivos agrícolas en Colombia.
Si miramos entonces cómo está distribuida, cómo se usa la tierra en Colombia, que es el
siguiente punto de la ineficiencia en el uso de la tierra, está usada de una manera
supremamente ineficiente.
Esta es la vocación de la tierra en Colombia. Hay veintiún millones de hectáreas que
deberían ser dedicadas a agricultura y veintiuno a a ganadería.
Y miren cómo se usan, solamente un cinco punto nueve se usa en agricultura, un
veintinueve punto cuatro se usa en ganadería, mucho más de la vocación, y esto que, a mi
juicio, es dramático, siete punto tres billones de hectáreas que no se usan, son
completamente improductivas.
Además, si nosotros miramos entonces a los a los pequeños pobladores rurales, esa es una
encuesta que estamos haciendo en la en la en la facultad, la encuesta longitudinal
colombiana de los Andes, en donde les preguntamos a los pequeños campesinos cuáles
otros insumos que son esenciales en el proceso productivo agrícola tienen, y nos
concentramos en dos cosas, créditos y seguros.
Varios varios puntos importantes de este de esta tabla.
Cuando ustedes ven esos pequeños campesinos, ellos explotan la tierra en un porcentaje
altísimo, usan un noventa y tres punto tres por ciento de la tierra que tienen, pero miren la
cantidad de créditos que tienen.
Solamente un veintiuno por ciento en los últimos tres años tuvieron acceso a créditos para
invertir en las tierras y para invertir en el proceso productivo, y cuando preguntamos por
seguro de cosecha eso es inexistente.
Les puse cero punto cero, pero es porque le puse solamente un decimal, pero es cero punto
cero uno.
Es decir, en Colombia los pequeños campesinos realmente no tienen acceso a insumos que
son fundamentales para el proceso productivo. ¿Cuál es el resultado?
Que la inversión en tierras es muy bajita, solamente un veintiocho punto un veintiocho por
ciento de esos hogares hicieron algún tipo de inversión en la tierra durante los últimos tres
años y él miren el valor de la inversión, un millón de pesos, que es bastante bajo.
Y este es un un punto que que ya mencionó el representante Rivera que es muy, muy
importante, Y es que la ley de tierras y la ley de restitución se ha volcado principalmente en
devolver la tierra a la población campesina, y esto no es suficiente, a todas luces no es
suficiente, este cuadro se los muestro.
Este es el promedio de consumo de un poblador rural, Esta es la línea de pobreza rural en
términos de consumo, o sea, con consumos por debajo de esto se tiene, una persona es
pobre, y esta es la línea de pobreza urbana.
Por debajo de esto se considera que una persona urbana es pobre.
El consumo promedio de un poblador rural antes de darles tierras es por debajo, todos los
poblados, un poblador rural promedio sin tierras está por debajo de un pobre urbano.
Si le damos tierras, apenas queda igual a un pobre urbano. Si le formalizamos la tierra, un
poquitico más arriba de un pobre urbano.
Entonces, si se hacen unas políticas públicas en donde solamente se van a atacar, se van a
devolver las tierras, realmente vamos a llegar a este punto cuando realmente solamente
estamos iniciando la tarea.
Y este es el último punto, entonces, que quiero hacer, que es la pobreza rural. Les traje
solamente unas tres cifras para mostrarles.
En Colombia, la pobreza rural es altísima, un poquito menos del cincuenta por ciento en
este momento, ha venido cayendo, pero ha venido cayendo muchísimo menos que la
pobreza urbana, entonces la brecha urbano rural se ha aumentado sustancialmente, y les
traje unas cifras así a la todo tipo de cifras comparando situaciones y condiciones de la
población urbana y rural.
Si comparamos, por ejemplo, acceso a acueducto urbano y rural, urbano noventa y siete por
ciento, rural cincuenta y tres por ciento, analfabetismo para personas mayores de cinco de
cinco años, tres punto ocho por ciento en las zonas urbanas, trece punto tres por ciento en
las zonas rurales.
Y cuando se le pregunta a la población, a los hogares, si se consideran pobres o no, y si los
ingresos que tienen son suficientes para cubrir sus gastos mínimos, realmente la la situación
es desoladora.
Un sesenta y sesenta y siete punto siete por ciento de los de los rurales se consideran pobres
y un treinta y cinco punto tres por ciento de los urbanos.
Pero lo más preocupante es que esta pobreza rural que tenemos en este momento, en estas
condiciones, puede trascender a las siguientes generaciones, es decir, a los niños rurales.
Esta es una gráfica un poco técnica, pero que de todos modos la quise traer porque
realmente me parece preocupante.
Esto es de nuevo la encuesta longitudinal que nosotros hacemos acá, en donde les hacemos
pruebas cognitivas a los niños, menores de nueve años.
Este es el puntaje de la prueba, estos son la edad, es la edad en meses, y eso es un gráfico
que hizo Raquel Bernal, y ella divide a la población entre el treinta y tres por ciento más
pobre, el intermedio y el menos pobre.
Y esto es cómo se desempeñan los niños urbanos, cómo se desempeñan los niños rurales.
Este es el valor del puntaje más alto de un niño rural en este momento. Está muy cerquita al
al porcentaje más bajito de un niño intermedio urbano. Y este es el valor del puntaje más
bajo urbano en un niño rural.
Es decir, solamente los niños más privilegiados en las áreas rurales están siendo realmente
capaces de alcanzar el porcentaje más bajo, el el desempeño más bajo, capaces de alcanzar
el porcentaje más bajo, el el desempeño más bajo de un niño urbano.
O sea, las diferencias entre los niños urbanos y rurales empiezan desde los desde que nacen,
y con el paso del tiempo no se disminuyen, sino que se acrecentan, y entonces por eso me
parece que es importante que lo tengan en cuenta.
¿Cuáles son entonces las conclusiones de lo que quería decir? Y por eso digo que un
acuerdo, el acuerdo agrario tiene unos puntos muy importantes que de todos modos se
tienen que hacer si no alcanzamos la paz con las con las FARC o no.
Primero, tenemos un mercado de tierras sumamente concentrado, con una alta informalidad
de los derechos de propiedad y la tierra es usada de una manera supremamente ineficiente.
Esto facilitó muchísimo el despojo de tierras. Las áreas rurales realmente en este momento
no alcanzan su potencial productivo, estamos muy lejos, tenemos un uso inadecuado de la ti
erra.
Realmente el estado no es no provee los bienes públicos que son necesarios en el proceso pr
oductivo y la pobreza rural es muy alta.
Y si realmente el país no inicia programas de inversión en las áreas rurales, esa pobreza no
solamente va a ser para las personas que están ahora, sino para los jovencitos que ahora se e
stán educando.
Entonces, para terminar de nuevo, todas esas políticas para mejorar el mercado de tierras y
reducir la pobreza rural son más que bienvenidas y el proceso de paz no es nada más que un
a buena excusa para que lo hagamos. Muchas gracias.